You are on page 1of 21
Responsable editorial de Literatura Tianl y Juyeni Natalia Méndez Direccion de arte Natalia Femandez Diseno de a eolecclon} Luciano Andajar Conrecelon: Carolina Calabrese 1* edicion, abril 2015 © Del texto; Gustavo Roldan, 1984 © De la tlustracion: Roberto Cubillas, 2014 © De esta edicién:; Edelvives, 2015 a0 224 2° piso (C1022AAP) Aires, Argentina ISBN: 978.987-642-532.8 ‘Quecla hecho el deposit que dispone ta Ley 11 723 Lmpreso en Latingritien, Giudad Autonoma de Buenos Altes: Angentina Reservas tos ls derechos Queda POM, Kt Ta HOMeAtBN era de as tulares ct copyrigh, {a reproducion total o parcial, odstihucon dees oi par ealjuier Melo v process, ‘omprencies el tratamiento informalicay Ia veprogralia FICHA PARA BIBLIOTECAS Roldan, Gustavo El chivo del cebollar / Gustayo Roldan ; ilustrado por Roberto | Cubillas. - 1a ed, - Ciudad Autonoma de Buenos Aires Edelvives, | 2015. 40 p. : il. ; 20x13 em, - (Ala Delta, Roja) | 1. Literatura Infantil y Juvenil Argentina, 1, Cubillas, Roberto, ilus. 1 IL Titulo CDD A863.928 2 ISBN 978-987-642-332-8 ae | ALA hae dk , El chivo del | cebollar Gustavo Roldan llustraciones, | Roberto Cubillas _ lM Version libre de un cuento popular, Habia una vez una viejita que tenia Una mafiana, cuando fue a regar sus un huerto apenas mas grande que un cebollitas, se encontré con un chivo mantel. Y en ese pequefiisimo huerto que se entretenia en pisotearlas. habia plantado un hermoso cebollar. —jSalga, chivo, de mi cebollar! —grito enojada la viejita. El chivo se qued6 quieto. La miro de arriba para abajo y de abajo para artiba, y después dijo: La viejita se fue muy triste porque El perro la consol y le dijo: no sabia qué hacer. —No se preocupe, viejita, ni por el En el camino se encontré con un huerto, ni por la cebollita. | perro y le conto la historia. Y se volvieron hacia el huerto. Cuando llegaron, el perro ladré: —jSalga, chivo, de ese cebollar! Y el chivo, mirandolo muy fijo a los Ojos, le dijo: 10 Al perro se le pararon tres pelos del mo y penso que no le convenia pe- Tear con ese chivo. Y le dijo a la viejita fue volveria otro dia para sacarlo. La viejita regreso muy triste al camino a buscar quién pu- diera ayudarla. Encontré al caballo y le conto la historia. Y el caballo le dijo: —Nose preocupe, viejita, ni por el huerto, ni por la cebollita. ™~ Cuando Iegaron al huerto relincho: —Salga, chivo, de ese cebollar! \ el chivo, mirandolo fijo a los ojos, E lijo: Y siguid zapateando a todo zapatear. \| caballo le corrié un escalofrio, o si le caminaran siete ciempiés bre el lomo. Pens6 que no le con- nia pelear con ese chivo, y dijo que La viejita volvid muy triste al cami- no a buscar quién pudiera ayudarla. En el camino se encontré con un toro y le conto la historia. Y el toro le dijo: No se preocupe, viejita, ni por el Hjuerto, ni por la cebollita. mttiene (especial de Roms puede (eval Toinupenletsnais me VI feel en TI toro pensd que no le convenia lear con ese chivo, y dijo que vol- Miia otro dia para sacarlo. Pp OL La viejita, llorando, volvio al cami- no, y s€ encontro con una hormiguita que andaba paseando. —jAy, hormiguita! ¢;Como me vas a yudar siendo tan chiquitita? ——No se haga mas problemas, pero Apido alceme —éPor qué llora con tanta lagrima? para que lleguemos rapido 4 y —pregunto la hormiguita. Cuando escucho la historia le dijo: —iNo se preocupe, viejita, ni por el huerto, ni por la cebollita! jéveme en su bolsillo. Cuando llegaron la hormiguita dijo: —jSalga, chivo, de ese cebollar! La viejita puso un dedo en el sue- lo y la hormiguita se trep6 corriendo. Después la puso dentro del bolsillo y volvieron al huerto. aanee® Y el chivo, mirandola muy fijo alos _ ojos, dijo: \ pitt ; Yo soy el chivo aa cebollar y de 7 aqui ningune a puede sacar! tae Y se puso a zapatear con mas fuerza todavia sobre las cebollas. 30 Despacito, despacito, con paso de hormiga, la hormiguita se fue acer- cando. Y comenz6 a trepar por la pata del chivo hasta que lleg6 a la punta de la cola. ¥ ahi, una y otra vez, lo pico a todo picar. on ee RY om, cA e ie * a a ‘. + + ie © ° « * . + a + tA 6 « e * - . * a ' 32 s ees ae os o8 a ta or te _ "> —jBrlrlrl! —hizo el chivo con los ojos bizcos. Y salié corriendo y se perdid a lo lejos para no volver nunca mas. Cuando la hormiguita se canso de picar pego un salto y, pasito a paso, volvio a la casa. Li Y se quedo a vivir en la azucarera de la viejita. Y ahi estan todavia, contentas, char- lando sobre chivos y cebollares y un monton de otras cosas a la hora del mate. PRIMEROS LECTORES MOR CSLiCSLLe MONO Mage Ree) SCS) en ES LOC) ENMU Omori ecrerecba (OMe (oat) aly éQuién podra con ese chivo desobediente? El perro? 2El caballo? ZEl toro? Ie celal mt atts Carancom Oca m COC y volver a escuchar. MMe MOM CME eee me Chaco, Argentina, y se crid escuchando historias, esas que pasan de boca en boca. Muchos afios despues, ya lejos del monte, los PaO IE) ome om eeliece(emcat) Kagem en MLLER IT LSet To MANIK STATO Ce) I IROLIC SARE DOU OPme Lee er Teena PIMA Ee TCM RELL} libros para chicos y desarrolla proyectos de aN eae oa animacion, como Los bufiuelos, que se emite por (NN paren aga 95789876 423328 oy Ay

You might also like