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RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL Por Actidoro CACERES V.* HI desarrollo del lenguaje en el nifio reune peculiaridades trascenden- tes para Ja comprensién del lenguaje en el adulto y atin mas para el estudio de la Patologia del Lenguaje en general. Se encuentra alejandose la época en Ja que, como producto de la ignorancia, del desinterés 0 de la ingenuidad, Jos trastornos en el desarrollo del lenguaje infantil sélo obedecian a la ver- tiente auditiva y/o a la cerebral como sinénimo de sordomudez o de las Ila- madas todavia en nuestros dias, aunque felizmente por personas no califica- das en la especialidad, “afasias infantiles”. La Patologia del Lenguaje en el nifio est mereciendo en estos iltimos tiempos la atencién mas especializada, a diferentes latitudes y por personal cada vez mas idéneo que margina defi- nitivamente las improvisaciones, los alardes teéricos y hasta las buenas volun- tades exclusivas. En el diagnéstico y en la terapéutica de los nifios con alte- saciones en ei lenguaje, descansan el futuro de integracién a la escuela y a Ja sociedad. El aprendizaje, tanto verbal como grafico y el desenvolvimiento en el seno de la comunidad tiene en el Jenguaje al instrumento mas noble y mas efectivo. ;Cémo esquivar entonces la grave responsabilidad de perfec- cionamiento cada dia mayor y de severa acusacién a la impericia, a la apatia y a la impudicia? ‘Vivimos en una época en la que el estudio analitico del problema verbal infantil, acucioso. imparcial, revela catacteres de personalidad diagnéstica con perfiles peculiares y con proyeccién pronéstica del incalculable valor te- rapéutico. Y en este afén, el retardo del lenguaje verbal ocupa lugar preminente. El término “retardo” tiene no sélo una implicancia cronolégica sino también analitico-estructural. Los patrones de comparacién son referidos al desarrollo normal del lenguaje en el nifio, diriamos de “salud lingiiistica” * Jefe del Departamento de Patologia del Lenguaje del Hospital Central de las Fuerzas Policiales del Pert. RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL ut Es por tener otras implicaciones, especialmente en el terreno intelectual, que el término “retardo” no ha logrado la preferencia de muchos patélogos del lenguaje, substituyéndolo por el de “trastorno de elaboracién” 0 por el de “trastornos de integracién", que, a nuestro parecer, cubren a otras altera- ciones en el desarrollo del lenguaje infantil, La época en Jas que un nifio expresa un determinado simbolismo ver- bal, es el producto de una integracién biolégico-ambiental, progresiva, ma- durante y, casi diriamos, ineluctable, que lo hace alcanzar Ja calidad de Ho- mo Loquens, condicién imprescindible en su realidad de Homo Sapiens. Es en esta “evolucién” o en este “recuerdo de una historia de complejificacién” como queria Teilhard de Cuarvi, que se produce el cuadro de retardo del Ienguaje verbal, como realidad cronolégico-esteuctural en el curso creciente del nifio. CLASIFICACION EI retardo del lenguaje, a nuestro parecer, ocupa lugar importante en el grupo de trastornos de la organizacién e integracion del lenguaje verbal. Su perfil semiologico, su “historia natural” y hasta su pronéstico nos han permitido elaborar una clasificacién, que presentamos a continuaci6n. 1. RETARDO SIMPLE La época de aparicién de las diferentes etapas integrativas esta apenas perturbada o no lo esta; pero la morfologia del enunciado esté alterada, con- servando, sin embargo, su carga significante. Con frecuencia son las etapas finales de adquisicién (a nivel de frases especialmente) las que estan mas comprometidas. Puede ser: a. esencial o idiopatico; b, familiar, y c. funcional, de acuerdo a su posible naturaleza etiopatogénica. Es este tipo de retardo en el gue generalmente el cociente intelectual es normal en donde tienen lugar Jas especulaciones de “deficiente maduracién” o de “deficiencia instrumental’ mejor aplicables tal vez a la variedad funcional si més que 2 “-maduracién mielinica” se refiere, pura y lanamente, a maduracién lingiiistica. Se puede aplicar, igualmente, a este tipo de retardo, lo que Andrés Feveux, discipulo de Fromenr, refirié por primera vez quizas, en 1932, como trastorno en la evocacién del leit-motiv verbal, el cual habria sido “mal constituido”. Esta funcién de evocacién, seria analizada mas tarde por SADEK-KHALI a propé- sito de un estudio en pacientes afasicos adultos. 