Introducción

Las micro y pequeñas empresas (mipymes) tienen una gran importancia

dentro de la economía a nivel mundial, y en México conforman el 98.8% de las
empresas en el país (INEGI, 2014), no solo en el ámbito de productividad de
bienes y servicios que ofrecen, sino, además, en el gran potencial que representa
para la generación de nuevos empleos, teniendo como consecuencia un gran
aumento económico dentro del mercado laboral.

La sociedad actual del valle de Mexicali se caracteriza por contar con un

alto índice de micro y pequeñas empresas tales como lo son abarrotes,
refresquerías, puestos de tacos, tortas, etc., éstas cuentan de 0 a 10 empleados,
los que proporcionan empleo al 29.5% en la zona valle, lo que se considera un
gran porcentaje en comparación a la ciudad de Mexicali el cual es de 28.4%
(Morales et al. s.f.). Siendo esto un factor que representa a dicha comunidad, ya
que se conoce que es una zona en donde el emprendimiento de nuevas empresas
va en aumento, haciendo que con ello incremente el desarrollo económico.

Se conoce muy bien que las mipymes se caracterizan por poseer una
flexibilidad a los cambios que se generan en el ámbito laboral, al igual en la
generación del emprendimiento de proyectos innovadores. Sin embargo, dentro de
la comunidad del valle de Mexicali, la adaptación hacia los nuevos cambios, como
lo son las nuevas tecnologías y la innovación en las microempresas, no es algo
que se implemente habitualmente.

Actualmente es imposible concebir una empresa exitosa sin el apoyo de

tecnologías de información y comunicación (TIC) para administrar sus procesos de
negocio (Saavedra & Tapia, 2013); esto se debe a que la ciencia y los avances
tecnológicos han ido innovándose teniendo un gran impacto, tal como es el caso
del uso del internet, es ahí donde surge la importancia de la adaptación de las
mipymes hacia la implementación de las TIC.

De acuerdo con lo anterior, las pequeñas y medianas empresas son las que
mejor pueden aprovechar y beneficiarse de las oportunidades que brinda el nuevo
ambiente de negocios, que pueden obtener resultados positivos al implementar las
tecnologías de información y comunicación en sus estrategias de mercado
(Maldonado et al, 2010), con esto puede generar un impacto favorable en el
rendimiento y productividad empresarial.

FALTAN REFERENCIAS DE DAHIR

Con el paso de los años, la sociedad ha ido evolucionando conforme al

avance de la tecnología integrándola en la vida cotidiana, haciendo de ésta una
gran influencia y facilitando ciertas acciones que se realizan en diferentes ámbitos
tales como en lo personal, educacional, laboral, etc. Esto genera un mejor
desarrollo de habilidades en cuanto al uso de las TIC integrando la emoción,
pensamiento y acción al implementarlas.

Para que se lleve a cabo lo mencionado con anterioridad, los responsables

de la empresa deben contar con una regulación cognitiva y emocional estable, que
les permita tomar decisiones que beneficien a su empresa integrando un
adecuado uso de su inteligencia emocional.

La inteligencia emocional se refiere a un “pensador con un corazón” (“a

thinker with a heart”) que percibe, comprende y maneja relaciones sociales y de
acuerdo con Mayer y Salovey (1997):

“La inteligencia emocional incluye la habilidad para percibir con

precisión, valorar y expresar emoción; la habilidad de acceder y/o generar
sentimientos cuando facilitan pensamientos; la habilidad de comprender la
emoción y el conocimiento emocional; y la habilidad para regular las
emociones para promover crecimiento emocional e intelectual”.

De acuerdo con la inteligencia emocional y el uso de las TICS dentro de las

pymes es de suma relevancia, ya que la sociedad se encuentra en una era de
innovación y la herramienta principal es el internet. Las empresas Pymes deben
adaptarse a los cambios para poder crecer y desarrollarse; la tecnología sin duda
hace avanzar al ser humano de una forma más rápida y enriquecedora que en la
antigüedad, aunque al no tener el manejo adecuado de la inteligencia emocional,
crean aspectos que pueden llegar a ser contraproducentes como por ejemplo la
adicción, la frustración, el aislamiento, la irritabilidad, la violencia, pueden aparecer
y llegar a destrozar el avance de aquella persona que comenzaron en la
tecnología, Daminici (2016, p.5).

Según Ruiz y Aguilar (2007), en su investigación La inteligencia emocional

como factor clave para la competitividad de las PyMES, expresan que es
importante promover la inteligencia emocional, con el objeto de anticipar
acontecimientos y conductas que optimicen la gestión tanto de la productividad
como la competitividad. De igual manera se debe integrar la GIE (gestión de la
inteligencia emocional) en la organización con el fin de reinventar la estrategia y
crear las acciones que induzcan a la revolución, resiliencia y renovación de la
empresa.

