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| ASOCIACION [A | P } I | PSICOANALITICA (:c)B A ) DE BUENOS AIRES Psicoandlisis Comité de Arbitraje "Ensgue Alba Dra. Adriana Yankelovich Indice ‘Masoquismo Ricardo Avenburg Conversando con Freud sobre “El problema econémico del Masoquismo” Leonardo Peskin Los masoquismos y su diversidad Delia Torres de Aryan y Raquel Duek de Escandarani Fantasfas de la escéna masoquista ‘Trabajos Arbitrados Gustavo Canti Los usos de las nuevas tecnologtas: notas para un andlisis metapsicolégico Juan Gennaro Latransferencia lateral Raiil E. Levin El juguete Marta Martinez Romén las paginas de Intemet PRO ANA y PRO MIA: Janine Puget Efectos de presencia, efectos de ausencia Diversas maneras de pensarlo 229 249 259 275 299 337 361 385 CY Autores, Restimenes y Descriptores CV Autores, Restimenes y Descriptores 403 Los usos de las nuevas tecnologias: notas para un anilisis metapsicolégico Gustavo Canti “nuevas tecnologfas” constituyen uno de los campos de la jones sociales que los j6venes eligen, utilizan y valoran con intensidad e independientemente de su condiciGn econé- escolares. Si consideramos las “nuevas tecnolo- *" como objetos socialmente instituidos, es decir constituidos por ificaciones imaginarias sociales, comprendemos que constituyen \de las ofertas sociales més ampliamente investidas por los j6venes ‘os ofrecen una oportunidad valiosa para interroganos acerca de procesos de investimi tivo y la pasiGn con que algunos jovenes se ulan con estos objetos (tanto dispositives como formas de proce- iento) que constituyen las TICs," no podemos dudar de que se trata procesos ligados al placer. Placer sustitutivo que nos interpela: ,qué as de satisfaccién obtienen los sujetos en su uso de Jas TICs?, Las teenologias de la informacién lementos y las tcnicas usadas en principalmente fa informstia, Interne Pisctelli, 2002) isis - Vol. XXXIV - N*2- 2012 - pp. 275-298 275 —_— {qué rasgos de los objetos virtuales los atraen?, ;qué procesos psfqui- 0s los sostienen? | Pero no todos los sujetos parecen aprovechar su uso de las TICs en Gustavo Cano yy de apropiacién de las TICs ligadas a procesos sublimatorios, es decir que permiten el placer sustitutive por mediacién de los objetos sociales, de aquellas otras ligadas a modalidades restrictivas. Para analizar las formas de produccién simbélica (Schlemenson, 2009; Schlemenson, 2010) de los sujetos en su uso de las TICs, un equipo de la Citedra de Psicopedagogia dar cuenta de las transformaciones en los procesos de subjetivac produccién simbélica de los j6venes en relacién con el uso de las nuevas tecnologias. Para profundizar metapsicolégicamente en ese problema, en este trabajo recurriremos a los ejes que André Green propone para el anilisis del pensamiento como problema psicoanalitico (Green, 2001). } Abordaremos cada uno de estos ejes en un apartado especifico. 1. Las fronteras Eneste nivel de andlisis, el problema estéen articular las relaciones entre la frontera que separa el interior del exterior, con la que separa Jos sistemas Consciente-Preconsciente e Inconsciente, Estas fronteras estén siempre en juego y en cuestién, dentro de relaciones de reunion | y separacién. | En la clinica con nifios disponemos de un material fécilmente maleable que permite a nuestros pacientes desarrollar ~cuando les es * =Nuevas tecnologiss: compromiso psiquico y produecién simbélica”. UBACyT 2006- 2009, Directora Dra. Patricia Alvarea 276 Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N’2 - 2012 - pp. 275-298 “108 308 be LAs NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOGICO jicamente posible~ escenas de juego en las que intervenimos nie. La plastilina, en efecto, es lo suficientemente diictil para recibir cualquier forma, pero a la ver lo suficientemente ita por ejemplo sostener la identidad de un personaje o ser contrada en una sesién posterior. La plastilina puede tomar jet forma, pero a la vez.es algo: es decir que es manipulable a 2005). lina para arrojar al piso, revolear, cortar en pedazos, es decir que realizan usos predominante- igados a la descarga. Otros se empefi -cionar su idad de construir pequefios modelos a escala: autitos, muiiecos, tas, flores, etc.,en una actividad con arreglo al principio de realidad, algunas veces esté puestaal servicio de generar elementos para un, 30 dramatico posterior, pero