VISITA PASTORAL DEL OBISPO MARIANO

MARTÍ. PECADORES, PECADOS Y DELITOS

DE INCONTINENCIAS Y MALA VIDA
EN LOS LLANOS DE CARACAS
Algunos Aspectos Para Su Comprensión
Histórica e Historiográfica

Autor: Prof. Jorge N, Campos R

C.I.: 10506149
RESUMEN: En la historiografía colonial venezolana son señalados numerosos misioneros que
durante su accionar por el territorio se convirtieron en figuras claves del proceso fundacional de pueblos de
indios, pueblos de misión y de villas de españoles. Entre ellos queremos resaltar la incuestionable labor
fundadora de los misioneros capuchinos en los llanos de Caracas conformados por los actuales Estados:
Yaracuy, Lara, Cojedes, Portuguesa, parte de Apure y Barinas, todo el Estado Guárico y parte del
Estado Aragua. El estudio planteado tiene como finalidad aproximarnos a la comprensión de la figura de los
pecados sexuales, delitos de incontinencias y mala vida conocidos por Mariano Martí por vía de infidencias
y denuncias efectuadas por habitantes de los pueblos llaneros visitados, ampliamente reseñados en el libro
Personal que forma parte de su obra Documentos Relativos a su Visita Pastoral de la Diócesis de Caracas
1771-1784 donde señala todo un conjunto de impresiones en el orden: social, cultural, religioso, etc. Estas
impresiones del obispo Martí podrán ser observadas en cada una de las relaciones de Visita Pastoral
asentadas en los libros de Providencias Generales que reposan en los archivos parroquiales de las diferentes
localidades visitadas al igual que en el Archivo Arquidiocesano de Caracas. Se pretende con esta
aproximación sociohistórica dar continuidad a la línea de investigación Vida Cotidiana en los pueblos de
misión de los Llanos de Caracas.

Palabras Claves: Misionero, Pastoral, Incontinencia, Delito, Pecado.

I. Una Aproximación Historiográfica. A Manera de Introducción.

Cuando pretendemos abordar la vida y obra del Obispo Mariano Martí Estadella me es imposible olvidar
una de las observaciones de orden metodológico y criteriológico señalados por la Historiadora Angelina
Lemmo Brando quien de manera enfática señaló “…que no es posible comprender a cabalidad la obra de un


El autor es Prof. Especialista en Historia, egresado del Pedagógico de Maracay, realizó estudios de Postgrado en la Universidad
Nacional “Rómulo Gallegos” (UNERG-San Juan de Los Morros), donde obtuvo el título de Magíster Scientiarum en Historia
de Venezuela. Posee curso de Postgrado en la Maestría Enseñanza de la Historia, coordinado por la UPEL-Maracay. Cursó
estudios avanzados de postgrado a nivel de Diplomado 2007-2008 titulado “Bolívar y Martí, Raíces de Integración
Latinoamericana”, coordinado por el Centro de Estudios Martianos-Cuba, la Casa Nuestra América-Venezuela y la
Universidad Bolivariana de Venezuela. En la actualidad es candidato a DOCTOR EN HISTORIA por la Universidad Católica
Andrés Bello. Se desempeña como INVESTIGADOR del Centro de Estudios Históricos-Sociales del Llano Venezolano
(CEHISLLAVE), Institución en la cual es Miembro Directivo, ocupando el cargo de Coordinador de Proyectos de
Investigaciones desde el año 1999. En el ámbito educativo universitario es profesor Pregrado de la Escuela de Historia de la
UNERG-Calabozo y Postgrado en la Maestría: Historia de Venezuela coordinado por la Universidad Rómulo Gallegos.
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escritor del período conquista-colonia, o de cualquier otro que se desee estudiar, sin ubicarlo en su ámbito o
momento histórico…”1 en que se desarrolla. Por la sencilla razón que “…un fenómeno histórico nunca puede
ser explicado en su totalidad fuera del estudio de su momento”2 pues no es tan

Sólo (…) hacer la biografía del autor, lo cual ayuda, sin duda, a una mejor ubicación histórica del
personaje, sino de estudiar con toda la propiedad requerida, el momento histórico que le tocó
vivir, a fin de comprender mejor las influencias que recibiera y que, por lo general, se encuentra
en su obra3

Por ser allí donde podríamos entender el porqué de su accionar histórico, entendiéndose éste, como un
producto socio-histórico cultural representativo de un momento determinado de acuerdo al espacio en el cual
se desenvolvió. Será bajo esta concepción donde podríamos ubicar el pensamiento conservador-moralista del
Obispo Mariano Martí Estadella muy bien reflejado en sus producciones de corte historiográfico-literario
donde recoge una serie de impresiones en el orden: social, cultural, religioso, económico, costumbres,
valores morales, etc.., durante los 13 años de recorrido por la diócesis de Caracas que al ser estudiadas
metódicamente servirá de hilo conductor en la labor de la crítica historiográfica del investigador de uno de
los período-proceso históricos poco estudiados, como ha sido la Conducta Social o antisocial de la
población colonial venezolana, en caso particular vinculada a la Vida Cotidiana en los pueblos de misión de
los Llanos de Caracas.

