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wn paidos.com HUAN) stilt LA DEMOCRACIA POSIBLE Orie RONALD DWORKIN SUMARIO Agradecimientos Prologo 1. Una base comin, 2 Terrorinmoy derechos humans 3. Religién y dignidad . 4 Impoesos eitimidad 5: eB pone la democrai?, Epflog ee ss Indice analitico y de nombres ey Ce ee PROLOGO, React eso darante un pesodo en gc Eston Unidos - ‘via una situacidin de especial peligro politico; los ejemplos y citas que tz penenecen ace period EI texto versa sobre el debate pal oe ema dona teccige elect eee sobrelaamencit de debate— Novae es teas de logue tac! br ain nen gran igenciayaedtcumciben mucho renee ala cultura pole de on pals parila delo qe pier suger ios cemplor e dustacones menconadon,Tods sociedad politica ‘econémicamente avanzada y culturalmente plural —incluyendo las. fee democracy ls sociedad que son Femes spnines Converse en docs debe encontrase modo de lite tre reels enapSnice acerca de a aturaer faces deo de rechos humanos, acerca del papel de la religién en la politica, acerca deta dsibocgn de riques condi del comnidad y ser 2 dl caricter formas de pote mediante toma cbs ‘lesions Los temas de los ge ocup libro pose on len porcionar una explicacién de emo decidir qué derechos deberian pertenecer aes lista, Son cucstiones importantes que requeren que Fellexionemos un poco mis sobre la idea misma de derecho huma ‘no, Si queremos bacer progres la construcién de un debate na- nities —— ‘ional sobre la moralidad de nuestra polis antterorists, debe: ‘mos abordar directamente esta cuesti fls6tica. Més adelante, en la scecin siguiente, podremes volver a las controversas politicas. Derechos legate» politios. pecialmente los mas jvenes, derechos tales como los denominados derechos sociales y econmicos, por ejemplo el derecho a una vi vienda decente, #atencién médica e incluso aun puesto de trabajo Derechos bumanos. Ahora podemos preguntarnos de qué modo Js derechos humanos se distinguen de los importantes derechos ee politicos que acabamos de considera. No quiero preguntar —t0- ‘davia— qué derechos coneretos deberiamos eonsicerar como de- rechos humanos. Pretendo mis bien investigar mo deberiamos dad han adoptado esta esis. Ami er cambio, a tess me resulta a- dicalmenteindefendibe, pero no puedo decir que todo aque que la facepta muestra st despreciosubyacente por la dignidad humana 0 por el valor ntrinsoco de Ia vida humana. No obstante, hay impor- antes argumentos favor dl punto de vista contrrio. Ningin jue ‘ado, no importa lo justo ycuidadoso que sea, puede eliminartotal- ‘mente la posibildad de haber condenado an inocente,y correr ese riesgo parece poco respetuoso con la vida humana, En la prictca hnorteamericana la pena de muerte se aplica desproporcionadamen tealos acusados negros, con lo que resulta dificil no sospechar dela influencia que e racism tiene sobre esas decisiones. Con todo, tal como afrmé; la acusacién de que la pena de muerte viola los de- echos humanos no parece fundada si atendemos a la cuestién de los derechos primordiles. Podemos comprender la opinisn de {quienes piensan lo contrat, pero estas mismas personas conven dlian sin dda en que seria rdiculo que otros pases invaieran Te ss o Florida para detener esa prctica, aun en el caso de que re nieran el poder suficiente como para tener éxito en su empress. “Ahora poclemos por fin reanudat a cuestién que nos concieme de manera inmedita Violan las politieasadoptadas por Estados ‘Unidos para combat la amenazaterorista los derechos huanos primordiales, los derechos que todo pais debe respetar con inde- ppendencia de cules scan sus prictcas ytradciones? Es obvio que Ja tortura viola los derechos primordiaes, al margen de lo que pe- dan alega los abogados dela Administraci6n Bush. La mayoria de Jos norteamericanos coincidieian con ese juiio; ademas, la Admi- nistracién nigga oficialmente que torture a sus prsionetos. Asi pues, debemos concentraros en las politcas de detencién que la ‘Administracion reconoce seguir y que defienden tna gran mayoria de norteamericanos. Encarcelamos indefinidamente a cientos de ‘personas sn cargos ni juiciosélo apoyindenos en que el ejecuivo Jos ha declarado enemigos peligroses, una declaracion que no ext sujet ala revisi6n ordinara por parte de os tribunales. Viola esta politica los derechos humanos primordial de esos prisioneros? “Trataré de construi un argumento que exprese lt opinicn de Jos norteamerieanos que creen gue no e asi. Nuestra politica de de a a tenciones se basa en determinados supuestos ictios acerea de os acl someone cidoncto deter tat ian est politica, y ademis