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Utilidad clínica y propiedades psicométricas del inventario conductual de


Cambridge

Article  in  Revista de neurologia · January 2016


DOI: 10.33588/rn.6310.2016204

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7 authors, including:

Rafael Fernández Ekaterina Kokoulina


Conselleria de Sanidade Centro Médico El Castro Vigo (Grupo HM Hospitales)
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Elisa Carballido Araujo Olga Gutiérrez Martínez


Conselleria de Sanidade Fundacion Biomedica Galicia Sur
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ORIGINAL

Utilidad clínica y propiedades psicométricas del inventario


conductual de Cambridge
Rafael Fernández-Martínez, Ekaterina Kokoulina, Elisa Carballido-Araújo, Ildefonso García-Fuertes,
Olga Gutiérrez-Martínez, Francisco Santiago-López, Patricia Vázquez-Batán

Estructura Organizativa de Xestión Introducción. Un área importante de la evaluación neuropsicológica son los síntomas psicológicos y conductuales. El in-
Integrada de Vigo; Hospital Álvaro
Cunqueiro (R. Fernández-Martínez, ventario conductual de Cambridge –Cambridge Behavioural Inventory (CBI)– es una medida de autoinforme dirigida a
E. Carballido-Araújo, I. García-Fuertes, allegados que recoge una amplia variedad de síntomas conductuales que pueden darse en el curso de las enfermedades
O. Gutiérrez-Martínez, F. Santiago-
López, P. Vázquez-Batán). Centro
neurológicas. El principal objetivo del estudio es comprobar la utilidad clínica de su adaptación al castellano.
Médico El Castro (E. Kokoulina). Sujetos y métodos. El CBI fue cumplimentado por 215 allegados de pacientes remitidos desde los servicios de neurología
Vigo, Pontevedra, España.
y psiquiatría. Se compararon los perfiles del CBI de cuatro grupos de pacientes formados sobre la base de sus principales
Correspondencia: características clínicas, datos psicométricos, pruebas de imagen y juicio clínico del profesional solicitante del estudio neu-
Dr. Rafael Fernández Martínez.
Estructura Organizativa de Xestión
ropsicológico.
Integrada de Vigo. Hospital Álvaro Resultados. La mayoría de las escalas (10 de 13) del CBI tuvo valores de consistencia interna aceptables, y las escalas de
Cunqueiro. Estrada de Clara
Campoamor. E-36312 Vigo memoria y atención/orientación, correlaciones elevadas con medidas objetivas de memoria y orientación temporal. Los
(Pontevedra) perfiles del CBI de los grupos de pacientes con distintas condiciones (trastorno orgánico de la memoria, trastorno funcio-
E-mail: nal de la memoria, variante conductual de demencia frontotemporal y enfermedad de Alzheimer) fueron consistentes con
rafael.fernandez.martinez@ sus principales características.
sergas.es
Conclusiones. El CBI es un instrumento psicométricamente fiable y con adecuada validez convergente y discriminante que
Aceptado tras revisión externa: puede ser útil en el proceso de evaluación neuropsicológica, aportando información relevante no sólo sobre el funciona-
07.06.16.
miento cognitivo y las capacidades funcionales, sino también sobre los síntomas conductuales y psicológicos de los pa-
Cómo citar este artículo: cientes con trastornos cognitivos.
Fernández-Martínez R, Kokoulina E,
Carballido-Araújo E, García-Fuertes I, Palabras clave. Cambridge Behavioural Inventory. Demencia frontotemporal. Enfermedad de Alzheimer. TAVEC. Trastorno
Gutiérrez-Martínez O, Santiago-
López F, et al. Utilidad clínica y
de la memoria. Trastorno funcional de la memoria.
propiedades psicométricas del
inventario conductual de Cambridge.
Rev Neurol 2016; 63: 440-6.

