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Pease, H., & Romero, G. (2014). La politica en el Perti del siglo XX. (2 ed.). Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Catélica del Pert. Primera Parte El Oncenio del Presidente Leguia, pp. 59 - 83 | Este material es para uso académico exclusivode los alumnos de la Universidad Tecnolégica del Peri. Su reproduccién y distribucién mas alld de estos fines est prohibida, de acuerdo al Decreto Legislativo N° 822. ‘Ex ONcento pet presipente Lecuia. ‘La Repiblica Aristocritca, que ya tenia una exizencia precra, inalid en 1919 con la legada de Augusto B. Leguia a le presidencia. La prosperidad econémica y 4a exabildad politica que caracteizaron al periodo generarin nucras clases socia- les que, debido 2 su propia exsteacs, lograron desestabilinr el orden imperance, pus las nuevas clases medias y obrers compreadieron que nis ambicionss sociales no podrin ser ralzadas por un régimen poliico exclusive y excluyente. La oli- garqula jamds podkta representarles 7 el cambio qui ofrecia era demasiado gradual ara stisfacer las expectativas de estos nueves secrores. Al inyal cabo, la Repiiblica “Aristoericica nacié en un momento en al cual las condlicioses poiticas nacionales eran maucho mis simples, o en cualquier aso, en un momento en‘ call oligarquia, vel a paced para gorats in gars conseouenis pls: : “Tha Replica Avocet) habia podido panini en una sociedad donde no habia Ia neceéad de iocemediasossocales, ya queos grands promgonises socials y policoe eran la elie y un pueblo wisburr al que debian edaca, «que por lo demés, se encootaba bastante Frgmenrado ycontclado po el gamio- talismo rir Con la apa de lar clses medias exe deta de sociedad y gobierno ener en exis (Contreras 8 Cueto, 2000, p 217). Eventos externos también dicaban que este vijo orden ya no era viable éa un ‘mundo en convulsia, pues no solo el Pert estaba cambiand:, La Revolucién mex ‘ana la rusa demostraron que no habia orden politico emo, y el Pei, con st. ‘eeraficdo sig onden socal, fue sin dda impactado por eos dos trascenden tales eventos. De un momento a om las clases populares escucharon sobre el tiunfo de idzolegias que liiaban exclusivamente con las injusticias que eos sufsan y que ‘buscaban elimina. Organizados y dizigidos Jos peruanos podrian porencialmente repedr las victorias de estos movimientos revolucionarios Aquellos excudiantes universiurios idealists de clase media que simpatizaban cén el proleariado as lo. coosiderdban. Ese entusismo se vio refijado en todas ls clases de la sociedad pperuana, con la obvia y comprensible excepcin de la oignrquia. provi mim Pend per 110 XK En ese contexo el personae mejor preparado para exploarestacopunrura probs ser Augusto Bemardino Leguia y Salcedo, un hotibre que atos ams se habia disan- lado de la oligaquia, aunque no necesaiamente por las mismas razone ideaisas. Para poder contar con el apoyo de esas nuevas clases, Leguia promedé ecansformar> ‘© sreaovar la sociedad peruana. Exe discurso encontrs su mejor expresia con el ‘érmino la Par Nueva. En exe auevo orden politico, ls clases medias que habian. surgido durante las itimas dos décades se convertirfan en los principales actores politicos de la nacién y del desarollo econémico. La vieja oigarquéa ya no serial responsible de conducr al pals hala I modemidad. Ea ese sentido, analiza cl zoncept de Pavia Nueva equlere cau, pues a pesar de algunas ideas generals, como el rl de las cases medias, Lega no llegé zetable- cer una dara noc sobre lo que impliaba la erenovacéns del pals. Asimisno, alo saber cudles eran los objetivos, resulta difcl etablecer sus resultados ys ess fueron ‘exitoso. Sin embargo, guldndonos por la generalidad del discurso, es debarble si tas dases medias legaron a tener la impoftanca que Leguia decia buscar pera extas. ‘Sibien gran parte de ete secto apoy6 al presidente, ou considerable porcntaje se dlesencantdrépidamente de la dicadure, ¢ incluso llepara a apoyar ideologatradi- ‘ales deinquierda que tenian poco o aadx en comin con lo que representaba Legufa ike, 1969, 218). Asimismo, el presidente también agus que ls nuevas «masas proleutias yas verdaderas masasindigenastenfan tin papel que jugar en esta Paria Nueva, aunque ‘ete sera secundaro respecto al de las clases meds. Sin embargo, resulé que al final 14 objetivo era propones alguns reforms «favor de exos sectores para debiltar sus ‘eadeacissrevolucionatiss, peo en ningtin momento considerabs incorporislos ala vida politica nacional Inclaso fue impesiblealcanzarescas limieadas mers, pues 2 pesur de expedirincontablesleyes que buscaban mejorar las condiciones de vida de los obresos los indigenas, eas no fueron implemenadas,y cuando lleaton aseco, fran sibieamente eliminadas, en la medida que Legufs se percataba de que impli aban cambios importantes en ls eseructuras polis y social. Al final l supuesro precio del presidente por el obrero oa indio erminé sendo una herramieara pol tia dl mds que un objetivo sincero. . or tod esas rzones, el Oncenio de Legula