a vesoeG anos = ALEAGUARA adh ~~. Sapo y Sepo ® —> son amigos 7 \ Arnold Lobel BiRL — dlustraciones del autor Fase Sapo y Sepo son amigos Arnold Lobel llustraciones del autor Sapo y Sepo son amigos y pasan muchas aventuras que reafirman cada vez més su entrafiable amistad. Con esta serie, Amold Lobel se ha comvertido en un clésico de la literatura infantil norteamericana Este primer libro de la serie recibié el importante premio Caldecott ALFAG LARA il ] | \ INFANTIL ALSapo y Sepo son amigos por Arnold Lobel st 3062‘THTULO ORIGINAL. [FROG AND TOAD ARE FRIENDS Del texto: Armolé Lobel ‘Taduecon de Pablo Lizcano © De esa edcion 1999, aguilarChulena de Eaton, td Dr. Antal Arata 1444, Providencia Suntago de Chile + Grupo Santilan de Eéciones 8. ‘Tonelaguna 60, 29043 Made, Espana Agua Altea Thurs Alaguars S.A de GY. ‘Avda: Universidad 767. Co. del Vale, ‘México DF. CP. 03100 + Aguilar Altea Taurs Alfiguare SA. Beaaley 3860, 1457 Buenos Ales, argentina + Eaitoria Sunilara 8. ‘Avda. San Felipe 731, Jess Nar, Lima, Pend + Editorial Sanlana (ROU) Javier de Viana 2350, (11200) Montevideo, Unsgusy Santina S.A Proce Carlos Argo 228, Asuncion, Paraguay + Santana de Balones, $4. ‘Avda. Arce 2338, enue Rosendo Guiry Belisaio Salinas, La Pa, Bolivia ISBN: 956238.067-5 Impreso en Chle/Printed in Cle Primera en Colombia: enero 1989 Sepia reimpresisn: septiembee 1996 Primera edicin en Chile otabre 1997 ‘Segunda edicidn: agosto 1999 Tetera edn oetiore de 2000 Diseio de colecién: Jose Crespo, Ross Marin, ests Sane “Todos os dence eserados Esa pulisctn 0 pede Ser eprom do nten pane, negara eens or ser de capes enforce guns fox po ign medi, ea cin, kc sic, cletibnko, magne, Cesrodiy, pore Seep cgi oa peo peo por Primavera 6 El cuento 18 rh Un botén perdido 30 Un bafio 42 La cartaPrimavera Sapo subi6 corriendo por el sendero a la casa de Sepo. Llam6 a la puerta. Nadie contesto. —iSepo!, jSepo! -grito Sapo-, despierta. |Ha llegado Ja primavera! —Bah -dijo una voz dentro de la casa. La nieve se esta derritiendo. —iSepo!, jSepo! —grit6 Sapo-. iDespierta! —Yo no estoy —dijo la voz. iBrilla el sol!Sapo entré en la casa. Estaba oscuro. Todas las contraventanas estaban cerradas. —Sepo, idénde estas? —le llamé Sapo. —Vete —dijo la voz desde una esquina de la habitacion. Sepo estaba en la cama. Se habia echado las mantas por encima de la cabeza. Sapo sac6 a Sepo de la cama empujandolo. Le sacé de la casa empujandolo hasta el porche de entrada. Sepo parpadeé por el brillo del sol.—jSocorro! —dijo Sepo-. No puedo ver nada. —No seas bobo —le dijo Sapo-. Lo que ves es la clara y cdlida luz de abril. Y eso significa que podemos empezar todo un nuevo afio juntos, Sepo. Date cuenta, podremos saltar por los prados y correr por los bosques y nadar en el rio. Por las tardes nos sentaremos aqui mismo en este porche y contaremos las estrellas. —Cuéntalas ti, Sapo —dijo Sepo-. Yo estaré demasiado cansado. Me vuelvo a la cama.Sepo volvi6 a entrar en la casa. Se metié en la cama y se echo las mantas otra vez por encima de la cabeza. —Pero Sepo —grit6 Sapo-, ite vas a perder todo lo divertido! —Escucha, Sapo —dijo Sepo-. éCuanto tiempo he estado dormido? —Has estado dormido desde noviembre —dijo Sapo. —Bueno —dijo Sepo-, entonces un poco mds de suefio no me har4 dafio. Vuelve otra vez y despiértame a mediados de mayo. Buenas noches, Sapo.