212 A. CACERES II. orGANico Se encuentran perturbados: la época de aparicién de las diferentes fases de integracion del lenguaje, la morfologia del enunciado (su estructura); y la prosodia, Pese a esto aiin se conserva una estructura simbélica, inten- cién comunicante y significante. Podra ser: a) Leve 0 primario, Perturbacién limitrofe con el retardo simple “fun- cional”’; se le puede atribuir, igualmente, una posible “deficiencia instrumental” La expresion, alterada en su evolucién cronolégica y en su morfolotia, lo es mas que la comprensi6n, la que es bastante buena Ilegando inclusive a superar las érdenes semicomplicadas. b) Moderada, Hay alteracién en la cronologia integrativa, en la pro- sodia, en la expresién y en la comprensién verbal que esta limitada al cumpli- miento de 6rdenes simples y s6lo a algunos semicomplicados, de acuerdo a la edad del nifio en estudio. El trastorno expresivo lo es tanto en su norfologia cuanto en su sintaxis, ¢) Grave. La perturbacién es mixta, tanto de comprensién cuanto de expresién verbal. Hay, ademas, evidencia de un compromiso en otros siste- mas neurosensoriales (en especial auditivos), motores, (dispraxias 0 paresias bucofaciales), intelectuales, aunque estos no explican. por si solos, todo el trastorno del lenguaje verbal IIL. sociopAtico El término es aplicado en el concepto de alteraciones, distorsiones 0 privaciones que la sociedad puede ofrecer al nifio como integrante de un “grupo”. El nifio es miembro de un campo social y desde su nacimiento in- tegra un grupo. Las relaciones con éste establecen indudablemente un juego de influencias que desde los primeros momentos son parte de su integracién social. La lingiiistica, la antropologia, la sociologia, la neuropsicologia y, en fin, la ciencia del comportamiento (“entender, explicar y predecir el compor- tamiento humano”; Bernad BERELSON) tienen aqui un maravilloso campo de estudio. Y es que tenemos que aceptar los conceptos formulados por William Granam Sumner de que “las relaciones de grupo afectan a los juicios éticos y modos de pensar”. EI nifio es un individue parte de un grupo social y por lo tanto en contacto y comunicacién al comienzo de un “campo primario” o “cuasi grupo” (familia) y después lo seré en uno “secundario”. Como tal, su estudio inte- resa a la Sociologia tomada ésta “como el estudio cientifico de la sociedad, RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL 213 de su estructura, funciones y procesos”. De aqui de este “estudio cient de las leyes fundamentales de los fenémenos sociales” en la acepcién de Au- gusto Comte, —arbitariamente talvés— hemos derivado el término Socio- patico, para hacer comprender (de pathos = enfermedad) que la falta o dis- torsién de los “modelos’’ lingiiisticos que deben ofrecerse al nifio para ta formacién de su lenguaje, son los responsables de este tipo de retardo. Comprendemos la probable limitacién del término, pero es que casi siempre al “modelo” distorsionado corresponde un “grupo” distorsionado, un grupo social alterado, muchas veces privado de un “sentido colectivo” o de “criterio futurista”. (Sin querer aqui tomar al pie de la letra el concepto de Wuonrr-Sapir de que la forma en que uno concibe el mundo es, en gran parte, determinada por el lenguaje que uno habla). Se ha reconocido que los nifios gue viven aislados en los hospicios durante los 3 primetos afios dé la vida y que no disponen del cuidado integral que ponga atencién en los “modelos” de lenguaje a imitar, suelen ser lentos en Ia adquisicién verbal sin que exista relacién con el nivel intelectual. Wooxey, como lo recuerdan BRECKENRIDGE y Murpny, ha presentado al nifio David como ejemplo de esta desventaja social, David a los 2 afios y 10 meses y segiin el autor, con inteligencia nor- mal, s6lo podia decir una frase “Buenos dias” y entender algo més. Hasta esa edad habia permanecido en un orfelinato “donde se le habia proporcio- nado buen cuidado fisico pero donde no habia oido apenas otra cosa que buenos dias”. En la antigiiedad se trat6 de encontrar la lengua original de los hombres, aislando nifios del mundo. SEEMAN recuerda el intento del Fa- raén PSAMMETIQUE, que vivid en el siglo VI antes de Cristo y que hizo aislar dos nifios recién nacidos, a tal punto que no podrian entender ninguna lengua. Como influencias responsables de este tipo de retardo tendran que es- tar, en los extremos, la sobreproteccién y Ia “carencia emocional”. Los nifios sobreprotegidos sin necesidad de aprender, no hablan “porque no lo neces tan”, “sus deseos son tan insistentemente anticipados que no sienten la nece- sidad de expresarlos verbalmente”. Launay, establece dos maneras importantes de influencia ambiental: 1. El aspecto social. 