You are on page 1of 63
Patrick Modiano __ Dora Bruder ‘Una aolescente perdi en spies del pasa resume en sa desoladorapripcia vital el euviieno de toda un épocs: 13 dedictombrede 194, nel perio Pars Soiraparecis ‘manunciedramutiaeunos padres buscaban aide Fao, Tudo de un colegio de monjas,Nuere meses mis ‘loner nce conocerose deta de todo un pueblo detod ranciay etd Europa enn momento de dolor yilencaen tlquelapurena ela bee un fondo de destruc Pereltoma iro no x sl a vida de Dora Broder, ino Ia equa del proplouutor que tan de econstrir aula blograla orm, on into contenido de una breve y exact entree: ‘edo, Putick Modano, uno de os mayores autores ances ‘ontemporineos lamina dee el present el doo herr ye Sutinieato del paso, peo también posi «Dore Brader es jor novela Bins cco qe es una delas mejores news po reds os ullnas aos en Rurpa.s Modtano cube {su nanatia, Adel Gast Ort Seix Barral Biblioteca Formentor Seix Barral Biblioteca Formentor ora Bruder. So basa una oven, Ds Se iSson 18, rat vada, ie ame. abrign oor x pullover Grell sombreroar marina, mapas spre ren, Foner com | tna ery rs Bre, Salevar Orman, 4, Pas Patrick Modiano Dora Bruder Prologo de Adolfo Garcia Ortega Tradvccién del ances por sie a | ttt ‘Sng ate ace ng. 0) ‘icin rr ren PROLOGO por ADOLrO Gancta Orca [Me considero un lector constante de Modano, ua mo- ianista, desde sus primeras novelas a finales dels setenta. (Creo que he leldo practzament todo lo que ha escrito, por ce puedo decir que Dora Bruder e su mejor novela. Bin cluso creo que es una de las mejores novelas aparecidas en los skims anos en Europa (el orginal fancts es de 1997), {yaunque no es mis extensa que el resto de su produccén, ya {que Modiano acostumbra a escribir novelas de unas 150 0 170 paginas, éta adquire una dimension extraordinaria, _profuda, escaloriante, por su contenido, Bs Modiano en la Cumbre de su narrativa Las fases quel erftia faneesa ha dicho acerca de Dora Bruder son absolutamente exacts: li- ‘bo turbadors (Renaud Matignon),slbra conta el lvidow (Norbert Czarny), eos gra libro» (Mare Lamon), libro ‘excepcional (Jorge Semiprin). ¥ se podria anal: libro ne- cesar, libro cautivador, libro magistal Patrick Modiano no 5, como digo, un desconocido en Espana, Nacido en Boulogne-Billancourt, Franca, en 1945, de origen judi, sus novelas, desde la primera, La Place de toile (1968), har sido traducidasperiédicamente a nes tra lengua. Bn 1972 publi una de las novelas que marea- 1a una especie de spatrin» para toda su obra, Los buleva- res peifricas,caracterizada por ahondar en el pasado des- dle una stuacion de presente, casi sempre en ef marco de un Parts concebidi como uy mundo geograficamente dilaado, ‘enorme, casi un pats en x,y eon la intencion de encontrar las claves a la prsecucin judia en Francia 0 al naufragio moral que supuso la Ocupacién, mediante personajes qu, sometidos «diversas prsiones, no siempre definidas, inter nas 0 externas, vagan por a vida sin una expliacion, pero con la necesidaa de describe tempo pasado. Esto, esque- Imarcamente, resume el cuadro general de las novelas de ‘Modiano. Ex 1978 fue premio Gancourt por la impresio- rnante Rue des boutiques obscures, y su producion com prende, entre otms, La onda de noche (1970), Una juven- ‘ud (1981), Domingos de agosto (1986), Pl rineén de los nins (1989), Viaje de novies (1990), Joyita (2001), Un pe lige’ (2005) ola maravillose Enel café de la juventua per ida (2007). Sus obras han ido siempre al margen de las mo- tas del momento, eseribiendo un tipo de literatura propia, y 0 le hace grande. Alora, con Dora Bruder, todos ls ingredientes habi- tuates se dan cita para componer un, prisero modesto pero Tego descomunal, fresco de la vida piiblia francesa en el marco volento,sterrado 9 rue dela deportacsn de judo. tema es fircuente en Modiano, sbre todo en Rue des Doutiques obscures o en la novelizacn desu guibn, para Louis Matte, de Lacombe Lucien, pelicula que convulsions Francia donde sin piedad escarbaba ex ls fantasnas del co laboracionismo, Pro es con Dora Bruder donde se conver teen wn canto fnebre,directamente persona, entonado a todas y cada sma de las personas judias cuyas identidades fueron borradas, climinades, suprimidas. Y esa supresié, ‘cuando se traa de hallar cul fue su hela en esta vida, iis escaloriante cuanto se intuye que slo pueden perma: necer en la memoria gracias a libros coma el de Modano (0 lde Arendt o el de Goldhagen, por citar dos muy distintos), * ‘ya que no existe memoria familiar pant pervivir en el re- cero: ls familias morian enteras. eclaradosapdtridas,siendo vecinosy convecinos de ls Sranceses nojudios, send compatrotas, amigos, familiares, ‘paulatinamente os rastros por este mundo de los judios de Dportados van haciéndove desaparecer por una voluntad pre- concebida. ¥ Dora Bruder, la nina de quince aos desapare ida, ese smbolo de todos ellos. "Narrada como wna historia presente, en que el narrador ‘ye autor se