que otras veces se reduce a la mera cién de ajuste a un referente externo. Otros, finalmente, constrayen s objetos con ciertas caracteristicas que permiten indicar ina semejanza con un referente, pero sin que la actividad se centre semejanza: lo importante para ellos es que ese objeto sostenga egoenel que se enmarca. Asf, inventan naves espaciales, bombas, of0s, dinosaurios, con semejanzas apenas sugeridas por un rasgo les es suficiente para dar lugar al despliegue imaginative y co del juego. Realidad y placer se articulan entonces en un que hace posible la construccién de mediaciones para la i6n simbélica, Otx0s objetos frecuentes en una caja de juego son mufiecos, males de juguete, autitos, soldados, etc. A diferenciade 95 objetos tienen una consistencia que sostiene una si © mas restringida, pero de todos modos susceptibles de ser multdnea o sucesivamente- ya sea receptores de las proyecciones los nifios (que los convierten -de nuevo: cuando esto les es dlisis - Vol. XXXIV - N’2- 2012 - pp. 275-298 277 Gustavo Cano psiquicamente posible en dobles narcisistas (Green, 2010a, p. 133) puesto que encarnan aspectos de sf mismos durante el juego), ya sea meros depositarios de la descarga, ya sea en soportes de un pseudo juego estereotipado al servicio de la defensa. Algunas formas de accién o de produccién en el espacio virtual tienen modalidades que Hevaron a Tisseron a describirlo como una “pasta de modelar numérica” (Tisseron, 2006): en algunos juegos se ir espacios, objetos y personajes que permiten expresar nntasfas y sentidos singulares de los sujetos. Por ejemplo, el juego de Los Sim’s, en el que se trata de construir personajes y disefiar una vivienda para ellos. En un primer aspecto del juego, se cionando paredes, puertas, ventanas, pintura, papel de empapelar y todos los elementos de avatar “a la carta”. Hace algunos afios, si hubiésemos deseado favore- cer en un nifio procesos semejantes a éstos, le habriamos ofrecido plastilina, bloques de construccién de madera 0 pléstico, objetos de in, mufiecos. Pero si lo que nos interesa son los procesos psiquicos que se desarrollan en el sujeto, el hecho de que los objetos ‘que manipule sean de plastilina, madera, plastico, bits de informacion ‘0 pixeles en la pantalla, simplemente carece de relevancia. Podremos leer las marcas de la idad en los objetos que el nifioo el joven construye o selecciona, en los sentidos singulares que se ponen en juego, en los modos en que los manipula y en las asociaciones y verbalizaciones ligadas a dichos objetos. En un segundo momento del juego, estos personajes desarrollan fas acciones cotidianas: trabajan, miran i6n, Haman por fono.aamigos, atienden sus necesidades de alimentaciénehigiene limpian su casa, se enamoran, mueren. Algunos sujetos prefieren el primer momento del juego, donde de lo que se trata es de constr personajes y la casa y se habilita la posibilidad de crear una realidad acorde con sus deseos. Y es que estas casas y estos personajes estén 278 Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N° 2 2012 - pp. 275-298 5 USOS DE LAS NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAFSICOLOGICO, i; pero fundamentalmente~y para usar la la materia de la que estén hechos los Jes da, no son sino aquello que 0s de bits y de pixeles sjeto proyecta en ellos. Oiros sujetos invisten mas significativamente el segundo momento aciones, poner en escena j6n, Aqui se trata de una inscripeién de implicada en el primer momento del ienen la forma fisica y la por el jugador al ini de los deseos del jugador de interactuar socialmente, de pagar sus cuent les que no pueden ser obviadss por el jugador im) a quien no ode un medio complejo que opone resistencias a la actividad del to a que permite al sujeto sin embargo ejercer modificaciones. ‘Gandocapratopsiqio pute aprovecharestamaleabilidad del ia investidura significativa tanto del cteristicas consistentes con los procesos trai it objetos y personajes con jica del sentido subjetivo. El funcionamiento cuasi magico del Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N° 2 -2012 - pp. 275-298 279 Gustavo Cano dispositivo permite la realizacié ria de deseos en la pantalla y la puesta en escena de angustias, temores y conflictos. Como mediante unos simples clicks se puede alterartanto laconfiguracién de yes ambientales y dar instruc~ de los objetos y personajes