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aa | M.E, Cham La descoloniz: La cat oh impetios Editorial Ariel S 4 i st 8 PROLOGO ALA EDICION ESPANOLA 1s habitual que se piense en la descolonizacin como en un fendmeno del perfado que sigue a la segunda gucera mun. dial aunque no dee se ser éste un punto de vista simplifies slr. Es evidente que, en cierto sentido, los imperios han ido siempre creindose y desintegréndase, pera incluso si se com. fempla ln wdescolonizaciéne como uns marifestacién lnhe- ‘ente a los imperios macitimos europeos que han ido nacien- dd a partir de ls época del Renscimiento, este fenémeno dio ‘enmienzo mucho antes de 1945, Los dos principales imnperins maritimos europeos en el 'iempo fueron los de Espaia y Portugal. Tambien fueron los primeros en hndise.L2 guerra es el mis comin de lox ele. mmentos destruciores de esas formaciones: Alemania ¢ Italia perdieron sus imperios como consecuencia de las derotsy ‘que siguleron a la primera y a Ia segunda guerra mundial ‘espectivamente; Espana se quedd sin Cuba y Filipinas a aur sa dela derrota que sufi en a serra sostenida contra Esta los Unidos en 1898; pero la desintegracion de los imperios ‘spanol y portugués en América Latina siguio tn proceso ‘muicho mis complejo. En realidad, ambos fueron destruidon or las guerras napolednicas y por las tensones que ésas ge ‘eraron ex ls teritorios metropalitanes. EThecho de que, fi nnalmente, Napoleén fuera derrotado no permitiéa Espa ® Portugal restablecer sus imperios. En ese sentido, tal ped dd cs comparable a la de britsnicos, francesesy holandeses despise In segunda guerra mundial. Las tes potencias se encontraban en el bande de los vencedores, pero el mundo habia cambiado demasiado como para poder restablever por entero al sian quo anterior Gran Bretafa perdié también un imperio finales dels 5 PROLOGO A LAEDIGIONESPAROLA ‘10 xv (as colons ameticanas que se comestirian pronto fen Estados Unidos), aunque Francia y Espana desempeia- fan un pape sufciente como pata permiticles a los america nos conseguit In independeneta, la pérdida de ese imperio ho comenz6 a causa del enfrentamienta en una guerra exte- Flor sino en una disputa interna entre metrépol y colons. Hasta el siglo Xi, Ia expetincia imperial de britnicos y tspaioles habia sido en muchos aspectes parecida, gober ‘nando ambos colonias de poblamiento ubicadas en el cont nente americana. La politica de os bitanicos weidia ala de- ‘olucign, mientras que la de Tos espaBoles lo hecia hacia la interaction, pero sus legidos fueron también muy similares: ta lengua (castellano en el su, inglés en ol nore), el erston hismo (eatolicizme ene! sur protestantime de manera pre ‘ominante nel note), y ls sistemas legal y politico. E la fetualidad, las Américas son el producto y las herederas de Ia eiilizacion europea, scompatiada tnicamente por alg- na gotas de ln herenein aticana y de Ia eivilizacion indige~ TEn el siglo Xx, aunque Portugal se reafiemé de manera tarda como una potencia colonial e® Altea, Espafia deser- paid un papel muy poco importante en el nuevo imperiais- Ino, Fue sobre todo a Gran Brelata ya Francia en mucha, ‘menor medida, a Alemania) las que les coerespondi I onde conqusia y gobernar vastas extensiones de rras del fspacio no europeo, Deede el momento en que, muy a ment {dose contempla In descolonizacian como un Fenémene que tiene lugar exchisvamente a partir de 1945, se considera, también n menudo, que ese concepto debe aplicase inca Inente Ta liberseidn, @ 9 Ia eonsecueién dela independen ‘a, de los pueblos asiicos y afieanos que previamente ha ban estado sometidos al mandate de los europeos. Es nec: sivio realizar una nueva interpretacion lo sufcientemente fmplia como para dar cabida en ella al proceso de madura- ‘ion enteramente pacifico que tov lugat en pases como Co- fd y Australia. [La conquista europea del resto del mundo dio eomienzo bio 9 Tn cresidad,caractristica del Renacimiento, va la fe, elemento inherentea la Contearreforma; y finalizs, de una PROLOG A LA EDICION ESEARML ‘manera mucho mas humile, despues de Ta entire slo te fos guerras mundisles(guetras que eamenzanan bh ‘oraz dela Europa sclilzadan), como conseeien Sparicién de una mayor voluntad para recenoccr Ie las de tras culturas e eo, i Vga yee i clas de napendecia Put: B Gifot'y WR Lous leds), The Tanaer of Rowen Ale, Ye Mara 2. Acne 1980, com ls 199, Fuente: Bexedo ex The Bamiyn Histol Ads 1981, mapa 86 saw. asia INTRODUCCION El concepta de wdescolonizacién» es bastante reciente, pues no Hegé a convertirs en termine de uso general hasta las dScadas de 1950 y 1960; no obstante, parece que ya he- bia sido seufado-en 1932 por un estudiogo aleman, Morita Jalias Bonn, para Ia vo2 simperialismos de la Encyclopaedia ofthe Socal Seences (Seligman, 1932). En la actualiad,s¢ fntiende habitualmente por =descolonizacion» el proceso ‘que condujo alos pusblos del Tereer Mundo a conseguir su independencia de los daminadores coloniles. Sin embargo, no encontré wna acogida muy favorable entre aséticos y aricanos puesto que tal definici6n levaba Impltcto cl he ‘ho de que las inleativas en favor de la descolontzacion (lo mismo que aguellas owas que habian conducido a la cree ‘nde los iaperis colonies) habfan sido tomadas por las potencins metropolitans, En constcuencia, asiticosy alt anos han preferide en acasiones hablar de'was «puerras de Tibersciéne 0 inelsto de la erecuperacin de I independen- cian. (Hngreaves, 1979, pp. 38; Gilford 'y Louis, 1982, pp. 315, 569). Esta objecion posee un cierto peso, pero no dela por ello de ser menos cierto que lis decisionesWitales se tomaran en. Lodes, Paris, Bistas o La Haya. Los historiadores deben trstar de encontrar el equilib al examinar, por uns parte, Ia politica de ls poteneias colonials, y, por otra, el eonjunto ddelkleas ¢inicintvas procedentes de los colonizados. Ambas Se vievoninfluidas ou frecuencia por sus ekperiencias hist ‘cas anteriores, Por tanto, es tambien importante que el his: toriador contemple ol problema con’ una perspectiva de am plio sleanee, La descalonizacin tavo lugar casi en su total ‘lad partir del final de Ta segunda guerra mundial especial 6 nernopecaos mente entre 1947 y 1985, pero posta unas ralces mucho més ‘profundas, Hay quienes han defendido que los imperios ex ‘ropeos habian sembraco In semillas de Ia decadencia ya des de'los primeres momentos (Kennedy, 1984, pp. 201-203), € Inco, aunque parezea un punto de vista excesivameate de- terminista, es bien cierto que tanto el ritmo como la forma fen que se desmantelaron los diferentes imperios europeos on, en gran medida, deudores de experienclashlstrlcas an {eriores y de las leciones que, correcta o incorrectamente secaron deel, sta situncin 5 particularmente cierta en aquellos ca- sos en que In relncién habia sida duradera y de gran impor- lancia para amas partes, como sueedé entre Gran Bretata ya India, teritoro este timo que debe tomarse como un ‘aso histrieo paradigmatica en cualquier estudio sobre des- ‘colonizacion. Peo ls historia habla comenzado mucho a- tes de 1947. Se tras del pals descolonizado mas extenso, as, ‘como del primer ejemplo importante de descalonizacion con [posteriordad » 1945. Actalmente el tema de asta qué pun {os India habia sido el modelo de Independéneta pars Af. cc es un move de debate entre extudionss (véase p. 26), ‘pero parece estar por encima de toda disputa que el pals satico Tue el gran ejemplo en el que se miraron las waco: halistas de otres tertorios colonials, yque la renuncia ala posesi6r de Ia India en 1947 clos de manera inexorable al {mperio brtdnico (con mucho, el mayor de los imperios eo loniales europeos) en el camino de su disolucén. Las demas siguieron simplemente Ta que habian comenzado los britan- os: Debide s todo lo que ella Hevabs implicit, hbo que e= perar una generacisn para que se advirier In realidad de la Sitvacién, pero, Finalmente, le mayoria de los antiguos poe. ‘los colonies se encontraron con que estaban empujando ‘una puerta cuya cerradura ya habia sido abieria Los euro peos tuvieron que abandonar el intento de dominarel resto el mundo politicamente, aunque quizs no en el aspects fconémico. Habia legado a su fin la era comenzada ine latamente despues del Renacimiento nreonuecion ' Los procedentes La primera pron per de tevitoro Imperio de la Europa Moderns no inv harem el si sino a finales del sigh xvi y pine de ke, sony 8 pucbios extranossitdos de fornia temporal hj europeo, sino a poblaciones