SUCESIONES ANUALIZADO.

TALLER SOBRE ALBACEAS.

PRESENTADO POR:
PABLO RIOS TAMAYO
CAROLINA ALZATE ZAPATA.

PRESENTADO A:

ALINA ARTEAGA.

INSTITUCIÓN UNIVERSITARIA DE ENVIGADO

FACULTAD DE DERECHO.
MEDELLÍN.
2019.
ALBACEAS Y EJECUTORES TESTAMENTARIOS

Concepto:

El albacea es aquella persona o personas designadas por el sucesor para velar

por el cumplimiento de su voluntad testamentaria y encargada de la ejecución de
todas o algunas disposiciones del testamento valiéndose de las facultades que de
forma expresa le otorgue el testador, o que disponga la Ley
La figura del albacea encuentra su fundamento y justificación en la confianza que
deposita el testador en un tercero para cumplir su voluntad post mortem. El
albacea como concepto jurídico puede entenderse como el mandatario del
testador que gestiona y ejecuta las últimas voluntades del testador, por lo tanto es
ilícito excederse en el ejercicio de acciones por fuera de la voluntad del testador
Es un cargo potestativo fruto de la libre voluntad del testador, asimismo es un
cargo voluntario, en ausencia del albacea el encargo de hacer cumplir las
disposiciones del testador corresponde a los herederos; es un cargo personalísimo
lo que significa que no se puede delegar o heredar el carácter de ser albacea a
menos que el testador así lo faculte; es un cargo de duración limitada que
concluye una vez sea cumplida la voluntad del testador.
El hecho de que un testador designe a una persona como albacea no significa que
la herencia ya tenga albacea, ya que esto depende de la aceptación del
designado, de la aceptación del cargo, por ello el juez dentro del proceso de
sucesión estipulara un tiempo para que este comparezca.
La aceptación del cargo, proveniente de la libre voluntad del testador, es de suma
importancia, ya que de ello depende la entrega de los bienes si el albaceazgo es
con tenencia, porque estos serán administrados por él hasta que quede en firme la
providencia que apruebe la partición o adjudicación de bienes y la no aceptación
del cargo de albacea tiene como consecuencia indignidad de suceder al testador,
esto sólo si no logra comprobar que la no aceptación del cargo se debe a
inconvenientes graves que imposibilitan dicha ejecución, esto está contemplado
en el artículo 1028 del código civil “El albacea que nombrado por el testador se
excusare sin probar inconveniente grave, se hace igualmente indigno de
sucederle.”
Todo esto nos muestra que la figura del albacea es sumamente importante en el
proceso de sucesión, ya que en caso de que no comparezcan los herederos, la
herencia no podrá designarse como yacente, porque está presente en el proceso
el ejecutor designado por el testador.
Respecto a las obligaciones:
La obligación principal del albacea es gestionar y cumplir la voluntad del testador,
por lo tanto adquiere una responsabilidad solidaria a menos que el testador lo
haya exonerado de la solidaridad.
Si hay varios albaceas, responden solidariamente todos, a menos que se designen
atribuciones especiales por parte del testador o del juez. En ese caso, su
responsabilidad irá solo hasta el monto de su atribución.
Es obligación del albacea velar sobre la seguridad de los bienes, hacer que se
guarde bajo llave y sello el dinero, muebles y papeles. Si hay un inventario
solemne debe cuidar que se proceda como dicte dicho inventario.(art.1342)
El albacea está obligado a dar noticia de la apertura de la sucesión por avisos
publicados por la imprenta, en periódico que circule en el territorio, y por carteles
que se fijarán en tres de los parajes más públicos del lugar en que se abra la
sucesión, y cuidará de que se cite a los acreedores, por edictos que se publicarán
de la misma manera. (art.1342)
Existe una obligación intrínseca del cargo, es decir, no requiere de la designación
del testador y esta es la del pago de las deudas del causante y para ello podrá
exigir la partición de una parte de los bienes para pagar estas, para ello el albacea
está facultado para vender bienes que pertenezcan a la herencia en las siguientes
circunstancias:
 Que el dinero no sea suficiente para saldar los créditos adeudados o los
legados.
 Siempre y cuando exista el consentimiento de los herederos para que se
efectué la venta de los bienes.
El albacea podrá vender tanto los bienes muebles como inmuebles, sin embargo,
los bienes de los que se deben disponer primero son los bienes muebles,
agotados estos se pueden vender los bienes inmuebles.
También está obligado a pagar las deudas del testador con intervención de los
herederos presentes o del curador de la herencia yacente si es el caso (art.1343),
pero los herederos podrán presentar oposición a la venta, entregando al albacea
el dinero necesario para efectuar el pago de las deudas.
Deberá también pagar los legados a herederos o legados a la beneficencia
El albacea, luego que cese en el ejercicio de su cargo, dará cuenta de su
administración, justificándola.
No podrá el testador relevarle de esta obligación.

