BIBLIOTECA ATRIUM DE LA BANISTERIA DISENO, PROVECTOS YPRESUPUESTO COLECCION TECNICA DE BIBLIOTECAS PROFESIONALES ee AUBIBLIOTECA ATRIUM DE LA EBANISTERIA | DISENO, PROVECTOS Y PRESUPUESTO | | Were____ Sumario Pag. Pag. 1 -El mbito piblico ae aL a EL DISENO EN LA SOCIEDAD ACTUAL 9 -Muebles de bar 2 - Qué es el disetio? 3 - El taburete pet 32 “El disefio y la empresa suru 10 -Elsillon ee 8 - Disefio frente a artesania Sean - Discotecas hig tech es - Disefio puro y disefio industrial .. n El imprescindible equilibrio . 33 El disefio de vanguardia al -Disefio de vanguardia 3, LOS MATERIALES «0.00 3 y disefio comercial... 13 - Las nuevas propuestas 8 = Tipos de diseflador 4 -Mezclas % El disefiador que imagina 0... 18 -Elretorno del color 6 -El disefiador que razona 18 -lamadera ar =a concepcién de uN dISeAO vovwnnnnunn 18 - Madera para ambientes célidos 37 Un disefio para una funcién ... aires - Vuelven los muebles La responsabilidad, de principio a fin... 16 de madera maciza 8 Bueno, bonito ¥ BaratO wessuniminnmonn IT - Madera para todo 39 - El rigor de lo racional i 18 - Las combinaciones de materiales 39 - Los diserios sociales a8) - Los metales x ~Eldisefio, reflejo de la Cult vcs. 19 - El hierto 40 -Elaluminio 40 LA FUNCIONALIDAD DEL DISENO ay - Los tejidos 40 ~El Ambito privadd nnisnsnsn al ~ La composicin de los tejidos 40 ~ Muebles de hogar 22 = Con nombre propio 41 Los muebles de re : 22 El cuidado de las tapicerias 42 ~Los musbles de sal6n 23 - Cada estilo Con $1 TE nnn 42 Los muebles de comedor .... 24 - Las tendencias en tapiceria ceoaeeds - Los muebles de dormitorio ... m4 - Las pieles para tapiceria... 4 - Muebles para nifios 28 -Muebles de firma : 28 4, LAERGONOMIA 45. - La importancia del color .. 8 -El mobiliario bAsico .. aT -Muebles que crecen ... eee -Lasilla 48 - Muebles ecol6gicos ~La vida sedentaria =... 8 y con personalidad propia... et ~ Las exigencias ergonémicas 48 - Muebles para minusvélidos at - Altura del asiento ..... 49 ~ Caracteristicas generales ean Profundidad del asiento 49 “Ia silla de ruedas, Los muebles Ancho ideal del asiento 49 de donmitorio, El bafio. La cocina... 28 - Inclinacién del asiento 50‘Sumario - La tapiceria del asiento -Elrespaldo ~La mesa ideal Un repaso a su evolucion - Las medidas fundamentals - Los muebles para el ordenador Oficina/hogar, una nueva opcién ~ Los nuevos programas... - Los elementos indispensables 8, EL PROTOTIPO ¥ EL EMBALAJE -El control de calidad = Tos materiales, a prucba + Elembalale oo =Concepto basico ~ Las maquinas de embalar - Embalaje para bricolaje Proyecto 1, LANORMALIZACION =Introduccién - Normas que rigen el dibujo profesional - Las bases para un trabajo normalizado -La luz, vital para un dibujante ..... - La nitidez de un trabajo inmaculado - Las Iineas... 3 . “El dibujo de las lineas . - Los grosores de las lineas - Clases de lineas - Las acotaciones ~ Normativas fundamentales - Elementos que forman una acotacion - Observaciones - Indicaciones graficas en el plano Las lineas de rotura o interrupcién - las lineas de marcha del corte - las superficies cortadas Caracterizacién de los materiales de revestimiento enn ~ Los s{mbolos convencionales - Normas para rotular 1. ~ Los recuadros de rotulacién y 7 El despiece separado La escnitura en los rétulos: 2. PRESENTACION FORMAL DE UN PROYECTO. - Las escalas - Los formatos de papel ..... SSSSSIIQRSRSLLBB “4 ad aan ~El formato bésico ~ Formatos secundarios - Formatos auniliares - Los rollos de papel .. -El plegado de planos = Cémo plegar los dibujos .... - Sistemas de archivo de planos - Reproduccién de planos 3, EL DIBUJO A MANO ALZADA -Elboceto -Elcroquis 4, LA PROYECCION ORTOGONAL - Disposicién de vistas y cortes - Sistema americano de representacién de vistas, : 5. LA PERSPECTIVA ~ Perspectiva lineal 6, DISENO GRAFICO ASISTIDO POR ORDENADOR - El método CAD/CAM .. - Las bases de funcionamiento - Las funciones mas usuales en CAD 7. LA OFICINA TECNICA - Formas de recibir un trabajo ~ Clases de dibujos para el taller - Rayados y colores indicativos ~ Planos que necesita la oficina técnica 1, VALORACION DE TRABAJOS Y PRESUPUESTOS DE UNA PEQUENA EMPRESA - La pequefia empresa =Calculo y descomposicién de precios ~Gastos directos = Gastos indirectos .. ~Ejemplo préctico 2, VALORACION DE TRABAJOS Y PRESUPUESTOS DE UNA MEDIANA EMPRESA = Calculo del precio/hora - Ejemplo préctico. Remodelacion de una oficina SS S SF LBS SkSSSsaR a 101 101 101 102 102 103 108 108 109En la actualidad, el disefio forma parte de précticamente cional, de produccién seriada o de edi clones corlas, su conocimiento concep- tual es indispensable en el momento en cue se pretende cr les de cualquier tipol al servicio del hombre. 20UE ES EL DISENO? Aunque no existe una definicién tinic acta del concept ja mencionar una larga lista, sin llegar en ningin momento a la definitiva—, ca: bria decir que disefio es el resumen de seriada de un objeto, Son todo: pasos que, a la larga, llegan al pro: final, incluyendo en él una forma determinada, un material, unas dimensio: nes, una textura, un color, etc. Es una la- bor creativa que puede desarrollar una sola persona, pero que en la actualidad, y cada dia mas, se elabora en equipo, di- versificando las especialidades de cada uno de ellos segiin su incidencia directa indire en el producto final. En la elaboracin de un diserio pueden parti cipar disefladores industriales, disenia dores graficos, ingenieros, arquitecto: arquitectos técnicos, ilustradores, et Citando una de las numerosas defini ciones relativas a este término, nos re- mitimos a una enciclopédica, segin la 1 El diseno en la sociedad actual al disefio es la ordenacién de los ele bdsicos, materiales peptua- de determinado objeto o estructura, con el fin de aumentar su belleza o su uti lidad funcional .a labor fundamental del disefiador es la de crear objetos, aparatos o sistemas para el uso del hombre. A partir de aqui mresenta todo tipo de posibilidades canizadas, industrial Entendido si mal, el disefio puro se limita a valorar las propiedades intrinsecas del objeto en cuestion, sin analizar otros condicionantes que atafien bésicamente a una e: dad més compleja: el di se p jempre de pro Wax fueron Lloyd Wright eBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 El disofio industrial exige una ‘mecanizacién absoluta de su produccién, como la serie de ‘asientos y mesas en aluminio ‘Trial, de Joan Casas (1292). Este disetio se ha creado para exteriores e interiores, hdbitats privados 0 colectividades Para que un mueble sea ‘competitive debe proponer ‘uevas soluciones y una estética diferente a temas Clasicos, como Ja mesa Olivia, de Estudi Blanc: con leterales abatibles se cconvierte en consola, y extendida offece mitiples posibilidades. La ‘estructura es de haya y el sobre, de cerezo De hecho, un mismo objeto, bien aca~ bado, prolijo, de aspecto exterior agra: dable, siempre se valora mejor a primera vista que si este mismo objeto, con idén- tica funcién e idénticas prestaciones, est acabado toscamente, no quarda una linea estética 0 esta realizado con materiales de poca calidad. Est demostrado: todo lo que entta por la vista seré siempre mejor aceptado que aquello que en una primera Impresién produce rechazo 0 no gusta de forma espontinea. Esta es la prioridad basica del disef ‘Sin embargo, debe tenerse en cuenta que todo disefio, como tal, debe estar creado con vistas a una produccion seria: da. El nivel de industrializacién al que se legue es el que determina su funcién so- lamente como disevio o que vaya mas alla y adquiera la responsabilidad de disefio industrial ‘Ademas de cumplir con una serie de objetivos inherentes a la produccién —fa- cilidad de industrializacion, costes poco elevados, adecuada seleccién de mate- riales—, el disefio se responsabiliza por completo de la imagen estética que ofte- ce el producto. ‘Sin embargo, el término disefio abarca algunas facetas de responsabilidad inhe- rentes a la sociedad, incluidas las socio- légicas y las psicolégicas, ya que su produccién en todo momento debe res- ponder a un consumo colectivo, aunque existan siempre unos condicionantes cul- turales y sociales que influyan en la adquisicién del objeto de dive: Segin su linea, hay productos destina- dos.a un consumo abiertamente masivo 0, por el contrario, productos que, debido a unas influencias culturales 0 sociol6gicas, son preferidos por una elite, sin que esto signifique, de ningiin modo, un coste mas elevado. El disefio y la empresa La ampliacién del mercado desde y ha- cia el consumo de masas exige, cada dia més, una calidad técnica y estética en el disetio de los productos seriados. Cada empresa, si quiere sobrevivir en estos nuevos limites, est4 obligada a desarrollar ampliamente la creatividad en su produc- cién, para marcar su propia linea y com- petir al mismo nivel con otros productos similares y con un nimero mucho mayor de fabricantes ya introducidos y experi- mentados en este nuevo mercado sin fronteras, Esto confirma el hecho de que, hoy por hoy, el disefio se ha convertido en una he- nramienta imprescindible dentro de toda estrategia de marketing empresarial. La produccién actual dentro del entorno del mueble esta obligada ahora a superar el reto del disefio en cada una de sus co- lecciones industriales Ain mds, con la entrada de Espafia en el Mercado Comin Europeo, cada fabricante tiene el com- promiso de aumentar su capacidad com- petitiva ante un mimero mucho mayor de fabricantes del mismo sector, y la mejor arma en este aspecto, precisamente, vie- ne de la mano del disefio, seguida muy de cerca por una cuidada calidad en la produccién industrial, un sistema avan- zado en su fabricacién, un desarrollo tec- nolégico de evidente interés y, por ‘iltimo, una adecuada comercializacién, seguida a través de un exhaustivo y ade- cuado proceso de promocién y mailing. 10Para que un mueble pueda ser com- petitivo, es fundamental que proponga in- hovaciones en su estética, que demuestre un avance en la calidad de los materiales y de la fabricacién, y que esté apoyaco or un proyecto de marketing suficien- temente planificado. Por otra parte, y qu 7 llevado por esta evolucion necesara, hoy en dia el criterio estético representa una baza fundamental en el momento de decidir una opcién de compra, ya que de 41 dependerd la salida del nuevo produc- to 03u fracaso absoluto en el mercado de consumo, ‘Al mismo tiempo, hoy el consumidor ha adquirido nuevos conocimientos y ha des- cubierto necesidades hasta ahora desco- nocidas para conseguir un determinado nivel de calidad de vida. En la actualidad se busca un bienestar en todos los ele- mentos que rodean el habitat humano, desarrollado a través de una estrategia psicol6gica, un criterio ergonémico y una aceptacién de la anatomia humana, con sus dependencias y necesidades fisiolé- gicas en cuanto a comodidad, descanso facilidad de movimientos. Hay un gran in- terés hacia el mueble desarrollado a par- tir de un estudio anatémico y funcional, ya que responderé a unas légicas neces dades de uso y de confort, Estas exigen- cias del consumidor deben estar absolu- tamente asumidas por los disefiadores, 7 por afiadidura, por los fabricantes, si en realidad quieren satisfacer los gustos y apetencias de esta nueva sociedad de consumo. Disefo frente a artesania El concepto de disefio se diferencia fundamentalmente del de artesania en que el segundo se basa en la esponta- neidad y la intuicién del acto creativo, mientras que el primero necesita unos amplios conocimientos técnicos, en él es imprescindible la experimentacién me- tédica y por lo general exige un trabajo en equipo, desde el creativo al técnico in- dustrial. De todas maneras, la creacién de un diserio permite también, hasta cierto punto, intuicién para captar la filosofia es- tética'a la que debe responder el nuevo producto. Disefio puro y disefio industrial Sin embargo, profundizando en la di- ferenciacién que haciamos anteriormen- te, hay que tener en cuenta una dis- tincién préctica entre el disefio puro 0 simplemente disefio, que equivale en principio a la creacién estética de un pro- ducto mas o menos funcional, y el disefio industrial, que exige una profesionaliza ccidn infinitamente mas profunda y técnica que el primero. Con el disefio puro pue den crearse piezas que decoren un am: biente s6lo por su estética. Con el disefio industrial, el valor principal no reside en su estética, sino en el anélisis exhaustive de cada parte del produco, para facilitar al maximo su realizacién industrial en los mfnimos movimientos y con la méxima funcionalidad, es decir, sin adornos ni ex- tras decorativos que no cumplan en el producto una funcién determinada El disefio industrial es absolutamente mecanizado, mientras que el disefio puro puede incluir algtin apartado de acabado a mano en su elaboracién. Por otra parte, y dentro de la mecani- zacién del disefio industrial, es fundamen- El disefio en la sociedad actual El disefio actual debe responder @ Jas nuevas exigencias estéticas funcionales y ergonémicas del ‘mercado, como propone Gabriel TTebadé en el sillén Summit (1992), En 61 destaca ta rotundided del respaldo, en combinacién con su dréstica estilizacién lineal. Los pies, de ‘madera, estén barnizados en snogal o lacades en negre. El disefio de artesania puede tener un valor afadido cuando Jo ha realizado un maestro, como el febanista Gaspar Homar en sus trabajos modernistas de marqueteria. En la fotografia, un cabezal de cuna (1905) restaurado,Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 El diserio actual retine la funcionalidad de la escuela Bauhaus, suavizada con muchas ccurvas, en disefios mas reducicos yy rompiendo la sobriedad del regro con colores aleares. En la fotografia, show-room de mueble contempordneo de! Centro Internacional de Disefio [DEA de Viena (1982) tal tener en cuenta los avances de la informética: una de las formas mas utili- zadas para disefiar en los iitimos tiempos es el disefio informatizado 0, més cono- ido, el disefio por ordenador, Hoy en dia hay programas especificos de dibujo (CAD), y por otra parte, ahora es posible conectar el disefio asistido por ordenador, con la produccién industrial (CAD/CAM). Para trabajar con ellos no es necesario saber informAtica, Sélo es pre- cciso conocer a fondo, es decir, en profun didad, ese programa en particular y luego disefiar con él cémodamente en la pantalla, olvidandose del ya tradicional lépiz y papel. Naturalmente, lo que st debe dominarse es el concepto teérico y practice del dibujo, tanto técnico como artistico, porque el programa informético dard facilidades para la realizacién de un disefio determinado, pero es evidente que no crear por s{ mismo El disefio de vanguardia tra distincién especifica, dentro del amplio concepto que abarca esta palabra, se refiere a una nocién por completo di- ferente del muy manido término disefio: se trata del conocido como disefio de vanguardia. Por lo general, la vanguardia es la creatividad que marca la moda que definird, con el tiempo, una determinada tendencia. Fundamentalmente, toda vanguardia se ha caracterizado siempre por detectar el espiritu estético que flota en el ambiente, una linea o una forma imaginaria que to- davia no tiene identidad, pero que sin embargo ya se palpa en el ambiente o, al ‘menos, unos cuantos privilegiados se dan cuenta de que esté ahi. Hay algo indefi nido, unos colores, unos materiales o unas formas latentes que poco a poco la autén- tica vanguardia va captando y tansfor- mando en disefios reales, tangibles y representatives de una determinada es- tética que todavia se reduce a una elite de seguidores. Hasta que con el tiempo, la vanguardia deja de ser novedad y se impone la nueva tendencia Asi, la que impera en los afios noventa es la tendencia que ha evolucionado de Ja vanguardia de los afios ochenta, mai asentada y reposada que una propuesta de vanguardia, y al mismo tiempo resul- tante de una determinada situaci6n eco némica, que influye también de forma decisiva sobre la imposicién de la ten- dencia estética de disefio, imperante en el mercado en ese momento. La vanguardia de los aflos noventa, cu- riogamente y debido a la situacién econé- mica general. tiende a buscar disefios que perduren, muebles de gran calidad que sirvan pata toda la vida. Se ha recuperado el rigor racional que se habia perdido en los afios setenta-ochenta, con creaciones en las que se dejaba escapar la imagina- ciéa. En muchos casos se vuelve a los di- sefios que causaron una revolucién en los affos treinta, se reeditaron en los setenta y ahora aparecen otra vez como la gran s0- Tucion a la funcionalicad més racional, pero ‘muy Cercana a la creatividad de un arte ssano ebanista 12f | En estos tiempos ya no basta la funcio- nalidad en si misma Ahora se necesitan, ademas el calor humano y la calidad que propone un disofio en el que esta latente, junto a una tecnologia puntera, la mano ex: perta del maestro que pondra el broche de oro a un vanguardismo acérrimo. En estos momentos, la tendencia que se vive intenta recuperar ambas facetas de la creatividad: la funcionalidad y la ar- tesanfa, En lineas generales, las formas actuales de méxima vanguardia ya no son Jas muy funcionales dictadas por la Bau- haus, ni tampoco las formas curvas y re- cargadas de un neobarroco que parecia volver, ni siquiera el posmoderno estilo Memphis, atrevido pero ut6pico. El di. sefio actual aboga por la funcionalidad del estilo Bauhaus, dulcificado con mu- chas curvas humanizadas, y de tamafo mas reducicto. Se impone cierta conciencia respon- sable hacia el disefio de muebles. No basta con la palabra disefio, incluso en algunos casos, lamentablemente, esta palabra puede ser contraproducente debido al uso y abuso que se ha hecho de ella. Ahora se exige una responsa- bilidad del creativo hacia la calidad de la produccién, la adecuada linea estéti- ca, la seleccién més idénea de los ma- teriales y el cuidado de los acabados del mueble en cuestion. ‘Ademés, y este es un hecho a nivel ge neral, e] notable aumento de la concien- cia ecolégica colectiva ha desarrollado una nueva necesidad en el consumidor: la de adquirir muebles con determinado va- Jor, muebles de larga duracién y que per- mnitan ser restaurados 0 reparados, no los muebles de usar y tirar que tanto éxito tu- vieron en los afios sesenta y setenta, ni los muebles tradicionales de los abuelos, que tienen su propio valor por su calidad o su resistencia al paso del tiempo, pero que no caben en este concepto de esiética contemporénea No se trata de buscar muebles que huelan a viejo. La idea es disefiar mue- bles de rabiosa actualidad, pero que cumplan con este requisito de calidad, funcionalidad, rigor, estética y calor for- mal. Para conseguitlo, la funcién de los di- sefiadores es la de buscar los caminos que permitan definir esta pauta, marcan: do siempre el ritmo que poco a poco con- duciré a la tendencia de un momento determinado. Disefio de vanguardia y disefio comercial Uno de los principales logros a los que se ha llegado ahora en el disefio es la buena relacién entre el disefio de van uardia y el diserio comercial o practice Hasta ahora, el disefio de vanguardia se mantenia al margen de la utilidad préc: tica o la solucién mas o menos comercial. la estética estaba antes que todo, aunque su comodidad o su servicio no fueran los ‘més indicados. ;Cudntas veces ha apare: cido en el mercado un mueble de van- guardia extrema, de linea impactante y formas aerodindmicas, pero tremenda- mente incémodo 0 muy poco til para ser ‘usado en un ambiente cotidiano! Ademés, Ia sola idea de crear un mueble préctico era absolutamente antagénica con el he- cho de crear un mueble de vanguardia Sin embargo, ahora esta divisin tajante parece haber desaparecido, El disefio en I. la sociedad actual Hasta no hace mucho, la tumbona reclinable LC-4, de Le Corbusier (1928), se mantenla en una elite Vanguardista, pero ahora, a finales de sigio, tiene cada vez més adeptos por su forma anatémica.os muebles de vanguardia ‘actuales suman una cémoda utlidad préctica a su extrema simplicidad de linoas. El respaldo para uso al aire libre Back, de X Claramunt, esté formado por un circuio de traviesas de madera maciza de teka apoyadas sobre una sencilla ‘estructura de hierro. Siun mueble util antes era casi una pie- za del todo refiida con la estética, més atin sisse trataba de un mueble con tna doble funcién, como un sofé-cama, una mesa plegable o una silla apilable, ahora los disefiadores de vanguardia buscan solu- cionar problemas précticos para el amueblamiento interior. Responden a los cada vez més comunes problemas de fal- ta de espacio —mesas plegables, sillas apilables, sofas minimos—, crean mue- les auxiliares con un servicio determi- nado —mesas con cenicero_incluido, sillones con ruedas para TV, sofais-cama, médulos para HiFi, contenedores-bar, ca- mitos para el teléfono, ete— y disefian muebles convertibles con tna belleza de alto nivel y linea estética extremadamen- te depurada, Una de las demostraciones que contir- ‘man esta dualidad es que los muevos mue bles de vanguardia son de gran calidad, cuentan con buenos materiales y estén tealizados con unos acabacios excelentes, respondiendo asi a las actuales exigen- clas de un nuevo mercado mucho més preparado que el de antes, y ademés es- tos muebles cumplen una doble funcién: sison cantitos para TV, ruedan con extre- ma suavidad: si son sofés-cama, es facil montarlos y desmontarlos, como sofés no arecen camas, y como camas no Te- ‘cuerdan a un sofa, y por afiadidura, en cada funcién cumpien su cometido: como sofas son mullidos y cémodos, y como ca- mas son de buenas dimensiones y se adaptan al cuerpo para facilitar €l sueti. Si son mesas extensibles, el sistema es sencillo de manejar, su apariencia es 96- lida y el acabado, impecable. Si se trata de sillas apilables, ahora pueden ir tapi- zadas y pueden vestir muy bien tanto una ‘cocina informal como un elegante salén- comedor. ¥ asi, un largo etcétera. Pero lo mejor de todo es que esta nueva sintonia entre los creativos de uno u otro bando comercial o vanguardia— promueve que ahora el disefio més imaginativo bus- que soluciones practicas en muebles de vanguardia, y que a su vez, el disefio co- mercial, el de grandes almacenes, lleve la estética més personal e individualizada a ambientes que hasta ahora eran todos iguales, tediosos y aburridos por una ab- soluta falta de creatividad. Todo queda en manos de la imaginacién de los respon- sables del disefo. TIPOS DE DISENADOR A la larga, cualquier producto seriado debe cumplir con ciertos requisitos fun- damentales, como un importante valor funcional, un aspecto agradable y con un valor intrinseco, una suma racional de fun- cionalidad, estética y sentido social. ‘Sin embargo, hay distintas formas de enfrentarse al problema creativo, segin Ja mentalidad del disefiador. Por un lado est el imaginativo ciento por ciento, el creativo que primero ela- bora el proyecto en su mente, paso a paso y minuciosamente, viendo los resultados en su mente a medida que va elaborando Ja idea con la imaginacién, y cuando ya ha agotado mentalmente los pasos que ha de realizar, lo desarrolla en la practica, sabiendo los pasos que debe dar para lle- ‘gar a la realizacién ideal de su disefi. Por otro lado se encuentra el diseriador racional, el profesional metédico que se plantea primero —por escrito y de modo muy légico— una serie de pasos cohe- rentes y analiticos, para desarrollar des- 4pués el proyecto metédicamente, a través del cumplimiento sistemAtico de esta se- rie de pasos. El disenador que imagina Para elaborar un disefio, el