—Pero Sepo -dijo Sapo-, hasta entonces estaré solo. Sepo no contest6, Se habia quedado dormido. Sapo miré el calendario de Sepo. La pagina de noviembre estaba todavia encima. Sapo arrancé la pagina de noviembre. 14 Arrancé la pagina de diciembre. Y la pagina de enero, la pagina de febrero, y la pagina de marzo. Llegé a la pagina de abril. Sapo arrancé también la pagina de abril. 15Luego Sapo volvié corriendo ala cama de Sepo. —Sepo, Sepo, despierta. Ya es mayo. —iQué? —dijo Sepo-. Puede ser mayo tan pronto? —Si -dijo Sapo-. Mira tu calendario. Sepo miré el calendario. La pagina de mayo estaba encima. 16 — Pues si, es mayo! —dijo Sepo, mientras salia trepando de la cama. Luego, él y Sapo corrieron afuera a ver cOmo estaba el mundo en primavera.El cuento Un dia de verano Sapo no se sentia bien. Sepo le dijo: —Sapo, estés completamente verde. —Pero yo siempre estoy verde —dijo Sapo-. Soy un sapo. —Hoy estas mas verde, incluso para ser un sapo —dijo Sepo-. Métete en mi cama y descansa. Sepo le hizo a Sapo una taza de té bien caliente. Sapo se bebié el té y luego dijo: —Cuéntame un cuento mientras descanso. 19—Esta bien —dijo Sepo-. Déjame pensar en un cuento para contarte. Sepo pensaba y pensaba, pero no se le ocurria un cuento para contar a Sapo. —Saldré al porche y pasearé de un lado al otro —dijo Sepo-. Quizas eso me ayude a imaginarme un cuento, Sepo paseo de un lado a otro del porche durante mucho rato, pero no se le ocurria un cuento para contar a Sapo.Luego Sepo entré en la casa y se puso cabeza abajo. —;Por qué te pones cabeza abajo? —le pregunt6 Sapo. —Espero que estar cabeza abajo me ayude a imaginarme un cuento —dijo Sepo. Sepo estuvo cabeza abajo durante mucho rato. Pero no se le ocurria un cuento para contar a Sapo. 23Luego Sepo se eché un vaso de agua en la cabeza. —iPor qué te echas agua en la cabeza? —le pregunt6 Sapo. —Espero que echarme agua en la cabeza, me ayude a imaginarme un cuento —dijo Sepo. Sepo se ech6 muchos vasos de agua en la cabeza. Pero no se le ocurria un cuento para contar a Sapo. 24 edtLuego Sepo empez6 a golpearse la cabeza contra la pared. —,Por qué te golpeas la cabeza contra la pared? -le pregunt6 Sapo. —Espero que golpeandome duramente la cabeza contra la pared, podré imaginarme un cuento —dijo Sepo. —Ya me siento mucho mejor, Sepo 26 —dijo Sapo-. Creo que ya no necesito un cuento. —Entonces sal de la cama y déjame meterme a mi -dijo Sepo— porque ahora yo me siento fatal. Sapo dijo: -:Te gustaria que yo te contara un cuento, Sepo? —Si -dijo Sepo-, si sabes alguno.—Habia una vez —dijo Sapo— dos buenos amigos sapos: uno se Ilamaba Sapo y el otro Sepo. Sapo no se sentia bien. Y pidio a su amigo Sepo que le contara un cuento. Sepo no supo imaginarse un cuento. Paseé de un lado al otro del porche, pero no se le ocurria un cuento. Se puso cabeza abajo, pero no se le ocurria un cuento. Se eché agua en la cabeza, pero no se le ocurria un cuento. Se golped la cabeza contra la pared, 28 pero ni aun asi se le ocurria un cuento. Luego fue Sepo el que no se sintid bien, mientras que Sapo se sentia mejor. Asi que Sepo se metié en la cama | y Sapo se levanté y le cont6 un cuento. | Fin. éQué tal, Sepo? Pero Sepo no contest. — > Se habia quedado dormido. 