2. El aspecto afectivo, como determinantes importantes de lo que lla- ma los “retardos de elaboracién del lenguaje”. Y en efecto, considerando io que el nifio recibe como influencia social, ambiental, puede evidentemente ser motivo de privacién en el sentido verbal pura y llanamente: pero ademas la comunicacién en su polo receptivo Hiecesita "sintonia” afectiva, pasividad emo- cionalmente condicionada que debe ser despertada en primerisimo lugar por la madre, pero sostenida y reforzada por el nifio “receptivo”” 214 A, CACERES EI bilingiiismo y el plurilingiiismo son también influencias a conside- tar en algunos retardos que Iamamos sociopaticos. Recordamos los conse- jos de ARSENIAN, quien afirma que no produce efectos nocivos el aprender dos lenguas diferentes desde Ja infancia, si: 1. se observa un método con- secuente en cuanto a la fuente y a la presentacién de las dos lenguas: “Cada persona una lengua”. El consejo que sefiala el autor, sin embargo, es discuti- do actualmente; 2. si no concurren algunas barreras psicolégicas 0 condicio- nes afectivas negativas, tal como Ja pretendida inferioridad o superioridad de una de las lenguas o las enemistades nacionales 0 religiosas que a veces acompafian a determinados idiomas, y 3. las lenguas se aprenden con méto- dos espontaneos informales, jugando, dice ARSENIAN. y no mediante una ta- rea formal. A este respecto, van River afirma que "si el medio lingiiistico es bueno, el empleo de dos idiomas no resulta perjudicial, si por el contrario, es pobre, el hecho de emplearse dos lenguas distintas puede constituir el ori- gen de graves complicaciones”. Estas y otras influencias sociales perturbadores son los responsable de los retardos verbales sociopéticos. Naturalmente, los padres que no saben hablar o que tienen gran limitacién expresiva, como los sordomudos, estan en primer plano como influencia perturbadora en la formacién del lenguaje verbal de sus hijos. IV. ixto En no pocos casos el diagnéstico se basa en la heterogeneidad de factores. DIAGNOSTICO DIPERENCIAL La individualidad diagnéstica del retardo det lenguaje obliga a reali zar un diagnéstico diferencial. Este debera establecerse con las siguientes condiciones: 1. aupimupez Como ya lo establecimos, la comprensin y la inteligencia enteramen- te normales, la carencia de alteraciones auditivas importantes y la casi inexis- tencia del lenguaje expresivo, pero sin otros signos neurolégicos. sicolégicos © mentales, como ocurrian en el retardo organico, establecen el diagnosti- co de audiomudez. No quisiéramos entrar aqui en el ani harto conocido del diagnéstico de audimudez, considerando la instalacién tardia (mas de 5 afios) del lenguaje. Nuestro concepto de audimudez es, como se vera, dife- RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL 215 rente al basado plenamente en el caracter cronolégico. En lo que si estamos de acuerdo, es en que ambos trastornos, retardo del lenguaje y audimudez, pertenecen al gran grupo de trastornos de “elaboracién del lenguaje” y/o de “trastornos de instalacién de la palabra” como lo quieren C. LAUNAY y Boret-Malsonny. 2. DISARMONIAS EVOLUTIVAS Son cuadros reveladores de un problema psiquiatrico y que intentan establecer, a través del estudio del lenguaje, la situacién psicética de algunos nifios cuyo diagnéstico psiquidtrico no es atin claro. El contexto clinico gene- ral; los trastornos en la “realizacién” verbal, especialmente a nivel fonema- tico. (segiin la experiencia de Mises y Secur), la apetencia a hablar y en conjunto su situacién de “habladores” que presentan generalmente estos ni- fios y la presencia de factores que perturban precozmente el sistema relacio- nal afectivo son naturalmente algunos de los hallazgos importantes en estos casos. Ayuriacuerra, DiaTxine y KALMANSON, mostraron en su trabajo “los trastornos del desarrollo del lenguaje en el curso de los estados psicéticos precoces” que el retardo masivo en la adquisicién del lenguaje podra ser re- velador de un autismo infantil precoz y que, en estos casos, la evolucién ul- terior del lenguaje leva la marca de los mecanismos psicéticos que alteran la estructuracién de la personalidad. Se trata de nifios “prepsicdticos” 0, en una acepcién mas amplia, “disarménicos". Es asi como lo parecen entender autores como P. MALE que han insistido en el rol prevalente que juegan ha- bitualmente los déficits instrumentales. Mises, al abordar el “concepto de psicosis en el nifio”, sugiere una restriccién al término, precisando que cies- tas desarmonias evolutivas “evolucionan a menudo en funcién de una insufi- ciencia instrumental bajo el signo de una neurosis" como lo recuerda M. Borex. A nadie escapa el profundo interés a estudiar el lenguaje de estos niffos. 3. 1pioctosia El tipico componente verbal indiferenciado y jergonofasico no per- mite el equivaco en el diagnéstico. 