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a BOLETIN, oy ACciON ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA TOMO LXXVII CARACAS, AGOSTO-SEPTIEMBRE DE 1994 Nt 307 COMISION EDITORA SUMARIO CATALOGO DE LAS NAVES UNA SOLA ESTRELLA / Guillermo Morén, DISCURSOS DISCURSO PRONUNCIADO EN LA PRESENTACION DE CREDENCIALES DE EMBAJADOR ANTE. LA SANTA SEDE / Lucas Guillermo Castillo Lara CONTESTACION DE SU SANTIDAD JUAN PABLO Il. DISCURSO PRONUNCIADO EL 1° DE FEBRERO DE 1994, EN EL HOMENAJE RENDIDO A | DON CECILIO ACOSTA, POR LA GOBERNACION DEL ESTADO MIRANDA, PARA CONME- MORAR LOS 76 AROS DEL NACIMIENTO DEL SABIO / Tomfs Polanco Alcéntara. HOMBNAJE A LA UNIDAD EDUCATIVA “GRAN COLOMBIA”, EN SUS 100 ANOS DE EXISTE: j CIA / Enmila de Veracoechea. i CONTESTACION DE ROSARIO BARAZARTE DE ABDALA. : DALLA COSTA / Manvel Alfredo Rodriguez. DISCURSO PRONUNCIADO POR EL EXCMO, SENOR JUTARO SAKAMOTO, .EMBAJADOR EX- TRAQRDINARIO ¥ PLENIFOTENCIARIO DEL JAFON EN VENEZUELA EN INCEPORTUGUE- SA EL 10 DE MARZO DE 19. ESTUDIOS JESUS QUEVEDO TERAN, CRONISTA Y PORTA DE CARACHE / Mario Briceifo Perozo, CONDICIONES GEQHISTORICAS DE HISPANOAMERICA / Ramén A, Tovar Le GOBIERNO, DERECHO Y ADMINISTRACION DE JUSTICIA EN HISPANOAMERICA EN 1ABtO : CA COLONIAL / Jaime M. Saleh, MISCELANEA / BIBLIOGRAFICAS / DOCUMENTOS / VIDA DE LA‘ ACADEMIA, GOBIERNO, DERECHO Y ADMINISTRACION DE JUSTICIA EN isi 2. 2:4 HISPANOAMERICA EN LA EPOCA COLONIAL Por Dk, Jaime M, Saugi* I, INTRODUCCION El t6pico de este articulo representa un poco de historia del derecho, sobre el cual es muy poco lo que ha sido publicado en Ia regién linguistica holan- desa. Son varias las causas que se pueden sefialar para ello. En primer lugar Jas fuentes del derecho en cuestién son en lengua espafiola y ademés no estén a inmediata disposicién. En segundo lugar se trata de una materia para la cual no existe pricticamente ningiin interés de parte de los holandeses. Se supondifa mayor curiosidad en las Antillas Neerlandesas y Aruba, pero en la préctica el balance se inclina hacia lo negativo en este aspecto también Sin embargo tanto las islas de sotavento (Aruba, Bonaire y Curazao) como as de barlovento | Saba, San Eustaquio y San Martin) estuvieron bajo régi- men espafiol desde e] fin del siglo xv hasta los afios treinta del xviz. Una &poca cuya duracién es suficiente para justificar un estudio. Son muy pocos nuestros conocimientos del gobierno, del derecho y de la administracién de justicia en el territorio que en la actualidad conforma las Antillas Neerlandesas y Aruba. A base del sistema de cosas en vigor en otros tertitorios, se podrd intentar una averiguacién acerea de Ja situacién tedtica en estas islas. Para averiguar més sobre la préctica es imprescindible una indagacién dc las fuentes, especificamente en Espaiia, Desafortunads- mente el tiempo disponible no me alcanzé para emprender el esfuerzo que lo requiere. Y en el marco de este articulo tenfa que limitarme ademés a las grandes lincas 2. LA SITUACION EN ESPANA: Los Reyes Catdlicos y la Casa de Austria: 1474-1700 RESUMEN HISTORICO Para una comprensién de la historia del derecho en Hispanoamérica es indis- pensable un conocimiento de la situacién en la misma época en‘la peninsula ibérica. * Gobernador de las Islas Antillana 66 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA imonio en 1469 de Isabel de Castilla con Fernando, rey de Aragén, y eb advenimiento de Isabel al trono en 1474, condujeron a 1a unién de los dos reinos mayores en Espafia. La expulsién de los moros de Granada, el dltimo baluarte islamico, result6 en unificacién adicional, La unidad de culto, considerada la base de la unién de la nacién, fue fomentada atin més por la reforma interna de la Iglesia, el destierro de los judios (1492) y la institucién de la Inquisicién (1480). En lo interno se establecié el orden por la disminucién del poder de la noble- va y por la creacién de la Santa Hermandad (1476, una forma de fuerza de poli- cia) cuya tarea era la de poner coto a la criminalidad creciente. Afiddase a esto el descubrimiento y Ia colonizacién de América, factores que en’ esa época convirtieron a Espafia en Ia nacién més poderosa del mundo, Bajo Carlos 1 (1517-1536), el primer monarca de la Casa de Austria, que con el nombre de Carlos V_ascendié al trono imperial de Alemania, y durante el reinado de su hijo Felipe IL (1556+ 1598), quien continué la expansién del reino con la anexién de Portugal, aleanzé Espafia su expansién méxima, Este poder politico siguié intacto bajo Felipe III (1598-1621) pero comenzé a decaer bajo Felipe IV (1621-1665), quien perdié no s6lo Portugal, sino también su hegemonfa militar a favor de Francia, La ctisis legé a su cispide en la época de Garlos IT (1665-1700), el dltimo monarca de la Casa de Austtia, 2.2 Ex estapo Los Reyes Gatélicos lograron acaparar el poder politico que al principio tenfan que compartir con Ja nobleza. La intervencién directa del rey en Ia gober- nacién del estado se puso de manifiesto bajo los Reyes Catélicos y bajo Carlos I y Felipe I, pero ahora fue reemplazada por el manejo de los asuntos de Ia nacién por funcionarios que actualmente Ilamariamos ministros. La unién de las coronas de Castilla y Aragén, favorecida por el matrimonio de Isabel y Fernando, quedé definitivamente scllada en una sola mano bajo el nieto de los dos monarcas, Carlos 1 Pero en esencia tal unificacién no eta sino una unién personal y no la fusién de dos reinos en un estado. El matrimonio fue precedido por capitulaciones matri- moniales cuyo objeto era la limitacién de la intervencién de Aragén en los asuntos de gobernacién de Castilla. Los dos reinos debian permanecer auténomos e inde- pendientes el uno del otro, Por cjemplo, los Consejos Reales cran iguales en rango y el uno no dependia del otro: Se trataba aqui del Consejo de Castilla, de Aragén, de Navatra, de Portugal, de Flandes, de Italia y también de las Indias. Cada reino conservaba sus propias leyes y cortes. Estas eran la junta representativa de la nacién; las componfan Ja nobleza, el clero y la ciudadanfa. La colonizacién de América era una empresa castellana ejecutada por castelianos, quienes lograron establecer en los nuevos territorios sus institutos y normas jurfdicas. En los siglos que ceder facultades al Ministerio de Asuntos de Indias y fue abolido en 1812, La Casa de Contratacidn, suprimida en 1790. Los organismos administrativos con sede en Hispanoamérica consistian 0 de una sola persona 6 de un consejo, Los virteyes pertencefan a la primera categoria, asi como los gobernadores y corregidores, y a partir del siglo dieciocho los inten- dentes y los subdelegados, ¢stos ditimos en reemplazo de los corr organismos de gobierno que se componian de consejos eran las audiencias y los tribunales del consulado (consulados). ‘También importantes eran los cabildos (con- sejos municipales), quienes representaban ante la corona Ia sociedad local 0 Ia “zepiiblica”. 84 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA 6.2 Las AUTORIDADES CON SEDE EN ESPANA 6.2.1 Ef Real y Supremo Consejo de las Indias Descubierta América, no tardé en hacerse sentir en Espafia la necesidad de tuna entidad encargada de asesorar a la corona en Jo referente a la gobernacién de Jas nuevas posesiones. De esta gestién fue inicialmente encargado, por delegacién expresa de los Reyes Catdlicos, Juan Rodriguez de Fonseca (1451-1524), miembro del Consejo de Castilla, arcediano de Sevilla y confesor de la reina Isabel. En su tarea lo asistian algunos miembros del Consejo de Castilla, un contador mayor y un tesorero, Este cltime, Francisco Pinclo, tomé Ja iniciativa que indujo a los reyes a establecer en Sevilla cn 1503 la Casa de Contratacién, entidad encargada de la vigilancia de todo lo relacionado con el comercio y la navegacién entre Espafia y las Indias, obranclo con alto grado de autonomfa pero sometida a Fonseca. Por auto acordado del 14 de septiembre de 1519, se cre6 un nuevo departamento deno- minado Consejo de Indias y que era parte del Consejo de Castilla. El 1? de agosto de 1524 Carlos 1 lo convirtié en una entided auténoma, presidida por el general de los padres dominicos, Garcia de Loaisa, quien era ademis confesor del rey; cl nombre fue cambiado cn Real y Supremo Consejo de Indias. Lo constitufan un presidente, un ntincro de miembros (al principio einco, a la postre otros muchos) , un procurador del sey, un canciller, un secretario y un contador. Su tarea era de mucha extensién y tenfa numerosas facultades en lo administra- tivo, Era a través de el que se preparaba el gran volumen de legislacién colonial. Intervenia en el nombramiento de funcionarios eclesidsticos y civiles, todos some- tidos a su vigilencia, En este cuadro enviaba de vez en cuando visitadores a los tetritorios de