de procedenia pln mente europea que rompieron lr vines con ls, coloniaes para formar ss propos Estados ‘qvecl movimienta que tava ga ene sige <> ales pereetamente defines, tlic neh ne In ereeisn de nucies Extadoe-naiin aw lege cbs hasa exe misie momente pics ie fos. No paeden queda eno hilo lx pecans vas Selossigis xy XX. En acasione sean cris 2avos, por las eolnias dl ign x po cmp In he uiétona de aia que habia conse un en hn versitarla too conoid cay mercanos habla realza soe la imac Se es tos briaicos que precedios aera de Tne rican, ere propia formacton Gel mets de prints del sito 23), cm ainda ean 9 dior a que boicteran los pret Ioepropios dl pate a pts de esos primens evita te ores de las poteneins colonies. Gran Becta ss fo 176 y 1783 cuando se erarom Ine Este hy ey &s psible que Ll privacion mo Hay sh Gran Brea, tant Jose ct punto le sla smn deste el pogo, com leh super ram es te tierpo El pofesne Haren defen en or pee nice sisi para centiona I mento ents pin ica: de Iapetsv el Bier dees de pier se ets Fol eta, 1952, pp. 11) Noobs, ka gueren de fe funk vat de en i beticas ana prenta i ble sub har entender el imperi,suque se re Fly consigo misma por asa ria air hu de un hecho natural. Las enlonias fe Finale za Ta mnie ¥ de ‘le runsepur a independencia de la 1 Brotaia opus serine obsteulos a ese tesa sus olras colonia ae pblamienta, come Ca aks Asstalis, Nurs Zelda Sudafrica (ya dese princ him ‘. comtenyplaba esta stim come uea colo ho banc gual ue Has anteriores). Sin eet alana por convertse en nbjeto de debates sos im angen cram aplicables a las dependeneias 10 inv liao kas rumeress eas tropicals "Dict pia Alien y om tanto otros Iagares por pate de Gran Brstafa de tas eolonias Jon huniriento alguno da potencia dana then al conerari, ati tena en el recuerdo Ta Viniasza po stato he puerra de fs Siete Aros, entre proporciosaloel Canal frances a » pete exrupca dominsnte en fa Tn sls Piel teri estan ya comerzando a bgoerse realidad ihc canes cambion cconomicos que convertivian a Gran. Sytat daatean Tan Pevido de tempo en fa patencia ‘evens mundi. Aquellapsrlida debe inn ctnme pobtcos de lo bitanicos, 2H determ inks tos aamvicanesy a apoyo fatermaconal qe estos gration de Prana ye Bap ow lilerente os ks stra del undanento de os impe cr steivl 5 poring en América central y meridional a thes sl sighs ADs, Espa y Portgal habian queda ics pur las gucrras mapleénicas que ls aba ie conserva sts Knpetive americanus por mas Sonar um els lugar abo tne, por lo gene {Vs Fatilos sess se eslablecieron par Hema va fron anuy i anenadecn regtinenes inestbles ‘linus a wcll entre Toran de gobierno extre ‘nists. Alpunos historiadores han especulado con la tess de ‘gue se necesita una verdadera hicha para obtener Ia inde ‘Pendencia como estadio indispensable en la creacion de Es {ads establesy disciplinados ‘ho largo de siglo xx, tanto Espana como Portugal pass- ‘ona ser potencias de tercer orden. Tos propagandist eolo- tales les fe muy senello optar arguments de scausafec for, tales cotta que la pada de Is coloniasevaba apareo {i inevitablemente la privacicn del estats de gran potncia, 0 bien que a privacin del status de gran potencia se vela Tne Ciblemenie seompattada por la pérdida de las colons. Ea ‘cualquier cau, ln posesgn de un imperio cra contempada ‘Como ima especie de distin del estatus de gran potencia, importante por el prestigio que confera, al margen de star ign era alles desde el punto de vista eeonémico. TEI gran ecouomistaescocés Adam Stith adviré esa pa radoja en una fecha fan enyprana como 1776, Defendié con fran energia que, aunque las colonias no signiicaran otra ‘cosa que uns enorme responsabilidad para la potencia colo- ‘ial, nga pas as abandonarfa veluntariament,debido en parte ala presién ejereida en la metépoli por los interests ‘Sreauoe, pero tambien » enusa de consideraciones generales Felacionadas con el prestigio que conferfa Ia posesin de un Sinperio colonial. Lot argumentos de Adam Smith eontribu- yea a expliesr por qué. aunque la doctrina de moda a princi bcs y mediados del ipl xDxsostenia que las eoloniss const Tufan una pesada carga econémiea y una gran responsabili- thal interaconal, no hubo ninguna potencia colonial que tralara de deshacerse de elias. ES més, en esa misma epoca Gran Bretafia aumento considerablemente su imperio (Ro- binson y Gallagher, 1953, pp. 1-13) “Los sos finales del siglo XIx fueron testigos de na reno- vada competencla por aumentar lo imperios coloniales. La pinign de los expecalista se ha voeto conta las explicacio tes de ese fendmeno que lo atrbayen exclusivamente a una ole causa, Lo que Hew a las vielas potencias colonials, ‘comno Gran Bretafa, Francis, Holanda, Portugal y Espatia (acompafiadas ahora por atras nuevas, como Alemania e Ta Vi), a tomar parte en In carrera por la consecucin de nuevas 2 pimmbotediow } ech Ll in ie i cil eee a yor mae mom i i i te ac eeeranes eri see are i Se ets sige ere eee tte SI or oo Hea Cec Goi eat Po inp Fo a eens eee tear etter acre Se ee ee casei rahi oe eden See a ere peetilad Rote ea eke acai a Ce a daa led rose er eres te es Sa a ne tee eee rere oe ae ie Eien Oo mh i Tea See tne ae ee aerate ee en pe Souda ea pacing ve elete Fecma getter lo decane ex Ai, hbo sempre uns importante eta de ger ‘eto, ange hatte see teem serie Arosiadamente a iad de stone fio se enconrab bajo ener hati ese ntnenbnsiondo gobermn por opi seqin 36 les conoia de ronety eect ona bitcom. geme de He ts habie conven lo snide a tars Gialmeni tanita de lon pio. Ean ei se Fefords ors asombr sc Ie proes,o thin de reyes dimensiones del mores a nrarse de promo como pene dana “Sheontinenie info Em fecersr treo MCh Treveyan eeriba sy relaion caste vate th fe ta tame como nga yy de en faluralera te as esa, no peer pena: we Ssfocrzo plitcn alpine ve mics iar ehh iste fnalmente de mies kp fn Stokes, 1959p. 40) Pere sacaa loans ene ase Ings el goberntlr de Berta Mensa ies tba legado wn ends onterssdnane interes e que aleancemee um ronta separ on Bio civiizao, mor qe una rapra lent lin bra, en agate bee os, inl nuest comer rec to ave leans insttocones ue haya {lp (Colebroake, 1884, v.72 Una mented dest tpo bya hy to educacin ost en Tan eine wa Elphinstone babe qe se ae llevvin Gran Br ee repens derieselvn thomas Pabhington Meee onan elaine Oren em TSS. nga ska ene eonocmitno copeo, pean, en a igh itunes europea [1 Sued io ave SNES EPG i det que la histor ingles 9 send we gems [el Bh cetvo puede alejase de nosotros (-1 Fee wa veto 22 comer en inconsante & MUESTOS ‘feos, Pee ete iutos que hay ave seis on TRIN ue np enetde ods I ess matures eerfinoran le eadenea, Agus tranfos no son ols elon pie de ein Sore ls babar ue Wei ts ovo que pesto imperecaero de wuestras eee cis mont de esis erara y ness yes ‘aa en harmbetsn, 1974 pT. yc rante l peviode impevalisia de Ta ima parte i ee precio quesar a i lado de manera. indefinida abut de que ls dia se conviriea en un Estado in- inthe, csuanisma-Kew sabyactea i lentrmtroduceion =iewetow se goer representative cn sub in, cemenvando pola admisin de algunos i regen para formar parte del eonseju legslativo del Mead acceo con fa ladian Couneil Act de 1861, El Acta TUR is fa iia, de 1909, mis conocida como a re nace Murky Ain (por los nombres del secretario de Este i pore Lu hia, el wean radical John Mosley y de virrey eel niamento, Jord Mit), reali certs, progresos jos sucplba mayors no oftiales (aunque no nec: Wve cgi por sufragi) los wonseos legslativos i hs totals, i blen no todavia en el propio con vi lesei del wire ales avances parecieron sustancio CE EINa moment, aunque no dsjaban de ser modestos, ‘ith les compara con la posicién que fabian conse: Wey angus clon de poblamiento bites: Ca- ‘Nostalia, Nova Zelanda y Sadafrica habian obtenido Tite jms ne pects a wna sutanom por toque se retire sedation interna y,snque todavia sin na definicion haa derecho a ser consultadas en las deisiones 1 Steir que pain afectalas. En otras palabras, Mina el sess de dowsinion, que haba sido de- ‘ce pmtmera en la conferencia imperial de 1907 Tiida, y de manera automstia, lox dounnos y 1 tia, Jo misino que las colonias britnieas, se endontraron ine rnetsos en el conflcto cuando Gran Bretafa declaré la gue faa Alemania, porque, syn el derecho internacional, el Iimperiobriténico estaba considerado como un Estado nico. Pero el gobierno metroplitano habia aceptado ya en la prée- fica que la contibucidn al esiverzo de guerra de los domi nice y dela India debfa