impone al mas de elaboracién en cada caso Yo del jugador, prot diferentes. El mismo dispositivo actiia como una suerte de prolonga iestimulo contra esos representantes de la snte con un simple clickes posible detener el partida quel sujeto grabadeliberadamente y borr desea suprimir. Por lo tanto, y puesto que el disp lura que un sujeto gu haga del yun modo objetal de reconocimiento de la difere objeto adquiere las caracteristicas paradojales que cripto a propésito de los objetos transicionales: el sujeto no necesita jams decidir qué viene de sf y qué del objeto. Por el contrario, cuando para el aparato psiquico no es posible constructivos (si los procesos secundarios permiten la ordenamiento espacial necesario para la configuracién del edi 's actividades: ‘cotidianas de los personajes), pero desligadas del sentido subjetivo: s, prolijamente decoradas, personajes cuyas “ne ‘i * son atendidas puntualmente, pero a quienes nada”. La desligazén subjetal (Green, 2010b, p. 103) riencia a los hechos concretos y a la resolucién operativa de lo que el 280 Psicoandlisis - Vol. XXXIV -N?2.-2012 - pp. 275-298 USOS DE LAS NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOGICO 0 plantea: “Hay que darle de comer, ves que dice ahi”, dice (0. Siesta desimplicaci6n subjetivaes el modo predominante del . 114) con el propio mundo interno. Turkleha observado (Turkle, 1997) que el espacio virtual comparte de las caracteri icionales (Winnicot Es decir que cuando la dinémica de la transic itwise en] funciona dde una realidad tercera, en el espacio transicional, que no es ni la idad material externa ni la realidad psiquica interna, El sujeto se ye enesa realidad que construye a partir desu trabajo sobre y con eto. La relacién que los sujetos establecen con los objetos y virtuales no escapa a las modalidades que signan nuestra Ji6n con los objetos en general; por lo tanto esti atravesada por el de unirse con el objeto sin perderse y a la vez el deseo de uararse sin perderlo. La dindmica fusién-separacién es, en efecto un constitutivo de nuestra relacin con los objetos (Green, RON poandlisis - Vol. XXXIV - N°2- 2012 - pp. 275-298 281 Gustavo Caro in amenaza de pérdida. Cuando por distintos motivos esta no se ha establecido, el deseo de fusion leva al sujeto a ee y Véléa, 2010) del objeto con incapaci- id y con debilitamiento o ruptura de los lazos significativos en ocasiones formas de contrainvestidura destinadas a controlar y pérdida absoluta: “Mejor no chateo nunca mas”, decia un joven al haber notado que cada vez pasaba més horas en esa actividad. Esto nos permite preguntarnos cuales son los parémetros de la economfa de las fronteras psiquicas en una situacién peculiar como es el chat. Podemos ensayar una caracterizacién de estos pardmetros del siguiente modo: a. Ausencia de visibilidad directa del interlocutor. Atin usando camara web, esa visibilidad es indirecta, recortada y mediada, y por lo tanto artefactual (Derrida, 1998). Es decir que el sujeto se dirige aotro que s6lo puede representarse sin percibirlo directamente (aun mas si se trata de un desconocidio). El acotamiento de la visibilidad produce una estimulacién del sistema representativo a través de la limitaci6n de la percepcién. De este modo hay en los intercambios una ruptura de la referencia real y una ‘exacerbaci6n de lareferencia imaginaria, ya que nunca se puede compro- bar la adecuaci6n de la referencia real de un enunciado (“Hay gente que temanda cualquiera, yvoste hacés la re-pelicula, comono loestds viendo no podés saber sies cierto”, nos diré uno de los j6venes). La ausencia de idad modifica asimismo el eje presencia-ausencia, siendo imposi- instil pensarlo en términos dicot6micos, ya que el dispositivo ofrece uuna amplia gama de estados intermedios entre presencia (conectado) y ausencia (desconectado). Nada garantiza encontrar al otro onli siquiera el hecho de que lo esté, puesto que puede utilizar alguno de los modos de presentaci6n que le permiten mostrarse como ocupado, ausente, © incluso desconectado aun estando conectado. Esto crea suspicacias y 282 Psicoandlisis- Vol. XXXIV -N°2 - 2012 - pp. 275-298 LUS0S DE LAS NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOGICO, sn incluso programas “espias” desarrollados espectficamente para MAsno me pongo ansioso por vers esto no esté, pero como ella ‘me puede llamar, si me llama le hablo, sino, como ni la veo no me 1a...”