© 2016 Revista de Neurología Introducción incluye secciones de síntomas neuropsiquiátricos


que presentan con frecuencia pacientes con afecta-
La importancia de la información de los allegados ción cognitiva (por ejemplo, creencias delirantes,
en la valoración clínica de pacientes con síndromes conductas estereotipadas, desinhibición o pérdida
neurocognitivos es enfatizada en las guías de prác- de iniciativa y motivación). En consecuencia, contar
tica clínica de atención a personas con demencia con una medida en formato de autoinforme y diri-
[1]. El valor diagnóstico de la historia colateral pue- gida a los allegados que captura la fenomenología
de aumentarse a través del uso de entrevistas es- clínica ahorra tiempo en contextos con alta carga
tructuradas, por ejemplo, el inventario neuropsi- asistencial y facilita la valoración comprehensiva del
quiátrico [2]. Sin embargo, requieren considerable paciente.
tiempo, lo que limita su uso en contextos con alta Las enfermedades neurodegenerativas como la
carga asistencial. Este obstáculo puede salvarse a enfermedad de Alzheimer (EA) y la demencia fron-
través de los cuestionarios autoadministrados. totemporal (DFT) en sus distintas variantes (con-
Aunque hay otras medidas de autoinforme por ductual y afasias progresivas primarias) se encuen-
parte de allegados, con excepciones (inventario de tran entre los síndromes neurocognitivos más fre-
síntomas prefrontales [3]), éstas se centran en sínto- cuentemente observados en la práctica neuropsico-
mas cognitivos y pérdida de capacidades funciona- lógica. La EA se asocia inicialmente a trastornos de
les en la vida diaria. Por el contrario, el inventario la memoria [4]. No es infrecuente la ocurrencia
conductual de Cambridge –Cambridge Behavioural de síntomas neuropsiquiátricos durante el curso de
Inventory (CBI)–, además de recoger información la enfermedad, como ansiedad y depresión, irritabi-
de síntomas cognitivos y capacidades funcionales, lidad, creencias delirantes y agitación [5]. Por otra

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Inventario conductual de Cambridge