ultsmar para Hevar a cabo inspecciones. Al final de la gestién de un vitrey 0 gobernador el Consejo mandaba instituir une investigacién (denomina- da “residencia”) de la conducta del respectivo funcionario durante la administsa- cién de éste. Las decisiones de las autoridades metropolitanas sdlo se podian ejecu- tar con la autorizacién del Consejo de Indias. Las bulas papales no se podfan pra- lamar en las In to del Consejo, a cuya censura estaban sometidos a panoamérica y el envio de obras a los territorios de ultramar. También intervenia en el comercio y la navegacién a las Indias, por intermedio de la Casa de Contrataciém. Otra de las responsabilida- des del Consejo cra la defensa de las tierras de ultramar. Con este objeto se insti- tuy6 en 1597 una comisién especial denominada la Junta de Guetta de Indias, en Ia cual tenian asicnto cuatro miembros del propio Consejo y cuatro del Consejo de Guerra de Castilla En 1595 ya ce ered una comisién especial para asuntos financieros, la Junta de Hacienda de Ind Al Consejo se habia conferido también facultades de administracién de justi- cia y obraba en calidad de instancia de apelacién respecto de las decisiones de 1a Casa de Contratacién, contando entre sus responsabilidades ademas con la revisién de fallos de audiencias de ultramar en contiendas de alguna importancia, Juzgaba Tos pleitos de ji ides eclesidsticas y civiles. Y finalmente el Consejo estaba encargado de la proteccién de los intereses de los indios, Su ESTUDIOS 85 posicién y la de las comisiones especiales Hegaron a debilitarse’a consecuencia del absolutismo de los reyes borbénicos. En 1714 Felipe V creé la Secretaria dey Marina de Indias y asi los asuntos hispanoamericanos quedaton directamente some- tidas al manejo de los reyes, aun con mis énfasis cuando se establecié en 1717, he Hamada Secretaria del Despacho Universal de Indias, medida que dejé reducido' el Consejo a una meta entilad de asesoramiento que por otra parte st conservé sus funciones de administraci’in de justicia EI Real y Supremo Consejo de Indias fue abolido en forma definitiva por la Constitucién espafiola de 1$12 con la creacién de un Consejo de Estado de cuyos | cuarenta miembros doce debien ser de descendencia hispanoamericana. /Al mismo ¢ tiempo se establecieron algunos ministerios, de los cuales uno fue denominado “Gobernacién del Reino para Ultramar”, 1 6.2.2 La Casa de Contratacion ‘Al principio el comercio y la navegacién entre Hispanoamérica y Espafia se ditigia desde a ciudad portuaria de Cidiz, Pero el 20 de enero de 1503 se creé en Sevilla Ja llamada Casa de la Contratacién, Equivalfa ¢ una clase de Cimara de Comercio encargada de funianes de gobernacién, legislacién y administracién de justicia, Era responsable de Ia organizacién y vigilancia de la navegacién y de los movimigntos de personas y mercaneia, Sus facultades amplias establecieron un modelo de comercio y navegacién que iba a durar mas de siglo y medio y que harta de Sevilla el centro mercantit del mundo atlantico. Las tareas de la Casa de Contratacién pueden resumirse asi: 2) la organizacidn de flotas; la concesién de licencias; el embarque y el recibo de mercancias; 'b) tribunal en lo civil y en lo penal, en procesos relacionados con el tréfico entre los tetritorios de ultramar y Espatia; c) entidad encargada de la preparacién de mapas geogrificos y de la forma- cin de pilotos (el puesta de piloto mayor fue creado en 1500 y Amé- rigo Vespussi fue el primero nombrado en ese cargo) ; dd) la conclusién de capitulaciones con jefes de expedicién y la imposicién de instrucciones a los mismos. Cuundo se trataba de asuntos comerciales Ia Cesa consistia de un presidente y tres funcionarios (un factor, un tesoreto y un contador) y como entidad para impart justicia la componfan un presidente, dos miembros, un fiscal y un secre: tatio, Ademés eta funcionario de la Casa el precitado piloto mayor, especificamente encargado de la preparacién y el examen de pilotos. Como ya queda dicho, todo fl trdfico hacla y procedente de Hispanoamética debfa pasar por Sevilla, En 1526 Se dispuso gue toca la navegeciGn tenfa que hacerse en flotas, Anualmente zarpa- ban dos flotas: la primera en primavera hacia el Golfo de México con destino a 86 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA Veracruz, Honduras y Jas Antillas mayores. La segunda salfa en agosto para Pana- mé, Santa Matta (Colombia) y otros puertos en la costa del norte de la América del Sur, No es de extraiiar que aquel tréfico rigurosamente regulado condujera al contrabando y a la evasién en gran escala. En el siglo dieciocho se dio un poco mas de libertad a la navegacién entre Espafia y Hispanoamérica. Entonces la Casa de Contratacién perdié gran parte de sus facultades y al fin de 1790 fue suprimida 6.3 LAs AUTORIDADES GON SEDE EN HiSPANOAMERICA 6.3.1 La onganizacivin administrativa a prineipios de la conguista Las capitulaciones de Santa Fe que firmaron los Reyes Catélicos y Colén antes de emprender ste su primer viaje y Jas instrucciones que le dieron los mo- narcas para su segunda expedicidn contienen la forma bsica de la organizacién de la administracién del nuevo mundo, Colén fue nombrado almirante, virrey y gobernador de todos los paises e islis que descubriera. En su calidad de almirante la extensién de su jurisdiccién maritima abarcaba las Azores y las islas de Cabo Verde hacia el occidente; cra la suprema autoridad judicial y administrativa a bordo de la flota. Como virrey y gobernador ejercia en tierra las funciones de goberna- cién y de administracién dle justicia. Contra sus actos y omisiones la Gnica apelacién que se podia interponer ante el Rey. A medida que se descubrian més territorios no era posible mantener este sistema de bastante sencillez. Se crearon nuevas unidades aciministtativas (provin- cias) que inicialmente eran independientes las unas de las otras y slo sometidas a las autoridades metropolitanas. Algunes gobernadores ostentaban el titulo de “Adelantado”; en esta calidad sus funciones eran principalmente de indole militar. Al que se nombraba gobernador, era para toda Ja vida y ademdés el puesto era hereditatio. En los afios treinta del siglo dieciséis se introdujo un cambio en esta situacidn, las personas fueron designadas por un tiempo de tres a ocho afios y la sucesién por herencia quedé abolida. 6.3.2 La organizacin administrativa en tiempos de la Casa de Austria ‘A medida que se iba dando cuenta de la magnitud de los territorios descu- biertos, se manifesté la necesidad de una administracién mds estructuracla de las Indias, circunstancia que a su vez iba acompafiada del deseo de la corona de fortale- cer su poder que varias veces se vio amenazado por el espiritu rebelde y las ambi- ciones de los conquisiadores. Todo ello fue un estimulo para la institucidn de ‘organismos especiales de administracién: los visreyes y las audiencias, En este esfuerzo la corona traté de evitar mediante un sistema de distribucién equilibrada de funciones las consecuencias desfavorables de la concentracién exagetada del poder. ESTUDIOS 7 6.3.2.1 Los virreinatos Durante el reinado de los reyes de Austria se crearon dos vitreinatos grandes: la Nueva Espafia (México) en 1535 y el Per en 1542. I visreinato de México abarcaba el territorio que es en Ia actualidad el sur de los Estados Unidos, més Méaico y Centroamérica, Casi toda la América del Sur era parte del virreinato de Pera. Las audiencias le Santo Domingo, México, Guatemala y Guadalajara estaban subordinadas a la Nueva Espafia y las de Panamé, Santa Te de Bogoti, Lima, Chareas, Chile y Buenos Aires al Peri. La corona, a propuesta del Consejo de Indias, nombraba a los virreyes. Estos ejercfan la autoridad suprema como los representantes directos del rey, tanto en lo civil como en lo militar. De ahi que tenfan a su encargo la vigilancia de los ingresos y gastos del Estado, Nombraban la mayorfa de los funcionarios civiles y eclesidsticos de los rangos inferiores. También eran responsables de velar por el bienestar de los indios y cacla semana debian dedicar algunas horas a las solicitudes presentadas por la poblacién indigena. Ademds eran presidentes de las audiencias con sede en la capital de su territorio y supervisaban las demés audiencias. Tenfan licencia para la ocupacién provisional de las vacantes en las audiencias hasta que la corona efectuase un nombramiento definitive, Generalmente el plazo del desem- pefio de su cargo era de cinca afos y al final de este perfodo los sometfan a un Hamado juicio de residencia, en el cual tenfan que responder por el manejo realiza- do y por las quejas contra ellos presentadas por sus sibditos. Los virreyes debian obscrvar numerosas restricciones, Aparte de su verdadero cargo no les era permi- tido ejercer otros oficios. Les era prohibido contraer matrimonio dentro de su jurisdiccién y hacer negocios dentro de ella. Ya se ha mencionado que el virrey era presidente de las audiencies en su tertitorio juridieo, pero esto sélo significaba que podian presidir las sesiones del tribunal y distribuir los procesos. Aunque no eran facultados para la participacién cn las delibecaciones a fin de Hegar a una decisién, si contrafirmaban los fallos de las audiencias. Considerando la posicién que ocupaban los virreyes con respecto a la Iglesia y las audiencias, no es de extrafiar ¢l que hubiesen surgido numerosos conflictos entre estas instituciones. 