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MAGRASSI, Guillermo; Monica Berén y Juan Carlos Radovich: Los juegos Serie La vida de nuestro pueblo. N° 15. CEAL. Bs. As. 1982 Rode Escalus (ese emer Le coc sel grcerene) ~etgat ol Reon = ot compares Fear sermess a les ates (coms caster ayerple Los veges + ole ALE = WTR = Ante can | ape seen ote Das Ge Ae (GE AGS Cooeln ce ousfrosan Mes se ttn A See ver Gon Is Saltembing cs? Tede G SE RR (EGE or enpEE Su Teepe 4 ” “ los. bay 0 Menge dost. engage y vas Dance Termine “En ESio Senge y EhgBewN Tain slgunes Pumice aye 02 Teer Bide ofue cl wuss. Netasme on tiengs seat a eh cust Veam las sunarokes Yer “cla Wego. Las TeQas puanlar sae eoLe mee explore = ~ MODUS © se olfereS leh WES ome olchs "Desde. que régresé de la Ropis ~ blicd-Argentitia, en ‘cuyo Gran Cha- 60 estuve cerca de un afio, viviendo “entre ‘los ‘indids,. muchos me han ‘preguntadd. cud! es’ el’ especticulo: -humano que en -aquellastierras ma- "Yor impresion ‘han “dejado en mi mente. Y-cada vez que me ha sido formulada ‘tal pregunta he contes- tado ‘sin vacilar: los grandes parti- dos de. hockey. disputados 2 orillas del Pilcomayo, Enel transcurso de una’ existencia errante he asistido a ‘muchos encuentros de. futbol. He visto jugar a los admirables equipos Sep yt “el. baRas y Ba ee rere es ducges “Guillermo agrassi Ménica Bern “--y Juan Carlos: Radovich argentinos y uruguayos. He presen ciado los “big games’ en Palo. Alto; California. Pero -ninguno de ‘esos ‘acontecimientos deportivos me han Proporcionado tanto placer como: los. partidos de hockey disputados en el Chaco por los indios tobas 0° los matacos.""" Asi'se expresaba en. 1940,-en que todavia lo: que relara! ba era posible, ef suizo Alfred Mé. traux, uno de fos que tanto han he- cho desde el campo dela antropo- logia para que el pais pudiera algin dia asumir sus raices indigenas en SU posibilidad de ser nacion.- ole nse y Ge pees Sh teas Nunca’ Serdsufi¢iente insistir en! que todos los pueblos producen cul-. Auras dé complejidad. comparable y. °~ que. todas: las culturas son, de una... densidad: similar. desde ‘que somos “homo sapiens”, desde hace alrede- dor de 50.000 aiios. Y en el extenso. 3 listado~ aspectos que todas: las.” culturas*“incluyen, Se cencuentra el. ‘nubro que Hlamam@s juegos y depor- |" ‘tes al punto de que el, propio hom-- bre ha sido definido también como “homo ludens’ 4 She verdad que. nada_nuovo hay bajo et sol, esta verdad esta hoy 1 plenamente contifmada en lo que respecta a los juegos y deportes. Pero. lo que més podré extrafiar (a algunos} es que para confirmacion de este aserto no es. menester ira consultar. los anales de los germa- nos, galos 0 visigodos, ya que, por lo que a América toca, nuestros digenas conocian el base-ball,.el ho: okey y el fitbol y practicaban otros deportes qué. nosotros desconoce- mos. Los citados juegos y deportes, aunque’ con otros nombres, existian entre ellos. desde mucho antes del descubrimiento de América”, sefia ~ Taba'Guillermo Furlong S. En rigor de verdad, es mas proba- ble que los dichos y otros juegos y. deportes. tengan un origen autécto- ‘io’americaiio més que europeo por -/ Varias.razones que se irén exponien- do:'Los eirdpeos tenian sus propios “+ deportes y. juegos, muchos de. los Gales fueron transferidos a Améri- a tomo los de azar con bargjas, los dados: cibicos, las corridas de’ to: 105, ta taba con astrégalo de vacuno o.lanar, el cricket, el golf, fas carre- ras de ‘cahallos y de perros 0 con ‘carromatos, las cacerfagcon armas de‘fuego, tc. Sin embaigo, fueron menos dé los que ilevaron 3 su co: fnocimiento y. difusionen Europa desde: América y otras partes del ‘mundo. Ello debido a que: durante “Na conquista y colonizacion de ‘Aimérica fue escasa la inmigracion Fide j6venes y adolescentes; quienes habrfan podido ser los portadores de juiegos y pricticas deportivas? ‘que no fueran las mencionadas, mas ‘adecuadas para gente madura. 