Ser doterminada en sus respectivas Cpitles més que en Londres. Los dominios (Sudafrica de manera menos entusinsia que los denis) dieron su apoyo a Gron Brera. La India re identifies también con la causa britinieayHevé a eabo un envio de tropas. Gran Bretana, agradecida por lo que pareca ser una pro funvla muestra de lesltad por pare dela India, respondio con Ja declracion Montagu de 1917. Lord Montagu, seeretario de Estado parla lia, such ol 20-de agosto La poltica del Gobierno desu majested (pasa por la sii cada vex mayor eos nis on xs a ras {els aininiscn y pore deseo gradual dels fstine ones de suogobiem, con cl pono de mic puesto en la ropesva conseeyein a India de un golem respons Sl eomo pre nepal del impero itn, ‘Se trataba de una declaracién dominada por la cautela, con el énfasis colacado en Ia palabra gradual, que quedaba fin mas carifcada a medida que avanzaba el texto, cuando ‘Montag hea hiacapié en que, como la responsabilidad di- thu le eomresponlia por el momento al gobierne brinico, era te el que debia deteminar Ja ocasion y a cuantia de cada favances, que, a su vez debia decirse pore yrado dela «00> peracion india. Pero aunque estuviera marcada pot tales Condiciones, Is declaracién Montagu no dejaba por clo de Sienifcar white, Frases como «institiclones de autogobier hnow y agobierno vesponsable no era evidenteroente ragss. Eos mismos conceptas hablan adguirido un preciso signi ‘carlo legal enol desariollo dela rlaciones entre Gran Bret ba y aus colonias de poblamiento, A Ta India se le estaba ofr clenco el sesttus de dominion, comparable al, que ya disfr- tala Canad, no de manera iniediaa, pero sien un futuro Py eniopuccios prevsible. Se tts de la primera vez en que Gran Breiaia e- faba a airmar formnalmente que ése era el objetivo-que debia flcenzar cualquier teritria eno blanco» desu imperio. ‘Sin embargo, las consecuencias de Ja primera gues mundial conseguirfan qve fers Alemania, y no Gran Bret fa. la primera gran potencia europea que se vera obligada a abandon su mpero de la época prebelics. El presidente de Estados Unidos, Woodrow Wilson, habia esperado que lf hal dela guerra no se diet ingurm clase de anesiGne; no tleseaba gue en Escape se mantuviera abjerta herida algun ‘como Ja que habia provocado la anexién de Alscia y Lorena por pate de Alemania a falar la guerra franco-prusiana, pero low aliados estaban igvalmente deterinados-a no de tolver las colons alemanas que hablan sido conguistadas fl transcursa de Ia guerra. Por lo que se referia a la situa ibn de los Estados sucesores del imperio astro-hingat, fque se habia hundide al final de la guerra, los aliados se bian comprometido a aceptar para ellos el principio de wau= {odeterminaciGn-. Eran los propios pueblos los que deberfan ‘legir a qué Estado ceseaban perteneecr. Se crearon nvevos Estados, como Checoslovagula y Yugoslavia. A manera de en ‘ayo, ls allados aplicaron asimismo iéntce principo alin perio otomano (tren), que también se habla huddo. A lo [Ergo ée la contends, hablan apelado de manera deiberada sl apoyo de los arabes que vivian en el interior de este Imp tio, muchos de los cuales estaban ansiosos por deshacerse Jel dominio treo, No abstante, ls alias no ereyeron toda via oportuno que estos Estados Arabes de recente creacitn fern eapaces de gobernarse a sf mismos, “Tampoco ninguna de Ins polencas aliadas two la oct: srencia de aplicar esos mismo principios de autodeterina cin a los teritorios que habian conformado el irperio ae ‘nn, El tema rclalio a los asentamientos colonials apare- fa en el quinto de los famosas wealorce puntos» del presi- ‘dente Wilson, Esta importante cldusula exit Un atute i, trad com meniaidad aie y aboa- ome impede tas ne vclsmaciones colonials bas Uncen lnsoita sbcrancia del rineipo de qu, er el m0- srmopuccion = ment de dcerinas das ns sons rcs ‘anf, Jos intrerer dela pbacenes ec dev ter vs pes igual alos joss eelarmncies le We ‘i titra a de determi Las alados se quedavon en cierta medida contre 1a contradiecion existente one los principio qe pr than y el regatoo ya pneado de mods por lo gus xe felt destino de ie mtigunecoloniayslemanss. El rsa tstablecimionto del sister cle «mandation, Io fs fn denn reign creda organiza In Liga de Nat EEistinn tes clacs ele mandatos: les ele tpn A pee ‘camentc alos Estados aparccids 2 part de le desir ‘lin de pero otomano. Sir fast 1920 Lior Form parte de Sista) se conver lest hs 4 alo francis, Irak (Mesopotamia) y Palestina (> fenlonces ineluin a is tertorios actales de tel ets hia) legarom 3 sor mandats britain Estos melas tipo A obligaban a la potencia tandstri, my aol obernarias de forma spropinds. sino this wos fue el erste del mandato aleansar wna Slyrnt lena tan pronto como fuera pole, eo nn Hemp considera rmzunble. Irak alesis by iene 1932, era Tow restanis mandate se ences I el dominio de In poteneis mandatare cn 1959, sf stl Seguncla gaerea mali ‘Los mandatos de tipo B y C se aplicanew «las ais colonine alemanas de Arica y Asi, Le tp 1 tories qe Iabian si trvmaferides 2 ire ‘roped, Gran Bretaia psa ser respuetlede he nik (ls antigua Alrcn erent emia) v sept tes de Togo ¥ de Camertin frnterizs em cll misma posefa de Conta de Ora» Nisei prop de Ins dems rae cle Tog» Caer 62 fremlera con aus colonia de Daberey ¢ Chen. ddtes de tips C inane ligersste dle fe se! ‘ero fabian sid ced 2 varias peste nc = Pacifico. La Union Sulatican xe ent eli dora de le satis Aten stele lea ‘tsa de parte de Nueva Guinea y de algunos ots ter ‘tis inline del Pacfieo, y Nueva Zelonda, de Sammon oe "let. No exsfoobligneson formal alguna de hacer seguir + clos tcvitvios por la senda de la independent, Se exh pia dla peste tan ia Gnicamente que es proporcio. ‘un zohicmo nen y humane, ae se abstoviese de ex otal ae suprimiera males tales como lay restos del ners coast. Lt potenela mandarin debia hacer He «ulormes epulares 2 la eomisisn de mandatos dela Liga Naviones,comision que se tom at trabajo eon gran se stuf. Por in general, las potenci tnandatarias eamplian ‘sotupilosanente con el deber de enviar los informes,y, ‘wicntis li Lia de Naciones estovo vigente, el sista de sano enandde menos el mérito de dsclar unos mo- stele (macades, eso si, por un elevuda grad de patemalis: 0) snediante Ios eval se esperaha que se rgiera el com: ‘nami de las potenetas colonies ta ppd de tos slindos ea tempo de guerra, en atu pocamacion dela docrna de la sooo ‘cn, ei pr desaperciba eel rao loa + expecilen alas pres que, como en le Indi Bet “can ya vo ina clase pata my prepared, El pa ret aossnpenai por i nda es de prime impontaneia ot “thst, En aca a tet aa ie Ts es cle i chest debate a propoito de its amisible ‘px Asie debe Goicunemecontemplare cme unter ‘orig sg hn pasos nares por sk en sua hae ts eidente = hens pte de capeienctaafsrana es precte inp Ae, po no pede dsacharee po compet int line desempeado for le nacionaliss inion En ‘isle ooo de Nigra ert: a India es un Be ii er nto Ss chs pare! oqo Sis contmpladn con entsasme 9 simple por oe ch cles age table er tay consented Jos terrible peligro de division entre las comntdades indo 'y musulmana, que podian fener in paralelismo evidente en propia Nigeria (Awolowo, 1947, pp. 25, $0-S1). Muchos de lo primeros movimientor nacionalstasafrcanos adoptaron clnambre de weongreso» an imicacén del Congreso Nacional Indio. En Sudaica, un Joven abogado nubs, edaeada en Co Jumbia y Oxford, Paley Seme, denominé en 1912 a una orgs nancion reign éreada por él Congreso Nacional Nativo Su dafricano. (Posteiormente, en 1925, eambié su nombre por ede Congreso Nacional Africano, denominacidn con la que se le conoce en la atualidad) En 1918, otro abogedo,éste de (Costa de Oro.J-E. Casely Hayford, fundé el Congreso Nacio nal dl Africa Occidental Brianica, Pero por encima de eual- ‘ier otra cosa, la India properciond aos movianientos na ‘omalistes modernos-un roe cerismdtico cn le figura-de Mahatma Gandhi, personalidad que pareeié combinar uns ‘especial habilidad para wiz eon Ia mayor capacitacin to- ds ls teticas de los politicos eecidentales con una autént «x reafirmacign de los valores no europeos. Los lideresafr- fantor hablaban siempre de él con admiracién (Nkrumah, 1957, pp. visw). En 1968, Chipre (independiente desde 1960) emiié un sello de correos para conmemorar el cente- nari de su nacimento, ‘Ln primera respuesta de los no europeos a las presiones de la conguista europea fue, como es natural, lade la ress tencia armada Ene siglo x0, los ineas y los mayas de