En este capítulo, el desarrollo empresarial está comprendido
como un todo en las competencias que tienen todas y cada
una de las personas que conforman una organización logrando de una u otra forma el crecimiento continuo y progresivo de su competitividad con lo que se pretende garantizar la existencia del capital financiero, tecnológico y humano adecuado para avanzar efectivamente este proceso. En toda empresa es muy importante que el talento humano sea de un todo competente para que con ello, por medio de sus destrezas, habilidades y saberes puedan someterse a pruebas de resolución de problemas que complementen dichos conocimientos.
En este capítulo se pretende resaltar como un todo el ámbito
cultural y ético perteneciente a una empresa u organización, entendiendo que todo empresa tiene definida su propia cultura lo que le permite diferenciarse de otras. Dentro de la empresa, está cultura se ve reflejada en las formas de actuar, sentir y pensar que comparten los miembros de esta identificándolos ante los particulares que de cierta forma tienen conocimiento alguno de la existencia de la misma. Esta cultura junto con los valores y creencias son una parte muy fundamental de la empresa, ya que está permite determinar funciones y acciones que realizan los miembros de la empresa los cuales deben tener pleno conocimiento de esta tanto teórica como observacional mente. En este capítulo se comprende la manera en que las políticas actúan positivamente por medio de la implementación estratégica de las mismas, generando un cambio muy notable tanto en el crecimiento económico como en el fortalecimiento de las mismas en del desarrollo empresarial permitiendo que dentro del país este crecimiento económico se haga sentir, con el fin de generar más empleo y capacidad de afrontar el libre comercio dejando muy en claro qué la percepción del país tanto económica como políticamente se ven mucho mejor desde la perspectiva externa que desde la interna.
POLITICAS DE DESARROLLO EMPRESARIAL
Este capítulo encierra como un todo al sector educativo y a la
manera en como este funciona como bien público; teniéndose muy presente todos aquellos elementos que intervienen tanto implícita como explícitamente en el diseño y empleo de las políticas que van direccionadas a este sector que de hecho es uno de los más importantes en el desarrollo empresarial, económico y político regional como nacionalmente. Aquí se comprenden varios puntos de nivel educativo que son: 1. La dirección cómo bien público; 2. La estructura del sector educativo; 3. Las características de la crisis del sector educativo. Los cuales nos direccionan al establecimiento de las políticas que han buscado mejorar continuamente el funcionamiento y crecimiento de este sector.