Se Monde ¥e ciudades CTT Ge ecece a pane Ty 1) Bo | e000 ae tt SEG cooe =: MEE — geeeNOTA DE LOS EDITC spiritus inquietos o Kicidos nos anuncian que estar superpoblada, contaminada, que sera tentacular, proliferante y sometida a vigilancia. A menos que se muestre inteligente, participativa, vertical, sensual, biodiversa y conectada... qu, en el presente, hablamos de la ciudad que se ha convertido en museo y se ha vuelto bohemia y aburguesada, Pero al en el futuro, la vemos y la vivimos ya de otra manera: “revisitada”, reinventada y globalizada. Entonces, za quése parecerd la ciudad del futuro? Pregunta decisiva, pues todo Ileva acreer que lo ‘urbano es el futuro del ser humano, porque en poco mas de una generacién solamente un tercio de la poblacién mundial seguiré viviendo en el medio rural. Lavibracién, la pulsacién y Ia energia del mundo ya son esencialmente urbanas. wmaiana? Para comprender el presente e intentaranticipar el fururoa fin de que podamos ser us actores, no hay nada como un viaje al pasado. Este es el método que ha proporcionado el éxito, siempre reconocide, de nuestros Atlas, en Tos ‘cuales se unen Is historia ala geografia yla cultura ala geopolitics. Asi pues, remontemos el paso del tiempo. Ciudades antiguas habitan nuestro imaginario: Babilonia, Atenas, Roma... Otras pueblan nuestros sttefios o nos invitan a nuevos PASOS INSPIRADORES viajes en un pasado que no deja de ser actual: Kioto, Venecia, Tombuctt, Estambul...A través de tales recorridos legaremos a Shanghai, Nueva York y San Pablo, asi como a Dubai, Hong Kong y Lagos, Por tanto, nuestro nuevo Atlas cuenta asu manera toda la historia de la humanidad, desde los primeros niicleos uurbanos hasta las megal6polis contemporsineas. Puede parecer que las ciudades francesas forman parte de un museo y que estén paralizadas ante las exigencias conservacionistas. Sin embargo, no escapan ‘este gran movimiento planetario, con sus desafios medioambientales, culturalesy sociales. En torno a los desplazamientos multimodales, la intermunicipalidad, la heterogeneidad social y la crisis de identidad de las zonas periurbanas, surgen euestiones complejas, se debilitan viejas divisiones politicas yyse perfilan opciones éticas. Nos hemos esforzaddo en hacer comprensibles estos debates de apariencia téeniea, pero que en realidad se refieren a nuestra vida cotidiana. Tales el objetivo de estos atlas, reuniendo alos mejores expertos, docentes universitarios y periodistas, y cotejando los puntos de vista al igual que se intercambian palabras y miradas a lo largo de un inspitador paseo. Esta obra, por suiambicidn y por su dimensién excepcional, se presenta como una, megal6polis. Hay que aceptar perderse en ella para conocer cada esquina de las calles, a menudo gracias a encuentros inesperados: grandes arquitectos, novelistas de éxito, cineastas, artistas, urbanistas..e incluso un monje. Tengan, ustedes un buen paseo por las ciudades. dean-Perre Dens, a Ve, Didler Pourguery; Le MondeINDICE 1| Nota de los editores Jean-Pierre Denis y Didier Pourquery 4| Habitar el mundo 6 | Introduceién La ciudad da sentido al mundo Augustin Berque 8 | Panordmica La urbanizacién del mundo Jean Seller 10| Ladefinicién... del arquitecto Jean Nouvel 13 | ..de la socidloga Saskia Sassen 14| ...del guionista de cémies Benoit Peeters 15 | ...de a chefcon estrellas Héléne Darroze 16 | ...del monje Hermano Stéphane 17 | ...del street artist C215 18| Historia de ciudades 20] Introduccién La ciudad, emblema dela civilizacién Marcel Roncayolo 22|| Babilonia En el tiempo de Nabucodonosor II Béatrice André-Salvini 24| Atenas La vida urbana en los tiempos de Pericles Aurélie Damet 26 | Roma Las transformaciones de una antigua megalopolis Géraldine Djament-Tran 28 | Bagdad La ciudad-encrucijada del universo Vanessa Van Renterghem 30 | Constantinopla Bizar Georges Sidéris 2 ELATLAS DE Las cIUDADES 32 | Paris Patrimonio genético de una capital Guy Burgel 34] Venecia Serenisima y triunfante Elisabeth Crouzet-Pavan 36 | Agray Shahjahanabad Joyas del Imperio Mogol Harit Joshi 38 | Chinaimperial ysus capitales Brie Trombert 40 | Kioto Mil anosde reinado imperial Philippe Pons 42 | Tombuctsi La perla espiritual del desierto Mamadou Diouf 44 | Tenochtitlan £1 centro del universo azteca Frédérie Saliba 46 | Salvador de Bahia Cuna del mestizaje brasilefio ‘Nicolas Bourcier 48 | Amsterdam Ciudad global adelantada asu tiempo Sako Masterd 50 | Londres De la bipolaridad la multipolaridad Rémy Bethmont 52 | San Petersburgo El suefio de grandeza de uun zar André Filler 54 | Barcelona Ciudad turistica del Mediterraneo Carlos. Pardo Abad 56 | Madrid Aglomeracién supra-metropolitanay ciudad verde M. Antonio Zérate Martin 58 | Unaciudad, unarquitecto Un propdsito imposible Simon Texier 621¥ el planeta devino ciudad 64] Introduccién Ciudades bajo presion Olivier Mongin 66 | Paris Un ligero perfume de ciudad-museo Jean-Jacques Larrochelle 68 | Londres Mundial ycomunitaria ‘Mark Bailoni y Delphine Papin 70 | Berlin Un destino fuera de lo comin Boris Grésilion 72 | Moseti Metamorfoseada y sobrecongestionada Sylvie Kauffmann 74| El Cairo Efervescencia popular Eric Denis 76 | Jerusalén Dividida en su seno David Amsellem 78 | Cindades del Golfo Fachadas de cristal y corazén de piedra Roman Stadnicki 80 | Tokio La megalépolis de los barrios-pueblo Philippe Pons i82 | El moderno Seail, un crecimiento sin control Hyojung Bac 84| Elnuevo gran salto chino Del arrozal... 86 | ... Pekin Jordan Pouille 87| ... Shanghai Jordan Pouille 88 | Singapur Un modelo a prueba del tiempo Rodolphe De Koninck 90 | Bombay Un enjambre amenazado de asfixia Brédéric Bobin 92| Africa Un continente en vias de urbanizacién 94] ... Lagos Myrtille Delamarche 95 | ... lohanesburgo Myrtille Delamarche 96 | Sio Paulo Bfervescencia de cultura cosmopolita Paulo A. Paranagua 98 | Argentina Un pais casi totalmente urbanizado Alejandro Sehtman 100 | Buenos Aires Las murallas invisibles Alejandro Sehtman 104] Fstados Unidos De la ciudad al territorio metropolitan Cynthia Ghorra-Gobin 106 |... Nueva York Henrik Lindell 108 | Panoramica Juegos Olimpicos 110 El efecto subprimes Una crisis de confianza mundial Hugo Lefebvre 112 Suburbios Una reserva de energia por ransformar Laurent Grzybowski 114 | Panorimica Los centros urbanos se aburguesan 116 | Copiary pegar un modelo urbano mundial Corine Chabaud 118 | La ciudad participativa facilita Ia vida cotidiana Claire Legros 120| Parques urbanos Apuesta politica Amanda Fléty 122 | Panorimica Bl papel central de las plazas, 124| Geografiade ciudadesen guerra Bénédicte Tratnjek 128 | Panorémica Una ciudad, un cineasta 130 | Elhip-hop Una cultura urbana arraigada € Recoguilfon e ¥. Le Moigne 132| Los desafios de la ciudad 134 | Introduccién Dar el poder alas comunidades urbanas Jacques Donzelot 136 | Periurbanos La eleecién de vivir sélo con los suyos Jacques Lévy 138 | Modificar los transportes, convencer a los usuarios Patricia Sajous 140 | El problema delos barrios periféricos Jérémy Robine 142| Laintermunicipalidad Una cuestiOn de poder ‘Simon Ronai 146 | ... La metrépoli de Paris Simon Ronai 148 | Panorimica El control de las contaminaciones 150| Expansidn comercial La plaga de las ciudades modernas Mare Endeweld 152 Dederechao izquierda Una gestién no tan diferente Olivia EIkaim 154| Ciudades universitarias Un atractivo crecis Benott Floc’h 156| gCOmo sera la ciudad del mafiana? 158 | Introduccién Devolver el sentido ala ciudad Thierry Paquot 160| Las ciudades inteligentes La felicidad bajo captadores Daniel Floffman 162 | ... Laciudad conectada Claire Legros 164] Laagricultura se propaga al asfalto Hervé Kempf 166 | La biodiversidad se instala en las ciudades Olivier Nouaillas 168] Labuena suerte delos “guetosdericos” Renaud Le Goix 172| Cuandolacireulacién reduce la velocidad Dominique Buffier 174| Laera delos “rascamares” y de los “rascatiorras” Maryse Quinton 178 | Densificacidn gClave para la supervivencia de la ciudad? Alain Cluzet 180 | Ciudades en el espacio donde se podra vivir bien Charles Frankel 182| Entrevista “La ciudad debe fomentar la solidaridad..” Jean-Christophe Rufin por Chantal Gabé 186 | Nota del editor Un mundo de ciudades Blanca Azcérate y Ferran Montesa 188 | Bibliografia LE MONDE DIPLOMATIQUE EDICION CONO SUR /FUNDACION MONDIPLO | 3Vista aérea del emplazamiento arqueolégi¢ode Rutog Dzong, prefectura de Ngari, Tibet, China.\bitar, e Leberele) La Giitlad; céntrourbano y de poder, alberga a la civilizacién entre sus muros. 4INTRODUCCION Augustin Berque La ciudad da sentido al mundo Desde la Antigua Roma, centro del universo, el fendmeno urbano no ha dejado de extenderse Rodeada de murallas hasta el s alberga intramuros a la civiliza iglo XVII, la ciudad cion. En la actualidad, la urbanizacion se expande mas alla de sus muros. ‘ 6 TUDAD,s.f (Arquit.civil.),con- junto de varias casas dispues- tasen calles y cerradas por un cercocomiin, que normalmen- te consiste en muros y fosos. Perolamaneramis exacta paradefinir una ciudad eslade unrecintocerrado por murallasquecontie- ne diversos barrios, calles, plazas piiblicas y otros edificios”, tales la definicion del término “ciudad” que figura en el Tomo XVII de L’Eneyclopédie de Dideroty d’Alembert (1751). El hechoes que antes delaRevolucién Industrial,y salvorarasexcepcio- nes, el fenémeno urbano se manifesté primerome- diante las murallas. De modo que en una lengua como el chino, el eardcter cheng, S& (‘muralla”), es el mismo que hallamos en Changcheng, #4 (la “Gran Muralla”),y en chengshi, Shih (‘ciudad”,li- teralmente“muralla-mereado”) Simbolocésmico ePor qué esta asociacién entre ciudad y muralla? Porque la ciudad debia poder defenderse, eviden- temente; pero no menos porque la muralla era el signo de su cardcter urbano. En lengua francesa, la del mundo”, Viene directamente del término lati- no urbanitas, cuyo primer significado era “la vida ‘en Roma”, Entonces, ,por qué en Roma antes que en las ‘otras ciudades? He ahi un simbolo propiamente Futa tomada por Homan Cortés (1621) nos, la conquistaron sangrientamente en 1521 y, después, la destruyeron. Sobre sus ruinas, el virreinato de Nueva, Espaiia construyé su capital. Terraplenaron los canales y edificaron los palacios coloniales con las piedras de las pirdmides, Pero, aunque esté destruida, laciudad azteca permanecera como uno de los principales simbolosde un itico pasado prehispanico, exaltado por elarte