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    Yeniva Femandez Los rios de Marte (seguido de Trampas para incautos) comees. Su del ow SSepabwncnianoatee suman ee Meee at inca neon a deb RESID Specpomoo enact coe eee am ne tapaurs dnb Pe | Los Rios DE MARTE ‘Sa figura pequetia se aleja por el parque de los Poetas con pasos rpidos ydecididos. Yo la observo sin saber cfimo explicar su existencia, eémo nom- bbrara sin caceen superstciones 0 qué hacer ahora con esta nueva version de una historia que hasta hace unas semanas cre{ conocer El ffo es inten- 0, Elmesero se acerea a preguntarsiprefiero pe sar al interior del restaurante, respondo que no ¥ abotono ef euella de ni abrigo, Frente a mi, ana ‘exposiciin de paneles con fotos del sistema solar re hace pensar en los miles de kilometros que se- paran Paris de Lima. En que, pese alos avances dela tecnologia, los habtantes de ambas ciudades pueden cocxistr ignorsindose, como s vivieran en dos planetas distintos. También en que, para mi ‘llaes algo parecido a un insondable agujero ne ‘gro, psa igual que aquellas areanas regiones del espacio, s presencia tangible, imnegable ya la ver tan evanescent com las pocas Fotografias que he conseguido tomarle representan un misterio que tal ver nunea sleance a compre Desde muy temprano, Pav ejercié sobre mt ‘una fascinacion especial, Quird por la letura de las novelas de Simonon, que durante la secundaria tne llvaron en sn viaje casi por todos sus distr= tos, mientas sembraban en ri expt Taian de comvertirme agin dia en ana gran detective. Un suelo que la vids se encargé de difuminar, hasta ser solo un entraiable recuerdo de adlescencia ‘Gon los aos, sin entbango, Paris pasé a ser para 1 sindnimo de los impresionistas, de Tas suesi> ‘vas evolucones alentadas por anhelos de jsticia,y ign, por qué no confesaro, ka bella ciudsdl que sme ayudar. lear el recuerdo de un amor que no conseguia olvidar. Por exo, cuando al fin pude rege Tarme una est mayor aun indigno four de cinco dias, terre exe] Charles de Gaulle con un ina ‘oso itinerario, El punto no del programa consis. tia solo en dejarme Hevar sin mapas ni destino, y Toscumpli. Iba por Ia calles como por tun tine del tiempo, cuando al vanzar por J oil det Sena di con la sede de la Policia Jodi. El enorme edificio ime devolvié de inmnediato a mis date aes. Pu feliz Alimaginar que el comisario Maigret podria tab Jar tra alguna de sus ventanas y pensé que era un buen plan inelagar si en realidad existtan los dems scenarios de la saga. Com era hora del almuerzo, To mejor era empezar por la Brasserie Dauphine. No obstante, si bien lot parisnos rememorsban ry bien al personaje creado por Simenoa, pos ‘ea Farinse ° supieron darme informacién sobre las loaciones de sus historias, asf que a as tres de Ta tarde enteé a tun pequetio hist ubicado en la plaza Dauphine El ocal no se paceca a ls ambientes descrtos por autor belga,y la uefa, una simpstcaseiora de ojos grsen que hacia de cajera, se vio al comentarme qu all coincidfan tres Dauphine, la plaza, el res taurante y ella misma, todos con el mismo nombre, mas ninguno relacionado con Las novelas protago- Jas por Maigret. Igual eszogt una mesa, estaba ‘cansada y hambrienta, ademas, el gar era acoge- dor. Mucbes de estilo modern se combinaban en _armonia con Ins pares cubiertas de focografias oe “denadas de forma eronoligiea que abareaban todo siglo xx. Mientras coma empect a mira le fotos ‘ms antiguas, pero antes de abaudonar el etableci- _mienta quite compet cn Ia moda de los afior 90 no hacia muy atsactiva 1a Gina parte del recortido, por lo que ya estaba de slida en el momento en que me detuvefrentea tun retratocoloeado aun lado del dite. La imagen presentaba tres figuras sonrienes: dos hombres de dliineas edades sls lados, una mje en el centro, wre cteito. EI minimalisrno todos de pie, en la entrada de lo que parecia una Uienda en cuyo rétulo s¢ lef la palabra Lamidre Nada extraotdinari, en suma, sal por un de tall, la mujer que abi aparece era Enilia. Quedé perplej, asombrada ‘mei en Par? La sefiora Dauphine debi notar mi Udesconcert, pues sealando la imagen mencioné: "eQuieres examina de crea?” “Por favor” repl- ‘qué. Ya con el retrato en mis matos estaba segura de dos cosas: a mer era idéntica ai ta, ta como yo la recordaba antes de moriea sus cuarentay tres fos (morena, enuda, cara ovalada, nari rect, Jabios delgado, ojos medianes, cea als), pero 10 psa ser ella. Mi tia Filia nunca sali de Peres ten el sitimo tramo de su va mi madre tenia {qoe empujar su sla de roedas hasta para leva al Tava, Para colo, la mujer de la fotografia vestia ‘completamente de amarillo, levaba el pelo recorta- {do en un coqueto eile bob y trasuntaba valida. Le expliqué a lt defia dt resturant la inustal scmejanza de mi pariente con la mujer del retratoy Te pregumté sla conocia 0 podia darme alin dato sobre la fxografia, Contest que le resukiaa curio- fo, pes a diferencia del resto, que las adquirié de “aigoso en mercado, sa foto lx encontr trad calle, dentro de una pequetta bolsa de tla, |junto aun pisapapeles y un encendedor. De todos mors, le agradet la informacion y le pei permiso para fotografia la imagen con mi ciara, La seio~ a Dauphine accedié de buena gana sicando ta foto desu marco. Cuando lo hizo, le eerto en cl rever sc: "Con Jean-Pierre y Emilia, enero 1901 9 de julio de 1962, Hoy Joaguin me composé Bells Artes, No es verdad lo que dice mi padre Yor Femina " El ambiente noe para nada sirdido wi lumpen, for el contraria, un ave Kip juguetea en sus ation, rocore sus ous y sedans en las rstras ilies de Ios jboene que eiclnan sore las taleras ohunden os mana ol aca. ¥ no slo he vst a jfcenes, también vi muchacha. No muchas, 8 cierto, per las hay. Vestas com guardapatvo, el cable cago, concentradas ens taras como si nada més exisit~ 1a, Al verlas he camprendido por gué para alguns de nooo a intr significa la va, por gué we pz wn pada de crtalina, wna alta de color, zon més waior que tao el dinero acemado en bs ances. Los colores em eli da ol a crtalina, La ‘eye sobre la que asentanas ress pies, el acto e pinta, a nico modo que temas de exis La visite 0 Bellas Arts me ha confrmado gue munca seré sna buena profesor de primaria, Ahora tengo a seguridad abate de lo que sy, de logue quiero cere rea demi id sa noche sofé con mi tia Emilia, Hacia mi ‘ho tiempo que no pensaba en ella, y el sueno fue sis bien un traer a mi memoria un incidente de mi Infancia, A los sete aos, todo To que sentia por la hermana menor de mi madre eva antpatia ytemor Elanora dels csicas ta ovale, consentioras ‘querendonas de las que presumian mis compat ras de colegio. Emi como Ia Iammaba cavinosamente si made, era na mujer de organism frégil que cen imierno era atacada por brongutis, gripes y st nai, Pese a To cual munca tomaba alimento «3 Tient: “La comida caliente me enfria el etémago, sols decir om humor pese a su carter de palo. En ‘verano paces alergias € infecciones de todo tipo. [No obstante, su deteriora salud! no menguabs smal earécter, Tampoco sus manos troncadaso la ceojera de sn iesna derecha impedian que apenas ‘opera mi voz en el pasilo, en dos segundos, chara ‘el seg o ester como wn eustoio en Ia puer= ta de su habitacibn, adonde yo tenia prohibido el ingreso, ni siquiera me concedia detenerme en su ‘ventana, Por esta ran, elcuarto dela hermana de rai made suponis para mi la misma tenacion que tuna torta de chocolate, Gvando una tarde, durante tun periodo especialmente grave en a salud de mi tia, mi madce sali con ella al consultorio de uno ide sus fantos doctores, aprovech un desevido de mi padre para tomar por aslo ag inespugnable. La puerta estaba eerraa con lave, ia ventana, en cambio, cedi al primer empujén. EE ormitorio luca dividido en tres seciones: la de- recha, un estate con libros de arte, ocupado en la parte superior por varias medalla doradas, ala i= ‘qviewda, un aon que deer contener un tesoro:y en eleento,| portarretratos de diferentes tamafios. Al examinar Tos portarretratos comprabé que era cierto To que ecta mi madre: “Antes det acidente, Emi era una ‘ama y un velador que alajba varios ea Fee 2 ciea alegre, vital, que ademds de ser una gran de- portsta sonia con ser pintora™ Algunas imagenes ‘mostraban a mia en su juventud vestda con shorts ‘ectbiendo medallas en otras, se la ela sonreiren- sefiando dibujos de paises. Eo el arc, descubri Lipices de colores ydecenas de pinturas en acuarea, tempera o dibujo a carboncilo que deseribian