2 55'En cambio el traslado forzoso de =nestros indigenas a las cortes, fe- -aflas, circos y mercados de esclavos ‘de. Europa fue casi exclusivamente = de jvenes, varones y mujeres, ma- yor al comienzo y desde el mismi- Simo” primer viaje de Cristobal “Colén, . El juego con pelotas de goma, ~Santecesor indigena de “nuéstra fiitbol actual <3 Todos tos: juegos con pelota de “{g0ma ‘son patrimonio cultural de sexélusivo origen’ indoamericano.-La totalidad de las plantas que produ- s€en ‘caucho, goma natural, goma eléstica~o goma ‘de mascar (“chi- cle") pertenecen a la flora indigena americana y_ sus. primeros. empleos fueron aprendidos por los europeos de nuestros antepasados aborigenes.. La Gnica excepcién la constituye la goma arébiga (que se obtiene de luna acacis comun en la peninsula del mismo nombre), cuya.sustancia viscosa’ distiefta en agua. sirve para pegar 0 adherir. El.caucho o hule, en cambio, és una sustancia eléstica indisoluble. ef agua y que circula por los. vasos laticrferos de ciertos arboles. y plantas, Ifquido. general- mente lechoso del cual se obtienen distintos tipos de goma vegetal. La gomorresina, a su vez,que fluye del 4rbol- dei chicozapote al practicarse incisiones en su tronco, e3 la-que proporciona el "chicle”” que gusta- ban mascar los antiquisimos nativos mesoamericenos desde milenios an- tes que los norteamericanos adopta- ran Ia-costumbre y la difundieran como parte de su “humanidad de goma’*. Hoy tenemos absoluta se- guridad de que hace por lo menos 3.500 afios existian en América jue- gos con pelota de goma, Al menos desde. el tiempo de los llamados Ol- mecas: arqueolégicos cuyo nombre precisamente quiere decir “los hom- bres 0 habitantes del pais dei hule”, allé en el gotfo de México. -La propia palabra cancha nos fe- mite aun origen indigena (qeshwa © quichua) incorporada al castella- ROO .espafiol como muchos otros * vocablos aborigenes. En su expresién inglesa, el fatbot es muy moderno, pero como depor: te ya existia en toda Europa en-el siglo XV. antes det ““cubrimiento”™ de América. Claro que no se utiliza- ban entonces las pelotas de caucho inflables y recubiertas con cuero, sino que se empleaban vejigés de animales llenas de aire. Recién “cuando arribaron e América los conquistadores espafioles, pudieron ver cémo tos indigenas jugaban al futbol, con excelentes pelotas de goma, sin comparacién mds perfec ‘as que las de aire... Tenian cam- os a propésito, de anchura y largo sefiaiado; con rayas equivalentes a piedra alrededor para los espec- tadores, y ain tribunas de honor donde fos caciques y seffores se aco- modaban en duhos o. asientos pre- ciosamente tallados.”* Jas ‘porterfas (arcos), con asientos | de, Nuestros indios argentinos Se valian “para hacer sus pelotas det mangay; que’ es.un drbol. bello, su juego se practicaba con la cabeza y, con el empeine de los-pies”, con. signaba hace més de doscientos afios el sacerdote. jesuita “Sanchez Labrador, aclarando po: sespecto ai origen indigéna del ba- fompiéo fitbol, “En el Paraguay (en dicha época se inclufa.al, Rio de la, Plata dentro de esta denomninacién) , no. tiene esta resina/otro’ uso.que ef de hacer con ella pelotes. con que entretenerse. ..Tienen. fag pelotas una’ elasticidad__prodigiosa, “exten- digndose y_restrigiéndose: también fa resina en otras figuras, segii.se- quisiere; las pelotas sin giande’ im: pulso, al tropezar en. tierra, 0. en otro cuerpo. duro, resaltan con ad- mirable resorte.""