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DICTAMENES RELACIONADOS
FUENTES LEGALES
POL art/98 ley 10336 art/5 ley 10336 art/6 ley 10336 art/9 ley 18834 art/160 ley 18883
art/156 ley 10336 art/6 inc/3
MATERIA
El recurrente expone que la interposición de la referida acción en su contra por parte del
SERVIU, solo busca impedir que este Organismo Contralor cumpla con el imperativo legal
de realizar el control de legalidad de la resolución exenta que dispuso la no renovación de
su contrata, haciendo ilusorio el desempeño de dicha función fiscalizadora a través de una
maniobra que viene a judicializar improcedentemente la discusión, con la clara finalidad de
excluir e impedir la actividad de este Ente de Control.
Añade que la acción deducida por el SERVIU aduce a una incerteza que no existe respecto
del artículo 10 de la ley N° 18.834, ya que desconoce de manera temeraria lo instruido en
los dictámenes Nos 85.700, de 2016 y 6.400, de 2018, de esta Contraloría General,
acerca de la confianza legítima en materia de renovación de contratas, jurisprudencia que
es obligatoria y debe ser acatada por los servicios y sus asesores jurídicos.
Por último, informa que con fecha 8 de julio de 2019, el 1° Juzgado de Letras de Linares se
declaró incompetente absolutamente para conocer la causa judicial en comento, por lo que
solicita que la Contraloría Regional del Maule se pronuncie sobre el reclamo de ilegalidad
que dedujo.
Por otra parte, don Manuel Alejandro Norambuena Méndez, también acude a esta Entidad
Fiscalizadora para solicitar que se resuelva sin más trámite su reclamo de ilegalidad
deducido en contra de la determinación del SERVIU en orden a no renovar su contrata para
esta anualidad, a cuyo respecto también se dedujo una demanda en juicio ordinario de
declaración de mera certeza, según da cuenta el oficio N° 860, de 2019, de la Contraloría
Regional del Maule.
Luego señala que el Director (S) del SERVIU de la región del Maule y sus asesores, a
instancias del abogado en cuestión, quien no ejerce la jefatura del departamento jurídico,
determinaron demandar a los funcionarios despedidos -lo que ha ocurrido en el caso de los
señores Viguera González y Norambuena Méndez, entre otros que menciona-,
presentando en contra de ellos acciones declarativas de mera certeza con el objeto que los
tribunales civiles resuelvan algo distinto a lo concluido en los pronunciamientos de este
Organismo Fiscalizador, como el dictamen N° 6.400, de 2018, y para impedir que esta
Entidad Contralora haga uso de sus facultades en razón de lo dispuesto en el artículo 6° de
la ley N° 10.336, por lo que solicita que se persigan las responsabilidades de los
involucrados en los hechos descritos.
Por otra parte, los artículos 5° y 6°, de la ley citada, en cumplimiento de dicho mandato
constitucional, indican que corresponderá exclusivamente al Contralor informar por medio
de dictámenes, entre otras materias, sobre el derecho a sueldos, gratificaciones,
asignaciones, desahucios, pensiones de retiro, jubilaciones y montepíos y, en general,
sobre los asuntos que se relacionen con el Estatuto Administrativo, y con el funcionamiento
de los Servicios Públicos sometidos a su fiscalización, para los efectos de la correcta
aplicación de las leyes y reglamentos que los rigen; estableciendo que sólo las decisiones y
dictámenes de esta Contraloría General serán los medios que podrán hacerse valer como
constitutivos de la jurisprudencia administrativa.
Luego, el artículo 9° de la ley N° 10.336, dispone, en lo que interesa, que los informes
jurídicos emanados de esta Entidad de Control serán obligatorios para los funcionarios
correspondientes, en el caso o casos concretos a que se refieran.
Por ello, desde la segunda prórroga, al menos, la superioridad solo puede adoptar una
decisión contraria a través de un acto administrativo que explicite los fundamentos que
avalen esa determinación, detallando el razonamiento y los antecedentes de hecho y de
derecho en que se sustenta, el que, según se expresa en los citados dictámenes, se
materializa mediante la emisión de una resolución exenta.
