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Pe diet one FOTOcoPADOR, = a HISTORIA NACIONAL TT Prof. ANN FREGA ELPA ACERCA DE LAS CONSECWENCIAS DE LAG INVASLONES INGLEGAS’ 1. Léentificar los aatices que presentan estas interpretactones 2 las consecuencias de 1as invasiones inglesa Gh lo posible, seialar adends Is arguaentacidn utilicads en cada caso, 2, Escager un titulo para cad: sno de los textes, 3, Guteaer conclusiones, tanta en lo que respecta al aétoda de trabajo cono al tesa en cuestién. "La simiente dejada por el conguistador inglés comenzaba a dar sus mas éptimos frutos. Como si no hubiesen side pocos los motivos de divergencia entre las dos ciudades del Rio de la Plata, se echaba ahora a la hoguera de las pasiones y rivalidades 1 problema econdmico del monopolic y del librecambio. El pretendide impuesto de efreulo a las mercaderias inglesas de Montevideo, intentado aplicar atin cuando la separacién politica de las dos capitales, era ya. definitiva, sefalaricé C...) los términos de la controversia en la cual se encontraria otra vdz, como tantas anteriormente, el interés de los comerciantes de Hohtevideo frente al interes de los comerciantes da Buenos Aires. C...3 Montevideo, por interés propio, tomé para si 1a bandera dal librecambio y del comercio libre. A su amparo habia dada fuerte impulsa a sus operaciones mercantiles, rehaciéndass do las considerables pérdidas ecandmicas reconguista de Euenos Aires y de la ocupacién ex ufridas en los gastos de la ranjera.l...J El gran comercio de Buenos Aires, adopté ‘para si 1a bandera del restriccionisma y del monopolio. Esa era la herencis directa espafola, y si es de notar que en la orientacién econdmica encontré tenaces opositeres, la verdad fue que la reaccidn en favor del librecambio recién se experimenté cuando toda la argumentacién y les resultades prdcticos habianse ezpuestos par Montevideo. 1 comercio de la capitaY virreinal debio ser forzosamente monopolista. No sélo alimentarfa esa tendengia su epesicion irreductible al progreso de Montevideo, sina que el comercie libre, ademés de romper una tradicion inveterada y secular, conspiraba contra la voluntad reiterada da convertir 4 Euenas Aires’ en puerto Gnico de entrada y salida en el Rio de la Plata y de sus territorios adyacentes. Gn rigor, el conflicto de ideas econdmicas antagénicas entre Montavideo y Iuenos Aires, se plantearia en seguida, siendo los comerciantes de una y otra ciudad los opasitores y defensores de los des criteries." {Toeado ée Fable DOCENTE, EREGA Ana MAT Histena Necconel® 2 “Guta disputa entre el Consulado, 1a Real Hacinnda de Uuenos Aires y los comarciantes da Montevideo, no impidié que los géneros cuya intreduccién se cuestionaba. salieran de Montevidea en forma clandestina sin payar derechos, por cuanto entre los adquirentes de las mercancias britdnicas Jiquidadas por los invasores al abandonar la ciudad, se hallaban también comerciantes de la capital interesados en’ extraer tales efectos. aah El Dr. Bruno Méndez, redactor de uno de los escritos de apelacién formulados por los\ comerciantes contra la medida restrictiva,’ refiriéndose a los alcances de la misma expresé en abril de 1909, “que no.sclo tse] interesaba este comercio en ia representacion que se expresas ce] dela Capital lo era mucha mas, @ instaba p.r medio delos Ayentes que tenia en esta, que en prueba de esto mismo efrecieron contribuir Jo que Jes cupiese en parte de gastos. £= atro punto tambien gigno de no perderse de vista que atento el interes que hacia el abjeto y fin de la representacion, debe calcularse aquel en Jo que importaba la expedicion mercentil Ynglesa que toda fue vendida en esta Plaza a Comerciantes de ella y dela de Bes a.s y se abogaba a favor de su introduccion A las Provincias interiores, que a Jjuicio prudente de los