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ARTE Y MUSICA, MARIO DE MICHELI ENSAYO. LAS VANGUARDIAS ARTISTICAS DEL SIGLO XX Versién de Angel Sanchez Gijén Alianza Editorial EL LIBRO UNIVERSITARIO “Tiel original Le anenguariarisihe del Noeceta Publicado por acuerdo con Giangiacomo Feleineli Edivore, de Milin Primera edicién en wAlianza Forma: 1979) Primera edicién en «Easayor: 1999) ‘Segunda reimpeesin: 2000 Foxecomposicin e mprerién FX 5 Pollgnso «La Mons: 28850 Tors de Antox(Macrid) Printed in Spin 1983, 1984, 1985, 1987, 1988, 1989, | | INDICE NOTA ALA VIGESIMA EDICION ITALIANA. PRIMERA PARTE: ENSAYO SIGLOXIX. 10S SIGNOS DE LA CRISIS. LOS MITOS DE LA EVASION. LAPROTESTA DEL EXPRESIONISMO. LANEGACION DADAISTA. SUENO Y REALIDAD EN EL SURREALISMO. LALECCION CUBISTA... ‘CONTRADICCIONES DEL FUTURISMO LAREGLA DEL ABSTRACCIONISMO, SEGUNDA PARTE: DOCUMENTOS EXPRESTONISMO... Crénica de la Unig Artitica Die Brice Esboao de un manifesto anovie Manifesto del Grupo Rojo, 245 2465 248 249 249 255 263 265 265, AS VANGUARDIAS ARTISTICAS DEE SIG 295 NOTA A LA VIGESIMA EDICION ITALIANA SUPREMATISMO.. ‘CONSTRUCTIVISHO. a Manifesto del realism, 1920 PRODUCTIVISHO sss durante la reuaién del presidium del CC. del La presente nota sustituye a la que esctibf en junio de 1966 con motivo de la primera edicién de esta obra en la coleccién Universal Econémica de Feltrine- res, en 1959, Las nanguardias artisicas del sigle XX habtan conocido 337 iciones a cargo de Schwarz. La actual reedicién de 337 ampliada, es la vigésima. Como puede apreciatse, el libro ha teni 338, acogida, teniendo en cuenta sobre todo las numerosas traducciones q 339 hhecho en Europa y América (en la actualidad estf apareciendo en dtabe, en 340 una revista stia), En Ia nota de 1966 destacaba algunos aspectos que también ahora me gus- taria cvidencias. Estas paginas, dij entonces, han nacido de la necesidad de de “TABLA CRONOLOGICA., de distan- 0 falran en la ac- cane accie a interpretaciones de las vanguardias histéricas que no me patc- INDICE DE AUTORES, = cen muy distintas de las que existfan cuando eseribf este Desde este punto de sayo y su personal tono servan su actualidad, razén carlos. Si he intcodu me parece que el planteamiento general del en- ‘en el que no falta a veces la provocacién, Ja cual no he considerado oportuno m en casos raros y la obra se ha enriquecido en la parce correspon- rosy las poéticas, donde he afiadido un a, crénica, politica y sentimientos se vinculan fnti- mamente a los problemas de la cultura, porque en mis investigaciones criticas ividir o reducit a fragmentos aislados una «ma- i, en cuyos contrastes nacen y viven también [| que las conciben y las realizan. Esta obra, | es precisamente dl fruto de esa conviecién, Maio De Micueut Milin, 27 de febrero de 1988 Ufa é0re absolument moderne Rimbaud 10 PRIMERA PARTE ENSAYO CAPITULO 1 UNIDAD DEL SIGLO XIX Arte y realidad Harte modern no nacié por evolucién del arie del siglo xix, Po el contratio, 6 ‘de tha ruptura con los valores decimonénicos. Pero no se traté de una ra estética. Bus plicacién 2 las vanguardias artisticas jones del gusto es condenada al fracaso. Ea se le escapa- igvitablemente las causes que generaron el fenémeno del arte modern. Que fixe, pues, Lo que provocé tal rupeura? La respuesta a esta pregunta no se puede buscar més que en iia SoHE WE W¥Bnes histbricas ¢ ideoldgicas. Pero Ja misma pregunta, impliciamente, plantea también otto problema: el de la i 40x. Bfectivamente, fue l siglo x1x europeo conocid 1 la cual se organizaron el pensemicnto filoséi produccién arti i Note: el texto eftico de este vol logico de fos hecho a 15 petiodos culminantes de su des tamio de fa esperanza como del des lon Batrot, uno de los jefes de la oposi maria del si- ales, anafquistas y socialists impulsaban a | tual a batrse, no sdlo con sus obras, sino coi lis armas‘ la ran sgentes con el fas al hombro, Jamds tantds potas y’literatos se tal manera con una revolucién...»®. El mismo Baudelaire, en aqui vida a un periddico revol » Le Sabut Public, y en 1852 escribla el prd- logo a las poesias de Pierre Dupont, Chant des ouuriers, en el que, entre ottas cosas, definia como «puerily la teoria del arte por el arte. Las paginas de este prélogo son un documento bast icativo de su actitud cuatentaioches- a. Hablando de los versos de Dupont, de repente, exclama: Desapareced, sombrasfalaces de René, de Obermann y de Werthes. Fluid ala nic- bila de la nada, monstruosas creaciones de la pereza y de la soledad. Como los cet- dos en el lago de Genesarey, id a zambulliros en los bosques encantados de donde ( sacaron las hadas enemigas, ovejas ar a puerta seré eterno honor para Pierre Dupont. Hacha en mano, coré las cadenas del puentelevadizo de la fortaleza, Ahora, la poesla popular puede pasa. ‘Ve, pues, cantando hacia el porvenitjoh poeta providenci deluminoso de las esperanzas y de las conviecioncs popula curso del movimiento revolucionatio burgués, * Lewis B. Nem, La enone del itelltel, Hina, Tas, 1957, p18 * Palippe de Chenmevitve, Sennen: dun dice de Borers ae Muse ds Louse ex 1848s 86; ef, Burp, Pai, eneno-maaa de 1948, p. 221 "audelave, Rilo st mie eratemporane sae, Mildn, 1945, ed. por A. Donatdy, pp. 9297. MOND DAL stat xs captada por los lectuales como tn elemento decisivo de la historia moderna. ‘atta Son vistos como espejo de esta realidad, hombres de acc 5, salida de forma de la accién; ya no seri més una ‘unos cuantos perezosos, sino la voz del pueblo que habla al pucbl low. La claridad, la evidencia, ol compromiso eran Ia caracterfstica fundamental ‘en la que el arte, en su tendencia general, debi final de su vida, esto es, hacia el 1830, gacaso el mismo Hegel nes de estétice en el mismo problema2: «El artista pertenece a su tiempo, vive imbres y sus habitos, comparte sus concepeiones y representacio- ry que decir que e poeta crea para el pi 6 para su pueblo y su época, los cuales ticnen derecho a exi ‘protisantenite”entonces, En todo [os cumpos interdependiences einconccbibles por separado, Este descubrimicnto de la scali- “CEA Alesandee, A. Deno, caras de Michelet 3 Dauner, Laut, Pty 1488 dad provocaba en Belinski una sensaciin de embriaguez: «Fn la fin ‘spltitu se ha venido forjando un significado ded: mio la realidad, antes por mé ran despreciada, y tem al levantarme y al acostarme, de h real ~ Realidad —digo la realidad me circiundas }, em ESA nueva trans- 10 cata realidad, que que habfa que aceptar incon- vos ineluctables, después de 1840 de transformacién pot parte del hombre. El poeta debe vivir del espiritu del tiempo», escribié ef mismo Belinski. ¥ ese es- precisamente, Belinski— no pue- no de la realidad contemporinea; todo el pasado debe vivir en él. La sociedad quiere ver ‘no ya un consolador, sino un intérprete de su propia vida espiitual e ideolégi- ‘a5 un oriculo que responda a las preguntas mis arduas..»® El contenido y la forma rechazo del romanticismo ya es neto ¢ intransigente. Ya Goethe, en sus co- loqinas con Eekerinaiin, habla dado un juicio fulminainté sobs «Todas las épocas en reptoceso y en, disolucién son subjerins das las épocas progresivas tienen una direccién objetieas. Ahora afios que nos intcresan, de hecho, esta objerivided se m: ‘mas significativas,y ello por la razbn profiunda de que den el cho- ‘que de sus mismas contradicciones, se manifestaba objetivamente el movimic to tendencial revolu de las fuerzas burguesas-populares. Hasta un es- Monarquiay, revelaba luego en las pégi sus novelas la verdad del movimiento histérico, hasta el panto de ser el escritor fad sin que una lente deforma- dora se interpusiera entre su ojo de artista y los hechos en su desarro se vela obligado, a pesar suyo, a contradecir sus propias convicciones politics. cd histbrica se hace ast contenido de la obra a la obra y su forma, Este es otro punto firme de la estética madurada particu larmente“e® aquellos afios del siglo xrx, Citemos una vez mds a Hegel: Lo que decid, tanto en el arte como en todas las obras humanas, es el con- fo siempre Ta aidear que se-walixa-err-ebaspecte-sensible-de-la- Bel leras St 18 S at Bata is, Le MEE Tt se a ‘que su conviccién se apoyaba en tales presupuestos, por lo menos desde que comenzé su ensefianza en fa escuela napolitana, poéo antes de atrincherarse con todos sus alunos en las barcicadas de 1848 y de ser hecho prisionero. De su bro de memorias, La giovinezza, resulta claramente este hecho: mas tarde fie Hlama- ca coma su sustaticia y Yo decta: po, que forman su atmésfera, adoprando de'esta 0 de aquella sociedad. Estos elementos tenian una comple, Conest, Niles, 1940, pp. 239-244 flonase opt, p 1D. la expresién mds completa de la cosa Ps pl arte consiste sélo «en saber hall afios que prepararon el 1848, parece, pues, cvidente era juzgado bastante severa- ondena. Sélo un romanticismo fundado en Fie en-elesurglan le fondo realis- jéndose a los poetas del ie haga vibtar fatuamente / las cuetdas de la libra. ! ahora taf estas cuerdas. / Si no sabes m4s que cantar / tu gl lo / no ees dil al mundo. / Aparta de #i ese sacro instrumento». O como el de Heine en la Cancién de los tejedores de Si- Iesia; 0 como el de Victor Hugo, el poeta que desde 1835, en el prélogo a El Angel, habla escrito: «Bn el siglo en que vivimos el horizonte del arte se Hoy el hha ampliado, Hubo un tigmpo en que el poeta decis: el pribico. poeta dice: el pueblos. Rechazo del arte por el arte La doctrina del arte por el arte habfa encontrado. en Fran« mf favorables cn ef perlodo de la Restauracién, pero la habfa supuesto un duro golpe a tal teorla. Las «tres glotiosas jornadas de hhabfan exaltado 2 artistas y poctas. Daumier se descubrié como dibujanc Delacroix habla pintado La Libertad en las barricadas. Sin. embargo, el gobier- tno de Luis Felipe descubrisfa muy pronto su verdadera esencia. Con Luis Feli- pe, como escribié Stendhal en Lucien Leuven, al gobicmo llegé ela Banca, esta ‘nueva niobleza acufiada al aplastar la cabeza ala revolucié Alexandre Decamps en el Nasianal del 18 de marzo de 1838 desc: gustos estéticos de la nueva burguesia financiera que Shras de arte de una originalidad, demasiado. indzpendiente o de gj mixiado audaz ofenden la vista. de nuestra sociedad espiritu no puede abrazar -vastas concepcion« sgetieFosos de amor‘ la buirianiidad. El vuelo de la opinién es de corto alcance; t6do To que sea demasiado ‘vasto, todo J6 que 8¢’eleve por encima de ella se le apap 1 conformismo se habia ido extendiendo idames G. Court ream, Colip, Milde, 1955, pp. 35-36 LUyIDAD DEL stcto x0 que respecta a los cuadros de iglesia, el gobierno ya no los encarga. Los artistas os rechazan» ®. Al cabo de pocos ecuperado su influencia y los ‘encargos oficiales de cuadros de tema religioso sc habfan reanudado, En el Sa Min. de 1837 mere de os ‘cuadros religiosos superaba al de cuzdros de ba- Peto las fuerzas politicas y culturales ms abiertas reaccionaban con eficacia, preparaids ef élima dé 1848. La conciencia de la‘estretha rélacién entre tte y pueblo, seiedad, era més viva qué Wiunca: Bastar he var de hes tepablicaitor demioerdticos,’ La Refring, 6d pe blicanos burgueses, Le National, para encontrar en cada niimero articulos que remachan, siempre con mayor insistencia, este punto esencial En los escritos de Courbet esta conciencia se manifiesta abiertamente. «Sin la revolucién de Febrero —confiesa a Castagnary el 8 de octubre de 1868— ver no se hubiera visco nunca mi pintura» ¥ algunos afios més carde, vo do sobre el mismo tema, afirma: «Al renegar del ideal Faso y a nica c: si, Tégicamente, he Tuchado as de'g0- ¥de-derecks divine, queriendo que el hombre's¢ gobieme & idades, en su proyecho disecto y.siguiendo, sus pro- cnitancias 36 agrapal EEG aise CaN Todas los copect artistas mds representativos de la escuela ralista: Co “AY piiitar W Campesinos y burpiesesy de taniane natin, eo iin ase 193 Coutber, op. cat pF * fay Egy Sr tare Fiat por eile Eons Scaes Pat 1996p 132 Lae resin es de Mars, en EHO UNIDAD DEL StGLO xix, dandoles el vigor y el cardcter que hasta entonces hablan estado reservados Las palabras vevismo y realismo cran muy frecuentes en estos debates. Pr a dioses y héroes —escribe Castagnary—, Courber Hevd 2 cabo una tevoli ‘mente, lo que persegutan los mace ¢a, sobre, todo,.cato: sincetidad de én artitica» eapresion, verdad, apego alas cosas. ‘el BVIAIEHTo artistico italiano mds avanzado se orienta- ba en la misma direecién en que se movia todo el arte eusropeo democritico, es cir, un arte vivamente enraizado en los problemas, en la vida y en ‘cupaciones por la historia en marcha. , Pero lar capacidad de wcargar la expresi6 te mas le gustaba es el del color no usado en bet es un valor més al los tones profundos, de rojo-oscuro, dorados, violetas, ms Fi ccon ef negro [..] es més bello que el retrato de quien ti quieras, imitado el color del roscro con una horrenda exactizuds, meta evaacisin del Valor transl ‘aids, Esto es lo que &{ biiscaba: la intensidad de la expresién, a la que sact 7 He aqui, pues, quign es Van Gogh antes de Uegar a Parls en 18: __ Esso. cualquier otra preocupacién. Pero, siempre, expresién de la realidad, © mejor atin, det Nombre aiadidlo-a la nacuraleza. Esta vieja definicién baconiana de la fa recogla Van Gogh con un