You are on page 1of 55
TTT DE COMO VIVIR CON LOS HOMBRES CUANDO SE ES UN GIGANTE Suzanne Lebeau (Canada) yp. Cuadernos de Dramaturgia para Joven Publico PASODEGATO COMO VIVIR CON LOS HOMBRES CUANDO SE ES UN GIGANTE Suzanne Lebeau (Canada) Traducci6n del francés de Alicia Martinez Alvarez == Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico PASODEGATO de Dramaturgia para Joven Priblicc las calles.) En la tierra, la luz artificial inventada por el hombre. En la casa de Alfredo, una iluminaci6n preca- ria: velas, candelabros, lamparas de mano, etc., todo lo que Alfredo ha podido encontrar... esta casi ciego y la luz le sirve mas para calentarse que para iluminarse. DOS PERSONAJES Hay que prever un sistema que permita establecer entre los personajes una relacién de tamajios creible y significante. Hay que sentir que a pesar de la gran estatura de Troller, comparada con la pequefia de Al- fredo, provocan miedos equivalentes. Se podria ima- ginar, por ejemplo, que cuando el gigante esta en la tierra tiene el tamafio de un hombre y Alfredo, mario- neta chiquita, del tamafio de un chicharito. En ciertas escenas, en la tierra, podria verse a través de sombras chinas. En la casa de Alfredo, él puede tener el tama- no del hombre y Troller ser una marioneta gigantesca que deja ver sdlo algunas partes de su cuerpo, como a través de una gran lupa, segtin la accion y la situacién. EL GIGANTE TROLLER. Fisicamente es un gigante que sigue los cdnones de la imagen tradicional. Es gordo, acolchonado, se ven pliegues de grasa en sus brazos y piernas; con una placida sonrisa, lo que le da un aire de sorprendido e ingenuo. Tiene poco pelo y es practi- camente lampino. Es tan grande y tan voluminoso que sufre por su tamano y su fuerza. En su manera de mo- verse uno nota sus ganas de hacerse pequeno y de ocul- tar partes de su cuerpo. Cada una de sus emociones provoca un cataclismo. Cuando respira es una tormen- ta, sisu corazon late mas rapido es un temblor y si llora es una inundacion. Provoca miedo, se siente detestado y rechazado a causa de su apariencia y ése es el drama de su vida. Busca desesperadamente una manera de seducir a los hombres, con quienes le gustaria vivir en armonia. Ha intentado todo: imita sus comportamien- tos, se apropia de sus miedos, cultiva sus envidias. En sus intentos desesperados por hacerse mas pequefio y amable (eso cree él), Troller ha adoptado una vocecita aguda, rasposa, forzada. Sus gestos son medidos, ama- nerados, retenidos por el miedo de romper algo o herir a alguien, y dan la impresiOn de que se mueve en ca- mara lenta, prisionero de una piel demasiado pequefia para él. La ratA, ALFREDO. Es una rata vieja, casi ciega, que aprendié a vivir merodeando a los hombres y aprove- chandose del miedo que les provoca. Envidia a Troller por ser grande y fuerte. Ha sofiado siempre con impo- nerse a los hombres pero tuvo que resignarse a darles miedo y provocarles horror. No comprende la pena de Troller y no quiere aceptar su apego a los hombres, a quienes considera peligrosos y locos, incapaces de ser fieles, en guerra perpetua, despiadados en el uso de los recursos naturales. Su juicio sobre ellos: despilfa- rradores, cobardes, crueles y estipidos. A pesar de su pequefia estatura, Alfredo tiene una bella voz, grave y baja, pero potente, lo que la hace muy extrafia com- parada con la vou de Troller. Su lenguaje es cotidiano Cémo vivir con los hombres... 5 Suzanne Lebeau (rrr Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico y correcto. El texto esta escrito segiin las reglas de la sintaxis, pero el actor debe apropiarse de las palabras y darles un ritmo especial de tal forma que surja una manera de hablar propia. ARGUMENTO Es de noche. Troller esta solo en escena. Se lamenta amargamente de la soledad en la que los hombres lo tienen relegado. Enamorado de la humanidad, suefia con vivir cerca de ella. Le encantaria que le confiaran el cuidado de los nijfios, a los que adora. Todo lo peque- fo le fascina. Pero a causa del terror que inspira debe esconderse de los hombres y asi poder observar c6mo viven. Troller conoce a Alfredo, quien, por razones si- milares, también se esconde de los hombres. Alfredo y Troller se hacen amigos y el gigante sigue a la rata bajo tierra. Troller se siente bien en casa de Alfredo incluso si hace frio, esta oscura, himeda y no puede entrar completamente. El rumor de la vida diurna de la ciudad se escucha en casa de Alfredo a través de sus radios. Alfredo, enfermo, se acuesta. Tiembla de fie- bre, de frio y Troller busca la manera de aliviarlo. Ese dia el sol desaparece. Sobre la tierra hay confusién. Nadie puede explicar lo que ha sucedido. Bajo la tierra Alfredo comprende. Esa noche extrafia inquieta a los hombres y el ma- lestar se instala sobre la tierra. Gritos, llantos, lamen- tos, preocupaciones cientificas sobre las cosechas, el efecto de la oscuridad sobre el desarrollo de los nifios, el rendimiento de las vacas lecheras, etc. La natura- leza, los animales y los hombres estén agobiados por el calor. Alfredo, que sigue bajo tierra la evolucién de la situacion, adivina las buenas intenciones de Tro- ller, pero esta consciente e inquieto por los efectos desastrosos que ese desbarajuste puede provocar en el equilibrio natural. Troller se apropié del sol para calentar y curar a su amigo enfermo, sin sospechar que el sol es esencial para la vida en la tierra y que su ausencia puede causar grandes desgracias. Después del intento de encontrar las causas de esta stibita des- aparicion, los hombres caen sumidos en el panico. A la inquietud de la extrafia situacién se suma el efecto de- primente de la oscuridad y la angustia causada por la sombra de Troller. Es todavia mas extrajio, dicen quie- nes saben, que la luna siga su trayectoria normal, pero ya no brille en las noches, y tampoco las estrellas... y que la tierra no presente ningun signo de enfriamien- to, al contrario, esta hirviendo. El fendmeno sdlo con- cierne al sol y las hipétesis mas absurdas se estudian para encontrar una explicacion. La angustia se apode- ra de Troller. Se siente vagamente responsable, inca- paz de explicar ni por qué ni como. Troller sufre, los hombres también, Alfredo también. Todo hierve sobre la tierra, todo hierve bajo la tierra. Alfredo habla del orden de las cosas. Troller comprende que debe regre- sar el sol a su lugar... e irse, no supo como integrarse a la vida de los hombres... ni de las ratas. Cémo vivir con los hombres... 