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ideas airy Flay iE a Clio Tae mae separ toate Cs johi william cooke leyendas del noroeste por anastasio quiroga relatos de bioy UEP CeNe HOR a VO mau Ys iicee HE XG Oe vinicius: sobre neruda cartas de manr los poemas que theodorakis escribié aqui corin tellado, la literatura de consumo la ultima cancién de victor jara las opiniones de alejandra boero obras de badii y nelson blanco Sa precio para el = a uruguay: $ 650 buenos aires, enero 1974 YA APARECIO Sara Facio Alicia DAmico | edi as a 4 a = 4 CON FOTOS INEDITAS DE LOS MAS IMPORTANTES ESCRITORES LATINOAMERIGANOS Y UN TEXTO DE CADA UNO DE ELLOS EN EL QUE NOS CUENTAN COMO SON. cooke documentos, cartas, discursos anastasio quiroga leyendas del noroesie daniel moyane moneditas héctor tizén parabola Jorge amado carta /velorio del poeta del pueblo Vinicius de moraes historia natural de pablo neruda victor Jara cl ultimo poema patrick white ¢cudl fue la suerte de jackie? thomas mann ‘la angustia de ser aleman adolfo bioy casares “yo necesito la tormenta” un nuevo surco (cuento) mikis theodorakis “servir a la poesia” los poemas escritos en Ia argentina tarjetas de fin de ano de chicos de villas y barrios obreros carnet itinerario libros alejandra boero: opiniones de la actriz del aio pancho virginia erhart corin tellado; la cenicienta en la sociedad de consumo 1047, Bodie: 16 19 20 23 24 2 34 36 53 58 69 6 6s 1 n Este ejemplar de eerissis incluye una serigrafia hecha sobre un dibujo original Libero Bagi. Nacido en Arezzo {Italia}, en 1916, y cludadeno argentino desde ‘bre todo escultor y grebador. Su obra es una constante evolucion hacia forme iiusoriamente simplificadas, resultado de un procese de reducciones y eliminaciones. y merecié ol Promio Palanza en 1969 y la maxima distincién do la Bienat de San Pablo en 1971. En ol Taller de la Orilla ee procosaren cuatro dibujoa e Libero Badi. Cada ejemplar va acompariado por una de seas serigrafiae. redaccién y administracion pueyrredén 860, 82 piso tel. 87-8913 / 87-7303 enero 1974—repiblica argentina afio 1 ne 9 director ejecutivo federico vogelius director editorial ‘eduardo galeano secretarfa de redaccién julla constenla Juan gelman diagramador eduardo ruccio sarlanga colaboradores permanentes hermenegildo sabat (dibujante) herman mario cueva (redactor) administrador ‘manuel lira Es una poblicacin de EDITORIAL DEL NOWOUSTE SALA. Registro Nacional de Propiedad Intelecteal: Ne Linans Gonesibn N65 Frangueo Pagado Ne U6 | Disieidee am Catal TROISI Y VACCARO atamacca 618 - Tel. 9-850 (CAPITAL FEDERAL. Distetbuider nt Interior [EIELOSUR EDITORA S.A. dy. de Mayo 112, Piso 19, Of 207 Tel, $7326 369 Cp. Fed., Replica Argeatira Franquso Papa -Concesién PO ‘CAPITAL FEDERAL LATTRENSA st sm Ronin as | ul Cheques y airos a la orden dé | del Noroeste S.A... 61. los autores joh Nora m_cooke nts. anastasio quiroga (1916) ‘Argentine, nacido en la puna jujefa. Artesano especializado en la fabricacion de instru- mentos musicales indigenas: desde quitarras a pincullos. Su memoria lo ha convertido fen un reserverio vivo de cuentos y tradiciones populares. daniel moyano (1930) ‘Argentino, nacido en Buencs Aires. Es narrador, periodista y ejecutante de viola. Desde 4958 esti radicedo en La Rioja. Entre sus libros figuran Artistas de veriedades, La lombrie, £1 fuego interrumpido y La cludad de Beatriz (cuentos), Una luz muy lejana y # coronel (novelas). héetor tiz6n ‘Argentino, nacido en Jujuy. Abogado, diplomético (circunstancieimente) y nerredor. Hasta ‘hora ha publicado A un costado de los rieles (cuentos y relatos; 1900), Fuego en Caso- indo (novela, 1969}; Canter del Profeta y el Bendido (novele, 1972) y El jactancioeo y la ‘ella (cuentos, 1972). En dos oportunidedes fue finalista en el concurse do Cass do las Américas. jorge amado (1912) Ver ns. vinicius de moraes Brasilefo, nacido en Rio de Janeiro. Abogado, diplomético, critico de cine, poeta y drama: turgo. A los siete aos compuso su primer pooma y a los diecinueve publicé su primer libro. Obras més importantes: Camino zara la distancia, Forma y exégesis (premio Felipe de Oliveira); Ariana, le mujer: Cinco elegias; Poemas, sonetos y baladas. Se lo considers tuno de los fundadores de la bossa nova. victor Jara (1998-1973) Chileno, nacido en Chillén, Egresedo en 1963 de Ia Escuela de Teatro de la Universidad Nacional de Chile, con el titulo de Director Artistico. Monto mas de diez espectéculos, dos de ellos premiados con el Laurel de Oro de fa critica chilena. Dej6 la direccién por fl canto “porque asi creo servir mejor a la causa popular". Fue asesinade por le Junta Millia. patrick white Inglés, nacido en Londres, a los sels meses sus padres lo llevaron a Australia. Cursd studios especializados de idiomas. Durante la Segunda Guerra Mundiel fue oficial do Inteligencie de RAF, Obras mis importantes: Heppy valley (1898), The Living and the Dead (1941), The Tree of Man (1958), Voss (1957). thomas mann (1875-1955) ‘Aleman, nacido en Lubeck. Narrador y ensaylsta. Su eposicién el nazismo lo llev6 a emigror 2 USA, pals que abandoné cuando la histérica “caza de brujee” do McCerthy. Su vasta Obra iitererle 0 integra, entre ottoe titulos, con La montefe mégica, Los Buddenbroks, Marlo y ol hipnotizador, Lae cabezas trocadas, La muerte en Venecia adolfo bioy casares Argentino, nacido en Buenos Aires, Nerredor. La Invencién de Morel (1940), Plan de eva. Sion (1948), La treme coleete ($018), £) evofio de los héroes (1950), Diario de la guerra Gel chancho (1970), Dormir af so! (1973), son algunas de las obras que han cimentado su prostigio. mikis theodorakis (1927) Grieg, nacido en Atonae. Compositor, director de chquesta y posta. Durante la ocupscién mana. combatié en las filas del Frente de Lberabién Nacional. El récimen de Papado- poulos lo persiguié, lo encarcelé y lo obligé a etiliarse, Reside en Paris desde 1970, virginia erhart ‘Argentina, nacida en Martinez (Buenos Aires). Ensayista. Profesora de literature, ha sido docents en la Facultad da Filosofia y Letras de la Universidad de Buenos Aires; actual- mente se desempefia en la Universidad Nacional de! Sur. Ha publicado trabajos sobre harrativa inglesa, Pars iustrar este numero se han utllizado trabojos de Nelson Blanca. Argentino, nacido en 1924 en Tres Arroyos (provincia de Buenos Aires), Blenco reside on Paris dlesde 1966. Inventor de un cingular bostirio, sue figuras tostimonian siempre una tiavema y dinémica Invontiva documentos, cartas, discursos john william cooke Cooke explorando Ia historia: cooke inmerso en las luchas populares, elaborando un pensamiento revolucionario, solidario con los movimientos de liberacin de América Latina; ‘Cooke ‘amando y vislumbrando su muerte: todas estas imégenes van apareciendo en estos textos —en su mayoria inéditos 0 de circulacién muy restringida— que crisis publica como parte del rescate de la vida y de la obra de quien fuera una de les figures més Integras y representatives del peronismo. ( taraces,t umes 5% \ GL WER: Villon Boks fossis ate a ose idlrvéke a ae dix phe Wibliae bor’ haat ‘ Cat fel a on O°: he bps f fe Fo ci cacelaccste ‘an Ate oe crate fe one 5 john w. cooke “la conciencia nacional es también conciencia histérica” Le Historia siempre se piensa en fun- cién de le actualidad. Su evocscién es una fmirsda que echamos al paszdo con los ojos del presente, y el recuerdo esté te- fido por la circunstancia en que se pro- uce. Por eso. la distancia fisica que nos separa de la Argentina no agrega nuevos ‘rados de pesar a nuestra nostalgia: en la Cuba Revolucionaria, por el contrario, revivimos la epopeya del 25 de mayo con maxima intensidad pesional y nos senti- tos proxieros a ella, a la responsabilidad ée su mandato. ‘Cuando los pueblos pugnan por liberar- se, ahondan en of eecrutinio de ev paca do, Las ansias que laten on el pueblo los vordades intuldas y las esperanzas ifusas necesitan conjugarse en une vision proaia de la Patria y del mundo y la na- clonalidad se repliega sobre si misma, bo- biendo en la sebiduria y la experiencia colectiva acumulada en el decurso de les generaciones. Pero no pata recluirse en el pasado, 0 para traerlo al presente mediante un joo- {90 del pensamiento: eso no es revivir ef pasado sino congelarse en él, volverse asedo, Nadie tiene facultadse pera anu- Tar al tiompo: s6lo existe la posibilidad de anularse para el futuro. la conciencia nacional es también con- clencia hist6rica, es decir, sentido de que la Historia no es una fuerza. misteriosa que se abate como una fatalidad sobre nosotros, sino la designacién que damos a actividad humana; no un desarrollo fexterno al hombre, sino el resultado de fo que hace el hombre. ‘Asi se establece una relacién dialéc- ties entre of ayer, el presente y fi En ol pasado buscamos ‘ontocedentes, claves. Pero sat fos desafios histéricos son constantes y renovados, y que, cada generecién debe responder a los suyos. La Historia no esté escrita por anticipado y el mundo se nos ‘ofrece como inacabado pera que lo cons- truyamos en medio de la contingencia y el riesgo: estd en nosotros que deje de ser un mundo ¢e ignominia Le época revolucionaria es, asf, un pure to de incigencia donde confluyen los mon- s0jes do Ja tradicién para sbrirse en k hipétesie do la osporanza. ¥ on ol abe de la Segunda Emancipacién Americana, desde Cuba que es su vanguardia. reme- ‘moremos la gesta de 1610 y casi sentimos come si nos acariciara el viento de le Historie, se.La guerra de Independencia fue un ‘e280 tiplco de esa “guerra subversive”, de esa “guerra revolucionaria” que hoy quite el sueFio a las minorias goberran- tes y promueye les plenificeciones. de! | Pentigene. Iban contra el orden conatitul do, lao haofan laa masas y los. procedi ‘mlentos eran de guerrilla. Va la kicka del ‘pueblo espafiol fue guerra de guerrillas. Y San Martin formaba parte del sector del Fjército Espafol que se unid a la causa popular y pele contra los franceses. Ar- ‘igas era querrillero: Guemes y sus gau- ‘chos saltefos, que detuvieron el avance de los godos, también; Boves, Pez y sus llaneres, Bolivar, Sucre, todos empleaban ticticas de guerrilla, El grupo pretoriano que hoy gobierna fen la Argentina fup insiruido en “guerra jtisubversiva” por los coroneles franco- ses de Argelia, los asesinos de la OAS: ‘se han asignade ol papel do franceses para tratarnos coma srgelinos. Tal ver n0 yepan que en Ia década del 40. cuando los ingleses blocuearon el puerto de Bue- fos Alres, San Martin, que vivia en Lon- ares, publicé un articulo explicando que sl Invadian nuestro territorio ser tados, no por los ejércitos de ir por le guerra de recursos del pueblo en armas: 0 sea, [a famosa “guerra revolu- clonaria con que los pueblos. hoy como fentonces, detierden su libertad. os ejéreites de la Independencia oran milicias populares. Poleaban on olles 10 {que un autor do la época llamé “mestizos de la hez del pueblo, campesinos arrul- nadas 0 Indios medio salvajes”. Cuando fracasé la primera tentativa de Bolivar, fen 1812, fue la repdblica negra presidida or el Herrero Petién la que lo ecogié y Te facil ayuda para reiniclar la lucha que culminé vietoriosamente. Fueron las ‘capas mas humildes de la poblacion que ayuderon & San Martin @ preparar el cru- ce de la cordillera de los Andes. En todas partes fueron los pobres las matas deo- Poseidas, lao que rogaron con eu eangre foe campos de batalla. [...] ‘Como antes Mackandal y los esclavos rebelados. Como los que al mando de Toussaint L'Ouverture derrotaron alos ‘ejércitos de Napoledn y de Gren Bretai ‘Como Ios que acompafiaron en su geste fa Tupac Amaru y @ 3u compafiera Micae- la Bastidas, cuyas palabras parecen recién pronunciadas: "Yo ya no tengo paciencie [para soportar todo esto”. En la Argentina, desde el principio, ew tran_en lucha le tendoncia democrbtic, popular, nacional de Mariano Moreno, y {ade la oligarqula, ligsda al comorcio de portacién y cémplice de os planes in- ‘laces. La corriente de Moreno era la de Bolivar, San Martin, Hidalgo, Morelos. Monteaguio y demas. préceres: unidad Tatinoamericana, utilizecién de la ayude Inglesa en forma téctica, pero sin some- terse a sus vigencias voraces. Le polt tea de la oligarqula era localista, antipo ular, pro Ingles. ‘Moreno queria elegir un goblerne com tral mediente el acuerdo de todas les pro- Vincias; la oligarqula queria arrogarse la Focultad do elegir autoridados para todo ‘ torritorio, asi podia usufructuar Ins rentas del Puerto de Buenos Ares. Mo- ‘reno, con visién genial, intenté crear una hbase material para fa revolucion democré tice: su plan consistia en expropiar las grandes fortunas para crear un fondo de 200 0 300 millones de pesos fuertes des- tinedos a desarrollar la economia, en con trolar el comercio exterior y la moneda, en controler [a riqueza minera. Gomo se ve, un plan bien totalltario. ¥ en efecto, Ia ‘oligarquie, que era furiosamente ib ‘cambiste porque convenia 8 cus interes 7 leo de Gran Brotaf, lo ecuse de “ja- tobino", que era para la época algo asi como decitle “marxistaeninista” ‘Cuando Moreno cay6, victima de esa ceasta usuraria, ésta puso trebas constan- tes a la guerra libertadore, intentendo va- lerse de los ejércitos libertadores para reprimir la protesta de las. provincias, artulnadas por el librecambio. A esa sOr- dia estrechez de tenderos se debio ta Segregacion de las provincias del Alto Perd, el alslomiento del Pareguoy, el sur- gimiento de movimientos defensistes en Tas provinelas, la anarquia durento varias décadas, La politica de Moreno era ayudar a Ar- la Banda revo lucién al Imperio esclavista del Brasil. La oligarquia, eliminedo Moreno, rechaz6 la ayuda. de’ Bolivar y_prelirié entenderse ‘con el Brasil, que era sliado de Inglaterre y servie gus planes en el continente. Tres ‘Yeees traiciond @ los orientales. ‘A través de esias oligarquies parasite res actden Gran Brotahe y loo Estados Unides. Canning, miniotro inglée, menifos- taba: "América Espatola es libre y sino otros los iagleses manejamos nuestros negocios con habilidad, ella serd inolesa”. Jefferson, por su parte, habia sido el pro- feta de le expansion yanki hacia el Sur. Mientras Bolivar, San Martin, Sucre, Mo- relos, Hidalgo, O'Higgins, Moreno. 'Mon- teagudo buscaban formas de unidad conti rentales, Inglaterra y Estedos Unidos, con ‘ayuda de las minorias usufructuarias de! ‘comercio exterlor, trataban de impodirle, El Congreso de Penamé demosiré cémo maniobratan las diplomacias anglo-sajo- thos. Por una parte, dificultaron la compa- ecencia de los paises y procuraron que no sa llegase a ningiin resultado. Por otro, se opusieron al tema que insistentemen- te plantezba Bolivar: la invasion para I+ berar a Cuba y Puerto Rico. Estados Unidos, que se habia dectarado neutral en nuestras guerras, reconocié la Independencia cuando era un hecho com ‘sumado; pero amenaz6 con represalias si '3e Intentaba libertar 2 las isles irredon- tas. Y, junto con Inglaterra, quicieron for. zer el Congreso a la firma del tratado de pez con Eepafa, que significabe reconc- er como definitivo el status colonial de Cubs y Puerto Rico. ‘Cuba qued6 asi marginada del proceso Iiberador. Aqui también los intentos do femancipacién tuvieron bese popular: des: A de Aporte a los inientonse de tos afoo 20 al 20, la conspiracion de lo Escalora, Plicido, Pimienta. El Mar Caribe no. so. lamente fue aisiante fisico, sino también factor de insuleridad Ideoligica, La clase dingente cubana tenia contradicciones con les comerciantes espafoles, pero eran menores que las. contradicciones con el resto del pais: unos y otros eran benef clarios de una economia bassda en la fselavitud y sentian horror por los pen samientos tgualitarios. La Independencia sigilficeba abolicion de la esclavitud, pér- ida de sus privilegios, iguoldad racial Prefioren sor autonomistes, reformistes, anoxionistas. £1 indopendentiomo os pa- trimonio de pequefios grupos de patriotas ¥y del pueblo desposeido 0 esclavo, En Cuba se habla el lenguale ame- ricano, que fue el de nuestros libertado- res. Ya América no es una yuxtaposicién ide scledades y miserias provincisles en- Cublertas por soberanias teéricas, Es un Continente movilizado, que no acepta i fartas de la paciencia y la resignscion que le ofrecen las oligaquies y los man- arines de! panamericariomo, «16 no na 20rd para engordar pluevalias sino pare Identificar ta suerte de ta Nacién con la suerte de sus hijos. Ove en el orgullo de io propio no olvida que su esfuerzo esta eniazado con el de todos los. pueblos que se oponen a la opresién en cuciquie- ra de sus formas. La conciencie latino- americana es conciencia nacional y, si- multéneamente, sin escision posible, con: ciencia de clase. las luchas de liberacion se ayudan mu: tuamente, por fe simple mecsnica del pro- cese y porque voluntariamente los pue bloe se non en eolidarided activa, Asi fomo en 1810 hubo que oxplotar lae lu thas entre las grandes naciones. ahora suena como factor fundamental la_pre- sencia del mundo socialists, que ayuda a [a liberacién nacional por el freno que pone a las maniobras imperialistes y por que puede prestar al desarrollo de los paises liberados. En esta circunstaneia dramatica es que celebramos nuestro aniversatio patrio. En tunién con los restantes companeros de Latinoamérica y con la Revolucion Cuba Fragments de be Soraderes dl cir arom LIBRERIAS fausto ahora EDITAN NOVEDADES DE DICIEMBRE cuentas para nifos travieses JACQUES PREVERT 8 6— cl naciniento (los nis y el amor) AGNES ROSENSTIEL $35— oetas italignos del siglo. XX traduccidn de HORACIO ARMANI dic, binge $46— poeta franczsee contempordneas traduccién do RAUL C. AGUIRRE cic, bilingle $52— Jes armas milagrosas AIMEE CESAIRE traduccién de LYSANDRO GALTIER etic, bilingie $36— DE PROXIMA APARICION la noche se agita HENRI MICHAUD, traduccidn de ADUILES FERRARIO etic, bilingie cantos de glacomé leopard traduccion, prolage y notes de DOLORES SIERRA etic. biingae antologia poctica de piere j. jouve traduceién de FEDERICO GORBEA etic. binge poetas ingleses del siglo XX traduecion de €. L. REVOL dic, bilingle antologia poética de herman heste traduotién de RODOLFO MODERN ce, binge la alegria-la tiers rometida GIUSEPPE UNGARETTI traduceién de ORESTE FRATTONI etic. bilingie pote alemanes del siglo XX traduccién de RODOLFO MODERN poemas eleaidos y peemas inéitos traducolén, prétego y notas de H. ARMANI | | “john w. cooke jo _la rebeldia popular y los aparatos partidarios “Pero ta politica no es un vicio, preciosa, ni un juego de sociedad”. Rabelais ha relatado Ia llegada de Panu ‘90 al reino de la Quinta Esencia, cuyos bitantes eran ingeniosos y _sutiles: “unos blanquean a los etiopes froténdo- fas el vientre con una cesta; otros labran _su campo con un arado que tiene zorros: ‘uncidos; otros conservan el agua en in ‘cedizo, Los hay que miden con exactitud 1 salto do las pulgas y los hay también los loboe". A través do los tlempoe, loo ‘guinteseencianos han mantonido sus. ca- Tacterieticas psicol6gicas y hoy en dia dosparramados por el muno, siguen de- dicandose a tareas similares a las que absorbian @ sus antepasados. Los jem plares més perfectos estén en la Argen- ting, empefados en dirigir el movimiento de masas con procedimientos y planteos ide insplracién burguesa. Es clerto que abundan los casos en que los enfoques reacclonarios no constt- {uyen deficiencies del raciocinio sino eleo- clones do la astucla para tlogar ol ver- dadero objetivo, que e2 Ia salvaguardia de prvilegios y prebendas. Pero atribulr méviles deshonestos a todos los que. no plensan como uno es tioico de irecundos tensimismados en la adoraciGn de su pro- pla virtud; y de los hibridos burécratas ue mediante personalizaciones_sistemé- tices tratan de dar elgin sentido e Inte- és @ sus pleitos sin grendeza; y, muy ‘especialmente, de los participes de la co- rrupeién, ansiosos por echar sombras so- bre la integrided de cualquiera que los ‘enjulsio. Do manora que oi bien co obvio papel principal que juegan las loro: ide fanga en los esfuerzos por evitar que fl Peronismo adopte una linea revolucio- faria, eso es sélo parte de un problema ‘mucho més emplio, que se cilucida a ma- yor nivel que el de algunas motivacions Individuales. El asunio de fondo es el choque de dos concepciones diametralmente opues- tas sobre el presente y el futuro det pais. Ese cheque se presenta con nitidez en el plane general, donde Is diferencia talan- 0, note, entro ol Peroniomo y los llama- dos “partidos tradicionales" os un dato euidente por sf mismo y previo a toda teorizaci6n. Sin embargo. como lo que objetivements ¢s el Peronismo no s@ re- fieja sino muy pélidamente en sus estruc- turas, en su seno reaparece aquella con- tradiccion entre una visién burguesa, re- formista, burocrética_y una vision revo- welonaria. Un punto de confluencia —el reconocimiento del liderazgo del. general Perén— permite que ambas coexistan, | pero ln euprimirlas como polos de une antitesis cuya resolucion ya no puede ser postergada por mucho tiempo. Hasta entonces, persistira ol desajuste entre las permanentes demostraciones de rebeldia popular y 1a debilidad funcional ‘de los aparatos partidarios; entre la ne- cesidad de desarrollos teéricos que re ‘oan y enriquezcan le experiencia de lee masas y las luoubraciones de ombarullo- doe cerebros directives que nos. presen. tan como adictor a banslidades sociclégi- cas que dejan intocadas les raices de la tragedia argentina y latinoamericana. or su composicién de clases, por vo- ‘cacién histérica, por los apremios de una crisis insoluble, el Movimiento exige una politica en quo se conjuguen las Idees, la préctica y la organizacion revolucionarias, fen que la busqueda de los objetives ti nales se armonicen y complementen con las varlentes técticas y operatives copa es de dar respuesta a cada coyuntura. Pera, por fallas de gran nimero de sus cuadros dirigentes, en lugar de esa pelle tice revoluelonaria te le hace oscilar bruscamente en una serie de politicas bartoloras, cada una de las cuales surge como improvisacién y muere con el pe- iodo. de persecucién 0 apaciguamiento que le va presentando el enemigo. Esa yustaposicion de polticas efimeras equl- vale a no tener politice alguna. ‘Gon un agravante. Cada vez que nos clerren los caminos de le cemilegalidad, la burocracia peronista declara la guorra, pero dejéndola librada a le eopontanet dad de sscrficados activistas, que opo- nen una violencia inorgénica, incenexa, Inguficlente al potencial de los. drganos represivos oligérquico-imperialistas. Esa vacarcla de conduceién dura hasta que se entreven soluciones negociadas: en- tonces la retaguardia de la lucha pasa ser la vanguardia de la tregua y capitalize la combativicad de las bases en la mesa de arena del acuerdismo electoral No quisiera que del pérrafo anterior se Inflera que todo es cuostién de mayor 0 ‘menor coraje personal (aunque si gran parte de estos burécratas son los mismos que sélo atinaron a dispersarse y/o @ perjurar en 1955, dficilmente los veremos ‘ahora como mértires de la fe marchando ‘a hacerse “destrozar por los gorilas y de- mis bestias). Lo medular esta, repito, en ue, al manejarse con jos mismos valores ¥ concepios de las clases dirigentes ex ‘én inhibldos para Imaginarse siquicra lo ‘que e2 una politica rovolucionoria. Es0 lee (SIMONE DE BEAUVOIR) crea la convicelin de que, mas alla det Imagro repertorio dé metodos.y tacicss Quo ellos manejen solo quedan el infane tliemo, 1s gaipes de mano yl top fmonees be Tehindican como “resist, Gdiinitradores. avarea do leo. mirgones de Toclidad. quo 20 noe concaden ars no quedar descolocados, recubren coe mansedunbre inrinseca con 6l POW tetorieo de temendismos.insurreccona- ios. antimperialismos verboles.y_antica- pitlismes.abstracios. De noche. suefan Gon apctonsis eletorales colmadas de argos, represontaciones y honores. Comiene. aclerat que sol0 eFC! ex tremismo de les nocombatientes puede nogarse a dscrimner posiciones y_ cane dustes entre nuestros edversarion, © res tar Impertencia la medida. on quo fare Stonan lbs. dorechoe. constituclonsios. No fon equipasblee lov nergimenos que slamen por Ia sargre de los pobres con las personas quo tienen respeto por ll Condicion humana; ni es 19 mismo ectuar fn el dasemparo que cuando existen re- Sursos. contra la vilacion de las garan- tias indviduales. (Estos articulos me han So pedidos por un diario cuya onenta- Gin editorial es antitetica con mis puntos {de vista; por sostener estes mismes Ideas, durante ocho sfos estuve prese prsfuyo) Pore roconacer ol valor de le avancos bless y de buscar alk © angustias que afjon a la D- blacin no. imelica, ni mucho menos, el fbandono dea. perspective revoluciona- fia, Una conduceién auténtica libra la ba ali por las relvindiesciones parciales € iinmedltes ce. los sectoros necestados, poro sin otrbuirtes cardcter mercial sino fneuadrandolas ‘en un proveso que ins masas ven sleancando coda vez mayor plied y grado Jo conciencia, Todo. le Controro de ose "realioma” cayos cite feo han motdo sh Movimiento en um ca ilojoe sin salda tras otro, y que consiste on tratar lo inmediato y relativo como si fuera la realidad absolute y definitiva. 0 sea, en someterse a la inclativa ajena Aetuslmente son devotos ce la. conciia: cién de claces, el desarroismo y Ta Tk feracion nacional como. culminacion evo lutiva do la relteraca adicion de conquls- tas progresivas ¥_pacticas, logradas en Comizios més. 0 menos impoltos. ‘Seguramente hay que ser un varén pr: dents y mosurado. para ceptar Ia coral: ded do. sacer al Peroniomo del fronto do tall on quo.ee baton lax massa con Sbtema sonoaconnsn vista para I A ‘Afi 1945. Cooke con su padre, el Dr. Juan Isaac Cooke, entonces anciler, en un aimuerzo con Spruilie Braden, La tormenta cine. Su padre, “El carciller de la soberania” Ssertarlo como supernumerario en ef tor feo entre agrupsciones que admiton lo Sustancial ce dicho régimon. Como. no somos mis que atolondrados perturbado- es, se nos hace dificil comprender cémo aquel conflicto —decisivo e implacable — Vea desaparecer simplemente porque nosotros resolvamos desplazarnos. hacia ‘Otros conflictos que son interncs al ré dimen, secunderios —aungue a veces ro- en 10 dramético y sus actores los vean con dimensiones trascendentales, El secreto de esos dirigentes respetue 308 de la respetabllidad y hurafios. con las ideas es que estén apostando a que Se materialice una integracién que ya existe on sus espirtus. Creen, como los Wiejos partidos y la flora anémica que comparte con ellos el moropolio del ‘ct Wismo, que los problemas terminarén por amoidarse eldsticamente a la juridicivad burguesa y que lo real y viviente se achi- e2ré a la escele que sea menester para encauzarse on les suporestructuras Im Puestas cagctivamonte ai pais. Lo ocurrt do deste 1955 no es més. que una suce sién de malentendidos y desencuentros, onde ia mano de algunos paces malignos consiguié mantener enconades a todos les buencs. Todo se superard por la bue- na voluntad general. Y bestarén la hones tidad ce propésitos en el clenco de go. ierno y algunas adaptaciones de nuestra Parte para que nos queda expedido el co mino de ta igualdad politica. Nada de esto © exacto. El andlisis de nuestros estrategos, como eorresponde a las ideolicaciones, burgue- 825, e8 una evasién do la reslidad. Sos tener que el peronismo ve “antidemocré dirigitia poco des. Uico” por la aviesa terquedad de Perén 3 exactemente fo mismo que cargar as culpas de nuestres desgracias en los per- sonsjes que han ocupedo los puestos cle ves en los dltimos ocho aos, ebsolview ddo al rBgimen del eval fueron persenaros. Si Ips partidos clésleos disputen supre macias mediante el! juego constitucional, {5 porque no cuestionan Ja naturaleza ni {a legitimidad del poder que dirimen: y si el Peronismo esta excluido, es poraue expresa fuerzas sociales cuyas aspirecio- ‘nes no pueden satisfacerse sin alterar el ‘ordenamiento capitalista Es cleo que a fuerza de buena con: ducta podemos obtener mayores cuotas de legalidad, pero férreamente condicio- ‘nadss on su magnitud por esas mismas Circunstanciae: por ahora, en la propor cin suficiente para eer una fraccién que ‘Goce del Fégimen pero sin eapacided para trabarle: eventualmente si un comporta ‘miento irreprochable despejase toda dude ‘en cuanto a nuestras calidades democré- ticas, no habré impedimento para recono. ‘cernos en pie de igualdad con los demas Partidos. Lo triste es que cuando termi- fase esa metamorfosis ya habriamos de- Jado de representar a la mayorie. popelar Esa es la suerte que nos deparan nuestros “realistas”. Las clases dominantes eatin encerra das entre la ideologia damocrdtice ropre Sentativa que profesan y Is imposibilidad de llevarla a la préctica porque perderian el gobierno: la Constitucién del 53 ha de. Jado de ser resquardo de sus privilecios. El Movimiento Peronista osté desagarrado entre los esfuerz0s para convancer a los factores de poder de que carece de pel grosidad para el statuquo social y la ne- puss 1 batalla diplomitica y polit eave: mericano. En ese momento Cooke ere el asesor més corcano, y revolucionario, de} Canciller. contra el embsiador norton cesidad de mantener la contionza de las ‘masas demostréndoles, precisamente, qué esa peligrosidad si existe. Pero mientras la primera contradiceién ‘es uno ds los sintomes de ta crisis total del sistema de relaciones capitalistas en le Argentine, la segunda es la consecuere cia de no ssumir todas les response dades quo derive de aes crisis. Mientras ro plantee una alternativa integral al ‘dimen. Ia capa dirigante peronista no sera la cabeza det Movimiento sino el vehicula pare que la burcuesia trate de traslader al pueblo su confusién, su ambigiedad ‘84_impotencia histérica, Esta postergacion en llevar a las mesas las premisas de una politica revoluclone Fla es un factor de derrotismo y desorien- tacion Cuya gravedad es deber denuncier sin vacilaciones. Los respansables, mien- tras tanto, estén fascinados con un me niobreo quo terminars on otro de. esos ‘estropitosos fracaoe en quo so han ot pecializado. Porque es en vano que 20 es meren en asignarnos el papel de ofosi tores atinados y prudentes, insensibles al maleficio de Madrid e incapaces de es- cupir en el suelo como los maleducados, ‘Como Ja historia no ~~ un reflejo de las leas, ninguna opera do pensamiento puede sustitur los wcminos reales del ‘antagonism que secude al pals y enwel- ve a todas las fuerzas actuantes, Esa ct Ficatura inveniads por estos bestos © su imagen y semejenza no confundlra a 1 die. Ni al puoblo, que ve en el: Movimien to el instrumento para. constituir la Ne Gién real, libre de la opresién interna. y de los explotadores locales, Ni tampoco a fa oligarauia, que sabe que tras sus ban ores se agrupan esas mases oscuras @ ltreductibles que amenazan irrumpir la de mocracia exquisita de los selectos. john w. cooke Ve Buenos Alres, 21 de agosto de 1968 Queride Aliel: Ya @ punto de ser operado, deseo esteblecer algunas indicacio nes, disposiciones y directivas que, lementablemente, pertenecen ‘2 [o mecabro: pero creo mejor consignarlas, expresamente. 1) En caso de que mi estedo se agrave y entre en coma, debes ccuperte de que bajo ningin pretexto ni artimana se me acerque personal eclesidstico, monjas, etc, 0 se Intente suministrarme sa- Gramenios, exorcismos, etc, La probibicién Incluye @ los sacerdo- tes que sean amigos personales. Comprendo que, ya que a! fin ¥ a1 cabo para mi carece de importancie todo ritual, algunas por ‘onas que me qulsren plenson que exegero las restricciones. Pero x Intacto mi “buon nombre y honor” de steo inte, y no deseo confusiones, leyerdas. s0- bro erropentimion! iremis” y otras fébulas producto de la propogends (y 2 veces de Ia buena Intencién) de la gente. 2) En caso de muerte. todo lo anterior se aplice con e| mismo rigor. aunque he tomado disposiciones —con tu participacién— que ‘espero obvien dificultedes: ‘) donacién de mis ojos, de mi piel, etc. ') gestiones en trdmite pare dorar los restantes Orgenos y. si es posible, todo lo que resie de mi cuerpo. '3) Si 10 anterior iuese factible, cumplirie un doble objetivo: yo ‘que no he podlde, por medio de una muerte heroice, contribulr @ {a solucten revolucionerie de nuestro dreme emericano, al menos pairs syuder « resolver algin probloma Individual, eervir para I préctica do eetudlantos do medicins, etc: y al mismo tiempo, que- Goria eliminodo ef problema de disponer de mis restos mortales. ‘con ef consiguiente alivio en materia de velorio, entierro, etc. ‘4) Pero como la burocracla y 1a imbecilided de! orden estoble ‘ido son Infinites, es previsible que surjan inconvenientes para une Tiquidecién dréstica y completa del cadiver, y por Jo tanto debo plantearte lo que corresporde segin las diversas hipotosis. 5) No sé si el velorio es algo inevitable. Si puciere eviterse. ‘mejor, pues sabes (0 que oplno de esa ceremonie de cuerpo pre ‘Senta, coronas y demés elementos de mal gusto. Si, edemés, pue 4 prescindirse del entierro, mejor que mejor. No pretendo que mie restos tengan que ter llevados en un pequete y en colectivo, pero Sf que sélo recurres a 10 méa funcional, eriptico y desprotocoli- zado: nada de pompes fdnobres, ceremonies, solermidades, etc. For razones do fondo, estéticas y también econémicas, pues mi tendencis al despilfarro no alcanza a lo post-mortem o ses. que ‘me inita pensar en gastos de pompa y clrcunstencia para setis- facer costumbres y vanidades que ofenden ml racionalismo y sem tido de lo elegante. 6) En fin, ya llegamos, de una y otra manera, 2 1a ultima etapa de esta planificacion necrologica. Si no fue posible élsponer In- tegralmente del cadaver por medio de donacion y hay que hacerlo de otra menere, entences que lo cremen. Y que les cenlzas no se canserven ni se depositen: dispéisales poétlcamente al viento, lirales al mar (transo con que las tires al Rio de la Plate; Jo mis- ‘mo de cualquier otro rio y aun una loguna). Yo viiré, como re- ‘verde, durante el tlempo que me tengen en su memorls Iss per- sonas que de veras me han querido: y en la medida en que ha edicado mi vida a los ideales revolucionarios de le libertad hu- mane, me perpetuaré en la obra de los que continden esa mil. tancla. As! que no deseo que queden ni vestigios de lo que fue, or un breve Intervalo de tiempo, un complejo fisiolégicemen ‘orgenizado como ser viviente 7) A rlesgo de machacén, reltero: durante las tramiteciones que demande 18 finalizacion de mi existencia como cuerpo, eplica con ef méximo rigor mis. prohibiciones sobre extibiciones religloses nl personal religloso donde estén mis restos, ni cruces i esca- pulerio, ete. 8) Por separado, dejo verlae notas quo preeumiblomente, pueden ayuderte 2 cumplir con estas disposiciones. ic John Cooke testamento = Queen fre, 24 4 Eat AGES Abs; V Ae fer < elias bind catians, fer (lwemehe veh (Leet en Hicetnl, 4 a £2 weteahyr pire axe mifa cade poe [Gots AG, Chymces parr gerre 86. ptt orca Qunrd SAtigp DE tas Pe tes a igteetan Cel pad dene ormrket y dew t Oy cas Gong: a cents ie oe iE | cede te ertapen te” te fe’, bore te ee on rete ate Mae ae pres pened eferyete Cee dor tevin YA Aetaje ele Meeckorees, ee Hrs temet= (as Learn Hetty Lenssuslem Lo elem ald te ptt vee, ey Lid tame oh tetdian wpe tines a pecbn abecbecnse Abii 0s aclijeing Bll tls ao berlin be voc op lara, ate, a) Per paced, be tenet est pt Rapetntd io fmoke fey een By tyr one e 24, carta a salvador allende Or. Salvador Allende Santiago, Chile i querido amigo: De més esté que me extienda en ex plicaciones sobre la ansiedad con que es- amos siguiendo los sucesos de Chile y hasta qué grado n0s identificemos con 1a suerte electoral de Vd. y las fuerzas que fencebora. Me limito a decirle que a la ‘olidaridad forvoroca que une a las re Volucionarios do toda América se prego, fn este caso, ol cocficiente de atects Personal que mi esposa y yo sentimos or usted, % Si fuese oportunidad de emitir julcios mds 0 menos objetivos y_panordmicos, destacaria que la forma en que se han Polarizado las fuerzas para la lucha elec. oral es, de por sf, un triunfo de las co frientes revolucionarias de las que Vd. es endere. Supongo que este juiclo ya he brd sido omitido roltoredamente y, por otra parte, no es momento pare ess tipo de balanc sino para la militancia, ol fer vor y Ia pasién del triunfo total, inme diato, concreto; asi lo sentimos nosotros, con ja misma vivencia que si estuiése- ‘mos también en medio de la barainda de mitines, estendartes y oratoria: queremos Que Va sea Presidente y que en el pais hermano se realice la revolucién autén- tica, no el pélido espectro que intenta duplicarla en Ia retdrica y ofrece simul téneamonte una elternativa a la reaccion Yun escape a quionee quieren correr la ventura revolucionaria in exponerse sus riesgos. “cambiar las estructura ero sin romper las que alienan al pais ¥ a sus hombres, En fin: todos sabemos (nosotros ye! ‘enemigo) que en ese episodio electoral ‘esta comprometido todo el continente, ‘que la victoria del FRAP destruye esque. ‘mas pacientemente prepsrados ¥ prescri ‘be geopoliticas: es una patada al tablero del ajodrez ponomericenista y a sus ple. n educaditas, que se mueven de roglas.profjadae. Aaui se piensa que sl incidente de Pa- Jena —y la posicién “dura” que preconi zen las Fuerzas Armadas— es una mane- a de mantener un foco conflictive que feventuelmente podria ser aprovechado pera algin plancito de los que inspiraré el tiunfo del FRAP. La versién “oficial” es decir, la que can observadores, ex. Pertes y comentaristas de la prensa co. ‘morcial— es que el asunto es a la In versa: que eo dosde