postrevo- ucionario de pintores célebres como Diego Riverao Luis Covarrubias. “Las ruinas de Tenochtitlan todavia pervi- yen en el centro de México ~comenta el arquedlogo Gon- zlez. Es imposible excavar una canalizacién sin toparse convestigiosarqueolégicos” = rédériesaliba LeMonde,corresponsal en México LE MONDE DIPLOMATIOUE EDICION CONO SUR//FUNDACION MONDIPLO | 45HISTORIA DE CIUDADES SALVADOR DE BAHI Capital del Brasil colonial hasta 1763, la ciudad portuaria fue un punto de confluenciaen la tratade esclavos, hasta su abolicién en 1888. oprimero que debe hacer quien pise Salvador de Bahiaes derramar discretamenteal suelo el con~ tenido de un vaso, Poco importa cul sea la bebi- dasiempre que tenga alcoho). El guardisa de las ‘allestienesed yhade beberantes de abrirelcaminoy dar- Jeproteccidnal visitante. Su nombre es Exu, unade fas di- vinidades mis vencradas en a liturgia del candomble, el culto de origen africano que se remontaalanoche de los tiemposy que conocié muy de cerca Jorge Amado, el gi gante brasilefio de la literatura, fallecido en el afio 2001 ‘Amado hizo de Bahia el escenario de sw obra. EXu e maestro del desorden y dela confusidn, aly comoeserib Amado. Exu, quien cortael paso alos mediocres ya los hi- péeritas, porque el pueblo deestaciudad esde un cardcter cordial ysonriente” Salvador de Bahia es eso: una ciudad portuaria baia- dade misterio, donde la realidad y la magia se mezelan en. cada esquina, La Roma Negra, tal y comose la denomina, la Madre de las ciudadesbrasilefias por haber sido capital del Brasil colonial hasta 1763 yel gran mercadode eselavos hhasta su abolicién en 1888. “Portuguesa y africana ~eseri bird ademis el hijo dela ciudad en unarticu- o publicado en el periédico Le Monde en juniode1980-, reaen historiay leyen- das, maternal y valerosa, ni blanca ni negra, sino mulata”. Bahiaeslacunaurbanadeunpue- bblomestizo, compuesto de estratos, mezclas y encuentros sucesivos quese pueden leer en un mapa tanto como en sus pavimentos negros y en sus viejas cal- zadas. Sus primeros pasos se remontan al 1 de noviembre de1501, el Dinde Todoslos Santos, cuando elnaveganteita- Jiano Américo Vespucio bauti26 el pequefio golfo que aca baba de descubrir con el nombre de Sao Salvador de Bahia de Todos os Santos. Agradecfaasfalossantosy aCristotras una travesia apacible que cancluyé conel descubsimiento deungigantesco puertonatural. El politico y militar lisboeta Tomé de Souza, emparen- tado con la Casa Real, fund6 la ciudad mas vieja de Bra- silon 1549. La inauguré y empez6 aconstrairla el Dia de ‘Todoslos Santos, Su misién era fortificarla posicién para asegurar el dominio portuguésen todo el itoral,entonces amenazado por traficantes franceses y espafoles. Anidada fen una cornisa, supo resistir los ataques de os espaftales (1580) y de [os holandeses (1624). Orientada haciael inte- rior,al norte yel noreste, Salvador de Bahia también debia aportar el apoyo militar necesario, para defenderse de los indios,alasprovineias que el rey habiadadoalos colonos. 4g | ELATLAS DE LAS CIUDADES Capital fundada en 1549 oo por los portugueses : Pea on one remesie [ver también Sao Paulo, pag. 96] _Bje maritime y punto de convergencia entre las cultu~ ras europea, africana e indoamericana, la capital de este territorio en plena expansién ocupé el extremo de la Pe insula y bordeé la Bahia, Pronto se convirti6 en el centro econémico dela caia de azsicar. Se desarrollé igualmente igracias al tabaco, el cacao y el oro. Pero fue sobre todo su proximidad con la punta occidental de Africa, en particu larcon elreino de Dahomey (el actual Benin),lo que hizo decllauno de los lugares principales dela trata transatln- ticadeesclavos, una ciudad-santuario Ciudad espejo,oftece desde un punto de vista arquitecténi- ‘coundestacado ejemplodeuntipo de planificaciénurbana Gel Renacimiento aplicado au asentamiento colonial. He ‘aqui esta ciudad superior que reunia las funciones defen sivas, administrativasy residenciales, Esta ciudad elevada {que permanecer preservada alolargo de toda su historia, Gominabaalaciucad inferior, dondelas actividades comer- cialesse organizaban alrededor del puerto.Su densidad de ‘monumentos es extraordinaria, Ademds de uncierto nd- merodegrandes edificiosde los siglos XVI-XVIII,como la catedraly los conventos de San Francisco, la mayor iglesia jesuita del pais,yde Santo Domingo, ylasiglesiasde Carmel ‘ye San Antonio, Salvador presenta varios espacios abier-Bahia de Todos los Santos ee tos del siglo XV1 (plaza municipal, Casa de la Piedad) y pa lacios barracos (palaciodel Arzobispo, palacio Saldanha). Bahiaesunaciudad-santuario,con 367 iglesias: una por «cada dia del afto, més una por el dia bisiesto de febrero y, ademds, una iltima en el caso de que se hubiera cometido unerror en elrecuentodelcalendario...£1 centrohistérico, aque gravita en torno al barrio de Largo do Pelourinhoy su plaza triangulare inctinada, se caracteriza por su fidelidad al plano del siglo XVIy por lahomogeneidad de su cons- truccién, Fl Pelourinho, “plaza de a picota pequefa”,es elcorazin de laciudad, donde estaba colocado el poste en el que se torturaba a loseselavos,a quienes azotaban hasta sangrar por sus supuestas malas acciones. La riginalidad del Pelourinho, taly comoescribe per- tinentemente Jorge Amado, reside enia bellezay enel su- frimiento con el que esté hecho. Cristaliza la vida popu- laren lomisdestacadode ella: “Lasescuelasde capoeira, lasgafieiraso los guinguettes ..J,los miisicos, los artesa- nos que trabajan la madera, el hierro, la plata, el cristal 0 la paja, los pintores naif, las vendedoras de acarajés y de bards, las planchadoras que se esfuerzan con los trajes blancos, Is eastureras especializadas en vestidos de en- caje, enaguas y chales de bahiana, la curandera que reza para expulsar la mala suerte, la vidente,la-hija-de-santo, eleurayelobrero”. Untejido urbanomuy denso Laciudad se expandidy las favelas se multiplicaron por to- das partes, oeupando hoy en diacerea de la mitad de lasu- perficie, Enel norte y el noreste,la ciudad bajay el puer- tonohan conservadosu caricter original. De 340.000 en 1948, laciudad pas6 acerca de 3 millonesde habieantes en 2013, Mase la mitad de loshabitantes tienen unantepasa- do originario de Africa, Este crecimiento de la poblacién, particularmente rapido a finales de los afios 60 debido al desarrollo industrial, contribuy6 aencerrar la ciudad his t6ricaenun tejido urbanoextremadamente denso, En los afios 90, se limpis y restauré el barrio del Pe. lourinho. ¥ alejarona los pobresa la periferia. Reconstrui- do, pintado de nuevo y renavado, el Pelourinho entré a for- ‘mar partedel patrimonio mundial de lahhumaniciad, bajola ‘mirada benévola de la UNESCO. En la antigua plaza de los, suplicios destaca la Fundacién Casa de Jorge Amado, crea- daen 1987. A suspies, Exu se mantiene erguido, esculpido enel hierro, Vela por las alles pavimentadas de su ciudad, comosieltiempo nohubierapasado. m [Nicolas Bourcier “LeMondecorrespansalen Riode Janeimo LE MONDE DIPLOMATIQUE EDICION CONO SUR /FUNDACION MONDIPLO | 47HISTORIA DE CIUDADES AMSTERDAM Ciudad global adelantada asu tiempo Durante su apogeo,en el siglo XV, la ciudad holandesa fue una gran potencia comercialyyfinanciera. Tolerante, ha desarrollado el multiculturalismo. Amsterdam contemporinea puede describirse como multicultural, segura dest'mezcla socialy de su riqueza cultural, y poseedora de una, ‘mensién internacional. Ciudad comercial, tam- bbiénes famosa por su tolerancia o, para algunos, laxitud)y suactitud de apertura hacia el “otro”, Acepta los modos de idaalternativos,las prostitutasen escaparates el uso de ssustancias estupefacientes. Sin duda,elrasgo que més’ de dela ciudad es su centro, que se termind antes de final- zarel siglo XVILy forma parte del patrimonio mundial de Ja UNESCO desde 2010. Todos estos aspectos estina la vez correlacionados y firmemente arrai- ‘gadosen su historia, Desde las sigios XIV y XV, Amsterdam constituyé ‘un punto vital del comereio interna- ional en torno al Mar Baltico. Los conflictos que enfrentaron 2 las ricas provincias holandesas yal poderosoIm- perio espafiol fueron cruciales para el siglo XVI1y, asimismo, para lo que es Amsterdam en Ia actua- lidad, Las Provincias Unidas lucharon por su indepen- dencia,ylaobtuvieron en 1648, Al principio, todas las pr. vineias holandesas combatieron conjuntamente, pero la reforma calvinista instauré una demarcacién entre el nor- te protestante yel sur eatélico, Esta divisién no hizo sino incrementarse cuando los espafioles ocuparon Amberes ybloquearon el acceso al puerto en 1585, mientras que las siete provinciasdel norte se constituan en unaconfedera- cidn. Estosacontecimientos tuvieron consecuencias histo- ricas muy importantes. Comercioagran escala En primer lugar, Amsterdam qued6 exeluida de sus ant- guasrutas comerciales. Por tanto, la ciudad se vio obligada buscar soluciones. Cred compafiias comerciales a escala ‘mundial: la Compania Holandesa de las Indias Orientales .¢n 1602, para el comercio (colonial) con Asis, ylaCompa- fifa Holandesa de las Indias Oceidentales en 1621, paral comercio con Africa Occidental y América (y entre estos dos continentes), que més tarde incorporaria la trata de esclavos. A continuacién, la ciudad acogié arefugiados de numerosos lugares del mundo, entre los cuales seincluiaa librepensadores, cientificos yricos hombres de negocios de Amberesen busca desitios nuevos en el“mundo libre”. 48 | ELATLAS DELAS CIUDADES Estos acontecimientosestimularon ainnovaciénasicomo lainversién enel comercio agranescala.Partiendo de este sgermen, se desarrollé después la Bolsa, asi como potentes Ssectores financierosy de seguros, pero tambiénlacartogra- fino laimpresién a escala industrial. Al mismo tiempo, la poblacién se polarizé, sacialmente hablando: los comer- ciantes ricos se instalaron en las grandes casas solariegas recién construidas a lo largo de los principales canales, rnentras que una poblacién mas pobre, principalmenteal serviciode unaelite comercial, vivialamayoriade as weces enbarrios densamente construidos, tales como Jordaan. Identidad preservada sin dudaalguna,el siglo XVII -laedad de oro forjé laci dad. Amsterdamse convirtiéen una ciudad global antes de tiempo, Unida al mundo y dotada de instituciones finan- cierasinstrumentos de regulacién, quizi feeratolerante, peroasimismo estaba socialmente dividida, asemejanza de las descripeiones que realiza hoy en dia la socisloga: tadounidense Saskia Sassen dellas ciudades globales con- tempordneas. 