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  • Cuya 1992 Boletin Lima - Carica Candicans Revalorar

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    CARICA CANDICANS (MITO): UNA PAPAYA DE ZONAS ARIDAS QUE URGE REVALORAR Oscar Cuya Matos* INHALTSANGABE Der Autor stellt ans Carica Candicans botanisch, dkologisch, slvikulturel! und wirtschafilich vor mit der Absicbt diesem einbetmischen Fruchtbawm wirtschafiliches Interesse zu verschaffen. Thr masstver Anbau whirde die Bevilkerung mit Vitamin C, Pektin und PRlanzentl versorgen und enorme dkologische und vor allere auch winschafiliche Vorteile bewirken. SUMMARY This note covers the botanical, ecologial, sitvicultural and economic aspects of the Carica candicans Gray Mita’, with the aim of showing the advantages of developing this native fais in agrotndustry. highly nutritions, especially rich in Vitamin C, and its seeds can be used for edible oil t Bas economie advantages for cultivation ‘ver other fruits, and could belp local farmers working on a small scale to develop agrotndustry SUMARIO. Se presenta, en esta nota, informacion sobre los aspectos botincos,ecolégicos, silvculturaes y econdmicos de Carica candicans Gray “Mito”, con el animo de divulgar las posibilidades econémicas de esta especie frutal forestal nativa. Se conclaye que, dado que fos frtos de eta especie tienen un contenido nutricio importante, sobre todo de vitamine "C". y que ademts puede obtenerse pectina, y de sus semillas aceite para consumo buamano, conviene sea fomentado su consunvo y agroindustria. Su cultivo 0 maneyo agroforesal, tendria ventajas econom «as frente a otros frutos no silvestres que se cultivan en su drea de distrbucion, teniendo en cuenta su adaptacion a babitats xéricos. El fomento de su consumo o agroindustria, y su consiguiente dercanda, permitiria obtener ingresos adicionales al poblador lugarefo, revalorando, por otra part, este fruta festa INTRODUCCION ¢Quign no ha probado en algiin momento un agradable jugo de “papaya” o desconoce que ella ¢s un fruto tropical ampliamente cultivado en nuestra selva y, con riego, en la costa? Mas, équign conoce'la papaya de zonas éridas: Carica candicans, “mito”, patiente cercano de la “pa- aya” Carica papaya? (Fig. 1). En realidad, pocos citadinos saben que el “mi 0” tiene frutos tan agradables como los de la “papaya”, que pueden adquirirse en. mercados costefios. Atin mis, desconocen que esta planta «3 importante en la economia del campesino gue crece natural en las lomas y sitios éridos de la vertiente occidental andina, en condiciones don- de ain la misma “tuna” Opuntia ficus indica ten- dria problemas para desarrollar; ni hablar de los frutos tradicionales, “manzanos” y “duraznos”, que en esa regién se cultivan, por supuesto, con riego. BOLETIN DE LIMA. N° 82, pp. 75-80 Lima, julio 1992, Dada su adaptacién a sitios dridos, y muy bien, por su atractiva forma, que recuerda una higuera, podria adornar los jardines y parques de nuestros pueblos jévenes donde la escasez de agua es un problema; e incluso, podria cultivarse cn los huertos cascros de la ciudad. Aquf cabe una observacién a los proyectos de arbotizacién cn la ciudad capital. 2Por qué no considerar este frutal forestal en los programas de arborizacién de la ciudad, por ejemplo, el del Cerro San Cris- t6bal si, para muestra, a una corta distancia, en el Cerro San Gerénimo, en las lomas de Flor de Amancacs, se encuentra todavia 12 tltimos “mi tos” sobrevivientes? EI autor revisa la literatura sobre el “mito”, complementindola con informacién de campo producto de sus trabajos de evaluacién de recur- *Ingeniero forestal, especalsta de la direccién de Foresales, ‘ONERN, 75 s0s forestales en las cuencas de los rios Pativilea, Huaura y Cafiete, dentro de estudios ONERN. Asimismo, con informacién de campo, producto de haber trabajado en reforestacion, en la cuenca del rio Rimac, como especialista del Ministerio de Agricultura, Se presenta esta descripcién del “mito”, con el animo de contribuir a la difusion de su consumo y agroindustria, los cuales genera- rian demanda en beneficio de ia economfa de los campesinos de la regién. Generalidades sobre el mito El “mito”, Carica candicans Gray, es una espe- ie de valor econémico indudable; presentando gran potencialidad para su agrosilvicultura en rras aparentemente sin capacidad de uso econ mico. Clasificacién botanica De acuerdo al arreglo taxondmico de Engler, el “mito” puede clasificarse como sigue Carica candicans Gray, US. Expl. Exp. Bot. 640. 1954; 177. Familia |: Caticaccae Orden: Parietales Subclase : Archyclamidae Dicotiledoneae Angiospermae Division; Fanerogamae Ha sido denominado también como Carica in- tegrifolia Raimondi, Elem. Bot. 2:230 (Lima), 1857; Vasconcellea’ candicans A. DC., Prodr. 