Chile que se mag. fifica el incident». para eacarle dividen dos electorales: algunos doctos hon ide ‘més alld y han expuesto Ia tesis rocem. Bolesca de que la izqulerda chilena fo Imenta la friccién pare servirse de. ella ft caso de triunfo, arrastrando. mediante la movilizacion patristica a todo el pals ¥ descolocando @ quienes se opongan & la "comunizacion". Si por ellos fuera, nuestros militares ‘serian copaces de presterse a cualquier ‘maniobra: lac Fuorzas Armades tienen acuerd Ao 1947. En la Gémara de Oiputados con Albrieu y Osella Muncz. En ese entonces Cooke tuna politica internacional propia, occiden- tal y cristiena, pentagonal, que imponen desde 1955 cvalgulera sea el titular del ‘gobierno civil, Frondizi e Illia, ambos de- Claradementediscipulos de irigoyen (y ‘sobre todo lia, que esté congelado en la era Irigoyenistay heble como si 9° ‘comunicase con ol espirity do Irigoyen todas las noches) han vatado en Ia OFA ‘como quieren los yanquls: Frondizi simu- ando algunas rebeldies, prontamente so- focadas por los medios castrenses, pero ‘como forma de cbtener concesiones ece- ‘némicas para su politica de desarrollo en base a Ia eyuda exterior; Ilia, que con '8u partido imputo a Frondizi su entreguis- mo y sumision frente a EEUU, ha hecho o mismo en Washington, aunque que- rondo tapar los hechos con recursos de leguieye provinciane que se abstione pe- ro vota, que dofiende la “sutodetermine: clén’, pero la de México, Chile, Bolivia y Uniguay (Cuba parece que ra tiene av- todeterminacién), que hace de mediedor ero pare tratar de meter a todas las ‘ovejas en el redil, etc. Qué América esti alborotade Io prusban, precisemente, s- tas votaciones por 2/3 que ahora que ‘ahora consigue EE.UU.: las burguesias no tienen margen de maniobra y su popu: liemo de corto aliento queda para encer: didos discureos de entrecase, Nuestras FF.AA, seaban do conclulr un cconvenio militar con EE-UU., por ol cuel éstos nos suministrarén, como rogalos 0 ‘en préstamo, material de guerra: el go- berno afirma solemnemente que es un ‘convenio tan maravilloso que todo eso es por pura solideridad, sin contraprestacion ‘il compromisos. Claro que en el texto del pacto se habla de “ayuda reciproca’ ¥ tengo mis dudas sobre la posibilidad 2 secretario del bioque peronista. de que sea la Argentina la que les st- ‘ministre gratis 0 les preste armamentos a los nortesmericaros, Todo esto, sumado a la regimentacion bajo le Junia Interamericana de Defensa. y el turismo permenente de nuestios ak tos mendos a los EEUU. no deja dudes fon cuanto a la pérdida total de la con Clencia nacional que en otras époces, pe- se todo, predominaba en el Ejércto, Sin embargo. tampoco Ia libertad de ac- cién de nuestros heroicos querreros es tanta que puedan meterse en cualquier plan y hacer cualquier cosa en cualquier momento. Desde 1955 ha habldo muchas Purgas y enfrentamientes internos que han minado su cohesion intema, no obs tante que en el “occidentallsme eristi. ‘n0" y el antiperonismo no discrepan. Pe- ro el clonco que dotenta loo oltos man doe os el preducto do un oqulibrio In- terno que cuslquier sucess fuera de lo ‘normal puede quebrar ‘Ademés, tienen miedo, como toda nues- tra clase dirigente. Ven “la conspiracién ‘comunista mundial” por todas partes, no ‘lo por exageracién propagandistica, sk ‘no porque creen que estén acechados por ese enemigo de mil ceberas. Como el regimen burgués fa ensayado, desde 1955, todos los equipos técnleos, politicas de- ‘sarrollistes y planes lbrempresistes, co- paloros, ete, ain quo la eituasién oconé- ‘mica doje do deteriorarse permanente. mente, comprenden que son las. Instit: clones y las estructuras las que el pusblo uestiona. 1 peronismo, que no ha con- ido arrebatarles et poder, no los de- ja tampoco gobernar en paz, hostliza al sistema dia a dia, no solamente en lo politico, sino en las fabricas. A 9 aftos de la caida y del exilio de Peron, el pe | john w. cooke ronismo no se ha desintegrado para in- tegrarse en los partidos "tradicionales’ como ollos estaban seguros que ocr rrirfa— y aunque por una serie de fallas que no es del caso enumerar no se ha estructuredo como un partido auténtica mente rovolucionario pare la toma dol ‘un movimiento de robeldie po- que pelea en muchos frentes. y que, aunque dirigido por una burocracia raformista y pactista. tiene una potencia- lidad revolucionarie que aflora constante- mente. El reciente “Pian de Lucha” de la CGT fue una demostracién que puso los pelos de punta a nuestra burguesia. Miles y miles de obreros ocuparon los estableci- mientos industriales, detuvieron como ro- henes expulsaron a los patrones y ge- rentes y se hicieron cargo de la produc- clon. La ollgarquia comprendio que esa maniabra pacifiea ers un atentado muy trascendente al sacramento de la propie- dad privada (también el embalador nor- teamericano comprendis esa peligrosi- dec) y pidié sangre y represién. Las Fucr- 200 Armedas. quo eatin cansades do quo 12 las acuse de vardugos, 20 dosonton dioron y dijeron que sélo saldrian de los cuarteles si el caos las obligaba. El go- bierno, entre una represién cuyas conse- uenclas eran imprevisibles y una act!- tud contemporizadora, eligié esta itima rnativa y se limit6 a pasar los anto- tedentes y denuncias a la justicia, 1 Plan de Luche esté ahora en otra eiapa, pero 2 obreros y patrones les ha que. dado ol sabor do ae00 di Completands ceto panorama, Perén ha snunciads on todes formas que vuelve ‘antes de fin de afo. Si hay condiciones para que regrese en tren de paz. mejor. ero regresaré en cualquier condicién. zCémo impeditlo? Y aunque le proporcio: hhasen conciciones para que venga como “pacificador”, nadie ignora que su pre ‘sencie desatara procesos populares que pueden llegar a cualquler limite, ya que Ia clase trebaladore esté orgenizada, est fogueada en largos arios de lucha y su- {fro la2 consocusnclos del dessetre ooo rémico. ‘Todo esto s0 lo expongo para trasmitirle ‘mi impresién de que ni son exactas las, novelitas roses de una reacclén popular incontonible en defensa de un gobierno popular chileno, ni tampoco puede scep- {arse que nuestras FFAA. se entreguen ‘2 Jueguitos demasiado arriescados. Ya hablaremmos de esto nuevemente. ] amigo que le lleva esta carta es de toda conflenza, y con él puede tresmi- ‘veme cualquier cosa que desee. Me hu: biera gustedo ir por alld. para cclatorar ‘en lo que pueda y como curloso. Pero sl situacién procesal en Chile me lo. impl- de: todavia tengo ablerto el proceso por hhaberme fugado de alli con pasaporte falso y es un dalito grave que n0 se ha prescripto. En cambio Alicle, cuyo pro- ‘cex0 si esté cerrado, iré a poser con Yds. la dltime semana de campais, junto ‘con la dolegacién del FRAP formada por los residentes chilenos en ta Argentina, Dicha agrupacién, que integra Marga fa Aguirre, tom6 contacto conmiga para vineularse a las fuerzas populares, y le prestemos toda la coleboracién posible contactos con sindicatos y grupos pero: nistas, publicaciones en los peridéicos: del Movimiento, entrevistes con los dirt gentes sindicales conocidos (como Fre mint, Olmos, Vazquez, ete.). En fin, nc pudimos prestar la coleboracién que hu: biésemos deseado y que con més tiempo hhubiésemos orgenizado, y para peor, hace: pocos meses que he regresado al pais, y Alicia s6lo dos meses, asi que mis ‘actividades presentes no son de las que requieren mantener excesivos contacto ‘con las direcciones peronistas (Alicia le explicaré lo que estamos haciendo). De cualquier manera, les fuimos utiles a los ‘compafieros chilenos en la medida de las condiciones existentes. ‘St el loquero del final de campana y clecciones lo permite, convendria que converse con Alicia cuando ella vaya jun- to con los FRAP que rosiden aqi Hago votos por su triunfo y le ratifieo las seguridades de mi solidaridad —que es la de muchisimos compafieros que en. todo el pais actien conmigo— y de mi invariable amistad. Lo abraza : john cooke — f “esta época de infamia” Compaferos H.M. y J. F. del Sncicato Buenos Aires de FOETRA Estimados compafieros: Durante bastante tiempo he estado pré- fugo fuera de mi domiciio, clrcunstencia por le cual recién esta mafiana lleg6 a mis manos le invitecién para asistir al ‘Cabildo Abierto Tolofénico". Pese @ mis esfuerzos, no he pedido cancelar un com Dromiso contraido con bastante antorio- fidad con compaferos.trabsjadores. del Uruguay, que mafiane regresan a su pais. En consecuencia, junto con mi agrade- cimiento por la invitacion, les hago llegar mis excuses por no poder participar en ese encuentro. Pero también deseo ha- Cerles presente que si bien toda partici. pacion en actos relacionados con la clase ‘obrere constituye para mi un deber y una satifaccién, on este ces0 del Sindicato Telefénico Capital mo 0 particularmente peroso no contribuir al debate y eater presente. En un memento en que {a clase obrere afronta las condiciones durisimes creadss por un gobiemo que elecuta con decicecion implacable la politica del ré- gimen restaurado en 1955, las estructu- as orgenizativas estan en crisis y no pueden cumplir con su funcion de unir en. tune voluntad comin de resistencia las (ebeldias generales pero dispersas. Y eso n0 90 debe al rigor represivo 4o la dictadura militar, que domostré. 09 0 tar dispuesta a todos los extremmos de fe- tocidad cuando, frente @ un paro de acti- vidades, decroté una “escalada” de re- presalias y se comport6 como si hubiese verciéo en una guerra. Esa violencia po- tencial no ha necesitado, en general, transformarse en actos précticos, porque la combatividad obrera ha carecido de los instrumentos funcionales que 1a cohesio- ‘nase en consignas, métodos y planteos comunes. Lo mencs importante, con ser algo que la indignacion obrera he. regis- trado perfectemente, es el nombre de los responsables on diverso grado, de los que hhan incumplido su mandato, demostrado ‘u tomor ante el enomigo, Hlevade o las filas.proletarias una derrota que no se produjo an los hechos sino en la propa- ‘ganda del résimen y en el espirity de esta pobre gente prisionera de las posi- clones burocréticas. las prebendas, los Intereses.individuales. Ellos, los. dirigen- tes claudicantes, demostraron ante el ci- gor de momentos de crisis hasta qué grado era profundo el deterioro de la or- garizecién sindical, Flores de invernade- 10 buscando siempre el calor oficial, en {a primera confrontaclon proyectaron ‘sus temores y compromisos al conjunto de {a clase trabsjadora, como si ésta com partiese esas debilidades nacidas en la Gulce oclosided de los cargos elercides sin vececién revolucionerie, Sus nombres no interesan, y pronto se los llevaré el olvido, y cuanto antes me- Jor. Pero es preciso que no pueda especse larse nuevamente con los trabajadores, que “lo burocrético’ —qe es un estilo, une visi6n, implantae dos por la clase dirigente y no absorb fen la tierra fértil de las bases obror pero no Ia clase han traficado con honor y temblado ante el primer de las espuelas mandonas, para testi ‘iar que diez afios de desgracia no s factor para minar la moral combatier ara todo ese contraste, estén las dir Ciones como la de telefénicos capital, q fen los mementos del peligro dijeron que muchos callaban, miraron de fi {las cosas y dieron cumplimiento I pramesas y dederes contraidos con I aves, quo para los claudicantos del " logo” y “el compromisa” y demas bres. del reformismo pactis” son. st materia de discursos floreac. se Int cendentes. Por esas razones, y pese a no pode expresérselo personelmente, quiero tengan presente que los companeros mitan en nuestra ACCION REVOLUGI NARIA PERONISTA y que pertenecen otros sectores del trabajo, han segui con interés y_solidaridad emocionada, Icha de ustodos contra la prepotencia fos espadones gobernantes y Ia compl tided del temor de parte de quienes te- Rian ebligacion de apoyarlos més alld de las formulas vacias. Y que el espectéculo ‘que han brindado ‘algunos sindicatos {renies que opusieron sus escesas fuer- 72s aun clima viciado por la cobardia ide muches no ha sido en vano ni ha pa- Sedo desapercibldo en todo cuanto sig- nifia, por quienes mantienen inaiterada bu leaitad 0 le causa do Ia liberacién ar- Gentina, para cumplir con la vocacién de nuestro pueblo de realizarse como Nacién foberana y como sociedad sin explota 160 del hombre por el hombre. Caern bas estructuras de la depredacién impe Hialsta y las estructuras del despojo de ste capitalismo que esta llegando el iémino e su ignominioso reinado, Para #90, todo esfuerzo es digno de mencién, tingin acto de consecuencle y lealtad debe ser ignoredo 0 desestimado. Y rosto llegaré el momento de las bate las defintivas, y ol triunfo final, antes. o después, ha de rodimir todee las frustre. tiones de esta época de Infamis. lis abraza fraternalmente John William Cooke Secretario General ACCION REVOLUCIONARIA PERONISTA, (Earle « foes de 1964) Enero de 1959, en una Unided Bisica de Revisso. Una breve pausa de legolided entre 1a prision a fines de 1958, 9 1912 de la hueloa petrolera. y la ininterwmplde Slandestinided en 1a que se veria sumergido después de haber diriaiéo. la. gran hhuelga general revolucionerie de 1959 la desaparicién del che guevara No tenemos respuesta a las insdgnitas de como desaparecio el néroe de Santa ‘Glare y cudl es su paradero actual. Pero f@ tose ol desconocimiento de esos d fe, hen proliferado las conjeturas sobre fos factores que determineron su desa- Baricén, casi todas bacadae on una mis: Ma causal bésica: un onfrentemionto entre His linoas china y soviética en al seno. el gotierno revolucionario cubano, que ‘88 hubria resuelto con el triunfo dela tendencia pro-Moscd, Segtin unos, esto fe éeterminado por la dependencia eco- Rémica y estratégica de ln Union Sovié- Hica en que se encuentra Cuba: el impe: Fidlismo los sefala como prueba de. sa. Icllsmo, ciertos simpatizantes del castris- Mo Io toman como justificactén, epoyada @ rmores de fuera mayor. Otros anotan, crepancias entre un modelo ideal que han concebide como revolucién portocta ¥.la Revolicién realizada an Ia isle. dol Caribe, mucho més compleja e imperfec- 4a To que explicaria que haya sucumbido al bureratismo. Hay. para mencionar otro Matiz les que ven en esa revelucidn un Miotivo de complacencia: s6lo " cabezas Galleries pueden separarse del ejemplo ¥,los putes de la Union Sovietica, y hore roinoré la felicidad absolute en (Ciba, perturbads por Guevare y su prédt. {9 "aventurera do la incurreccién, los es. Hinulos politico.moralee para movilizar o Has masas en el proceso productive, y ‘ttas herejias semojantes, Todos esos razonamientos. #1 margen We sus diferencias de enfeque y calidad. tienen la debilidad intrinseca de tomar ono punto de partida una premisa que Wejan sin cemostrer; a lo més, nos ofre- a = cen como prueba algunos datos alslados © imprecisos, uridos en una cadena ar. gumental donde faltan casi todos los es- labones. Por qué esa falta de rigor, aun ‘en analistas sagaces? Nuestra opinién es ‘Que responde a una tendencia general: zada a encuadrar toda la politica del co- ‘munismo en el esquema del conflicto contre los dos grandes paises socialistas: a renuncia del Che se explica por la derrota de la “linea china’; el triunfo Soviético, @ su vex, queda demostrado por Ia remuncia del Cho. Un caso perfec: to de razonemiento clroular, que da. por establecido que Guovera oncabezaba la Corriente pekiness, cuando eso no paca de una afirmacién dogmética —es decir, que no necesita confirmacion fictica y 8 en si misma una verdad y fuente de otras verdades. Por nuestra parte, nega- mos que los hechos autoricon a deducir que se trata de un episodio del pleito chino-sovietico. Enunciaré brevemente los Principales elementos que abonan mi aflemacion: 1) Le trayectoria de Ia Revolucion Cu- bana y de Fidel Gestro como su lider 9 una ligereza sostener que pueden ser “presionados” ni aun siendo vital la ayu- da de la Unién Soviética, Recordemos ‘no més Ia crisis de los cohetes y su re- chazo del acubrda Kennedy-Jruschon. 2) Los debates en el seno de Ia direc: ‘ién cubana se hen originado en los pro- ‘blomas que iba prosentando Ia construc- ida del socialiemo y no pueden simpli ficarse en uns disyuntiva glotal ontro uno 1 otro de los polos del antagonismo Pe. kin Mosca. 2) Las polémicas sostenicas por el Che con economistas y tedricos ‘no se. confungen con las delimiteciones do. la excision en el campo socialists; edeméo, 1) Guevara partié de situaciones cone tas que se daban en Cuba y de ali lleg6 @ enunciados te6ricos generales: b) sus: Primeros trabajos sobre autogastién, sis- ‘tema de estimulos, métedos de contebi- lidad_6e empresas, etc... se publicaron, antes de que et debate sobre 80s asun- tos cobrase Impulse entre los expertos seviéticos. 