her ‘mosos prado, balenes colonales 0 el mar con sus barquites, Pro el mis interesante era el de un joven de labios gruess y cabello ensortijiado que posaba ‘con una sori para. Como ese dibujo fue el que sms lam mi atencin, quise darle mi toque perso nal, Cog los pices, le dibusé mds pelo, le pinté la boca y le agrandé los ojos. Me distrae eto en mi labor que no sent! Taegada de mia, hasta que ella arranes, juntando sus dos manos torcidas, el pliego de mis manos. Su cara estaba roj, su eabello mis negro y su mirada repasaba con faria la eartulina que yo habia retocado, Vol hacia atvésasustada Cre que me gritaria, que Hamarfa ami made, in- cluso que ella misma me sacarfa de las orejas; sin embargo, lo tnica que hizo fe mirar na ver mis cl retrato del joven, bajar la cabeza, extender la ca- tulina hacia mi y decir: "Hévatlo, ya no lo quiere" Desperté en mi hotel en Paris con el mismo sex timiento de culpa que experimenté en el momento que sll del dormitorio de mi tay eseuehé su llamo tras a puerta, Recordé también que, desde ese di su ya penota salud fe empeorando igual que una “ oro dete planta privada de agua, tanto que termin6 por se- arse apenas dos afin después. Tome de la mesta ide noche la copia que yo habia impreso de vetrato de ka majer miseriosa, yTa imagen de mi ta vlvis fa presentarse ante mf, aunque sin su largo cabello famarrado, su cara musta ni sus ropas gries, Era fevacta a pesar de los cambios. La foto, adem, em= ppezaha a inquietarme por oro de sus personas ‘Uno de ls hombres mayor de ellos, recostaba sa calera poblada de poquesies rans sobre el hombro dela mujer, 20 de enero de 1964. Me gustan os oo scurs de Joagun 9 cael de crderito. Me gusts Su 0 ume, ss manos fuerte ya colo desu pel. Me gusta cual sonte de manera Tadeada ¢ nila 0 ‘umpleey Bognt, cuando segue pensation f= anda wn cera com sus labios gress que saben Ut onansana,y cuando et comteto ye cuenta como Send nuestra vida, Me gusta wu cerdcteringuita,st eon el fury 9 a seguridad con qu dice que mis ‘pntures wo tienen nada que enodiar a ts de tos ‘hizs que veto Blls Arts, quem pa ae lores, y que sremes des, la pareja de atlas nds talents de Lima A acto 9 30 Pintor, por lempejunts Sali del mosto de Orsay una hora después de ha- bor entrado. Nopodiaconcentrarmeen el recorido. Llevaba en el bolsilo una copia de la fotografia de Ia mujer idénticaa mi ia y de modo inconsceate la acaba acada momento para echaele un vistazo. ‘Se tratarfa del milagro de una repeticién fisonémica cen dos puntos distintos del globo, o, mis bien, de agin pariente leno del que, sabe Dios por qué, ‘nunca supe? O quiz, como ls fotos dependen del Singulo de la luz, del estado de dnimo, etcetera, la semana era solo aparente, pues en personals s- nites se redueirian a unos euantosrasgos.Aut- ‘que también estaba Ia leyenda del reverso del re- ‘rato exrta en espatioly con el nombre de Emilia, {echada solo dos aos antes de que mia falleciers. ‘Lo que no queria aiadir, pero la idea sonaba como ‘un susurroen mi cerebro eral similtud que habia centre el retrato pintado a catbondillo de Joaquin Lana y el hombre de rizos de la fotografia Tal vez solo eran una serie de coincidencias, pero de tanto mira la faz de la mujer parecida ami a, su ros: tro era para mf cada ver més desconcertante. Com- pend asi que el asunto sexta un mosquito en mi ‘rej a menos que hiciera algo al vespecto 5 demayo de 1964, Toes ls das core cnc biléme thos, No suche, pia corer sit, dee 0 quince am faciidad, Cando ovr me siento podersa, eo teres sei la fuera de mis pirnas, el trabajo de tis plone, sobre to, e como s con cada pas ‘ni capacidad de percidr y de hacerme dl mundo furs mis inensa. As abravesr ol pong signin ‘conocer os verdes de Tarde de domingo ent isla de la Grande Jato halla en la ciudad la misea Tz Banca que inspira Hopper. Bl ntrenador de fa Normal dice que deo cancentrrme ex lacasrera, en a tii, que lo hag podria hata ganar lama rin nacional. Peta yoo coro para compet, coro Solo por lace de estar ea y de serie. ‘De entrada, tenfadlaro que la posbilidad de ha- Ilarinformacién sobre la Emilia de Pars (comencé a Tlamarla ast para diferenciarla de mi ta) era tan ‘remota coano encontrar una pareja ideal entre ess doscentas cineventa mil personas, entre las que, sein las estadatieas, cada uno debe encontrar a ‘a perfecto pa, Sin embargo, tenfa que intentarlo, TLnego de que mi padze me confirmara por telo- no que mi fallecda madre no tena ms familiares {que los que yo conoci, e! dnico hile sueto pendta del lugar donde se habla tomado Ta fxografia. Un ‘vadeo en Internet vali la pena. Tal como imagi- aba: el Lumigze no podia ser otra cosa que un ‘inectub, EL lagar se ballaba en una calle estrecha fe solo un par de cuadias. Esperé dos anges horas hhasta que un joven de gresos antenjs levanné de ‘un tnd la puerta de ferro del local Su nombre era Philippe y habia heredado el Lemire de su abuelo Ihcia uns aiios. Le relité el motivo de mi visa Después de-exauninar por un rato la ftograti, ‘erva Fandnar ” smuchacho se toc6 la frente. “Los amigos peruanos de mi abuelo”,exclam,y sin darme tiempo a pre ‘guntar desapareci tras un abique al fondo del par Silo, Voli a los pcos minutos con un album en las manos: "Mi abuelo exa muy sociable, le gutaba tener amigos de diferentes cultura. Mie estas fo- to", All estaba mi ta, o mas bien la Emilia de Pax ris en tes imdgenes que la mostraban sentada ala mesa de un restaurante, montando bcicleta en wns colina y com wna copa de vino en fa mano, en ko que ‘era sin duda el vestblo del Lumfére. En todas las fotografia ta misterior mujer spareca al lado del hombre de cabello respo, y junto 2 ellos, un cone junta de personas que era siempre el mismo. “co conoces, sabes quiénes son, pregunté anhelante Bueno, no tanto, Solo Jos he visto en el lium de ‘mi abuelo, El me dijo que eran peruano Creo que djaron de verse mucho ants de que mi abuelo fie Ieciera’. "2¥ no te dijo mada mis sobre ellos, in- ‘Sst EI muchacho neg6 con la eabera. “2Y de los ‘demis?",agrequ sehalando al resto de personajes. “El seior Lunnanta muri de cdacer hace dosafos’ espondis Philippe, posando su indice sobre el ni ‘co africano de las fetogralfas. “2¥ ell?” reuse yo, indicando con el dedo a la pelirojt del grupo. “Es madame Alison, vv a dos calles de agu, pero hace ‘poco se mudé a Le Havre. Aunque, en realidad. ro creo que le sirva de mucho”. “2Por qué, ingui ri, "Oh Buen, es. algo excénsica". “No-importa © Lone go ae Pomme su direccién en este pape, por favor" one terrumpl extendiendo hacia él también un lapicero, Philippe se encogié de hombros: “Como quira’ 11 de septembre de 1964, Hoy tambien regres fe dhe la Norval. Tigo que corer ads ls dis ra swportar las elt. Odio la Normal. Me siento como tuna salamandsa on un curt de rato. Sino fee 1 porque goné las Olinpiadas interna, alt nae ne rsptaria. Salamondea mala en Mateméticns, Salanandsa mala on Metadoogi,Salamandra mala en Corio, Salama que corre ms ri do que toes, Samanta que age, Salamandra que ger ponerse wm par desopatillas rojas y dj ats ‘etndos los rates, Salamondva qu sabe que pinta sel cio, Salamancra que na woven ala Normal Rumbo als cast de a sefora Alison, mi inquie~ tad por conocer algo més de i Ema de Pars tba fen aumento cada paso, Ahora sabia que ella era pervana (peruanal, que hio amigos en Paris y “que al parecer el hombre de eabello ¥zado mante- fia una relaci6n estrecha con ella, pues en todos os retratosfiguraba a ss lado. Al tocar el timbre del cdifcio dande vivis la seiora Alison-una anciana de cabello rejiblanco, con geto desconfiado, asomd fa ventana del segundo piso. Al principio no quiso 1 hablar conmigo, pero mencionar el nombre de Philippe fue providencial. Ya en su departamento, i | 1 In sefiora Alison se extendio en una larga alocucion sobre la casualidad de sus origenes peruanos —i padre es norteamericano— y la poca inclinacion ‘que sentia por sus compstriotas. Al final, anadi: “Sin embargo, ti pareces diferente, cosa que para lla debia ser un halago, y me pregunté por qué acudia a vera, Le revlé el motivo y le ensenié el e- trato de la mujer parecida ami tin La senora Alison permanecié un momento examinsandolaFotogratia, después ve puro de pie y sin decir nada se dirigid una puerta, Al regresar me lame: “Sweetieee." Cuando voleé a verla, el flash de una eimara foto agrafica me diode leno en a cara —Verfecto, ahora sé que puedo confiar en ti dijo fa sefora Alison mientras mira la pantalla de su Canon profesional —Noentiendo Tranquil, las fotos son para cerciorarme de que no eres uno de ellos. Por supuesto que conoct ‘Emily. Obviamente, en aquel tiempo yo ignoraba todo lo relacionadlo ela —Sigo sin entender Est bien, iré de modo ordenado, suetie. A ella ya su esposo ls conoct por Lucien, el abuelo de Philippe. Yo reién habia egado a Francia, y como le comté a Latcien que yo bala nacido en el Pert, ime presents con ellos. La verdad, a mi nunca me gst aternar com peruanos sn embargo, ellos eran simpiicos. En fi, con Lucien, Emily, esposo y ‘otros amigos, soliamos reunienos muy seyuido. Fac: nna poca hermosa, Pars era muy diferente. mln x4 casada? —interrumpy. 