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Los Breviarios del Foxoo ve Covruea Eco- Néauics constituyen la base de una biblioteca ‘que lleva la universidad al hogar, poniendo al aleance del hombre o la mujer no espet zados los grandes temas del derno, Redactados por es universal, cada uno de estos Breviarior es un tratado sumario y completo sobre Ia materia ‘que anuneia su titulo; en su conjunto, euida peculacién astronémica por la bioldgica, como in Huencia dominante en el “mundo cient tamto que Ia matematiea alcanzé un alto grado de desarrollo, que Hews a los pitagéricor a. pensar aque Ia ciencia tle los mimeros es, en si, probable mente, Ia clave de los secretos del universo.® Por la época en que Séerates tenia veintitantos afios, LA JUVENTUD DE SOCRATES las eorlas orientales y accidentales sobre el universo Gitaban cristalizando en certa oposicién mutua, feuyo mas prominente “signo exterior y visible” era In diferente descripeién de la forma de a Tierra Yel lugar de ésta en el equema de las cosas dado en los dos sistemas. En general, el punto de vista de Oriente era que existe una simple materia de la que fstim hechas todas las cosas, incluyendo nuestra propia mente, Esta materia es "alte", y por air fe entendia nicbla o vapor. Todo lo que existe es nicbla o vapor, y las diferencias entre las cosa se deben simplemente a variaciones en el grado de condensacién o de rarefaecion de esta materia pr mitiva, Incluso el “alma” humana es aite,siendo, de hecho, sélo una porciin de ki atmésfera que nos Todea y que introducimes en nuestro cuerpo pot mientras respiramos, y por esto “exhalamnos el lt 1a respiration, Pe ran masa de aire een el centro de nuestro “mundo” particular, o sistema entelar, es fo aliento” al mori, La Tierra, tun ancho disco que flota en el aire que tiene deba jo, como flota una hoja sobre la superficie de un Ho. Como esta concepcién oriental era monista en principio, las concepciones occide principio dualisas o pluralistas, La mis conocida fe estas teorias para el lector medio de nuesteos dias, 6 la de Ea or de la escuela médica siciliana, quien sostenia. que ire en varios grados de condensacién, toda Cosas eran compuestas de cuatro “rales” primitivas (los elementos de una terminologia posterior), fue fo, aire atmosférico, agua y "vierra™. Un contraste fodavia mds notable con la teoria ‘oriental, es el « La JUVENTUD DE SOCRATES jue presenta la concepeién de los pitagSricos, quie: nes trataban de conecbir fas cosas, de mancra ttictamente matemitiea, como ouas tants figuras ronstituidas por “unidades" 0 "puntos", distribu os en modelos geométricos caractersticos en vn ‘spacio” circunambiente que no era claramente diferenciado de la niebla w oscuridad. Ahora bien, siricos habian descubierto In forma esférica de la Tierra, y la consiguiente imponibilidad de {que flotara sobre un soporte, Volvieron a Ia bri Tlante ides de Anaximancdro, quien, aunque supo ha que la ‘Tierra tenia la forma de un tambor habia declarado en los primeros dias de la ciencia a que no estaba sortenida por nada, sino que osilaba libremente en el centra de todo’el sistema ‘telar porque esté situada simétricamente, y de sta suerte no hay tarn para que deba desviar- seen una ditecci6n y no en otra, El choque directo entre las concepciones Upicamente orientales y oc ‘dentales sobre Ia forma de Ia Tierra es un buen ejemplo de la condicién del pensamiento cientifico a mediados del siglo v. La ciencia habia sido fl resultado, que Socrates insinga en el Fedén pla: ténico, de que nada parecia seguro, a no ser que si una’ de las teorlas rivales fuera exacta, todas las dlemés tendrian que ser falens® Ain mis desconcertante que las asercior tradictorias de las excuelas cientificas en conflict, fra Ia critica radical de todas ellas hecha por los ldsotos eleatas, Parménides y su discipulo Zend, Partiendo del principio racionalista de que lo que rho puede ser pensada sin contradiecién no puede sor LA JUVENTUD DE socRATES a vetdadero, Parménides habia declarado que el mo- vimiento y el cambio, caracteristicas fundamentales el mundo tal como Io dewribe la ciencia, son ‘ontradictorios en si mismo y eben ser ilusorios, Que lo que realmente es debe ter un "Absolute" simple, uniform, inalterable;* ‘ado que Ia Naturalezs, talc tox conmndlogos, no es un Absoluto de ee tipo, sino santes, Ia Naturaleza s6lo puede ser una susién, Zenda habia Hlevado la guetta al corazén del campo por consiguient enemigo al sometcr los principios matemsticos de Jos pitagéricos a un examen detallado que parecia probar que el propio pensamiento matemitico tina masa de cantradictiones y, de hecho, conduce a una reconstruccién de los canceptos matematicos fundamentales que empeud en Ja edad de Dlawn Y apenas es completado en la nucstra.™ El efecto ae ‘est ente incontestable sabre los primeros elementos del cc a mediados del siglo v a,c, fue la difusion de un fexcepticismo general sobre la posibilidad misma de ‘conocer el mundo natural mas capaces y notables volvian Iss espaldas al mun: do tisico como objeto de estudio; eran cast exclu esalto. aparenter sivamente las inteligencias de segunda las que se “ LA JUVENTUD DE SOCRATES ‘ocupaban de repasar los viejos sistemas. Los hom bres de primera categoria, como Protigoras de. Ab: der, ditigian su pemsamiento a algo diferente, En tuna edad de rapido progreso moral y politica se sen tia la necesidad de prineipios bien pensador formulados sobre legislacién, politica y condueta personal, que ocuparan el lugar de Ia confianra fn Ta tradicidn y en Tas costumbres, y con ello paecia abrirse Ia posibilidad de un empleo true tifero de Ia inteligencia para fines précticon. Esto explica la aparicién de ‘una profesién nueva: la el “sofista”® 0 “educador de hombres" pagado, cs hubieran sido investige dlores de Ii Naturalera encontraron tuna nueva y remuneradora ocupacidn viajando de Gudad en ci dad como expostores profesionales de Ia "vireud y de la “bondad”, e+ deci, del conocimiento de ‘cbmo manejar los asuntos privados lo mismo que los de In ciudad’, precisamente del conocimiento {que una javentud que aspirara al poder y a In dis tincién estaria sumamente ansiona de adquirir, Los studios de humanidades de Europa tienen st of igen en este movimiento, 1o mismo que las cencias naturales tienen el suyo en las expeculaciones cot moldgicas de los “sabios” de Mileto, La rdpida aparieién de una democracia imperial en Atiea, en 1A JUVENTUD DE socRares © la época de Pericles, hizo naturalmente de Atenas uuna capital cosmopolita en la que el profesor de ‘bondad” podia estar seguto de tener un entusiasta auditorio y una rica cosecha, Tanto el viejo interés por la ciencin matematica y fisica, como el nuevo. por los estudios hums Iisticos de derecho y de moral, estaban plenamente representados en la Atenas de Pericles. La ciencia antigua, en su versién oriental, con su Tierra pla na, habia sido levada a Atenas, durante la nitiez el estadista, por Anaxdgoras, y la tadicion acep- tada por Platdn e Isderates, afirma que Anaxigoras fe encargd de la educacion del propio Pericles” Probablemente Anaxigoras fue obligado por los adversarios politicos de Pericles « abandonar Ate nas para escapar a una sentencia por “impiedad” an tes de que Socrates Iegara a la mayoria de edad; * fl Fedro. (08) accica de le "a oratoria ‘de Pevicis dela 4 m1 tian com. Ansedgors, fon lan dciststiocs de Plain, quien Ga ona Targa dep Sion eat experamas,despertadae en el pec del fone 1.) JuvENTUD De socRares for, Arquclao, y Diégenes de Apolonia emeRaron todavia ls coxnologies de tipo oriental. El gran geémetra Hipderates de Quio se habia domicliad para dudar de ello, que Parmenis y Zenon vish tron la ciudad, donde Sécrates entable. conoc? Zendn debié de vivir alll durante algin tempo, yu Que mais de un eminence atenfense le page mag Aifieos honorarios por su instruccin®? Los dito por las visitas de Tor jtestobresalientes del movi mmiento “humanists”, Protigoras y Gorgas. En todo eso Sines que fed 3 Ate ors psibanente un ero por eallady, como te Una nt del de Salsina cn oro tapes), stow dato (Matin) Albis 1, 192, mencions a Pitdor, hi 1a joven pe socnatis : caso, Prorigoras debe de haber tendo acceso al tirelo dl propio. Pericles, quien to incy en osinada a su importante colonia de Turi (43 sc) en la ltatia terdional, y parece que Zenon Gotuvo también entre sir eolaboraores Ts probable que Socrates, dese temprana edad fda de It poca y de st caltura humanist, Esta fla postin habiceal de'Platén, Ia mejor pra Ge verdad cs que se ve conrad, pot Ts mimisiones realmente notables de Jenofonte. Por tat que Socrates enla'su propio punto de vata tulideio sobre a clencia: que. pensaba que se debla saber suficiente geometria pars “medir un debe une quebrar la caber sobre’ “los i para ver eapar de “decir el momento dela noche, Set mes o del allo en wna expedicion, un’ viaje plantas y dels exrella erants, de ss data afade en seguida que “sin embargo, él mo ignoraba el tema", "a pesar de esto, no era ignorante en estas materiay tante, en ambos casos, Jenofonte {por ello, Ia actitud que le atribuye no era lad ‘menosprecio de la ignorancia):# 1 Jenolote,Recuerdor, IV, wi, +-6 Taos cones “ LA JUVENTUD DE sockares Platén nos dice algo més sobre exta cuestién cen la narracién autobiogrifica que el Fedén pone en boca de Séerates Sderates se inici, segun se nos dice, como un entusiasta de “Ia investigacién de la Naturaleza’ ‘ausat de Ja generacion y corrupeién de las coms". Estudio las diversas tcorias cosmoldgicas eorrientes, ore tales y occidentales (Ge indica que y sus eompaiieros en cuestion 1A JovENTUD DE socnatEs ande si nos hemos hecho amigo qu escrito es enteramente distinto del hombre que tiene una odor y cada uno, tan familiar para nosotros por los recuerdos personales de Platdn y de Jenofonte. Es, muy defi nidamente, un estudiante de los “aitiguos varones sabios”, es deci, os fldsofos y hombres de ciencia primitivos. Lo todea wn grupo de estudiantes cole as, totalmente diferentes de los jovenes ociowos de familias oputentas que se apinaban a su alve edor en sus ltimos aftos, como dice Platdn, por 1 placer de oirlo desenmascarar Ia ignioraneia de Jos hombres pai cireulo como director de sus estudios & tal que plausiblemente puede ser confundila por Anttén fon ba de un profesional. Jenofonte nos al suyo, que basta para probar que el spensadero de Lar nuber ex la deformacion de algo real para Es importante sefialar que la ade Sécrates re de facultades intelectuales sobresa Tientes dehe le haberse stablecido en esta primera on los famowos "sa sta” deben de remontarse a fe fecha, Esto es lo que Platdn presupone en de un pasaje, El gran encuentro de Socrates. y Provigoras, el sofisa mis eminente, descrito en el didlogo mis dramético de Platdn, = imaginado omo teniendo lugar antes de que fuera inminente el esllido de Ia gran guerra, AL Matin “Apotgi, age LA JUVENTUD DE SocRATES que pele con Ia caballgsiansienRotidea, oiliri Wo Ingo’ aos cibiades, aparece en el Protégoras tod cente; lo eminentes “homby de ellos de ciudades que soft wRotephe Me oe i pe ole a or Calls en apacbles sraBfetempies hohe bien, en el didlogo se da jor WyUlio ue Moeraips bith gor todos Incluso alude, ¢ iy le yo ex otros didlogos platénicos, 2 bem Ae las conferencias menos caray-decredies carga tigoras, en particular, que fo HB le hace ¢ decir que pensd por entonces, que era et joven mis capa trado, y tiene gran confianza Tas relaciones de Socrates con o lak describe Platén, aun fen su porvenin* aquellos hou aque esta cuestin es algunas veces pasada le que se hubiera comprometido en su “mision ‘estaban muy Tejos de ser hostiles. Los “sfistas ho son jamés mencionados en la Apologia como tina dle fas clases a las que su voeacton fe Hlevar a denunciar, Admiran auéllos wu habilidad, aun: ce 1A JovENTUD pe saceaTes Como ha sefalado Burnet, tenemos ademis un sto en creator lectaaes bien alfa de Ate mC por el Fedén de Platon los Jenofonte. Estuvieron presentes, ee Hivenes de Tebas, Simmias y Cebes, en un tiempo iscipulos del pitagérico Filolao, y dos eledticos le Megara, Euclides y Terpsion, Sitamias y Cebes citados por Jenofonte ® entre los hombres de mérito que frecuentaban la com . omparia es para bien de sus almas. El elegante “cos a" Aristipo de Citene, aunque 1 ; ene, aunque no pre sente de hecho, estaba en tales relaciones con Sé ‘ates, que Platén siente que ha d dlyae alguna Socritica, y recibir una cus oon Lx JOVENTUD DE SOCRATES fs hecho de que, en Platén, el relato de su mucrt 1 lieeho por Fedén de Elis al pitagérico Equécra tes de Flo au grupo de compares awinimos, eseritos como adimitadores tina completa narracion de los dkimos momentos del. gran hombre, Ahora bien, las ciudades de onde eran natives la mayor parte de aquellos {individuos, ‘Tebas, Elis, Flio, fueron “Estados enc rmigos” durante In Guerra del Peloponeso, qui fontinud, a pesar de 12 “paz” concluida nomin mente en q2t a. c, casi sin interrupcion desde Ccuarenta hasta los sesenta y seis afios de Sdcrates Parece deducirse que su relacion con los mais anci now de estos fildsolos no dticos debe de haber empe ado antes de ss cuarenta 3 pos de pitagdricos desparramat dlebian considerarlo ya prender por qué Tos jovencs di carn tar ansioor de poricos de ‘Tebas habrian de 0 posible Sinise a sm cireuto tan pronto como To h Ta terminacion de la gran guerra, Esta misma jernacional” se presupone en usa noticka aque Ia Tlegado hasta togotros, gracias a Esquines, je que Arstipo de Cirene en particular habia sido atraido a Atenas por “la fama tle crates” Tod fxtos heehos implican Hanamente que Si feontra de algunas concepciones modernas, era bien fonocido, dele una época temprana de su vid. ura sobresaliente en cifculos intelectual muy alejados de Aten, Esto ex estrictamente de acuerdo con la teferencin de Dlatén acerca de la impresién que hizo, de joven, a “ext 6 La JUVENTUD DE socATES teminentes como Parménides y Protigoras; pero no fetd de acuerdo, en absoluto, con la extrafiay ntractiva teorla del siglo xx que lo presenta como tun excéntrico “proletario” de-genio. El mismo punto de vista acerea de sw posicién durante su vida temprana est supuestoen Ia famosa historia, referida extensamente por Platén en la Apologie, de ly declatacién del ordcalo de pelfos de que “ningin hombre viviente era més abjo que Socrates". A pesar del escepticismo de unos cusntor autores alemanes modernos, 0 puede haber ninguna duda razonable de que la Aeclaracién del oriculo es un hecho histbrico. Pla no podia haber hecho que Séerates refirese Aetalladamente esta historia asus jueces, muchos de Jos cuales deben de haber leido la Apologia, a me nos de que efectivamente hubiera hablado de lla y habria sido insensato referir tl historia,» ofrecer {a presentacidn de testigos desu veracidad, como lo hhace Scrates, a menos que realmente hubiera sce ido, Tampoco hay