significado espititual rico en emocionante tensin: eNo conozco mejor definicién de la palabra arte que ésta: “El arte es el hombre afadido a la naturaleza’. La naturaleza, la realidad, la verdad, pero con un significado, con una concepeién, com un cardeter que el artista hace sa- y alos que da expresién». ‘Para Van Gogh la expresién consiscla precisamente en este shacer sali. de las coma su mds a jignificads. Beto pata ef este principio eta tal que no ‘ya que tena la frme conviecisn’ de que le fal- iba dé agiie li aturaleia exis ¥ con este de penuria. Yesto es lo que habla que thacer cin realista de Daumier lo aytidaba caticatura a la co dada en los valores huumanos més profundos del siglo x1x: «Quise conscicate- rnente dar la idea de esta gente que, bajo la luz de la Him con las mismas manos, las mistnas que mete en.l plato, con fas que ha traba- jado la tierra, Mi cuadro, pues, exalt el trabajo manual y la comida que ellos, por s{ mistnos, se han ganado tan honradamentes. bre que esté al lado de los valores de 1848. Imagindndose a sf quella época, no dudaba en clegir su puesto como xrevolucionatio y rebelde» ten Las barricadas, y con atrebato exclamaba: «En cuanto a hombres y en cuanto 4 pintores la gencracién de 1848 me es mis grata que la de 1884; y en lo to- cante a 1848, no me refiero a Guizot, sino a los revolucionarios, a Michelet y también a los pintores campesinos de Barbizon». s yaa pintado sus cuaudros oscu- vi largamrente medicadas den- ‘poco antes de partir hacia la capital francesd esctibe a su hermano [Nos hallamos en el dhimo cusrto de un siglo que terminarf con una gran revolu- Gdn. Ciertamente, nosotros no conocetemos los tempos mejores, else puro y toda la sociedad refsscada después de estos grandes huracanes. Pero una cosa im- porta, yes no dejare engafar por ks falsedades de la propia época, 0, al menos, 0 frst el punto de no idensifcar en ella las horas funestas,sofocantes y depresvas aque precevien ala botasca. Ves? Lo mis eonslador es el hecho de no deber corer emapre con los propioe sentimientosy con las propas ideas, y poder eoaborar y teabajar eon un grupo. Los s1GNOs DE LA CRISIS as cova menos wien ot parte de las esferas oficiales siempre se habla manteni tecelo y de repulsa. A la vista de los cuadros de los pintores realists, el ial de Bellas Artes con Napoleén Ill, habla afi intura de demécratas, de gente que no se cambia de ropa interior y que quiere avasallara la gente de mando, Es un arte que no ime disgustay®. Y, en gesieral, éta habia sido la ac- a de moda, Se podrfan reunir cientos de paginas llenas de im- ‘roperios contra los artistas realistas hojeando los periédios de la época. Pero os se encarnizaban con la imagen vio- ahora, después de la Comuna, velan andor de los incendios de 1789 y las picas de los campesinos amotina- dos detris de las dulees figueas de El Angelus. Charles Yriarte, en 1876 y en las aquellos afios, de este modo: «Yo creo que sus fines se explican con razones de fndole politica‘. También refi dose a Munkcsy, a propési del cuadro y las burlas més idas a Courbet. Alejandro Dumas hijo se habia cebado ceraria virulencia después de la Comuna de Paris: «Bajo que ciclo, campesino Courbet encerrado en una jaula de hierro al pie de la Columna Vendéme, previo pago de la entradav’. Francisque Sarcey, comentarista de ‘moda, habla propuesto, en cambio, con noble descén otra forma de castigo: » CELL Aragon, Conet, Cele d'Art, Pat, 1953, p13. 29 castigado con el silencio publicov®, Pero no bastaba, La idea de exponerlo 6 de los bienpensantes parece que gustaba especialmente alos enemigos ‘8 una idea que se encuentra en muchos atticulos con todo . Hasta los poctastros unieron su vor a este triste coro. Por Bergerat conclufa un pocma suyo dedicado a Courber de este puesto en la picota, que reviente de vejez. entre cuatro a Courbet, que tiene un punto culminante en la sentencia del spota del Saldn de 1872 (Lo que ne *, sc habia exiendido a los impress de las posi impresioni tespecto, Robert Rey cuenta un ¢ en 1919, Una m: conscrvador en tono confidencial no ctee que es un poco impresio- de la esttica, fomentada por ef cncastillamiento de la jones absolutamente conservadoras, sido ¢l movimien- ceausas, y no la dil- s de la visién cealista anterior, y, en iintura de ideas, de pensamiento y de nattacién, de la ‘ual, en' mayor o menor medida, habfan’ tas, Los problemas d y lo lgran, alos problemas de conteni- do que habion angustiado a los artistas, tanto realistas como roménticos. Des- dela primera exposicidn de los imprestonistas, que habla tenido lugar en 1874, hasta el afié et‘que Vaii Gogh llegé a Paris, la progresiva evolucidn de los pusionistas en esta direccién —salvo algunas excepciones— se acentiia hasta Ilegar a ls experiencias del divisionismo, No obstante, el grupo dé 13impre- sionistas seguia repres ina fuerza y una unidad vital. Pero en 1886 esta de dessparecer. Fn efecto, en ese aio el grupo fuerday esta unidad habri 30 10s sianos Data cuss ee igo de Manet y de Cézanne, el impresionista se disuelve"®. El mismo Zola, primero y autorizado defensor de los impresionistas, se aleja de ellos al publi- Car en ese afio su novela [’Oeuore, en fa que describe ta dertota arvstica de un pintor en el que se han querido reconocer las earacteristicas propias de Manet y de Cézanne, Y esta obra no era mis que el prélogo de lo que Zola eseribirs afios mds tarde, cuando se lamente de haber luchado epor aquellas manchas, agqhallas relljos y aquella descomposicign de I Taz» ue, segin a, 9 fa la fuerza mocin piiinitive d& ignistas ante la rea" vorecienda ast wisp in-embargo, se trata de disquisiciones indispensables desde el punto de vista histérico y cul tural sobre todo pati compeeider fas'reatcione’ de’ Vain Gogh ei fect Vait Gogh lea’ a Parts cot Tos problemas; las ansias y los deseos de un tfatando de amorderse la natia los unos a los otros con un celo digno de causa». Fl, que hasca es n hota’ te ve vivamente afectade por los ieszt 3 mies de los imiptésionistas. Bs mis, acoge Con enisiasio Ia hueva teorla y s pero dentro de é bra. Penisaba encontrar en Paris un apoyo tientos y aspiraciones; crefa que iba a encontrar «hombres como escribe en el verano de 1887, sélo encuent donde ya se consideran diteraturay las verdades que él abla aprendido a czeer ineros, los campesinos y los tejedores de Bélgica y Holanda. Un decrumbado. La derrota de la Com profundo y definitivo foso con el pasado, y Van Gogh, en la aguda sensi desu alma, lo advierte como tn espasmo, como una contraccién dolorosa siente que los artistas ya no estén integrados en la sociedad, sino eopues- tos» ATE Sétiedad, ¥ qi son . ;Qué podia hacer un hombre solo, agobiado de esperancas frustradas, smpos habla buscado el aturdimiento y una especie de em- briaguez en el trabajo. La inguictud y el ardor gulan su mano sobre el través de la lente de su agitacién interior se deformaba la realidad de las cosa le intentar reproducir exactamente lo que tengo ante mis ojos, me sirvo de los colores arbi Este varbittioe, este yso violentamente psicolégico del cofor, es una de las claves del subjetivismo moderne: «He intentado expresar con el rajo y el verde —con- les pasiones de los hombres», La ley del color natu- ralista de fos impresionistas queda abolids. Para Van Gogh el color tiene ahora el valor de uns violenta metéfora y adquiere una virtud de persuasién auzéno- ‘ma, aunque no distinta de la inspiracién general de la obra: En mi cundro Cif de noche traté de expresar cbmo el café puede ser un lugar donde € no se puede atruinar, volverse loco 0 cometer un dito. Finalmente, interité ex- presar algo semejante a la potencig de las tinieblas de un matadero con contrastes de rose suave, rojo sangre y i trastantes con los verde-amatillos y los duros verde-azules, y todo ello en una at y de pilido anufie. nao, Van Goh, ondator, Min, 1952p. 169. 34 105 SIGNOS DE 14 crisis ‘es lo que ahora hace, una seaguiszada por i " a funcin decorative, ei 10 biisca Ia armonia de Tas relaciones, no es un vehiculo de evasién en un sue de abstractas sugestiones. Todavia en febrero de 1890, y a propésito de un ulo donde sc habla de dl, escribe: «Bl articulo de Aurier me alentar atreviese a dejarine it, a arriesgar una evasi lor algo asi como una miisica de tonos ual del siglo xtx, Van Gogh da via in fick de contenido que es la goitieite expre- una corriente.que tend forcuna diversa,¥, 8 veces, conteas- tate, pero que, sin embargo, casi sempre reconocerd en el hombre el centro cde sas iitereses, El moralismo irbnico de Ensor Sin embargo, Van Gogh no es el crisis ae Unidad pi presentimientes. ptdcéden de una experienc 1850 1880 fue casi al ipos que encontraba en el barrio medieval de la Puterie de Brusclas, Bs cl perfodo en que entra en contacto con el poeta Emile Verhaeren; la época en que Constantin Meunier toma como tema de sus escul- turas a los obseros y estibadores de puerto y a los campesinos, y en que grupos 35 egsnvo_ ace “de intelectuates dan su adhesidn a las ideas socialstas, agrupandose en toro a ‘Le Coq Rouge, cl periddico Fundado por el mismo Verhaeten, quien comisnea 2 ed Fan “ta de muchos adistas europeos. En Francia, por ejemplo, bale bemen una situacién espiritual muy semejante, ya a principios del siglo, pin res como Viaminck y Rouau La situacion francesa : ia muerte de Gaugui cn octubre de 1903, cuando se recibié Ia noticia de la muerte de Ga Bn ct pled en a rvita Orient un areal Gulado «La ifluen ‘Ga de Paul Gauguin». Entre otras cosas, este artfculo decia: lado por Sérusien, sensed, no ia nos Fue reve ‘Accomienzos de 1888 el nombre de Gaui frapo de Le Povldu', el cua de retorno de Pont-Aven tila capa de uma 3 leone ces dl i a a ac pe, ee cob tone poet were el ee m vt, nt! Sen atl? Enconces no engi eparo en ma i = vn aanapeicén, una cerca equi Sane tinea (1-2 cea raat que aide de SSrteaneess eons seh eae maceutomra Suara jntores(..}- Si estaba permitido pintar con cn : 5 qué no poi, Ra Mia 3A 78485, babe te cca ke Pon es lel Bea cia fra ae J, Maufia y algsin otro, sgrupados en fora 2 Caug ene 1686 y Ma stn eng 1988, Fue un grapo de no m sipstes en os nahi. a Pxoresra pa exrrstonisMo Fucron los fawoes quienes recibieron esta ensefianca de Gauguin, con dese i presente mas l_y ambigua inspi Grepuscular, un evocador de desnudos poco més que adolescentes realizados ‘on una pintura tenaz.y macerada y con ui deliberadamente acre, cu- yas reticencias contienen lascivias que recterdan al Verlaine de Paraldlement, publicado precisamente en el afio en que se fo / Rowault; Maiguet, Dufy y Van Don- Pero, én realidad, el fuse més conse- nick; y durante un cierto tiempo Dersin, antes de que se Braque, Marquet, Van Dongen y, més tarde, lentos, pero calmna y natural al mismo tiempo. caso de Rouaule que, mds tarde, siempre declaré que nunca habia sido fave. En Matisse cl sentido de la medida, del orden y de la armonia ya era vivo entonces: “Tengo que poner orden en mis ideas... —escribfa en 1908—. Todas las relaciones de tonos que encuentro deben formar un acorde viviente_de co- lores, una armonta andloga a fa de una composicién musicale’. Para una pin- ‘ura de semejante planteamiento bastaban, pues, as indicaciones de Gauguin. Nosotros queremos —sigue hablando Matisse— aleanzat un oquiibrio inte rior mediante la simplificacién de las ideas y de las formas figurativas»® {No ¢ como si en estas palabras se oyera el eco de aquéllas otzas de Gauguin: «El » Bebe min hbeeo que igi prfe Fas sgt a Stuer pore pot Cass ‘de Mallarind, ig c ° eal ecco Vaurel,l cul + Rouauley Devan, ea De HL. Macines Notes d'un peintres, en La Grande Revue, Pao, 1908. Vase cabin J. Charpie y . Saghers, Lie dle entre, Sehr, Pal, 1997, pp. 584-585, "Bde «9 ~ Sere LA PROTESTA DEL ExrREsIONISMO itor plasma mediante la simplificacién, mediante la sintesis de las imptes hes, que son sometides una ida gene? 2 culnss veces nox hable Gate guin del emégico acordes de los colores? Pee bro: «El arte'es individualistas. Como atinadamente observa Francis Jour- dain ®, el anarquismo no eta una doctrina, sino una actitud del esprit bas Fe : ‘ante imprecisa. La inconsistencia de las tesis anarquistas permieia procamarse Bn efecto, Gauguin creaba sus obras con calma interior, Su sintesisme y su disfpuls de la anarqta a los personajes mds dispar, Por elo: nachos ace, idea dela decoracién eran un medio de e tas, poctas y literatos se declaraban anarquistas 0, por lo menos, demostraban del pensamiento y de la emocién ex por entonces —al final del siglo pasado y comienzos del present permanecfa en Mat ta simpatfa hacia el anarquismo. Porun lado, ciertamente, era una a que propagé el culto de! anarquismo entre Este es el clima en que Viaminck vive. profesién, del mismo modo que no lo es ser Sbtiad0r'0 boxeador, Es un -escribla— rio ¢s una enamorado, corredor, crtad dese legar a ser un «genio de populars, Sanguineo, impulsive y rev. udlé en breve ticmpo en una sombria visién, en una especie de cerrado cada vez mds en misantiopia. Su paleta ns muy pronto los colores fatwves para hacerse mis sombria y oscura En sus euadros empezaron a aparecer los primeros huracanes, las nubes negras tircadas por sulfireos resplandores, los horizontes negros, los érboles esquelé i . ¥ en el paisaje aparecen cas las en una nieve sucia de carbén sobre un fondo de janas chimeneas de fabricas, mientras por ls calles fangosas pasa un mincto, in campesino... Su pesimismo anatcoide se hace pesado, mondtono y deseipe. unos aspectos estos lienzos recuerdan los suburl al que Vlaminck puede, de alguna manera, carécter de sus conttadicciones, y también como hombre, smenco, parece que su pintura recoja los colores del norte, los sombrios coloces del primer Van Gogh". modo, querfan tasladar ls seiseciones al leno con eric’ de explo dad y de brutalidad. ran2, sostenfa Vlaminck. ¥ algunos afios después «Mi pasién me permitfa.todas las audacias, todas las desvergiienzas ‘ontra los convencionalismos del oficio de pintoc. Queria provocar una revol ‘ign en las costurabres, en Ia liberarla de las viejas teontas y del jincura estaba estrechamente ligado 2 a pi ‘Como otros muchos at- sélo un anarquista del nin, Ss remordn ancune, Cora, Pats, 1953, p12. Per codes las primeroscapltlos cuerdo, sobre todo, con una definicién de este reser creer eee eee eaeeeeeectee ito de recuerdos evocan agudamente cl ambiente parsense dela fpoce dee ee pogo de ado por P. Couthion, Ax indipendant, Alin Michel, Pats, 1958, p. 63 msdn nuesraexarina ght toda la actvided de Vln niampoco as conipicadas ce cis de u vida, Slo ditemes que e nieastheaam que haba en lo ew a easels cena sacs del volumen anobiogrico Touran dangers, 1929. 