. De este modo pretende conjurar la ansiedad que le produce de incluirse la posibilidad de ver y/o ser vi ijemplo como una situaciOn sumament signifi ‘que se desnudaron para otros frente a la cdmara web. b. Restriccién motriz: reduccién de la posibilidad de descarga por de los dedos en el Psicoandlisis - Vol, XXXIV - N°2- 2012 - pp. 275-298 283 Gustavo Canto idad directadel objeto y limita nes de palabra de un modo articulado con elementos no linguifsticos (emoticones, colores, elementos figurales, etc.). La puestaen palabras pasa a ser una modalidad de puesta en escer Podemos pensar entonces que esta clausura parcial de los polos perceptive y motorcreada por el dispositive del chat tiene como efecto un cierre parcial de las fronteras entre el adentro de la produecién psfquica en produccién simb6tica que en ciertos casos puede favorecer una cierta permeabilidad de las representaciones de palabra a las representaciones de cosa. Esta situacién se exacerba por el hechg de que el sujeto se dirige a otro que no puede percibir sino solo representarse. De allfla vacilacién de las relaciones entre el adentro y el intercambios que se generan en el chat es mencionada frecuentemente por los sujetos usuarios, para quienes al poco tiempo de chatear con un alguien, se genera un vinculo de un cardcter diferente de aquellos que se generan en las relaciones cara a cara. 2. Las representaciones Cuando un sujeto interactiia con dispositivos digitales, construye representaciones. Esta afirmacién de apariencia banal implica que -si consideramos la complejidad del concepto psicoanalitico de represen- 284 Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N’2- 2012 - pp. 275-298 110s us0s DE Las NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAFSICOLOGiICO én la forma de uso que un sujeto singular hace de un dispositive luiera no esta determinado por el objeto ni tampoco es puro liegue fantasmatico de contenidos 0 formas de procesamiento 108 del sujeto. neste sentido, las concepciones del psicoanilisis contemporsineo permiten superar la dicotomia sujetofobjeto y pensar de modo ejo en el entramado que se constituye en su relacién. Entonces, | trabajo del pensamiento se sitéa en la encrucijada de una doble : entre adentro y afuera por una parte, y entre las dos partes que dividen el adentro (fronterade los sistemas Preconsciente- iente e Inconsciente) por otra (Green, 2001). Lateorfa psicoanalitica del pensamiento no puede contentarse con a éste una funcién de exploracién del mundo externo, puesto esta exploracién esta relacionada con el trabajo psiquico que boca en la constitucién de las representaciones inconscientes y |comunicacién con la consciencia a través del preconsciente. concepcién de la representacién nos esclarece con respecto a y ladindmicadel trabajo de lo virtual. Asicomprendemos que sistema de la representaciGn parte del representante psiquico de la Gn estrechamente ligado al cuerpo, se expande en representacio- de cosa inconscientes y conscientes, se asocia en lo consciente a taciones de palabra, y por tiltimo se une a los representantes a realidad en el Yo. Puesto que la cadena puede movilizarse desde era de los cuatro territorios, podemos inferir que en la escena tenemos al aparato psiquico enfrentado a un objeto particular, sjor dicho a miltiples objetos heterogéneos: 4)el dispositivo material (computadora, celular, Wi, play-station, b) laplataforma légica (char, sitio web, juego de PC, juego en red, i, SMS, videoconferencia, etc.), en tanto organizan, limitan y bilitan las operaciones de produccién simbélica (Schlemenson, ) de cada sujeto singul €) por tiltimo la propia actividad de produceién simbélica como de investidura. Pricoandlisis - Vol, XXXIV -N®2- 2012 - pp. 275-298 285 Gustavo Canto sostiene que los objetos virtual por lo tanto es invis material) siendo que las si caciones? Si son objeto de sublimacién, serdn investidas por el sujet es decir que podrn reemplazar parcialmente a los objetos primarios ibiendo la investidura originalmente destinada aellos y se inen soporte de placer. En tanto externas al aparato psiquico, icaciones sociales se sitdan tpicamente en el espacio de lo a all{ se dirigen las investiduras del sujeto: el trabajo de lo ;plica una actividad que supone el envio de cargas de ener; atravesando la barrera de la proteccién