[REVISTA DE CRIVICA LITERARIA LATINOAMERICANA Ago XL, N° 75. Lima-Boston, 1" semestre de 2014, pp. HACIA UNA ECOCRITICA TRANSNACIONAL: APORTES DE LA FILOSOFIAY CRITICA CULTURAL LATINOAMERICANAS ATA PRACTICA ECOCRITICA’ Laura Barbas-Rhoden Wofford Collge Resumen, Es de vital importancia integrat en la conversacién ecoctitca prietieas taansna ciooales que contexrualicen en panoramas amplios, globales y planetaios la comprension de expresiones calturales provenientes de espacios locales. Las ‘voces de fldsofos y criticos culurales lasinoamericanos offecen un apore fu damental a ls construccién de tal ecoeritica, ya que sus discursos conentan desde una posicionalided periférica la constauecién de saberes, flosofias¢ ima- sginatios que todavia rigen la organizacio humana. El presente ariculo explora las posbilidades de apliea al estudio de eextos lteraios las pormulaciones eeér- cas de destacados intelectuales, tal y como Ant6nio Candido, Enrique Dussel, Leonardo Bott, Enrique Leff y Walter Mignolo, De ral manera, se forjaia una a, flosofia, América Latina. prictiea ecocrtica mas sea, inclusiva y mai Palabras clave ecocssica estudios cultures, Abstract I's vitally important that ecocsticl conversations take on a new tration: form and that practitioners contextualize profoundly local cultural expressions against the backdrop of broader, global, and planetary contexts. Latin American philosopters and cultural erties make 2 fundamental contribution to the cons- ‘ruction ef transnational ecocrticism because, from a peripheral positionality, their texts comment upon the construction of knowledge, philosophies, and Jimaginarcs that sell govern human organization, The present article explores hhow the theoretical postulations of prominent intlleeruls Eke Anténio Candi do, Enrigie Dussel, Leonardo Bot, Enrique Leff and Walter Mignolo, can be applied literary texts in ways that allow rites to forge a richer, more incla- sive, and nuanced, ecocriccal practice Le agradezco a Carmen Campos so trabajo en la Ketuta y sedaccién del presente acco, Par supnesto evalquie éeroe que haya 6s mio8 TADKA BARSAS-RHODEN Rowordr ceocritcism, cultural stdies, philosophy, Latin America. “t,entamas dentro de wna situa do ese mas no de raga, Toda crise aris, deans era as engin comtrcina. A ese inplsetransgas¢passgom. Estamos jgndo a Passer de wma conc da hitria Head ds cults, a olin, a etadenae, 8 less suis ds pesaas referencias para uma bistria costa lanatnia da spi ba ‘mana Para entendleadeguadamentedewomosstnila deat do rocreevlusnaro, de bingines, da aniropegtuse ede planstgénse® (Bott 9) "Bat in isto, what is important isthe planatary, and the planetary is not wnveral is insted te sooo of tons that include differences, with variable depesof empl The truth i seri no one nnivercal elt here area cultures competing and sing ith each cber, and thar isoftentines the expansion of ome penomenasonetines fo «a planctary dimension, This is bow T have come lo understand the ution of globalization” (Dussel, ci. en Gomer 26) ¢Cudl seri la forma de una ecoctitica que contextualice en pano- amas amplios, globales, planetarios, su comprension de expresiones culturiles provenientes de espacios locales, generosamente variados y marcadas pox el dinamismo, el cambio y la temporalidad? Es de Vital importancia integrar a la conversacién ecocritica ms pricticas como las mencionadas, y de paso, inventarnos una ecocritica trans- nacional, caya construccién nos ayudaré a superir limitaciones e in- Auird en como percibimos el paisaje, tal y como Io hace el famoso puente de Martin Heidegger: ‘The bridge [..] does not just connect banks that are akeady there. The banks emerge as banks only as the bridge crosses the stream. The bridge expressly causes them t0 lie across from each other. One side is set off against the other by the bridge. Nor do the banks stetch along the steam a iniferene border strips of the dey land. With che banks, the bridge bogs to the stzeam he one and the other expanse ofthe landscape lying ‘behind them, Ir brings steam and bank and land into each other's neigh= borkood (354). Propongo aqui como metiifora para una ecocritica transnacional, el puente, que sugicre tanto la funcién como las posibilidades de es te pensamicato ambiental. Ea la claboracién de una ecocritica transnacional, las voces de fi- ésofos y criticos culturales latinoamericanos ofrecen un aporte fundamental, ya que sus discursos articulan, desde una posicionali- dad periférica, una conciencia de lo que es hacerse parte de la mo- HACIA UNA ECOCRITICA TRANSNACIONAL 31 demnidad, una ctapa que, segtin ellos mismos, empezé con el contac- to entre grupos europeos y americanos en el siglo XV y conllevé la construccisin de