6.3.2.2 Las audiencias A las audiencias hispancamericanas sirvieron de modelo las de Valladolid y de Granada, por lo que respecta a las tareas de éstas en la administracién de jus- ticia, Pero las facultades de las de Hispanoamética iban mucho més allé que las de sus colegas en la Madre Patria, porque aparte de la justicia su cargo compren- dia ademds oficios de administracién. En aquella época no existia todavia la sepa- racién de los poderes. En la historia de las audiencias pueden distinguitse tres perfodos: 1. El primero, que comienza con la instituciéa en Santo Domingo en 1511 de la primera de las audiencias y termina con Ia proclamacién en 1563 88 }OLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA de las ordenanzas de las mismas. Era caracterizads por la intervencién directa de las audiencias en la gobernaciin, por poseer éstas el poder gjecutivo. 2. Durante el segundo periodo, de 1563 2 1776, las audiencias no ejercfan un poder directamente ejecutive pero sf un cortrol considerable sobre los funcionarios udministratives, 3, Después de 1776 la tarea principal de las audiencias tue la de administra- eign de justicia Las reales audiencias consistéan de un presidente (obrando en esta cali- dad los virreyes 0 los gobernadores) y de los oidores (miembros, cuyo nnitnero dependia de la extensién del territorio), un fiscal en represen: tacién del Estado y un alguacil quien era a la vez jefe de policia (con titulo de alguacil mayor). Las audiencias no sélo tenfan atsibuciones administrativas y de justi sino ademés un papel de importancia en los asuntos eclesiésticos. Sus facultades de yobernacitin, comprendfan: a) el fercicio del cargo de gobernador durante la ausencia de este funcio- nario; b) obra en calidad de consejo de asesoramiento de los virreyes y gober- nadores; c) Ja vigilancia de Ja conducta de los organismos administratives, mediante las Hamadas “visitas de tierra’, inspecciones estas realizadas por los miembros de ales tribunales; 4d) Ia inyestigaciSn de la validez juridica de las ordenanzas, con facultades de permitir gue éstas tengan dos afi: de vigencia en espera de la ratifi cacién detinitiva de parte del Consejo de Indias; €) Ia responsabilidad de una ejecucién correcta de las provisiones y oédulas; en este respecto eran facultadas para la suspensién de Ia implementacién fen caso de los precitados juicios de obrepcién y de subrepeiéns £) el velar por el buen trato de los indios; 2) Ja incautacién de libros de difusién prohibida. ‘A continuacién un resumen de Jas facultades de las audiencias en Jos asuntos eclesidsticos: a) el ejercicio, en representacién del Rey, del patroconio eclesidstico en su circunscripeién, a fin de mantener al Monarca debidamente informado de todo lo relacionado con Ja Iglesia, y Ja presentacién de ternas para dd nombramientos de funcionarios en los cargos religiosos de nivel més alto; ESTUDIOS 9 inal b) el averiguar si la difusién de las bulas papales se realizé! con ef |dedttt miento del Consejo de Indias; &. c) el trémite judicial del lamado “recurso de fuerza” que tenfa derecho de interponer ante Ja audiencia el que se sintiera agravado por una decisién del tribunal eclesiéstico. Mfs adelante se pasard la revista de las funciones de las audiencias en asuntos de justicia, En el discurso de los afos se produjeron cambios er la extensién y en las fronteras de las audiencias; de éstas, la de Santo Domingo era hasta 1527 la Xinica en los territorios de Hispanoamérica entonces conocidos. Posteriormente se instituyeron otras trece: México (1528), Panamé (1538), Lima (1542), Gua temala (1542), Nueva Galicia (Guadalajara: 1547), Bogoté (1549), Charcas (1559), Buenos Aires (1561), Quito (1563), Santiago de Chile (1565), Caracas (1786), Cuzco (1787). De 1583 hasta 1590 las Filipinas eran gobernadas por la propia, pero en 1590 fueron sometidas a la jurisdiccién del virrey y de la audien- cia de México, nombrénclose ademés un gobetnador iocal 6.3.3 La organizacidn odneinistrativa bajo los Borbones Los esfuerzos de los reyes borbénicos de establecer un gobierno més centra- lista en Hispanoamérica condujo por una parte a Ia creacién de nuevos virreinatos, asi fortaleciendo el poder monrquico, y por la otra a la institucién de nuevas autoridades (regentes ¢ intendentes)), proceso este que redujo las facultades de los virreyes, gobernadores y audiencias, y fijé con mayor precisin la érbita de accién de cada uno de dichos poderes, dando més control a la corona. Inicialmente casi tada Hispanoamérica formaba parte del virreinato del Perd. Ante la imposibilidad de gobernar territorio de tanta extensi6n fue creado en 1717 el vireeinato de Nueva Granada (Colombia, Ecuador y Venezuela) que, suprimido en 1724, fue reinstituido en 1740. En 1776 otras tierras del virreinato del Perti fueron segregadas y denominadas el virreinato de Rio de la Plata, con jurisdiccién sobre las regioncs que actualmente conforman las repdblicas de Argen- tina, Paraguay, Bolivia y Uruguay. Por provision real del 20 de junio de 1776 se cred para la audiencia el cargo de regente, funcionatio este que presidia las sesio- nes de la entidad y repartia los procesos entre los miembros de la misma. La reforma administrativa de mayor importancia introducida por Carlos III fue la divisién de Hispanoamérica en las Mamadas intendencias, gobernadas por intendentes. Este sistema, de origen francés, fue «doptado en Espaia y luego intro: ducido en Hispanoamérica en los afios ochenta del siglo diecisiete, Se abolieron Jos cargos de gobernador, corregidor y alcalde mayor, quedando los intendentes responsables del desempefio de dichas funciones, As{ fueron destituidos de sus fanciones en Nueva Espaiia (México) 200 corregidores y alcaldes mayores, que- dando su territorio dividido en doce intendencias. Hacia 1790 este sistema habia entrado en vigor en toda Hispanoamérica, Los intendentes estaban encargados de la gobernacién, la justicia y la autoridad militar. Las audiencias perdieron el poder administrative y s6lo conservaron sus funciones de justicia y de asesoramiento. 90 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA 6.4 EL CAPITAN GENERAL, EL GOBERNADOR, EL CORREGIDOR Y LOS ALCALDES MAYORES Los virreinatos estaban subdivididos en provincias, capitanias, presidencias, cortegimientos y alcaldias mayores. Esas unidades administrativas estaban encabe- zadas por presidentes, corregidores y alcaldes mayores. Dichos funcionarios tenfan 4a su cargo, dentro de sus territorios, la administracién y la justicia. Eran nombra- dos por el rey y el plazo de desempefio de su cargo era de tres hasta cinco aos’ y no podfan ser oriundos de Ia regién que dirigian. Al tiempo de su investidura debian especificar su caudal y constituir una caucién por una buena administracién. Igual que los virreyes, ellos también estaban sometides a un juicio de residencia al vencerse el plazo de desempeiio de su cargo. Los corregidores y los alcaldes mayores estaban estrechamente ligados a los eabildos y, en algunos casos, hasta eran miembros de los mismos. En 1537 obtuvieron la facultad de intervencién en los asuntos de! cabildo si el interés general lo exigia. Si se encontraba en el muni- cipio, ninguna reunin podia celebrarse sin su presencia, 6.5 Los municipios En las capitulaciones, instrucciones y ordenanzas de descubrimiento los reyes estimulaban expresamente Ja fundacién de municipios locales en Hispanoamérica. ‘También indicaban con exactitud la forma de construir una ciudad, 0 sea con la disposicién como un tablero de ajedrez, con una plaza rectangular en el centro y alrededor de la misma la iglesia y los edificios més importantes del gobietno. El cabildo era la entidad encargada de la administracién de tal municipio. Representaba los intereses de la comunidad 0 sea de Ia “‘reptblica". Los cabildos se componian de regidores (concejales) y alcaldes ordinarios (funcionarios judicia- les) y los presidfa el gobernador o el suplente de éste, En la ausencia de estos Ultimos un alcalde ordinario dirigia la asamblea. Los alcaldes ordinarios, gencralmente dos, ejercian el poder judicial, tanto en lo penal como en lo civil. Ademés tenfan a su encargo, entre