ls ‘América meridional y central lucharon contra los conguist dores espatoles. Los indigenas de América del Norte man vieron una lucha contra los ocupantes europeos hasta finales {el siglo xn Ln tala de‘ Wounded Knee entre los sie y In ‘aballeria de Estados Unidos se ibs inmediatamente antes dd las Navidades de 1860 (Brown, 1972, p. 352) En la India, britaneos y franceses se ganaron en un pe ‘mer momento el poder politico actuando como ausiiares de los mandatariosindios que disputaban entre ellos por hacer se con la herencia'de un imperio mogol que se derrumbabs: pero en el: momento mismo en que los britanicos comenza fon a luchar en benefcio propio se encontraron con la fea resistencia de algunos pretendientes indigenes. Sirajud-dau- 2 ermopueaoy Ia, el nawab (gobernador) de Bengala,fracas6 en si intento por derotar las fueraas de In. Compara de Ia India Oriental britinica en Plassey, en 1787, pero no seria hasta 1799 cuan- do el sultin Tips, mandatario de Misora, region de Ja India meridional, five derrotado en In batalla de Seringapatar por Arthor Wellesley, posteriormente dague de Wellington, y ht brfa que esperar hasta 1803 a que el mismo Wellesley deco tara en la batalla de Assaye a la confederacién mara. Hay aulenes defienden que, de no haberse, produce la interven ‘dn betdnica, Jos mératas huberan side los sueesores nat rales de los mogoles. Tal alirmacion no es aceplada univer ‘Salmente (Spear 1965, pp. 7.777 116-117, pero los victoria: ‘nor ncortmbran fechar props supremacia sve la India partir de la derrotadefinitiva,sepuida de su posterior diso- Tucin de la confederacién marata, en 1818. "in Africa puede encontrarse un paraelismo a esta resister cia militar dela Tia, en particular all donde Yoseutopeas t= pron can un Estado o un imperio fuerte yn ocasiones,mil= {arista, Lin Costa de Oro los briinicos sostvieron na sei de faueras, en [821-183], 1873-1874, 1895-18969 1900-1901, con tra la polerin confederacin achan. Be Sudden seen taro 3 Tos niles en 1879, slerdo en un primer momento el emstronn encuentro de Isandhiwans, Ni que deci ene que fos emigrantes boers mantivieron wna hucha entra Jes ules ‘durante un period mucha més dltado de tempo, Zuid Se Incorpos® a la colonia britinica de Natal en 1897, pero en 1906 stall un tebalion aa mucho més importante. Ura e- nia emparentaa con los ules Ja matabele (ndebel), comba- ‘6. ls bstnicas en 1893 para evitar que éstos mantvieran el contro sobre e!tervtorio que ibaa convertrse en Rhodesia de Sur (la actual Zimbabwe). No deja de ser eats sorprendente ain ‘ue el pueblo shons, dominado ya por ls matabele, y de los que se esperaba que reibieran als britinices como libertdo- res, se levantara fambien contra étos en 1896. Gran Bretana onguists Egipto on 1882 sin excesias difculiade, per Te xpultads del Sls egipeio en 1885 por un fundamenaista isco, El Madh Unicnmente pudievonsleanvarde note unteol sobre cv ime teitoria enn resell de una eam psn pram aca ela eb pe vneral Kitelener en 1896 y 1898. La tlsnas fincas 9 tare ha sx apuesta por consi Abin, sulieno a deme ante en fa bain de Ades, en 896. Lm ne Mn cabo su expansion lon eon pan ke eva ke ic Tonia dle Senegal, y sigairon a eas ht leva af din acetdental, donee spon Finalmente dete yo by a Uénicos en Fashods, en 1898, despo de Traber ssi we Fern resistencia por pave dele en anise si sulimanes de la saan En el or, le ance les Sembarearan en aguclas tira en 130, ‘eintens de afi en someter Arli, ‘Sin embargo, todo estos intentos de oxistencia se vieron Finalmente enrdenad arcs nhs Al ‘yd en manos de Tos italimms en 1935, Lt sencilla este hecho, y que, como es vbvin, Tmuena parte de vera, reside en In enerane disuse poleneial que exisfa enoncos entre hi ite sy nentes. A finales del siglo xix, Europa Habis Nevins > tina revolueign instal desconvida par lastest to No era sinicamente un problem de super wis, iayie Hilsire Belloc ond om lr cir ey sl Ts entepeos peel hy emus fs len acta ra) 9" no ast sus oponentes, Contahary tani vw Hy Fiores medins de wansports, que ichvi hows rn ro, fervocatiles, y, ya entre el sig XX, bv eon sw predaceibn abril podfan Iver fpr se waza en fs Jocaligades refi js ne toda ta eficaz buvocracin del Estady maxlern Ls vl fueron tanto psicoagios oor ae lonalisias alicanos recon ester mt prado sn temor revereneial al topes rucsra de fa esr eine, tale Se en a vapor, tsps. Propaganula ihe. ts ve Sepect crud tea (60 a tna en el muasen Vitoria y Alberto), en et ese Ge i tigre dewrand 2 un oficial inglés; et etal Hise gue igre eomedor de hombres era el emblema, sonal jp Tip Clo ls tapas briténicas ent ‘oct spit, Sevingapatam, ei 1799, se encontraron Con bes perk dora com caviatiras en las que pan Yer vise cary enrojecidas, ea bajo ls mesa, com ‘tameut rach, mczclados ent perros y cnt Awiangalentalos por lis beiténicos en la detominada ‘ate detlOpins, entre 1839 y 1847 (de hecho, Ia guerra ‘vo tna que ver enw el conercia en yeneraly eon ‘steric britinica de ue las chinos aceptaran las nor suis defy iplamacia europea que con el api), Jas chinas sulcuypto su victoriosos enemigos si ssombro, El co swiss Lin ret una censsra magistral els vase strgjnis on 1839, Esra siguiente 1 Gna Ci jst por tas lea ue per iano acon in se Bentley ns ts os] Mistna passe enema avin len de ag sh oe Camnin dal Cs jug ene To ‘ana ara wswira ee par pany Wen Instn ‘wifi de sms agus pat hy habe on ‘i sean eapaces de discern sire allo seo ward vida yo que de mete ere gue propor “a bec yall que ca lal (tal en Wale, No otstante, los chinos se vieron obligads & abrir los nn spins del Utada los invasoines finales des sl, scala uh gran diner de concesiones alas diferen: MEP vteanjeras. Alvear le 1900 parceta impos! casa a paren entre Ris, Ale ns alia y Estados Unidos. No cchonents el poderto militar lo que la sal, aunque his liscisram una fuerte resistencia em 1E3B-1842 le saucer 1856-1860. En 1900. en venganaa por el ataque “ait ss eas shvante Is rewuets de tos boners, Tos ‘sncion de Gran Ivtat, Francis, Alemania, Estados Unt ev dupsin abcaeanun y neuparot ks eaptal, Reka. China se salvé en parte por los eelos que dominaban a las grandes Potenciss, cuya eivalidad mantendea tambign intact el in pesio otomano hasta la primera puerta mundial. Pero desein- ‘peo asimismo um importante papel el mantenimfento de la ‘nidad politien del pas. China no se fragment en numero 55 unidades politias, coro ocurié en el caro de Aiea. La linastfa manchsi era debil pero no se estaba ya hundiendo, como habi pascdo con el smperfo mogot cuando ls beténk ‘08 consiguieron el contol sobre la India. Los chinos confi ban en los valores de su propia civilizacién, y su desconfian aa y su desprecio hacia los extranjeros signifies que entre cllos se dieran muy pocos easos de -colaboracionismoy. 1a existencia de colaboradores constitufa un elemento ‘esencial en la imposicion del dominio colonial Pero, parad- iamente, contrbua también a generat Jas oerzas de oposi- ‘ion que; de un manera definitiva, ervrfan para acabar con los gabiernos coloniales Esta idea se encuentra expuesta de tuna forma muy interesante en el articulo de Ronald Robin son: «Non-European foundations of European imperalier: sketch fora theory of collaboratione (Owen y Sutliffe, 1972, Pp. 117-140) La ereaein de una nueva clase «oceidentaliza ‘las fue partcularmente importante en la India, datale puede rastrearse ya con anterieridad al emotin« de 1857, Captruto 3 EL IMPERIO BRITANICO: OTROS ENCLAVES EI Caribe Se suponia que Ia mayor parte de las antiguas colon Dritinieas de Ac, com la posible dinica excepeién de Gar bin, podian ser vables como naciones Estado indepencten tes, tanto desde el punto de vista econémio como deste i politico. Se dudaba, sin embargo, que oeucriera To misma con la mayoria de las islas que formaban las Todias occ tales britinicas(y entre las que inehaimos @ propdsito Ber rmudas y las Bahamas), a pesar del eco de que algunas tll, coma es cl caso de Jamaica, constituian antiguas cob hiss con tna larga historia de desarrollo constiucional. Co ‘finde continuar el proceso de inde abo varias actuactones experimentales. Parry y Sherlock identfican tres déctda ercites en Istria de Ine Indias oceidemtaes: a wees le Ia bev ten os diez aos que siguieron al 1830, momenta de la ema ‘ipacin de los esclavos alo Itgo ya lo ancho de tod eli perio britnico; la =décadn de kx Nberacién, en los 1930, cuando I gente comenz® a rechazar las aetites dlicionales;y la =déenda de la independencias, a partir