que tienen mexores conocin.tos practicog en el com.o asendian desde luego las Haciendas desemharcadas y “vandidas 4 max de siete millones contando p.r encima." [Archivo de Eseribanta de Gobierno Hacienda. CExposicién custodiada en el -Legajo..de. Expedientes correspondiente al aia 1606.1 Esta referencia ca una idea aproximada de lo que *epresentaron las transacciones reclizadas en la plaza de Montevideo durante 1a ocupacién britdn:ca. Las medidas. restrictivas, no habfan. sida inspiradas tanto par los comerciantes-de la‘capital contra los de Montevideo, como si ha creido, desde que ellos Vinieron tambien a esta ciudad a hacer sus negocios, como por las autoridades de la Peal Hacienda, . interesadas en aprovechar la oportunidad para arbitrar recursos mediante nuevos impuestds. Los comerciantes que habian’ side generosos donantes creian,.a su vez, que con tales medidas se les disputaba el derecho’ legitimo de resarcir sus pérdidas materials. Resulté de todo esto que se exacerbara la resistencia contre un régimen impositivo mediante el cual parecia quererse contrabalancear las ventajas mercantiles del puerto de Nontevideo,y que se generalizara, a la vez, la oposicion contra el sistema de las contribuciones y donativos a que se venia apelando con reiterada frecuencia para subvenir las urgencias del gobierno." | t (Tonado de duan E. PIVEL DEVOTD, Raices colonisles de 1a Revolecibn Oriental de 1811. La versién que utilizasos es frdlago escrito par Pivel en COMSION KACIONNL ARCHIVO ARTIGAS, Archive Artigas, Montevideo, 1932, Toao I, pp» UL} 3 "Los efectos mis imaortantes en materia ecendmica de las invasiones inglesas se percibieron en el Plata luego de la ocupacidn britdnica da Montevideo. taller del mundo volcaba mercancias cuyo monte habria alcanzado a 1.209.600 libras esterlinas a través de dos millares de comerciantes.C..:3 El comercie de Montevideo y si campata no: podia absorber las mercancias entradas, lo que daterminé que fueran reexpedidas @ las dends regiones del’ Virteinato. Los -funcionarios espafoles y los comerciantes monopeistas -bonaerenses -pese a haber adquirido en muchos casos los productos ingleses- reclamaron drdsticas medidas para impedirlo C.. E1 conjunto’ de los comerciantes, montevideanos se habia unido para usufructuar una situacién de privilegio, y enfrento al grueso del gran*comercio monopolista importlador bonagrense, cuya voz cantante lievé Martin de Alzaga. Las invasiones inglésas significaron ‘un nuevo nite en la crisis gel sistema monopolista, y aunque el conjunto de la poblacién Feacciond activamente contra la conquista britanica —pese ecusaciones de colaboracionismo contra cabildantes y grandes persénajes- e@l sistema edondmico en que reposaba el coloniajc habia sufrido un real descalabro. tos hacendades que colecaron sus. cueras y 1a poblacién que usufructué manufactiras ims “baratas «no -podian dejar de ser sensibles a lo ataecidds'Los comerciantes' montevideanos, que erovecharen el trafico con los :ingleses: cuanda..les. fue posible, hablan visto, “sin iembargos al wextranjero -sustituyéndalo —no’ 8010 los importadores “y vexportadores, «sino los.mayaristas y adn los minoristas-; los propietarios de barcos, su flota paralizada y en gran parte confiscada. Si tomamos coma indice ¢1 comercic com La Habana, veremos queen 1807 mo llegs-carga alguna de tasaja en barco nacional, y aun hubo una sensible disminucién eh la importada bajo bandera extranjera. Al mismo tiempo, las invasiones inglesas habian acentuado la puja entre el comercio de ambes margenes del Plata.C...J ta retirada de los ingleses -cuyo regraso se temiéd fundadamente hasta bien entrado el. ake 1808, en que terming 1a querra entre Espaha e Inglaterra- no resolvid los problemas del comercio, que se vio nuevamente privado del contacto regular can el marcede exterior. En los meses. que van entre la liberacién de Montevideo y el fin del afo 1607, sélo éntraron en Montevideo dieciséis buques’ Ringune desde la peninsula." CToaddo de Lucia SALA; Nelson DE LA TORRE; Julie RODRLGUED, va Etictones Pueblos Unidos, 1967, 99. 