diftcultad alguna en compren ler por que pronuncié a sacerdotisa de Delfos este riculo, aunque algunos historiadores se han que brado la cabera acerea del asunto, Como Sdcrtes fen Ia obra de Platén, el ordcalo fue dado amigo Querelén que habla planteado. la Pregunta: "Hay alguien vivo mas sabio que Sé crates?" Naturalmente, como sucede en tales casos, se dio a Quereldn Ia respuesta que habia pedido, EL punto realmente instmuctivo es que la pregunta haya sido hecha, porque el plantearla significa que Sécrates debia gorar yade tal reputacion que um admirador pudo hacetla sin ponerse en ridicu LA JovENTUD DE socRaTES a to; al pregunta solo podia hacere sobre un hombre aque 7a ot famovo, en el circulo. que To Todeabn Sino wn “talento Ahora bien, Platon pone per fectamente en aro que, ein su propia creenen, Ja pregunta de Quereon fue hecha sl ordio antes dette Guetra del Peloponeso; esto cy antes de aque Sdrates legara alos euarenta Ta apology we hace decir a Sécrate que Popalarkiad con los jovenes, en so limos aos, PrP consecuencia del placer que ellos derivaban de Ia mkign mcrdtica de desenmasarat Ia ignorancia de los mayores,mision que, agin decla, cra un eter pues por I pues el ri, Dee Iege, su popularidad etre ls jovenes centes es tn supuesto del dislogo de Plat6n, Car tides, donde Sécrates, que acaba de regrear de la Gampaia de Potiden(ysrige) al comienro de ia guera, es obligado a investigs dicen de le filwofla” en Atenas y ln sgnos de ines owl, miedo por “oe Ast, pus, Ia manifestacién de oricuo, de acuerdo Gon Plan, perenece a una fecha todavia anterior s importante instr sobre ese incdente del oréeulo, puesto que, si el relato de Platon es fie dligno, parece haber acarreado una css eopeitual en la vida de Sbrates Por las noticias que Plan for ba dado de Ta primera époea anterior de st Vide dcbemes considerarlo.prinelpalmente como tan hombre prominente en los clrulos invelectales, familiarzado con la avanvada clenci de su epocs aunque muy dagustado con el eatado efectvo del onctimiento, y°que sortenta opiniones, propiat decididamente originales acerca de low supucton adoles « LA JUVENTUD DE SOCRATES y métodos de Ta investigacin filosifica, Sin em- hhargo, aungue es respetada por todos los intelectua: Jes de su tiempo, y hay un grupo de asociados devotos que lo consideran como el mas destacado dle todos los “hombres de ingenio”, nada hay en él del hombre con una misién de convencimiento ha: cia todos y cada uno, acerca de st ignorancia de lo que mas necesita saber un hombre, y de la impor. tancia suprema de “cuidar sus propias almas”. Esto era justamente lo que, segin Platén, distinguta al ‘Sécrates de lor ultimos aflor del Sécrates de quien cl pedante de la comedia aristofanesca es una cat ‘catura comprensible, Segin la version del asunto dada en la Apologia exta misién era el resultado ditecto del ordeulo Gado por Apolo. Sberates explica que el princ plo quedé atombrado por la opinién que el dios tenia de él, ya que se daba cuenta de que no posela ninguna sabiduria. particular, Por" const fuiente, quiso probar que Apolo era un embustero encontrando alguno mis sabio que él, Bused ese hhombre, primero, entre los prominentes hombres ppublicoe de Ia ciudad lor “politicos”; Inego entre Jos poeta finalmente entre Jos comerciantes y arte sanox; pero en ninguno de los casos encontré. 10 que se proponia, En las dos primeras cases no fencontrd ningin verdadero saber; ni los politicos ni los poetas pudieron dar una descripcién intel gible de los principios de su calidad de extadistas © de su arte, Los artesanos Hevaban ventaja a los ‘otros pues entendian verdaderamente sus propios cficios; pero, por desgracia, imaginaban entender fe otros y mis importantes asuntos con igual cer- teza. Gon el tiempo, el verdadero signifieado del La JUVENTUD DE socRATES & oriculo se aclaré para Sderates, El significado era gue In humanidad ignoraba lo unico que importa fn verdad saber: cimo conducir rectamente la vida imo “cuidar” si propia alma y “hacerla tan ‘buena como fuera posible’, y todos padecian na ceguera universal sobre esta cuestion, Sdcrates es Ja tiniea excepeidn; si €l tampoco posee este cone cimiento supremamiente importante, conoce por lo menos su importancia, y conoce su propia ighoran. da; él es “el tuerto en la tierra de ciegos", y el iis sabio de los hombres, tal como éstor son, Por festa azn siente que e un deber que Dios le ha impwesto el persstir en buscar el conocimiento supremo y tatar de eonvencer a todo hombre, cam patriota © extranjero, que quiera escuchatlo, a aque se una a su busqueda. Segin la Apologte, de sta manera el Sécrates "hombre de ingenio” re con virti6 en el "fundador de Jn ética’ Desde luego, e evidente que existe un elemento de humorismo en Ia manera en que se emplea, en teste relato, la historia del ordcilo; sin embargo, pata que tenga algin sentido, debe de haberse que Fido que fuera el relaio de un hecho histérico de acuerdo con su supuesto principal; que Séerates, hacia Ia mitad de su vida, pas6 por wn periodo de isis, cuyo resultado fue el surgimiento de un hhombre con tna clara conciencia de una “misidn", y que la respuesta del ordculo tuvo un papel en la Provocacién de aquella crisis. No puede carecer Ge significacién el que Platon lo presente haciendo el intento de “convertir”” a un joven prometed Gérmides, tio del propio Platén, inmediatamente Gespués de la campana de Potides, durante la eval habia experimentado el “rapto” © “tance” de veinticuatro horas deserito en el Banguete, Si su pidramos mis acerca de Tos hechos quis4 veriamos que su “vocacién” de profeta le vino durante aque Mia vision, y Burnet puede may bien haber tenido una feliz inspiracion al sugerie que esto explica por qué, en Platdn, lo encontramos tan frecuente mente usando el lenguaje militar para expresar el sentido de la vocacién que Dios le impuso. Parece claro, por lo menos, que segin el relato de Platén, Ia conviceién de ser un hombre elegido, con una mnisién especial hacia 1a humanidad, databa en el del principio de Ia Guerra del Peloponeso, si no de antes. Si pensamos en é1 como debié de ser antes de que Querelén hiciera su importante pregunta a Apolo, veremos que el cuadro trazado por Platén en las primeras paginas del Parménides, la referen cia a sus primeros dias en et Fedin, las memorias de origen descomocida en las que se bad Jenofonte para hablar de las relaciones entre Sécrates y Anti fon y la divertida farsa de Las nubes, srmoniran admirablemente entre a. Primera Spee denn ida como pt rar en el erode muponcr que a “geo ivan” © “gn ea toy et ol io Pala ‘Mpaogi ue eserbe et rig de Ie tls; etando gs 1A JUVENTUD DE socRaTis % Aigo podeinos deducic de Platin y de tos acerca de as personas que deben de haber formato el ireulo” de Socrates en aquellos Wiss, anteriowes fia gran gue En primer lugar, ene sus ami for mis times cstaia Crtén, su acaudalado y Tehoto amigo y vecno, hombre de st misma edad Minitador Querelén,cseamectdo por lo. pocas Smieos por supe trina, aspect sombre y fame Heo, preventado por Ariattanes como el comple aque fepreventa ow “espiitus” en as sdances de Beach Algunos de tos hombres de ms edad aque figeran despues como "eocrddces", puclen se fe remontan teste periodo, por ejemplo, con tla probabilidad, Arsupo de Cirene, yl lilo Fhomoe dicho, Eucldes y Terpidn, ts eleaticon de Megara, ‘Desde luego, Plain, Jenofonte y Eat neo habtan nacido aim Ente lon hombres em mentes que deben de haber mantenido relaiones de tstrecha amistad con el fildeofo desde el mism Comienzo de la gran guerra, teneraos que anotar en primer lugar al mas brllante de todos, Aleibiades, fenio maligno de Ia democracia ateniense, la que flternativamente lo mimaba y se volvia contra € tule wpero Oe Quests padi Sri’ dace Ie sco LA JUVENTUD DE SécRATES cwida x dos parientes de Platén, su to Garmin y et prio de su mnie, Crt, dexinn dos ambes's deshonrarse nin mis que Alibiades Pesdemos adie a i lista, por el testimonio de In Republic, lor hermanos, mayores de Platén, ‘Adlmanto'y Glaus, y la tails el rico fabric te sracusaio, Cfo, proto de Perce, y padre de tamono escritor y orador, Lista Plain 9 Ee quincy presentan.ademés al filbsoto en terainos fies com miembros dl helo mis de Pericles, especialmente con st epots morgand tica, Ia famom Aspasny el enormemente senda lado, Calls, hijo de Hipnico, el ateniene: mas panto desi época. Como Eoquines presents en Mileader,alogo scrtien perdido, @ Milas hijo de Estsigoran,miembré de Ta gran fait de os Filed, parecria que Séerates tvo aco al ciculo de Cin igual que al de Perle ‘Sabe tos ademas por el Lagues de Platon que tena una 4 Sobre 1 sfato de Alcibiades por Séertcs Prati, en el Banguete,'y Eaquen, ch oe tens de Alcibiades, que we resentaba 8s adclceenca de Ata Adserbe a recente preentcin de. Soracs & Chrae fctoncs mot, inmeditamentedespaee dela camp Sanna el Meneene de Pie, y Huis ein Palen el anqucte de Jenofonte) que sida face en ayy lo actos tis prominenes de aa asters pica Prvténlen 2 pcs postion 4 muerte de Slerat, 1A JOvENTUD DE socRATES ” vieja amisiad con lay familias de Tucidides, hijo UeMctsiayy del graf Arie; asimismo que era muy conocido tel acaudalado,respetable ¢ infor tunado Niclas, jefe de Ia secon mis moderada y responsable de fa democracia ateniense en Ion aos Er partido mis mltante que hizo tolos sues Samente de Cleon y Alcibiades Plan alude va Tas veces una temprana amistad con otro hombre romineme de un tempo aun ms remoto, Damén Be 'Oen eminente minico del que se deci, gual qq de’ Anaxigoras, que habla “eucado” a Pert ey que le habla tngerido algunas de aus me Aida democriicn Los esrtores de la epoca alefandrina referen también antedotas sobre una amistad personal en tre Socrates of porta trgico Euripides, unos Enripides s acasado de iospirarse en Sr para sus comedias®™ Como carecemos de toda informa cién anterior’ y mis precisa, no podemos, natural mente, decir si habia.o no alga fundamento para rei 3 he nei (de ee cute ch ge en la dpologe (art) de Ptdo Las fee poet can » LA JUVENTUD DE SOCRATES cstas hablilla, ademas del espritu de investigacién y desconfianza de la opinién convencional que es Comin al tnigico y al fildsofo, Un poeta trégico ‘ds joven, Agatdn, aparece en Platén como amigo y admirador de Sécrates; en el Banguete se des Cribe tna reunidn celebrada en su casa para cele brar su victoria en el concurso de tragedias del ato 415 a, c. Atist6fanes es uno de los invitados a quella reunién, y lo que da a entender Placon fs que, a pesar de su burla de ocho afios antes, y Sécrates se mantenian en perfecto compafterismo, Ahora bien, como vemos por la Apologia. Platén sontenia que algunas reminiscencias de Las nubes wibuyeron a asegurar Ia condena de Séerates, ar un prejuicio en las mentes de los jueces hho me parece posible que Platén hubiera inver tado tal relacién después de la muerte de su Maestro. Debemos, por el contrario, aceptar su re lato como un hecho histérico, y scar la conclt sid obvia de que Ia burla de Las nubes era cons Se ee ecu ree donado aqul como patrén del teatro, y me parece que LA JUVENTUD DE SOCRATES 3 derada en aquel tiempo por todo el mundo como tuna sencilla broma.* Por nuestro conocimiento del tamaio de la Atenas de Pericles y de las costumbres de sus ha bitantes, podemos, naturalmente, estar seguros de aque cualquier individuo conspicuo dentro de aque Tha sociedad, como lo era Séerates de modo mani fiest, tenia que encontratse con todos los demés notables, No. podemes abrigar dudas razonables, por ejemplo, de que Sdcrates debe de haber conocil hombres como Sofocles, Herédoto, Fidias; per hingin provecho tiene el especular acerca de sus relaciones con aquellos eminentes contempordneos cuando carecemos de toda informacién detinida, foc i defer Ill. ULTIMOS AROS DE SOCRATES, SU PROGESO Y SU MUERTE tes duran el periodo. que menos conoccmes ha dlado un resulta fells, tenemos que pensar en €1 tales" maa tobreslientes de tna gran epoca de imeteciale por su intensapreocupactén por el orden mora Invisible y tuna fe religion eomon tn Ta woiedad que lo rodeabs, en Dios y en el Sima inmortal, ast como también por su concep ‘in alamente orginal sobre In ‘naturalera de Tos Problemas filwitice y lor méiodos que, debemot fa consderado por el pico como un exctntrca Alvetdo, combinacion de pedante, paradojiea, Ik bre pensador nigromante,earcter que ae le ath Due en Lar ruber de Arisdfanes. Ahora tenemos ecabierta, como predicator de una mish tos hombres de tods clase y condicion, ejerida de rane lo aos de wna “guerra mundial que se Bizo ada vez ends dura hata Tegar a ser para Atenas tensién crecente entre el profeta y ta masa de finalmente a su condena por lo que de hecho ex tina acuscién de inciviono, dedealiad al explits de ls vida ateniane, No hemes de olvidar, dexde igo, ue a per de que fa larga Tacha coment ‘como una guerra para sostener un poderoso impe tio, y a pesar de la “Pax de Nicias" (421 a. ), que suspendi las hostlidades serias durante dos 0 ues fais y de que Atenas, a pesar de todo, surgié atin ccomo Ta mds poderosa de las ciudades helénis, los ikimor afior de la. contiends, especialmente después del fracaso irremediable de la gran aver tura ateniense contra Siracusa (en 413 a,c), vieron a Ta Gudad imperial Iuchar entre "la espada y la pared”, y acabar en el completo colapso del viejo orden ioral, politico y econémico, Los demécratas bien intencionados, aunque raiopes, que persigue ron a Séerates, vivian en condiciones muy diferen tes de Ias de aquella democracia, firme y podero: 3, y por ello, tolerante, descrita en la’ Oracién Fanobre del Pericles d Tucidides. Pocos datos tenemos sobre los acoitecimientos cexternos de In vida de Séerates durante los. pri ‘meros diez afios de Ia contienda, Ia Mamada "Gue- ra de Arquidamo”, a no ser unos cuantos hechos relacionados con su excelente h iia de servicios, Pero debe haber sido. por aquella ¢poca cuando contrajo matrimonio con fa Gniea esposa que se Te conoce, Jantipa, puesto que sabemos, por Plat, fque al rorir dejé un hijo adolescente, s decir, no tenia mis de diecisiewe 0 dieciocho ‘aioe, y ‘dos nifios, el mis pequefio de los cuales parece haber sido tn nifio de brazox* Los nombres de Jantipa y de sus hijos, el mayor y el menor, indican buena una. Los bidgrafos alejandrines presentan a Jan tipa como una mujer arpia de genio ingobernable y lengua venenosa; pero ningin indicio de ese 1 nombre del bijg mayor, ctado por Jenofote, cra anproce, lor de ln sto Soon fence, _género se encuentra ni en Platén ni en Jenofonte, En el Fedén, Unico lugar en que Ia menciona Pla tn, aparece simplemente camo una esposi. riflosa con Ia cual tiene Séerates una ultima y prolongada entrevista inmediatamente antes de su muerte, y Jenofonte slo dice de ella que su hijo mayor ia consideraba insulsible? como es frecuente {que piensen Ios hijos de una buena made, y que ‘Anuistenes aparentemente no Ja queria Puede su- ponerse, por consiguiente, que Sdcrates no contrajo Inatrimonio hasta su -maduter. Los alejandrinos feventan que tuvo otra exposa, Mirto, que se decia ppariente del gran Aristides. Pero sus historias acer fer de Mito son contradietorias. Unas veces la ha cen hija, otras veces nieta, de Aristides; algunas veces es Ia primera espora de Sécrates, otras veces Ta segunda. Hay ocasiones en que incluso afirman aque Sdcrates extuvo casnda con las dor a Ia. ver (sto es, al parecer, invencién del infundioso Aris: Toxeno) € incluso relieren el cuento estipido de que tomé wna segunda esposa en cumplimiento ddevuna imaginaria ley ateniense que tendia a re pparar la pérdida de poblacién debida a la guerra, ‘mediante Ia legalizacion de In bignmia.