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Shillingburg/Jacobi/Brackett Principios Basicos en las Preparaciones Dentarias para Restauraciones de Metal Colado y de Ceramica Con la colaboracion de: James C. Kessler Robert T. Probst Frank J. Wiebelt Jack E. Willoughby qubeheueter La Gran Biblioteca Medica Principios Basicos en las Preparaciones Dentarias para Restauraciones de Metal Colado y de Ceramica Herbert T. Shillingburg, Jr, D. D. S., F. A. C. D. David Ross Boyd Professor and Chairman Richard Jacobi, D. D. S. Associate Professor Susan E. Brackett, D. D. S. Assistant Professor Department of Fixed Prosthodontics University of Oklahoma College of Dentistry Oklahoma City, Oklahoma Visita ntp:/lagranbibliotecamedica.blogspotcom/ Clemtos de libros ati disposicionttt quintessence books Editorial Quintessence S.L. Barcelona, Berlin, Chicago, Londres, Paris, Tokyo, SAo Paulo, Moscu, Praga y Varsovia Visita hap:/tagranbibliotecamedica.blogspot.com/ Contenido Introduccién 9 Capitulo 1 Principios biomecdnicos de las preparaciones 13 Capitulo 2 Lineas de terminacién y el periodonto 45 Capitulo 3 Instrumentacion 6 Capitulo 4 Coronas de recubrimiento completo 83 Capitulo 5 Coronas posteriores tres-cuartos superiores 95 Capitulo 6 Coronas posteriores tres-cuartos inferiores 115 Capitulo 7 Coronas anteriores tres-cuartos 133 Capitulo 8 Coronas tres-cuartos modificadas para pins 183 Capitulo 9 Coronas siete-octavos 173 Capitulo 10 Media corona proximal 189 Capitulo 11 Inlays ( Incrustaciones) 205 Capitulo 12 Onlays MOD 237 Capitulo 13 Coronas anteriores de metal-cerémica 259 Capitulo 14 Coronas posteriores de metal-ceramica 279 Capitulo 15 Coronas de cerémica 295 Capitulo 16 Modificacién de las preparaciones en dientes dafacos 31 Capitulo 17 Modificacién de las preparaciones en situaciones especiales 369 Indice de autores 377 indice alfabético de materias 385 £261 ‘CE:Ly "oossy que JED "YiNog ‘T 'UUBP pUE jeWUEUe Jo ssaLN{aI4 “90819 “S°O uk BuNgEUMNS ‘L'H OP OPEOWIDON of 9% 6% 9% vy ge Bujusq OL eb HL eb 6b la 60. 6h 0% Jeyews3 apidsng epidsng soy spidsng apidsno Jejow seWlldd sz 9% 8% Sz ov 6s eunueq OL vb Sh eh 6 6b 90 BL git 4eyJeUs3 epidsng epidsng escy epidsng epidsng 4BjOW JEWId 1d Wwe dd IN ez ol zz 0% ve ove et eunueg WE ek UL wy. 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Por ejemplo, a veces hay que sacrificar tejido dental sano para con- seguir una forma mas retenliva, para crear espacio de forma que consigamos el gro- sor de material dé restauracion necesario para que la estructura aguante y dure, 0 por un frente estético, y para permitir a la restauracion el asentarse en margenes que jengan una terminacion adecuada. Preservacion del tejido dental Una excesiva remocion de tejide dental puede tener muchos efectos dafinos. Si el diente est conificada 0 acortado en de- masia, esto representara un sacrificio in- necesario de retencian y de resistencia. Hipersensibilidad térmica, inflamacion pul par y necrosis pueden ser resultado de acercamos demasiado a la pulpa. Como guia de cuZinto tejido dental puede ser ell- minado de una forma segura 0 en qué pra- fundidad podemos extender la preparacion, los promedios de grosor del esmalte y de la dentina para dientes permanentes superio- res aparecen en la tabla 1-1. Las correspon- dientes a los dientes inferiores se muestran en la tabla 1-2. Una de las violaciones mas comunes de este principio se ve en el uso indiscrimina: do de coronas totalmente recubiertas por ceramica, en situaciones donde podrian usarse recubrimientos estéticos con una corona parcial metalica. Es cierto que las festauraciones de recubrimiento total esta- ban reconocidas por los clinicos desde hace tiempo por ofrecer superior retencian y re: sistencia.’ Esto ha sido rebatido en los anos recientes por diversas estudios ** Quizas el carnbio de! énfasis en las coronas parcia- les por el énfasis en las totales esta praba- blemente mas relacionado con la facilidad y comodidad asociadas con su diseno.” La decisién de usar recubrimientos tolales debe aleanzarse tnicamente despues de considerar la utilizacin de una corona par cial y haberla rechazado por ofrecer una in- adecuada retencion o estética.*"" j La preservacidn de tejido dental supone mas que evitar simplemente una destruc- eién excesiva. Requiere también disenar la restauracion de forma que refuerce y prote- ja el esmaite y la dentina remanentes, in- clugo cuando esto significa sacrificar una pequefia cantidad adicional de tejide den- tal en la cara oclusal para proteger las cis- pides subyarentes. 13 Principios biomecanicos de las preparaciones Retencion y resistencia Si una restauracién no permanece firme- mente unida al diente, no podré cumplir sus requerimientos funcionales, biolégicos y estéticos. Su capacidad de retencién y re- sistencia ha de ser lo bastante grande para contrarrestar las fuerzas dislocantes que se produzcan durante la funcién. Observando al grado de abrasién de los dientes, la fir meza de los dientes antagonistas, el grosor del hueso de soporte y la masa de los mus culos masticatorios, se puede hacer una estimacién de las fuerzas oclusales impe- rantes en un determinado paciente. Un re- tenedor de una prétesis, contrariamente a las creencias de los alumnos, requiere mas retenci6n y resistencia que una restauracion unitaria de un diente. La forma geométrica de la preparacién es quizas el mas importante de los factores que se halla bajo el control del operador que de- terminaré si una restauracion permanecera ono cementada sobre su preparacion. Es la forma geométrica la que determinard la orien- tacién de las interfases diente - restauracion en relacion con la direccién de las fuerzas que actien. Esto determina a su vez cuando en una zona dada el cemento estard sujeto a tensi6n, cizallamiento 0 compresion. Todos los cemmentos dentales muestran su mayor resistencia bajo compresién, Son mas débiles bajo tension, con un valor para el cizallamiento situado entre ambas. Los cementos de fosfato de cine, por ejemplo, tienen una fuerza de compresion, cizalla- miento y tensién, que se han medido en 14.000 psi, 7.900 psi y 1.300 psi respectiva- mente.'® Cuando una parte de la restaura- cién es sometida a una fuerza de arranca- miento del diente, la separacion se previene Gnicamente por la relativamente débil resis- tencia a la tensiéndel cement y por las pro- piedades adhesivas del mismo (Fig. 1-1, A). Los cementos dentales se agarran princi- palmente a través del entrelazamiento me- cAnico de las proyecciones del cemento 16 dentro de las pequefias irregularidades de las superficies que van a juntarse. El cemento de fosfato de cine no presenta ninguna ad- hesién especitica, de manera que incluso su modesta resistencia a la tensién no se utiliza plenamente antes de que se separe de una de las paredes adheridas. Los ce- mentos de policarboxilato y los de ionéme- ro de vidrio entablan alguna adhesién ver- dadera bajo condiciones adecuadas, pero sus resistenciasa la tensién son ain muy débiles en comparacién con sus respecti- vas resistencias a la compresién. La nueva técnica de unir metal grabado al esmalte también grabado con resina puede conse- Quir resistencias a la tensién de 2.270 psit® 2.500 psi"* bajo condiciones optimas, pero estos valores son ain demasiado bajos para permitiros ignorar las formas geomé- tricas de retencién y resistencia. Si la fuerza aplicada es paralela a la peli- cula de cemento (Fig. 1-1, B), el movimien- to en las interfases cemento-diente y ce- mento-metal est impedido de una forma més efectiva por las minUsculas proyeccio- nes del cemento en las irregularidades de las superficies que cuando la fuerza es de naturaleza tensional. El movimiento en ef propio interior de la pelicula de cemento es resistido por su relativamente mayor resis- tencia al cizallamiento. Una fuerza dirigida en Angulo hacia la restauracién tiene un componente paralelo junto con un compo- nente perpendicular a las dos superficies unidas (Fig. 1-1,C). De este mado el cemen- to esta sujeto a una combinacién de fuer- zas de cizallamiento y de compresi6n, y el movimiento es resistido mas eficazmente que si las fuerzas fuesen puramente de ten- sin o de cizallamiento. Una fuerza compre- siva perpendicular a la pelicula de cemento no produce ningtin movimiento de la restau- racion con relacién al diente a no ser que sea \o suficientemente grande para romper el ce- mento 0 deformar la estructura (Fig. 1-1, D) Estas fuerzas raramente se encuentran du- rante la funcién. Principios biomecdnicos de las preparaciones Fig. 1-1 La direccidn de las fuerzas que actdan sobre un segmento de una restauracién determina el tipo de estrés al que est sujeta la pelcuia de cemento. Una fuerza resuitante dirigida hacia afuera del diente produce una tensién (@), mientras que una fuerza paralela a lainterfase produce cizallamiento (B). Una fuerza dirigida contra el dente en Angulo produciré una combinacién de