La producción literaria-historiográfica del Obispo Mariano Martí expuesta en la reconocida obra intitulada
Documentos Relativos a su Visita Pastoral de la Diócesis de Caracas 1771-17844 forma parte representativa
del llamado “Ciclo de Naturalistas y Viajeros”5, delimitado temporalmente entre el siglo XVI y XIX.

Durante estos siglos el territorio venezolano sería visitado y recorrido por célebres hombres de ciencias
entre los cuales se destacan: Alejandro de Humboldt, Francisco Depons, etc., al igual que contaría con la
presencia relevante de misioneros y cronistas de Indias. Entre ellos podríamos mencionar ordenando
cronológicamente en siglos y por sus obras fundamentales a los siguientes: Siglo XVI: Fr. Pedro de Aguado,

1
Angelina Lemmo Brando; Historiografía Colonial Venezolana, 1983, p.86
2
Marc Bloch, Introducción a la Historia, 1988, pp. 31-32
3
Angelina Lemmo Brando, Ob. Cit., pp.86-87
4
Esta obra ha sido publicada y editada por la Academia Nacional de la Historia en 7 tomos distribuidos de la siguiente manera: Los
Tomos I y II corresponde al llamado Libro Personal, los Tomos III y IV (Inventarios), el Tomo V (Providencias) y los Tomos
VI y VII (Compendios).
5
Véase: Angelina Lemmo Brando “La teoría de los ciclos”, en Historiografía Colonial de Venezuela, 1983, pp. 164-218
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Juan de Castellanos, entre otros. Siglo XVII: Fr. Pedro Simón, Fr. Jacinto de Carvajal, P. Juan Martínez
Rubio, etc. Siglo XVIII: P. José Gumilla, José de Oviedo y Baños, Fr. Antonio Caulín, Obispo Mariano
Martí, entre otros, que se darían a la labor de recoger en sus obras (Crónicas o relaciones de viajes) algunos
señalamientos, muy descriptivos-narrativos de los diferentes poblados visitados y en algunos de los casos
fundados por ellos.

Estos “Naturalistas y Viajeros” en la mayoría de las veces “…no son historiadores quienes escriben, sino
religiosos obsesionados por la idea de la evangelización y, por consiguiente, seguros de obrar con justicia al
querer acabar con la llamada idolatría de los indígenas y así servir a Dios y al Rey…” 6. Serán en estas
producciones, con las cuales los investigadores contemporáneos obtendrán una visión muy general del
espacio del “Nuevo Mundo”. Por consiguiente “nuestra historiografía colonial tiene como base los relatos,
cartas, memoriales, descripciones, narraciones, biografías, crónicas, etc…, de los primeros tiempos…”7 del
período Prehispánico-colonial venezolano. Fuentes de innegable valor donde el investigador podrá captar las
“…transferencias de pensamiento entre generaciones muy alejadas…”8 entre sí. Por ello se requieren ser
sometidas previamente al análisis crítico historiográfico por el investigador de la historia-ciencia quien
guiado por los principios fundamentales del método histórico podrá aproximarse a la comprensión del
proceso histórico en un tiempo de larga, mediana o corta duración.

En razón del hecho histórico-problema sujeto a investigación, debemos acotar, que “al intentar estudiar la
historia del comportamiento sexual, los historiadores deben admitir que cualquier cantidad de casos
registrados representan sólo una pequeña parte de una realidad mayor”9 que dinamiza y caracteriza la
mentalidad sociocultural de la época en la cual se impone por la vía de mecanismos coercitivos una serie de
medidas implantadas, tanto por el Estado en vinculación con el sistema religioso en pro de lograr implantar
un conjunto de valores y normas sociales.