4) La politica de la Revolucién Cuber demuestra una aplicacién censecuente de principios fundamentales, que hon ox uesto indistintamente Fidel, ol Chey otros drigentes. en absoluta. ccineiden Cia. Uno de los presupvestos de esa linea fs, precisamente, el rechazo de todo em- banderamiento en Ia contiende chino-so- vletica. En el discurso donde dio. cuen ta de la renuncie del Comandante Gue- vvara, Fidel Castro lo reitero una vez mas (8/10/05). Para concluir, transerivo algunos. de ous pérrafos: “y podemos discrepar en. ‘cualquier punto con cualquier Pertid. Esta (Ia. doctrina marxists) 9 una guia para la accién revolucioneria, no un dog: ‘ma. .._porque el marxismo no es una pro- edad privada que se inscribe en un re gistro” (...) ".. frente al doloroso hecho de Ia division en las filas revolicionarias nuest: politica seri de mas estrecha union, ruestra politica seré la politica de lun pueblo pequefio pero independiente libre"... ¥ la. prerrogativa de educar y orientar a las masas revolucionarlas €8 une prerrogativa lrrenuneiable de nuestto Partido, y seremos muy colosos defen: john w. cooke sores de ese derecho. Y en materia ideo- Togica serd e! Partido quien diga 10 que debe decir. ¥ si nosotros no estamos de acuerdo en que las divergencias que Viden al campo socialists noe dividan 0 nosotros, nadie podré imponornoe come Janto cosa sas palabras. son, para nosotros, un testimorio que hace ‘plena fe. Los. sabe Jotodo- nos imputerén Ingenuidad: pero sus juldos mos tienen sin cuidado... a menos que primero se alcen contra. el régimen, derroten al Ejército e implanten fl socialismo en la Argentina (De wn bots Internode ARP. do 1965) 25 de mayo de 1962. Cooke y ef Ché hablan sobre le fecha patria desde Ie perspective de las Juchas por le liberacién de América Latin cooke versus “la prensa” Nosotros estamos contra “La Prensa’ por razcnes mucho més serlas, mucho Inés fundamenteles. Estamos contra "La Prensa” porque creemos que dlarios do ‘ea clase eon loe que han minsdo las bates de [a nacionalidad: eveomos que La Prensa” es uno de los obstéculos como hay muchos otros en el continents, ‘que han Impedido 0 demorado todas las osibilidades de relvindicaciones prolet rias en Latinoamérica. Nosotros lo deci- mos por encima de las contingencias de la comision investigadora; lo decimos co- mo tombres polities que expresames opiniones personales. Nosotros estemee con los ebrores estamos contra "La Prenca”” porque Prensa", por supuesto, siempre estaré como lo ha estado hasta ahora, contra los obreros y contra nosotros. Este es el planteo revolucionario con respecto a este problema da “La Pren- sa", Nosotros con los nuestros, "La Prex- sa" con los. suyos y con sus ‘liados de dentro y fuera del pais y con todos eque- Nios que, sin estar complicados en las maquinaciones de los diarios capitalistas, creen que estén cofendiendo los intere- see do la pronea libro y do la liberted do prensa, Esa “movilizacion capitaista internacto- nal” a que se refiere el mensaje del 2 Poder Ejecuto —y que Mama la_aten- ‘ida al sefior diputade por Entre Rios— es un hecho concreto que notemos a travée de todas las cadenas poriodfet. cas, do lat agencias roticiosas, de los diarios que estén en manos de los pro- pietarios de minas de cobre o de estafo. de las grandes plantaciones, de todas las ‘compafias con ramificaciones imperialis- tas en América Latina. Lo notamos a tra- vés de todas esas organizaciones de tipo Internacional que 0 pretexto de la defen- ‘sa de principios como la democracia y 1a libertad, que nos son caros a todos los habitentes. de Latinoamérics, estén en realidsd sirviende —eoneciorte © incone tlontemente— la causa de lee auténticoe y verdaderos enemigos de la libertad, de la democracia y de Latinoamérica Nosotios le notimos porae evidente- mente se ha creado un clima internacio- nal con respecto al problema de “La Prensa”, Este diario. es todo un poder, perfectamente cimentado a través de mu: hos anos de vida, Tanto es un poder que en todo el continente y aun en Eu- ropa se han levantado voces de protesta contra el amedo atropello contra. "Le Prenea" @ inclusive ol efor ayudanto do Estado para Asuntos Latinoamerica- nos, Edward Miller, se ha permitide ha- cer declaraciones con referencia espect- fica al caso de “La Pronsa” que, on resumen, dicen lo siguiento: “que las felaciones argentinonorteamericanas 50 habian recontids a causa do la actitud dol gobiemo argentino hacia Ia huelga que determiné el cierre del diario "La Prensa”, que como todo el que cree en luna prensa libre y como amigo de la Argentina debia sentirse preocupedo res- ecto de la situacién de "La Prensa” y de sus empleados: que Ia politica de su gobierno estaba determinads por la opl- hlon publica norteamericana, que en este ‘ease habla reaccienado en tal forme que su gobierno se estaba viendo obligede a dieminuir eu politiea de cooporscién [..-] Por lo pronto, existe un gran desoqul libcio entre el hecho en si, un conflicto tremial. y su repercusién en el plano in- temacional en el cval 'se intenta poner ‘an juego el principio de la libertad de prensa y también resultan extrafes estas declaraciones porque luego se aclara of closamente que ro puede existir inter- vencion de los Estados Unidos para so- luctonar el conficto de “La Prensa” como asimismo que no podré ser levado a la préxima Conferencia Panamericana. {...] Las aclacaciones tionden precisamente 1 expresar todo lo contrario de lo que enumeran. ZOuién le pregunté al decl rante oficioso si los Estados Unidos quie © no Interven en el conflcto de Pronsa”? {Eo que sceso puodo hobor lain ingenuo. quo. cren que. verdadera: Imento foe EE. UU. tionen personera pare Tesoker ol problema de "La Prensa”? iA ‘v6 viene esa sclaracién de quo no podré Tevado a la préxima canferencia de eres? ste es un Itento de coacelén contra “el gobierno argentino: y precisamente, Tmertras por un lado go le acuta de far procurendo intervenir en el conte: gtemial, por otro lado se le formlan tits par la octitud que. tome. de. no _ intervenir, porque seguro se esperaré que [el gobierno argantine edopte medidas de Taoresin viclonta contra os obreros, co- mo en el pasado. sia seria una’ declaracién absurda_si ‘consideramor en su exacta ublcaclén 9 no nos engahamos. Esta no es una "porque sabes Cuil ha sido y cual es la estos imperalistas con respecte. 8 3 paleos ve América Latina Si fuora exacto que etd en juego la eriad de prensa, ninguna vor 20 levan- la libertad de pronsa. ‘¢8 una cosa auténtica, que se esté cillando a través del plan distorsio- ue se esié siguiendo en este asun- Nosotros creemos en la libertad de prensa, de la prensa independiente y de ideoligica, de la equivocada y de Ia esti en la verdad; pero en lo que no 26 morcaniilos y cepitolistes para 1 quo loo recortes ‘dol Estado al servicio de sus intoresos cada z que hay cuestiones gremisles en +, UEs acaso Ia libertad de prensa lo que dado lugar « este deciaracién del se- ‘er Mille? Nosotros afirmamos que no. ‘Los faises de América espafiola. han ldo a través de siglos de sudor y gie, « desconfiar de aquellas palabras sistas y justicieras cuando son for- lades por les labios de sus explo- fl principio de ta I el principio de Ia libertad de a, 1 principio de le libre ec- ded privada y el principio de la libre esa son todos fantesmas y mitos a lerga sirven para acentuar cada mas la desigualdad que ya existe patses coloniales y semt-coloniales. _Desgraciademente, a través de 108 pro- e802 fistéricos de la humanidad, le li do prenss, junto con otras liberi ‘que he moncionade, ha veniéo 0 titulr un instrumento més de. aherro lento, de sometimiento de los pueblos les semi-coloniales j0V6 os vienen a hablar do libertad es con una supuesta igualdad ju- 1. que es el punto de arranque de la exacerbacion de la desicualded so- Suponge que para alicia eguren desde el penal del sur Stupty: Cuando Ud. llegs a lo de Palacio, con su sombrero coronado de Hares de durazno (0 serian jezmines?), me dio le sensacién de un bello junco @ le espera del vendaval que fo abstiese inmisericorde, Us. me dird, senore, que desde entonces han pesado diez afos y —iay!— muchos vendavales. No haga caso del almaneque. seitora, que es una obra mezcuina de burdcratas dei Tiempo. Son otros ‘equinoccios Jos que rigen pars nosotros. Yo le voy a conter 1a verdadera hietorla, le auténtice y reel. De Io de Palacio tuimos 2 su coco, y hablemos de presidentes depuestos y de politicos, en ls penumbre prepieia de un cropdsculo de primavera. Comimos “cher mal", Ud. leyé vorson, Desde en tonces, su adorable sonrisa de conejo iluminé mis Fellces noshes de conspirador en desgracia Ud. seflora, eprovechs pars hacerme victima de sus artimenas & ‘insolencias: puso en duda mi indiscutido talento, mis virtudes para el mando y mi condicién de jefe: cred series dificultedes ¢ mi ‘acercamiento con el sector femenino del Partito: y, en sume, intents tratarme como a otro de sus peleles. Ahore culmina sus esefveros epareciendo en mi calde, a las horas més intempestivas, ova Intranquilizar mi reposo y turber mis pensamientos. (NO er ‘que me queje, eofora: Ud. sobe que nunca me quele.) Dicen que estoy por abendonar esto colds propicio y me epro- suro a escribrle. Por qué? {Ah, seforal no ee que yo m sepa que de Ud. se puede decir Ia fresa del posts: “Qu'estice quill y 2 de plus changeant qu'un matin d'avrll. si ce n'est que le coeur de mon amant” (confio en que mi francés sea menos traicionero que Ud). Pero eso no impide que yo tenga el deseo de verle caminar y moverse cerca mio, mientras su cara conell se anime, Y protlere impertinenciss, y los lugares van quedando contaminedos con su coqueteria Insoportable, Ye ve. sefiore, qué fumildes son mis antelos. Venge @ verme. a lame opelondo e los lezos Indestiuctibles que unen a los cons: piraderes y 9 una relecién de la’ cue lo menos que podré decirse (en el peor de lot exces) os oquella otre Irese: “questa € une piccola, aventura: patetica, milsgrose, © quoei d'amore”. Cooke PD: Esta carta la escribi un dis que me anunciaron mi libertad. La he dejedo como esta Ota vex Cooke | senor Millor ne oreeré cilal_y econémica, las empresas periodisticas como la que consideramos hoy estén en un mun- do de trusts, de cartels, de holdings, de toda forma de integracion monopolista. La llamade “prensa grande” no ha esta ado © este proceso: se han ido Inte ‘grando, concontrande, y al final hen ve niido todos los érganos de pinion de importancia comercial a quedar en’ m: nos de pocos propistarios que. siempre estan vinculados directamente a las altas Finanzas y a los grandes negocios. Cuando el sefot Miller se preocupa de la situacion del diario "La Prensa”. zen ue concepto, en qué principio se inspi ra? SI creyeramos por un momento, en ‘que su aplicacion es sincera y que ver- te esté en juego el principio tad de prensa, le disiamos et tonces al sofor Miller que né necesita trasladarse hasta la Repablica Argentina, pues puede dodicarse a defenderls en su ropio pais, porque esti demastrado que el lugar donde menos libertad de prensa existe es en los propios Estados Unidos. que le cadens Hearst = una cedone de prensa libre © que la cadena Seripp- Howard con sus 19 diarios y todas sus filiales constituye una expresién del pen samiento libre en materia periodistica Pero no nos sorprendemos, porque $3- bemos perfectemente bien qué es lo que Se quiere defender a través del dia “La Prensa El sefior Miller tiene algunos ejemplos fen ou propio pais. Cusndo el presidente do la Ascociated Preso, el oofior Cooper pproclams la necesidsd de defender Ia li bertad internacional de prensa, lo que ‘queria ora conservar la liberted de mo- nopolio de su agencia. ¢A quién le van a hacer creer que esos periédicos son expresion de la opinién ciudadana, y que airigen honestamente el pensamiento pi: blico? Al mismo tiempo que formulaba ‘esa declaracion, en su propio pais fo fi bien deslarado Hegel por haberse com probede los menicbras torwoses que [a ‘Associated Prose roalizé para imposir qu otras agencias menos paderosat tuvier acceso » los medios de informacion John w. cooke ‘Se nos podra decir que-es una afirma- cién que hacemos los peronistas desde ‘equi, protondionde interiorizerros do. co 2 do lee Estados Unidos. No os Una de las publicaciones que gozen’ de ims fe en los propios circulos afectos a este tivo de prensa, como “The Econo- mist” de Londres, docia que a través de ‘estas declaraciones "se preparaba el ca- ming al dominio mundial de los EE. UU.. mediante agencias informativas norte ericaras poderosas desde el punto de iste finenciero”. Por supuesto que al mismo tiempo la Associated Press acusé de Hdéntico dolito a la revista "The Eco: omist’. La verdad se que ambos tonian ra26n. El proceso de concentracién ha do parslelo on fos EE. UU. y en Ingle. rm. A través de los afos ha ido res- tringléndose el nimero de periédicos y forméndose las grandes integreciones ca- pitalistas que manejan todos los medios de informacién, difusién y publicacion de noticias escrites. Tanto la Reuter como la Asscolated Press y la United Press po- seen una red. Internacional yuna orga: higacién privads, al margen de la uel hay [peee menos que una imposibilidad total Pera sctusr alae demée agenciae noti Ciosas. salvo que cuenten con apoyo de. ‘onbiernos igualmente poderosos. Una sola de ellas controla 285.000 millas de cable telegratico contratado especialmente para su explotaciin monopolista Los vastos capitaies que abarcan em- ppresas_no pueden moverse 2 impulsos. propios 0 ideologias, sino que deben pro- ‘cura: ampliac su esfera de accion y de dominio. Le concentiacién de la indust ‘eenduce fatslmonto al monopolio, tiondo fa la expansién y busca ampliar la 20na dominada por fos ronopolios rivales. Es ‘simplemente una ley econdmica de la so- cledad capitalista. De ninguna manera una lucha do ideas. En los EE. UU. las cifras son elecuen: tes. Recuerdo que Tocqueville, en su libro clisico “la democracia en América” se asombraba de la extraordinaria cantidad de periddicos que exisien en torte Ainé- rica: on cada pucblo habia 2 6 3 periédi 0s quo se dosenvolvian con muy pe. quefios gastos y que no perseguian fines de lucro. Pero lo que vio Tocqueville era hace més de 100 afos, Ahora el nimero de diatios ha ido. disminuyendo, -porque fen la actualidad son emproses de tipo Aetamente capitalista y no pueden sub- Sistir si no producen dividendos y dan ganancias a los accionistas, En Norte América habla en 1920, 2900 diarios_y actualrrente hay alrededor de 4700. En 1100 ciudades do. loe EEUU, xy solamante un periédico y on los. 160 chidades donde hay més do uno, ellos se fencventran en manos de un proplsterio © grupo de propietarios. Salvo contadas fexcepciones, la regla es que ol periddico 8 un Instrumente mas de las clases do- minantes en perjuicio de las clases eo- némieas menos favorecidas, Un ex director del diario "New. York Post” y ce la revisia “The Nation”, am- bos muy importantes en los EE. UU., decia lo siguiente: "A ningin editor Io pasa por la caboza fundar un gran poriédioo a menos que su cuorta bancarla logue a 10.6 15 millones de délares". Esto lo dice tun fombre que forma parte del sistema 1" ‘iio 1987. En la Alcaidia de Sgo. de Chile, arestado junto con Cémpora, Gomis, Ke- ly y Jorge Antonio, por las. autoridades Chilenas y sometido a juicio de extradt cién, después de la luge del Penal de Rio Gallegos. perlodistico fundamental de los EE. UU. Después de estas afirmeciones, gpuede hablorse con seriedad de pronea ibro?, 40 pocomos ircctamonto dar @ estas ‘empresas el nombre que verdaderamente tienen? Son empresas de lucro. de inte- ‘aracién capitalista. y que légicamente buscan lo que buscan todas las empresas ccapitalistas: repartit dividendos, favore: cer a los accionistas. No s2 puede creer que exista la posi bilidad de que esos larios, controlados de este manera, vayan a jugarse en pos de un ideal 0 de un principio que puede producirles un quebranto econémico, Nosotros ereemos que euponer que Is Independencia de esos diarios es un he- cho real, constituye una ingenuidad en Ja que no puede caer una persona tan altamente colocada como el funcionsrio que ha hecho la declarecién que estoy ccomentando, Los propietarios de los grandes diarios, de las grandes agencias, estan interesa- dos on sacar un interés @ su capital, Sus Ideas principios —cuardo los. tenes — ‘ubordinen inexorablemente @ ou inte 6s comercial. [. .] Eso, que es une vordad en los EF. UU. fo es tamaién con respecto a los “diarios srandes” en toda América, Nosotros. ereemos que en lugar de dig: nificar af oficio periodistico, esos grandes diarios transforman a hombres dignos, que sen los auténticos productores de este ra mo de la difusion de las noticias, en ver. dederos prisioneros encerrados en carce- les sin rejas, obligados a servir los Inte- reves de sus snunciadores, No #9 puode confundir prensa libre con la empresa periodistion que parsigue un negocio. Nosotros tenemos el mas profun. do respeto por los diarios que a través de nuestra vida nacional han salido 2 combatir por ideas, desde bos diarios de los primeros goblernos, ¢ et dirigido por Manuel Belgrano, pasardo por los jocosos Pericdicos de la época del padre Castave: da, y hasta los de la epoca de la organk zaclén, y si blen con quienes dirigian el pais y esos periddicos podemos tener dis eropanciae ideoidgiceo, o8 ovidents que to. ‘maban la omprosa poriodistica como une manera de defendor su pensamionto. Paro ‘no podemos comparar es0 con estos co- tmerciantes que no bien tienen un com flicte con sus abrores pretenden, a través de todo cate movimiento internacional, que ‘ol gobierno 20 ponga al servicio do los Interosos de los propietarios contra los servidores que hacen y han hecho su er Grandecimiento Nosotros estamos en contra de "La Prensa", Si la comisién llega a decimos que "La Prensa” esté en regla, que no ha trasgrediéo ninguna dispesicién legal, ella Seguira su vida rormalmente; pero nose ‘os estaremos contra ella, como "La Prem 2” seguiré estando contra nosotros. No es éste pera nosotros un planteo ircunstaneial, sino de fondo. Si "La Pron 8" tleno raz6n, tlene que estar equive. cdo el pais, y si tiene raz6n el pate estén equivocados “La Prensa” y todos los que tienen relacién con ella ‘La Asociacién Norteamericana de Propie- terios de Diarios, que agrupa a los duenos dde empresas periodisticas de los EE. UU, tiene la misma condusta con respecto los trabajadores, Se reunio publicamente y prociamé que la liberted de prensa era el principio bésico de la civilizacion occlder tal, y luego 96 reurié secretamente ¥ or ganiz6 brigadas rompohuolgas pera impe- dir cualquier movimiento gremisl dentro de los periédicos, Mis ain: cuando se sancions la I Wagner, que fue llamade "la Carte Ma nna de los trabajadores de los EE. UU. los propietarios de grandes periédicos ¢ coaligaron para llevar una campaiia con tra el senador autor de Ia ley contra la ‘misma ley. Una vez sanclorada todos procursron obiener un veredicto de ine onstitucionalidad de la Suprema Corte de usticia, [...] En los Estados Unidos, dends reside este funcionario que con tanta desapren- ssion ha hecho comentarios con respecto 2 estos conflictos internos nuestros. una ‘comisién parlamentaria investigadora_s0- bre libertades civiles demostrd que 4 de los més grandes diarios de los EE. UU. tenian alquilados espias y celincuentes para luchar contra sus empleados. Y otra ‘Comision parlamentaria demostr que una veintera de e308 diarios importantes es- teban controlados por los truts del papel y de Ia enorgia oléctricn. Aparto do oe tas comprobaciones hechas por sas co- imisiones.parlamentarias, un representan te de la Notional Electric Light Associe- tion decleré que ésta tenia reservado un fondo anval de 25.000.000 de dolares pé- ra distribuir entre los periodicos que fe- vorecian sus Intereses. Decia: “Marchan- do codo a codo, como buenos hermanos, las empresas de servicios publicos y las dl perlodismo libran la batalle en comdn, Nuestro. vinculo més importants es Ia Asoclaciéa Norteamericana do Proplote- ios de Diarios”. [...] Cuando se pidieren mejaras en EE. UU, se resolvié no aceptar ningin eédiga Gtico que de alauna manera pudiese tre bar su més absoluta libertad de accién. Resolvieron no. adoptar medidas contra el trabajo de los menores de 14 aos ‘que en gran parte prestaban servicio en Su empresa. Cuando se proyecto la Ley Copeland, que tencia a impedir Ia exe- geracién de la propegends de produc ‘tes medicinales, consiguleron que no s¢ trataco, Cuando on Chicago se produjo la rou: ni6n de todos los propietarios de diarios importantes, a la cual todo el periodismo © recueria a le: esa Lan ereseneinlec expeaias ‘COMANDO suPERIOR PERONISTA Al Comando de Exilodos de bre de 1957. io trascendental importancia, entre les “imlsmos periddicos de EE. UU. circulo un F20 humoristico que dice mis o menos: wxplotarios y despedirlos, la libertad de engafar al préjimo. liberted de ganar el 37 por clento, famos a Chicago, pero no olvidemos [que la gente piensa ‘que nuestra batalla ‘Woertad _Esa es la concepcidn que nosotros te- 08 del actual conflicto gremial, y co podemos comprobar, ésta es también ‘a concepcién que tienen las mases pro- teriss y los servidores do los grandes fiasios con respecio a estas empresas tipo capitalista. [. ..] sta no es una modida de temor, como cia el sefor diputado Santender. Cuan o el presidente Perén ers el candidats fuerzas populares. no tenia. més dos diarios a su favor. y gand la ecién. En los EE. UU., el presidente It tuvo el €0% de los diarlos en Y¥ gané la eleccién. Yrigoyen, uno > los triunfadores mas clamorosos. de @ historia argentina en materia electo- ‘tenia en contra la cast totalidad de dries. coapatiacoe qty por recoluciéa CaS. ws 1/1227, tor eaiseado tome La Jatioion peirin war lee qe aebuaiatate pooweny hasta taste les exas guatitvdaee por este Coane Sapertinen cuenta que colavente Ueses wis sAreeteaente. per ol Coma Superior Pero Altes partie ait 2) de dietestre 0 22376 Se recuerde # os compareras que, por resolcién CS. Nt 1/1957, han ead alo todos Tao cedercisos expades Con anfororded ai %8 Werrisbeb te 1057, Solemonte oa dees de Gumancos te leds pod cast Tae oon et Ianto poteen, hanto tanto los acon iatutas por te Cooney ene Debe tenerso on evente que solamente ioren valle les coaterers expe Ales crectamenta por a! Conando Suporor Peroisa's pasty deh oe oe he canna We Age. credesciales expeditas eos antarto- Anamate Lee Jefes de Cosandoe te 8 de febrere de 1958.