ant de si y catectizar un objeto no sexual 50 Imente yroducen en la zona de pasaje significaciones sociales ii dispositivo en su heterogeneidad y las representaciones de palabra y las representaciones de cosa conscientes que el sujeto construye en relacién con ellas. En a interaccién con un dispositivo digital, estas representaciones estan organizadas de acuerdo con el proceso secundario, de modo que estructuran el intercambio en su aspecto I6gico y permiten dar cuenta de los aspectos compartidos y comunicables. Per significativa del objeto y de ia propia actividad, el intercambio no se reduce a las representaciones de palabra que estructuran el psiquismo sino que éstas constituyen un eslabén en el jas representaciones de cosa inconscientes. Entonces producen formas de trabajo psfquico en la frontera entre los t consciente ¢ inconsciente: este trabajo represent i per Ja produceién tenga no s6lo miramiento por la instituida) sino también sentido subjetivo singular (Alvarez, 2008; 286 Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N° 2 - 2012 pp. 275-298 Los us0s DE Las NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS MPTAPSICOLOgCO Alvarez, 2010). Merced a la doble representancia (Green, 2005), las fepresentaciones de cosa inconscientes son capaces de mediatizar la igaz6n de las representaciones de palabra conscientes (en el tetritorio consciente) con el soma, ya que se sittian como punto ;6nen el psiquismo inconsciente. La doble representancia abarca no sélo la biparticién entre las representaciones conscientes ¢ incofscientes, sino el hecho de que lo inconsciente esté constituido s6lo por representaciones de cosa mientras que lo preconsciente- ‘consciente lo esté por representaciones de cosa asociadas a las tepre- Sentaciones de palabra que les corresponden. La cuestién es entynces euéles son las relaciones entre esos dos tipos de representacjones sindejar de mantener el contacto con las raices afectivas que le confieren sentido. Por lo tanto, si bien esta estructurado por la organizacién l6gica y temporal del lenguaje como estructura y ordenado al servicio de la comunicacién y la resolucién de situaciones de juego, de intercambio 0 de construccién, esta predominancia de legalidad se- ‘cundaria ~que caracteriza al preconsciente-consciente, impuesta por Ja organizacién del lenguaje— no excluye a los procesos prim; sino por el contrario los presupone como condicién de posibil articulacién de los procesos primarios con los secundarios, que Green denomina procesos terciarios (Green, 200La) permite que el trabajo de lo virtual constituya un proceso subjetivamente apropiado y 10 un mero mecanismo de célculo, de estrategia 0 de comunicacién. 3. La ligazén izaciGn puede ser referida a los procesos de ligazénsomo ‘caso particular de éstos. Al problema de la ligazén se afiade que ésta funciona de manera diferente en los regimenes primario y secundario y atin més, el problema de las relaciones entre dichos procesos. En la comunicacién entre ambos es donde puede buscarse un models que nos permita no contentarnos con los productos terminados & Jos Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N° 2 - 2012 - pp. 275-298 287 Gostavo Cand deldispositivonoes elaborativo, sino quelasupresiGn omnipotente de toda huella (digital) de la relaci6n con el objeto constituye la puestaen escena: ito deanul fquicas que no parecen haber encontrado formas de tra ‘A Facu lo borré. Noque inningiin indicio de to la investidura de wertido en “nada”: la la rel bjeto sino que éste e: forma del odio que la funcién desobjetalizante trabaja menos bajo de la indiferen La tendencia desobjetalizante que leva a otro de los jévenes a decir: “Me conecto para desconectarme cuando estoy embolado” nos muestra la diferencia entre el funcionamiento predomina el principio de placer y aquél en el que lo predominante es Jaevitacién del dolor. Eneste adolescente, “conectarse” alared noesti alservicio de buscar gratificaciones narcisistas ni tel sujetos; paradéjicamente busca “desconectarse”. Los esno ingresanen un entramado de sustituciones al servicio del placer, sino en tanto permiten contrainvestir su propio mundo interno que se hha vuelto amenazante ya sea por su conflictividad o por su vacto. En otros casos, en cambio, las caracteristicas del dispositivo pueden ser aprovechadas para encuadrarlasrelaciones con los