7 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Ptiblico Escenas 1 DONDE EL PUBLICO _ CONOCE AL GIGANTE TROLLER En la tierra, la noche. Hay luz en algunas casas, unos faroles alumbran levemente, la luna esta en su tlti- mo cuarto menguante. Mientras el ptiblico entra, el escenario sugiere la vida nocturna de la ciudad: las luces se encienden y se apagan, las puertas se abren y se cierran, los vehiculos circulan. Una forma enor- me se desplaza muy lentamente. Es Trotter. Camina muy atento para no engancharse con nada y sigue con gran interés, y placer evidente, lo que se mueve en la tierra. Gritos ahogados, portazos, responden a sus intentos por tocar o tomar alguna cosa. Se aga- cha, escondiendo la cabeza entre los hombros en un esfuerzo por volverse invisible, pero al mismo tiempo, demasiado interesado por el ruido de un motor, ex- tiende la mano... Gritos y ruidos de pasos de alguien que huye son la respuesta. TROLLER: ¢A donde van? iNo partan mas! Yo soy amigo, se alegraran de haberme conocido. TROLLER recoge del suelo un paquete de periddicos lis- tos para ser repartidos. Toma un ejemplar y se apar- ta para leer con ayuda de una lupa. “La tierra tiembla. Por quinta vez en cinco dias 8 nuestra ciudad ha sido el escenario de eventos que no logramos explicar. Un gigante que nos amenaza con su sombra desde hace casi una semana arranco un poste de luz privando de electricidad a todo un barrio de la ciudad... ustedes pueden hacerse una idea de la fuer- za extraordinaria del monstruo que siembra el terror. iNo dejen salir a los nifios! Guarden sus perros y sus gatos...” Detiene su lectura. iHuyo de gatos y perros pues interrumpen mis suefos afilandose los dientes con las ufias de mis dedos! Después de un momento de reflexién. Aqui entre nos, amiguito... Yo no duermo por la noche, no me vengas con sustitos. iCuidate de mis enojos! Que yo te quitaré las ganas de hacer bromas y destrozos. Leyendo nuevamente. “ .testigos cuentan que él es horrible y espantoso; tiene miembros desproporcionados, una larga cabelle- ra, una barba espesa y (con asco) ipiernas como tronco de serpientes!” Cambiando de tono. Cémo vivir con los hombres... 9 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Publico Si atrapo a ese bribon los hombres comprenderaén mi verdadera intencién ya no tendran miedo los paseantes de nosotros los gigantes. TROLLER toca con el dedo pequefto en una de las casas. Disculpe, sefior, mi tocar, no lo quiero molestar. Un grito de horror, la voz de un hombre que lanza insultos, disparos. Quisiera un café beber, y una noche en brevedad. Si lo asusto es sin querer. Yo no pido caridad. Oro y plata tengo yo, silo quiere, es para vos. Una puerta se azota, una luz se apaga. Moneditas o billetes, aqui dejo, no me cierre. Deposita el dinero en el piso y se va. Es necesario enfrentar a quien me hace tanto mal. Leyendo. “El poste arrancado con las manos pesaba media to- nelada y media quince metros de alto.” 10 Cambiando de tono. iQuince metros dice él, un palillito de dientes! iMucho mas peso cargué! iMucho ruido y pocas nueces! Deja caer el periddico y saca de su hatillo un inmen- so par de calzones que empieza a coser con un hilo negro. iCuando se haran los calzones al tamafio de mi talla! Qué me pierdo entre la malla dobladillos y tablones. iQué alegria bordar mi nombre! Cada letra, cada borde... Té, ere, 0, ele, ele, e, errr... iTiene ritmo... y caracterrr! Troller suena como a ferias de hombrecitos en piruetas. Saca un lapicito de su bolsa y escribe las letras en los calzones que estaba cosiendo. Y saca también un grueso hilo negro que mira con atencién. Se ve preocupado, regresa al periddico. “Sucedié ayer... muy tarde en la noche...” Juega con el hilo mientras lee. “Cables eléctricos... arrancados y robados sumieron en la oscuridad a todo un barrio.” Repitiendo. Como vivir con los hombres... 11 Suzanne Lebeau i Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico ..arrancados y robados... Arrancados y robados... iCables eléctricos entonces son! iEl monstruo, el creador del caos total, el tunante, el bandido...! iEse yo soy! Quisiera estar a mil leguas de aqui, reducirme, ocultarme en un pequefio dedal. Recoge sus calzones, saca el hilo de la aguja y trata de volver a instalar los postes de luz. Aguarden, aguarden, yo los puedo colocar. Al fin y al cabo yo sé donde era su lugar. Se acerca a la tierra y de nuevo se oyen gritos y pasos de gente que huye. Ya los dejo de tocar, ivuelvan a este lugar! No se mueve, se queda paralizado, con miedo de rom- per algo. Yo un héroe sofié ser iy creo que lo logré! Pero un héroe que da miedo. iEso es lo que logré! Amanece y se escuchan los rumores de la ciudad que despierta. TroLter se sobresalta. 12 Mas no me pueden hacer sufrir. iSe quieren deshacer de mi! Lentamente, aun cuando se apresura, se va y logra esconderse casi completamente abajo de la maqueta de la ciudad, solamente la cabeza sobresale. Sus que- jidos rompen el alma. Escena 2 DONDE EL PUBLICO ______ CONOCE A ALFREDO, LA RATA Justo antes de amanecer en un pedazo de tierra, después en casa de Alfredo. La escena empieza con ALFREDO entrando en su casa, volteando a ver hacia los lados prudentemente, asegurdandose que no hay nadie. Axrrepo: iVaya! Todo parece tranquilo hoy. iOjala pudiera dormir toda una noche de un tirén! Se ve obligado a detenerse constantemente a causa de una tos ronca y continua. Durante ese tiempo amanece y la tierra se mueve, la casa de ALFrepo aparece. Tose tanto que se ve obligado nuevamente a detenerse. iAh! Maldita tos. iCreo que se me esta bajando a los bronquios! Busca febrilmente en una bolsa que arrastra, pero no encuentra lo que busca y empieza a caminar de nue- vo. Finalmente llega, enciende la luz, suelta la bolsa, Cémo vivir con los hombr 13 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico saca de ella las paginas de un diccionario médico y se pone a leer. “Tanto en los hombres como en los animales supe- riores una elevaciOn anormal de la temperatura del cuerpo... (murmura) ...la fiebre no es preocupante por debajo de los 40 grados...” Se toma la temperatura. Mmm... 38.5, 6, 7... iNo hay que preocuparse! iNo es preocupante! iNo hay que tantear la suerte! Leyendo la etiqueta de un frasco de jarabe. “Dos cucharaditas cada seis horas.” Se bebe todo el jarabe de la botella y luego se instala para vaciar su bolsa y clasificar los objetos que tra- jo: juguetes rotos, pedazos de vajilla, papeles, restos de comida, jabén, etc. Hace tres montones: los obje- tos utilizables como estan, los que quiere reparar y Jinalmente los restos de un walkman del modelo mds pequeno que se pueda imaginar. Las piezas del walk- man estan en una caja junto con el instructivo del aparato. Walkman, modelo j80 1260. Duracién para enro- llarse: dos minutos. Funciona con corriente continua... o con dos pilas AAA... Saca unos cables de la caja, y pedazos sueltos de un aparato del que no se puede reconocer nada. 14 iNuevecito!... iHijole! Y con salidas de 25 watts por canal... (silbido de admiracion) irecogido de la basura! Lo abre con mucho cuidado. Enciende la radio que so- lamente hace ruido, la trata de arreglar sin lograrlo. Conecta y desconecta el cable. Enciende otra radio. Se oyen ruidos sordos, luego el mismo texto que TROLLER ley6 del periddico. El volumen es muy leve, las ratas detestan el ruido. Rapio 2: ...se buscan las razones de este acto de vandalismo... Sube el volumen y escucha atentamente. Atrrepo: iBueno! iA ver qué hizo ahora! Rapio 2: Numerosos testigos confirman la hipdte- sis de la presencia en la ciudad de un ser enorme que incluso varios nombran “gigante”. Afirman que es ver- daderamente horrible y espantoso de ver. ALFREDO tose con grandes sacudidas, tiene escalofrios y toma de sus reservas un comprimido que se come a pequenios mordiscos. Rapio 3: Exhortamos a la poblacién a extremar precauciones, no podemos prever quién sera la pr6xi- ma victima. Regresa la musica y ALFrEvo continia su inventario. ALFrepo: La proxima victima... podria ser un pobre viejo que nunca ha lastimado ni una mosca, un moco- sito... Cémo vivir con los hombres. 15 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico De repente las paredes empiezan a temblar, tanto que le hacen perder el equilibrio. La radio rechina de nue- vo. Intenta una vez mas sintonizar una estaci6n y al no lograrlo la apaga. Gritando hacia lo alto. iAhi esta de nuevo! iVuelve a empezar! iOh! iOh! iOh! iYa es suficiente! iComo si no tuviera bastante escuchando a los hombres quejarse todo el dia! Se escuchan, ahogados pero de todas maneras terri- bles, los sollozos del gigante. ALFREDo va a buscar un objeto que le sirve de paraguas (una taza rota voltea- da u otro objeto) y pone todo lo que encuentra para recoger el agua. Vacia los improvisados contenedo- res llenos, en lo que le sirve de banera. iBasta! iBasta! iBaaaasta! Escurre por todos lados... iAlto! iEeeeehhh! iAaaalto! La lluvia no se detiene y la batiera se desborda. AL- FREDO se abriga. iYa estuvo! Esa fue la gota que derramod el vaso. Sale temblando. ESCENA 3 DonvdE ALFREDO SE ENCUENTRA _______UN GIGANTE POR PRIMERA VEZ EN SU VIDA _____ La tierra con los primeros rayos de la aurora. Muy cerca de la entrada de la casa de ALFREDO. TROLLER Se 16 durmio llorando. Esta acostado muy cerca del hoyo de entrada de Aurrepo y suena hablando en voz alta. Tro.ier: iUn pequeiio desastre! A.rrepo: Impresionante. (Rodedndolo como si se tratara de una montafia.) iTan enorme como se dice! TRouier: iUna bestia repugnante! Le toca la espalda. A.rrepo: iHola, hola! ROLLER: Tiene aire fingidor es malvado y socarron. Y como sefia angustiosa itiene la boca apestosa! ALFREDO estornuda y TROLLER se despierta sobresaltado. Axrrepo: Discilpame por molestarte... (TROLLER mira a A.rrevo horrorizado y totalmente mudo.) Lle- vas cinco dias gritando, llorando... gritando, orando. Todo esta mojado. TROLLER grita con su vocecita, pero con toda la fuerza de su alma. TROLLER: iDios mio, qué pesadilla! iUna rata repulsiva! Si me perturban las pulgas, mucho mis las ratas inmundas. Esos bichos se tornan plaga, Como vivir con los hombres... 17 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico pululan, mordisquean, pasan, llenan tu cuerpo, suben, bajan y esperan pacientemente para... el cuello morderte. Se tapa la cara aullando de asco. ALFREDO, sintiéndose insultado, se pone a gritar... retomando el mismo rit- mo y las mismas entonaciones. ALFREDO: iDios mio, qué pesadilla: un monstruoso gigante! Odio a los gigantes todavia mas que a los hombres. Odio a esos brutos, beben la sangre caliente de animales, de la gente y también de los bebés. (Después en otro tono.) iImbécil! TROLLER detiene su llanto. TROLLER: iMe dijo... imbécil! éQué mosca te picd? Ya deberias saber que a un gigante asi no lo debes ofender o se pone histérico, isi! Atrrepo: éCrees que un gigante histérico me da miedo? TROLLER: éQué se cree este ratoncin? ¢No me tiene miedo a mi? ALFREDO silba suavemente, TROLLER lo mira con duda que se transforma en asco. Volviendo a la realidad... 18 Lo que pasa, iay de mi! es que yo te temo ati. Aurrepo: Todo el mundo le tiene miedo a las ratas. ROLLER: A las ratas yo detesto y no quiero caer bajo su ley que aborrezco. Se enrosca con horror. Arrepo: (Cruel y amenazante.) ¢Tienes miedo de que te muerda hasta hacerte sangrar? TROLLER: No hagas eso, por Dios, yo te pido perdén. A.rrepo: €O que te saque tres gramos de cerebro con mis afiladas ufias? Hace la finta de lanzarse sobre TROLLER. TROLLER: Te lo ruego, por favor: iNo hagas eso, no! ALFREDO: ¢Piensas, tal vez, que te voy a comer? ALFREDO rie enternecido. TROLLER: ¢Como me vas a comer? Pequeiio pobre animal... éQué no me has visto bien Cémo vivir con los hombres... 19 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Ptiblico de los pies hasta el testal? Yo soy un gigante. iSoy Troller el grande, soy Troller gigante! ALFrEvo estornuda y TROLLER suelta un grito de horror. ALFREDO: Pues yo soy Alfredo. Alfredo, la rata. TROLLER: (Retomando su tono temeroso.) Las ratas con su afan, propagan la peste, gran mal. ALFREDO: Ay, ino exageres! Si, tengo gripe, pero me sueno en un paifiuelo... TROLLER: Ratas negras y peludas, ratas sucias y sanudas. Si las ves y las saludas, contaminan las verduras. Atrrepo: Yo iba a tomarme un bafio... TROLLER: Sucias e irreverentes, viscosas y apestosas, eso dice la gente. Atrrepo: Dicen... dicen... équién dice? ¢Qué gente? TROLLER: Eso lo dice toda la gente, toda, toda, toda la gente. A.rrepo: Toda la gente, toda la gente... TROLLER: Dicen que ustedes comen mil desechos repugnantes, que en las coladeras ven 0 en otros sucios lugares. A.rrepo: Los hombres lIlenan los botes de basura, las ratas los vacian. éQuién es el bueno? éQuién es el malo? (TRoLLER se queda con la boca abierta.) éEs ver- dad que los gigantes tienen piernas como cuerpos de serpientes? TROLLER: (Asombrado.) cQué esta pasando? ¢éTe burlas acaso? ALFREDO: Piernas como cuerpos de serpiente. iEso dicen! Horribles y espantosas. TROLLER: Mis piernas horribles, équién dice esas cosas? éMis piernas espantosas? ALFREDO: Una barba rasposa... TROLLER: Pues tt: deberias saber que no se debe creer... ALFREDO: ...lo que dice la gente... (TROLLER se pone a chillar.) iOh! iNo! iNo! iNo! iNo vas a llorar de nuevo! iDesde que llegaste, tengo los pies mojados, tengo frio! Esto no es muy sano. Como vivir con los hombres... 