4, MUTISMO-AUTISMO “La ausencia de expresién verbal a pesar de la integridad de funcio- nes que concurren a ia elaboracién del lenguaje” como Io recuerda Leon Micuaux y su génesis enteramente “afectiva’, son la caracteristica esen- cial de este sindrome. A veces es “selectivo”, en la acepcién de TramEr: sélo 216 A. CACERES en ciertas circunstancias (en la escuela, la presencia de un extrafio, etc.) y cesando con ellas. Es e! ‘‘mutismo selectivo” o la “afasia voluntaria” (SEEMAN) “Puede constituir el elemento mas evidente de los trastornos severos del de- sartollo de la personalidad y al maximo, los sintomas de una esquizofrenia infantil, presentandose como sintoma inicial (MIcHAUXx) 5. OLIGOFRENIA Y OLIGOLALIAS Solo empleamos este término al referirnos al Jenguaje del nifio oligo- frénico (Mutitas Idiotica). Evidentemente e] grado de compromiso intelectual es el indicativo, explicativo del trastorno del lenguaje. Mencién aparte merece el diagnéstico de “‘sordera verbal congénita” “agnosia auditiva congénita”, “‘impercepcién auditiva congénite” 9 en una nomenclatura mas reciente, “trastorno grave de la elaboracién del lenguaje” y al cual NaDoLeczny, Lorpett. Worster-Droucut, ALLEN Brisset, LAUNAY y BorEL-Matsonny, entre otros, han dedicado tanta atencin. Evidentemente el trastorno corresponde a Jo que Ilamamos aqui en unidad clinica, retardo organi- co del lenguaje, entre moderado o grave, de acuerdo a la intensidad de sinto- mas y signos acompafiantes. Asimismo y segtin un criterio evolutivo, el diag- néstico diferencial se planteara con las disfasias de integracién. Empleamos este tétmino para denominat asi al cuadro ptoducido por una lesion cere- bral evidente a Ja anamnesis y al examen clinico (en el hallazgo frecuente de signos neurolégicos, distintos a los correspondientes a los del lenguaje). adquirido después de los 3 meses de vida o en la evolucién integrativa organi- zativa de la comunicacién verbal infantil. Sabemos con mas y mas seguri- dad que el nifio no posee ain al nacimiento, territorios cerebrales especiali- zados pata el lenguaje, definidamente constituides. La predisposicién y plas- ticidad hereditarias pueden, en situaciones de agresién cerebral, desplazar su molde organico a otras regiones corticales de las habitual y clasicamente co- nocidas. Tal “compensacién” dice en grado sumo de la extraordinaria cuali- dad de! hombre en su marcha evolutiva y que le es teleolégicamente privativa RESULTADOS Presentamos el estudio de 25 nifios con retardo det lenguaje y con los siguientes parametros. I, EDAD Y SEXO Los 25 nifios de nuestra casuistica se repartieron asi: trece entre tres y seis y medio afios; siete entre seis afios y medio y nueve y medio; cinco entre nueve y medio y trece. RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL 217 52% de la casuistica estuvo por debajo de la edad considerada limite para la integracion del lenguaje. En cuanto al sexo: 20 pertenecieron al masculino (80%) y cinco al femenino (20%). Es remarcable, como se observara, el predominio del sexo masculino en este tipo de sindrome, hecho encontrado por nosotros también en la tartamudez e igualmente referido en la literatura mundial. Menciono el interesante estudio realizado por Jean PiaceRE en Paris y presentado bajo el titulo “La Integracién audiofonético-motriz en el nifio”. Empleando la prueba de repeticién de silabas, inspirado en la bateria de elocucion de BoreL-Maisonny, encuentra en el andlisis diferencial entre nifios y nifias que el ritmo de evolucién y no la eficiencia final, es diferente entre sexo masculino y femenino y que esta diferencia es ostensible a los 3 y a los 6 afios, siendo de 6 meses a los 3 afios y de un afio a los 6 en favor de las nifias. Se encontraria asi confirmado, como concluye el autor, el avan- ce de las niffas en cuanto concierne a fonemas aislados, avance constatado también por otros autores en otros dominios de la actividad Jingiistica, oral y escrita, Recordamos igualmente 2 M!NKowSKI, para quien el peso del cere- bro de Ia nifia supera al del varén en el curso del tercer afio, cayendo en se- guida por debajo de éste y por dltimo a Sergio Levi, quien en su articulo “La Patologia del Lenguaje en el nifio", del libro Neuro-psicologia y Pediatria, recuerda a Decroty y PicHon quienes explicaron el progreso mas rapido de las nifias en la adquisicién del lenguaje por el hecho de que “en la mujer el aprendizaje es mas imitative y menps original’. La discusién, creo, esté atin abierta en cuanto a raz6n fisioparogénica. IL. DESARROLLO PSICOMOTOR Se ha investigado, ademas del lenguaje, Ja ereccién cefalica, la posi- cién sentada, la posicién de pie la marcha y el control de esfinter vesical du- rante la noche. A nadie escapa lo dificil que representa la tarea de obtener informacién precisa en nuestro medio en relacién a estos objetivos. Los pa- dres 0 no recuerdan o son imprecisos en su informacién. Sin embargo, hemos observado que cada vez hay mejor atencién en la fijacién de fechas a las que los familiares les asignan un valor intrinseco en la evolucién del nifio. 