5% lo estuvo, Exe es Jean-Pierre, su esposo —sefials en el retrato al hombre de cabello crs: po Jean-Pierre era dvertdisimo. Estoy segura ‘de que él mig sin saber nada, Ast que sn esposo est mucrto. Si, muris hace nds de veinte aos de wn ate que al crazé, Pe luego del enterro de Jean-Pierre ‘que le tomé a Emily esta foto, mira —ane alcanz6 tuna imagen orrosa donde los contornosy la ropa de una silt femenina eran definidos, pero el cen- ‘ro de a figura hua cas transparent ‘—2Qué es? —preguntédesconcertala Y esta otra se fa tomé un mes después a segunda fotogratia ora la de un abrigo negro con tuna ten lz sobre fos hombros—. 2.0 ves? Solo las ‘camara los cptan tl ome son, sere transiicios, porque a la vist parcoen personas norms. Por eso sempre tengo mi cimara ala mano. Ah, eatiendo —dlije tratando de segite la co niente, aunque agregué—: Pero si fuera ast nunca _parecerfn en ninguna foto yyotengo esta Philippe también tiene otras, donde Ena sale muy nti. Fo no quiere decir nada, sete —me arrcba- td laimagen de las manos. Yo también tengo otras fouogratis doa esto con ella en sa taller: Mira esta ane pad una foo de ella yd la mujer parecida a nia, etadas unto'a una ventana Eso solo sg- nifiea que en esta foto Emily estéalerta, pose por 1 propio gusto. La cosa es captarlos cuando estén despreveidas. Yo creo que tienen alguna especie de ‘Sst recangable ya veces se les baja abate, “Ar yes y mie dice que Emilia tenia un taller, fun taller de qué? —De pintura ella era pitora, éno te lo die ‘Venda cuadtos en Ia Place du Terre —iPintoral Digame mis sobre ell, por favor. {Sabe mu apellido 0 el de su esposo, donde vive, mo puedo localiza? La perdé de vista a Jos pocos meses de la ructe de Jean-Pierre. Se mud6 sin despeditse. Y ‘us apellidos no Tos recuerdo. Lo que sf he descu- Wierto es que el hombre del piso de abajo guarda ‘eimbrionestransléidos en una incubadora Ulam. ¥ volviendo al tema de Emilia, én0 sabe cuil era sv apelldo o el de su esposo? —pre- gumté ansiosa. No sé Hace tantos aos que ano lo recuer 4, seati —Monscur Pex ex bislogo, mami —djo wna vor a mis espaldas, Una pelirroja muy alta, con Dolsas de supermercado en las manos estaba en la puerta—, No sé quién es usted, pero como debe haberse dado cuenta, mi madre necesita descansar aio, miréndome ala cara 27 de septiembre de 1964. ie pad pintar ta flici> dad? Todas mis matonasen Bellas Arts son amari as a amar ntonsasalpcado de reo; naranja sy end, las trdes con fag; aces, las noche at Sea ora: amaril, ro, naan verde, Vane yer, especialmente, ha sido volta, Vita la voz dal maestro Gonier al msrarl el ato erminade de Joan, 9 eeuthato, atacand bgoe franc, ‘decir: "Bien, Eni, mien, para ser alu tr haces grandes progres. Vileta fue tabi la roche en Barranco con Jagr, villa mi sombra al seguro or primera vex hasta wm hotel, volta te, lta sangre, vileta A y 0 deéndonos ener sobre un sb com wn campo de wos, da a noche sin dari Que la sedora Alison Fuera una de los tantos Inuochafos que niegan su palsy que adem noes ‘uviera del todo en sus cabsles, no quitaba el hecho de que algunos de ls datos que me proporciond Facran verdderos, esta idea me-aferraba en el tren de tegreso = Paris mientras recor a pla de Tertre donde, ame la suspicaca de lo artistas callejeros, me vi abligada a inventar que era una periodista haciendo una investigacin sobre inmi- igrantes, Pero solo en ui. par de ancianos pintores ‘re notar Gerta ingrid l mostrares las dos fo tosde a Emilia de Pats, porque en un descuido me habia apoderado tari de una de las fotos que SEES EGR ESE SESE REEES CSs sc ensef6 Ia sera Alison. Aungue tal ve slo fixe resion, pues la pareja afirmé en todo mo- mento nunca haber visto alas personas de ambos retratos, ni conocer a ninguna pintora peruana, De ‘cualquier modo, por simple formaliad, les dejé mis referencias. Camino # mi hotel me detuve a obser var ls pénichesatravesar tranguilamente el Sena, en tanto reflexionaba sobre mi fracasada pesquss, la belleza de la ciudad y la absurda manera en que ‘estaba desperlciando mis vacaciones, Me quedaba tuna semana para volver a Lima, as! que reso tomar mi itinerariotarstio,olvidarme de la mujer parecida a mi a, iar su recuerdo al ro. De pron- to, un baroo de la Policia fluvial pas6 muy cerea de en la cubierta ia un hombre alto, corpulento, vestido con un largo abrgo, que me saludé agtando ‘una mano en fa que sostenia una pipa. Quedé pars lizada,habria jurado que se trataba del mismisimo inspector Maigret, En ese momento, sabe Dios por qué extratios enlaces de la mente, cafen la cuenta de que an qedaba una pista por nevis La seiiora Dauphine me reid con una taza de café yuna pequefia bolsa de tela sobre uno de los -mostradones de su restaurante. Era una suerte que no se hubiera deshecho de los artical que com paliaban la forograta que guaba mi busqueda, "Es pero que te srvan de algo estas cosas. Las conservé ppensando que agen las relamarfa alga cia’, me dij, Yo le agradect, y paséa examinar el conten de a bolsia, Pheza n# I: Eneendedor de plistico sede, forma ciindrica, uso comin, descompueso. icra n22: Psapapeles de madera, forma rectangu- lar semejaba una cajita (pero no se aba por ningéin Tad), con un pase de pinos grabado en la parte superior Conclusin: Pérdda de tiempo, Cabizbaa, ‘naa devolver tol interior de a bol; sn ema ‘0,1 tomar el encendedor, mi brazo ror el psapar ples y este resbal. El objeto al romperse dej6 por fina la vista secreto, Entre Ios pedzes esparcdos ce el piso habia un mindsculo rollo le pape. Lo Sint a toda pris; "Madeleine, x6 que leers eso uno Jc estos dias, confo.en que para entonces ya sera ‘fora Madeleine Bouviers-Palomino y yoseré el fe- liz peruano que encontré el amor en Pars. Te ama, jorge’, Salté de emocién, iCabia fa posibiidad de {que el tal Jorge fuera el tereer personaje dela foto fen puerta del Lumiére! Ahora tenia una pista com hombre completo. La sefiora Dauphine me ming como si fuera una nila, y pregunts “Por qué te ‘capefas en dar com una mujer euyo parecido com tu ta debe ser solo una casualdad?, “Curiosidad contest, sungue la frase que aflors en mi interior fic: “Porque mi suo era ser detective” pero est respuesta la guardé solo para mi Decidiarrancar In busqueda restingiéndola a Paris. Facebook resuké mma tt pues bien m0 ens contré ninguna mjerapelidada Bouviers Palomino, si descubri 4 un grapo numeroso de Madeleines Bouvier, asf como unos cuantos Jorges Palomino. ‘Una vex fitrado el ote por rango de edad perfil, €conjunto se redujo de movdo notable. Un mensaje scompafsido con la fotografia de la Emilia de Paris ¥ Tes dos hombres de distinas edades a cada Tado fac enviado a todo ol grupo. Solo una persona res pondis, Por mi fico peruano Madeleine Bouviers me reconacié apenas erucé el umbral de su negocio. "Ti debes ser Natalia", me invt6 a pasar Caleulé que Ia tienda alcanzatfacon las usta los cinco me- 00s cuadrados, pese alo eval, el ambiente acogedor data la impresn de un espacio mayor. La exsefora Palomino era uoa rubia baja que me relat a gran- {es rasgos su historia de amor con elms joven de Jos personajes del retrato, un economista peruano Iamado Jorge Palomino, euyos pasatiempos eran ir al cine y Ia faricaciin de pequeios atigios de madera. Le entregué los pedazos de la caja y el mensaje ocuko en ella Leys el oxo de papel “Transcurrié un par de minutos en silencio para que agregura que lacajita fue un regalo que Jorge e hizo ‘en la época que eran novios Sin embargo, como el ‘matrimonio no acab6 en buenos términos, ego del rompimiento ella se deshizo de todo cuanto le ve ‘onda su antigua relacion. Después de emitir un suspiro, aiadié que al poco tiempo de divorciarse se enteré de que su exesposo habla desaparecid en Peri durante un incendio. Respecto a los dems personajes del retrato, sus noticias incorporaron datos que me dejron