piensan que ess suposiciones no son ‘an claramente alsa que ninguna persona razonable pueda acep- tarlas. Estados Unidos se enfrenta a una permanente amenaza de ‘una masacre terrorist, y nuestro gobierno piensa que exa amenaza stumentaria si liberase alas personas que mantiene detenidas, 0 ‘ice que éstas tienen informacién que podria se itil para reucit ‘eat amenaza, 0 ambas cosas. Esto puede no ser cierto respecto de algunos de los detenidos. Pueden ser inocentes y no supone nin- una amenaza. Pero es demasindo artiesgado dejar que los jucces dlictaminen sobre ello mediante juicios criminals ordinrios, dado. ‘que sabemos que tals juicios permiten a veces que gente peligrosa quede en libertad. El argumento reconoce que es cierto que Estados Unidos debe ‘mostrar respeto por a dignidad humana de los detenidos. Pero los militares disponen de un procedimiento para revsar el estrus de los detenidos en Guantnamo: se evan cabo audiencas en las que los oficiales dl ejrcito decden caso por caso sel detenido es efec- tivamente un combatiente enemigo y, de selo, si dicho detenid ‘rorismo vila los derechos bumanos. El argumento parte de una ‘oncepciin de los derechos humanos que se basa en los dos prin- ‘ipios basics de la dignidad humana, Dicha concepcin exie, en primer luge, que los gobieros, cualesquiera que sean sus pric: tieasy tridicones, aetien en consonancia con una interpretacion bienintencionada de la igual imporancia itrinseca de las vidas de las personas y de a responsabilidad personal que vienen sobre ss ‘props vidas. En segundo lugar, exige también que las naciones ‘que bayan deserollado su propia interpretacion particular de lo que ‘estos estindares exigen, no denieguen a nadie el beneficio de esa imterpretacin, La skima exigencia es especialmente fuerte en el cxso de Estados Unidos y significa que, para nosotros, nuestra po- — inde detncin infin sin juco viola los derechos manos deaquclon «quienes reluimos Est eranamient contradic lo que ere un buen nimero de soreamericanos rn por lca deberoscnsierar aor de qué modo podtian stacro, ¢Qué pxsan anit en elena de una conclusion opuesta? En primer lugar, y como estrategia més fun damental, psa echazr a cori de lon derechos humanos que aparece entre las premisas de mi argumento, Ciertamente algunos paises y algunos movimiento rechisrian cia tora pore se ‘basa en principios de la dignidad humana que estin lejos de ser univerlment compari. hor bien, conidereros lo que im- plea rechazardichos principe, Los serbics de Bosnia negaon Guess programas genocides ocran una violacin de os derechos Fhumanos argumensndo qe los masmanes no ra realmente se res humano: los ut decararon algo muyparecio sabre lott sis que moran victimes de as machetes. St estamos dspucstos 4 ‘ceptrplenament idea dls derechos hanes, demo aop- tar una dterminacin acerca de aqui cosideames como ‘humano y sobre qué significa tratar a alguien con respeto hacia su dignidad hamana: No podemos sex ecuénics sa Bj; debemon dar contenido axa expresiones,ydebemos hasan en moet propia reencis hacerlo fAlgonon podian bjeter gue ins en ln concepen de In cignidad qe he dfn now obliga anomie que ex poible a ‘aar una verdad oben en los enos dela en yl moral Estoy de acerdo, Per deberos hacer xa suporcon porque Ia ‘es sctien op este losicamente indsendible He nen tudo expen por gu en oto ext, y doy por supuesto ademas lox derechos humanosdelos cron con nuestro propio derecho ala seguridad rene aletor, de ‘modo que podemos apropiadamentejgorar los derechos dels, xtaners cuando el peligro que cto suponen ex sufclentemen te grande, Desde ego, se dice amenudo que ningin derecho pc dese aboluto, que ay siempre ccunstancias else un biemo puede jusificadamentelimitaconoignorls, Las grandes declaraciones de derechos humance, incluyendo la Convencia Europea sobre Derechos Humanos, eeonocen este hecho cuando Jasran muchos de los derechos que enumeran con importantes re trccones. La Convencion Europea sbre Derechos Hamanos, por ejemplo, identifica la Herta de expresisn como un derecho hy ‘mano bisieo, pero a eoninuacié ade que los sobiernos tienen futrizacdn pura corr este derecho cuando ello sea neccsario para protege el orden o a moral pblcos. Exas resticiones fue ron el resultado de eomponendas polias que siveron par ale tar alos paises tubeantes ala hoeu de suserbi a eonvencién. Pero parecensugerit que ls derechos manos no son sbecltos {or tanto ponen en enredicho mi ress de que los derechos hu ‘manos son poderosos triunfos que prevalecen sobre los, por oo lado, eis objctivos dels gobiemes 'No obstante, la afimacion de que los derechos