otras cosas, Ia imposicién y la recaudacién de algunos impuestos. Cada afi los elegia el cabildo ‘A pesar de ser legalmente incompatible el cargo de alealde con el de reyidor, algu- nos municipios lograron a cambio de la cancelacién de cantidades corsiderables, que la corona les permitiera elegir a uno entre los regidores, designando los veci- nos de la ciudad al otro. Aunque les estaba prohibido a los virreyes, gobernadores y otros altos fun- cionarios toda intervencién en la seleccién de un alcalde, era considerable su in- fluencia al respecto, ya que tal nombramiento estaba sometido a su ratificacién. Es preciso hacer la distincién entre los alcaldes ordinarios y los mayores, por set estos uiltimos designados por el rey, el virrey o el gobernador, para administrar determinada regién. Las funciones més importantes de loc regidores era la gober- nacién del municipio. Al principio eran nombrados por el fundador de la ciudad, pero en 1523 Carlos V dispuso que podian ser elegidos anualimente por los vecinos ESTUDIOS ot de ésta, entendiéndose que no estaba permitida la recleccién antes, del lapso de un afio. Pero en 1518 ya se habia arraigado la préctica de ser designados los regi- dores por el monarca de por vida en recompeusa de servicios prestados. Felipe II introdujo ‘la costumbre de vender el cargo de miembro del cabildo en subasta publica, a fin de mejorar la mala situacién econémica de la hacienda de Espafia: El resultado fue que acontecia regularmente que personas de una misma familia ejercian la funcién durante muchos aijos. A principios del siglo diecisiete los cargos municipales eran en su mayorfa propiedad privada y hereditarios. Solamente el alcalde ordinario se designaba por eleccién, pero su nombramiento sélo podia efectuarse previa ratificacién de parte del virrey 0 del gobernador local, Aparte de los alcaldes ordinarios y los regidores, un alférez, un procurador y un fiel ejecutor eran miembros del cabildo, E] alférez real portaba el estandarte real, lo elegia el cabildo, en el cual tenfa voto; ésta fue otra de las funciones que en afios posteriores Iegaron a venderse en subasta piblica, El procurador tenfa voz pero no podia votar en el cabildo, Era clegido para su cargo. El fiel ejecutor se nombraba para desempefiar durante un afic sus funciones, que eran numerosas: poner el sello sobre los géneros cuya venta era permitida, calcular los precios méximos, ejercer la vigilancia de las pesas y medidas. Ademés tenia la facultad de detener a las personas sorprendidas a mano flagrante en la comisiGn de actos penables por la ley. Y finalmente, cada cabildo contaba con un alguscil mayor, el equivalente de un comisario de policia; contaba con funcionarios policiales de menor rango, deno- minados alguaciles menores. Estos cargos también se vendian al mejor postor, de por vida o no. El alguacil mayor también formaba parte de dicha entidad. Se distinguian cabildos cerrados y cabildos abiertos. Los vecinos més impor- tantes de la ciudad podfan patticipar en estos ultimos, con voz y voto sobre los asuntos del orden del dia, pero sin fuerza obligetoria ante el cabildo. Sélo los funcionarios arriba mencionados podian participar en las asambleas de los cabildos cerrados E! cabildo estaba encargado también de la administracién de justicia. Contra las decisiones de los alcaldes ordinarios se podia interponer recurso de apelacién al cabildo. 6.5 La ADMENISTRACIGN DE JUSTICIA En la época de Ja conquista y de la colonizacién en Hispanoamérica los fun- cionarios que ejercian cl poder judicial estaban también encargados del ejecutivo. Como ya hemos podido observar, no habia en aquellos tiempos separacién algunay de Jos poderes. Aunque la organizacién judicial en las Indias, en todo caso en lo que atafie a los nombres de las distintas entidades, tenfa semajanza con la de la 92 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA Madre Patria, eran grandes las diferencias de estructura y de Ja forma de su fun- cionamiento. El derecho procesal también presentaba desemejanzas de considera- cién, El primer funcionario espafiol investido con poder judicial en Hispanoamé- rica fue Coldn, en virtud de les capitulaciones de Santa Fe. Bésicamente se. podfa recurrir contra sus fallos ante la audiencia de Velladolid 0 al Consejo de Indias. No se tardé mucho en quitarle este poder y en pasarlo a los que como alcaldes de las ciudades eran juce de primera instancia ‘en causas penales y civiles,, En 1311 se cred la Real Audiencia cn Santo Domingo como el primer tribunal cole- giado de América. Su territorio judicial no se limitaba a la isla de La Espafola, sino que abareaba los territorios a la sazén_ eolonizados por los espafioles, 0 sea: todo el Caribe, Venezucla, Colombia y las Guayanas. La citeunscripeién de esa audiencia se iba reduciendo paulatinamente a medida que se creaban otras adomés de ésta, Con el progreso de la estabilizacién de la autoridad espaftola en América y con Ia mayer concretizacsén de la organizacién administrativa, se poxtfan distinguir organismes judiciales ordinarios, menores y especiales. Los primeros comprendlian el Consejo de Indias, las audiencias, los gobernadores, los intcndentes, los virreyes y los Iamados justicias mayores. Los alealdes ordinarios y los cabildos correspondian a la segunda categorfa, y a la ter- cera los tribunales eclesidsticos y militares, entre otros. 6.5.1 Los tribunales ordinarios 6.5.1.1 El Consejo de Indias Considerado desde el punto de vista de organismo judicial, el-Consejo de Indias era el més alto en Hispanoamérica; de él dependian todas las audiencias en dicho tertitorio, E] 1524 el Rey dispuso que en todas las causas sometidas a su juicio debia fallar el Consejo de Indias. A medida que se creaban mas audiencias, las facultades de éste se limitaban pero siempre las conservé en cuanto a los pro- cesos tocantes a virreyes, miembros de las audiencias y otros funcionarios guberns. mentales de ultram: EI Consejo de Indias también conocia de las apelaciones contra las decisiones de Ja Casa de Coniratacisn de Sevilla, al menos si representaban tales fallos un interés de importancia y en la medida que era asf. Otra de sus funciones era rados por In Academia Nacional de ln Historia de Caracas, perteneciente a la seccién Civiles del Archivo del Registro Principal del Distrito Federal. Fue ssigna- do a nosotzos para set estudiado ya que se enmarca en jos contenidos del programa de la materia ‘Técnicas de Ia Investigacién III y Préeticas de Archivo de Ia Escuela de Historia de la Universidad Central de Venezuela, cétedra que dicta Ia Profesora Maria Antonieta Martinez, E] expediente es del juicio criminal que se sigue a Luis Sanoja por el homici- dio de Joseph Clemente, ambos esclavos de Joseph Ignacio Sanoja, el dia 23 de noviembre de 1799 en el hato Cortalito, Villa. de San Carlos de Austria, en los Tanos de la Provincia de Venezuela. El Fiscal pide la pena de muerte y amo Sanoja se nombra defensor de su menor esclavo y “logta que el_juez falle por prisin de cuatro afios a raci6n y sin sueldo en la cércel, de Puerto: Cabello. El estudio del expediente “Causa de oficio contra.Luis eselavo”.... pretende ser un modesto aporte en el estudio de la esclavitud en Venezuela. Este documento wcat as ars) 7} muestra una faceta novedosa ¢ interesante en el ilar: ies escumes <2 Venemele No & = scicie on ie Peo ince de Veneta DOCUMENTOS int El delito de homicidia de Luis a Joseph Clemente, ambos esclavos de Don Joseph Ignacio Sanoja IV. El hecho criminal ocurre el dia 23 de noviembze de 1799 en el hato Corra- lito, Villa de San Carlos de Austria, en los Llanos de la Provincia de Venezuela. Luis y Joseph Clemente Sanoja, ambos esclavos de Don Joseph Ignacio Sano- ja, se enfrentan en una rifla por el reclamo que hace Joseph Clemente a Luis por las ttancas de la puerta del corral de los animales. Luego de soportar golpes insultos, Luis hiere mortalmente a Joseph Clemente con una almarada,’ El esclavo herido es trasladado por orden del amo a la Vilie de San Carlos y luego de haber sido examinado por el cirujano y dar su declaraci6n ante las autoridades, muere. Luis es juzgado en la Villa de San Carlos y el Fiscal nombrado en la causa pide la pena de muerte. El propio amo Sanoja se nombra defensor de su menor esclavo y con la ayuda de su asesor, Don José Francisco Velazeo, logra que el juez, Teniente de Justicia Mayor Don Bernardo Isidoro de Herrera, haga caso omiso a la pena de muerte solicitada por el Fiscal y que falle por prisién de cuatro afios a racién y sin sueldo en la cércel de Puerto Cabello. El amo Sanoja apela'a la Real Audiencia de Caracas y este tribunal superior ratifica la sentencia del juez Ber- natdo Isidore de Herrera, San Carlos en 1799. “La villa de San Carlos de Austria, es una de las mas hermosas fundacio- nes que tiene esta Provincia: Esté situada en los Llanos, en una Mesa alta, ana vistosa, y muy alegre, 4 la orilla del Réo Tirgua con cuyas caudalosas vertientes se fecundan sus dilatadas Campafias”? La Villa de San Carlos de Austria era para el siglo xvitt, junto a San Sebas- tién de los Reyes, Calabozo y Santa Marfa de Tpire, un importante centro produc- tivo, cuya economfa estaba basada en la explotacién de hatos ganaderos producto- res de carne y cueros tanto para consumo interno como para exportacién, “Los frutos son Atos de Ganado Bacuno y ay vecino que tiene dos 6 tres; y son de tan crecido numero que Iegan a treinta y quarenta mil Cabezas: Las crias de Yeguas, son muy grandes de modo que ay hombre, que no sabe las que tiene: ‘Ay Ato que pasa de quinientos caballos de’ servicio, cogen gran Cantidad de Mulas”? Josef de Castro y Araoz,* estima para 1786, que en la Villa de San Carlos de Austria hay 135 hatos ganaderos con un total de 192.718 cabezas de ganado. Uno de estos hatos, ha debido ser el hato “Corralito”, propiedad de Don Joseph Ignacio Sanoja. 