«Las humanidades digital a
son un efecto de Internet.»
ia parecer que todos los humanistas digitales
estin interesados en proyectos alternativos,
no tradicionales, pero no es el caso»
Patrik Svensson, «The Landscape of Digital Humanities»,
Digital Humanities Quarterly, 4(1),2010
De hecho, el Aumanities computing aparece, antes que la Web, gra~
cias al establecimiento de un estandar para la codificacién de tex-
tos: el Text Encoding Initiative (TEI)..os numerosos investigado-
res que codifican los elementos que se deben distinguir en un texto
(fecha, nombre del lugar y persona, eteétera) tenian cada uno su
pia manera de hacer las cosas. Construyeron una torre de Babel
y se obsesionaron con recodificar sus textos de acuerdo al software
utilizado, En 1986, se repens6 el lenguaje de descripcién del do-
cumento de IBM para dar paso al SGML (Standard Generalized
Markup Language), que distingue la estructura légica de un docu-
men
de su edicién en una pagina. Al ser vilido para todo tipo de
textos y sus metadatos, un grupo de investigadores consigui
nde délares para definir los patrones (por ejemplo, la secuen-
cia en un didlogo, la identificacién de hablantes) de los textos estu-
diados por las ciencias humanas (incluyendo rastros de letras 0 pa-HuMANTDADES OIGITALES
abras suprimidas que Po any ae 5 ‘s
y establecer un estindar para s acion
se convirtio en el estindar para la constituci6n de nuevos corp
bases de datos para In edici6n critica de textos por parte de iti
tecaros yarchivistas. También seré el punto de paride dent
flexién que condujo al desarollo de una teoria de mateas(m
shear). En realidad el humanities computing se consti oo
nueva disciplina, conectada slo parcialmente con alingisicso
putacional (computational linguistics) en la medida en que
vvestigadores necesitan herramientas desarrolladas porésta (bus:
datos y el anilisis morfoldgico, sintctico y lexical).
El siguiente giro resulta a su vez del desarrollo de Inter
(1983),los protocolos de intercambio de archivos de datos jst
todo, la Web (puesta en relacién de documentos eon enlace dl
pertexto HTML - Hypertext Markup Language),y dels aver
res para moverse entre las piginas-pantallas via los enlaces hipee
dia (texto, grificos, imégenes, sonido, video), asf como forms
que hacen la Web interactiva (el usuario puede introducilade
tos). Se hace més ficil de usar y es ahora una de las heraniet:
basicas de cualquier investigador, que tiene atin menos nes
de poner sus manos en el cédigo. A finales de 1990, los joveas
vestigadores encuentran que el termino humanities computes
poco atractivo y hace pensar en los departamentos de informs
que dan soporte a las humanidades. Cuando se prepara unlit
referencia, los editores proponen hablar de humanidades dig!
zadas (digitized humanities), pero insistiendo en queno eu
ple digitalizacién, sino una codificacién de textos que impli
reflexién tedrica y plantea interesantes cuestiones cientifics”
jan la expresion digital bumanities (DH) (humanidades dig!
so
{QUE SONLAS HUMANIOADES DIGTALES?
popularizan el término con esta publicacién en 2004: 4 Companion
t0 Digital Humanities.
Sigue después una primera oleada de las humanidades digita~
les, que corresponde a la digitalizacién de los archivos, a codifica~
«ién de documentos y la comparacién de bases de datos con la Web.