confunden, Dora Bruder arranca del encuentro ‘asus, en un priédico de 1941, de un pequeio sult en que Ios padres avisan dela desaparicigm desu hija. El hecho de ‘que el domiciio familar coincida com el barrio en que el na- rador vivid su infancia, hace que exa noticia le Hame la ‘tencibn. A partir de ahi, bajo la capa de recuperar mis ald de la euriosidad, empezard una busqueda de la identidad perdida de aquella nia que, como sus pares, como tantos miles de parisinos, termiind en um horso crematoria naz, ‘ayudades or la burocracia francesa. Buscar primero en los ‘scenarios actuales de Pais, Buscardrastros, pequeis indi ios, pero durante afios en investigai6n ind erciendo, se prolongard por archives de la policia, por centros de docu- rmentacion, encontrar cavtas, nombres, sabrd cull habré sido el destino, paso @ paso, de esa muchacha en vn Paris rratado con cavino, pero com dureza, asta su muerte en el campo de concentacion. escarnadamente, como pocas veces se ha vist, Moda no, con pinceladasescuetas,relata como wn historiado la se ‘cuencia terrible de aquel ano 41, primero en comsivaras, Ine- 0 en cuarteles, luego en tenes, luego en campos, luego en horns. Inluso el tono autobiogrfico de autor pele le presta un realismo descarmado, a-lieraie, que objesiva la novela en un ranga de investigaion periodistca, aunque slo en pare, ya que la novela desiende famente ao ms onde del alma, A medida que va profundizande en la vid, ‘los retazor de vida, que consique averiquar de Dora Bru der, el lector asiste a una especie de apertura de cimara s Nada: cienos, miles de Doras Bruder var saliendo a lah Lo que era una sencilla busqueda, alimentada porta conc dencia de calles y de lugares comunes com la infec del na rrador, se converte en el acta notarial de wna masacre,¥ 10 espeluzmante de la historia es precsamente esa cercanta de Iugarescormunes, ese Paris que compartieron tanita y el ma rrador. Mientras busca Ia identidad de ls Bruder, Modano nos describe el mundo anterior a s infancia, cada enst, ada tre, cada hora, cada sufrinientoo angustia le es ju dios y judas deportades son casas, horasy tenes en que otros franceses viva ajenes, © no tan ajenos, esa matanca, ‘Modano, en esta obra magna y concentra, demuestra que el mundo al que vuelve una y ox vez no estd agotada. aa novela, incluso, abre una via por la que cabe esperar que el autor avance con nuevas perspectiva desu disecion ‘moval de la Francia ocupaa, Pero lo terrible es pensar que Jos siempos actuaes no son distintos en cuanto a ese tipo de sitwaciones. Las gueras, las grandes migracions de despa _zaios, la ascensién de ls fanatismos, las matanzas genera- lizadas alli donate un colectvo es perseguido por ser slo ex, lective, hacen que novelas como las de Modano, donde la tims se lamentan de er arolladas por la historia, no pa sen dle moda, al revés, pervivan como faros morales. DORA BRUDER Hace acho afi, en un viejo ejemplar del Paris-Soir, con fecha del 31 de diciembre de 1941, me lam6 la atencién tuna secci6n, «De ayer a hoys, en Ja pagina tres. Le: Panis Se busca a una joven, Dora Bruder, de 15 anos, 1,55 ms, rostro ovalado, ojos gris-marrn,abrigo sport gris, pullover burdeos, falda y sombrero azul marino, zapatos sport marrén. Ponerse en contacto con el seior ya sion Bruder, bulevar Ornano, 4, Paris. Conozco desde hace tiempo el barrio donde esté el bulevar Ornano. De nifio acompanaba a mi madre al ‘mercado de ls Pulgas de Saint-Quen, Bajsbamos del au- tobis en Ia puerta de Clignancourt ya veces en el ayun- tamiento del dstrito XVII, Siempre en sibado o el do- :mingo después de comer. En invierno, en la acera del bulevar, que discurre a Jo largo del cuartel de Clignancour, solia estar entre la mulitud de gente, con sa tripode, un forografo gordo, de nariz grumosa y lentes redondos que offecta una sfoto de recuerdo», En verano se instalaba en el puerto, de Deawwille frente al bar Soleil, Hacia clientes. Pero 6 allt, en la puerta de Clignancout, los transeintes no pa ‘ecian fener muchas ganas de Fotografias, Llevaba un, Viejo sobretodo y un zapato agujereado. Recuerdo el bulevar Barbés y el bulevar Ornano desiertos, una tarde soleada de domingo, en mayo de 1958. En cada cruce habia patrullas de policia debido a las sucesos de Arg Estuve en ese barrio en el invierno de 1965. Tenia Uuna amiga que vivia en la calle Championnet. Ornano 49-20 En aquella época la multitud de transetintes que pasa los domingos por la aera del cuartel debia de ha: bersellevado por delante al gordo fotdgrafo, pero mun- @ fui a comprobarlo. ;Para qué habia servido exe ‘cuartel? Me dijeron que habia albergado tropas colo- nates. Enero de 1965. Eran las seis de la tarde y caia la no- che en el cruce del bulevar Ornano con la calle Cham- pionnet. Yo no era nada, me confundla con el crepiseu- To, con las calles. El ltimo café, al final del bulevar Ornano, lado de los pares, se lamaba El Surtidor Constante. A la iz- quierda, en la