4gCémo una ciudad asta conseguido preservar su ide tidad en un periodo de cuatrocientos aos, mientras que ‘otras ciudades europeas importantes se han transformado? Puede quela respuesta residaentres nocioneslafaltade ii ciativa.el poder de laelite comercial yla oluntad popular, Después de su edad de oro, Amsterdam perdié su po- en el comereio internacional; la economiase estan- 6 ylainiciativa pasé a manosde otros; una gran parte dela lire comercial se contentaba con vivir por sus propios me- ins. No fue sinoa mediados del siglo XIX cuando Amster dam despert6y, aunque tardiamente, logré generar un ue- ‘Yo crecimientobasado.en a industria manufacturers. Pero aciudad pudo conservar su imagen tolerante, encamada principalmente en la publicacién de libros controvertidos de autores célebres del siglo XVIUL, tales como Rousseauty ‘Voltaire, permitiendoasiel desarrollo dela Tustraién. Sin embargo, el rapido crecimiento del siglo XIX no trajo consigo obras sustanciales en a ciudad, al contrario queenel Paris de Haussmanno en otras ciudadeseuropeas como Budapest, Bruselas, Romao Viena. Esto quizé pueda considerarse unlogro desu establishment, quenosebasitba enunaclase politicasinoenunaclase comercial, apenas teresado.en acreacién de monumentales paisajes urbanos. Losplanesmonumentales,comolos que disefié Van Niferik.£2 1866, fueron sustituidos por otros, mas pragmiticos (el plan Kalff,1877). La consecuencia de ello fue la preserva- cidn dela refinada estructura urbana del centro delaciu- dad. Esco también implied quesse perpetuaranlascondicio~ nes de pobreza preexistentes y los problemas de higiene, deresiduos y de superpoblacién; de al que mis alli delos cantales principales, la mayor parte del centro dela ciudad adoleciera de malareputacién hasta aproximadamente los aiios1980, cuando comenz6 la “gentrificacién” del centro, quese convirtié enunIngarde vacaciones paralos residen- tesdelaclase media ylos turistas Enelsigio XX,el centro de la ciudad pudo salvarse de ‘otraamenaza: el modernismo, Como en otras partes, en los afios 1960 1970, setrataba de reestructurar radicalmente elcentro dela ciudad y reemplazarlo por wa barrio finan- cierayporestacionamientos,accesibles a través de autovias urbanas.La resistencia popular fren6,literalmente, este de- sarrollo, Uno de os lugaresdonde laramente atinse puede iresio es In entrada sudeste del centro de la ciudad. nt rricnrer al enon 1 Bosch Amer se lll Anhiecurestdy tow, Jones! ia a ‘stendem, orbiter lll =a iam , an ‘Unacarreterade circunvalacién decuatro carriles debialle- ‘var hasta alli,pero esta se interrumpe justo antes de entrar enel centro. El cambio repentino del ancho de lacalle que tune Jodenbreestraat con Nieuwmarktsirve para recordar ellugar donde dicha resistencia alean7ésu objetivo Decaraal futuro, Amsterdam tendré queenfrentar dos desafios. El primeroesresistirlatentacidn de hacer de “ciu- dad creadora” aplicando esquemas de moda: porel contra- rio, Amsterdam no debe olvidar que yaes “creativa” a su manera que esta especificidad incluso crea su riqueza. El otro desafioesel del retrocesode latolerancia, amenazada por unaclase media cada vez. mds presente, mientras que lamezela social disminuye. Sin embargo, latolerancia es tunaspecto profndamente arraigado en lapersonalidad de Amsterdam y es razonable pensar que su mantenimiento también seriaesencial parae! futuro. m Sako Musterd CCatedstioo de Geografia Usbanaen la Universidad de Amsterdam 4877 El plan Kalf, respuesta a Vestgis oe fa oludad mecieval eae as elas Orel: Plantacién a eu) » LEMONDE OIPLOMATIQUE EDICION CONO SUR/FUNEACIGN MONDIELO | 49 1619 La expansion hacia el oeste 1663 La eded de oro de Amsterdam las necesidadas de industrialzacon Un desarrollo urbano constantemente planificado 1920 De aldea de pescadores ‘iudad mecieval ~ Hl 14501105 primeros canates, 1885 Extensiones insufcentes ~ frente ala presi demogrfica !Seen LA Srp MRC RUC CLE capital mercantil TESS Limite de la Gudad IDRES De la bipolaridad a ala patie Enel Renacimiento, Westminster fue la sede del poder real, Ia City, ladel poder municipal. La ciudad se extender alrede Ititud de distritos auténomos. deestos dos polosen una apitalpoliticay econdmica,el Londres delRena- cimniento heredé una dinémicabipolarqueseha bin establecido en la Edad Media: por un ladoes taba la City de Londres, administrada por un poder municipal auténomo que gestionaba la plaza comer cial de reino;y, por otro lado, Westminster, al que la eina Isabel Televéal rango de estaba instalada la Admin quese convirtiden unaconurbaciénalo largo del estaban uno enirente del otroen una posicién de rivalidad constructiva que permitiétantoa a Municipalidad comoa aCorona nexociar conjuntamentellas condiciones desu afianzamientoy desuentiquecimiento respectivos. La ciu- dad de lossiglos XVI, XVI y XVI hizo aparecer gradual- rente,al lado de estos dos polos, en todo momento funda- mentales, una multiplicidad ereciente de nuevos espacios £00 .d multipolar de os siglos XIX y XX Ladisolucién por Enrique VIII de las 6rdenes monds- ticas condujoauna primera creacién de nuevos espacios de Vida urbana. La ciudad medieval estaba roteada de tie- ras monésticas yasimismo contenis tontimero de ellas. Vendidas por la Corona. propietarios ty en 1585 ye racién real. Los dos pol zrficos, administrativos y sociales que anuncié la ciu- en si interior uncier- laicos, se procedié a reconvertirlas parausos profanosy, desde 1540 has- 141560, se asistié auna verdadera fiebre inmobiliaria: viviendas, tiendas, tale albergues y caball , teatro izas surgieron en lo que podemoscon- siderar otrostantosnuevos microbarrios. Su particularidad residiaen que estos seguian disfrutando de las libertades y privilegios que se habjan atribuido ala Iglesia, cuando estas tierras estaban situadasen el perimetro de la City, quedaban a salvo dela jurisdiecién de la Municipal dad, lo cual as hacia muy atractivas:instalarse alliy ejercer tun oficio permitia iberarse no sélode losimpuestosmmuni- cipales sino asimismo de todas las reguluciones de la City sobreelejercicto delosoficios y laactividad comercial Portanto, a disolucién de los monasterios contribuyéa Taexpansién de Londres, de lncual habia partes nada des. preciables queescapaban al Gobierno municipal. Después de laciudad bipolar, formada por la ity y Westminster, co- ‘menzaron aaparecer las primeras manifestaciones de una ciudad multipolar compuesta por distritos aut6nomos. Esteescenario se acentué a partir del siglo XVII con la construccién del West End, erigido en tierrasaristocrati- as. Sus distintos propietarios, buscando generar nuevosDene iy Aor Peet) 1 | Parry ma ee ror ingresos, hicieron aparecer verdaderas barrios “llave en mano", d sy tiendas a los cuales alguilaban las vivien particulares. Cada barrio estaba estructurado en una plaza central yencalles noblesdestina: nnteelegante, por un lado, yen allesde segunday terceracategoriasdonde se hallaban los comerciantes y la gente humilde al servicio de Ia sociedad refinada de los sectores nobles, por otro. Entre ‘estos diferentes barrios aparecié asimismo una jerarquia IL. Blin: 'spor tal o cual barrio de modase perdia en beneficio de uno nuevo, en general cada vez mas al oeste, lejos dela contaminacién del aire causada por la actividad industrial ‘enexpansidn, cuyo combustible, desde prineipios del siglo XVI, eraelcarbin, amedida que Londres se extendia en el siglo ¥ tel Lo que impresiona de estas evoluciones es que, dentro de esta conurbacién, cad yadmi- nistraba de manera independiente del conjunto con una ‘otal de intervencionismo por parte del poder real, al contrario de lo que se observaba en Paris, y sin to- ‘mar comoreferenciala Municipalidad de Londres, cuyaju. risdiceién no se extendia mésalld de sus limites medieva- les. Fueron casi exclusivamente las fuerzas del mereado las, ‘quemodelaron la capital inglesa delos siglosXVILy XVIII lanuevo espacio se constru ran incendio de 1666, que destruyé casi completa- mente la City intensifies ladiferenciacién de los espacios: In aristocracia, que poseia numerosos palacios en la City, no regreséallidespués dela catistrofe, prefiriendo el West End, queya estaba de moda entonces. El foco medieval de laciudad perdi sueleg: tirse, una vez reconstruido, en un espacio burgués quese concentraba cada vez mis en la actividad comercial yen el desarrollo de los servicios financieros tras lacreacién del Banco de Inglaterra en 1694 \cia aristocritica para conver- Pere CR ir) Sta as. a Hesiminse eee Pee eee | Elidealdelamezcla social que se viviaen a City medie- val dio gradualmente pas por parte de lasclases altasy medias. Laevo- 1s modos de vida urbanos dan muestra de elo. iclasveladasde lasnoches de verano de princi aun deseo de segregacién so ciogeogrifc lucion de Mientras; pios del siglo XVIy los teatros de laépo hacian que se odearan los grupos soc siglo XVIII guarda el secreto de los lugares donde se rela cionaban socialmente personasafines enna ciudad cada vezi grandey populosa: ejemplos concretosal respecte podian ser los cluses para hombresyylos salones (de pago) donde se divertian personas de ambos sexos. El papel creciente del dinero en este ideal de segresa cin social refle de consumo, la primera en Europa, Gracias aa aparieién cde Shakespeare es mis diversas, el pa elascenso de unacultura londinense de los escaparates en las tiendas, asi como lade las veredas ~copiadas después por Paris que separaban los peatones, delos coches, el irse de comprasse afiadié de lasclasesprivilegiadasy contribuyéun poco maisacrear modos de vida urbanos diferenciados en funcion de los srupossociales, Delideal medieval deun cuerpo urbanode Vida unitaria se paséal de una culturade consumo donde setrataba de que cada grupo social quedaradiferenciado, Sinembargo, aconciencia deuna mismaidentidad urban laramente en el mosaico geogritico y humanoen el que se convirtié la capital inglesa tras gran incendio. Esta contradic mino “Londres” que, aunque oficialmente slo se aplicara alla City, termind por designar cada vez mésal conjunto de Jaconurbacién de las miltiples earas. nse encontraba en el iso mismo del té (Catedrtico de History Civiizacién Brit Universidad Pare Londres, pag. 68] IMATIQUE EDICION CONO SUR /FUNDACION MONDIPLG | 52HISTORIA DE CIUDADES Lacapital del Imperio ruso, fundada por Pedro el Grandeen 