bumanos no son absoltos entra una importante ambigiedad. A veces dicha alirmacin significa que la descripcidn de un derecho en agin do ‘mento en alguna expresisn comin cs an slo un abstaccién (que debe carificarse ants de saber qué significa exactamente en rcunstanciasconcretas Decimos que la libertad de expresén es un derecho humano, peo nade piensa que s vielan los derechos hhumanos de cualguice persona ciando se imponen consticciones razonables relatos al pomentoy algae para realzat manifest doves ydesles.Deciaos que la iberad de expres sun dre- ‘cho, pero nos debemos una descripcin mis precisa del contenida de este derecho; podriamos estabecer, por ejemplo, que es el dere: ‘cho a no ser censurado en la expresin de ideas poltcas cooside- rando que tales ideas son errdneas o peligrosas, lo que expicaia por ‘quéson aceptables las restriccionesrelativas al momento adecuado para celebrar un defile Es decir en cuanco disponemos de una des ‘ripcién cuidadosa del contenido exacto de un determinado dere- ‘chohumano, dejamos de tener dificultades para airmar que ese de- recho es absoluto, © para afirmar que no admite vioacién alguna. Sin embargo otras wees la afirmacin de que ni siquiera lo de rechos hummanos son absolutos significa algo més dréstco y més pertinent: que ante una emergencia lo sufcientemente seri, 1 ‘gobierno estéjustificado para volar incluso los derechos humans is bisicos y fundamentales aunque hayan sido esablecidos con una formulacin precisa. Existe un cao tipico cuva repeticién pe- de haber atenuado su fuerza. Supongamos que hemos apturada a un terorsta del que sabemes que ha colocad tna bombs nuclear «que explotart dentro de dos horas en agin lugar de Manhattan Seria absurd, dice a gente, no torturarle i pensiramos que la tor ‘ura Ie forzaria a decimos dénde est la bombs a tiempo para de sactivala, Supongumos ahora, slo en aras dela discusign, que es ‘moralmente admisbleviolar los derechos humanos en una emer: sgencia tan seria como ésta. Entonces nuestra cucstin se converte en a siguiente: ceuin seria debe ser la emergencia? Recuérdense nuesttas premisas. Enel capitulo 1 dije que nos daitabamos a nosotros mismos,y no sélo a nuestras vitimas,cuan- do ignoramos su humanidad, porque al menospreciar su valor intrinseco menospreciamos también el nuestro. Ponemos en pei ‘ro nuestra dignidad y nuestro autorrespeto. Asi pues, debemo si ‘are! umbral de la emergencia muy artiba. Debemos tener cuida do de no definircemergencia» simplemente como «gran peligrom, yyno debemos suponer que cualquier acto que mejore nuestra se ‘uridad, aungue lo haga en muy pequefa medida, queda por esta ‘azbn autométicamentejusificado, Debemos adquirir una virtud muy diferente, como esa anticuads virtud dela valentia Scrificar cl autorrespeto frente al peligro es una forma particularmente ve: sgonzosa de cobardia. Nuestro derecho penal y nucstras pricticas Jntemas demuestran que somos valientes: elevamos el riesgo esta- tlstico de sufrir un rimen violento cuando prohibimos la dete ‘preventiva ¢insstimos en que las personas que hayan sido fcusadas de cometer un crimen tengan un juicio justo. Debemos sdemostra igual valetia cuando el peligro viene de fuera, puesto ‘que nuestra dgnidad esti en juego del mismo modo. Y ahora consieremos los aspectos cruciales del ejemplo tpico ‘dela bomba nuclear escondida en Manhattan. Fl peligro es ala vez Ihorrendo y cietto, sabemos que nuestra victima es responsible de ‘xe peligro y suponemos que si le torturamos y conseguimos que confiese, podremos eliminar la amenaza. Nada de esto es cierto res pecto de nuestra politica de encarcelar sin scusacién ni jucio en Guantanamo y en otras de nuestras bases en el mundo Es verdad {que corremos el riesgo de padecer otro ataque devastador. Pero ‘vin no existen razones para pensar que este peligro se acerca de ‘modo cierto 0 que nuestas violaciones de los derechos humanos stn bien calculadas para climinar 0 al menos reduci significa tivamente este peligro, Hicimosprisioneros indiseriminadamente. [Nes equivocamos al excedernos en las detenciones; cualquiera que ‘pensibamas que podria ser peligroso,o disponer de informacin Stil, fue detenido. Ya hemos liberado, bajo presién diplomética y judicial, a varios de los que retuvimos én Guantinamo durante mu tchos meses. En todos los casos, afirmamos estar convencidos de que ya no es necesario retener a ls prsioneros. Por supuesto, e pblico desconoce la informacin que los interrogatories hayan po- {ido propotcionar hasta la fecha. Pero ls criticas hacia nuestras politics de detencidn, tanto dentro del pais como en el