70 = vero, eee ir anarcoide y populachera de Viaminck hiro dec a Piee se podta haber aplicad ts evidener que Semcjante definicién es Nacido en un sétano de Parfs durante las matanzas dela esemana i ae de la Comuna, Rouault parece poner su obra, en los nee ae vidad, desde 1902 a bajo el signo de la acusaci : ee dad hacia los pobres. El Rouault de este perfodo puede definirse sin-vacil mo pintor social. i see oblemas epectcos de los five nol a le los rojos, dé 108" id raya grass pineelada chorreante i ie dno Yo frecuenté la ara la ips ca ancha den preeen «una Bagels gaa escuela de Dauimier antes de conocer Ral Be Psat i ts se eines cas ates es i ae? Tae eee tamagen ct un nud de hes o de dolor La paca idm del ono de sage slo que rus guachesy acuarels arece pensar Row sus els us gu =n Xen prefrentemente a una tonalidad nie, un etl de made ae aclara, ofa se hace deaso, sombrlo, profundo, Ente la maria Se os signs ddestaca y emerge dramdticam aparecen los payasas, ud aplguaoben ser pn Rouaule que no se puede ovidas cs eLeamponente que pare dl decade cide aig, un jovimiento Tante de los fies co pangs en oe ces deta sateen Ln uncon Zee UA FROTESTA DEL ExPRESIONISMO sugestiones_y.de.no poces elementos que, No nos refers t bro semejan de una pistola y los pies de la pot esto el cardeter de su decaclen f no le queda mis qh Huysmans habfa elegido la cruz, Bloy es un catdlco que se arrstra por el pecado, que vive con prostitutas y gente miserable, devorado de un ardor mistico in: mundo esté dominada por la concepcidn a dela humanidad massa damnationis. A pesar de set catdlico, queda incluido en [a definicién verlainiana de los maudite. Peto su pesimismo vertido, eizado de anatemas ¢ hijo dela crisis de Ios intelectuales después de la Coruna de Paris, no ha olvidado el babeufismo de su juventud. Sigue estando de parte de los pobres contra los ricos. Para dl, los adi 508 no son mds que los precursores» de la justicia final de cada esté la revuelta de los desheredados cont <5, pues, la postura de Ledn Bloy eespecto a lo que pos lia cl conformisino de las ecatdlicos-fieris» locentinos, los llamados ealvajes», ‘iene una base bien fundada la obser en algunos libros de Bloy un «coment Rouault anteriores @ la guerra del 14, fas obras de Rouaule inspiradas en sus paginas, no qu ies ningiin « las vela aiin més truculentas y desesperadas. Cuan- en el Salén de Otofio de 1905, el mismo Salén que rc a los fiewws, expuso Los Poulet, la pareja pequefio- burguesa descrita en la segunda parte de la Femme pauore, Leén Bloy escibids «Patece que este artista no sabe concebir mds que atroces y vengativss carica, (uras. La infaria burguesa ejerce en dl que su arte queda herido de muerte, Se t dos burgueses, hombre y muj Sin embargo, es dificil conseguit uni imagen mds ficl al texto de Bloy: hay el mismo gusto por el tono sorbrloy I misma manera de destaca a figut pi niendo de relieve algunos elementos esenciales hasta hacerlos prepondcranes, univeiaces, Pals, 1956, p56 " Rouaule decta del tipo burguée: «No le reprocho su ervldad ni su gots ‘mo, inconsciente a veces bajo una fingida bondad, sino més bien el cuidado segura nuestra felicidad al pensar en la suya propia. Cémico y grotesco, sino preter ademds, bajo una especie de bonhomia easi sacerdot clamor, el cone de. Rowan en cién apologética, Y, sin embargo, en sus imégenes hay una fuerza premonito- ta, una conmovedora piedad.que las eleva a la altura de figuras simbélicas, a doloridos simbolos de Ia humanidad. Sus campesinos, sus obseros, sus mater- nnidades proletarias y las familias de pobres cn los suburbios de Paris son e: 30s afios sus temas favoritos. Es una tealidad que siente comin a su suerte de hombre y de artista, Pn esa época habla en Pals bastantes artistas que pintaban y dibujaban vemas de este tipo. Las ideas socialistas se habfan difundido: el movimiento obrero iba ampliando sus organizaciones. Pero la gran tradicién realisa del arte habla acabado, se habia desmenuzado y disuclto en géneros menores, y se habia refu- Hl anecdotismo de Denis Valverane, Jules Adler, Alfred de mer orden. “EL mundo. lo de los pobres es, pues, un tema cen Rowailt"A° et “io sBIo uit grat hiimero de Sbras igur sino también una serie de ae sencillas, descarnadas y elementales en su es- idas para ayudar a su comprensién, 74 Ductme, amor mf, decia Y.svefia que la alegte pri Sucede al rudo invierio Odiado por la pobre gente Suefia que “Tado es bel ‘este triste barrio todo ¢s luminess De una a ota punta del aio Y¥ que las ratasy los rarones Son s6lo antiguas hades Que mafiana recobrarén Su brillane librea. Pero i sigue softando que la m Duerme, mi am Tino tendris is frdgiles brazos por apoyo. nasa la mala suerte, Yo estoy aqui'y velo De la noche a la masana, Duerme, amor mio", Un breve poema como Hiver también recrea el clima y el paisa de algunos de camino sube al horizonte Flanqueado de drboles enclengues El hombre solitario Rogresa a su cugurio Himedo y triste Y se ducrie con un suefio pesado Sin amor sin surfos. El camino sube al horizonte langueado de érboles enclengues ", En Sure de Pari G. Rosa, Salone, julio de 1914 Ides et Calenes, Neuchie, 1946, p. 193, 75 1ato con los de los jueces y los clowns, vueiven a aparecer en Ia ‘de la Guerre y del Miserere, realizadas entre 1914 y 1927. En ‘én que Rouault tiene de la vida se revela con toda st evicen- ertas piginas de su amigo y maestro cro que se ha dado en llamar vi jones, podredumbre... Rouaule ticnde a considerae secuencia del pecado, como el ro no por esto sus imagenes alza en menos fuerte. No genes no esconden aque las carga de autén- cobstante la eransposicign mi tn absoluto su anacimiento hist6ricon. Es més, esto ties fuerza, No ocuttird lo mismo con las obras que Rouault, segdin un modelo fjo, ealzacé en gencral después de 1930. Ea la rmula de un medievalismo decorativo su fuerza expresiva de un tiempo se ird destemplando cada ver. ms tn densas pastas cromdticas de metédica repeticién. Pero no es de este Rowault Gel que nos interesa hablar. En el discurso sobre el expresioni tune viva importancia indicativa el estudio del primer Row: ‘ampliay profunda fue la polémica antipostivsta a comienzos indose de su impulso ni siquera grupos de intelectuales y de En Alemania argo, el fendmeno del exprsionistno e manifests, sobre codo, en Ale- SIL a€en: snvania'™. Aqity ef e€gitien triperal, feudal y alt ‘uuaba dis lad inddernas contradicclonds sBcialés ¥ pl lead’ por.miles de wiaeioe YUE in el eurso de algunas décadas no sélo se habia co” ibfal ¥ polfticamente la burguesfa alemana, sino que también alge ‘estratos populares hablan sufrido la H lerminos de supremacfa'y Kieroicos, el pequefo burgués adoral ‘Alemania, cegada por un suefio de gloria y inpe militarista de los «Junkers , marchaba a grandes pasos ° Dhoy, La fede impaniene, Bor i sg _LATROTESTA aL BerRESIONISMO. snbargo, des- a nuestro juicio, algunos elementos carac- indo slo presente que por lo qué respekt a « Jos ands-abiertos y plendor det diversa; tedccioftaban'al Falso €3- \ ruled de flietsmo burgué-gilermino, de as poten te namo, dea libertad yd imine inesps ce ui as tun segundo elemento es el que insiste en Ia exigencia de sustraer- refiigidndose en el eteino una fuerza externa puede penetrar y levar ura puede considerarse a Georg "Trakd como ef éxporiente *” sid alto de esta segunda tendencia Nin Cri Ema Qt la seriedad con una grindioss saake al ‘univer que debera tener lugar lo mie tard hacia 1900 at elo in) ls jee indetnls enn res epee Ean lara Wedekind exrbi toda sar obras tears mis importants 90 y 1917. El phe cd yo protagonist eel famoo pesonsje de Llc de ke : pm sao propia cf sh 1893. a x de Pda, ae 1A PROTESA DEL INPRESIONTSMO tiva en sentido erfti- el naturalismo de Ia década de 1880 tuvo en el nacimiento del expre- cos, querernos poner lain. En su novela Bl sdbdito es- 1h 0 del acai gue dol Fifer Gue- manidbilas ef gesto de 1 del hombre, el narucalismo ld de hormige contra Dios. ¥ eso fue lo que le perdis acién la sintesis, y, dentro de ‘ones no pueden ofrecer més que tifa | in llegado impresi es, La realind, pr , el problema es més arduo. Los tres elementos que hemos enun: tales elementos podemnos reconocer cal desctbir fos sintomnas generales de idos deen cada uno de los artistas en estado pur catacteres particulares que ya hemos lacrisis de la unidad det siglo xix y Jos mitos'de-la evasion deti | § Sin éribargo, is se lleva hasta fas, smpre, con mayor menor intervencién de uno 0 de otto, los mismos elementos se hallan mezclados en el seno de un mismo grupo o incluso en un solo artista, ‘Ya hemos recordado un texto fundamental de Hermann Bahr; no seré imi- til recordar también un escrito, bastante menos conocido, de Kasimir Edsch- rid, que su autor leyé como conferencia en diciembre de 1917, Se trata de al expresionismo en poesia, pero su vinculo con los proble- icos es tan estrecho que, incluso en este campo, es sumamente ilus- bre todo, este esctto, elaborado en plena guerra, ilustra de forma in- jorable desde dentro de la experiencia expresionista los caracteres y los clementos que hemos tomado en cor én. Ademis, las razones de la po- émice antinaturalista y antiimpresic por Behr, son replantea- descomparirony means wa de Eon Bis co- +8 Si inbargo, a menudo no se consigtieron més que efectos d Spt in esencit dela cons iimo sign po a ago de la En gestos falgurances —instan- lampagucaba y desaparecia; era como afr la invocacida, aire y destinada a no encarnarse nunca. Nacicron efi- estos profundos; probablemente se logré un resultado nstante, y, sin embargo, toda la época qued6 cor ypregnado de conceptas burgeses y sometido 2 |. Sensacién elemental y hecho descarmado, a eso que- ada de los de la nueva cortiente para los 4 erelada por u la en el arco del parti las relaciones capi os dan peaks dea psig urge yc vastsima sensbiida, no slo ven, sino que cont \; no fotografiaban; ter i tomistico de los impresionistas, eee aes to del mundo de gran apen ‘lo inmediaz, y que abraraba 2 Eysw0. captando su esencia grande y la més misera: es hombr épocar de este modo se sale dela concepcién burguesa ruviese nada que vee con al espacio feagmeniado el rostro del hombre; y2 no hay ep fen cambio, que posecsé ua sencille propia rv un pj anes, Fs nce ser pss de forma que'R08 Tlie iaci'y nos demos cuenta fn cuant se nos aparece come realidad. ext Telia alla el seni dl 2 malo ¢ anotado, Fs nero gue la imagen “esi slo puede verficarse a ravés de no sien y sufien sogin las ce Bl aeita expresionista uansfigua, ash todo el expaco. no mi vives no reproduce: recrex; no encuentta: busca. La voncatenacifa de bbrieas, casas, enfermedades, prosti cos y hambre— es su trmafiguraién. Los hechos aqateVé importa s66 en el momento en qu la mniano del artista, que se tiende a través saat cada uno de los fendmenos tne conjunco del mundo. Nos da la in id Campea ru arcees el gran Piafeo que Dios cieB en los oF is variado e infinito que el Que nucsizaYaiiada, en su ciego empirismo, ique no interesaria desribi, pero que de un modo medi ico y lo marsvillso spiritual ofece nue- do en el pecho, Ya no es un person: mes, pero con sensi iad cba; now reacupa por vv a no tlio sob mtmo, ene ques ve ast miro: nod lo exeino. El enferme ya.no es s6lo el individvo que suf, 0 qi se conyierte en Ia enfermedad misma; en sc snsperenta ol do- 7 de toda To creado y sobre él desciende Ia pieded del creador. Una cosa ya no es Al ro com los atributos dc la belieza o de bueno, trivial y magnifica, 5. "Todas las cosas le son pré ificado y su auténtica esenc hasta gar a su aspecto de una vecdad erréneai expresién que revelaré su sig hasta que se eleva o pr cduerme en estado de pos! riento que s6lo se puede alcanzar 2 Y, sin embargo, estos hombres no son. unos pensamiento discurre de una manera especi Jin ete fragmento se aclaran aiin mis algunos