1712. dotada de una arquitectura cosmopolita, pronto se convirtiéenun grancentro culturaly mercantilen Europa. iudad extraiiay maravillosa, capital sinrai- cesen lahistoria nienel suelo,” Tal fueel pa- rad6jico veredieto que el 12 de_ulio de 1839 por la tarde”) emitié el marqués de Custi- nne,quien acababadedesembarcar en San Petersburgo.Ciu- dad fantasia, ciudad de Pedro el Grande y de Rasputin, de Raskolnikov y de Ana Karenina, “ciudad de lastres revolu- ciones",asu vez ciudad de Pushkin y ciudad de Putin. El mito de laantigua capital imperial en ocasiones hace olvidar que, ante todo, San Petersburgo es una aglomera- ciénmuyimportante. Desde que en 1988 superara loscinco millones de habitantes, constituye actualmente lasextame- trépolieuropea,y continda creciendo ala sombra desu pa- sado, Enearnada desde 1782en laestatua ecuestre de Pedro elGrande sta sobre unacolasalroca,obradelescultorfran- cés Etienne Falconet -recomendado a Catalina la Grande por Diderot-, que Pushkin mitificaria medio siglo después enel poema“Eljinete debronce”, San Petersburgo es per- cibida comiinmente como el triunfo de lacultura sobre la naturaleza salvaje, del orden europeo sobre el caos oriental 66, Ruptura geopolitica y cultural En realidad, las tierras de la futura metrépoli llevaban cul- tivindose desde el siglo XVII yestaban inseriptasen ela tastro sueco. En 1648, la reina Cristina de Suecia conce- dig el dominio de Spasskij Pogost, que correspondia con el centro histérico de la ciudad actual, ana noble familia sgerménico-biltica que habia entrado au servicio, los Von Steensund. Una vez.que Rusia hubo conquistado los terti- torios suecos, Pedro el Grande construira la ciudad sobre este dominio que ocupaba lacrilla izquierda del rio Neva, menos hostily menos pantanosa que a derecha. Eleélebre jardin de verano, por ejemplo, que hasta nuestros dias ha sido el lugar predilecto de paseo de los habitantes de San Petersburgo, lo funds el Zar mismo, en el emplazamiento del parque holandés delos ltimos seioressuecos. Muy pronto, el monarea deeidié hacer de San Petersburgo su nueva capital (en 1712), ademas de un sim- bolo della rupturaconel aistacionis- smo de susantepasados. Laruptura pretendia ser geopolitiea y cul- tural:abrirel territoriono sélo hacia el mar, proyecto primor- dial ruso desde finales del slo XVI, sino asimismo hacia Occidente. En efecto, debido que eltemible Imperio otomano bloqueabae! Mar Negro,el joven Zar puso su mirada en lascostasbalticas, sobre lascualesrecuperariel control durante una guerra librada contra Suecia, Esta aetitud conquistadora se sumaba su sorprendente tropism: elherederoal trono de los Romanov se sentia ms cémodoentre losaven- tureros alemanesy los capitanes na. vales de los Paises Bajos que rodeado de boyardos bajoel orodel Kremlin moscavita, En 1697, ala edad de veinticinco afios, el Zar, acomps fiado de un pequefio séquito, abandond de incégnitosutie- rranataly viaj6.a Amsterdam por primera vez. Alli pasar ‘una temporada entera trabajando como carpinteroen tin astillero, Los canales de Amsterdam, verdadera red san- guinea de la agiomeracién, le dejaron una impresién im- borrable. A continuacién, se empefiarden trasladarlosasu ‘nueva capital. Europa, el agua y la flota naval se convi ron en una verdadera obsesién paral Zar reformador. La primera construceién sustancial de San Petersburgo sera a Fortaleza de San Pedro y de San Pablo, futura sepultu- radelemperadory de sus descendientes, A su alrededor, mis tarde, en el espacio de dos décadas, se extendié una Extensi6n de la aglomeracion urbana de San Petersburgo: ‘52 EL ATLAS DE LAS CIUDADESConstruccin de la época de: TB Pedro e Grande (1882-1725) WB catalina u 1762-1796) ot aia eran” Crore EA Nina Ye Eat vverdadera ciudad, encarnacién de un nuevo imperio euro- peo, desu defensa y de su ilustracién, tanto en sentido lite- ral como figurado, Ciudad-programa, ciudad-manifiesto, San Petersburgo lo ser4 asimiismo en un plano estético. El barroco petrino, robustoy sobrio,enel quese adivina lahe- renciaruso-bizantina; el barroco suntuoso de Bartolomeo Rastrellielclasicismo de Giacomo Quarenghi, otro italia- no;eleclecticismo del francés Auguste Ricard de Montfe~ rrandsel modernismo del sueco Fredrik Lidval: los estilos aportados durante dos siglas por les arquitectos europeos seaclimataron répidamentev adquirieron rasgoslocales. La arquitectura de la ciudad siempre ha sido fastuosa yrepresentativa, desde las primeras mansiones privadas dela gpoca de Pedro el Grande hasta las sedes de losban- cosy las villas patricias de los patrones industriales de los, aiios1900, pasando por los palacios y las eatedrales del si- sloXVIIL Y lasarteriassesuceden -anticipindose al Paris deHaussmann-,yasean terrestres oacustic 4 jestuosa de las acuaticas contimiia siendo el rio Neva, y su equivalente pétrea, a Perspectiva Nevski, que conduce al Palacio de Invierno, obramaestra de Rastreliytltimosim- bolo del poder imperial, Alrededor del centro histérico y nobitiario crecié otra iudad esencialmente comercial, donde el puerto desem- pefiaba un papel fundamental hizo de San Petersburgo tun lugar con todo tipo de mezcolanzas. Lallista de barrios periféricos(slobody) incluia tanto acomunidades profesio- nales (boticarios, marineros,remeros,cocheros, ete.) como cs tartaros finlandeses,griegos,franceses incluso...rusos, quienes tenian dentro de esta metrépoli ccosmopolita su propio barrio alas afueras, caso tinicoen laparte europea del Imperio). Lamezcolanza también era social, sobre todo.en el centrode laciudad, donde los pala- ciosde las familias aristocriticas ms importantes (You! soupofi, Stroganoff, Potemkin, Cheremetiey, ete) lindaban con insalubresedificios de departamentos, unidos por una serie de patiosinteriores, que albergaban losbajos fondos yelhampa, Alolargo del siglo XX, San Petersburgo.cambié cuatro veces de nombre, perdié su estatus de capital a partir de 1918y sufrié una serie de experiencias violentas, Las creci- das del Nevé parecfan entonces una pequeiez frente alas turbulencias revolucionarias, el terror estalinista,elterri~ ble bloqueo de las tropas de Hitler ola ola de criminalidad de los afios 90. Pero la ciudad siempre ha sabido resistir: urbanismo inico, considerado como “irreformable”, ysarios 30 de lareordenacién sovietica. Bn proyecto de construccidn de una torre que habia impulsa- do la todopoderosa Gazprom, En laciudad que fue testigo del suefiodte Pedro. Grande,el presente siempre ceders.el pasoal pasado, m Andréiler Profesor tiulardel Departamento de Estudios Esives ‘enla Universidad Paris-8 [Ver también Moseti, pag. 72] LE MONDE DIPLOMATIQUE EDICION COND SUR /FUNDACION MONDIPLO | $3HISTORIA DE CIUDADES BARCELONA Ciudad turistica del Mediterraneo La capital de Catalufia se destaca en el conjunto urbano europeo por constituir una gran ciudad del arco mediterréneo, un foco econémico y turistico de primera magnitud yun emblema global delaculturacatalana. ciudad se fundaenépoca romana,conel nombre de Barcino, entrelas desembocadurasde los ros Bes6s y Llobregaty al amparo del relieve costero {del Montjuic. Fue unimportante nado de corm nicacionesitoralesen esta parte de i peninsula y hacia la zona pirenaica, asi como el principal niicleo de poblacién deunamplio territorio. De aquellos momentos iinsecon: servael trazadourbano originalen cuadricula, tancaracte~ risticode as fundaciones romana. ‘Tras la reconquista mustlmana, y durante la Edad Media, la ciudad vivié un momento fundamental para su evolucién urbana, con importantes transformaciones de acuerdo au propio crecimiento poblacional yal dinamis- mo mercantil y econémico experimentado. Desde el pun- to de vista politico, fue lugar de siento paralos condes de Barcelona y para los monareas de la Corona de Aragén, construyéndose algunas de las edificaciones mis signifi- cativas del actual centro histérico: iglesia de Santa Maria del Mar, Barrio Gético, atarazanas, murallas con recintos ampliados para proteger un perimetro urbano progresiva- mente acrecentado... Eran Jademostracién de una pujan- zaextraordinaria yde una gran proyeccién exterior en el Mediterrneo que, por entonees, earecian otras ciudades peninsulares Laimportaneia otorgada al Atintico por lamonarquia espafola durante la Edad Moderna frené el crecimiento barcelonés en favorde Sevilla y Cédiz. Eldinamismosere- cuperd en el siglo XVIII, con la liberalizacién del comer ciocon América, enriqueciéndose la burguesia autéctonay comenzando la produccién protoindustrial con sélidos ci mientos parael despegue definitivoenel siglo XIX.Eneste siglo la ciudad experimentatransformaciones urbanisticas profundas, con laaprobacién del plan de Ensanche deCer- «daen 1860, Fue una apuesta porel erecimiento ordenado, masallé de losestrechos limites y deltrazado andrquico de laciudad medieval, conunplano ortogonal que se convirt en la mejor muestra del desarrollo planificado de Espata Sedestacan sus amplias manzanas achaflanadas, las gran des callesy la apertura de vias diagonales para facilitar los desplazamientos, Algunos de los edificios més emblema- ticosy visitados de Barcelona se encuentran enestazona, como la Sagrada Familia de Gaudi, maximo exponente del modernismo arquitecténico. Laburguesia industrial catalanase sintié especialmen- te identificada con ese estilo como expresién artistica de susaspiraciones de dominio econémicoy social. Lasmues- tras son muy abundantesen toda laciudad,en.un contexto 54] ELATLAS DE LAS CLUDADES deintensodesarrollo urbanoe industrial tras lareafirma- cidn cultural nacida dela Renaixenca. Hay un total de n6 obras modernistas identificadasen laciudad, que sbarean comercios, farmacias, templos, hospitales, casas, ete. Las, ‘masconocidas son los palacios Giielly de la Miisica Catala- 1a, lascasas Batllé, Amatiler y LaPedrera,el parqueGielly aya mencionada Sagrada Familia. Laexpansién urbana continu durante el siglo XX, con la presencia de periodos de mayor intensidad, comoen las décadas de 19609 1970, Bsn momento de intensametro- polizaciény laaglomeracién urbana de Barcelonase extien- dealolargo de la franjalitoral yhacia elinterior,enlazando un niimero importante de nécleos préximos, que sirven como zonas de residencia y de asentamiento industrial Las funciones administrativas y comerciales se concen- traronen el centro, entorno al micleo histéricoy el Ensan- che (UEixample), con algunas arterias y puntos principa~ Jes, como la Gran Viade les