¢_ Sy En nuestra pampa, el mismo cro- nista consigna en ef siglo XVI!I_un. juego con pelota de goma.distinto, ya que en este caso se ermpleaban las manos y seria muy bueno que alguno de nuestros sctuales: depor tistas 0 profesores de educacion sica’ réhabilitaran. y difuridieran’ su. Practica: “Doce 0 mas indios se B nen en cireulo, todos desnudos’sin hilo de. ropa sobre sus. cuerpos,..y esto. aunque’ sea en-el-rigor ‘del viorno. Dispuestos del modo dicho, toma uno. la pelota y. haciendo dat un'bote, Is echa por entre sus pier- nas alas espaldas det que esté a.su lado! éste, al sentir el golpe en sus costillas, se.revuelve con gran: liges reza, y tomando la pelota de rebote la hace pasar por.entre.sus piernas y arroja a las espaldas de! otro, como lorhizo el priniero. De ese modo va. dando vuelta la pelota, pasando por entre las, piernas. de todos‘y.tebo: tando en’sus espaldas. Si alguno ni fue pronto a revolverse y recibir el bote de la pelota; para echiétseta al ‘otro, pierde su juego’con fiesta del partido. este juego apenas se puede comprender por lo raro, si dole." é Que este juego deportivo-era tre dicional en nuestra tierra 'y muy di fundido. lo. confirma, .con ‘algunas: variantes en su forma, otro eronista ayenturero cien aftos. después.” Se trata del. explorador inglés Musters, quien ademas de espiar para la coro: na briténica cudles serfan las rejo- les. ducias : En el siglo XVII, el misionero > Jesuita Florian Paucke describ. con imagenes y palabras. eldeporte de la natacion ‘entre los mocobies. El epigraje sefialaba que "las nines sultaban desde el drbo! al ‘gua y se buscaban mutuamente’ 2 (Tomado de Hacia alt y para ach, 7. I) Volantes de chalas de mat wsados por los indios - : ‘chiriguanos del Chaco en un juego migico agricola. Se jugaba alrededor de maizales y el - ‘iractivo consistia en no dejar caer los volantes..» (Musco de Prehistovia'y Arqu de la Univ. Nac. de Tucumén), Fes tietras patagonicas donde erig | luego"Sus.‘inmensas_-estancias, nos dejé ‘un, vatioso vrelato desu. Vide «entre los patagones (nuestros tehuel- «ches histOficos) etre 1869 y 1870. Su ‘régistrs: del, deporte’ presenta: al: unas ‘veriantes. en’ laforma- que pueden Jester: dadas, tanto por los y cambios -habidos .eh’ el transcurso |. ,del-tiempo, como también por el hecho--de, estar constatado el ante.» riot entre’ nuestros aborigenes. dol Rio de ia. Plata y éste entre los habi- antes de Patagonia quienes no. dis “ponifaf alli: de Arboles ‘de ts goma, El viajero ingtés-nos dice: “EI juego de la polota esté limitado a los jove- nes. y sé juega de esta mane tiende un {az0 en ef suelo de'modo ‘que forme:un cffculd:como de cus. tro. yardas de diémetro; los jugado- Tes; gue por'regla geniral son'ocho, “enitan. en ‘ese.€irculo desnudos, sin mas préfida: que el taparrabo. Cada |d¢"los banios est armado de- unia-pelota. hecha de cuero y rellena “de. yg f I of Ie lanza’ por’ debajo de la pierna'y. rechdza con‘ la mano la del ando: contratio, .:contandose un Get Ronee ose “Punto, pdt ‘ads aolpe. Los jovenes,, Reino de Chie, “déspliegan gran destrézs y habilidad deporte. wei 80) estoryaundiie nunca tomé par- *n,Hinguno. de sus partidos requ. lates, ¥/0.asistia con frecuencia a ese juego, en-el. que se revelaba notable- ‘Mente el esp|énclido desarrollo mu: Sp scular a8 46s indios.”