* (Cronolé: gicamente seria posible que Sécrates hubiera estado feaindo dos veces; peto el silencio de Platén y Je. nofonte hace improbable que asi fuera.) El servicio militar de Sécrates, hasta donde sa scons, vte Dis bbemos, pertenece (aparte de a probable partici pacién anterior en el bloqueo de Samos bajo Pe icles) a la Guerra de Arquidamo. Refiere Platén que se distinguid por su valor excepcional en el Sitio de Potidea (433-430 a. c), e igualmente en Ta desastrosa batalla de’ Delio (424 a. c), donde toda la fuerza militar de Atenas we copada por los beocios. Se supone comaginmente que la tercera ‘ampata, ante Antipolis, mencionada por Platéng se teliere a la accién fuera de aquella ciudad en 422 2, 6, en la cual perdicron la vida tanto el co ‘mandante ateniense, Cle6n, como el espartano, Brasdas, aunque el profesor Bumet ha sugerido {que esa referencia puede ser mis bien a la lucha que facompaiis Ia fundacién de Antipolis, unos quince fafios antes. Es evidente por lay narraciones de Pla tn, que la hoja de servicios de Séerates, en cuanto 4 valor militar y presencia de énimo era excelente, En la Apologia? se le hace refertse, con orgullo justficado, a si comportamiento ejemplar como soldado, y'en otra lugar hace Platén encomio de su conducta tanto en Potidea como en Delio, por boca de un testigo ocular muy competente, En el Banquete} despucs de ensalzar In fortalera de Sb ‘rates en todas las penalidades de la dura campatia y-de relatar Ia historia de su notable “ance”, AL ibiades refiere que en el combate fue él mis efendido por Sdcrates al ser herido, y dice que el premio al.valor que los comandantes le concedie Fon, debia en justicia haber sido para Socrates ‘Afiade que fue testgo de la presencia de Animo * tha de Sécrates en la desastrosa retirada de Delio, y fque su dominio de st-mismo excedié al de xi ‘ompanero en la retirada, el general Laques. En 1 Leagues? se hace al propio general comtar la his- totia, aiadiendo el comentario de que si el resto de la fuerza ateniense se hubiera comportado como Séerates, la derrota ve habrla tansformado en vie toria? Evidentemente, Platén quiere hacernos com prender que Séerates fue muy estimado como ex felente soldado por los militares profesionales, y fst, sin_duda algona, explica la consideracién en que lo tenian, aflos después, los jévenes que asp ‘aban ala carvera militar, como Jenofonte y la béte noire de Jenofonte, el condottiee tesaliano Me rnén, cuyo nombre leva uno de los dialégos de Platén, NNo tenemos ningtin dato sobre actos particula res cualesquiera de Socrates entre la retirada de Delia y los ultimos aos de ln lucha renovada, cuando Atenas hacla su esfuerzo final para evitar el desastre completo, Pero tenemor que recordar ue son precisumente los afios entre la Paz de Ni dias y la tenovacién general de Ia guerra, con la cupacién espartana de Decelia, puesto militar en territorio ateniense, en 41g, los que deben de haber sido mis crlticos para su posicién, Fue en aque: Hos afios cuando Alcibiades se convirtié en el fa vorito de los imperialistas atenienses militantes, ‘que salvé tt vida de Jenofume ‘on Deli tin embargo, AEs que Jonotonte era ‘epuramente un nia de pecho en et ended ea les inspié el fatal desvario de Ta conquista de Sirs ccusa que levé dizectamente a la ruina de Atenas La fecha de la reunion celebrada en casa de Ags tn, descrita en el Banguete de Platén, se ha fijdo a prineipios de 4x5, en los meses anteriores a dar seva la vela la gran flota ateniense que levaba 4 Alcibiades como primer comandante;_y el retta to que hace Platén del comandante “hinchado de nsolencia y de vino", pretende, sin duda alguna, recordar la boyante confianza general en si mind aque te habia abandonado por entonces el pueblo ateniense En unos pocos meses la situacion cath Di6 totalmente. Apenas se habla hecho a Ia mar cuando toda Atenas se conmovié por un gigantesco “sacrilegio". Fl propio Aleibi des y muchos de sus comparieros fueron ncusados de hhaber tomado parte repetidas veoes en burlas s cillegas a los misterion de Eleuss, parte integral el eulto religiowo del Estado, Alcibiades recibi forden de regresar inmediatamente para ser ju do, logré Init en su viaje de regreso y fue conde. nado a la pena capital en ausenci, junto con su tio Agioco, también miembro del circslo socritico, y gran nlmero de hombres distinguidas, que ince Yye al parecer a varios de len que (iguran en cl relato Plaeinico del banquete de Agatén." Siementeo fue En todo cat, Path a end cad 2 a icteceees pre {actrado que se volvo Gelato) cn ou dium Sobre for Alcibiades se ditigié a Esparta donde se convie- tid en sequida en el mis formidable enemigo de la democracia que lo habla adorado, Por au con: ‘ejo, cuando los espartanos reanudaron Tas hot dades, tomaron la. decisién que cambié todo el carieter de la guerra: el establecimiento de un puesto fortificado permanente en territorio stico. Alcibiades es ahora abiertamente un traidor. ver que un hombre condenado a la pena capital y anatematizado por sacrilego, y por esto, en adelan te, muchos dignos ciudadanon imputan a Sdcrates I responsabilidad de las malas acciones de sus puesto “disciple”. Cierto es que, despues del fra aso del coup d'état antidemocrético del afio 411 (la lamada “oligarquia de los Cuatrocientes"), Al cibiades comenid a trabajar a favor de sus concit adanos en lugar de ir contra ellos, y de hecho fue llamado oura ver a Atenas en triunfo (407 ac); pero Ta marea del favor popular cambié de nuevo, y luna vez mis se encontraba en el destierto y 70: eado de mala reputacién general cuando Sécra tes, por primera vex en su vida, surgié repentina mente como actor en Ia escena de lor asuntos pablics. Ocurrié esto en el otofo del afte 4o6 a, c Du rante el verano, los atenienses se hablan salvado, en el iltimo momento, de Ia derrota final gracias una gran victoria naval en las costas de las pe {quefias fas de las Arginusas, entre Lesbos y la tierra firme asidtica. Pero la victoria habla costado 25 naves y la vida de 4 000 hombres, muchos de Tos as que eonocemes por el Banquet Trained Ge cuales —segiin se crela— podian haberse salvado dde no haber sido por In negligencia culpable de los jefes. Se resolvi6 jusgar a los generales que ha bbfan evado el mando por su responsabilidad en la muerte de aquellos, siguiendo el procedimiento conocido en Atenas como eisangelia}? el fecal pi Aig ademds que la suerte de Jos ocho comandantes Aacusados fuera decidida en bloc por una sola vote: cién, Como esto era una infraccién evidente del procedimiento constitucional normal, los prytanes, el Comité del Senado de los Quinientos, cuya mi sién era preparar Ia agenda de la Atamblea y Dresidir ss reuniones, protestaron enérgicamente Aigimoslo para honra siya, y declararon que ellos no podian someter tan ilegal proposicién a vota cidn, Aunque el “signo” de Sécates era adverso 4 poner en peligro su misién por mezclarse en po Iidea, no le impidié servir a In ciudad en casos cextremos, permitiendo que lo eligieran miembro el Senado, y por ello fe uno de Tos prytanes en quella ocasién, Después de larga y fogosn disc sin, Ia resistencia de los demés Prytanes quedd vrencida por la amenaza de los acusadores pablicos de inclulr sus nombres en Ia acusacién; Séerates permanecid inconmovible; pero sa solitatia protes- {2 fue dominada. Los gencrales fueron juzgados ¥ condenados en grupo, ¥ los seis de ellos que ex ban en manos de las autoridades, inmediatamente ejecutados, pero Séerates tenia derecho x narrar el seeso, como lo hizo en 44 propio proceso, en prue ha de su integridad perfecta y de su devocién veh: rmente a Ia casa de la ley En los meses aciagos dol aio 404-3 que siguic. ron a la capitulacién de Atenas. ante Lisandto, Socrates tuvo oportunidad de demostrar que a él no le intimidaba mis una cemarilla oligarquica que una canaille. Atenas se habla rendido a dis crecién, y los brutales espartanes a quienes la for ‘una de Ia guerra, y muy probablemente la traicion dle su propio comandante, habla hecho duetioe de la situacién, no tenian idea alguna de permitir la continuacién de la democracia, Bajo la. presién de Lisando se nombré wna Comisién de rein, con instrucciones de redactar una legislacién para 1 futuro gobierno de la ciudad. Desgraciadamen nan cm pe oS ‘Recuerdos (1,1, 8), dice Jenolonte que Sécrates fue, de te, en lugar de realizar Ia tarea que se les habla asignado, se conatituyeron ellos mistnos en un go biemno revolucionario violentamente oligirquico, obligaron a los demécratas mis radicales a aban. donar la ciudad y a extablecerse en 1 puerto del Pireo, y procedieron a deshonrarse pot un gran rmimera de ejecuciones arbitratias y confiseaciones de propiedades, hasta ser expulsados por Ia fuerza y restablecerse una democracia moderna, en el trans curso del afto 403. La mala fortuna de Sécrates hhizo que dos de sus mds Intimor companeros to ‘maran parte prominente en aquel desdichado asun to: Critias, primo de la madre de Platén, que era jefe det grupo més violento de los “Treinta”, y Cérmides, hermano de ella, que era uno de los agentes principales, Una ver mis, como en el caso de Alcibiades, parecia que Sécrates “educaba trai dores"."€ No Te era simpitico, a pesar de wndo su respeto por la autoridad constituida, el tipo de de moeracia que s¢ desarrolld después de Ix muerte de Pericles y, en contra de au viejo amigo Quere fn, no se sintié obligado a abandonar Atenas cuando lor demécratas avanzados se retiraron al Pireo, Sin embargo, los amos tem dad sablan muy bien que seguramente eriticatla Indiidoce prob ia cabey sat proceder de la misma manera tajante que acos tumbraba emplear cuando exponia su opinion 40 bre los asuntos pblicos. Aprovecharon. pues sus comentarios cfusticos acerca de sus primeras eee clones ilegates para citarlo a su presencia y pro hibiele conversar con hombres mis jvenes, #0 pre texto de que estaba contraviniendo no’ de sis decretos que prohibia la enseftanza del arte ore toria. Séerates opuso algunas observaciones carac terlstcamente huimoristas acerea de Ta imposibil dad de obedecer tal prohibicién, y fue despedido de alll con una amenaza de Crit." Un acto de intimidacién mas serio fue el intento, hecho inme Giatamente después, de implicar a Sécrates en uno de aquellos aesinatos administrativos."™ El y otros cuatro, recibieron orden expresa de arrestar a Led de Salamina, hombre acauidalado cuyas propieda des se pensaba confiscar. Los otros ejecttaron la frden y Leén fue asesinado; pero Sdcrates se mar ch a su casa, aunque experaba pagar con su vida aquella desobediencia, si no habia una contrarre volucidn que acabara con el Tervor.™® La desconfianza despertada por la relacién de Sberates con “traidores” fue la causa de que 105 jefes de Ia democracia restaurada To procesaran en €L alto 4oo-sgg. Alcibiades y Crit habian muer fo; pero los dembcratas no se sentian a salvo rien tras el hombre del que se crela que habia inspirado faquellas traiciones ‘tuviera asin influencia en la vida piibliea, Anito, hijo de Antemio, instigador el proceso, parece no haber tenido ninguin mo- tivo indigno, ni era tampoco un fandtico politico ‘ religioso. En politica era demécrata moderado y tuno de los principales promotores de Ta amnistia entre las fracciones en conflico despues de la caida de los" Treinta”, y habia probado su lealtad ne findose a buscar cualquier “compensacién a Tas faves pérdidas personales sufridas por usurpacién No era un fanitico religioso, porque en el aio en {que sostuvo el proceso a Sdcrates por “impiedad’ aayudé a lx defensa del orador Andécides, entonces bajo proceso. por Ia misma acusacién, Ni tenia deseo alguno de derramar sangre. Su objeto al pedir la sentencia de muerte er2 simplemente in flucir a Sdcrates a pemar en su propia salvacién, marchindose il destierro y dejando el caso termi nado por rebelda."® Ha babido quien preguntara por qué el proceso se demoré hasta cuatro aos Alespnés de Ia restauracién de la. dem texplicacin es que la revolucion y la contrarrevo Iucién de 404-5 habian producido una gran cont sidn en el trabajo ordinario de los tribunales; todo el cuerpo del derecho stico tenia que ser revitdo Y codificado y Ia Comision designada para exe hajo no termin6 hasta cl a Pata es Ta cia. La URS TREE RES razén_ por Ia cual no pudo ponerse en marcha cl proceso contra Sécrates hasta el afio yoo; de hecho, Anito planted la cuestién tan pronto como fue posible Un politico moderado eminente como Anito no podia, naturalmente, presentarse como acusador poiblico en un caso de exe género; esta tarea le fue asignada a un hombre oscuro y relativamente joven liamado Melito (probablemente no se trata del poe ta de ese nombre que es mencionado por Arista nes en Las ranas, aunque puede haber sido el hijo de aquél), El acusador publico de Andécides, por impiedad”, se Hamaba también Melito, y habia sido micmbro del grupa que lev a cabo el arvesto egal de Ledn, Lo que al parecer {ue el discuso pronunciado por Melito contra Anddcides nos ha sido conservatlo en la recopilacign atribuida a Li sias,y es a decaracidn de tn fantico religioso. Si éte fue, como es lo mis probable, #1 misma. que veusé a Séerates, queda explicado inmediatamente por qué se eligié Ia “imapiedad” coma la acusacin formal, Con esto se tendria la seguridad dle que el instrumento de Anito pondria toda su voluntad en la obra. El peor rasgo de Ia conducta de Anito fs que, para realizar Jo que él erela un fin saluda ble, haya usado un instrumento al que debia des preciar. Sa participacién en el proceso estaba limi {ada a pronuinciar tn diseurso formal en apoyo de Ja acusacién. Una participacién andloga’ fae la de un tercer orador, LieSn, del que nada ee sabe, a no ser que Sécrates lo Iams, en ba Plat6n, “orador” profesional pologia de Como el delto del que se habla renueto cust a Socrates era ténicamente un delito contra la feliggn del Estado, el caso pass a conocimiento {el funcionario conocido en Atenas eamo el Rey 1 segundo de Tos nusye sagitrados anaes Ti fades tolectvamente sarcontes, pues Ia eligi primer lugar, ver que la acuraciOn tuviera la debi 4 forma legal anotar la comtesacin dl acusado alos cargos, tomar declaracién aoe testgon de Decesrias para Hevar el caso ante wn jurado. po plats En cl momento del juco, el Rey tenia ade recordar que no tenia ln funciones de un jue br tada por cualgutera dels Sia ver "jucces de derecho y “jucces de omo tambien jueees sobre lt ciestin de lo que for goo hombre) desgnados tniamente pars ‘asamblea public”, y exto debe tenere en cuenta al eer Io que dice Platon de Ia defens, artes. 