de los caracteres dominantes de Ia tendencia expresionista. Entre otras cosas, en las afirmaciones de Edschmid no tiene ningin sentido bacer una répica de dl: La funei6n lagar sus movies inds profes yt Gad hombse ye no es un individvo vinculado % Bde, pp. 5:11 del instinto. Nos hallam: 30 neotroméntico, No es lad que uno de los autores més cstimados por Edschmnid sea Novalis, al que Heine definta como sun espantoso grito de angustia en veinte vol Edschmid también se asoma a una solucién espi y de visién putificada de los accidentes més det En sus péginas estos dos aspectos se confunden. tuno ni otro de tales aspectos excluye atin la presencia de una - aunque en ellos haya un potente impulso a saltar por enci- ara apoderarse mevaffsicamente de una esencia absoluta, La ur- stancia a hacer diana en el centro de la realidad, a no quedarse en la periferia, venta de una justa reaccidn contra el arte oficial, epidérinico por constituciést; venta del contraste con un impresionismo cada vez més exte- riot. Se trataba de hacer presién sobre la realidad para que de ella manase si laremte secreto, En este hacer presién esté el otigen tipico de la deformacién i n Gogh y 2 Munch. Por fa frente era una realidad no imaginads sino hist6rica, el nticleo que brotaba de ella no podfa dejar de ser sat de que la operacién creativa estuviese empapada de su sxistenciales. Sin duda éste es el lado més rico, més val posibilidades de desarrollo del exptesioni alemn. Bs evidente que su fruto esté de verdad no miscificada que e artista Baya & Giertamente, en este aéto cteat cn Ia cosa misma, se siente ci6n de lo re: Los artistas expsasioniscas rec lugat fe de Niewesche. Sul ideol6gicas, en primer te Boro confusonihiliste neorvoredacico, del contra los «valde» de la 'sociedéd bur- gucta, sugestiona a los mejoi cores, poctas y artistas de [a época, desde ‘Thomas Mana hasta Grosz. Strindberg y Munch tampoco se libraron de su fascinacién. En 1888 y 1889 Strindberg mancuvo correspondencia con él,y en 82 1A PROTESTA DEL. BXPRESIONISMO, 1906 Munch hizo su retrato partiendo de una fotografia. ‘Tiaemos aqul a co- lacién a Strindberg y a Munch porque ambos ejercieron una fuerte influencia en el expresionismo alensin, Entonces de los historiadores pruso-alemanes, al 8 corriente. Ty precisamente en esos afios, empiezan Sd im antes ae Fred ciyos analsiscjefceron una indudable TasCinacign en de- verinadoy aipblentes culeuisles¥ Por tanto hids © menos dl Ios attistas®, Pero la mayor influencia sobre los expresionistas alemanes la ejercieron los artista’ Franceses, Van Gogh y Munch. De todos modos, es obvio que tal in- flucacia ie Habria palidosee faa profanda sino hubiese acaiate un terre ado y oticntado en sentido expresionista. Munch fue, probable- mezo que en Alemania present una imagen sobrecogedora de la exposicién de 1892 en Berlin, en la que expuso cincuenta cuadros, impresioné profundamente a més de un artista. Cuando se exigié que se des. colgasen sus cuadros, todos los jSvenes se pusieron de su parte y asi se llegé a la fandacién de la Secesién beslinesa. Munch hallé en Alemania su segunda pa- «tia, En 1905 salié su primera monografia en Miinich, Bor lo denids, ya habia estado en Berlin antcriormente junto con Strindberg, y en 1890 pinté alll uno de sus cuadros més alucinantes: Celo. Pero ademds de las'exposiciones de Munch, debemes refericnos también a, fas de Van Gogh, Gauguin y Cézanne en Miinich, en 1904; las de Van Gogh en Dresde, en 1905, y en Berlin, en las de Matisse en 1907 y 1909, | respectivamente, en Berlin y Miinich, donde, en el mismo afo, otra de Cézanne. A ello hay que afadie los frecuentes contactos dos, entre 1899 y 1906, donde descubsié a Gauguin; y Nok Frecuenté la Academia Julian de Parts, de la que habjan Bonnard. 2 CLA. Abusch, Suri dle Grnania modere, Ena Ee nos refrimos alas obras, ne swine 83 ENSAYO El grupo Die Brice anes oat | fue el que en 1905 srupo 65, contemporineo irupe &, “al Saléin en el title fowl vebjeron ol bait de cilia. Sin embargo, junto con Matisse, V! de 1905, cambien fue miembro de Die Bricke al aito siguiente y sirvid de in- do se encesraba en esta simbélica denominacién nos lo dice la carta con la que el grupo invitaba a Emil Nolde a formar parte de él: «Uno de sos. de Die Bricke es el de atraera sa todos los elementos revolucio- narios y en fer era, pues, cl sentido de la denominacién, pero no eran tan claras las bases ideologicas que ido al grupo. Posiblemente, el comin terteno de entendi- jas reglas y de reali- ‘gual que los fauves cde uno a avés de su propio témiperainento: Kirchner, que piictiéaimente i el jefe del po, esctibia: ia Hpende « wat sus propi una obra sola se forman d aiid expresionismo: eo poder suftir una ley ai una disc alas presiones emotivas del propio ser. En reali cién se mani 2 CE Pate segunda, Crna de lenin arta «Die Brick. De exe cxbnica resulta que Nolde for si pate del grupo desde 1905; la cata Que Je invita a adhere en cambio, leva la feck de 4de febrero de 1996. ™ Tider yn que pudiera obstaculizar la puntos de par | 1A PROTESTA DEL EXERESTONISMO tas que les da una fisonomla p: ni hedonista ni brillante; al cont son FeabIdas sin excesivas preocupaciones formales, de modo, rad6'F deioidenado. Todo ello es sefal de una orien Nolde. Pechstein sigue anclado en un exotismo est tante externo; Schmidt-Roteluff, si bien con una virginidad bérbara de sincera cenergia, no consigue superar un rosco esquematismo en el plantcamiento del lo por la gr de su dios, aun tenicado una sensibilidad mas aguda ¢ inguieta que Pechstein, El mundo poético de estos tres ‘iltimos artistas se concentra en la aspitacién a la primitiva belleza de lo creado. En Miller, en cambio, y profunda; sus gitanas y sus muchachas son un eq) ssus densos azules y violetas, de los mendigos y Picasso. Pero Kirchner, con un lenguaje seco y vibrante, es, cierts- agen verdaderamente nueva y ¥ tigidos, sacudidos, no obstante, por En un escrito firmado con pseudénimo, Kirchner afiemaba: Si se toma un dibujo de Kirchner como se lee w izaciéns e# nuevo en cada cosa, y cada cosa es cada vex nueva y un poco diversi, dado al caso de que se repita en varias imigenes. La proporcién de sus pastes y su. aque estin en funcién de fa vida de todo dl cuadeo, de un movimiento y jealacién de toda a superficie, no de una composiciénagregadoraen un espacio See Nano, ae igurativa de de transcripcion de aquella ola psiquica que es la Este pétrafo ilustra bastante bien Ja concepcién de la exci Kirchner como un medi que se traduce en formas tensas y iciones de la figura. En plena guerra, i6n nerviosa, encuentre asilo en las moritafias sui. 73s, os pastores, Jos campesinos y el silencio de los Alpes endu su visi6n, y més tarde atin, antes de matarse en 1938, buscard solucionee dis, ‘intas al margen de su primera poética, en una direccién de gusto més educide ¥ francés, Pero ol Kirchner mas significativo seguird siendo el de las calles ha ls Hicuela de danza de 1914, del Autorretrato de 191 8 flor de piel y estremecimientos, eéctrico y contra(do, niento y lo fantasmagérico del hombre en el horm: sobre las que se cernfa el Apocalipss de la guerra, plado el guco de las metidpo En 1911 el grupo Die Bricke se Nolde'se"habta salidé de'@l, ¥"a partir de en Para dl, Gauguin, Van Gogh y Munch iam su orientacién. A Munch, ademés, lo hal Je estaba preparinds ‘os dt Ue Las apetires de afio en que el grupo se traslada a Berlin, él, que sé ei IGA Balgica, tended easién de ver otros mumerosos cusdros de Var. Gogh y, sobre todo, de cono- cer a Ensor, que ejercerd en él una influencia decisiva, ” — Pero en esta época contiene én ciernes Pero yaa finales de 1907 ces send siempre Ui Foliatio, ‘Rigioiy RRR Rimetanientales de io tun primer paso seguro del alcjamiento de Nolde de aquella especie de vigoroso impresionismo alemdn cuyos méximos exponentes fueron Liebermann, Cosinth y Slevogt. Nolde era un alemdn del norte, y también dl se sintié atrado por ef mito del salvaje y del primitivo, como sus amigos que iba a estudiar los fetiches negros del Miiseé que hasta copiaba estos fetiches én sus i muchos expresionisias,siguiendo los pasos de G: ses cxbtioos. Pero su modo de concebir lo pris razones mucho mds decisvas que la de vida desvinculada de aquella primeta'éuscancia tamorfosis de la materia, que en surfer- n ln auobiogafla, Nelle, Je der Komp 1 Wolf Veda, Flensburg. 1956, 8 Bra, 1934, Al mismo eat penne tas quesiguen. 86 vos o el arte popular son, pues para él, sugesti- ms que en ninguna otra parte, lo primordial se co- muniea directamente. Pero también siente asl la naturalcza: «El gran mar fra- goroso esté atin en su estado primordial, y el viento, el sol y hasta el cielo «strelado todavia son casi como hace cinco verso de Van Gogh, recorrido por densas corrientes de energla, por un univer- ‘0 que s6lo desde hace poco parece haber salido del caos primigenio: tierra y ciclo y mar se unen en un vasto, turbio y humeante abrazo en el que es tallan sordos fogonazos rojizos, se encienden amarillasllamaradas inesperadas y la naturaleza parece dilztatse por una oscura e miento teégico de la nacuraleza ‘es renlan «una vida propia», eran eplafideros o reidores, cdlidos ¥ satas> como canciones de anor yde creta ain mas: eAl pintar hut pintor, se desaro lacon la misma consecuencia con que l Jeza misma crea sus figuras, como se forman. las minerales y las etstalizaciones, como crecen el musgo y las algas, como ba} y brotar la flo. ensas manchas de color se chas condensaa clas gritos de miedo y de delor de fos animales junto con de 1916, la evolucién noldiano puede decirse que queda completa. Después sélo se tratard sus precedentes intuiciones. El esquema de sus paisaes es simples «es el esqueta holandés: horizonte bajo y cielo alto. Es el mismo esquema de Ensory el mistno que, més tarde, ambidn serd ol de Petmeke, Pero, mientras Ensor y en Permele el la visién de Nolde prevalece un tudo misticismo nérdico. Ya no hay nada en esta pintura de la minuciosa I6gi del pasado. La inspiracién ya hha alcanzado la regién de los instintos, antes ain de ramificarse en los varios estados psicolégicos. En esta regién no existen las pequefias categorfas de lo real es una scgién indiferenciada donde s6lo se encuentra la oscura cadencia de Ia sangre. Aqut viven odio y tetror, sexo y muerte. Aqui, en lo mé do, se agitan las potencias que unen el hombre a la naturaleza. Y 52 ‘mente, adonde Nolde quiere descender para pinta i Pero, junto con los paisajes, que constituyen la parte inés alta de su obra y ue pinta con igual intensidad hasta su muerte, hay que incluir sus cuadros fi- garativos. Estos empiezan a aparecer con toda su plenitud hacia 190% ql de una grave enfermedad, Se trataba de sus primeros cuadros de tema 87 ENSAYO. jen son anteri grotesco de Ensor. ure ‘Academia Julian, habia salido en Patis tod mero de desea 4 Ens, yer probable que él lo viera, y que las, los que ie sa sigui trfptico de Santa Maria Faipciaca y las escenas de la Vida de Nolde bastante mas que sus pa ne nada del moralismo sarcistico de Ensor; por el bien hunde sus rafces en et misticismo teuténico medieval. Fl sito de estas obras zarme en le et Lucgo descend atin mds en las profundidades mist cas del ser medio hummano y medio divino. Pentecostés ya estaba esbozado. Los couados de La cena y de Pentecastés marcan el paso de un de valot interior», Nolde insista en el hecho de ser «aleméto, alemn incluso cuando pintaba los paises de ls islas y de los mares del Sus. Y no hay duda de que en estas representaciones sacras se advierte una especie de ancestral ascendencia, Al mirar estas rudimentarias imdgenes eject tadas con pastas cromiticas acres, febril tes, con verdes matchitos, ro- jos vinosos o ardientes, lividos violetas y am: iamo alemén debida a Heine: «Une repugnante mezcla de locura gética y de falsedad moderna». Pero, al mismo tiempo, de cesta exacerbada iconografia expr ipérboles se des- prende una carbacién y una desez pritan los personajes expresionistas de Nolde. Obligado a manejar un conteni- do fluido y avasallador sin medida racional, tiende cada ver més hacia un arte natracién ni desarrollo. En lo primordial de Nolde tambi raramente, para la alegela, pero se trata de una alegria bastan- de Pechstein, Se trata de una alegrta que tar turbadora como un espectéculo de an- exterior a un sentimi 8 CEU, Apollonia, «Die Brn a cau delltspreionim, Alri, Venda, 1952. 