185-188.) cin econbnica de 1s Sanda Oriental. tonterideo, csabid, 20. AOtMfacdiscutireg Bante weet taRer Teaco P Yan ica Aires? Wy ciertamente muy serio’ Smee? S84146ria social “de ‘Baen, Sites. Mabria que colecar es Fe feteal Uoaeeec, 2a haraWepeee ett Goccig mit Shocientes oficicior isherinenrrigopWargetnge a. mi Goscientos, entre oficiales Re col Unaeete ee oe que ¢ Ge Tae oe ptt, aaministracien panies Son la, fuente cee 28 ocuPaciones tenidas nem honorables, ia ieee mers da cargos “rentalos Yabia significa, pire dace VEN Ey poet | gage Sdvertirse ‘bien prongs Senge HEAT © sERoe! oneame ge Ea ia eues Functonaries etyeioe sirectare: Stalesaaua fetenog fogavia mas importante era girecto, al acrecer @l costo local de aS en Buenos Aires una most monetaria Sara tk metrépoli ee que vineeet, Sttivalente a1 20x" act va ortaciones, pe ae ec ieer ttse cress tel expedite por Atlantico). Una cepontribucion entre metroners yerplonia, y dentro de is misma propa comenzaba ‘asi, pare aoe Acentuada luege por 1a revolucién. cane Fe03 la creacisn de un crerpo de 9.000 hombres Shaaos so. ..7 et reclutamienta de 1.200 oF ici, ld cilidad que a0 tiene 50, On un 30% de en sYOSs Puede no introduti’ equilibria de poder hecho — nada sorprendente= que quienes Nueva fuerza hayan gstado menos marginados fe-20: queauele.-ponerse oy la estructura ae poder y prestigio antarice A808... " for el contraction ae “presencia” mento, en. @] serene mismo en que lade te tenue por 2} fdecisivas; en esas vez M45 el poder locales por su Boe Sumedastar ca improvisadas fuerzas militaressse casientan cing Tectubo ena "al vipredigece. [Fs8s_ fuerzas son reclutamienta “y, financiacich —y, americanas... , cruel Es la segunda invasign inalera la que inspira a tos Fapitulares 1a BEnsuaBién’ de Gus | a, oneal netzeendente ya eS encontrar g Oposicién. C.,.7 Ee fundamentalmente is Calan ae ale cahiternia ys pent neace di pring vatar out Marks rico comerciante qnsereetae Cuyas “ambiciores tirict®? ™S vastas ‘que Jas de la institueién con a que eq identitica {orate de Tulio nreets wycu, Revolucién y guerra, Frases te un Elite sirigete 1s begentng 24 ed, Buenos Aires, Sigin AM 1979) pe d=t44) sl cristta “Cuands Castlereagh astimid sus funciones de Secretario de Estado en la cartera de Guerra uno de sus primeros actos fue preparar un “Memorandum para el gabinete, referente a. América del Sur fechado el 12 de:mayo de 1807. Ce. Después de corsiderar desde todos ‘los puntos: de vista la totatidad de la Cuestidn. Castlereagh goncluia ‘bien claramente que *¢7 por cierto, alimertaba 1s muy fllerte conviccién de que la politica Segin la cual estamos ahora obrands producira.muy paces beneficios comercisles ¢ politicos ¥ ha de consideratise. comovun gran’ desgaste para nuestros wedios militares.* Ct. Al estudiar los acontecimientos del fio de la Plata hasta el momenta en que Whitelocke partié para asumir 1 manda, Castlereagh" Tlegd a la conclusién de que las razones de las dificultades que encontraban los britanicos eran politicas, neo militares. La causa real de tales dificultades consistia en el hecho de que los Comandantes britdanicos y posteriormente el gobierno britanico no proclamaron la independencia del Virreinato. Este hecho represents lina oportunidad para el gobierno espafal. ‘Les principales Ffuncionarios del gobierno espaiol... encontraran a la pablacién de Fuenos Aires, decepcionada de esta manera en sus esperanzas, pronta a cooperar en nuestra expulsién... NO es en moda alguno sorprendente que Ja pablacién de todas Jas clases considerara con grandes recelos Jas circunstancias en que nes presentamos...