parte, la variante conductual de la DFT (vc-DFT), cognitivo leve (n = 17), traumatismo craneoencefá-
además de disfunción ejecutiva, se presenta inicial- lico (n = 11), variante frontal de EA (n = 8), trastor-
mente con un deterioro progresivo de la personali- nos mentales graves (n = 7), tumor cerebral (n = 5),
dad, conducta y cognición social derivado de la de- deterioro cognitivo asociado a abuso crónico de al-
generación cerebral frontotemporal [6,7]. cohol (n = 4) y otros (n = 9).
Asimismo, se ha descrito una condición deno- En el caso de 27 pacientes no fue posible estable-
minada ‘trastorno funcional de la memoria’ (TFM) cer un diagnóstico por faltar datos clínicos necesa-
caracterizada por experiencia de fallos atencionales rios en el momento del estudio y, en el caso de 12,
y de memoria en la vida diaria, habitualmente vin- existían datos discrepantes.
culados a condiciones de estrés y malestar emocio- Los allegados en 103 casos son el cónyuge o pa-
nal asociado, para los que la exploración neurológi- reja; en 83, un hijo; en 11, un hermano, en ocho,
ca, neuropsicológica y pruebas de imagen no reve- uno de los padres; en nueve, otros familiares; y en el
lan alteraciones [8]. Como en el caso de los trastor- caso de un paciente, un cuidador profesional.
nos somáticos funcionales, además de la influencia Con el fin de comprobar la utilidad clínica del CBI
del estrés y sobrecarga podrían producirse círculos para reflejar las diferencias de distintas condiciones
viciosos en los que la propia ansiedad focalizada en clínicas, se formaron cuatro grupos de pacientes se-
el funcionamiento mnésico contribuye al manteni- gún sus principales características, datos psicométri-
miento del problema [9,10]. cos, pruebas de imagen y juicio clínico del profesio-
Dado que el CBI abarca un conjunto amplio de nal solicitante del estudio neuropsicológico:
síntomas cognitivos, capacidades funcionales y sín- – Trastorno orgánico de la memoria (TOM). Com-
tomas conductuales y psicológicos, es un instru- puesto por 98 pacientes (55 mujeres) con tras-
mento potencialmente útil en la valoración del pa- torno objetivo de la memoria (valorado psico-
ciente. Por ello, en el presente estudio, además de métricamente) asociado a afectación neurológica
comprobar la consistencia interna de las distintas determinada por alguna prueba de imagen (to-
escalas que componen el CBI y la asociación de dos mografía axial computarizada, resonancia mag-
de sus escalas (memoria y orientación/atención) con nética o tomografía simple por emisión de fotón
medidas psicométricas objetivas de la memoria y único). La edad media era de 69 ± 12,1 años. Un
orientación temporal, un objetivo es comprobar su paciente no tenía escolaridad; 19, estudios bási-
utilidad para diferenciar a los pacientes con distin- cos; 42, primarios; 25, secundarios; y nueve, uni-
tos trastornos. En concreto, nos preguntamos si las versitarios.
diferencias clínicas entre los pacientes con trastorno – TFM. Formado por 34 pacientes (22 mujeres)
de la memoria provocado por un daño neurológico que referían afectación de la memoria en su vida
y los que tienen trastornos funcionales de la memo- diaria. Sin embargo, todos los pacientes de este
ria se reflejaría en los perfiles clínicos del CBI. Por grupo puntuaron dentro del rango de la norma-
otra parte, comparamos los perfiles clínicos del CBI lidad en la valoración psicométrica de la memo-
de los pacientes con vc-DFT y los pacientes con EA. ria y, en la mayoría de los casos (n = 25), habían
realizado alguna prueba de imagen en la que no
se evidenció afectación neurológica. Había clara
Pacientes y métodos indicación de la asociación de factores emocio-
nales con la experiencia de los síntomas mnési-
Muestra cos. La edad media era de 63,3 ± 9,5 años. Seis
pacientes tenían estudios básicos; 14, primarios;
La muestra total estaba formada por 215 pacientes 11, secundarios; y tres, universitarios.
(118 mujeres y 97 varones) que acudieron a la uni- – vc-DFT. Formado por 17 pacientes (9 mujeres)
dad de evaluación neuropsicológica remitidos des- en quienes los datos clínicos (pruebas de imagen,
de los servicios de neurología o de psiquiatría y cambios característicos en la personalidad y
cuyos familiares acompañantes cumplimentaron el conducta social valorados en la entrevista e his-
CBI. La edad media era de 64,6 ± 13,7 años (rango: toria clínica y el perfil neuropsicológico con
18-92 años). Un sujeto no tenía ninguna escolari- afectación de las funciones ejecutivas) apoyaron
dad; 31, estudios básicos; 98, primarios; 57, secun- dicho diagnóstico. No fueron incluidos ocho pa-
darios; y 28, universitarios. cientes con afectación frontal, pero que forma-
Los diagnósticos principales fueron: deterioro ban parte de un daño neurológico más global y
cognitivo por enfermedad vascular (n = 38), TFM estaban valorados como variante frontal de la
(n = 34), EA (n = 30), vc-DFT (n = 17), deterioro EA. La edad media de los pacientes era de 66,2 ±

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R. Fernández-Martínez, et al