boquiabieta. “Nunca via sus amigos en persona, lo ‘nico que sé es lo que Jonge Ine cont6. Que eran sus paisanos y que (rabaron Amistad porque frecventaban ef mismo cinechi, Desde que las conocs Jonge queria que yo lo Ta mara Aled, por Alfted Hitcheock, pues su amigo (el al hombre de cabello rizado dela fotografi) se hacia llamar Jean-Pierre pyr el actor Jean-Pierre Léaud’ afr, “Entonces, sel nombre de amigo de su exposo no era Jean-Pierre, érecuerda cul era fen realidad?” nterrogué. “Creo que tenfa un nom- bre similar al de Jorge, pero no sé.” dijo Madeleine Bouviers. "No serla, Joaquin’, insist. “Si, era eve Ese exactamente’, respondié. "Te sucede algo? preguntéal ver lacxpresion demi cara. "Nadi estoy bien, Por favor, és acuerda de algo mis", contest "Bueno, solamente que como Jorge me coment6 que Ia esposa de su amigo pintaba, yo le di las sefias de Roland Gilbert unos atistas plisticos que eran ve- «inns ce mis padres y vendian sus obras en la Place (du Terte",agregS ella Por descripeign, Roland 1 Gilhert no eran otros que la pareja de ancianos, de acta algo sospechosa, con quienes yo conversé a 1a plaza dels pintores. ‘Mientras vajaba en el metro que me levaria hasta ahi, mi mente no dejaba de trabajar Cada informaciéa sobre Ia Filia de Paris me devolvia tra vez a mi fllecida ta, como si con todas bas 1e- ferencias completara un parle que representaba st figura, La nueva piza del rompecaberas tela que ver abora con el tnico novio que nwvo mi tay el cexposo de la misteriosa mujer idéntica a ella. Ambos hombres eran peranos, quid dela misma edad, de asgosafroandinos, con aficién por eine, yabora, {gracias a Madeleine Bouviers,conoc que compar ‘fan hasta el mismo nombre: Joaquln. Una luz bills ‘en mi cerebro: y sila dave de tants coincdencias cstuviera precisamente all? Recaptulé entonces todo lo que sabia respecto a Joaquin Luna. Lo que me cont mi madre fe que era un ahijado de mis abwelos que vista com ellos desde que era un bebé a modo de benjamin de la familia, hasta que el mac rmiento demi ta Emilia le arreba settles pesea ‘lo, los dos fueron siempre ls hermanitos mis uni ‘dos del mundo, El tiempo, sin embargo, transforms tal cario fratermo en wn amor itenso al que mi auclo se-opuso con singular virulenciay total in- tuicién, pus tras chocar el auto en el que hula con titi, lal Joaquin Luna desapareeié de la manera més evbarde, abandondndola casi moribund a un Taco de In carretera. A past de ese hecho, ef des tino del abijado de mis abuelos se convirtié en una incdgnita, 2A Jo mejor Joaquin Luna se exiliéen Pa 12 Tal suposcin podeia ser el punto de partia para explicar la insta serie de duplicidades, pense al bajar del metto, decidida a iterrogar Tos dos Tongevos pintores,exta ver sobre el sujeto de pelo crespo de Is fotografia. Fa ln plaza de Tertre me fue fi ubicar el puesto de venta que buscaba, No habia dado ni ds pasos cuando me detuve en seco [Aliestaban Roland (rubio, pecoso, gordito,Giber: {alto, delgado, afrcano), y una anciana menuda, cobriza, de cabello blanco cortado al eso bob, ves tida totalmente de color verde Him. Los tres co versahan de manera cémplie, Aceleréel paso, mas Roland y la mujer se ijaron en mi, intercambiaron imiradas, yell, en el acto, emprendi6 una marcha ‘que poco a poco se convirié en una carvera, La ve ‘afd de la anciana era asombrosa.Hstuve a punto de aleanzarla, pero consiguiésubirse a un autobs De pen a parada de alinea 94, viebmo se aljaba rmirdndome desde Ta ventana trasera del vehculo. En ese momento solo atné dispararel lente dela cehinara queMevaba colada en mi muieca 1 de octubre de 1963. Siena que algo se ba part dentro deme as de as horas a raja sear cada vez més. Now nada de Joguin desde hace ts dias, dnd stad, kqué comer, édbnde erin? Paps ao de esa com fero wn f= ‘my ahora no quire nique lo nombren. Por qué, por gud stan malo gue fain y 0 no queramst ‘Por qué querer ser pinta le parce am padre una stupidest APor gut ny tax diferente a mis pads? Serb que sey aro, pro mo aporta, Me defender, no ante a comer hasta que me eferme, eungue ame- acon com fonere ne conde Taapoco valent & ‘eoWa Faéncse a 1a Normel, yo wo quis ser profesor, quer pinta, iba, fj el manda y sus colors, quiero amas 4 Jagan yr flit. Gref que podia tratarse de wna fallaen la maa, ast que lo primero que hice al volver @ ini hotel fe pasar Ia fotografia a mi laptop y dasle el maximo rom, La imagen de las personas en la ven tata del autobiscontiquaba sendo la siguiente un hombre de abrigo azul, una muchacha con audifo- os, yen el lugar que deberiahallarse a anciana objeto de mi interés, Jo Unico que asomaba era el traje verde limén suspendido en el aire, despro- visio de contenido, como si quien lo eva puesto fuera el Hombre Invisible, Qué ocurvia? Por qué ro apareca su cuerpo en la fotogratia? Después de ‘que la anciana eseapara, regresé al tenderete de la pareja de pintores. Cuando me negaron conocer & | mujer con la que hacia unos minutos deparcan com obvia camaradera, les dje que eolgara las fotos desu amiga cabal de sacisle— en Internet, "Estoy segura de ‘que all alguien me informara sobre ella’ air No abstante, £qué informacién podria obtener con tuna imagen de hacia mis de dos décadas, y otra ‘que més parcciasacada de wna pelicula de fantas- ‘as? Con todo, Internet era la nica opcién que me ‘quedabs. Estaba por subir las fotografi ala red ‘euando reeib wna mada telefGaica incuida la que haeia unos minutos 1a ta fue pactada para el dia siguiente a las reve de la mafana, em wn discreto café cerca del pargue de los Poets. Llegué quince minutos antes. Me ubiqué en sna mesa exterior para dvisar i fie sguraen cuanto apareciera. Enel fond, tenta miedo dle que no se presentara, 0 que a sltipo momento se atrepintiera y tuviera que perseguisla Sin em- bango,traté de tranquilizarme al recordar el sonido claro de su voren el elfono: "Soy Emilia Huamén. Sé que usted ha estado preguntando por mi. Si dlispone de tempo, me gustaria verla mafana’. Su apellido resond en mis ofdos toda la noche sin de jjtme dormir. Una extrafa se habia apoderado del hombre yapelide de la hermana de mi madre, se trataha de un simple ca de homonimia? Me tome ‘una pastllarelajante, pero seguia igual de nerviost. 2Quiéa era la mijer con la que me reunia, _por {qué sus amigos negaban conocer, él exnovio de initia tendria partcipacin en aquel juego de iden: tidades? Conform se aproximaba la hora sfialada, Ja emocion por encontarme cara a cara con la imis- teriosa Emilia de Paris erecta al mismo tempo que se mulkiplcaban mis preguntas, tanto en el sentido dela mjeridéntica a mi tia, como en direccidn del ‘también enigmatic Joaquin Luma, Recordé una ver _mis el euaderne que descubrt entre las cosas de mi tia, cuando guardamos ss cosas hego de su entic- sro, que ella us6 a modo de diario durante sa je ent: 28 de setubra de 1964. Qu sexsi nosy lo que (itr sr. Nada, 10% hueca que camina, wn muerto que ‘gue de ie Nol cso, ma hark. Manian todo debe ‘estar mejor, todo tiene gue estar man. No me rnd La dima anotacign,escrita con letra cas legible, databa del dia anterior al accidente que frustr6 fuga. Mi tis logré superar el estido de coma, au que a consecencin del accidente queds para siem- re can a pieraa derecha indi, los dedos de las manos toreidose insrvibles; en general, con la - Id quebradiza, eSeria posible que el ahijado de mi abuelo, acosado por la culpa de haber abandonado a su amante sin prestarle ningén auailio, hubiese Tbascado tna mujer muy prec a mi i, y bli _gado & eta a asumir el nombre de su exnowia? 20. se traarfa mds Bien de wna mujer ala que le con- ‘venta asumir otra identdad, alguien que escapaba de la justcis? 2¥ a todo esto, dle encajaba la ex ‘aia “evaporaciGn” en ls fotografias de la imagen de Ia Emilia de Paris? Mientras refexionaba cud pregunta hacerle primero, oi que la anciana ayanzé hacia mf Llevaba el mismo trae verde lim del dia anterior y wna eda sonrisa Mletaba en sus labios pintados de rosa "viento sacude sus Dokillos sobre nosotros, ‘verdad, senorita Juln?”