cizallamiento y compresién (C), Cuando la fuerza es perpendicular al diente, se produce compresién (D). Retencién y resistencia pueden llevarse al maximo dando a la preparacién una forma tal que permita que el maximo posible de Su superficie experimente compresion y ci- zallamiento cuando la restauracién esté sometida a una fuerza dislocante. En la practica, retencién y resistencia es- tn intimamente relacionadas, y a menudo no son facilmente distinguibles. Retencién es la capacidad de la preparacion para im- pedir la remocién de la restauraci6n a lo lar- go de la trayectoria de insercién. Bajo esta condicién la unién de cemento esta sujeta a tensién y cizallamiento. Resistencia, por otra parte, es la capacidad de la prepara- cién de impedir ¢l dislocamiento de la res- tauracién bajo fuerzas de una direccién apical, oblicua u horizontal *. Cuando exis- te una resistencia efectiva, la mayor parte de la pelicula de cemento estara bajo com- presion, si bien algunas partes estaran su- jetas a tensién y cizallamiento. Retencion Una restauracién puede experimentar fuer- zas de desinsercion a lo largo de la trayec- toria de insercion durante la masticaci6n de alimentos pegajosos. $i la restauracién es un retenedor de un puente, una fuerza diri- gida apicalmente en cualquier punto de la prétesis puede producir ocasionalmente una fuerza tensional directa por un efecto de palanca. Existen cuatro factores bajo con- 7 Principios biomecanicos de las preparaciones 100 80 60 40 RETENCION (gt/m 20 5 10 15 20 GRADO DE CONICIDAD 25 30 35 40 45 SO Fig. 1-2 A medida que el grado de conicidad de una preparacién aumenta, decrece su capacidad de retener la restauracién (segtin Jorgensen") trol del operador durante la preparacién del diente que influyen en la retenci6n: (1) gra- do de conicidad,"* (2) superticie total del area de la pelicula de cemento, (3) area de ce- mento bajo cizallamiento, y (4) rugosidad de la superficie del diente."” Conicidad y retencién La capacidad de unién de un cemento para resistir una fuerza depende en gran medida de la direccién de la fuerza con re- lacién a las superficies cementadas. A par- tir de esto podemos esperar que cuanto més paralelas sean las paredes opuestas de la preparacién, mayor sera la retenci6n. Esto fue verificado experimentalmente por 18 Jorgensen,"* quien hallé que la retencién decrecia cuando la conicidad incrementa- ba (Fig. 1-2). Tadricamente, la preparacion més retentiva ser una con las paredes pa- ralelas. Sin embargo, para evitar socava- dos y para conseguir un asentamiento completo de la restauracion durante la ce- mentacidn, las paredes han de tener algu- na conicidad. Una que esté situada en un rango de 2 a 6,5 grados ha sido conside- rada como éptima.'®® Esto esta basado en conseguir una inclinacién de aproxima- damente 3 grados en cada superficie, ex- terna 0 interna, mediante los perfiles de los, instrumentos de tallado. El resultado sera una conicidad o un angulo de convergen- cia en todas partes de 6 grados (Fig. 1-3). Principios biomacdnices de las preparacionas Fig. 1-3 Para obtener una conicidad dptima de 6 gra- dos, o Angulo de convergencia, cada pared axial opues- tadebe tener una inclinacién de 3 grados en relacién a latrayectoria de insercion, Estudios de preparaciones actuales de co- ronas realizadas por estudiantes han mos- trado un promedio de conicidad de entre 13 y 29 grados.2*° Muriones de laboratorios comer- ciales tomados aleatoriamente por Eames y cols. mostraron una conicidad promedio to- tal de 20 grados *”. Kent y asociados hallaron que las conicidades de las preparaciones rea- lizadas por un operador experimentado esta- ban en promecio entre 8,6 y 26,6 grados, de- pendiendo de la localizacién en la boca y de laaccesibilidad visual. Se observo que los sur- cos y las cajas eran marcadamente menos cénicas. El promedio global en este estudio fue reseriado como de 14,7 gracos.®° Una conicidad 0 convergencia total de 16 grados se ha propuesto como clinicamente aceptable, ademas ofrece una retencién adecuada. La tendencia de los opera- dores de sobreconificar innecesariamente las preparaciones debe ser contrarrestada para producir preparaciones con un minimo de conicidad y un maximo de retencién para cada situaci6n dada Superticie del érea Obviamente cuanto mayor sea el drea de la pelicula de cemento unido a la preparacion y a los detalles internos del colado, mayor seré la retenci6n del colado. Por ello cuanto mayor sea la superficie del area de la pre- paraci6n, mayor seré la retenciénde su res- tauracion.'°* La superficie total del drea de la preparacién esta influida por el tama- fio del diente, la extensién de lo que cubra la restauracién y formas como surcos y cajas, que se situan en la preparacién. Area bajo cizallamiento Mas importante para la retencién que la su- perficie total del area del cemento es e! area del cemento que experimentara mas cizalla- miento que tensién de estiramiento cuando la restauracion esté sometida a fuerzas a lo largo de la trayectoria de insercién. Para dis- minuir el potencial de fracaso, es esencial minimizar las fuerzas de tension. Para utili- Zar la resistencia al cizallamiento del cemen- to, la preparacién debe tener paredes opues- tas, es decir, las dos superficies de la prepa- racion en planos separados deben ser casi paralelas entre si y con la trayectoria de re- mocidén. Las superficies opuestas pueden ser internas, como las paredes lingual y vesti- ular de la caja proximal de una preparacién para una incrustacidn (inlay) (Fig. 1-4), 0 ex- ternas como las paredes axiales de una pre- paracién para una corona de recubrimiento total (Fig. 1-5). También pueden ser una com- binacién entre paredes internas y externas opuestas. Con las paredes en esta configu- raci6n la restauracién no se puede mover en 19 Principios biomecanicos de las preparaciones 20 Fig. 1-4 Una incrustacién (A) depende de la retencion interna para mantenerse dentro de su preparacion. La retenci6n inte se consigue por la intima adaptacion de la restauracién contra dos 0 mas paredes internas copuestas ligeramente divergentes (fechas, B). Fig. 4-5 Una corona (A) depende principalmente de la retencién externa para resistir la remocion. Laretencién externa se obtiene por la aproximacién de la restaura~ cién a las paredes axiales externas y opuestas de la preparacién (fechas, B) Fig. 1-6 La retencién se consigue limitando las posi- bies trayectorias de remoci6n o trayectorias de inser cidn. El tronce de cono excesivamente conificado tiene un ntimeroinfinito Ge trayectorias a través de las cuales la.corona puede ser quitada (A). La adicién de surcos paralelizacos (B) limita la trayectoria de remocién auna sola direcci6n, reduciendo asi a posiblidad de desaiojo. Fig. 1-7 Una preparacién para una corona de metal cerdmica tiene una trayectoria de insercion limitada y Una excelente retencién (A). Sin embargo, si una de las cuatro paredes axiales no existe 0 Se queda sin cubrir (6), las trayectorias de remocién potenciales se incre- ‘mentan grandemente y se compromete la retencion. Principios biomecanicos de las preparaciones Fig. 1-8 Cuando se deja sin curr una pared axial se consigue la retencién substituyendo la pared que falta por surcos (A), cajas (B), 0 pozos para pins (C). ninguna direccién sin que se sobrepase la fuerza resistencia al cizallamiento del cemen- to que contactalas paredes opuestas. Para obtener la mayor area de cemento bajo cizallamiento, la direccién en Ja cual la restauracién pueda ser desinsertada ha de ser limitada esencialmente a una trayecto- ria.2° El maximo posible de la superficie de la preparacidn debe ser realizada casi paralela a esta linea de remocién. Unapreparacion severamente conificada tiene muchas trayec- torias por las que una fuerza de tensién pue- da hacer saltar la corona (Fig. 1-6, A); una restauracion sobre este tipo de preparacin encontrara muchas fuerzas como éstas du- rante la funci6n. Si se afiaden elementos a la preparacién de tal manera que solo una fuerza en una direccién pueda mover la res- tauracién sin comprimir la pelicula de cemen- to contra una o mas superficies, la retencién estar incrementada (Fig. 1-6, B). Estos ele- mentos aumentan la retencion incluso con- tra fuerzas a lo largo de la trayectoria de re- mocién, no sdlo por incrementar la superti- cie total de la pelicula de cemento, sino por- que la mayoria del 4rea anadida esta sujeta a cizallamiento puro sin ningun componen- te de tensién, Una preparacién para una corona de recu- brimiento total tiene una excelente retencion porque las paredes mesial, distal, lingual y vestibular limitan las posibles trayectorias de ingercién a un estrecho pasillo (Fig. 1-7, A) Sin embargo, si la cara vestibular no se cu- bre, la corona colocada sobre dicha pre- paracién puede moverse hacia lingual, in- cisal 0 hacia cualquier direccidn entre me- dio (Fig. 1-7, 8). Para crear una forma mas retentiva, la pared axial no tallada puede ser substituida por surcos, cajas 0 pozos para pins (Fig. 1-8).