Je 1960, que fe testimenio del Indimiento del finpesio brit- nico enol Caribe (Parry y Sherlock, 1971, p- 299. El cambio de posiciones acura la décala de 1930 cstivo estrechamente vinculade con Ia erisis econdmica » con los intentos de diferentes grupos por onsanizarse po haces frente, Despus de 1929, el prin dl sti mre pal producto de ls Indias occidentales brinicas, se hundl6 ‘manera catastréfies, También tavieron que enfrentarse 8 saias ditealades los eultivadores de bananas de Jamaica: debomas recordar que este producto constits la principal ‘ssportacicn de ls ila. Los productoresrespondievon ereando nperativas, yen el mismo ano de 1928, se fundé en Jamal ‘stl Asociacion de productores bananeros. Arupaciones pa scidas fueron apareciendo, por ejemplo, entre los producto ‘5 de net moszads de Granada 0 Tos de tric de Trinidad 4 Jamaica. De esta manera, en un principio los productores fncrementaron de forma considerable su eapacidad de nego ‘acién. No obstante, la eiisecondmica provocaria tambien | apavilon de serios disturbs entre los wabajadores del suuicar yen algunos o1os grupos, enue 1935 ¥ 1938, y, por cz primera los sindicatoa de as ilas se consvticvon cn or- dganfeaciones de peso, De ls flag del sindiallamo surgrta ttn buen dinero de poliueos impariantes, entre ellos Nor- ‘nan Manley y We A Bustamante (después sir Alexander Bus- tamante) en Jamaica, © Grantley Adams, en Barbados. Uni- do todo ello a un recente sentimicnto de identidad racial, ‘sfaraado por hombres come Marcus Garvey, las Indias acc ‘kotales, ya con anterioridad ala segunda guerra mundial, ‘omenzaron a destrrollar senimientos de pertenencia a Ia ‘misma comunidad y deseos de independeneia, que aumenta ‘an dovante la guerra, aunque en esa epoca se mitigaron al ‘gunos de los problemas econdmicos dela zona, 1s posibilida de rear na federscion de todas Iss Indias coceidentales britnieas, com la ue alguns haban estado so” Fando durante aos, comen26 a parecer una propuesta pricti- ‘cen 1947, cuando una canfereneia reunida en Montego Bay ‘olsen principio en favor de la formacion de una federaci6n, a1 iempo que exeaba un comité para redactar un borrador de Constitucin, que esta acabado, fnalmente en 1953. Se te- nia la esperanza de que los dos principales territorios briténi- us en el continent, la Guayana y Honduras, se-uniran a la Teenie, pero declinaron la invitacion por diferentes razo- es, ete elas el temora verse obligadas a subvencionaralas ‘slus mais poles. pesar de todo la federacion comen26 a jjercer como tl en 1958, Duro aproximadarmente tes aos. Las falas se encontrsban dsemninadas lo largo de miles de Jalmetos de macy los sentimientos particuarstas de cada isla demostraron ser mucho més fuertes que el atractivo de ua federacin bastante nebulosa, Las dos islae mis extensas, Jamaica y Trinidad, que gozaban ambas de una reativa pros: peridad, comenzaron a considerar a las més pequetsas como ts auténtico laste para ellas, yen un referéndam que two ugar en 1961 en Jamaica, se voto mayortariamente fav0r dela secesidn. En agosto de 1962, tanto Jamaica como Trni- {ad (unto con Tobago) declararon la independencia, ‘Seguia en el candelero el problema de qué hacer con las Islas mas pequefis. Se intentaon, y se abandonaron, diferen- tes modslidades de federacin ms limitada. Barbados se in Unico se et lajendo cas an rpdo como los emprestios ‘mercado en Benes, 1982, p. (2) Pero la mayor pare de las naciones de reciente inde- pendent eligiron permanecer en ol seno dela Comunidad [Britiniea de Naciones, la Commonwealth. (La palabra bri rica no 2 elimin6 hasta 1965} La decision tanto de la India, ‘coma de Pakistan de continuar siendo miembros, en 1947, provocé en Londres cierta sorpresa. y alegria. Si dejamos parte algunos trritorios en régimen de manda, las dni- as excepciones importantes fueron Birmania, Sudan y ‘Aden (que se convirtio en parte de la Repablica Popular de ‘Yemen del Sur en 1967). Algunos la abandonartan después de haber formado parte de ella, siendo los casos mas nota- bles cl de Sudalica, en 1961 (vease p. 101), y Pakistin, fen 1971, en el momento en que otros miembros de la Commonwealth reconecieron el nuevo Estado de Bangla- sesh (anteriomnente Pakistn orienta), despues de su s8ce- 100 LaDEscoLoxteacion sin del Pakistin oce dental, Bangladesh continus ene seno ella organizacin, ‘La cuesign de la permanencia 9 no en la Commonwealth vidéo Jos nacionalistae indios en las décadas de 1920 y 1930. En conjunto, la primera generacion de nocionalists alicanos la habia considerado como algo deseabe (veasc, por ejemplo, Awolowo, 1947, pp. 27-29) pero el problema {Que te planteaba era i el chub del hombre blanco» podia Simpiatse hasta converte en una agrupacin internacional ‘mulieraca Tl perfodo de entreguerras signifies el apogeo de estatus de dominio. La dsfniclén clasica de la relacion existent en tre Gran Bretaia y sus, en aquellaépoca, dominios, Canad, ‘hustrali Nueva Zelanda y Sudaiica, nos la proporcioné la ‘eelaracion Balfour, de 1926, cuando afirmabs: Son comunidedes auténine ene interior del inprio \witnico.igaes om estat. ningua de els ebordinad. 2 fre por lo que se rete sss apuntos de polite terior © ‘heron, aunque uae por une dlidad xn ala corona $Tnselads ibremente como miembros de a Cormuni Brk Unica de Nacone (lado en Ket, 196,» 16), sta situacsn adquirni realidad legal por el estauto de ‘Westminster de 1931, E] problema residia en que, como ya ‘econovia el propio informe Balfour, la cohesion entre estos paises, tan diseminador geogvificamente, dependia en thi tno término de lt partcipaeén en una herencia comin y en tines perspectivas de futuro también comunes. ‘Otro problema, éste comparativamente menor, consist fen que el Informe Balfour habia definido a los miembros de te Commonscalth como sunidos por una Fidelidad comin 9 Jn coronas, y eso parecia implicar que una repibiica no po dia legar a se miembr; y desde un punto de vista téenico, Itfanda se apoy6 en esa base para abandonar la comunidad tn 1949 (Mansergh, 1958, pp. 265-308). Sin embargo, en ese fromento ebay otros palses que deseaban comvertirse en epublcas, pero qu, a su ver, queetan prosegulr pertenecin- {lars la Commonwealth, como es el caso, en especial de la a commoxwearti 304 India Pakistan. En abil se enconted una frmala de com promiso que simplemente describia al rey (lorge VD) como ‘ele de In Commonwealth y ala corona como el simbolo Ae alive asociacion de Estados miembros independientes» ‘Se considerd que esta férmla era bastante compatible con hecho de que la India se consitira en repiblica en 1950. En Ta década de 1960 se observ come muy normal que une am tigua colonia se consirtiera en repablia, sino inmediat mente, sf algunos afos despues de aleanzar fa independ ‘da, No obstant, se fue abriendo paso una convene, sein Ta cual un Esto, al convertrse en replies, debia edi a aprobocion dl resto de los pales de Ia Commonvealth pas ‘Seouie perteneciendo a In ofganizaeidn. Cuando, en 1961, ly Union Sudafreana (que se eneaniraha ya sometida a fuerte pesiones Internacionales por su politica de discriminacién Freial el apartheid y por el uatamiento que estaba in tendo a Namibia —Ia antigua Afsica sudoccidental ales ha, tertorio que, en otro tiempo, habla consttuilo un tmandato dependiente de ells) se convirtio en una replies, {ecidié no continvar come miembro de Ia comunidad. Si fbandono consituy® un auténtico respiro para otros pases fe la Commonwealth, 3, en especial, para Gran Bretana, gus bo deseaba seguir ni un die mis siendo considerade de alg ta forma responsable dela posiein de Sudarica, La primera conferencia colonial tayo lugar en 1887, Se teats de una reunin mais o’mencs informal de varios esta tas procedentes dle las colonia, que se encontraban en Low Ares con motivo de la celebracion de cincventa aniversario {de la ascension al tone de la rena Victoria, La siguiente nn Se convocd hasta 1897, en ocasion del sesenta.aniversrin, ‘partir de 1907 la canierenca se comvrté en an encuent regular que tenia lugar cada cuatro aifos, In que asistion fos primeros ministis de los dominios. os ministos, s bre todo los de Rinanzas, se reunan tambien con relative fr cuencia, Se realzaron proyectos Favorables« una federac impeval, excasamente populares en les ultimos tempos de fina Victoria, que fracsearon por la diversdad y la rata 1m disperse del fmperi pero, euando menos, pare ales Zzarse um satisfctorn prado de cooperacin. Muchos fueron quienes dudaron de que estos