Los grandes proyectos de digitalizacién, el establecimiento dela
infraestructura tecnolégica y a publicacién en linea se multiplican;
nnumerosas instituciones se lanzan y abren sus servicios a un piibli-
co més amplio, Surgen nuevos grupos de usuarios, mientras que los
investigadores producen y ponen a disposicin nuevos materiales y
anilisis, sin limitarse por las restricciones de la p
icacién impre~
sa, 0 de a escritura. Con los motores de biisqueda, como Google,
y el movimiento internacional para la codificacién TEI de docu-
‘mentos textuales que se pueden buscar en los textos y cosechar en
‘muchas bases de datos, se anuncia un cambio radical en el modo de
estudiar los textos. El nuevo nombre DH permite marcar la dife
rencia. A esto le sigue una ola de codificacién de textos, lo que abs
suchas posibilidades para su edicién y tratamiento; un verdadero
sitio DH debe entonces proporcionar un mayor acceso alas bases |
de datos digitales; debe ofrecer potentes herramientas de busqueda
personalizables para los investigadores que abordan cuestiones de
fondo sobre la forma de representar el conocimiento,
Nacen nuevos tipos de publicaciones, abiertas a la anotacién,
/ al comentario, el enriquecimiento y a la actualizacién por los visi-
/|tantes en Internet,
investigadores profesionales o el piblico en ge-
neral, El mundo editorial est cambiando,
Brotan nuevas ideas, algunos proyectos consiguen los recursos
necesarios para salir a Ja luz, pero muchos no van més allé de la
«demo» o prototipo, ya que estos recursos se gastan en el duro tra~HUMANEDADES OIGITALES
bajo de digitalizacién y el marcado del texto, No quedan ls
centes recursos para el disefio de una interfaz amigable; asa
Tidades de los disefiadores se utilizan poco en Tos proyect
Ver se realizan estudios de usabilidad, lo que se traduce en hers-
anientas que fracasan a la hora de atraer aun piblico mis ampli Ls
audiencia es limitada, los proyectos se detienen debido a su na-
ciacién, nadie mantiene los dominios web, los enlaces no fins
nan, la investigacién queda encapsulada en herramientas que nos:
difunden. Ademés, los proyectos se reducen a menudo auna pb
cacién en linea de los materiales y a la navegacién por palabras
ve; se proponen pocas herramientas de andlisis. A finales de 19%
Ia cosa se vuelve aburrida. A pesar de esto, el niimero de actoresi
voluicrados (especialmente los archivos y bibliotecas) aumenté
Surgen nuevas précticasa partir de las herramienta disenis
con base en esta perspectiva: anotacién colaborativa de textos, er
traccién de partes de documentos para establecer cronologias obit
torias (historia de las escritoras briténicas),larelacién de textoson
imagenes o peliculas.
9, Laproliferacién de los recursos digitales, su subida assis
Sus usos yrastros (incluyendo textuales) dejados por los usuatia
internet generan, de hecho, un nuevo objeto de investigasén
‘Web y sus comunidades de usuarios. Asi, se desarrolla una ms:
comunidad de investigaci6n que tiene el ciberespacio como oi
de estudio. Amplia de hecho el campo de la investigacin dll>
manities computing, pero conduce a una polarizacién inter ti
Jos que hacen y los que hablan. Incluso cuando se proponen debit
ciones inclusivas,
muchos observan a sus colegas y su produccit
Cientifica considerando que los que tienen razén son ellos,es
Jos que meten las manos en el cédigo. Stephen Ramsay,en su
se
{QUE SON LAS HUMANIDADES DIGITALES?
ha Who's In and Who's Outen 2011 dij
les se ocupan de hacer las cosa:
«Creo que las humanidades
También creo que la dis-
ciplina incluye y debe incluir a los que teorizan la realizacién, los
que disefian para que otros puedan lograr,y los que supervisan la
cjecucién. Incluso me atreveriaa incluir alas personas que trabajan
para reconstruir nuestros sistemas, irreparablemente destruidos,de
publicacién académica, Pero si usted no fabrica nada, no es un hu-
‘manista digital.» El denominador comiin de los DHfers seria el paso
dela lectura critica al hecho de crear y realizar.
Las humanidades digitales tienen menos de 20 afios, pero los
investigadores ya estin hablando de la segunda ola, de las humani-
dades digitales 2.0, que se centran en la creacién de entornos y he
ramientas de trabajo para la produccién, gestién y tratamiento de
Jos datos digitalmente nativos, como micromensajes, los tuits, las
consultas en los motores de btisqueda o los metadatos asociados con
las fotografias registradas en los sitios y compartidas.
Loshistoriadores que hacen dea distancia histérica una virtud
se han impuesto una «ley de 30 aftos» antes de abordar los archivos
yylas huellas de la historia. Pero para los historiadores del siglo xx,
30 afios es ya 1980, es decir, ordenadores personales, Internet y la
‘Web. Los archivos sobre los que tend que hacer frente ya son ba~
ses de datos, softevare,mnillones de corseos electrénicos, mensajes de
‘Twitter, minivideos y protocolos informticos, a pesar de que sus
| objetos de estudio sean la integracién europea, los movimientos so-
ciales, el comunalismo, etcétera. Se necesitarin nuevos métodos y
habilidades para hacer frente a estos nuevos tipos de materiales.