1. Ereccién cefalica. En nueve casos no se precisaron fechas, en dos se refirié como “normal” y en catorce se fijaron meses destribuidos asi: ocho hasta los tres meses; cuatro entre tres y seis, y dos entre seis y ocho. Es decir, catorce nifios, sobre 16 en los que se obtuvo informacién precisa, fueron nor- males (87%)}, si se acepta la escala de BRECKENRIDGE y MurpHy, segun la 218 A. CACERES cual entre los cuatro y seis meses la mayoria de nifios pueden mantener ergui- da la cabeza, 2. PosICION SENTADA. En 15 nifios no se obtuvieron informes seguros. En los diez restantes, se refirié que ésta fue lograda entre los seis y ocho meses, en 7; entre los ocho y diez en dos, y entre los diez y doce meses en uno. En todo caso, los diez pudieron mantenerse sentados antes del afio de edad. Recordamos a GEseLt para quien practicamente todos jos nifios de nueve meses son capaces de sentarse solos. 3. Posicién de pie. Segin los estudios de BaytEy, la bipedestacion esté plenamente desarrollada hacia los doce meses. En nuestra casuistica, en doce nifios no se pudo obtener informacién precisa. En dos se acepté que fue “retardo” en esta fase; en siete la estacién de pie se logré antes del afio de edad y en cuatzo se logré después de los doce meses, alcanzando uno hasta los 18. Marcha. Sélo en dos no se obtuvieron datos. En 18 nifios la marcha se inicié antes de los 18 meses, es decir en 72%. En 2 fue entre 18 y 24 meses; en 2 entre 2 y 2 1/2 afios y en uno a los tres afios. Si nos atenemos a los resultados estadisticos de Seurtey, Bav.ey, Grirritis, GEseLt, 72% de nuestros nifios anduvo a una edad normal (‘‘la mayoria de los nifios dan ya algunos pasos solos hacia los 18 meses") sospechando que esta cifra puede subir hasta 80% Control nocturno de esfinter védical. Ya nos hemos referido al dificil analisis cronolégico del dominio del esfinter vesical durante la noche. Sin querer incurtit en el grave defecto de exageracién, hemos tomado la edad de 5 afios como limite maximo en la consideracién de normalidad para nuestro medio, determinacién de probabilidad segiin nuestra creencia de la influen- cia del ambito sociocultural. Nueve nifios con retardo del lenguaje controlaron el esfinter antes de los 5 afios (36% del total); 8. con mas de 5 afios, ain tenian enuresis noctur- na (329 del total); 4 nifios, cuyas edades estaban entre 3 y 5 afios “mojaban la cama muy esporadicamente” y en 4 se refirié que sélo ocurria “cuando hacia frio”. Es decir que entre 32 y 48% de nifios del total de 25, habia la sospecha, confirmada en la gran mayoria, de enuresis nocturna 4. Lenguaje verbal. El analisis neuropsicolégico de la funcién se rea- lizé empleando baterfas adaptadas al nivel cronolégico del nifio. Se us6 la bateria de Katherine Hirsch’ modificada, elementos del test de Borel Mar RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL 219 SONNY, listas de palabras y referencias de los protocolos de “examen del desarrollo” de Gest. Comprensién. En 17 casos la comprensién puede catalogarse como normal, esto es en 68% del total. En cinco estuvo claramente limitada al plano mas concreto; en dos definidamente deficitaria y en uno podriamos se- fialar que fue nula, En conclusién: en 8 nifios (32%) del total se encontré compromiso de la comprensién verbal adelantandose a referir que en éstos, el trastorno fue mixto, puesto que también la expresién verbal estuvo alte- rada; en 17 nifios el problema fue tnicamente expresivo predominante. (“La formula “no habla pero comprende todo” es raramente exacta. Ella es una consolacién que’ se ofrecen los padres pero que raramente resiste a un examen sistematico”: BoreL-Matsonny). Expresién, Los 25 nifios tuvieron compromisos de la expresién verbal; este es pues el eje central en la disquisicién diagnostica. En algunos casos se encontraron elementos superimpuestos 0 adicionales de problemas de voz, la que era disfénica en tres casos y rinofénica en uno asi como elementos di- sartricos en un nifio y dislélicos en otro, Uno presentaba embolofrasias y balbismo, y dos, dificultad ténica para iniciar la frase lo que ofrecié un mar- gen interpretativo de un blogueo incipiente probablemente de naturaleza es- pasmofémica. Los resultados establecen luego, que la gran mayoria de nifios presen- t6 compromiso predominante en la integracién estructural del lenguaje que se ofrecia como lenguaje “inmaduro”, con un desnivel entre la expresion verbal y su correspondencia cronolégica