14 años. Tres tenían estudios básicos; seis, pri- vos que contribuyan a la calidad de la evaluación
marios; seis, secundarios; y dos, universitarios. neuropsicológica [16]. Las propiedades psico-
– EA. Formado por 30 pacientes (22 mujeres) con métricas de las distintas pruebas que componen
datos clínicos (perfil neuropsicológico y pruebas el instrumento, entre las que se incluye la escala
de imagen) sugerentes de dicha enfermedad con de orientación temporal, son apropiadas –vali-
presentación inicial típica (amnésica). La edad dez convergente con la parte cognitiva de la es-
media de los pacientes era de 75,1 ± 7 años. Siete cala de evaluación de la EA y excelente fiabilidad
pacientes tenían estudios básicos; 14, primarios; test-retest e interevaluadores– [17].
siete, secundarios; y uno, universitarios.
Procedimiento
En todos los casos el diagnóstico fue emitido por el
neurólogo o psiquiatra solicitante de la evaluación Realizamos una traducción y adaptación al castella-
neuropsicológica. no de los ítems que componen el CBI.
El CBI fue cumplimentado por el familiar acom-
Instrumentos pañante, salvo en los casos en los que lo impidiera
el bajo nivel cultural-académico o en los casos en
– CBI. El CBI [11,12] indaga sobre dimensiones cog- que no mantuviera un contacto diario o casi diario.
nitivas y conductuales de síndromes neuropsico- El cuestionario fue cumplimentado en la sala de es-
lógicos diversos. En su elaboración se emplearon pera durante la primera de las sesiones de evalua-
cuestiones del inventario neuropsiquiátrico [13], ción del paciente.
pero se incluyó un conjunto más amplio de sínto- El TAVEC se administró como parte de la valora-
mas. Lo cumplimenta un familiar con quien el ción cognitiva a un subgrupo de pacientes (n = 158).
paciente tiene un contacto habitual (a diario o La escala de orientación temporal del TBA se ad-
casi a diario) y está compuesto por 81 ítems agru- ministró a todos excepto a ocho pacientes (n = 207).
pados en 13 escalas puntuadas en una escala de El estudio fue realizado entre enero de 2014 y
frecuencia: 0 = nunca; 1 = ocurrencia ocasional noviembre de 2015.
(pocas veces al mes); 2 = ocurrencia repetida (va-
rias veces a la semana); 3 = ocurrencia diaria; y Análisis de datos
4 = ocurrencia constante. El período evaluado es
el último mes. En la versión en castellano del pre- Empleamos la prueba estadística α de Cronbach
sente estudio incluimos todos los ítems excepto el pa­ra estimar la consistencia interna de cada una de
número 71, que pertenece a la sección de conduc- las escalas del CBI.
ta estereotipada. El CBI tiene adecuadas propie- La comparación entre las puntuaciones medias
dades psicométricas en términos de consistencia en las escalas del CBI de los grupos (TOM frente a
interna, fiabilidad test-retest, validez convergente TFM y vc-DFT frente a EA) se realizó con la prueba
y validez discriminante [12,14]. t de Student, y la correlación entre las dimensiones
– Test de aprendizaje verbal España-Complutense de memoria a corto y largo plazo y de orientación
(TAVEC). Es la versión española del test de apren- temporal del TBA con las escalas del CBI se estimó
dizaje verbal de California [15]. El TAVEC eva- con la prueba de correlación lineal de Pearson.
lúa la memoria inmediata, la curva de aprendi-
zaje, la interferencia proactiva y retroactiva, la
memoria a corto plazo y a largo plazo, y el reco- Resultados
nocimiento. El estudio de las propiedades psico-
métricas del instrumento indica coeficientes de Consistencia interna de las escalas del CBI
fiabilidad por consistencia interna (en la puntua-
ciones en los cinco ensayos de aprendizaje, cate- Todas las escalas, a excepción de creencias, hábitos
gorías semánticas y totales de los ítems en los alimentarios y sueño, mostraron consistencia inter-
cinco ensayos) que oscilan entre 0,8 y 0,94 [15]. na aceptable (Tabla I).
– Escala de orientación temporal del test de Barce-
lona abreviado (TBA). Está compuesta por seis Correlaciones entre el TAVEC y la orientación
ítems con un rango de puntuaciones que oscila temporal del TBA con las escalas del CBI
entre 0 y 23. El TBA es uno de los instrumentos
que forman parte del proyecto neuronorma, que Encontramos altas correlaciones entre las puntua-
tiene por fin principal establecer datos normati- ciones en la medida de memoria a corto y a largo