— J bh CIRCULAR Nr 1/1958 4 de tebrero de 1998 Juan Perén John Cooke COMANQO SUPERIOR PERONISTA Kite 1028 Cooke lima cid ard tas hrecins mss mprintes toy Te) Lntonces, ;c6mo se nos puede decir y er creer que ésta es una medida de temor? Es evidento que las fuerzas. po. pulares no creen en la imparcialidad fen la objetividad de estos grandes po. riédioos, que deben, logicamente, servir directamente os intereses de los gran- eo avisadoros. 4Cémo cree ol oncargedo de Asuntos Latinoamericanos del Departamento. de Estado que existe libertad de prensa, ‘cuando esos mismos diarios que ‘en un pais vecino nos critican por el problema de “Le Prensa”, no dijeron una sola pal ‘bra cuando los’ propietarios de las mings de estaiio fusilaron a centenares ce Obreros yy llenaron de sangre los hogares proletarios de un pais hermano? C6mo piensan esos sefores del De- pertamento de Estado que nosotros va mos @ creer en la critica que nos form. lan tos dierios que sabemos estén di- rectamente vinculados a le industria det ‘cobre, del estar, del caucho, a I des empresas del canal de Panamé, a las ‘empresas de servicio péblico, cuando es- ti demostrado, a través de documents. ién seria y estudios concienzudos, que los diarios que se hacen eco de todas estes manitestaciones de tipo capitalista son, en el fondo, los resortes de un gran a mecanisme que persigue el mismo fin ‘que persigue "La Prensa’ ao pronea grande es Ia prensa contro la que nosotros tenemos un sgravio. Te ‘hemos un agravio. mucho més profundo, Recordamos que son ellos los que lan- zaron la teorie disociadora de la nacio- nalidad y nos quisieron hacer procamar doctrinas internacionales que iban a ser ‘nocivas pare nuestro pats. Son ellos los ue hablaban de la necesided de prose guir con nuestro tipo de economia de ‘produccién uniforme, la concepcién que les parecia idilica: ef sistema por el cval nosotros produciomes el cuero, lo men débamoe a Inglatorra y luego comprébe- moe lor zapatos. 2C5mo creen que po vamos a tener profundos agravics, agravios tan ser que no et por via de un conflieto 91 rial que nosotros pretendimos buscarlas tuna solucién definitive? :Acaso somos la primera fuerza popular que enfrenta al diario “La Prensa” y que es objeto de los ataques de ese diario? No voy a leer las cosas que el éiario “La Prensa” dijo sobre el Partido Radical, Porque eso no tiene absolutamente nin: {guna importancia. Lo comprendo. No es tun buen argumento para este asunto, Pe- Fo voy a leer lo que dijo Hipdlito Yrigo. yen sobre ese tipo de periedisimo en nuestro pels: “Los pueblos siguen alton tando Ia'luche contra ol vicio y Ia imps dicia triunfantes, sin contar of siquiera con una prenea nacional que levante 10 mente y juzgue los sucesos en su ver- dadero significado”. Esto lo odservé quien fue jefe y fundador del partido de los sefiores diputados: la ausencia de una prensa nacional. Cuando decia eso el pre- sidente Yrigoyen hacia ya 45 aos que existian los dlarios @ los cuales nos es ‘amos refiriendo, De la gran prensa dijo Yrigoyen en clerta oportunidad: "Si las. generaciones presentes pudieran consentir en la com tinwacién det oprobio simulado © apa tado en convivencia con la prensa mer- cantil y abyocta, resistencia que no son Sino variantes del mismo oproblo, st la vida nacional sigulera slends vivide de ‘como para estamparle cl sello del desprecio y la y agregata: "A pesar de te- fer a su servicio todos los gobiernos y sus extensas ramificaciones, més las fac- clones aventureras que merodesn en tor. no a ellos, la prensa asalariada, mercan- til y desleal a la fe y a la gratiud pe bea..." De modo, seror Presidente, que podri decirsenos que la medida que vamos ¢ ‘adopter °9 conveniente © 90; 9@ 709 po- dé. Inclusive, decir que es un pretexto para combstir a un diario al que nos. ‘ros, segin las palabras del sefior dipu- tado, le tenemos temor: se nos podran decir con injusticia esas y muchas otras cosas, pero lo que no se nos podré nunca negar es que cuando nosotros afirmamos que son diarios enemigos del pals es Porque tenemos la seguridad de que es Tarros atirmando una verdad que ya fue fproclamada por el creador del partido de los sefiores diputedos, y que nosotros hemos conecide y experimentade en cor ‘ne propl . anastasio quitoga leyendas del Anastasio Quiroga es hombre de Jujuy. Cuentero de ruedas de fogones. hacedor de guitarras, él ha recogido en el norte argentino viejas leyendas populares que sabe trasmitir con la gracia, el aroma y el sabor originale Ediciones de erisis las recogerd proximamente en un volumen. Anticipa ‘mos algunas. > una viuda y sus pretendientes Una viuds gue nada queria saber de enoomiento vivia acoeeds por tree cargo #08 protendiontos, Para librarso de el solicits consojo al viejo mat sabio del pueblo. Con mucha astucia, el anciano le armé una complicada trampa para que la dejeran en paz para siempre. Siquiendo ‘ese plan, al primero cue volvié al ateque le dijo lo siguiente: "Yo acepto su pro- puesta si usted se atreve a ir a la mor- gue y se finge muerto dentro de un c2- Jon que lo esperaré con las custro voles ya prenddas. Yo le diré ol dia y la here Al segundo pretendiente te contests: "Ya {que insiste fo acopto con Ia condicién de que vaya a volar un muerto ¢ Is. morgue Yo le diré ol dis y la hora. Y al torcoro Jo recibié muy amable diciéndole quo acoptabe casaree con éI a condlcion de ‘que disfrazado de mandinga se prosontara en la morgue donde velaban a un muerte Y quedé en avisarle el dia y Ia hora. Los tres cargosos. dados do valientes. aceptaron les exigencias. Y un buen dia ella les hizo saber la noche y la hora del encuentro. Y esa noche se presentd en la morgue el primer pretendiente a oct: par el puesto del muerto en el cajon que lo esperaba con sus cuatro velas. As! se ‘metid dentro haciéadose el cadéver. Al rato legs el segundo preterdiente que abla hacer do acomparanto del muorto ¥ estar solo en al velorio de la morgue. Alf estaban los dos cumpliendo las ex'- oncias de la viuda hasta que llegs al ter- cero distrazado de mandinga. Cuando Io vio llegat el que velaba al muerto dio un grito diclendo: "Eh, bérbaro, jehi viene el diablo!” Al ofr semejante grito el muer- to dio un corcovo en el cajon y se sen- to horrorizado, Resucitado el muerto, el acompaniante y el disfrazado de mandinga salleron de fa morgue dando alaridos. De ese modo fos pretondientes. male doroa 90 ospantaron entre si y nunca ‘mas volvieron s marodear ia casa dole wud. la hija del aguila Bajo de un érbol, en el patio de un Fanchito de campo estabe scosteda en tuna cuna de palo una nifia muy pequeth De muy pocos dias acabsba de quedar hhuésfana de sus dos padres y sllé tirade fon ou cuns cetabs solita libreda 0 au suerte, La nifa lloraba todo el tiempo de hambre, sed y frio. hasta que los finos aides de una enorme sguila la oyeron Desde arriba comenzé a olfateerla en el are, Esta équila hebia sido una excelen- te madre de unos agulluchos que le ha- bbian arrebatado unos cazadores. Se la pa- saba lorando y graznando, llamando. ini ‘timente a sus hijos. Volando muy bajo sobre ese rancho escuché los gemidos de la criatura. Ast fue que clavande su feguda mirada enfilé derecho en velor pl ‘cada hacia la alfa. Volando sobre su cuna do palo la tomé por los pafsles y Ta le. vant6 por el aire con sus garrss. Ast la condujp a su cueva en un alto pefesco. Sélo con alas podia entrarse a Ia casa dol Squila. Mamé Aguila edopté a la ri fita procigéndole toda clase de cuidados y atencienes. Pasé el tiempo y la nita ya estaba bas- tante crecida; fue poniéndose bonita y ‘con cabellos ‘refulgentes. Mamé se los lamente y se los contaba uno ol Sguila bajé 0 Ia torre En un matorral vio tun lindo pichicho que andsba extraviado. Se langé en su pesca y lo levanté en vus- lo. €1 pichicho fue un compatero para la rife cuando el équila se ausentaba. Pero, siempre ansiosa por rodearla de juguetes, Mamé Aguila le trajo un loro que andaba atorranteando por las calles. El loro en mudecio de susto y después aprendo a hablar de nuevo. Entre el éguila. el perro y et toro, la nina crecié hasta hacerse FT oie sala voooe es beree a cuova a mirar el hermoso vuclo do Ma ‘Aguila, Un dfa que estaba tomando sol 8 1a orila de Ia cueva vio pasar a lo lejos tn joven. Era nada menos que el principe de Ia comarca. El, 0 su ver, que iba de eaza y con un largavieta, descubrié on lo ‘alto a uns hermosa eriatura al lado de un erro y un loro. El joven al llegar a eu sa cont6 a sus padres el descubrimien. to. ¥ al dia siguiente se presentata alli secundado por una comitiva, Ataron fuer: tes cuerdas desde rriba y bajaron haste la entrade de la cueva. Pero como lla hablaba el idioma do las éguilas no pur dieron entenderse, aunque el joven le ha la sefias para que bajara con ellos al pusbio. \ muy bien, grt taba diciendo; “trde, ‘trda", con le’ que ‘anunclaba el regreso de Mamé Aguila. La ‘lia nerviosa so metié adentro de Ie cue- va, pero el joven alcanzs a tomarle la ‘meno arrancéndolo un cabello de oro. Cuando el joven legs a su casa que un pelacio, hablé a sus padres do la her- ‘mosura de la nifa mostrando el oro de 8 pelo. Entonces los reyes decidieron rescataria. A todo esto, el aguila volvia 4 su cueva trayendo preciosos vestidos ara la joven. Pero sintié que algo raro habia ocurrido, “ZOulen ha Todos enmudeci decia: "tria, tria, al principe’ De inmediato el sculls comenzé 9 con- tar los cabellos de le joven comprobando que faltaben dos. Entonces reprendié ma- famente a la nifa. Pero al dia siguiente Mamé Aguila tenia que salir en busca de comida para la familia y ordené que fo se reciblera a nadie en’ su ausencia, ¥ $0 ech a volar raudamente pot los sires, Pero ta comitiva del principe ya estaba fen marcha para raptar la. hermosa ni Uegado el principe convencis la joven de que balara con 6! por Ia cusrda. Des- _ puts de resistirse muchas veces. la her. masa bsj6 con é1 hasta el pie de una linéa carroza y se slejaron velozmente Guendo Mamé Aguila volvié a. su pe- hesco, quiso morirse de rebia y de pena, ‘Solo estaban el perro y el loro mudos de _ferior por la ausencia de la nina. Todos eepondieren gimiendo y Hlorando sobre: fo que hobie pasedo. Entonces Mamé Aguila se scurrucé on al fondo de la cus a y estuvo cinco diae sin levanter cn ‘bez. El loro se excusaba diciendo que la itiva venia. muy bien armada para sta Glos. Cuando el dull pudo reacioner, “Yo les buscaré, los encontraré y los Werceré’. “Me las pagarén muy caro, Dotia Aguila, que tenia la vista roja de tanto lanto, se puso @ preparar su ateque, noroeste Mientras tanto, la nifa se encontraba fen el palacio del rey. La educaban insti tutrices para que fuera Ia digna novia del principe. Todas las mananas recorrian los dos el jardin, pascando entre flores y can teroe, Pero un dia ol joven selié de caceria y la nifa paseabs sola. En ess momento Mamé Aquila volabs sobre el lugar. Ella quiso esconderse entre ias plantas para ‘Mama Aguila la descubrié y encarancola le dijo: “Ingrata malpagadore, por el dolor que me has ceusado te haré sentir tante pene como la mia”. Y en el acto Ia aplico lun aletazo en la cara. Por arte de magia a hermosa cara de la nina se conviric fen caboze de burro y las dos quedaron Norando. La niéa on el jardin, el éguila ® Ia casa por io o2u- que un servidor vino @ bus- Carla, La encontré detrés de un gran érbol y se dio un tremendo susto: ¥ salié co- Friendo a avisar lo ocurido. A Ia pobrecita la encerraron en un os- tablo con los cabsilos y se la pasaba llo- endo. Nadie se acercaba a verla, sélo el eén y su novio que sutria horriblemen- to. Buscaron todos los médicos del lugar. ¥ ol Squila soguia volando sobre el lacio y vigilando lo que alli ocuris Un dia. considerando que eu ce habia sido mas que suficlente +6 pood fen la puerta del establo y llamé carito- samente a su hija. La joven se le acercd y le dijo: “Asi como has sufrido he su: frido. Tal vez este dolor te enseie a no ser inflel a tus seres querides. Si td y el prineipe no me hubieran faltado el ret eto y hubleran solicitado mi consenti miento no habria pasado todo esto, Pero ya 0 acabon tus penutlas y todos pode- r felices. V puedes reir porque ya me voy, pero asi”. ¥ la cubrié con sus dos alas volviéndola & transformar en ise hermosa, Las dos se abrazaron entonces, Los hbitantes del palacio miraban escena desde lejos y de pronto vieron subir a Mami Aguila que con sus’ enor. ‘mes alas volaba para siempre hacia el lelo. Y en el casamiento de la joven con el Principe estuvieron el perro y el loro, que ara siempre se quedaron a su lado tabos extraviados Durante el banquete de los animales en el cielo, los perros se fueron 2 bafiar en tun rio muy lindo allé arnba, Los perros convinieron en dejar fuera del agua sus rabos pues los necesitatan seces para espantarse los mosquites. Asi dejaron sus rabos en perfecto orden y en tinea al bborde de equel rio y luego se echaron al ‘agua. Mientras les lindos pichichos se divertian ruidosamente, of C-oador quito hhacerles una broma para aeustarloe, Or- dené que el agua bajera a grandee oo rrentadas. desbordando el rio. Los pic chos, tedos afligidos, salieran a los em ujones del agua y sin tiempo pera pro- arse el rabo propio se pusieron el que tenian més a mano, As! apurados del ju: lepe bajaron a la terra. Pero ya aqut abajo se dieron cuenta de que andaban con ra: bos sjonos, Desde entonces se empenan fn olfetearse buscando el rato propio. Por os0 es que dos pertos se encuentran ¥ juntan sus hecleos y 2 ecsrician pe- rrunamente con un batir do rabitos, unos olfatens. un guitarreo de pulguisntos,, sl. quen los bigoteos. un erizamiento de pe- los, un mostrarse fos dientes, un escarbar e ufitas, nuevo batir de rabos, bronco roncar de pechos y gargantas, nuevo olf. te0 y movimiento de orejas, patas y rabos, El encuentro acaba con una camara ya p rra final pera el més chico, y luego, & ‘tro perro en busca del rabo perdido. anastasio qiiroga el condenado La costumbre cuenta que ura persona que no cumple un juramento se condena después de muerte tomando la forma ¢el diablo. Pero también toma formes huma- nas. Generalmente, después de muerto ‘se levanta en pleno velorio y come a los ‘concurrentes, con lo que se convierts en un cantbal de otros mundos. Una vez, el condenado queria llegar a tuna ease do. antiguos eanocides. Poro of perro del lugar ea lo impedia con aus la. dridos. Como lor ladrides eran Intermina. bles. los duefos de casa resolvieron ma tar al perro para que no molestara y tirar su cuerpo al campo. Pero a la noche $2 guian oyéndose los ladridos del perro muerto y los del condenado que hablaba de natices, Los duefice salian a ta puerta y no velan nada, Cerraben 1a puerta y ‘tra vez estaban los aullidos del perro y del condenado. Al dia siguiente fueron 8 ver déndo habian tirado los restos del snimal y reaolvieron quemerloe y enterrar Ine bien hondo, Pero = Ine doce de la roche siguleran los aullidos del cond nado y los Iadridos del perro. Un vielito del vecindario, al saber lo que pasaba to- das las noches, les diio que habian hecho muy mal en. matar ai dngol quardidn de Ia casa que ledraba para protegerls. Los dueios de casa comenzaron la bus- queda del condenado. Salieron con un chicote trenzado en cruz y una vez que Io encontraron lo castigaron y te llevaron al fuego. En medio de las llamas se escucha- ba la vor de eu alma que decis: “Al fin a8 tay ealvado del demonio y voy @ Dios" los duendes Son changuitee desnudes y con gran- dos sombreros. Son chicos no bautizados: que aparecen asi después de muertos, Tienen ua mano de fierro y otra de lana, Si el golpe del duende es con fa mano de tana, mata; si golpes con la mano da fierro no dala y ademés regala pepitas e oro. la voz del destino Este voz la sintio un hombre que que- tia pesar un rio, Pero el rio venia cre- tidisimo, Ei hombre se pero 2 mirarlo y ‘oy6 que do las aguas brotaba una voz que decia: "La hora ha llegado y el hom- bre no aparece”. Se dio vuelta para todos lados y no vio a nadie, Y le voz repetia lo mismo: "La hora ha llegado y el hombre 1 aparece”. De golpe aintlS un gelope ® lo lojes. Ezorutands ol lugar vio vonir Un jinete, Venis a 1s variads. Ast lleg6 hasta la orilla del tio donde fread de gol- fe. El jinete quisa pasario pero el hombre Io detuvo pidiéndole que no buscara la muerte. Como el jinete insistia, el hom- bre tuo que sujetarle las riendes para que no se ahogara juntamente con el ca: ballo. Entonces ol Jinete se bajo del anl- mal y s@ acerco a las aguas del rio para beber. Al primer trago de agua que fond, cayd muerto. £1 destino de ese jk fete era morir con lea aguas de eae rio. Yel rio to llemaba a cumplito. En ol boliche, temando unos vinos, el hombre no tenia més dinero y quiso par Gar con un pijero, que sacé do un bol aillo. Un canario que apenas cantabs ~, E bolichero lo miré desconfiado, Nunca habia visto a ese hombre. Pager con un " péjaro perecia insdlito, aunque penséndo. _ fb bien no parecia algo demasiaco extrafo Yel hecho aperentemente no iba més allé | de su propia significacion, "Lo acepto por te voz". ¥ le sirvio otra copa, pensando que se tratabe de una nueva variedad de _ 8 problomas producides por ta falta de trabajo. El