diseniador imaginativo debe estar abierto a captar y asumir cierta informacién que puede es- tar latente en su mente, o que de forma inconsciente le llega desde el exterior la actualidad mas reciente de productos se- mejantes; experiencias anteriores sobre el tema; el andlisis subjetivo del producto en su imaginacién, a partir de sus nece- sidades funcionales. Con estos datos en el cerebro, el di- sefiador imaginativo obtiene el punto de parlida para desarrollar todo el lento pro- eso del proyecto, en una serie sucesiva de dibujos experimentales, que iré mo- dificando a través de la experiencia vi- sual, primero en papel —o en la pantalla, si trabaja con ordenador—, luego en ma- quefas, hechas a escala proporcional, y en prototipos basicos después, realizados siempre a tamafio natural una vez que se llega a este nivel El disefiador que razona El diseador racional, a su vez, plani- fica por escrito los pasos que ha de dar antes de plantearse el disetio: —Realiza una exhaustiva basqueda tebrica y préctica —escrita 0 real— sobre otras obras y otros antecedentes que han precedido a su proyecto, y analiza simi- Iudes con producciones que presenten alguna concordancia con su futura pro- puesta de diserio. — Busca soluciones tedricas légicas an- tes de iniciar el estudio del proyecto en Ja préctica —Crea una metodologia racional de trabajo. —Rechaza radicalmente toda experi- mentacion per se, sin un fundamento pre~ meditado. ‘LA CONCEPCION DE UN DISENO La mayorfa de los disefiadores que hoy cuentan con un reconocido prestigio pro- fesional actual mente crean sus disefios a partir de una comprobada carencia del mercado. Hay una necesidad determinada tanto por la falta de un objeto de ciertas carac- HNSERTERLEEUPTY teristicas, como por la inadecuacién de los objetcs existentes en ese momento, El disefiador advierte esa falta y estudia una solucién, tomando en consideracién tanto ‘su aspecto funcional y estético como su solucién a nivel industrial e incluso el va- lor lidico que pueda tener como objeto de utilizacién social. Un ejemplo interesante en este sentido es el de la creacién de las sillas deno- minadas Diestra y Siniestra, obra del ar- quitecto Carlos Ferrater. ‘Un disefo para una funcion Hay millones de sillas en el mercado, por lo tanto, crear una silla no es ninguna novedad. Pero lo que no habia en el mer- cado era una silla de uso piiblico, creada epresamente para su uso en restauran- tes, que permiitiera sentarse cémodamen- te. Su forma debfa ser anatémica para Para crear determinados diserios ‘se necesita utilizar mucho la ‘imagmacién, ademés de conocer a fondo las posibilidades que ofrece el material previsto. Cartoons, del disefiador Lui Baroli, es un original y préctico ‘biombo ecoldgico y reciclable, realizado en cartén corrugadio, acabado en celulosa pura y sin residuos polucionantes los bordes superior e inferior son de goma negra, y las extremos, de aluminio satirado. Extendico inide 4 m de largo y enrollado en forma de cilindro apenas lega & los 40 om, 18El equipo de diserio Rambla Branch comprobs que Ja mesa Olivia no tenfa una sila que la acompatiare, y de abi disefé la silla Tennessee (con brazas y sin ellos), en madera de haya ¥ ‘siento tapizado. Partiondo de una investigacion formal, con un materiales, el resultado ha sido tun producto cémodo, resistente y con una imagen adecusda @ su Diestra y Siniestra es una silla en dos versiones (para apoyar Ia derecha o en Ja iequierd: diseriada por Carlos Ferrater con nalidad espectiica: la de facilitar la tertalia con el vecino ‘en una mesa de restaurante. Producida por Carlos Jané Camacho, esté tapizada en aledntara, microfibra las patas ¥ apoyebrazo madera de haya de La estanterfa metdlica Tria, de Massana-Tremoleda, esid diseriada para abanico de pos serie de estantes y soportes en jistintas alturas, profundidades y res permite una gran variedad de compo Se adapta a las medidas de la pared y 2 la altura de los obje que ha de contener (pagina acoger la estructura hu: recta en un principio, y cada vez més re- lajada a medida que transcurriera la co- mida Esta silla debia sostener k nn de un bolso femenino, sin a cilitar el sos que éste llegue al suelo, Pero la grat novacién de este disefio ha sido el de- sarrollo iegular del respaldo, més al de un lado, brazo, a izquierda o a det posicién del comensal penmite cierta communica cino de mesa, facilita la charla informal, arrellanado hacia el costado opuesto al vecino, y crea una camaraderia en el con- junto. De esta forma, el diseo cumple nn los conceptos basicos del disefio: es radicalmente funcional, su linea estética est extremadamente depurada y, por tl- timo, su concepto de servicio responde ecnologta despuds. iSgena con regnl Equipadé seguridad, 27 un criterio de sociabilidad inherente a todo producto de estética contemporé- nea, y mas atin si su funcién est desti- nada a un espacio de uso piiblico. La responsabilidad, de principio a fin Para ottos creativos, el disefiador pro fesional tiene una responsabilidad frente a la sociedad de consumo. Para Josep Liusca, una de Jas grandes figuras del di: sefio industrial contemporéneo, el disefio es una propuesta para ver los objetos co: tidianos desde una nueva perspectiva, mas amable e infinitamente més comuni- ativa. En sus creaciones, Llusca traspasa mmcepto basico del producto de di- fio. Supera la estética, la funcionalidad y la sociabilidad de los objetos, para bus car una nueva forma de ver y de convivir industriales, Sus pi puestas de disefio extraen lo mejor del jonalismo teérico y el organicism fundirlos en una nueva c.tura, més cordial y més humana que la que se imponia en los tiltimos tiempos Sin perder el valor intrinseco del racio. nalismo, Llusca huye de su rigidez recti linea, para sustituirla por la linea curva, mérbida y sensual de las formas organi cas de Ja naturaleza. Al mismo tiempo, este disefiador propone, en cada una de sus creaciones, una conjuncién de valores contemporéneos culturales, lidicos y for males representativos del momento his- torioo que vive nuestra sociedad. En su caso, al idear un disefto, Liusca trabaja con la imaginacion. Proyecta, bos: queja y analiza materiales mentalmente, hasta llegar en teoria al producto ideal En su cerebro va puliendo y transforman- do el proyecto de forma ordenada, sin ha- berlo trazado todavia en el papel Va sintiendo el producto, puliéndolo y de- purdndolo hasta llegar al punto en que le satisface funcionalmente, y en el que su linea estética, desde una estructura sen: cilla y racional, responde a la necesidad de uso que se le exige al producto. Justo entonces inicia el desarrollo del di en un dibujo sobre papel. Por otra parte, este disefiador sigue una pauta de trabajo que sirve de guia a un determinado estilo creativo: todo el proceso de diserio es seguido por él paso ‘a paso, supervisando su elaboracién des- de que él entrega el proyecto, con las co- nrespondientes maquetas, y ha probaco ya los prototipos iniciales. Controla la pro- duccién y por iiltimo sigue el producto cuando ya est4 en el mercado, para com- probar en la practica los resultados de su propuesta, Llegado a este punto, Llusca contimta investigando, y si aparece un material o una técnica que puede superar su creacién, la aplica en posteriores ver- siones de dicho disefio. Desde luego es elmejor sistema para que el disefiador se responsabilice de su obra incluso cuando ya ha legado a manos del usuario final. Bueno, bonito y barato Otros disefiadores crean sus proyectos de muebles de acuerdo con lo que ellos echan de menos en el mercado, buscan una calidad y luego se encargan direc- tamente de su produccién, controlando la plifeacién y reduecién de costos del producto en bien del consumidor final Por ejemplo, Josep M* Tremoleda y J, Massana crean productos de gran con: sumo dentro de una linea de gran sim- plicidad formal y excelente relacion alidad-precio. Antes de lanzar un pro- ducto al mercado, el equipo busca un ele- mento que falte en el mercado, como un esBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 disefiador Vicent Martinez so de! mercade sa lejanclo accesible el nierior. El muoble est risticas especiales, o una lam nal para hogar, una mesi preste vicio concreto, el proyecto al departame: ting, y si éste confirma las px rencias de un elemento racional y funcion muy determinada —un: breria que permita guardar el doble de lik a mesa plegable de gran tam: tempordnea an estudio de nte, nzamnien prensa, Sin embargo, este equipo, au que comenz6 con sus prop ahora esta abierto a las colaboraciones otros disefiadores, que participan en la jpresa proponiendo sus propias of de disefio, sigui cidad formal y m Los diseios sociales Ottos grandes diseftadore: italiano Ugo La Pietra, abogan por | bertad de conciencia para el consum sin _adjudicarle un cardcter individual y personalizad El rigor de lo racional por usuario, Es iar la bender la sociedad actua una fuerte n radical a toda cx nsibl a determinada ne- miembro de ut ido. El observa su en- \dividuo como absorbente y vesidad del met uel, y propone, tomo, habla con la gente, se interesa por diales que anulen la frialdad del exterior sus problemas de hdbitat y en el mo enel interior de un ambiente. S to en que comienzan a repetirse la ‘les, racionales, célidos y humanoEl disefo en la sociedad actual rie Kix Mai ualmente una sociedad posmodemna, harta de la fria gida funcionalidad de los afios seten henta, El disefto, reflejo de la cultura ndes genios del disefio in sirial Contempordneo son el equi do por el inglés P antiago Miranda, Pai parte de en un ampli 1 entomo. Para que st guen al mismo tiempo c cial y urbana del momento, leen, se informan y participan en cualquier acti vidad lidica que esté relacionada co pintura, aquitectura, teatro, cine, etc. que se desarrolle en su entorno, De esta forms n conscientes de las tendencias artist que se palpan en el aire, saben a dén de se dirigen los gustos de la gente sven su tiempo en todos los sentidos. Sus disefios, por tanto, reflejan necesariamen- _xiliar en un centro de trabajo tradicional, te el espiritu urbano més actual, y consi- pero adapta fesional que se m guen crear las formas y los objelos que ve con la méquina a cuestas, al free-lance pera de forma esponténea el consumi mye de las oficinas kalkianas para de la nibir en su propio entorno, en su dé Perry King inicié esta nueva es he la Val al disefiador austro-italiano Ettore moldes conocidios hasta én ss dinémico y muy conocido crea- tonees: dentro de un cuerpo de un rojo Ta casa Olivetti y creador del van- imponente, el teclado riguroso de la ma guardista y sorpr quina de escribir tradicional se convirtié disefio Memphis, de Milan en im teclado arquetipico, basado er n equipo, King Colabors con &: primeras letras de las culturas mas jonaria méquina _cestrales, cuya forma ergonémica respon- (1965), un un concepio més humano y mas plo de origen, Util como elemento au- jo al prBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 La primera creacién en Espatia de King & Miranda fue la serie indiscriminada de materiales y colores rompe Ja rigides estética de su estructura metal Santiago Miranda, a su vez, trasladado a de lo buscaba los signos de los tiempos en cualquier detalle trivial que para otros pudiera pasar inad: verlido, Era un detallista de la vanguardia, con una cultura de artesania. En 19: iados ya King & Mirai Tel el nuevo equipo las maquinas de ¢ caria la pauta que seguiria dio, complement procesos que siguen para dar forma y vida a sus disefios industriales disefios de muebles de ‘proponen. mezcla en este equipo aun humanismo propio de las creaci manuales de los antiquos artesanos. Ellos desmitifican la frialdad de las ule de los objetos ittiles pa la suavidad de Iineas de con personalidad propia. Su primera a en el disefio de muebles fue de la silla para lespacho A adi calmente ergonémica, adaptada para onsumidor, ya sea de f , 0 por ei c permite al que ne nsuario todas para sii de trabajo. amable el di impersonal ns obras mas cari creacién de la serie de sil 4 Beato, disenlada en 1986: una estruc tura de tubo de acero pintado de ne re la que se apoyan el asiento tapi- zado en tela y el respaldo, 4 do de tela de que mga hasta tocar el suelo. En este la indiscriminada mezcla de mate ala rigidez de una Se trata de una serie de mue bles de asiento creados con gor cientifico, en la que se p! nota informal y dese elementos basicos —los asientos— deCada tipo de mueble debe disefiarse siempre en funcién del uso al que ird des tinado, entendiéndose como uso: ambito para el que se disefia (privado o pitblico) y edad de Ja persona que lo utiizaré (citio, adulto). Ademés, en este capftulo debe tenerse en cuenta la forma del objeto, mas o me- nos funcional; la linea estética, rigida y friao suave y cordial; el estilo de los mue- bles, clésico, moderno/tradicional o van- guardista; los materiales que se emplean en su produccién y la calidad aconseja- ble en cada uno de los respectivos aca bados finales. EL AMBITO PRIVADO El primer concepto, el émmbito, tiene un carécter muy relativo, segiin el espacio, elestilo y el uso al que se destine el mue- ble. Si se trata de un espacio privado, el disefiador debe tener en cuenta @) las dimensiones propias de una vi vienda. Un mueble de linea clésica 0 tra- dicional puede permitirse un tamafio relativamente importante, porque tal vez serd utlizado en casas antiguas, 0 al me- nas en pisos urbanos de vieja construc- én y, por tanto, de grandes espacios. Incluso si el Ambito es un apartamento de construccién actual y espacio reducido, y se utilizan muebles de linea clasica, el di- sefiador debe contar con la creacién de un mueble de uso indivictual y aislado del resto, ya. que, por su volumen, este tipo de mueble necesitaré rodearse de un es- La funcionalidad del diseno pacio vacio que permita disfrutar de la imagen del mueble. Sise trata de proyectar un mueble de linea actual, el disefiador debe contar con que se creen formas de dimensiones mas reducidas, propias de los pisos y aparta- mentos contempordneos. En este caso son aconsejables los muebles individua: les adosables, o los programas modulares que pemmiten al usuario adaptar los ta mafios de los médulos al espacio con el que cuenta en su vivienda ) La estética doméstica. Por otra par- te, el efecto visual de los muebles para uso doméstico debe aportar un volumen, una forma y una linea estética agradables, lejanas de toda agresividad éptica propia de formas excesivamente funcionales y Los muebles de uso doméstico eben ser précticos, de lineas suaves y materiales célidos, como ‘el canzito-bar 900, disefiado por Alvar Aalto en 1993 En él se combinan madera contraplacada, ‘madera pintada, mimbre y cerdmicaBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Disefiada por Paul y Chery! Ruine, Renaissance es una serie de diferentes sillones realizacios en forma de escultura Ia tapiceria deja al descubierto J onginal tala de las patas, acabadas manualmente con tintes y ceras de artesanfa. El tapizado €s de terciopelo 0 de chintz festampado con motivas clisicos 2 asépticas, en las que la racionalidad pri- ma sobre la sensibilidad En este caso son siempre aconsojables unas lineas forma- les suavizadas y de efecto calido. Un mueble disefiado para uso domés tico debe transmitir su funcion ambiental a través de su imagen estética, aunque luego ese mismo mueble se utilice en un Ambito piiblico, pero en este caso sera con la intencién de aportar un calor do- méstico dentro de un espacio impersonal, al que se quiere humanizar con un deter minado tipo o estética del mueble. Mnuebles de hogar Su finalidad basica es ofrecer un des canso a la persona. Todo ser humano bus: ca un entorno privado que lo cobije, que lo arrope. Sus muebles deben offecerle cierta intimidad, una personalidad que se adapte a la suya. La propia historia de los muebles esté directamente relacionada con la historia vital del ser humano. Los muebles de uso doméstico —los primeros muebles, naturalimen ron cuando el hombre primitive refugiarse en cuevas, en las que lechos de hojas y ramas pata crear sus primeras camas, y trozos de troncos de diferente tamano para utilizarlos como n dimentarias mesas y sillas, Cuando vivia como némada, estos seudoruebles se des- trufan o se abandonaban con cada cambio, pero al imponerse la vida sedentaria, ata- as. una incipiente agricultura, el hombre io los primeros pasos hacia una construc- ion, atin manual y elemental, de unos au- ténticos muebles de hogar. Siguiendo esta pauta primaria, pero muy légica y racional, la linea de estos muebles, por tanto, debe ser célida, cor- dial, acogedora y al mismo tiempo ha de cumplir una necesaria funcionalidad. LOS MUEBLES DE RECIBIDOR Lazo de unién entre el exterior inhés- pito y lo célido del interior, el recibidor necesita muebles neutros, funcionales, para facilitar el acceso a la casa —espej perchero, paragiiero, mueble auxiliar— al propio tiempo en la misma linea de los muebles de interior. Esto quiere decir que al disefiar un mueble de recibidor deben tenerse en cuenta todas las necesidades propias de una entrada doméstica, y los posibles e: tilos que pueden encontrarse en el inte- rior del hogar. Si ademds la vivienda se encuentra en un lugar con determinadas caracterssticas zona de nieve o barro, playa, monta: fia—, el recibidor debe incluir un tipo demueble que facilite el cambio producido entre el exterior y el interior: por ejem- plo, un zapatero para botas, o un gran ar- mario para abrigos de nieve, etc. Los materiales empleados en muebles de recibidor dependen también de la lo calizacion y de la arquitectura de la vi vienda Si se trata de una casa rural, los muebles pueden ser de madera maciza y esilo ristico, como una afirmacién a la es- ‘ética ambiental de toda su arquitectura, o pueden combinarse con piezas de hi no forjado, trasladando parte de la esté- tica del jardin al interior, Sin embargo, en un apartamento urbano este tipo de mue- ble puede ser muy chocante. En una casa de campo o de montati les muebles pueden relacionarse con la historia o con las actividades de la region cajas, arcones, baiiles riisticos, ete— y pemmiten un sofé de fibras vegetales o de madera como preémbulo doméstico, aun- ue nunca se utilice como tal, o una azada como peculiar pieza decorativa, ‘Asi vez, en una vivienda urbana con- temporénea, los muebles de recibidor permiten una vanguardia extrema, dentro de una gran simplicidad de lineas. ya que Jas formas recargadas son poco practicas y no se aconsejan en una habitacién tan impersonal y generalmente pequefia ‘como un recibidor, Por el contrario, son aconsejables muebles auxiliares multi- piles, como un espejo-perchero, o un mé- dulo contenedor en el que se guarden las llaves, se deposite el correo diario y se deje €l paraguas. El material empleado en este caso puede mantener la frialdad de un mueble urbano —metal, mérmol, custal— y combinarse al mismo tiempo con un mueble de madera representativo del mobiliario del interior de la casa, Esto penmite que al disefiar una serie de mue- bles para salén se incluya también algtin elemento individual que pueda utilizarse en el recibidor y relacione ambas zonas de la vivienda por su linea estética y la calidad de sus materiales. LOS MUEBLES DE SALON Creados para recibir, estar y compartir ‘a vida social, los muebles de la sala de estar suelen ser los mas representativos del gusto personal y del nivel de calidad de vida de sus propietarios. Constan, bé- sicamente, de: —Mnebles de asiento (sillones, sofas, utacas, puff, tumbonas 0 médulos, in- distintamente, ya que no es imprescindi- ble contar con el tradicional tresillo). —Mesas auxiliares para dejar copas, cigarrillos y objetos decoratives. Un contenedor para los equipos de miisica, imagen y sonido, —Un elemento a modo de bar, para quardar copas y bebidas. —Finalmente, un buen sistema de ilu- minacién, a base de ldmparas de pie o de sobremesa para crear zonas individuali- zadas de estar, y una iluminacién general, mejor si es indirecta, para unificar todo el ambiente cuando sea necesario. Los muebles de esta habitacién deben tener fisonomfa propia y cierta persona- lidad, a la vez que estar disefiados con materiales de calidad, dentro de la ca- pacidad econdmica de la produccién, Sus lineas han de ser suaves, evitando la ri- gidez de las aristas. Los asientos deben adaptarse cémodamente al cuerpo hu- mano. Las alturas y dimensiones de las mesas auxiliares tienen que estar al al: cance de la mano de la persona sentada, En conjunto, los muebles de sal6n, aun- que estén disefiados con lineas rectas funcionales, 0 acabados en un ftio e im- personal color negto, deben ofrecer una imagen estética agradabie y acogedora, propia de un ambiente de uso personal y privado, Esto se consigue con una buena dosis de imaginacién por parte del di- sefiador, como puede ser un sistema de tiradores disimulado en la madera, formando parte del cuerpo del mueble, un juego de soportes y patas con una Ii nea muy estilizada, unas superficies lisas La funcionalidad del disefio os diserios de Jaume Tresserra combinan una vanguardia radical con la ebanisteria més minuciosa yy artesana, como la cajonera ‘Tecla, un contenedor en nogal ‘Por fuera y sicémoro por dentro, con aplicaciones en simil de ‘marfil y un espejo en 10 alto, Sirve como médulo auxliar on el ‘comedor, 0 camo chiffonnier en ‘el dormitorio,Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Philippe Starck disefié estas ‘puertas para armario de dormitono, modelo Club, con tiradores de metal y vidio, aplicables en la caintidad ¥ posicién que se quiera, Zar 4 es un galén de noche para dormitorio en metal cromado y ‘madera maciza de nogal, tendo en azillo lacado en negro. y pulidas, etc. En el disefio del mueble o el objeto decorativo esta la clave de su acierto estético, LOS MUEBLES DE COMEDOR Por lo general unido o muy cercano al sal6n, el comedor suele mantener una re- lacién muy directa con aquél, y por tanto su mobiliario debe seguir la misma linea estética que el salén, 0 al menos debe te- ner un estilo concordante, para guardar una armonia entre los dos. Lo més acon- sejable es disefiar un programa comin a ‘ambos ambientes, en el que coincidan la esiética de uno con otro, pero si su estilo es diferente, el disefio de los muebles de comedor debe mantener cierta unifica cién en el tipo de maderas utilizadas, en el empleo de superficies de cristal, en las estructuras metélicas, en algunos detalles de acabado o en la coordinacién de li neas formales que presentan ambos gru pos de muebles. Dadas las dimensiones de las viviendas contemporéneas, es conveniente tener en cuenta ciertos factores funcionales al di sefiar una mesa de comedor, Si interesa tear un efecto éptico ligero, es aconse- jable el disefio de mesas con sobre de cristal, transparente y casi sin volumen Optico, apoyadas sobre una estructura li neal, Sisse prefiere la construccién de una mesa de madera con perspectivas de am- pliaciones esporédicas, es preferible di sefiar un sistema para extender la mesa en determinados casos, o para abatir sus dos alas en otros. En cuanto a las sillas, pueden tener ur estilo o una linea propics, diferentes a los demés elementos de interiorismo, siem- pre que no desentonen en el conjunto de muebles del comedor. Actualmente exis. te una marcada tendencia a disefar sillas independientes del resto de los muebles, pero si un disefiador crea todo un conjun- to para una funcién determinada, como es un comedor, tiene la responsabilidad de unificar la imagen de todos los elementos, ppara que mantengan una coordinacién ar- ménica entre si