29 srUn botén perdido Sapo y Sepo se fueron a dar un largo paseo. Caminaron por un extenso prado. Caminaron por el bosque. Caminaron a lo largo del rio. Al final volvieron a casa, a la casa de Sepo. —jAh, maldicion! —dijo Sepo-. ke iy | | No sdlo me duelen los pies, sino que he perdido un bot6n de la chaqueta. a—No te preocupes —dijo Sapo-. Volveremos a todos los sitios por donde anduvimos. Pronto encontraremos tu bot6n. Volvieron al extenso prado. Empezaron a buscar el bot6n entre la hierba alta. —iAqui esta tu botén! -grito Sapo. | —Ese no es mi botén ~dijo Sepo-. Ese bot6n es negro. Mi bot6n era blanco. Sepo se metié el botén negro | en el bolsillo.Un gorri6n bajé volando. —Perdona —dijo el gorrién—. {Has perdido un bot6n? Yo encontré uno. —Ese no es mi botén —dijo Sepo-. Ese boton tiene dos agujeros. Mi bot6n tenia cuatro agujeros. Sepo se metid el botén de dos agujeros en el bolsillo. Volvieron al bosque y miraron por los oscuros senderos. —Aqui esta tu botén —dijo Sapo. —Ese no es mi botén -grit6 Sepo-. Ese bot6n es pequefio. Mi botén era grande. Sepo se metié el boton pequefio en el bolsillo. yUn mapache salié de detras de un Arbol. —He oido que estén buscando un bot6n —dijo-. Aqui tengo uno que acabo de encontrar. —jEse no es mi botén! se quejo Sepo-. Ese bot6n es cuadrado. Mi bot6n era redondo. Sepo se meti6 el botén cuadrado en el bolsillo. Sapo y Sepo volvieron al rio. Buscaron el botén en el fango. —Aqui esta tu botén —dijo Sapo. —iEse no es mi botén! —grit6 Sepo-. Ese bot6n es delgado. Mi bot6n era gordo. 37Sepo se meti6 el botén delgado en el bolsillo. Estaba muy molesto. Saltaba sin parar y chillaba: —jEl mundo entero esta cubierto de botones y ninguno es mio! Sepo se fue corriendo a casa y dio un portazo. Alli, en el suelo, vio su bot6én blanco, con cuatro agujeros, grande, redondo y gordo. —iOh! ~dijo Sepo-. Estuvo aqui todo el tiempo. Cudntas molestias le he causado a Sapo.Sepo sacé todos los botones del bolsillo. Cogié la caja de la costura de la repisa. Sepo cosié los botones por toda la chaqueta. eae se aire Al dia siguiente Sepo le dio su chaqueta a Sapo. Sapo pensé que la habia dejado preciosa. Se la puso y salt6 de alegria. No se cay6 ni un bot6n. Sepo los habia cosido muy bien. 4Un bafio Sapo y Sepo bajaron al rio. —Vaya dia para un bafio —dijo Sapo. —Si -dijo Sepo-. Me colocaré detras de estas rocas y me pondré el traje de bao. —Yo no uso traje de bafio —dijo Sapo. —Pues yo si -—dijo Sepo-. 42 Después de que me ponga el traje de bafio, no debes mirarme | hasta que me meta en el agua. ! 43 |Sapo y Sepo saltaron al agua. Estuvieron nadando toda la tarde. Sapo nadaba rapido y salpicaba mucho. — Por qué no? é Sepo nadaba despacio —pregunt6 Sapo. : SSS | y salpicaba poco. —Porque me veo ridiculo en.traje de bafio. Por eso —dijo Sepo. Sapo cerré los ojos cuando Sepo salié de detras de las rocas. Sepo llevaba puesto el traje de bafio. —No me mires de reojo —dijo.—Tortuga -le dijo Sapo-, Una tortuga vino por la orilla del rio. tienes que irte. —Sapo, dile a esa tortuga — Por qué tengo que irme? que se vaya —dijo Sepo-. No quiero —pregunté la tortuga. que me vea en traje de bafho —Porque Sepo cree que cuando salga del rio. se ve ridiculo en traje de bafio Sapo se acercé nadando a la tortuga. y no quiere que lo veas —dijo Sapo. 46 47 ee—Tortuga —le dijo Sapo-, Una tortuga vino por la orilla del rio. tienes que irte. —Sapo, dile a esa tortuga —Sapo volvi6 nadando con Sepo. —Lo siento, Sepo —dijo—. Todos quieren ver qué pinta tienes. —Entonces me quedaré aqui hasta que se vayan —dijo Sepo. La tortuga, los lagartos, la serpiente, las libélulas y el raton silvestre, todos se sentaron en la orilla del rio. Esperaban que Sepo saliera del agua. —Por favor —grit6 Sepo-. jPor favor, marchense! Pero nadie se fue. Sepo tenia cada vez mas frio. Empezaba a tiritar y a estornudar. —Tendré que salir del agua —dijo Sepo-. Me estoy resfriando.La tortuga se eché a reir. Los lagartos se echaron a reir. Sepo salié del rio a rastras. La serpiente se eché a reir. El agua chorreaba de su traje de banio El rat6n silvestre se ech a reir. y le caia a los pies. Y Sapo se eché a reir. 52 53a sm A — De qué te ries, Sapo? —dijo Sepo. —Me rio de ti, Sepo —dijo Sapo-, porque de verdad te ves ridiculo en traje de bafio. —Por supuesto que si —dijo Sepo. Entonces recogi6 su ropa y se fue a casa. La carta Sepo estaba sentado en el porche. Sapo paso por alli y dijo: —iQué te pasa, Sepo? Pareces triste. 35—Si -dijo Sepo-. Este es mi rato triste del dia. Es el momento en que espero que venga el correo. Me hace siempre muy desgraciado. —iY eso por qué? —pregunt6 Sapo. —Porque nunca tengo carta —dijo Sepo. 56 —jNunca? —pregunté Sapo. —No, nunca dijo Sepo-. Nadie me ha enviado nunca una carta. Todos los dias mi buz6n esta vacio. Por eso esperar el correo es un momento triste para mi. Sapo y Sepo se sentaron en el porche, sintiéndose tristes juntos. 7a Metio el papel en un sobre. Luego Sapo dijo: En el sobre escribio: —Tengo que irme a casa ya, Sepo. «CARTA PARA SEPO». Hay algo que debo hacer. Sapo sali6 corriendo de su casa. Sapo se marché a su casa rapidamente. Vio un caracol al que conocia. g ee Bae : —Caracol —dijo Sapo-, por favor, toma esta carta para Sepo y ponla en el buzén de su casa. —De acuerdo —dijo el caracol-. Ahora mismo. Encontr6 un lapiz y un trozo de papel. Escribi6 en el papel.Luego Sapo volvié corriendo a la casa de Sepo. Este estaba en cama, Sapo miré por la ventana durmiendo la siesta. el buz6n de Sepo. —Sepo —dijo Sapo-, El caracol no habia Ilegado todavia. creo que debes levantarte —Sepo —dijo Sapo-, nunca se sabe y esperar el correo un poco mas. cuando puede enviarte alguien —No -dijo Sepo-, { una carta. estoy cansado de esperar el correo. , —No, no -dijo Sepo-. 60 61ae el me enviara una carta hoy. Sapo miro por la ventana. El caracol todavia no habia llegado. —Sapo, ¢por qué te quedas mirando por la ventana? —pregunt6 Sepo. Creo que nadie me enviara —Porque ahora estoy esperando nunca una carta. el correo —dijo Sapo. Sapo miré por la ventana. —Pero no habra nada —dijo Sepo. El caracol todavia no habia legado. —Pero, Sepo —dijo Sapo-, alguien puede enviarte una carta hoy. —No seas bobo -dijo Sepo-. Nadie me ha enviado nunca una carta antes y nadie :=. Gers —jOhl, si que habra —dijo Sapo-, Tu mejor amigo, Sapo.» porque yo te he enviado una carta. —jOh! -dijo Sepo-, — De verdad? —dijo Sepo-. es una carta preciosa. ZQué has escrito en la carta? Entonces Sapo y Sepo salieron Sapo dijo: al porche de la entrada —Escribi: «Querido Sepo, estoy a esperar el correo. contento de que ta Se sentaron alli, seas mi mejor amigo. sintiéndose felices juntos. 64 65Sapo y Sepo esperaron mucho rato. Cuatro dias mas tarde el caracol lleg6 a la casa de Sepo y le dio la carta de Sapo. Sepo se alegré mucho de recibirla. 66