54 1A PROTESTA DEL EXPRESIONISO Der Blaue Reiter Bl grupo Die Briche se. disalvid.en 1913. Resist, en cambio, el grupo de Der Blaue Reiter (El Jincte Azul), fundado.en 1911 por Kandinsky y Franz Marc Ee grupo ina nacido del via vide elec ya istica de Mai ‘omienzos de de toda Pairops los j6ve- ise are. En eva poea enoinranigs én Mich a ieaina von Werefkih, los hermanos David y Vlad 09 y la segunda al siguienteafo. A esta Derain, Van Dongen, Vlaminck, Picasso y Bra- vigjost faves presentacién del segurido Eatdlogo, en el-que af cdis algunas ideas ipicamenté kandinskiafas En una hora indeterminada, de una fuem biemente viene al mundo la obra de are. el conscientee inconsciemte impulso creativo? jAy de aquel que tiene el poder de poner en la necesaias y no lo hace! ;Ay de aquel que apart de la boca BL hombre habla al hombre de lo sobrehurmano; ellen guile del arte® Este texto de entonacién esotérica da una idea de la diversidad de plantea- mlento del ev grupo munigut. Bs erent un beso gue Kaninky y le Die Bricke. El instimo, el 1A PROTESTA Dél. EXPRESIONISMO, 'No vivimos hoy en una época en Ia que el arte est al servicio de la vida. El verds- deco arte que hoy nace parece, més bien, el sedimento de todas las fuerzas que la vida no ha sido capaz de absorber: «sla ecuacién que esptitus de mentalided abs- tracta extraen de la vida, sin deseo, sin lucha. En otras épocas el arte eral fendme- no que hacia fermentar la masa del mundo: esas épocas hoy quedan lejanas. Hasta que tegresen, el I. Este es nuestro schazo lbeemesié didi conta los ofecimienrot que e mundo nos hace. No- contra le (On ya estd condensado todo el nto estético de Kandinsky. La i ién a la segunda expasicién describe las formas figurativas de vangua: liferenci fa ‘ade la protesta y de la evasién de la que ya se ha hablado. Peto, en este caso, Ja evasién no es hacia el mundo salvaje ni tan siquicra al corazén o a las entra- fas Itentes de la natucaleza, sino a lo sespirituale de la nataraleza al Yo inte- rion a Ja verdad del alma. Bstamos todavia en una ca » pero cesta verse trata de tuna mistica ascética que de un turbio misticismo de natuae guticién nacucalista. Cuando Kandinsky escrbla ea presentacién, sa libro De lo espiritual em el era fisiolégica. Desencarnarse, destruir la antigua idolatria ‘del artista por Jos arte” ya estaba listo 0 casi, si bien por una serie de citcunstancias sélo saldré fendmenos de to-Feil, purificar fo impi a que debe hacer el dos afios més rarde. Asf pues, sus convicciones estéticas ya estaban form La virde tr abiitaccion Sts Bi Las razones de su dimision de la Newe Kiinstlervereinigung tienen su otigen ‘tal como Ta enunciaron a x presionisevo" ie tila Is detorinacisn’” Kandinstey-echazan Ta brutalidad de este cllo-no se-taia de agiavar una de fierar Tata verdad de aqui, en su contraste estético. Junto con Kan Gabriela Manter, Ast nacid Der Blaue Reiter en 1912. Kandinsky dlicron vida y lo alimentaron con su entusiasmo. El nombre enctientco nacural del amor de Kandinsky por la, tes, que # menudo habia pintado, la belleza de los caballos; ey salcron Marg, ime patecta ms repugnantey de bruto, hasta el punto de que instintivo y por neceidad imerion se fueron hacienda cada ver mis esquemsticas, cade ver mis abstracts. Arboles, flores, era, todo, a medida que pasaban ls fos, ‘me mostraban cada vex més aspoctos feos y repugnaates al sentimiento, hasta que tengo plena conscencia de la feadad de lan ‘Lie males ter des “lois tenemos la experincia ibujos y acuarelas. En esta segunda exposicién ipé también con diecisiete hojas Paul Klee. En octubre de 1913 los arts- montado en B de cardcter internacional donde se expo- nian unas 360 obras. A esta exposicién Der Blaue Reiter se presentaba con tna premisa que revela claramente, junto con la conciencia del divorcio entre arte y sociedad, la voluntad de mantenerse extraios al «rmundoy: ” itp. 108 ° GLY. Kandinsky, Delo epntnal evel ne, Nucva Vein, Buenos Ate, 2 eck, 1967 beahaiaeaL shaala ot 90 oy, a dif de Ja de Mare, reviste an ». Kandinsky habia estudiado derecho, y su esfuerzo te6tié6 se cumple en su plena madurez incelectial i ¢ |a espiritualidad del acte, ya tes de las ideas que ordena y clabora en su texto ya han brotado ‘en Europa y ya dieron o estén a pu endencias en Francia, en Italia, ent He curismo; ya comenz6 evolucién de Mondrian, y, en ya ha enunciado ideas particulates sobre la autonomia | de los miediog artisticos, mientras en Rusia Mal ridnov sedisponen a . proponer @Bupremacismo y el, ayonismo: BL hecho de’que cwatido de Kari- dinsky conociera tres ediciones entre diciembre de 1911 y octubre de 1912 demuestra que otros muchos artistas meditaban sobre problemas anlogos © los. EL antipositivismo evs a hhicia poctas como Miierer- ee indy haci i "Peto éa Alemania no faltaban 10 neorromédntico de Kandinsky se expresa claramente ‘mera parte de su tratado. Al abrir el libro se lee: en la pri- [Nuestra alma, que después de un largo pesfodo de mateialismo apenas se ha. des pertado leva ens los gérmencs dela desesperacién producida por Ia falta de fe, de °F, Mare Bris Anfichnngn wnd Aphorionen, Belo, 1920. H.K. Riel, Pra raderns te dec De Agpatnt Nowra, 1997, pp. 75.76, W. Fes, op. ct pp. 110-11. 3G W. Grohmann pi, 9p. 85.86. 92 # ta morssra pet exrnestonisvo, fin y de meta, Toda la pesdilla de las concepeiones mateialistas, que han hecho un de la vida del universo, todavia no rado. El Esta débil luz s eo cn la duda de cidad para los hombres y la visién pura para el pensa insky es confuso donde los haya. En su la sociedad debe coneebirse COTO Un etEngulo 0, contey une pirdenide, ha progresiva y ascendenter i Jos que tienen un lan la espada de la justicia para dar el golpe mortal ala hidra capitalstay cottarle la cabera al mab En opinién de Kandinsky, toda esta gente no es capaz en absoluto de entender un problema. Un poco més arziba se hallan los «socialistas de diversos matices» Iecrores de la Hinma de Schwe Ley de hierro de Lassalle y de Fl capital de Marx, y asi sucesivamente en una ascensién purificadora, en cuyos escelones ‘mis altos se hallan unos pocos hombres de ciencia que «no ponen ninguna es- peranza en los métodos dela ciencia materialsta», algun teGsofo y algiin artista No valdsfa la pena hablar de esta concepcién kandinskiana si no revelaseen toda su plenitud la crisis en que habfan caldo los intelectuales europeos después de 1848 y 1870. En el caso de Kandinsky también conviene recotdar la impresio- zante involucién de los intelectuales de 1905. fi ntimamente ligado a su pals; entre 1903 y 1905 estuvo repetidas veces en Rusia y no hay duda de que el relly revolucionatio, con el consiguiente deslizamiento de los inteleccuales ha- cia posiciones misticas, también ejerci6 sobre él una particular influenc Un eco de este hecho, ademas de la angustia de la guerra, cn algunas Iineas de su diario: «Cuanto mds-espanroso se vuelve este mundo {como lo cs precisamente el mundo de Roy), tanto wi e ate se vuelve abseae= toy waite qu un hd fli ee a as, Se vuelve ax porboca 8 EW. Grohmann pts p28 98 Los medios espectfcos dela expisign iS téricamente en la segunda part la base del arte es s6lo «el principio de la necesidad int dccidm al eatalogo de la exposicign de la Newe Kins- tistaes a ala adecuacién de las teclasr, es decir, de los colores, snecesidad interior» Para hacer esco es indispensable aclarar la compleja naturaleza.del color. Y ‘ta 65 la empresa a que se dispone Kandinsky, ci categorfas fundamentales: el calor y el frfo de la entonacién en sus-varios gra- dos de clacidad y de oscuridad. De aqu{ nace toda una complicada simbologfa psicolégica de los colores que. segiin correspondan a los vat fa 0 frlas, determinan pa yplo, venimos a saber que vel res lo giseen el mundo humnano es Este verde —sostiene Kandinsky— wes como una vaca gorda y muy s vil y que, io slo para rumiar, contempla ef mundo eon mira- y obtuser. Y continéa: «EI verde es el principal color del verano, cuando la naturaleza ha superado el perfodo del Sturm und Drang, el perfodo romdntico del afio, la primavera, y'se sumerge en una quietud satisfecha», En tuna nota sobre este verde, Kandinsky hace el siguiente comentario: «Ansloga cs tambign la accién del ideal y tan alabado eq: Cris. to: "No eres ni frlo ni caliente"s. Fate lenguaje biblico o evengélico aparece a menudo én sus péginas. Una ver, incluso llega a exclamar: «Todos los medios necesarios. Todos los medios son pecaminosos cetioc». ¥ éte €5 otto signo de su proximidad ales teverdecidas, como ya hemos recordad: de 1905, No es casualidad que citase de que después del fraceso revolucion: buen grado a Blavataki y 2 Merejkovski, positi- vax, Solo més tarde su postura antipositivista se atenuard hasta ponerse de 4 1A PROTESEA DEL EXPRESIONISHO. acuerdo con los presupuestos del racionslismo cientific dbo, Pro dems, Mendsian fambien p Kandinsky también introduce en su teor color hay, pucs iproca interaccién. Por ello, también es vélido para la forma lo qiie & ‘Pai ET COTGr: la adecuacién al «principio de la necesidad interior», princi- pio que Kandinsky, por lo demds, nunca intenté definir con claridad. Para Kandinsky sige El isiid lo oifiesa— ‘practicars la pura abstraceién, Como quiera lemento abstracto de la forma «poco a poco se va desplazando ha- ros planes. Y este crecimiento y el definitive predominio de lo abstracto son naturales En los ensayos inmediatamente posteriores al tatado sobre la espiritualidad del arte trata de profundizar y ampliar atin més una serie de conceptos. En Pintura como arte puro®, de 1913, hace wna afirmacién de: y profiidas efesonancia espirituales. Exte punto de Icgada de Kandinsky, que él convierte en imagen abstr fe 1910, no era, sin embargo, exclusiva. En efecto, Kandinsky sos fentonces que Ia realidad objetiva tambin se podia mirar «abstractamente», 0 sca, prescindiendo de la funcién que las cosas se ven obligadas a dese et ls mortficante rutina cotidiana. Ello podia dar lugar a lista de alguna manera andlogo al . en Der Star Belin, 95 ENSAYO - de sus més alucinantes naitaciones. No parece kafkiana, por ejemplo, esta it tuicién de Kandinsky? Un simple movimiento de hombres euyo fin prictico no se conoce hace, en siy por En este objetivismo abstracto oe trata, pues, una vez més, de suprimir la histo- igo se esiialen. ‘PéO 'to fue en est nde el grupo Der Blawe Reiter orients s ‘aunque cn el puro significads det termine sbler Kandinsky | de su razonamiento se enci rra'en la afirmacién de que a san més las «fiierzas creativase de la naturaleza que los fenémenos por ella generados. Es més: laspi recisammente, integrarse en tales fuerzas, de, modo,que, a aturaleza pueda generar fendi ida- sechazat los fenémenos ids extraios de la nat tampoco podremos rechazar los efendmenos» producidos por el ar efecto, serfa como si rechazramos la natu a. Llegado a un punco de su confercncia, Klee se pregunta: »gQué artista no queria hi alli donde el drgano central del tiempo y del espacio —no importa rma cerebro 0 corazén— determina todas las funciones? En el seno de la na- turaleza, en el Fondo primitivo de la creacién, donde se halla la clave secreta del todo». Klee erata de explicar esta relaci6n naturaleza-attista con un ejemplo: Peumiidme —dice— que use una imagen, la imagen dl dtbol. Hl artista se preo- cupa de este mundo complejo , de alguna manera, se orienta en , podemios WH, op. cit pp. 122-123, Fela, Mize, 1958. ‘que se ejercen en dos campos dis intos deben, a la fuerza, provocar formas distintas, ramente, se quiere negar al artista el derecho 2 alejase del mo- s,s lege, con celo verdadera |, acusarlo de impotencia y de deliberadafabsficacin, idad, al cumplir su funcidn de tronco, él no puede hacer més que recoger lo que le viene de ls profundidades y transmit Icjs. Ast pus ir manda; s6lo actin como mediador. En consecuencia, ocupa una posiién extremadamente modesta. No eeivindica Ja belleza del ollie, porque ella slo pasé a través de Esta similitad es el primer paso que Klee nos hace d Jementos formales vo en un sentido nuevo, en sf iffcado que te impone 28 realidades de esa ‘esencia del proceso 4s fuerzas formativas de mundo como el mejor de los mundos posibles, tampoco quiere afirmar que et ‘mundo que nos rodea es demasiado malo para poder romarlo como modelo, El blo dic: tal como se presenta en su aspecto acta, éte no es el nico mundo que En consecuencia, con mirada aguda, el artista penetra ls cosas que la naturaleza te coloca, ya formadas, ante su vista. Cuanto mds en profundidad mira, tanto més ficilmente relaciona los sta de hoy con ls de ayer, y tanco més se graba de la naturale, la imagen esencial def cres- sxsv0 sca accién creativa del mundo del passdo al fruzo. De is una duracién. wt a en Tet Pia fede dy dl plese Ass a planetas se haya llegado a formas conipletamente Semejante movil iberuad de l evolucidn al desarrollo de sus personales creaciones, ‘cuenta este punto de vist, serf, pues, justo eximirlo de revelar- actual del mundo de las apariencias que se le ofrece de cd cerrado en el tiempo y en el espacio, y que, por ello, ado con relacién a sus visiones profundss y a sas conmovides jAesso no es verdad que el microscopio cea ante nuestros ojos imgenes que Ilna- amos fantisticas y paradjicas si las vidramos por abi, por cx prender su esprita? Kandinsky, est fitifalea de es ifranquea- ‘oF tamto, el arte no puede ser mis que abstractd en modo absliiéo, Eni Klee no” diafiagma definido entre artista y mundo fenoméni ‘echaza la abstracci6n absoluta. Kandinsky tiende a suscitar en ela | cies mediante purosritmos formales, paras vibracioneseromiies Por supa Mt ‘te, Klee tiende a expresarse siempre por alegorias, analogias y simbolos. Saya es / Estas son las bases de la poética de Kl ‘convencido de poder penetrar la corsez: vencide de que el arte puede caprar J inods di 98 de Digs, puro eg y-en cuanto despliega su imagen, echa ralces en dl yd mis. smo se hace parte integrante de las Fuerzas creadoras naturals, "tind dea conserilones talon cae claro el proceso de formacién de los modos figuativos de Klee y de Kandinsky, Aparte de la sugestién que en Al ejercié Ia Liberacién del color llevada a cabo por lot fais Kandinsky sufi, sobre todo, i inflencia del fugendiil, del que ‘Minich fue el centzo eee mas elo pasado. Se sucle facet co actividad muniquess, es de ye un elemento fundamen: on fos pelitiGkO ABBY de su lad, va més-alld y constitu- ismo kandinskiano. 