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Inventario conductual de Cambridge

plazo del TAVEC y las escalas del CBI de memoria,


orientación/atención, destrezas cotidianas y auto- Tabla I. Consistencia interna de las escalas del inventario conductual
de Cambridge.
cuidado. En el caso de las medidas de orientación
temporal, también hubo altas correlaciones con las
α de Cronbach
mismas escalas. En ambos casos, mayores dificulta-
des reflejadas por el allegado en las escalas señala- Memoria 0,79
das del CBI se asociaron a rendimientos peores en
la valoración psicométrica (Tabla II). Orientación/atención 0,81

Destrezas cotidianas 0,91


Comparación entre grupos en las
puntuaciones medias en las escalas del CBI Autocuidado 0,86

Comparación de los grupos Ánimo 0,84


de pacientes con TOM y TFM
Creencias 0,68
La valoración de los allegados a través del CBI indica
puntuaciones medias significativamente más altas Conductas problemáticas 0,77
(mayor presencia de síntomas) en el grupo con TOM
en comparación con el grupo con TFM en las escalas Desinhibición 0,84
de memoria, atención/concentración, destrezas co-
Hábitos alimentarios 0,67
tidianas, autocuidados y motivación (Tabla III).
Sueño 0,55
Comparación de los grupos
de pacientes con vc-DFT y EA Conducta estereotipada 0,84
Las puntuaciones medias en las escalas del CBI de
Motivación 0,92
conducta problemática, desinhibición y motivación
de los pacientes con vc-DFT fueron significativa- Insight 0,70
mente más elevadas que las de los pacientes con EA
(Tabla III).
Los ítems individuales que fueron valorados co­
mo presentes de modo significativamente más in- entre grupos de pacientes con distintas entidades
tenso por los allegados de los pacientes con vc-DFT clínicas [12,14,18]. Sin embargo, salvo un estudio
se concentraron en cambios en la conducta social, realizado en Argentina [18], no hay investigaciones
impulsividad y apatía/inercia, que son rasgos carac- que valoren sus propiedades psicométricas y utili-
terísticos del síndrome. dad clínica en nuestro idioma.
En la presente investigación, nos planteamos,
como principales objetivos, por una parte, estimar
Discusión la consistencia interna de las escalas de la adapta-
ción al castellano del CBI y la validez convergente
Una recomendación de la guía de práctica clínica de las escalas de memoria y de orientación/aten-
de atención integral a las demencias [1] es el uso de ción con medidas psicométricas de valoración de la
instrumentos diseñados específicamente para valo- memoria y la orientación temporal; por otra parte,
rar los síntomas conductuales y psicológicos en la analizar su utilidad en términos de capacidad para
demencia de forma independiente de las alteracio- discriminar diferentes condiciones y síndromes neu-
nes cognitivas y funcionales. Esos síntomas debe- ropsicológicos (TOM frente a TFM y vc-DFT fren-
rían detectarse lo antes posible para el diagnóstico te a EA).
diferencial entre las distintas entidades neurodege- En primer lugar, la adaptación española de las
nerativas y orientar la estrategia terapéutica. escalas del CBI presenta de aceptable a buena con-
El CBI, además de contar con escalas de sínto- sistencia interna en la mayoría de las escalas. De las
mas cognitivos y capacidades funcionales, recoge 13 escalas, solamente en tres (creencias, hábitos ali-
ampliamente una variedad de síntomas conductua- mentarios y sueño) la consistencia interna fue defi-
les y psicológicos que experimentan con frecuencia ciente. El único estudio en el que se informa de la
los pacientes con síndromes neurocognitivos. Ade- consistencia interna de las escalas del CBI [12] tam-
más, hay indicaciones de sus adecuadas propieda- bién indica adecuada consistencia interna de la
des psicométricas y utilidad al permitir discriminar mayoría. En dicho estudio, salvo la escala de sueño,