° Estos elementos son también muy utiles para aumentar la re- tencién en dientes severamente dafados. Para que un surco sea un substituto efeo- tivo de una pared vestibular sin cubrir, la pared lingual del surco debe ser marcada y perpendicular a la superficie axial adjunta (Fig. 1-9, A). De otra forma una fuerza des- plazante en sentido lingual podria causar que los puntales de metal situados en la corona se desplacen por los planos incli- nados de las paredes linguales de los sur- cos, expandiendo las paredes axiales y abriendo los margenes (Fig. 1-9, B) La altura de la preparacion es un factor importante en la retenci6n: una preparacion larga tiene mayor retencién que una prepa- raci6n corta.*"*.*” Esto es debido, en parte, asu mayor area de superficie (Fig. 1-10), y al hecho que la mayor parte del area adi- cional esta bajo cizallamiento mas que bajo tension. at Principios biomecanicos de las preparaciones A la restauracién (B), Fig. 1-9 Una fuerza que acta en una direcoion lingual en una corona tres-cuartos es resistida etectivamente sila pared lingual de los surcos es perpendicular a la trayectoria de desplazamiento (A). Sin embargo, las pareces de un ssurco en forma de *V” actuaran como planos inclinados que eventuairmente causaran la apertura de las paredes de A B A B ig. 1-10 Permaneciendo constantes todos los otros factores, a mayor érea de la superficie de la pelicula de ‘cemento, mayor retencién. Por esto, una restauracion con una preparacién larga (A) puede resistir una fuerza que removeria una restauracién con una preparacién Corta del mismo diémetro (B). Doblando la altura dela preparacion se dobla aproximadamente al area de sus Paredes aviales. 22 Fig. 1-11 De dos preparaciones de igual altura y ooni- cidad, la mas ancha (A) tendra mayor retencién que la estrecha (8). Doblando el diémetro de la preparacién se doblael drea de las paredes axiales bajo cizallamiento, y se cuactriplica el drea de la superticie oolusal, donde el cemento esta bajo tensién Principios biomecdnicos de las preparaciones Debido a su mayor area de superficie, una preparacién con un diémetro mas grande (y mas circunferencia) tendrA mayor reten- cién que la que tenga una preparacién es- trecha de la misma altura (Fig. 1-11).2: Rugosidad Superficial Debido a que la adhesién de un cemento dental depende primariamente de las proyec- ciones del cemento en las irreqularidades y oquedades de las superficies que deben ser unidas, la superficie dental preparada no debe ser altamente pulida. Oilo y Jorgensen encontraron que la retenci6n de colados ce- mentados con cemento de fosfato de zinc sobre troqueles de prueba con una conicl- dad de 10 grados era el doble en preparacio- nes con unas rayas de 40 um que en las que presentaban unas rayas de 10 pm," si bien Smith no hallé diferencias significativas en colados cementados en preparaciones con una conicidad de 14 grados cuya rugosidad variaba por un factor de 24 desde mas puli- do a mds rugoso. Resistencia La resistencia previene la dislocacién de la restauracién bajo fuerzas dirigidas apical, oblicua u horizontalmente. Si la pelicula de cemento se interrumpe por un deslizamien- to 0 una inclinacién de la restauracién so- bre la preparacién en una minima fraccién de milimetro, la restauracién esta condena- da por la penetraci6n de fluidos, disolucién del cemento y por caries recurrente. La re- sistencia al deslizamiento y a la inclinacién debe ser disefiada en la preparacion crean- do paredes que bloqueen el movimiento pre- visto. Cuanto mas cerca se hallen a la perpendicular a la fuerza, mayor ser la re- sistencia otorgada por las superficies de soporte, porque el cemento sera comprimi- do,“ y es menos probable que los fallos ‘cocurran bajo compresién que bajo cizalla- miento.*" Fuerzas de palanca y resistencia Las mayores fuerzas que actlian en la fun- cién tienen direccion apical y pueden produ- cir tensi6n y cizallamiento sobre {a pelicula de cemento Unicamente a través de apalan- camientos. Las fuerzas de palanca, proba- blemente el factor predominante en el des- prendimiento de las restauraciones cemen- tadas, tienen lugar cuando la linea de ac- cidn de la fuerza pasa por fuera de la estruc- tura dental de soporte, o cuando la estructu- fa se flexiona. Por temor de la simplicidad, cualquier estructura se considerara rigida en las situaciones que siguen a continuacién. Sila fuerza pasa por dentro del margen de la corona, no habré inclinacién de la restau- racién (Fig. 1-12, A). El margen en todas par- tes de la restauraci6n esta soportado por la preparacién. El torque producido tiende me- ramente a asentar la corona mas fuertemen- te. Si la tabla oclusal de la restauracién es ancha, incluso una fuerza vertical puede pa- sar por fuera de un margen con soporte y producir un torque destructivo (Fig. 1-12, B} Esto puede ocurrir también en coronas so- bre dientes versionados y en retenedores de puentes en extension. Una fuerza aplicada en Angulo oblicuo sobre una corona cementada también pue- de producir una linea de accién que pasarA por fuera de la estructuradental de soporte (Fig. 1-13). El punto del margen situado lo més préximo a la linea de accidn es el pun- to de fulcro 0 centro de rotacién. La magni- tud del torque producido es igual a la fuer- za aplicada multiplicada por su brazo de palanca, que es la distancia mas préxima entre la linea de accién y el fulcro. En equi- librio, este torque esta compensado por la suma de todas las resistencias a la tensidn, cizallamiento y compresién generadas en la pelicula de cemento. Cuanto més lejos del fulcro se situen estas fuerzas de resis- tencia, mayor serd su ventaja mecénica. Si se traza una linea perpendicular des- de el centro de rotacién a la pelicula de 23 Principios biomecdnicos de las preparaciones 24 Fig. 1-12 Cuando [a linea de accién de una fuerza ~aplicada pasa por dentro de los margenes de la restau- racién, no se producen fuerzas secundarias de eleva- cidn (A). Cuando la linea de accion pasa por fuera de los margenes de la restauracién, se produce un torque que tenderé a ladear 0 rotar la corona alrededor de un puntof Gel margen (8). Fig. 1-13. En P, al arco de rotacin es tanger superticie de la preparacién, y a pelicula de esta sometida Unicamente a cizallamiento. componente de compresion en P,y en todos lose por oclusal de P,, que sera mayor cuanto mas ai Jocalice el punto. En P, y en todos los pun apicalmente al punto de tangente, los esiuerzos te ‘un componente de tension. Mecanicamente a = cia esta proporcionada solamente por puntos 2c: del punto tangente. Principios biomecénicos de las preparaciones Fig. 1-14 Si se unen todos los puntos tangentes de todos los arcos de rotacin alrededor de un eje dado, se forma la nea tangente. El érea por encima de la linea tangente (roja) es el drea de resistencia, que previene el ladeamiento de la restauracion alrededor del eje (Seguin Hegdhal y Siiness®). Para que una preparacion tenga una resistencia efectiva, la linea tangente se debe ex- tender como minimo por debajo de media preparacion. cemenio en la pared opuesta de la prepa- raci6n, el punto en que esta linea intercep- tala pelicula de cemento puede ser referi- do como punto tangente. En este punto, el arco de rotacién alrededor del fulcro es tan- dente a la superficie de la preparacion, y la pelicula de cemento esta sometida ex- clusivamente a cizallamiento. Todos los puntos situados oclusalmente al punto tan- gente estan sometidos oclusalmente a ci- zallamiento y compresion. El componente de compresion sera mayor cuanto més ale- jado esté el punto por encima del punto tangente. Un punto cercano a la termina- cién oclusal de la preparacién contribuir més a la resistencia que si estuviese cer- cano al punto tangente, no s6lo por la ven- taja mecanica de tener un brazo de palan- ca mas largo, sino también porque la fuer za se dirige con un angulo mas empinado contra la superficie de la preparacion. Si se traza una linea uniendo los puntos tangentes de todos los arcos alrededor de un eje de rotacién, la pelicula de cemento a lo largo de esta linea estaré sometida a ci- zallamiento puro por cualquier fuerza apli- cada perpendicularmente al eje de rotacion (Fig. 1-14). El drea delimitada por esta linea tangente ha sido referida como “area de resistencia” por Hegdahl y Silness.? Dentro de esta area, el material de unién esta suje- to a varios grados de compresién tanto como de cizallamiento, mientras que cual- quier otro punto de la superticie de la pre- paracién experimentara algtin grado de ten- sién y contribuird poco a la resistencia de la preparacion. Altura de la preparacién y resistencia La altura de la preparacién tiene una in- fluencia importante en su resistencia. Acor- tar una preparacién produciré una mayor disminucién proporcional del area de resis- tencia (Fig. 1-15). La capacidad de una res- tauracion para resistir