ravillosa granja ] ‘ p
Broom eRe Meme eli}
Sid Fleischman de McBroom
Naci6 en Brookln, Nuova York, pero
desde hace mucho tiempo vive on
Calfomia con su mujer y sus tres hijos.
Ha escrito varias novelas para adultos
con enorme éxito y muches de los
erscnajes do sus bros para ninios se
hhan hecho farosos y han sido Hevados
alcine
Fleischman fue ganador, en 1977, dal
Premio Mark Twain, que se otorga al
mejor escrtor de humor.
Josh McBroom, su esposa Melisa y sus
‘once pequetios peliojos:
Wilhestercesterpeterpolifimtonmnary
laryylapequenaciarinaa, viven juntos en
‘una maravilosa granja. Ali pasan
‘emocionantes y extratios suoes08. Y es
{que ni el propio McBroom sabe lo quo la
maravilosa ganja le puede deparar en el
futur.
AL GeeksMcBroom cuenta la verdadWilljthescrchocerpercpolfxinonnaty
laryylapequctiaclerind
Fra verano y’ los drboles que bor
aban el caring estaban llenos de pat de
gatos, Habiamosllegado ya hasta el Esta
do de Towa cuando mi esposa Meliss hizo
tun descubrimiento sorprendence. Levi
snos can nosotros dave nis: sobyrabs un
Acababa de conta
Frené bruscamente ylevanté
una nube de polve
{Will ilthesterchesterpeter:
pellsimtommarylarryylapequeiactarindal
gyité— fn fila!
Los nifios fron saliendo 3 empt
jones del auro, Coté narices y habia dove
Comé de nuevo, Fini dewconcertante por
Gute todas lay caras resultaban conor das
Yolvi a cantar, pore esta ver pill’ a Larry
coldndose par detris, Hstabut hae
alo que
contdramos su mari, dos veces, y asi se
selard el misterio, (EL muy pillo! Pero: nos
hizw gracta, y apravechamas. pas estirar
las piernas,
Justo en ese momento. un hombre
aco y patilargo se nos acered andando
pausiclamente por of camino, Estaba can
Tacucliento que esioy’segitio de que podia
escumderse sletris del palo ile una escoha,
con orejasy todo, Llevaba un cule post
yo alto y eso, un alfiler de diamance
prondide a la corbatay sorabrere de pajs
Qué se le ha perdido, ‘vecino?
pregunt, escupiencdo las pepas de una
manaans verde que se estaba comiendo,Ninla—chje nos ditigimos
umbo al Oeste, seot, Hemos abandona-
sna: mitad era pura roca y
by outa rita truneas secos de deboles. La
agente dice que en el Oasic hay buena the
alo muesir g
ray que el sol brill: en invierno,
EL campesino fruncié el ceno,
Para vietras de cultivo no hay
ids coma fowa —afirins,
Quizé —-asenti—, Pero ando
eseaso de fonds. A no ser que regalen tie
18 en [owa seguizemios ol cumbo,
El hombre se #9sc6 la barbill,
Mire, tengo: mus tierra de la que
pucdo labrar. Pareven ustedes buena gent
M
ustaria teneifoy de yevinos. Les dejaré
a hectéreas bien baraeas. Ni una
picafa i rastro de troncos vecos de drboles
en todo el terreno, Hagame una oferta
May agnidecido, senor —Le son-
rei, pero me temo que se reir de mi si le
afrecien tnd lo que evo en ni blltera
«
co lows? pregunes. eb
campesino,
Praciamente diez délares.
iNendido! — exclamé.
Bueno, casi me atraganro de sis
to, Pensé que estarfa bromezndo, pero mis
a pul se puso a
rip que w
tun teato en la solapa de un sobre vei.
Vecinno, mi nombre es Hecor
Jones —deckro—. Pero puede tlan
Heck, come todo el mundo,
aPucsle haber en el mundo un
hombre mis amable y generoso? Firmé el
‘aco con una firma adornada y abst el
roche de-mi billetera entusiasmado. Sx
ligron eres polillas Blancas como la Teche
Habion
de div dares cate que silimos de Con.
necticut, pero quedabs alin suficiente pa
ra-comprar fr granja, ;Y sin eastro de pie
das ni tronces secos de drbol!
Me. Heck Jones. salts sobre cl
‘esribo y noe guid camino arriba un parde
ado aimentindose del billere
Lilémetros. Mis ninos intentaron distract
fe durante el camino. Will movi6 kas on
jay [il se paso turnin, Chester arr la
tnariz. come un conejo, pera comprendt
que-e St Jones no estaba acostumbeado a
Tos tinus. Hester bat Ios braros como un.