hombre torminé de beber, miré un ato su copa vacia y sslié caminando | como si temblara. El bolichero quieo com partir su asombro con los demis parro. - Gulanos, que entregados a sus sorbos y "4 sus silencios frecuentes no le dieron ‘importancia al hecho. Entonces pens6 que todos los borrachos eran iguales. El de. timo bebedor, al salir, le dijo desde la puerta: “Y. de algo hay que vivir". El bolichero no sebia si se referia el hombre de los péjaros 0 @ si mismo, Todos ‘sus lentes eran changadoros o hacien taroas Ms 0 menos insdliios. Parece que este asunto 20 coments, Porque después mucha gente iba al bo. liche con et pretexto de tomar un vino, [Pero en realidad para saber si era cierto lo do los péjaros, que el duefo del nego. Go exhibia en una joula, Eran clientes ‘nuevos, personas bien vestidas que. sin ude tenian trabajos tijos. El hombre de loo péjaros no habia vuelto desde equella ocho. La policia tambien anduve’ hus. ‘meando por all Varios dies despuée eparecié el hom be tembloroso. se spoyé contra el mos. trader y pregunté on vex baja si podia ager com péjeros. Esta ver sacé un ror. zal de un bolsillo de la camisa. —Canta bien —explice —ATiene otros pajaros? Si, cloro 182 puede saber cusntos? =¥, cast todos. —1De donde los saca? = De ningune parte. Los erfo en tos bol ‘silos. .Me puede recibir otro? Después el botichoro le pregunté si era un profeta o un santo 0 slgo parccido, tenia slgin mensaje especial. Y él no ‘¢a nada, simplemente tenia muchos pa. _Jar08 en los bolsillos. y no habia. ningcin _Significado, Hacia frio y cayeron muchos A partir de excelentes relatos como La lom- briz, La fabrica 0 Artistas de variedades, la cuen- tistica de Daniel Moyano, é: dicado actualmente en La Ri itor argentino ra ja, se ha caracteri zado por ser una busqueda alucinante y al mismo tiempo profundamente comprometida con la co- tdianeldad de la marginacidn, de la migracién Interna, del desamparo on la aren ciudad. moneditas pichones de los nidos y los crié en los bolsillos, eso es todo, El comerclante vio que sus negocios prospereben con la presencia det hombre, hhabl6 com gente interesada y logré que 44u negocio funee Incluido en las guies tun tisticas para que todos pudieeon ver sl hombre de los pileros. Léstima que, cuando legaron los tu tas, los pajaros, aterrados, se fueron. Vé- monos a buscar bolsillos no instituciona- lizados, trinaron, y el hombre se quedé ‘010 como a golondrinita de Oscar Wilde. EI comerciante especuld todavia con “el hombre que tuvo todos los psjaros”, haciéndole responder preguntas ante tes turlstes. Pero esta nueve forma del nego- clo no prosperé porque al hombre le po bbreza te habia agotado oe recuerdos y 10 sabla qué desir, Un amigo. viéndolo tan disminuido, te reqalé un péjaro mecénico, El aparato, eon tods la cuerds, podia cantar hasta veinte ‘segundos y mover las alitas. Pero la cuer- tba un poco al principio, después aburria fon su pequenia vor engolads, El hombre deseaba volver & su cond: eién normal, sin péjaroe ni nada (éstos después de todo habian side un simple accidente), pero por la propegands todo et mundo’ lo hebia identificado con el hombre que sacaba pilaros de los bols- Nos; especialmente los burdcratas. que sumaban miles y no podian ver otra cosa en él. Guando la cuerda del artefacto, herrum brada, se coro, el bolichera le sugirié que centase 1’ mismo como el pajaro mecinico. Esto entretuvo todavia algun mpo a los turistes, que tinalmente de saparecioron sburridos Por pudor no valvié més 9 ese boliche. Andaba en los boliches de lot euburbios, ¥ a la tercera copa sacabs los pedszos del péjaro mecénico tratando de imitar con su propia voz el canto de la cuer. da rota, El estuerzo casi constante de imitar te voz de un pajaro to lev’ a adoptar sus actitudes. Y en realidad, pare quien ob- ‘serva bien, este hombre es casi un pé Jaro. De los costados errugados de ‘st ‘camisa grasionia parecen broter, a clertas hhoras de la noche, cuando ol boliche ests Meno de humo y de amisted ilusoria, al: gunas plumas sucies bestante convin centes. ‘Aquellos parroqulanos cuye fraternidad ura un poco més que el efecto del al cobol le dijeron que para cantar no er nnevesarlo mostrar los pedazos de! péjaro tote. Asi que iltimamente sélo cantabs, Poco después, cuando el conto también envejecis, lograton que dejase de canta: ¥ 80 quedara quiet simplemente, porqus Su aspecto era suficionte para satiefacer |a curiosidad de ios visitantes ocasionsles De manera que sélo con su aspecto. sin sacrificar dignidedes resistencias Ultimas, el hombre obtiene todavia. slg as monedas pera pagar a copa con ly ‘que pretende convocar. gor lo general ‘naulmente, el recuerdo de sus. pajeros La Rioja, 11 setiembre 1973 Toda politica de la felicidad ins- taura la alienacién que intenta superar. Toda propuesta de un objeto para Ia carencia no hace mas que subrayar Io inadecuado de la respuesta a la pregunta quo Se Intenta aplastar. No se trata del hombre, ese espantepéjaros creado por el liberalismo hume. nista del siglo pasado: lo que se discute son sus intercambios. Ediciones Nos C -?. . éctor tiz0On parabola Ahora es el tuna del Zurdo y todas as miradas comienzan 2 ester pendien- tes de su mano sin un temblor y sin em- rg dispuesta ya al movimiento pos. ‘rere. El Zurdo avanza un paso y en un Instente lo recuerda todo. Sin acatar prudentes razones el Zurdo habia resvelto prolongar ol asodo, a pe do Ia tormenta. (Cuando cruzé ol rio spenas si las aguas Hlegaban 2 Is cincha. Miré al cielo y pudo ver un ave oscura cruzarse oblicuamente en su camino, Pero ningin recelo lo de- ‘two. Después vinieron los lamentos, Ie coca ya demasiado trasegada y el alco- hol. Para colmo te caja y unas letrillas de ‘ propésito. El alcohol le ilumin6 los 0108, y el deseo, Paulina —una de las dolien- os dicciséis, mejor do la tormonta ya ostaban Juntos, refugiados debajo del poncho azul, on un rincén oscuro del cuarto contiguo al de! velatorio: y la mano del Zurdo, 1a mis- ma mano, fue al encuentro de la mujer. En los olmos y en las puntas de los sauces comenzaba a retornar la prima vera. Habla sido caluroso el tiempo en 08 dias, pero, de repente, un temporal vencid al calor y la neblina se acosto so- bre los corros, doscendié. al valle, a los ccaminos, al cementerio, hasiéadose més densa sobre el rio. Era la modia tarde do un sébado y por esa razéa_habla hombres desccupados fen el pueblo, hombres que Irfan a con regarse cémo a desgano en el boliche, donde el patrén, con el pucho apagado entre ls labios, tampoco demostraba an- sieda A es0 de las cuatro regreso el lechero con la noticia de que no habia podido cruzer el rio. Llovia formidablemente en Jas quebradee, —Ahora to hae porjudicsde —le dijo alguien. indicando los taches. El lechoro No habl6. Emponchado, da un salto des- cendié de le jardinera y después de ob- Servar la grupa de su caballo, reluclente de sudor por el apuro y el esfuerzo de! regreso, entré al boliche masticando el tallo de un clave, El almacén era sobre fa calle, fa dies del poblado, que nacia confusamente ve. ina el lugar dispuesto para cementerto ¢ iba @ morir en la playe dol rio, No ha bia tranqueras fronto al oliche y por 80 los parroqulanos dejaban eu caballo Desde A un costado de los rieles, publicado en México en 1962, la obra de Héctor Tiz5n, argentino de Jujuy, es una exploraci6n constante de los pueblos marginados de la Puna, de su cultura, de su historia. Esa exploraci6n, miltiple y morosa, que ha roto las viejas pautas del regio- nalismo y que alcanza su mayor profundidad en El cantar del profeta y el bandido (1972) instela a Tizén entre los escritores més importan- tes do la literatura argentina actual. atado’ @ un alambre que rodeaba el tron 60 do un celbo viejo y robusto que habfa cerecido a un costado, Después que el lechero lego —y cuan- do ya se hablan juntado cuatro caballos debajo del drbol— empezé a caer una Ilo vine fine, imperceptible, que més que Hovizna parccia vapor. El Zurdo no habia llegado atin Unas gallinas, apichonadas, confundl ddas tal vez por temporal tan taro, cruza- ‘ron con dignided el patio interior del bo- liche rumbo a la higuera. No era todavia la hora del suefio, pero lo buscaban. Tres gauchos bebian sentados junto a ‘una mujer. El mas joven parecia borra- ‘cho © Insistia con el comienzo de una historla acerca de un tordillo arrecho; el Joven no enhebraba bien el cuento y cuary do llegaba a la dificultad —slompro Ie ‘misma— trataba de relree, tomoba un trago més y volvia a lo mismo. El bolichero. para amenizar. puso el disco en el fondarafo: una marcha mil: tar. €1 resultado fue buero y, al cabo de repetirlo por tres veces, la gente so ha bia congragado en el patio, sentada en lun banco junto a la pared. Un parral in- iplente intentaba trepar rumbo a los lambres entrecruzados del patio; @ sim ple vista cualquiera se percataba del ex traordinario esfuerzo de la. planta. Perr sando er 080 estaba 0} bolichero, ya doo fentendido de la victrola, cuando un ro. impago ray6 el cielo por entre los. sar ‘mientos ambiciosos. Y en ese mismo momento entré el Zur do. Renqueaba un poco de la piema iz quierda pero lo disimulaba. No tlevabs Cuchillo ni cinturén, Estaba pélido y con el pelo y Ia barba crecidos. No fumabe nl rela, Calzaba alpargatas y, a pesar del frio, trata el pecho casi descublerto, lo ‘cual contrastaba con su guardacelzén so edo. Habia logado otravesando Ia dis tancia al paso de su cabalgadura, nervioss ‘por alguns razén: junto al palo del comen. terio se habia detenido para persignarse ero quizés Ia falta de costumbre le en- torpecié la mano y al dar vuelta en lar: bera distinguié a las mujeres enlutadas, lavando. Las mujeres observaron al Zur. do, sin saludarlo; golpeaban desacompa ‘sadamente los trapos sobre las. piedras, Con ef relémpago aparecio el Zurdo en el boliche, diran después los Y. para peor, cuzndo ya do la vietrola habia cosado. Sin vacilar, el recién llegado atravese la galeria y se sont sobre un cajén de vino, solo, No quiso beber. En es9 vob vio @ sonar la victrola y algunos empeza- on a jugar al sapo. EI ritmo. cadencioso de las fichas motélicas al caer, comenzé 0 transportarlo, ‘Al montar aquells. vez, de_madrugeda, aligerado del amer de Paulina, sintié que ‘estaba ebrio. Era un amanecer oscuro: Ia Hluvia, intensa, se haba convertido en Ilo: via triste y_persistente. Subié al cabs No sin despedirse y olvidé el sombrero; era la primera ver que le ocurtia eso. Co- ‘menz6 a andar por la explanada y luego de superar el angosto sendero que atra- vvesaba los malzzles, la tlerra se cabo y las patas del caballo inielaron una mar- ‘cha cautelosa por el pedregal do la pla- fe. EI ruido eordo del agua ora impre ‘lonanto: el Zurdo apuré al caballo. que ‘se resistia, pero le chicoted la cabeza ¥ el animal tenté el rio. No fue més que ‘es0. y el jinete sallé despedide por e pescuezo para caer dentro de la corrien- te, Alli, of Zurdo comenzé a detatirse contra las aguas que, desde horas atré vvenian arrastrando pledres y troncos por la creciente. Era imposible nadar y cua do ya se habla abandonado a su presunto destino, algo como una fuerte corren toda lo s0i6 on vilo arrojindole contra tuna pledra do la orila, on terreno inofen ‘slvo. Enseguids s0 dio cuenta que san- araba de una cela y. al mismo tiempo. al ‘querer arrastrarse hacia la arena. sintié tun dolor en le piemna izqulerda. Miré a uno y 2 otro tedo en busca de su caballo ¥y cuando quiso gritar laméndolo, una pre- ‘sencia le abogd la voz. El Zurdo vuelve shora @ esta realidad de aislades risas de hombres semlebrios. Continda la victrola a duras penas y los jugadores de sapo se animan apostando ‘cervezas. El pateén mantiene ol pucho manoseado entre los labios y llegan en ‘ese momento dos hombres més y Un mi chachito. Son las seis de Ia tarde: caen las fichas del sapo. No supe cuénto tiempo transcurié, pero al amanecer todo se hallaba en el mismo sitio. Miré de pronto el luger pre- iso pero ni alll ni en otro habia seal ‘alguna de pates de caballo. Al levantar fos ojos al cielo alcanzé a ver ts oltime Imagen de una lune muerta. Observo lo, le corrlente ceudalesa, y sus ojos abarearon en una larga mirada las squas; la mirada remonténdose rio arriba hasta in punto indeterminado en que la co mmiente desaparecia, Se pierde el sol y la luz comienza a sbendonar e! desierto campo de batalla, Sobre la playa rondan ya las primeras aves oscuras y hay lanzas rotas, carros estruldos y cascos de bronce con pens chos de crin. Targitao, herido y extravie- >, busca a su trope diezmeda en el des: fladero. Lae avanzadas porses lo dojeron por muorto. ¥ aqui me encuentro desval o, janto a estas aguas que no cesan de flu, como 1a sangre, salpicéndome la ‘amedura; invicto hasta la luna de anoche, livélido desde ahora, arrojado como uns ‘samenta a un costado del campo, viendo ‘cémo el enemigo pisotea Ia tierra de mi ficimlento. Pudimos dernos cuenta y obe- decor las senales. Los caballos tenian mie- do y en el primer encuentro fos aurigas feron destrozados. Ahora Io sé! Los doses protectores nos _miraban triste: iments desdo ol Olimpo. Fuimoe eaberbios ante ol vuelo del Sguila. Un dguila volan- dh a la Izquierda del ojército llevab Si ico una sorpiente colorada que ‘gur0s. Tres noches antes Targitao se despedia sin saber que era su tltima noche de fnor. Junto a la puerta sintié su presen- | a. La habla esperado demasiado tiempo ro ahora seria compensado, Batide, Iue- 9 del bafo, unglé su cuerpo con aceltes J Perfumedos; cliése un manto liviano con 1 brocho do froncs en el pacho y un J cturén do suave cuoro de cabra, y ast | Ia contemplé e! guerrero. | A media tarde fueron emboscados y | luego de una hora de feroz combate los cuerpos muertos casi obstruian la ee riente del rio, Ona lanza, peganio de soslayo, le despojé del casco y al ir a blandir ‘su espada sobre el cuello de un fenemigo, una flecha se hundié de pronto fen la correa de su escudo al mismo tiem- po que otra se le clavaba en el hombro aquierdo; rapidamente Targitao, con su honda de lana, trend 1a hemorragia, Se hhabian lanzedo al combate sin haber he- cho ofrendas a los dioses, Se plerde ol sol y el Zurdo se incor ora, Ouizés s6lo él 20 ontora quo he Megado alguien. £1 Zurdo lo reconose on- seguida, no bien se asoma a la galeria, fen el moments en que el forastaro ata su caballo al alambre que rodea el érbol Y cuando se agacha para recoger una flor de ceibo, vuelve a vor le Feluctente vsina de tres puntas. El forastero avanza; unos diez pasos se detiene y lo saluda on Jos ojos. Lleva puesto el sombrero negro, Impecable, sujeto a la mandibula con barbiquejo blanco trenzado, calza bo tae bajas y espucles grandes de media wolta, traje azul oscuro y poncho. Ensoguida todos lo eabian: el forsstero ‘era oriundo de los pagos de Ocloyas, © alguna vez (alouien lo afirmars después) le habrian avistado en borrosas tabeadas de la zona, y hacia tres noches y tres dias que cabalgsba, hasta que dio con Yala, Pero el Zurdo, como buen pagador, sa ba algo mas. Era el mismo jinete que le hhabre salvado del rio. ¥ sostuvo si pro- ‘ese: ehora estaba sano, habien florecido los primeros celbos y cumpliria su pala bra; y, como dobia sor un huceo neutral ‘el Zurdo llamé al holichero y le hablé al oldo, mirando al suelo, iOh, extranjero! —exclamé Targitao desde el suelo, —Si mi desconsvelo es grande, mi deshonra es mayor; devuél vere a la vide separandome la cabeza on ml propia espada, Te lo mando. El que do pronto se habia aparecido # tunes diez pasos del soldado caldo, deter taba la figura de un mendigo snciano, desdentado. soncionte y ealvor vostio ti. nica raida y se epoyaba en un basta resolandeciente. —iDios! Qulenquiera fueses. Invéido no merezco la pena de vivir. Arriesao los Ultimos alientos que me quedan a cambio de la fuerza suticiente para alcanzar las Vanguardias de mi tropa, ahora en re- ‘rada, El otro dio un paso hacia adelante y ij: —No esti on condiciones, Targitao, de batirte con nedie: tu lanza esté destroze 4a, perdida tu espada podoroca y le fuer 735 no te respondon. —¥ diciendo eso ‘avanzé un paso més: —Pero acepto Ia ropuesta. Jucaremos tu suerte.a Ia taba Segin de qué lado caiga e! hueso podrés reunirte con tu ejército, o serés mi obe- iente esclavo, para siempre Targjtao acept, El Zurdo se incorpor6 en sefal de asen- timiento. ‘Ahora ya el bolichero regresaba con fa taba en la mano. Los demis se abrieron en circulo. Habia entonces mucha gente reunida. EI agora de Yale. Tom el recién HNegado el hueso entre ambas manos yy, ‘in alardes, lo ech al aire dibujando une parabola perfects. Los demas iran luego que la taba describio una. trayectona br llanie, como de fuego. Y el hueso en ‘suerte fue a clavarse en a tierra hume- decida, ‘Ahora es el tuo del Zurdo. Este es el trance final, hijo de Ascatalo y de Mortoves, hermano, amado de Me ‘npentes, Es el tune del Zurdo. EI alre esté quie- to, ni una réfaga sutll sobre les hojas, ninguna yoz. Las risas han celledo. ¥ te Victrola. Lao miradas de todoe, pendientes de esa mano izquierda que aprisiena Io taba con maestria. La mano del Zurdo retrocede, el brazo se: apresta a imorl mirle una fuerza adecuada. una fuerza prudente y adecuada de la mane al hue: ‘30; el brazo comienza a describir un sec- tor de arco en el vacto, la pardbola, et ademan de pronto estan alll, en el aire, fn Ia historia, en ese instante Inmortal y rotunds. Y mientras tanto, el alma este Pronta a salir de ese cuerpo transitoro. Un viento leve sacude ahore les copas do los diboles y cron al suclo grucsas gotas rojas. A lo lejos se escucha la ina del émnibus que llega y. mis aqui las lavanderas golpean las pledras y sus gestos son méscaras fluctuantes en el ‘agua donde antafio lavaron los cadéveres; aguas del amor, de la concupiscencla, amo: rosas aguas de los ahogados, sudario y alimento. Un carancho he surcado el despoblado cementorio y el veredicto se cumple: la taba esta en el suelo Envuelto en un pladoso poncho, Ta alguien impensadamen- 198 una somera explicacién: El sincope, FIESTA LA SABANAS PARA VIVIR AMAT monte grande Coimado por la tierra y por el pueblo, seme y sangre de le patra, tenias que crir, Pablo, cuando los asesinos apuna- n'a Chile en la noche de le tralcion, fs hora inaugural del siniestro golpe tar, cuando los vendopatrias 20 alza- del arro. La pufaleda transpaeé les ontafias. Jos voleanes, lor riot, las mi los vifedos. el cobre. el pan. ol mar Pacifico y al corazin del poeta, En este mento inmediato todo se parece a ia Muerte, muerte para siempre y nunca Jo el crimen persiste victorioso uerte extendida sobre el terrtorio cal- de, sobre el pueblo una vez mas ver Y sesangrado, Pero nosotros, Pablo, e ot ste ‘o ninha oxteria sObre © norte de Hemda. fornia efbre 6 neeio tena. tooo goon uciésive tntexessen’a “Cripie", tanto Yinics tos con com sun publicagio. f fi tes We ee ofzeunstfinedas atuate oles nfo te 2 2 no Breast, ; scuscewen @ recedssento. sabemos que no es asi, pagamos caro por festa certidumbre, por este saber sin va cilaciones: el pueblo volverd a levantarse por sobre las cadenes, las rojas de las séreeles. los pelotones de fusilemiento sumario. Le poesia renecerd de ti, Pablo rmuerto © inmortal En ol mundo do pronto vacio, ein een tido, apenas ausencia y lute, busco Ia vida en tu muerte y te reencientro en mil instantes diferentes, en los lugares més diversos de los continentes que. recori- mos con nuestros pies solidarios, rumbo abierto en una larga caminata hacia ade- lante. No te veo solo janas, nunce ence- rrado en la pequenia soledad del impo- = Waited teretnda | art renee (Ris Verto} ~ Saeco i) a Make Dan, 16 ap 7 ‘Geocchone Re joe 40 0 leitor e ednimior, Os Jorge santo velorio del poeta del pueblo fente, Te veo en la plaza piblica, rodeads por el pueblo, naciendo de él, haciéndolo ser y nacer de ti. Te veo junto @ los am ‘gos, los que ayudaron a construir fe vids jTantos rostros! Un cuadro debi6 haber sido pintado para que el tiempo perdurara més allé de los documentos ‘otograticos, para fijar en la cternidod la generosided y la decencis, la grandoza dol hombr Para que también se fijaran —zpor qué no? las duras huellas de ta caminata, los momentos terrbles, las pruebas mas tremendes, el miedo y la dude, Ningda ‘combatiente deja el campo de batalla sin traer en el cuerpo y en el corazon las ‘icetrices de las decepsiones y de las = | jorge amado angustlas. No vislumbro, sin embargo, de- ‘sesperscién ni amargura. Rostros abiertos. fen alegria. escucho las palabras limpidas fa risa suelta, siento renovada la con- fianza, En 1968 viniste por citima vez al Brasil pera inaugurer el monumento a Lorca, rea- lizado por Flavio ¢e Carvalho y levantdo fen San Pablo, Al descender del avicn en Behie, donde, al final de tu estadia, qul- siste descansar en el calor do la amista ime dijisto con aquella vor do antigua fa tiga: Hermano, no vamos a preguntar por los amigos, murieron todos; somos ‘tan pocos los que quedamos. hablemros sélo de la alegria de vivir. 