Retribución por el albaceazgo:

El albacea por el desempeño de su cargo, tiene derecho a percibir una retribución,
y si el testador no fija el monto de la misma o no señala la forma en que se le debe
retribuir su desempeño, el albacea tiene derecho a cobrar el 2% dos por ciento
sobre el importe líquido y efectivo de la herencia, y el 5% cinco por ciento sobre
los frutos industriales de los bienes hereditarios.
Dentro de las prohibiciones que tienen los albaceas encontramos las siguientes:
a) No puede delegar el cargo que ha recibido, pero si puede designar apoderados.
b) No debe permitir la extracción de cosa alguna antes de formar el inventario a
menos que conste la propiedad ajena por el mismo testamento, por instrumento
público, o por los libros de la casa llevados en debida forma, si el autor de la
herencia hubiere sido comerciante.
c) No puede gravar ni hipotecar los bienes, sin consentimiento de los herederos o
de los legatarios, en su caso.
d) No puede transigir ni comprometer en árbitros los negocios de la herencia, sino
con el consentimiento de los herederos.
e) No puede dar en arrendamiento por más de un año los bienes de la herencia
sin el consentimiento de los herederos o de los legatarios en su caso.

Prohibiciones: Actuar excediendo la voluntad del testador o que aún siendo la

voluntad del testador, sea un acto contrario a la Ley.

Pluralidad de albaceas: Siendo muchos los albaceas, todos son solidariamente

responsables, a menos que el testador los haya exonerado de la solidaridad, o
que el mismo testador o el juez hayan dividido sus atribuciones, y cada uno se
ciña a las que le incumban. Art. 1338.
El juez podrá dividir las atribuciones, en ventaja de la administración, y a
pedimento de cualquiera de los albaceas, o de cualquiera de los interesados en la
sucesión. Art. 1339.
Habiendo dos o más albaceas, con atribuciones comunes, todos ellos obrarán de
consuno, de la misma manera que se previene para los tutores en el artículo 502.
El juez dirimirá las discordias que puedan ocurrir entre ellos.
El testador podrá autorizarlos para obrar separadamente, pero por esta sola
autorización no se entenderá que los exonera de su responsabilidad solidaria. Art.
1340.
Duración del albaceazgo: El albaceazgo durará un tiempo cierto y determinado
prefijado por el testador, si no se hubiere fijado, durará un año contado desde el
día en que el albacea haya comenzado a ejercer su cargo (podrá prorrogarse ese
término por orden judicial si por dificultades graves el albacea no pueda ejecutar
su cargo).
Causas de terminación del albaceazgo:
a) Por el término del encargo,
b) Por muerte,
c) Por incapacidad legal, declarada en forma,
d) Por excusa que el Juez califique de legítima, con audiencia de los interesados y
del Ministerio Público, cuando se intereses menores o la Beneficencia Pública,
e) Por terminar el plazo señalado por la ley y las prórrogas concedidas para
desempeñar el cargo,
f) Por revocación de sus nombramientos, hecha por los herederos, y
g) Por remoción.
En caso de que el testador no haya designado a una persona o ella falta por algún
motivo, son los herederos los encargados de ejecutar las disposiciones del
testador.

ALBACEA FIDUCIARIO.
Según el artículo 1368 del código civil el testador puede hacer encargos secretos y
confidenciales al heredero, al albacea y a cualquiera otra persona para que se
invierta en uno o más objetos lícitos una cuantía de bienes de que pueda disponer
libremente.

Disposiciones: Los encargos que el testador hace secreta y

confidencialmente, y en que ha de emplearse alguna parte de sus bienes,
se sujetarán a las reglas siguientes:

1a.) Deberá designarse en el testamento la persona del albacea fiduciario.

2a.) El albacea fiduciario tendrá las calidades necesarias para ser albacea
y legatario del testador; pero no obstará la calidad de eclesiástico secular,
con tal que no se halle en el caso del artículo 1022.
3a.) Deberán expresarse en el testamento las especies o la determinada
suma que ha de entregársele para el cumplimiento de su cargo. Faltando
cualquiera de estos requisitos no valdrá la disposición.

Limites: No se podrá destinar a dichos encargos secretos más que la

mitad de la porción de bienes de que el testador haya podido disponer a
su arbitrio.

Juramentos: El albacea fiduciario deberá jurar ante el juez que el

encargo no tiene por objeto hacer pasar parte alguna de los bienes del
testador a una persona incapaz, o invertirla en un objeto ilícito.

Jurará, al mismo tiempo, desempeñar fiel y legalmente su cargo,

sujetándose a la voluntad del testador.

La prestación del juramento deberá preceder a la entrega o abono de las

especies o dineros asignados al encargo.

Si el albacea fiduciario se negare a prestar el juramento a que es obligado,

caducará por el mismo hecho el encargo.

Caución del albaceas fiduciario: El albacea fiduciario podrá ser

obligado, a instancias de un albacea general o de un heredero, o del
curador de la herencia yacente, y con algún justo motivo, a dejar en
depósito, o a afianzar la cuarta parte de lo que por razón del encargo se
le entregue, para responder con esta suma a la acción de reforma o a las
deudas hereditarias, en los casos prevenidos por la ley.

Podrán aumentarse esta suma, si el juez lo creyere necesario para la

seguridad de los interesados.

Expirados los cuatro años subsiguientes a la apertura de la sucesión, se

devolverá al albacea fiduciario la parte que reste, o se cancelará la
caución.
Guarda del secreto: El albacea fiduciario no estará obligado, en ningún
caso, a revelar el objeto del encargo secreto, ni a dar cuenta de su
administración.