1.08 jurados eran ‘decarado en lus iigencingprelitinaresy ose pod 203 No sabemos, naturalmente, cual era la acusa- idm contra Sécrates, tal como Ia formulara origi nalmente Melito, puesto que el registro oficial contendria dnicamente Ia versién final transmitida al tribunal por el Rey para su decisién. En el Aidlogo platdnico Eutifrén, eaya fecha parece coin cidir con los preliminares del proceso, se pone en boca de Sécrates que Melito Io acusa de’ “inven: tor de diores nuevas",* pero nada de esto se dice en las diversas referencias a la aeusacién hecha en el juicio efectivo. La mis exacta de ellas ex pro- bablemente la dada por Didgenes Laercio® que parece ser una transcripcién del documento auten tico tal como se conservaba en el siglo 11d. e "Me lito, hijo de Melito, del deme de Pita, acusa a Sécrates,‘iijo de Sotronisco, del deme de Alopece bajo juramento, al siguiente efecto, Socrates es culpable: 1) de no rendir culto a los dioses a quie nies rinde culto el Estado, sino de introducit pric ticas religions nuevas y poco conécidas; 2) y ade. mis, de corromper aloe jévenes, pblico pide In pena de muerte,” 31 EL acusador | : Debemos tener cuidado de no entender eré Segue el primer cargo no quiere decir que Sére the herelea” ni-que hublera dejado de creer en Iie historias dela mitologiaconvencional, como tonfem freeventemente en lon didlogos de Paton Ta reign el Estado ateniense era una cues fe cutouts) no tenia dogs een bron mgradon, ¥ tenemor Ix seguridad de que no era dll conta In reign el'no creer ela Imiteloga de Hlomero y de Tos poeas In opinion {abun sus lejentdas pars entretener ‘nx plico?> iis certo qe lero de "prt tl fShrenaturat™ de Socrates. Desde el punto de vie {adel ateniense medio, setataria solamente de un caso del hecho familar de la“ poveiOn®y ex tam ff acodo, unt ver selencado, una menos grave, HL TH ‘Gon tena que sprobar una de ar don proper, y 00 8 sperms gir un amino inci Hapa Ge {penta lomo, Ener, Heo, ne) a Ae propio gee facta Geo contract Exado et esene fiat opinions tecgcas, fue el propi> Plan, en no big evident, por ls Apotogia de Platén* que no hasta que S6erates smo la hizo sorgr, ‘De he cho, tal como Platin presenta las costa, nade, mi Siquiera el propio acusador publica, sabia lo que Sigifcaba eta parte de In actuacin, Si leemos ene lines, podemes, no obstante, descubrir en a dpotogia de Paton estas don const que habia en la mente de Melitoy por que no pudo hacerse Gte mis ineligible Platon Race hablar a Sbcrates de manera cutio- sa cuando tata dela acsacin, No dice mada pare telat I acc de into mura Pr tins religions” yTograatrapar a Melivoy abligar Io a explicar que la frase acern de no rend eulto alos ones del Estado significa una imputacign ‘mente la incompatiblidad de las dow partes de la donor mponer que eto @ lo gue MC tenga que ttre la hati, prucbe, dese fue ce Burnett foe, que nab de decal gue agin Tengunje misterino de lactacin. Tl toni Bat 4 auctor dose, Jentonte. (un, so dar able Te fet go! que pudirs nooner un acoacgn de pea {que un legitimo empleo del humorismo para si Tenciar a un actsador que no puede o no se atreve a explicar su verdadera intencién. sta se indica én una seccién anterior de la Apologia platoni a2 en la cual Socrates sostiene que, a falta de algo tis especifico que alegar contra él, In parte acusa dlora acude a todas las acusaciones contra [os “hom: bres de ingenio” y los cientifios como clase apar te, ys apoya en si caticatura como hombre de coe ginero que Aristéfanes hiciera en Las uber (que ya tenlan un quarto de siglo). La cuestibn fr que los hombres de ciencia jonios se hablan scostumbrado a emplear el nombre “dios” en forma totalmente arreligiosa, atribuyéndolo al “aire” o cualquier otra cosa que, en su concepto, fuera la fstancia eterna de In que estin hechas as cos. Por esta razén, Aristéfanes habia puesto en boct de Socrates que “los dioses” no eran “moneda co- rriente” en su escuela, y lo habia presentado ense fiando que Zeus habia sido destronado por un y jurando por uma serie Caos, Resp ‘movimiento de virtices de “divinidades de su propio cu raciOn, Bter, las Nubes.™ De hecho, Sdcrates 4) Aecir que el cargo de “ateismo" silo xe basa en tn in. tento de prejuiciar al tribunal recordandole Ta ama corriente'de la antigua ciencia jonia, (Posiblemente también, aunque nada re dice en la 4 arroje alguna huz acerca de esto, Melito pudo haber fenido en cuenta el recuerdo’ del antigua escin- dal del afio 445 sobre la “profanacién de los mis teries", en el cual estuvievon mexclados Alcibiades rs ILTIMOS AROS DE SOCRATES y otros amigos de Sécrates: y pudo incluso haber Contado con Ia posibilidad de que alguno de los jurados supiera que, en época més reciente, Sera tes habia estado en relacién con admiradores pits ricos jovenes de las cludades que hacia poco fran todavia “Estados enemigos") Ahora vemos elaramente por qué el acusidor publico no podia fexplicare mis francamente, De acuerdo con los términos de la Aniniatia que habia puesto fin a la confusion del aio 404-3, ningiin citidadano podia fer citado para responder por delitos cometidos am tes de esa fecha, y ningin cargo fundado en hechos cometidos en época anterior podia ser considerado por el tribunal. Corresponderia a Anito, como tuno de los principales promotores de la Amnistia, ver que sus condiciones no fueran explictamen te intringidas, La intenciém del segundo cargo, “corrupcién de la juventud”, es mis clara, Durante el juicio mismo, parece que el acusador piiblico y sus cole fg dejaton vago su significado, Por lo menca, Pla tn presenta a Séerates muy perplejo sobre el género particular de dafio que e le acusa haber hecho a Kus compafieros mis jévenes, Dice que no es po sible que se refiera a ensenarles las "insensateces tobe ciencia natural de las que se Je hace hablar en Ia comedia de Aristifanes, ni ejercer el oficio de solista. Todo el munda sabe que jomas ha sido tun “educador” profesional, ni ha tenido “disc ppulo” alguno, y ho menos sahido es que las specu Taciones cientificas patodiadas por Aristdfanes no fueron tema de sus conversaciones. Si sus acusado. res hubjeran sido sinceros, habrlan tenido que con fesar que el supuesta daiio hecho a los jévencs que goraban escuchando sus repetidos interrogatorios a sus conciudadanos era, en realidad, el sacar a Juz Ia gnorancia satisfecha de sf de sus mayores. Le yeno entre linea, se percibe que lo que realmente Inolesté a Anito fue que la etftica de Socrates tne Ia incapacidad de politicos como él tendia a rebajar su reputncidn ya producir una actiwd critica hacia Ia democracia y sus instituciones entre Jos jévenes mis brillantes (lo que de hecho oc 1116} “Tenemos bases suficientes para pensar que igo peor que esto debe de haber sido el verdader fgrmuamen de la acusaci6n; pero que los acusadores, tenian razones para no exponerlo claramente, Podemos advertir su inteneién principal si acu ddimos a los Recuerdos de Jenofonte, detensa de la Imemoria de Sécrates contra un ataque esrito p tun “acusador” ——posiblemente el sofista Poliera tes, escritor nada distinguido que parece haber Gado forma literaria algunos afiok después del pro- eso, a la acusacion de Anito y Melito, Jenofonte tmenciona asimismo una o dos formas poco impor tantes mediante las cuales presentaba el "acusador falsamente el caricter de Sécrates. Le acusaba d ensefiar a los jovenes a perder el respeto debido ala generceién mayor y de sacar un sentido in tas" Pero la "act moral de los pasijes de los 2% Apologia, i da0c; age ayea6 2M Recuetey, by pam, Low cargos de que se tata ede eee eat de eet Sespe'or iota sks pocin y 4 M actlded ae 7 sacién” particular que Jenofoote esté sade descos. de refutar es algo mucho més preciso. El “acuss dor” culpé a Socrates de haber educado a Critis ya Alcibiades, y Jenofonte explica detalladamente ue ambos ssfo frecuentaron a Sécrates el tiempo Sliciente para aprender algo de su habilidad sin paralelo en el ditcurso, abusando de ello para sus propios fines® En el juicio mismo, toda releren cia a su supuesta influencia sobre los dos grandes ‘uaidores” estaba proscrita por la Amnistia del aio gor, ¥ Anito, sin duda alguna, tavo buen ccuidado de que Ta acusacién fuera poco clara, sa fe la causa de que no veamos inmediatamente el porqué de Ia referencia, cuando Socrates, en. Pla tin, niega maliciosamente que jamés haya tenido tun verdadero “diseipulo”.® Polierates,en tu libelo, oe celcs tases tl Me emer etait oe ws acuerdoy, I,m, te! “Cre 7 Akibiades, contin el hist ta septch Ge Joxseate we ds cricmcne Yo jams he sido macaro ce ningon hombre, queer toc foae ete Lar pense» ques reer fe que iss de torque fe die que sot dnipulon mer" no: San i Plstn al Jovene deo slempo.Ningono de ttn bab usa dao ln ada del qoe made pdles hater ee dice sin reparo lo que las formas de procedimiento legal sélo permitieron insinvar a Melito, Vemos por lsdcrates que aquel acus6 textualmente a Sb {rates de haber sido maestro de Alcibiades Isdcrates replica neganda el hecho, exactamente como Pla ton hace replicar a Sécrates® Debe de haber dicho To mismo acerea de esto explica por qué, cincuenta afi después, el orador Exquines podia tecordar a los atenienses que “vosotros matistelt a Séerates por haber sido maestro de Critias"® Loe fmotivos de la acusacién son ininteligibles a menos fue se entienda que Anito consideraba, honrada mente a Sdcrates y su ensefianea como responsables del perjuicio hecho a Atenas por el hombre que hhabia mostrado al enemigo donde dar el golpe mortal, y por otro horabre que habia sido jefe del Terror que siguié a su calds, No hay duda alguna de que Ia desconfianza de Anito fue provocada por la erftica inmisericorde a todos los estadstas fimo sus de la democracia, de que Si fom frecuencia en lot didlogos de Platén; casi se gguramente habia tenido experiencia personal de fos efectos humillantes producidos por los interro sgatorios de Sdcrates; pero el verdatlero secreto de Si hostilidad era més profundo. Séerates, de hecho, no habla educado a los dos hombres que mas hicie {ane Pt, x5) que lo nico gue dec 4 Piaén a aban: $6 Retdrs, v 7E "Vou ite 4 Shere loi prnque se demouté que habia educado sia ‘mala fortuna de haber silo amigo de amb, e in ‘tablemente se suponia que habia sk algo me Para sorpresa general, Socrates no march) al destierro voluntari, sino que permanedd trangu locen Atenas en espera del Jul, que ocurié ex la primavera o prinelpios del verano del ao 399 Si thud alguna, dado 90 punto de vst ctriciamente constitucionaista, ef Estado tenia derecho a prac dadano, y_era simple deber de ete el afrontar Ia investigacién. Su defemsa nos ha sido. conser vada por Platén, quien eatuvo presente en el jab Jo. El dicuno es tan crcteratice que podcnes tener confianza en que la version de Platon lo re Produce con toda exactitude" Séerate. no corte Jaa ala muerte; por el contrario, dela amamente due deseaba una absolucién honors, siempre que €ifallo‘no comprometera Ia verdad Sobe wus {igh¢s01, sobre er tune tad Mlle, pal pre “guedar libre” 8 cualquier previo. Exo puede ter cierto paras mayor parte de ks howbres, mayo pa todos 8 ata chin vernon de Platin (dpologl, 198) Jeno Tibia jaw para Nombre descono de ser abuclto, y por coigueney hace relaciones con Alcibiades y Critias, tuvo buen cu ado, como lo exigla In lealtad al espiritu de la Amnisti, de no decir nada més alla del simple hnecho dinico de que él nunca habia sido “maesto de nadie, Los errores populares acerea de su perso na los explicé como naturales ‘reminiscencias de Jas burlas de Aristofanes y de los ottor poctas ob mieos. En cuanto al cargo de las “nuevas priet ‘as religiosa y de “no rendir culto a Tos doses", se ‘content6 con demostrar que el mismo Melito no queria, ono podia, explicar lo que significaba, Traté un poco més seriamente la acusacion de ser ‘cormuptor de la juventud”, aunque también con toda despreocupacién, y oftecié retutarla invitando a los patientes de mis edad de Platén y de ofr jévenes compafteros como testigos de sa falsedad, Si su objeto hubiera sido, como de hecho no lo era, conseguir simplemente una absolucién en cual: quier forms, debié entonces pasar a decit algo Acerca de su excelente hoja de servicios, y de su valiente desafio a Critias en Ia cuestion de Leén de Salamina, y alli habria podide terminar el asun to, Pero tal defensa habria sido una traicion 4 su misién, Asi, pues, no hizo ningin intento de evi tar el odio que siempre acompanaba a una rept: tacién de “inteligencia” superior en aquella suspi car democracia ateniemse, Hizo centro de su discurs0 Ta historia del oricalo que lo habia declarado el mis sabio de los hombres, y describ sin la menor reserva cémo aquello lo habia levado a tomar sobre {Se fein cegueray demas achanoet dela wet eno Si la tarea de convencer a unos y a otros, de los principales hombres de Estado hacia abajo, de su ergonvosa ignorancia del ginico género de cono- Cimiento que es de suprema importancia: el saber émo hacer el alma de uno mismo y las de los {emis tan buenas como sea posible. Desstir de su rlarse contra Dios, y o de que sdlo la muerte Tndluso la hoja de ser tribunal pia estar seu to aparatia de pronegurla vicos ye asunto de Len surgieron en e! dcr fl orador el'abandono del simple debe, y Ia hie toria del desi a Crtias acompaé a Ia del des ten'elJuio de los generals de las Arginusaa. No ey por lo tanto, que el tibunal diera tn yeredici de culpabilidad, aunque por ppequeta mayoria, Cuando tenemos en venta el tono del disurso y el hecho de que ls jurados Sulado acredita la liberalidad de pensamicnto de Séeratestenfa ahora que Todos debicron suponer que propondria el deste tiibunal tabria quedado satisfecho. Petetie Apotgia, $63, mente permanecié fiel a sus principios. Sostenia segiin dijo que su misién habia sido un don bhenéfico que Dios habia ofrecida a Atenas, y que suis méritos quedarian debidamente reconocidos con firiéndole el privilegio excepcional, otorgado a los vencedoresen los juegos olimpicos, a» generales em nentes y a unos cuantos mis, de un asiento vitaicio fen li mesa pablica del Pritaneo, Por tener esta opi nin, no puta, en conciencia, proponer que se le infligiera el destierra 0 cualquier otro positivo mal Una simple muita, sin embargo, no es un mal, sila persona tiene dinero para pagar, en conciencia, libre de ofrecer el pago de esa mult Por consiguiente, oftecid pagar la cantidad que pedis abonar in ‘© alia diendo acto seguido