Corts Catalanes, el passeig de Gracia, la Diagonal ylaplaca de Catalunya, Enlaactualidad, Barcelonaes, amén desede de lasinstituciones politicasau- tonémicas, punto rector de un sistema urbano maduroy consolidado y uno de los centros de mayor reconocimiento internacional parael turismo urbano de Espaia. Barcelona como espacio turistico Barcelona es el mejor exponente del turismo catalén, Bl pprimerturismo catalin fue de tipotermal ena primerami- tad del siglo XIX, en localidades balncariasdel émbitoru- ral, como Caldes de Montbui. La Exposicién Universal de 1888 en Barcelona, aunque fue un fenémeno puntusly ur- banorefora6 ascaracteristieasinicialesde Catalufiacomo destinoy promovid laimagen de laciudad y dela regién en suconjunto. ‘Appartir del siglo XX tiene lugar una nueva demanda turfstica que redescubre las transformaciones vinculadas alaintensa industrializacién. Ena década de 1920 arran- can los primeroscomplejosturisticos ena Costa Bravay se emprenden otros proyectos alo largo de todala costa cata- lana. Aescala mas ocal, las playas della Bareelonetay el Po- ble Nou, en Barcelona, se consolidaron, entonces, como la zonade bafiosde laciudad. La Exposicién de 1929, cuyorecinto se ubieé alos pies de Montjuic, eel referente que simbolizé los avances de este periodo, Durante la Segunda Repiblica yla restaura- cin de la Generalitat, la gestién publica del turismo fue competencia del gobierno catalan, impulsandose la pro- mocién del sector en el extranjero y la imagen de Barce-eZ axl 3 eng aol Siareowe é EANPLE e ace ph raat Eni x A ears : Mage Bes J, Macdh. aN 7 “tahite 3 S vata ‘sans. ae Paes. BOE Lice Pe Sant rae at on ae, arent io Jona como destino urbano, En todo caso, el turismo de masas de la década de 1960 y comienzos de la de 1970 afecté poco ala ciudad, por oposicién alrestode lacos- tacatalana,ysuimagen permaneeié muy asociada con las industrias y la administracion. A partir de 1980, coincidiendo.con larecuperacién de las competencias autonémicas, se supera a crisis de crecimiento deme diadosy finales de ladécada anterior se promueveel turismo cultural debase urbana. Los Juegos Olimpicos de 1992 colocaron definitiva- mente a Barcelona en el mapa de los principales dest nosinternacionales. Las visitas de un dis, que earacter zaban a Barcelona hasta 1992, cambiaron entonces por unpredominio de los viajes con estadia, amedidaquela ciudad abandonaba laimagen exclusivamente comer- cial industrial por otrade eardctercultural-Larenova- cidn deampliosbarrios,larecuperacién del frente ma- ritimo ylaconstruccién de elementos arquitecténicos singularesreforz6en gran medida esa funeién. sa posicién se mantiene en la actualidad gracias otros factores: vuelos low cost, aumento delos cruce- rs, ferrocarri de alta velocidad, mejora dela calidad sve anita f ai i HORTA | pgumannd (ongene Monona pe , SANT ‘MAB elora, anode Js destnes acne s Impor ips sos GRACIA teres = Line de ioe hotelera, irrupcidn de turismos especificos (de patri- monio industrial, de eventos deportivos, de compras, gastronémico). Enel espacio urbano de Barcelona se pueden dis. tinguir tres sectores turisticos principales: easco anti uo, endonde selocaliza lofertahotelera de mediana categoria, los monumentos goticos y las zonas comer- ciales més concurridas (Ramblas y Portal de TAngel); eje paseo de Gracia-Diagonal, con hoteles de lujo, im. portantes sedes financieras y los edificios més emble- miticos del modernismo (La Pedreray Casa Batll6);la zonade Montjuic, con ampliasinfraestructuras depor- tivas,ferialesy de congresos, Laciudad mantiene una notable actividad turstica aquelallevaa situarse por delante de numerosas cap! tales europeas porsu condicién de referencia cultural, especialmente en lo histérico-artistico y arquitecténi- co,nos6lo porsuincomparable arquitecturamodernis- tasino también por la medieval ylacontemporsnea. Carlos Pardo Abad Profesor tlar de Geografia,UNED, Madrid ae rete Eocene ateHISTORIA DE CIUDADES MADRID Aglomeracion supra-metropolitana y ciudad verde Laciudad de Madrid, quesufreelevados niveles de contaminacién, tiene una periferia verde que podria llegar a mejorar la calidad de vida de su poblacién con la intensificacién de politicas urbanas sostenibles. uuando a fines del igio 1X, elemircordobés Mu- yhammad I (#52-886) fundé una fortaleza para la defensade Toledojunto al Manzanates,niadaha cia pensar queaquel enclaves convertirfaenca~ pitaldeunimperioenel quenose ponia elsoly,enlaactua- Tidad, en el centro de una aglomeracién sélo superadaen poblacin porl'lede France yGreater London. Esteesps- ciodispone de una eficient estructurace comunicaciones, ‘conuna ed de subterrneosde293km, lamasextensa des pués de Londres, se integra como “ciudad global” en el sistema mundial de grandes metrépolis Capitalidad y ciudad global AA diferencia de otras capitales europeas, Madrid es una ciudad moderna;sudesarrollo.comenz6 a partir de1561,¢1 atioenel que Felipe decididinstalarlasededela Corteen esta cidad, entre atrasrazones porsu calidad medioam- biental, al pie del Sistema Central. Madrid apenas llegaba alos 14.000 habitantes y ls principales cludades espatio- Jaseran entonces Toledo, con més dle 60.000 habitantes,y Sevilla, on unos 109.000, una de las mas pobladas de Bil- ropa, Desde aquel momento, el crecimiento ha sido rpi- «Jo,de 70.000 habitantes.en1625 se pas6 281,000 en 1857, 530,835 en 1900, 2259931 en 1960y 3.283.527 en 2012, que se elevan a 6.498.560 con su aglomeracion, de los cualesel 15,5%son extranjeros. Blerecimientomadrilenio ha estado ligado asu funeién politica sibien desde lasegunda mitad del siglo XIX se ini- sin proceso de industralizacién quealcanzsintensidad apartir de 1950, e acelerd entlos 60, con el desarrollisino econdmico,y se consolidé con laintezracién de Espatiaen Ja Unién Europeaen 1986 y laglobalizacion dela economia. Por otra parte, la capitalidad explica el protagonismo de los servicios que aumenta con lagiobalizacidny laintegracién nel sistema mundial de grandes metrépolis. Hoy la aglo- meracién madrile’a aporta alrededor del 12% al produc- tointerior bruto (PIB) espaiol, ocupae! sexto puesto del mundoentre las plazas bancarias yel noveno en capitali- zaciénen bolsa La forma urbana ylos paisajes de Madrid estin asu vez. muy condicionados par lafuncidn de capital, sobre todo porlaubicaciéndelosdos centrosde poder en el pasadorel ‘Aleézar, donde estuvo la fortalezaislimica, ye} Palacio del Buen Retiro, al este, ala izquierda del arroyo de la Fuente 56 | EL ATLAS DE LAS CIUDADES Castellana, luego Paseo del Prado, y hoy, prineipal corre- dor museisticode Europa, conel Museo del Prado, la Gale fa Thyssen yel Centro de Arte Reina Sofia, Las frecuentes desplazamientos de los reyes al Palacio del Buen Retiroya Jaermita dela Vingende Atocha configuraron sus dos prin cipales ees viarios: las calles de Alcala y Atocha. También laCorona,con Felipe III, fue responsable de aprincipal in- tervencisn histricaen elinteriorde laciudad,laconstruc cin de la Plaza Mayor entre 1617 1619, punto de encuen- trade los distintos estamentos sociales y dela monarquia conel pueblos travésde fiestas yceremonias de todotipo. Unespacio medioambiental privilegiado Lappolitica estd también en elorigen de una de las princi- pales caracteristicas de Madrid, su carscter de “ciudad verde”, yaquees|aciudad europea con mas superficie ar bolada, yla segunda del mundo por este concepto, detrs de Tokio. Asi, Madvid responde alos planteamientos dela ‘Cumbre de Rio (1992) y de la Carta de Aalborg (1994) que propugnan la entrada della naturaleza ena ciudad y lare- duccion de lahuella ecol6gica urbana. Gracias a la Corona, Madrid cuenta con zonas verdes, deexcepcional valorpatrimonialyextensién:el Monte del Pardo (16.000 ha), antiguo coto de caza, que conserva casi {ntactoun bosque mediterrineo en el que dominalaenci- nna fa Casa de Campo (1.700 ha), finca real desde Felipe IL cedida al municipio en 193isel Parque del Retiro (Asha), lo {que queda del Palacio de! Buen Retiro del siglo XVI, pre- cedente de Versalles, yel Jardin Boténico (22 ha),fruto de lamentalidad ilustrada de Carlos 111. Otros jardines hists= ricos son: Ia Fuente del Berro (7 ha), sobre wna finea ad- ‘quitida por Felipe TV en1630,y municipal desde 1948, y el Parque del Capricho de la Alameda de Osuna (3 ha), cons tuido por iniciativa delos Duquesde Osunaen 1784, El urbanismo del XIX, envuelto en preocupaciones higienistasy medioambientales, ereé otras zonas verdes. dems del Parque del Oeste, iniciado en 1898, en la pro- Tongacién hacia el norte de la cornisa de! Manzanares, el Ensanche de Carlos Maria de Castro, de 1860, introdujo bulevares y parques en sus bordes, sustituidos por razo- nes financierasporcoloniasdehotelitesmuy arbolados.La propuesta de Ciudad Lineal de Arturo Soria para fecilitar elcontaeto con lanaturaleza, materializada en un eje deo skm, ylas colonias de viviendas unifamiliares en los bordesPlan Rio Manzanares ‘ante Ayu de Maid del ensanche madrilefio, acogiéndose alas leyes de casas, baratas (191, 192Ly 1924), contribuyen aleardeter de dad verde de Madrid. La preocupacién por las zonas verdes es una constan- tedel urbanismo madrilefio: desde el suefiode Carlos 111, enel siglo XVIII, de crear una zonade huertos y jardines junto al rio,con alamedas cuyo trazado perdura en latra- ‘mauurbanaactual,hastael proyectoparael Plan General de Ordenacién Urbana de Zuazo-Jansen, de 1928, con un mii- cleo central rodeado por un cinturén verde del que forma- ‘baparte principal el rio Manzanares, y el Plan General de Ordenacién Urbana de 1946, que mantenia ese mismo con cepto, Laexpansiéndelosaios 50 y60 frustré aquella idea, lasorillasdelrio fueron edificadas,desaparecié la “pradera de San Isidro”, uno de los paisajes culturales dela ciudad, yse trazé una autovia répida de circunvalacién, la M-30. Noobstante, los siguientes Planes Generales, de 1963, 1985 1997 siguieron creando zonaswerdes y parques urbanos, Lareciente recuperacién de as orillas del Manzana- res ha sido una de las operaciones de renovacién urbana mésimportantesde Europa. Entre 2003 2005, sesoterra- ron 6kilémetros de autovia ripida, la M-30, y de laaveni de Portugal, recuperando casi 50 hectéreaslibresdeedifi- cacién. Esta superficie, parquizada entre 2007 y 201, ha transformado la imagen de la ciudad, ha dotado las orillas del riode calidad medioambientaly paisajistica,yha hecho deeste espacio un lugarde ocio, encuentro