. "Si, hace fio, conten, sobreponigndome a mi asombro, pues pese a las arrugas, alas eanas, ala ropa, al peinado, en esa anciana,reconocta ls inconfunsibles rasgos de la hhermana de mi madve. “Aqul me tiene Soy Emilia Haman, yi futuro depend de sted”, Yo estaba atonita al escuchar el nombre completo demi ta en ‘su boca y solo extend una mano, que ella recibié ‘ysosuv0 oom tbieza. Quiz aque gesto fe el que terminé de descolocarme. EI hecho es que, en hi- gar de cnsayar cualquier pregunta inicial, respond "No tiene por qué preocuparse,seiora Emilia”. La anciana tomé asento frente a my volvié a esborar ‘esa Sonrisa que me resultaba al mistno tiempo des- ‘comocidae fatima. No sabe efm me tranguilza eseuchata,se- forita Jolin, ¢Puedo Hamasla Natalia? Lamento snicho lo de aye, corter fue mi primera reacio, sme comporté como una nifiaa mi edad, yes que en ef momento en que lav, Gilbert y Roland me rel aban que una periodisa habia preguntado por mi smostrando una foto en la que aparezeo junto a Eus- tag Alison .-ambas sabemos o que es significa =a sefora Alison se llama Eustaquia? —no de reprimir I pregunta, i, alla no le gusta su nombre por eso nun- ca lo menciona, y candle le preguntan die que se ama Blizabeth —respondi6, y las ds sonreimos. —Dieculpe que la cortara, continge por favor —reinvié a cata Como te deci, enté en penico. De pronto me vi acosida por lt prensa, respondiendo cientos de preguntas a especalsas, conectada a diversas sidquinas hora tras hora, encerrada et resto de mis ‘ea Farts: = dis. Sé que Eustaguia iene pruchas del "fendmenc” ‘que me afecta ¢ imagino que debid enseirteas, Gre, ingemamente, que, si alguna vez hablaba de clo, pensarian que se trataba de una de sus tantas fantasas. ¥ ya ves, ahora toda mi esperanza esté puesta ent, en que comprendas la que para mi sig- nilicarta hacer piblico el “fendmenc" ntendi ques referfa su extrafa desaparcion cn ls foografias y deci postergar mis preguntas para despues =Vo he venidlo para escucharla, sora Emil, Gracias por eso, Natalia, Puedes Hamarme Eni, silo deseas. Tengo sesenta y acho afios, pero aqui —se toc el pecho— me siento tan viva coma'a los veinicinco. El tiempo es mas ligero para quienes son flces, y yo al eorter por Ie maftanas, recibir las visas de mis contados amigos y, sobre todo, a Pinca, pinta es mi modo de afiemarme en el mun- 4, sy fli. Porque I felicidad, Natalia, € elegir Ja manera en que quieres vivir ¥ por exo no quiero perder mi vida tal eomo ahora la tengo... compres: des, 2verdad? —me miré suplicance En fin, no quiero parecerte patéica —re pers Ja compostura. Supongo que cstarésansiosa por or alguna explicacién sabre el “fendmeno”, pero fo tnico que puedo ofiecerte es un reato de mo empers El mozo puso sobre la mesa las dos tazas de cae iene toda mi atencion —repliqut —Ocurri6 hace winticinco afos, después det ‘entierro de mi esposo. —2Gémo se lamba su esposo? Joaquin, Joaquin Luna, pero le gustaba que sus amigos lo Hamaran Jean-Pierre, por el actor de fa pelicula Lar 400 goes, Lo extrafio mucho. Te No, es el café Esté my caliente —traté de lsu la mpresion que me causaba escuchar el nore de Joaquin Luna Oh, dees tener cidade. en qué estaba? Ea Joaguin Luna —me apresuréa contest Es cietn, Mi esposo flees de un infato, y su muerte me dej6 huérfana de amante, de amigo, de cémplice, uérfana repentinamenté de toda ini familia, con wn dolor tan profundo que es impose escribir com palabras. —ALe quer macho? —lainterrumpt No puedes imaginarte cus. —2Gino bo coneci6? —aprovehé para pregunta. Joaquin era aijado de mis padtes. Yo tue una i que tambien se enamors de tun abijado de nis abuelos —afiring,contenienda el asombro por lo que aeababa de of. A a? £Y qué pass com ella? “Mis aelos se opusicron y el romance termi- 1n6-—tespond para ver eémo reaccionab Fs una pena, EL Peres un lugar dill para Peto estoy hablando del pasido. Debe ‘de haber cambiado mucho desde que me fui. Yo soy peruana, “sabes? —dijo sin expresar ningda —Yo también —contesé enseguida Lo sé, Me di eventa port aento —tPor qué sali6 dl Pert? Es una historia un poce larga. Me gustaria escucharla —repuse svi Bs bien. Trtaré de abreviar. Joaguin y yo nos cviamos juntos, al crecer el romance surgié ‘entre nosotros de manera natural. Pero mis padres no extaban de acuerdo, Cuando descubrieron lo nuestro, encima que yo, a esgondidas, habla dejado 1a Normal para asistir como alumna libre a Bellas ‘Artes, me obligaron volver a los stulos, erminar on Joaquin, y hasta me impidieron sir corer, aun sabienda que era un pasatiempo donde habia ‘ganado medallas y me servia de desahogo. O sea, resolvieron cortar de glpe toda mi felicidad. Ahora te lo evento tranquil, porque el erapo ha trans: Formado todo solo en un recuerdo gris, pero en ese momento suffi mucho, Pinar pars mi siempre fae una especie de nevesidad, no de earenca, pues mis Dien era algo que sumaba, como un estrechar en ‘misbrazoe al mundo yabrazar mi ser més intimo en tun solo acto, ¥ el amor... el amor es lo mas maravi- Ios de esta vida. 1 tenes novior Lo tse, pero no me fue bien —ePor que? Bueno, quias el amor noes para mi—respon- algo ineémoda =F] amor es para todos —alijo mirdndome a Jos ojos Lo que pasa es que a veces cambia de contro, Sabes, cuando Joaquin falled yo también uise seguinlo, I dolor era tan intenso que tomé ‘quince pastllas de clonazepam com la itencién de djarme morr. Pasé des das durmiendo y tuve en suetio muy extras. Me vi muy enferma en Ferd, ‘como x fuese yo y al mismo tempo otra persona, vacia de suetos, lrando sobre un antiguo tetra to de Joaqutn que yo habia pintado cuando éramos muy ovenes y que dejéen Lima evando vine aqui. El retrto era el mismo, pero estaba retoczdo como por una mano infantil Al despertar tena muy viva ‘es imagen a carboncillo en mi mente, con Ta boca pintada de rojo y las pestis que le Hegaban 2 las ‘eas, como s fuera Una mufeca:y me eché a rer: mi primera risa ego de muchos dias de llanto. Después sll de mi cama y comencéa pintar de me- rmoria un retrato de Joaquin en su juventud; ego pinté una rosa, wn gato, una aia que comia una palea,y af fo recobrando el amor gracias al acto de pinta. Porque a veces el amor que nos rescata es amar lo que hacemos. —0 tambien nos puede rescatar conversa con alguien que nos recuerda un fumiiar que perditms. Natalia, 2por qué te pones tan triste, die algo mak? No, no, es. es slo que usted me reeverda a ‘una tia que muri hace mucho tiempo, Lo siento tanto, quétorpehe sido al hablar de a muerte de Joaquin. —2Guso musi6 su expose? EL 10 de febrero de 1995. Povo ya no hable mas de eso. —ATiene alguna foto soya? Si, sempre levo esta conmigo. Es de cuando ‘rec legamos. Paris —me aleanz6 una fotografia cen fa que vi ami ta Emilia joven, como en las anti- ‘guas fotos que estaba sobre I ebmoda de su cuar- to, jumtoa un Joaquin Luna muy pavecido al retrato demi infancia, ambos abrazados con el fondo de la torre Fife Bs hermosa, Te pones rst, Mejor hablamos de otra cosa, Pero no me ha contado cm legs a Pats Bsc bien. Lo qe pass fue que ante el reehazo dle mis padres 2 todo lo que yo amaba, convenct a Joaquin para fugarnos. Sé que parece una teleno- ‘ela, pero es cierto. Nos fagamos y hasta tuimos tun accidente antomovilitico del que nos salvamos ‘de milagro; Hegamos a Ecuador y de alt commen tun bareo hasta Espafia y luego a Paris, donde nos Alojamos por un tempo en casa de a fais de ua mast francés con el que entabi amistad en Bellas Artes. ¥ después, bueno, empezatnosa trabajar, hie ‘mos amigos y uno de ellos nos presen a Eustaquia 2Y ome fe el accdente? __—Pues Joan y yo estamos may nevis lia conduciendo a teda velocidad, el auto cra ve- jo y en una curva se saié del camino. Yo deb cae ‘mina como sonsimbula durante largo rat, porque cuando vol en s, estaba recostada en una cama y Joaquin tomaba ti mano. El campesino que nos escat6 dijo que me encontré caminando maltrecha sun ldo dela carretera y que yo lo condje hasta lugar del arcidente, onde el buen hombre ayuds a Joaquin asilir del auto donde estaba atrapado, y {que luego yo me desmayé. Pero de todo eso no re- ceverdo nada. —2Nada, ningdn declle? Nada en absolut Det encontrar en shock —dijecomteniendo toras las emociones que se agitban dentro de mi St, debi6 ser as. Es muy raro Lunes, Pero, enfin le he preguntado de tan- tas cosas y ahora toca hablar del motivo de muestra ita, Me decia que el "fenémeno” comenz6 hace “Si fe después entérrar a Joaquin, Bustaquia me acompaniea casa al regresar del cementeri. Ella habia comprado ese dfa tina mara foogratica y me hablaba del aparato, supongo que para tratar de animarme, aunque yo solo escuchaba palabras sucta. Entonces, en algin momento, ela me tom6 ‘una foto, Nime di cnenta hasta que ella me ens 1a fotografia varios dias después. All aparecia yo, pero luca csi transparente, Cuando Eustaquia me sac6 una nueva foto, todo salié normal y eref que debia ser agin problema’ de la cimara que ya es