una inclinacién no solo depende de la preparacién, sino tam- bién de la magnitud del torque. Si dos coro- nas de desigual altura sobre dos prepara- ciones de igual altura estan sometidas a fuerzas idénticas, la corona mas larga tiene més posibilidades de fallar porque la fuerza actda sobre ella a través de un brazo de palanca més largo (Figs. 1-16 y 1-17) Cuando debe realizarse una corona rela- tivamente alta sobre una preparacion cor ta, deberd orearse una forma de resistencia adicional, usualmente en la forma de un murfién retenido por pins, antes de realizar la restauracion colada. Las técnicas para realizar esto estdn discutidas con mayor detalle en el capitulo 16 25 Prinolpios biomecanicos de las preparaciones: 4 26 Fig. 1-15 Disminuit la altura de una preparacion céni- ca causa una disminucién desproporcionada del érea de resistencia. Una corona con unas paredes axiales relativamente altas puede resistir una fuerza dislocante importante (A). Si bien la preparacion B todavia conserve mas de la mitad de la altura de la preparaciOn A, tiene ‘menos que la mitad de drea de resistencia. Esta corona fracasara bajo Tuerzas que seran tacilmente resistidas por la preparacién més larga (B) Fig. 1-16 Una restauracién corta sobre una prepara- ci6n corta tiene menor posibilidad de fracaso porladea- miento que una restauracion larga en la misma prepara- cién, La resistencia de esta preparacién es adecuada para prevenirélladeamiento de la corona bajola fuerza aplicada (A). Sibien la preparacién y a fuerza aplicada en (6) es idéntica que las aplicadas en (A), la corona fracasard por la mayor altura de la restauractén, 1-17 La longilud del brazo de palanca primario es la distancia mas corta entre la linea de acoién de la fuerza al margen mas cercano. En la corona corta la fuerza de elevaci6n es pequefia porque el brazo de ppalanea primario es corto (4). En una corona alta (B), la misma fuerza produce un mayor torque porque su linea de accién pasa més lejos del punto de ratacién, Principios biomecdnicos de las preparaciones. Fig. 1-18 Debido a! pequefio diémetro, la linea tangente de esta preparacion estrecha cae baja en la pared puesta al eje de rotacién, dando lugar a un area de resistencia grande (A). La preparacién (B) es més ancha que la preparacién (4), pero sualturay canicidad son las mismas. Debido al mayor radio del arco de rotacién, al érea de resistencia es menor que la de ia preparacién estrecha. Resistencia y anchura dental Como hemos explicado anteriormente, una preparacién ancha tiene mayor retencién que una preparacion mas estrecha a igualdad de altura. Bajo algunas circunstancias una corona sobre un diente estrecho puede tener mayor resistencia a la inclinacién que uno sobre un diente ancho. Esto ocurre porque ‘a corona sobre el diente mas estrecho tiene un radio de rotaci6n mas corto resultando én una linea tangente mas baja y una ma- yor érea de resistencia (Fig. 1-18). Esta ven- ja esta contrarrestada, en parte, por el menor brazo de palanca del diente estrecho y por su disminuida area de superficie axial. La resistencia de una preparacién en un diente ancho y corto puede ser muy aumen- tada con la adicién de surcos (Fig. 1-19). El radio de rotacién mas corto entre el fulcro y el surco, causa que el arco de rotacién sea tangente a la superficie de resistencia de la pared del surco en un punto mas bajo que el que proyecta el radio més largo en la pared axial mas distante. Un area mayor de la pared del surco esta en un angulo re- lativamente escarpado con relacién al arco de rotacién, aportando una resistencia au- mentada. a Principios biomecnicos de las preparaciones Fig. 1-19 La débil resistencia de la preparacién corta y ancha (A) puede acrecentarse con la adicién de surcos verticales (B). Desde la cara (C), se puede ver como el radio r, esta bloqueado efectivamente por el area de resistencia de las paredes del surco, mientras el arco det radio r, encuentra poca o ninguna resistencia en la pared aval lejana Fig. 1-20 E! area de resistencia disminuye cuando aumenta la conicidad de la preparacion. En un cillindro sin conicidad, el rea de resistencia cubriré la mitad de las paredes axiales (A). En una preparacién dental de conicidad ideal, el rea de resistencia cubrird algo menos que la mitad de las paredes axiales (B). Una preparacién sobreconi- ficada (20 grados) tiene solamente una pequena area de resistencia cerca de la superficie oclusal (C). 28 Frincipios biomecénicos de las preparaciones Tabla 1-3 Dimensiones y maximos de conicidad de las preparaciones* Diametro de la preparacion (mm) Altura de la preparacion(mm) 3 4 5 6 7 8 § 10 M1 12 13 14 Grados 2 we 2 0 8 7 6 6 5 5 4 4 4 3 AG AR PBF BBS 4 3B 24 19 #6 4 #12 «1 «1 49 8 8 7 5 33t 31 24 20 7 15 13 12 1 10 9 g 6 2B 37 8G 1s 1210 7 24 32t 365 2B 24 a1 19 17 15 14 «13° «12 8 att 2g 3st 33 8961S 9 Tat a oF a 24 22 2 1 #17 «15 10 17 23 28 3st 35 Bt oF OSHS * Los célculos se basan en asumir una preparacién dental simétrica, con paredes axiales rectas yun area de maxima resistencia que abarque el 80% de la altura de la preparacién. + Es la conicidad maxima posible de la preparacién para la altura y didmetro dados. Conicidad y resistencia El Area de resistencia de una preparacién cilindrica incluira la mitad de su superficie axial (Fig. 1-20, A). Si aumenta el grado de conicidad, la linea tangente se aproxima a fa superficie oclusal y disminuye el area de resistencia (Fig. 1-20, B y C). Cuanto mas conificada la preparacién, menor es la re- sistencia. Un diente corto puede ser facil- mente sobreconificado hasta llegar a la si- tuacion de que no tenga ninguna forma de resistencia. Una preparacién larga y estrecha puede tener mayor conicidad que una corta y an- cha sin arriesgar la resistencia. A la inver- sa, las paredes de una preparaci6n corta y ancha han de ser hechas casi paralelas para conseguir una forma de resistencia adecua- da. La conicidad permitida en una prepara- On es directamente proporcional a la rela- ci6n altura/anchura. La conicidad que ofre- ceré un érea de resistencia efectiva, para una preparacion en la que la altura igual a la anchura, es el doble de la permitida en una preparacién en la que la altura sélo es la mitad de la anchura (Fig. 1-21). Las coni- cidades maximas permilidas para varias combinaciones de alturas y anchuras se muestran en la Tabla 1-3 Las formulas usadas en calcular las co- nicidades aceptadas (4ngulos de conver- gencia) y para determinar la altura del pun- to tangente y la altura de la preparaci6n son: T = are sin (2r/w) (wsin 7) /2y f= [wtan (90° - 7/2)] /2 = conicidad de la preparacién en grados Itura del punto tangente en mm anchuta de la preparacién en mm = altura de la preparacién en mm, 2 Principios biomecdnicos de las preparaciones Rotacién alrededor de un eje vertical Si bien los ejemplos anteriores estan atri- buidos exclusivamente a la inclinacién o rotaci6n de la restauracién alrededor de un eje horizontal, la rotacién alrededor de un eje vertical también es posible. Cuando una corona est4 sometida a una fuerza hori- zontal excéntrica, ocurren momentos de torque tanto alrededor de un eje vertical como de uno horizontal (Fig. 1-22). Una corona tres cuartos sin surcos tiene poca 30 |. 1-21 Lainclinacién de las paredes de una prepa- racion que todavia proporotona una resistencia efectiva depende de la relacién altura/anchura. Una preparacién ‘con una relacién altura/anchura de 1:1 (A) puede tener una inclinacion de 15 grados teniendo todavia una re- sistencia efectiva. Una preparacién con una relacién de 1:2 (B) pod tener una inclinacién individual de cada. pared no mayor de 7 grads sin comprometer seriamen- te laresistencia. La resistencia se considera arbitraria- mente efectiva sil area de resistencia se extiende como inimo por debajo de la ritad de la pared axial resistencia a un desplazamiento por rota- cidn (Fig. 1-23, A). La adicién de surcos coloca una superficie de resistencia en Angulo recto al arco de rotacién, bloqueén- dolo efectivamente (Fig. 1-23, B) Es posible que una corona de recubrimien- to total en una preparacién cilindrica rote lo suticiente para romper la unién del cemento antes de hallar cualquier resistencia ala com- presion (Fig. 1-24, A). Formas geométricas como surcos 0 “alas” (Fig. 1-24, B) aumen- tan la resistencia bloqueando la rotacién al- rededor de un eje vertical Principios biomecdnicas de las preparaciones Fig. 1-22 El componente horizontal de una fuerza, oclusal puede tener una influencia de rotacién en el plano horizontal Fig. 1-23 Una corona de recubrimiento parcial queno ‘enga surcos (4) tiene poca resistencia a larotacion alre- dor de un eje vertical. Cuando existen surcas, sus -des linguales proporcionan resistencia bloqueando 20 de rotacién (8). Fig. 1-24 La simetria axial de una corona de recubri- miento total puede permitir la rotacién alrededor de la preparacién (A). Puede ganarse resistencia creando pla- nos verticales (alas) que sean perpendiculares al arco de rotacién (8). 