con elementos del Hamado “lenguaje bebe". que fue el signo predominante, encontrandosele en 15 casos, es decir en 60% de la casuistica. Un nifio de seis afios nos decia “teno ame” por “‘ten- go hambre”; otro “pedo di” por “no puedo decir”; un tercero de cinco afios decia “el otro lalusch” por “la otra limpara”, etc. Completando el sindrome se encontré ademas agramatismo, talescopages, inversiones, omisiones y subs- tituciones fonematicas y hasta morfémicas, algunos agregados y no pocas deformaciones, inclusive frasticas aunque sin Hegar en ningin caso a la jerga © a la neoestructuracién verbal del nifio idioglésico psicdtico o del afasico verdadero. En dos casos hubo ecolalia y en uno la limitacién fue tan importante que casi presentaba una verdadera mudez dejando, sin embargo, entrever una configuracién balbuceante que sefialaba un retraso en la inte- gracién a nivel del balbuceo. La prosodia estuvo normal en seis nifios (24% de la muestra) siendo en doce francamente disprosédica (48%) y monétona en el resto. A. CACERES Integracion del lenguaje verbal expresivo. Es dificil, repetimos el en- juiciamiento de las épocas en las que se pretende sefialar una determinada etapa integrativa lingiiistica. Ademés de la pobre atencién puesta por la ma- yoria de padres en la observacién de estos hechos, existe Ja natural versatili- dad y plasticidad en el paso de una etapa a otra. Sin embargo, es necesario aceptar, por lo menos, informaciones que demuestran seguridad de la parte de los informantes y que permiten situar el desarrollo lingiistico aunque fuera solamente a titulo comparativo. Llamamos “Jaleo” o “murmullo” a la etapa prelingiiistica en Ia que el nifio “juega” con sus érganos fonadores, los que Je ofrecen el sonido tan caracteristico del “angu” infantil. Sélo en seis nifios de nuestra casuistica se obtuvo referencia segura de su aparicién: en tres alrededor de los tres meses; en dos entre cinco y diez meses y en uno a los dos afios... Los datos obte- nidos carecen de valor estadistico. E| balbuceo, segunda etapa integrativa, se produjo entre 8 y doce meses en 11 nifios; entre 12 y 18 meses en 9, entre uno y medio y dos afios en dos y entre dos y tres afios en tres. Esto, es decir, que en 44% de la ca- suistica el balbuceo se integré practicamente en forma normal. Entre el balbuceo y la adquisicién de palabras se establece una fase que pronto individualiza una etapa en la vida lingiiistica del nifio y que mu- chas veces ha servido para calificar como lo mas caracteristico en la pri- mera infancia en cuanto a lenguaje. Es la “jerge infantil” o también Hamada “habla infantil”. Bajtando, envolviendo palabras reconocibles y con significado simbéli- co y balbuceo bi y trisilabico, el nifio expresa sonidos de rica inflexién mel6- dica, con los que quiere sefialar una accién o un afecto, pero que carecen del significado simbolico, preciso. Los padres entrevistados no nos ofrecieron edades en la adquisicién de estas etapas y ain mas, la mayoria no supieron reconocer la existencia de esta época en el desarrollo del lenguaje del nifio. Segiin lo recuerda Charles Van Riper, en la obra de Wendell JoHNSON Jos adultos pueden comprender alrededor de la cuarta parte de lo dicho por un nifio normal de 18 meses. A los 2 afios resultan comprensibles las dos terce- tas partes, a los 3 afios alrededor de nueve décimas se perciben con claridad y a los 4 afios es comprensible practicamente la totalidad de su habla. Palabras. Entre los 12 y los 18 meses, el nifio, enriqueciendo su bal- buceo, avanza en el logro de palabras. Su “vocabulario activo” es cada vez mas abundante y de cuatro a cinco palabras a los 15 meses, alcanza de 10 a 15, a los 18, pudiendo, a los dos afios, asociar dos o tres de ellas y confi- gurando el armazén de una frase. Se pudo obtener informaci6n relativa a la época de la adquisicién de palabras en 20 nifios. En los cinco restantes los RETARDO DEI, LENGUAJE VERBAL 221 datos 0 estuvieron ausentes.o fueron inciertos. Sélo en dos de los 20 nifios analizados, se refirieron palabras a los 12 meses (8.5% del total, 10% de los 20). En dos nifios a los 18 meses; en cinco a los dos afics: en cuatro entre dos y tres afios; en seis entre tres y cuatro y sélo en uno mas de los 4 afios, En conclusin: de los 20 nifios en los -que se logré informacion de la adquisicién de palabras, éstas aparecieron en 80% de una época tardia, que estuvo entre dos y mas de cuatro afios. Si consideramos a los dos nifios cuyas palabras. aparecieron a los 18. meses, el porcentaje se eleva a 90% de los 20 nifios Frases. Es importante referir que a partir de los dos afios se puede encontrar ya en muchos nifios un armazén de frases en un juego articulato- rio de dos o tres