Bajo estos señalamientos compartimos plenamente el criterio del Dr. Germán Carrera Damas, expuesto en
la obra intitulada Aviso a los Historiadores Críticos…, donde señala que en “la historiografía Venezolana
abunda en referencias estadísticas que revelan desconocimiento de su metodología, si es que no una posición

6
Angelina Lemmo Brando, Historiografía Colonial Venezolana, 1983, p. 151
7
Ibídem.., p.178
8
Marc Bloch, Ob. Cit.., p. 36
9
La Sexualidad en el México Colonial” en sexualidad y Matrimonio en la América Hispana…, p. 64
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pura y simplemente acrítica ante las mismas”10, donde “la mayoría de los trabajos sobre historiografía
colonial de Venezuela no son sistemáticos; de allí su carácter biográfico-descriptivo y laudatorio más que
analítico”11

II. Ubicación de Mariano Martí12 en el Contexto Histórico del Momento.

El accionar socio histórico, formativo, religioso-episcopal, cultural, etc., del obispo Mariano Martí se
desarrolla en el espacio geográfico correspondiente a la Diócesis de Caracas durante los años finales del siglo
XVIII enmarcado

…en el proceso de formación del Estado moderno de Venezuela, con la creación de la

Intendencia de Ejército y Real Hacienda (1776), la autoridad conferida al capitán general de
Caracas sobre las demás provincias (1777) y el establecimiento de la Real Audiencia (1786-1787),
recta final hacia la independencia13

del territorio.

Durante este proceso de formación y transformación del Estado se generan cambios trascendentales en el
“viejo mundo” que inciden directa e indirectamente en el llamado “nuevo mundo” 14. Estos cambios se
podrían visualizar para el caso histórico-concreto en el espacio geohistórico del territorio venezolano
“…tanto para la antigua ‘Provincia de Caracas’ como las restantes provincias que componen la Venezuela de
hoy…”15. Cambios que permitirían que el territorio venezolano alcance una “…verdadera importancia entre
las posesiones americanas de España”16. Por supuesto, todos estos cambios al igual que las reacciones que
generaron en el territorio serían percibidos por los hombres del siglo XVIII como lo demuestra la gran
cantidad de informes y documentos que dejaron sobre los mismos, lo que conllevaría a fomentar una
producción historiográfica literaria del período colonial venezolano caracterizada por relatos descriptivos de

10
Germán Carrera Damas, Aviso a los Historiadores Críticos…, 1995, p. 24
11
Angelina Lemmo Brando, Ob. Cit., p. 21
12
Mariano Martí Estalleda nació en la localidad de Bráfim (España) el 24 de diciembre de 1721 y muere en Caracas el 20 de
febrero de 1792
13
Francisco Tort Mitjans, “Mariano Martí” en Diccionario de Historia de Venezuela, Tomo III, Caracas, 2010, p.67
14
El llamado “nuevo mundo” es la resultante del proceso de la Fase de estructuración de los núcleos primeros y primarios de
implantación…” (Manuel Beroes, “Estructuración de los Núcleos Primeros y Primarios de Implantación” en Formación
Histórico Social de América Latina, Caracas, 2008, p.37) donde se “…expresa la dinámica del relacionamiento inicial
hispanoportugués con América” (Ídem)
15
Lino Gómez Canedo, “Estudio Preliminar” en Documentos Relativos a su Visita Pastoral…, de Mariano Martí, Caracas, 1998;
p. XII
16
Ídem
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los espacios incorporados a la corona española, quienes en muchos casos fueron escritos por los propios
exploradores (civiles, militares y religiosos) con lo que se desarrollaría el género de la crónica.

Por razones de tiempo tan sólo trataremos en este ensayo de aproximación e interpretación histórica
acercarnos (a grosso modo) a la comprensión de las ideas y mentalidades de los hombres y mujeres en sus
diferentes estratos sociales que de alguna forma u otra por su “conducta antisocial” que contravenía los
valores de la Sociedad Colonial fueron llamados y calificados taxativamente “pecadores” lo que implica
acercarse a la figura de los “pecados sexuales” y “delitos de incontinencias” cometidos como parte de su
“mala vida”. Estas conductas serían conocidas por Mariano Martí por vía de infidencias y denuncias
efectuadas por habitantes de los pueblos llaneros visitados, ampliamente reseñados en el libro Personal,
tomo I y II que forma parte de su obra Documentos Relativos a su Visita Pastoral de la Diócesis de Caracas
1771-1784.

El obispo Mariano Martí a pesar de ser catalogado en razón de su exigencia pastoral como un prelado muy
conflictivo por las prolongadas desavenencias sostenidas con el Cabildo Eclesiástico y con las autoridades de
la Universidad de Caracas desde el mismo momento en que asume la diócesis de Venezuela no se puede
negar –a pesar de ello- que “fue el más diligente de los prelados que ejercieron en los tiempos de la
dominación hispana y celoso cumplidor de las disposiciones canónicas, defensor a ultranza de la moral y las
buenas costumbres…”17 En su accionar pretendía instaurar un nuevo clima ético en su diócesis al tener la
firme convicción que “…el Nuevo Mundo carecía de una moralidad rigurosa debido al gran número de
pueblos marginalmente civilizados y convertidos al cristianismo”18.