LOS MUEBLES DE DORMITORIO En las titimas décadas, el disefio de muebles para dormitorio ha consequid¢ crear formas muy practicas, apoyadas er: gran medida en la produccién de progra mas de muebles modulares, Se le hi dado un auge importantisimo a los arma: rios, individuales, dobles, empotrados, « media altura 0 de suelo a techo, con puer tas abatibles o correderas, con estanites con cestas sobre rieles. Las opciones sor infinitas, y se adaptan a un espacio deter minado del dormitorio 0 se una habitacién anexa, convirti vestidor. Las camas han aumentado de ta majo, unificdndose con Europa —el large europeo normalizado de camas de adul: tos es de 200 cm, mientras que en Espaii era, hasta hace pocos afios, de 180 cm salvo medidas especiales—. Ahora lor muebles estan capacitados para contene! Ery disimular, si es necesario, equipos de sonido y de imagen. La ropa de cama ha dado un giro radical y se ha transformado en elemento de enorme importancia, tan- to funcional como estéticamente, dentro de la habitacion. La manta ha cedido paso al edredén, y éste, a su vez, ha invadido el lugar de la colcha (también en algunos casos se utilizan sacos de dormir en lugar de sabana y manta). Los eldsticos de las camas se han reemplazado por lamas de madera, A menudo se cambia el cabezal tradicional por un juego de almohadones. Incluso en Jas ventanas, la combinacién de visillo y cortina ha dado paso al sen- illo y sobrio estor enrollable o plegable. ‘Todo es funcional, cmodo y, sobre todo, ecolégico. ero las dltimas tendencias de esta dé- cada proponen la vuelta al dormitorio ro- méntico, a la cama con dosel, la tarima, las sibanas bordadas, las colchas blancas de encaje, los visillos traslicidos, etc. En esta habitaci6n es donde se aprecia mejor el egreso al acogedor y célido ambiente doméstico. Los nuevos disetios de dor mitorio proponen camas enormes —an- has y largas—, muy bajas, a veces sin somier, pero siempre con un colchén er- ‘gondmico (la preocupacién por la salud y el cuidado del cuerpo va en aumento). Se definen estilos controvertides en busca de una calidad estética: posmodemo, Santa Fe, neobarroco. Las lineas més avanzadas se atreven con reminiscencias de un Imperio actualizado, aunque el res: to del mobiliario para la casa mantenga una linea sobria y funcional. Las mesillas esconcien una bandeja para desayuno y llevan Tuedas opcionales. Abundan los di sefios de galanes de noche, y en algunos casos el clésico tocador se transforma en escritorio informal durante el dia. Para | dormitorio se ha convertido en la actualidad en el auténtico corazén de la casa, Todo depende del criterio em- pleado por los disefiadores en sus nuevas creaciones Muebles para nifios Hoy en dia existe una nueva filosofia respecto a la utilidad y duracién del mo- biliario infantil. Los tiempos son més difi- ciles que antes, se intenta que el mueble dure mucho més. En este nuevo criterio ya no cabe la cuna, que sdlo sirve para los primeros meses de vida del nifio, y luego se guarda para siempre en un tras- tero 0 simplemente se desecha. ‘Al diseflar un programa de mobiliario infantil deben tenerse en cuenta solucio- La funcionalidad del disefio Cama con baldaquino Franz Joseph, disedada por Antonia Asiori en 1990, de metal y madera, 28Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Los programas para nifios deben ‘solucionar problemas de espacio, ‘como el pequefio armario-juego infantil do la fotografia. Elcolor es fundamental en un ‘mueble infant, como esta alegre cama multicor. nes précticas que permitan el crecimien- to de los muebles junto con el de los nifios. Por esto mismo, ahora no caben programas infantiles con marcadas ten- dencias estéticas heredadas de los ma- yores, como lineas muy roménticas que Tayan con lo ridiculo, o formas y colores estridentes, contagiados por alguna van- guardia insélita, o incluso aburridos ele- Mentos que imitan auténticos juegos infantiles, pero que no llegan a cumplir Ja misma funcién pedagégica de éstos, Ahora los programas infantiles deben so- lucionar problemas de espacio, de con: tinuidad en el tiempo e incluso pueden adquirir un cardcter hereditario si cum- plen los requisitos de estética, estilo y ca lidad en los materiales de edicién. MUEBLES DE FIRMA Dentro de este iltimo concepto se in- cluyen ahora los muebles de firma, pro- gramas proyectados por conocidos di- sefiadores de] mundo de la vanguardia, que amplian su creatividad hacia un cam- Po que est4 adquiriendo un gran interés en el mundo empresarial. Es importante tener en cuenta los carn- bios que se han producido ahora respec- to al mobiliario para nifios, Se ha vivido una transformacion econémica en la so- iedad, la crisis de los afios noventa ha provocado un nuevo vuelco hacia la vida familiar, se ha recuperado la tradicién, existe una marcada preocupacién ecolé- gica. Este seudorretomo al hogar reper- cute, evidentemente, en el desarrollo de una nueva forma de sensibilidad ante los nifios y su entorno, sus juguetes, su am- biente, sus muebles. LA IMPORTANCIA DEL COLOR Sin contar con Ja légica identificacién Por tamafios y proporciones, la principal diferencia que debe caracterizar al mue- ble destinado a una habitacién infantil es el color. En diferentes estudios con nifios se ha comprobado numerosas veces ‘cémo ante un mismo elemento, que para un adulto debe estar acabado en un color natural o en un tono discreto, el nifio se decanta por los colores primarios, con una fuerte predileccién por el rojo o el azul. Por otra parte, y dadas las reducidas dimensiones de las viviendas actuales, los muebles para la habitacién de un nifio de- ben estar concebidos para servir también como muebles de estar para el dia. De- ‘ben convertirse en parte de su cuarto de juegos, su rincén de estudios y su sala de estar. También hay que tener en cuen- ta que los nifios de hoy suelen vivir mucho menos en el exterior que en otros tiem- Pos, por tanto es imprescindible crearles en su pequefio mundo privado algo del encanto que puede tener un espacio ex- terior en un parque al aire libre, excep- tuando, evidentemente, el aporte de la naturaleza. MUEBLES QUE CRECEN (Otro tema que hay que tener en cuenta al disefiar un mobiliario para nitios es la posibilidad de transformar los mue- bles de acuerdo con el desarrollo delniiio y, de esta forma, desde la cuna que le sirvié de recién nacido se puede llegar hasta la habitacién de un joven estudiante, coon su rincdn de descanso y su zona de estudio, En este caso, el tema del color debe quedar reducido a los acabados na- turales a los tonos ms neutros posibles, porque los muebles evolucionaran con su duefio y deben estar preparados éptica: mente para adaptarse a los distintos cam- bios psicolégicos que se experimentan de una edad a otra, MUEBLES ECOLOGICOS Y CON PERSONALIDAD PROPIA El ya clasico mueble de pino, cttbico y modular, de lineas rectas, muy sencillo y de estética impersonal ha quedado atrds, Los nuevos muebles deben ser ex tremadamente naturales, sus lineas de- ben ser suaves y sencillas, sus formas tienen que ser acogedoras y con una fuer- te carga ergonémica. Por su calidez y ri- queza formal, los disenos de mueble infantil tienden a usar la madera maciza, con preferencia haya 0 aliso, con acaba- dos muy pulidos para evitar cualquier po: sible astilla y deben evitar el empleo de productos quirnicos nocivos para la salud (existe una normativa respecto a estos productos). En su lugar se recomiendan los tintes naturales y la cera de abeja Un ejemplo muy representativo de esta nueva cultura del mueble infantil es el programa creado por el arquitecto Efthy- mos Warlamis: después de numerosos es- tudios ergonémicos y sociales en torno a la psicologia infantil, este disehador pro- puso una serie sumamente versétil para los niffos, favoreciendo con sus muebles el desarrollo de la creatividad infantil y propiciandoles llevar sus suetios a su pro- pio entorno, Con este experimento se re- cupera un valor pedagégico y didactic en el ambiente infantil doméstico, y se pretende despertar en el nino una sen- sibilidad poética que é1 mismo podré de- sarrollar a través de los muebles que forman su reino privado. Muebles para minusvalidos CARACTERISTICAS GENERALES Otro tipo de mueble para el que la fun- cionalidad tiene una importancia primor- dial es el mueble para minusvalidos, qye ‘al mismo tiempo mo puede perder la ca- lidad imprescindible de un mueble que forma parte de la vida cotidiana de un ser bumano. ‘Suponiendo que se ha de disefiar un tipo de mueble apropiado para esta si- tuacion flsica —o psiquica—de un sector de la sociedad, hay que tener en cuenta una serie de conceptos que en muchos ‘casos coinciden con los necesarios para un nfo de corta edad, dada la posible fal- ta de autonomia, de equilibrio o de con- centracién. Tanto unos como otros ne- cesitaran un punto de apoyo innecesario para un adulto normal y también, en am- bos casos, los materiales deben ser sua- ves y morbidos, si se trata de un asiento, y sblidos y resistentes, si el objeto ha de recibir una cierta presién en su uso, La funcionalidad del disefio Los muebles para niflos deberfan poder crecer, como esta mesa ‘modular que puede prolongarse indefinidamente, haciendo eses, ‘por adicién de médulos en ‘somicircunferencia as pinturas y esmaltes para ‘muebles infantiles deben ser Inocuos. Estos muebles cumplen todas Jas normas al respecto.Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Cada uno de estos muebies es algo mas: una casita, un éxbol. ‘Son muebles con personalidad ‘Todos ios elementas de la casa cocinas, armarios empotrados, percheros, colgadores, estanterias, mesas, camnas, cajones, etc — deben estar al alcance de la mano desde la silla de medas (pégina siguiente) Asimismo, es preciso tener en cuenta que al facilitar la utilizacién de los mue- bles a un minusvalido, al mismo tiempo se crean soluciones cémodas aplicables a individuos normales. Por ejemplo, el di- sefio de una silla de ruedas, cuya forma debe acoger con absoluta comodidad el cuerpo del minusvalido, por su concepio anatémico, a la larga puede ser aplicable a cualquier silla de uso generalizado, en la que se exijan ciertos condicionantes er- gonémicos: butaca para salas de espera, sillon de trabajo, silidn de lectura, etc. Por otra parte, los pasillos anchos de las ca- sas, las rampas sin peldafios de edificios ubblicos y las de la calle sin el bordillo de la acera, todo ello disefiado siguiendo un plan humanitario para facilitar la cir- culacion urbana de las sillas de ruedas, facilita también la circulacién de Jos tran- setintes que llevan carritos de la compra © maletas con ruedas. La tinica precaucién que hay que tener en un disefio con estas perspectivas es que su realizacién debe tener un alto ni- vel de precisién, porque asi como una persona normal puede obviar ciertas di ficultades 0 incomodidades de determi nado mobiliario, una persona con difi cultades fisicas se veré impedida para su perar estos inconvenientes, y el disefio habra perdido todo sentido. Otro punto muy importante que hay que tener en cuenta en este caso es la situacién especifica del usuario al que va estinado el disefio en cuestién: si se trata de un minusvalido de nacimiento, sin una experiencia normal anterior, el mueble debe cumplir unas funciones mucho mas radicales que si se trata de una persona que ha quedado minusvalida después de haber vivido normalmente y, por tanto, de haber adquirido determinados habitos cotidianos. Ante la perspectiva de un di- sefio semejante es conveniente dejarse asesorar por un especialista. Un terapeuta que conozca las posibles dificultades de determinadas minusvallas seré el mas apropiado para estas consullas especifi cas. Naturalmente, cada caso es un mun- do particular, pero aun asi es posible disefiar muebles y objetos adaptables a determinadas situaciones que coincidan 0 se asemejen en algunos aspecios de cier- tas minusvalias. De todas formas, estos muebles deberian facilitar siempre la au- tomocién de la persona, desde la altura de una mesa de comedor, mis baja de lo normal, para llegar a ella sin dejar el apoyo de la silla de ruedas, a la manio- brabilidad de ésta, que debe estar con: cebida para que el usuario pueda des- plazarse con gran autonomia La silla de ruedas Los disefios de sillas de ruedas han evolucionado notablemente en los tiltimos B7 Estanierias Zona de la cocina ‘Armarios de la cocina 40.35. + .80"min._— 29Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 os picaportes, teléfonos, etc. deben estar a media altura, Segtin Ja minusvalia, en la casa debe haber avisadores luminosos ¥ actisticos ' eee Pesan x ‘0 ; Ree eae eeeeeree es oS FAS tiempos. Incluso el adecuado estudio er- gon6mico que se ha aplicado en ellas ha permitido lograr una terapia en pacientes que necesitaban ayuda externa para tras- ladarse desde y hacia la sill y ahora pueden valerse por sf mismos, Un ejemplo especifico de este estudio lo realizd un disefiador de muebles para minusvélidos. Antes de proyectar la silla més adecuada, este disefiador sacé mol- des en yeso de varios minusvélidos con problemas en la columna, y a partir de tna forma comin de soporte en el res- paldo de la silla consiguié unificar un mo- delo que sirve para todos, incluso con dos variantes de altura, para facilitar también lun mejor apoyo a personas tanto bajas como altas. ‘También la mecénica y la electronica han ayudado a facilitar el uso de la silla a ‘personas con impedimentos fisicos. En el mercado existe una silla danesa formada por diversas piezas intercambiables. De esta forma, al montar su estructura cada silla puede adaptarse por completo a la forma del cuerpo de la persona que la va usar, desde la curva més adecuada en el respaldo para sostener anatémicamen- te la forma de la espalda, hasta la altura y el éngulo de la pieza sobre la que des- ccansan los pies, o la altura y el Angulo de los brazos de apoyo. Los muebles de dormitorio Por lo general, las situaciones més di- ficiles para una persona que padece al- guna minusvalia son las de levantarse y vestitse por la mafiana, 0 acostarse por la noche. Es imprescindible, entonces, fa- cilitar estas actividades con los muebles mAs apropiados al alcance de su mano. En primer lugar, las camas para minus- validos deben igualar su altura con la del asiento de la silla de ruedas, para facilitar el traslado del usuario, Seria muy itil in- Cluir en el disefio de la cama un sistema electrénico accionable fécilmente con un mando digital. Este sistema puede per- mitir levantar bajar el respaldo de la cama, levantar las piernas, etc,, sélo con apretar un botén. La ropa debe poder guardarse en un buck con redas fécilmente extraible delarmario, y la barra del perchero debe quedar dentro del armario, a la altura de la persona sentada. Un espejo bien it minado y de facil acceso ayudaré también ‘a que la persona se peine y arregle con relativa comodidad. El bafio En el bafio de un minusvélido, apar- te de que la instalacién de los sanitarios ha de estar a una altura asequible, sobre todo el lavabo, que suele situarse a cierta altura para usarlo de pie, los tinicos mue- bles que suelen ser imprescindibles son: una seudosilla con agarraderas, para ins talar sobre el W.C,, y dos barras también a modo de agarraderas para trasladarse ala baflera. En cuanto a las puertas, todas las de la casa deben diseflarse con una manija de fécil manejo, y debe situarse a la altura més comoda para manipularla desde la silla de ruedas. La cocina Los muebles disefiados para una co- cina de un minusvélido deben tener en cuenta la posicién que éste adopta en su actividad culinaria, Si puede trabajar de pie, la altura sera la misma que se ha normalizado para todos los muebles de cocina en general, Pero si se trata de muebles para usar desde la silla de rue- das, hay que tener en cuenta, por un lado, su altura, que debe ser similar a la de un escritorio, para permitir el apoyo de los brazos sobre la encimera. Por otto lado, también es imprescindible contar con un espacio hueco bajo el mueble, para per- mitir el acceso de las piernas y de la sila ‘Todas los accesorios deben quedar al alcance de la mano, por tanto seria inte- resante diseflar un tipo de mueble con ar- marios escamoteables, encimeras aba- tibles, etc, y situar enchufes en puntos de fécil acceso. Adems, en el disefto de este tipo de muebles se puede incluir todo tipo de adelantos electrénicos para facilitar los movimientos de los minusva- lidos, incluso en situaciones de ceguera (Gistema Braille para cocinas y hornos). EL AMBITO PUBLICO Si el ambiente al que va destinado el disefio es de uso piiblico, el disehador debe distinguir entre dos modalidades ti- picas: el Ambito de diversién, es decir, si- tios para beber 0 comer o, simplemente, espacios como puntos de encuentro o de estar, y el Ambito de espera o antesala, fifo e impersonal, como prembulo a un espacio posterior, como puede ser el an- dén de una estacién de ferrocarril, la sala de espera de un aeropuerto o una simple parada de autobits, con indiferente y neu: tro sabor urbano. a) Espacios litdicos. Este espacio pue- de servir de diversién y esparcimiento (un bar, un pub, un restaurante, una dis- coteca), recordando en cierto modo a un 4mbito privado o doméstico, y exigir por tanto un ambiente célido, En este caso, los muebles deben diseflarse con una gran funcionalidad, pero al mismo tiempo de- ben dotarse de la humanidad y el confort que necesariamente debe aportar un mueble de hogar. La funcionalidad del disefio Para trabajar en Ja cocina desde una sila de ruedas, los muebles deben ser accesibles y tener una altura similar a un escnitorio, como la mesa-carrito Le chet nolley. El conoepto mérbido y recogido el sof Thello, diseriado por ‘Mathias Hoffmann es ideal para crear un célido @ intimista Sabor ‘de hogar en un local piblico, como un pub.Biblioteca Atrium Dado el breve plazo de utilizacién in- eet dividual de estos muebles, su disefo de la Ebanisteria - 2 debe ser absolulamente funcional —en este caso prima por completo la utilidad sobre la comodidad—, simple © imper sonal. No es aconsejable una forma ana- tomica, que se prestaria para un mayor acomodo de la persona, situacién ina cu se tiene en cuenta que se trat de una parada en la que se cuen' guramente, los minutos del reloj. Por el contrario, el disefio de este de muebles, de uso urbano, debe ser rf gido y sélido, ha de permitir el apoyo del — ¥ cuerpo para un sostén momenténeo y Karen es una serie para ba member an \ debe estar preparado para un roce con- eee tinuado a lo largo de toda la jornada Icada con epoxi y su Gil 5 ‘Mnuebles de bar ant espa la, inhéspita y pi “io piblico més confortable, de funcionalidad e! Normalmente hay una gran diferencia e el taburete de pueden ser el andén del metro o la barra de un bar y el sillon que acompafia s espera de un aeropuerto, sus 4 una mesa, mientras que las mesas se muebles necesitan estar fabricados con adaptan al servicio que se pretende dar materiales frios y asépticos: metal, goma, local pueden tener la altura de una ic. Ein este caso, el disefiador mesa de comedor, aunque sean muy pe: fener en cuenta el posible maltrato quefias, si se sirven comidas en el bat, recibirén unos muebles utilizados pueden alcanzar la altura de una mesa au sélo de paso y por ingentes cantidades de _xillar de salon, mas baja, si la intencion personas an6nimas. Habré un roce del local es la de crear un ambiente de algunos descuidos e incluso podrén verse pub, mas relai Cosy Plo (Torck & Noirot, 1983) y acogedor, y con con: ecaearere afeciados por las condiciones climéticas _notaciones de un salén privado. tmullido y de pequefias externas que arrastran consigo los viaje- dimensiones para bares os: ropa mojada por la lluvia, zapatos con ¥¥ espacios reservados maletas demasiado etc. PABURETE Cuando se ocupa un sitio en la barra en principio, es para estar poco rato, Pue de ser un momento de espera antes de pasar a la mesa, o simplemente puede ervir para tomar un café o un aperitivo sin mayor trascendencia. El asiento, por tanio, tiene poca importancia y equivale simplemente a un punto de apoyo para no esiar de pie. El taburete debe ser alio pues ha de alcanzar con comodidad la al. tura de la barra, por lo general elevada para ser atendlida con facilidad desde o! lado interior, mientras que el tamafio de! asiento s6lo requiere unas dimensiones mfnimas. Tampoco se precisa una super- ficie mullida en el asien‘o, ¢ incluso hay quienes piclen que la tapiceria sea més bien dura, para permitir la citculaci6r nua de clientes en la barra. El ta- te no debe invitar a las grandes char- las, En algunos casos tan slo se puede squefio respaldo para a ger la espalda y hacer algo més cémodc el rato en este asiento, mientras que indispensable un soporte para apoyar lopies. También es aconsejable que el ta burete de bar esté dotado de un sistemz giratorio en el asiento, para facilitar el jovimiento cuando se espera o se busca Al mismo tiempo, las patas de- y deben mantener cierto angulo de abertura para facilitar el equi librio. No olvidemos que es posible que mientras esté sentada, y ¢ del taburete, la persona no zar el suelo, y en tal caso nec apoyo para guardar esa ne bilidad. 1L SILLON pueden ser pequefios sillones indivi les, bancos adosados a la pared, o sim plemente s menos cémodas, ‘aunque es Je que en cualquier caso est muebles siento tengan la comodidad suficiente para permitir lar- gos ratos de permanencia en el local se trata de sillas, suelen ser apilables, se- gin la categoria del local, 0 ada Ja mesa, a fin de que ocupen me pacio cuando no se utilizan. Ultimamente hay una marcada tenden- cia a disefar sillas para colectividades con una estética de vanguardia, con e: tructuras muy ligeras, combinando ma: jera muy bien tratada con aluminio o incluso con nailon, apilables horizontal o verticalmente y con un marcado estudio i los asientos son sillones o sofas, la comodidad suele ser mucho mayor, los tapizados son muy mullidos y suelen con- formar pequefios rincones de estar, re cogidos individualmente, Este tipo de asiento es propio de pubs de bares para ‘escuchar miisica o de discotecas de corte tradicional, que invitan a la conversa y la camaraderia. Discotecas high tech ‘Aunque para muchos disefiadores esta ética fria y extremadamente vanguar dista ya ha quedado atrés, muchos am- bientes jévenes ain piden esta linea ambiental, que coin un determi nado tipo de misicy Los muebles disefiados para ¢ i local deben neral, en ell reducidos sélo a los taburetes de la barra, y tanto los col los mater deben responder a esa ténic: dura de la vanguardia mas extrema. En un bar o discoteca de e: teristicas, el acero y el alu ser los materiales por excelencia, acom- pailados de cristal y goma. A su vez, las mas deben ser recias y atrevidas, 2 que un buen dist munca en la exagera as carac ini suelen no debe caer (tica, que co on estética high t los que se ha cot seguido quilibrio racional en tre la unas formas, una correcta li a y la funcionalidad precisa que se pide en el recin El imprescindible equilibrio Dentro del ncepto de funcionalidad de los objets de diseio interior to dos los elementos que forman una pi intrinseca del hébitat, aunque slo sea un pequefio y discreto intermuptor. Precisa mente, un elemento tan sencillo como onvertido ahora en una pieza te io. como cualquier icluida dentro de un inte- este se he tan importa ra que e: mo integral La funcionalidad ble modular ado as jente para bientes high tech, MBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Los muebles cotidianos mas ‘simples recuperan hoy la ‘sensibilidad y el calor de los valores tradicionales, como el programa de muebles Ondina, en madera maciza teflida de azul ‘Muchos ambientes de trabajo actuales evocan un sabor doméstico en el disefio de sus muebles Con este espiritu se ccre6 la libreria Piroscafo, en la ‘que se asocian una forma tradicional con unos insSlitos planos de construccién, en metal y madera. 