esquina con el bulevar Ney, habia otro ‘que tenfa un juke-box. En el cruce Ornano-Champion- net, en la esquina con la calle Duhesme, una farmacia y dos cafés més, uno de ellos muy antiguo, Lo que he llegado a esperar en esos cafés. Desde primera hora de la maftana, cuando atin era de nocke Desde mediodia hasta el anochecer. Y mis tarde, hasta Ia hora de cierre, Los domingos por la tarde un viejo automévil de- portivo negro —un Jaguar, creo— aparcaba en la calle Championnet, a la altura del parvulario, Llevaba una, placa detrés, G.LGu Gran Invilido de Guerra, Su pre sencia en un barrio ast me chocaba. Me preguntaba qué cara tend su dui A partir de las nueve de la noche el bulevar se que- ddaba desierto, Todavia veo la luz de la boca del metro de Simplon y, casi enfrente, la de la entrada del cine, uubicado en Orniano, 43, El numero 41, que precedia al cine, nunca me habia llamado la atencién y, sin embar- go, estuve pasando por delante durante meses y De 1965 a 1968. Ponerse en contacto con el sefiora Bruder, bulevar Ornano, 41, Pars De ayer a hoy. Con el paso de los aftos las perspectivas se vuelven borrosas, los inviernos se mezclan unos con ‘otros. El de 1965 y el de 1942. En 1965 no sabia nada de Dora Bruder. Pero hoy, treinta afios despues, mis largas esperas en los cafés del cruce Ornano, mis itineratios, siempre los mismos —recorria la calle Mont-Cenis hasta alcanzar los hote les de Butte-Montmartee: el hotel Roma, el Alsina o el Terrass, en la calle Caulaincourt— todas las impre- siones fugaces que conservo: una noche de primavera en que se oia hablar en vor alta bajo los drboles del par que Clignancourt,y de nuevo el invierno,a medida que bajaba hacia Simplon y el bulevar Ornano, nada de eso ‘me parecta debido simplemente al azar. Quia4, sin tener todavia una conciencia clara, andaba tras la pista de Dora Bruder y de sus padres. Estaban ya all, en fli- gran. Intento encontrar indicios remontindome en el tiempo, Cuando tenfa doce aftos y acompataba a mi made al mercado de las Pulgas habia un judio polaco que vendfa maletas, a la derecha, al principio de una hilera de casetas, casa Malik, casa Vernaison... Maletas lujosas, de euero, de cocodrilo, y también de cartén, bolsas de viaje, bailes con ctiquetas de companias ‘ransatlinticas,apiladas unas encima de otras. Su case ta estaba al aite libre. Llevaba siempre un cigarrillo colgando de la comisura de los labios y una tarde me offeci6 uno, i alguna ver al cine, en el bulevar Ornano. Al CClignancourt Palace, al final del bulevar, al lado de EL Surtidor Constante. ¥ al Ornano 43. ‘Mis tarde supe que el Ornano 43 era un cine muy Antiguo, Fue reformado en los afios treinta al estilo bar~ 9. Volvi a aquellos parajes en mayo de 1996. Unos al- rmacenes han reemplazado al cine, Se atraviesa la calle Hermel y se llega ante el niimero 4 del bulevar Orna- no, a direccién indicada en el anuncio de busqueda de Dora Bruder. Un edificio de cinco pisos de finales del x1x. For ‘ma con el niimero 39 un bloque rodeado por el bu- levar y la confluencia de las calles Hermel y Simplon; esta tltima pasa por detris de los dos edificios. Am. bos son parecidos. El numero 39 lleva una inscripeién. con el nombre del arquitecto, un tal Richefeu, y la fe cha de construccién: 1881. Lo mismo vale para el nti ‘mero dl, Antes de la guerra y hasta prineipios de los afios cincuenta, en el ndmero 41 del bulevar Ornano se le vantaba un hotel, asi como en ef 39, que se llamaba ho: tel Lion D'Or. También antes de la guerra habla en di- ‘cho nmero un café-restaurante regentado por un tal Gazal. No he podide encontrar el nombre del hotel del numero 41.4 prineipios de los aos cincuenta figura en sa direccién una Sociedad Hotel y Estudios Ornano, Montmartre 12-54, ¥ tambici tun café, cuyo dueio se lamaba Marchal. Ya no existe {Ocupaba el lado derecho o el izguierdo de la puerta co cherat [sta se abre sobre un corredor bastante largo. Al fondo, la escalera se pierde hacia la derecha como antes de la guerra, Leva tiempo conseguir que salga a la Iuz lo que ha sido borrado. Quedan pistas en los registros pero se ignora donde estén escondides y qué guardianes los vgilany si querran ense ado que esos regstros exsten. Basta un poco de paciencia, Supe por fin que ya en 1937 y 1938 Dora Bruder y sus padres vivian en el hotel del bulevar Ornano. Ocu- paban una habitacion con cocina en el quinto piso, donde un baleén de hierro se extendia a lo largo de los dos edfcios, Una docena de ventanas, Dos o tres daban al bulevar y las otras al final de la calle Hermely,detrés, la calle Simplon, quel dia de mayo en que volv al barrio, os pos- tigos oxidados de las dos primer piso que se abrian a a calle Simplon se encontraban ce rrados, yen el baleén observé un monton de objets en desorden que parecian abandonados alli desde acta ‘mucho tiempo. En el curso de los dos o tres anos que precedieron a Ia guerra, Dora Bruder debié de ser inscrita en alg ra de las