saberes, flosofias, disciplinas e imaginarios que to- davia rigen la otganizacién humana del mundo en que habitamos, Una ecocritica transnacional, que incluya el dislogo amabientalista de la filosofia y critica cultural de diversas tradiciones culturales- lingiisticas, como [a latinoamericana, puede reconfigurar la ecoctiti- a de las metrépolis coloniales y neocoloniales, y fomentar entte los investigadores ecoctiticos, un desenvolvimiento intelectual mis ho- esto ¢ inclusivo®. Lo que hoy llamamos ecoctitica nacié principal- mente de forma institucional primero en los EEUU, en publicacio- nes como The Eworiticisw Reader de Cheryl Glotfelty y Hatold Fromm (1996), y con la fundacién en 1992 de la Assocation for the Study of Literature aid the Environment (SLE), centrindose al princi- pio en lo que én inglés se ha denominado “nanare writing”, como asi también en textos de tradicién romantica. Poco a poco este campo de investigecién ha ido evolucionando, primero ea Estados Unidos (Buell 17-28), yIuego en Europa, Australia y territorios pre- viamente coloniales y, en Ia iltima déeada especialmente, se ha ace- lerado la produccién de publicaciones y encuentros que te-imaginan Jas tradiciones literarias nacionales como parte de una dinémica po- livalente. Ea la ola ecvcritica més reciente, marcada por voces post- coloniales y marginales en términos étnicos, culrurales y sexuales (Tiffin y Huggan; Mortimer-Sandilands y Erickson), se le da contex- to histérico al excepcionalismo estadounidense, al privilegio hetero- sexual y al dominio occidental en conversaciones literarias, y asi se revela la dependencia de contextos culturales especificos, y de tér- minos ¥ tropos como wsldemess 0 nature. También, ya desde princi- pios del nuevo milenio, ha habido dentso de la ecocritica un crecien- te cuestionamiento de la postura anti-te6rica que prevaleci6 en afios anteriores y privilegié un realismo marcado por la conciencia social y €l activismo ecolégico, y que ocupé un higar central en publica- 2 Trabajo en una instiucién dedicada a fa formacién de esrudiantes de gra- do, dilogo a diario con eatedriticos residentes en tos EEUU y cam écoctiticos de ouas partes del mundo por medio de textos, mensajes conferencias, Desde ‘mi propia posicionalidad enunciativa, me parece mucho mis honesta en el pre- sente ensayo plantear preguntas que contestadas, y postular conexiones, mis ue proponer respuestas definitivas.0 AURA BARDAS-RHODEN ciones, proyectos y pedagogias durante un tiempo prolongado ull 7), arn pensamiento ecocritico exclusivamente orientado hacia lo lo- cal, regional y nacional tiende a producir un imaginario del mundo ‘que minimiza el flujo de personas, ideologias, bienes y tradiciones ‘que caracterizan el mundo moderno. En cambio, constesir una ecocritica transnacional sobre los fires cimientos de investigacio- nes locales y nacionales, anclada en la tierra firme de estas ttadicio- nes, como puente colganté que resiste fulerzas y tensiones, puecle cambiar radicalmente la perspectiva desde la que percibimos tales tradiciones; en palabras de Heidegger, con el puente presente, arro- yo, banco y tierra se veriin como parte de la misma vecindad, ¢Cua- les son los aportes de la flosofia y critica cultural latinoamericanas al desarrollo de una ecocritica transnacional? Planteo aqué dos: Las contribuciones contemporineas de los estudios cultarales y filos6ficos latinoamericanos invitan a los ecoctiticos de todo el mundo 2 profundizar la conexién entre ser y saber (y la posicionali- ad implicita en ambos). ‘Ya que se estudia la produccién cultural hispanoamericana cada vex més como parte de una dindmica transnacional (Moraiia; Ortiz Wallner; Palaversich; A. P. Rodrigue; I. Rodriguez), afiadit a dicha discusién una dimensién ambiental basada en los estudios culturales y filoséficos de Ia regién, podria resultar en una aproximacién transnacional ecocritica, por excelencia, a textos literarios. Estos dos aportes abten el espacio a una setie de interrogantes: qué pautas vemos en In ideologia y las pricticas de comunidades humanas a lo largo del continente en relacién con el medio ammbien- te y en qué formas las captan diferentes textos culturales? y Fred Moseley". Historic! Mator- abn 11, 2203): 287-263, Barbas Rhoden, Laura, “Biopolies and the Critique of Neoliberaism in. EP ‘onegn Dil Sila by Tatiana Labo".A Contracorent 8, + QO): 259-276, + Bova! Imaginations in Lat Amin Fiston. Gainsvlle: UP of Florida, 2011 Bennet, Douglas C., Grant H. Corawell, Haifa Jamal ALLail, y Celeste Scinenck. “An Education forthe Twenry Fist Century: Stewandship ofthe Giobal Commons”, Libra Edwcaton 98, £ 2012): 34-41 ofl, Leonardo. Virtues para sm our mando pose. 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