que Critén, Platén y ottos ami. {gos le habian convencido de que elevara la oferta 2 go minas, que ellos estaban dspuestos a gutantizar Es muy matural que los jurador se irsitaran por quel discurso que no presentaba posibilidad de acuerdo y votaran la pena de muerte por unia ma Yoria mis grande! que Ta que habla, promunciado A vereicto de eulpebided ‘De acuerdo tanto con Paton como con Jenofon ronunciado totalmente a su favor, Segim Jeno Fonte, Séerates apenas hizo algo ms que repetr su decaracin de inocencis; pero ta version de Paton afade algo més aracterisico. La sentencia que se tabla dieado cobre él no era tn mal, En e eat fo y, por lo tanto, no es algo malo, Pero hay la que sla que él sortine, enwada en tna vida mejor, En tal caso Socrates puede esperar la felicidad de presentane ante Tot feguramente cambiarin la decsién de un tribunal tual infortnada y leno de precios, y de reunirse Yet algunos que, como 4, fueron njusamente intertogar a It sociedad que fo rodea, quede cor Si tate era el aba el tribunal, sin inte destino a que Jo conder tarlo Te conteria el bene Ta préctica usual en Atenas era. que los con: ddenados fueran entregados inmediatamente 2 los ‘Onee” que administraban la ley, y Ia ejeeucion se cfectuara dentro de las veinticuatro horas siguien tes El cao de Sécrates fue una excepcion. Exist Ia costumbre de enviar anualmente una "nave st grada” al santuario de Apolo en Delos, en conme fmoracidn de la liberacién prehisériea, hecha por Tesco, del tributo de "siete jvencs y siete don as” impuesto por Minos de Cnosos, La ciudad era purficada feligiosamente antes de Ix partida de la nave, y las teglas de la purificacién ceremo nial prohibian que se levaran a cabo ejecuciones hhasta el regreso de I nave. Ocurria que aquel pe iodo de purificacién ritual habia comenzado, en Lafio 399, el dia anterior a que el caso de Séerates fe presentara en el tribunal y, por consiguiente, habla que decidir qué hacer con él, (El asunto no podia tratarse hasta no conocer Ia sentencia, ya que nadie esperaba naturalmente que Socrates, de esul Sino. Jentonte eatin noxnte em gel ‘ar culpable, propusiera otra cosa que el destierro) El opulenco Criton hizo cuanto pudo para induct al tribunal a permit que Sécrates quedara en Ii Dertad hasta el regreso de la “nave sagrada’, dando garantias de que no habria el menor intento de fuga, pero au oferta fue recharada. Sécrates fue, por consiguiente, entregado a la prisién de los ‘Once’, donde se le pusieron cadenas, aunque no se le prohibié govar de la diaria compafla de sus amigos. Como la nave quedé detenida durante un ‘mest por vientos contriris, todo este periodos¢ consagré a estos diarios cologuios, y parece que al ggunos de los amigos extranjeros del filésofo, como Fedén de Elis y los jévenes tebanos Simmias y Cebes, permanecieron en Atenas durante aquel tiempo. Sécrates se divirié haciendo versos por primera vex en su vida, Compiso un pedn 2 Apolo Y puso en verso fabulas de Esopo.® Explicaba esto iciendo que durante toda su vida babia sido per teguido por un suefio en el que se le ordenaba “practicar Ia mein", Hasta entonces habla st puesto que el significado de aquel mandato era {que debia trabajar en a “misién”, ya que “la filo tofia es In musica mis verdadera”, Pero como el ‘efio se repitié durante su prisién, cuando ya no powlia ejercer su misién, la piedad le ordenaba Eumplir sus indicaciones en su sentido litera. {Eos amigos de Sécrates hicieron un intento final para salvarlo, corrompiendo a sus guardianes para oncertar Ia fuga, Se hicieron todos los preparati vos, y para vencer cualquier resistencia que el fit tofo piidiera poner a implicar a unos conciudada hos en un asuinio que pudiera tener desagradables as los admiradorestebanos, toridailes ica, ‘consecuencias para ¢ sobre los que no tenian poder las proveerian todos los fondos neces Fela su carscter, se negé a aprovecharse de aquclla oportunidad —Ia razén de su negativa se explica fen el Gritdn de Platén. La fuga lo pondria en con: ttadiccién ‘con los. principiosprofesados durante toda tuna vida, El Veredicto del tribunal que lo habia sentenciado estaba equivocad se habia llegado a 1 mediante falas p de los hechos, que deshonran a los acusadores. Pero era el fallo de un tribunal legitimamente constitu do, y el Estado tenia, por consiguiente, derecho a ponerlo en prictica. La injustcia cometida contra Sécrates no habia sido perpetrada por Atenas, sino por Anito y Melito; si Sécrates quebrantara la pr dn, seria un crimen contra el Estado y contra ss Tees, un acto de traiciGn contra el esprita de ciu dadania, Séerates mantenta la misma lealtad a la propia conciencia de quienes, en la época moderns, tienen “escrapulos de conciencia” a participar en la guerra, por ejemplo; pero en él se unia a un re. peto por la "conciencia publica” que, desgraciada mente, es inusitado en nuestros dis, sobre la tierra, tal 6 crithn, 4s ‘como Platin la relata en el Fedin —aunque Paton fo estuvo pres pleta opartunidad de informarse por los que alli estuvieron, y escribid para ser leido por ellos, es quiza el pasaje mas sublime de Ia literatura europea en prosa.. Sdcrates, que habia sido advertido del dia exacto de su par tida dos dias antes “en un sueiio”, fue hallado por sus amigos en compaiiia de su esposa y st hijo, & los que envié a su casa en seguida, seguramente porque el descanso les era necesatio. (Parece que Tantipa y el pequeduelo hablan pasado toda’ la inoche en Ia prisién.) Se comport6 con su_usual talante festive —Ja “alegria” era tan natural en él como en Tomés Moro—, y hablé extensamente de su conviecién de que la’ muerte, para un hombre bueno, es el alza del teldn en un drama para el que Ta vida encera ha servido de ensayo: el drama de la liberacién det alma del confinamiento en el ‘corral o pocilga” del cuerpo, donde hasta entonces estuvo aprisionada por Dios segiinsus propios bue nos fines, y la entrada a la mayor libertad de un mundo mejor, donde la verdad y la realidad seria ocidas ara a cara, on vez de ser atisbadas “a través de las celoslas de los ojos". Una vida entre gada a la “filosofia” (la busca de Ia verdad. por Si misma) es de suyo una larga preparacién para esta bienaventurada libertad, conto es asimismo el verdadero servicio de Dios que simplemente nos pide “hacer el alma” —ese algo dentro de nosotros, ‘que piensa y sabe “tan buena como sea posible’ Como él habia consagrado su propia vida a este servicio de Dios —decia—, podia mirar hacia ade lante, con confianza en el porvenir que le esperaba Viendo que sus jvenes amigos de Tebas, Cebes ‘Simmias,estaban muy perturbados por dudas “cen tifieas” acerea de que el alma no sea sino una funcion perecedera del cuerpo, dedicé su sltima ma- flana a raronar con elles, para justicarse a s{ mismo. sobre la “verdadera distincién entre el alma y el Guerpo", y sobre los fundamentos para creer que ni pace con el cuerpo ni muiere con él, sino que par ticipa en la eternidad de Ia Verdad y Ia Bondad (que conoce. A lo largo de toda Tn discusién, se thoste libre tanto de la depresién ante la perspec tiva de la muerte inminence, como de Ta angustiosa fdhesidn a una creencia consoladora, que no toma fen cuenta todo lo que puede argdirve contra ella ‘Terminada la discusién —que finaliza con una imagen del juicio de los buenos y de los malos en es se ret & prepa ‘fin de que las ope Gon a su cadaver, y para celebrar una Uikima en vise privada con los “uiion y mujeres de wf mnilia", Langa debio dese la entrevista, porque la tncuridad era ya casi completa en aquel dia de pr tmerno vero, cand vl eunine com ik iniges, Al ponerse el wl, el "fancionaio de los “Once” como nosoiros diramos, “el aleide de 1a prsién”— se despdié formalmene,y no sin Me gay, del hombre “mis valent, mis bondadoso, Elmejr” que jams se le hubiere coniado, Despugs te presentaron fs ejecutoresefectvor de ka muerte, Tievando Ia bebida Yenenons” mediante la cal se de‘Sderaer demoesra que i 8 es OLTIMOS AROS DE SOCRATES, ejecutaban los condenados en Atenas. Sécrates toms fem sus manos a taza con tranquilidad, y hubiera he cho una “libacién”, como accién de gracias antes de beber, si no fuera por Ia advertencia de que la ‘antidad preparada no permitiria ningin desper dicio. Con unas pocas palabras de plegaria por un ‘rinsito fel, apurd el contenido de la copa sin ningsn signo de repugnancia. En aquel punto la serenidad del grupo dle amigos se quebrant6; algu nnos de cellos Moraban a ligrima viva, y uno de ellos, Apolodoro, se puso tan histériea que tuvo que ser llamado al orden por el propio Socrates. Ateniéndose a las instrucciones del oficial dela prisién, Sécrates paseé por a habitacién durante Algiin tiempo, hasta que empezd a sentir pesados Jos pies; entonces se aconté en su jergon y eubrid su cabeza, La exploracién manual mostré que un acormecimiento iba avanzando hacia arriba, hacia la regidn del corazin, Después de un intervalo de silencio, el anciano descubrié su cabera por Un mo. mento ¢ hizo la siguiente peticién: "Critén, debe- ‘mos un gallo a Escvlapio; no olvides pagar cst dleuda.” Estas fueron sus dltimas palabras. (Era aquello el vago recuerdo de algiin incidente, Fela. cionado acaso con una enfermedad infantil ens familia mesa al dior de la salud porque esperaba despertar curado de la Fiebre de vivir? Poco después hbo un movimiento convulsive; s¢ descubrié el cuerpo y se vio que la vida habia huido de él, “Entonces CritSn certs sus oy par movotron mds sabi, el mejor. emi justo de a epoca.” Tos alendrinos reataron hist Ao que dcron muerte a Melito y que honraon a Ae la iba Sitter emia por eros a como tupuesto intigador de Alcibiades y Gr ting enon policos deseaban echarlo de Atenas Pero no habla deseo alguno de quitare ta vida y franca pudo wr objeto de general Rostilidad. Un ta absolucin, como ya esos visto. Y no hubo nin Shecrates, lo mismo que tespecto a Alcibiades. Lo que apa D por Isserate Su libelo, de haber sido preceptor de Alcibiades, sia mayor doi’ i menor de Sate gi alga de waa todos los dedicados por siarlo"s* Socrates debe lain ‘como mirtir de la filosofia no a una melodramética cexplosin de sentimiento popular en tuna democra cia emocional, sino a la Providencia que le dio, ‘como amigo mis joven y dise/pulo, al nica hombre en Ia historia que ha combinado Ta grandeza supre ‘ma como pensador filosdieo con wna grandeza igual como maestro del lenguaje, y por ello ha sido, di recta o indirectamente, el maesto de todos’ los hombres de pensamiento desde sus dias, IV, EL PENSAMIENTO DE SOCRATES {Cuil es el verdadero significado de Séerates en la historia del pensamiento europeo? Por To pronto, podemos desechar dos opiniones que a veces ve han fostenido acerea de exta cuestién, pues no explican hhechos que necesitan ser explicados, No era Scr tes um mero predicador de una moralidad comin fue actuara como un homme de bien por la raxin ttiltaria de que los malot procedimientos “salen smal", concepeidn sugerida por una atencién inde bidda a ciertas partes de los Recuerdos de Jenofonte Un hombre de esta clase dificilmente habria sido condenado a muerte como un peligro piblico; no habria ganado la devacién de Paton, ni la admira: cién general de todos los hombres notables de su época, ni haba sido caricaturizado como efectiva- mente lo fue por Aristéfanes, Puede decirse que ‘Anito no comprendié a su hombre, que Plan lo isd", que Aristfanes distorsion’ sus rasgos Pero debia haber algo que hiciera surgir In mala comprension, la dealizacin y la distorsin. El obje to de éstas debe de haber sido en cierto modo un ‘aricter extraordinario, singular de hecho, un hot bre “original”, y tenemos que descubrir en qué eon sista sw singularidad, ‘Tampoco puede haber sido Sécrates lo que algunos leetores superticiales de Pi tén han creido que era: un mero escéptico, pido para trastornar Ine conviceiones de otfor mediante Ingenioras preguntas, pero sin convicciones apasio nadas, propias. El mero escepticismo inteligente es fan efiimero en sus resultades como deslumbrador porn momento; Sécrates ere la tradieiGn moral e {intelectual de la cual ba vivido Europa desde enton ces. Cémo pudo ser ast ex To que hay que explicar En el fondo, la respuesta parece ser muy sen cilla, y la mejor manera de ofrecerla es la forma elemental que Burnet le ha dado,* En Ta medida en ‘que portemos afirmarlo, fue Séerates quien creé el oneepto del alma que deste entonces ha dominado fl pensamiento europen, Durante més de dos mil afios el europeo eivilzado ha supuesto que tiene un fata, algo que es la sede de si inteligencia y de su ‘aricier moral, normales y en estado de vigilia, ¥ fque, dado que esta alma e idéntica a €l mismo 0, fen todo cata, lo mas importante en él, su ocupacién fuuprema en’ It vida es hacerla lo. mejor posible. Existe, desde Tuego, una minoria de personas que rechaza esta teoria de Ia vida, y hay quienes niegan ‘aun la exitencia del alma; pero constituyen una pequetla minoria; hasta hoy, para la gran masa de fos occidentale, la existencia y Ia importancia del alma es una doctrina tan familiar que parece evi dente por sf misma, Ciertamente, la influencia recta que més ha hecho para que esta doctrina nos fea tan familiar es la del crisuanismo, Pero cuan {00 el cristianisno Hegé al mundo grecarromano se fencontré con que el concepto general de alma que necesitaba le Habla. sido preparado ya por la {lo tolia, Ahora bien, lo notable es que este concepto ‘el alma, como sede de la inteligencia y del cardcter hotinales, es ya cost corriente en la literatura de la sgeneracién que siguié inmediatamente a la muerte de Sécrates; es terreno comin de Iserates, Platon y Jenofonte, y en consecuencia, no puede ser descu brimiento de ninguno de ellox. Pero no aparece, casi no aparece, en la literatura de épocas anterio 76s. Por lo tanto, debe de tener au origen en algiin contemporineo de Sécrates, y no tenemos noticia de ningun pensador conte atribuiree eve concepto como no sea el propio SO crates, quien se presenta enseitandolo, tanto en las paginas de de Jenofonte Naturalmente, con mucha freciencia se men. ciona en la literatura griega, de Homero en adelan. te, una cosa Hamada payche, Pero el punto impor tante es que no hay quizé un solo pasaje en la literatura anterior, en el que poyche signifique lo aque alma ha significado para nosotros durante tan tos sigles: la personalidad consciente que puede ser sabia o nec, virtuosa 0 viciosa, de acuerdo com la “tendencia” y diseiplina que recibe, En la literat ra primitiva, payee significa regularmente una de dog cosas —ninguna de las cuales ev idéntica a To Aue se nos ha ensefiado a llamar alma, segin que 1a palabra se asocie con Hometo o con la religién rea, En Homero, la poyche significa literalmente fantasma. Es algo que esta presente en el hombre di rante toda su vida, ‘que To abandons en la muerte. de hocho, el “iantasma” lo que el hombre "en: trega'” al