eseuelas municipales del barrio. Escribf una noslos. © tal vez simplemente han olvi- ventanas del quinto carta al director le cada una de ellas preguntandoles si podian buscar su nombre en el resto: Calle Ferdinand-Flocon, 8, Calle Hermel, 20, Calle Championnet, 7 Calle Clignancourt, 61 Me respondieron amablemente, Ninguno habia en- contrado ese nombre en la lista de alumnos de antes dea guerra. El director de la antigua escuela de nitas de Ia calle Championnet, 69, me proponia ira consultar yo ‘mismo el registro. Algin dia ira. Pero vacilaba. Queria ‘mantener la esperanza de que su nombre figuraba en ellos. Era la escuela més cercana a su domicilio. ‘Tardé cuatro aftos en descubrir su fecha exacta de nnacimiento: el 25 de febrero de 1926. ¥ dos aos mas conocer su lugar de nacimiento: Pars, dstrito XL. Pero soy paciente, Puedo esperar horas y horas bajo la ltuvia. Un viernes por la tarde, en febrero de 1996, fui al registro civil del ayuntamiento del distrito XII. El en- cargado del servicio —un joven— me tendié una ficha para que la rellenase: Peticién en ventanilla, Esriba su Apelldo Nombre Direccién ido copia literal de la partida de nacimiento de: Apellide Baupse Nombre Dos Fecha de nacimiento: 25 de febrero de 1926 Marque ses: EI padre o la madre El abuelo o la abuela I hijo 0 ta hia El cényuge ota cényuge Bl representante legal Si tiene autorizacin mas carmet de identidad del in- teresado(a) Silo serd extendida copia de la partida de nacimien 0a dichas personas. Firmé la peticin y se la tendi al encargado, Des- pués de consultarla me dijo que no podta darme Ia par- tida de nacimiento: no tenia ninggin lazo de parentesco con aquella persona. or un momento pensé que era uno de esos centi- nelas del olvido encargados de velar por un secreto ver~ gonz0so y de interceptar a quienes quisieran descubrie |a menor traza de su existencia, Pero era eficiente. Me aconsej6 pedir autorizacién al Palacio de Justicia, bule- var del Palacio, 2, seccién 3.’ del registro civil, planta 5, escalera 5, oficina 501, De lunes a viernes, de 14 a 16 horas. En el bulevar del Palacio, 2, me aprestaba a fran- {quear la gran verja del patio principal cuando un orde- nnanza me indicé otra entrada, un poco mas abajo: la {que daba acceso ala Sainte-Chapelle. Una cola de turis- tas aguardaba y quise pasar directamente al porche, pero otro ordenanza, con un gesto brusco, me senal ‘que hiciera cola como los demas Al fondo del vestibulo el reglamento exigta sacar todos los objetos metilicos de los bolsillos. Yo s6lo le- vaba un llavero. Tenia que dejarlo en tna especie de al- fombra rodante y recuperaslo al otro lado de un cristal pero en un primer momento no entendl la maniobra, Por cullpa de mis titubeos me gané Ia regasina de otro ordenanza, Era un gendarme? {Un policia? ;Debia en- ‘wegitle, como cuando se entra en prisién, los cordones ‘de mis zapatos, mi cintur6n, mi portaflio? ‘Atravesé un patio, me introduje por un corredor y dlesembogué en un hall muy amplio por donde circula- ban hombres y mujeres con carteras negras y, algunos, con atuendo de abogado. No me atrevi a preguntarles por dénde se accodia a a escalera 5. Un bedel sentado detris de una mesa me indicd el extremo def hall Por all entréa una sala desiertacuyas ventanas en voladizo dejaban ver wn dia grisiceo, Reco- rita sala de una punta a otra, pero no encontré la es calera 5. Me dominé entonees el panic y el vértigo que se sienten en las pesadlas, cuando uno no puede le sgaraaestacién, el tiempo corre y sabe que va a perder eltren, Veinte afios atrés me habia sucedido una aventus parecida, Me habia enterado de que mi padre estaba hhospitalizado en la Piti-Salpétriere. No lo vela des- de mi adolesceneia, Decidi hacerle una visita por so presa Recuerdo haber deambulado durante horas a tra vés de a inmensidad del hospital en su busca, Entraba en edificios muy antiguos, en salas comunes donde se alineaban camas y camas, preguntaba a las enfermera que me daban indicaciones contradictorias. Acabé por ddudar de la existencia de mi padre pasando y volviendo pasar delante dela majestuosa iglesia y los irreales edi- ficios del lug, intactos desde el siglo xvi y que evoca- ban a Manon Lescaut y la época en que aquel lugar ha- bia servido como prisién de muchachas con el siniestro nombre de Hospital General, antes de deportarlas a Ia Laisiana, Recorri patios adoquinados hasta que anoche- id. Imposible hallar a mi padre. Nunca volvi a vero, ero acabé descubriendo la escalera 5, Sui los pi sos. Una hilera de oficinas. Me indicaron la que tenia el rimero 501. Una mujer de cabellos cortos y aire indi ferente me pregunté qué queria. Gon vor seca me explicé que para obtener aquella partida de nacimiento era preciso escribir al senor Pro- ‘carador de la Republica, Parquet de Grandes Instancias de Paris, Quai des Orfevres, M4, 3.” seccién B. Al cabo de tes semanas recib la respuesta El veinticnco de febrero de mil movecientos veintists, 