y socializacion ddelos madrilefos. Este ele verdese prolonga por laaglome- sacidnamodode parque lineal haciael norte, por el Monte Parquos meropeltanos de Madr 4, Cia te Campo 11, Baleberars 2.Demeence via 12 Manzi Su Para Sur 3 Paes ‘iro Bilrawe 1 ay Clb Labeda 38 cateta 6. Pavers 1 Vee 1 Aimplacon Ca ce Campa 17. Co Aad. Mneinares Not ‘roo Gav & BOWvaree eHiojca 18. Anptacn Arya Burg ‘a veavan 19. Maar del Pardo, yhacia elsur, porel Parque de las Cueneas Bajas del Jarama yel Manzanares. Larevision del Plan General de Madrid, de 2013, plan- tea entre sus objetivos la biodiversidad y a “naturaliza- cin” urbana, con la sostenibilidad ambiental como prin- cipio de ordenacién. Asi, se propone crear una “red de corredores o jes urbano-ambientales” que conectaré los ‘parques actuales. Pero ademis, las zonas verdes yaexisten- ‘esse prolongan por losespacios naturales protegidosdela ‘Comunidad de Madrid, mis del 16% desu superficie. Todo ellohace de laaglomeracién macrilefia un espacio que in- ‘tegra paisajes serranos,vallesy paramos, junto ala riqueza ppatrimonial yecoldgiea de sus ardines historicos, Lacalidad medioambiental y la riqueza patrimonial, conloslugares como El Escorial y Aranjuez, laimportancia desusmuseosy los valores paisajisticos de un medio natu- ral muy contrastado en una superficie reducida, explican {que Ia aglomeracién sea un importante destino turistico, con 147 millones de visitantesen 2011, de los que 10, fue- ronespafolesy 4,6 extranjeros. Esos atractivos justifican, ‘también que Madrid ocupe el octava lugar entre las ciuda- ides mas utilizadas para el rodaje de peliculas y un puesto importante entre las urbes comprometidas con lasosteni- bilidad ecolbgicay medioambiental. = -M. Antonio Zarate Martin Profesor de Geografiade la UNED, Madrid LE MONDE DIPLOMATIQUE EDICION CONG SUR/FUNDACION MONDIPLO | 57HISTORIA DE CIUDADES UNA CIUDAD, UN ARQUITECTO Un proposito imposible Amenudo se asociaun arquitecto a una ciudad, como Oscar Niemeyer a Brasilia (la capital de Brasil) o Le Corbusier a Chandigarh (en India). Sin embargo, concebir una ciudad en su totalidad es un acto colectivo. esde el Renacimiento italiano, los arquitectos hananhelado concebirlaciudadensuconjunto como un todo susceptible de que una unica y ‘misma manolotrace ylo construya,hastaen sus mas minimos detalles. finales del siglo XV, Leon Battista Alberti, Antonio Averlino, conocidoasimismocomo Filare- te, o Leonardo da Vinci esbozaron el perfil de una ciudad ideal,es decir, regular (predominio delos planos radiocon- céntricos),eficaz, seguray salubre. “Tres siglos después el inicio de una ivilizacion indus- trial Hevara a que Claude Nicolas Ledoux proponga el di sefio de la ciudad de Chaux, cuyasalina de Are-et-Senans (1775-179) s6lo representaba una parte. Al otro lado del ‘océano Atlintico, la ciudad de Washington naciden la mis- ma época (1790) en los planos del ingeniero y arquitecto franco-estadounidense Pierre Charles LEnfant. El siglo XIX mare6 profundamente la historia del ur- banismo,en particular través dela generalizacion de las préeticas de regulaciény de adaptacién de las ciudades al crecimiento demogréfico y ala mecanizacién delos trans portes, pera los arquitectos no fueron sus inicos actores. Fueron mas bien los ingenieros olos politicos quienes de- jaronsunombre:se habla asi, aunque en ocasiones dema- nera abusiva, del Paris de Haussmann, donde el prefecto del Departamento del Senase impusocomoe! director de dorquesta de unareforma de acapital francesa queengiobé numerosas competencias. Preibido en muchos aspectos ‘como un modelo por numerosos arquitectos del siglo XX, eThaussmannismo contribuyé en todo caso alegitimar una concepeién unitaria de laciudad. Los principios dela ciudad-jardin ‘Tras medio siglo de propésitos, sobre todo tebricos, rela tivosaun urbanismo de los tiempos modernos, el periodo posteriorala Segunda Guerra Mundial brindé la oportuni- dad avarios arquitectos de que concibieran ciudadesen su totalidad. Obra colectiva ~a fortiori por lo que se refiere a los prineipios de urbanismo- ls reconstruccién del centro delaciudad de El Havre, niciado en 1945, llev6lamareade tunarquitecto, Auguste Perret (1874-1954), cuyos discipulos aplicaron de manera hamogénes el clasicismo estructural (estructura vista de hormigén, techados-terrazas, colum- nas de capiteles, pirticos, ventanas en altura, ete,)-Incluida $58) EL ATLAS DE LAS CIUGADES encl Patrimonio dela Humanidad de la UNESCO en 2008, El Havre se unié asia Brasilia -cuyo perimetro del plan pi- lotode a cindad ya habia sido incluidoen 1987-,lacapital quel presidentebrasilefio Juscelino Kubitschek habiade- seado-y queempezd aconstruiren 1956. Expresidn de la independencia, de la unidad y dela identidad de Brasil, unade las capitales masrecientesy,sin embargo, una de las més mitieas del mundo, Brasiliase con- cibié enteramente en el Planalto Central. Brasilia se asocia generalmente al nombre de Oscar Niemeyer (1907-2012). El arquitectobrasileno constray6 allflosprincipatesedifi- cios piblicos quecomponenel Eje Monumental y la Expla- nadadelos Ministerios (Congreso Nacional, catedral, pala cio presidencial, teatro... Sin embargo, el urbanista Lucio Costa, su compatriota, fue asimismoel creador deesta ciu- daden la quese pusieronen pricties algunosde losgrandes principios de la ciudad-jardin, formuladosen las primeras décadas delsigioXX. Lirismo formal Mis europea que estadounidense, la ciudad participa del pensamientode Le Corbusier, aunque esciertoquessloen parte; as formas empleadas por Niemeyer, porelontratio, encarnan una modernidad brasilefia especifica, que asocia proezas técnicas ylirismo formal. Elespacio residencial, ysus“supercuadras”, grupos de edificios de viviendas co- locados sobre pilotes, participa, porsu parte, deunainno- vacién tipolégica destacable. Pero aunque Brasilia fuera lamas observada y la més comentada de las ciudades nue- ‘vas las criticas que acompafaron su eclosion yel desarro- Ilo descontrolado desu periferia (se crearon répidamente favelasy ciudades satélites) hicieron de ella el simbolo del rechazo de unurbanismo racional que no habria integrado Iasaspiraciones de loshabitantes. Laciudad de Chandigarh, situada al pie de las estriba- ciones del Himalaya, ofrece una situacién relativamente andloga. En primerlugar,enel plano politico:se trataba de ‘unantieva capital, Ia del Estado de Punyab, que sigui6 ala independencia de Indiaen 1947 Entreelcentenardeciuda- des nuevas creadas apeticidn del primer ministro Jawahar- lal Nehru, Chandigarh sirvid de ensayo:en ella, el arqui- tecto estadounidense Albert Mayer, junto con su colega Matthew Nowicki, aplied en primer lugar losprincipios >Lago artificial ‘de Paranod Concentracién de centros de poder @ cer ea vi tie Conjunto residencial adaptado [D]_Sireseil, dias oun maximo eels aluras constuldos sobre plotes Armonia con la naturaleza_ _Dimensin tus, aga vy vegetacion omnipresent -untesO Dabive, Lowa, Adarda rl Autrement, 20:3 = LE MONDE DIPLOMATIQUE EDICION CONG SUR/FUNDACION VONDIPLO | 58HISTORIA DE CIUDADES " Guuded industiat circular ob Ghaux, proyecto abandoned | > urbanisticos; tras la muerte de este iltimo en 1950, Ila- maron al franco-suizo Le Corbusier para retomar el pro- vvecto, que proseguird desde 1951 hasta su muerte en 1965, Experimentacion Pero incluso alli, Le Corbusier no fue el vinico en presi- direl destino de esta ciudad concebida inicialmente para 150.000 y luego para 500.000 habitantes, yque actualmen- te cuentacon alrededor de 15 millones. Su primo, el arqui tecto suizo Pierre Jeanneret, que se instalé alli durante quince aiios:los britanicos Jane Drew y Maxwell Fry, que realizaron numerosos bloques de viviendas, e incluso el botinico indio M.S. Randhawa, que establecié el plan de arborizacién de laciudad, impusieron su saber hacer'y,en “ocasiones, sumarca en Chandigarh, El plantlevado aeabo, ladivisiénde laciudad en secto- res seggin sus funciones y, por diltimo, lajerarquizacién de Jas vias de circulacién ~existen ocho en la actualidad, del enlace interregional al carril para bicicletas-constituyen, por otra parte, elementos doctrinales compartidos por nu- ‘merosos urbanistas, Comoartista plastico sin gual, LeCor- 660) EL ATLAS De LAS CIUDADES ‘ Claude Nicolas Ledoux [iStaude Nicdias Levous:| Una salina ideal Una arqutetura insti - social imegrada (1775) Salina easoy a ‘almacenamienta de sal (Wh case det seer Viviendas © Plano en semicirculo para opinizar os ‘esplazamiontos y los rendmientos Gh Perdines y huerts cue peritenalmentar alos obrers y oreceries esparcimiento busier diseié para Chandigarh los grandes edificios pibli- cos quecomponenel Capitolio. Superada una cierta escala, toda creacién urbana capa asu creador, asicomo al plan del cual es autor. Alre- dedor de medio siglo después de su nacimiento, Brasiliay Chandigarhesténsujetasaevolucionesque muy amenudo vanen contra delos preceptos que las fundaron,empezan- do por lanocién de espacio abierto (espacio eseasamente construido). En contextos radicalmente diferentes, pero tanto uno como el otroa laescala de un pucblo, clesipeio Hassan Fathy,en New Gourna, cerca de Luxor (1945-1948), y después el francés Francois Spoerry, en Port-Grimaud (964), experimentaron, por elcontrario, con cierto éxito, una concepcién ala vez centralizada y variada de laarqui tectura, Aunque son numerosos arquitectos los que conci ‘ben actualmente fragmentos enteros de ciudades nuevas, no cabeduda de que parece haber sobrevivido laideasegtin Jacual un inicolipiz, podriaengendrar una ciudad, Simon Texier| CCateritico de storia del Ane onaUniversidd ‘de Picardie Jules VerneLe Corbusier | € | La ciudad horizontal Concentracién de los centros de poder © ec aia poten Conjunto residencial adaptado 18 Bloques sectoiales Fete-ChansizarhAdinsaron 500 m ‘Armonia con ta naturaleza py Dinansin wea, ago yveaetacion omnipresente Las siete vias de circulacién © Grandes areias ——@ Cates ce bario © Grandes bulvares — @ Vias de acceso CCareteresdeiniendo @ Cle peatonales e © Vane io extres, @ CCalescomerciaes arable z LE MONDE DIPLOMATIQUE EDICION COND SUR /FUNDACION MONDIPLO | 6¢ En el siglo XX, la se acelera, em: modernidad yobra publicada: La ville de moet INTRODUCCION Olivier Mongin Ciudades bajo presion Frente a las ciudades tentaculares y a las ndmadas, al urbanismo frenético y a las ciudades interconectad metropolis intentan controlar su desarrollo sin disociar