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R. Fernández-Martínez, et al

nerativas, y el síntoma psicológico más prevalente


Tabla II. Correlaciones entre las puntuaciones directas en memoria a corto y largo plazo (TAVEC) y orien- fue la apatía (40,9%). Las conductas estereotipadas
tación temporal (TBA) y las escalas del CBI.
también son frecuentes en la demencia y se ha ob-
servado una tendencia a que se incrementen con el
TAVEC, lista A, TAVEC, lista A, Orientación
corto plazo largo plazo temporal (TBA) progreso del deterioro cognitivo [20]. La observa-
ción de correlación significativa entre memoria
Memoria –0,437 b –0,443 b –0,346 b evaluada a través del TAVEC y las escalas de moti-
vación y conducta estereotipada del CBI la inter-
Orientación/atención –0,455 b –0,438 b –0,350 b pretamos como reflejo de la asociación documen-
tada entre deterioro mnésico y dichos síntomas
Destrezas cotidianas –0,446 b –0,444 b –0,335 b
conductuales. De modo análogo, la medida objetiva
Autocuidado –0,345 b –0,325 b –0,322 b de orientación temporal (escala de orientación tem-
poral del TBA) correlacionó significativamente no
Ánimo 0,007 –0,048 0,019 sólo con la escala de orientación/atención (máxima
correlación), sino también con la escala de memo-
Creencias –0,146 –0,143 –0,076
ria y las de destrezas cotidianas y autocuidado.
Conducta problemática 0,018 0,038 0,014 Dado que la escala de atención/orientación incluye
otros ítems además de los referidos a orientación
Desinhibición –0,107 –0,095 0,031 temporal, seleccionamos los tres ítems específicos
de orientación temporal. Esta subescala fue la que
Hábitos alimentarios –0,099 –0,099 –0,030 tuvo mayor correlación con la escala de orientación
temporal del TBA. Aunque más moderadamente,
Sueño –0,025 –0,077 –0,035
esta escala correlacionó significativamente con la
Conducta estereotipada –0,178 a –0,192 a –0,072 escala de motivación y reflejó, como en el caso de la
memoria, que un mayor grado de desorientación
Motivación –0,192 a –0,198 a –0,164 a temporal tiende a asociarse a un mayor grado de
apatía/desmotivación.
Insight 0,059 0,070 0,037
En segundo lugar, los resultados muestran que el
CBI: inventario conductual de Cambridge; TAVEC: test de aprendizaje verbal España-Complutense; TBA: test de
CBI aporta perfiles específicos que capturan las
Barcelona abreviado. a p < 0,05; b p < 0,005. principales características clínicas de distintos tras-
tornos. Ningún estudio ha investigado los perfiles
clínicos a través del CBI de pacientes con los deno-
minados TFM. El síndrome es frecuente tanto en
todas mostraron consistencias internas por encima las consultas de neurología como psiquiatría y re-
de 0,70. Por otra parte, encontramos correlaciones presenta en torno al 6-30% de las derivaciones para
elevadas de las escalas de memoria y atención/ valoración cognitiva [8]. En la presente investiga-
orientación y medidas psicométricas de esas di- ción, el 15,8% de las derivaciones fueron de pacien-
mensiones, lo que apoya la validez convergente del tes con TFM. Las características propias del tras-
instrumento. Además de la correlación esperada de torno, con afectación en la vida diaria de procesos
la escala de memoria del CBI con medidas de me- atencionales y mnésicos vinculados a condiciones
moria a corto y largo plazo del TAVEC, éstas tam- de estrés, pero ausencia de deterioro o mínima
bién tienen correlaciones elevadas con las escalas afectación en la exploración psicométrica de estas
de orientación/atención, destrezas cotidianas y funciones, haría esperable que en el CBI se reflejara
autocuidado, lo que refleja la estrecha asociación el contraste con respecto a trastornos francos de la
entre esas dimensiones. De modo más moderado, memoria vinculados a enfermedad-daño neuroló-
hubo también correlación significativa con las es- gico. Esta expectativa fue confirmada y, así, los alle-
calas de conducta estereotipada y de motivación. gados de los pacientes con TFM valoraron la afec-
El déficit mnésico es el síntoma cognitivo más fre- tación de la memoria significativamente menor que
cuentemente observado en los síndromes neuro- la valorada por los allegados de pacientes con en-
cognitivos, y en éstos no es infrecuente la presencia fermedades neurológicas y TOM asociado. Además,
de síntomas psicológicos y conductuales. Por ejem- el perfil en el CBI indicó puntuaciones significativa-
plo, en un estudio [19], la prevalencia evaluada con mente menores en el grupo de TFM en las escalas
el inventario neuropsiquiátrico fue del 66,7% de los de orientación/atención, destrezas cotidianas y au-
pacientes con distintas enfermedades neurodege- tocuidados. Es destacable la elevación significativa-