Estas acciones del obispo Mariano Martí, - nada fácil de alcanzar- podrán ser observadas en cada una de
las relaciones de Visita Pastoral que dejó asentadas en los libros de Providencias Generales que reposan -
algunos de ellos- en los archivos parroquiales de las diferentes localidades visitadas en la Diócesis de
Caracas. Al igual que en el Archivo Arquidiocesano de Caracas se conservan todos los libros hoy conocidos
a excepción del libro denominado Relación y Testimonio19. También pueden ser consultadas en el referido
archivo las Secciones Parroquiales y las carpetas de los Documentos Episcopales. De igual manera en razón

17
Oldman Botello, Orígenes de Nuestra…, 1998, p.22
18
Kathy Waldron, “Los Pecadores y el Obispo en la Venezuela Colonial: La Visita del Obispo Mariano Martí, 17711784” en
Sexualidad y Matrimonio en la América Hispánica…, p. 173
19
Comenta Lino Gómez Canedo en el “Estudio Preliminar” de la obra Documentos Relativos a su Visita…, que “…el último en
utilizarlos parece que fue Parra León” (p. XXXII)
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de su importancia la Academia Nacional de la Historia publicó en 7 Tomos con el título Documentos
Relativos a su Visita Pastoral de la Diócesis de Caracas 1771-1784 donde condensa 12 años y medios de
incansable labor episcopal de Mariano Martí. Los cuales son de obligada consulta para quienes emprendan
investigaciones referentes al proceso fundacional de los pueblos ubicados en la misión de los Llanos.

En razón de ello Fernando Orellano no duda en afirmar y resaltar la importancia que tiene para los
estudios históricos de la Venezuela Colonial la relación dejada por Mariano Martí durante la visita pastoral a
unas 350 parroquias y doctrinas de la diócesis al señalar que

es una de las fuentes más completas para el conocimiento del estado del país en el último tercio
del siglo XVIII, ya que giró su visita acompañado de un equipo de personas doctas encargadas de
tomar minuciosas notas estadísticas, geográficas y etnográficas de los diversos poblados20

Las cuales por su importancia al ubicarlas en el contexto historiográfico del momento permiten deducir
que sirvieron de antesala a uno de los hombres representativos del “Ciclo de Naturalistas y Viajeros” como
fue al sabio alemán Alejandro Von Humboldt quien recorrería parte del territorio a partir del año 1800.

III. Visita Pastoral21 del Obispo Mariano Martí.

Durante el largo recorrido por la Diócesis de Caracas el Obispo Mariano Martí visitó 350 pueblos y fundó
52 nuevos pueblos o parroquias. La Visita Pastoral era uno de los deberes a cumplir por los Arzobispos,
Obispos y Visitadores eclesiásticos impuestos por la legislación eclesiástica dadas por el Concilio de Trento
y establecida para los obispos hispanoamericanos por reales cédulas en la Recopilación de Leyes de los
Reinos de las Indias, promulgadas en 1680, en la cual se establece

Encargamos A los Prelados de nuestras Indias, que personalmente visiten todas sus Diocesis y
reconozcan el estado de las Doctrinas, predicacion del Santo evangelio y conversión de las almas,
y administren el Santo Sacramento de la Confirmacion, procurando informarse de todo tan
particularmente, como encargan los Sagrados Canones y Concilios y nuestras Leyes Reales… 22