4 Después de la fuerte implantacién mundial de un disefio racional extremado, funcional y absolutamente industrializado que habia dominado en los atios ochenta, ha aparecido una marcada corriente pos- moderna, basada en un concepto contra- puesto al disefio fio y mecanizado. Se buscan formas més afables, mAs cercanas al hombre, se personalizan los objetos, se reencuentia la calidez del color, olvidado en la pasada década de los. ochenta, cuando dominaba la estética del blanco y el neato més radical, En estos tiempos, la sensibilidad que caracteriza a la sociedad occidental de los afios noventa encuentra un reflejo no sblo en las grandes piezas, sino también en los objetos cotidianos més simples creados por los disefiadores contempo- réneos. Hay un giro hacia los ambientes naturales, se busca la humanizacién y la ppersonalizacién en las cosas corrientes © incluso, curiosamente, hay una marcada recuperacién de los valores tradicionales, como la familia. La casa, por tanto, es uno de los lugares que mejor refleja este nuevo tipo de sensibilidad psicolégica, presente hasta en los elementos més in- trascendentes de un ambiente habitable. Por ejemplo, la existencia de una deter. minada cafetera en una casa indica cierto compromiso cultural 0 estético de su due- fio, Para formar parte de esta nueva situa- cién, los productos industriales creados hoy deben reflejar, de algin modo, esta mueva sensibilidad de la sociedad, pre- sente hasta en los detalles més imperso- nales, como por ejemplo, el mencionado interruptor. Esto ha llevado a que el di- sefio de estos pequefios artilugios deba cubrir diferentes posibilidades estéticas dentro de la arquitectura interior. sin duda, no es lo mismo una decoracién de corte doméstico y privado, que un des- pacho de trabajo, una oficina 0 un labo- Tatorio; por tanto, es necesario que existan en el mercado soluciones para distintos hdbitats, pero, dado el mimetis- mo que se esta produciendo entre émbito privado y espacio pitblico, los disefios ac- tuales deben permitir su uso tanto en tno como en otro ambiente, muy diferentes entre sf, Hasta hace algunos afios parecia im- pensable concebir un producto con estas caracteristicas de universalidad de uso. Hoy en dia, no sélo un interruptor, sino también un mueble, una mesa, una lém: para (por no hablar del ordenador per- sonal en si, que se encuentra tanto en casa como en un despacho), se crean con unas caracteristicas funcionales y estéti- cas tan estudiadas que permiten su uso generalizado en cualquier tipo de inte- ior. Esto demuestra la evolucién que ha experimentado 1a sensibilidad humana ‘hora no sorprende inciuir en la casa adelantos tecnolégicos funcionales, y al mismo tiempo, en el lugar de trabajo es cada vex mas fuerte la necesidad de los usuarios de rodearse de un ambiente més parecido al doméstico, No se trata de una contradiccién, sino de la bisqueda de un equilibrio lo més constante posible en el curso de la exis- tencia cotidiana, sin provocar conflictos entre la vida personal y el trabajo. Real mente no se puede definir esta investi- gacién como posmodera, pues ha sido siempre uno de los deseos aparentemen- te irrenunciables del hombre occidentalEl disefio contemporaneo tiene la obli- gacién de transformar el valor intrinseco de los materiales tradicionales sequin el uso al que se les destine en un disefio: un ‘material frio como el aluminio puede con- vertitse en acogedor y cordial si forma parte de un mueble de Iineas suaves y re- dondeadas, mientras que un material tra- dicionalmente noble y de prestigio, como Ja madera, puede someterse a la frialdad de un disefio de alta tecnologia y trans- formarse en un elemento funcional y uti- Itario, como un teléfono sin cables, Pero en ambos casos se habré producido un mimetismo hasta lograr un término medio propio del disefio més actual, en el que se Techaza la frialdad, la vanguardia sin justificacién, la agresividad de unas for- mas apoyadas en una seudooriginalidad, para dar paso a unas formas més senci- llas, a la funcionalidad auténtica, a la res- puesta a unas necesidades concretas, a la industrializacién racional y, en suma, a un regreso al humanismo. Los nuevos disefios respetan profun- damente la relacién forma/funcién en la seleccién de materiales, y se le da un nuevo valor a la ergonomia. Las lineas ri- idas hoy ya no tienen sentido, porque los muevos materiales se fabrican mejor en li- neas curvas, y el cuerpo humano, al fin y al cabo usuario absoluto de todos los muebles, esté formado por lineas sinuo- sas, a las que debe adaptarse un mueble creado para 4 y su enforno, ya sea pri- vado 0 pitblico, de descanso o de trabajo, tradicional o de vanguardia. En cualquier caso, la responsabilidad del disefiador es siempre la misma: bus: 3 Los materiales car, imaginar o inventar todas las formas y técnicas posibles para conseguir ele- mentos adecuados a una mejor calidad de vida, al servicio del usuario, LAS NUEVAS PROPUESTAS El disefiador debe estar at ala po- sible utilizacién de todo tipo de materia- les, clésicos y nuevos, existentes en el mercado. Los clésicos, porque un buen ‘Momos (1993) es una original cajonera a la que se puede acceder por sus cuairo costadios, ‘gracias a un curioso sistema de anclaje de los frentes en el ‘cuerpo de los cajones. Es un diserio de Mathias Winkler, 35Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Actualmente se diseflan muebles de vanguarcha con detalles ropios del siglo xvm, como el sillon club Griffon disefiador siempre puede encontrar un ‘uso distinto y original a un material de toda la vida, y los nuevos, porque es su deber, como profesional, informarse acer- ca de los avances de la ciencia que pue- den aportar nuevas soluciones a cual quier produccién seriada, Es su respon- sabilidad directa, y el diseniador debe es. tar al dia porque, en el fondo, los objetos ens, sobre todo los muebles, no cambia: én gran cosa en su esquema funcional Lo que cambia y evoluciona son nuevas ideas, nuevas soluciones para temas de siempre, porque cada dia se investiga ms Con nuevas propuestas y nuevas pro ducciones que hace unos afios hubieran parecido descabelladas, como los mue bles de cartén, por ejemplo, o las sillas de aluminio para comedor, 0 las encimeras de vidrio para muebles de cocina, etc. También hay que estar atento al empleo de materiales que se destinaban a una funcién determinada y ahora se adapian @ ambientes que en otros tiempos podrian haber llegado a ser antagénicos, como los muebles de mimbre: si antes eran pro- pios de ambientes risticos y comedores informales, ahora pueden ser la base de producciones de una vanguardia radical, apropiada para ambientes de alto nivel Otros materiales, como la piel, ya no se destinan tan sélo a salones de determi- nada posicién social 0 a oficinas sofist cadas, sino que también pueden tapizar muebles para locales piblicos como pla- as, aeropuertos 0 andenes de tren. Y el bronce colado, propio de las patas de muebles de otras épocas, sobre todo de los siglos xv y xx, ahora se utiliza de nuevo para dar forma a las extremidacies de mesas y sofés de la vanguardia mas radical, aunque con sorprendentes remni- niscencias de estilos regios y pomposos, como el Imperio francés, ‘MEZCLAS Otra tendencia a la que el disefiador debe estar atento es la posibilidad de mezclar materiales para conseguir resul- tados altamente funcionales, jugando al mismo tiempo con auténticas proezas de imaginacién estética, como propuso Josep Liusca en 1986 con su entonces revolucio- aria silla Andrea con estructura de tres ppatas en acero cromado, brazos de alu: minio inyectado, y asiento y respaldo de madera maciza de caoba 0 roble. La ver sién para instalaciones de este disefo cambiaba la madera por espuma de po- luretano en asiento y respaldo Otto ejemplo sorprendente de mez- clas, y muy representativo de una van- guardia que se esté imponiendo, es el creado en 1993 por el aleman Mathias Hoflmann, en su silln Gabriel, con res- aldo de mimbre, asiento de estructura metdlica tapizada en tela, cojines sueltos ‘con tapiceria diferente al asiento, y patas de madera maciza. EL RETORNO DEL COLOR El disefio de muebles contemporaneos debe asumir la fuerte recuperacién del color que se advierte en todo elemento empleado en el interiorismo actual. Ya no son suficientes los colores neutros y sin personalidad. Hoy en dia, un disefio debe contemplar el color en todas sus gamas y en todos los materiales: las maderas, que en los afios ochenta se vestian invariable- mente de negro en producciones de van: guardia, no abandonan del todo los tintados (con las vetas a la vista) o los la- 26cados (superficies mates) en negro, pero éste ya no es radical. Los disefios de mue- bles incluyen frentes en colores muy de- finidos, como verdes, azules y amarillos, 0 adoptan el color en todo su volumen, In- cluso de nuevo se utiliza el blanco en muebles para uso doméstico. El aluminio se emplea ahora pulido y anodizado, o se laca en colores frutales, como el verde menta, el rojo ciruela, el fresa y el azul claro, El hierro se deja niistico, se pule 0 se laca con pintura epoxi, y el acero se ule y recibe, ademés, un tratamiento de ‘anodizado, LA MADERA Es el material por excelencia para la fa bricacién de muebles. Provoca un efecto simulténeo hablar de muebles y pensar en madera, Se trata de una materia prima natural fundamentalmente célida, resis tente y sélida. Si se cuida y se trata contra las termitas, puede durar siglos y es facil de trabajar. MADERA PARA AMBIENTES ‘CALIDOS La madera puede emplearse en cual: quier tipo de muebles, pero es més acon- sejable para los muebles dirigidos a ambientes en los que se necesite un de- terminado confort, una gran calidad for- mal y un marcado calor estético y fisico en su apariencia exterior, como pueden ser un interior doméstico, un local piblico de corte recogido y cordial, una casa de montafia y, por supuesto, una habitacién infantil completa, incluidos sus muebles y sus revestimientos, La madera es acogedora, suave y cf: lida, Durante siglos ha asumido sola la funcién de materia prima para la cons: ‘tnuccién de todo tipo de muebles, y ahora se define dentro de un tipo muy deter- minado de producto en el que se valora su calidad material Utilizada para muebles de exterior, y con las vetas a la vista, la madera debe recibir un tratamiento especial antihu- medad para resistir las inclemencias del tiempo —sol, lluvia, viento, frfo, calor— Los productos mas apropiados son los creados para proteger la madera de bar- co, que son invisibles e impermeables a la humedad Otra opcién es lacar los muebles de te- rraza 0 jardin con productos preparados para el exterior. Actualmente se utilizan mucho los muebles lacados en blanco, verde o azul en di Los materiales Sillén Gabriel, de Mathias Hofmann, en mimbre, n madera y tela de tapiceria. Los muables de exterior se pprotegen con barnices especiales para madera de barce, 0 52 Jacan en colores, especialmente en blanco,Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - Hay wi 2 fuerte tendencia hacia la produccién de muebies de alta calidad con efecto de madera maciza, Asi es el aparador Pilastre, ce Pedro Miralles, 0 caoba ‘acabado en nogal, raiz de rable ‘aur es un programa modular de cocina en madera de pino te de azul en los frentes y ‘barnizada en las encimeras. cla pero que recuerdan los célidos muebl de terraza de los afios treinta Hace unas décadas —afics cincuenta sesenia y parte de los setenta— la ma- dera habfa perdido protagonismo, pero ya en los afos ochenta volvié al primer plano del consumo con enorme fuerza, re- valorando sus inequivocas cualidades téticas y funcionales. En la actualidad, el peso de la madera en los productos de disefio marca otra vez una escuela, en la que se recuperan con gran fuerza su duc: tilidad, su plasticidad y, sobre todo, la queza de sus vetas Vuelven los muebles de madera maciza Por ota parte, también se advierte aho- a una fuerte tendencia hacia la recu- peracién de la madera maciza en la pro- duccién de muebles, Aungue la utiliza on de las chapas de madera com« revestimiento de muebles es una practica ancestral, fue en los afios treinta, cuando se impuso el Déco, cuando adquin6 ma- yor relevancia la moda de chapar mue ples con maderas exéticas. Mas adelante, nacia los afios cincuenta-sesenta, sola- nemte los muebles de mucha calidad se fabrice madera maciza, en mu- cchos casos en producciones realizadas a medida y por encargo. Con la crisis mundial de la madera este sistema de c virtié en im prescindible en mu s, ya que la falta de maderas en el mundo disminuy6 las posibilidades de cons con madera maciza. Los tinicos elementos di siempre debe realizarse sobre maderas macizas, dada la absoluta necesidad de contar con un material s6lido y resistente para soportar el peso y los movimientos de un cuerpo humano. ‘Sin embargo, quiz por la necesidad de calidad que se exige hoy en toda pro: duccién de muebles, se advierte una fuerte recuperacién de la construccién con maderas macizas. Las maderas més uscadas en esta época son el aliso, el ce-re20, el fresno y el pino en todos los tilos, en tanto que el roble est de capa caida en la produccion de muebles mo- demos y en cambio se afirma en muebles de linea clisica. Los acabados risticos toscos también estén descartados, mien- tras que los tefiidos en tonos whisky claro en un rojizo cofiac estén a la orden del , ya se trate de muebles de estilo pro- venzal, campestre de alta calidad o mue- bles modemos vanguardistas. En estas tiltimas producciones, los di- sefiadores optan por las maderas claras haya, arce, abeto, pino y nogal. Sin em: bbargo, las maderas tropicales, que tantos adictos tuvieron hace tiempo, han caido mbién en desuso. El mueble chapado se continia fabricando, pero en produc: ciones de corte tradicional, imitando a la madera maciza. Madera para todo Segtin estudios recientes, se ha demos ado que la madera ha vuelto a impo: nerse en todos los Ambitos, ya no sélo en Jos muebles o restringido a los habitats. ‘También en los revestimientos de pa- tedes y suelos, sobre todo en parqués, cuyo uso ha aumentado de forma notable, curiosamente también en acabados de cocinas y bafios, con un adecuado trata- miento antihumedad, ahora es frecuente que se aporte un calor extra en el am- biente de una vivienda, de un despacho ode un local publico, con un determinado revestimiento de madera como acabado altamente decorativo y funcional Las combinaciones de materiales ‘Sin quitar valor a la madera, fundamen- tal en la construccién tradicional de mue- bles, en la actualidad hay una marcada tendencia hacia la combinacién del calor estético de esta materia prima natural con ottos materiales de indudable frialdad, como cualquier metal, basicamente hie- 70, acero, aluminio y bronce, cristal o in- cluso piedras, como mérmol o granit Estas curiosas combinaciones, en disefios de absoluta vanguardia, permiten mez- clar la calidez reconocida de un material como la madera con otros materiales tra- dicionalmente fries como los metales, y conseguir, con esta dualidad, un efecto sorprendente, en ocasiones incluso cho: ante, pero siempre con la riqueza de la busqueda de nuevas posibilidades esté- ticas e industriales. Es muy importante insistir en este tem la madera es un material natural vivo, y en estos momentos su crecimiento en el planeta se encuentra francamente dismi- nuido en relacién a épocas pasadas, por tanto, el aporte de nuevos materiales en los disefios contemporéneos, combinados con madera, no demuestra sino una preo- cupacion ecolégica que todos deberia- mos agradecer. LOS METALES Sin duda, representan a los materiales adicalmente frios, aunque segtin el di Los materiales Hans Ténnier, un joven finlandés residente en Suiza, es el creador y producior de esta serie de Imuebles de hogar en madera y metal. La mesa Wing, en versién baja para saién y en versién alla para comedor, es una curiosa ‘combinacion de madera en el sobre y hierro pintado con epoxi en las patas, que recuerda los firantes de un puenteBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Don Carlo es una coleccién cvordinada en seda natural, con ‘motives inspirados en la ‘Commedia doll Art. sefio del que formen parte pueden con- vertirse en un agradable aliado para ambientes célidos contemporaneos. Un disefiador astuto puede aprovechar sus cualidades y, con una forma estudiada, eliminar 6pticamente la frialdad que sue- Ye emanar de ellos. El hierro Es un metal diictil, maleable y muy re- sistente. Es de color gnis-azulado y puede recibir un gran pulimento sobre su su- perficie. Empleado por el hombre desde hace més de cuatro mil afios, hasta ahora habia sido el metal mas utilizado en la produc- cién de muebles, como materia prima ba- sica 0 como complemento de la madera, sobre todo en relacion con producciones para casas de campo 0 para ambientes de exterior. En la China milenania se llegd a construir una pagoda integra de hierro forjado, con todos sus muebles y estatuas interiores también en este material. Su fa- cilidad de moldeo, cracias a las técnicas de colado, o la posibilidad de curvarlo al calor —hierro forjado—, permiten mu- chas posibilidades estéticas para la in- dustria del mueble. El hierro puro se corroe y oxida con la ‘thumedad, por tanto es indispensable pro- tegerlo con lacas, bamices 0 cualquier otro tratamiento especifico para aislario de las inclemencias de! tiempo. Sin em- argo, el hierro forjado (utilizado en for- ma de tubo 0 de chapa), oracias a su ‘composicion, es un material anticorrosivo, antiabrasivo, resistente a los golpes y facil de doblar y de soldar. Esto lo convierte en un material ideal para la produccién de muebles de exterior, y no es impres- cindible tratarlo para protegerlo de los cambios atmosféricos. Por este motivo, el acabado de un mueble de hierro forjado esta sujeto tan slo a la imagen estética que se haya proyectado en su diseno. El aluminio En Jos iiltimos afios, el hierro ha que- dado un poco atrs en la produccién de muebles (aunque se sigue utilizando, a menudo combinado con madera), y ahora comparte su uso en el sector del mueble con un material mas ligera y en aparien- cia mds informal: el aluminio. Este metal, producido industrialmente extrayéndolo de la alimina, es de color y rillo similares a los de la plata. Es muy resistente, tenaz, liviano, muy sonoro, inal- terable a la corrosién, dlctl y facilmente maleable, Es buen conductor del calor y de la electricidad, y refleja intensamente Ja luz y el calor solar. El empleo de este material ha aumen: tado a ritmo vertiginoso en la produccion industrial de muebles de diserio, Primero fueron muebles para colectividades, sim- ples producciones industriales absoluta- mente funcionales, y en las que la estética aba una prioridad radical a la facili- dad de industrializacién, hasta que el di- sefio de vanguardia lo adopt6 para crear producciones tradicionales de interior. Los actuales muebles de aluminio para interior —sillas, mesas, armarios—suelen tener la estructura de aluminio y el cuer- po de madera (en las sillas) 0 de cristal (en las mesas). Para aportar calor al in- terior del que forman parte, estos mue- bles reciben un acabado acorde con el tono del interior. [A menudo se lacan en tonos pastel, y si se dejan en su color pla- teado natural, pulido y anodizado, se des- taca el material complementanio, como puede ser la madera en asiento y respal- do de sillas, 0 la tapiceria de una butaca. ‘Sin embargo, los muebles de exterior no lian perdido su caracteristica ancestral y siguen disefiéndose integramente en metal, aungue también en el exterior se utilizan las combinaciones de aluminio con madera, aluminio con pléstico o alu- minio con mimbre. A menudo estos mue- bles son apilables y su uso, en este caso, esta destinado mAs a colectividades y lo- ales de uso piblico que a viviendas par- ticulares. ‘LOS TEJIDOS Uno de los materiales casi imprescin- dibles en la produccién de muebles de asiento (salvo raras excepciones) es el te jido o tela de tapiceria. De su calidad, su textura, su color y su estampado depen- derén, en gran parte, el acierto o el fra- caso de una propuesta de disofi. Una tela para tapizar muebles puede estar fabricada con fibras naturales, con fibras artifciales o con la mezcla de am bas, en distintas proporciones, La composicién de los tejidos Las fibras naturales —algodén, seda lino, lana—aportan una nota de calidad y estilo a cualquier ambiente, Suelen ser as telas més apreciadas, ya que son agra- dables al tacto, no producen alergias, son ids resistentes al fuego que los materia-Jes sintéticos, permiten la transpiracién y mantienen el calor. Su inconveniente es- triba en que se arrugan con facilidad, so- bre todo el lino, pero ahora se estén fabricando con productos especiales anti arrugas que facilitan en gran medida su empleo en tapiceria. las fibras artificiales, a su vez, son mAs ligeras de peso, resisten mejor al desgas- te, no se armugan con facilidad y son més econémicas, Entre sus inconvenientes f- guran que, depende de la sensibilidad de la persona, pueden producir aleraias, son més frias que las fibras naturales, arden con facilidad (salvo que reciban un tra- tamiento especial ignifugo) y producen electricidad estatica Ta tela ideal para tapiceria es la que esté compuesta por una mezcla de fibras naturales con fibras artificiales, lo que permite conseguir el equilibrio ideal en- tre los beneficios y las virtudes de unas y de otras. Con nombre propio Segiin la técnica de tejido utlizada, las telas reciben diferentes nombres, con in- dependencia de su composicién: —la seda es un tejido plano, suave lustroso, delgado y resistente, de gran va" Jor en la industria textil. Para fabricarla se utlizan hilos delgados, resistentes y muy flexibles. La seda natural esté realizada ccon hilos formados con las finfsimas he- bras que segtegan los gusanos de seda, mientras que la artificial, conocida técni- camente como rayén, se crea con fibras sintéticas de caracteristicas similares a las de las hebras de los qusanos. Descendientes de la seda son: el tafe ‘én, un tipo de seda con un tejido muy tu- pido. Su apariencia es delgada, pero compacta, rigida y ligeramente acarto- nada. El aso, un tejido més grueso, Tesis- tent, brillante por una cara y opaco por 1a otra, realizado siempre con fibras sin- téticas El shantung, originario de la re- gién china del mismo nombre, es un tejido similar a la seda salvaje, con un bri- lio muy lustroso. Se fabrica con fibras na- turales o sintéticas. —El terciopelo. ‘Tejido rancio y sefio- tial por anfonomasia, es una tela muy tu- pida, afelpada por el derecho y lisa por el revés, realizada en fibras naturales 0 atiiicialés. De su densidad de tejido y origen de la fibra depende su precio, que puede llegar a ser bastante elevado, Tra: dicionalmente es una tela de un solo color, pero también pueden encontrarse en el mercado algunos terciopelos sinté- ticos estampados. El jacquard. Es un tejido muy grue- 80, compacto y resistente, con dibujos for: mados con hilos de varios colores, en tonos por lo general neutros, Antiguamen- te podia llegar a medir 2 cm de grosor, luego se adelgaz6 muchisimo y ahora hay algiin fabricante que ha tecuperado la ca- lidad del pasado, para ofrecer de nuevo Jas telas propias de las tapicerias de més rancio abolengo. — El damasco. Con una técnica de te- jido similar al jacquard, es una tela de co: Jor liso, con apariencia sblida, muy re sistente, y se caracteriza por sus dibujos en relieve, con efecto brillo/mate. Se fa brica con fibras naturales y artifciales, y es muy apreciada en tapiceria —El moaré, un tejido de alta calidad, es delgado pero sblido, produce un efec- to brillo/mate de aguas 0 de vetas, y ac- tualmente se fabrrica en un solo tono 0 9¢ estampan motivos decorativos —por lo general florales— sobre su superficie Como el damasco, se fabrica con fibras naturales, attificiales o mixtas —EBl otomén es un tejido de algodén de gran calidad, grueso y compacto, cuya E] modelo Portobello, de Pepe Pefalver, esté estampado con diferentes dibujos coordinados ara decoracisn, y realizado en algodén 100 %. 41Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 a colecci6n de tejidos en ‘madras, de Dolifus Mieg, en algodén 100 %, coordina una gran variedsd de dibujos @ Ccuadras en colores teja, amarillo, azul, verde y crudo. Un dibujo clésico se presta para revestir muebles de disefio tradicional, como este biombo tapizado en algodén de la colecaidn Real Fabrica, de Pepe Pefialver, 42 textura forma canutillos més 0 menos mesos, segin su disefo, Es muy resis tente y se aconseja para tapicerias de Ii- nea tradicional. ‘También se fabrica con fibras sintéticas, pero es mas apreciado el natural —El piqué, tradicionalmente de algo- d6n, aunque también se fabrica con fibras sintéticas, es una tela fuerte y resistente, con dibujos simétricos —rombos, lunares, granos— tejidos en relieve sobre su su: perficie. Su efecto siempre es mate. chintz, Se trata de un simple al godén plano, liso o estampado, cuya di ferencia —y mayor precio— estriba en el bamiz de acabado que se imprime sobre su superficie. —la cretona es la tela tipica para ta picerias sencillas. Generalmente estam: pada con colores fuertes y fondos ct- biertos, es un tejido fuerte, resistente y fa- bricado en algodén. —El madras es una tela delgada y pla na, casi siempre de algodén, aunque tam- bién se fabrica con mezclas. Su principal caracteristica es su acabado a cuadros. Es muy representativo de ambientes rurales. — La lona, y su descendiente, la loneta, Una y otra son telas risticas, fuertes, muy lavables, més gruesa y rigida la prim y més delgada la segunda, Suelen fabri- arse en un solo color, pero aceptan per- fectamente los estampados con todo tipo de dibui ‘A.este tipo de telido pertenece el cuti mallorquin, cuyo dibujo a rayas se realiza mezclando fibras de diferente color en el telar. La lona es apropiada para muebles juveniles o informales, y para colecciones de linea contemporénea. El cuidado de las tapicerias Actualmente existe una amplia gama de materiales creados para la proteccién de los tejidos, desde los tratamientos ig nifugos, realizados sobre el hilo que hay que tejer, a los pulverizadores que pro tegen las tapicerias del agua, él polvo 0 Jas manchas, 0 los productos de limpieza que acttian sobre la mancha que ya se ha producido en la tela Para proteger un mueble tapizado desde un principio, es conveniente imprimirle un producto pro tector al final de su proceso de produc: cién, si es que no lo lleva la tela desde su salida de fébrica Cada estilo con su tela Hay que tener en cuenta que la linea estética de un mueble tiene una relacion directa con el tejido que lo viste: un es- tampado de algodén, cubierto de flores diminutas, es apropiado para un estilo campestre 0 provenzal. Un escocés de grandes cuadros, o un tafetan de algodén, son adecuados para un mueble ristico. Una seda salvaje se presta para un sof de alta calidad, Los sillones victorianos in: Gleses reclaman un grueso jacquard con un dibujo colonial. Un cuti mallorquin es ideal para muebles de ambientes j6venes y desenfadados. Un moaré a rayas es ideal como tapicerfa de un sillén Imperio. Las comparaciones pueden ser infinitas Al mismo tiempo, un tejido utilizado ‘equivocadamente en el tapizado de unla linea estética lo, si una silla isabelina ‘apiza con loneta, el mueble puede perder todo su valor a efectos épticos, a su vez, un sofa con un disefo de van: lineas esti toda su ligereza éptica si el ta grueso jacquard flor pizado es v estilo inglés. Las tendencias en tapiceria Los tejidos utilizados en muebles de di- sefio huyen cada dia mas de las fibras sin téticas y tienden, en su lugar, hacia las absolutamente ecolé: materias pri mas naturales —algodén, lino, lana. aunque con un tratamiento especial anti armugas, Aumenta la produccién de filbras con proteccién igntfuaa, sobre todo cuan: fa de tejidos utilizados en locales y en este mismo apartado se nisimo la estética de sus e: 1e en un principio estas te- piiblicos, mejora uc tampados, ya. protegidas eran muy practicas, pero distaban mucho de ofrecer una imagen apropiada a un ad, estétice cierta ca nueble de dise Los estamy ten: dencias mé nan y mez dibbujos qu propia: por ejemplo arquitecténicos, como ¢ énforas, dificios cldsicos, se estampan con moti- vos florales propios del mobiliario inglés onal, 0 los sobrios motivos geo- mo rayas, curvas y cuadros, y alegres bai- 3s que dominan las Con cierto recuerdo de la preocupa 6n ecolégica general, vuelven los Los materiales ecoldgicas mar diserio actual, como la serie I verde, en 8Actualmente, Ja piel para ‘apiceria ha alcanzado un alto grado de calidad, y los colores ‘apuestan por las gammas discrefas, como el ante que reviste la ‘butaca Barceloneta (1992), de Gabriel Teixid6. tampados imitando a los coloniales y artesanos trabajos de patchwork (troz0s rectangulares 0 cuadrados de telas di- versas, reciclados y cosidos entre sf para formar mantas y edredones). Con miras a la naturaleza, aumentan los ‘estampadbos frutales a modo de bodeaén, © los dibujos de hierbas, con su explica- cién correspondiente, realizados en una sola tinta, y se mantienen las flores en to- das sus formas, tamajios y estilos, inspi- radas en cuadros de naturalezas muertas, © con formas abstractas y difusas. Siguen utilizandose los dibujos étnicos y las co- pias de kilims en telas risticas, mientras que se recuperan los clésicos brocados franceses con motivos de caza, Grandes estampados de animales salvajes, dibujos beréberes, el descubrimiento de Améni- ca, el globo terréqueo renacentista, ma- pas antiguos y todo tipo de motives histéricos sirven de excusa para estampar telas que marquen una estética diferente. Se estampan copias de antiguos tapices holandeses, se imitan texturas de mate- riales arquitectonicos —piedras, marmo- les, ladrillos— y se recuperan los clsicos bordados de toda la vida, como los di- bujos en petit point que adomaban los antiguos reposapiés ingleses. En cuanto a los colores, siguiendo la pauta general del disefio para interiores, se buscan tonos terrosos, extrafdos de la naturaleza. Las gamas que se proponen evocan las cuatro estaciones del afio, aun- que con mayor tendencia hacia los colo- res del otofio, mas reposados y con una vida més larga. (Como contraposicién a la enorme amal: gama de colores que invade el diserio actual, se recupera el blanco para tapi- cerfas de gran volumen y para decora- clones que buscan un nuevo aspecto de la vanguardia. La posibilidad de reciclar tejidos es otra de las tendencias que debe tener en cuenta un diseflador en el momento de seleccionar la tela apropiada para su proyecto, Las pieles para tapiceria En el apartado de revestimientos para muebles de asiento, en especial en sofas y sillones, el acabado en piel ocupa un lugar muy importante, y gracias a la com- petencia de Jas industrias ha conseguido llegar a un alto grado de calidad, Hoy por hoy puede decirse que no hay grandes diferencias en el acabado de asientos de piel de alto nivel, tanto para despacho como para hogar. En ambos ca- ‘sos es indiscutible el alto nivel que se ha aleanzado en la seleccién industrial de pieles, en la calidad de los tratamientos quimicos y en los procesos de manipu- laci6n, tapizado y montaje. Su distincién entre una produccién y otra se encuentra en el disefio formal del mueble, més o menos funcional 0 confortable segiin el destino para el que se haya disefiado el asiento en cuestion. Respecto a colores, el negro sigue mar- cando la pauta en los muebles de piel de linea tradicional, pero en los disefios de vanguardia existe una auténtica pale- ta de colores en pieles tefiidas. Los di- ‘sefios més sobrios optan por uno, 0 como mucho dos colores en un mismo mueble, pero las creaciones mas atrevidas, sobre odo las de linea americana, mezclan en un sillén un surtido de tintas que convier- ten el asiento en una pieza tinica y fuera de serie en cualquier espacio interior. Los tonos favoritos huyen de los colores chillones, como amarillos 0 naranjas, y se decantan en cambio por gamas mas dis- cretas y acogedoras, como toda la escala entre rojo oscuro y azul, incluidos los co- lores berenjena y zarzamora, de gran ac- tualidad. También existe una fuerte de- manda por la gama situada entre verdes yazules, y los tonos tierra y miel, propios de un matiz otoial absolutamente actual en decoracién.Esta ciencia, nacida como tal durante la Il Guerra Mundial, a rafz de las experien- cias llevadas a cabo por los biélogos so bre el comportamiento humano al en- contrarse en distintas posiciones inevi- tables, se basa, de manera fundamental, en los habitos y costumbres que desarro- lla el hombre en todos sus movimientos cotidianos, sobre todo en los relacionados con el trabajo. Definicién la palabra ergonomia proviene de dos términos griegos: trabajo y ley, lo que se traduciria en leyes 0 normas para el tra bajo. Por otra parte, una definicion enci clopédica de esta ciencia dice: «Ciencia aplicada que, aprovechando las ensefia zas de la psicologia, la fisiologia y la hi- giene del trabajo, analiza las propiedades de la actividad laboral humana, con vistas a la produccién del equipo instrumental mAs acomodado a dichas propiedade: Dicho con otras palabras, la finalidad de esta ciencia seria la de unificar una se- rie de materias que facilitan la comodidad de la persona en posicién de descanso, y evitan el esfuerzo extra en la ejecucién de tun trabajo, Su origen Los primeros estudios cientificos sobre ergonomia se iniciaron a principios de este siglo, pero hasta finales de los afios cuarenta esta disciplina no adqutriria for- ma como método cientifico. La experiencia de la Il Guerra Mundial sirvié para demostrar la conveniencia de adecuar a la anatomia humana los mue- bles y elementos que utiliza el hombre en su vida cotidiana. El problema residia en ese momento en la necesidad de op- timizar el duro trabajo de los pilotos aé- eos. En su mayoria, estos combatientes, con poca o ninguna experiencia, debian adaptarse en un tiempo récord al habitat de una cabina de mando en la que debian dirigir su avin en una batalla aérea, y que, dada la situacién, les exigfa un es- fuerzo de veteranos. Para facilitarles cier ta comodidad en sus movimientos y una maniobrabilidad adaptada a su posicién en el asiento, se recumé a la experiencia de cientificos expertos en el potencial fi- sico de la anatomia humana —anatomistas Gravity es una de las sillas ‘ergonémicas més universales Creada por Peter Opsvik, emnite cuatro posiciones que acogen el cusrpo desde la ‘posicion horizontal a la vertical, ¥y estimulan la variedad de movimientos, 45Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Wink es un silién-tumbona de ‘Tashiyukikita, en el que se han estudiado miltiples posiciones requlables para la comodidad de Ja persona que esté sentada 0 recostada y fisiélogos—, en las posibilidades de su dominio mental —psicélogos—, y a téc- nicos expertos en las capacidades de las méquinas ‘Afinales de la década de los cincuenta, lejos ya una guerra que habfa afectado mundo entero, en Inglaterra se cre6 el primer centro mundial destinado a em: pplear las técnicas ergonémicas de un gru- po de cientificos en la débil industria de posguerra, que necesitaba con urgencia los medios para crecer rapidamente con un esfuerzo justificado y l6gico. Habia pa- sado ya la época en la que poco impor- taba el esfuerzo el cansancio del hombre, y se habla descubierto que sia una perso-na se Je facilitan los medios para hacer su trabajo, su rendimiento puede aumen- tar en elevadas proporciones. Esta recién nacida entidad era la denominada Socie- dad para la Investigacion Ergon6mica, en Ja que se han basado luego otras organi- zaciones similares aparecidas en otros paises europeos Jastificacién la motivacién bésica de la ergonomia es la de facilitar la comodidad en cual- quier actividad, evitando movimientos 0 esfuerzos initiles, aportando seguridad en el trabajo y mejorando la productivi- dad, gracias al confort con que se rodea toda actividad laboral Su extrema utilidad ha levado a la in- dustria a emplear la ergonomia en todo el mbito laboral, adaptando las maquinas y Jos muebles al trabajador, no lo contrario. Es infinitamente més ttl y Iogico disenar ‘una herramienta en funcién de la forma de una mano, que en definitiva seré la ‘que Ja utilizard, que crear formas incd- modas que impidan la aceleracién del trabajo Y por el mismo motivo, lo més racional en cualquier érea —laboral 0 domésti- ca— es coordinar las distancias de los elementos, con relacién a la posicién del usuario y su esfuerzo fisico y psiquico. Esto se transmite a todos los elementos que afectan directamente a la vida coti- diana del hombre, desde el objeto més elemental hasta el mueble mas complejo, con especial incidencia en los muebles de asiento, No podemos olvidar que la posicién sentada es hacia la que més tien de el hombre en su actividad consciente, y tlimamente cada vez més, gracias a la implantacién de 1a informética en todos Jos Ambitos (para trabajar con un orde- nador es imprescindible estar sentado con comodidad, en un sillén disefiado es- pecificamente para la posicién del cuer- po fmmano en esta actividad). El andlisis ergondmico Para llevar a cabo tn estudio ergoné- nc es necesario analizar a fondo distin- tos agpecios relativos al ser humano y a ‘su entorno. El andlisis del ser humano abarca des- de las caracteristicas funcionales de su anatomia hasta su comportamiento fisio- légico, por una parte, y sus reacciones psicolégicas y sociales por otra. Al mismo tiempo, se estudia el entorno en el que se mueve el hombre, en el que estin inclut- dos sus medios econémico, cultural y so- Gal, y la relacion que existe entre el hombre y dicho entorno. En este andlisis participan cientificos expertos en cada una de estas ramnas re- lativas a la fisiologia, la psicologia y la anatomfa humanas. Usos de la ergonomia La misién principal de esta ciencia se relaciona con el trabajo, pero en realidad es aplicable al mejor funcionamiento de todas las actividades que realiza el ser humano, tanto en e] émbito laboral como en el doméstico e incluso en el lidico, y tanto en su relacién con las méquinas ‘como con todos los muebles que confor- man su habitat El capitulo relativo al mobiliario es qui- z4s el més complejo, porque es el que Te- laciona de modo mAs directo al hombre con cualquier actividad. Sin embargo, es necesario sefialar la diferencia entre muebles de trabajo y muebles de des- ‘canso, porque, entre ambos, las posicio- nes que adopta el cuerpo humano pueden ser diametralmente opuestas: una misma silla, disefiada_anat6micamente para trabajar en wna oficina, puede ser in- cémoda en una vivienda, porque la posi- cién que adopta el cuerpo es diferente en cada situacién. Por este motivo, una mesa de despacho en la que se apoyan los bra- 20s para escribir y la espalda se inclina hacia la superficie de trabajo debe ser més baja que una mesa de comedor, pues 6sta serd més alta porque en ella se man- tiene una postura erguida, los cubiertos se cogen sin apoyar los brazos y el plato tiene que estar cercano al comensal ‘Sin embargo, en ambos casos los mue- bles més importantes con relacién a las actividades de! hombre son los de asiento —sillas, sillones y sofas— y luego las me- sas —de despacho, de comedor, de or- denador o de mAquina de escribit— Las medidas aplicables para lograr una mejor adaptacion del cuerpo a los muebles que utiliza son diferentes segin el autor del estudio y el pais al que se refiere, ya que hay marcadas diferencias anatémicas en- tte los habitantes de un pais —o de un continente— y otro. A pesar de esto, en los illtimos afios se han ido unificando las normativas. para todo el continente europeo, hasta lograr un practico término medio, con ligeras variantes en las normas de un pais a otro. EL MOBILIARIO BASICO Dentro de los tipos de muebles que suelen conformar el habitat minimo de una zona de estar, piblica o privada, o de un centro de trabajo, los dos primeros lugares son, por este orden, para la silla y la mesa. Cada uno tiene unas caracte- risticas basicas intrinsecas irrefutables. La ergonomia 4aBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 La silla Zig-Zag, de Rietveld, disefiada en 1934, es un claro intento de crear un elemento de asiento absolutamente funcional y racional, bésico pero con puntos de apoyo del peso en la diagonal, y dé la columna en el eve dngulo de! respaldo, claramente ergondmicos. La silla a silla es un mueble de asiento que proviene de la antigiiedad. Se calcula que hacia el afio 1600 a.C. el hombre ya habia creado este mueble, indispensable hoy en dia en cualquier ambiente, tanto piiblico como privado, en el que haya presencia del ser humano, Es notable la cantidad de posiciones que a través de la historia el hombre ha adoptado al sentarse, desde el taburete minimo de los chinos al triclinio romano 0 a los imponentes tronos de la Edad Me- dia, Incluso las sillas del Renacimiento, arandes y pesadas, eran mas comodas de lo que nos podriamos imaginar. Su estructura bésica prdcticamente no ha sufrido modificaciones desde enton- ces, pero por otra parte, aunque siempre serd un asiento con cuatro patas, con bra- 20s 0 sin ellos y con un respaldo, de entre todos los muebles de un habitat, la silla es precisamente el més sensible al desarro- lo de la técnica, a los cambios estéticos de la moda y a las costumbres sociales, LA VIDA SEDENTARIA En Ja actualidad, el hombre pasa la ma: yor parte de su tiempo sentado, Se sienta para comer, Se sienta para descansay, leer, ver TV, conversar. Se sienta en el cine, en el teatro, em la cafeteria. Se sienta para tomar una copa con los amigos. Se sienta en el W.C. Se sienta en la consulta del médico. Se sienta para trabajar, dirt Gir, organizar. Se sienta para reunirse en el despacho. Cada vez son més los tra: bajos sentados en una oficina ante una maquina de escribir o un ordenador, y las operaciones industriales en que se con- trola la maquina con un programa infor matizado dirigido desde un asiento. Y por timo, se vuelve a casa conduciendo un coche, sentado, naturalmente, o en un medio de transporte pitblico en el que to- dos, en mayor 0 menor medida, busca- mos dvidamente un asiento libre para viajar cémodamente... sentados, LAS EXIGENCIAS ERGONOMICAS En nuestro sigio ha habido intentos por crear un elemento de asiento racional y estricto, como las revolucionarias y extre- madamente funcionales sillas propuestas por el holandés Rietveld en los afios vein: te, Pero con el tiempo, la experiencia ha confirmado que siempre habr4 tenden. ias formales segiin las regiones y las cos- tumbres del lugar, y, sobre todo, la ‘ergonomia ha demostrado que para con seguir un asiento en el que el cuerpo des- canse, es imprescindible tener en cuenta el conccimiento estéitico de la posture sentada y la dindmica fisiolégica del ser humano: al cabo de un rato de estar sen tado, es imposible mantenerse en la mis: ma postura. El cuerpo necesita variar sus puntos de apoyo, y el interés exterior se transforma asimismo a medida que transcurre el tiempo, aunque también en este caso influye en cierta medida la cultura adqui rida, que hasta cierto punto puede con: trolar el mantenimienio racional de la postura inicial —una reunién formal, una comida de compromiso—. Los nifios cam- bian de postura infinitamente mas que los mayores, que han aprendido a controlar sus movimientos. La ergonomia, en este caso, ayuda al descanso del cuerpo, con dicionando la forma del asiento a la fun- cidn que se espera de él. ‘Al disefiar una silla, lo més importan que hay que tener en cuenta es su misién de soporte para el cuerpo humano. Sus dimensiones —frente, fondo y alto— y su forma anatémica dependerén del uso al que esté destinada, siempre en funcién de las dimensiones del cuerpo humano: para comer, para trabajar, para descan- sar, conversar 0 leer.ALTURA DEL ASIENTO Como término medio, una altura cé moda de asiento es de 48 cm, aunque los cénones europeos permiten un margen de 39 a 54 cm. Desde el punto de vista anatémico, la altura ideal del asiento depende de la al- tura del pliegue posterior de la rodilla: para cada persona, en posicién de pie, el siento debe quedar de 3a § cm por de- bajo de este pliegue. De esta forma, al entarse, la rodilla quedard por encima de la superficie del asiento, evitando con esto que el pliegue intemo de la rodilla se presione y afecte a la correcta circu- lacién de la sangre. Por otra parte, esto ‘ambién permite que el pie se apoye en al suelo en toda su extensién, facilita la estabilidad de la persona sentada. Este andlisis demuestra que no hay una altura ideal de asiento, porque no existe una unidad de altura’ en las personas, pero ante esto es aconsejable adoptar una altura tendente a la baja. Para una persona alta pueden quedar sus rodillas ms altas de lo normal respecto al asiento y sin embargo sequira manteniendo per- fectamente su equilibrio con el pie total mente apoyado en el suelo, mientras que para una persona baja, el asiento alto le obligaré a dejar los pies levantados o in: luso en el aire, lo que desequilibraré su posicién y necesitard otro apoyo a nivel de los brazos. Aun ast, su posicién seguiré siendo ineémoda Pero todas estas connotaciones corr: ponden siempre a las posturas sedentes occidentales, porque las costumbres orientales permiten unas dimensiones ab- solutamente diferentes a las nuestras: los chinos suelen llevar consigo sillas plega- bles de altura minima, y estén acostum: brados a adoptar posiciones peculiares para permitir el descanso natural de la columna vertebral os japoneses, por su parte, se sientan sobre cojines sin respaldo para comer, pero compensan esta carencia con una inclinacion que no corresponde a la cul: tura occidental PROFUNDIDAD DEL ASIENTO Lo ideal es que un asiento acoja cé- modamente a la persona sin dejar un hue- co molesto a la altura de los rifiones (si es jemasiado profundo) o presione el plie- ue interno de la rodilla (si se trata de un asiento poco profundo), La medida per- fecta debe acoger la cara anterior del muslo desde la nalga hasta el plieque de la rodilla, ni més ni menos, pero volvemos otra vez a las diferencias de alturas entre Jas distintas personas. Sila profundidad es exagerada, la per sona tenderd a sentarse en el borde, obli- gando asia la columna a hacer un sobreesfuerzo al no tener el apoyo del respaldo, Por el contrario, si la profundi dad es reducida, a la persona le faliaré un mayor apoyo en los muslos, perder equi: libro y, para sostenerse, la columna ver- tebral de nuevo se verd afectada por un exceso de esfuerzo, De ahi que se haya legado a un término medio europeo de profundidad de asiento, que abarca de 38 47 cm, aunque la medida estandar suele rondar los 40 cm ANCHO IDEAL DEL ASIENTO Normalmente se considera itil un an- cho de 40 cm, esto es, que el perimetro