4 las veintiuna horas y diez minutos, nacid, en la calle Santerre, 15, Dora, de sexo femenino, hija de Ernest Bru- der, nacido en Viena (Austria) el veintiuno de mayo de ‘mil ochocientos noverta y nueve, pedn, y de Cécile Bur- ej, nacida en Budapest (Hungria), el diecisiete de abril de mil novecientos siete, sn profesin, su esposa, domici- liados en Sevran (Seine-et-Oise), avenida Lidgeard, 2. Li brado el veinsisicte de febrero dle mil novecentos veinti- sis, a las quince treinta horas, segtin declaracion de Gas- ard Meyer, setenta y tres ans, empleado y domicliado ‘la calle Picpus, 76, habiendo asistido al alumbraraien to, quien, después de leer este escrito, firms com Nosotros, Auguste Guillaume Rosi, teniente de alcalde del distrito doce de Pars EE nimero 15 de la calle Santerre corresponde al hospital Rothschild. En ese mismo servicio de materni- dad habian nacido, por la misma época que Dora, mu- ‘hos niios de familias judias pobres que acababan de ‘emigrar a Francia. Al parecer, Emnest Bruder no pudo ausentarse de su trabajo para declarar a su hija perso- nnalmente el 25 de febrero de 1926, en el ayuntamiento del distrito X11. Quizé puedan encontrarse en algin re- isto datos sobre Gaspard Meyer, firmante de la partida de nacimiento. El nlimero 76 de la calle Picpus, donde se hallaba vempleado y domiciliado», era la direccién del aslo de Rothschild para vijos e indigentes. Ese invierno de 1926 la pista de Dora Bruder y sus padres se pierde en el suburbio nordeste, a orillas del canal dol Ourcq, Algtin dia ieé a Sevran, pero temo que las casas y las calles hayan cambiado de aspecto, como €n todos los suburbios. He aqui los nombres de algunos establecimientos y de algunos habitantes dela calle Lié- sgeard de aquellos tiempos: el Trianon de Freinvlle, que ‘ocupaba el niimero 24. :Un café? ;Un cine? En el 31 es- taban las Caves de I'lle-de-France. Un tal doctor Jorand vivia en el 9, un farmaceutico en el 30. La aalle Lisgeard, donde habitaban los padres de Dora, formaba parte de una aglomeracién urbana que se extendia por los municipios de Sevran, de Livry-Gar- ‘gan y de Aulnay-sous-Bois, ala que se lamé Frcinvlle, EI barrio habja nacido alrededor de la fabrica de frenos ‘Westinghouse, instalada a principios de siglo. Un barrio obrero. Que en los afios treinta habia intentado conse- guir la autonomia municipal sin conseguir, Y habla continuade dependiendo de los municipios vecinos. Pero al menos tenia estacign: Freinville Ernest Bruder; el padre de Dora, era sin duda peén ‘en la fabrica de frenos Westinghouse en exe invierno de 1926, Emnest Bruder. Nacido en Viena, Austria, el 21 de mayo. de 1899, Debio de pasar su infancia en Leopoldstat, el barrio judio de la ciudad, Sus padres seguramente eran oriundos de Galitzia, de Bohemia o de Moravia, proce- ddentes, como la mayor parte de judios de Viena, de las provincias orientales del Imperio austro-hungaro. En 1965 cumpli vente anos en Viena, el mismo ano en que frecuentaba el barrio de Clignancourt. Vivian la Taubstummengasse, detras de a iglesia de San Carlos. A veces habia pernoctado en un hotel de mala muerte si- tuado cerca de la estacién del Oeste, Recuerdo las tardes de verano que pasé en Sievering y en Grinzing,y os par- ques donde solia tocar una orquesta. Y una casita de ‘campo en medio de una especie de jardin obrero, junto Heilingenstadt Todo estaba cerrado esos sabados y do- ‘mingos de julio, hasta el café Hawelka, La ciudad estaba Aesierta. Bajo el so, el tranvia se deslizaba entre los bi trios del noroeste hasta el parque de Potzleinsdort Un dia volveré a Viena, ciudad que no he vuelto a visitar desde hace mis de tcinta afos. Quizd encuentre la partida de nacimiento de Ernest Bruder en el registto civil de la comunidad isralita de la ciudad, Me entera~ ré del nombre, el apellido, la profesion y el lugar de na- cimiento de su padre, y el apellido y el nombre de sol tera de su madre. ¥ dénde estaba su domicili, en alge: na parte del distrto segundo que bordea la estacién del Norte, el Prater, el Danubio, De no y adolescente conocié Ia calle del Prater con sus cafés y 9 tet l puente de Suecia. el patio de la Bolsa de Comercio, junto a la Taborstrase, ¥ el mercado de los Carmelitas, En Viena, en 1919, sus veinte aos fueron mas du ros que los mios. Tras las primeras derrotas del ejrcito austriaco, decenas de miles de refugiados que hulan de Galitzia, de Bukovina, de Ucrania legaron en oleadas sucesivas y se hacinaron en los cuchtriles de los alrede- dores de la estacién del Norte. Una ciudad a la deriva, arrancada a un imperio que ya no existia, Ernest Bru- der no debia de ser distnto de los parados que, en grit pos, vagabundeaban por calles con tiendas cerradas. en ol que actuaban los Budapester.