jo global de |o local I devenir de las ciudades, una vez puestas en evidencia la fuerza de la demografia y la velocidad de la urba nizacién enel ultimo siglo, noes nada sencillo de prever. O bien se insisteso- brelahomogeneizacién urbanaen curso vinculada alagiobalizacién, alegandoque por todas partesen el planeta se esta imponiendo un mismo tipo de ur- banizaciény de construcciones; obien se centra la atencién sobre la dimension caética de un univer- sourbanoenel que predomina lo informal.Sin em- bargo, es mejor comprender bien tres tendencias importantes: lapreponderancia de los flujosy de la ‘movilidad en los territorios, el retroceso de la inte~ gracién multicultural urbana en beneficio de las estrategias de demareacién y la privatizacién de los espacios pitblicos. Con la revolucién digital ya no esnecesaria laeleecién entre lo global olo local, CC ety Cae escritor y ensayista, oni Cece Paescl ad Cesta Tue rar ea ac} et ed Pieces) ar TL Cae (64) EL ATLAS DE LAS CIUDADES ‘encontramosportodas partes elementos de olocal ‘de unmodo miso menos globalizado y que conlle~ van la presencia de figuras urbanas contrastadas. Este esel motivo pore quelaglobalizacién urbana ‘opone hoy en dia dos concepciones diferentes so- brea ciudad de los flujos: lade la ciudad globsliza- da, que separa lo global ylo local, yla de la met poli contempornea, que intenta, por el contrario, asociarlos. Elescenario que misse ajustaala urbanizacién contemporinea, interconectada y que trabaja en redeselde laciudad globalizada:esta puede llevar por nombre Dubs, Shanghai, Astand.. ciudades en las que laconexidn (puertos, aeropuertos, esta- ciones de tren, servicios) es el motor, pues apues- tan por lavelocidad y la potencia delo virtual, algo que las desmarca del funcionalismo de la ciudad industrial. La ciudad globalizada se adecua, ante todo, ala red de las otras ciudades globalizadas. con las que esté tanto mds conectada cuanto mas. se mantiene a distancia desu entorno mis proxi- mo yse isla desu emplazamiento original. Ba re- sumen, la globalizacién urbana va acompainada de unadescontextualizacién. Las variantes de este fe- nomeno son numerosas:las ciudadesemergentese insulares de la primera generacién asiitiea (gene- ralmente os puertos,a imagen deSingapur y Hong Kong, que inauguraron la mundializaci6n urbana desde finales de los afios 70); las ciudades globales (una expresidn de Saskia Sassen), queson ciuda- des-mundo histérieas como Londres 0 Tokio; las microciudades globales insertadas dentro de me- sgaciudades (la ciudad portuaria de Montreal, las, darsenas de Puerto Madero en Buenos Aires); as ciudades de excepeiéns las cibereiudades; las cit- dades escaparate o las ciucdades de los emiratosdel Golfo (Abu Dabi, Dubai), que se las ingenian para disociarTolocal de lo globalTentacular, voraz y canibal Dado que la globalizacién descontextualiza, el de- sarrollo urbano, por otra parte contrastado, evo- Iuciona, ya sea en el sentido de una extensidn sin limites en el de la creacién de limites separado- res, ajenos al espiritu integrador propio de la ciu- dad europea lo largo de la historia. La ciudad sin. fronteras, lano-ciudad segtin algunos, adopta di- ferentes formas, entre ellas ade la ciudad nomada en extensidn (Los Angeles, Houston, Casablanca, Buenos Aires, México) y la de la ciudad tentacular (Bombay, Sao Paulo, Kinshasa).La“ciudad-pulpo” es tentacular, voraz y canibal, corresponde a me- galépolis como las de Estambul o Shenzhen, en las queel proceso de expansién urbano lamayor parte delas veceses debidoal asentamiento de poblacién procedente de zonas rurales en barrios periféricos, arrabales, suburbios que constituyen potencial- ‘mente una especie de trampalin para ellos. En el caso de Johannesburgo, hablamos de una ciudad elusiva, una ciudad en constantemovimiento, ina- prensible ¢inestable:esuna ciudad en com- pleto desorden que atrae a todo el mundo pero que, sinembargo, yano es habitable. Bs la ciudad del éxodo rural en Africa (Kinsha- sa, Duala, Jartum) 0 en Asia (Bombay, Daca); sla eiudad-mundode laque, denaturaleza centrifuga y centripeta, tampoco nos faltan ejemplos: Sio Paulo, Lagos, Combinaciones heteréclitas Mientras que a ciudad-pulpo aspira y expulsa, la ciudad ndmada, que corresponde al urban spraw! del que Los Angelesessimbolo en los Estados Uni- dos, traslada sus limites hacia el exterior (lo su- burbano, loperiférico). Esta voluntad de deportar laciudad fuera de centros urbanos inseguros vale también para una ciudad como El Cairo, dondese estén construyendo nuevas ciudades en la peri- feria, Sibien la ciudad némadaes, generalmente, luna respuesta frente ala megaciudad yaconver~ tida en insostenible e insoportable, esta movili- dad también albenga una intencién de mayor se~ guridad. Se manifiestan asf las tendencias hacia el cierre y el repliegue, que se earacterizan prin- cipalmente por la imposicién de limites entre los territories intramuros y extramuros: la ciudad in- tramuros, propiay controlada, remite a todas las, formas de entorno urbano seguro; los limites ex- ‘tramuros representan la ciudad impropia, la de los enclaves relegados al exterior de la ciudad: las chabolas, los suburbios del extrarradio, las zonas, abandonadas, losdeseampados. Lejos de estos territorios marcados por la aspi- raci6n.a loglobaly por kaoscilacidn entre la presen- ciao ausenciade limites, la tendenciacontempord- neaalametropolizacién atestiguauna voluntad de asociar loglobal yo local, de no desvincularlaciu- dad delos flujosde uncontexto, “Elemplazamiento delaciudad precedeal pro- sgrama urbano”; esta formula subrayala preocupa- cién por distanciarse tanto del repliegue sobre lo local como de lasredes de conexién de lo global. La ‘metrépol intent asiconservar su unidad,agiome- rarloque yaesté disociadooen viasde separacion. Con respecto a este fenémeno, encontramos una sgrandiversidad de escenarios posibles: hay metré- polis en formacién repartidas por todo el mundo; eltérmino esta pactado, pero son més bien escasos los proyectosmetropolitanos susceptiblesdedina- mizarlademocracia urbana de preocuparse por loshabitantes. Entre otros, estas eiudades respon- den alos nombres de Vancouver, Seattle, Amster- dam, Amberes, Nantes o Burdeos,y tienen la doble particularidad, por un lado, de no disociar lo local de lo glabal y, por el otro, de saber hacer frente al mismo tiempo alos desafios sociales y ecolégicos asicomo alasrestriccioneseconémicas. El desarrollo urbano se lleva a cabo ya sea en el sentido de la extens creacién de limites separadores. Esta diversidad de escenarios no nos debe in- ducira pensar que las entidades urbanas son ho- mogéneas, Las combinaciones heteréclitas son numerosas, a imagen de esos condominiums (con- dominios privados) que insertan favelas en pleno centro de Sio Paulo. Sila ciudad “conectada” (en interconexién con la red global) est4 descentrada, atraida por los lujos globalizados, privatizada y es, selectiva,y siel enclave al margen de estos flujos, esti condenadoa inventar unas reglas en las que la violencia es uno de los factores determinantes, es, tan solo la ciudad metropolitana la que se esfuer- zaenaplacar dichos flujos,en desacelerary en re- crearlas condiciones deuna democratizacién ur- bana que tome en consideracién las pricticas de sus habitantes. Esto esa lo que Alberto Magnaghi se refiere como “la globalizacién desde abajo”, un. tipo de globalizacion en Ia que el devenirurbano desempeiia un papel fundamental. Se plantea de este modo la ereacién de un urbanismo responsa- ble para el manana: sies necesario reinventar un ‘mundocominen una Tierra finita, ganarledenue- vo el terreno ala urbanizacién generalizada en fa- vor del campo sometido a la industrializacién de sus tierras, del bosque en vias de deforestacién 0 del desierto, ya no es posible recurrir para ello al urbanismo industrial y funcionalista del ayer. i LE MONDE BIPLOMATIQUE EDICION CONO SUR /FUNDACION MONDIPLO | 65 ién sin limites 0 en el de laPLANETA CIUDAD PARIS Un ligero perfume de Laciudad de la luz atraea millones de visitantes cada aito, Sin embargo, la capital esta perdiendo una de sus mayores riquezas: su diversidad social. nos 130 museos instaladosensuconjuntourba- no, es decir, la mayor coneentracién por metro cuadrado de todo el planeta, mis de 1.800 mo- rhumentos hist6ricos, 27 millones de visitantes 12 veces su poblacidn!-, de los cuales 18 millones sonextranjeros,yedificios (Iatorre Eiffel oe! Louvre) que, como sise tratara de atletas sobrevitaminaos, baten sus propiosrécords de visitas. Son suficientes estos indicado- res para hacer de Paris una ciudad-museo? Pongamos por corolario esta doble cuestién: squé es una ciudad-museo? Xeuilesserian losescollesde dichaestampa? Unaciudad- musco est ancladaen su pasado, en su herencia, yesinca~ Paris, una extension muy limitada Un patrimonio protegido (WW Sector savaguarcado gy tus tia o iserto como monumeni histrica Primero de protectin de 500 motos alrededor de un monumenta Sito casicado o inserto Una verticalidad periférica trmuble 4D cegan aia : 0 maxes) * art: as dspatrinoines, ‘Mintero decals, Pre (66 | EL ATLAS DE LAS CIUDADES paz deadaptarsealasexigencias ela vidacontemporinea. Habriaperdidoasi, pues, sucapacidad de inventar,deinno- var. Este es uno delosreproches quese le hace ala ciudad de Roma, quesereconstruye unay otra vez sobres{ misma, alcontrario que Milin, en continuatransformacién y do deel skyline, la silueta urbana, se enriquece con auda ciudad estaria perdiendo,eneambio, el elemento mis presentativo desu historiay desu éxito:su grandiversidad / social. Laeseasez delos bienesinmuebles, conunos precios que aleanzan cifras desorbitantes,no es ajena zestasitua- cidn: algunos barriosestin perdiendo de manera progresciudad-museo vasu poblacidn de origeny,conella, los servicios y activi- dadescolindantes. Para Philippe Meyer, periodista y autor de varios libros sobre Paris, candidato en las municipales de 2008 bajo la bandera del MoDem, “Ia ciudad se ha convertido en una reserva de neoburgueses” yse haembarcado en lo que de- nomina “un proceso de ‘veneciacién”. En resumen, “la ciudad se vuelve un decorado”, Un decorado dibujado, de inspiracién esencialmente haussmanniana,y trazado en tornoalas impecables perspectivas de unas fachadas mi- nuciosamente ornamentadas, en las que la palidez de la piedra talladacontrasta conel intenso negro del hierro for- jado. Pero Ia oficina de turismo nos