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Inventario conductual de Cambridge

mente mayor de los pacientes con daño neurológi-


co en la escala de motivación. La apatía, la pasivi- Tabla III. Puntuaciones (media ± desviación estándar) en las escalas del inventario conductual de Cam-
bridge de los grupos del estudio.
dad y la desmotivación son síntomas neuropsiquiá-
tricos frecuentes en pacientes con EA [5], y son uno
TOM TFM vc-DFT EA t de Student
de los rasgos centrales de la vc-DFT [7]. La acusada
elevación, muy por encima de la de los pacientes TOM frente a TFM = 4,31 b
Memoria 2,1 ± 0,8 1,3 ± 1,0 2,1 ± 0,8 2,1 ± 0,8
con TFM, en la escala de motivación podría estar vc-DFT frente a EA = 0,15
reflejando la asociación documentada del deterioro
cognitivo y la apatía [19]. TOM frente a TFM = 4,15 b
Orientación 1,6 ± 0,9 0,9 ± 0,7 1,8 ± 0,9 1,4 ± 0,8
vc-DFT frente a EA = 1,35
En tercer lugar, el perfil del CBI de los pacientes
con la vc-DFT difirió del de los pacientes con EA, Destrezas TOM frente a TFM = 4,13b
1,8 ± 1,1 0,8 ± 1,0 1,6 ± 1,1 1,7 ± 1,1
con puntuaciones significativamente mayores de los cotidianas vc-DFT frente a EA = –0,29
primeros en las escalas de conductas problemáti-
TOM frente a TFM = 3,24 b
cas, desinhibición y motivación. Estos rasgos, pro- Autocuidado 0,9 ± 1,0 0,3 ± 0,5 1,1 ± 1,2 0,7 ± 0,9
vc-DFT frente a EA = 1,01
pios de la enfermedad, se plasman en las valoracio-
nes de los allegados a través del CBI. Los resultados TOM frente a TFM = 0,04
Ánimo 1,2 ± 0,7 1,2 ± 0,9 1,4 ± 0,7 1,0 ± 0,6
del presente estudio son consistentes con los de vc-DFT frente a EA = 1,76
otras investigaciones [11,12,14], en los que el CBI
TOM frente a TFM = 1,24
también diferenció a pacientes con DFT de pacien- Creencias 0,4 ± 0,5 0,2 ± 0,4 0,5 ± 0,4 0,3 ± 0,5
vc-DFT frente a EA = 1,69
tes con otras enfermedades neurológicas.
El estudio tiene algunas limitaciones que deben Conducta
0,7 ± 0,8 0,7 ± 1,2 1,4 ± 0,7 1,0 ± 0,6
TOM frente a TFM = 0,11
destacarse. En primer lugar, el limitado tamaño de problemática vc-DFT frente a EA = 2,17 a
las muestras, en especial del grupo con vc-DFT.
TOM frente a TFM = 1,28
Ello hace que los resultados, aunque apoyan clara- Desinhibición 0,8 ± 0,9 0,6 ± 1,1 1,4 ± 0,7 0,5 ± 0,7
vc-DFT frente a EA = 3,74 b
mente la capacidad del CBI para capturar los sínto-
mas conductuales característicos de esta enferme- Hábitos
0,8 ± 0,8 0,7 ± 0,8 1,0 ± 0,7 0,5 ± 0,7
TOM frente a TFM = 0,50
dad, deban replicarse con muestras de mayor tama- alimentarios vc-DFT frente a EA = 1,90
ño. La segunda limitación se deriva de la dificultad TOM frente a TFM = 0,99
para establecer límites nítidos entre categorías diag- Sueño 1,6 ± 1,3 1,3 ± 1,1 1,5 ± 1,3 1,5 ± 1,4
vc-DFT frente a EA = 0,29
nósticas. A pesar de la cuidadosa selección de los pa-
cientes que formaron parte de cada uno de los gru- Conducta
1,0 ± 0,8 0,9 ± 0,9 1,4 ± 0,7 1,0 ± 0,8
TOM frente a TFM = –0,46
estereotipada vc-DFT frente a EA = 1,57
pos a través de los datos de la entrevista e historia
clínica, valoración neuropsicológica, pruebas de ima- TOM frente a TFM = 2,13 a
gen y juicio clínico del profesional que había remiti- Motivación 2,0 ± 1,1 1,5 ± 1,2 2,5 ± 1,0 1,6 ± 1,2
vc-DFT frente a EA = 2,37 a
do al paciente, en ausencia de marcadores defini­
tivos no puede descartarse por completo que haya TOM frente a TFM = –0,91
Insight 1,1 ± 1,2 2,0 ± 1,5 1,2 ± 1,2 1,7 ± 1,0
vc-DFT frente a EA = –1,61
podido producirse algún error en las agrupaciones.
EA: enfermedad de Alzheimer; TFM: trastorno funcional de la memoria; TOM: trastorno orgánico de la memo-
En conclusión, la adaptación al castellano del CBI, ria; vc-DFT: demencia frontotemporal, variante conductual. a p < 0,05; b p < 0,005.
una medida concebida para capturar los síntomas
conductuales y psicológicos más frecuentes de las
enfermedades neurológicas, muestra adecuadas pro- Bibliografía
piedades psicométricas en términos de fiabilidad
1. Grupo de trabajo de la guía de práctica clínica sobre la atención
y validez convergente de las escalas de memoria y integral a las personas con enfermedad de Alzheimer y otras
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Plan de Calidad para el Sistema Nacional de Salud del Ministerio
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Clinical usefulness and psychometric properties of the Cambridge Behavioural Inventory