convenios sobrevivcran a fa segunda guerra mundial y al rapido perf. do de descolonizacion que la siguld. La adininistracién cen. tral del impesio en Londres cambié répidaente. En 1967 ‘qued6 abolido el Ministerio de Colonia, y el de Dominios se omit, en 1947, en el Ministerio para las Relaciones con le Commonwealth y finalmente, ued absorbido, en 1969, por sl Ministerio de Asuntos Exteriores, Pero como seflaba un —bastante sorprendido— titular lel diario The Observer en 1969: «La Commonwealth sobrev. Wa las esquelas mortorias» Se siguieron convacando en uentros regulares de las jefas de gobierno de la Commnon. wealth Los primeros ministrs de'la Comunidad Britanica dle Naciones se reunieron, por primera ver fuera de Landes en Lagos, en 1966, para tratar el problema de Rhodesia. Ex, te na prucba evidente de hasta qué punto la Commonwealth ho era um onganismo que se contemplara ya como especifica, mente sbriténico»: en 1965, dos paises, Ghana y Tancania, Fompieron durante un tiempo sus relaciones diplométicas ‘on Gran Bretana,debido al que consideraron una resp. ta insatisfacoria ala situa de Rhodesia, pero no tsi. tieron obligados a abandonar Ia Commonwealth, Los ef Centros de los jefes de gobierno de la crganizacin pasaron | convocarse cada dos aos Dos problemas han creado tensiones = propésito de continwidad de la Commonwealth, El primera de clos lo constituye la evestion de Ja ciadadania comin, que habla provocado escasos coniictos en la época de la reina Victoria, Exceptuando algunas «personas protegidass de los protect ‘dos bitnicos, todos eran sbditas dela rein, en conse. ‘suena se podian desplazar por todo el imperio con entera Nbertad: Pero ya con anteriridad a Ia primera guerra mun la tos australianos impusieronrestriciones la inmiges siones de gentes procedentes de las zonas asticas del impe: ‘io, decisin que provocs dificultades en las conferencis co. loniales. Cuando en el periodo de entreguerras lem dom fueron haciendo cada vex més conseicntes de su propia Pertenencia a una nacida, comenzaron tambiée a definis con "acho mis rigor asus ciudadanos. La ciudadanta del Reino Jno no fue definida hasta 1948, y no existieron barreras a 1S Je sedans den Commonresth hata Oe et ie us nao chloe Caaikintalts denies a consider lu sdadanon de So a ac aeners my prea co Sey algae con craton De ee ae i ori ni en ek cei cn Se ne cea Tos amen Se ‘etnisacatie dcr nage Uns hp So EA 1 Cement ee sce nanny oy 955 ie ae yan Una Ace, elec Sn cn 0c apo Grn ea een : Sap ate aaa Tate se Siatntcmvo dela Commonwealth, canada: ¥ todavia 2 et ingroo, dope ie mocha SUS amie noo Spe Rone eat tare yaa ere Sines prt ston secs coethles eComon- ‘wealth ie la misma manera que lo habfan hecho los france- a eee Counted feos a cro ee i ndamentl de re ean eae 132 LapEscoLonizacton tra colonos blancos, que tuvieron lugar en los meses sigue: tes, como realizados por sokdadosirregulates procedentes del otro lado dela frontera congolenia. La respuesta se hizo con toda Ta fuerza militar que tenian a su mando, estimindose el -niimero de muertos entre as veinte mil y le esenta tn (F iucredo, 1975, pp. 209-210) La rebeidn se extendié a Mo- zambique ‘Mucho ms tava que en e cas francés, el inl del in- perio portmgués leg a cause de una guerra en gran excala Salazar habia hecho una fuerte inversion para convert el Portugal metropelitano (te mismo, un pals pobre) en ce {10 de un rico impero. Se habian patenciado as inversiones en Tas colonias lo mismo. que-laemigracion hacia aquellos ‘errtorios. Durante bastante tiempo, Portugal habia obtent do de las colons africanas azar, café y t€ 20 sdlo paras misma, sino también para la exportacin, hasta el punto de ‘que constituia un captulo importante para equiibrar la ba lanza de pagos. Uno de los puertas ms importantes de tod cl Africa austral era Bera, en Mozambique. uilizad por am bbas Rhodesiss y por el Transvaal, ademés de por el propio Mozambigue, Al fina, ls coloniassrvieon para destiny no para sal- var el régimen que Salazar habia levantada eon tanto culdo: do. El propio Salazar muri6 en 1970 (estaba incapaitade desde 1968); pero sus sucesores continvaron su politica dr ante slgunos afios més, hasta que el coste scandmico y Ta sangria de los propios recursos humanos de Portugal se vol 16 intolerable. Los hombres eran llamado fils constante mente para ira luchar alas colonias. Finalmente, en abril de 1974, el gobierno fue depuesto por un golpe militar. Durante dos sos, Portugal visio al bord de una profundizacion dele revolucin, y ls colonia fueron los beneficlarioe inmedian tos: Guinea-Bissau se independizé cl 10 de septembre de 1974; Mozambique, e125 de junio de 1975, y Angola, el 11 de poviembre del mismo sto {Lo mismo que habia sucedido con los restantesimperios curopeos, pronto se hizo evidente que, alcanzada la ie- ppendencia, un buen nimero de problemas, en lugar de aca ‘bar, no habian hecho mas que comenzar. Guinea-Bissau s- cambio pronto aun golpe mili: En Mozambique, un movi- Siento merssta de beri, el Frelia Frente de Liber ‘on de Mocsmbique)esablecis un Estado de partido Sn Pero seria Angola la que suea Ins peoresconseeenclas Cuando alcara6 In indepensenci, leva macho bernpo it ters no s6lo en un guerra cont Portugal, soo tambien thr una guerra i. En 1976 el apoyo cubano habia peri do al manista MPLA (Movimento Poplar de Liberacon de “Angola controlar poder y crear un Esta de parti opera cl movimiento rebelde, Unita, concertos apoy0s ps pects de Sudafte, habia generado de nuevo una siacin 4s guerra cll | | | { | | CONCLUSION Con el fin del imperio portugués, en 1975, se cierra el circu de la historia de In ascension la caida de los impe- Fics maritimos eurapeos que habla durado casi por espacio {de quinientos aos, Slo continuaban existiendo los dos in pestos continentales: Rusia y Estados Unidos, que se habsan Tevantado al lado de los Estados mariimos de Europa oct ‘dental Ambos, el so y el norteamericano, habian cont- bride hundimiento de los imperios maftimos "Los nisos no absndoneron terior alana después de Ia seyunde guerra mundial, antes bien, etendievon su influ. ia sobre los Estados de menor extensialocalizads en Eu- fopa orienta, asf como sabre otros pals, como Afganistén Por lo que respecta al puchlo norteamericano, el problema ce aun mis complejo, Debido a su propia historia se sents Sentimcntalmenteatraide por la deseolonizacion. Contempl6 Su expansidn en el continente nortearericano como un wdes- tino inaniiestor, pero Te molestaba la posesion de trritorios fn ultramar, Se neyo a conservar Ia posesion de Cuba des pus de la guerra que iro contra Espafa en 1898, No obs amt. melds del siglo, am poseta algunos teritorios tilteamarinos disperse, como Puerto Rico, las islas Virgenes, ‘Ganm, las isas Wake 9 Midway, In Samoa americana y Ha ves, esta tltima se conviris en Estado de pleno derecho de 1 Dnién en 1959, Las islas Filipinas, que también habian silo ganadas @ Espa en 1898, eran la mis evidente de las posesiones wcolenalese norteamericanas. No fue hasta 1946 ‘nando Estados Unidos cancedi6finalmente Ia independen- ‘a's lesfilipis, por medio de na cuidadasa transferencia de posderes a una oligarguia de Ia que esperaban que cont ‘mara apayanda a los norteamericanos. Fue una tctica que 136 conenusién estuvieron dspuests a favorecer en otras éreassensibles al desarrollo de la guersa fia, aunque en ninguna otra parte ‘anzaron un ésto tan evidente (Gifford Louis, 1982, p. 2) ‘A finales de la segunda guerra mundial los nrteamerics: nos se consideraron a s{ mismios casi com los valedores de la descolonizacion, pero su entusiasmo se vio atemperado por el miedo a que los Estados recientemente independiza- {os pudieran unirse al Bloque comunista, Ese temor se 3g ‘zarfa en Indochina. Ouizs hubiera mucho de cierto en iejo adagio iberal de que una reforma a tiempo mantiene 8 distancia eualquer revalucién, 9, de hecho, en aquellos pas Ses en Jos que el proceso de descalonizacidn comen2d pron (o, Jos comunistas spenas hicieron propresos. Blerres wert ave hubo un movimiento comunista en la India bitinia, {que reeibié alguna publicidad —y quizs tambien alento— en Jos julcios que por conspiracién tuvieron lugar en Meerut, de 1929, pero fue una planta muy debi si se Ia compara com el vigor del Partido del Congreso. Los franceses y los porte: Ses, que resitieron por ins tempo, dejaron tas desi pode ‘esos partidos marsstas en muchas de sus antiguas colons En el periodo de entregucrras, Ia relscin entre communis ‘mo y nacionalismo fue muy compileada. Después de 1917, tos rusos estaban en general demasiado absorbides por la magn td de ls problemas econdmices y politicos de su propio pats ‘como pata invertir machos recursos en potenciar revolucio nes en los imperios de otras potencias. Realvaron algunos ‘estos, quizé rales, en su reconocimiento de Tas Iichas co lonialesen tanto integrantes del movimiento peoetaie, pero esistian dificultades de tipo idealépico. Para Mars, el camino “el futuro pasaba por Is hicha de clases, y no por el nacions: ‘smo. En los efeulos comvnistas, In adhesion al nacional to olia casi a herea, puesto que, de acuerdo con las ense- sanzas clsicas del marxism, In revlucién Ia llevara a cabo un proletariado urbana, en el momenta en eel eaptalismo Yel ascenso dela burguesa hubieran alcanzado sy estado ral de decadencia. Marx no hnbin previsto que el proceso el diese el paso por una de ls elapasy fuse realizado por movs ‘entes campesinos en pases que ni siqiera hubieran alee zado la fase inaugurada por la revoluclén industri. Pero ni conensi6n 17 tos colonialist ni los nacionaistas de Ins colons etaban en 8 mayorfa relacionados con los aspectos mis minuciosos de Ja ideologia marssta. Por encima de todo, eran pragréticos [No obstante y aunque en gradosdistintos, todas las potencia colonialestemfan a los marsstas, puesto que los opositores» las metrépois, aunque hubieran comenzade sienlo nacions listas mas que socialists, contemplaban las veniajas que en st hichs podiaofrecrles un organismo con I dueza, al ‘mismo tiempo, la Nestbiidad dela sesula» comunista, a! como l adhesion a una omgantzacion internacional, especial mente en un momento en que ain se sentian débiles y alsa dos, cuanda debian enftenare al formidable poder de wn E= tado europeo moderno. Sin embargo, v sobre todo en las it tas fases de Ta revolicion colonial, dervaron a mienid inspiracin (x, en ceasiones, In aya directa) de Cuba de China, mas que de Rosia ‘i jnzeamos por las aparencla, a finales de Ta sesncla zverra mundial Ia mayorfa de ls naciones occidentales ai fea may poderosas. El caos econémico con el que acaba ls ‘década de 1940 paso de un modo que no deja de sorprende! fos por su repidez, En Gran Bretaha, ala epoca de sass dads siguo In cde los sopulentos aos cincventae. Si se ad te la importante exeepeiin de Ia India, east ninguna de a~ ependencias britinieas se independizs durante ol period (de mayor debildad evidente de la metrpal,en la dad dh 1940. Alzaos historiadores han contemplado coma inet ble, sl menos, el abandono dal imperio brinico. Bernar¥ Porter ha afirmado: «Desde 1870 « 1970, I historia de Gra Bretana esl de una decadencia ripida y asi ininterrumpico [1 Et imperio que habia acumulado hacia finales del sigh: andy. continaacién, perdido, no fue més que un ineidentc fen el trnscursa de ean decadencia, En origen. habia sk ‘onseguide como resullada de exa deeaencta, precissments ‘com el fin de evita. ¥, Finalmente, se habia tid ve Fe ‘nunciar a 6 como confirmacién definitive de ex misma de ‘adencin~ (1975, pp. 353-354) Paul Kennedy i pesto oh tniredicho Ia vader de este argumente en un intereante Tien, donde sugieve que nos habria sido muy senclla al tar como propia la metifora de Joseph Chamberlain que ea ‘empl inperio briténico, incluso en el momento del cam= bio de sgl, como un «Titan cansados, pero que, y Inde Tas implieaciones «que la descolonizacin two pa fa teoria marsista. Ea ts ‘ros de texto ingleses del siglo XIX apnrecia siempre cons ‘verdad manifesta que el gobieria britnicu se habia Vist» tligado a interveniren Ia tna » Finals del sist SV par eonivoar fos excess de la Compara de lx India Oriental in lesa. Desde entonces, este aspreto ha sido alvidado a ment ‘la, Muy pacos eran los robiernos eoloniales eupeos ger ‘debfan rendir eventae ante ale: si no eran eonttaldas por tus propins conciencas, « por Ia fuerza de ks opin ph fa se veian refrenados ante le expectativs demo elas wi mor cuienes pesiblemente cantiniaran gobirara fs col fis enum futuro previsble. Tena, portato rl ier fn ssegurar que esa colonia conlfnusria siendo cazonable- mente préspera y que no se le despojaria de todos sus recut os. Las compafiss multinicionales no estin sujetas @ un, ‘control sstmtico de este tipo en ls operaciones que reall zn, Al nienos en algunas zonas, parece probado que el nen calontalism se ha comportado peor que e elenialisino, No deja de ser‘una ironfa que la disaleién de los lenpe- Figs europeos haya provocado mas probes tedricos a fos hhistoriadores marsistas que al resto. En 1916, Lenin eseibi8 tun breve estudio ttulado ET imperialism: fese superior del capitalismo, (En un borrader anterior, lo haba subtitlado altima fase del capitalismox.) Eu él considersba el imperta. Jisme europeo casi como tna sel spocaligtics de Ia llega 4a dc! milenio, de Ia revolucén proletaria que derriberia el stema capitalist. Nadie e cuestion6 entoncs, ni eh los i faientes cincwenta anos, que Lenin estavire-atihzando-e ‘oncepto de simperalismon en el sentido que sl aribul, os lo genera, en aquel moments: la conguista del resto del ‘nude por las potenclas europeas uw accidentales. Salo fue ‘cuando se observ que los imperins than desapareciendo, evo que el capitalisme permarceia, cuando comengarom ‘videnclars dificultades teérieas. Como resutade, lon hist Fades maraistas (y algusos ne waraistas) Haron a eabo ‘wo importante revistn del papel desempensde por el ime ‘Salis en el marco de la historia snalizada dese una pes. pectivo marist, Las propuestas mis accesbles se encuen- tran cn lis contribuciones de Kemp y Barait Brown a la bra Studies in the Theory of Inpetatsm (Oven y Sutcliffe, 1972. pp. 1-70), yla més antigua ygulad una de las mejores en el artculo del malogrado profesor Erie Stokes en el His ‘oxisal Journal (1968, pp. 285.301). De forme mucho miss ‘sniea concepto de simperislisino» ha sido reinterpreta to asia significar una cert forma de organizacion del ea. pitalisme, En la seWalidad se puede arma que yaa fnalizado la Primera fase de las wguerras de liberacine del Tercer Min ‘lu. Preticainente ya no quedan colonia, en el vejo sent el términ No obstante, por desgracia se ha demostrado ‘ate, como habia predcho et jefe awolowo, la independent to as «al veine de Diose (Awlowo, 1947, p30). El proceso 4d construccidr de is maciones sigue avanzando, complica dose con rvalldades de polities interior y por crisis econbn ‘as a escala mundial, si ha Hegado a provocar problemas fon el rmundo desarrolado, ha sido en ocasiones eatastrofico pra esas naciones de nueva eveacién de Asia Africa. BIBLIOGRAFIA ESCOGIDA 1a Fteratura sobre Ia descolonizacion es, en Ja actus dad, extensisima. La que presentamos 2 continuacion pre tende ser tnicameate una guia de algunos de os tabs isponibles, Muctox des ibros-mencionedos eomtienen bibliografias que proporcionatan una orientacion mucho sis detallada Wario de los tratados generale sobre los imperios europe inchyen capitlosinteresantes, aunque habitealmenie Ines Sobre eterna de Ja descolonizacin, son importantes, sire ‘roe: B. K. Fieldhouse, The Colonial Empites: a compare Srey fromthe eighteenth century, 2” ed, rev. Macllan, 182; VG. Kieman, European Empires from Conguest 10 Colle 1815-1960, Fontana, 198: 9 JL Miege, Expansion Europ. 