31 Principios biomecdnicos de las preparaciones Fig. 1-25 La trayectoria de insercidn ideal para una corona total o parcial de un diente posterior es paraisia aleje longitudinal del diente. ] 1 | 1 Fig. 1-26 Sise hace la trayectoria de insercién de una corona res-cuartos anterior paralela al eje longitudinal de diente resuitaré una exhibicion innecesaria de metal (4). La trayectoria de insercion para una preparacién anterior es parelela alos dos tercios incisales dela superficie vestioular (8), Esto no minimiza s6lo a exhicién de motal sno ave permite que los surcos sean mas largos ymés retentivos, Trayectoria de insercién. Antes de tallar cualquier tejido dental, debe decidirse la trayectoria de insercién, tenien- do en mente los principios expuestos previa- mente. Esto es especialmente importante cuando se tallan pilares para puentes, pues multiples trayectorias de insercién deben ser paralelas. La trayectoria debe seleccionarse de tal forma que permita a los mérgenes de los retenedores asentar sobre sus respecti- vas lineas de terminacién de la preparacion con la minima remocidn de tejido dental sano. Esta trayectoria no debe cruzar ni la pulpa, ni los dientes adyacentes. La trayectoria de insercidn de las coro- nas posteriores totales y parciales es ge- 32 neralmente paralela al eje longitudinal del diente (Fig. 1-25). No obstante, hacer para lela la trayectoria de insercién de una coro- na tres-cuartos anterior con el eje longitudi- nal del diente produciré una exhibicion an- tiestética de metal en la superficie vestibu- lar (Fig. 1-26, A), La estructura dental incisal remanente quedaré minada, haciéndola susceptible a las fracturas. En cambio, la trayectoria de insercién de una tres-cuartos anterior debe orientarse paralelamente alos dos tercios incisales de la superficie vesti- bular (Fig. 1-26, B), permitiendo que la res- tauracién no presente casi ningun metal vi- sible en la cara vestibular. Esta inclinacion también permite surcos mas largos con mejor retencién y resistencia Principios biomecdnicos de las preparaciones A ‘ ee? Fig, 1-27 La trayectoria de insercicn para una corona de recubrimiento total de un diente posterior normalmente alineado es paralela al eje longitudinal del diente (A). Un diente inclinaco debe manipularse de forma distinta (8). Si latrayectoria de insercién de un diente inclinado es paralela al eje mayor, aquellas partes del diente adyacente que se introducen dentro de la trayectoria de insercién impedirén e! asentamiento de la corona (C). La trayectoria de insercién para este tivo de dientes es perpendicular al plano oclusal (0). ttl Mee, Normaimente, para que una corona de recubrimiento total tenga una duracién estructural con contornos adecuados, su trayectoria de insercién sera paralela al eje longitudinal del diente (Fig. 1-27, A) No obstante, si el diente esta versionado (Fig. 1-27, B), la trayectoria de insercién paralela al eje longitudinal estara blo- queada por el contorno proximal del dien- te adyacente (Fig. 1-27, C). En este caso, la trayectoria de insercién se hace per- pendicular al plano oclusal (Fig. 1-27, D) 33 34 Fig. 1-28 Un diente ha migraco dentro Gel espacio creado por una lesién de ca- ries antigua (4). Una trayectoria de inser- cin vertical no permitira el asentamianto sin quitar excesivo volurien de talido dental dela superticie proximal del diente acya- ccente (8). El problema se pueda solven- tar de forma menos destructiva, inciinen- comesiaimants a trayectoria de insarcin y quitando poca cantidac de esmalte de los dos diantes adyacentes (C). Un co- lapso més severo puade requerirtun en- derezamiento ortocéncico para recupe- rar ol espacionecesario, Principios biomecdnicos de las preparaciones Fig. 1-29 Cuando se mira desde una distancia e on un solo ojo, se oueden ver todas las super ‘2s axiales de una preparacién con una conicidad 0 lo de convergancia ideal de 6 grados. La pérdida de contacto proximal por lar- go tiempo generalmente se acompafia con @ inclinacién del diente adyacente dentro del espacio (Fig. 1-28, A). Cuando esto ocu- re, una trayectoria de insercién, paralela al jangitudinal del diente, puede impedir el asentamiento de la corona, alin cuando su red distal haya sido recontorneacia exce- amente (Fig. 1-28, B). espacio entre los dientes adyacentes debe aumentarse tanto como el didémetro mesio-distal del diente preparado en la |i- nea de terminacidn gingival. Un compromi- aceptable puede alcanzarse al inclinar trayactoria de insercién de tal forma que se retoque igual cantidad de esmalte de da uno de los dientes adyacentes, per- endo a la corona asentarse sobre el dien- Fig. 1-30 Nunca debe emplearse la vision binocular para evaluat la correcta conicidad de una preparacion. Con los dos ojos abiertos, una preparacién que tiene socavacios puede parecer que tenga unos grados acep- tables. te preparado (Fig. 1-28, C). Sila pérdida de espacio es tan grande que se tenga que recortar mas del 50% del grosor del esmalte de los dientes adyacentes, o bien, si no exis- te espacio adecuado para la tronera gingi- val, el diente debe ser separado y endereza- do ortodéncicamente. Todas las conicidades negativas, 0 soca- vados, deben ser eliminados 0 impediran el asentamiento de la restauracion. Para eva- luar la conicidad de la preparacién, se debe mirar con un solo ojo desde la distancia de 30 cm o 12 pulgadas (Fig. 1-29). De esta forma, es posible ver simultaneamente to- das las paredes axiales de la preparacion con una adecuada conicidad. Un socava- do tan grande como 8 grados puede ser en- cubierto si se usan los dos ojos (Fig. 1-30) 35 Principios biomecénicos de las preparaciones Fig. 1-81 Cuando la visidn directa no 2s posible se utliza un espejo para eva- lusr la preparaci6n. Una vision sin obs- trucciones de toda la linea de termina cién escasamente por fuera de la cir- cunferencia de la superficie oclusal indi- cauna conicidad correcta. Fig. 1-32 Ei ajuste de las trayectorias de insercién de los pilares de un puente puede ovaluarse centrando laimagen de una de les preparaciones en el espejoy —4)] wegomovienda elespeio en su totalidad, sin inctinarto, hasta que eeté centrada la ‘segunda preparacian. Toda la linea de terminacién de la segunda preparacion debara ser visible. Sila angulacion del espejo debe ser maditicacia para poder vera nea de terminacién de le segunda preperacion, as trayectorias de insercién de las dos preparaciones no ajustan y dleberén realizarse correcciones. Cuando es dificil de analizar la prepara- cién con visidn directa, se usa un espejo de boca (Fig, 1-31). La totalidad de la linea de terminacion debe ser visible con un solo ojo, en una posicién fija sin ninguna obstruc- cidn de cualquier parte del diente tallado 0 de los dientes adyacentes. Para verificar el paralelismo de las trayectorias de insercién de los pilares de un puente, se centra en ef 36 espejo la imagen de una preparaci6n. En- tonces se mueve el espejo, usando con fir- meza los dedos, sin cambiar su angulacion hasta que la imagen de la sequnda prepa- racion esté también centrada (Fig. 1-32). Si la angulacién del espejo debe cambiarse para conseguir ver toda la linea de termina- cin, existe una discrepancia entre las tra- yeotorias de insercién de las preparaciones Princinios biomecanicos da las preparaciones: Fig. 1-83 Ei espacio interoclusal sobre la clispide mesial de un diente versionado puede ser suticiente para preparer una corona sin necesitar una reduccidn. Lina reduccién oclusal uniforms en estos casos producira un -spacio interoclusal excesivo y una pared axial mesial acortada innecesariamentalA). Sdlo debe tallarse al telido dental suticiente para conseguir e| espacio necesario pare la restauracién (B). Algunas de las caras oclusales {nales no necesitan ser talladas en sutotalidad, Duracién estructural de la restauraci6n colado debe ser lo suficientemente rigido ra.no flexionar y romper la pelicula de mento.