otros de in modo que no reemplazan ni excluyen Jos intercambios “cara a cara”. Enocasiones el hatear prepara, acompafia, prolonga oenrique- ce los intercambios “cara a cara”. Entonces no hay desobjetalizaci6n, sino una relacién de conjuncién de espacios que permite un apuntala- miento entre ellos. En otras, los intercambios virtuales son significa- tivos en si mismos sin necesidad de ser referidos a un encuentro posterior fuera del tiempo-espacio del chatear. Aqu{ tampoco hay Sesobjetalizacién, sino investidura de otros objetos, que no son ni cl cuerpo real del otro ni su presencia fisica, pero paradéjicamente como su presencia en ausen } aparato psiquico es capaz.de construir un espacio trans no se opone a lo virtual, sino que lo virtual es una de | experiencia de lo real. ‘La “metafisica de la presencia” (Derrida, 2001) nos Hevaa revestit formas de 290 Vol. XXXIV -NP2.-2012- pp. 275-298 Los sos DE LAS NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOGICO en tanto preparatorias para un encu para los jévenes las osterior. Pero it es medi " ni menos signifi ‘trata de una diferencia cuantitativa en términos de mayor o menor intensidad o implicacién subjetiva, sino de unaheteroge- E de 13 afios, nos hablaba acerca de los momentosen que fa deseos de conectarse al MSN: “; Viste cuando no querés estar pero tampoco te bancarias a alguien al lado?”. Esti claro in que se establece al chatear es conservar un grado de distancia igadura amenazada de y imulos que permite regular las excitaciones que .. La posibilidad de conectarse con varias personas vez o de alternar las conversaciones con distintos contactos, de mpi una conversacién con un simple click, de hacer y recibir iarios, convierten al dispositivo en un encuadre apto para lar ¢l ritmo de las investiduras del otro a los niveles en los que es table para la psique. De ese modo la confrontacién narcisista que fica todo encuentro con el otro puede ser atemperadaen una forma encuentro que ~al no incluir la presencia fisica~ minimiza los gos de decepcién y sufrimiento concomitantes a la biisqueda de ficaciGn. Asf el espacio virtual permite conservar la posibilidad jiente de los derivados pulsionales de donde nace, sin dejar de coandlisis- Vol. XXXIV - N*2-.2012 - pp. 275-298 291 Gustavo Caro mantener contacto con sus rafces afectivas, que le confieren su peso de verdad. Laabstracci6n suponeel trabajo de lo negativo, Asise produce tuna “depuracién” de los derivados pulsionales y de la carga afectiva por la que se mani Es decir que hay a permitida por porque le impone la exigencia de traduccién de una trama subjet absolutamente intima a una organizacién simbélica exterior arbitraria que es condicién de intercambio con otros. La renuncia al ediato permite investir otros objetos alejados de la din: articulan con las exigencias pulsionales mediante enlaces sustitutivos sntos Y representaciones. La mutaci6n energética que caracteriza la sublimacién permite la sustituci6n del placer de érgano por el placer representativo; de este modo una cantidad de energia Girigida originalmente a la descarga motriz se convierte en energia concentrada en la representaci6n o en el flujo representativo mismo. Gracias a la sul in, la carga energética recae sobre objetos no privados, es decir piblicos, que valen en virtud de suimpregnacién por las significaciones imaginarias sociales y que son convertidos por la psique’en causa 0 soporte de placer. Este acceso sublimatorio a los objetos publicos esté posibilitado porel trabajo de la imaginacién radical (Castoriadis, 1993);es pores gue Castoriadis entiende a la sublimacién como un retoio de imaginaci6n radical, ya que la comprende como condicién necesaria aunque no suficiente. De este modo se deja atrds 1a concepcién antigua de un sujet neutro, desapasionado, como una entidad fija y permanente, y pasa « concebirse como la resultante precaria y cambiante (unas veces dominado, otras veces dominante) con respecto al didlogo que man- tiene con la pulsién, supone recono imposibilidad de pensar los fundamentos del st obraen él, el trabajo pulsional. Es decir que el desarrollodel psiqui 292 Psicoandtisis- Vol, XXXIV - N°2 -2012 - pp. 275-298 Jas usos De LAs NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOKGICO menos de la relaci6n con la realidad que de la necesidad de al. Para analizar estos procesos en ar que I ilizan