1. Auaaxapa: Punzén con mango de madera usado para curar ampollas a las bestias. 2. Josep ve Cisexos, Descripcicn exacta de la Provincia de Benezela, en Héctor Pev dreinex Trejo, Amor, Paisaje y Tiempo en la Villa de San Carlas de Austria, p. 5. 3. Ibidem, pp. 5:6. 4. En RamOn AtzeCaua, Introduccién at Estudio del Contrabando en la Provincia de Venezuela... p. 89. 152 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTO! EI hata de Corratito . No tenemos referencia especffica sobre Ja ubicacién de este sitio. Sin embargo, por la lectura del expediente podemos deducir que ha debido estar ubicado en un tango de 30 a 40 Km. de la Villa de San Carlos. Nos podemos basar en el hecho de que José Clemente, la victima, recibe las heridas a las seis de la tarde del dia veintitrés “Len las noches del dia de aller veinte y tres del corriente como alas oraciones. y, traido en hamaca,’ llega a la Villa a las diez de la mafiana del dia siguiente -que en este instante que serén como Tas diez de Ja mafiana sele ha dado parte a Su Merced hubiese traido a la casa de Don Joseph Sanoja de su hato de Corralito, un esclavo gravemente herido...”7, © sea, que han debido viajar cerea de 12 horas desde Corralito para Iegar a San Carlos. Esto nos da un promedio de 2,5 a 3,3 Km, por hora, velocidad razonable de una caravana con un herido en hamaca. También podemos suponer que estarfa ‘ubicado en la via hacia Tinaco-Tinaquillo, ya que tanto Don Fernando Figueredo, como Domingo Oviedo, testigos del hecho, son vecinos del Tinaco. La tnica refe- rencia geogréfica se encuentra en el testimonio de uno de los testigos, Juana Fran- cisca, quien dice venir del Caio Pavén, de buscar agua.* Hemos tratado infructuo- samente de ubicar este caiia de agua. Mano de obra esclava en un bato ganadero La mano de obra esclava en los hatos ganaderos era escasa pero parece haber sido mano de obra especializada. Joseph Clemente es el mayoral del hato y Luis es un esclavo joven que sabe lect y escribir. Los hatos eran sitios muy extensos, propicios para el cimarronaje y a esto podemos afiadir que todo vaquero tiene a su disposicién un buen caballo. “Los hatos, amplios y abiertos, dependfan més que todo de la mano de obra libre, ‘asi que los esclavos’constitufan una proporcién mucho menor en los Llanos que en las regiones de la costa”? En el hato Corralito, aparecen ademas del reo y la victima, otro: esclavo llamado Alexo —quien ha debido set un nifio pues no es Iamado a declarar como testigo— y el resto son mujeres esclavas, Marfa Lorena, juana Francisca y Micaela, personal de servicio de la casona de la hacienda. Causa de Oficio contra Luis esclavo... [Declaracién del Herido] f. 2 Tbidew. (Dedlaracién de Micaela] £. 27 vuelto, Ibidem. [Auto de Proceder) £. 1 [bidem, £. 5 vuelto. P. MicuinsL McKinuey, Caracas antes de la Independencia. p. 24. wows DOCUMENTOS 453 Aspectos formales del expedicute de ta cause contra Luis Sanoja Auto de Proceder El dia 24 de noviembre de 1799, Don Joseph Ignacio Sanoja da parte en la Villa de San Carlos de Austria al Teniente de Justicia Don Bernardo Isodoro de Herrera, quien en esa época era el Juez de los Llanos, del hecho acaecido en su hato Cotralito el dia 23 de noviembre. > EI auto de proceder se abre el dia 24 de noviembre de 1799; Este ordena que el herido sea reconocido por el primer citujano Don Juan Joseph de San Vicen- te, que le sea tomada declaracién sumaria y que se proceda a convocar a los testi- gos del hecho: --.por tanto para proceder como co:responde pacese a su reconocimiento de Don Jean Joseph de San Vicente primer cirujano de profesién el que practicara con avisiencias de Su Merced el presente Escribano secibiendo- ele a consecucncia declivacién instructiva al herido, y después a evacuarse sumaria infor macivin. de lo acaceida y que los testiges que fuerense sabedo- res bajo jurancnta ceclarasen por el tenor de este auto...” Examen e informe del Cirujana F] primer cirujano precede a teconocer a Joseph Clemente y encuenita dos hetidas, una en la verijat! y Ia otra del lado izquierda encima de las costillas. Esta ‘iltima es considerada mortal por el cirujano, “ . habidndole examinado con la exatitud posible dixo: y le encontré dos heridas, In ana en la verija derecha de ninguna consideracién y la otra del Nido Zguigtdo ‘encima de Tas costlas (...) y que cuya ultima fue mort: BS Al final del expediente, en el folio 79, apatecea entse los costes del auto la cantidad de 6 pesos pagados como honoratios al Cirujano San Vicente, Esta suma le es cancelada el 15 de enero de 1801, 0 sea, 14 meses después. Testimonios. De ta propia victime La declaracién al moribundo se toma en presencia del cirujano San Vicente y con asistencia del escribiente Manu! Pifiero, Joseph Clemente, quien ha debido ser hombre fuerte, da su versidn de los hechos. Dice que el dia veintitrés “como a las otaciones”, vinicndo de fa sabana, se dio cuenta de que la tranca de la puerta de la cerca estaba abierta, Fue a reprender a Luis por considerarlo responsable y 10. Causa de Oficis contra Lis eseluvo... [Auto] f. 1. AL. Venija,. Bajo vientre, pelvis 12. Causa de Oficio contra Luis esclavo..- f. 1 wuele 154 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA la discusién termind en una pelea. Dice que dio a Luis dos golpes uno en la cabeza y otro en el brazo con un mandador que tenia y que en La lucha, Luis le hirié con una punta de espada. ““. ..y abrazo con el citado Luis inocente de que tubiere hierro y en aquel acto sacé una punta de espada y le dio dos heridss, al que expone, una en la costilla del lado izquierdo y otra en el empeine. Dice también que en este acto no estuvo nadie presente, y que luego de Jas heridas legaron la esclava Josenia, Don Fernando Figueredo y Domingo Oviedo. Los testigos Los testimonios de los testigos son bastante parecidos entre s{. Son lamados a declarar las siguientes personas: Don Fernando Figueredo, de Tinaco, como de veinticinco afios, quien no firma su declaracin porque dice no saberlo. Atestigua que estando en el hato aco- modando un caballo, oyé a Joseph Clemente decir ‘*.. .ahora lo veras perro zambo que ya me tienes sofocado...” y acudié a la griterfa de las esclavas de que habian matado a Joseph Clemente. Vio al herido y aplicé estiércol de bestia en las heridas. Es probable que esta cura haya sido peor que la enfermedad, pero era préctica corriente para detener hemorragias. Otro testigo es Domingo Oviedo, también del Tinaco, de treinta aiios y que tampoco firma por no saberlo, Su testimonio concuerda con el de Don Fernando Figueredo. Otros testigos son Micaela, Marfa Josenia y Juana Francisca, esclavas de Sanoja. Todos coinciden en que Joseph Clemente es el atacante de Luis y que éte actué en defensa propia, pero ninguno declara saber exactamente cémo se produjezon las heridas. Declaracién del reo La declaracidn del reo Luis se toma el dia 16 de diciembre, en la sala capitu- lar, en presencia del teniente de Justicia Mayor, de Joseph Ignacio Sanoja y del escribano Manuel Pifiero. Luis dice ser esclavo, pardo y de trece a catorce afios de edad, Asegura que esta ba descansando en su chinchorro en su cuarto y que Joseph Clemente le reclamé con insultos y golpes de garrote acerca de la tranca de la cerca. Baiiado en sangre por un golpe en la cabeza, trata de huir del cuatto pero Joseph Clemente se lo impide y continéa golpedndolo, Ve sobre un saco de sal un almarada y la usa para ame nazar a Joseph Clemente para que lo deje salir y suspenda el castigo, pero éste se Ie viene encima y accidentalmente se hiere con la almarada. Dice que Joseph Cle- mente Je “.,.confiesa una enemistad grande”, Luis firma su declaracién. —sabe leer y escribir— y es trasladado a la cércel piblica. 