® Debe tallarse suficiente tejido ntal para crear el espacio que permita un arosor adecuado del material de restaura- cidn que cumpla esto sin sobrepasar los contomos normales del diente, Existen tres eu aspectos de la preparacién que contribu- yen a la duraci6n de la restauracién: (1) re- duccién aclusal, (2) reduccién axial, y (3) provision de puntales de refuerzo. Reducci6én oclusal Debe tallarse suficiente tejido dental de la superficie oclusal de la preparacién de tal manera que cuando la restauracién se 37 Principios biomecénicos ce las preparaciones Fig. 1-34 Una reduocién oclusal correcta es paralela a la mayoria de pianos dal diente (A). Unareduccién plana en un solo plano dara come resultado un grasor de la restauracién insuliciente sobre los sures y las fosas (B). Una reduccién en un plano lo suficientemente profunda para que proporcione un grosor adecuado de metal en el Area del surca central ccasionard una pérdida innecesaria de dentina sobre las astas pulpares yun acortamiento exceslvo de las peredes axiaies con pérdida de retencion (C). construya sequin la oclusién ideal, tenga el grosor suficiente que prevenga su desgaste © su distorsiOn. El grosor oclusal variara se- giin el material de restauracién usado. Una corona de oro requiere aproximacamente un espacio de 1,5 mm en la cuspide funcional y de 1,0 mm sobre la clspide no funcional. Los metales mas duros requieren un espa- clo algo menor. Si el recubrimienta cerdmi- co se extiende a la cara oclusal, sera nece- sario un espacio adicional de 0,5 mm El total de la reduccian oclusal no es siem- pre el mismo que el espacio necesario. A menudo la parte de un diente versionado ya es cota con relacidn al plano aclusal ideal y requeriré menor reduccion que la que sé pre- cisa en un diente en oolusién ideal (Fig. 1-33). La reduccién oclusal debe reflejar los pla- nos inclinados geométricos subyacentes de la morfologia de la corona terminada™ y seguir lo mejor posible la mayoria de pla- nos de las cuspides antagonistas linguales. y vestibulares (Fig. 1-34, A). Se debe evitar crear planos muy inclinados con ctispides agudas que puedan causar aumento del estrés y dificultar el asentamiento del cola- 38 do, Para disminuir el estrés se deben redon- dear los éngulos y evitar surcos profundos en el centro de la cara oclusal,** haciendo una angulacién aplanada de los planos oclusales.* Cualquier equilibrado del diente antago- nista debe ser realizado antes de empezar el procedimiento restaurador, Las cuspides antagonistas que no existen, o bien, son cortas con relacién a su posicién ideal, de- ben ser reemplazadas en un encerado diag- néstico en el modelo, de tal forma que pue- da determinarse la cantidad de reduecién oolusal requerida Una superficie oclusal plana es indesea- ble.”’ Si la superficie oclusal se hace plana y la reduccién es conservadora, él metal en el area del surco de desarrollo ser de- masiado fino, con riesgo de perforacién (Fig. 1-34, 8). Un intento de evitar este pro- blema mediante el desgaste de la totali- dad de la tabla oclusal ocasionara una destrucci6on excesiva de la estructura den- tal, y las paredes axiales serén excesiva- mente cortas con un resultado de pérdida de retencion y resistencia (Fig. 1-34, C) Principios biomecénicos de las preparaciones Fig. 1-85 Un biselaco de la ctispide funcional en un plano paralelo 2 la cUspide antagonista permite una restauracién de grosor adecuadi sin un sacrifcia inadecuado de tajido dental (A), Sise omite e! bisel de la cuspide funcional, es probable que la restauracién sea delgada en éste rea soportaddora de estrés (B). Sie! grosor de la restauracién se ‘Consigue sobraconiticanco la pared axial, se comprometerd la retencién (C). Frecuentemente, en ausencia dal bise! de ciispide funcional, el tecnico sobredimensiona la corone (0). Esto puede dar como resultado una sobreoclusién de ja restauracién, que s6lo paca ser carregida mediante la reduccién oclusal del diente antagonista. Bisel de la cispide funcional Como parte de la reduccién oclusal, én la cuspide funcional de los dientes posterio- res se debe realizar un amplio bisel para conseguir una duracién estructural en el area critica. También se debe redondear la linea del angulo oclusal, que puede ser un area de altas concentraciones de estrés.’” E| dngulo de las cdspides no funcionales se redondea discretamente. El bisel de la cUspide funcional se coloca usualmente en la cUspide vestibular de los dientes inferiores y en la palatina de los su- periores, paralelo a la inclinacion de los pla- nos cuspideos del antagonista (Fig. 1-35, A) Un fallo en la colocacion del bisel funcio- nal puede causar areas delgadas y dé 39 Principios biomiecanicos de las preparaciones biles en la restauracion (Fig. 1-35, B). Con- seguir el espacio suficiente a expensas de Ja pared vestibular puede producir una pre- paracién excesivamente conificada con una retenci6n disminuida (Fig. 1-35, C). Com- pensar la falta de bisel mediante un sobre- contomo de la corona causaré un contacto oclusal prematuro (Fig. 1-35, D) En una relacién oclusal de mordida cru- zada, Jas obspides funcionales se invierten (Fig. 1-36), y el bisel de la cUspide funcional se sittia en la clispide vestibular de los dien- tes superiores y en la lingual de los inferio- res, Es muy importante explorar la oclusién antes de iniciar la preparacién del diente: Reduccién axial Un segundo prerequisito para fa duracién estructural es una reduccién axial adecua- da. Cuando la reduccién axial es suficiente, las paredes de la restauracién pueden tener un grosor satisfactorio sin sobrecontornos (Fig. 1-37, A). Sila reducci6on es inadecuada, una restauracién con contomos normales sera delgada y flexible (Fig, 1-87, B), y para el técni- co sera dificil de fabricar, revestir y colar, sin 40 Fig. 1-96 Cuando los dientes estén en mordida cruza- da, e! bisel de la cUspide funcional se coloca en las cuispides vestibulares de los dientes superiores y en las linguales de los Gentes infariowes deformacién. Por esto, el resultado més co- min de una reduccién axial inaclecuada es una corona sobrecontomeada (Fig, 1-87, C),*** que como demostrd Perel, producira inflamacién gingival.®* Puntales de refuerzo La duracion estructural en los margenes de una corona de recubrimiento total es re- lativamente facil de obtener debido a la alta resistencia a la tensién del metal. Las pare- des axiales circunferenciales se mantienen unidas a si mismas mas de lo que sus aros se mantienen unidos a un partil. Sin embar- go, cuando en una corona parcial se deja sin cubrir una o més superficies axiales, se pierde la ligadura circunferencial. Los mar- genes pueden distorsionarse durante la fa- bricacién, cementacidn y especialmente cuando estan sujelos a las fuerzas oclusa- les, a menos que no se le anadan elemer: tos que refuercen la estructura 5° El refuerzo se consigue en un onlay (sobreincrustacién)mesio-ocluso-distal (MOD) por el istmo que une las cajas prox: males (Fig. 1-38). En una corona tres-cuar- tos el refuerzo es una banda ce metal une Principias biomecdnicas de las preparaciones Fig. 1-37 Una reducci6n axial adecuada crea espacio para un volumen de metal con resistencia y can un contre normal del diente (4). Una reducoién axial inadecuada puede producir una corona con paredes delgadas y débilas (8), Es més probable que resulte una restauracian con contomas abultados promovedores de placa (C). | Fig. 1-38 Los colados de recubrimiento parcial se refuerzan mediante una barra da metal engrosado sobre. ‘a5 Zonas oclusales, Esta se une al metal que ooupan las 288 0 Surcos praximales para formar los puntales rigi- cos. Fig. 1-89 Los espacios para las nervaduras de refuer- 20 de metal través de la supericie oclusal de las coro nas tres-cuartos posteriores clésicas se crean tallando ‘acodamientos oclusales en las cuspides no funcionales de los dientes superiores, y escalones en las ciispides, ‘juncionales de los dientes inferiores, 4 Princigios biomecénicos de las preparaciones los surcos para conseguir un “efecto de su- jeci6n".® © Esta banda de refuerzo toma la forma de vastagos laterales en las prepara- ciones superiores y de un hombra oclusal en las inferiores (Fig. 1-39). El acodamiento 42 oclusal se usa en cUspides no funcionales porque conlievan menos metal. El hombro esta indicado en las cuspides tuncionales para proteger @ los mérgenes de la distor si6n de los impactos oclusales prdximos. Principios biomecanicos ce las preparaciones Bibliogratia 1, Knapp, K. W. A modern conception of proper bridge attachments for vital teeth. J. Am. Dent. Assoc 34:1027, 1927, 2, Lorey, R. E., and Myers, G. E, The retentive qual- ities of bridge retainers. J. Am. Dent. Assoc. 76:568, 1968. 8. Reisbiok, M. H. and Shillingburg. H. T. Effect of reparation geometry on retention and resistance of cast gold restorations. J. Calif Dent. Assoc 3:51, 1975. 4. Potts, R. G., Shilingburg, H. 7, and Duncanson, M. G, Retention and resistance of preparations for cast restorations, J, Prosthet. Dent. 43:203, 1980. 5. Ingraham, 8., Sochal, , and Hausing, F. J. 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Dent. 11:487, 1961 43 Capitulo 2 Lineas de terminacion y periodonto Hay tres requisitos para conseguir mérge- nes de restauraciones perfectos: (1) deben eneajar al maximo contra la linea de termi- nacién de la preparacién para minimizar la anchura del cemento expuesto; (2) han de tener fa fuerza suficiente para aguantar las fuerzas de la masticacian; y (3) siempre que sea posible, deben estar situados en zonas donde el dentista pueda acabarlos y exa- minarlos y el paciente pueda limpiarlos Una preparacién adecuadamente conifi- cada es esencial para unos mérgenes muy bien encajados. No pueden existir ni soca- vadas ni irrequiaridades en las parades axia- ‘8s que impidan un completo asentamienta ‘© que ocasionen un ensanchamiento de los margenes mientras se coloca la restauracion La rugosidad de la superficie del diente baja os margenes puede impedir una perfecta adaptacion,"® y por tanto, hay que propor cionar @ todos los biselados y biseles verti- cales 0 flancos*' una linea de terminacién muy lisa hecha con un instrumento lo sufi- cientemente fino para que pueda caber en la zona que se va a terminar. Los preferidos son ‘0s discos finos y las fresas de carburo? Historicamente, el biselado era usado como. un recurso para compensar la contraccién en ‘a solidificacién de las aleaciones usadas para fabricar restauraciones coladas.