¥ dra tal ver de origen menos miserable que los te- fugiados del Este? ;Hijo de un comerciante de la Ta borstrasse? Como saberlo? En una pequetia fica entre millares iguales, elabo- radas una veintena de altos después para organiza las redadas de la Ocupacién y que se han conservado hasta, hoy en el ministerio cle Antiguos Combatientes, se indica ‘que Ernest Bruder era slegionario francés de segunda clases. Se enrolé, por tanto, en'la Legiéin extranjera sin que yo pudiera precisar en qué fecha, ;19192 ;19202 Fl alistamiento duraria cinco aos, No hacta falta visjar a Francia, bastaba presentarse en un consulado francés. ;Lo hizo Ernest Bruder en Austria? 0 ya se en- contraba en Francia en ese momento? En todo caso, es probable que lo enviatan, junto con otros alemanes y austracos como él, a los cuarteles de Belfort 9 Nancy, donde no se les trataba con excesivos miramientos. ‘También a Marsella y al fuerte de Saint-Jean, donde la acogida no era mucho mas cilida. En seguida, la trave- sla: al parecer, el general Lyautey necesitaba treinta mil soldados en Marruccos. Intento reconstruir el periplo de Emest Bruder. Y la soldada que se cobraba en Sidi Bel Abbes. La ma- yor parte de los enrolados —alemanes, austiacos, 1 0s, rumanos, bilgaros— se encuentran en tal esta- do de miseria que estén asombrados de que les propor- cionen esa soldada. No se lo pueden creer. Se meten en. seguida el dinero en el bolsillo como si alguien fuera a ‘quitérselo. Luego viene el entrenamiento, la carreras en. las dunas, las marchas interminables bajo el sol de plo- ‘mo de Argelia. Los alistados de Europa central como Er- nest Bruder soportan mal el entrenamiento: han estado ssubalimentados durante la adolescencia a causa del ra cionamiento de los cuatro afios de guerra. En seguida, los cuarteles de Meknes, de Fez 0 de ‘Marraquech. Se les envia a operaciones de pacificacién de los teritorios sublevados de Martuecos. Abril de 1920. Combate en Bekrit y en el Ras-Tar- ‘ha. Junio de 1921. Combate del batalion de la legién del comandante Lambert en el Djebel Hayane. Marzo ‘de 1922. Combate del Djebel-ech-Cherg. Capitin Roth Mayo de 1922, Combate del Tizi Adni, Batallén le- gionario Nicolas. Abril de 1923. Combate de Arbala, ‘Combates de la mancha de Taza, Mayo de 1923. Inter- venciones muy duras en Bab-Brida del Talrant, que los legionarios del comandante Nacgelin ganan bajo un in- tenso fuego. En Ia noche del 26 el batallén Naegelin ‘ocupa por sorpresa el macizo de Incherdit, Junio de 1923, Combate del Tadout. El batallon Nacgelin se apo- dera de Ia cima, Los legionarios plantan el pabell6n tricolor en una gran casbah al son de los clarines. Com- bate de la Oued Athia, durante el cual el batallén Ba ritre tiene que cargar dos veces a la bayoneta. Fl bata- lon Buchsenschuta se apadera de los reductos del pico sur del Bou-Khamouj. Combate de la depresién de El ‘Mers. Julio de 1923. Combate de la planicie de Immou- zet. Batallén Cattin. Batallén Buchsenschutz. Batallén Susini y Jenoudet. Agosto de 1923. Combate del Oued ‘Tamil Por la noche, en aquel paisaje de arena y guijarra- les, jsofaba él con Viena, su ciudad natal, con los casta- ‘hos de la Hauptallec? La ficha de Eenest Bruder, «legio- nario francés de segunda clase», indica también; «mut Indo de guerra al ciento por ciento». En qué combate fue herido? A los veinticinco afios vuelve a pisar el suelo de Paris. Debi de ser liberado de su alistamento en Ia Le- si a causa de su herida. Supongo que no hablé de ello con nadie, ¥ ademds a nadie le interesarfa, Y estoy se- uro de que no cobré pensién de invalider. No le con: , habria podido ser detenido en la redada de agosto de 1941, durante la cual los policas franceses, lanqueados por militares alemanes, bloquearon el distrito XI el 20, % de agosto y durante los dias siguientes interpelaron a los judios extranjeros en las calles de los demas distritos, entre ellos el XVII gCémo escapé a esa redada? {Gra cias a su categoria de antiguo legionario francés de se: sgunda clase? Lo dudo. La ficha indica que se le buscaba. Pero za partir de cudndo? Y por qué motivos coneretos? i se le hubiera bbuseado ya el 27 de diciembre de 1941, el dia en que ha- bia denunciado la desaparicién de Dora en la comisaria e Clignancourt, la policia no habria dejado que se fue- ra, gLlamé la atencién sobre él ese dia? Un padee intenta encontrar a su hija, denuncia su Aesaparicion en comisaria y aparece un anuncio de bis- queda en un diario de la tarde. Pero también se busca al padre, Unos padres pierden la pista de su hija y uno de ellos desaparece a su ver, un 19 de marzo, como siel in vieeno de aquel aft separase a las personas unas de otras y embrollase y borrase sus itinerarios hasta el punto de proyectar dudas sobre su existencia. Y no hay salida. Pues quienes estin encargados de buscar y en: contrar a la gente elaboran fichas para, a renglén segui- do, hacerlas desaparecer definitivamente. 