13. También se Thana “empeine” 2 la parte inferior del vientre, DOCUMENTOS 155 Actuacién del Fiscal dia 16 de noviembre se nombra Fiscal de la causa al bechiller Domingo Vélez y se le dan tres dias para que formalice su acusacién. El dia 18 de noviembre acusa a Luis de homicidio y pide pena de muerte. En su acusacién dice que la muerte de Joseph Clemente no fue casual sino maljciosa. Se basa en Ia pluralidad de las heridas dadas a la victima, y en el hecho de que Luis debe ser castigado con més dureza por ser esclavo, "...los esclavos deben ser castigados mas severa- mente que las otras personas con arreglo a las leyes de partida”." Se refiere a las Siete Partidas, Ley VII, Titulo XXI, Partida VIT en donde se recomienda a los jueces tomar én cuenta el origen, edad y condicién de la persona que comete un delito para aumentar o disminuir la pena. En el caso de los esclavos la Ley es ‘specifica “...que mas crudamente deben escarmaentar al siervo que al libre...”. El Fiscal considera a Luis un infractor de las leyes naturales, positivas y divi- nas y que segtin esto debe ser juzzado por la ley de Dracén presente en las Sagra das Escrituras “*...qui gladio pesare, qui gladio sucumbare...”. E] Fiscal no acepta el alegato de la minoria de edad de Luis y expone dos razones: “...aun cuando se quiera suponer al indiciado Luis como de menor edad, sin embargo cle que la malicia que respira su confesidn le constituye mayor de ella y que por ira parte he de extraiiarme que siendo originario de esta villa se haya omitido agenciar Ia partida de Bautismo y otra prueba con que haberlo acreditada. . Efectivamente, la partida de bautismo de Luis no aparece como documento anexo al expediente ni es mencionada en las pruebas de la defensa. EI 18 de enero de 1800, el Fiscal pide se ratifiquen los testigos y se lame declarar a un testigo faltante, Ia esclava Micaela. Los testigos ratifican lo dicho anteriormente, y el Fiscal los descalifica al demostrar que ninguno fue testigo presencial ““.. .que los testigos Ilegaron después de haber sucedido el hecho. . ."” Joseph Clemente, moribundo, habia dicho lo mismo en su declaracién “,..que a este acto no hubo nadie presente. Que después de las heridas vinieron alli unas negeas viejas esclavas. ..”.!* En la acusacién estén mencionadas dos leyes de la Recopilacién de Sevilla. La Ley IV, Titulo XXII, Libro VIII, “Todo hombre que matare a otro a sabien- das muera por ello”, y la Ley III, Titulo XXII, Libro VITI, de la misma Recopi lacién cualquiera que mate a otro aungue lo mate en pelea, que muera por ello Las leyes antiguas son muy severas y fueron esgrimidas por los fiscales draconianos de la época. Sin embargo habja un divorcic evidente entre la ley y lo que se hacia en las colonias, se tendia a lo més préctico. “La condena a muerte no se ejecutaba casi nunca, y en muchas localidades venezolanas no habia verdugos, ni ejecutor de justicia"”.” 14. Ibidem, f. 20. 15. [bidem, £. 39 [quien a hierro mata, a hierro muere). 16. Thidem, &. 40 vuelto. 17. [biden £. 40. 18. Ibidem (Declaracién del hetido] £. 2. 19. Humazero Beto Lozao. Historia de las Fuentes e Instituciones, p. 470. 156 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA EL Fiseal Dotninga Velex y su csor Doctor José Francisco Hernindes, son recusados” por cl delcasor y amo del acusado Don Joseph Sanoja. Las razones de n-ne) esidn chirancute expuestas en el expediente, Se mencionan frases ~-no me canviene en manera alguna...” y “.. .por asistirme justos motives de sospecha...”, No encontramos ninguna explicacién del tribunal para tomar esta decisibn, pero cabe suponer el poder que ha debido ejercer un hacen- dado poderoso en la Villa de San Carlos: la ree como * “La Clase de los hacendados ejercia una influencia y control considerable sobre la sociedad en que vivian (...) y proteger lo que consideraban sus derechos sociales y legales ¢...} en Jas municipalidades locales se mane- jaban diariamente mediante una red de influencias a menudo muy ajena a Jas autoridedes coloniales centrales”’* Fl Fiscal _y su asesor son recusados €] 28 de abril de 1800 y en su lugar se nombran los Licenciados Juan Joseph Garcia y Don Vicente Faxardo, vecinos de Valencia, La Actuacién de tu Defensa Don Joseph 1 io Sanoja como procuruador de su esclavo La defensa de Luis la Hevan a cabo el amo Sanoja y su asesor Don José Fran- cisco Velazco. Don Joseph Ignacio Sanoja es designado curador y defensor de su menor esclavo desde el dia 12 de diciembre de 1799, casi al inicio del proceso. Desde el primer momento toma muy activamente la defensa de su esclavo. En este sentido, el esclavo esté en ventaja con respecto a los manumisos 0 trabajado- tes libres. Los esclayos no son responsables ante la ley por no ser considerados ciudadanas y son defendidos por sus amos quienes tienen dinero e influencias. ‘Sanoja es responsable ante la ley de las scciones de su esclavo, ademas, Luis es menot de edad y el homicidio fue ejecutado en su propiedad Por otro lado esté Ja parte econémica. El esclavo es un bien que produce beneficios y ya Sanoja ha perdido al mayoral del hato. No quiere perder a un esclavo joven, fuerte y leal que conoce muy bien el manejo del hato. Hay bastante documentacién de avaliio de esclavos en la Provincia de Vene- zucla para fines del siglo XVIII. Un esclavo joven en ¢l Llano ha debido estar en el orden de los trescientos ochenta y cuatrocientos pesos, suma que era conside- rada una fortuna “Los precios de cada pieza varian de una regién a otray (...) una esclava de veinte hasta veinticinco affos se cotizaba entre tescientos y tres- cientos cincuenta pesos de plata, en tanto que en las ciudades, villas y 20. Ibidem, &, 52, Causa de oficio coutra Leis exclavo..., , 52. 21. McKintsy, ob. cif. p. 124. 22. Fuero Real, Libro IV, Titulo XVIL, Ley TIL: “Todo homme que fallaren. muerto, 6 livorado en alguna casa, € no supieren quien lo maté, el morador de Ja casa sea tenido de mostrar quien lo maté, si no, sea tenico de responder por su muerte, salvo derecho de defenderse, si pudiere”, DOCUMENTOS 17 d pueblos de Jos Llanos ascendia hasta cuatrecientos y cuatrocientos cin- cuenta... Para una escala de valores tomaremos los salarios oficiales asignados a los funcionarios del Real Consulado de Caracas en 1793, El Prior recibfa la cantidad de 600 pesos anuales y cada uno de los Cénsules 400 pesos anuales.* También esté el hecho que ya para el afio 1799, la trata de negros era ya casi inexistente en Ia Provincia y era dificil conseguir mano de obra esclava. -con [a intersupeidn del comercio de esclavos por las querras napoles- nieas, cisi ningin escavo liegé ala Provincia de Venezuela” Ha debido existir también un nexo afectivo entre Luis y su amo. Este lo visita a la circel y prueba de ello ¢s Ia comunicacién de Sanoja al Teniente de Justicia de fecha 27 de febrero de 1800, pidiendo le sean retirados los grillos al muchacho y hacicndose responsable pot ei juramento hecho por Ia conducta de su esclavo en Ta prisidn= “.. como hace pues mucho tiempo que el citado mi menor se haya preso con un pat de prillos ha resultado enfermo por la frialdad del hierro, y se tli jvalidar st prontamente no se lo quitan puss ya se haya con las piernas hinchadas y el manejo de estas muy torpe. ..”.™ El 10 de marzo se da la orden al alcalde de Ja prisién Perfecto Torrealba para que sean retirados los grillos a Luis La defensa convoca a un grupo de testigos para que certifiquen ante el tribu- nal que conocen a Luis, que es de caricter bueno y cordial y que conociendo el funcionamiento de hato saben que el arma homicida legs a las manos de Luis por casualidad, Entre los testigos de la defensa se encuentra Pablo Joseph Villanueva, capitin del Batallén de Pardos de Valencia quien fue maestro de primeras letras de Luis, EI 12 de marzo, luego de la declaracién de estos nuevos testigos, el Fiscal ratifica que a Luis debe aplicirsele 1a pena de muerte, En abril el ssesor de la diefensa, Don José Francisco Velazco, presenta su alegato en un documento de cinco folios que resultard contundente en la defensa del reo. Don José Francisco Velazco, asesor de la defensa La defers se apoya en Ja siguiente legislacién: 1) La Real Cédula dada en Aranjuez sobre el trato que deben dar a los esclavos y de sus tareas del 31 de mayo de 1789. 23. Fevertco Brito Ficueron, El Problema tierra y esclavos... p. 192. 24. “AGN. Real Consulado 1786-1797, +t, 1, fs. 56-72" en Micver A. Martinez, Aspectos Econémicos de a Epoca de Bolivar, Ancxo 49. 25. Jost Tonsis Loves Gaxcia, Dos Defensores de esclavos.>. p. 6. 26. Causa de oficio contra Luis... £. 36. 