* Los margenes de metal deberan ser agu- dos en la seccién transversal mas que en el Angulo recto, para facilitar una mejor inser- cién 24? Para que esto pueda suceder, la preparacién de las Iineas de terminacién ha de tener unas formas que permitan bordes agudos en los margenes de restauracién Incluso en las mejores coronas vernos que faltan algunas micras para que encajen com- pletamente (Fig. 2-1). Si la superficie prepa- rada adyacente a una linea de terminacién es perpendicular a la trayectoria de insercién, tal come lo es el hombro, la hendidura margi- nal, d, sera tan grande como la distancia que impide que la corona encaje, D. Sin embargo, si [a superticie interna del margen de metal forma un angulo, m, de menos de 90 grados con la trayectoria de insercién, como si fuera un bisel o un chafian, d sera mas pequerio que D. La distancia mas corta desde la pieza colada hasta el tejido dental, d, puede ser establecida como una funcién de D y el seno del dngulo m o el coseno de! angulo , que es el Angulo entre la superficie del bisel y la trayectoria de insercion (180 — m). d=Dsenm,o d=Doosp. Si se reduce e éngulo m, su seno se vuelve més pequeno (Tabla 2-1), y lo mismo ocurre con d® Cuanto mas obtuso es el ngula del diente en la linea de terminacion horizontal, y por lo tanto més agudo es el margen de la restauracion, mas corta es la distancia entre el margen de la restauracion y el diente. Evi- dentemente el 2ngulo del margen debe ser bastante agudo antes de que la mencionada distancia disminuya grandemente (Fig. 2-2) Se pusde considerar éptimo un Angulo 45 Lineas de terminacién y periodonto Fig. 2-1 Un bise! permite una mayor aproximacion del margen de una corona al iene. La distancia, D, por la cual tuna corona no encela (4), se refieja en la apertura del margen, d, con un union intertumpida (B), Sin embargo, en presencia de un bisel, la distancia més corta del margen a la estructura del diente es menor que Dy es una funcién dal seno del angulo agudo dal margen, 7n, 0 del coseno del angulo obtuse de la linea de terminacion, o (C). Tabla 2-1 Senos y cosenos para varios 4ngulos Angulo (grados) Funcion 0 45 30 45 a} 75 2 Seno oO 0,259 0,500 0,707 0,866 0,966 1,000 Coseno 1,000 0,966 0,866 0,707 0,500 0,259 0 46 Lineas de terminacion y periodonto 10° Fig. 2-2 Cuanto mas pequaio es el angullo entre la superficie oreparaca del diente en la linea de terminaciGn y ia trayectoria de insercion, menor es ia apertura marginal para la misma cantidad de falta de asentamiento. La anchura de la apertura marginal para los angulos seleccionados se da como un porcentaje de la distancia por la cual la rastauracion no encaja, Para los angulos rayores de 50 grados la reduccion no es significativa. Los angulos menores d@25 grados puaden presentar un margen demasiado fino y debi de 30 a 45 grados.*"* Un angulo mucho mas agudo es demasiado débil. Un borde agudlo de algunas aleaciones se puede bruftir con- tra el diente para una posterior mejara del asantamiento marginal.'°' Mc Lean y Wilson rebaten la superioridad de los biseles en los casos en los que se emplea una corona cerémica. Afirman que el margen debe alcanzar un Angulo de en- re 10 a 20 grados antes de que pueda cum- plir su papel"? Mientras que el uso de bise- les puede mejorar la adaptacién del mar- gen metalic, aunque sea minimamente, las extensiones subgingivales profundas que se requieren para su uso conjunto con una corona de cerémica son inaceptables. Pas- coe dascubrié que los colados sobredimen- sionacios con biseles tenian discrepancias a7 Lingas de terminacién y periodonto Fig. 2-8 Los impactos que golpean el esmaite cercano a un bisel se pueden soportar sin lesién (zquerds). Sin embargo, donde no hay bisel, [0s prismes na pratagidos dal esmaite cerca ce la restauracion se pueden fractures més ‘acilmente (derecha). Fig. 2-4 Sin un bisel, la preparacion tendria un borde agudo ce esmalte sin soporte (A). Las fuerzas oclusales pueden deformar elfine recubrimiento de ore suficiantemente como para trecturar al iragil esmalte (6). Elmargen puede ser reforzaco colocandio un simple bisel de terminacién (C] 0, silzestética lo permite, un aontrabise! (0). Sa inclinacion de Ia superficie oclusal es reletivamente plana, e! angulo cavosupericial puede ser tan obtuse queno sea rneceserio un bisel como refuerzo (E) (Seguin Ingraham) 48 Lineas de terminacién y petiodanio marginales superiores que los colados con hombros."* Por otro lado, Pardo abogaba de forma distinta por los colados sobredi- mensionados (creados con un corto relieve del mufién en la linea de terminacién) con biseles.'” Gavelis y cols. descubrieron que los margenes en filo de cuchillo eran los que proporcionaban el mejor sellado, mientras ue los hombros fueron los que permitieron la mejor adaptacidn de todas las configu- raciones de margenes que comprobaron.'® Para dar fuerza y rigidez al margen, debe- ria haber un volumen meiélico cercano. Lo podemos obtener mediante un acodamien- to oclusal 0 un hombro, un istmo, un surco vertical, una caja 0 un hombro gingival. Este volumen metélico es una parte integral del margen en chafldn. Biseles oclusales Los margenes siempre se deben colocar por io menos a 1,0 mm de los contactos oclu- sales céntricos para evitar la distorsién del margen 0 la fractura del esmalte contiguo. Las aristas de los angulos cavosuperficia- les de la preparacién en la porcién oclusal del diente deberfan terminarse en bisel para evitar un Angulo recto “junta a tope” que podria dejar un borde fragil y quebradizo en a estructura dental. El borde agudo del metal y el Angulo obtuso del esmalte crea- dos por un bisel pueden aguantar los im- pactos mucho mejor gue un borde cuadra- do del esmaite (Fig. 2-3) EI bisel usado como linea de terminacién oclusal de los onlays*? MOD superiores y de las coronas parciales proporciona una combinacion de proteccién del diente, re- ‘uerzo del colado y la posibilidad de acaba- do del margen (Fig. 2-4). Cumple el requeri- miento de tener un borde agude con un olumen metélico cereano. Una fina exien- sion de metal sobre una cUspide se hace nas rigida con sélo una pequefia adicion de metal, colocando un bisel en angulo con | plano inelinaco de la clispide. Este efec- to se puede demostrar haciendo pliegues cerca de los bordes de una hoja de papel El trazo de papel doblado podra ser soste- nido horizontalmente por uno de sus bor des, mientras que un trozo de papel sin plie~ ques se dablaré bajo su propio peso Biseles verticales La linea de terminaci6n vertical de incrusta- ciones onlays © de la preparacion de una corona parcial esta terminada con un flanco oO bisel vertical que forma un borde agudo de metal en e! colado que se prolonga hacia una zona accesible. La diferencia entre un bisel vertical y un bisel horizontal es que el vertical es un plano geométrico ligeramente inclinado respecto a la trayectoria de inser- ci6n (Fig.2-5, A) y tallado a través del contor- no del diente. Un horizontal, en cambio, si- gue el contomo del diente y debera ser usa- do solamente en las lineas de terminacién que son mas 0 menos perpendiculares a la jrayectoria de insercién. Un bisel vertical rea- lizado como uno horizontal colacado en una. linea de terminacion vertical producira inevi- tablemente socavados a causa de la con- vexidad del diente (Fig. 2-5, B) En las superficies mesiales que son facil- mente visibles, el bisel vertical deberia exten- derse tan cerca como fuera posible de la su- perficie vestibular para poder ser alcanzado por la extremidad de un explorador. En las zonas menos visibles se puede extender mas alla de las superiicies vestibular o lingual Los planos de dos biseles verticales ves- tibulares en el mismo diente deberian incli- narse el uno hacia el otro y converger hacia un punto mas © menos vestibular al diente. Los planos de los biseles verticales lingua- les deberfan converger asimismo de forma lingual al diente (Fig. 2-6). Un bisel vertical con una inclinacién adecuada sera estre- cho cerca de la linea de terminacién gingi- val y se ensancharé hacia la superficie oclu- sal. Se deberd tallar por igual a costa de la superficie axial extema del diente y la pared 49 Fig. 2-5 Un bisel proximal (vertical) correcto 9s un plano liso que atraviesa el diente on angule agudo (A). El uso inoorrecto de un bisel corto en lugar de un bisel proximal en las linea de terminacion verticales ocasionard socava- dos indeseables a causa de los contomos naturales del diente (B) 50 Fig. 2-6 Los planos de los dos biseles vestibulares También serfa exacta la traduccién por broca. Instrumentacién partir de un tronco liso de la misma confi- guracién que la fresa en forma de llama Para aleanzar la maxima efectividad, debe- tia usarse solamente para acabar los bise- les horizontales y verticales después de ser tallados con un diamantado de llama. El uso de una fresa como primer instrumento de corte lo embotaré rapidamente y produ- cira una linea de terminacién menos épti- ma en el proceso. Eluso de discos diamantados grandes no ha sido descrito para las preparaciones por- que, segun los autores, no hay lugar en ia odontologia moderna para este tipo de ins- trumentos en la reduccién proximal o en la realizacion de biseles verticales o flancos, son peligrosos para el paciente y usandolos es facil de sobreextender las preparaciones. 