paiaro, Perer silbé por entre los dienes16
delanteros que
hacer morisquetas en la pa
pero el St. Heck Jones
spun de ellos
Finalmente, levanté su enorme
bbrazo y sefialé en la diseancia
Ahi esta sui propiedad, vecino
faltaban y Tom se puso a
de atrs del
no hizo easo
—dijo,
Debian habemos visto saltar del
auto! Contemplamos encantades nuestra
‘nueva granja. Fra amplia y soleada, con
tun roble sobre una suave Loma. Claro que
tenfa un defecto, Del lado del camino se
extendia una laguna de media hectérea, de
aspecto pantanoso, En in sitio asi se podia
peider una vaca, pero aguello era una gan-
si de eso no habia duda alguna
Mams —te dije a mi querida
Melissa. 2Ves ese magnifico foble sobre
a Joma? Ahi es donde construiremos
Nada de eo —dijo Mr, Heck
Jones—, Hse toble no esti en su propie-
dd. Lo uiye 6s tid lo que ven bajo agua
Ni rastro de toes ni roncos secos de érbol,
tal como les dije
Pensé que nos escata juginde una
pequena broma, aunque no habia ni la
mas minima sonrisa
ero, jsefior! —dije— {Used
afirind muy claramente que hi granja tenia
sarenta hecrreast
Exactamene
Pues ss laguna pantanoss ape
ras si eubte media hectitea!
Se equivoca usted —liio—
Hay exactamente cuatenta hee
inna de Ia otea, como n pastel de ho
jaldre. Yo munca dije que su
ra toda sobre la superficie. Tiene coarenta
hectireas en profindidad. St. Mc Rroom,
Lea el conerat.
Lefel congrato. xa verdad
fii, gif —resophi- Bue
nna la broma que Le hice ah, Mciioomn!
Buenos dias, vecino,
Se largé a hureadills,riéndoss pa
ra sus’adentros, hasta Ih
ja este
Pronto me enceré de que el Ss. Heck stern
pre se tea para suis alentton, La gente me
dijo. que cuando cole
ha sat abvigo vse
ect en fa cama, toda est risa dedenun le18
sally Inca fuera y leven on vela ala la
roche, Peto esa uo es verdad,
Dentro de un momento kes conta
o de las sandias,
Pues bien, ahi estsbamos plantados
miranda nuestrs granja de media hee
aque no servia puis nada mas gy
houllimos en ella en un dia de calor come.
ee. Y ademis hick mis calor que nunca,
Se batié el record de calor, segin supe mis
tarde, Aquel fue el dia en que, ces mints
anes de lis doce, los eimpos de m
Pstado de Iowa explotaron de cabit, Eso
es historia, Seguro que fo han leida ya cm al-
‘guna parte, Hay fotos que lo prucban,
Me ding hacia nuestros sion.
i Will jdhescerchesrerpeter
poliimsanaenaty lary
—tlije—- Siempre hay un lado bueinw en
tod
apeyucniacharinle
Js Las cosas, Fst haguna que hems
comprado esti un poco Mena de barra, po
foes ages jal agus patos!
2 idea fue aogidi fivorablemente
yer un abrir y certar de ojs estamos oon
fos eres de bate puesios, Di he sofa y em
Ppetanos bi cartena, Fn exe instante nes eas
ais
‘encima el rifiga de sequia que atesszanien
sobre mesa hextirea de irra seca, Li
se habia evaporado. Fue muy soxprendente
os nifios habian saleado de cabe-
2a y no se vefa de ellos mas que las picrnas
lando patadas ea el aite, Los euve que
arrancar de la tierra como ar
‘Algunas de las nifias etaban aii sa
dose las narices. Por supuesto que fre
amarga decepcién ver desvanecerse ante
nuestros ojos aquella piscina
oo,
ie
NE
shotan
Pero en el momento en que apre
sé un tertdn entte los ded, a mit coreén
de granjero se le escapé un latido. Aquel
Fondo de estanque era suave y rico como lia
sedla negra.
{Mi querida Melissal —grité—.
‘en a ver. Esta tierra estan buena que de
berfa guardarse en un bance,
‘Me eneontraha fuera de mi de ox
sitacién. Aquella titra gloriosa parcoia e
tar suplicando que la sembrasen. Mi queri
dda Melissa habia trado un sico de poroios
lé a Willy « Chester a buscatlo, No
guna falta que nos molestisemos
en arar aquella tierra. Dirigi « Polly para
{que hiciera un surco recto con un palo y a
Tim para que la siguiese, cavanda agujeros
en la tierra, Latego me acerqué yo. Dejé
{caer un poroto en cada agujero y fo aplas-
econ tal
Pues bien, apenas habia avanzado
tun par de mettos, cuando sents rovar cone
tea mi pie algo verde y con hojas. Mir
\
avanzaba a coda prisa buscando un pal al
que reper
ja atris. Un alla de porotes. verdes
\Valgame Dios! —exelame—
jHéscacierra sf que os rica!
Los callos se exiendian ante nues-
tea vises por todas partes. ‘Tive que
apresurarme para quie no me alcanzaran,
‘Cuando Hlegué al final cel sureo
los primetos tallos hubsan Morecido, se
bian formado las vainas y se podian ya
recogere
n. Las orcjas de Will se agitahon, Los
‘ojos de Jill estaban turnios. La nariz de
tet se retorcla, Los brazos de Hester
subian y bajaban. Hl hue del dicate que