20
Fernando Orellano; Una Introducción a la Venezuela Prehispánica…, Caracas; 1987, pp.195-196
21
La visita pastoral es definida como “…una especie de inspección de carácter eclesiástico que abarcaba una cuantas cosas
esenciales y otras más o menos opcionales, dependiente de la meticulosidad y celo del visitador” (Lino Gómez Canedo, “Estudio
Preliminar” en Documentos Relativos a su Visita…, p. XL)
22
“De los Arzobispos y Obispos y Visitadores Ecclesiasticos” en Recopilación de Leyes de Indias., Libro I, Título VII, Ley
XXIIII, p. 9. (Nota Aclaratoria: La cita se transcribe tal cual en razón del Castellano de la época)
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 El obispo Mariano Martí dando cumplimiento a la referida Ley al tomar posesión de la Diócesis caraqueña
en agosto de 1770 comienza a planificar meticulosamente los pormenores del viaje y las visitas sin obviar
detalles, lo que lo lleva a establecer los criterios para elegir los auxiliares que lo acompañaran durante el
recorrido al igual que establecer la ruta a seguir que le permitiría como “pastor” espiritual conocer
personalmente las condiciones de vida, costumbres y valores morales de su “rebaño” diseminado por todo lo
largo y ancho de los Llanos de Caracas.
Esto lo llevaría a iniciar su visita pastoral a finales de 1771 y terminarla en 1784. Este tiempo de un poco
más de 12 años de recorrido por la Venezuela de la segunda mitad del siglo XVIII, va a permitir que el
Obispo Mariano Martí pueda presentar en el libro de Providencias y en los 2 tomos de los Libros
Personales, “…la descripción minuciosa de los pecados menores, los pleitos de poca importancia y las
conductas escandalosas y los delitos más serios cometidos por los habitantes de los lugares visitados”23 al
igual que ofrece la descripción muy detallada del paisaje, los topónimos de los lugares y sitios por donde
pasa, los cambios de los periodos climáticos del año, las clases sociales, moral y buenas costumbres,
prácticas culturales y religiosa, escándalos públicos, casos de vicios y delitos sexuales, conductas de los
sacerdotes así como el tipo de construcción y el estado y la dotación de las iglesias, capillas, oratorios y
altares, entre otros aspectos.
Nos comenta Lucas Guillermo Castillo Lara que “el Obispo Mariano Martí en su incansable caminar
pastoral por todas esas ciudades y pueblos de tierra adentro, llegaba a lomo de buena mula, tal como llegó a
Barbacoas de los Llanos un 5 de febrero de 1783”24 proveniente del pueblo de El Sombrero, acompañado por
una comitiva, “…a la cual se había unido el Cura y el Teniente Justicia de este pueblo Don Manuel
Hernández, que era también Corregidor de Barbacoas”25.
Los pormenores del viaje son reseñados por el Obispo Mariano Martí, en el Libro Personal, Tomo II26 .
De igual manera una vez ya en el poblado y recibidos los honores respectivos por parte de la población y
del cura doctrinero Miguel Antonio Barrera de quien señala que “es de buenas costumbres, cumple con su

23
Kathy Waldron, “Los Pecadores y el Obispo en la Venezuela Colonial: La Visita del Obispo Mariano Martí, 17711784” en
Sexualidad y Matrimonio en la América Hispánica…, p. 174
24
Lucas Guillermo Castillo Lara; Barbacoas de los Llanos. Historias del Tiempo Viejo, Maracay, 2000, p.75
25
Ídem
26
Para una mejor y mayor visión de la Visita Pastoral del Obispo Mariano Martí a Barbacoas Véase “Barbacoas” en Documentos
Relativos a su Visita Pastoral de la Diócesis de Caracas…, 1998, pp. 449-454
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obligación, nada se ha oydo27 contra su conducta, administra los Sacramentos, es estimado de todos, no tiene
afecto a las riquezas…”28 daría cumplimiento a lo estipulado en la legislación eclesiástica.
El Obispo Mariano Martí permaneció 4 días en el poblado. Tiempo suficiente para que “…con sentido
escudriñador pasa revista a la situación espiritual y material del pueblo y sus habitantes”29.
En el aspecto espiritual señala lo siguiente:
1. “Esta Iglesia es baxo la invocación de la Madre de Dios de la Concepción”30
2. “En quanto al méthodo de enseñar la Doctrina christiana se observa acá que al son de campana
se juntan los muchachos al nacer el sol, y a pelotones resan las oraciones y parte del
Catecismo…”31
3. Entre otros.

IV. Pecados, Pecadores, Delitos Sexuales y Penalización en la Venezuela del Siglo XVIII.

La Sociedad Colonial venezolana en razón de su muy compleja composición, vendría a estar caracterizada
por una alta carga de violencia, que sería el reflejo directo de las contradicciones de clases representada tanto
en la esfera sociopolítica al igual que en el ámbito religioso. Estas contradicciones, calificadas como
Conducta Antisocial serían atacadas en cooperación mutua entre el Estado y la Iglesia. Lo que permitió en su
primera fase la implantación cultural y luego en una segunda fase el replanteamiento de la cultura europea en
el Nuevo Continente. Tanto el Estado como la Iglesia compartían la responsabilidad de preservar el debido
orden y control social, por ello, debían normar la forma de actuar de los hombre en la tierra. “De este modo
toda acción que infringiera las normas del equilibrio social o contraviniera la armonía de la institución
familiar, era, en principio, un ataque a la persona del Rey”32. Es por ello, que “…todo delito en esencia debía
ser considerado ‘crimen majestatis’”33

Es de acotar que durante el sometimiento crítico-historiográfico del Libro Personal, tomo I y II del obispo
Mariano Martí, se pudo observar que en todo el territorio de la Diócesis de Caracas, el principal delito