extranjero, han sido tan intensss, que sospecho que el gobierno se hubiera ex pesado con mis precisién acerca del valor de esa informaciéa si Inubiera podido hacerlo. CCorremos un gran peligro de caeren la trampa contra la que cabo de advert, s decir, la rampa de pensar que cualquier cosa ‘que mejore la seguridad de Estados Unidos, aunque sea de un ‘modo insgnificamte o hipottico, constituye una politica juicioss, [Esto conviertealaprudencia aterrorizada en la tnica virtud que re ‘congcemosy scrficala valentin yla dignidad pore prjuicio mez ‘gino y cobarde de que nuestra propia seguridad es lo ‘nico que — vee importa. No cometemos ese missmo error en estas vidas ni en ‘nuestas lees internas,yno est claro que el peligro que proviene: del terrorismo sex mayor que el que suponen ls drogas os asesi- os en serie y otros crimenes. Pero hoy en dia es realmente mayor Ja amenaza a nuestra dignidad, y debemos mantenemos unidos para vencer este mayor peligro. La metéfora del equilibrio entre derechos y sequridad es, como ya he dicho, muy engafosa. Una. ‘metafora clferene seria mucho mis apropiada debemos encontrar tun equilibrio entre nuestra seguridad y nuestro honor, Estamos hoy tan asustados como para que el honor yx no sigifique nada? Capitulo 3 RELIGION Y DIGNIDAD. Poufrica nenscxsn La religisidad norteamericana no es un fenémeno nuevo; Este clos Unidos ha sido wn pal rligioso desde sus inicos. Un nimero ‘mucho mayor de norteamericanos que de extopeos cree en la exis: ‘encia de una vida después dela mverte, en la Inmaculada Concep- ‘in y en el telat biblico de a ereacién, tanto del univers como de los seres humans. Por supuesto, los paises iskimicos también son muy eligiosos y Is guerra que hemos declarado contea el terror se ‘asemeja a menudo a una anacrénica puerta de relgiones; de hecho, Bua se refi una vez ella con el zmino wcruzada». Los historia: dores debaten sobre las causus de gue a rligin haya llegado a ser ‘aqui tan importante; muchos creen que la eligién ha prosperado, peradéjcamente, porque Estados Unidos, a diferencia de lo que jure en muchas otras democracis,carece de religin oficial 0 es- tablecida, Una Ipesia de Estado absorbe las sectas marginale y tien de mis hacia el ecumenism que hacia el fundamentalismo; en au sencia de una Iplesia ofc, florecen la secs fundamennalsas, y son estas secas las que probablemente tengan programas politicos ‘Lo que ha cambiado ahora —y ha atemorizado a muchas pe sonasno solo en Norteamérica sino en todo el mundo— es la mil tancia politic, ln agresividad y el aparente éxito del fundamen. talisma religioso, La religién desempeBé en el pasado un papel ‘deplorable en la politica norteamericana, pero tas la eleccién de JJohn Kennedy en 1960 —ningiin eatlic haba sido elegido pres ‘dente antes que él—, el uso partdista dela tligin parecié tabs Sin embargo, la inhibicién empez6 a evaporarse durante el manda ‘ode Reagan, y hoy parece haber desaparecido, Los ministro dela Ipesiaeatdica y evangélica pidieron abiertamente la derrota de ‘7a Wademceracla posible: a John Kerry, un grupo de obispos incluso leg al extremo de decla- at que cualquier calico que votase por Kerry debetia set exco- plendo, La campata de Bush esuvo plague de referencia @ os, y su segundo parlamento inaugueal sorprendlié al mundo su explicitarligiosidad, 7 ‘La comunidad evangéicareivindicé su contibucion a la victoria dde Bush y le pidié una recompenst por los esfuerzosrealizados. El reverend Bob Jones ITI presidente de la Universidad Bob Jones, es ‘un ejemplo extremo, pero su tooo trunfal no era inrecuente, Eseri- bi6 a Bush: «Con su reeleccin, la gracia de Dios ha garantizad a ‘América aunque nose lo merezcs—unasuspensién del programa el papanismmo. A usted se le ha concedido un mando ..1. Ponga en pitica su programa punto por punto, Usted no debe nada alos Tibeales.Ellos le menosprecian porque menosprecian a s Cristom! No esti claro que el reverendo acertara al afirmar que la elec cin otorg6 un mandato a Bush afavor de un gobietno cristiano te Iacido; no hay certeza sobre cuntas personas votaron 4 Bush ba- sindose sobre todo en razones religosas. Una encucsta a pie de urna muy citada sugerfa que para muchos votantes de Bush la cues ‘tin mis importante er la que tenia que ver con lo que la encuesta «tiquetaba como «os valores morales». Muchos comentaristas at ‘micron que el significado de dichaexpresisn hacia referencia alos valores rligiosos, pero «valores morales» es una descripcign ex cepciooalmente opaca, y otros analistas piensan que Bush consi _guié su estrecha victoria porque la gente pensé que el ra el candi ‘dato mis duro con los teroristas. Todavia no sabemos qué pass, ¥y quizé nolo sepamos nunca. No obstane, la religiin como mini ‘mo desempefé un papel importante en laeleccién, y los candida ‘0s politicos —tanto demécratas como republicanoe— sientencla- ‘amente a tentacién de hacer un uso del retéricatligosa mucho mis explicito del que seria tolerado en otras naciones con una ma ddurez econdmiea y democritica simian? 