21 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico El sol sube cada vez mas alto en el cielo. TROLLER: (Mostrando un periédico.) Se anuncia un dia esplendoroso. Quédate aqui conmigo. Asi, tranquilo y armonioso, estaras seco y calientito. ALFREDO: (Yéndose.) éTt estas loco? Me van a perseguir los nifios con sus palos, y los adultos con sus venenos. Estornuda y empieza a temblar de la cabeza a los pies. TROLLER: iUn momento, por favor! quédate sdlo un minuto para que seques tu furor. ALFREDO: (Se suena la nariz con un pafuelo.) ...En otra ocasion... la proxima noche. Se va corriendo. TROLLER: iEspera! iEspera! Atrrepo: iOh! iNo! Majfiana.... Alo mejor... Tro.er: Llévame, illévame! ALFREDO: Llevarte... A donde? Tro.ier: Llévame a tu casa. ALFREDO: ¢DOnde quieres que te ponga? 22 TROLLER: No te debes espantar. Yo me puedo adaptar. ALFREDO: Es muy pequefia... es himeda... es... TROLLER: Yo puedo hacerla amplia y protegerla del agua. iPuedo ahuyentar las tormentas y mover una montana! ALFREDO guia a TROLLER. ALFREDO: Aptrate, oigo autobuses venir y los talle- res abrir. TROLLER: Me gusta mucho el rumor de las fabricas y grias. Pues sacuden el sopor de las dormidas rias. ALFREDO: Odio el ruido. TROLLER: Estos pequefios hombres merecen mi amistad, dia y noche los pobres trabajan sin parar. AvFrepo: iTrabajar! TROLLER: Contraidos van pasando, van tensos y apurados. ALFREDO: Enojados, absurdos y confusos... Cons- Cémo vivir con los hombres... 23 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Publico truyen porquerias que van a tirar mafiana y que yo re- cogeré, sin prisas, pasado mafiana. iAptrate! TROLLER: (Continuando con su juego.) No te vas a arrepentir, en todo te ayudaré: repararé, recogeré yo todo lo haré lucir. Avenidas trazaré, el rio dirigiré, sembradios sumergiré y hasta puentes tumbaré. A.FreDo: iOh! iNo pido tanto! EscENA 4 DONDE UN GIGANTE DESARROLLA UNA AMISTAD PARTICULAR CON UNA RATA Y VICEVERSA, Y DONDE ESA AMISTAD HACE FLORECER LA IMAGINACION Y EL SENTIDO DE JUSTICIA DEL GIGANTE Llegan finalmente a casa de ALFREDO. ALFREDO Se es- tremece con grandes escalofrios y TROLLER se acomo- da lo mejor que puede. TROLLER: Es pequefia tu morada, pero muy acogedora. Un poco himeda tu casa, pero muy acogedora. 24 Cuando pueda acostumbrarme aver en la oscuridad, no habra razon de lamentarme gracias a tu hospitalidad. ALFREDO enciende un candelabro. Aurrepo: iRecogido de la basura! TROLLER: No quiero ser descortés pero estoy un poco gordo y en lo oscuro soy pesado. No te quisiera romper algtin objeto preciado. A.FrRebo: (Ironico.) éTienes hambre? No tengo ni- fios para ofrecerte... desgraciadamente... TROLLER: iAdoro a los nifios y sus piececitos! Sus lindas manitas, todos sus deditos... Trower saca de su hatillo recortes de periddicos, fotos de nifos... Es triste que se queden chiquitos porque no comen ni frijolitos... Lee el encabezado de un recorte de periddico. “Los nifios se mueren como moscas...” Comentando. Yo podria llevarles de comer, Como vivir con los hombres... 25 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico leche y pan que les gustara y ropa que se quieran poner. ALFREDO: Todavia falta mucho para que los nifios sacien su hambre y las ratas mueran de hambre... TROLLER: No me preocupa, iapenas llegué!, una buena labor yo podré hacer, los hombres pronto entenderan que yo solo quiero ayudar. ALFREDO: iBuena suerte! TROLLER: éPero como llegaste a saber lo que a los nifios puedo querer? ALFREDO: Todo el mundo sabe que los gigantes se comen crudos a los nifios. TROLLER: (Furioso.) ¢Yo comer la carne fresca de pobres pequefiines de sangre cubierta? iPero qué cruel eres! Animal necio y malvado, como dice la gente. iQué desafortunado es este malentendido, senor es usted un villano! TROLLER guarda sus cosas con la intenci6n de irse. iPensar que yo pueda nifios comer! Qué cosas la gente puede creer. 26 A.rrepo: Yo solo repito lo que dicen. TROLLER: Lo dicen a los pequefios los mas grandes para que les tengan miedo a los gigantes. Protestando con todas sus fuerzas. iEn ese caso yo prefiriera que de hambre me muriera! A.rrepo: No es necesario... Yo puedo alimentar dos ejércitos de gigantes con toda la basura de mi barrio... Le muestra su despensa. ROLLER: (Reinstalandose.) Mi pobre estomago tiene mas hambre que un gran lobo. Yo me comeria una vaca desde las patas al lomo. Si me tienes confianza ahora prepararé un festin de importancia. Diras: “No lo olvidaré”. Aurrepo: iYaaaak! Yo no quiero comer nada, hasta el olor de un chicharito me da ganas de vomitar. No te molestes, come, come. Al menos asi no se desperdicia. TROLLER: Cuando nos quejabamos de no tener apetito, mi mam siempre decia “el que duerme come”. Sino comes... duerme, aunque sea poquito. Cémo vivir con los hombres... 27 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico A.rrepo: (Un poco sofador.) Mi madre también... TROLLER: Para que te duermas te puedo contar un cuento: La historia de Patagonia es un mitico argumento. ALFREDO: éLa Pata... qué? ‘TROLLER: La Patagonia, el pais de los pies grandes o si prefieres... iE] pais de los gigantes! Buscando en su memoria. Es una historia que los gigantes cuentan cuando quieren que sus nifios duerman. Le lleva a Atrrepo un vaso de leche y dos galletas. Con panecillos y un vaso de leche. iOh Patagonia, qué bella pareces! ALFREDO: (Un poco conmovido, murmura y gru- ne.) iPatagonia! TROLLER: Lo que de ella se cuenta puedes escuchar: la muerte esta exenta, no hay enfermedad. ALFREDO: iéNo existe la muerte ni la enfermedad?! TROLLER: No existe tampoco la guerra, la miseria ni el hambre fatal. Los arboles tocan estrellas y de un manotazo, los gigantes traviesos ahuyentan las nubes cargadas de lluvia y tristezas. Se dice que viven con gran libertad, plenos de armonia y felicidad. TROLLER se da cuenta de que ALFREDO se durmié. Todos son felices. Que tus suefios sean también felices. ALFREDO tiene un gran escalofrio. Si al menos en este sotanillo no hiciera tanto frio.... ALrrepo tiembla y tose. TRoLLER le lleva unas cobertu- ras y se pone a esculcar. Todavia seco el queso tiene sabor. Un pedazo de pan... hojas de coliflor... En su busqueda prende por equivocacién un radio que difunde la misica. Salta inquieto y trata de es- conderse. Con su vocecita pregunta: iQué susto me di! éQuién esta ahi? Rapio 3: ...dia ideal para los que comienzan sus va- caciones... TROLLER: iSi esta alguien escondido, que muestre ya el rostrillo! Cémo vivir con los hombres... 