15(1):417, 1854; Papaya candicans Kuntze, Rev. Gen, 1:253, 1891; segiin refieren Badillo (1967) y Mac Bride (s.f). El género Carica comprende 22 especies (Ba- dillo, 1967). Bn el Peri se presentan C. acuta O. Heill, C. augusti Harms, C. erythrocarpa Lindeu y André, C. heterophylla Poepp. y Endl., C. mo- noica Desf., C. microcarpa Jacq., C. pubecens (A. DC.) Solms-Laubach y C. papaya L., segdin Sou. kup (1987). Fy ccnocilenon digctior monies uaniee los. En el centro, como “mito”; en Parinacochas, como “jerju”; en Carumas, como “uliucana”™ (Weberbauer, 1945). Soukup (1987) reporta ade- mAs los nombres ““quemish” y “ckemish”. Cor- dova ef al, (1980) anota el nombre “machuque”, dado en la zona de Frias, Piura Caracteristicas morfolégicas Es un arbusto pluvifolio, dioico, de tallo grue- so, liso y bastante ramificado (Weberbaucr, 1945; Cérdova et ai, 1980). Debe anorarse que como toda caticécea, no forma leno secundario: mas bien, desarrolla un liber secundario que llega 76 Fig. 1. Area de distribucién de Caviea eandicans. 2 formar una banda anular alrededor de la médu- la, segain indica Badillo (1967). En cuanto a su altura, Weberbauer (1945) anota portes de 3 m de’ ako. Cérdova ef al. (1980), mencionan que puede alcanzar alturas entre 6 y 8 m. Habitats diferentes explican tales, variaciones en su altura Sus hojas son palmado-pentalobuladas, verde oscuras, de envés blanguecino y pubescente, co. ridceas y de peciolo robusto (Mac Bride sf). Sus flores son unisexuales, amarillo blanqueci nas o verduzcas. Las flores masculinas se agrupan, en inflorescencias racemosas. Las flores femeni nas se presentan solitarias. (Mac Bride sf) Sus frutos son de tipo baya, arométicos, ama- rillo verdosos, ovalados (cortos 0 alargados) con cinco protuberancias longitudinales, de tamano que van entre 12 y 15 cm de largo por 6 a7 cm de ancho y pesos de hasta 300 g (Mac Bride sf, Cal- derén, 1988; Cordova et al. 1980). Sus semillas son numerosas, ovoides, con lon- gitudes de 8 mm, cubiertas por una masa viscosa (sarcotesta); con testa o esclerotesta de color ma- r6n y protuberancias poco elevadas; (Mac Bride sf; Badillo, 1967; Calderén, 1988). Distribucién geografica Vatgas (1983) y Badillo (1967) lo reportan co- mo nativo del Peri, Ferreyra (1986) anota que se distribuye en las vertientes occidentales andinas peruanas, incluyendo las lomas Weberbauer (1945) precisa su distribucién re- poando su presencia en las vertientes accidenta- les peruanas entre el Rio Safa (7°S) y el valle de Carumas (17°S). El limite oriental de su distribu- cidn se encontrarfa alrededor de los 3,000 m de altitud en el flanco occidental central y surefio; enel nortefio, entre los 2,000 y 2,600 m. Su limite altitudinal inferior andino podria marcarse a los 1,700 m de altitud, segiin se desprende de la in- formacién que este autor presenta En las lomas, ocupa las partes mas elevadas, eneralmente sobre los 300 m de altitud (Weber- yauer, 1945). Cordova ef al. 1980 anotan su presencia en Frias, Piura. Con este dato, podria extenderse la informaciéa sobre su distribucién hasta los 3%, un poco més al Norte que los reportes de Weber. bauer (1945), Generalizando, podria decirse que el area de su distribucién en el flanco occidental andino, se corresponderia, aproximadamente con el nivel inferior de la ecorresién de la serrania esteparia de Brack (1986) (Fig. 2). Caracteristicas del habitat Esta especie ocupa dos ateas de distribucién bien diferenciadas; una costefia (lomas) y otra an- dina o de serrania esteparia (Ecorresin segdn Brack, 1986), separadas ambas por una franja de- sértica. En la ecorresién de la serranfa esteparia se le encuentra, principalmente, en el biotopo de la estepa de Carica candicans, Jatropha, Espastoa y Pitcairnia (Kocpcke, 1954, citado por Brack, 1986). Esto es entre los 1,400-1,600 a 2,400-2,600 m de altitud, siendo tipiea en las vertientes oc dentales centrales, la comunidad de “Mito” Cari- ca candicans y “Huanarpo” Jatropha macranta con la “Perdiz Serrana” Nothopracta pentlandii y la “Cascabelita” Metriopelta ceciliae. En la porcién nortena de las vertientes occi dentales las condiciones son més himedas, por tanto, Carica candicans es parte de comunidades més complejas. Se le encuentre entre los 600 y 1,200 m de altitud asociada con el “Yacuguero”, “Pian”, (la fuente no presenta sus nombres cientificos), “Tartago” Ricinus communis, “Chi- rimoyo” Annona cherimolia “Arrayan” Eugenia sp, “Siguiche” Lantana camara, “Yerba Santa” Cestrum hediondinum, “Marcacash” Flotavia sp, entre otras; (Cordova et al,, 1980). En el area de su distribucién, el clima es de estepa (BSw). Usando la informacién de ONERN (1976), puede inferirse, aunque con mucha generalidad, que en la regidn andina, sus habitats se caracterizan por tener precipitaciones pluviales annales que van de los 200 2 550 mm, con petiodos secos de nueve meses y temperatu: ras medias anuales en un rango entre 12 y 18°C. Asimismo, puede deducirse, también con mucha generalidad, que se desarrolla sobre suelos franco arenosos y superficiales. Hay que anotar que segtin la distribucién an- dina sefialada para esta especie, podria decirse que ¢s tipica del matorral desértico, Premontano y Montano Bajo, estepa espinosa Montano Bajo, monte espnoso y bose seco, Premontano (20: nas de vida de Holdridge). Como adaptacion al medio xeréfico donde se desarrolla se presenta deciduo en la época seca; ademds, su tallo tiene caracteristcas subfrutecen- tes (Weberbauer, 1943) Su fenologia varia de acuerdo a sise desarvolla en lomas o en el flanco andino (Weberbauer, 1945; Torres, 1982). En las lomas, la floracion

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