1, Vee Bob Jone I Retiring from University, byw mee, ms cor 85082 r/R), 2. Vase Jue Lovone, lah Was « Democrat, Iteration Hevld Tre,3 de enero de 206. a ee ee ‘Asociaciones de padres y consejos escolares a lo lango del pais ‘presionan a los profesores para que informen asus estudiantes de Te existencia de alteratvas a la teoria darwiniana de la evolucién tales como In Hamada «teoria del diseo imteligenten, que fue cali- fieada por un juez federal nombrado por el presidente Bush como ‘una forma camuflada deinstruccin religisa cristina. Cuando los jueces de Florida decretaron que se podiaretirar li alimentacion {que mantenia con vida a Tere Schiavo, una joven mujer que se ba bia mantenido en estado vegetativo persstente durante muchos meses, algunos politicas denunciaron que dichos jueces desafiaban In voluntad de Dios. El Congreso intents interven, y el que en ‘aguel momento era lider dela mayoria parlamentaria republicana, ‘Tom DeLay, que desde entonces ha sido acusado de varios deits, declaré con una insensbilidad escalofrante que Dics habia conce ido el suftimiento de Schiavo al pas «para ayudar a hacer més vi sible lo que estaba pasando en América.’ Notodas as personas re Tigiosas participan en esta hoida hacia la eligiosidad politica. John Danforth, un minstr erstiano que fue senador republicano por “Missouri durante dieciocho ais , durante un tiempo, el embsja dor de Bush en las Naciones Unidas, dijo recientemente que el Par- tide Repablicano cha levado tan lejos la adopcién de un programa scctaio que se ha eonvertido en el brazo politico de un movimien to religion. «Como senador —prosegula—, me preocupé todos los das por lt magnitud del deficit federal, No peri ni wn solo mi- ‘natoen atender ala amenaza que los homosexuales pueden repre- star paral intcin delat, Hoy parsseimpenete lo ‘ontario! No abstante, muy pocos politicos en activo han de: hhuneiado pablicamente el fenémeno que Danforth deploraba Elabrio mars a diferencia l omer alvin ean élico, que habia conseguide un gran poder social en muchas zonas ‘de Estados Unidas, en una fueraa politia mis potent. La resolu- cn del Tribunal Supreme en el caso Roe v. Wade de 1973 otorgs 3, Vea eHow Faniy’s Cae Reached the Hall of Congres New York Tine 22 dear de 2015, sc A pi “SV Join Dantoth, sn the Nae of Pons, New Yok Times, 30 rmaran de 209, sec A, pi. 1 eaten a *osmiembros dela deeca reign 7 : un xs gue consdearon ‘Syeimpornin une cause gue pes tiara ques tna hetroges minora, eon rend {Tin fn 1923 se deeido peter qo ml bandera se feria la bandera {i Baades Unidos, po el erbio pico legs en 1934, uando leno \Sersconmovid por un cm elie, deli fara acne Dis, {pail ce Es dow palabras han tind varias eens utes, 1 ivenen nels una de un tna de Frid ora del Supremo, qu vt ronunclane bre posible iacortconldad de et onc que vio: Fic ln elas dela Psimera nied La yesin orignal de 1892 6 «h ‘lela uleyiune tomy Fagan othe Republic for which stands one Nation Tatwubl ih Liberty and Js forall, De 192314 fu: pled all (une tsb Flag ofthe Unie States of Amer snd tothe Republic for which EES onc Nation nile with Liberty an otc For ln Desde 1954 [Spee aleanee to the Flag the Unie Sates of Ameria, and othe Re Fuliicfor which tard one Nao wader God ndble, with Liber and ste oral N de) a ——— 4 sus hips escucla prvada enlugar dea escuela bls, oan: do sabamos que acabara tisindowe prncpalmente part apoar * esculasconfesonle? ‘Se debera pete que en lx espactr piblcos de ciadadesy pueblos se exhibieran sinbolosrelpionse Como os bos de Navidad y as menors)¢Debers un here ‘net autoreacin pare oa laa dels dice mandanionos ca las pares desu ala deve? :Debe entcarse Darwin y ton a como del Bg angen as ecuca pblcar? Si ae dlberaordenae alos profeores que expuscrn qu algun clon tos eputadosrecaran estas tes ydfcnn nctneninde ridencas inten slidas de que wn mitorntlignte ac el tniverso low sere manos? ¢Debenaguels personas aya sin equer o poh un acto leealment prebbidew quedo Seda exasdel cumpliminto de las eglaciones cinco ses generale? Puede un ato que od la guerra converine set de condencs? sugerir que un ateo se siete «menos miembro dela comunidad politica cada ver que sus conciudadanos