palabras. Pero es igualmente interesante aclarar. que es entre los dos y tres afios que el sentido de frase esta implicito en el uso de palabras con el valor simbélico de frase. Cuando el nifio dice: ‘agua’ sefiala que quiere tomar agua o que esta loviendo o que quiere bafiarse; “sopa” significaba en uno de nuestros nifios todo tipo de alimento y en otro pan, etc. Se pudo obtener informacién en trece nifios y de ellos sélo dos inte- graron sus frases antes de los tres afios, tres a los tres; dos a los cuatro; tres a los cinco; y tres adn no habian comenzado esta etapa integrativa. En con- clusién: 11 de los trece nifios en los que se obtuvo informacion, 84% inte- graron tarde su lenguaje verbal a nivel de las frases. En resumen, desde el punto de vista cronolégico fue a nivel de las palabras y de Jas frases que la integracin del lenguaje estuvo mas retarda- da en nuestra casuistica. III. ANTECEDENTES PERSONALES Gestacién. En 18 nifios el embarazo fue normal (72%): en dos duré siete meses y medio sin problemas sobreagregados; en dos hubo amenaza de aborto en el segundo trimestre, y en tres se encontraron datos de traumatismo (dos caidas sobre el vientre y una descarga eléctrica). Parto. Bn 14 nifios el parto fue normal (56%);-en uno si bien el parto fue sin problemas, el nifio que nos tocé estudiar nacié en trillizos con 1,500 grms. de peso; otro, siendo igualmente normal el parto, pesd 2,160 grms. y en otro la presentacién fue podalica. En dos nifios se practicé cesa- reas: eni tres forceps: y en tres hubo dificultad preparatoria evidente, Si sélo consideramos el acto del parto observamos que 17 nifios lo tuvieron sormal (68%); en 5 hubo distocia (20%), y en 3 sospecha de problemas de oxige- nacién (12%). 222 A. CACERES: Postnatales. En 16 nifios no se encontraron antecedentes postnatales de importancia (64%): el trillizo tuvo que estar dos meses y medio en incu- badora, sin ninguna intercurrencia. En tres se describieron convulsiones ge- neralizadas antes de los dos afios de edad y en 5 (20%) se registraron an- tecedentes de importancia: una otitis media crénica, dos traumatismos en- céfalocraneanos moderados y dos “virosis”. En conclusién, de 25 nifios estudiados entre 68 y 72% estuvieron li- bres de todo antecedente pre, para o post-natal. Estas cifras son tanto mas importantes por superponerse a los resultados obtenidos en la encuesta familiar. TV. ANTECEDENTES FAMILIARES En los 25 casos s6lo se encontraron 6 nifios que no ofrecian ningin antecedente familiar importante, es decir, 24% de la casuistica estaba libre de patologia familiar remarcable. Los 19 restantes tenian antecedentes préxi- mos de interés, es decir, 76% de la casuistica, resultado altamente significativo. En 11 nifios se encontré el antecedente familiar de retardo del len- guaje, lo que da un porcentaje de 44% entre los 25 de la casuistica y de 57.7% en los 19 con antecedentes significativos. Este resultado es verdade- ramente importante, y lo es mas cuando en 6 nifios fue el tinico antecedente presente. Es decir, en 24% de la casuistica y en 32% de los nifios con ante- cedentes familiares, el retardo del lenguaje estuvo presente como iinica in- formacién. Otros trastornos del lenguaje y/o de la palabra, especialmente espasmofémia, se encontraron en 4 nifios, es decir, 16% del total y 21% de los nifios con antecedentes. En resumen, de 25 nifios, 19 tuvieron antecedentes familiares impor- tantes y de estos 15, (60% del total y 78.9% de los nifios con antecedentes familiares significativos) presentaron antecedentes de trastorno del lenguaje verbal en sus parientes préximos. Otros antecedentes encontrados fueron: convulsiones, distimias, mi- graiias (10 veces), psiconeurosis, enuresis nocturna, onicofagia. alcoholismo (4 veces), zurderia (5 veces), pardlisis cerebral (2 veces), sordera (1 vez), retardo mental (I vez). V. BILINGUISMO Ninguno de los nit en estudio pertenecieron a ambiente bilingiie en la acepcién especializada del término (integracién simultanea de dos lenguas). RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL 223 VI. PRoBLEMAS Psiquicos Dos tipos de comportamiento han dominado el cuadro clinico. Nifios hiperactivos, explosivos, con rabietas, destructores y hasta agresivos de un lado y nifios calificados por sus padres como timidos, retraidos, inhibidos, aunque algunos con rasgos caracteristicos explosivos, del otro. 14 nifios (56%) ocupan el primer rango, siete estan en el segundo (28%). Entre ambos grupos se sitdan 3 nifios cuyos padres y el examen mismo, no des- cubren nada importante a nivel del caracter y s6lo onicofagia y monotipias al dormir y en otro terror nocturno, egocentrismo, ecopraxia. Esto, es decir que 84% de nifios en nuestra