Capital cultural, 9, ESPACIO SOCIAL Y ESPACIO SIMBOLICO,
i c NTRODUCCION A UNA LEGTUR’
escuela y espacio social JRPONESA DELL DISTIVGION®
FOTOG:
GCE
Peobrens
Pierre Bourdieu
{Yo creo que si yo fuera japonés no me govarin fa
mayor parte de las cosas que los no japoneses escr-
woh sobre Japén. En ln epoca en que escebi Los
Teredps, face ye. mas de vein afos, reconod fa
jertaci6h que me inspiration lor abajosnorteames-
| canos de etnologfa sobre Francia al conocer Ia critica,
| Gue os setclogosjponeses, Hirsh Minami y Te
dio Wats sobre todo, habfan enderezado contra
fl elebre libro de Ruth Benedict, El ersantone yl
| fn notes hablar ps de “snsibiiaejapone
Cohan demisteri"o del "magi japonés, Habre
| Geum pats que yo conoace bien, no sale porque en
th ny del que hablo su lenges, sno porgee fo he
saudiado mucho: Francia, sto quere decieque me
heceraré ens paricularidad de una sociedad sing
lary no ablaré para nada de Japén? No lo cre.
Pieaso por el contrario que, presentando el modelo
Gel epacio socal y del espacio simalio que he
onstaido a propia del caso pareular de Froncin,
fo cord de fables de Jopén fe om, ablando
de pales ajenos, hablaré también de Estados Unidos
ode Alemania) ¥ para que ustedes eniendan con
pletamente este discurso que les coneierne y que, at
= Conference pronuncnda ens Casa Francoaponess. Toke,
4 ae oem de 198.
(23)2 LAS CHENCIS DEL ORCI
igual que mafana a hablar de homo academic frase
cés, pocré tambien parececescargado de alusiones
personales, quisiera extimularis yyuarlor arms
SK de a letoraparicularizane que, ms que cons
Gtsrse en un excelente sistema de defena contra eh
anit esl equialene exacto, del ado de la recep
Gi6n, de Incurtosidag pos los particulars exoicos
gue han inspirado muchos de los trabajos sobre
Fipen.
Mi trabajo, expecilmente Le dtingln ext par
tcularmente expueso a esta reducion parclark
zante. El modelo cedrico que al se presenta no est
ornado de todos os sgnos en los cules se recono-
ce de ordinario a a “gran teora", comentando por
Tnausenca detocareferencina una realiia empticn
curlquiera.Larnocionesde espacio soci de espacio
Simbolic o de clases sociales no estin examninadas
allinuneaensfismasniporst mismas;estin pests
a prueba en na investigacion ineparablemente te
"ea yempirica que, sobre un objeto bien siwado en
Clespacioyelsempo, a sociedad frances de los aos
-Setenta, mobilina tina plualiad de meiogos estas.
cosy etnogrtiens, macroscioldgicosymicrosoco-
logins (lo mismo que oporiciones desprovias de
Semtide). EY informe de esta nvertigaign no se pre
Senta en el lengunje al que nummerosoesocislogos,
tobre todo nortsamerianos, nos han habltuado y
ue no debe su apariencia de universalgad sino a
Indeterminacion Gen lexco preciso mal record
del uso ordinario =no tomaré masque un solo een
plo, la nocién de profsin. Gracias an Tenguaje
Siscursvo que permite yuxtaponer el cuadro esta
Seo, Ia fotografia, el extacto de conversa, el
facsimil de un documento y la lengua abstracta de
SSPAGIO SOCIAL Y ESFACIO SmIBGLICO 5
andlisis, puede hacerse coexist lo mas abstracto yo
més concreto, una fotografia del presidente de la
Repiiblica jugando tenis o la entrevista de un pana.
deto, con el analisis mas formal del poder generacor
yunificador del habitus,
‘Toda mi empresa cientifica se inspira en efecto en
Ja conviceién de que no se puede asir la légica mais
profunda del mundo social sino a condicién de su-
‘mergirse en la particularidsd de una realidad empt--
rica, hist6ricamente siada y fechada, pero para
construiria como “caso particular de lo posible", s
gin las palabras de Bachelard, es decir como un caso
de figura en el universo finito de las configuraciones
posibles. Concretamente eso quiere decir que un
Analisis del espacio social en Francia en 1970, es elde
Ja historia comparada que coma por objeto el presen.
te, 0 el de la antropologfa comparativa que se apega
un area cultural particular: en los dos e2sos, se trata
de intentar asir lo invariante, la estructura, en cada
tuna de las variances observadas.
Esta invariante no se encuentra al primer vistazo,
sobre todo cuando este vistazo es el del amante de lo
exético, es decir, de las diferencias pintorescas; aquel
ue, por decisién 0 por simple ligereza, se apega
Prioritariamente a as curiosidades superficales, alas