norteamerieanos» recitan esa expresén. La ‘Constcucin, dijo, so leexige al gobierno que no imponga de he- ‘cho a los ciudadanos ninguna declaraién w observanca relzioss, ‘y.que no establezca realmente ninguna reign oficial, Esta es una formulacién extrema del modelo religioso toleante, pero podeia reflejar bastante bien la postra dela mayoriadelos ueces que hoy cjercen. Son muchos otro fos aspectos, que al lector le parecenin mis ttivales, ue parecen indicat que nos acercamos mis al modelo re- ligioso tolerante que al modelo laicotolerante. La mone nacional expresa nuestra confianza colectiva en Dis, ls grandes institucio- nes de gobierno inauguran sus actividades con una oraci6n,y muy ‘pocos analistas esperatian que el Tribunal Supremo delaras in- ‘onstitucional la referencia a Dios contenida en el Juramento de lealad, si alguna vez tuviera que decid sobre este asunto. A me- ‘nado se argumenta que estas précticas son slo ceremonies, y que ‘se murmuran mecinicamente del mismo modo que un opersdort telfinico desea los buenos dias. Con todo, creo que el Tribunal Supremo desatara la furia nacional si finalmente deciiera modifi ‘carla formulacién actual del Juramento; esto da fe de la importan 1, Alegheny Coty ACLU, 492 US. 373 (198) deen del mais doKeonedy = ‘Religiio y dignided 87 cia simbslica nada banal de que gozan las invocaciones oficiales de Dios. Dichas invocaciones garantizan a los ciudadanos creyentes ‘que no viven en una sociedad fundamentalmeote lic, en la que incluso las referencias oficiales « Dios de careter accidental est rian prohibidas. Retioi6s ¥ tnenaLismo rouirco ssTRICrO Por tanto los ibe no podemos firma co cencza qu modelo ic cs c modelo histo de Estado Unido, Pere debe foe inven star el debate en foe printpon, 2a ex a Raton Durant agin tmp macho nfs profesools bea de ‘Norteamerica han ntetado lat ss consdeacones cee del ronrama poco dela cise de cusiones mis generals que ene econ a loa moral nee, en parca con Intel Este exatepaome alento den ypernzs act, Yn e ota guc ade du lox miembros razonables Je un coms rida polite desarin vents en trmins de espeto 9 cla bra mi ors ci carions uv impane acl eel may aye sof Joh Ra ring lain plc," Acrparo que deben jin oe: Channels deine pln lo ono cs en Eminon {tr cae uno pueda enendery cya fers pueda cada ono ape Gar dade on compresses crea sells, nora cas Eon conacconesinpedan awa inchs nae cligons ccuminict en lems de qu lqnos mizmbros del comunidad ‘echmsen cual fon de eligi ex Intra de Gh Estado lo tolerant, As pues, pda neta configuar cso debate ea tomo aa cexln de lds debemes acepear ins eonstricones gu impane aun abla. No obstnte el mismo Reels decrbi lox puto ie dean propucsa Come e pose C1 para los creyentes []axpiar th regen eonsiuonal cuando si dotnas no pueden poe 12, Vase misc de ies de Ral earn pica en Jase in Robes apul9 (58 La demiocracia poate pera n ly deecho hasta pueden deca" Debemos onl deat la cust desde el punt de vista de extas personas Muchos, ‘omeradores rele pensan gue un dios sl responsable dl xeepional xt y buen forma de Estados Unidos de stb fuer, ycreen que conetiuye una baja peligro nga es dios el aradeciniento pico que merece su gaca, Newt Gin arich declare «Deberoereafirmar que nuestros derechos proves ten de neato Crendor,y que una America uc hu expubao a Dic dela arena pie e ung Americ en proceso de decaenca ave camina hace le derotan Los noreamecans ue compat ten ea opinin no pueden cpaar ale envision rion de sus prncpos ples. Su comiconc religion ion prnpios Poltco. No acepan que la cbnervncn priv sen un sustiano del compromito religiso pablo, cuieen hone «su dos no A6lo como celebrantespritndo, sine anbign como chudadanon (Quieres verte if enn ptona de modo que won Ge promos findanen uno, No enueatrin atv algun en rnp qu es recomienda dejar un lad es aici rscen deme por dfcrencia hacia lon que no comparen sf eligons Pensa qe ets personas etn profundameneeequvocadas que verano por pio No en gc eh fic su naceesible alo ato, tampoco piensan quel diosa guc fonran deniegue su gra a exe pesos plestn mis len que lo atone ga con sores ai sus crenonc a verde {Bor ut deberan abundonarla profnds ambicons desu es plement pra sisfacera quienes perten en xa ones? “Adem, 0 etd nada claro que fuer algo deseable par ox crcjentes mantener us convcciones separadas des pli, ah undo pudiran hacerlo, Martin Laer King Jeera un bore defy recur a religtn ara condenar oe prejucioncon ura gyn elcid alginos curs exces hablando er eid de uta han stad en la vangardia dea ach pola justia so Galen Latinoamérica yen oto lugares. En cule co, lor 13, Jon