Por otra parte, la distribucién multimedia, en donde se mez-
clan textos, imagenes, sonidos y peliculas, nos invita a considerar
también la experiencia emocional que puede vivir el usuario. Mien-
sHUMANIDADES DIGITALES
eras que os enfoques anteriores reproducen ls formas deh:
“démicas centradas en él texto, la investigacion en bases de dats
procesamiento automitico de corpus yl andi cuaniatin ds
Tido-yla imagen permiten al usuario experimentarysetirl as
pleidad de ls situaciones y secuencia, la profindidad aml
‘contextos ylos tiempos, la interpretacin del sentido lactic
cualitativo prima sobre lo cuantitativo, la interacci6n con hs mass
| de datos sobre su tabulacién, Ia inmersion sobre lo analitico Last
manidades digitales se desvian del texto s6lo para dar mises
las visualizaciones, al disefio, a la puesta en escena y la expen
ny Ia experiencia temporal, al soy
Ia imagen. Se acercan a los artistas que manipulan y distrsins
cia espacial, la escenific:
Jos materiales (en este caso, las masas de datos) lo que les ems
conocer mejor y hacer las cosas con sentido.
Bien sea que se trate de textos, registros histéricos o stoic
Internet de nuestros contemporneos, la nueva ola se preocps
io de tecnologias e interfaces que permiten explorst
za de las interpretaciones posibles, vivir la experiencia iluminass
en lugar de aplicar un razonamiento sistematico y controls
informatica se vuelve especulativa, lo que permite poner apr
las interpretaciones, por ejemplo, por estar inmersos en recone
ciones tridimensionales de las viejas situaciones a descubrig it”
Iando en ellas como si estuviéramos allf: caminar por
un pueblo del
iglo xiv gracias a un street view hist
se de una epidemia al sumergirse en la situaci6n y el estado
conocimientos disponibles en el siglo xvn, revivir una obo
si estuviéramos en Pompeya, simular la evolucién de una oi
versia actual en un sujeto cargado de cuestiones y poblado po
chos actores con intereses divergentes.
sa
{QUE SON LAS HUMANIDADES OIGTALES?
as humanas y sociales
vuelven obsoletos los viejos métodos de la investigacién solitari:
que parte del texto y publica sus resultados en forma de texto, cen-
trada en un caso, un fragmento de archivo, una regién o un perio-
‘muy limitado. Ahora las tecnologias digitales permiten estudios
‘comparativos a gran escala y la movilizacién de muchos archivos,
asi como diferentes disciplinas. También pueden procesar y combi-
nar datos heterogéneos, textos (desde manuscritos antiguos hasta
tuits), mimeros (de los registros de tiempo hasta los /ogs en los sitios
web), imagenes (desde mapas hasta seifies). Se abren a una amplia
variedall de pricticas que estan lejos de ser estabilizadas, validadas
y conse})suadas. Las humanidades digitales a veces se asemejan al
arte digital o la investigacién en museologia. Se definen entonces
“en términos generales como el estudio de las culturas a través de las
posibilidades que ofrecen las tecnologias digitales.
Por todo esto, socidlogos, historiadores, antropologos y huma-
nistas debenaprender a usar el archivo digital y el big data, aprender
cémo codificar para desarrollar herramientas originales. En THAT-
Camp (The Humanities and Technology Camp), encuentros de hu-
rmanistas digitales que ellos Haman «no conferencias», que se defi-
nen informales y no jerarquicas, los participantes se autoorganizan
para definir los temas propuestos; a menudo hay un intercambio
deexperiencias en tomo a ciertas herramientas especificas. Algunos
autores consideran que el estudiante de CHS ahora debe ser capaz
de secuperar los datos desde la Web o base de datos, seleccionar y
gecutar algoritmos, elaborar tablas y visualizaciones interpretar-
Jas. La cuantificacién ha triunfado en casi todas las disciplinas de las
ciencias naturales; las CHS no deberian escapar. La profecia de Le
Roy Ladurie en la programacién quia se haga finalmente realidad.
ss4
«Las humanidades digitales
son también una cuestion
de las ciencias sociales.»
hhace mucho tiempo para la que no se encuentra una
respuesta coherente: nos encerté Intemet en nuestras
aimer-internet-256885
Las humanidades digitales abogan por la cooperacién interdiseipli-
naria entre las humanidades, las ciencias sociales y la informatica, asi
como por la invencién de metodologias hibridas. Esto se entiende
ain mis cuando se observa lo mintscula que es la frontera entre el
tra delosnvestigadoreseniteratura que exporan nuevas formas
(micromensajes tipo SMS y tuts, conversaciones en linea
tipo chat, cuadernos y discusiones en linea tipo biog, incluso eseritos
por dotses decir, robots que corrigen, traducen, sintetizan, retinen tex-
ay
Jos nuevos tipos de movimientos sociales, como la «primavera érabe>.