20u6 hiclmros, sin embargo, en aquellos roves cuatro dias en las calles de la vieja cluded, en el puerto de las pirag viendo el mar, en Ia mesa del restauran [pobre del Mercado, en el claustro de oro de la Iglesia o en el bullicio de la Facul- tad, sino recordar a los que hebian par- tido, Mevéndose, cada uno de ellor, un pedazo de nuestra vida, dejéndonos en el vacio de la muerte la presencia intacta y completa? Son tantos los que se fueron, tantos. ‘Al pensar en ti, en este instante de tu partida, en la batalla de velorio, en la noche de los asesinos desbocedes sobre Chile, reveo el rostro duro y tierno de llya Eremburg, el combatiente al que ja- més dieron un instante de reposo, a quien Jamés concedieron armisticio, el amigo primero, 1a conciencia del hombre, Esta- mos td y yo, Matilde y Zelia, en la mesa del departamento de la calle Gorki, con Luba, Sacha Fadeov lieve al hombro la carabina con la que habria de matarse, Pudovkin con su camara y su raqueta de tenis, Savitch con su pipa prendida, y ‘Nazim Hikmet, con su pecho abierto, su Corazon expuesto. Estamos ante el queso y @l vino y podemos expresar ta verdad vin mis alucinads, tentes. Todos ellos se fueron, tragados pot la estamos enteros_y po: batalla. Eramos muchos, somos pocos pero no importa, Plantamos la semi En los castllos de Dobris, surge el ros- tro carnoso y leal de Jan Orda. (Recuer- ‘das, Pablo, nuestro miedo en los dias im- Posibles, pues Drda era un nifo bueno © Ingenuo —en el frio castillo de: las intr ‘ges 0 en Ia calida noche de Isla Negra, ‘comendante de la imaginario escuadra en fl abordaje dol amor, recuordae? Eramos muchos, somos pocos, Ia muar- te pasé muchas veces a nuestro Indo. Eso fue lo que dijiste en Bahia cuando re- ccordamos la cena en casa de Brecht. ‘aquella noche de amenazas, noche exten- dida sobre un filo de navaja —Berthold ‘era un soldedo con su tunica rota y nun- ca faltaba un peloton de imbécies dis- uesios a disparar contra ¢l. De la ma- rugeda de Santiago broten Rubén Azocar 1C1UuS historia natural de pablo dylan thomas los angeles, 1948 Buenas noches, Pablo Neruds. Acsbo de escucha al primer pajaro de la primavera pense en t. Parece increible pero canto ® rr Me Incliné sobre él ero tampoco se a ‘agonizabs, tenia miedo jaba, ‘el primer pajaro de la primavera. Todavia hay pajaros que cantan en las noches de primaver Estoy solo y todo es silencio. Mis hijos fa duermen. Mi rebelién, momenténeamente, bién descansa. Lo cierto, poeta, 38 que te tengo presente, Ie corveza esté bien helade lo peor ests por venir. Hoy penaé en Lorca. Lo vi nitidamente camirando ontre soldados. Sus ojos ‘me mirsban entre dos cailos do fusll, doafigurados. Hoy supe que tuvo miedo, tuvo miedo de. morir. Tuvo miedo, pero no dijo una pala Yo también tengo misdo, hermane. on cuando tenfe qué corer, como lo indicaban fugaces imigenes de las grisos plantas de cue pier, El muchacho, cuya piel negra no hacia ‘menos terrible su aislemiento en el es ‘ile incoloro, iba con las manos vacias. Uevaba un taparrabo de tela de corteza yen toro del cuello una cuerda que una hoche habia pedido al sofior Judd. De ella colgaba el cuchillo con mango de hueso, regalo del Jefe de Ia tribu. Estabe solo, ues, y también desnudo. En clrcunstan- ‘les normales, las muchas ocupaciones ‘que hacion agradable y posible ta vida habrian ido dstrayéndolo do eu aislamien to: hubiera podida seguir loo huclles. do los animales. 0 escucrifar entre la maleza ¥ los troncos. o buscar agua y miel. Hu- biera podido usar los ojos sin cesar. Pero en aquellos momentos, sus ojos no podien Ver con claridad y ‘sus persamientos ‘shondaban la soledad. Los terribles pu- fales del pensamiento, afilades por el ppual dol sol, se hundian en su care. Por 1a noche, esos pensamientos, menos precisos, se mezclaban o se identificaban ‘con los oapiritus que merodeaban los Iu- ‘gares dondo rosolvia dermir. Romeu. LITERAL La palabra. El teatro. Los mitos. Las escenas. La politica. Los textos. El tiempo. Los diversos espacios. Las muecas. Los gestos. German Garcia. Luis Gusmén. Osvaldo Lamborghini. Josefina Ludmer. Julio Luduefta. Lorenzo Quin- tero. Jorge Quiroga. Ricardo Ortolas. Horacio EDICIONES NOE Tucumén 1655, 3° D ~ Tel. 468301 - Buenos Aires ecual fue la [Ral continué Jackie su camino. Aunque hieiora una hoguera, no lograba ealvarse de Ia oscuriéad. Cuando era nececario ca vvaba en busca de tubérculos o apedresbe tun lagarto © sorbfa las raices lianas de liquido de algunos éboles y hasta el ro- ‘clo que perduraba en las hojas, porque ‘itigar la sed y apaciguar el hambre eran hhabitos adquiridos. En une ocasién siguié @ unos emudes y logré atrapar a un re- zagaco: cuando ya iba & tomar el cuchilo, sdbltamente prefinl retorcer et pezzuezo dol ave, Nunes supo cémo perdié el cuchillo; pero tiré la cuorda rota y pringose, sa tisfecho do quo esa deagracia lo depera: ra al menos clerta ventaja Sin. embargo. aliviarse del peso det arma no alivié su espiritu. Como estaba libre de obligaciones y no habia nadie a Quien observar, a veces se ponia a jugar ‘como si todavia hubiera sido un nifo; pero esos juegos efimeros no lo absor- bbian de! todo, porque los ninos adquirian muy temprano el sentido del deber. Por lo menos conecié el consuel® del ‘movimiento. Viajaba sin cesar. Une vez, al ‘anochecer, encontré en une formacién rocosa Ia’ osamenta de un eabello. con el cuero gris ain adherido y, a ev lado, luna argolla. de la bride corroida por ta herrumbre. Insensiblementa, el muchacha 2voe6 Ia inmaculada, la sobrehumana ps feccién que sugeria el esplendor de esos arreos. En su espiritu centelleron como en su tierra natal. Tocs la argolla, pero se acercé con més cautela a las ropas podridas que contenian los restos de un hombre. Después pated ese montén y hhurgé_en él. Comprobs que eran cuanto quedaba de aquel hombre a quien llama. ba Turner, aquel hombre de quien se ‘apartaba siempre que podia a causa de su olor: el peculiar olor de los. blansos El muchacho vagabundeo en el cre pasculo del desierto sembrado de moll: hos Inméviles viejos cobertizas, Mas allé de las roces erizedas de bordes crietslinos, encontré un mechén de palo. {Lo arraneé como #1 hubiera sido une plan. ta —patecia cracer on la arena— y mien tras lo secudia al sire lo estremecié | ontecto con ese pelo del hombre bien: co, que experimentaba por segunda ver Era_un pelo fino, rizado, une llama ar diente en la luz moribunda. £1 negro re- ‘conoci6 el pelo del senor Angus. Recordé los muslos de aquel muchacho cuando Cetfan jos flancos de un caballo y su plel rosada brillondo a través de le camise himoda La luz sogule agonizanéo ono! dosior- to. Aunque hubleze oxistide slgune otra cosa en ese lugar. Jackie sabia que ya no le quedaba tiempo para descubr De modo que huyé de los muertos. La oscuridad cayo sobre él casi una mila después, en un monte alto de acacias donde se eché a dormir. Cuando aparecis la luz de la luna, Jackie no la recibid como ura amiga, por que los espirius de los muertos esti: vieron junto a él durante la noche entera, EI tenue eepiritu de Tuer colgaba de Ja rama de un frkol como une zarigicya de su cola. Tras un chasquide de létigoe Y varas, surgié a su lado el sefior Angus en una inmensa. blanca, obtusa columna de luz hirsuta. El muchacha pensé qie tra incapaz de soportaria y se eché arena sobre la cabeza. Cuando el amanecer 96, estaba con los ojos en blanco y el boide de los pérpedos hacia afvera, como en una especie de ataque, Pero ro tardé en recobrarse al calor do's mefiena y la ol este, hablando smo de lo quo habia visto, Mientrao dejaba @ sus copaldas el pels de los muertos, Jackle edvirtié quo hhabia encontrado los restos del. sofor Judd. Durante su travesia, en el resplen- dor del sol y en la bruma de ta mer ris, la imagen de aquel hombre blanco 'y grande anduvo una y otra vez junto a él ‘con las venas en el dorso de la mano ‘gruesas como ramas de érbol y ol rostro Como un segundo sol de cobre, Ese vincu: Jo entre Ja came y ta hosca sustancia de la naturaleza era una evidencie de vida y el muchacho bajaba la cabeza con alivioy humllacion, Jackie se auguraba la gran felicidad que seria hablar con el viejo Dugald. Gvando se ecerceba a Jiidra, se puso ¢ enter. Pero comprobo desilusionado que Dugald habia envejecido tanio que ya era otra ver joven, mientras que él mismo, Jockio, estaba abrumado por la sabiduria de les fie. Por e29 no conte demasiar das cocae a Dugeld, salvo algunos deta. les triviales sobro al motin de los blar- ‘008. Todo lo demis 20 lo guardé para ai Esa desprestigiada catapulta que se llama Premio Nobel convir- ti6 en celebridad, hace tres meses, 2 un escritor hasta entonces casi ignoto més allé de las fronteras de Australia: Patrick White. Su el tono y los efectos épicos aspiran a satirizar la mediocridad cotidian. EI texto que aqui reproducimos pertenece a Voss, una de las més importantes novelas de esto na- trador cuya obra esté ain escasamente difundida en lengua esparo a, La traduccién fue hecha por Enrique Pezzoni obra es una vasta alegoria done Porque ye no es posible comuricarse licigamente con los hombres cuardo ya hha habido una comunién de las almas, y la piel hirsuta de los espiritus blancos habla laceredo la pie! humeda del mu- ‘chacho aborigen mientras se estremecia fen el monte de acacias. Los secretos del pals Iban poseyéndolo lentamente heste sentia que se aduenaban de él es iritue de romotas tierras tribeles, Los nifos de Jildra hulan de Jackie chillando ¥ se escondian en las chozas, Y cuando Jackie se marché, tritus enteras do. no tivos desconocidos golpesban las Arboles al verlo acercerse 0 se sentaban en un silencio de cenize en torno a las hogue. ras, mientras él contaba historias del mundo de los espiritus @ sus oidos poco propicios. Pero nunca habio de su propio esprit, del gran espiritu que lo posela y que algunas veces miraba desde fuera, a tra: vvée de ous ojos, pero que con frecuencia ‘mucho mayor 90 retorcia en su Interior ‘como una vida on las ansias de la muer- te, 0 bullia y latis como la sangre. Nunca habl6 de eso espiritu, porque nadie sino. 61 debia conocerlo ‘Asi anduvo Jackie. Log6 Yyenda entre las tribue. Fue el aime por- turbade y fugitive de ese gran pais por el cual erraba sin cesar. Su vor sala do. sus pulmones y chocaba contra les rocas. hhesta que recaia de nuevo sobre él. Siem- pre hablaba con los espiritus de los ham- bres muertos en la tierra y siempre es. taba dispuesto a traducir al dialecto sus deseos. ¥ si no hubo otros hombres ne- {gros que supieran qué deseos eran eses, fue porque el miedo les impidis pregun- tatlo al profet i < ae =. cattas de thomas mann Estes certas, inéditas en castellano, revelan los desgarramientos y fas tensiones que despertaron, en la conciencia de un gran escritor alemén, las horas tragicas que el mundo vivid durante el apogeo del nazismo. Las cartas provienen del extenso Epistolario, seleccionado por la hija de Mann, Erika, y publicedo por 1a editorial alemana Fisher. La traduccion es de Sofia de Alvarez, al rector de la universidad AL SEROP RECTOR DE LA FACULTAD DE FILOSOFIA DE LA UNIVERSIDAD DE SON Kasrach, Lago de Zurich, Afio Nuevo 1837 Estimadisimo Sefior Rector: de diciombro, Pormitame reeponderle ‘cuanto sigue: La grave complicidsd de la que las tuniversidades alemanas las ha hecho cul: He recibido la melancblica comunica cl6n que usted me enviara con fecha 19 ables de tode esta desaracia presente Puesto que, por haber malentendido te Sumeriplenos Rapdlca Argon: Sutcriptones exter. 1 Bio” 12 délrer Suscripelones terior Vie Avan 1 oo. fe meces 10 dolret tae” 20 Satta Cheques y giros a Ia orden de Editorial del Noroeste S.A.L<.. rriblemente el momento historico, Inc baron las fuereas del mal que devastan moral, cultural y econdmicamente 2 Ale: ‘mania; este complicidad me habia ye ‘amargado en parte el placer del honor ‘académico que hace un tiempo me con firieron. y me habia Impedido hacer has ta el minimo uso de él ‘Acn hoy ostento el titulo honorario de Doctor en Filosofia porque la Universidad de Harvard ha wielto a otorgirmelo, por ‘un motivo que deseo no permanezca ées- Cconccido para usted, Sefior Rector. El documento, traducido del tetin, dice ‘sl; “nosotros, rector y consajo, con la aprobaclén de los honorables inspectores universitarios, en solemne sesién, hemos nembrado y proclamado doctor en fileao- fia ‘honoris cause’, confinéndolo todos loe derechos y honores ligados a este titulo, a Thomas Mann, el ilustrisimo eseritor que, explicando los problemas de la vide a muchos de nuestros conciudadanos, “custodia, Junto 2 poquisimos contempo réneos, la alta dignidad de la cultura ale- mana’, Tan extraflamente contraria a la actual cconcepcién alemana es la idea que de mi existencia tienen los hombres libres ccultos del otro lado del océano y, me es Hicito agregar, no s¢lo de all, Jamés hublera pensedo vanegloriaime de las palabras de oa documento; pore hoy y equt puedo, aun mée, debo oitarias, ¥ 81 Usted, Sofor Rector, hublese hecho fijar en lo alto de les tableros de los fanuncics universitarios la comunicacién ‘que me envia, aspiraria a que también @ ‘mi respuesta le correspondiera tal honor. Quizé, leyéndola, més de un ciudadano académico, estudiante 0 profesor, tenerie tun motivo de sorprésa ode reflexién, lun temor premonitonio aunque fuera pron- tamente reprimido; seria como una mi rada fugaz lanzada sobre el mundo lire del spirit en medio de la limitaciéa y Ja Ignorancta porvorsamento coactivas Podria torminar aqui. Sin embargo, en te instante me p eal menos admisibles algunas, explicaciones mis. Sobre mi decretada “pérdida de la ‘cludadania siempre mantuve silencio pesar de ser muchas veces interrogado; ‘ahora, la proscripcién académica me pa: rece ocasi6n propicia para una breve pro: fesion do fe personal. Usted, Setor Rec. tor, a quien no conozco siquiera de nom bre, considérese solo el destinaterio, casual de esta declaracién, que no le estd destinada personelmente. En estos custro.afics de oxo —que ria eufemiomo llamer voluntario puss, si hublera permanecido on Alemenia 0 si hubiera vuelto a ella, no estaria ya con vida— el extrafo error del destino veri. cado en mi situacién no ta cesado. hacerme reflexionar. Jamis hubiera cre do, ni_siquiera sofado, que deberia pasar os dias de mi vejez como emigrante, laan gustia de ser alemdn expropiads, proserito en mi patria, por ns actitud de protesta politica profurda- Monte necesaria. Desde que ingresé al mundo del oopititu, me habia. sentido Siempre on feliz armonia con ol alma de mi pais. cOmodo y segura en sus tradi. clones espirituales. Neci para ser un re- Presentante més que un mértir, para evar al mundo un poco de serenidad ‘superior mucho més que para slimentar la guerra y el odio. Aigo totalmente e:r6- ‘neo debe haber sucedido para que mi ida tomase un rumbo tan falso, tan con- trarfo a mi naturaleza. Traté de impedit eon mis poces fuerzas este horrible error ¥. procisemente por o30, me’ prepare el Aestino que ahora debo eprender a armo- F con mi natwalozs tan opuesto a él Es verdad: no fue solo en estos uitimos cuatro aos que provoqué la furla de ‘aquellos que estaban en el poder, con mi mantenerme aparte, con las manifestacle res irreprimibles de mi horror. Ya mucho tiempo atrée tuve que hacerlo y to hice, Porque yo Vi, antoe quo la burguesia ale mana, hoy desesperada, quién y qué estabe surgiendo. Cuando luego Alemania definitivamente en esas manos, decid caller; con mi sactificio pensaba haber merecido el derecho a un silencio que me hhublera permitido conservar algo que me ‘era muy querido: el contacto con mi pt blico de Alemania. Mis bros, me decia, estan escritos para alemanes, sobre todo para ellos: el mundo” y su interés por mi fueron siempre un agradable “acct dente”. Estos libros son el producto de lun mutuo vinculo educativo entre naoin ¥ autor y cuentan sobre premisas que yo mismo contribut a crear en Alemani ‘Son relaciones delicadas y éignas del me yor cudedo, y no debe permitse qué le politica las corte abruptamente, Aun evando en Alemania able impacienies ‘que. por estar smordazados, desaproba ban ol silencio de quien vivia on libortad, me ora licito esperar qua la gran mayo ria compreniiera mi diserecién, ain mis ‘me estuviera agradecida por ella Estos ers mis propésitos. Pero no pude llevarlos @ la préctica. No pode haber vivido, respirado, me hubiera sofo cdo, sin “lavar —como dectian los ant Quos— mi corazon” de tanto en tanto; remodele total o parcialmente su figura Método de avanzada y sélida experiencia para eliminar: Adiposidad localizada, flaccidez, acné, manchas, arrugas Bronceado “centro integral de estética” Contes orats - Cémotos abonas