casuistica, presentaron francos trastornos del comportamiento que ya preocupaban a los padres a tal punto que muchos de ellos habian concurrido a consultas neuropsiquiatricas. VII, FACTORES SOCIALES Analizamos aqui lo que consideramos ambiente familiar y relacién especialmente afectiva con los padres. Dies nifios demostraron anormalidad a la encuesta médico-social (40%); otros nueve estaban reconocida y evidentemente sobreprotegidos (36%), y 4 pertenecieron a una familia numerosa (entre 6 y 12 hermanos) y uno a un micleo familiar mal integrado, por pésimo entendimiento entre los padres que aim vive en un solo “hogar”. El dltimo de nuestros nifios ensaya una terapia reeducativa siguiendo al parecer el método amado de “organiza- cién neurolégica", segin las pautas de Doman y Detacato. En conclusién, en 50% de nifios se encontraron factores sociales per- turbadores a su equilibrio: formativo. VIII, sicNos NEUROLOGICOS E] examen neurolégico “general” result6 enteramente normal en 11 nifios (449). En 6 se encontré hipotonia muscular generalizada en grado moderado sin otro signo de compromiso neurolégico. En 3 nifios también al- gunos signos oftalmolégicos (estrabismo en uno, nistagmus en otro, pigmen- taciones del iris en un tercero). En 4 se encontraron diversos signos, sin valor estadistico como: hiporreflexia osteotendinosa, hipercinecia, estereotipias de movimiento y en uno dispraxia labiolingual. Un nifio se resistié al examen en diversas oportunidades en que se intent6. En conclusién, en 44% el examen fue enteramente normal y en los restantes no se encontraron signos concluyentes con valor estadistico de al- gin sindrome neurolégico conocido, al examen clinico general. 224 A. CACERES IX. COCIENTE DE DESARROLLO Y COCIENTE INTELECTUAL De los 25 nifios sélo se pudieron obtener resultados en 21, es decir, en 84%, Los restantes fueron examinados con este intento, pero no se logré obtener una cifra cuantificante. Se ha tomado el cociente de desarrollo como semejante en la prime- ra infancia al cociente intelectual y segin Ja acepcién de Henri WALLON, en especial, en su vatiabilidad cronologica. Diez nifios estuvieron en el nivel normal promedio (40%); uno nor- mal superior (4%); cuatro “fronterizos" (16%); cinco tuvieron evidente de- ficiencia 30, 46, 58, 65 y 69) es decir, 20%. De lo que se desprende que en 16 nifios de los 21, en los que se pudo obtener C. I., es decir, 71.4% fue normal o superior considerando que su potencial siempre fue mayor a lo actual. Se usaron las baterias de Weschler Bellevue (Wisc) para nifios. la no verbal de Catell y Brunet-Lezine. La normalidad obtenida se proyecta en la responsabilidad de un en- trenamiento bien conducido, en cuanto a reeducacién que pueda aprovechar en el futuro del nifio en ese nivel intelectual actual. X. AupIOMETRIA En 20 nifios se practicé audiometrias a tonos puros usando dos apa- ratos: el uno Maico y el otro BELToNE 15. Los 4 restantes no pudieron con- dicionarse a este examen. Los resultados fueron: normales en 18 (85.7% de los 20) y anorma- les en dos correspondientes a hipoacusias moderadas (uno de tipo conducti- vo). bilaterales. XI, ELECTROENCEFALOGRAMA En 21 nifios se obtuvieron trazados de una a tres oportunidades en cada ‘caso siguiendo las normas clasicas y por diferentes especialistas, De ellos, 17 estuvieron anormales (80% de 21) y 4 normales. La anormalidad consistia en la mayoria en disritmias difusas, sin valo- res especificos con valor estadistico, Este trabajo asi como el de la medida audiométrica, seré motivo de un andlisis mas minucioso y con una casuistica mas importante. RETARDO DEL LENGUAJE VERBAL 225 RESUMEN Se estudia el Retardo del Lenguaje Verbal. Se establece una clasifica~ cién basada en aspectos clinicos, evolutivos y pronésticos. Se presentan los resultados de un estudio realizado en 25 nifios portadores de este cuadro no- sografico, SUMMARY It is studied the Verbal Language Retardation and it is established a classification of this disorder based on its clinical traits, course and prognosis- It is presented the results of a study made in 25 children affected by this nosographic entity. RESUME On étudie le retard du langage verbal, établissant une classification basée dans les aspects cliniques, évolutifs et du- pronostic. On présente les résultats d'une étude effectuée chez 25 enfants porteurs de ce cadre noso- graphique. ZUSAMMENFASSUNG Man hatte die Retardierung der verbalen Sprache studiert und eine Klassifikation entwickelt, die auf klinischen, prognostischen und Entwick- lungsaspekten beruht. Die Zahl der Faille waren 25 Kinder. BIBLIOGRAFIA 1. Asuniacuerea, J. Duvreive, R. & Katmanson, D. 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