morir. Pero no es el yo; para Homero, ‘héroe mismo”, como algo distinto de st pyche, es su cuerpo. Aunque un hombre no puede vivir cuan: do su payehe lo ha abandonado, jamis se piensa que sta tenga algo que ver con la "vida intelects como decimos ahora; éta se realiza, segiin Homero, en el Kear, el corazin,o.en el phrenes, el diaragma ambos érganos corporales. V la piyehe que ha abandonado el cuerpo no tiene conciencia de nin ‘guna dase, como no la tiene Ia sombra de un. hor bre 0 se reflejo en un estanque; todo lo que Ix pyehe que partié puede hacer ex dejarse ver de tiempo en tiempo en los sueior de lor vivos. De cesta muerte, en el fondo, no es inis que el “aliento”” {que tin hombre inhala mientras estd vivo y exhala finalmente cuando “expira”, La ciencia jonia, en su descripcion de I pryche, comienza por estas con ‘xpeiones y lleva todavia mis lejos su desindividua. TizaciGn, Su teorfa cortiente e que mi payche es simplemente Ia parte del “aire” ambiente que in halo, El “aire” es tin “dior”, y por ello es cone ciemte, y ésta es la causa de que yo sea consciente ‘mientras continge Henando mi sistema con nuevas pporciones del "dios". Cuando “exhalo mi ileimo Aliento”, el aire divino que hay en mi vuelve sim plemente a mezclarse con el deptsito comin de fire” en todo el ancho mundo; no existe ningin portador individual rel y permanente de mi "per. Sonalidad”. (Fs verdad que en la filosofia de He lito el “alma” —que se supone que no es “aire” fino “fuego"”—era muy importante; pero existe una fuerte contradiccién en sa pensamiento cuando dice por una parte, que debe tener una especie de indi Vidualidad permanente con objeto de pasar por as vicisitudes del nacimiento, Ia muerte'y el renack ‘miento, y, por la otra, que es tnicamente una por cin temporalinente separada del “Tuego” césmico.) En la religién érfica, por otra parte, como en Ja religidn congénere de fos primeros pitagoricos, la poyche es algo mis importante. Tiene una indi | ualidad permanente y, por consecuencia, es inmor- tal; de hetho, es una divinidad temporalmente "eal- x” y deserrada, El gran interés del devoto cs practicar las reglas de vida, en parte morales y en parte ceremoniales, que Hevarin a la liberacién final de In payche de la “rueda de nacimientos", y a restituirla « su lugar entre los dioses. Pero esto rho ex el alma, si por alma entendemes "lo que esti entro de nosotros —usancdo las palabras de Sera tes tranemitidas por Platn— en virtud de lo cual te nor dice sabior o necios, buenos 0 males". Los Srficos suponen que manifiesta su actividad preci- tamente cuando Jo que Ilamarfamos el yo “normal” de Ta vigilia extd en suspenso —en suetos,vsiones, tances. Como dice Pindaro: “[la psyche] duerme ‘mientras los miembros actin; pero al dormir los Fhombres presagia en miichos suefios las soluciones desconocidas de la felicidad y el pesar"* Asi, pues, ‘mi inteligencia y mi caricter no pertenecen a [a payche que hay én ml, y st inmortalidad, por im portante que Ia consideren los érficos, no es, ha blando propiamente, mi inmortalidad, En los pa sajes de la literatura primiciva en que se habla excepcionalmente de la fuyche, como origen de to das las acciones en la vida de vigilia diara, se la ‘menciona por lo comin en relacién con los apetitos Caprichosos que dessprucha el sentimiento de so pe die que por una er "dak gaan si gre” cw Eeacéa de ctnibel (Glclopes, 4). Aa! tn fomanow Scan {emo Indugere cn cl mang tid y anne coum pee Sera gen propio eaprcho Parece cierto que en Atenss, en el siglo ¥, Ja palabra fuyche sugerfa al hombre ordinario no mas Ae Jo que para nosotres significa Ia palabra “fan tasma', y éita es la razdn de que Aristéfanes hable fen Las ruber acerca de SBerates y sus compafieros como og yak —intenta sugerir que Ia vida de aquellos “pensadores" no pasa de Ia de otros tantos “fantasmas". De esta suerte, @uoynjia, el cuidado de la propia payche, significa exe aferrare cobarde- mente a la “vida amada” que leva a un hombre a ser presa del pinico en el campo de batalla Es evidente que lo que se necesita para el des arrollo de una moralidad y una religion “espirieua les” es que Ia insistenciadrffea sobre la importancia suprema de “ocuparse de los intereses de la psyche", fe combine con la identificaciOn de est peyche ppremamente preciosa como sede de la inteligencia y del caricter de Ia persona normal. Este es el paso que da la doctrina del alma ensefiada por Sécrates en Plain y en fenofonte, y debido a este rompimiento con Ia tradicin érfica, tanto como a conceder el lugar central a Ia conducta en Ia vida, centro que-los pensadores anteriores habian dado a la astronomla 0 a la biologia, Sdcrates, segun la ‘manoreada frase de Cicerdn: “hizo bajar a a filo sofia del ciclo a la Tierra”, En otras palabras, lo que hizo fue crear Ia filosofia como. algo enters ‘mente distnto de la ciencia natural y de la teosoa, © cualquier amalgama de ambas, y Hegar a este re fultado de una yer por todas, El alma, tal como él Ta concibe, tiene tala la importancia y la indivi dualidad permanente de la payche Grfica, Por rx zones dadas anteriormente, me parece evidente que ebemor creer los relatos’ platonicos acerca dela firme conviecién de su maestro sobre la immortal dad del alma, y en boca de un griego, esto significa Sut divinidad exencial, He aqul la verdadera just fieacién de una misién de prédica a todos los hom. bres, en todas las épocas, el sencillo deber de “cu dar al_alma”, y "hacerla tan buena como sea posible”, fuera cual fuere el precio que la fortuna bel cuerpo propios hubieren de pagar. Pero la fentifieacidn del alma, cuyo “cuidado” es nuestro pprimer deber, con el yo normal, significa, natural frente, que el “cuidado” no consistiré en Ia pric tea de dncta asimismo tacional, El deber de vn hombre tina justificackin racional de lo que cree y de l tho aguello de lo cuat no pedemon dar ninguna Ja razon por la cual, cuando Séerates emprendid el €l de convencer de DDebemossefialar que esta doctrinasocdtica del indie ‘gnorancia" a los no ente fea palabra, ni psicofisiea, ‘Nada nos dice sobre la fc Io que el alma es, excepto que es “lo aque esté dentro de nosotros, sea lo que fuere, en Yirtud de lo cual se nos dice sabios 0 necios, buenos ‘o malos”, y que no puede scr visto ni eaptado pot hhinguno de los sentidos. No es una doctrina de la Mfacultades” del alma, como tampoco de su. “sus tancia”, Se piensa que Ia “obra” o “funcidn” de cate divino constituyente del hombre es slo cao cer, captar las cosas tal como son realmeate, y, por ‘consectencia, ber, particularmente, lo que es bue no y lo que es malo, y divigir y gobernar las accio nnes de un hombre de manera que leven a una vida que evite el mal y logte el bien. Axi, pues, lo que a Sécrates interest no es la pricologia espect Jativa ni la empitiea* sino tn principio comin de Ja epistemologia y Ta étiea.. “Hacer el alma tan buena como sea posible” seria, por una parte, Ile gar al conocimiento de la existencia tal como es Fealmente, y por la otra, basar Ia propia conducta ‘moral en uh Yerdadero conocimiento de “los valo- res morales". En ambas esferas, lo dinico que debe uperarse es el poner Ia “opinién’, la “Tantasla’ (doxa), las suposiciones que no. pueden justficar se como verdaderas, en el lugar del conocimiento. Asi como la ciencia se arruina por Ia confusién de la fantasia con el hecho, asi Ia'vida prictica se echa a perder por una falsaestimacién del bien, Hemos de ver ahora cémo este concepto del conacimiento de la verdad como interés supremo del alma y, por consiguiente del hombre, resulta en el principio de una teoria tanto de la ciencia como de la conducta ‘moral, Podriamos aceptar con confianza, aunque no poseyéramos las elaras indicaciones de Platén 4 La pcologla cmp, fandad por Alin de Cro toma, tl epresetad, en i Gora erat, por ia pt fi cei gue can que sina “afm ania” de a moda emanada el cuerpo, dct {st como queds Semostrada en el Fedon ener ci nn vl, tae Vigoss como de So FL PENSAMIENTO DE SOCRATES ut para guiarnos, que el interés de Séerates por los problemas cientifieoe pertencce mis en particular la primera parte de su vida, y que al Iado ético de su pensammiento debe de haber sido casi exclus Yvamente el dominante en los dtimos afos, dedica dos a su misin hacia la humanidad, Pero debemos considerat los dos arpectos en orden inverso, en vis ta del consenso muicho mis general de los eruditos sobre los rasgos caracteristicos de la dica socritica 1. Pica, Ariatételes al hablar de Ja doctrina moral distintiva de Sderates, Ie adscribe wes prin tipios particulares que, a primera vista, parecen pa a6jicos: @) la virtud, excelencia moral, es idén tica al conocimiento y, por esta raxéu, todas las virtudes distinguidas coméumente son’ una sola b) el vicio, Ia mala conducta moral es, por cot figuiente, en todos los casos, ignorancia, error intelectual; c) obrar mal es, pues, involuntsrio siempre, y realmente no existe tn estado del alma ‘como el que Aristételes llama “debilidad moral (acrasia), Ycobocer el bien y, sin embargo, hacer el mal”. £5 bastante evidente que Aristételes toma fstas alirmaciones directamente de su lectura de tun gran didlogo de Platén, el Protdgorar en par. ticular, pues en él se encuentran todas, pero sim. plemente deseriben la sustancia de lo que Sécra fes tiene que decir acerca de Ia moralidad en los Aislogos del primer periodo de Platén, y todas re fparecen en forma mds comtin y eorriente en los Recuerdos de Jenofonte. Tendsemes la dave de ells si podemos descubrir ta concepcion por Ia que fesan de ser paradojas y comienzan & parecer obviae ‘Lo més conventente ser’ que comencemos con lo que parece ser la paradoja mayor; la asercion de que toda mala aecidn ex involuntaria. La “debilt dad moral”, ef hecho de que los hombres hagan lo {que confiesan que es malo, y que lo hagan sin que nada les fuerce a ello, es'una de las experienci Séecrates quiere negarlo, Lo que quiere deci es que la frate popular que acabatnos de cmplear da tin andlss inadecuado del hecho. Con bastante hacer el bien smplemente porque ve que eo bueno ado en nosoron! el desco del bien o de la flict dad. Es posible, en todos los demés caos, preterit la apatenin a ela aspect eto de de dear a apinca dt ben de afl truo de perversidad” grieg, el “iran puede pasar su vida entera “haciendo lo que le viene en gana” con las personas y las propiedades de todos; pero justo pot que hace siempre “lo que le viene en gana”, nunca Consigue aquello que’ realmente desea. Desca. la felicidad, y logra la infelicidad extrema, un alma Sentencado a'muerte, porque ésta puede set juste mente la “irugia” netesaria para curar In ener Mnedad del sng del criminal, De esa suerte, sun Ia cual no pueda tener mayor dada. que Ta que pueda neti a ‘su propia existencia, que los Iama- for "bienes” del cuerpo y de la “propiedad” son an comparacién cone bien dl alma, y supicra To que el bien del sina cy, ada lo tentria jams {cer el ma. Hacer el tal a apoya siempre en Gia fala extimacion det bien, ‘Un hombre hace cl thal porque equivecadamenteexpera obtener con ello pa tiene en cuenta el hecho de que Is calpablidad fontratda por eal poss. incomparablemente fds que las supuestas ganancia. Ast, pues, Sea que hacer cl mal ve debe a un error de cial Foro el errr de cileulo no es wbre la “eantidad de Placer, sno Sobre los valores del bien alirmar que toda las virtudes ton una sola cote aque ex el conocimiento. La idea Babieual en la pluralidad; cada una es enteramente distinta a las emis, yes posible tener una en el més alto grado sin poseer ningtin vestigio de otra (se puede ser, por ejemplo, el brave des braves, sin embargo, tan li Dertino como valiente, oe] mis casto de los hombres y al mismo tiempo el mis codicioso y leonino). Ahora bien, Sécrates reconoce que esto es verdad, si por virtudes queremor significar lo que él Il por boca de Platdn, “virtud vulgar”, uta especie de Fespeto aparente a un cédigo de conducta aceptado por hombres que no tienen ninguna convieciin ppetsonal de la suprema importancia det alma, y de In identidad de la verdadera felicidad con la “sa Ind” de aquella, y que se comportan decentemente slo porque los habitos de su sociedad asi lo ext ‘en, ¥ temen sufrie las consecuencias si se compor tan de otra manera, Pero-estavirtud “vulgar” estna simple imitacién ilasoria de Ia verdad. La verdade ra virtud es cuestién de conviccién apasionada, de conocimiento personal de los verdaderos “valores” ‘morales. Existe, por lo. tanto, un simple prit ipio dnico detris de todas aus diversas manifesta ciones en las diferentes situaciones de Ia vida. Un hhombre que ha captado exte principio con le plena comprension del conocimiento, no. puede ya api. carlo en algunas situaciones, y no en otras. El co nocimiento real de lo bueno para el alma se desple gard por si mismo en una justa actitud hacia todas las situaciones de la vida, y, de esta suerte, en la vida del “filésofo" desaparecerin las aparentes Ii neas divisorias entre no y otro tipo de excelencia ‘moral. La totalidad de su conducta exhibird una tinica excelencia, certidumbre consiante y segura de Ja verdadera “escala de bondad”. "‘Tenemos aqui la de que mis de uno explicacién del hecho cu z singular, Ge los didlogos platénicos da un resultad aparentemente negativo, Se nos invita a considerar ul es el verdadero carscter de alguna virtud reco ida por todos (la templansa en el Carmides, el valor en cl -Laquet). La reflexion parece evar fot a la conclusiin de que In cualidad que se di mente el conocimiento del bien, cuando parece for detenemos por la olwervacin de que e feria definiion, no de la virtua particular en di eiconocemos atin, lo mimo que al principio, la Tespoesia a 1a cucstion que se non ba plantendo, Derecho, nos hace entender que el ntento de define ina vrtad resulia en algo que Ho cs silo etn de evry go dea, cn de Myaturalmente, el eanociniento con el que Sb crate identifica la vrtud, no alg, too aque flo a To que se puede dar el nombre de conocimlen to, defnidamente es el conocimiento de To que en rests dias se Hama “valor moral, conocer To Cerdadera dificaliad: gefmo comeguir eae conoct Imiento? Por unta part, sila virtud es conocimien- {o, poseerla o no poreerla no es asunto de simpl on congénito; lot hombres no vienen al mud buenos de nacimiento, por Ia misma raain que no nnacen en poresion de cualquier otro género de conocimiento; tienen que adguirir su conocimien to, No obstante, la idea corriente de que no Gqitiance el uo de muestra lemgan toa, bajo In influencia de buenos padres y de buen ambiente social, no puede ser certa, Es evidente que Peri cles y'Ios demas hombres notables a quienes el pi blico ateniense considera, con mitcho, como ss mejores hombres", han sido totalmente incapaces dde transmit sus propias nobles cualidades sis hijos; étos han sido por Io comin pervonas muy inferiores. Por otra parte, los “softs” eminentes