29 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico Rapio 3: Yo estoy con ustedes hasta las nueve y después adioods, ivengan a reunirse conmigo en la playa! iiiAh ah ah, no les digo cual!!!... Musica. No ve a nadie y entiende que al girar la peri- lla del radio provocé algo. TROLLER: iQué veo! Un ser humano que me acompajia en el acto. Sube y baja el volumen frenéticamente. Lee una eti- queta. Mermelada de fresa... Ilena de confetis y en la tetera... iviejos espaguetis! Alinea las cdscaras de huevo vacias, pastas duras y secas, pan enmohecido que come con mucha pru- dencia. Atrrevo gime sin despertarse. Se da vueltas y vueltas, tiene escalofrios, castaftetea los dientes. Tro- LLER trae mds trapos, coberturas, periddicos y sopla para calentar a ALFrevo con su aliento. Enciende va- rias velas que toma de la despensa. Brrr. {Una tumba, un refrigerador! Cuando afuera el mes de julio iesta en su maximo calor! Busca una ventana intitilmente. Esta humedad y oscuridad, seguro a la rata van a matar. iPobre ratita!, ¢qué diran? 30 Total otro que va a reventar. iQué terrible! La voy a extrafiar. Si para todos brilla el sol no veo por qué verdad una rata no puede gozar el derecho a esa libertad. TroLLER desaparece, ALFREDO se agita en un sueno febril. Rapio 2: Interrumpimos nuestras emisiones para un boletin especial. Por primera vez, el monstruo que siembra el terror se mostré en plena luz del dia. Se di- rige hacia la montafia. La policia esta a punto de cerrar todos los puentes. (Comentario del periodista.) iPff qué mal plan! ¢Y nuestro dia de campo? ALFREDO gime en su sueno. Rapio 2: iQuédense escuchandonos! De repente se oye un grito, un disco que rechina, rui- dos de muebles que se caen, al mismo tiempo que apa- gones y lo negro que se instala en la tierra. ALFREDO despierta. Aurrepo: (Con escalofrios.) ¢Qué pasa?... éQué sucede? (Mirando las velas encendidas.) éNecesitas realmente cuatro luces al mismo tiempo? (Silencio.) iSe fue, se fue dejando cuatro lamparas encendidas! Apaga las luces con excepcién de una y se recuesta sin darse cuenta de que la tierra empieza a temblar y los objetos y los libros se caen alrededor de él. Cémo vivir con los hombres... 31 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Publico EscENA 5 EL REGALO... GIGANTESCO En casa de Atrrepo, bajo la tierra. Los pasos de Tro- LLER resuenan sobre la tierra hasta que llega a casa de Atrrepo. Trae sobre sus hombros su hatillo a pun- to de reventar. Chifla, se frota las manos, no puede contener su emocion, feliz, nervioso, orgulloso de si mismo. TROLLER: iAlfredo, ven a mirar, no te menti cuando dije que todo lo podia lograr! ALFREDO grune en su sueno, molesto por los ruidos. ¢Tendran tan mal humor las ratas como los hombres cuando duermen y el suefo se les arrebata? Deshace su hatillo y un rayo de luz que enceguece sale del mismo. Lo dirige hacia los pies de ALFREDO que murmura y se enrosca. Trotter sopla sobre sus dedos... iEl calor del sol ahora lo entiendo! Apaga la lampara. iMira nada mas! No sirves de mucho. Me haces sospechar 32 oF que eres una gota de agua en el mar. Suaviza la luz del rayo, recoge los objetos y se ase- gura de hacer tanto ruido como para que ALFREDO se despierte. iVamos, vamos, a levantar! No hay que ser flojo. iMira nada mas! ALFREDO se despierta visiblemente atosigado por el ca- lor. Se voltea hacia Tro.1er que lo vigila atentamente. Tro.er falsamente sorprendido. iAh, qué contento estoy! Mi amigo al fin despert6. Estaba muy impaciente de mostrarte lo que traje: ilas delicias del verano! ALFREDO se seca la frente. A.rrepo: Escalofrios en la espalda, las manos mojadas. Se toma la temperatura, inquieto. TROLLER: El sano calor del sol que te da satisfaccion. ALFREDO: iEl sol! iLa fiebre! TROLLER:? Ya mejoraras, sé optimista. Cémo vivir con los hombri 33 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico Lo negro y lo frio te entristecen, mas la enfermedad pronto cede, anda, ya no seas pesimista. ALFREDO: (Tomando su temperatura.) éQué dices? TROLLER: La enfermedad teme al sol... No me mires como un tonto. Mientras TroieR habla, ALFREDO mira el termémetro inquieto. ALFREDO: 42.8. iOh! iohi ioh! Eso es mas de 40 gra- dos. (Se vierte unas gotitas de algtin remedio en la boca, se toma unos comprimidos, revuelve todo ha- ciendo gargaras y se lo traga.) A enfermedad de hom- bres, remedio de hombres. TROLLER: Todo eso se ira ala basura ya. ALFREDO: Polvos, pildoras, jarabes... TROLLER: Esos remedios fingidos ya no necesitaras. Atrrepo: iEs asqueroso! Lo sé... pero no puedo evi- tarlo. TROLLER: No tendras mas tos, garganta irritada ni los pies frios. iFuera jarabes, pastillas, brebajes! 34 ee Mira mi receta que yo en su lugar traje hasta tu puerta... A Frebo: (Interesado.) iUn remedio! éDénde esta? TROLLER: éNo sientes aqui brisa del verano que en un momentin tu casa ha secado? ALFREDO: Me siento febril hasta los dedos de los pies. TROLLER: Se fundira la fiebre como la nieve al sol y tu seras alegre color bermellon. A.rrepo: éDo6nde esta tu remedio? Trotter dirige los rayos del sol sobre el cuello de At- FrrEDo y deshace totalmente su hatillo llenando todo el interior de la casa de ALFREDO con una luz muy in- tensa. iDetente! iDetente! Me vas a volver ciego... iAy! iMis ojos! TROLLER desvia el rayo y ALFREDO se pone gotas en los ojos. TROLLER: Si para todos brilla el sol no veo por qué, verdad, Cémo vivir con los hombres... 