0 Liberty, nombre inglés que Vie Are Notaeia, BPR ances GE AN tp He tivo i263 de siglo Watabsan de A cillején ‘ali “Las tdldciones entte Art Nouveau y pinuitt rece ri Ya nos Tchios FeRIAS alto a-hablar-de Mh pero laanlisiédeberia excenderse desde Gaiguin hasta Toulouse-Lautee, pa sand POE 16s nidbis, Hodler, Klimit, Modigh ia Cato. A voces, la relacién-es directa, como en Klimt, otras o¢ ingitéeta. En ef Art Nouveau hay el exotismo y el simbolismo del arte oriental, = que ya habja cjercido una viva faseinaeiGh so sobre Van Gogh; y hay la libertad d penctante nists Delay &e Guien en 1913 tradi 0 magico de Te waiehgenas eT fiuciieia de’ todas le cjereid ef de Asie WENGE ben areste Oienite CE W, Grohmann pits p49. saxo de un motivo de inspiracién, En abril de 1914 —y esto también es signifi- cativo— se halla en Tiinez, y alli, después de su exclusiva dedicacién a la agrifica, se descubre como pintor. Su Diario esté leno de notas sobre esta ‘luminacién que lo llena de inmensa felicidad. Une noche de luna: «Esta no- che quedard profundamente dentro de mi para siempre. Alguna pilida apari- cidn de la Juna en el Norte me tracrd a la memoria el recuerdo como uaa jmagen reflejada en el espejo; no a olvidaré nunca. Seré mi novia, serd mi otro yo. Un estimulo para reencontrarme 2 raf mismo, porque yo soy la sali- da de la luna en ef Sun ¥ nucve por ciento de cador al mismo tiemp. cemente en mi persons se ha apoderado de siempre, lo sé. Este es el fodo ello penetra profunda y dul- ero algo sin esfuerzo. El color andlogar. Cuando a admiraba, Klee | del méximo rigor, dela théxiina pericia. Hastarel-snefio y alusive debe set pura triiasparencia, limpidex inte- lo consigue llegar a donde Kubin no habla sido capaz: a ina existencia no manchada por el «fango viscoso del as lunares, entre arbustos de coral, por encima de lagos de amianco, Se ven entre las ramas los verdes pSjaros de fisforo y las es- tucllas que se confunden con la escarcha. Se vive, ora en un paissje de cuarzo, cra en una landa submarina, en el corazén de una luz preciosa de algo y de diamante. Otras veces, en cambio, se camina sobre un mosaico vibrante, o en- tre una selva de simbolos domé croniético debido 2 un: bign es més inmediata y dit Ihde, 9-4, 102 anne 1A PROTESTA DAL EMRESIONISWO,_ Leamos algunos titulos de cuadros de Klce, titulos nacidos con la inspira- cién del cuadro: Una paloma que desciende del cielo, Aves acudtcas, El pabelln de les mujeres, Tejado asl, Luma naranja, Parque bajo la lluvia, El ex Kain Flores en la noche. Comparémoslos con estos tos de Kandinsky: Mancha nex ga 1 Cuadro con fondo blanco, Pequeto cuadro con amarillo, Improvisicién con formas ftas, Oscilaiin en puntas, Esta simple compataci6n nos da una pista mas acerca de la diversa diteccién de trabajo de estos dos artistas. je Ima de una briana de hierba, el linfa en ef tronco de un érbol, la geografia de cuerpo terrestre; busca la vida cn su estado iGo, Feeibiemao He TaN als sapeeinaeta de la lemicites esirtictates, reer utilidad de la geomersiay de la mecénica, peto, al mismo tiempo, 10 4a sus alumnos: eyes, pero también tenemos la posi- ls reglas con dem: se perder en : anbias el pute de vt y cosas, Coma ‘uieta que sea, el movimiento libre es casi un deber mora, Siempre se puede repre. senta algo slo intresndo‘e en la noes, Pero con esto stata no cumple on su deber, pues la finalidad de un cuadro es haceznos felices , La Bauhaus fue fundada y oficios orientada a dar un’ dase ant steal 7 de en ek cna de a Fepablica de posible dee mona y dirigide por ol par ciatdemourats Hr Bauihaiis Fecopia el tema positivista en una perspec- lsidn feformista hacia su sparicién, dando un incucsioia- iinceridad a Gropius y a sus colaboradores. El manifiesto de 1919 de la Bauhaus dice, entte otras cosas: memos una nueva comunidad de artifics sin la distinciGn de clases que alea una unre barterrenie atwesnrc Coiieibames y creemes june afiuevo iio dl Rau que aba 103 sola una, y que un a seré aldo al cielo por ls manos de millones de trabsja- dores, come el simbolo de al de una neva fe ‘Aguf estén las rafees de aquel «hacernos ‘menos durante cierto tiempo, crey6 en el soci der de redencién social del arte. Y creyé en tanza, La conclusién de la conferencia de Jena de 1924 lo confirma exp! ‘mente: La obra debe exeeer cada vex. més ata, j, cuando haya llegado su tiempo, tanto se- . Nosotos tenemos que buscarla todavia. Hemos encontrado alguna de sus Zo no su eonjanto, ‘Tadavia no tenemos esta fuerza final porque el pueblo std con nosotros. Pero nosotros buscamos un pueblo. Kemos empezado all, en la Bauhaus, con una comunidad a Ja que consagramos todo lo que tenfamos El realiomo expresionisia fundiendo elementos cubistas y futuristas.con formal. Pero ya hacia algunos afios.que en la sicuaci venia otra serie de hechos decisivos. Ta guerra de 1914, ade / ooipide violentaments el primer plas sido a mis de un artista a teflexiopar fobs tuaeién de La culta ‘aids. La teflexién tor reaccionaba cont alistas o roformistas, en, un. arte. duso.y. dad, pero que, al mismo tiempo, fuse dl al hombre. En resumen, un arte no tanto «revolucionatio» en la forma como en cl contenids. ~ "Esta fie, en particula, la posiciéa dé Kithe' Kollwice, Barlach, Otto Dix Grosis Beclamana, Joan Heaithield'y Fans Grid: _ IA PROTESTA DEL EXPRESIONISMO ‘motivos de esa reaccién en una pagina de 1925, una pégina la situacién que se habfa ido cteando en el arte dque-seformaron sexerita enter aii, Hb tabi embargo, precisamente aqut se rastrean los orfgenes de los nuevos conoci- .. Cuando se hablaba de dindmica, inmediatamente se reconocfa que en los de loeingenieros la dindrmica hallaba su expresion més inmediata. El ra én metaflsica, 6 porque casi codos insisten en gi edi ial. Olviden que hay sur alo ier de 3 "el rrero, el capiner, en pocas palibras, d ‘ren que son ella los que lo gufan, mientras que nd ge fle). Las wis hod de verd: bases ‘eomprometen. Los muebles ruidos de modo &lS, ios das for carpinteros absolutanienté "a siadas por Tos constructores de fa Bauhaus, ca ce east HATTA LegicaNeMe” MevARTOMEGS, eT ea abliciir dl arta tal coro se presenta en su forma actu ces? Todo lo que hasta aqut se ha dicho conduce a una solucin:jLiquidacién arte! Y, sin embargo, esta solucin no satisface”. pueiniiie © CEG. Grau edtado por Ferdinando Ballo, Resa Ball, Mild, 1964, pp. 9-10 Esa. te estado de cosas Ievaré a la formacién de una nueva “Neue Sachlicbkei: Nueva Obj lad. Pero es diff ificado cultural de sta corriente y sus caracteres, incluso no se logra comprender las vivencias de un gran nimero de intcleceualesalemanes durante la guerra y los afios inmediatamente posteriores acl s Haba tii Gu mudado en una realidad aiin més trégica y pavorosa, Fl ulte- desplazamiento a la izquierd intelectuales era, pues, inevitable, y a adopts las formas mds extremadas y radicales. ins de este reaccién contra las causas que habfan ge- rerra es, sin duda, el dadaismo en todos sus aspec- itico y moral. Pero la consecuencia més importance po de literatos, poctas,directores apoyo de las fxerzas revolucionarias, hacien- ja sociedad, y dedicados, en summa, con todas al renacimiento de una Alemania democritica. El paisajé culeural nds ticos y fructiferos, aungite, Togicamente, pero también confirmaban la necesidad de Uiendo de tal constatacién se habia formado los artistas y a los arquitectos de vanguardia, iaquierda. Peto durante los afios de la ‘ural de i dn democrética y sbcialista aumenta ¢: comienza a escribir sus poemas y sus primeros dramas; ler dedica su obra tcatral Hombre masa ea los proletatiose y Piscator En el campo de la novela Heintich Mann contintia su req rguesa, Thomas Mann publica La montaia mdgica, Arnold 106 A PROTESTA DAL EXPRESIONISNO. ‘Zweig sus libros contra la guerra y Déblin su Berlin Alexanderplatz, Toda una literatura de tipo documental, el reportaje social, se afirma como autén tico Imrevs ‘género: Eni siinia, desde el inter ti como Proresti dé 16% senitimiieiitos se observa ef desarrol de-um-expresisn tieas-rmevas: “Ulienes en el campo de las artes plésticas dieron un encrgico impillo 2 esta ‘tendétigi in Barlach, pot lo menos en parte, y Kathe Kollwitz. Bar ‘binétizads a tallar én inadera campesinos, méiigos y vagabiundos nal en 1906. Su actitud ante los kiana, con mézcla de profiinda i fay 7 isi positivist deta vidas Verifi- 66 €Oi'una dolorosa sinceridad moral. «En un cierto momento —esctibe— se ben alejamiento de la aceptacién automética de toda forma fy fuerte, grotesca y fintiva de los ocultos valores rsibles Ja habitual mascaray™, Deerds de la eméscara» lel hombre y la encontré, como Rouault, en > en mayor medida que Rot de modo que sus imagenes poseen una austera fitmeza y is, grabadas y tals, en las laban a un pathos 2 més contenido y est . que alcazard su punto cufminante en el monumento a los cat idad de Magdcburgo (1925). Por lo que respecta a Kithe Kollwitz, tendencia realista del exprestotiismie Iz fido de la Alemania de hoy, un poema que refleja las pru hhumildes y de las personas sencillas, Esta muj sus ojos y en sus brazos matcmnales, Ella es aificados» ®. A este reepecto, su obra g de las laminas de extraordinario vigor evocativo de la Reouelta de los tjedores de 1898 y de la Guerra de los campesines de 1907, vealizadas ain el gusto dese s de Beilin, el espe lescsperado de los parados dies aTas que la guerra habla attebitado a sus hijs, fas luchas y las manifesta- * E Batach, Ain str Leben (Avecbiogtals), R, Piper Verlag, Mu sper ct es de 1928 CEM. De Michel op. isp 107 iones obretas, éstog son los temas que wz trata, Su trazo desciende en profamdidad yj capia en los estos, destacindolos, Tos ideales, las pasiones y los ppensamientos de los peisonajes de este gran drama humano que cat lugar en el Berlin de Iz derrota, «Estos ‘Diario— son la esencia de mi vida. Nunca hice un trabajo en pre, yen un cierto sentido, con mi propia sangre.» De este perfodo son inolvidables sus iminas conmemorativas de Karl Lieblatecht, ascsiado junto ‘cbr’ Rost Laeftiburge eit eset dé 1919 por los puillermino. Ese doble crumen fue Ta sefial de Ta ave ica de Weimar y a la legac ‘er’ perféciaimenté coriéciente de lo. La litografia coninemorativa realizada ese’ mismo: afio-nace-dle esta Tos obreros que Hloran ante los restos de Liebkenecht ; sus grandes manos que se tienden hacia el sudati dan a la escena una fuerte intensidad paidt Ia cabeta de Liebknecht est como apagada, como disecada; .0 es simple y severo. Una litografla que es tipica de Ja nueva orientacién te buscaila en ¢l filbn de la cultura perar la frastuta cieada.s finales dl siden alineatse con la nueva fuerza , Bsto sos personajes nunca podrén ser oficiales y nunca podrén simtegrarse>. Est es lo que sucede también « los personajes de Rosai a sus famosos ehombreci- tosr, Son muchas Tas analogias de Rosai con Viani. Como Vi principio —desde que en 1911 pints fa acuarela El hampdn— hemi y elisa que xpesba con un brasco rehaun dels endencis oft ciales y reformistas, Excepto un brevisimo paréntesis fututista hacia 1913, ietdin desma eco eeeeeee ee eeecon rey oee i ‘més popula- resiva de las imagenes de su ticrra y de su gente, la que lena los mds pop Tor bares florentinos: una bésqueda de expresién desma, ue Rosai persegula, en todo caso, inspi San enjutosy eseniles y tan desearnados, Por ello la rentaciSn del fuurismo le duré tan poco. Posiblemente, en torno a 1919, Cézanne le ensefiara algo: la ncia, Ia fuerza contenida, la precisién. Carri también ejercié ica en él, pero su lenguaje es profundamente diverso, ditigido a Sn precisa y circunstanciads. : ssonajes de Rossi se han ganado un puesto bien seguro en la pin- ina, Son personajes trstes, tacitusnos y cerrados. Vestidos con cha- queras desastradas y ridicules abrigos, estén sentados en la mesa de-la taber- 6 Vinis Mare gros sli bch, Vallecchi, lorena, 1955, p 6. 