7% Tgnoro si Dora Bruder se enteré en seguida dela deten- cién de su padre. Supongo que no. En marzo ain no habia vuelto al bulevar Ornano, Eso es al menos lo que sugieren las pistas que subsisten en los archivos de la Prefectura de policia ‘Como ya han transcurrido casi sesenta afios, eos archivos nos van desvelando poco a poco sus secretos 1a Prefectura de policia de la Ocupacién ya no es mis ue un gran cuartel espectal a orillas del Sena. Al evo. car el pasado se nos aparece como la terrorifica casa Usher. ¥ nos cuesta creer que ese elfcio, cuyas facha: das vemos a diario, no ha cambiado desde los fos cua tenta, No acabamos de persuadirnos de que son las mis mas piedras, los mismos eorredores. Muertos desde hace mucho tiempo estén los ins- ppectores que partciparon en la busca i captura de ju dis y sus nombres resuenan con un eco ligubre y des piden un olora cuero podrido y tabaco frfo: Permilleux, Frangois, Schweblin, Koerperich, Cougoule... Muertos 0 impedidos a causa de la veje, esos guardianes de la paz alos que se lamaba agentes captadoress y esciblan su nombre al pie de las declaraciones de los detenidos du- rante las redadas, Esos millares de declaraciones han ” sido destruidos y no se sabrén nunca los nombres de los ‘agentes captadores». Pero quedan en los archivos cen tenares de cartas dirigidas al prefecto de policia de fa poca, alas que nunca respondi, Han permanecido allt durante mas de medio siglo, como sacas de correo olv ddadas en el fondo del hangar de una Iejana etapa del Correo Aéreo. Hoy podemos leerlas. Quienes las reci bbieron no las tuvieron en cuenta y nosotros, que no hi biamos nacido todavia, somos sus destinatatios y sus ‘guardianes: Seftor Prefect ‘Tengo el honor de pedirle que seinterese en mi de- ‘manda. Se trata de mi sobrino Albert Graudens, de na- cionalidad francesa, de 16 atios de edad, gue ha sido in- ternado. Seftor director del servicio de judios: Solicit de su alta benevolencia la liberacié del carn- ‘po de Drancy de mi hija, Nelly Trautman. Seftor Prefecto de Policia Me permit solictar un favor en relacin con mi ma- vido, Zelik Pergrcht, permitiéndome pedirle noticias, ash como algunas informaciones.. Setior Prefecto de Policia: ‘Tengo el honor de solcitar de su alta benevolencia y de su generosidad informacion concerniente a mi hija, sellora de Jacques Lévy, de soltera Violette Joel, detenida cl 10 de septiembre iltimo cuando intentaba cruzar la linea de demarcacion sin levar la estrella reglamenta- ria, Iba acompaada de su hijo, Jean Lévy, de 8 anos y medio. Entregada directamente al prefecto de polit Solicito de su benevolencia la liberacion de mi nieto Michael Rubin, de 3 aftos, francés, de madre francesa, in ternado en Drancy con su madre Senior Pefeto: Le estaréinfinitamente agradecida si quiere exami- nar el cao siguiente: mis padres, bastante mayores y en- {fermos, han sido detenides por ser judiosy nos hemos que- dado sola, yo y mi hermana pequetia, Marie Grasman, de 15 atios y medio, judla francesa, con carnet de identi dad francés n° 1594936, serie B, y yo misma, Jeannette Grosman, igualmentejudia francesa, de 19 aftos, con ear- net de identidad francés n° 924227, serie B. Setor director: Discilpeme si me permito diigirme a usted, pero he ‘agut mi caso: el 16 de julio de 1942 vinieron a buscar a ‘mi maridoy, como mi hija loraba, también se a levaron Se llama Paulette Gothlef de 14 afos aos y medio, tnacida el 19 ce noviembre de 1927 en Pari en el dstrito 12, ys frances. Con fecha del 17 de abril de 1942, el registro de la co” risaria de Clignancourt leva la siguiente anotacién bajo las columnas habituales: Fecha y direcein ~ Estado civil - Resumen del asunto 17 de abril de 1942, 2098 15/24, P. Menores. Asunto Bruder Dora, de 16 aitos de edad, desaparecida, después A 1917 ha regresado al domicilio materna. No sé a qué corresponden las cifras 2098 y 15/24 AP. Menores» debe de querer decir «Proteccidn de me: noress. El atestado 1917 contenta la deposicién de Emest Bruder y las preguntas relativas a Dora y a él mismo que se le formularon el 27 de diciembre de 1941, No hay ningiin otro indicio del atestado 1917 en los archives, Apenas tres lineas dedicadas al «asunto Bruder Dora». Las notas siguientes, relativas al 17 de abril, se reficen a otros asuntos Gaul Georgette Paulette, 30.723, nacida en Pantin, Sena, hija de Georges y de Pelz Rose, soltera, domiciliada en hotel calle Pigalle, 1. Prostitucion Germaine Mauraire. 9.10.21, nacida en Entre-Dewe- Eaucx (Vosges). Vive en hotel. 