158 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA 2) La Ley II, Titulo VIL, Partida VII, “.. Jmandamos que cualquiera que mate a otro aunque lo mate en pelea que muera por ello salvo si lo matare defen digndose...”". Incorrecramente la menciona como Ley III, Titulo XXII, Libro VIL, la cual se refiere a legislacién de artes y oficios de sastreria. 3) Del Fucro Real, la Ley I, Libro IV, Titulo XVII: “...todo hombre que matare a otto a sabiendas que muera por ello, salvo si lo matare # su enemigo conecido 0 defendiéndose. ..”” 4) Miés adelante, vuelve a la Ley II, Titulo VII, Partida VII, “'. si lo matare defendiéndose viniendo el otro coatra el traido en la mano cuchillo sacado espada o piedra o palo o otra arma cualquiera...”. 5) Y¥ finalmente, la Ley VIIE, Titulo XXXI, Partida VII que habla de los agtavantes de las penas debido a la condicién social del indiciado. El principal documento de la defensa redactado por José Francisco Veléequez contiene principios jurfdieas y sociales novedosos como son: el derecho inviolable de defender la vida y la propiedad sin importar diferencias de clases 0 condicién y el desacuetdo con la ley de partida por incrementar la sentencia aun reo por st condiciGn de esclavo. El derecho a defender la vida, es para el defensor un derecho natural no sujet a ninguna ley terrenals +. cnadie puede ignorar el derecho que tiene cada hombre de defender su sana su honor y- sus bienes de cualquier insulto (...) sean de la condi- fign que fueren (-..) el uno esclavo y el otro ciudadano (...) el dere- cho de delenderse no conoce clase ni condiciones, todos los hombres son iguales en la presencia y en las distinciones conque aparecen a la faz del mundo”? EI defensor considera un absurdo y un error gravisimo en la interpretacién de Ia ley de partida alegar la esclavitud como agravante del delito: “. . .como si la condicisn servil fuera una circunstancia agtavante del delito... .” Se refiere, ala Ley VII, Titulo XXI, Partida VIT que dice: “...que mas cradamente deben escarmentar al siervo que al libre. ..”. El defensor sefala la diferencia que hay entre los siervos a quienes se refiere la ley y los esclavos americanos: “porque dicha ley (...) soa un estrato de Jas romanas (....) y habla precisamente de aquellos siervos que habfan sido enemigos de la patria y Cautivadas en la guerra (...) pero nada de esto se ve con nuestros escla- Vos. Estos sin delito alguno pzopio ni de sus padres han caido en, esta miserable condicion (..-) no al derecho de la guerra y si a la codicia de las hombres...” Para esta época, Jas ideas morales, los defensores cristianos y hasta el mismo Rey, habian mitigada el maltrato de esclavos e indios y la sociedad era més con- descendiente con la situacién social de estos estratos inferiores, sin embargo, la ! ad segula siendo aceptada como algo normal y necesario DOCUMENTOS 5 19 para la economie de Ia Provincia y los negros eran considerados inferiores. Refi rigndose al incremento en In sentencia a un esclavo, ef defensor expone: “Lejos de waiseles la pena aun cuando fuesen verdaderos delincuentes debetia mitiyarseles mayormente si se asiende @ le suma iguorencia de los hiegros que son los esclavns de que bablamos...”. Cel subrayado es info] Finaliza el alegato de la defensa con una interpretacién de los hechos en donde el homicidio de Joseph Clemente es visto sin lugar a dudas como un caso de defensa propia. Se describe el buen carécter de Luis y su naturaleza pacifica, buena educacién y buenas costumbres. También se resalta en el hecho de que el muchacho no s¢ dio a la fuga sino, que por el contzario, contribuyé al trasladé del herido a San Carlos y se mantuvo todo el tiempo a la orden de su amo. Fallo del Juex El fallo de juez Berfnatdo Isidore e de Herrera, se da en San Carlos ¢] 28 de abril de 1800 condenando a Luis a cuatro afios de presidio en Puerto Cabello a racién y sin sueldo. El fallo esti dado sin mencién del delito por el cual se impone la pena, No hay dlescripcidn, ni antecedentes, ni se menciona ninguna legislacién. Esto confirma lo mencionado por Antonio Gonaélez Antias: +, hasta donde hemos pedido indagar, no existié una normative que obligara al funcionario a mencionar por escrito en los documentos cuél © cudles leyes aplicabu en los procedimientos. donde tenia participacién”* Suponemos que el jucz ve el homicidio como un caso legitimo de defensa personal, pero que castiga de todas formas por la condicién de esclavo de Luis. Apelacién ante la Real Audiencia y fin del proceso B18 de julio de 1800, Joseph Ignacio Sanoja da un poder a José Gutierres, Procurador de la Real Audiencia de Caracas, para que lleve el caso de Luis ante este tribunal de superior instancia. El 20 de agosto del mismo afi se envia un documento 4 la Real Audiencia solicitando que ta pena de Luis sea cambiada por cuatro afios de desticrro en la Villa de San Carlos y sea utilizado en Ja construccion de la Iglesia. La Real Audiencia no es favorable y el 20 de septiembre ratifica la sentencia de Luis en Puerto Cabello. El caso se cierta, y el tiltime folio del expediente, de fecha 15 de enero de 1801, se refiete a los costes del juicio que tiene que pagar el amo Sanoja que ascienden a la enorme cantidad de 849 pesos 30, [Bidens £. 47. 31. Awronio Gonzizez Awrins, La Actuacidn procesal y su correspondenci 3/4, 160 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA CONCLUSIONES DEL ANALIS!S DEL EXPEDIENTE El expedicnte esti cn muy buenas condiciones y su transcripciér (escsitura itélica) no fue muy dificil. Esté estructurado y escrito segin las normas y fotmu- Jas juridicas de la época. La duravicin del proceso es ele dies meses, tiempo que no pareciera ser muy largo y est en coatra de lo que afirma Humberto Bello Lozano en su historia del derecho: “Los procedimicntos judiciales eran largos_y engorrosos; en materia penal eran secretos y el catélogo de los delitos era muy largo Hay un vacio legal, sefialado por Ja defensa, para juzgar a los esclavos ameri- canos. La tinica legislacién especifica para los esclavos americanos que conoce la defensa es la Real Cédula del 31 de mayo de 1789. Las leyes mencionadas en los documentos presentados tanto por el fiscal como por la defensa corresponden a la legislicién que fue eserita para los siervos de la gleba y para los esclavos captura- dos en fa guscra (Las Sicte Partidas, Fuero Real y Ordenanzas de Castilla). En este expediemte vemos que, en comparacién con un trabajador libre o un manvmiso de! haro Corralito, el esclavo Luis estd en ventaja al ser sometide a un proceso judicial. Contaba con la influencia y poder de su amo, quien lo defenderé como propiedad y hasta se podsfa especular sobre Ja paternidad del amo sobre su esclavo. La scnacidad de la defensa del amo Sanoja llega hasta la Real Audiencia de Caracas, sin embargo, la condicién de esclavo s{ va ser un agravante para su pena y la sentencia es ratificada. Esta “Causa de oficio contra Luis esclavo”. .. debe ser tomada en cuenta en el estudio de la esclavitud en Venezuela, ya que presenta caracteristicas novedosas € interesantes referentes al tratamiento legal que recibfan los esclavos en Venezuela. No se trata de afirmar que el esclavo era mejor tratado en la Provincia cle Vene- zuela que en otros lugares de la colonia “.. .pucs resulta absurdo excusar al régi- men eselavista porque haya sido més 0 menos cruel..." sino de que el trava- miento de los esclavos no era igual en toda Ie colonia y dependia de los amos y de la cultura y religién de la localidad* En 1799, al mismo tiempo que Humboldt se escandaliza del trato que reciben los esclaves en Cumané, se est Ilevando a juicio a Luis con el amparo de su amo. 32. Hummer Beuto Lozano, ob. eit, p. 142. 33. Mrcuri. Acosta Saices, Vida de los esclavos negros... p. 234. 34. Jos T. Lovrz Gancia, Dos Defensores de los esclavos... p. 16. 35. ALEjanweo ve Humuownr, Viaje a las regiones equinocciales... p. 48. DOCUMENTOS 361 ANEXO CRONOLOGIA DESCRIPTIVA DEL EXPEDIENTE 23 de noviembre de 1799. “como a las oraciones” (6 pm.): Rifia de Joseph Cle- mente y Luis, esclavos de Don Joseph Sanoja, en su hato de Corralito, en la Villa de San Carlos de Austria, Luis da dos heridas mortales a Joseph Clemente. 