35 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico una rata no puede gozar el derecho a esa libertad. ALFREDO: iéQué?! TROLLER: Tw no querias calentarte al sol Asi que lo traje, como un girasol... Atrrepo: iQue el sol venga a mi! ¢Por qué no? TROLLER: (Un poco inquieto.) Ahora que tienes el sol, cestas contento? Dimelo. ALFrebo: iSi no tuviera tanto calor! TROLLER: No te puedes quejar: no hay frio ni humedad, y mira, admira, esto es luz de verdad. TroLLER mueve los rayos del sol. La luz se extiende una vez mds. ALFREDO se enrosca completamente, ocultando los ojos con las manos y gritando hasta que TROLLER Cierra nuevamente su hatillo. ALFREDO le da un trago a su jarabe. TROLLER: éQué bebes ahora? ¢Por qué esa cara? éNo sera que tomas veneno antirratas? Trotter le quita las botellas y las vacia. A rrepo: iVeneno! Mi jarabe a la codeina, tan es- 36 caso como moco de princesa... Nooo... iLo tiraste! iNo puede ser! (ALFrepo se derrumba y tocando las paredes, nervioso, busca una botella con gotas para curarse la quemadura de sus ojos.) iMis gotas! iMis gotas! iToda mi farmacia! TROLLER: éQuieres por un rato no estar preocupado? A.FrEDO: éD6nde voy a encontrar ahora, jarabe a la codeina? TROLLER: Todo eso es inuttil, iMirate a un espejo! Rojo empiezas a lucir. ALFREDO: Con 42 grados de fiebre... iEs normal! A punto de tomarse nuevamente la temperatura, una tos seca lo sacude y lo dobla en dos. TROLLER: (Con panico.) Ya no tosas mas. Yo lo iré a buscar si crees que con él te vas a curar. Arrepo: iDéjame hacerlo, iré yo mismo! TROLLER: Yo voy contigo. A cualquier lugar, estoy seguro, que me necesitaras. Cémo vivir con los hombres... 37 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico ALFREDO tose suavemente. Lo sorprendi, lo perturbé... ¢Fue el regalo? ¢Mi amistad? Es mi manera de agradecer su enorme hospitalidad. ALFREDO tose cada vez mds. ALFREDO: Rapido, me ahogo. TROLLER: Vas a ver qué bello es, a tu casa regresar y encontrarla calientita... No te podras quejar. Salen y en la medida que se van alejando de la casa de ALFREDO se meten en una gran oscuridad. Escena 6 DONDE EL REGALO GIGANTESCO SE VUELVE PARA ALGUNOS _____ UNA PESADILLA GIGANTESCA_____ ALFREDO Y TROLLER se deslizan silenciosamente, la tie- rra esta llena de los ruidos de la ciudad: gritos de horror, claxones, sirenas de policias. ALFREDO ahoga su tos y TROLLER retiene su respiracion. Las luces se encienden en las casas, los edificios y las calles... ALFREDO: Se necesita ir hacia el oeste, los basureros son mas ricos. TROLLER y ALFREDO se ven obligados a hablar en voz muy alta para cubrir el ruido de una ciudad excitada, 38 — que a pesar de la oscuridad, parece en plena activi- dad. Arrevo calcula. A.rrepo: (Calculando.) Mi fiebre no parece bajar. Una rata en buena salud no puede morir antes de la edad de nueve o diez meses, eso quiere decir que me falta... TROLLER: éTe burlas acaso de mi? No te puedes morir a tan corta edad, asi. cEs realmente tu sentir? Arrepo: Hacia el oeste, no olvides, ieh! Tengo ocho meses y... 'TROLLER: iOcho! iOcho meses solamente! Yo he vivido tantos siglos que no los puede contar mi mente. Los ruidos crecen sobre la tierra. TROLLER: Yo suefio que me muero... ALFREDO: Suefias... TROLLER: ...y que despierto... ALFREDO: Yo si voy a morir. 'TROLLER: ..con el cuerpo de una abeja o una libélula que se aleja. Y comienzo una vida nueva entre pequefia naturaleza. A.rrepo: Un imbécil puede apachurrarme con su tal6n sin darse cuenta. éPara qué quieres cambiar? Yo vivo escondido... Cémo vivir con los hombres. 39 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico TROLLER: Yo también. ALFREDO: Cazado. TROLLER: También yo. ALFREDO: Odiado... TROLLER: También... Vivo solo. Y a quienes me reciben molesto o incomodo. ALFREDO: (Cambiando de tono, angustiado e in- quieto.) iParece que ya huele! éA dénde hemos llegado? TROLLER: Camino encorvado el cuerpo doblado, ningun olor infeliz despierta mi nariz. Atrrepo: iAhi iSi, si, si! Apesta, no vamos hacia el oeste, parece que estamos en el centro de la ciudad. iHace tanto calor! TROLLER se acerca a un edificio provocando miedo. TROLLER: éYa viste a los hombres, como tienen miedo? Asi sucede siempre cuando yo me acerco. A.rrepo: Es normal, iun elefante en un hormigue- ro! Si pudieran meterte en una jaula de zoologico ter- minarian por aceptarte. TROLLER: (Riéndose.) 40 iMirenme bien! iAtencion! No ha nacido ahora quien me haga cuota de su coleccion. De la mariposa no tengo la gracia. Amino me enjaulan como fragil cosa. A.rrepo: Tal vez los hombres te parecen pequefios, pero son malvados. Se ahoga con su tos. Tro.teER: iRespira! iRespira! éYa estas mejor? Axrrepo: iVete... lo mas pronto! Cuando uno vive con los hombres nos contagiamos con sus enfermeda- des... Tengo gripe, y tt le tienes miedo a las ratas. TROLLER: Gracias a ti, amigo Alfredo, el miedo ha pasado al recuerdo. A rrepo: iEscucha entonces! TROLLER: iYo le diré al mundo entero que podemos vivir en paz! ...Eso es lo que yo espero. Axrrepo: No habré jams paz entre hombres y ratas. TROLLER: éPor qué no? Arrepo: iJamas! ‘TROLLER: Ni una palabra puedo creer de lo que dices con tanto desdén. Cémo vivir con los hombres... 41 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico ALFREDO: Tampoco entre hombres y gigantes. TROLLER: iYo lo voy a lograr! iVivir aqui es mi suefio! iPorque me encanta todo, todo lo que es pequefio! Los ruidos de la tierra se vuelven mds opresivos. Las sirenas responden a las sirenas, los embotellamientos con sus conciertos de claxones se multiplican, gritos de horror, desmaypos... ALFREDO: Odio el ruido. TROLLER: Parece que algo anda mal: aqui pasa algo anormal. ALFREDO: Me regreso. TROLLER: El jarabe no aparece, seamos mas juiciosos. No nos vayamos tan pronto. Esperemos un momento. ALFREDO: Toma lo que sea, codeina, morfina... iNo importa qué! iAh! iNo puedo soportar el calor! iMe ahogo! TROLLER: Vuelve a tu casa amigo mio, yo regresaré a darte alivio. ESCENA 7 DONDE LA TRAGEDIA ________ TOMA PROPORCIONES NACIONALES ALFREDO regresa a su casa sudando a mares. Aurrepo: iNada! iNo veo nada! iNada! iNada! iNada! (Tentando entre sus cosas busca su reserva de medicamentos: comprimidos y gotas. Intenta leer las etiquetas...) Ya no veo nada. (Se seca la frente y se echa al lado de una radio que enciende quemdandose los de- dos.) iAuchhh! iEsté muy caliente! Rapio 2: ...paricién del sol se produjo a las 10 horas, 14 minutos y 12 segundos exactamente, hora del este. Musica. Baja el sonido del radio y busca tentando, las paginas del diccionario médico. Se acerca lo mas que puede al rayo de luz, intentando descifrar alguna palabra... A.rrepo: En el caso de los hombres... (busca con su dedo, pero como no ve nada, intenta recordar...) en el caso de los hombres y los animales superiores, la fiebre es preocupante arriba de 40 grados. (Se toca la frente.) 