* e . ‘actuales, se descubre: 80. de. -polote_ se Practicaba dentro de un circulo for- mado por seis personas arrojéndose con fuerza de una a otra la pelota - fetobada.” Esta describla_ un arco. or debajo derecha y se debia evitar : Que saliera’ del circulo’” como Seve- eta ae oo ro Colchado, ranquel de San Luis, isma Bréctica existia entre © Colchedo, : ros ma ana Bideten exist, Oe. contaba =: Héctor Greslebin todays 2 et oi pet lero ue nay ai evo fo also, el ened Bertie orange ns Pee Sg eae n yr eB 2 un 3 el ion Racer ocr ee. onentr i -que la mayoria de-ellos ya é honplacra usec soerpeat Ao rca elaion Wot de One Romesh ofa. pilmatin, aunque mas como °° face muchos afios. “elercitecion 4isica que comio entre. Js enimignto deportivo 0 juege dé di _Nersi6ns'ya. que como cijera el cro. ist Diego de: Rosales: “es también ar a-ejercitarse eri.la ligereza y avili- Se para la-guerra, Este es un jue- e'pelota, que le juegan desnu- 008 Yeh [Ueda tiréndose-los.unos a 105 0170S la.;pelota con las palmas fata. arsé con ele. Y cada uno por. ue. no’ eden tuer masicos con flautas y tambores sue. Je acompafiar el encuentro que se efectia por lo regular enirelacion a la ceremonia anual del arete, su fies- ‘a tradicional. Como de este juego se derivaban algunas lesiones, ter min6 por ser prohibido hacia 1972 por. las autoridades policiales de frontera3* Sin makana®* pere con ramas Algunas mujeres guayeuri prac ticaban antafio tin juego de vinculs: ciones magico-eréticas que el! padre Sénchez { abrador consideraba inde- cente.."La diversion Is ilamaban Exaguinags, 0 de la méscara, {y) es fiesta de ramas,.Una moza robusta se viste de ramas.de arbol y tifiese la cara de negro. En esta forma ca- mine rodeada de-otras mozas y mu- jeres altaneras. En. llegado a una ~_cierta distancia; tes. sale: al encuen- ‘0. una cuadrillade mozos desnu: dos, libres y sin verglenza. .E1 em- pefio de'estos'es quitarle odes las hojas a fa enmascarada, Al fin lo logran, por més.esfuerzos que en _ defenderla ponen las compafieras. Es indecible la batalla y trisca que meten y las indecencias que come- ten, Despojada la Corneje del vesti- do ajeno, corren y van hasta el rio a lavarie ta cara. . "36 Los “pufietes’” como antecesor indigena del boxeo El box, que tanta difusion tiene en el mundo actual y a cuyas com- peticiones es tan afecto nuestro Dueblo, también se practicaba en es- tas tierras antes de la llegada de los fspafioles. Claro que entonces habia mayor - diversidad, flexibilidad ereatividad para, los contendientes, ya que cada uno de nuestros grupos indigenas lo practicaba a su manera, ‘Tanto entre dos como en forma co- lectiva, en que una misma tolderta 9 aldea, “y a veces una contra otra, 12 se apufieteaban hasta herirse los ros: ‘ros y cabezas, provocando ‘knock outs” que 2 veces duraban horas”3, tal y como en nuestros dias a veces ocurre en la lona de un estadio. Hace un par de siglos se consigna- ba que los quaycuries, “algunas ve- ces en estos buenos meses que. son los de los calores, suelen visitarse (entre) las parcialidades y ta prime- ra salutaci6n es (ya) una formal pe- lea de pufiadas. Acabaiios los mo- quetes, comen y beben como los de la casa, pero luego se organiza una contienda deportiva mas-especifica entre los jévenes de ambas tolderias donde se~puede apreciar desde la presencia de los ‘managers’, a la Jona y el recinto especialy hasta el paseo 0 presentacién del campeon y su desafiante. Segin ef nimero de los jévenes huéspedes, se escogen otros tantos del. toldo’ (local). Pin: tense todos a las mil maravillas y forman dos partidos. Cads uno de estos Hleva su viejo de padrino. Sa- Jen las dos compafifas Ia