en general una (oaestimulos visuales y auditivos intensos. Es posible compa- Ja superabundancia de estimulos proporcionados por los sistemas sticos y digitales con lo que Bion concept beta (Bion, 2006). Para ser pasibles de ser ico, estos elementos deben ser metabolizados mediante lo que el funcién alfa, que en los momentos del psiquismo esta a cargo de quien ejerce los primeros cuidados bebé para luego internalizarse como una funcién del aparato ico. decir que el trabajo psiquico de ligadura de estos estimulos lica una exigencia de puesta en sentido: el sujeto se lanza a ar el espacio virtual del juego, el y esta internas que es necesario ligar. La i6n entre la busqueda de excitacidn y la puesta en sentido parece ‘el eje que ordena el trabajo de ligadura. {Qué sucede con la idn interna suscitada por la interaccién virtual? Hacerse esa unta clinica implica cuestionarse acerca de los modos de tramita- pulsional en un sujeto concreto, Las respuestas seran singulares: NOs Sujetos apuestan a una biisqueda constante de estimulos de Jaméquina proporciona una oportunidad de llenado del vacio con es y sonidos que cumple una funcién autocalmante. Es decir, sobreinviste la busqueda de excitaciones externas sin sentido, para icoandlisis - Vol, XXXIV -IN°2 -2012 - pp. 275-298 293 Gusravo Canto hay busqueda del placer sino que lo que s displacer del vacio. El principio de placer h zado por la En otros casos, la excitacién puede ingresar al territorio psiquico fadura de representaciones de cosa inconscientes +n continuar su camino progrediente hacia la consciencia por la de su asociacién con representaciones de palabra. De ese modo el sujeto podré elaborar una interpretaci6n de la situaci6n que ha expe- rimentado: una narracién que da cuenta de la puesta en sentido. y que nose reduce aladescargade la tensién sino que implicasu elaboracién significativa Es decir que para que el investimiento de los objetos piblicos sea posible, es necesario que se produzca un circuito de sustituciones que permita que algo del orden del placerseensamble con y se cireunscriba ites que le impone el sistema de significaciones sociales (Alvarez, 2008). Esta tensin entre las significaciones instituidas y los ruyentes (Alvarez, 2004) en cada sujeto se pone en juego intercambio con los objetos del mundo, y la relacién con las TICs no es sino un caso particular dentro del fi caciones sociales. 5. Conclusiones Estas cuatro dimensiones de andlisis nos permiten comprender las modalidades singulares de produccién de la experiencia subjetiva singularenel usode las TICs: cada sujeto, en cada situaci6n partic despliega una forma de ligarse hacia adentro con su propio mundo interno y hacia afuera con la realidad compartida con otros, utilizando los recursos que le son offecidos por las significaciones sociales, apropiados subjetivamente en el proceso de sublimacién, de acuerd. ‘con modos especificos de relacién de las distintas formas de activida, 294 Psicoandlisis - Vol, XXXIV - N° 2 - 2012 - pp. 275-298 {Los 50s DE LAs NUEVAS TECNOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOGICO, ica que sean homogéneas ni la del sujeto; no se trata de esiructuras en e] sentido de configuraciones estéticas -en las cuales ada elemento tuviera una coordenada especifica en su posicién en laci6n con los demés-, sino més bien de entramados méviles en los in simbélica, sino que cor lun encuadre que puede ser utilizado por los sujetos de distintos 's segtin sus propias formas singulares de producci6n. , cnol6gico, como de la plataforma légic: i Vida simbulicantey dela celacion con ott anges Los tipos de actividad desplegados en estos casos son muy varia- enalgunas ocasiones se trata de contactos con grupos de intereses fficos (como grupos de miisica, moda, cine, etc.) vinculacién y sda de personas, compartir archivos, bajar o compartir mi » Bn estos casos la accién del sujeto se organiza con arreglo all ipio de realidad ya que esté orientada al mundo exterior en busca objetivo resolutivo y requicre por lo tanto del funcionamiento de tefi ya que se lonen como condicién de investimiento del objeto. De otro la actividad seria puro despliegue sobreadaptad See vad st plieg iptado de una meta En otras situaciones se desarrollan actividades que para un obser- ‘externo no implican claramente la concrecién de un objetivo lisis - Vol. XXXIV - N°2- 2012 - pp. 