set evaluado de manera difreate oro hisvotiadores empero hay un consenso en cuanto a certs punts claves, El pri- sero de ellos es que aunque la oligarqua perdié una considerable pare de st poder polico, mantavo su supremacta ecoaémica, lo que le permixrfa volver a dominar ‘2 poltica nacional una vez que el gobiemo se debilitara. Luego, la legada de Leguia al poder permit la entrada de capitales extanjros, paricularmente extadauniden- ss, en vokimenes nunca anes vistas en la historia nacional. Pr timo, el Oncenio % ‘Panna sure E: Emapo ouciaquico destruyé el antiguo sistema de partidos (ses que exe fecivamente exisi6) dela Rep blica Aritocrtice, oa Lo cual se instal6 tn régimen dicarorial en el cal los pocos vances democriticos que se habian logrado en el pas se vieron vulnerados. Parte de su desaparicién se debe alos props actos de Legus, pero tambia debe considerse que el propio siscema siempre esewvo plagado de debildades y que ya se encontraba en proceso de desaparicién durante los ilkimos aos de la Replica Arsrocritica. 2.1. Las ELECCIONES DE 1919 Para entender el triunfo electoral y el gobiemo de Leguia es necesario entender su ‘vida, pues a pear de repreentar supuestarente el cambio, habia pereenecido por sauchos afos al orden politico que decfa querer dest. Nacido en Lambayeque en 1863, en una frail de clase media, el joven Leguia no permanecié mucho tempo cen su derma nana, ya los treceafos fu enviado aun colegio betinico en Valparatso, CCl, Su paso por esa arquetipcainsteucon burguesa clertamenteinflenci6 su visién de que el Pert necesitarla una mayor dependencia det capital exranjero si deseaba alcanzar un verdadero desarollo capitals vsi6n que sera reforaada una ‘vez que Leguia empecara a trabajar para vars compailas britiniasj eadouniden- ses, Debido a este éxito, ¥ a pesar de sus origenes no oliglequicos, loge acceder 2 Jas altas eferas de a sociedad limefn. Sus hijo al contraer matrimonio con mujeres de eclecas familias de dicha ciudad, logron expasdir su influencia. Debido a 1 ‘ascenso social, muchos extanjeros lo consideraban como el verdadero scapicilia [peruanoo, quied favés de sus esfurzos yhabilidades habla conseguido la trans- formacién de pequefo burgués a Presidente de la Repiblics. Si dicha menralidad pudiese permear a la sociedad peruana, argumentaban, el Pert dejaria aris el sub- desarrollo. Otros fueron menes generosoé al deserbir Legul, pero pocos podian iscutir su Ecco (Pike, 1967, pp. 195-196) Bajo tales circunstancias, una currea politica era pricticamente inevitable. As, Jogré ingresar a aquel basién de la oligaquia que era el Partido Civil, con el cual ‘gan la presidencia ex 1908. Dentro de la isa de ls presidente de la Repablica Aistocrtica probe ser eitoso, aunque poco orginal en materia econémica; por elo, -esoleard dificil distinguilo de sus predecesores. Sin embargo, en tEomines politicos ddemosué tna clara tendenciaauioritaria y sus cuatro afios de gobiemo fueron los ‘menos libres de I RepGblica Arstoritica (Panas, 19948, p. 106). Muchos, enzo del partido, consderaban que dicho pisotco de las libereades civles, cuyo respeto era supuestamente el ethos del vlismo, era inacepable, lo que lev6 al fagmentacisa dal parido. A culminar su gobiemo, la mayorsa de los civlsas tenfan un sincero espreco hacia Legufa, a Laroctnes mem Pond pet 2010 _Dichaarlmadversiéa también fue comparcida por sus oposicores pollens fuera del partidos en conseouencs, atando Guillermo Bilinghurstgané Ia presidenca en 1913, Lagoa fe eliado, Pero su ausencia del escena politics nacional, al igeal que sus enemisades polities, especialmente con su antiguo partido, terminaroa sendo faccoes posvos para su carrera. Cuando regresé al pas en 1919 y lanz6 su candi aru al presidencia, podia presentare a si mismo como el candidaro del cambio, en tanto sus lazos con fa oligarqua habian sido corados. Para Legua, la RepGblia -Aristocritica ya se encontrabe morbunda y las nuevas clases medias ahora admire bana los empresarios yno a los oligares. hasten 3, Augusto B. Lagu, Presidente dela Reptblic (1908-1912) y (1919-1930) epg pi prea es Cr, ce 196,15 p10. a Paneens nu Be Ermsd oxreingnes Por tanto, su plaraforma politica conssté en atcar exclusivamente ala eoigar- ‘quia cvilisas y proponer une nueva repGblica mis inclusiva, llamada Patria Nucos. Esa esuatega politica le permicié obtener ua amplio apoyo de diversos secrores: rane: los exdicos alos dest ausenca, muchos perumdé aparntemente st Iban olvidado de sus fla slevameate recordar los vredes Los conser- vadoresescordaban del mano dura co la ex manure el onen. bers scondaban de sus politics econdenins progresivas, Las Fuenas Armada apreciar ‘hn su actnd iflerble ance Caley us amplis preupuesos de defense. Los crudiane se balan demoscado en contra de Legua en 1911, peo una aucra sgeneraiéa en San Marcos crela que epoyaia a reform universitia(.} Legula le recorlba al obrero quela Ley de Compensaci Laboal ..] babi sid pro- sulgads bajo nu manda, Su dicho

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