del asiento tenga una base cuadrada de 40 x 40 cm, teniendo en cuenta la pro- fundidad media que hemos comentadb. Esta dimensién, que en los paises nérdi- cos suele ser mayor, es la més utilizada en sillas domésticas sencillas y en sill de despacho sin brazos, Una silla con bra- 20s necesariamente es mas ancha, pues la anchura de cada brazo se suma al ancho total del asiento. La tapiceria de una silla de comedor debe cumplir ciertos requisites ergonémicos. En la foto, la sila Linn, de Andreu World (1980), tapizada en gamuza La ergonomiaBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 1 éngulo de inclinacién det respaldo, respecto al asiento, debe situarse entre 95° y 105°, y la zona de apoyo lumbar, de'12 2.20 cm sobre el asiento. La silla Independence, de Fritz Hansen, ‘std disefiada siguiendo estrictamente esta norma, para permanecer en ella durante Jargo rato, en conferencias, clases, etc. 50 Si las dimensiones de un asiento son excesivamente anchas no representarén ningin problema al usuario, ya sea del gado o gnueso, pero si estas dimensiones son estrechas, aunque probablemente no afectaran a una persona delgada, si serén inaceptables para una persona gruesa 0 de caderas anchas, que apoyaré todo el peso de su tronco sélo en parte del cuer- Po, presionando desagradablemente nal- gas y muslos, lo que provocaré un corte erjudicial para la circulacién de la san- re, y una presién nefasta para las vena: INCLINACION DEL ASIENTO Al disefar una silla, debe tenerse cuenta la comodidad que puede conse: guirse en el asiento, calculando un deter- minado Angulo de inclinacién, hacia delante o hacia atrés, en relacion con la actividad que se realice con la silla. Lo ideal y apto para diferentes posturas de trabajo —escribir, a mano o a méquina, leer—, y que permite un apoyo relajado para la columna, se calcula desde la p sicion absolutamente horizontal, a 0°, has taun angulo de 5° respecto a la horizontal, tomando como eje 1a linea posterior del asiento. Algunos especialistas pro también el ngulo en sentido contrario, decir, tomando como eje la linea del tera del asiento. Esta segunda opcién recomendable cuando la persona apoya su peso en la orilla del siento, inclina su cuerpo hacia delante y levanta la super- ficie de la mesa de lectura o de trabai en un dngulo de 10°. "APICERIA DEL ASIENTO Si se trata de una silla para exterior, la superficie del asiento debe ser sélida, inalterable a los cambios de temperatura y muy resistente al desgaste, pero si es una silla para uso interior, la tapiceria debe cumplir una serie de requisitos gonémicos estudiados especfficamente para la comodidad de! usuario. cuerpo humano emite un calor, por tanto el material de tapiceria utilizado debe absorber ese calor y neutralizarlo, —El cuerpo transpira al presionarse sobre una superficie. La tapiceria del asiento debe tener capacidad humectan- te para absorber esa humedad y elimi- narla por evaporacién. —Un exceso de pulimento pro incSmodos deslizamientos. El material de tapicerla debe provocar cierto roce, ‘como una tela gruesa, una piel mate 0 ft: vegetales. Un pléstico tipo charol es desaconsejable desde todo punto de vis: ta, porque es muy resbaladizo, provoca el sudor y no absorbe la humedad. Es aconsejable el tapizado mullido, conseguide con espumas 0 con el clasico sistema de muelles, para que la persona adapte normalmente su peso mediante una buena distribucién de todos los pun: tos de apoyo. Hay dos puntos de interés ergonémico en el disefio de un respaldo: su 4ngulo de inclinacién, necesario para sostener la es palda, y su altura central, donde se en: cuentra la zona de apoyo lumbar. a) El éngulo de inclinacién del res do, respecto al asiento, debe situarse en: tre los 95 y los 105°. Menos de 90° de inclinacién no permiten el descanso de la columna, y mas de 105° son exagerados y no facilitan una posicién cémoda de tra: bajo, sino todo lo contrario, apoyan una posicién mas distendida, de descanso. ‘b) La altura del apoyo lumbar debe si- tuarse entre unos 12 y 20 cm sobre la su- perficie del asiento. Esta zona de apoyo es fundamental en una silla de trabajo, porque permite descargar sobre ella gran parte del peso que soporta la column na vertebral. Por otra parte, al sostener la presién de la espalda, evita curvaturas erjudiciales para la columna. a altura total del respaldo es rela tiva y depende, en gran medida, del di sefio, siempre que no sobrepase la altura de los hombros, porque dificultaria enton-ces los movimientos libres del cuello y de la cabeza. Tampoco es aconsejable que el respaldo sea excesivamente ancho, porque dificultarfa los movimientos late- tales de la persona en actitud dimamica de trabajo. La mesa ideal Se entiende por mesa un mueble for- mado por un tablero 0 sobre, apoyado s9- bre uno 0 més pies de soporte, que se utiliza normalmente para comer, escribir, jugar o trabajar. Tradicionalmente es de madera, aunque con el paso del tiempo se ha realizado en mérmol, en hierro, en pléstico y en diferentes combinaciones de materiales, incluidos entre ellos el cristal y el metacrilato UN REPASO A SU EVOLUCION Los egipcios utilizaban tablas redondas © cuadradas, apoyadas sobre una o mas ppatas; estas tablas se decoraban con ta- las, incrustaciones y pinturas. Los griegos usaban sus mesas domésticas para reali- zar ceremonias, y al duefio de casa 0 a los invitados se les ofrecia una mesa para su uso individual, apoyada sobre una sola pata, como los veladores del siglo xix. Los romans comfan en mesas bajas, recos- tados sobre tumbonas, o en mesas ple- gables, similares a las actuales, y crearon ademas la mesa con pie de tripode, pa- recida a la griega de una pata, En la Edad Media se impusieron las mesas de tipo bastidor. En el Renacimiento se crearon las primeras mesas extensibles, y el siglo xvil agregé gran lujo y boato a las mesas, incluyendo candelabros y espejos en los escritorios. En el siglo xvm inglés apare- cieron las clésicas mesas con alas abati- bles de estilo Chippendale. El estilo Imperio francés recuperé las mesas de tripode y de bastidor, y las mesas victo- nianas del xn impusieron los sobres de mérmol y los pedestales de nogal negro. Actualmente, las mesas buscan més la funcionalidad y la comodidad en sus di- ‘sefios que los lujos y los decorados sin un fundamento razonado. En las dimensiones se opta por las medidas ergonémicas, y Jos materiales de construccién permiten una produccién industrial mas 0 menos seriada, segin las caracteristicas de su disefio formal, LAS MEDIDAS FUNDAMENTALES La altura Optima de una mesa (no se in- cluyen en este andlisis las mesas auxilia- res, de dimensiones muy particulares en cada situaci6n) depende del uso al que esté destinada, Aunque existan unas di- mensiones normalizadas, siempre habré diferencias entre una mesa para escribir ‘a maquina 0 con teclado de ordenador (mas baja de lo normal), para escribir a mano, para comer (més alta que las dos anteriores), para juegos de sal6n, etc. Es- tas diferentes alturas dependen de la al- tura ideal de la silla correspondiente, y de la posicién que debe adoptar el brazo en la actividad determinada, aunque, por témmino medio, se considera correcta la altura que alcanza entre 73,7 om y 762 centimetros, La ergonomia Tradicionalmente, la mesa es un mueble de madera, apoyado ‘sobre cuatro patas. Este sencillo disetio es el modelo de comedor Wag 2200 (1989), en haya maciza encerada. 51Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Ia altura de una mesa depende del uso al que se destine. En la Jotogralla, mesa de comedor Camillo, en acero y cristal transhicico al écido. Uno de los principales condicionantes de esta altura para la superficie de una mesa —cualquier mesa, ya sea de tra bajo, de esparcimiento o para comer—se relaciona, como deciamos, con la altura de la silla, ya que debe permitir, a la per- sona sentada, un apoyo cémodo de las piemas en posicion vertical, dejando ade- mas un espacio libre para entrar y salir de ella cémodamente. A continuacién se ha de calcular la al- tura de apoyo que necesita el brazo en posicién de descanso. Cualquier posicién que no sea la natural provocard, ala larga, un cansancio muscular de la persona sen- ‘ada, Esta altura varia en mesas de trabajo —mis bajas, para acercarse a escribir— ymesas de comedor, que deben ser mas altas para facilitar el movimiento de la mano desde el plato a la boca, y acercar asi la comida al comensal sin provocar gestos exagerados. También, al calcular la altura del sobre o encimera, hay que con- siderar la posibilidad de guardar la silla (Con brazes 0 sin ellos) bajo la mesa cuan- do no se usa. Si se trata de una mesa de trabajo, conviene mantener un angulo de inclinacion de unos 10°, para facilitar la escritura, la lectura o la manipulacién de un teclado, ‘Una mesa de comedor rectangular puede tener el largo que se desee, den: tro de unos limites razonables. Sin em- argo, el ancho no debe ser inferior a los 70 cm Esta distancia equivaldria al es: acio minimo disponible entre dos co- mensales enirentados. A su vez, la mesa redonda, prictica en un rincén o en el centro de un comedor pequefio, debe te- ner un didmetro aconsejable de unos 120 centimetros, espacio suficiente para sen- far a seis comensales. Si se trata de una mesa de trabajo, sus dimensiones deben pemmitir el facil acceso a todo su perf metro. Si hay que levantarse de la silla para llegar a un punto de ésta, la mesa ya no cumple con las minimas exigencias de comodidad de un elemento utilitario. LOS MUEBLES PARA EL ORDENADOR Dentro del campo del disefio de mue- bles, actualmente hay un nuevo sector que tiene cada dia mAs seguidores y para el que hacen falta muebles muy funcio- nales y con un minucioso estudio ergo- némico: el del ordenador. Esta revolucionaria tecnologia ha con: seguido dominar todos los campos de tra- bajo y, ademas, ahora se ha introducido silenciosamente, pero con mucha fuerza, en un gran mimero de viviendas parti culares, Es un nuevo habitante doméstico, que necesita un mobiliario pensado tinica y exclusivamente para él, Este elemento no distingue entre gru- pos profesionales o sociales, ni limita las ‘edades, ni se centra en ningtn habitat de- terminado: puede estar en un pequetio cuarto de estudio o en la cocina, en un incén del salén 0 en el dormitorio. Mas ain, en gran medida es el culpable de que ahora se trabaje en casa mucho més 82queantes. Y quizé también es el culpable, al menos ha ayudado a ello, de que ai ra, en los nuevos disefios, se busque co! més in un intereambio mutuo para neutralizar la fr ho yl calor del hogar. denador necesita una coordir uunifi ay muy funcional de todos sus ele- mentos, con todos los medios protesio males necesarios pa Jamente su trabé ello, transformai a realizar adect pero no puede, por ambiente habitual de ina vivienda, Su existencia et : por comodidad 4 no tiene importancia) unifica d a no hace mucho solian ser an- s: el estilo familiar de una vivien- ormalidad es Oficina/hogar, una nueva opcion la propues introducir espe. cificamente en el despacho de asa algunos elementos mas funcionales y racionales que los propios de una estétic 1, sin perder el carécter pers y humanizado de los muebles de una vi vienda par Al mismo tiempo, el mueble de oficina, icionalmente frio y funci general metalico y si era posible lacado e sume parte del calor am formas mé nas cAlidos y is, ahora biental que suavizadas, w doméstico que a un s pacho comercial Esta doble vertiente, la de la oficina en casa por un lado, y el hogar en el de pacho 2s una tendencia que esta aum 8 tltimos tiempos en el ia gama dk rte para el 0 » DiagonalBiblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Aries (1989) es una coleccién de ros metalicos con medas, para alojar el equipo del ordenador, con cesto incluido para el pape! continuo, También se adapta al equipo de miisica y de TV/video. Los carros, lacados en next negro, son extensibles en altura y en anchura, Diseiio de JJ. Teruel presa, inciuidos tanto mesas como sillas anatémicas, creadas expresamente para trabajar largas horas frente a la panta: Ila del ordenador. No se trata, por tanto, de crear nuevos elementos para el sector del mueble de oficina, possedor de una larga tradicién industrial. En estos tiem necesario utilizar elementos co- 0 crear nuevas piezas, sencillas y funcionales, como soporte de un orde- pero del todo adaptables a un am- biente doméstico, Ulimamente se ha creado una amplia gama de muebles para ordenador, inte- Grados en el carécter doméstico de los programas de mueble de hogar. Si el usuario prefiere esconder o disimular su equipo informAtico cuando no esté tra bajando en él, los nuevos disefios pro- ponen soluciones técnicas ya utilizadas en equipes de sonido o TV. Por ejemplo, hay médulos de armario con tableros abatibles o escamoteables, bandejas giratorias o extraibles, con puertas, y armarios individuales méviles, totalmente desplegables, que cerrados parecen una sencilla libreria con puertas, yabiertos se transforman en una auténtica oficina por tra propuesta es la de revestir inte de una habitacion con un programa especifico de armarios modulares, con bandejas extraf- las que se apoyan los elementos. del ordenador, bucks archivadores y es tantes para contener todo un pequefio material de trabajo, Esta recogida oficina casera se disimula, fuera de las horas de trabajo, con un sistema de puertas corre deras que viste todo el frente del progre: ma de pared a pared. Los elementos indispensables Un ordenador necesita una mesa para el teclado, un soporte para la pantalla, una mesa auxiliar para la impresora, para con- tener el papel y para recibir las copias, y una silla ergonémica para el jo. Es importante tener en cuenta las neces dades que debe cumplir cada uno de es: fos muebles para que se pueda realizar una correcta funcién en este cada dia més comin sistema de trabajo, pero sin lugar a dudas, la silla es el mueble més impor- tante para conseguir un buen émbito en este campo. No podemes olvidar que unas cuantas horas al dia —o a la semna- na— sentado frente a la pantalla de un or- denador exigen imprescindiblemente una posicion ergonémica en los muebles, pues la concentracion que provocan la pantalla y el teclado crea una tension lum- ar para la que debe existir un apoyo constante de todo el cuerpo. Los dolores en Ja espalda que a la larga —o a la corta— provocan una silla inadecuada 0 mma mesa con una altura incorrecta de- muestran la necesidad imprescindible de pecificos para el orden La silla debe permitir el giro del asien: to hacia los distintos elementos que con. forman una terminal de ordenador. La espalda debe estar muy bien apoyada en Ja regién lumbar, y la altura del asiento ha ermitir que las piemnas queden en ical. dios ortopedistas recientes, la posicién ideal del cuerpo humano al trabajar delante de un ordenador ha de seguir una pauta muy concreta: debe mantenerse la cabeza recta, la espalda inclinada hacia delante en un angulo des de 90° (en posicién erguida) hasta 120° de inclinacion respecto a la linea del hori zonte, y el brazo debe doblarse en un &n- aulo de 80 a 120 La altura de la mesa del teclado debe ser regulable, para permitir el apoyo de Jas mufiecas y una posicién natural de las manos, sin excesos ni defectos de alzado que en pocos minutos cansarfan notable- mente los brazos. Si el teclado no puede inclinarse, el sobre de la mesa deberla poder hacerlo a un éngulo de 10°. La mesa debe estar dotada de un sistema in. terior conductor de cables, y ha de poder extenderse para trabajos excepcionales. La pantalla del ordenador ha de que dar a la altura de los ojos, y la impresora debe situarse sobre una mesa més baja de lo normal, a la altura de una maquina de escribir, para visualizar fécilmente el texto que se esta imprimiendo. dor.Asi como la maqueta de un disefio un trabajo hecho a mano, puede realizar- se con materiales faciles de manipular y etende simplemente que se aprecie a tamaiio reducido la forma del objeto y la apariencia estética que tendré su cons- tuccién con los materiales elegidos para la produccién industrial, el prototipo debe efectuarse a tamafio natural, su el boracién debe ser industrial, tal como se realizard luego la produccién en serie, y empleando exactamente los mismos ma- teriales con los que se fabricaré despu enum proceso industrial Su finalidad es la de experimentar la resistencia y la funcionalidad del produc- to, para efectuar en él las modificaciones pertinentes antes de iniciar la elabora: cidn en serie. Este control de calidad, que deberia serimprescindible en todos los productos de disefio industrial, se hace sobre pro- fotipas de muebles de asiento —sillas y sillones— y en algunos paises se ha con: vertida en obligatorio para superar el control de las Normas de Calidad corres- pondientes. El prototipo, més tosco que el objeto definitivo y naturalmente sin el acabado final, se utiliza también como guia para la produccion seriada EL CONTROL DE CALIDAD En la actualidad hay varias organizacio- nes en Espafia, de distintos sectores de produccion, que se dedican a realizar 5 El prototipo y el embalaje pruebas y controles de calidad, homolo: gadas con los controles internacionales, en sus respectivas especialidades; por ejemplo, AENOR, que certifica la calidad del sector electradoméstico. 1 la rama del mueble se puede contar con varias organizaciones nacionales muy cualificadas, que realizan pruebas sobre los prototipos de nuevos disefios, como AIDIMA, la Asociacién de Investigacién y Desarrollo en la Industria del Mueble y Afines, una institucién valenciana no lu- crativa destinada al servicio del sector del mueble, Esta organizacién puede controlar un producto desde la cali- deben soportar de peso y de largo de su vida mayores cambiosBibliot. dad de las materias primas utiizadas, in- dsl Bee — 2. Mayor que © Diémetro r Radio O Cuadrado = Minuto — Limite "Segundo de segmento NORMAS PARA ROTULAR Cada dibujo debe llevar escrita una in- formacién que oriente al observador —obrero, encargado del departamento técnico, etc — sobre el contenido, las ca- racteristicas, el nimero de piezas y el nombre o nimero correspondiente de ese proyecto, Toda esta informacion se incluye en la rotulacién y despiece del ci bujo en cuestién, interpretacién del dibujo, y estan regidas por unas normas muy concretas, que de- ben seguirse puntualmente. Los recuadros de rotulacién y despiece )Segiin las normas UNE 1036 y DIN 28, la informacién del dibujo debe ir ence- mada dentro de un marco o perfil. El ca- jetin o recuadro en el que debe incluirse dicha rotulacién, con el listado de piezas que conforman el dibujo, debe situarse en el dngulo inferior derecho del papel, con posibilidades de desarrollarse hacia Ja izquierda y hacia arriba. b) El nimero identificador del dibujo debe situarse abajo y a la derecha del ca- jetin. Las letras y los ntimeros deben se- guir la norma UNE 1034 ) Las columnas explicativas se agre- gan sucesivamente, de acuerdo con la in- formacién necesaria: niimero de piezas, denominacién y observaciones, marca, fecha, modelo, materiales, etc. El nimero de columnas explicativas depende de la informacién que necesite el dibujo para su facil y r4pida interpretacién. d) Cuando el objeto se construye en una sola pieza, basta s6lo una casilla para indicar el niimero de piezas, Sin embar- 0, si el objeto lo forman varias piezas, se "4aabcdefghyklmnopq rstuvwxyZ ABCDEFGHUKLMNOP QRSTUVWXYZ 01234567789 1VX [?."-=4x V%EIO aabcdefghijklmnopq rstuvWXxyZ ABCDEFGHIJKLMNOP QRSTUVWXYZ 01234567789 1VX [(!?:-"-s4x-V%8llo La nor malizacién Escritura normalizada para rotular. cursiva (arriba) y verticalProporciones normalizadas de la rotulacién, segiin la UNE 1094. Proyecoién do vistas acotadas de un sillén, en un dibujo a escala realizado en 1934 6 del dibujo. ‘Normalmente, en rotulados del ramo de la madera, los datos imprescindibles son: niimero, razén social, designacién del trabajo, escala del dibujo, material, modelo (n."), almacén (n."), dibujado (por), comprobado, En el mercado existe una variedad de r6tulos impresos que se pueden adherir a la hoja y rellenar segun la informacion correspondiente. En cuanto a la cantidad de columnas in- formativas 0 informaciones patticulares, necesitardn tantas casillas como piezas, ccon los indicativas a), b), c), etc. e) El tamaio del cajetin de rotulacién depende de las dimensiones generales no existe una norma especifica al respec- to, Todos los datos dependen del conte- nido del dibujo. despiece separado La norma UNE 1035 tiene en cuenta la posibilidad de que las indicaciones de un dibujo excedan las dimensiones normales de un cajetin de rotulacién. En este caso 52 agrega una hoja tamatio folio —A4, 210 x 297 mm— en la que se desarzolla el despiece del dibujo en columnas simila- res a las del cajetin y con parte de la ro- tulacién, Esta hoja debe archivarse junto al di- bbujo, por tanto debe dejarse un margen para archivo de 25 mm, a la izquierda de Ja hoja. Los ottos tres lados del folio ten- dran § mm de margen cada uno, LA ESCRITURA EN LOS ROTULOS En el dibujo técnico se utiliza una es- critura particular, diferente a la tredicio nal, la empleada normalmente en notas, correspondencia, etc. — La comprension de la letra para 10 tulacién debe ser répida, por tanto su es- cxitura debe ser muy leaible, con tipos de letras simples, ciaros y féciles de hacer. Un buen dibujo puede perder gran parte de su valor técnico si est mal rotulado y no se entienden sus indicaciones. — Ia letra impresa clésica se basa en los caracteres romanos, los cuales han servido de base para el desarrollo de la actual letra de imprenta. Por tanto, es im- pprescindible conocer Ja forma y la pro- pporcién de dichos caracteres, si se realiza luego a mano alzada 0 se seleccionan los tipos en una maquina de rotular — Ios tipos més empleados en dibujo profesional son Ja cursiva para rotulacién UNE 1034 i 1, y la vertical para rotulacién UNE 1034 h 2, empleada habitualmente en la rotulacin de planos. — Para dominar con agilidad la rotu- lacién a mano alzada, es conveniente practicar con una cuadricula y seguir la tabla de proporciones y caracteristicas que indica la UNE 1034 (h equivale a la altura nominal} Altura de Jas letras altas 14/14 h ‘Altura de las letras pequefias 10/14 h Espesor de los trazos 1/14 h Distancia entre las letras 2/14 h Distancia entre las palabras 6/14 h Distancia media entre las lineas 20/14 h La relacién de esta proporcién es x partes de ancho/x partes de alt. Alturas nominales en milimetros 2,5 — 35—5—7—10—14—20.LAS ESCALAS Los dibujos que se presentan en un proyecto no suelen realizarse a escala na- tural Por lo general se efectian cinco dioz, cincuenta, cien veces mas pequetio que su tamafio normal en la realidad, 0 si se trata de un detalle especifico y de gran interés, se dibuja més arande que el re aunque en cualqui 6 debe mantener exa dimensiones auténticas, ia proporcién en relacién directa se denomina técnicamente escala, y se re presenta de forma grafica con las letr E = 1:x (0 E If) si es una reduccié: E =x: | sise trata de una ampliaci detamano. Esto quiere decir que sitndibu- jo est realizado a el dibuio y ca da una de sus partes es 50 v nd pequeflo que al natural, y si se habla de el dibujo es el doble que la pieza a tamafo natural. Las normas UNE 1026 especifican las condiciones que deben regir los distintos tipos de escalas en dibujo: 1. Dibujo a tamajio natural. Es la opcién és fa, utilizada normalmente para el desarrollo en el taller, y se representa 0, todas las dimensio 1:1. En este cz tamaiio que I 2, Reduce da. Las piezas grandes se representan 1. ducidas en el