tal soluconado. No pensé mis en eso, hasta que semanas después vavi a mi puesto en la plaza de “Terre y unos turistas se acercaron @ mi para mos ‘rarme una fotografia que habian tomado del gar yy donde otra ver yo aparecia cas trasicda, Flos también me pidieron que posara una ver més, pero al comprobar que en la nueva imagen no se exhibia ‘ninguna anormalidad se despdieron sin més, saht ‘cuando para slir de duds le peda Gilbert que me fixografiara varias veces en el transcurso del dia, y ‘comprobé com asombro que en una de las imigenes mi figura presertaba otra ver el extrafofendmen, Es decir que el fendmeno no se da siempre, solamente algunas veces. Al principio era asi, después cambio, tA quése rier? Poco. poco el fenémeno se fe haciendo cata ver mis frecuente tanto que al cabo de pocos aos re hice completamente invisible en todas ls fot0- _grfias, Pero no es todo, hace unos ates tampoco 0 vale en los espejos y de un tempo a esa parte 1 fenéimeno es acompariado de una lev pérdida de ‘onciencia por ls noches, como sien un pestaieo ‘de epente pasaran segundos en los que hay un va- ‘io en mi memoria y entonees desaparezco también « eso co Mare para el ojo humano, Por e50 ahora nunca sao de ini casa después de ls siete de lt noche Ty emo hace para vivir sin que nadie se ene tere de fendneno? cuando comprobé lo dels focogralias aban- don mi puesto en a plaza de Tertrey me mudéa la periferia, Roland y Gilbert me ayudan a guardar el Secreto; venen mie pintaras y van avstarme todas fas semanas, Para correr me desperto a las cuatro die ta maadrugada y antes de as cinco yeeinta estoy {de wuelta, En realidad, Hevo una vida soitari, mas 0 feliz porque la pintura me acompaa: Por exo te rruego, Natalia, no hagas pablico el fenémeno. No (quero ser expuesta como tna rareza ni aabar mis {las en un laborstari, sia pinay, sin corres, le dda de mis amigos, Yo, aunque me siento joven por dentro, presento que ya no me queda mucho, que fs exe desaparecer por las noches le sigue inesora blemente la extinein, Sin embargo, en tanto Negs ‘quiero vvin,vvinpintas, vivincompartir on mis fig, sivi-corres, vivir hasta el Gkimo dia, por 00 te po, Natalia, te supico “No ding nal, Emi Selo prometo, ain verdad? Si, Ei, Used estan parecia ami tia que yo abe qi mio eu a? En un aocidente —mentt— Mi ia mais ast ‘ata misma edad que #6 tienes agut —le mostré fa primera ftografla que yo habia visto de lls Lo lamento, ¢Cémo se lamaba? Maria —menti otra vez, Por eso me puse a buscarte. Esta foto la vien un ea y a partir de ‘entonces comenct a javestigar quién eras —Oh, est foto nos ls tomamas en la entrada det Lamiére, on aio antes de que Joaquin fallecera. Et de alt es Jorge Palomino, un amigo peruano que conocimos en el cineelub. £1 se qued con a foto. 2Céimo abr Uegado esta fotografia aun cle? Le comté la historia omitiendo algunos dats, No quise que ela stra cabos sobre una verdad que podsiaafscars. Luego hablamos un rato mis. Me ‘confi que munca regres al Pert debido a un extra fo presentimiento que jamas puso defini, que sus pintiras no eran grandes obras, pero que el no Je Jmpoxtata mucho pues su nica ambi fe sem pre expresirsey se feliz en el acto mismo de pinta [No prio entender por qué Joaquin Lana renuncis asus ganas de ser ator para convertrse en solo un asituo espectdor. Hubiera querido conversar con ‘lla el dia entero, sin embargo, Emilia prefiris no ‘exponerse snucho tiempo en una cindad con tantes turistascémaraen mano, por lo que nos despetimas con un abraro antes de que ela tomara su café fio Su figura es shora un punto verde limon que seinierna en ol parque, ast que ya sn temor a inco- ‘modatta disparo el lence de mi Panasonic con doble oom aca ella. Ninguna sorprest me causa lo que ‘eo. Mi cuerpo sigue pegado a Ta sill, mi mente e sete do are sigue syjeta a su historia. Repaso la Sncomprension el abelo hacia sw hij, la idea de Ta voracién como fuente de ener, los recerdos demi ta en min fancia, tan palida, tan sufiente. Evalio que no ten- go mis datos sree ferémeno de las fotos que las dladas por Esl y ls estrafalaras afirmaciones de ta sefiora Alison, Calibro que la fecha de la muerte de Joaquin Lua evince com el empeoraniiento de sald de mi ti y también con el recuerdo del retre to garabateado por mf, Me detengo en un suceso que considero snstancal el aecidente. Creo que ali, ten exe hecho, #e encuentra la clave del misterio de Jas dos Emilia: la que acabo de conocer, una an: Gana huminosa, igual a la estrella solar del panel que se muestra en la otra acera ¥ la Emilia de mi pier, tan seca de vida como la dria imagen del planeta Marte que se edhibe a su Indo. Crzo hacia Ta vereda donde etn los paneles, Patsy Lima, dos nila viviendo sn saber Ia wna de la otra en dos planetas distintos. El accident, me digo, équé fue To que realmente pas6 all, éun fendmeno isco, ios, Hla volantad de wa joven por realizar ss ‘serios? No tengo respuesta, pero elie creer que, 10 {que sea que fue, ocurié como mecanismo extreme para que una parte de ella lograra vivir st amor y fu wocacién, Una vez fllecda la Emilia que yo co hocta, la otra vio disminuidas sus fuerzas yempent a desapnnecer, “Marte tao alguna vex mares. Aho: rasolo tiene ros subterrineos de agua congelada’, reua la leyenda debajo del fiche det planeta rojo Algo parecido scedié con mi tia en Lima, Sin eni- lhargo, la Emilia de Paris conservé s agua gracias alamor por su arte, y era tanta la que tents, que in- ‘lus fe suficente para rescatatla dela muerte de “Joaquin Launa.eY yo, dénde puse mi agua’, écsimo “dejé que se excurrieran mis suefios de ser detective para ser solamente la contadora de un estudio de abogados? Pienso que tal ve? por eso no tengo si- Auiera las fuerzas para olvidar un amor que desde hace mucho debis perderse en el pasado. Me pro- pmgo eruzar de nuevo calle. Ya no quiero ver los plantas. Pero me parece que hay un hombre mi riindome desde una banca en el fondo de parque Se pone de pie, me da la espalda, va muy rapido, Es alo, corpulento,y leva puesto un largo abrigo. Decide ir tras é, seguielo, aunque no legue a al- ‘canzarlo; y mienttas me interno a toda prisa en el parque de los Poetas, siento que poco a poco mis propos rfos empiezan a descongelarse ‘caminar por el pasaizo, suspends la respiracién por un segundo; fa narixsalié perfectay el pintor hace una mueca de satisfaccidn,y, sin perder tiempo, abres la puerta porque el otro se ale esa leras abajo, Atropelladamente te driges al ascensor, {que ahora sf funciona, Con solo condi el labio inferior el vetrato quedaré terminado.Sostiene con firmeza el lpi y presionas el bot6n arrojindote de inmediato al elevader. Una tbieza sn fin te reco- re, Fntonices unas manos que ya conoces te toman por la espalday un rosto se desranece en la carte Tina y et horizonte asa sdentro La primera habitaién apareci un sibado, después de ha terra carta que Miguel recibi de su familia. Se encontraba en la cocina a punto de servirse un ‘afé cuando la lu se apagé;entonces las pareds se stemneceron y la casa entera se bambole como si tan olegesubterrénco remeciera sus imientos. Lue- ao silencio, Una exploson?, Zum terremoto?, Zqué habia sido? Se incorporé temeroso, sacando el encende: dor del boillo derecho de su casaca. EL Nescalé aca esparcido bajo Ja mesa junto con algunas ta- 2asy patos hechos pedazo, Le costaba respira una rues sabana de polvo proveniente del foado de la ‘asa cubria la atmésfera.Avanzé despacio,tapindo. se la nar, hasta detenerse en el umbral del traspa- tio con suclo de tierra y contempla anita que este habia desaparecido y en s lugar se levantaba una construccién de slidos muros y piso de madera La vivenda se ubicaba en las afueras del pobla- do, en terrenos de propiedad del due del colegio 10 “rane pasion donde Miguel ensehaba matemiicas, y al que se divi todas las maianas en largas caminatas. EL jnmenso campo verde-amarill, en contraste con la strech de su oscuro edificio en la urbe, fo inv taba a recorrerlosallando y moyiend los brazos, a ‘eee capitn de wn velero pirata, otras, director de tuna orquestaimaginaria, motivo por el cual ciertos poblidores lo miraban con recelo, mas esto no Je preocupaba en absolute. En dos aftos de residen- ta se habia fabricado oa vida sencilla ysolitaria Aacompatiado de un tlescopio, libros y un agrada- ble silencio que Te permitia sofia, As, incamente sandonaba su madriguera los sabades, cvando tha fl pueblo para aprovsionarse de alimentos enviar cheque puntal a su familia, de Ta que