tarde em- plazada y dan una vuelta a los tol- dos. Después en fila y con paso mesurado van a la plaza, toman sus sitios, unos “enfrente de otros, de- jando lugar capaz par la pelea: dis- puesta la tela sale-uno de los jove es recién verlidos a pasearias. Lie- van todos en las mufiecas algunos cascabeles 0 pezufias de puerco, que al bracear forman su sonido. El que salié a provocar halla luego compe- tidor. Este hace lo mismo de regis war el sitio. Antes de arremeterse Parecen dos gallos que se disponen a la lucha, Se acercan, se retiran, como si no les diera consecuencia mucho cuidado. Al fin se acometen @ pufiadas, de donde diere y venza el que pudiere. Cuando ya ven los padrinos a los combatientes encar- nizados, meten ef montante, que es la mano, los apartan y hacen que otros dos salgan 2 medir los brazos, Recorridos todos se retiran con ei mismo orden con que vinieron, tie: nen una merienda y quedan’ tan amigos como si nada hubiera pa- sado,98 Este juego deportivo se denomi naba_warandk entre los mocobies de Santa Fe y Chaco, de donde se- guramente procedée en lejania de memoria étnica, parte de la técnica @ inteligencia deportiva que consa- graron a nuestro. gran campeon mundial Carlos Monz6n. Entre ~N ellos, “los hombres usaban una de- fensa cerrada, con los codos ubica: dos cerca del cuerpo-y los pufios con el dorso mirando hacia el con- trario; al aplicar el golpe lo hacian de abajo hacia arriba o sed en-forma de: “upper cut”, dice Red! Marti. nez-Crovetto, quien’ agrega que “di- rigfa un juez 0 ‘referee’ llaimado'ne- lokiak.-y~s¢ efectuaba Gnicamente 3 trompadas que podian aplicarse 2 Gualquier parte del cderpo, y-el en- cuentro--duraba ‘hasta -que\uno de los dos contrincantes se vei ens ‘tuacion comprometida."®°.. Ya en el siglo XVIII el jesbita Ca: nelas registraba quo.era practitada "con gran destreza. No se vert eier- tamente mejores entradas y escapes: en la esgrima de diestros espadachi- nes, que las que se ven en el juego.» .de sus brazos y flexién de sus cuer- os. Desde nifios los ensefian y'pro- vocan a apufietearse.”4° ois Entre nuestros vileles, "el. padre. Alonso Sanchez, hacia ‘la. misma época, consignaba que “s610'lo:jue gan de noche, a la 1uz'de: la Jufia, poniéndose en dos filds todos los”: hombres, sacudiéndose unos @ otros. - feroces moquetes y pufieadas.”"4¥ 5 ~ Si hasta se"llamabs' tongé el.bo-.. x20. colectivo entre los Mbya ‘gua: = ranfes, ““practicado antiguamente”” ~ entre dos cuadrillas de.5 2.10 con tendientes cada’ una: Los -golpes, que podian set dirigidos'a 1a cara 5. ‘a cualquier parte del cuerpo; se apli- - caban de ‘cross’, can el puro cerra: = do y con ef dedo medio algo adelan-. tado de modo. que el nudillo. del ‘mismo Sobresaliera de los demés."# No solo los hombres, sino también las mujeres se “apufieteaban’’ Entre los mismos mbayas (Guay cures) era comin que “salierah ali - > desafio de moquetes como queda" dicho arriba, de los muchachos. de.” distintastolderias”, dos conten= dientes del bello sexo, mas tiento (sic: tino) les juégan Ves) muchachas), que no. tiran’ a herir se*3, Aunque muchas veces’ su a¢ cionar no pudiera distinguirse lo su- ficiente de una.rifia, ya que “‘en'el caso de les mujeres, era el odio 0.108 — « celos los que decidian los combates; de este modo durante dichas réu! niones, una desafiaba piblicarente ‘La foto muestra whe partida ‘de “elempar”, juego bastante similar ‘al hockey de tos ingleses. ‘Se pructicaba también con pelotay palo. (Tomadio de Revists Geografica ‘Ameficana, noviembre de 1933). @ ia otra e inmediatamente se tren- “zaban a pufietaza limpio. Las