275-298 295 ell Gustavo Canto manifiesto en la realidad compartida, pero cuyo anilisis las revela a s ylo narcisistas que las con- ss para los sujetos involucrados. Asi elforolog, enlamensajeriacelular, fetc., aparecen desprovistos de una funcis adaptativa y dan cuenta de un plus de placer que supone el funcionamiento de una transicionalidad a la vez entre el adentro y el afuera y entre lo .consciente, De ese modo se crean y se profundizan luales reciprocos entre los sujetos y s¢ sostiene el sna de modo que se su elaboracién gracias a la sacién de la economia de as psiquicas favorecida por los aspectos regresivos del dispositivo. La permeabilidad del funcionamiento de las representa- ciones de palabra a su ligadura con las representaciones de cosa permite entonces formas de produccién mixtas que sostienen el lazo del pensamiento y la produccién simbélica con sus rafces pulsionales. La funcionalidad del dispositivo en estos casos puede ser utilizada como un anélogo de la membrana para-excitaciones, permitiendo regular el sitmo de presencia-ausencia del otro y de la presencia- ausencia propia para el otro de modo tal que se habilita su elaboracion psiquica. En los casos en los que el aparato psiquico muestra probleméticas de vacfo representacional, no puede aprovechar las caracterfsticas de un dispositive en particular para producir un tipo de funcionamiento integrado entre los sistemas. En ese caso la producci6n virtual es ‘utilizada como intento de Ienar el vacio interno con’ estimulos proce- del dispositivo, Se produce una sobreinvestidura del objeto jonamiento en el que predomina no la biisque- placer sino la evitacidn del dolor. Asf ia ausenciaes desmentida porla profusién de imagenes y de informacién, y se logra mantener un frdgil equilibro de no-displacer, al precio de la desimplicaci6n subje- tiva (Green, 2010a). La oferta del dispositivo, lejos de ser una oportunidad de enriquecimiento psiquico fundado en la permeabili- dad de los sistemas, es vivida como amenazante ya que implica un riesgo para la escisi6n que sostiene Ia diferencia intrapsfquica. En algunosintercambiosen. 296 Psicoandlisis - Vol. XXXIV - N°2- 2012 - pp. 275-298 [Los Us0s De Las NUEVAS TECKOLOGIAS: NOTAS PARA UN ANALISIS METAPSICOLOGICO ‘otros casos, el riesgo ilizadonocomosostéi puesto en el afuera, y el dispositive es pasadas. 5. "Nuevas teenologias: compromiso psiquico y produceiGn simbéliea”. UBACyT 2006- in discursiva en nfios con problemas de simbo lizacién. Facultad de Psicologia. Tesis Doctoral, Universi . nF |, Universidad de Buenos Aires. (2010) Las trabajos psiquicos det discurso. Buenos Aires, lel discurso. Buenos Aites, Tesco. , W. (2006) Volviendo a pensar. Buenos Aites, Hormé . (1993) La institucion imaginaria de la sociedad. Buenos Aires, A, (1996) La metapsicologia revisitada. Buenos Aires, Eudel (2001a) De locuras privadas. But ; cer (2001b) La nueva clinica psicom Amorrort. (2005) Ideas directrices para un psicoandi Amorrortu (2010a) Ei pensamiento clinico. Buenos Aires, Amorrortu (20106) fusions et désillusions du travail psychanalytique. 2010, Odile Jacob. mie, M. v Vitta, D. (2010) Les addictions & Internet. Paris, Payot. contemporéneo, Buenos Ai lisis- Vol. XXXIV - N°2 - 2012 - pp. 275-298 297 Gustavo Cano Moknucuowice, R. (2008) La generacién multimedia. Significados, consumos y précticas culturales de los jévenes. Buenos Aires, Paidés. Prscrrenti, A. (200: — (2010) Constinucién p pedagdgico, Buenos Aires, en prensa. lacra 298 Psicoaniilisis - Vol. XXXIV = N* 2 2012 pp. 275-298 transferencia lateral Gennaro “Entredos fuegoslangado, donde amor es repartido, del uno soy encendido, del otro cerca quemado; yno sé yo bien pensar cul serd mejor hazer: dexarme mas encender 0 acabarme de quemar. Dezid qué debo tomar,” Jorge Manrique nocién franco-francesa Lanociéndetransferencia ha tenidouna gran repercusion 1a manera en Francia en donde balnearia en la costa Normanda, que, con su inmensa playa de fina, sus clegantes mansiones de arquitectura tipica: muros con es” verdes, techos de pizarra con los curiosos “‘épis de y su exquisita gastronomfa, recibe cada otofio a los miem- ~Omamentosen terracotaesmaltada o maderaesculpida que como centinelas engatanados ‘eoronan los dngulos y las cumbreras de Deauville is- Vol. XXXIV - N*2-2012- pp. 299-336 299

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