27
Nota Aclaratoria: La cita se transcribe tal cual en razón del Castellano de la época.
28
Mariano Martí, Documentos Relativos a su Visita Pastoral…, Tomo II (Libro Personal), 1998, p. 450
29
Lucas Guillermo Castillo Lara; Ob. Cit.., p. 76
30
Mariano Martí, Ob. Cit.., p. 449
31
Ibídem., p.453
32
Juan Carlos Reyes, “Delitos Sexuales y Penalización en la Venezuela del Siglo XVIII” en Suplemento Cultural de Últimas
Noticias, Caracas, 1994, p.4
33
Ídem
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cometido por la población que más se relaciona o señala está determinado con el adjetivo de “mala vida”.
Mariano Martí, al aplicar una “…táctica única: invitar a los habitantes de cada pueblo visitado a hablarle en
privado de sus pecados, así como de los vecinos”34 logró ubicar un total de 728 pecados, de los cuales 525
representan el 72,11% son referentes a “mala vida”, un número considerablemente alto, pero que refleja las
características sociofamiliares y la conducta sexual del momento.
El pecado de mala vida sería cometido por todas aquellas personas que mantenían “tratos ilícitos”,
“cometen torpezas con mujeres”, “consienten maldades”, “han tenido hijos ilegítimos”, “viven de manera
escandalosa”, “tienen concubinas”, entre otros. En razón de ello, es necesario, para comprenderla, desde el
punto de vista sociológico, antropológico e histórico introducirse en los cuadros de vida y costumbres, de la
mentalidad de la época.

En el caso puntual de la institución eclesiástica, esta logra establecer y ordenar a través de sus escritos las
ideas de cómo debería funcionar el mundo, y a su vez el cómo normar el comportamiento de los hombres,
sujetos y a merced de cometer alguna acción que esté en contraposición a los valores morales y buenas
costumbres establecidas en la sociedad de la época. Será bajo la luz de este argumento que justifica el porqué
de la visita pastoral del obispo Mariano Martí quien observó una serie de pecados considerados delitos
cometidos por la feligresía. EL obispo vigilará, controlará y supervisará de qué modo sus fieles están
comprometidos con la suprema obligación de salvación y preservación del Estado por ser Dios una de sus
razones. Aplicará de manera rígida, en algunos casos las sanciones correspondientes y en otros será muy
cauteloso, para no someter al escarnio público la situación.

Del libro Personal se han tomado las siguientes sanciones aplicadas a manera de solución. Estas van
desde la advertencia, la obligación de no tratarse más, la expulsión de sus casas o de la localidad, el
amonestamiento verbal, prohibir la comunicación entre las partes, el traslado o venta de los esclavos, el
destierro, el encierro en un convento, la cárcel (en cuyo caso se pide la intervención de la autoridad civil),
reclusión en casa especial decente y segura, obligación de vivir con sus legítimos cónyuges, obligación de
contraer nupcias, reparación patrimonial, cumplir la promesa de matrimonio, obligación de casarse con
otra mujer, trabajos forzados, otorgamiento de dispensa (en el caso, por ejemplo, de parientes en mal vivir),
grillos en cárcel pública, apresamiento, despido del trabajo, ejercicios espirituales, como sucedáneo para la
corrección de la situación infringida.

34
Kathy Waldron, Ob. Cit.., p. 175
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 En razón de ello, consideramos necesario formular la siguiente interrogante: ¿En qué consiste el pecado o
delito? En respuesta a esta interrogante el pecado es considerado bajo los preceptos cristianos como toda
acción tangible o intangible que suele cometerse y transgredir las normas cristianas al igual que el
incumplimiento de los mandamientos de la Ley de Dios.

En toda esta lucha espiritual y moral por mantener el orden, el control y las buenas costumbres en la
sociedad colonial venezolana más de 1500 individuos resultaron acusados por cometer alguna transgresión
sexual. De estas acusaciones el 10% son de algunos prelados, tal es el caso de Don Carlos de Alvarado quien
se ordenó sacerdote el día 28 de mayo de 1774 en Maracaybo, a título de Capellanía. Referente a la conducta
de Alvarado, se le señaló a Mariano Martí lo siguiente:

El genio de este hombre es muy altanero, habla desenfrenadamente contra todos, y ni ahún tiene
respeto a sus hermanos ni a su misma madre. Por las tardes sale a passeo a caballo y se apea en
casa de Joseph Francisco Vasques, mulato, que tiene dos o tres hijas a lo último de esta ciudad,
azia la Vega. Apenas dize Missa, y lo más que haze, es dezirla solamente en los días de fiesta, y se
duda si reza el Oficio divino35

La denuncia es admitida con toda naturalidad por Mariano Martí y están expresadas en los referidos
libros. El obispo es muy cuidadoso al preservar la identidad del denunciante. Veamos a manera de
ejemplo la siguiente denuncia tomada por Martí, en la ciudad de Barquisimeto