40 grados, un bafio de agua fria. (Mira el termometro para verificar si puede descifrar algo y lo avienta desesperado.) éDe qué sirve? iYa no veo nada! (Toca el agua del bano y grita. Siempre tentando in- tenta hacerse un sistema de ventilacién con unas vie- Jas hojas.) iSi al menos tuviera un poco de aire! iAire! iAire! (Se sienta con mucha torpeza y se desparrama completamente aturdido por el calor.) Cémo vivir con los hombres... 43 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico Rapto 2: A las cinco en el centro de la ciudad regis- tramos (el locutor cambia de tono) 45 grados a pesar de la negrura en la que la ciudad ha caido desde esta manana. AtrreDo: 45 grados... Ya me parecia también que no solamente era la fiebre. No es normal... no es nor- mal este calor. Rapio 2: Los cientificos no han encontrado huellas de radiactividad, pero contintian creyendo que la tem- peratura de la tierra es muy preocupante... Interrum- pimos nuestras emisiones por un boletin especial. Nos informan que en estos instantes una decena de farma- cias del centro de la ciudad han sido victimas de una banda de malhechores... ALFREDO: iDiez farmacias! Ranto 2: ...quienes después de haber provocado de- masiadas molestias... Cambia de radio. Rapro 3: Las informaciones en el 640.3... un cente- nar de farmacias fueron destruidas... Avrrepo: iUn centenar!... iPor una pequefia botella de jarabe! Rapio 2: ...Y la policia afirma que se trata de una banda bien... Arrepo: iUna banda bien organizada! Se protege del calor con todo lo que le cae en las ma- nos: abanicos, paraguas, etc. Y juega sin cesar con el volumen de sus diferentes radios como para no per- derse de nada... 44 Rapio 1: ...sonidos que conservan en los agudos toda la frescura... Musica clasica. Rapio 3: Mas informaciones después de la pausa. Musica de la mds conocida en la publicidad. Rapio 2: La desaparicion del sol... ALFREDO: é¢é¢La desaparicion del sol???? Rapio 2: ...ha provocado extrafios fendmenos: los hospitales se quejan de la depresion que ha provocado sobre los bebés, que no paran de llorar por efectos de la negrura. Aurrebo: iLa buena luz que cura incluso el malhu- mor! Juega nerviosamente con sus radios. Rapio 1: (Miisica clasica.) Rapio 2: ...el teléfono se reserva para las urgen- cias... entonces no intente hablarnos buscando a su mama... Atrrepo;: iF calor del sol! Necesito encontrarlo in- mediatamente... antes de... Tentando busca la salida. Rapio 2: ...anunciamos la captura de los autores, del autor, es solamente uno el responsable... ALFREDO: iijiQué!!! Enciende todos los radios al mismo tiempo. Como vivir con los hombres... 45 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico Topos Los RADIOS: ..el culpable ...tendra que regresar a la normalidad en poco... .-En la capital se supo con alivio... A.rrepo: Y ahora, édénde lo encuentro? éDénde habra ido a parar? Topos Los RADIOS: ..Numerosos testigos... .-la sombra de un gigante... ..una historia que nos recuerda la época de los cuentos de hadas... Apaga el radio con furia y tentando entre sus cosas, lena una bolsa con diversos objetos que pueden ser- virle de arma y sale. Atrrepo: No puedo creer que hayan logrado atra- parlo. iEso si no lo puedo creer! Escena 8 DONDE LOS HOMBRES SON CADA VEZ MAS DESGRACIADOS, ALFREDO a CADA VEZ MAS PREOCUPADO Y TROLLER... Sobre la tierra el silencio es angustiante, de vez en cuando se oye el grito de un animal herido... gatos, perros, las campanas suenan, pasos de alguien que huye en silencio, quejas. Sin embargo, todos los gritos se ahogan rdépidamente y regresa un silencio mortal. ALFREDO se mete en los rincones y se desplaza tentan- do prudentemente y muy preocupado. 46 -—— Atrrepo: No deberia haberlo dejado solo. Tiene el corazon grande como una montaiia pero el cerebro como una nuez. A pesar del calor, él se estremece con escalofrios. Hace un calor de los demonios y yo tiemblo como una hoja. TROLLER esta sentado en una montafia como buscan- do un poco de aire fresco. Se sopla con un periddico. Murmura impresionado por el silencio y se mueve tan lentamente que parecerta un angel. Pone mucha atencién a todo lo que sucede en la tierra. TROLLER: Qué silencio tan extraiio y angustiante. Sin embargo... lo afioraba a cada instante. iDe mis costillas mi coraz6n es prisionero y mis entrafias ya conocen el infierno! Mira el periddico con el cual se sopla y lee furioso: iAh! iMentiras! iSon mentiras! iPuras mentiras! Retoma su camino removiendo todo a su paso. ALFRE- po, en su carrera a ciegas, se ve obligado a cubrirse para no recibir piedras y objetos sobre la cabeza. Aurrepo: iEs Troller! (Lo llama...) iTroller! iTro- ller! iTroller! (Al no recibir respuesta, regresa hacia su casa.) Cémo vivir con los hombres... 47 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piiblico Escena 9 Donvr ALFREDO ENSENA A TROLLER LAS VERDADES ELEMENTALES —_____ DE LA CONVIVENCIA CON LOS HOMBRES En casa de Atrrevo, bajo la tierra. ‘TROLLER: éViste lo que escribieron? Me acusan de matar, tumbar, robar... iEso fue lo que escribieron! Todos los hombres, grandes y pequefios, sin reflexionar en la verdad de los hechos. Dicen que incendié barrios completos. Amigo, Alfredo, éescuchas eso? Se da cuenta de que esta solo. Saca de sus bolsas las botellas de jarabe y las pildoras que trajo. Tantos lloros por botellas, tanto miedo por frasquitos. éA quién hice mal, amigos? Si en la calle no habia nadie, en las casas escondidos estan todos los perritos. De las sirenas los coches del Ianto hacen derroche. Y del calor que nos agobia, sin duda, seré yo la mofa. Atrkrebo entra cojeando y gimiendo, con los pies y las manos quemadas. 48 ~~ iPor fin llegas, Alfredito! Aurrepo: (Con un suspiro de descanso.) iAh, estas aqui! Vas enseguida a... Atrrepo busca tentando cremas, ungiientos y vendas para aliviar sus manos y sus pies. TROLLER: (Cortandolo.) Lee, lee para ver lo que puede tejer un poco de gente con muy mala fe. A.rrepo: No han inventado nada... TROLLER: (Cortandolo nuevamente.) éComo...? éLes crees? éLos defiendes? A.rrepo: iEsctichame! 'TROLLER: Tanto sufrir en segundos, no lo puedo resistir.” Axrrepo: No es intencional... TROLLER: O estas ciego 0 eres malo, otra respuesta no hallo. Axrrepo: iQuieres escucharme! La tierra esta hir- viendo... Cémo vivir con los hombres... 