24 de noviembre de 1799. (10 am.): Se da parte al teniente de Justicia Mayor en las Villa de San Carlos, Don Bernardo Isidoro de Herrera del esclavo herido. Se abre el sumario. ————.. Se toma la declaracién del moribundo ante ¢l cirujano, Don Juan Joseph de San Vicente, y cl Escribano Pablico y del Cabildo, Manuel Piftcro. Muere Joseph Clemente —, Comparece ante el tribunal Don Fernando Figueredo, testigo. Dice que escuché la pelea de los dos esclavos en el hato de Corralito, que acudié a los gritos de lus esclavas y' encontré a Joseph Clemente con dos heridas hechas con una almarada y que aplicé estiércol a las heridas de Clemente. ———.. Comparece ante <1 tribunal Domingo Oviedo testigo. Dice que Ucgando al huts ale Corralito oy6: la pelea de los dos esclavos que acudié a los gritos de las esclavas y encontré a Joseph Clemente con dos heridas hechas con una almarada y que pasd aviso a Don Joseph Ignacio Sanoja en la Villa de San Carlos . Comparece ante el tribunal Marfa Lorena, esclava de Don Joseph Ignacio Sanoja habitante del hato de Corralito. Dice que Joseph Clemente golped brutalmente « Luis con un garrote por encontrar abierta la puerta de Ja cerca. En medio de la pelea, Luis vio en el suc'o la almarada y dio dos hetidas a Joseph Clemente, una en el empeine y otra en las costillas y que pasé aviso a sa amo Don Joseph Ignacio Sanoja en Ia Villa de San Carlos. . Comparece ante el tribunal Juana Francisca, esclava de Don Joseph Ignacio Sanoja habitante del Hato de Corralito. Dice lo mismo. 29 de noviembre de 1799. Se nombra a Don Francisco Herndndez asesor de la causa y se Je remite el expediente. 2 de diciembre de 1799. Don Francisco Hernéndez solicita a Don Joseph Sanoja Ja entrega de Luis. Este es entretado y encarcelado en la cércel piblica. 12 de diciembre de 1799. Se nombra a Don Joseph Ignacio Sanoja, curador y defensor de su menor esclavo Luis. 16 de diciembre de 1799. Confesién del reo. Luis dice lo mismo que los testigos. 16 de diciembre de 1799. Se nombra Fiscal del reo a Domingo Vélez y se le dan tres dias para que formalice su acusacién 1462 BOLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA 18 de diciembre de 1799. El Fiscal pide la pena de muerte para Luis, por el homi- cidio de Joseph Clemente. 19 de diciembre de 1799. Primer alegato del asesor de la defensa, Don José Fran- cisco Velazco, pidiendo al teniente de Justicia Mayor, que el reo sea absuelto y puesto en libertad puesto que la muerte de Clemente se presenta como casual, en defensa propia y alegando también minoria de edad de Luis. 13 de enero de 1800. El Fiscal pide se ratifica la sentencia de pena de muerte. ‘Alega malicia de parte de Luis por “la piuralidad de las heridas”; por’ discre- pancia entre su confesién y la de los testigos; por haber ido contra la ley natural y porque “los esclavos deben ser castigados més severamente que las ‘otras personas con arreglo a las leyes de partida”. 14 de enero de 1800. Carta de Don Joseph Ignacio Sanoja al tenieme de Justicia ‘Mayor suplicando se sirva hacer caso omiso de los alegatos del fiscal y se ratifica que la muerte del esclavo Clemente fue casual, en defensa propia y que se exculpe de todo delito por ser ste menor de edad. 15 de enero de 1800. Carta de Don Joseph Ignacio Sanoja al teniente de Justicia Mayor pidiendo se prorrogue la causa a los ochenta dias de la ley, y que se procediera renunciar a los que no necesite. Esta peticién es concedida. 18 de enero de 1800. El Fiscal pide se ratifiquen los testigos y se tome declaracién a la esclava Micaela 22 de enero de 1800. Se ratifica al testigo Domingo Oviedo. 22 de enero de 1800. Se ratifica a la testigo Maria Lorena. 22 de enero de 1800, Se toma declaracién a Ia testige Micaela. Declara lo mismo que los anteriores testigos. 25 de enero de 1800, Se ratifica al testigo Don Fernando Figueredo. 20 de enero de 1800. Carta de Don Joseph Ignacio Sanoja al teniente de Justicia Mayor pidiendo presentar otros testigos para la defensa, los cuales testificaran ante el tribunal que conocen la buena conducta de Luis, su cardcter pasivo y cordial, y que estin seguros de que el arma homicida estuvo al aleance de Luis por casualidad. 22 de enero de 1800. Comienzan los testimonios de los nuevos testigos de la defensa, Estos son: Don Luis Joseph Bravo, Pablo Joseph Villanueva (Capi: tan del Batallén de Pardos de la ciudad de Valencia, quien ensefié a Luis a leer y escribir), Joseph Facundo Matute, Juan Joseph Pérez, Juan de la Paz Cedeiio, Gregorio Morin y Joseph Juliém Arcila. 27 de febrero de 1800. Carta de Don Joseph Ignacio Sanoja al teniente de Justicia Mayor pidiendo le sean retirados los grillos a Luis ya que éste “ha resultado enfermo por la frialdad del hierro, y se tullird e inyalidard si prontamente no 1 se hava con las piernas hinchadas y el manejo de éstas DOCUMENTOS 163 10 de marzo de 1800. Se da la orden al alcalde de la carcel, Perfecto Torrealba, para que le sean retirados los grillos a Luis. 12 de marzo de 1800. El Fiscal pide se ratifica la sentencia de pena de muerte. Esta ver se apoya en las Sagradas Escrituras “qui gladio pesare, qui gladio sucumbare”, en Ley IV, Titulo 23, Libro 8, de la Recopilacién de Sevilla, “todo hombre que matare a otro a sabiendas muera por ello”, y en la Ley III, Titulo 23, Libro 8, “por ende mandamos que cualquiera que mate a otro aunque Jo mate en pelea que muera por ello”. El Fiscal duda de la minoria de edad de Luis: “he de extrafiarme, que siendo originario de esta villa (Luis] se haya omitido la partida de bautismo”. Este documento no es pre- sentado por a defensa a lo largo del. proceso. Abril de 1800. Alegato de la defensa por e! asesor Don José Francisco Velazco. Este documento en cinco folios resultaré contundente en la defensa del reo. 28 de abril de 1800. Comunicacién de Don Joseph Ignacio Sanoja al teniente de Justicia Mayor para recusar a José Francisco Herndndez. Los motivos son vagos y personales: “...no me conviene en manera alguna (...) por asistir- me justos motives de sospecha 28 de abril de 1800. Por recusado el Fiscal y en su lugar se nombra a los. Licen- ciados Juan Joseph Gracia y Don Vicente Faxardo, vecinos de Valencia. Fallo del Teniente de Justicia Mayor, “Fallo que debo condenar como condeno al expresado esclavo Luis a cuatro afios de presidio al de Puerto Cabello a racién y sin sueldos.. . 8 de julio de 1800. José Ignacio Sanoja da un poder a José Gutierres, Procurador de la Real Audiencia para Ilevar el caso ante la Real Audiencia de Caracas y sea ratificada o revocada la sentencia de Luis. 20 de gosto de 1800. Comunicacién de José Gutierres a la Real Audiencia de Caracas explicando el caso de Luis 'y solicitando sea cambiada la pena de cuatro afios de presidio en Puerto Cabello por destierro en Ia propia para que sea usedo en la fabrica de la Iglesia. 20 de septiembre de 1800. La Real Audiencia de Caracas confirma la sentencia de Luis a cuatro afios de prisién en Puerto Cabello a racién y sin sueldo. 15 de enero de 1801. Pago de los costes del juicio. Se cierra el expediente. PERSONAJES DON BERNARDO {SIDORO DE HERRERA. Juez Segundo Nt 21, Teniente de Justicia Mayor Coronel Comandante de Caballeria y Justicia. Juez de los Llanos. DON JOSEPH IGNACIO SANOJA. Duefio del hato Corralito. Amo de los escla- vos Luis y Joseph Clemente. 164 ROLETIN DE LA ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTORIA JOSEPH CLEMENTE SANOJA Esclavo de Don Joseph Ignacio Sanoja. Mayo- val del hato de Corraliza, Vietima del! homicidio. LUIS JOSEPH SANOJA. Fsclave de Don Joseph Ignacio Sanoja. Peda del hao ‘de Corralito. Reo de homicidio. DON JUAN JOSEPH DE SAN VICENTE Primer Cirujano de Profesién de I Villa de San Carlos, MANUEL PINERO, Escribano Péblico y de Cabilde. DON FERNANDO FIGUEREDO. Testigo DOMINGO OVIEDO. Testigo. f MARIA LORENA, JUANA FRANCISCA y MICAELA. Eselavas de Don Joseph Sanoja. Testigos. DON JOSE FRANCISCO VELAZCO, Asesor de le defense. DON JOSE FRANCISCO HERNANDEZ. Asesor del Fiscal. Recusado por Don Joseph Sancja. LIC. DON JUAN JOSEPH GARCIA. Nuevo aseso de 1a fiscalia en Ja causa, nombrado al ser recusado ‘el asesor del Fiscal, José Francisco Hernindez. LIC. DON VICENTE FAXARDO. Nuevo asesor de 1a fisealia en 1a causa, nom brado al ser recusadlo el asesor del Fiscal, José Francisco Hernéndez. DON BENITO ALEGRIA. Funcionario de Ja Real Hacienda. PERFECTO TORREALBA. Alcalde de la Cércel de San Carlos. PABLO JOSEPH VILLANUEVA. Capitén del Batallén de Pardos de la ciudad We valencia, quien ensed6 a Luis a leer y escribir, taido por Ta defensa para <, pestimonio de Ta buena conducta y canéeter de Luis DON LUIS JOSEPH BRAVO, JOSEPH FACUNDO MATUTE, JUAN JOSEPH PEREZ, JUAN DE LA PAZ CEDENO, GREGORIO MORIN ¥ JOSEPEL JULTAN ARCILA. Nuevos testigos trafdos por fa defensa para dar testimo- ‘io de la buena conducta y cardcter de Luis. JOSE GUTIERRES. Procurador de Ja Real Audiencia de Caracas. BIBLIOGRAFIA, [ACOSTA SAIGNES, MIGUEL, Vide de for Esclesos Negros en Veneruela, Valencia (Vene ucla), Vadell Hnos, Editores, 1984, 409 pP- AIZPURUA, RAMON, Introducciéa al Estudio det Comtrabando de la Provincia de Venecuela eovempas de la Compatia Guipuzcoans 1730-1780. (Fuentes Pare ‘la Historia Colonial de STenerudln, N? 222), Caracas, Ed. Biblioteca de la Acicemia ‘Nacional de la Historia, 1993. BELLO LOZANO, HUMBERTO. Historia de las Fuenter ¢ Insfituciones Juisidicas Venezolancs. {gea, Edicién) Caracas, Mobil-Libros, 1989, 242 pP- ' s

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