muje- ~ res colocaban los brazos semiexten- didos, con el dorso de los. pufios hacia arriba y'golpeaban horizontal- ‘mente de la manera que en boxeo se'denomina “directo”, dice Martt nez-Crovetto del warandk entre tas, jovenies damas mocobies al hablar de la diferencia en la forma.de po- nerse en guardia y de golpear exis tente en los combates de diferente © sexo.44 “© SE}-boxeo. entre mujeres. parece “haber. sido comin asimismo para -Tos payagui y los quané, como entre “Jos‘vilelas: Entre éstos, las mujeres solian hacerlo ai igual que los hom. bres. ert una “‘cancha Hamada loké (donde) a.veces solfan pelear hom. < bres contra mujeres y nifios de edad “pareja. entre. sf. Algunas. mujeres eran tan habiles en este deporte que | -apotreaban.@ sus maridos y les ha- -Gfan sangrar las narices sin que éstos Pudierah alcarizarlas. con ningun =, golbe""*, motivo por eF cual, segu- ~? ramente,’se termin6 perdiendo este “deporte: para. él sector femenino, con solidaridad masculina de los sa: cerdotes -misioneros, ya que “en estes batallas femeniles —cuenta Pauicke para 4os mocobies~ nuestro padre Burges era el vencedor y po- dia separarles prontamente. tun entretenimiento muy habitual (De Hlaca alls y para acs) pre GF mediante rayitas.”"6* ° Un juego similar con el nombre ““iplanco 0 negro" es mencionado por Guinnard para mediados det'si- 1 Glo pasado como de uso general, eri folderias del gran Calfucuré en jempos de su sequnds Confedera- "clon. Mapuche: "Se \compone de ocho cuadraditos de hueso.ennegre- © Gides en und de los. lados; este se | Juega entre dos (personas). Se colo- a un cuero entre los jugadores con el objeto de que ‘sus manos puedan “Goger de una vez estos cuadraditos, {Gue dejan caer) gritando en voz alta y ‘dando palmades. pare aturdirse mutuamente. Siémpre qué el nime- fo’ de los negros es'par, el jugador tiene derecho 'a prosequir hasta que haga impar; entonces ie toca el tur- no al contrario; La: partida puede durar asi'eternamente”s*. A este juego lamabariamuinka, El awarkuden de los Mapuche-de Neuquéni se: jugaba en forma pare- cida aunque’ medianite el-empieo de “6a 8 habas peladas, uria cara teftida de negro de carbon y *40 porotos, arveias 0 palitos como-fichds.*¢ Una, variante femeniina entre los © tehuelches araucanizadds era el ma- - muél-kuzérren et que-se empleaban 4 palitos. de cuatro dedos de ‘largo, ‘ pintades una de'sus caras con trazos negros.: Varias mujeres sentadas en ~ circulo sobre el suelo tiraban los pa litos ‘por. firfio. Ganaba «la mano aquélla que arrojaba tas 4 caras ne- ~ gras ‘hacia arriba. .Los tiros se efec- tuaban en medio de 2 entonacion “ de'canciones y frases propiciatorias. ‘Encel kechukdh Mapuche se-ern- plea una suerte'de dado llamado ke- chukawe, tallado.en piedra’o hueso, de forma: pirariidal’o cénico-cupu- “lary cerca de 8,em de alto. En los de, hueso, [a parte inferior que es > circular tiene algo asf como 4 cm de “ didmetfo. Estos preséntan un punto’ _- grabado a, fuego en la base y otros {4 sobre'la tara del cono en forma ‘equidistante.- Para -jugatio! varios + hombres se ubican’en derredor de - un guero bien: extendido. Uno dé Hlos. inicia: la. partida, tomando.-el ‘Rechukawe por la patte’ superior con-el pulgar.