pproclaman ser capsces de “ensefiar la bondad", como podrian ensefiar algiin canocimiento tecnico mediante un curso de inttruceién, Ahora bien, si bbondad es conocimiento y nada mds que conoct 'miento, ciertamente debe ser posible enseflarla de algin modo; el individuo que posee tal conot. miento debe ser capaz de guiar a otra hacia su adquisicidn, Y, sin embargo, la afirmacion soflstica le ser capar de ensefarla mediante una serie de conferencias tiene que ser falsa. La euestién acerea de 1a cual Séerates, tal como Platdn lo presenta, inssterepetidamente contra los sofistas y sus adm adores, ¢s bien simple. Lo que el sofista puede en Sellar es, en el mejor de los casos, una especialidad profesional de algtin género; cémo hacer algo que Jos hombres, en general, no puerlen hacer, Pero la Virtud, 0 la bondad, no es una especialidad de do ninio restringido; su esfera de acciGn es el terreno total de a conducta humana, Una especialidad es, tu ves, algo aque puede dase un ben so tanto como uno malo, exactamente igual que el conoct miento médico puede ser empleado para curar, pero también para matar En el mejor de los casos, el sofista puede comunicar un conocimiento expecia conocido que low envenenadores mis di tmiento del bien que dark la seguridad de que tio que de él se haga serd bueno y no male. hemo, entonces,adgquiere el howabre et tnico fe, el conocimento del Wien? No'se ve bien que Sécrates haya legado nunca a una soluclde final del problema, Pero acato podamos dexcbrir el cx rieter general de la respucria que hublera dado, Segin Plain lo habia impresionado Ta doctrina devotvere al alma el recuerdo de 3 divino origen olvidato, y tomando esta indicacion como base, des arrollé Ia conviccin de que la adquisiién del co nocimiento es, generalmente, en realidad un pro floaty apes pees ee ce roe ee ces0 de “recuerdo” 0 de “reminiseencia” (onamne sis) en el cual los hechos sensibles particulares in pulsan o sugieren la aserciin de wn principio univer sal que trasciende Tos mismos hechos, Mediante el twazo de un diagrams y haciendo una serie de pre gumtas adecuadas, el matemitico Meva a un dish pulo al reconocimiento de wna proposiciin univer fal. No necesita comunicar ninguna informacion; si se traza el diagrama debido, y ve hace que la inte Tigencia del discipulo trabaje sobre él mediante las preguntas adecuadas, ef disefpulo Hegara a Ia justa usin desde dentro, por su propia accién, como fila sacara de un depésito de verdad que posee y inconscientemente. La verdad “aprendida’ de esta suerte es alcansada por un "descubrimiento” per tonal, al que el “ensefiado” ha sido simplemente stimulado por su “maestro”, y no obstante es “re conocido” asimiamo como algo implicita ya en lo que el “ensefiado” sabia de siempre. De igual ma Nera, las interrogaciones sutiles de un Socrates que nos compele a “dar cuenta” de nuestra conducta en la vida, llevan a la inteligencia del interrogado al “reconecimiento” de las implicaciones de los patro nes morales inediante los cuales estimamos nuestra propia conductay la de nuestra projimo, Este es el punto de partida desde el cual habia de desarrollar Platén su propia teoria de la “filosofi, como algo creado por la fricciin de inteligencias empeftades fen la comin persecucion de Ia verdad, La mente griega no hacia, con justicia, distin cién alguna entre los principios de Ia condacta pr vada y lor de la conducta pablica, entre la mora y la “politica”; y en consecuencia, Sdcrates aplic yu Aad del Estado y de sus estadistas. El mérito Estado, y de sus hombres piblicos depend, asus ojos, por comp a recta extimacion de los “valores eto, del grado en que Ia vida ‘nacio nal se basaba en una auténtica eacala del. bien Es evidente que, a pesar de toda su leatad prictica a In constitucién, no aprobaba el principio de la emocracia, pues Ia soberania de Jt rmultitud que no tiene conocimiento alguno del bien, y que ni siquiera ha soiado nunca con tenerlo, s la jstif cacién necesaria para Ia direccié de sus asuntos Los juicion sobre la democracin ateniense del s flo v, puestos en boca de Sécrates en el Gorgias y fen Ia Repablica de Platén son mucho mis dros (que cualquier coxa que el propio Paton tengn que it por propia cuenta sobre el gobierno demoer tieo en dislogos posteriores, tales como el Politico y las Leyes; me parece probable que li veveridad de aquellos juicos proviene de 8 Platdn® Seguin [a ates mir que de siblicg, el principio mismo a fenton Gem seb —_-HL PENSAMIENTO DE socRATES de la democraca, si ast puede lamar, 8 la nega tiva a pretender una superioridad de inteligencia hay “un ratio y ningin pastor”, y ta cs Ia van6n Hlamaban los griegos, un "tirano'). Igualmente se Gnica y en parte, de Aristides, el "Justo", Ningune de ellos tenia el conocimiento del bien que es lo Mi teed Aceiese pat emetic ‘ger bondad que poseyera as propio hij; nin uno, excepto acazo Aristides, hizo el “alma” pi bles mejor por sus cuidados. "Temstocles, Prides lor dems hicieron a Atenas poderosa y rics pero hada hicieron por la moral del pueblo “Ilenaron tender haber sido sos "médicos, que es lo que dleben ser los verdaderos hombres de Estado. "Es evidente que; de hecho, Sécrates empleaba de ma nera habitual el género de argumentos, que Platon Scapa por srto los pesie ei magirsrs fae age le atribuye, acerca de Ta ineapacidad de Jos hom: bres publicos atenienses de tansmitic Ia “bondad’ a sus hijos, como prueba de que su propia. “bon: dad” aparente no Era cosa genuina. En el Mend se introduce deliberadamente a Anito, quien Ie ad vierte que esta depreciacidn de los héroes naciona les es un deporte peligroso: clara indicacion de que Platon crela que aquello habla tenido mucho que ver en la provocacién del ataque que condujo as proceso, ‘De acuerdo con Ia concepeidn soeritica, la de bida organizacién de la sociedad seria aquella en Ja que la situacién y la funcidn social de eada ind viduo, extadista, soldado o productor, es determi nada por la naturaleza de la obra que sus aptitudes, fentendimiento y cardcter le permiten realizar, Este fs precisamente el ideal encarnado en el boceto de Ja Gudad ideal que lena los libros primeros de la Repibliea de Plain. Hasta aqui, puede decirse aque este esquema tiene una directa inspiracién so Critica, Mas hasta qué punto cada uno de sus Aetalles sea efectivamente de origen socritico, es ‘tra cuestidn, aunque es posible creer que tal sea fu origen por uno de sus rasgos mis originales, la proposicién de admitir a las mujeres, en las mismas Condiciones que a los hombres, en los empleos pi blicos, militares y civiles, y en la edueacién que da aptitud para ello, Que Sécrates, de hecho, sostenia cite ideal parece demostrado por ef hecho de que también Exquines, en su didlogo Aspacia, trata de la ‘apacidad politica de la propia Aspasia y de otras, y Ja habilidad militar que se creia habla mostrado ba real o legendaria princes peraa Rodogina. Asimis. smo Jenofonte pone incidentalmente en boca de st Sécrates Ia tesis de que, mediante la preparacién necesaria, una miyjer es capaz de hacer las mismas cosas que un hombre® Tronia pet. coNocnatero ¥ stéron0 erent rico, Arisisteles sefiala en la Meta cosas deben, en justia, argumentos inductive Esto no nos Teva que "dos judicare a Scrates: los uy Iejon claramente ve ve que cierios elementos de su propia filosol fine deri de aqua, patece basar su alirmacin simplemente ens lectra de To ddlogo de Paton que se act an de ete punto oon das EL interes apologé tico de Jenofonte por la entereza moral de las le tones de su viejo maestro, no le permite extenderse mucho sobre cualquier otra cosa. Nuestras proba Dilidades de descubrir algo mis acerca de Socrates como pensador sobre temas que no fueran estricta mente cticos dependen de la aceptacién, como ver: dad histriea, de la narracién autobiografica puesta en su boca en el Feddn de Platén.!! Ahora bien, Ime parece, como ya he dicho, que estamos obli don a ver esta narracion como To que Platén consi deraba sustancialmente un hecho histérieo. La otra alternativa es suponer que el relato de lo que S6 Crates dijo de al mismo en el timo dia de su vida, fn presencia de cierto nimero de amigos intimos, todos los cuales vivian ain cuando se publicé el relato, que de seguro leyeron, es una fiecién que toxlos aquellos lectores descubririan inmediatamen- fe. No hay nadie que tenga el valor suficiente para sceptar emeramente tal teorla. Todo el mundo fcepta, por ejemplo, como un hecho, la historia de fa lectura de Sderates del Libro de Anaxigoras, y del esengafio que le prodyjo, aunque no tenemos ninguna prucba de ello, excepto Ta afirmacién del Fedén. Pero esta afirmacién es, en el Fedén, slo el comienzo de un relato coberente y, por lo tanto, tenemos que aceptar el resto del relato como sus: tancialmente exacto, o bien tratar la afirmacién {nical con el mismo escepticismo que al resto. Para imi bay pocas dudas sobre cual sea la sctitud mis Tazonable, Desde luego, ningiin hombre sensato hegaria que Platén, como todo gran artista, mezc!6 1 Fin, hope dt er ca ot S's alsin de Busnet (Oxford. 91 su propia mente con el tema de la obra. Pero es feat enteramente distnia el aegurar que 4, cone clentemente, nos ofrece sus propion Taxgos Ga un Pretendido rtrato de Sécratex™ De acuerdo con el edén, por consiguente, e tecto inmediato que produijo en Sécrates su des brimiento a que Anaags domain seca sus precunores,fwe el Meavlo a forjar un musvo inétodo para Ta investgeciin de la verdad. Si no Podemos descubrir Ia verdad. acerca. de las cosas por la otueracion deca de las coms misma, po flemos intentar hacerlo examinando las oirmacio: nes 0 teorlas (logs), que damor acerca de llas. La aparente forma indircta del procediaento et la Faudn de que Sdcrates lo menosprecie humorist Ta atecali aes as cua ta legen lay tas probs laa de elt nociniot geen) El proceialeats us ar Poanenm epecnaac aan ei celtics ct maa = fn eoeae ae neetes fee eae ace ede el tana por is face del Hllogn 9 adie oe Jenofente, a fexpect! ts prooon uc er Hevad a exbo entre do investigadores, 0 Timbien dentro del corto de un solo lnventga Donde a sus propias imterrogaiones La verdad fe no puede wer descubierta por la mera observa Gln deloe “hector”, puede hacen mire en Ia de cllon Se Togra coando se lgra, como conch tién do un debate o“teoriay"rivles eel tema de ls butasingeno fut y malignas de Aristlanes en Lar nudes. Prot itereme, que vexsten dos argumentor cere de todo", dos sopectorencala cao y que el arte de la Aefens efi que elemseaba tenia s hacer que "caso mis dil" —que presentado torpemente pareceriael peor al auditorio— fuera “el mis fuer te". Aristéfanes daa esta inofensiva sentencia el sentido de que el objeto de Ia defensa es hacer que el easo moralmente peor aparezca como el mejor, y Tego atribuye este procedimiento a Sdcrates, con cl resultado tle que los “argumentos” rivales son Hevadoe a la excena como la Vistud y el Vici, y el Vicio, naturalmente, gana In batalla a In Vireud, Esto es farsa pura, pero da por supuesto, como su fundamento, el hecho de que, en la infancia de Platén, Sderates era ya conocido como hombre inte resido especialmente en Ia confrontacién de “argu rmentos" de algun género. EI Fedén os da una descripeién sumamente dovallada de 1a naturaleza de cse procedimiento Consiste el método en que Sécrates empieza por alguna proposicién que, por cualquier #xz6n, [px ce verdadera, La llama su hipstesisiniial, y pasa 1 preguntarse asf mismo “qué debe seguirse si esto se admite”, ex dect, pasn 2 deducir sus consecuen. cas, Siendo por ahora indiscutible Ia verdad de la hipdtess inicial, todo cuanto se dedurea de ella se epta asimiymo como verdad, y todo canto entre fen conflicto con ella como faluo. De esta suerte, 10 que el método da por supuesto es simplemente que Ta verdad es un sistema coherente, y que no hay nada que pueda ser verdadero si esti en conflicts ‘on un principio verdadero, Debemos sefialar, na- turalmente, que el supuerto principio, que Sécrates lama su hipdtesis, no es comsiderado como hipote tico en el sentida de ser una “pura suposicn” Sécrates fo considera como punto de partida de un argumento porque lo supone verdadero, 0 porque fs terreno comin a él y a su interlocutor. Por otra parte, no se trata de presentarlo como verdad final evidente por si misma. Puede ser puesta en dud, Y en Ge Caso necesita ser defendida presentindol como consecuencia de alguna hipdtess més definé tivg ymenos discutible. Laegla importante de este método es que la pregunta: 2qué comsectencias se Meclucen de la hipdtest, y la pregunta: ges Ia hips fesis misma verdadera?, deben mantenerse separa as, En tanto que mos ocupemos de la. pritaera ‘uestion, la de las conseewencias, Ia hipstesis misma Aebe considerarse indiscutibe, Hasta este punto, el método atribuido a Sberates en el Fedén es claramente, en principio, el unico senero probado hacia la verdad en Ia tcorla cen Llica, hasta nuestros dias, El coutraste entre el pro cealimiemto directo de los fisees jonios, que a nada condujo, y el método de estudiar Ine cosas en las afirmaciones” que de ellas hacemos, es precisa mente el trade por De Morgan entre el meétod ah para socer una teorfo de el : ura de Newton, quien trata los heli como medio te probar la feoria.