* Caer "> Al considerar en ‘forma exclusiva las circunstancias comerciales, Castlereagh pensé que ‘hasta podria cudarse de si las silenciosa @ imperceptibles operaciones del intercambio comercial ilicito que mantenemos cen aguella porcién del mundo durante Ja guerre, no serian mas operantes y beneficiosas cuando Ias abordamos sbla como comerciantes que cuando jas abordamos como’ enemigos, 10 cual presta al gobierna Igcal nuevas energias que con seguridad le permitan hacer cumplir mejor las disposiciones prohibitivas contra nuestro comercio.* C...3 Castlereagh ne era partidario de la incitacién deliberada a las Feveluciones, pues “al empefarnos en-promover la felicidad de los pueblos y coubinarla con la extensién de muestra comercia, a1 destruir un mal gobierna, pedriamos dejatlos sin gobierno alguno,* Cl...) Al considerar cualquier esquema destinade a Iiberar a América del Sur, sostenia Castlereagh, ‘parece indispensable que no nos presentemes a ninguna otra Juz qua no sea aquélla que nos muestre como suxiliadores y protectores.” E1 memorandum de Castlereagh de mayo de 1807 canstituye la base original de la politica britdnica en América del Sur durante un siglo y medio." UTonsdo de He S. FERIS, Gran Bretaia y Argeatinajen el siglo 111, 42 reinpr. 9p. 56-89.) jenas fires, Ediciones Sobsr, 1981, Arturo BENTANCUR, El puerto colonial de Montevideo. Los aitos de la crisis (1807-1 Montevideo, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educacion, 1999, pp.15-16 y 55- gistrada entre febrero y ica, temida y esperada a lo largo de tres o cuatro décadas. Esa breve pero relevante teracién dej6 secuelas favorables y fevers en el cuerpo econémicd montevideano, donde ya nada iba a perneecce igual El-acontecimiento reflejé la importancia creciente que Ia politica Pat, mencionada cada vez con mayor asiduidad en sus proyectos militares y cone rcults fl Fara el comercio montevideano, y también para el portefo, represent la ultima oportunidad de pbtenerrépidas ganancias, aunque tambien cred dificltades y e experimentar pérdidas parciales Practicamente con los invasores habian ingresado 66 barcos ‘mercantes ingleses, cuyo niimero se veria pronto aumentado, Casi al mismo tiempo que la plaza caia en poder de los britanicos, el gobierno de Londres habia ordenado que los buques de su bandera en viaje hacia el Rio de la Plata udieran entrar en cualquier puerto bajo dominio francés o espaol. [.] ‘ideana, Con el ya irreversible Predominio econdmico de Gran Bretafia se estrecharon sensiblemente las Posibilidades de los mercaderes locales, que Gcbieron adherir casi sin excepeién al imitanterégimen de consignacienes i) En efecto, los mercaderes rioplatenses pasaron a vivir casi enteramente de le consignacién, que nubarrones politicos, especialmente para los mercaderes ‘montevideanos, ‘pronto impedidos de esempetar ni afin aquella mediada funcién que reservarian pars wi cae colegas de Buenos Aires luna vez decidido el pleito local en su favor. Su posterior reglamentacién canalizé parcialmente un nuevo rebrote de xenofobia vinculada con ese ¥y otros servicios mercantiles. [...] La pérdide de protagonismo de los comerciantes locales ante el avance de sus colegas fordneos se transformé por tanto en un:hechd cotidiano, al que aquellos procuraron responder al menos por dos vias: el-usufructo exclusivo de. su:reducida cuota de. participacién.en:la actividad’y el rechazo violento de sus competidores his molestos. Ambas.estrategias se: verian mediatizadas por la realidad que impondria sus propias reglas, sobre todo por:la.incidencia del-poder econdmico de los, recién llegados y por los acontecimientos politicos que sobrevendrian a partir de mayo de 1810."

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