muy pocas ‘yeoes recibia correspondencia. Fue durante tna de ‘esis visas a fa ofcina postal que le entregaron la primera misiva. Hl empleado de correos decararia nis tarde: “Puso cara de preocupacion yse guard la carta como para que nadie lt vera, desputs se fie sin despedirse. Eso ya me parecié aro, porque el profesor, aunque timido, era atento, Pero en ese ‘momenta no soapeché nada’ "No era Navidad nisi cumpleafios, por eo per manecia en la cama con el sobre cerrado entre as ‘manos, hasta que tuvo la necesidad de encender la uy para poder leer su noinbre en el destinatario. Las dnicas dos wees que reibi6 noticias de su fi nila sn que fuera un fa estivo fueron cuando st cuitado le comunios la desaparicién de Boby, justo después de haber sido mordido por la mascot Pese alos aitos yaveriguaciones, Boby jamés fue encon- ‘ado, La segunla fue la ver que su padre eintox- co por fetjar con whisky, cervera yaguardiente un adierto en el hipédromo. La hospitalizacion y los ‘medicamentos consumieron el premio y todos los ahorros de Miguol en menos de una semana Rompe sobre, peroal ver la pequefia y cui da letra de x madre desdoblé el papel como quien desenvuelve ropa de un recién nacido: Quer gu: Bo sur de que se yf ran de ln vamp da comp, Nae, combi, eemas desperate Hace cute mess dpitson a pre tor juga dinero de las eros. art aol tics nlc ncn con de tend, foro tu pare ben elladn, Habla todo freind ate are cpr cont cau, Cuan ners omer Mra, y oom ave i Marta oon. Lo por fue ue cont rise id mario ‘sepsis tu pd, qe ue, 38 tug, soca ncaa dela mal, case vn alas mr, hrrible iy hil, harman que ns an das ln det pad y ll maria de Martha, aercabo on ls juts. Pos aor sl conte cmt porque Fire ue pat edi ats herman ues queria 2 “amps parainsuos nds plata, ella se ser a aaj, Imaginat, camo i ese sllere, Por mi no le ecb nada a et, pero csr stain os tore. En las bade ya mos cera tom el exit y no tengo cara ora egies pend Tos veins 9 tacoma est las denas de tu pare Miguel, o que mandas no aera para nada, aus as cosas etn por cad dia. Si me vers, ya no salgo ia isa yn la casa ety a scars 3 om as venanas ervaues para que da Elva piense gue no ems 3 tuo weg cabrar fa rnta. Demi sald te unto que te recto, segue portent problema, en ued andar sin el spray. Las maces me fas paso pensando,enloncer ‘ne sien os ages yn me angus de onsar qu en ta frmacia wo me fin mds remedis hasta que no can tale lo qu es deb, y enc de todo ee cima himed y ontawinado, Quin come ta, a quien us ijos le ha rigafada une «aso de compe. Sabi, yoaungue Sax me conforma cam wn euarto en nul perdido como lagel eel que encuentra. Me aces mucha fal, hi, las nches suet contig, xfer se ha puso més bide que mac, 6 nesta tu af de hermano ma Sor, prague tc ade no en buen jmp Bari lo ‘até malogrando, Sabes, haste a padre meda ena agus unc ws per rare de ici, a tabi hace fata xn ambiente sano “eno, Miguel me daspide. Besos acuédte de no otros porque ee to lo que tenemos. Bendicions, Tu madre Aquella noche no durmis. Hizo una relaciin de posilesinteresados en clases particulars, ademis ‘de ott lista con aticulos bsicos en fa que inchuys al calé como sinico yj. Sum, rests y dvds; aun as, a mesa famillar engord6 poco. A las tres de Ja mafiana, desanimado y exhaust, uscd regio en st telecopio, Lo atrao el brillo de una estella, jamais ln habia divisado y se Ye ocurri6 que fa tiber- tad tenia algo que ver con ese pequetio astra que alumbraba un cielo enorme y limpio. Se qued6 con- templindola hasta que esol termin6 por borrara, Los dias siguientes se concents6 en el trabajo. En las noches, sn embargo, sus intentos por dedi- ‘arse a la astronomia fracasaban amte el embate de las presiones econdimicas, que en soledad era impo- “ble olvidar. Al cabo de una semana, consigui6 o- tar el mes adlelantado en el colegio y en las cases extras, Guard el dinero en un sobre ysedirigié al correo, donde lo aguardaba la segunda carta Tas novedades eran desastosas. El embargo Aebido a las deudas acumuladas era inminente, a To que se sumaba wna notificacion de desalojo y la fuga de sa cufndo con una peluquers, Martha ests deshcha, necesita repo one compo. 2A Ande intan sin dinero trabajo? Te, Ajit, alé wo pgasalguiler Ls cantidad reunida apenas aleanzarta para cance tar algunas devas, 2y ego? iNe puedes abandonar sas akora! Miguel golpes la mesa. No ibaa permitir ‘ue vinieran. Se presté dinero del duefio del cole- so, vendlé un par de enciclopedias. Finalmente, jjunt6 un momto cereano a tres meses de su sueldo; pero antes de que pudiera disponer del dinero, la tercera carta legs. Con ef sobre abiero entre las manos, camin6 por su reino de dos habitacones y un patio. Una ‘casa puede ser un hospital, un asilo o una prisn, a eves las es cosas, la mayoria solo domicilos esta era diferente. Por primera ver en su vida, Miguel conocta la dicha de habitar una easa-guarida, un refugio donde sentise pleno y respirar sin pris. Mins a su alrededor, ls ibros se apifiaban en un sranquilo desorden iEsoy hata de tanto cacivache!, ltclescopio listo, enfocado al cielo claro, Imaginate ‘om lomog yla raha, yA, dueSo al fn, ya no una es pie de inguilin precario, de polizén, Este era su territovi, para etar consigo mismo, para contem- lar el espacio eterno del cielo. Voli6 a mirar. En ‘muchas ocasiones, cuando regresabacontento de al- guna obervacda astranémiea las Ines ya estaban, cencendias, © cuando se queda dormido, leyen- do, al despertarencontraba la ventana bien cerrada, sn lentes sobre el velador, todo dispuesto, Tal vez fuese él mismo, pero casi pda jrar que las cosas sedan por ssolas. Cuando alguien encentra st gar en el munao, puede ser que hasta Ios ros ‘gan dlewrso quelle trace, ol menos eso parezea stra la cata, pronto su hogar seria invalid, su ‘oc Ferns 18 espacio enajenado, la soledad que le era indispensa- ‘le para vivir desapareceria.Reley6 Lo hems per do tod, Hegamose prisine domingo. Despert6, el reloj mareaba las sete y quince de la tatiana. Se eal las sayonaras y fue al patio re Pitiéndose que habia sido una pesadilla, una ahs ‘inacién. Al Megar retrocedi, el cuarto estaba all imponente como horas atris. Se qued6 inmévil ‘un instante, pero forzé las picrnas e ingress. Las ‘ablas del piso se soltaban bajo sus pies. De dia la Dabitacién mostra un rosro distnto, Aungue las pparedes eran firms, la capa de cemento que is cu- linia presentaba seriasirregularidades, con prot Derancias y desniveles que se adelgasaban hacia ls pares inferiores, donde era posible vitumbrar el Taille. HI techo, por otra parte, si hin bastante alto, seinlinaba para formar una especie de ramps fen dl fondo del recinto. Toes Jos rmuros, era rea les. Turbo, sali6 cai a la carrera, pisindo libros ropa. nla cocina, de wt media docena de patos apenas quedahan dos y nada de café. Se sent6 en et piso. €Cémo explicar lo ocurrdo? Recoedé la ose rida, el rermezin que lo oblig6a caer, la asfixia por polo, Imposible evantar una pared en ese lapso. Buses pstas que lo acercaran a una edifcacn sccrcta del Gobierno, una broma. No hallé nada. Pens en fenémenos paranormale, telequinsis, se concentr, mas no consiguié mover ni una cuchar- ta, Canad de desechar hipétesis, reflexions sobre Jo conveniente que resultabacontar con otro cuarto hora que su familia vivsia con él. All podria llevar sus iros, su cama y salvar un poco de su atid. El problema era el colegio, mis exactamente don Pedro Carvajal, defo del colegio, quien le ccorgs Ia casa a condicin de que no hiierareformas, me- nos ampliaciones. Ademds, Miguel ya habia notado ‘que lege de los adelantosy el préstamo de dinero, director alzaba la cejaiquierda cada vez que selo ‘encontraha. De modo que reslvié guardar silencio hasta encontrar el momento adecvado. "Lo urgente es instar la In’, se dio entusias- ‘mado, aunque 2 808 veaticineo as su nico con- tacto con ciretoseléctricos fue armar una kimpara ‘de mesa cuando cursaba la secundaria. En el pueblo ‘compraria todo lo indispensable Las horas transeurtievon deprsa y en la ma- dragada ya le fllaba ray poco para terminar el cableado; sin embargo, un cortactetito que iui 16 la casa como si cien Huorescentes se encendic- ran de golpe, para luego sumirlaen las tinieblas To comming a acostarse Pero la idea de que cualquier ‘fuerza ra vano, que tener un dormnitorio propio no significa gran cose, que igual regresaria ala vida del departamento familiar, vagé un buen rato en su cabeza hasta que el cansancio lo vencié y por fin pudo dormir profundamente Al