$* La vnica notable diferencia fs que Socrates no hace ninguna Feletenciaespeetal S'la comprobecion de la teria mediante Ia con fromtacion de Tas consecuenciasteiricst con el he encuentra su lugar adecvade en fa claboracion del ppensamiento socratioo hecha por Dlatén y st Ac hechos relevantes abservados, era el de wna ip teais que “salva las apariencias”. (Las “apariencias" ton los hechos tal como se observany “salvar” eb dlar cuenta de ellas en forma coherente) Natural Aa ‘extennién moderna dela comprobactn por Hasta este punto, existe testimonio indepen acerca del dente de que as alirmaciones det F Indo de'scates son hires Jnotonte edi trincanie#® aunque exto, dee Tuegor pue hifiear meramente que Jenofonte liabia leido € Fedén y no encontsd raxén alguna para dde'sus afirmaciones, Pienso que es mis significativo 4ue Platén aparentemente haga refer a Protigo #a sin expicainadiiona af metodo de omar Bonerse en dda en tanto que nes, ccubemos Ale descubrr sus consecuencia- como algo’ part Gue simula habersecelebrado anus del nacimiento 4a propio Plain Es mis, podemos ver de dn de th derivado Socrates probablemente la ides d tste método. La deduccién tigurom de Tas conse Cueneias de una hipdteie cra el attodo. peculiar de famoso Zend de Een, bien eran tas hipatess 4 fin de desicreditarlos, demostrando que Hera plicar ante el joven Sdcrates en el Parménides de Blemente de feuerdo con nosotros a mayer so nega 4 dare! pas vguiente aceptado como ter dad fundamental, de acuerdo’ con low hechos lo aque la narraion del Fen dice despa aceres de i aturalem de la hipétes particnar woptade por crater como base esa penamiento, Bea, se fice, no es ota com que a famom "Teoria de as this prcbar que nay cuantas-expresions amb fas de Aisttcles, que on docttina Tue deseubierta TL PENSAMIENTO DESOCRATES 35 or Platén desputs de la muerte de Sécrates, Por Im part, ero, con Barnet, que es inconeebible que te leerlan su obra ydescubrivan cualquier falbcdad Sovtengo, por consiguiente, que debemos acepla Tas alimaciones del Feddn como sustancialm te verdaderas 7 ajustadas a ls hecho, y hemos de txplicar el teatimonio de Arstételes, a lo acepis: Mos como algo mis que mera conjtura sip de manera tal que no contradiga « Platon. De ‘bemos recordar, naturalmente, que Platn ha me lado su propia peronalidad con el aujto de 0 ‘obra en el momento mismo de desir; pero ‘gue haya en ello una diworsén,consiente de la teraad. El problema que habla dejado perplejo a S. crates tra el de a “generacion y Ia corrupaon’ for que aparece tna cosa en el mundo © por qué dlesaparece de el por qué muestra una coma alg arbitraria, La rellexion ebre las implicaciones ta tels de Anaxigoras acerca de La asd como or gon del orden en el mundo, sugirid a Socrates que Acquellon agentes isco, turen lo que fuesen, son las cosas sean como son, y en un mundo ordenado racionalmente cada cosa estard dispuesta en la me jor forma posible. Asi, Sécrates introdujo en la fi losofia ta concepcién “teleolégiea” 0 “linalista" del ‘orden del universo como realizacion de un final de valor absoluto, que fue plenamente elaborado y transmitido a ‘demos posteriotes ‘como herencix principal del pensamientofilostieo griego, por Pla on, Aristételes y Plotino, EI abandono del viejo método ingenuo de in fentar descubrir la verdad por una simple obser vacidn de “los hechos", significa, naturalmente, que Sécrates no podia sofar con aprender, por ‘observacién directa, lo que son los detalles parti: calares del orden césmico y por qué es lo mejor que sean como son. Pero st conviecién de que existe un orden inteligible en todo, y que es un orden sabio, dibale una concepeién’ caracterlst fc mediante la cual podia plantearse la euestion de por qué una cosa se genera o cofrompe, alquiere ovpierde un rasgo. £1 mismo habla de esta actiud enel Fedén como algo conocido a sus oyentes, algo «que éstos le habtan oido repetidamente. Si una cosa se convierte en lo que antes no era, si, por ejem plo, se convierte en bella, se debe siempre a la mis ma'y Giniea razén de que la Belleza se "ha hecho presente” a la cosa; si cesa de eer bella, la Bellera se hha "retirado' de ella. O bien, con otras palabras, Una cosa bella lo es jusiamente porque " participa de la Hellera y en tanto que participa de ella; tna figura es triangular justo en tanto que “participa de" el trngulo y porque “participa” de él; y ast sucesivamente. La Belleza, 0 como lo expresa la lengua griega, “lo Bello”, “lo triangulay”, etc, son Jo qu eta doctin lama Formas o Mol ( My ana cn so que ne in cates Jeng, porque “participa” de las Formas de Is ie pnp’. Adem ene etait fon gene pon importants acer de Foonms 1) Lat ceows qe partepan de una rompers pero in Form, ia Bella eT tsuicamente de To que Whitehead lama un “ob ta, o una Iimina vemos una vara perfectamente rec ‘Gractamente triangular, y quid nunca. nos encom traremon con un acto de pefecta justin. Vemox flo varas més 0 menos rectas y asimismo leninas Inds 0 menos triangulares, y encontramos al paso actos de mayor o menor justicia. Pero “la linea recia” 9 “el tridngulo” de los que nos habla el Smetra son perfectamente recta Ia una y perfec tamente triangular el otro, y Ia justicia de que hhabla el moralista es un deber, es justicia perfects 3) Las cosas que “partcipan de la Forma” pueden Ser casi infinitas; In Forma misma es estrictamente nies, Incluso en geometria, cuando hablamos de ws tringulos que se supone son perfectamen- te triangulare, lo que interesa probar al geémetra hho son las propiedades de este'o aquel witngulo, Sino las de “el” tringulo® Y siempre es Ia Forma, hnunea esta 6 aquella cosa que “participa de” una Forma, Ia que es el objeto del que hablamos, en cencia, Yo «é que es una verdad centfien Que Ccalequiera dos lados de un twidngulo deben ser Inayores que el tercer ldo; yo no se que dos lador de esta Ldmina que esta delante de ti deban se que el tercero, puesto. que no sé a esa lignina vibe es realmente un dnguo, "Nos gustaria, naturalment, st fuera posible, sa ber algo mis acerea de estas Formas 2De que cosas hay Formas (, en comsecuencia, de qué cosas po hero? Podtemon ver, por las alusiones polémicas de Avitteles, que en ina fecha posterior, la. Acad ¥- que Arisételes no encontraba. que todas ue fan aifatorins Peto no tenemos erechn leer en el Fedin desarollos que pertenccen a 1a vejer de Platon,y hasta poems pensar que quied cn la Repiblica Viaton “colores” inconsientementc retrato de Séerates mas de lo’ que cre, conforme avanza si argumento, Por los ejemplos dads en el Fedén mismo, parecer que, en lo que: peasaba princpalmente Sdcrater cx por una parte en Toe bjetos de Tos cuales el matemtico puede darnos mas ideals Ul moralisia (el nimero ge tanga HL PENSAMIENTO DE SOCRATES.) tol at, eta impr conta ve un didogo escito por Platén en un periods Prsterfor de su catvera, cl Parménides, en el cual Sfcrates expone su teria a lon grandes filésofos tleatas Parmenides y Zendn,y Ia dfiende, no muy Satiaciorlamente, contra In critica de aquéllon Se Te hace decir alli que ext completamente seguro dle que hny Formas de costs tales como Igual y Desigualy Unidad, Multtad, Justo, Bueno: pero (que dda de que haya Forma de Hombre, Fuego, Agea,y que duda todavia mds de que las haya de Palo, Lolo, Suciedad, ‘De hecho, etd seguro de 10 fue ce en Matemteny ‘Mra pert uy que'el primer impulio para la formacién de Ja ‘Corts provino de la reflexion acerca de Ia ved Imatematea y moral, Exo es lo que debiéramos es: paral la doctrina tuvo su oigen en Sicates, ya Efe fue el hombre que Platon describe, La misma terminologia empletda parece provenit en el pr ther eno de los matemdQios piagorcos, Hay Bue. has pruchas de que In palabra efdor era el viejo {éomino pitagorico dado a Ia "Ggura", sentido de Ja'palaben que persiteen algunas frases estereot plas de Eucldesy de otros geometras del siglo Znque st palabra usual para nombrar la figura es diferente Gchema)*" Com frecuencia, Paton pre- In necesdad de patrones morales que puedan Ue 4) HL eHNGAMMENTO DE socRATES desacuerdos acerea del peso recutriendo als be. de hacer juaicia al factor a prioré del conocimiento, i unoeriia yt eed dels verdes ce que esta dicplinas son tomas como motelo de Uo que debiera ser toa cencia. “AS! comprendemos por qué las Formas han sido identiticaas por los Ios “eoncepion, lt "nociones de cases” Pero ha bar de'ellasen exta forma implica una traspon mnds simple. Signtiea hacer hablar a SScrates como Ariudteles 0 como Kant, lo que no puede hacer Sin riesgo de equivoc, aungue st docrina la verdadera fuente de la de agudlls. 31 queremoe due la Forma (va fo que fuer) es lo que nos pro ion catia y absolutamente verdadera, el objeto acerca del ean aquella proposcidn hace una ai actividad fundamental In de conocer las realidades tal como son realmente, y blo conociendo ts For inttigncia‘no ae halla rent a frente con ln For aque, desde Iuego, pee ser en m TMtamenesuiciente para ls ecesidade de la vida davis pero no tenemos conocimient; fala el ee Constwuyen as Forman, que son los objetor tema organiza? Debertn consti sn dada guna, ya que, sein el din, toda la doctrina eben de ellis como expliccin del enerase¥ eo Frompene’e : defi de que, en un ntundo interpenetrsdo por la imteligencia, ta mejor manera posible, y el Bien —él mismo una Forma es, por consiguiente, Ia causa del orden de acuerdo con total. Esto se halla estrictament tin famoso pasaje de la Republica ® en el que SO- trates dice que el Bien, o Ia Forma del bien, ocupa la misma posicién suprema y central en el mundo de las Formas captado por Ia inteligencia, que su hijo", el Sol, ocupa en €1 mundo visible, As! como el Sol, en el mundo visible, es Ia fuente tanto de la Vida de las cosas que vernos como de la Itz por Ta que las vemos, aif el Bien en el mundo abierto al pensamiento es la fuente tanto de Is realidad de Tas Formas que captamos como del conocimiento que nos hace captatlas, -Y como el Sol, a pesar deer la fuente de Ia lus y del crecimiento, no es e el Bien no es ni el ni fa una ni el otro, igualmer set” ni el “conocimiento”, sino algo que es el mmo la hana supe igen trascendental de ambos ‘bligad a confesar que ax ma de la visin corporea es el ser capar de ve ol, igualmente el triunfo supremo y mis dificil ye HLL PENSAMIENTO Dk socRATES de Ia inteligencia es conocer el Hien, #£] mismo, en ‘ste para, confiesa su propia incapacidad para ha. blar de ello a no ser en patibolae o metifotas. Por lo general, se ha pensado que, en este pasaje, Pla tn habla de una expeculacién personal suya, no sofiada siquiera por el Maestro cya vor toma pret tada, En vista de la intima conexion hecha en las piginas “autobiogriticas” del Fedén entre la ipo {esis de las Formas y Ta conviecién de que el Bien es la causa universal, encuentro dificil aceptar esta opinién, Me parece més bien que el lenguaje y el ‘onjunto de imigenes de este espléndido pasaje on Tos de Platén en su “juventud dorada”;' pero que 1 pensamiento es el exigido por las meditaciones nnacidas de Ia primera lectura det libro de Ans sigoras. TEs evidente que Ia doctrina de las Formas, en Ia forma en que, en mi opinién, debemos atribuirla x Sécrates, crea difcultades al empo que las des traye. En particular, deja sin explicaciOn alguna la relacign de la Forma con el hecho sensible qu lama su “presencia”, o su "ser participacidn de ella. zAcaso lo que nosotros lsmamos una. cosa Sensible e meramente un ensamblaje temporal de Formas, o “universales”2, y si es algo mas qqué otra cosa es? Nadie ha sefialado estas dificuliades mas incisivamente que el propio Platn en su didlogo Parménides, y, por lo menos, parece claro que la forma final de la doetrina platénica, que tenemos que reconstrur imperfectamente por los datos enig. aticos de Aristéceles, ue un intento de encontrar respuesta al problema. Avitételes mismo quedé tan perplejo ante los resultados, que Hegé a tratar toda’ Ta doctrina de las Formas como un intento equivocado de separar los “‘caracteres universes e las cosas sensibles individuales de las cosas mai mas, para despuds establecer estas “abstracciones” ‘como tna segunda serie de cosas supersensibles, que de algin modo producen las cosas que vemor y manejamor. Es, die, como si un hombre que tw viera que contar un mimero de objetos imagi que debia emperar por duplicatlo, El Estagirita ‘rey6 haberse ibrade para siempre de un problema inveal e insoluble gracias a stt propia formula de que la “form” existe solamente’ en Ia cosa sensible individual, y es justo su “earicter exencial”. Sin embargo, el problema existe todavia, a pesar de Aristételes, como una verdadera crux en Tot dtimos intentos de crear una filorofia de Iss ciencias, ‘To davia nos preguntamos cual es el status de lor “ob jevos cienifics". Qué son exactamente las costs acerca de las cuales discurren el matematico y el fisico? © bien, cqué es un “ideal” moral? Y cul cs la relacidn del “objeto cientifica” con las coxas que tocames o vemos? zcimo, ademis, se telacio nan el “valor” y el “hecho”? ‘La filosofia natural ¥ la filosofia moral estan ain Tejor de encontrar tuna respuesta final estos interrogantes y mas lejos ain de haber escapado a Ta necesidad de plantear los. La grandera singular de Sécrates se basa en el hecho de que fue élel primero en plantearlos con clara comprensién de lo que estaba haciendo, Varios de los compafieros de Sécrates se conv tieron, tras la muerte del Maestro, en jefes de eo cuelas filosdficss; y uno de ellos, Antistenes, fue un prolifico escritor. Ha sido corriente llamar a estos hhombres y a sus partidatios los “socritions meno res", A mi modo de ver, esta expresion, que relleja artificial de Ta biograliaalejan cada, Los oponentes rina, estd muy poco justif tmegdricos de Aristteles, en el siglo 1v, sus contemt hes el puichlo apodd lor “Cinieos", Tow moralisas hhedonistas de Cirene en el siglo 1, estaban alilia dos a Sdcrates a través de Euclides, Antistenes y Arvstipo, respectivamente. Pero no hay testimonio alguno de Ia existencia de una escuela cirenaica Alejandro; los le Arist6teles, de Didgenes y los otros excénitricos 4 quie antes de Ia época de los sucesores Imegiricos, violentos opositores fendian concepciones claramen el estrictlo monismo atribuide por todas nuestras autoridades 4 Euclides; aunque Didgenes y sus imi tadores profesaban gran veneracin # Antistenes, no resulta muy claro que ellos mismos lo consideraran su "fundador”. Y'Euclides, Aristipo, Antistenes ran todos ellos mis bien amigos y admiradores de ‘Socrates y no sus “discipulor”, Las doctrinas de Eu: clides eran herencia directa de los eléatas; de Aris: tipo se dice expresamente que no tenfa doctrina de ninguna clase; las paradojas por las cuales Anise nies es recordado principalmente, su negacién de la posbilidad de contradiecién, etc, no provienen de Séerates, sino de los “sfista”, Sdcrates, en todo 10 realmente importa, «vo silo un "sucesor Platén, NOTA BIBLIOGRAFICA Tulriyin (890) ¥ Protas tf Grech Pilorphy, ‘Thales 0 Plto (Ox Ts Phe sEutyphre”, “apotigy” and “to” of Plato (Ox Guthrie, Wo. C, The Greeh Philosopher, From Thales ‘ritote (Londres, 30) [Toad ep, La fsofon gre. pepe We Petia, Lat teeter de tect pre (ECE [e lor ditlogo de Piatiny de lon Rerverds de Jenafonte sr fe PatOn von tn de Fe Aare 7D, Crcts He'becho pocas referencias» 1s Heat det sgl, poet me parce que, pode mwa, gue en mayor Parte 'unt ines squivorads a decor tel eat plat. ‘len. Sin embargo, de en vans Meratrs, esomendaria eye i Pleat the othr Companions a vetion lngis, gracias a La traducriin de R. D. Hick, Diogenes Laer axpecto "erotica" de Socrates tal como lo describe Pati, Ri Tagerbog, Die pstontce Liebe (epg, el) ele {op Recomieno parcaaraente ol prince y mas exch sn A lo dur de Pon (arn ph INDICE DE NOMBRES Y OBRAS CITADOS Acamens, Boa sag Anais pein, ‘trode, 3 * an oe peel Aabiad’, a5. 97. 59 4 55 8 one As eigen a 968 fee ete et rp, i nate Toa, ne a "Ot 108, 109, 18 WSirlege Ceanly Greck Ph. Atlee, sb ‘Hit gig ek Hi MSE ai Sh oy Seat eee cn ™ re phe Go, GO geere, Clery HEM ls uk Cella, ct, Gs au e i Eee ea omni longi FR apy hn eas 8 oar uanio (Apotogie de Shera tas Bera veh Le Faun eBay 8, tn de Quo, 53; Memoria ante Reta a ree Lae ae peat nae 2 A wey recon Hen som 7 eee Paar ae oe Noheep “ INDICE GENERAL 1, Introduccién : U. La javentud de Sécrates HE, Ultimos altos ele Sécrates: eu proceso ys IV, El pensamiento de Sécrates 1, Eten 2. eorla “del. comocimiento’ yin cientitico Indice de nombres y obtes ctados ay

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