Agregan dichos pronunciamientos, en torno a los reclamos ante esta Contraloría General
respecto de vicios de legalidad, que de acuerdo a los artículos 160 de la ley N° 18.834 y
156 de la ley N° 18.883, en aquellos casos en que son aplicables, los funcionarios tendrán
un plazo de diez días hábiles para acudir a este Ente de Fiscalización, contado desde que
tuvieren conocimiento de la situación, resolución o actuación que dio lugar al vicio de que
se reclama.
se reclama.
Es en ese contexto que los señores Viguera González y Norambuena Méndez acudieron a
la Contraloría Regional del Maule para obtener un pronunciamiento acerca de la legalidad
de la decisión del SERVIU de esa región, en orden a no renovar sus designaciones para la
presente anualidad, constatando dicha sede regional que aquel organismo de la
Administración había deducido en contra de esos exfuncionarios sendas acciones
declarativas de mera certeza.
Pues bien, en el texto de dichos libelos, se advierte que el objeto declarado de tales
acciones es que los tribunales pongan “término a la situación de incertidumbre jurídica que
se ha producido con motivo de una interpretación de la ley, en específico el artículo 10 de
la Ley 18.834”, y que por tanto se resuelva que existió una relación jurídica a contrata con
los demandados que expira inequívocamente por el solo ministerio de la ley el 31 de
diciembre de cada año, salvo que hubiera sido propuesta su prórroga con treinta días de
anticipación a lo menos, según da cuenta el petitorio de la demanda.
Como puede apreciarse, lo que se solicita a los tribunales de justicia es que se pronuncien
acerca de una temática sobre la cual esta Entidad Fiscalizadora ha emitido no solo dos
instructivos que sistematizan la materia -los citados dictámenes Nos 85.700, de 2016 y
6.400, de 2018-, sino una multiplicidad de pronunciamientos que junto a aquellos
conforman una clara y nutrida jurisprudencia cuya observancia es obligatoria para los
servicios que conforman la Administración del Estado, según se analizó, debiendo añadirse
que, además, existen profusos pronunciamientos judiciales sobre la materia emanados de
la Excma. Corte Suprema.
De esta forma, el SERVIU ha procedido a iniciar acciones judiciales sobre la base de una
supuesta incertidumbre jurídica que no es tal, toda vez que la Contraloría General en
ejercicio de su potestad dictaminadora ha precisado y aclarado el sentido de la normativa
que rige la materia, para proteger el principio de certeza jurídica y de confianza en la
actuación regular de la Administración del Estado, interpretación que por lo demás se
encuentra en la línea de lo resuelto por los tribunales de justicia.
Sin embargo, es forzoso anotar que, tal como lo señaló la Contraloría Regional del Maule, la
interposición de las referidas acciones de mera certeza impide a este Órgano de Control
emitir un pronunciamiento sobre las reclamaciones deducidas por los aludidos
exfuncionarios.
Lo anterior, por cuanto el artículo 6°, inciso tercero, de la citada ley N° 10.336, consagra
el principio de no intervención, el cual tiene como objeto evitar que esta Entidad de Control
tenga injerencia en los asuntos sometidos al conocimiento del Poder Judicial, a fin de
garantizar la competencia exclusiva y excluyente que la Constitución Política de la
República le ha conferido a ese Poder del Estado para conocer y resolver las causas civiles
y criminales, evitando decisiones contradictorias.
En efecto, el citado artículo 6°, inciso tercero, de la ley N° 10.336, dispone que la
Contraloría no intervendrá ni informará los asuntos que por su naturaleza sean
propiamente de carácter litigioso, o que estén sometidos al conocimiento de los tribunales
de justicia, que son de la competencia del Consejo de Defensa del Estado, sin perjuicio de
las atribuciones que, con respecto a materias judiciales, reconoce esta ley al Contralor.
Además, cabe considerar que, en la especie, se han utilizado recursos públicos para el
señalado fin ilícito, por cuanto el SERVIU se ha valido de los medios institucionales para
demandar a sus exfuncionarios, quienes, en cambio, deberán asumir con medios
particulares su defensa judicial en los litigios iniciados por ese organismo público en su
contra.
Confírmense los oficios Nos 860 y 876, de 2019, de la Contraloría Regional del Maule.