27 nna y jucgan a las castas on silencio miran su litro de vino o su vaso con nite auwente, caminan por estrechas callejuclas desiertast experan desolados, sentados en vn banco... Son personajes que Rosai conocta desde su infancia: de Via Toscanella y de otros barrios , cargadores, miisicos ambulantes, prost ros, ladrones; tuna humat pecialmente entre 1920 y con una ejemplar agude: paleta sobria, acentuando siempre su condicién social. De estos ddesprende una poesfa rica de senti- ‘un aire de crepiisculo, en una atmésfera azulada, dentro de gei- y prepotente, mantiene siempre u rminio que no esté hecho de coerci un estilo. Si los limites que este ensayo se ha impuesto lo permitieran, extendert nuestro estudio a un periodo posterior, el periodo italiano de la década afios treinta, y estudiariamos el expresionismo de la eescucla rornas ticular el de Scipione, Este es el perfodo de la dictadura fascista y de la restau- racién en el.camnpo de Jas artes con la operaci6n del Novecento. La postguerra, cexcitada y cargada de equivocos, habia arastrado a un gran rvimncro de tuales bajo la influcncia del fascismo. Al fascismo se habfan trasvasado los co-sindicalstas intervencionistas, los dannunzianos, Jos desbandados de laya y los nacionalistas. Las acticudes combativas contra la vacilante bur- guesia liberal fueron tomades por actitudes anticapitalistas; el plebeyismo por espiita popular, y la accién revoltosa ¢ ilegal por valor revolucionario. hacia el fascismo de muchos intelectuales y artistas como ‘con su pintura ardiente, cubi Peto otros artistas auténticos, que, sin embargo, hablan dado su adhesién al fascise poco renunciaron a su verdad pottica. Vi aun en los momentos de mayor cute al, sig ‘mas, sus vagabundos, sus chombrecitos» y sus filisteos, y acabaron siendo con- siderados irregulares y, en algsin caso, enemigos. Y en verdad lo eran o tet aaron sidndolo. Pero, acaso sea oportuno, llegados a este punto, hablar de tun artista que Hleg6 a ser considerado comio el maximo representante del Nove- Maccati, ido sus te- foc, y es, en sus momentos mis segues y «ste equtvoco surgfan de su tancia y proctive a un populismo apoc ‘oni supo pintar estos paisaes ucbanos —los barrios periféricos milaneses, s6rdidos, sombrfos y geométticos, los suburbios de asfalto y de cemento— con chimeneas, los tranvia, los tesraplenes y en las ca 38 gasémetros y la soledad de los amaneceres invernales sombrios y plo- 05, rota sélo por un obrero que va 2 pie o en biciclera, Cada elemento se ‘oposicién nietszcheana a la civilizaci6n del capitalism modermo, se siente en cle lad industrial. Pero no hay en ellos [a osa- luds y cl soptimismor de la westitper que el fascismo empen6 a exigita los ar- tistas poco tiempo después; exigencia que poblé las exposiciones de campesi- nas fecundas, de pecho grande y 5 emarineros» bien firmes sobre sus dlanzada al porvenirr. Qué més da: nes, a los trofeos, ala arqueologfa romana, a los misculos porentes, alos gran des t6rax y a la retérica. Entonces se vio a un gran artista embarcado en una ENSAYO ‘empresa desesperada. Si algiin detalle estaba bien conse el conjunto era "El expresionismo, pues, tal como se ar derno, aparece como e! movimi micnto que va més alld de los programéticos que cualquier artista 0 grupo de artistas haya querido marcarle. Acaso se podria decir que gran parte yor parte de los artistas contemporéneos,y los més valiosos en patti tieron y sienten los temas del expresionismo como propios. En efect mas estén muy lejos de estar agotados; co problemdtica del arte de hoy mientras duce la sign y la protesta son dos 108 Fundamentales de esta problemdtica, térmi- nos de los que las diversas soluciones expresionistas nos ofrecen ejemplos vatia- ;nsformacién de la protesta en Icha rminado momento, qued6 jovimiento se deriva del hecho de que nos cexptcsionista en su conjunto no fue mor jatehidos y por lo iieiios palpitan con fuerza algunos dé los thiotives dé fondo deli i tiempo. iia Pate de 41 130 CAPITULO 5 LA NEGACION DADAISTA Una definicin de Tzara de énimo de un grupo de jévenes en aquella especie de prisién que era Suiza en tiempos de la Primera Guerra Mundial, , de otra clectual del are y de ra de aquella época. La guerra, ciertamente, acabé, pera mds tarde vimos lo ello cayé en ese semiolvido que la costuznbre llama historia Peto hacia para mi como para mis demasiado an | guerra, sin por proporcionesflseadas por una pe sco y la rebelis, de elevacién campaba por sue fo la fuerza de ta burguesta en Anteriormente y en otto sitio Teara habia escrivo: 131 Perel poe e rae wn eigen a de na nope de saat eb salto moral, y del sencimaent Tarexacones del ep Drecidaedel susanca human cries. Dad luo a Tas necesidades de (dgica la.moral com [ dy tant si de TF chales ng sub- Thabtan sido vaciadas de su siances de jan mis que esque ial, La frase de Descartes: «No quiero i sai seéoisiderar y poner fabian so impuestas por nuesteos padre, y proba ‘Acerca del origen del nombre «Dadés, Hans Arp cuenta en una revista del mo- vvimicnto, en 1921, 1o siguience: 3s un encusiasmo legltimo. fevaba un bollo ala fosa na- ‘encontré la palabra Dada en el dic- cionario Lat 'Y Ribemont-Dessaignes confirma que todo se debié al azar dde un eabrecartas que se desliz fortuitamente entre las paginas del dieciona- rion Pero Tzara también ha dado otras explicaciones: Si alguien lo considera inl, alguien no quiere perder su cempo com una palabra que mo significa nad] El primer pensemiento que se eta en esta cabeza ede aien bacterioldgicor hallar su origenetimol6gico,histbrico o psicolégico por lo me- hos. Por Jee periédicns sabemos que los negros Kru laman al rabo de la vaca sagrada DADA. El cubo y la madre en cierer comarca caballo de madera, la nodriza, la doble afi 1 Tray Le sie lip ge cee regres Sari daa, Loans Mii, 1946p 11 a i so ee ara eatpec eae Noodle Roe Page eu jo de 1931. El mi Se tara desu Dd lat, Paty 1938, 1 Dede 18, Vase oa Sopnds pea vein ep de ee tt LA NEGACION DADAISTA ‘embargo, Tzara advierte a continuacién claramente que Ja palabra Dadi es simbolo de rebelidn y de negacién. El Cabaret Voltaire de Ziirich En aquella época Ziirich exa el refugio de innumetables personajes i Habfa desertores, emigradas politicos, objetores de concien y hombres de negocios més o m tas, aterrizados alli por los me pera declaracidn de gers permanecer en Zsirich, donde ya se hallaban por m ; tmatriculado en los cursos de filosofia,y Janco, en arquitectura. Arp habla ido allf para ver a su madre. Alemén de n: idad, gozaba de particular indul- gencia por parte de las autoridades francesas, dada su calidad de alsaciano. ‘Hugo Ball, anteriormente enrolado en cl alemn, habfa elegido Suiza Porque no tenia ninguna intencién de segui ido el uniforme. Huelsen- beck, declarado instil, habla abandonado Alemania para ir a Ziétich, ya Gué no quetfa convertirse en una victima del conflicto, Fueron estos hombres los que dieron vida al Cabaret Voltaire, donde n: 1916, el dadafsmo®. ‘Bt Cabaret Volare estaba cn el nmero T de la Spielgasse: Bsc mismo aio, yen el Filimero 12 de Ia misma calle, dadaistas'#€ encontraban eentido epeciheo del t tuales que hablan creado. byersivo de la historia del arte y de as Tetras. Sélo un afio més tarde, es decir, cuando ya Lenin, encerrado en el famoso vagén precintado, se encontraba desde hat bia puesto 2 la cabeza de fa revolucién, ‘Tzara y chos de octubre como algo que derfa un rudo golpe a fa guerra, Cuando en 1917 Placten —escribe Tzara— regress cf noticias freseas de la revolucién que ponan en s csperaba que este mavimiento se pudiera extender 2 los restanes paises beligeran- tes, poniendo fin a la guerra, de acuerdo con los principios de Kienthal y de Zim- mecwald, Bs sabido que la socildemocracia habe decidido otra cosa. En esta ocic © C£.G. Hugnet, Lemur Dade, Glee de nates, Pts, 1957, pp. 18-32 ne Lacbee, Titan Tear, Sees, ate p18 Ne @ partir de este momenta se dedicard Serer y yo mismo saludamas Ia revolucién ico medio capaz de poner fina la guetsa, y mente a la actividad polit ‘medida en que eonstituta ¥ a. pesar. de este salsdo, no. se puede decie.que el. movimiento iese_directamente en el campo de ron Jos dadais ‘lloscen Betlin y en fas luchas callejeras. En Colonia el poc itor dadatsta Baargeld legé a fundar el Partido Comunista de Renani ino de Z mantuyo en el émbito de una violenta negacién una definicign més clara de su propia ac- 16 GE tal actituc-ere te protesta sta. Sin einbango, et et aattaiimo la lafsmo techaza Su voluntad de des- mismo blanco del expre- ales. Dads std eorrrra be- contra las leyes dela T3gica, Diez de los caicepat abs. re a deseifenada fractos y contra libertad 134 1A NEGACION DADATSTA Ia impetfecei6n contra la perfeccidn. Por tanto, «cd contra el modernismo, es deci, el ex y sLabstraccionismo, acusindolos, en ido destruido 0 esté a punto de serlo, y de ser nuevos puntos de del espititu, el cual nunce debe ser aprisionado on la camisa de za de una regla, aunque sea nueva y distinta, sino que siempre debe estar ‘ontinuo movimiento de si mismo, en la-conti- rencién de su propia existencia, Ninguna esclavitud, ni siquiera la escla- le Dad sobre Dad. En cad: Dad&. No existe una libertad establ ‘rigor negativo también cubismo, el fuusismo la obras y el gesto se puede hacer en cualquier direc del arte y de las relaciones, Una sola cos tar que tal gesto sea siempre una proveeaciéy contra cl llamado bi contta Tas reglas y contra la ley; en consecuencia, el escindao es el preferide por los dadatscas para expresarse,, Desde este punto de vista, el da sentido de su dspera polémica contra el Arte y la Literatuen, con mayiisculas, debe verse precisamente en eV RecGa de sic Geos, Mpsertsohenie aes 1 captar los evalores eternos del espiritu», la vida haba sido a a, Dadé, en cambio, era el deseo priaeipio, pero no hay duda de que ése es su significado mas auténtico. Los manifiestos ica, con una auténtice ansia que da a la desenvoleura verbal de Teara una fuer- 7a real ms alld de fo meramente escandaloso: 135 _ ENSAYO wvan su libertad. No reconocemes ninguna sve para amontonat dinero j acaricia alos g fu einineo en fs moneda ya musiclida tesbala ke visto de peal. Teds bo banco a peur de ropieal abundancta squc huye y he ah de los sollozos. He ‘nuevos, rudos, cabalgando iterarios preocupados por mejoralo. Yo ss no temblamos, no somos mé las plegatias y preparamos el gran especticulo del desaste posicién. Preparamor la supresién del dolor y susticuimos ls Légei |. Yo destruyo las cajones del cerebro y lose io estéen orden: —Continuad, muchachos, 3 La diencia nos dice que somos los sérvidres de la naturalees: —Todo ced el amor ¥ rompens las cabeza; continuad, mchaches, hom- Durguesia y que aque ain segufan 3 ‘Bares, asear. La p! sgresiva y completa de un mundo Confido a las manos de los bandidos que se desgarran y destruyen los sgl (.) ‘Toda forma de ateo susceptible de convertizse en negacin de la familia es Dads la protest a puletzos de todo el serentregado a una acicn dest D In sbofiién de toda jerarqu‘a y de toda ecuacidn social de valores establecidas entre ic add: todo obj de colores sacrespa vradicsinnes, desl media gaara, Ge 2 Vea en la Segunda atte ves ncegra del Masifions Dad 1918. a LANEGACION paDAtsTA La energia de D: vino, sobre todo, de los intelectuales no artistas 0 de aque: llos artistas que sabfan manejar su pluma espléndidamente, como Arp, Baargeld, Van Doesburg, Hausmann, Picabia y Schwitters. La realidad es que en el ‘mento en que nace Dad en el cam ‘ya estaban afirmadas tod: principales tenden edad irreverente y un car majanzas con los productos de las otras tendencis. Es el mismo Tuara el que en el Manifesto sobre el amor débily el amor amar- go de 1920 sintetizé eficazmente tal método de sfabricacién». Veamos, por «jemplo, qué es lo que aconseja «para hacer un poeta dadalstan: Agi Sacad las palabras unas detris de otra, colocdndolas en el orden en que las habéis, sacado, Copiadlas conciensudamence. El poems esti hecho, Ye. habcis coavertido en wn escttorifinitamente original ydotado de una sensi encantadors,.% [tees punto extremo de la rebclién dadatsa. En esta epodtica se expresaba [n aspiracién de los dadaistas « una verdad que no estuviese sujeta a las reglas spor sna sociedad desagradable y enemiga del hombre: relas poli. tices, "morales y también artisticas. Finalmente, esta poética eta adem‘ un rtenecta a aquellos modos rotundos, @ Tos que Dadé presentaba batalla a Ja ment ; recogiendo los elementos mis adolos juntos sepin la casualidad de sus formas, de sus colores 0 de sw materia ‘Uno de los artistas més consecuentes en la fal tipo fue Kail Schiwi icacién de sobrasy de este de Hannover, qiie dadaliticamente se forjé en 1919 iado por él «Me 6 que parece sez miiila- gallina, ls, » cuero, etcétera. Sus obras estaban hechas exclusivamente con de este: material heterogéneo y mostrenco, Schwitters en su autobiografia, dice que el producto de cota actividad dadastarecibfa el nombre de spincura de la inmundiciay. Lae cobras» de Schwitters dejaron de ser dadalstas cuando intenté emulat con sus fragmencos al cuadro cubista y al ciiadio abitraito, es deci, Gianids Tatehed dar a su produccién un valor eestético», tansformando acadéiaicatiente en ch. fra Ja primera i ‘dadalsa: et eféceo, Te Tepedicion 6 la ice de Dada * iden * CLG. Darts, & Schwiten. Galleria del Navgia (asllogo), Min absimayo de 1959, 138 LA NEGICION DADAISTA Dadét en Nucoa York Pero si Ja produccién Dads cs verdaderamente un «gesto», entonces los artistas dadaivas por ewcelance Rictoit Dibdiiny Pica Nueva York on @ una a anzada que la de Tas. dulatias en Paris, Duchamp habia toriado un portaboral “Ai i atnpante det Salgn de’ los Tidgperi aii eG fabicaido envaig, con el ttulo de Fe amigo Anur ia sobre la pintura, se pibblico selecto, trando u de las sefloras, que escon alejar a aquel extraiio cont ‘Duchamp y Cravan época Duchamp hace salir en Nueva York tres’ pequetias pul imeros de The Blindman 9 Rongiorong. Picabia, pot tu parte, Eda li revista 391, donde publics sis Wibijas de eaueinas wecantcas y de bf copiados Tuna Helice, ane imparts eléctiica) yeserl Diachamp 7 Piabia tambien xed Man Way, cial rd com de sabfasy compucstas por materias extrapict feterogtieas, per qe so- bre todo eit el campo de fa fotografia alcanzar4 resultados notables, i Tiografias na ‘mundo real que, segtin'Ta expresiba de Hupnet, accnetan “poniténdole af désnuido. Estas forografias, dominadas por un gusto de ciencia mistificads, fueron lamadas, del nombre de su auton, rayografias. En 1918, ya de represo en Europa, Picabia irs a Zjrich a conocer a. Tears. Aquf se da cuenta de que Dada coincide con sus hhumores y se convierte en sandr deSis Tad actives defenss¥ess™— pequetias pubiccions: dos Dadé en Alemania GHiaget op cite p38, CER Hausen, Conorier Dad, depencle en su ejecacién y diteccién del tiempo en que vive y ke Los mejo os isis serdn aquellos bordes de su cuerpo en el fragor de las cataratat de seco vida y sangren de las manos y del corazén. gAcaso el expresionismo nuestra espera de un arte que fiuese el wballotages de muestros intreses vit No! {Nol No! {Acato el expresionismo ha saisfecho nuestre esperanaa de un arte que quemate fa esencia de la vida en fa carne? de la liceratuca y dela seunieron en una genracién que hoy ya pide el aprecio de la historia, de ay del are, y presenta su candidatura para obtener una honorable apro- Juesa (u), El expresionismo, hallado en el extraniero, se convirié en ‘espera de una buena ‘Alemania, como todo el mundo sabe. en un gran pensi6n: no tiene nada que ver con las tendencias de los hombres activos. Los frmantes de este manifiesto se han agrupado bajo el grito de combate DADAM para la difasi6n de un arte que realice las nuevas ideas. ;Queé es, pues, el dadafsme? Ta palabra Dadi simboliza Ia relacién mds primitiva con la realidad que nos ro- dea: con el dadaismo ua neva realidad toma posesién de sus derechos, La vida aparece en una simulténea confasién de ruidos, de colores y de ritmos expirituales aque en el arte dida(sta son inmediatamente recogides por 08 y las febres diana, y en toda su b del arte y, sobre todo, tado como una nueva ediciSn del impresionismo. 