2 Sibien la traduccién exacta corresponderia a pemo, de forma coloquial se usa la palabra en inglés, por lo que no lo traduciremos. 79 Capitulo 4 Coronas de recubrimiento completo @ corona de recubrimiento complete, du- rante muchos afios e! caballo de batalla de as restauraciones coladas, es una restau- cién que tiene muchas aplicaciones. Se puede utilizar donde la rotura de la estructu- ra dental es grave," hasta el punto que se. na descrito en odontologia operatoria como Ultimo intento de preservar un diente."* ambién es enormemente Litil en aquellas si- tuaciones en las que el diente a restaurar necesita ser recontorneado,'**° ya que es- tos cambios se pueden transformar en con- a8 normales del diente cuando todas las superficies axiales estan implicadas. A pesar de que la corona de recubrimien- ‘0 completo es una valiosa e insustituible parte del armamentarium restaurador del dentista, el disefo esta probablemente usa- do en exceso. Las estadisticas de los segu- 's dentales indican que un 93% de las res- tauraciones coladas realizadas son, de al- guna manera, restauraciones de recubri- miento completo.* La popularidad de la co- a de recubrimienta completo se debe probablemente, por lo menos en parte, a su facil utilizacién? Los clinicos han sabido empiricamente las coronas completas son superiores 2 otros disefios tanto en retencidén?**"3 mo en resistencia." Esto ha sido confir- ado en estudios de laboratorio realizados Lorey y Meyers,"® Reisbick y Shilling- rg’ y Potts y col.” Una restauracion de ubrimiento completo esta indicada cuan- do se necesita una retencién maxima. Si el resultado estético no es primordial, se pue- usar una corona totalmente metélica. Los términos “corona total", “corona to- colada” y “corona completa” se pueden usar indistintamente con el término “coro- na de recubrimiento total” para describir una restauracién hecha enteramente en metal colada. La disminucién del uso del oro y su sustitucién por otros metales nobles o ba- sicos, hacen que “corona completa de oro”, que en una época fue un término muy co- min, ahora sea inaceptable como descrip- cién genérica. Quitar toda la forma anatémica de la co- rona clinica es un procedimiento muy radi- cal y a veces, se realiza con la idea equi- vocada de que este procedimiento protege- ral diente de la caries. Aunque cualquier superficie axial descalcificada de un ciente doberia quedar recubierta después de una restauracion, es un error creer que todas las superficies deberian ser recubiertas para evitar que puedan ser afectadas por caries, en un futuro. El recubrimiento completo no deberia usarse para prolongar la longevidad, de una corona en una boca en la gue el entorno biolégico no ha sido sometida a control. En dichos casos no se aconseja ninguna restauracién colada hasta que haya sido controlado el proceso de caries Las figuras que van de la 4-1 hasta la 4-33 muestran los pasos para tallar la pre- paracién de una corona de recubrimienta completa clasico en un molar inferior. Los pasos basicos son los mismos para cual- quier diente posterior, a excepcidn de que el bisel de la cuspide funcional deberia ser colocado en la cuspide palatina de los dientes superiores. Las figuras desde la 4-34 hasta la 4-37 son ejemplos clinicos de coronas de recu- brimiento completo usadas para restaurar molares inferiores y superiores. 83 Coronas de recubrimiento completo Preparacién de una corona inferior de recubrimiento total (Figs. de la 4-1 a la 4-33) COMPARACION DE LARETENGION DE DISENOS DE PREPARACIONES | aR E——— 1 gq 250 2 B 200 | z 3 a So 4 3 g wp ge & = 4 & 3 B 10r 5 Hae z 50 PREPARACIONES Fig. 4-1 Los valores de retencién son comparados en cinco disefios de preparacién usados cominmen- te."*8® La retencién de la corona de recubrinianto total es significativarnente mayor que la de varios cise fios de coronas de recubrimiento parcial 84 COMPARACION DE LA RESSTENCA DE DISENOS DE PREPARACIONES 3119 3000 2000 1500 4000 FUERZA DE DESPLAZAMIENTO (EN LIBRAS) 500 Fig. 4-2 Los valores de resistencia so muestran para las mismas cinco preparaciones de la Fig. 41.7 La resistencia proporcionada por la corona de recubrimnien- to total es claramente superior a la proporcionada por cltos diserios de preparacién. Coronas de recubrimiento completo Fig. 4-8 Reduccidn oclusal por pianos: diamantado conico de punta redonday fresano, 171 Fig. 44 Usar un diamantado cénico de punta redenda ara hacer suroos de orientacién para la profundidad en estas triangulares y en los Surcos prmarios de de- alo. Fig. 4-6 Para conseguir una reducaién oolusal de en- re 1,0. 1,5 mm. jos surcos de orientacion para la ‘ofundidiad deberian tener 1,6 mm de protundidad en 2s cspides funcionales (Cuspices palatinas superiores vestibulares interiores) y 1,0 mm en las cuspides no nales [cUspides vestibulares superiores y linguales ‘riores). La prolundiciad puede ser caliorada por el amatro del diamantado usado pata la reduacien. Fig. 4-6 En ol surco de crientacién para la profuncidad s¢ ouede usar también un cincel de esmalte de entre 1,0 5mm (dependiendo de la profundidad de la redue- deseada), para juzgar con mas precision la profun- ded del surco. 85 Coronas de recubrimiento completo 86 Fig. 4-7 La reduccién oclusal consiste sn quitar ei tejido dental remanente entre los surcos de orientacién Se realiza un piano inclinado,# que también se puede escribir como un reseguimiento ds los contornos cusp deos,* 0 una preservacién de la morfologia oclusal gens ral Usando este sistema, se asegura le reduccion oct sal adecuada sin tener que sobreredusir el diente Fig. 4-8 Bisel de la clsspide funcional: diamantado c- nico de punta redonda y tresa no. 171 Fig. 4-9 Colocar los surcos de oriantacién para la pro- fundidad para el bisel de a cuspid funcional a través ce laarista del Angulo vestioulo-oclusal de un molar 0 pre- molar inferior y através de la cclusolingual de un diene superior Fig. 4-10 €! bisel de la ctispide funcional deberia re2!- _zerse con el mismo diamantado cnica de punta redonda Uusado en los pasos anteriores. Deberia ser paralelo alas vvettiontes opuestas de la clispide del diente antagonista, ‘con una profundidiad ce 1,5 mm, formando generalments un anguio de 45 grados con la pared axial Coronas de recubrimienta campieio Fig. 4-11 Comprobar que el espacio lore oclusal que presenta el paciente con la boca compistamente cerra- da, mediante una tira de cera roja “Uility” 6s de una anchuraaproximada ala cimension mesiodistal del dient preparado. Fig. 4-12 Examinar la impronta ce la superficie oclusal la cora, Comparar la transiucidez de la cera en las porciones de la preparacion que sabemos que tienenel espacio libre adecuado con la translucidez de aquellas cspides y éreas de la preparacion que estén demasia- 9 igjos lingualmente para poder ser vistas en boca. Si las improntas de los segmnentos no visibles son més trans- \icidos que los de los que tienen el espacio libre ado- cuado, necesitamos mas reduccién en las regiones no visibles. A pesar de que ol grosor de la cera se puede medir con un medidor de grosores, es muy dificil de racer acause de la blandura de la cera, Fig. 4-13 Reduccion axial vestibular lingual: diaman- tado de torpedo, Fig. 4-14 La reduccién axial vestibular se hace con un amantado de torpedo cansiguiendo al mismo tiempo ura marcada linea de terminacién en chaflan, Elchatln mpliamente prefenido para la linea de terminacion gingival" poraue es distinguible y muy fécil de to- “ar en una impresién, ademas, offece una junta desl- te entre el margen de la corona y la preparacion. y croporciona espacio para un grosor adecuado de metal =n el margen.* Sila tinea de terminacion debe extander- ubgingivalmente, nay que colocarla supragingival- mente primero y luego bajaria hasta que se haya efec- ‘vad una suficiente reducoion axial para permitir la en- 1a de la punta de! ciamantado en ei surco sin que naya una excesiva laceraci6n de la encia 87

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