plano. Normalmente deben usar, para Ja industria nstalaions las siguientes escalas: 1:25 (40 cm); 2 Presentacion formal de un proyecto es son frecuentes, 3. Ampliaciones. Las piezas pequetias, dificiles de entender en todos sus detalles un dibujo a tamafio real, deben repre ntarse més grandes, para su mejor mprensién. Las escalas més en ampliaciones son: 21, 5:1 y lizadas este caso, las normas recomiendan afiadir ficHivadcres para diferentes enelchbujo una representacién de laPle- obi on per pana. cmmeda za a tamaho natural con seis cajones estr — El rétulo informativa debe llevar in da en ke sndes la escala prin jedianos. Detrés, colte de nue’Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 AA 594 x B41 Superficie 1 m* x= 841 Divisién del formato bésico AO, cipal utilizada en el dibujo, y las escalas secundarias, en letra pequeia, Estas es- calas secundarias deben repetirse en la parte correspondiente del dibujo, con el mismo tipo y tamafo de letra — Cuando se dibujan piezas en dimen- siones fuera de la escala, sus cotas deben ir subrayadas. — Siempre deben anotarse las cotas principales de una pieza, aungue esté di- bujada a una escala determinada y se pueda medir directamente en el dibujo con un escalimetro. El papel podria hin: charse por la humedad medioambiental, y la proporcién del dibujo variarfa enton- ces irremediablemente, con aran perjui- cio para el resultado final de la pieza. LOS FORMATOS DE PAPEL Gran parte del mobiliario actual y del material de trabajo de una oficina técnica dependen de los formatos normalizados de papel. Es imprescindible, por tanto, tener un conocimiento basico sobre las normas existentes en relacion a las me- didas de papel estandarizadas, Actualmente, las normas més utilizadas en este campo son las UNE 1011 y 1026, y en su defecto, las DIN 198, 476, 829 y 4999, con especificacién en DIN-A y DIN- B (de 0a 12), y DIN-C (de 0 a 8). El for- mato més comin es ] DIN-A4, tamatio fo- lio (0 simplemente A4), de 210 mm de ancho x 297 mm de alto. Los dibujos de caracter técnico deben realizarse, obligatoriamente, en hojas de papel de formato normalizado, segiin las medidas de la serie A. El formato basico — Las dimensiones de partida de todos los formatos normalizados de papel de oficina 0 de dibujo se basan en un rec- tdngulo de 1 m’, con una relacién de lados de 1/2 = x/y, con lo que se obtiene un ado de 0,841 m, y otro de 1,189 m. Estas medidas corresponden al formato basico ‘AO, del que derivan todos los demés. Do- blando cada pliego por la mitad, sucesi-vamente, se consiguen todos los formatos de la serie A, desde la clase AO (841 x 1189 mm, e! mayor de todos) hasta la mi- nima clase Al2 (13 x 18 mm), pasando por la mencionada Ad, de tamatio folio. De esta forma, todos los formatos mantie~ hen una misma proporcién entre ellos. — Todos los formatos de hojas de pa- pel pueden utilizarse en posicion vertical © apaisada (horizontal). En los formatos pequefios puede adoptarse, como norma, la posicion vertical. — Cada hoja de dibujo debe llevar un cajetin o recuadro con la rotulacién y des- piece del tema que se haya desarrollado en el papel. Este recuadro debe situarse a.una distancia de 20, 15, 10 0 § mm del canto de la hoja, y en el angulo inferior derecho, — Para archivar las hojas de formato pequefio, se puede aceptar un margen de 25 mm, lo que reduciré la superficie ‘itil del papel, pero permitiré guardar es- tos trabajos en carpetas o archivos nu- merados, — Si interesa utilizar un formato parti- cularmente estrecho, se consigue aco- plando en los extremos de una hoja, y en su mismo sentido, otras hojas de formatos iguales, o del tamatio inmediatamente in- ferior al utilizado de base, pero en este caso cambiando su sentido, Formatos secundarios — Los formatos de papel pertenecien- sa las series auxiiares By Cno afectan a las normas de dibujo, pero sf intere- san a trabajos de despacho, porque se uilizan para productos accesorios de pa- pel de oficina, como sobres, fichas, car- pelas, archivadores, etc, que en algin momento si pueden tener alguna relacién con el trabajo de dibujo. — Los formatos de la serie B —desde Ja clase 0 (1000 x 1414 mm) hasta la 12 (18 x 28 mm)— se calculan a partir de la serie A: el lado menor de los formatos B es la media geométrica de la suma de los lados del formato A de la misma clase, y ellado mayor de Bes el menor resultante multiplicado por ve. — Para conseguir los formatos de la se- tie C se deben calcular las medias geo- métricas de los mismos lados y clase de las series Ay B Formatos awzliares Las tiras de papel para etiquetas, cu- pones, fajas de cartas, etc. también tienen un formato normalizado. Se consigue di- vidiendo los formatos normales A a lo lar- go, en dos, cuatro u ocho tiras, — Los archivadores, carpetas y clasi- ficadores, imprescindibles para quardar y mantener un control de los dibujos y tra- bajos graficos acabados, deben ser ma- yores que el formato normal, para dar cabida a los sistemas mecénicos de su- jecién (anillas, barras plegables, etc) ara calcular las medidas mas adecuadas se pueden utilizar formatos de las tres se- ries normalizadas, A, By C, sequin la nor- ma DIN 821, — los separadores de archivador, sino llevan orejuelas perforadas, deben tener la misma medida que el dibujo, es decir, formato normal A4. Pero si se sujetan en el archivador con orejuelas, su tamafo debe exceder sobre lo normal, en el an- cho preciso de éstas, — Los bloques de apuntes deben tener el formato folio, tanto si van unidos en su Archivador horizontal modular, apilable, en madera maciza de haya vaporizada y barnizado natural, para formatos DIN AO y DIN Al a FORMATOS DE PAPEL Formato ‘Serie A Serie B Serie C Clase’ mm mm wm AO ‘41 x 1189 41000 x 1414 917 x 1297 Al 594 x BAY 707 1000 648 x 917 a2 420 x 594 500 x 707, 458 x 648, Aa 297 x 420 353 x 500 924 x 458 A 210 x 207 250 x 953, 229 x 324 AS 448 x 210 476 x 250 162 x 229 AG 108 x 148 125 x 176 144 x 162 AT 74 x 105 8B x 125 81x 114 AB 52x74 62x 88 57x81 9 37 x 82 44 x 62 aio 26 x S7 31x 44 Alt 18 x 26 22x31 Ate 13x18 45 x 22 9Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Plegado de los planos. cabecera con pegamento, como si llevan la cabecera perforada para que puedan arrancarse las hojas. Los rollos de papel — El papel utilizado para obtener for- matos de la serie A debe tener unos an- chos especifices, segiin las normas DIN 823 y B24 Papel tipo Canson y papel vegetal 1500, 1860 mm (de estos rollos se obtienen an- cchos de 250, 1250, 660 y 900 mm), Papel de copia 650, 900, 1200 mm. Plegado segun el tamano A4 2 KA 9 Dobiez eae a sal eased [ieee 5 lara eee [agen g | [eoower| | | al | froutecin e180 | 160 | 190, Pliegues longitudinales. Pliegues transversales — Si todos los formatos que se nece- sitan, hasta el maximo, A0, deben obte- nerse de una misma tira de papel, es preciso un rollo de 800 mrm/ancho. EL PLEGADO DE PLANOS — Segan la norma UNE 1027, los di- bujos deben plegarse hasta alcanzar el ta- mano folio, A4, que permitira luego archivarlos en carpetas normalizadas, 0 ‘enviarlos por correo en un sobre también normalizado. Como todos los formatos mantienen la misma proporcién, con cual- quier plegado regular debe llegarse has- ta esta medida universal — Si el papel de dibujo tiene un for- mato superior al Al, los planos no suelen archivarse plegados dentro de una car- peta, porque su manejo seria bastante in- comodo. Cémo plegar los dibujos 1, El plegado de planos grandes debe ealizarse de forma que quede a la vista dentro de la carpeta, en primer lugar y cubriendo todo el resto del pliego, el 4n- gulo inferior derecho de la hoja de dibujo, en el que se encuentra el r6tulo. Esta seu- doportada, formada por el borde libre iz~ quierdo del papel —mediante el cual se sujetard el dibujo a la carpeta— y por el extremo inferior derecho, debe tener ta- mafio folio, mayor que los demas plie- ques, y que regiré sobre todo el conjunto plegado. 2. Para iniciar el plegado, es recomen- dable uilizar, solamente en este primer plegado, una plantilla con las medidas normalizadas de folio A4, es decir, de 21 x 29,7 cm, El primer pliegue debe ha- cerse comenzando por la izquierda, a 21 centimetros del borde izquierdo y a todo Jo largo de la hoja. 3, A 29,7 cm del margen inferior de la hoja de dibujo, y sobre el borde izquier- do, hay que marcar un pliegue triangular que nazca en ese punto y caiga sobre el extremo superior de la hoja, a 21 cm de su orilla izquierda. Este pliegue en diagonal permitiré que, una vez’ plogado el dibujo, el margen iz- quierdo de la hoja quede libre para su co- sido o taladrado. 4, En el lado exactamente opuesto, ala derecha de la hoja, debe estar situado el r6tulo explicativo del dibujo. Para man: tenerlo en primera posicién del plegado, debe doblarse la hoja hacia la izquierda, sucesivamente, partiendo desde su bordederecho, a 18,8 cm de la orila y a todo lo largo. En este caso, para todos estos plie- gues sucesivos, es conveniente utilizar una plantilla que mida 18,5 cm de ancho x 29,7 om de alto. Si una vez deducidos los 21 cm del primer plegado de la iz quierda, la longitud del dibujo plegado no queda dos, cuatro, seis u ocho veces 18,5, centimetros, el sobrante de papel —me nor que dos veces 18,5 cm— se pliega por la mitad. Este es el llamado plieque ompensador. En hojas pequefias de di- io (por ejemplo, A3, de 42 x 29,7 cm) el plegado puede hacerse mantenient el formato normal en la cara superior, y plegando a medio folio el resto de papel. 5. Una vez plegado el dibujo a todo lo go, debe quedar un margen a la iz quierda en el que se taladrar4 el papel para fijarse a la carpeta. Debe reducirse la altura del papel plegado, hasta llegar a la del formato normal Ad, Para esto hay que doblarlo de manera horizontal y de forma sucesiva, cada 29,7 cm, comenzan- do desde el borde inferior de la hoja. Para evitar que el papel se desgarre, es conveniente reforzar la zona de tala drado 0 de cosido pegando una cartulina en su reverso, bajo el recuadro inferior izquierdo, de formato AS (148 x 21), pegando anillas de papel plastificado al: tededor de los agujeros de sostén. Este sistema de plegado es valido para todos los formatos normalizados que se plegandolo tantas veces como sea El sistema de plegado no es aconseja ble para los dibujos originales, ya que pueden rasgarse 0 rayarse con facilidad, Jo que se reflejaria en las copias. Presentaci6n formal de un proyecto A la iequierda, secreter rodante archivar carpetas colaan ccajén intermedio dibujes en horizo diskettes y un contenedior con puerta abatible para accesonos. Ala derocha, co archivador con cuatro cajone estante central con d Dos de sus cuatro ruedas llevan 8Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 ‘Méquina para rebordear planos EZ-18. Evita desgarros y roturas en los bordes,utlizando cinta ‘adhesiva en papel gotrado, con hilo de refuerzo. SISTEMAS DE ARCHIVO DE PLANOS Una vez acabados los dibujos, es fun- damental cuidar muy bien de su conser- vacién, Esta depende, en gran parte, de las caracteristicas del dibujo que haya que archiver. — Si se trata de un dibujo original, su ‘conservaci6n tiene un gran valor. En este caso debe intentarse su archivo en una sola pieza, colgado con unas pinzas en un armario 0 colgador especifico para este servicio, y protegido dentro de una car- peta o una funda de pldstico de su tama- fo, En el mercado existen armarios especiales para este fin, realizados en materiales incombustibles y protegidos con un cierre hermético. — Si los dibujos son copias, negativos © calcos a la luz, se guardan en carpetas © archivadores en cajones numerados, 0 se cuelgan en estanterias 0 bucks con ba- ras colgantes. — Todos los dibujos que se archivan se numeran por orden de llegada, prescin- diendo de su tamafio, para facilitar su lo- calizacién posterior. REPRODUCCION DE PLANOS — Normalmente, los planos y dibujos originales se archivan, y en su lugar, en el taller se utilizan copias y reproduccio- nes del original. Estas reproducciones se realizan mediante distintos sistemas. El mas comtin es el de fotocopia, que puede ser al mismo tamafio del original 0, segtin sus dimensiones, pueden obtenerse ta- mafios reducidos 0 ampliados del origi- nal. Sin embargo, su calidad es inferior a la de éste, — Otro sistema muy utilizado es el de Ja heliografia o reproduccién de calcos a Ja luz, Este procedimiento consiste en ob- tener los grabados en planchas conve- nientemente preparadas, y mediante la accién de la luz. En este caso se utiliza un papel especial fotografico, sensible a la uz, que se adhiere al dibujo original me- diante una pesada plancha que se accio na con muelles. — El papel de calco se produce en tres tipos: positive —la reproduccién queda en Iineas blancas sobre un fondo azul—; negativo —la copia tiene fondo blanco y las Iineas de reproduccién son negras—; y finalmente el papel sepia, cuyas copias ‘quedan con Iineas blancas sobre un fondo en un tono ocre oscuro. También se uti lizan aparatos especiales neuméticos, ac- cionados con una bomba de aire y provistos de una superficie de espejo, contra la que se adhiere una tapa de goma, Con este sistema, los calcos suelen ser de gran calidad de copia Con cada reproduccién, el dibujo ori- ginal va perdiendo calidad y se va ajando y ensuciando con el papel de copia. Para evitarlo y proteger el original, lo mejor es realizar una tinica y buena reproduccién del original, y luego hacer las copias a partir de esta reproduccién.EL BOCETO menudo, un proyecto creativo —di- seo de muebles u objetos, interiorismo, arquitecture— debe ir acompafiado de ‘una imagen grafica muy simplificada, rea- lizada a mano alzacia y con pocos trazos, con la que el dibujante explica somera- ‘mente la imagen real que tendré el pro- yecto acabado. Esta imagen estilizada es ‘el boceto (0 esboz0, bosduejo, etc). Es la primera fase de una creacién gréfica, los primeros trazos o las primeras lineas con las que se quiere expresar la idea de un objeto, un mueble, un ambiente, etc. 3 Debe tener una gran expresividad para su répida comprensién, y por otra parte debe ser muy elemental y esquematico. Normalmente el boceto no incluye aco- taciones, y se representa en forma de perspectiva Para que un boceto, a pesar de su sim- plicidad, cumpla su objetivo de mostrar de forma gréfica una idea escueta, es ne- cesario que siga algunas pautas basicas: con indiferencia de la escala utilizada —suelen ser a una escala bastante reduci- da—, la proporcién del objeto tiene que mantener su correcta relacién con la rea- lidad. La estructura global del objeto, su volumen, debe quedar muy definida. El grafismo ha de ser informal, y al mismo Croquis de los muebles de una sala de estar, dibyiado en 1941, siguiendo las técnicas de sombras,brillos y color de la epoca.Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 (Croquis con planta y alzados de tuna consola en escaia 1:10, dibujado sequin las técnicas utilzadas en 1942. tiempo debe marcar distintos valores en el grosor de lineas entre las zonas mas importantes y las de menor interés en el mismo objeto. No hay una norma estética para boce- tar, en cada caso dependera simplemen- te de la mayor o menor habilidad artistica del dibujante EL CROQUIS A otto nivel, el croquis coincide con el boceto en que ambos son dibujos a mano alzada y representan graficamente la idea final de un proyecto, También, como el boceto, el croquis debe mantener una penenig AN asrciuenrese ee sysertiansysia proporcién real, debe esquematizar la es: tructura del objeto y debe diferenciar va- lores con grosores de lineas mas o menos estacados, pero técnicamente tienen im- pportantes diferencias: el croquis debe ir acotado, sus Iineas deben ser més defi- nidas y se representa con una proyeccién ortogonal —planta, alzado y vista lateral—. Por otra parte, podriamos decir que el croquis es menos expresivo, menos artis- tico que el boceto, y en cambio es més concreto que éste. Una vez superada la informacion del oceto y del croquis, el dibujante debe llevar a escala su proyecto, apoyado en un instrumental técnico. Ha llegado el mo- mento de realizar técnicamente la pro- yeccién ortogonalLa representacién gréfica de un objeto puede hacerse de distintas formas. La més utilizada en dibujo industrial —dise- fo, arquitectura—, por la exactitud con la que se muestra el objeto tal como es en la realidad, es la proyeccion ortogonal, geométrica, muy esquemética y de rapi- da comprensién visual. — Este sistema de representacién gré- fica de un objeto se basa en el desdobla- miento de seis planos de proyeccién, a partir de las seis caras de un cubo. Dos de estas caras —inferior y superior— de- ben estar en posicion horizontal — Todas las caras del cubo —las dos horizontales, superior e inferior, y las cua- tto laterales— se desdoblan y se extien- den, abatiéndose sobre un solo plano horizontal, mediante un giro imaginario sobre ejes también imaginarios. El cuer- po que se va a proyectar debe estar, ima: ginariamente, introducido en el interior de dicho cubo, sobre el que se realizarén los mismos giros y desdoblamientos que se han efectuado mentalmente con las ca- ras del cubo. — El dibujo resultante debe inciuir, en un dibujo industrial, todas las indicacio- nes sobre dimensiones, cotas, materiales, etoétera, para que esas piezas puedan realizarse correctamente en el taller. DISPOSICION DE VISTAS ¥ CORTES —Siguiendo la norma UNE 1032, se di- bujan tres vistas del objeto: planta (el ob- jeto visto desde arriba), alzado (el objeto 4 La proyeccion ortogonal visto desde el frente) y vista lateral (el ob- jelo visto desde un costado), Para com- prender el volumen total del objeto suelen ser suficientes estas tres vistas en sus dimensiones reales, reproducidas a escala, En ocasiones, y para su mejor comprension, se agrega un dibujo en perspectiva de la pieza, en el que se 1a libreria Houshill. de ‘Mackintosh, en fresno blanco, ‘con una bandeja de cristal rosa en la parte superior, ‘supuestamente como florero eventual 88Disposicién de una pieza con seis vistas. Muebles de sala de estar. Vistas ‘frontales y lateral de un sillén ‘segtin un dibujo de 1941, con colores a lépiz y brillos con la técnica de Ja aguada muestra la imagen del objeto tal como se verd una vez acabadbo. — En algunos casos, si el objeto se comprende sélo con dos vistas, se per- mite eliminar una, Incluso si el objeto es muy simple, es suliciente con representar ‘inicamente su alzado. — Por el contrario, si el objeto es muy complejo, deben realizarse més de tres vistas, es decir, planta, alzado, vistas la- terales y vistas inferior y posterior. — Siempre debe dibujarse la pieza en su posicién natural de empleo. Esto sig- nifica que una pieza vertical no puede di- bujarse horizontal ni al revés. Esta norma evita errores de comprensién. — Sin embargo, si se dibujan piezas que en el espacio tienen su eje inclinado, pueden representarse en el papel, cuan- do estén solas, con el eje en posicién ho- rizontal 0 vertical, a no ser que por algiin motivo especial deba mantenerse en el dibujo el eje inclinado real. — Sise trata de piezas auxiliares, en las que es indiferente su sentido de uso, se dibujarén en el sentido mas adecuado a su fabricacién, segin la maquinaria utili- zada por el taller. — En piezas complejas y antes de rea- lizarlas en el taller es conveniente, ade- més, dibujar geométricamente el abjeto, come orientacién para estudiar sus pro- porciones y su efecto visual. — Segin las normas NE, coincidentes en este caso con las UNE, la disposicién de las seis vistas de un objeto debe seguir un orden exacto: + Enel centro, el alzado o vista de fren- te, que se proyecta sobre la cara poste- rior del cubo de proyeccién. + Ala izquierda, vista lateral derecha, sobre la cara lateral izquierda del cubo imaginario, + Ala derecha, sobre la cara izquierda de dicho cubo, vista lateral izquierda del objeto. + A continuaci6n, la cara trasera del ob- jeto —vista posterior—, proyectada sobre Ja cara delantera del cubo, + Bajo el alzado, la cara de encima del objeto (vista superior), proyectada sobre la base del cubo de proyeccién. + Por encima del alzado, proyeccién de la cara inferior del objeto (vista por de- bajo), sobre la cara horizontal superior del cubo,La proyeccién ortogonal ppleza con dos vistas, medio corte yy seccién, y otra pieza simétrica Ssefiaiada como vista y como carte (C). Conviene rebatir objetos sobre ccuarta parte, indicando el eje de aristas inclinadas para evitar dibujarse sélo en la mitad 0 en la simetria (a). ‘cambios desfavorables en la representaci6n arética (b). Dos ejemplos combinados: una | ‘puertas, desarrolladas a través de un programa de CAD. Las piezas simétricas pueden plotter de un conjunto de la di- nadas y necesitan més vistas, etc. En esos reccién de la visual, mediante una nota in- cesario hacer alteraciones en el dibujo para continuar su proyeccién en otra hoja, 0 en objetos que tienen superficies mcli- cuando falta espacio en el papel y es ne- casos hay que indicar claramente En principio, estas normas deben se- guirse habitualmente, a excepcién de de- terminados casos, como por ejemplo, — Si se trata de un dibujo en el que sblo se proyectan tres vistas, la situacion en el plano es muy simple: + La planta del objeto se dibuja en el centro, como punto de partida, formativa que diga, por ejemplo, «Vista en la direccién X», + Sobre ella, el alzado de la pieza (vista 2 € a g28egih : wos Beales aq gai 3 Tegee28 ta Eel as" 2ua bag yeccién horizontal de éste se obtiene la 81Representacién de vistas sogiin el sistema americano, en lépiz de dibujo de crafito Disposicién europea y UNE 1032 de las vistas Vista inferior Nah Visia desde Vista de frente Vista desde la dorecha (alzado) la izquierda (lateral) lateral) Vista posterior Soe = <} Oo = Vista superior ‘planta) ee Vista desde Vista de frente Vista desde la izquierda {alzado) la derecha (lateral) (lateral) Vista posterior ame me El ee altura del lateral. Como enlace entre es- tas lneas se trazan cuadrantes de circun- ferencia—o lineas a 45" y de esta forma todas las vistas se relacionan en altura, an- chura y profundidad. — Las partes sencillas de una pieza pueden representarse con lineas finas, para evitar nuevas vistas 0 cortes: seccio- nes de brazos, planos normales, circulos de agujeros, etc — Las piezas simétricas pueden dibu- jarse sélo en la mitad o la cuarla parte, para ahorrar tiempo y espacio. En este caso, se ha de indicar cada extremo del eje de simetria con dos trazos paralelos. —Conviene rebatir objetos sobre aris- tas inclinadas, si de esta forma se evita realizar cambios desfavorables en la Te- presentacién grafica SISTEMA AMERICANO DE REPRESENTACION DE VISTAS Normalmente, todo dibujo realizado en Europa se efectiia con el sistema europeo de representacién de vistas (en Espafa, convalidado con las normas UNE 1032). ‘Sin embargo, a veces se utiliza el sistema americano, por Jo que es conveniente te- ner nociones sobre su funcionamiento. ‘Comparando uno y otro, se advierte que en el sistema americano: — La vista de frente —el alzado— se halla en el mismo sitio, mientras que todas Jas demés vistas invierten su posicién. — La vista por encima —la cara infe- rior— queda por debajo del alzado, y la vista por debajo—la cara superior—que- da por arriba del alzado. — La vista izquierda queda a la izquier- da del alzado, y la vista derecha también se dibuja, en el sistema americano, en el sentido opuesto al europeo, es decir, a la derecha del alzado. En el sistema europeo parece que el espectador permanece en reposo, mien- tras que la pieza dibujada ejecuta movi- mientos de rotacién: girando ésta en 90° hacia la derecha, el observador ve su lado izquierdo, y si la pieza gira en 90° de arriba abajo, el observador ve la pieza por encima (planta). Con el giro inverso, Ja pieza se ve por debajo. En el sistema americano la pieza di- bujada permanece en reposo y es el es- pectador el que gira en tomo a ella. Vista desde el frente (alzado), el observador gira hacia la izquierda y verd el lateral iz- quierdo de la pieza. Si gira hacia la de- recha vera su lado derecho. Si imagina ‘subir por una escalera hasta arriba de la pieza ver su cara superior, y si cuelga el objeto, desde abajo verd su vista inferior. 