7°" Por primera ver el dadafsmo no se sitia de manera escxica ante lava { dadaita puede quecer docir wnas veces ser comerciante poltico mas que artist, 0 1 ser artista por casaldad {..). Vivan los acontecimiencos dadafstas de este mun | dot star en coowa de este manifesto significa ser dada ™ Ean este manifiesto ya se rozaba en cierto punto el problema de los materiales nuevas en la pinsura, Pero en el mismo mes del mismo afio Raoul Hausmann abordaba el temna con su propio manifiesto, titwlado Cinema sineétco de la Pin- titra, Sin embargo, li idea del foromontaje se le ocusrié a Hausmann unos me- ses mis tatde, durante su estancia én la isla de Usedom, en el mar casi todas las casas de aquela isla habla colgada de la pared una li 2 hide, pp- 2639. A NESAGION patra colores que representaba la imagen de un granadero tcl. Para hacer més personal esta especie de recuerdo cata original del granadeto habla sido sustituida por la fotografla del familiar ‘que habia sido o era soldado. Este hecho sugitié a Hausman a idea de-compo- ner ecuadros» con forografias recortadas. Da regreso 2 Berlin, sc entregs a ello, uslizando forografias de prensa y de icipd su descubrimiento amigas didasias dela capit a dad, John Flcarrield Rabi frei re el fondo de un citar “0 de Artes y- 1a exposicién histéri aquclla ocasién el mismo Hausmann traté de definir Ia guerra, el expresionismo postfuturista, habla dad y de su falta de conviccibn, y de que no s6lo la pintura, sino tod: sus técnicas tenfan necesidad de un cambio revolucionario fundamental p ‘antes del nuevo material, y, través de dl niido nuevo, Dadé, que era una especie de Y es exacto que una gran parte de los pr cin de la fotografia a textos grabadbos,q. se transforman co un film fico, Las dedafstas[.] fueron Jos primes en erie de a forgrafla como rial para crear con a ayuda de esructuras bastante diversas y« menudo he ‘dad que aerancara del caos dela guerra cliente nuevo, Eilos Sabai que wire método, ¥ que para dess- aida, en su forma pri cra una explosién de puntos de vi wut. En su com dad, al ir més allé de fa pincura futuisa, sufrié, mientras tanto, una evolucién que se podrla llamar conscrucriva. Por doquier se impuso la conciencia de que et el mento éptico ofiece postbildades muy vatiadss. El fotomontje permite eaborar fopaganda: ala vida concemp Ihde, yp AAD. les mis dacs, en rain del ana es, por ejemplo, de lo éspero y de lo plano, de la perspec (Cuando Hausmann pronunciaba estas palabras, el fatomantaje-ya_habia tenido tun rotundo éxito. Liberado de la cas «profunda nostalgia de una comunién creadora entie el arte y porque los dadaistas uno se contentaban ya con un arte que se habia en un negocio puramente privados, deseando, sobre todo, «poner w det dadbismo. iSformiaciones que cxperinienté, Ft, sin, bd ep. 46-9, W, Vera, Dad, Vet, An tears recientes de anco, Hacherbea ich, 1957, p. 21, Ese volumen teoge tbign 142 LA NBGACION DADAISTA Pero quien hizo la aportacién més aguda a la experiencia del foromontaje dada DUES Tue Way Bane ascael-puntorde-gue-algunesrcome-Asagon, n realidad, no pres: contado cémo se Ke ocurrié Ja idea del foromontaje, en una pagina de gran interés, no sélo por esto, sino también porque en ella hay mucho del sutrealismo que vendsla esp Un dfs del afio 1919, halléndome con tiempo hin, me quedé sorprendido por fa obsesién que provocaban en mi mirada ieritada, las paginas de un cardlogo ilustrado donde figuraban abjetes para demostraciones dde cardcter antropoldgica, microscépico, 0. Vi reunidos elementos de figuraci6n tan distates que el m 0 provoed una sibie un suelo, 0 ura sola linea recta como hor tener una imagen fel einmévil de mi alucinacins para taneformar lador de mis ms secrets decos lo que poco antes no eran més que trviales paginas de publicidad”. sfodo los fotomontajes de Es fovocadora de autentics natiralea dada ‘este tono de abierta provocacién. La exposicién de cuadros, esculturas y obje- tos diversos tuvo lugar en el patio de un café del centto. Para llegar a dl h que pasar por los retretes. A la entrada, una muchacha vest CEL Aragon, La ponte df Glerie CE Max Best, Auobigrafe. PCa ENsavo, En medio del patio se alzaba un objeto de en f que el usmnor sarclsticoy pre iras de Te posigucie y lr de es, los insul- tos: «Bb jetta el pico o te doy de patadas en el culo. Cuando un dadaisea se ican paca leer versos, otto gritaba: «Alto! {No quertés dar nuestro arte en pasto a estos idiotas!»®. ¥ los gordos burgueses acababen bajo las mesas muct- mada técnica de la provocacién conseguia «dlesn petsoiiajes de la Alemania posibélica. Evidentementé, no ¢tah instrumentos rc ivos. Y bastantes’ dada, ‘COS SE se ha Tecortato, retiinaron por feguie ottos caniinos. Ie dt dal av dadalsas mds veos.se mexican hacia medios expreiivos y hacia posiciones que superasen la inicial anarguie, fue sobecbia- ‘iaente descrite por ge Pveattal EeWwit Peo, que en su volumen » publicado en 1929, evocaba ast los das de aguel af: Mebring, Richard Halsenbeck, Franz Jung, Raoul Haus ellos percenecta al Dadé. Se discutfa hasta el infinivo de arte, pero siempre y sélo en lz politica, ¥ siempre llegabamos a la conclusién de que este art, si preendla tener el minimo valor, s6lo podia ser un arma paca la cha de clases. An- gustiades por los recuerdos que dejdbamos a nuesttas espaldas, desilusionados en inuestras experanzas y de la vida, velames la salvacién del mundo s6lo en la extrema consecuencia: Incha organizada del proletariado, conquista del poder, Dictadura. ete. La ae Hear pobicr,Binaudy Tarlo, 3960, __LANEGACION DaDAtsTA y esatibfamos en is rojo, custo Yen este clima precisamente, como se ha visto, se desarrollé el expresionismo alemén. Dadé en Parts n— Tiara llega a Parls como un ‘mé parece déscubjir'en una riquisiia Vida Tite ilar sus ids art ass propies- tao Ea realidad, grips pati Plus Saupaake, Ribemone Ds er marcha esd en Dadé IITy Dad IV-V. Con la llegada a Paris de Tristan Tzara empiezan taciones dadalsias: Algunas fu como la del’ Festival Dadé en a ‘de 1921 on la Sala de las Sociéeés Savantes, conocida con el nombre de «Proceso a Barrés». Mientras tanto, surgen otras revstas dadastas y Z de Paul Dernée. El tono del pertinence y apodictien: De Dadé (..}. Bl cubi 1é hace Dad? Bl e imultaneismo tod 0 construye una cate nismo envenena as Bl furursmo ha muerto, De ral con pastel de higado sardinas arias. Qu sera comunign ar ascensor artic, Qué hace Dad? Bl unanimismo abraz el wtodismon y pesca con alia artice. {Qué hace Dad? (.). Cincuenta frances de propine a quien encuen 2 CEA. Beton, Ls papery, Gallimard, Pat, 1926, p. 207 desconffen de las imita acd en tuna forma ar ema pornogtéfica un e idiots pura reclamada por Datl, sino el dogmatisno y la imbecilidad pretencosa™, {Ciudadanoe!, hoy os presen No ¢s posible seguir la apretada crénica dadafsta en Paris. Sin embargo, es ne- 15 un pesimismo Dad, uit & igo més querido de Breton, el protodadaista Jacques Vaché, aquel ‘ cl esteno de La mall de Firdias, ent Yer ; inglés en I platea empuffando un revélver y apuntando a los es- pectadores escandalizados por el prodigioso erotismo de Apollinaire; Vaché, fianceses, herederos de Rimbaud, penseban segui cad ki Bi HiosneHto WWE puro eS producién como obra suya, 0 tun’ marco vaclo pars expone sobrass dadalsticamente més co: n n la que e part itraba en Ta «ldgica» dadalsta, que Dada El verdadero final del dadafsmo tiene aht su explicacin, y no en las varias con- trovetsis que estallaron en su época entre Breton y Tiara. En Berlin, oportu- namente ya cn 1920, el dadafsmo se habfa terminado como movimiento, En Pars gu final inevitable tended Iugar en 192 al inevitable azo cons- TANBGACION DADAISEA jente, Muchos afios més tarde, Tzara hablard de un anterior, en la nueva serie de Litératre, Breton habia definicivo alejamiento del dadaismo con e! breve texto Léchez nad Dada. Abandonad a-vuestra esposa, abandonad a yuestra amante. Aban- donad vuestras esperanzas y vuestros dolores...» Fara quien expresa clarame cesencial de la cuestién jerto —afirma— que la como pi edida en que afra cosa la hubiera sustit ‘que los dadafstas no sabian claramente, fel hombre: el hombre liberado, a ta- ls destrucciones necesarias preconizadas pot Rimbaud, de todas les Jnctustaciones que falseaban su fisonom(a, Fsta fuc la ambicién confusa pero profunda de Dad4. Por no desfigurada. Pero 6 Zinio act sidnctoral de la personalidads ®. En ef fondo, las palabras de Tzara, pronuncia- das err 1950, no han perdido su antiguo contacto con Ja experiencia de Detesto alos literatos —dice Teara— y no he dejado de amar lo alos que viven sin preguncér el porqué ni el cémo de sus gestos tn cantess, Se sigue manteniendo la primacta de la vida sobre la esté dadaismo hecha re : Dad ‘As{ pues, se puede considerar que la det por Atp (en 1957) es justay, en cierto modo, concluye: belidn de los no c1cyentes contra los descrefdos» ™. Brad mejory de manera mis concisa. S6e hay @ habitabaysecreta, una exasperada voruntad, 1 Bl extocomplew et incidoen Largs pedis ect 133 [Tears ke papi colle ole prover en platen en Cahir dr, Pas non. 2, 1931 % CER Lachte op. cc 2 GER Hausmann, opt p45 147 CAPITULO 6 SUENO Y REALIDAD EN EL SURREALISMO El problema de la libertad por su misma naturaleza lo intents ha- hasta sug_métados provocadores; pero todo éllo adquiere una figonomid'dis- tinta. EF a Esta pars destruct t nuevo relieve porque va flanqueada por una i del dadaismo apui legando, todo lo mas, , en eso, En el expresionismo yen el propio ent de fa fractura y de lac también su lema: la puesta que esti en jucgo hhaver cuadros 0 de esc ‘una o su ruina on, idm a esa verdad sin sobreentendidos in Bl are auréntico de hoy —escribe Breton en la época de la guerra de Ma- sruccos, en 1926— es del mundo burgués, dia a dfa més eonsciente de su pro- 1 de hoy debe justificarse como consecuencia légica del te de ayer y, al mismo tiempo, someterse lo mds posible a una actividad de pretacign que haga estallaren la sociedad burguesa su malestar® ibn tedrica de Breton y de sus amigos se dirige cuestién. Por ello, son muy frecuentes en los tema fanda- sminar con claridad los varios momentos de esta apretada historia de ‘experiencias, de tentativas, de dudas y de contradicciones. Pat, 1945p. 122 Par, 1935.68. om, Poin politique du serine, 150 SUENO Y REALIDAD EN EL SURREALISMO Dos nombres, que en la ave presiden esta investigaci ‘Mare como teérico de fa liberea individual. A ext respeets, aT piineua lizae Tas posiciones del surtealismo en una entrevista concédida en 1935, Bre- ton decia: Nosotros proclamamos hace tiempo nuestra adhesin al Estamos frente a las dos almas del surrealismo: es decir, el alma heredera i ls mensaje de la itus somdnticos y el alma que quiere acoge de ser un tod ‘unido como movi- nds inquietos es reyolucién socialista. El surtealismo esta mi cfefuerzo de Breto queda la mayor El poeta fi i es el modo enérgico con que se planceé el problema, Es wn 1 ‘jbl del surealitmo haberse medido con tamafio problema y haber visto la posibilidades de resolvett. La voluntad del surrealismo de irrumpir en Ia histor ones de la libertad material y espicitual » biden, pp. 782. 4 pce, Le Vases communicants, Cabs ibs, Pass, 1932. p85: 151 xO sién nueva, También en el expresionismo y en el dadaismo aflor6 una cxigen-

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