Don Joseph Antonio Alpisar, escrivano, viudo, tiene tres hijas y dos hijos (…) vino de Caracas.
Vive mal con Nicolasa Maseda, blanca, soltera de edad de unos cuarenta años, y todas las noches
va allí y hasta por la madrugada no buelve este escribano a su casa, y esto lo podrán declarar sus
esclavos Vicente y Joaquina, según así se me ha denunciado36

Toda la feligresía está obligada por el edicto general de visita a denunciar los casos conocidos incluso a
servir de testigos en ellos, así el acusado tenga algún vínculo con el demandado. En el referido edicto general
de visita se establece

…que todas y cada una de las personas de cualquier estado, calidad y condición que fuere, que
supiere o hubiere oído de cualquier pecado público y de otro digno de corrección en cualquier
manera, lo manifestare ante Nos (sic) dentro de dicho término37

35
Mariano Martí, Documentos Relativos a su Visita Pastoral…, Tomo II (Libro Personal), 1998, p. 79
36
Ibídem..., p. 72. Las cursivas son nuestras
37
Mariano Martí, Documentos Relativos a su Visita Pastoral…, Tomo V (Providencias), 1998, p. 80
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 Las diferentes denuncias atendidas por Martí, son relacionadas bajo un procedimiento técnico-sistemático
que las caracteriza. En la toma de la denuncia, se reseña la identificación de la persona, su raza, su
ocupación, el pecado o falta, estado civil y la recomendación o sanción del Obispo para subsanar la situación.

El pecado de los vicios y la embriaguez, es otro de los aspectos reseñados en el inventario espiritual
descrito en el Libro Personal. A la población indígena, de origen güire, de la Misión de la Santísima
Trinidad de Marchena, “el vicio predominante (…) es el de la embriaguez con guarapo, que se hace de
papelón (…). Esta embriaguez proviene de haver acá una pulpería (…) a una esquina de la plaza, que es de
don Joseph Gavaldon, (…) Teniente de Governador de Calaboso…”38

En el orden espiritual-religioso el pecado de las malas costumbres en algunos casos se llegó a cometer
durante la celebración de Semana Santa por parte de vecinos, quizás molestos o practicantes de otra religión
al lazar objetos a la feligresía, tal como ocurrió en la Villa de San Jayme, donde “…hay una mala costumbre
de que a los que concurren a las processiones (…) les tiran virates, que son como unas pelotas, terrones y
otras cosas…” El Obispo Mariano Martí en razón de tal vergonzoso accionar que atacaba directamente a la
religión católica estableció por decreto la sanción o pena de excomunión a ser aplicada a quien se logre
ubicar y detener infraganti.

A parte de los Libros Personales, y el de Providencias publicados por la ANH también se tuvo acceso al
libro de Providencias Generales (1772-1832) que reposa en el Archivo Parroquial de Barbacoas (APB). Al
ser revisado se pudo ubicar un decreto firmado por el Obispo Mariano Martí, en el cual realiza un conjunto
de señalamientos que ha manera de decreto pastoral deja para ser cumplido por los habitantes del poblado y
por el cura doctrinero Miguel Antonio Barreras. Al respecto a manera de explicación Mariano Martí señala
que
…decreta lo más conveniente para el buen régimen, y gobierno (…) culto de Dios Nuestro Señor,
de la Sagrada Imagen veneración de los templos y reformación de los gobiernos y constumbre de
nuestro y amados fieles vecinos, Población, Cantones y habitantes en dicha Parroquia, hemos
determinado (…) para dar consentimiento a esta nuestra indispensable obligación, ordenar (…)
que se cumplan las contribuciones de este obispado…39

38
Mariano Martí, Documentos Relativos a su Visita Pastoral…, Tomo I (Libro Personal), 1998, p. 154
39
“Decretos de la Visita Pastoral del Obispo Mariano Martí” en Libro de Providencias Generales (1772-1832), en Archivo
Parroquial de Barbacoas (APB), 1783, fol. 4
Página 11 de 14
 De estos decretos en el orden de la Moral y las Buenas Costumbres con el objeto de tacar y evitar el
pecado en especial de la carne, Mariano Martí, de manera tajante, establece:
Cortar la libertad y licencia con que los padres permiten tratarse los hijos e hijas ya adultos de
varias familias con los hijos e hijas de otra persuadidas de que el parentesco les da libertad para
su trata licencioso (…) pongan el mayor cuidado y esmero en prohibir semejantes
comunicaciones y que al mismo fin de evitar pecados, no consientan que sus hijos e hijas (…)
duerma en una misma pieza y mucho menos en una propia cama 40

Podemos observar que las providencias se inspiran en la necesidad de una separación de los sexos de
habitación, comunicación y actividades, aunque se trate de parientes. Con estas medidas tomadas por el
Obispo Mariano Martí, en razón del escándalo suscitado en la población de Barbacoas que atentaba contra la
conducta ciudadana la moral y las buenas costumbres podríamos inferir que tal vez estemos ante posibles
hechos de uniones sexuales entre hermanos o parientes. Siendo este pecado de la carne otro de los que en
gran cantidad podemos ubicar en la relación de los libros personales.