88Selec ote ae Se entiende por perspectiva el arte 0 ciencia que sirve para representar en un dibujo los objetos tal como se ven en la realidad, a diferencia de la geometria, que los muestra en una proporcion exac- 1a, tal como son verdaderamente. ‘Toda representacién que quiera mos- ‘rar determinada pieza o imagen como se ve en la realidad —un mueble, un am- biente decorado, una obra de arquitec- tura— debe recumir a la perspectiva, para la que es imprescindible esta cien- cia renacentista: cualquier objeto que esté alejado de la vista se vera més re- ducido que los objetos que estén cerca, incluso en un misino cuerpo la zona més alejada se verd mas pequetia que la zona que se encuentre en primer plano. Este fenomeno fisico, aunque parezca extratio, responde a unas leyes naturales muy con- cretas, descubiertas hace cinco siglos por Leonardo da Vinci. La perspectiva muestra la apariencia de los objetos. A menudo su forma o su color varfan sensiblemente segtin dénde esté situado el punto de vista. Esta dife- renciaci6n motiva el que se estudie la perspectiva desde distintos aspectos la perspectiva lineal, una ciencia exacta que reproduce a la perfeccién la apariencia de los objetos y se emplea sobre todo en dibujo técnico, y la perspectiva aérea, un arte subjetivo que se utiliza en dibujo ar- tistico y se basa en la apariencia de los colores, Estos pueden variar notablemen- te si se observan desde distancias dife- rentes, Esta segunda acepcién de la perspectiva (no debe confundirse con la perspectiva aérea de tres puntos) no puede cumplir unas reglas establecidas, porcue las variaciones en el color pueden ser constantes; por tanto, no se la consi- dera una ciencia exacta, PERSPECTIVA LINEAL La funcionalidad de su trazado permite que la perspectiva lineal sea el medio més praclico de representar sobre un plano los objetas en volumen. En su ver- sin més simplificada se la conoce tam- bien como Método del cristal. Segiin la posicién del objeto y sus pun- tos de fuga se desarmolla en cuatro ver- siones. caballera, axonométrica, paralela y oblicua. Con esta técnica, la imagen de los ob- jelos representados resulta bastante exacta, los cuerpos resaltan con la sufi- ciente claridad y relieve y se compren- La perspectiva caballera se basa en Ja combinacién de tres ees de direccién —horizontal (ancho), vertical (alto) y en angulo de 45° ‘profundidad)—, coincidentes en un punto. 3 si 3 = 4| 45° Dimensién real je dimétrico Cale abe = 11972Perspectiva axonométrica a partir de un eje bimétrico con dos ‘escalas diferentes. Las vistas los planos se ven oblicuos. Perspective axonométrica con eje isométrico. Las tres vistas estan Dimensin real ‘en escala real abe: = 11:72 den a simple vista sus tres dimensiones: altura, anchura y profundidad El procedimiento de este sistema de proyeccién se basa en la adecuada com- binacién de tres ejes de direccién coin- cidentes en un punto, A partir de este punto se prolongan las direcciones natu- rales de altura, anchura y profundidad, y sobre estos ejes se sittian las dimensiones del objeto. 1, La perspectiva caballera. Es la pro- yeccién oblicua de una pieza situada de frente, sobre un plano vertical. Segin las normas UNE 1031 y DIN 5, este plano debe ser paralelo a una de las dimensio- nes del objeto, y el punto donde concu- ren todas las lineas perpendiculares a la (2 cimension real Eje isométrico vertical esta en una distancia infinita. Las normas UNE 1031 para construir una pers- pectiva caballera son: a) La recta vertical del espacio también debe ser vertical en la perspectiva, y de su misma longitud y direccién, b) Una recta horizontal en el frente del objeto debe ser horizontal en la perspec- tiva, con el mismo sentido y longitud, y de direcoion fija ) Las rectas perpendiculares a la ver- tical, vistas de perfil, deben seguir una di- reccién de fuga de 45°, y su longitud tiene que mantener una proporcién constante, llamada coeliciente de reduccién, que es de 1/2. 2, La perspectiva axonométrica. Es la més natural, ya que en la realidad los ob- jetos suelen encontrarse en posicién abl cua. Por este motivo se utiliza para dar una idea completa de las proporciones del objeto en perspectiva, en sus tres di- mensiones: largo, ancho y alto, En esta proyeccién, los elementos aparecen algo deformados, pero se ven més reales que en la caballera Segiin la norma DIN §, hay dos sistemas de perspectiva axonométrica: ‘a) ba proyeccién bimétrica (concuerda con la escala UNE 1031), con dos escalas diferentes. En ella, todas las medidas que siguen la inclinacién del eje a 42° se re- ducen a la mitad. ‘b) La proyeccién isométrica. Sus tres ejes mantienen la misma escala. Esta perspectiva es util para ver claramente las tres vistas. 9, La perspectiva paralela. En este caso el objeto est de frente al observador. En el dibujo, tanto las lineas horizontales ‘como las verticales son paralelas, y las de pprofundidad fugan hacia un solo punto, si- tuado normalmente dentro del objeto. 4, Perspectiva oblicua 0 cénica. Tiene dos puntos de fuga. Sélo las verticales son pparalelas, las dems lineas convergen ha- cia una u otra fuga. 8, Perspectiva de tres puntos. Como su nombre indica, esté formada por tres pun- tos de fuga, y sus aristas van a cada uno de ellos, El tercer punto de fuga provoca que el efecto éptico de esta perspectiva sea aéreo. 90Nadie puede dudar que el avance de las nuevas tecnologias ha revolucionado todos los campos que rodean al hombre, ‘en especial la informatica dentro del te- reno gréfico y audiovisual: a través de un ‘ordenador se pueden solucionar desde temas de dibujo artistico hasta toda una generacién de imagenes sintetizadas, o incluso proyecciones de disefio bi y tr: dimensional Los tratamientos araficos realizados por ordenador necesitan un material muy dis- tinto a los tipicos de un tradicional estudio de disefo. Los lépices, reglas y tiralineas se sustituyen por lapices épticos, tabletas gréficas y una serie de otros elementos que asimilan toda la informacién que pase por ellos y la transmiten al cerebro del ordenador, denominado Unidad Central de Proceso (CPU), EL METODO CAD/CAM El conjunto de aplicaciones y procedi- mientos informaticos de disefio arafico queda englobado bajo la sigla CAD —Compuier Aided Design, disefio asistido por ordenador—, y se complementa con Jos medios de produccién con que cuenta Ja informética, conocidos como CAM —Computer Aided Manufacturing, pro duecién asistida por ordenador— de ahi que habitualmente se empleen las siglas CAD/CAM pera denominar el conjunto de tecnologias que utiliza el ordenador de forma interactiva en las tareas de di: sefio y fabricacién 6 Diseno grafico asistido por ordenador La principal finalidad del CAD/CAM reside en las posibilidades de generar, transformar y almacenar una gran canti- dad de datos simbélicos y gréficos, apa- rentemente sin conexién y sin sentido entve si Esta informacién puede integrar- se en una unidad de informacién util al proceso productivo, mientras se visualiza en todo momento en la pantalla y se co: mige 0 se agregan nuevos datos. De esta forma, con el CAD/CAM se puede racio: nalizar todo el trabajo, desde que nace el proyecto hasta su fabricacién real. Entre tanto, en el monitor se pueden optimizar los tiempos de produccién, efectuar si- mulaciones factibles de corregir sin que ea preciso tener un prototipo y, en ge- neral, perfeccionar el disefio hasta llecar al punto ideal, sin haber perdido tiempo en complicados dibujos sobre la mesa de trabajo, ni costosas pruebas durante la produccién. Un ejemplo simple puede explicar me- jor este método: supongamos que se esta Centro de disefto sein el sistema CAD. En la pantalla del ordenador se proyecta incluso el efecto de luz que emiten sus disetios de idmparas dentro del ambiente previsto.Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Distribuctén de sanitarios y seleccidn de materiales de revestimiento en un cuario de bbatio, con presupuesto inciuido, ‘segiin un programa de diseno en tres dimensiones. disefiando un escritorio. Primero habra que dibujar un boceto en la pantalla para tener una primera visién de la idea de base. Poco a poco se iran introduciendo muevos datos para perfilar mejor lo que serd el mueble, desde sus dimensiones y materiales hasta el tipo de acabados. Cada nuevo dato significaré un nuevo bo- ceto, mejor que el anterior. En algunos casos, si es un encargo determinado para un espacio concreto, convendra situar el dibujo dentro del plano de la habitacién, y seguramente habré que hacer nuevas modificaciones en sus dimensiones. Lue- go habré nuevos detalles, como cajones escondidos, archivadores extraibles, etc. que variaran el presupuesto inicial. De- purando disefio y costos, finalmente se legara al prototipo bésico ideal. A partir de éste, ya se pueden dibujar los dife- rentes planos de vistas, con sus acotacio- nes y corles, para entregar a la Oficina ‘Técnica del taller de produccisn. edige ae ret Lines visible pe Meeneral eo rohatevencla sctue— eau S00 oo] en obo ine) 04 tc teonerat Sinan 2328 ‘Todo este proceso se puede realizar en el ordenador, apoyado en alguno de los muchos programas de CAD. LAS BASES DE FUNCIONAMIENTO ‘Todos los sistemas informéticos funcio- nan. utilizando determinados programas (Software) y ciertos instrumentos estruc- turales (hardware), Las unidades perifé- icas del hardware se dividen en: uni- dades de input 0 entrada de informacion, unidades de memoria 0 almacenamiento y recuperacién de datos, Unidad Central © CPU (elaboracién) y unidades de output o salida. 1. Periféricos de Entrada de Datos (uni- dades de input) a) En primer lugar se encuentra el ter- minal alfanumérico o simplemente tecla- do, similar al de una maquina de escribir y por el que se introducen datos y 6rde- nes al ordenador —escribir textos, mo- ificar lineas, mover el cursor—. Es el elemento mas simple dentro de las uni- dades de input, pero no por eso requiere ‘menos atencién, pues un error de teclea- do puede estropear todo un trabajo ela- borado en el ordenador. ‘b) Los digitalizadores semiautométicos transforman la informacién analégica en digital, es decir, en el lenguaje del or- denador. Esta labor se puede hacer con el teclado, pero resulta mucho mas lenta que si se dibuja con un digitalizador. Un ipo de digitalizador es la tablilla gratica, 92que con la ayuda de un lapiz éptico (light- pen) envia al ordenador, bajo la forma de datos numéricos normales, las coordena- das X Y del punto indicado por el lépiz sobre la tablilla. De esta forma se intro- ducen los datos a una velocidad de dos a ‘cinco veces mas rapida que con un tecla- do, Para conseguir su objetivo de rapidez, precisién y funcionalidad, el CAD/CAM necesita una gran capacidad en su base de datos para almacenar, modificar 0 crear la informacion grafica recibida Parte de la tablilla puede dedicarse a cometidos de menti al tocar con el lépiz uno de los elementos del meni se envia una orden especifica al ordenador, pero ‘esto no es muy usual en disefio grafico, ya que su resolucién gréfica y su superficie de visualizacién son menores que los sis- temas sin mem, con muchas més posibi- lidades y precision. ¢) Digitalizadores automaticos. Su mi- sién es la de transformar, de manera au: tomética, las imégenes anal6gicas comple- jas en impulsos digitales (lenguaje bina- rio), Para las imégenes en movimiento se uiilizan diferentes sistemas auxiliares de video, y pata las figuras estéticas se tra- baja con escdneres épticos. La calidad de imagen dependerd de su resolucién es- pacial, esto es, del resultado de la com- binacién del niimero de lineas de explo- racién con el niimero de muestras que se toman por linea. ) Otros periférioos de entrada. Men- cionamos la utilizacién del lapiz. optic com la tableta gréfica, pero existe otra for- ma de uso del light-pen y del mouse sys- tem (rat6n). Ambos tienen la misma funcionalidad: localizar y desplazar el ‘cursor por la pantalla, 0 localizar opciones de un ment, La diferencia entre uno y otto es que en este caso el lapiz éptico se utiliza directamente sobre la pantalla, mientras que el rat6n necesita una super ficie plana para desplazarse pero tiene més precisi6n. 2, Unidades de almacenamiento, Todos Jos sistemas informéticos necesitan con- servar la gran cantidad de datos cque pro- cesan, aunque se desconecte el ordena- dor, Las unidades més conocidas son los discos o floppies, los discos duros o dis- cos winchester, y los CD Rom. La extrema complejidad del método CAD/CAM exi- ge un disco duro de al menos 20 Mbytes, equivalente al almacenaje de cuarenta planos normales en tamafio DIN-AO. Aun- que més lento que otras tnidades, el dis- co duro tiene una notable capacidad de almacenamiento. 3, La Unidad Central. La CPU—Central Process Unit— es el auténtico cerebro del ordenador, encargado de relacionar todas las partes que conforman el siste- ‘ma: unidades de entrada, almacenamien- to de datos y periféricos de salida. En ella se desarrolian todas las operaciones del ordenador y se manipula la informacién, Se relaciona con los periféricos a través de conectores llamados interfases. En la CPU hay una memoria de lectura —ROM— y una memoria interna para leer y escribir —RAM— en la que se al- macenan temporalmente los datos mien- tras se procesa toda la informacién que la CPU recibe normalmente. 4, Periféricos de Salida (output) a) La pantalla para el CAD/CAM debe ser de resolucién muy superior a Jos mo- nitores tradicionales de un ordenador personal. Sus dimensiones también de- Disefio grafico asistido por ordenador Vista frontal y perspectiva de un programa de muebles de cocina en CAD, dibuiado con plotter. 93,Biblioteca Atrium de la Ebanisteria - 2 Vista frontal de dos cabezales de cama infantil, disefiados con el método CAD e impresos con plotter. Nétese que el color ‘amarilio es plano, y se logra el degradado de sombra con el ‘aumento de puntos en listas de negro y rojo. El degradado del foi se consgue de forma ben ser muy superiores, como minimo de 1024 x 1024 puntos, frente a los 512 x 12 de un monitor normal. Para reforzar la re- solucién de la pantalla es conveniente uti- lizar un procesador aréfico que agregard nuevos Tecursos, como la unién de dibu- jos en tres dimensiones, el relleno de for- mas poligonales y la rotacién de! dibujo, solucién esta muy ullizada para desonibir en pantalla todo el contomo de una pieza, ‘como puede ser, por ejemplo, un mueble. Para una mejor visualizacién, existen en el mercado terminales de ordenador con pantalla de plasma, cristal lquido, elec- trocrémicas, etc., de alta tecnologia. En cuanto al empleo de colores, puede formatearse toda la gama de colores Pan- tone mediante sus niimeros de referencia, y obtener asf una amplia variedad de po sibilidades cromaticas. »b) la impresora es el primer paso para la salida grafica de la imagen que se ve ena pantalla. Con ella se puede imprimir sobre papel cualquier gréfica sencilla en color o en blanco y negro, ademas de tex- tos, cuadros, esquemas, etc. Su efecto de acabado es impecable para entregar un trabajo con texto y gréficas incluidas, pero no es suficiente para el sistema CAD/CAM, que exige mayor tamaio y precision. ©) El plotter 0 trazadora de gréficos. Junio con las impresoras matriciales, son Jas unidades gréficas de salida por ex- celencia, Bésicamente, el plotter es un tecnigrafo automitico, formado por un plu- min sujeto a un brazo mecénico, que se desiizalibremente a lo largo de dos guias. Si estas guias estin detenidas, el plumin, subido o bajado, trazaré un punto, y si las dguias estén en movimiento, el plumin tra- zara una linea. De esta forma, el plotter puede trazar dibujos muy complejos, a la ‘vez que puede escribir textos con cual- quier caracter y en cualquier estilo. Esta disefiado para reproducir todo tipo de graficos y a cualquier medida, imprimir en distintas calidades y tamafios, sobre papel, acetalo, mylar, etc, y en tantos co- lores como plumines acepte el cabezal Cualquier modificacién posterior al dise- fio —por ejemplo, si el cliente cambia de- terminado detalle del proyecto— es procesada por la Unidad Central, visua- lizada en pantalla e impresa de inmediato por el plotter. d) Los registradores fotograficos susti- tuyen al plotter imprimiendo la imagen de la pantalla con procedimientos fotografi- cos. Esto permite obtener diapositivas copias fotograficas de la imagen en pan- talla, modificar fondos y dar color a imé- genes monocromaticas. Es muy itil para incluir en el documento del proyecto una serie sucesiva de perspectivas. LAS FUNCIONES MAS USUALES EN CAD Aunque existen diferentes programas de software para trabajar en CAD, hay una serie de operaciones comunes entre ellos, Las més utilizadas son: — Elarchivo, El CAD/CAM cuenta con diferentes bibliotecas con dibujos estén- dares de piezas ttiles, adaptadas a varias especialidades, con las que se evita di- bujar disefio de muebles y decoracién (mesas, sillas, camas), arquitectura (es- caleras, sanitarios), ingenieria (torillos), etcétera. — El borrador elimina la zona de! di- bujo que indica el cursor. — El espejo repite visiones simétricas del dibujo representado. — El giro consigue vistas en perspec- tiva y escorzos de la pieza rotando en el plano o en el espacio, como si se diera ‘vwueltas en tomo a ella. —Elrelleno cubre una zona de la ima- gen con la trama y el color elegidos. — El zoom amplia o reduce la imagen, para trabajar con mayor comodidad, Aplicando de forma adecuada todos estos avances informaticos, el dibujante, diseador 0 proyectista de nuestra era tiene en sus manos una tecnologia de so- porte que en ningun caso lo supliré, pero si le servir de excelente aunliar en el momento de realizar su trabajo. 4La funcién de este departamento en una industria o un taller de ebanisteria es fundamental para enlazar y coordinar el proyecto realizado por un dibujante, co- laborador 0 cliente externo, con su rea- lizacién seriada en el taller. Es lo que podrlamos denominar como el punto de unién entre la idea y su plasmacién. FORMAS DE RECIBIR UN TRABAJO Segtin el nivel de profesionalidad téc- nica del cliente que encarga el trabajo —diseftador, decorador, arquitecto o sim- ple interesado—, el encargo puede re- cibirse de formas muy diversas, desde una sencilla conversacién en la que el Cliente explica oralmente su proyecto marcando unas pautas, un simple boceto realizado a ojo en pocos trazos, una pers. pectiva coloreada, o catélogos de objetos similares, hasta una serie de planos muy detallados, en los que el proceso de pro- duccién se comprende a simple vista En cualquier caso, es responsabilidad del encargado de la oficina técnica tra- ducir el proyecto recibido al lenguaje o Jos términos mas adecuados a su produc: ci6n en el taller. Si el proyecto procede de un profesio- nal, debe incluir planos a una escala de- terminada, y una rotulacién bAsica para comprender el despiece de la obra, Ade- ms, es necesario disponer de planos a scala natural, que realizara directamente 1a oficina técnica si no proceden del pro- yecto de origen. La oficina técnica Diferentes detalles de Ja construccién técnica de Ja mesa 4 Estaciones, un disetio creado y producido por Jaume TresserraOtros detalles de la construccién técnica de Ja mesa 4 Estaciones. Luego, una vez aclarados los planos, €: necesario definir un orden de materiales numerar los pasos que hay que seguir, ¢ indicar la distribucién del trabajo dentrc del taller, desde los primeros cortes cus hay que realizar en la materia prim —madera, aglomerado, chapas, etc— hasta el acabado final, determinando ; priori los barnices, esmaltes, ceras 0 & material que se haya elegido para con seguir el efecto final proyectado inicial mente en el dibujo. Los dibujos que utiliza la oficina técni ca para desarrollar el trabajo dentro de taller deben tener todas las cotas nece sarias para la realizacion racional de | pieza en cuestion. Sin embarao, si este di bujo esta realizado a escala natural (1:1 el operario no necesita ver acotadas ab solulamente todas las medidas, porqu puede saber la medida real de la piez mirando directamente el dibujo. Tan s6l si no se encuentra toda la pieza en el d 96bujo, porque se indican extensiones in- terrumpidas o porque estan dibujadas a una escala menor, deberdn indicarse en el papel las correspondientes acotacio- nes reales mediante un subrayado CLASES DE DIBUJOS PARA EL TALLER Segiin la norma DIN 919 hi, la oficina técnica debe contar con los siguientes di- bujos antes de poner en marcha la reali- zacion del trabajo: 4) El dibujo en boceto o en perspectiva, que es necesario para la aprobacién del cliente y para mostrar gréficamente la imagen que tendré el producto acabado, como complemento del dibujo de vistas (proyeccién ortogonal). ‘b)El dibujo de taller, que es el que ne cesita la oficina técnica para ejecutar los trabajos corespondientes. Este dibujo puede representarse de cinco formas, se- giin las dimensiones del objeto: — Dibujo de fabricacién, representan do el dibujo total en escala 1:1, con los cortes sefialados en las mismas vistas, Para una mejor comprensién, en el plano debe inciuirse el dibujo de conjunto de vistas (planta, alzado y vista lateral) en es: cala reducida — Dibujo de fabricacién, con el dibujo total a escala reducida o ampliada, y con la disposicién de las vistas y los cortes ne- cesarios. — Dibujo parcial, representando una pieza en detalle en E = I:1. Puede ir acompaiiado del dibujo de conjunto, a es: cala reducida — Dibujo de corte parcial, con el di- bujo de conjunto de la pieza a escala na- tural, con los detalles de corte més importantes, y el dibujo de conjunto total a escala reducida. — Proyeccién de tablero, en la que se representan los cortes necesarios a es- cala 1:1. Se incluye, en ocasiones, un di- bujo en perspectiva o de conjunto, a escala reducida RAYADOS ¥ COLORES INDICATIVOS Segtin la norma DIN 919 hi, el dibujo de taller debe indicar al operario espe- cializado la direccién de las fibras de ma- dera mediante un rayado realizado a ‘mano alzada, — Las maderas macizas se indican en dos sentidos: un rayado a 45° representa Ja madera transversal, y un rayado en pa- ralelo, siguiendo la direccién de la fibra, indica la madera longitudinal — Las planchas de madera se rayan perpendicularmente a la direccién lon- gitudinal — Las planchas chapadas se rayan también perpendicularmente, y ademés llevan una linea longitudinal En la ma- dera transversal, una X indica la direccién de la fibra en su parte central, y una fle- cha, en la madera longitudinal — El color indica las tres direcciones posibles de los cortes: el rayado en rojo indica un corte horizontal; el rayado en azul sefiala un corte vertical a través del alzado; el rayado en siena indica un corte vertical en las secciones laterales, de for ma paralela al alzado. La oficina técnica En el taller se cibuja la proyeccién de tablero, es decir, Jas vistas a tamaifo natural sobre un aglomerado cualquiera, para trabajar tomando las medidas a scala 1:1, fo que permite mucha ‘mayor precisiSn én el trabajo.