Raw, Coleted Papert (Harved Uniesy Pres, 1997, pi x8 38 14. Gingrich, Winning be Fate, i — a berales no logranin que los creyentes dejen a un lado sus convic- cones religioss cuando asumen el papel de ciudadanos. Este pa- ppl requieresincerdad y autenticiad, fo cuales imposible para sas personas a menos que mantengan sus creencas relgiosas en ‘mente El cisma en torno ala religion en Norteamérica muestra las limitaciones del proyecto Udberts) para referirme al eonjunto de derechos que el gobierno —— a debe csablecery hacer cumpli a finde protege la esponsbi- Tide ca personal de lsindivdos dbidamente entendida Usae tél términe alberta freedom) de un modo més neu, defor thaque euandowun gobierno impidea una pervona actuar del modo tr duc lla desea, clita que el gobiemo limita su iberad. Defi ‘Gren etecenide, libertad noes un deal politico, No hay nada fe ementar porque se me impida seccstea asus ios no sa maida conta mi singune insta nf skuirs una que poder, parecer necsaria © perms Ea cambio, las Uibertades, wy omo las defn, ison dec luego un ies police denifican Suen reas de ibertadeuya invasn limitacon por parte del Gpbiero cr inorrecia, Esc ex el ideal que debemoe exploar a os dos modelos que etamos comparando divergenrespecto del sleaneey del tipo de Hberad eligi que cada uno ofrece- El ‘modelo eligioso tolerate parte de una concepeiénexrecha dela ibertadrlgioss que noinclye, por efemplo el derecho aborts, fo ematie con aiguien del mismo sexo. El modelo lic olerante {ose en una eoncepeiin ms amplia que sf inlue el derecho a tomar tales detiones, Son teorias rivals de as Hberades. Cuil {ln teoria mis apropiada para una nacion en la que una amplia tmejoracrece an ce "Previarcat aime que quienes apayan el modelo religwo tle ante podiian defender eoncepen esrecha dela iberad rel dona nisiendo en ge la cligion es especialy require, por tanto, tn po de proteccin que n sige par ors actividades. No obs tant i ponemos un poco deatencin, nos daremos cuenta de que to pueden adopear esta delens, puesto que extionden la iberad taligios los ates ante como alos ereyentes, por lo quenecesitn Un tora mis gener de las Hbertadce para defender eu exten én. Los estadsts que fundarn la nacion norteamercanaencls- jlo xvi tenfan pofundas zones de indole prictica para proteget Ai dsensignceliginn. La hse es conoid ls teribles puerta de religion que asolaron Europa durante los sglos iy xv de smostirn as trgeaseonsecuencias de impane una otodoxi Tigi a berad religion ucla mejor, y il nica, manera de frena a goer civil masacre, Nuestros paces fundadores hatin iene —— ran partcularmente conicents de la sangrieta historia de la = ligins a lvergenciareligoa, que fue deta en la formacign de varias coloias norcamericanas, sino que también consttyé una Fuente de divsin e incluso devclncn ene ells. Per eta ext plicacin no bastara hoy para astficar la volerancia del tise delat religiones minors, La extabildad poltica ex mucho ma orn I Norteatdricacontapodnea en otes democracy mga Gras de lo que ersen la Europ del xvi, Podiamos provoct una ‘apantoas ola de terorismo sl prohbigeanos el ‘slam en Extadog Unides, pero no tendramos mucho que temer si negisemos lag iglesia o asambleas de lor Testigs de Jehov, ode los dscipulog de everendo Moon, ain menos si cbligicmos aos ios de log tueon a lear y recta el padrenuesto en lee En cualquier caso, as personas que ge nclinan por el modelo reigioo tolerate crecn que ladfens dla libertad sligona para todos inluidos los aeos, es una cuestin de principio, po sle de prudenciapotica, Algunas de ellis pienan que libertad es por ‘misma una exigenciatolgica; John Locke, por ejemplo, star + que lat conversions forzeascaecan de valor ante Dic, y la Ley de Virginia para libertad religions, cl precedente dels cau sula sobre reign de la Primera Enmicnda, arma que cualauiet, inteno de imponerla reign wae ale del plan de Creador Sgr do de nuestra relgins, Pero anque muchos cryentsestadoun denses eompartetn xe punto de vista ello no expliata por qué considera injusto que el gobierno ofcalice iglesias les propo Gione apoyo fnancieo tal ome se hace en otros paises. Por a mmo, podtia deci qu arin e especialy nee una pe dial proteceiin por na rnzin diferente: para muchas personas religious la observancia cx una cuestin de trscendenta impor. tancia, de le que dopenden, sein lla, u saracion osu conden etcras, de modo qe cual limitaion dela pric eligioen Isc un eh epee ge Ds hos tos ‘At pucs,sanalizamos en detalle I concepcin religiosa tole rane tl como ex defendida hoy en Noneamérc,veros que debe ‘eeuriea una tora mds general dels Hibertades