informa, no obstante, que “Paris es laciudad mas deseada del mundo”, de acuer- do.con estudios realizados enel extranjero, Merece la pena detenerse un momento sobre la si- uientecifra del Insee:habriaen Paris unas 193.000 segun- dasresidencias o pisos vaefos lo que representa un 14% del volumen total del parque de viviendasde laciudad. En los arrondissements (distritos) del corazén de Paris, los lla- mados histéricos, esta proporcidn aleanza el 20%. Solo Venecia -precisamente- cuenta con unas ‘tasas superioresa estas. Salvo en caso de que- reraceptar una fosilizacién tal, unaciudadcon tanalto flujoturistico dehe encontrarimpera- tivamente su equilibrio entre estos dos polos ‘humanos: el de los que a visitan y el de los que lahabitan Poblacion de paso Noobstante,el atractivo turistico de una ciu- dad en la quese vive, se trabajay se disfru- ta no es necesariamente perjudicial para su desarrollo, Una sencilla observacién: cn Paris, el 20% de los empleos estan li- gados directa o indirectamente al turis- mo. “La existencia de una cultura y de un patrimonio urbanos que gozan de re- putacién mundial no tiene demasia~ darelacién conel dinamismo dela ciudad -afirmaba refiriéndose ala capital el historiador del arte y ar- ‘quitecto Francois Loveren larevis- taUrbanisme-Sise sabe gestionar,el patrimonio noesun obsticulo paralavi- talidad urbana, sino uno de sus compo- nentesesenciales”. Una ciudad-museo se caracteriza~ riaasi pues porladesaparicién de sudimensién humana activa, en el sentido enel que esta rriga, nutrey animalaciudad,en beneficio de una LE MONDE O1PLOMATIQUE Et ATED | §) capac ceca sje Iarealidad: laciudad se convierte, de este modo, enel lugar de refugiode una poblacién de paso. “Paris, ciudad a tiempo parcial”, continia Philippe Meyer. Si Paris no fuese ya lo que era, los paisajes de Ia peli- cula Amélie no habrfan sido mas que un decorado de mar- keting publicitarios algo que privaria dcese escalofrie nos- talgico-romintico a todos sus eandidatos y no solamente los japoneses, vietimas del famoso sindrome de Parise! Parishokogun. Los peatones cielistas curiosos que reco- ran sus calles podrdn darse cuenta de lo siguiente: fuera de Las zonas turisticas mis concurridas (el Sacré Coeur, el Louvre ola torre Biffel) la ciudad della luz guarda aiinmu- chosotrosrecursos humanos que merecen ser destacados, ynotodoslosbarrios cierranala hora delos museos, Tirania de lo periférico Hasta para el simple observador, Parfs es una ciudad den- sa, muy densa, como atestigua la intensidad de sus flujos decirculzcin.Incluso sien menosde un siglola ciudad ha perdido una cuarta parte de su poblacién, pasando de2,9 millonesde habitantesen 1921 (momento de su apogeo de- _mografico) a 2,2 millones en 2010, su asa de densidad (de 21.000 habitantes por km: si bien, para que nos hagamos unaiidea, eneste célculoestin también incluidosel bosque de Boulogneyel de Vincennes) supera lade Tokio, Gazao Seiily sesinia por detrés de las de Manilay Calcuta. Alcontrario que Venecia, prisionera del legado de su propiahistoriay de os limites casi inmutables que leimpo- ne suinsularidad, Paris dispone de un potencial de apertu- ray desarrollo quetan solo necesita er activada, Sometida alatiraniade lo periférico, la ciudad est constituida, gros- so modo, por un centenar de heetéreas. Ahora es su mi ‘mento de aliarse con las comunidades de la periferia mas proxima, que no hace tanto tiempo constituian el departa- ‘mento del Sena, para hacer posible asi la creacidn de esa especie de antesala al Gran Paris que tanto esté costando smaterializar Paris podria continuarsiendounaciudad-museo, pero condicién de ofrecer nuevas alternativasa sus futuros vis tantes,esto es laposibilidad de descubriralgomasqueclya smanido recorrido por los principales monumentosckisicos: yysus tiendas de souvenirs frente alos que se agolpan auto- busesrepletos deturistas. Existen ingeniosas solucionesen las margenes de la ciudad: la red de tranvias, por ejemplo, reine treintay unespacios dela ile-de-France,incluyendo lacapital,en torno al interés compartido de la producciény difusién de arte contemporineo. Sin duda, algo con lo que refrescar un poco asideasy evitar el sindrome de Stendhal: ‘unmalestar psicosomiitico provocado por laexcesivaexpo- sicidn aobrasde arte, comoelque vividesteescritor francés en 1817 durante su vista a Florencia,otra de las ciudades- ‘museoporexcelencia, [Ver también Paris, pag. 32] Jean-Jacques Larrochelle Perieclstade Le Monde IN CONO SUR /FUNDACION MONDIPLO | 67PLANETA CIUDAD LONDRES Mundial y comunitaria Elbarrio financiero dea City disfruta de una influencia mundial. Pero, alrededor del dinémicoe innovador corazénde Londres, aumentan las desigualdades sociales. ondires naci6 en laribera del Timesisen la época romana, alkipor elaio $0, enel ugar donde cles- trechamiento del eauce y latierra mas firme de sus orillas permitieron la eonstruceién de un puente de madera. El Timesis ofrece un acceso directo al ‘maryalosoeéanos, unaaberturamaritimaque desempefia tun papel fundamental en el auge de la ciudad anivel mun- diak ya desde la Edad Media, entablé relaciones con los puertosde la Hansa -2sociacién integrada por comercian- tes de varios puertosy ciudades del morte de Europa—y, en el momento de laempresa colonial, reiné sobre un imperio cenel que “el sol nose ponia nunca”. Plaza financiera histéricayy centrodeinnovacién, laca- pital briténicaes también lacuna de a Revolucién Indus rial. Londres conserva atin hoy en dia su rango de ciudad mundial a pesar deldective de la potenciabriténicay de las diferentes crisis que hatenido que afrontar (el incendio de 1666, las destrucciones del bombardeo nazi del Blitz entre septiembre de 1940 y mayo de 1941, eteétera). Uno de sus puntos fuertes es su capacidad de reinventarse yadaptar- sea las evoluciones de laeconomia mundial, de a que ella misma se convierte aveces en principal eentroneuralgico. Londres, juntoa Nueva York, Paris y Tokio, se sittia en la cimade lajerarquia urbana:eslaprimera plaza bursétilyla prineipal plataforma aeroportuariadel continente, ESca~ pazde generar por sisolaun PIBequivalenteal de Portugal yy Austria juntos,y tiene una presencia destacada en varios aoe Mt Appert Mao Bp, ‘All deLontes Aree 3012 (68 | EL ATLAS DE LAS CIUDADES sectores punteros y de prestigio, como el dela economia del conocimientoy la innovacidn (32% de los empleos del pais) Setrata de una metrépoli creativa, que lberga em ppresas de primer orden a nivel mundial pertenecientes los campos de la publicidad, las artes, los medios de comu- nicaciény laarquitectura. Noobstante, su influenciainter- nacionalse pone especialmente de manifiesto en elambito delas finanzas y se ve materializadaenel barrio financiero delaCity,centrohhistérico de Londres. ‘simbolo del liberalismo Corazén econmico del Reino Unido, la City cuenta tan solo con 7300 habitantes, si bien concentra una cifra de 368,000empleos, os tercios de ellos relacionados con las finanzasy los seguros, Se alojanenella assedes dela Bolsa de Londres -London Stock Exchange (LSE), tercera bolsa ‘mundial en capitalizacién, luego de lade Nueva York y la de Tokio-, del Banco de Inglaterra y de otros 500 bancos mas de todo el mundo, asi como las de numerosas multi- nacionales, Simbolo del liberalism, la City participé ple- namente en la desregulacién de os mercados financieros establecida por Margaret Thatcheren losafios 0.Ademis, suiubicacién geografica le ofrece la posibilidad de dialogar con Asia por lamafiana y también con América del Norte por latarde del mismo dia, En definitiva, este barrio con- sregaazliunos de los profesionales mejor cualificados de ossectores de las finanzasy los serviciosempresariales Los rascacielos se multiplican en a City, lo que refuer- zalaimagen de una ciudad de laglobalizacién en perpetua reinvencién. No obstante, como el perimetro de la City es reducido, el barrio financiero tiende a exten- derse ademis sobre los tervitorios vecinos hasta el sur del Tamesis, Asiel barrio de Canary Wharf, en Docklands, situado aleste dela capital, ha pasado serel segundo centro financiero de laciu- dadyunanexo dela City. Estaespe cializacién en el sector financiero también acarrea, sin embargo, cier- tosinconvenientes. La crisis de 2008 frené por un tiempoeldinamismode laity. Un Gran Londres marcado por las desigualdades -# Revel invntariadas del 6a 9 de agosto de 2011 [BB Terrtoo con grandes dtcutates socoeconomicas + Direccions de sospectosesarestados i . Espacio era GranLondes’ Gitano Mudahe os cos 98S NRQOen’ s OW & ‘ . ‘Piewe:a Appr. allen. 0-Papl, Aledo Landes hurement 303. Un centro de la ciudad dinamico y creativo Centro dela economia Bastién de las finanzas mundiales F timte ae a city (BConcenzacion de ts fanzas IE concenracn ce services isos w= Grupo bitinico presente ena casfcacon Ferune 500, Centro de poder britinico Poder palo y acministtivo Asesoria ygestin Del mismo modo que acoge algunas de las grandes for tunas (64 multimillonarios viven en Londres), enlaciudad también encontramos unapoblacidn verdaderamenteem- pobrecida. Ladiferencia de ingresos entre os distintos ba- trios delacapital es considerable. Elpatrimoniodel 10% de loslondinenses mas ricos es 270 veces superior al carres- pondiente al 10% de los ciudadanos mis pobres. En Lon- des, un 38% de los nifios viven por debajodel umbral de pobreza (Ia media nacional es de un 30%). En lo que res- pectaasanidad, las desigualdades son también importan~ tes. Sextin la Oficina Nacional de Estadistica, entre losdlife- rentes barrios del distrito de Westminster, Iaesperanza de vida masculina puede variar hasta en diecisicte aos, Estas fracturas socioeconémicas van a su vez acom- paitadas de separaciones étnicas en una ciudad donde el 37.6% de la poblacidin ha nacido en el extranjero. Dichas desigualdades sociales y étnicas eausan profandos resen- timientosy sanel origende tensiones que se ver empeora- daspor la coexistencia inmediiatade unas poblaciones tan radiealmente diferentes, En Londres, ricosy pobres sue~ lenestar separados por unas pocas calles. Por ejemplo, los territorios enormemente desfavorecidos del East End, re- cepticulo histérica de inmigrantes recién llegados en bus- cade asilo (los hugonotes -protestantes franceses durante el periodo de las guerras de religién-, los judios y, actual ‘mente, gran cantidad de poblacidn procedente de Banla-

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