dia siguiente hizo lo posible por esquiar al director yditar sus clases con natualidad. Una ver ‘en casa se dispuso a seguir su labor de electrics, ‘nas un temblor lo ecorrié entero al eomprobar que no era uma, sino dos nuevas habiaciones. En la pared del fondo se abria un hueco como hecho a porrazo, que daba entrada a esta segunda estan 1a oscuridad era profunda, pes, lo mismo que la anterior, carecia de ventanas. Miguel no quiso pe ‘cra le bast6 una ojeada desde el pértio, interna cen mano, para saber que era identical otra, salvo aque esta tenta las maderas del piso mejor asegurae das. Un dormitorio, una cueva donde guarecerse ests bien, {pera dos? Se reins, necesaba sire, Por fuera ls euartos sebresiian del resto dela vvienda pporsu forma, altura yfaka de tare, A poca distancia, y escondidos tas unos ar. bustos, wm grupo cada ver més crecente de pobla- ores cbservaba Ia excens mientras esperaban la Negada del alealde y otras personas notables del pueblo, a quienes ya habfan ido a informar de tos En la madrugada, la casa se prendis com una Juz que parecia del inferno. Yo sli a buscar una ‘abra que se me habia perdido y de lejos vi toda. Ahora vengo y ya eit as. imo el profesor va a constewir tan pido? Es verdad, yo pase hace dos dias y la casa es- ta como siempre. "2 han vist a forma que tiene? Con puntas ‘que parece casa del diablo. Ay, Disito Santo! Mi esposo tiene raz6n, se scuerdan cémo andaba el profesor por el campo, como bailando y haciendo no sé qué movimientos ‘arms, Seguro lamando al diablo. "—Claro, cuando ba al colegio, eno? iDios mio! “Todos se persignaron. on Pedro Carvajal no creia en fantastas de ‘gente ignorant. Lo que pasa, seior allie, es que ese m= chacho se ba ereido que puede tomarme el pelo constrayeno en mi propiedad y con el dinero que yo mismo le faciité. Debe haber contratado aun ‘grupo de hombres para que le ayuden a destruir mi casa y levantar semejante disparate, pero ya vers eNo.e ass, ser alealde? lalealdeasinis, amnque sin escuchar, ya que ‘entonces se vela.a st mismo habiltando su domicili, ‘l conegjoy hasta la plaza central para recibir tan- to perioaista y enriso que Hegara al pueblo, como diez afios ats, cuando aparecieron esos puts minds que se movian en el cielo y los filmé la TV, {ysinieroni meatalistas, astrlogos ycientficos. Pero Tos mas mumerosos fueron los de grapo Gama, que re dormfan al aire libre esperando cominicarse com las navesextraterresres Después los centficns —————s ljeron que no eran platillos sino salves y poco 2 poco los visitantes se marcharon. Los gama fueron los imos, su lider antes de partir anu: “Ellos no fan querido manifestarse ahora, porque no les _gust la publicidad y porque esperan un tiempo ds tinto para irradiar su mensaje. Ellos volver pram to, han escogido estas montafias y aqut ser el lagar donde nos muestres fa verdad. Me lo han dicho en suefos. Se habian tardadlo, pero aquellacasa era prucha material de su presencia, 2Quign otro iba 4 construe algo semejante en un dia 6 dos? Y el profesor cn su telescopo seguro avis alos ovis y entablé comunicain.IAh, cuando Tos gama se en- ‘tren! Sonrié ampliament. Al ver esto, don Pedra Carvajal se dirgis al jefe de la Poi, cuyo gesto ‘runcido le parecié mas confiable ‘Miguel fue Hevado a la comisaria, donde relaté to sucedido hasta en vente oportunidades. as ne ve de la noche lo pusieron en libertad, tras com prometerse a devolver Ia sama adeudada al dui del colegio, ms wna indemnizarién por daios en ss propiedad. Tampoco podia abandonar et c= blo mientras no cumplies con lo establecido, Dein Pedro Carvajal estaba indignado, eCéimo era pos Dle que no lo conminaran a desilojar su propiedad deinmediato? “Tengo mis razones’, contest parc. mente el jefe de puesto pola Sus razones eran as siguientes: dos aos antes, soldados del pals vecino instalaron un campamento «en teritorio local ser descubietos, alegaron es- tar oonfundidos debido ala smiliad del paiaje. Su Gobierno pidis disculpas y todo fue olvidado. Poco lespésleg6 Miguel, quien vagaba todas las noches de modo my sospechso cerca de la fromtea, cargo do un disque tlecopio, Mego past lo de Ia casa que ‘amanecehecha un Beryl profesor quiere hueveare Uiconda que na sabe nat, Pera encontrmestiades lx inde metas de cable que ta dea deta fertertare- nerd habere vendide; fue su ero. Segin el jefe de la Policia, era obvio que la consraccién cumplla ‘un fin militar, y Miguel era pieza dave en una es- trategia de avanzada enemiga. Pero debia acumilar pprucbas, descubrircémo operaba su pli y hallar a Jos demas implicades, por ea det al pall libre, si as ‘cosas resulaban, él vlverfa as pesto en a capi= tal del que una injusticia, pues a quien ec mal wa plata esta, lo habia ale. De nuewo en casa, Miguel se empeié en buscar su telescopio entre los estragos que habia dejado la visita policial Lo.que més deseaba era observar la pequefia estrella, que avists en dias pasado y exyo rastro parecainexistente, Necesaba encontrarla ‘Sin saber may bien por qué: engancharse a ese algo semjante al mar desde un velero;oal campo a mec: oda que solo lla era capar de transite, Leva- do por ese afin ordené tod répilamente, pero el telescopio no aparec6. "La Policfa, por supuests”. Ya in escapatoriacontemplé su hogar. Amaba so casita de paredes blancas, lejos del pucblo, con uma sola ventana que daba asusaa-comedor-ccina,despuss 1 dormitorio con la puerta del traspaio sempre abierta: €Quign entrariaa rebar? Paseé los ojos por Jas vigas del techo sin encender Ia, pes sempre Inabia noche clara y much silencio, Ber su familia Tegarfa dentro de pocos dias y eso signtiaba el fin {de su refygo. Si bien con las abitacones extras ya ro era igual, Jo esencial se manten, Pero co ellos all, surgirian en Ia casa tbiques invisible y lira recrocediendo hastala puerta de sali, yesa puerta ‘dia era ahora una usin, pues ya nunca dsfr- tarla de su soledad, Sus padres y hermanos lo nece- sitaban demasiado para dejslo marchar. Un nuevo temblor lo cogié en plea desesperanza, Como los otros, Fue ort, fuerte ypolvoriento, Abr la venta rma y se queda pesar de lo ivespiable del ambien te; queria quedarve el mayor tiempo posible, queria soviar que podia permanecer all tds In eternidad, ‘Ala ur dal sol, que recén iba desdibijande' eves sgasas de neblina, la casa estrenaba sus formidables proporciones, Vanodototrescuartosmés,sino todo un complejo arquitecténico, Durante Ia noche las habitaiones se habian reproducido en todas dives ones, formando wna construccion amor, lberin- ticae inexpugnable. Miguel, uien en un principio se neg6 a presale atencida a nuews temblores, al notar que los remezones se suoedian incansables, ecidis,pasivelo en la narz, averiguar su origen. Sin embargo, conforme se adentraba, la polvareda cera mis densa. A punto de asfixiarse y casi perdido ‘enna maraéa de pasadinos y mevosambientes dela ‘asa, reyres6 al pértico solo para volver a eotrar a la carera, al er tnas figuras blanea y provistas de antorchas que se aproximaban ala distancia Los gana descendan de un certo aledatio for- mando wn grupo compacta, exjas nica blancas cas lotaban a fs haz dela hana. = Yaave, maestro, esa tiene que ser obra deel. Eso es indudable.A partir de exa noche este pueblo y usted, por ser so alcade, pasarén a la hinoria. “Alot, rots wna vox Al tempo que unifor= mado encendian ss linternas y disparaban al sire. {Las blas hicieron salir de los matoreales a poblado- res, esclares, curios y na provesin de Beles que se Confundieron con Tos gama entre gritos, conatos ‘depeles, lamados:la serenidad y pequefios incens dios provorados por la cada de cies, Alamanecer se pola contar un centenar de detenidos. Pero la tmulttud aglomerada en torao la edifcacin era ‘ala ver mayor, por lo que el jefe de Policia espe ‘aba ansioso la Hegada de un destacamento militar. “iN me importa que usted sea el alealde, nadie puede acercars!", "Es que sino suela al maestro, ‘por lo menos deje que sea yo el que dé la bienve- nda alos extraterrestres". “Basta de cojudeces! “aero no ve su forma de pirdmide teumcada?, el muestra dice que en Rgipte..”.“ICardal, Mévese al alcalde”. "“lOiga, no le permito.." "Sefiort Un ni echa espuma por la boca y dice que Dios le ha- bla, que esa et su capil”, "allt! silos militares siguen demorando, nosotros asalaremes est cas, fortaleza ola que sea” En el interior de la casa, Miguel recorria con ojos ya adaptadoe a Is oscutidad ls nuevas habita-

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