49 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Piblico TROLLER: De acuerdo estoy con tu pensar, este calor no es normal. ALFREDO: E] asfalto se funde en las calles, los coches se incendian... Ya hay mucho dolor... TROLLER: iNo me digas que soy yo la causa de tanto calor! ALFREDO: iE] sol! iTroller! iE] sol! Las cosechas se quemaron, cada vez hay mas incendios en los bosques, el agua de las Ilaves esta ardiendo... iLo tienes que parar! ROLLER: iLa causa de esta desgracia, la causa de tanto mal! A.rrepo: iBajar el sol a la tierra! Troller, veamos, apenas llegaste y ya quieres todo cambiar. Trastornas nuestras vidas, destruyes nuestros habitos. Ha tomado centenares y centenares de afios para que las ratas y los hombres aprendan a vivir juntos, hemos compar- tido la humedad y la oscuridad para las ratas, el calor y la luz... TROLLER: (Cortandolo.) Pero el calor cura todo mal. éTe has curado por completo? Atrrepo: No puedo respirar... Tengo los pies y las manos quemadas, ya no veo nada... TRoLLeR: (Intentando ser optimista.) Tus ojos se acostumbraran a ver el sol brillar. Atrrepo: iCiego! iEstoy ciego, Troller! Los rayos 50 pe ultravioletas han destruido la retina de mis ojos. No hay remedio para eso. TROLLER: iOh, qué mala suerte! E] remedio que yo traje fue la causa de tu mal. Cierra precipitadamente su hatillo envolviendo al sol. iYo crei haber hecho maravillas! iY qué estupidez, hice tonterias! Se va con su hatillo y la oscuridad regresa a casa de ALFREDO. A.Frepo: Por fin... Un poco de aire. Se oyen los pasos de TROLLER que se aleja. Rapidamen- te se siente como sube la luz hacia el cielo, por arriba de la casa de ALFREDO. EscENA 10 DonDeE HAY A LA VEZ UNA RECONCILIACION Y UNA SEPARACION Encasa de ALFrepo, bajo la tierra. TRoLLer regresa. En silencio arrastra su hatillo. TROLLER: Adios, Alfredo. ALFREDO: (Conmovido.) éQuieres irte? Cémo vivir con los hombres... 51 Suzanne Lebeau -——————_— ultravioletas han destruido la retina de mis ojos. No hay remedio para eso. TROLLER: iOh, qué mala suerte! El remedio que yo traje fue la causa de tu mal. Cierra precipitadamente su hatillo envolviendo al sol. iYo crei haber hecho maravillas! iY qué estupidez, hice tonterias! Se va con su hatillo y la oscuridad regresa a casa de ALFREDO. ALFREDO: Por fin... Un poco de aire. Se oyen los pasos de Tro.ter que se aleja. Rapidamen- te se siente como sube la luz hacia el cielo, por arriba de la casa de ALFREDO. EscENnA 10 DONDE HAY A LA VEZ UNA RECONCILIACION Y UNA SEPARACION Encasa de ALFrebo, bajo la tierra. TRoLLer regresa. En silencio arrastra su hatillo. Tro.ier: Adiés, Alfredo. ALFREDO: (Conmovido.) éQuieres irte? Cémo vivir con los hombres... 51 Suzanne Lebeau Cuadernos de Dramaturgia para Joven Ptiblico éVes el camino y atras el monte? ALFREDO: El camino... TROLLER: éVes Alfredo? iQué feliz me haces! iLas leyendas no son disparates! ALFREDO: E] sol se levanta, el camino se traza... TROLLER: Yo sé que encontraré la Patagonia, el lugar donde la felicidad se recobra. Yo estoy ofuscado en este lugar donde todo es pequefio y nada a mi par. ALFREDO: Adi6s, Troller... TROLLER: Adiés amigo, voy cantando. ¢Pero tu, Alfredo, estas llorando? ALFREDO: Mis ojos estan muy sensibles. Adiés, Troller. TROLLER se aleja mientras ALFrevo describe el camino. TROLLER: Adiés, adiés. ALFREDO: No olvides, Troller, ve hacia el este, y no mires atras. éViste el camino alld, en el bosque? En el cielo azul, éviste como crecen las montafias? Es por el sol de hoy, el que tt nos diste... La tos le impide terminar su frase. iQué linda mafiana! La mafiana mas bella para este gran viaje... 54 ALFREDO regresa hacia su casa, mientras contintia describiendo el paisaje que se imagina en el camino | de TrotLer. Seguimos escuchdndolo largo tiempo des- | pués de que desparece. Fin Como vivir con los hombres... 55 Suzanne Lebeau Esta versién en espafiol de Cémo vivir con los hombres cuando se es un gigante* se estren6 en febrero de 2013 en el Teatro Salvador Novo del Centro Nacional de las Artes, con el siguiente reparto: TROLLER, EL GIGANTE: MAURICIO PIMENTEL ALFREDO, LA Rata: JORGE AvALos EL Hompre (MUsIco y LOCUTOR AMBULANTE): MARTIN PEREZ ILumiNnAcION: JORGE Kuri DISENO sonoro: BisHoP Arte: Paota RENDON DISENO DE VESTUARIO: MAuRICIO PIMENTEL ProbucciOn EsECUTIVA: MARCO LiRAMARK Gestion: Rutu R. ROSALES ASISTENTE DE DIRECCION: NORMA DUARTE TRADUCCION, VERSION Y DIRECCION: Auicia Martinez ALVAREZ * Proyecto apoyado por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, den- tro del Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales, el 1vea, el Centro Nacional de las Artes y la Escuela Nacional de Arte Teatral. Cémo vivir con los hombres cuando se es un gigante se terminé de imprimir en agosto de 2013 en los talleres de Editorial Innova, Afio de Juarez #343, Col. Granjas San Antonio, c. p. 09070, Distrito Federal. El cuidado de la edicién estuvo a cargo de Leticia Garcia Urriza y Hugo Valdés. Formacion y disefio, Erick Rodriguez Serrano. El diseiio editorial es de José Bernechea Iturriaga. El tiraje consta de 2000 ejemplares. eh ro tae Lebeau ha dedicado vida y talento a crear una dramaturgia que destaca por su comprometido respeto ha- cia el pUblico de corta edad. Autora de mas de 25 obras, muchas de ellas premiadas, traducidas a diversas lenguas y llevadas a escena a lo ancho del mundo, es reconocida como una de las precursoras fundamentales del teatro contemporaneo para nifos. Lebeau ha dejado una profunda huella en México. Ademas de llevar sus obras, montadas por Le Carrou- sel —compaiifa quebequense de la que es, junto con Gervais Gaudreault, fundadora y directora—, ha sido Peer eee CM AEC MoM Lalo Mors cole ce ReloMemNCoo1UP) ca. Y su benéfica influencia se deja ya sentir en algunos OSI RC ICICLE ee Paso de Gato nos entrega aqui una nueva obra de la autora, cuya traduccién y reciente montaje corren a forte elke MAN Co EME ACA aa COR ZL TO Re Ee OR OMe 2 CLC (ol Cet cLe no pertenencia a un mundo en el que no se tiene cabida. Por buenas que sean las intenciones del colosal prota- gonista, cada uno de sus actos sdlo siembra en Ewer) Tere mYe (oct tcellel a DL Mn Teneo M (com Umeo eRe Cc aPC ae Sc RoE AERC MMe Re UM CoTUC Teo Cue Romeo elmo IM-ttcT CHIR ero Kel los humanos —por considerarlos cobardes, crueles y es- ttipidos—, rechazo al que ella esté mas que habituada. A partir de estos elementos, Suzanne Lebeau teje una historia critica y conmovedora, capaz de deleitar a eee YC LCs aa uae ISBN: 978 607 8092 56 7 | meee | | 786078 " 092567

You might also like