para expire ‘ado de tolerancia quel caractevza No puede simplemente spe — we lara la importancia o al valor de a religin para defender dicho ni sel de toleranca, Psta es una conclusién importante porque impli- ‘ea que la discusign entre los dos modelos debe levare aun plano filossfico més gener Silos dos enfoques deben apelar una con cepeién mis general de las ibertades, podemos clasficar cl debate fenire ambos si planteamos la euestin filosfica de qué 3 real- ‘ent las libertad. La WsTHUCTURA DE LAS LIBERTADES. Tal y como die as libertades no se identifican con la mera li- boerad. Natlc tiene derecho a vivir como Te apetezca: nadie tiene derecho a una vida consagrada ala violencia, el robo, la crueldad 0 tl asesinato, El gobierno limita libertad de las personas no slo pita protegerla seguridad ya libertad de los demas, sno tambien ‘en muchas otras ocasiones. Los impuests también limitan mi ca pecidad para vivir segiin mis deseos; podria adornar mi vida con ‘muchas cosas ue considerovaliosas, si el gobierno me permitiera ITenarme los bolsilos y mantenerlos asi. Pero la mayoria de noso- ‘ros no considera que la tibutacin limite las libertades. A veces, parece que el pago de impuestosconsttuye una ofensa al autorres- eto; asi seo parecis, por ejemplo, aH. D. Thorens, que se opon! ‘adicalment al destino que iban a recibir dichos impuestos. Pero la mayor parte de nosotros, la mayoria de las veces, no consider ‘mes que pagar impuiestos sea un acto indigno o un insult a nuest Capacidad de lepir nuestros propios valores. posiciones plausible acerea de cules sn realmente ls valores de las personas, porlo comiin también esti respaldadas por importantes justicacionesdistiburivas, Pero otra eyes slo pueden jusfcarse prtiendo de un supuestoprofundamentepatemalsta: que la mayo ‘Ha conoce mejor que alguns individuos dénde encontear el valor en sus vids y por ello tiene derecho a forza acichosindivduos a bus: ‘arse valor a donde ella cre. Este tipo de lye atenta conta las libertades y deben condenarse como aftenta a a responsabilidad personal que cada individu tine sabres propia via En este momento, el lector quinitenga la mpresin de que e- {as importantes conchisiones pueden resular determinants en la an ‘leccin entre los dos modelos de religin y politica, favoreciendo la opcién por un Estado laico toleante frente a la opcién por un Estado religiso tolerance. in embargo, esa suposicion es preipi- tada porque el debate importante no ha hecho mis que empezar. Ladfensa mis poderosay més conocida de instituir un Estado re ligiso en una nacicn la mayoria de cuyos miembros son creyentes ‘no es un argumento paternalist, sino cultural. Dicho argumento parte del supuestosegtin el cul una mayoria politic tiene derecho ‘crear la cultura en In que desea vivir y educar a sus hijos, no por bien de la minoria que podria oponerse, sino por el propio bien ddelos micmbros de la mayors; porque una sociedad abiertamente ‘comprometida con los valores relgiosos es mejor para ellos. Aten ‘dames, porn momento, ls argumentos que acualmentesecon: ‘ideran como los mejores argumentos a favor de prohibiro regular | pornografa. En el pasado, la censura de a pornografia se defen: «di por razones pavernaisa Ia lectura de pornograiacorrompe a las personas, por lo que debe prohibitse por su bien. Pero hoy es ‘mucho mas popular una jusilicaién dstinta de la censura el ma terial sexual explicito debe prohibirse para protege la cultura ena ‘gue todos los ciudadanos deben vivir. A los padtes les resul ‘ns fii eduear asus hijs en la valoracién de la sexualidad como ‘una intimidad construida sobre el amor si &tos no se vieran cons tantemente expuestos a materiales que ofrecen del sexo una ima gen muy distinta y menos atrayente. demi, los nifios no son las ‘inicas personas que se ven amenazadas por la degradacién cultural dde Ia sexualdad, En particular, la representacion de las mujeres ‘camo exclavas sexuales 0 masoquistas, habitual en buena parte de Ja pornografia, constituye un insult hacia ella que ademas conti bye a teforzar su subordinacién. De hecho, todas las personas, hombres y mujeres por igual, pueden sentir que la sérdida explo- tacidn comercial de las experincias mis intimas rebaja el valor de ‘us vidas. El argumento anterior no es un argumento paternalista Al conteario, cia el derecho de una mayoria de personas w dar forma a una cultura que influye profundamente en sus propias vidas. sta es la cuesti crucial que debemos abordar bora respec todela religin, ¢Quién debe controlar, y de qué manera, la ult:

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