Introduction. An important area in neuropsychological assessment is that of psychological and behavioural symptoms.
The Cambridge Behavioural Inventory (CBI) is a self-report measure aimed at relatives which takes account of a wide
range of behavioural symptoms that may occur during the course of neurological diseases. The main objective of the
study is to test the clinical usefulness of its Spanish adaptation.
Subjects and methods. The CBI was completed by 215 members of kin of patients referred from neurology and psychiatry
services. The CBI profiles of four groups of patients were compared, these being grouped according to their main clinical
characteristics, psychometric data, imaging tests and the clinical judgement of the professional requesting the neuro­
psychological study.
Results. Most of the scales (10 out of 13) of the CBI yielded acceptable internal consistency values, and the memory and
attention/orientation scales showed high correlations with objective measures of memory and time orientation. The CBI
profiles of the groups of patients with different conditions (organic memory disorder, functional memory disorder, behavioural
variant of frontotemporal dementia and Alzheimer’s disease) were consistent with their main features.
Conclusions. The CBI is a psychometrically reliable instrument with adequate convergent and discriminant validity that can
be useful in the process of neuropsychological assessment. It can provide relevant information not only about cognitive
functioning and the functional capabilities, but also about the behavioural and psychological symptoms of patients with
cognitive disorders.
Key words. Alzheimer’s disease. Cambridge Behavioural Inventory. Frontotemporal dementia. Functional memory disorder.
Memory disorder. TAVEC.

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