¥€l indice de la ano “derecha y faciéndolo girar a°unos - 10 cm e altura sobre el suelo, co- “mo si fuera un. trompo {0 una per “.Rola) 'y 10 deja caer: Si queda para- do, anota-un. tanto mediante una ba "ein, onuban sire sale raya en.el suelo y continia tirarido hhasta qué caiga de costado“®”.. Este juego ya fue registrado: por Ovalle, ~ a.comienzos del siglo: XVIL.6# Si bien el combn. denominaaor de estos 'y otros’ muchos juegos de azar eran las apuestas (en las.que fi © ‘quraban adornos, animales, ropes, monedas y hasta la propia mujer en- 4re tas variadas’ prendas),..as croni- ‘as,no consignan quejas.a causa de los resultados. Las mufiecas Desde: casi siempre, 1a mayoria de las nifias aborigenes aprendfan a ser mamas jugando con sus mufiecas y/o cuidando a los hermanitos mas peauefios, tal como sucede en la so- ciedad industrial. Con la diferencia de que jos juguetes indfgenas eran fabricados por ia madres 0, en cier- tos casos, por las mismas nifias, pero’ siempre de. acuerdo con la vi- sion. de su propia cultura. No suce- de lo-mismo actualmente. Insertas fas madres indias en el sector labo- ral de infraconsumo de fa sociedad de consumo, s6l0 a veces le llega a su nifia una mufieca y, por lo gene- ral, aunque muy “pléstica’’, de tez blanca, cabello rubio. y ojos azules ‘que nada tiene que ver con ella mis: ma. Entre lo que no puieden tener y lo que todavia pueden hacer, ain es posible encontrar mufiecas. indige- nas dé trapo, de barro,.de cera, de hueso, madera o papel. En’el acervo cultural aborigen de la regién chaquefia (entre los mata 0, chorote, chulup/, toba; mocobi, pilaga, chiriguano, chané) existia y din se pueden ver en uso, represen taciones antropomorfas femeninas ‘© masculinas aunque con prepon: derancia de las primeras— mas o menos ‘esquematizadas, Su elabora- ‘cidn varia segin el. tipo de materia- les utilizados. Son’ modeladas_ las realizadas en barro, crudo 0 cocido, ‘© en cera negra y, en-cierto modo, las de trapo. Las confeccionadas.en hueso,” en cambio, .aprovechan: ta “forma natuural'del mismo.” La: forma’ basica' general puede ser cilindriéa.o cénica. Salvo raros gjemplares (los chorote.tenfan mu- feces de madera con miembros arti- culades) no: poseen piernas ni, bra zos. Los rasgos facialeS pueden estar modelados en su caso.o'simplemen: W te sugeridos, aunque a veces fa cara es totalmente lisa. La distincion de sexo suele estar dada por la presen’ cie 0 ausencia de'senos y, en algu- rnos casos, por un.vientre abultado. Las mufiecas de hueso, por nO pre- sentar aditamentos no permiten tal distincion. En cuanto al vestido, las de hue- 30 de fiandif, suri 0 choique, (seain hagamos referencia al avestruz ame- Tieario en guaran’, quéchua o Ma. uche), -generaimente tienen. el ‘cuerpo’ revestido con hebras de al “godon, otras fibras vegetales 0 lana “coloreadas que forman bandas, cu- ya: variedad y disposici6n pudiera \ indicar algun sentido distintivo. tras poseen vestido, falda: o chiri- ‘pd (palabra igualmente indigena) de typo con cintos de hebras © cor- < ‘goncilfos. Incisiones, aditamento de ‘orejas, cuentas o mostacilla adhe das, vinchas, collares, suelen ser al gunos ‘elementos decorativos al igual que el. cabello de cordones pe ‘gados. Reguiarmente las mufiecas de hueso. les hacen’ los hombres, al igual: que las’ de madera, mientras “que-las de barro, cera y trapo las, 1. fealizan las mujeres para Sus propias hijas alas que.toman, en ocasiones, como modelo, 8S -“'La-cuestion que ahora nos for: *‘mulamos —dice Susana Colazo — {65 81 siempre fueron objetos para ju- gar, 0 bien las representaciones an- tropomorfas no han desempefiado ‘otro papel, es decir, como objetos de caracter. magico-religioso”. Es posible que la pérdida de identidad cultural que sufren los aborigenes ‘a causa del contacto con el blanco “haya hecho olvidar las distintas sig- ‘e nificaciones originales. “L. Jét foki dosé eran tas mufiecas

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