tos,eteétera)ylos sociélogos que estudian las comunidades en i
Estos nuevos fenémenos sociales y lingiiisticos implican la in-
vencién de nuevos enfoques y métodos para recopilar y analizar la
7HUMANIDADES DIGITALES
informaci6n, por: ‘ejemplo: el scraping 0: raspado, es decir, la extraccin
del contenido de sitios web o de metadatos através de wna seu
ia de comandos del ordenador; el erawling, I exploracion au
smitica de la Web para recoger Fecursos como paginas web in
genes, videos, documentos, eteétera, archivarlos y ponetlos
indice; la recuperacién de Logs, el historia de los acontesnie
tales como la consulta de paginas web, apertura de archivos oc
mandos por medio del teclado o Ia pantalla téctil, come finde
tudiar las pricticas de los usuarios, las interacciones humanos-nt
quinas o el rendimiento de un sistema informitico,
Los investigadores de literatura necesitan aventurarseen tar
nos que no sean libros, revistas, correspondencia y archivos; hsl
ciencias sociales deben imaginar otros enfoques distints aise
trevistas, cuestionarios y la observaci6n directa del camp.
El uso de la tecnologia de la informacién y de lo cuntiain
en las ciencias sociales, sin embargo, no es nuevo. En soci,
desde la fundacién de Ia disciplina en el siglo 2a, las encuss
realizan para producir datos cuantitativos de las variables ies:
racterizan a la poblacién (edad, sexo, estado civil, ocupasién iat
de residencia, etcétera) y el fenémeno estudiado, En su este
bre el suicidio, Durkheim también anota la residencia deo
dios, la época del afio, a hora del dia del momento del si
religién. Los datos presentados en forma de tabla en la quecilit
nea corresponde a una persona y cada columns a una castes
de esa persona se prestan ficilmente al procesamiento stilt
co. Con la aparicién de los primeros procesadores, los soit
‘cuantitativos los emplearon de manera casi natural. Enlai
sia computacional dela década de 1960, os datos se introdus®
tarjetas perforadas; se reformularon los programas en Fortat #
se
{QUE SON LAS HUMANIDADES DIGITALES?
sguaje de programacién) para tratar de transformar las matrices de
datos en matrices de variables (agregacién de varios indicadores),
para probar las hipétesis que asocian las relaciones entre estas va~
riables y las estructuras sociales (estratificacién, afiliacién, eteétera)
o la explicacién causal de los fenémenos sociales (la desviacién, la
smovilidad social, el racismo, la eleceién de una profesién,el apego a
las tradiciones, etcétera). Los afios 1960 y 1970 corresponden a un
cativo de la sociologia cuantitativista y de ls grandes
‘encuestas por cuestionarios; la informatica ya esta ahi para muchos.
Simulténeamente, cl modelado (determinista y/o estocistico)
yla simulacién de los fenémenos sociales surgieron como sustitu-
tos para el enfoque experimental, imposible de practicar al menos
«en macrosociologia, Estos métodos vivieron una moda pasajera a
vio de 1960. A continuacién, se aplicaron en el estudio dela
icas en reas agricolas y permi-
tirian demostrar la importancia de las redes de comunicacién in-
‘expersonal. Se formé as una pequefia comunidad investigadora en
de fenémenos sociales en el ordenador. La
nal se relacion6 entonces con el estudio de
temas sociales complejos,y las interconexiones entre los mi
cro y macro procesos. Otra corriente, llamada socioinformética, se
esfor2é por modelar y simular sociedades artificiales.
Las diferentes comunidades de ciencias sociales se estructuran
yyse especializan en torno a enfoques especificos (sociologia cuanti-
tativa,analisis de redes sociales con la revista Social Networks funda
daen 1979, sociologia computacional, socioinformética, ciencio-
metria, informetria y webometria, estudio social de las TIC y sus
sos, eteétera). Un ejemplo: en los afios 1950-1960, en el campo de
la sociologia de la ciencia, los investigadores establecieron la obser-HuNANIDADES DIGITALES
vvacién de las citas de una publicacién a otra (lalista delos arti