1 Décolonisaion de 1870 0 nes jours, Nouvelle Clio, Pass Universitaires de France, 1973, Puede apicarse to msi» 3 trabajos sobre el impero bitnico, Un interes especial tiene ‘Bemard Porter The Lion’ Shore short history of British rials, Longman, 1975, ed. rev, 1984; N. Mansergt, 1h CCommornvealth Experience, Weidenfld ane Nicholson, 196; LO. Lloyd, The Bris Empire, 1588-1983, Oxford Univesity Pres, 1984, Noessten michos libros que eaten de mos ‘tema de Is deseclonizncin fuer de las frontcras bi Une notable excepein ex H. Grima, Decolocrion: the Bris French, Dutch and Belgian Expires, 1919-1963, Routes: & Kegan Paul 1978 Se trata de un tema tan estenso que 1a mavoria de bras reclentes mas importantes son traajs coectvns ‘mails por artieulos sobre ls aspects mi relewats rsa Tadow por los més importantes especialistss. Ente lls por fo que se refiere 9 Africa, pueden citase: L. W. Gon | i Duignan (eds), Colomitins in Africa, vol, 2, The History sand Polties of Colosiaism, 1914-1980, Cambridge University Press, 1970, B.Giffocd y W. R, Loni (eds), France and Britain lw Affiea: Inperal Rivalry and Cool Rade, Yale University Press, 1971 (que alcanza hasta aproximadamente 1967), y de Jos mismes elitores, The Transfer of Power in Aen: Declan nition, 1941960, Yale University Press, 1982; y R. R. Ol se (ed. genera, History of Bast Afica, en especial el vol. 2, V. Harlow y E. M. Chilver (eds), Oxford University Press 1965, ye vol 3, D.A. Low yA. Smith (eds), Oxford Univers: ty Press, 1976. Una obra de autor sini es lade J. Hargsea ves, The End of Colonial Rule in West Africa, Maciillan, 1979, Bstin incorporads a este trabajo su sciculo para Historical Association (1976) del mismo ttclo y algunos ‘otros ensayos. También es dt John Hatch, History of Post ‘War Afica, André Deutsch, 1965. {Ls isionias generates, que proporcionan material basico nicesari, incluyen: P Spear, A Rizr of India, wo. 2, Pen- tin, 1985; 3. Fage, A History offen, Hutchinson, 1978: y JH. Pany y P. Sherlock, A Short iistory of she West Indies, Macrnilan, 1971 De particular intents por el wataralento que conceden a la cespuesta de Afrien 9 Oceidente, tenemos: Curtin (ed), Africa and the West: Intellectual Responses to European Cul. ve, Unversity of Wisconsin Press, 1972: RW. July, The Or sins of Modem Affican Thougl, Faber & Faber, 1968; Tho- ‘nas Hodgkin, Nacianatisn in Colonial Ace, Frederick Mu- lst, 1956: y Ja coleceion de decumentos de I. Ayo Langley, cot una ineduecion,feologes of Liberation in Black Arca, 1856-1970, Rex Callings, 1979. Nos proporcionan tambien THUEWOS pulos de vista los escrtos de varios nacionalstas siricanos, muchos de elles sutabiogréficos, entre los que se Inchiyen 0. Awelowo, Pal 40 Nigerian Freedom, Faber & a: he, 1947: KC Nkrumah, Autobiography, Nelon, 1957; Foshua Nkomo, The Story of my Life. Methuen, 1984, Fan sido también numerosos los nacionalistas indios ‘ge nos han legado relatos personales, Los mis importantes sn: MK: Gandhi, An Autobiograpy the story of my exper- ‘wens wit ruth, Penguin, 1982; y 3, Nehru, Autobiography: ‘esvards Freedom, John Lane, 1942. La biografia mas recien- te de Gandhi de que disponemos es la de Louis Fischer, The Life of Mahaoma Gandhi, Granada, 1982 (publicada en 1951 vez primera por Jonathan Cape). Bxisten estudios mis. detallados de algunos aspectos de la vida de Gandhi en Ju- ith Brown, Gendhls Rise to Power: Indian Politics, 1915- 1922. y Gandhi and Civil Disobedience: The Mahatma in In- ian Polites, 1928-1934, Oxford University Press, 1972 y 1977. La bicgraa cldsica de Nehra continta siendo Ta de Mickel Brecher, Nem « politcal biography, Oxford Uni- versity Press, 1559 (se publicé una edicion abreviada en £901). Ottos trabajos importantes sobre el nacionalismo in- iho incyen: Anil Seal, The Emergence of Indian Nationa- Tins Competition andl Collaboration in the Late Nineteen Century, Oxford University Press, 1968; R-. Moore, Libera- lism and Indian Foes, 1872-1922, Edward Aruold, 1986, y Escape fom Empire: the Atlee Government and the Indian Poblet, Clarendon, 3983; SA. Wolpert, Tilak and Gokhale revolution and reform i the reang of moder India, Univer of California Press, 1962: y B. N. Pandey, The Breakup of British India, "Aacmillan, 1989. De incalculable valor es la tclesién de documentos de CH. Philips, The Evolution Of fndia and Pakistan. 1858-1947, Oxford University Press, 1962, ‘Alser el briténco el imperio més extenso, son numerosos Jos histriadores que han escrito sobre él. La obra de WN. Medico, Contemporars England, 19/4.1964, Longman, 1967, ‘eral porgue sts la deseofonizacin en su content general J. Madgwick, B. Sieds y LJ. Wiliams, en su Brain since 1945, Hutchinson, 1982, puestan atencion 1 la sredrada de Impeticn incaven algunos documentos alles para el deba- te. La disolucion del imperio britinico est tratada con enor- ‘me penetracisn en C. Cross, Dhe Fall of the British Empire, 1918-1968, Hodder & Stoughton, 1968, y en G. Woodeock, Who ile the British Empive?, Jonathan Cape, 1974. El ercet vyolusnes dela rloia de James Moris, Farewell he Trumpets: «an Imperial Retreat, Penguin, 1979, es aneedético, pero colo- Fista. J. Gallagher (Anil Seal, d.), The Decne, Revival and Fall ofthe British Empire, Cambriige University Press, 1982, e5 48 imLiocnaria nscoams tna colecsin de artculs, varios de ellos no publicados con anterordad, que arojan alguna haz sobre diferentes aspecios ela historia imperil britinica La obra de P.S. Gupta, Fnpe- Filism and the British Labour Movement, 1914-1968, Mac tan, 1973, es un complet estudio sobre fa actind de un par ‘ido; mientras que la de David Goldsworthy, Colonial sss British Potts, 1945-1961, Oxford University Press, 1971, ex ‘mina las acttudes de todos los partidos en un perfodo de tiempo mis breve. M, E, Chamberlain, Britain and Inia’ the interaction of two peoples, Davi & CharesArchon, 1974, tr- ta de desarollar con mucho mas detalle algunos de los temas que se tratan en este libro. W. R. Loui, mpesialion at Ba, 41941-1945: the United States andthe Decolonication ofthe Br ‘ish Empire, Clarendon, 1977, plantea la influncia de Ainés- ‘nen i dsolucion del imperio britnieo or lo que se efiere a In descolonizacion del imperio francés, s6lo contamos con un mtimero limitade de bras en inglés, entre las que se inchuyen: P. Neres, French-Speaking West Africa: fom colonial status to independence, Oxford Uni versity Press, 1962; V. Thompson y R. Adlofl, The Emerging States of French Equatorial Aiea, Oxford University Pres 1860; D. Broce Marshall, The French Colonial Myth aud Cons. ‘itution-Making in the Fourth Repub, Yale Unversity Pres, 1973: y Paul C. Sorum, Dntelectuals and Decoloncaton it France, University of North Carolina Press, 1977. Como esl ico, Vietnam ha atratdo una atencion especialy dos libros ‘uy ails son el de Ralph Smith, Vietnam ond the Wes), Heinemann, 1968, y el de-George C. Hering, America’ Lo. gest War: the United Staves and Vietnam, 1950-1975, John Wi fey, 1979, . Hay dos trabajos que tata de los problemas gue sigue: ron a la independenci: R. Hacts, Inlependence amd Afr: Revoluron in Underdeveloped Couns, Oxford University Press, 1962, y A. HLM, Kitk Greene, Stand by your Radios Centro de Estudios Afrcanos, Cambridge, 1981, que analiza Jos golpes mites en Aries, Otros tes libros, dedi lasifcacion, pero impertaness son: M. Pesham, African Outline, Oxiord University Press, 1966, y The Colonia! Reckoning (ciclo de conferencin Reith, sinLociata escocion us Collins, 1962; y A. P. Thorton, Imperialism in she Hventierh Century, Macmillan, 1978. ‘Son tambien diiles numerosos volimenes de la Peng ‘Alriean Library, sobre todo porque han sido esrites cn pars Jelo los hechos, Entre elle, dbertan mencionarse: B, De vidson, Which Way frien? The search fora new society, 1964, Y Inthe Eye ofthe Stomm, Angol’s People, 1975; y Martin Lo tmey, Rhodesia: White Racoon and Inperial Response, 1975. Finalmente, ottos trabajos que plantean importantes de: bates sont el coninto de artieulos en R. Owen ¥ B. Sutil, ‘Sais in the Theory of Imperialism, Longman, 1972: asi imo tres artieolos recientes Tohn Darwin, «Imperialism in Decline Fendeneies in British Imperial Polley between the Warse, Historical Jourmel, 23 (1980), pp. 637-679: BR ‘Tomlinson, «The Contraction of England: National Declin. and the Loss of Empires, Jounal of Imperial onl Conan ‘wealth History, XI (1982), pp. $872; y P-Kennedy, «Why di {he British Empire last so long? en P. Kenney, Sexy on Diplomacy, 1870-1945, Footana, 1984, pp. 197-218 (Oveas leeturas aparecidas hasta la fecha La apertum posterior de archivos que cubren los os er ciales de la deseolonizacin, en particular los byitnicos, hs ‘Signiieado Ts sparicén dena verdadera corricnte de et ‘ies. Los que presentamos a contiuncion se enema c tee los mis importantes, al empe que wliles Entec lem tuatansobve la eolonizacion europea en gevera « sobt a pals continental en conereto, tenemos: RF Rolin, Esrm ear Decolonization, 1918-981. Macmillan, 198%: Mt. Kale Decoloisaion iv Briain and France. Prinecon Unis ress, 1984; y W.4. Momsen J. Ostesharnnel (od. Filia and Afr, Geren Historical institute, 1986. Entre ‘ue tslan de Gran Bretats, tenemos tes estudio de Jobin Darwin, «the Fear of Falling: British Politics snd tmperil Decline since 1900, Tunations ofthe Rou Historical Sei 1, 5 serie, 86 (1986), pp. 27-43, Britain and Decodmsation The Retreat from Empire the Post-War Wonk, Maclin, 1983, y The En ofthe Bish Emp: the Hired Deda Blackl, 1991; BLapping, nd of Emp, Gnade Pubs: tons Ui, 1985 Gi fue sompana ta sere eles sobre ttn): B A Low Bele of Epi CUR 19939 try A. 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