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    Amigos del alma Elvira Lindo Iustrasines ae Emilia Urberuaga Arturo y Lulai son amigos. Amigos del alma ‘Amigos de verdad. Son inseparables. Hasia que un dia Arturo se enfada coon ella y le dice que se vaya alla China. Esa noche Lulai lara... cuando volvera a jugar con su mejor argc? = me Amigos del alma Elvira Lindo \ustrecones de Emilio Urberuaga ALARA ©2000, de vente: Eo Links (6203 delete Ei Ute {© 200, Grupo Snide Eines A eset Amigos del alma ais Chn de kines 5 Se ae DD Aiba Ar 44, Pnseoia Elvira Lindo Stago de Chie toons Emilio Urberuaga + Gropo Senta de Eaones SA Tera, 2803 Mai Esp + Apia Alte, Tara, llagoarn Sade C3. ‘Aida nero 51 Cdl Valle Mexico DF. CP. 0310, + Aguilar, Ate, Tauro, ltguara Se Eilnts ‘a, Leandro N Ale 720,C1004 AAP, Buos As, Agente, + Sandione 8. ‘va. Par 2160, Sania Sa, Lins Pek + Baas Satta ‘Conic 18811890 Manevien, Ury. + Senna 4 Avda Venera N27, ¢M Lipsy pa, Asi, guy + Santana de Ediciones S.A. t Avia Ae 233, Resend Gabe Bsa Satis Lah Bon, isn ose-204020 Ingles ea Che Prise in Chile mean Chemie 205 Cut aionca Che my 208 Dito de cece Mane ara ALEAGUARA, G | No puede haber dos amigos mejores que Lulai y Arturo, van jun- tos a la escuela, se sientan juntos, juegan juntos en el patio y alos dos les entran juntos ganas de hacer pis. Tan amigos son que un dfa decidie- ron casarse. Les casé Adrién Carro, que dijo que sabia casar, porque su padre era concejal y ya habla casado a un montén de gente. Y si que es verdad que Adrian Carro sabia casar 8 porque lo hizo mejor que cualquier cura y cualquier alealde, con unas frases tan bien dichas que parecta que se habla pasado la wida casando ala gente —Arturo, iquieres a Lulai por siempre y por jams en el calor y en el frio, en enero y en agosto y hasta que después de la Resurreccién? Y los invitados que eran Pedri- to Gomez, Carbajo y Paula exclama- ron impresionados: —Ooohhhhhh! Era un jOh! de admiracién, co- mo diciendo: «Qué bien habla este cual», Y Arturo contesté: —Sii si, pero jle puedo dar ya el beso a la novia, que tengo mucha prisa? No, todavia he —dijo Adrian —, que la novia todavia no ha contestado a las preguntas del inte- rrogatorio, ~Lulai —empez6 Adrién—, iquieres a Arturo para casarte con ély quererle por la noche y porla mafiana una hora detras de otra aunque haya dias que no te apetezca niuna pizca? Ante tal pregunta, la novia se quedé dudando un rato y al final contests: Bueno, pero estaré casada un dia sf y un dia no, porque si no me aburro. Y los invitados a la boda, que dieron esta respuesta por buena, no dejaron ni que Adridn Carro diera su bendicidn a los novios, antes de Carr que dijera aquello de: «Yo los decla- ro marido y mujer», tiraron cada uno un pufiado de tierra en las ca- bezas de los novios, y entonces soné (l el timbre y corrieron todos hacia la clase, todos menos el novio, que fue muy despacio y muy desilusionado, porque cuando uno se hace la 12 ilusién de besar a su novia es muy dificil volver a clase simplemente con las ganas. Pero bueno, no hay que dra- matizar, porque después de este dia Lulai y Arturo se casaron unas cuantas veces mas y Arturo siempre intenta- ba que la ceremonia fuera rapida para llegar al beso, que era lo que a | de verdad mds le importaba. A Lulai le gustaba, pero no tanto como a Arturo, porque si fuera por Artu- ro hubieran estado todo el santo dia dandose besos y abrazos. Hasta la sefiorita Amparo tenia que intervenir algunas veces porque, por ejemplo, habia veces que Lulai estaba inten- tando hacer su trabajo de plastica, colorear los patos sin salirse de las Ii- neas, y de pronto, como si fuera un , EE 13 huracdn y sin venir a cuento, Arturo le daba un abrazo y le agarraba la cara con las manos para darle varios besos. —Arturo, Arturo, déjala que trabaje, no seas pesado. es que nos hemos casado en el recreo, —Me parece muy bien, pero no la atosigues. —Un rato si y un rato no —de- cfa Lulai mientras pintaba—, yo me caso un rato si y un rato no. ‘Arturo sufria un poco’ cuando Lulai decfa esas cosas, pero luego se le pasaba, cuando salfan de la escue- lay Lulai se despedia diciéndole: «Eres mi gran amigo». Arturo queria entonces darle un beso antes de que Lulai se marchara de la mano de 4 su madre, pero ella a lo mejor le de-

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