Por otra parte, Valenica y Itúrburo (2012) en su investigación La inteligencia

emocional en el éxito empresarial, concluyó que las empresas innovadoras están
invitadas a ser parte de las empresas visionarias y aprovechar las oportunidades
del nuevo orden mundial. Para hacerlo deben estudiar las posibilidades de
respuestas frente a un mundo cambiante y asumir los retos del siglo XXI. Frente a
los cambios los autores recomendaron responder asumiendo los problemas como
una oportunidad para desarrollar: capacidad de anticipación, innovación,
flexibilidad, excelencia, acorde al cambiante mundo de hoy.

Así mismo, Duque, Garcia y Hurtado (2017), en su investigación sobre la

influencia de la inteligencia emocional sobre las competencias laborales: un
estudio empírico con empleados del nivel administrativo, demuestra que la
inteligencia emocional representada en las aptitudes emocionales y sociales
influye positivamente sobre las competencias laborales, encontrando que aspectos
como el reconocimiento de emociones, el trabajo en equipo, la comunicación, la
orientación al logro, la percepción y la negociación son características del
individuo que favorecen la formación de competencias afectando el desempeño
laboral.
 Al igual Manrique (2012) señala que los integrantes de las organizaciones
se enfrentan en el día a día a situaciones o problemas que se deben de resolver
inmediatamente y la única manera o más bien, el mejor camino para resolverlo
desde el razonamiento, la capacidad intelectual, así, como la inteligencia
emocional.

Los problemas no se podrían resolver o las personas no se pueden adaptar

a las nuevas interfaces sin estos elementos para alcanzar el éxito. Es por ello que
las organizaciones se enfocan actualmente a seleccionar y contratar a las
personas que tengan estas habilidades para responder a los cambios tanto
competitivos, las nuevas formas de comunicarse y el nuevo sistema que se utiliza
con la innovación tecnológica.

De acuerdo con la inteligencia emocional y el uso de las TICS dentro de las

pymes es de suma relevancia, ya que la sociedad se encuentra en una era de
innovación y la herramienta principal es el internet. Las empresas Pymes deben
adaptarse a los cambios para poder crecer y desarrollarse. La tecnología sin duda
hace avanzar al ser humano de una forma más rápida y enriquecedora que en la
antigüedad, aunque al no tener el manejo adecuado de la inteligencia emocional,
crean aspectos que pueden llegar a ser contraproducentes como por ejemplo la
adicción, la frustración, el aislamiento, la irritabilidad, la violencia, pueden aparecer
y llegar a destrozar el avance de aquella persona que comenzaron en la
tecnología, Daminici (2016, p.5).
Referencias

Dominici, M . (2016). La importancia del coaching en las PYMES como factor

estratégico de cambio. enero 20, 2016, de Universidad de Palermo Sitio
web:
https://fido.palermo.edu/servicios_dyc/publicacionesdc/vista/detalle_articulo.
php?id_libro=555&id_articulo=11606&fbclid=IwAR1Ow6ItcbnYJWU5D-
OLphzO07OuVFuKpVgjXAR_TOGfgXm96AGFyr6ZVv4

Duque J, García M, Hurtado A. (20 de junio del 2017). Influencia de la inteligencia

emocional sobre las competencias laborales: un estudio empírico con
empleados del nivel gadministrativo. UNIVERSIDAD ICESI, vol. 33, núm.
144.

Instituto Nacional de Estadística y Geografía (2015), Censos Económicos 2014

http://www.inegi.org.mx/est/contenidos/proyectos/ce/ce2014/default.aspx#M
as

Maldonado, G., Martínez, C., García, D., Aguilera, L., & González, M. (2010). La
influencia de las TICs en el rendimiento de la PyME de Aguascalientes.
Investicación y Ciencia de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, núm
47.

Manrique E. (2012). “INTELIGENCIA EMOCIONAL Y LA ACTITUD DE LOS

COLABORADORES EN EL AMBIENTE LABORAL”. 22 de Febrero del
2019, de Universidad Rafael Landívar Facultad de Humanidades Campus
de Quetzaltenango Sitio web:
http://biblio3.url.edu.gt/Tesis/2012/05/22/Zarate-Eber.pdf

Morales, A., Guillén, G., Valenzuela, M, & Burgueño, R. (s.f). LAS TECNOLOGÍAS
DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN ORGANIZACIONAL EN
LAS MyPEs DEL VALLE DE MEXICAL. Universidad Autónoma de Baja
California, Escuela de Ingeniería y Negocios,Guadalupe Victoria.
Ruiz, J. y Aguilar, A. (2007). La inteligencia emocional como factor clave para la
competitividad de las PyMES . Catolica del Norte, 1, 18.

Saavera, M. & Tapia, B. (2013). El uso de las tecnologías de información y

comunicación TIC en las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPyME).
Revista Venezolana de Información, Tecnología y Conocimiento, vol. 10,
núm. 1

Valenica, G. y Itúrburo, J. (2012). La inteligencia emocional en el éxito empresarial.

Recuperado en: 22 de febrero del 2019, de Universidad Politécnica
Salesiana Sitio web:
https://dspace.ups.edu.ec/bitstream/123456789/6130/1/La%20inteligencia
%20emocional%20en%20el%20exito%20empresarial.pdf