A Manera de Conclusión

Tenemos una aproximación al mundo del pecado en la Diócesis de Caracas a través de la prolija obra del
obispo Mariano Martí. Una obra de gran extensión y alcance que permite aproximarnos al imaginario social,
cultual, familiar y sexual, entre otros de la población de toda la Diócesis. La visita del obispo Martí entre los
años 1771-1784 es además un documento único para conocer la realidad de lo que era Venezuela en ese
tiempo. Su viaje por el país constituye finalmente un periplo descubridor de las variadísimas realidades de la
Diócesis de Caracas enclavada en lo que más tarde se convertiría en la Capitanía General de Venezuela.
Estos tomos son el más vivo retrato de un territorio y se erigen como el incomparable aporte que el Obispo
deja para la posteridad.

VI.- FUENTES CONSULTADAS

A.- FUENTES PRIMARIAS

1.- Documentación de Archivo

Archivo Parroquial de Barbacoas (APB)

40
Ídem
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“Decretos de la Visita Pastoral del Obispo Mariano Martí” en Libro de Providencias Generales (1772-1832),
en Archivo Parroquial de Barbacoas (APB), Barbacoas-Aragua, 1783, fols. 4-13

2.- Fuentes Impresa

Documentos Oficiales

“De los Arzobispos y Obispos y Visitadores Ecclesiasticos” en Recopilación de Leyes de Indias., Libro I,
Título VII, Ley XXIIII, p. 9.

B.- FUENTES SECUNDARIAS

1.- Libros

BEROES, Manuel “Estructuración de los Núcleos Primeros y Primarios de Implantación” en Formación

Histórico Social de América Latina, Caracas, 2008, pp.35-117

BLOCH, Marc (1988) Introducción a la Historia. (14ta. Edic) México: Fondo de Cultura Económica,
Brevario, Nº 64.

BOTELLO, Oldman (1988) Orígenes de Nuestra Señora del Rosario de Taguay (2da edic). Villa de Cura-
Aragua. Editorial Miranda

CAMPOS R, Jorge N (2004) Aproximación a la Comprensión del Discurso Histórico de Federico Brito
Figueroa…”, Trabajo de Grado de Maestría, UNERG-San Juan de los Morros-Guárico

CARRERA DAMAS, Germán (1995) Aviso a los Historiadores Críticos: ...”tantos peligros como corre la
verdad en manos del historiador”... Andrés Bello. Caracas: Ediciones Ge, C.A.

CASTILLO LARA, Lucas Guillermo (2000) Barbacoas de los Llanos. Historias del Tiempo Viejo.
Maracay. Editorial Miranda. Publicaciones de la Gobernación del Estado Aragua

DE CARROCERA, Buenaventura (1968) Misión de los Capuchinos en Cumaná, Tomo I, Caracas, BANH,
Nº 88

DE CARROCERA, Buenaventura (1972) Misión de los Capuchinos en los Llanos de Caracas, Tomo I, Caracas, BANH, Nº 111

GÓMEZ CANEDO, Lino “Estudio Preliminar” en Documentos Relativos a su Visita Pastoral de la

Diócesis de Caracas (1771-1774) de Mariano Martí, Caracas, Biblioteca de la Academia Nacional de la
Historia, 1998; pp. XI-CXI

LEMMO BRANDO, Angelina (1983) Historiografía Colonial Venezolana, (2daedic) Caracas, Fondo
Editorial de Humanidades y Educación

MARTÍ, Mariano (1998) Documentos Relativos a su Visita Pastoral de la Diócesis de Caracas

(1771.1784), Tomos I- II (3era edic) Caracas, Biblioteca de la Academia Nacional de la Historia

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ORELLANO, Fernando (1987) Una Introducción a la Venezuela Prehispánica. Culturas de las Naciones
Indígenas Venezolanas. Caracas; Ediciones de la UCAB

TORT MITJANS, Francisco “Mariano Martí” en Diccionario de Historia de Venezuela, Tomo III, (2da
edic) Caracas, Fundación Empresa Polar, 2010, pp.65-67

En Barbacoas de los llanos; 17 de noviembre de 2019

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