Hipélito Yrigoyen 1961 - P.B Contratrente ~ Dto. 2 = Tel. 47-0427 Comyreso De 9 a 21 horas y también GIMNASIA thomas mann sin expreser abiertamente de cuando en ‘uando mi hocror infinito por to que se lievaba 2 cabo en mi patria con palabras imiserables y acclones ain més. misere- bles. Merecidamento 0 no, en el mundo ye mi nombre estaba ligado al concepto do un gormaniemo que so ama y so hon- a: hors, seta vida alemana sufria una barbara falsficacién y yo, precisemente yo, tenia el deber de oponerme tenazmen- te: una admonicién, ésia, que turbabs, ‘como un repetido reclamo, todos los Ir bres suetos do arte a los que me habria tan voluntarlamente abardonado. Era difi- dil resistirse tal reclamo para quien habia tenido siempre ei don de poder expresarce, de liberarse por medio de la palabra; para quien la experiencia vivida, ‘6lo habia sido una cosa de lenguaje, que Ia fijaba purifiséndola. [El dol longuoje ee un gran misterio: la reeponeabilidad por él y por su pureza ‘es de carfcter simbélico y esplrtual: no tiene s6lo un significado artistica. sino moral y general; es la responsabilidad misma y nada mis ni menos quo la res- ponsabilidad humana, también le respon- ‘eblidad por el propio pueblo, para que ‘8u rostro se mantenga puro a la vista de la humanidsd; en el lenguaje se refiela la unidad de la vide humana, la totalidad dol problema hurano, que no permite que nadie, hoy menos que nunca, eopare ol mundo eepiritualartistico del politicase- frente a ésto, on la noble ‘8 contra esa verdade- es |p humanidad misma materia grave culpe quien inten tara “totalizar” una parte de la vida hu- ‘mana, la politica, el Estedo. Un escritor alemén, habituado a la res- lidad_ del uso del_lenguaje; un ‘aleman cuyo patriotismo —quiza Ingenus- mente— se traduce en creer en Ia "incom pareble Importancia moral” de cuanto sv- cede en Alemania, ;dobia tal vez call tallar complotementa frente a todo ol mal lwroparable que so ha cometido y se co- mets hoy en dia en su pals contra cuer- pos, almas y espiritus. contra el derecho “ala verdad. contra los hombres y cont cl hombre? :Frente al terrible peligro que representa para el continente este régi- men corruptor de hombres que vive en tuna inexpresable ignorancia respecto a la hore que ya dio la campana del mundo? No, no era posible. Y asf sucedieron, con ‘rariamente a lo proyectedo, las manifes- tuclones, los gestos de une Inevitable ‘toma de posicién que han provocado she- ra el hecho absurdo y deplorable de mi proseripci6n nacional Basta pensar sélo que son‘los hombres a quienes esti dado el miserable y casual poder exterior los que me niegan mi na Clonalidad alemana, para poner este he- cho ante su mis ridicula luz. ;Dicen que Ultrejé al Reich, a Alemania, al declarar- me contrario a “elles”! jTlenien la Incret- Be eudacia de pretender ser, Aleman [Cusndo on roalided no esti lojeno momento en oi quo la suprema proscupe- ‘én del pueblo slomdn sari le do no cor Confundides con ellos! ‘tAdénde han llevado a Alemania en me- os de cuatro afos? En riinas, espirituel Y fisicamente desangrada por un’ rearme Wel belieo con el que amenaza, con el que detiene al mundo entero, Impidiéndole ‘cumplic sus verdaderos deberes, los dal roe enormes y urgentes de la "paz": ama 4a por nadie, mirads por todos con tomer y fria aversién, esta al borde de la catie. trofe econémica. y las manos de sus ‘migos” se tienden desesperadas hacia ella para arrancar del abismo un miembro tan Importante de la futura comunidad de los pueblos, para ayudarlo, pare que vuelva a fa cordura y se adapte a las reales nece- sidades de! momento en luger de inven- tarse una hipocrita leyenda de miseria. Si los detenidos y bloqueados por Alemania ‘an tlenen que ayudarla para que no arras- tre consigo al continente y no haga real mento estallar Ia guerra, 3 la que ti siempro on su mira como “ultima ratio’ Los paises maduros y cultos —y entiendo por cultura al conocimiento de que "ya no debe permitirss més la querra’— tratan a este gran pais peligrante y peligroso para todes, 0 mejor aun, a los increibles jefes en cuyas manos ha caido, como los méd- os tratan a los enfermos: con la maxima Indulgencia y cautela, con Infinita aunque fo precisamente hontosa paclencla; pero ‘aquellos creen que deben practicar “pol ‘ica contra éetos, uno politica do fusrza ¥y hegemnonis. Ouien "hace polities” evan > los otras no pil lla sino en la “paz”, tiene, transitoria: mente, ciertas ventajas. Lai ‘anacrénica de que la guerra ya no es admi- sible trae naturaimente, por cierto tiem- po, “éaitos” a quienes no lo ignoran. jPero dosdichado el pueblo que, 10 sabiendo ya ‘como salir del apuro, termine ‘su salvacion en, el horror de la colada por Dios y por loo hombre: Pueblo eeté perdido. Soria voncldo do me- ‘nore tal que jamie podria roponoree. El sentido y la meta do! sistema politico y edlo puede eer | pueblo sleman para fa ",eliminando, venciendo, destruyerdo inexorablemente toda reac- ‘cin perturbadora; hacerlo un instrumento cde guerra infinitamente voluntarioso, no Infectado por ningin pensamiento crit ‘co, relegado una ignorancia ciega y fe- Initia. Tal sistema no puede tener otro ‘sentido y meta, otra “justficacton”; todos Jos sacrificios de libertad, derecho, felic- dad human, incluso los delitos ocultes y mmanifiestos de los cuales 20 hicieron ree- oneables, se justifioen sélo por la idea ‘dol incondicional adiestramiento para. la ‘guerra. Apenas la idea de la guerra caiga ‘como fin en si misma, no quedard mas que una mera vejacién’ de 1a humanidad, totalmente absurda y superflua. A decit verdad, absurdo y guerra no se les serd permitida sino por- que también desde este punto de vista de ‘su idea rectora —el absoluto y_ “total” adiestramiento para le querra— logra lo contrario de lo que aspira. Ningdn pueblo de la tierra esté en peores condiciones, ‘80 tan incepar do soperter una guorra como éoto. La primera cortidumbre, aun- {que no la mas importante, es que no ten- dr ningin aliado, ni uno solo en of mun- do. Pero, aun sola, Alemania todavia puede F temible; lo peor es que se verd tam- bien abandonada por si-misma. Espiritual mente disminuida y degradads, moralmen- te vacia, Internamente lacerada, con una profunda doscontianze hacia ous jofes ¥ hhacia todo lo quo hicieron por afica, pro fundamente insogura de si, ignorante pero agitada por males presentimientos, iia a festa querra no ya en las condiciones de 4914, sino, —y también fisicamente— en las de 1917 0 quiza en las de 1918. Los aprovechadores inmediatos del. régimen —cerca del lez por ciento del total y tambien ellos ya semiemboscados— ro basiarian para ganar una guerra en la que a mayoria de los otros verian s¢io una ‘ccasién para liberayse del vergonzoso Yugo ‘que desde haco tiempo llevan: una guerra, plies, que luego de la primers derrota ee convertiria en una guerra cll No. Esta guerra es imposible, Alemania ‘no puede soportarla y si sus jefes tienen ‘in un poco de cordura, sus afitmaciones de que desean la paz no son, como quie- ren dar a entender con guifcs a sus s2- ‘cuaces, s6lo mentiras técticss sino que surgen de la temerosa comprensién precl- ‘samente de esa imposibilidad. Fero si no puede y no debe haber guorra ipara qué los bandidos y los asesinos? ,Para qué el islamiento, la hosillidad hacia el mund: gallded, la Intordiceién eopiritudl la ‘noche cultural y toda otra privacién? ¢Por ‘qué no, en camblo, el retorno de Alemania ‘2 Europa, su reconclliacién con ella, su libre ingreso. que seria saludedo con jabl- lo y campanadas por el mundo entero, en un sistema de paz europea con todos sus complementos internos de libertad, dere- ‘cho, bienestar y decoro humano? ZPor qué ‘no? {Slo porque un régimen que niega fl derecho humano tanto en Ia palabra como en la accién y se jacta de perma necer on el poder renegarfa de si, se anu larfa, oi no pudiondo ‘guerra, hilo va la pax? Olvid6, senor Rector, que todavia estoy hablando con usted. Pera confie en que, desde hace rato, haya dejedo de leerm horrorizado por un lenguaje al que en Alemania no se est acostumbrado desde hhace sios, espantado porque alguien haya ‘osado valerse del idioma alemén con la ‘antigua libertad. AK, no he hablado por ‘una entusiasta presuncion sino por una Preocupacion y un tormento de cuya opre- si6n sus usurpadores de poder no pudie- ron liberarme. cuando decretaron que ya ‘po 80} clomén; una angustia del alma y dol pensamiento quo desde hace cuatro ‘ior no me ha dado una sola hora de libertad en mi vida y contra la cual he dobido luchar cada dia para poder realizar ‘mi labor artistica. Es una grave calemidad. Y¥ como, aun quien acostumbra por pudor eligioso a abstenerse de pronunc siquiera escribir el Nombr Instantes de profunda tu fevitar recutrir a esta ultima expresién, permitame que —ya que no se puede de: Gir todo— clerre esta respuesta con esta fnvocactén: Dios, ayuda a nuestro pals berbarizado y doshonrado y enséiale a hacer la paz con el mundo y consigo mismo! ‘THOMAS MANN bertolt recht Pacific Pelisades. Callioraia 1850 San Remo Drive toxri949 llustre senor Brecht: He leldo atentamente su carta. Permi- tame resporderie lo que sigue: ‘Amediados de noviembre di una confe- ‘enela politica en la Columbia University “te Nueva York. Me escucharon fas pero, hecho muy extrafo y Alemén, entre ellae no habia une sols do lbs que pudioren habormo acontejado acer- ‘2 do la unifieacién de los antiitlerianos. flemanes en el exilio. Hubiera parecido I6- ioe que al menos aiguno se interesara for los pensamiontes politicos express os piblicamente— de un hombre que tllos consideran apto, ain mis, el dnico ‘apto para realizar tal unificacion. Pero finguno tuvo suficiente curiosidad. S! hue blera habido siquiera uno, no habria su: ido ninguna duda sob:e mis sentimientos, como aquella que usted exprosa on eu corte. En mi conforencia admit! que no 8@ pus- e rechazar cierta responsabilidad colec- tiva por cuanto ha sucedido y por cuanto sueederé todavia. De alguna manera, en ‘efecto, un hombre y un pueblo son res: ponsables de lo que son y hacen. Pero Huego no s6lo cité los mismos argumentos aque usa usted en su carta contra ta Wen: ‘ileacion entre aleman y nazi, sino que deciaré que se estaba obligado a, usar prudencia en el trato con el edversario, Yencido, aunque eélo fuera por le grave complicidad do las democracias de. todo fl mundo en el advenimiento de la dicta- ‘dura fascista, en el aumento de su pod: ¥y en toda la desventura que sbrumd ¢ Eu- opa yal mundo, Me expresé sobre tal ‘complicidad de las democracias capital tas en términos que supuse serian recibi- dos apenas con paciencia, y menos como sueedio en efecto, saludados con grandes: aplausos. Hasta me burlé del pénico necio, dot mundo burgués frente al comunismo. y ‘esto no e6lo on Nueva York, sino ya antoo, ‘en Washington, on la Biblioteca dol Con- ‘greeo. Dije que no era de nuestra compa toncia do. alemanes desterrados, aconse- Jar a los vencedores de mafiana sobre e6mo tratar a Alemania y expresé la es fanza de que las medidas de las potenci encedoras no agraven el futuro. comén. No es a Alemania o al pueblo aleman a quienes es necesario aniqullar y esteril- ar, die, sino a aquel culpable grupo de poder compuesto por junkers, militares y ‘grandes industrieles que results response: Wie de dos querras mundialos. So dobo tontorver toda esperanza en una revol ti6n alemana auténtica y puritieadora, que los vencedores no séio no deben impecir tino, por el contrario, favorecer y esti mmuiar. Este fue, ms 0 menos, el tono de_mi conferencia, y espero que usted y sus amigos puedan deducir, por estas alusio- nes, que yo no utlizo toda la Influencia de la que gozo en América para aumentar Jas dudas acerca de la “existencia de fuer tos corrientes democréticas en Alemeni Poro esto no tione nada que ver con of problema que me ha ocupado seriamente ‘autocaricatura de Thomas Mann duranto varias semanas, o en, que haya llegade ono el momento de constituir un Free Germany Committee en América, Lie ‘6 2 la conclusion de que la constitucién fe tal comité seria prematura, no solo Porque ciertos comporentes del State De- parment 1a" consigeran Inmadura, y por thora ne la desean, sino tambien sobre In base de relletones y experiencia per- sonales. Es un hecho, st mal no recuerdo fremos bablado de esto durents nuestro Altimo enoventro, que apenas 98 corr a voz de que 20 ba formado un grupo alo thin, nacen siempre Inquietudes y descon- Hianzas entre los exponeates de las varias naciones europeas, y que de inmediato la vet de orden 9s que el circulo slemén que $e. estd constituyendo sea disuelto. En tfecte, no s6lo existe ose paige, sino que Sin duda tendremos que contar con el he- tho de que nuestro comité. sea conside: ado nada més que un intento patlotico fara proteger Alemania de las conse: tuencas de sus delitos. Con la justice ony le defense do Alemania y la demon. fda do una “fuerte. domocracia.alemana noe pondrencs, en este momento, en Una peligrasa cposicién a lox sentimientes de los puetios que languidecen bajo el yuao nat y estan préximos al desasie. Es ce- masiado pronto para pretexter exigencias fn nombre de Alemanis y para epelar al Corazon del mundo en favor de una poten- Gia que aun hoy tiene como nodriza a Eu ‘opa'y ciya capacidas para delingir toda ia no ha terminado. An pueden suceder cosas atroces —probablemente sucodo ran que una vez mée evedttrén ol ho tror del mundo entero contra este pu blo, y zedmo quedaremos nosotros al ha- tomoe parantes de le victoria de las cua lidades més nobles y més oltas de. las cuales es capaz? Deje que Alemania sufra fa derrota militar, doje madurar la hora que permite a los alemanes saldar cuentas con Sus cormuptores de un modo radical y des piadado como el mundo ni siquiera 05a Esperar de nuestro pueblo tan poco revo- ludonario; entonces también pare nose: {ros, on el exile, habré legado el momen {o de alirmar que Alemania 29 libro, quo ‘Alemonia 20 he purficado verdaderamonte {qua Alomanta debe vive Su muy devoto THOMAS MANNE, POLITICA BRITANICA EN EL'RIO DELAPLATA Lbs studios gue integran ete “let sn read dhe Dprofunda tvesigaciones {ator sobre Ts prblemas po HISTORIA DE LOS FERRO- CARRILES ARGENTINOS. Tas consecueacias de ia poit- cn ferreviania mantenida impla- fxblemente durame mis. de ‘ohents aor le denunc, tras un minvcioso anilsi, de como dl Terrocarl fue ame cue socal sce row Signy da imperilisma eco- omic "sa YRIGOYEN ¥ FERON Una obra de" gran. vigencia que sat: fice’ una inqueted polities actu 521,30 EL HOMBRE QUE ESTA SO- LO V ESPERA ave net Tae SttiorntteveneresS 1S LAMANGA. ‘A taves de estos cuentos Scar inprini medita sobre el hombre bamico, a la ver individual y Slltario, pero iamerso treme iablemente en un todo Organ zade. 7 teleolgico. 5 15.— TIERRA SIN NADA TIE DEPROET AS TERRA Un hombre pare desde Smt devia on Ba Shears a Stevintnto” da Ser potente que se ome aque To. dige’ todo, Vig itterm in nada, donde sera prot fast de BASES PARA LA RECONS- TRUCCION NACIONAL Puntos de pariga para una sprecacion dol Pursmente ominal se debs fe a veces. un puis sometido 2 Ios" impeios inanciro. det sus —1Gomo el Bioy Casares de Ia adoles- cenela Hlego a ser el autor de “Le inven. clén de Morei"? —Desde el comienzo lo fantistico, lo policial (on of sentido de una investiga- ‘ida, de una intriga, do un erimen que $0 resuelve) y I> amoroso estuvisron pre sentes. ¥ a es0 s» agregabs, entoncos, el modo surrealista, un aneantamiento por los suefos. Muchos de los cuentos de Caos, u otros libros de adolescencia, eran Meras transcripciones de suehos. No sé, ‘algo tencria que ver mi Infancia. De ch. 2 tenia una fascinaclon por el miedo —18e podria decir que sparecia un in- terés por el inconsciente, en los primeros libres, por los svefos, etedtera —...Si, y manoseado por la retérica ‘urrealista. Eseribi bastantes libros, y on ‘casi todos los casos, implacablemonte, los publicaba. Después de los cuenios de Luis Grebe, muerto, en 1937, empacé tomerme un poco de conflanza, porque todos ses libros antericres, de le. ado. lescencie, eran realmente malos. En ese ‘fio, el 37, 2 108 23 afos, comencé a es ‘oribir ta invencion de Niorel. -uCémo surgié la idea de le invencién de Ia méquina de Morel? Me acuerdo que esteba en mi casa, fen Pardo, en un largo correder casi en penumbras. y pensé que esa maquina era ‘YO necesito la tormenta’ posible, imaginable. Pensé en escribir un ensayo para probar que no era imposible Wearla. Después pensé que debia hacer lo Contrario: hacerla imaginable, verosimil a través de una obra de flecién. Recuer- 0 que la escribi en la cama, Trabsjaba desde tas 8 de la manana hasta pasado el mediodte, Premeditadamente, comencé 2 escribirla de una manera totalmente, ci- forente a la que habia escrito el resto de mis libros hasta ontonces, La escribi con frases cortas, con mucho culdado, para no equivocarme. —La idea do situar Ia trama en una isla, con personajes que no son argenti- Fos, zfue parte de una necesided de to- mar distancia? Asi como se podria decir, ‘no existe una psicologia de los persone Jes, que esa trama apretada y rigurosa ‘se Imponia sobre ellos? —9i, es clerio. Fue muy necesarlo pare ‘i mantener una distancia con Ios perso. nsjet pore dosarrollar la trama, Lo mismo asé con Plan de ovasién y Ios cuentos de La trama celeste. Plan de evasién, que también transcurre en una Isla, donde los personajes también son extranjeros y tam. bien hay une invencién fantéstica. pensé escribiria enseguida, como para que La lnveneién y Plan salieran casi juntas, y de sigan modo el lector las uniera. Pero ‘m desidia, mi vagancle, retardaron el Ii- bro. Salié cinco afos despues. Me acuer- do quo mi madre so roferia a mi ectitud y me decia: “Que las mujeres no te de- —Volvierdo a La lnvencién, Plan y La trama, recuerdo que hace un rato me ha blabas de Felipe Fernéndez, el hombre ‘que te ensefié matométicas, y me dijiste ‘que en una época, pensasie, dedido a él, en dedicarte a las matemiticas. Esa on. sefianza en la adolescencia creo que ha Influido en tus libros. Detrés de ellos hay un persamiento matemétice, por esas tre- ‘maa que se desarrollan tan limpidamente, tan rigurosemente, —Creo que es clerto que Felipe Fer nindez ha infuido en mi, y quo la. im portancia de 61 en mi vida est también fen mis libros, —Recordis en este momento algo que te haya Influido de una manera parecida como escritor? s cuentes que me contabs mi ma ‘dre, cuando era chico. Recuerdo especial. ‘mente uno, que siempre le pedia que me repitiers. Era un cusnio de animales, de animales pequofes, que se ibon de i madriguera, corrion peligro y_ velvian. Siempre me gusté esa idea: le de corer Poligro y tener Ia posibilidad de volver 2 un lugar seguro. Pienso que yo soy uno de esos “autores de bérbaros romances

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