1 informe P. Menores, TOR, Cretet, Distrito 9! [Ast se suceden, en los registro de incidencias de las comisarias de la Ocupaci6n, prostitutas, perros perdi dos, nifios abandonados. Y —como en el caso de Dora— adolescentes desaparecidas y acusadas del deli to dew. En apariencia, nunca se trata de sjudios». Sin ‘embargo, pasion por lis comisarias antes de ser me tidos en prisién preventiva y Iuego enviados a Drancy. Y la frase wha regresado al domicilio materno» supo re que en el puesto de policia de Clignancourt sabian ‘que el padre de Dora habia sido detenido el mes an- [No hay rastzo de ella entre el 14 de diciembre de ~ 1941, dia de su fuga, y el 17 de abril de 1942 en que, se gin el registro, regresa al domicilio materno, es decir, a Ja habitacién del hotel del bulevar Ornano, Durante cuatro meses se ignora cusl es su paradero, qué hace 0 con quign esta. ¥ también se ignora en qué circunstan- cias regresa al edomicilio materno». :Por propia inicia- tiva, después de enterarse de Ia detencién de su. pa dre? ,O bien después de ser aprehendida en la calle, tras Janzar la Brigada de menores una orden de biisqueda contra ella? No he encontrado ning indicio, ningsin testigo que pudiera iluminarme sobre sus cuatro meses de ausencia, que quedan pata nosotros como un blan- «co en su vida, 1 dnico medio de no perder por completo duran- te ese periodo a Dora Bruder seré informarnos de los ‘cambios de tiempo. La nieve cay por primera vez el 4 ide noviembre de 1941. El invierno comen26 el 22 de di- eygap anb 0) gia1 ow gypuoad “40s aut anb ap asad v sououosuy sexiv> sua 19 some ye opuianb 24 oN safonsiqoy souorronp soy v sixaus nb soionbod sop upsnydaoo ‘oosed w uapuows so onb sf “2p ou uorounf ou v4 36 A souvseafuoug 0} 2p 2109 ‘715, 2p» poouappay soranbod S004 sovime osnpus Yous spp od exon vy sod sour p mse ZL 2p solo & soue gt A £1 9p s9u249f ey subo ‘oyp oper souoppuaiap Key xpos ju » wppuapnad appopususosny so1ogy vuonb ouspanboot nb po bo auyuanous peing) “sormuuofay vind ous wpou 2qnpad eand ow ‘unui ranqe vy © pons, “ola pm sous opson> upsoy gnb onunoad apy "wou0Ls0Y 21 nv ap 21138 nap subd sogous 2p oypingoo VT ‘ous (¢ armany ») mf sou nos opus so ony afoy4 um jap sonum auerdtuary » ups sow 3s 95 ony "weumsads9 wpos amuopuoqy onb Koy nbo sond ‘ound niyo uo souofow 534 “0 wanbsng anb ‘uopond 1s uoypaous 2s amb SoS so sop ‘01 » popuoworoy "0 vpiny bun opss vy ‘odio po owe aoyuocr upsoye upradea yo ay “pnd miu of soap wSiygo 9p 26 odui [2 u2 soun Aoy wpaquiay, “souosiod 2p anys un ap vais sowqes so4r2p vyssanb nb oj ope o> oan9pid of sepa44 vyaoysn8 du ‘aunts po epzou 2 opor Spunoyie> 4 soup ap ode» “oyo.g HPs 2p uoge! ‘upqel ap soypased seucng sop 0 pun syesviau2 au epior9poide 50 (EL 2xgHUNEY-opuo4sy aye9 “ou, 5 424) oStpus un oy2ay 2 & af amb oy spa agersog 9 “(augut) pans 2p vpologuis ») u2 jp 4od pou Yovras ae opouiny oxoeducs un ap wqeygDy 50 ses0L2HH 50) ans suc ws “Ousep ud 0 opepos ap so2ge8 ws29peAsE .2¢-Bpond owas puounde soy ou ‘uy ws “so sy osmpuy ‘a Soop atogys> safe ap soy somyon> soy sopiqnyoud ups “vyufon vp aguaszoxop 50. osad su amin Kou ‘ou opnuo> ap sspnbed ap owpepu fo oupmaua ody 9 ily 50 eyow mys9 35 UL W509 vy Inb vou puPryfs ou opuays yy souopeone 2p mon 25 oysanyy anb & “sosmuouuow so ou anb vyivasay oposuad of 2p spus soqanad sop ses stppod “oprpad opeuorusut P optainiis ‘ononde apow p 15 sompo p wand seperuss -21 piso amb 0 supypua opts wow ed ab spp ‘sogonad son snioumu svpoy 2p peas2sas ‘up1ipo vy 2p popryrior vy nuoysnb oye 9 sounuct up opousonus Yaduion 404 -25 2 oo souon)so8 su ap opornses 59 ‘2430 2p M.S ns Y suatsuonty tou, soy 10d oporuny yids soypos 1 “opvssU0> 12 ap sasni0s sys9 mind soyun apiquins soouvaf soria2 Sop jus punp s0 vuosiad wy>ic ‘uprrongey 2p o19yediio un mad 52 1X ‘Sung “1 uonBocq ay ‘oUONVIE BOY 25 Hap vse w ow ZDqTY ap muasdutt ap vganad DUN S194 2a nb oS2nu 50) ‘upsaszonap of au ¥¢& oda jo wo piso 15 98 ou ‘2010 ozaumu o1seHuNpOA 2p opeayysad mu pou -npoy “/e p sopmuayassoedod soy ‘paostSnyy oars (AX oninIp pp omonunpnde) yoquer-sus ap vpansaue> my uo powepay “ology 2125 0) » pypnre ossesonou s9 18 ‘pd snooaud 50 ou sernow Sigua ou 35 ages A OUD swsos3os sod 2qis0d of paopy uu 10d wxodnsoaud 25 pou Hap bus su anb vazisnb on, zonsov0u anb of oduay v pxpuai? Lounquotampus xonbod ap ouog un opie 24 6 “oduoys 1 2004 oprped eyquy anb ndas my opeay vy aus ow anb 59 mpasyf 341 anb oop oy opens uauoy “ums soypnue te estaré fuera todo el invierno, estoy preparado, no 08 preocuptis. Releed mis cartas. Vertis lo que me hace falta ¥y que ahora no me viene « la cabeza. Ropa de lana que zurcir. Bufanda. Stérogyl 15, El aticar se pulveria en ef {frasco de metal de mi madre. Lo que me fastidia es que ra pan a todos los deportados y que eso los identifica aie nds que la insignia. En caso de que el Ejército de Salva- idm se disperse, queda ef centro, al que enviaré noticias, ‘avisad a Irene. Sdbado, 20 de junio de 1942, Mis tes queridas: ayer secibt paquetes, gracias por todo, No sé, pero temo una partida precipitada. Hoy me van a pelar al cero. A partir de esta noche ls que vayan a salir sr encerradas en un cuerpo de edificio especial y vigilados de cerca, acompa- ftados incluso al véter por un gendarme. Una atmdsfera siniestra se cierne por todo el campo. No creo que pasemos or Compitgne. Sé que nos van a dar viveres para tres dias de viaje. Teno partir antes de recibir més paquetes, pero no os preacupéis, el iltimo ha sido muy abunndante y ademas atin me quedlaba todo el chocolate, las conservas ¥y el salchichén, Estad tranquilas, os tendré en mi pensa rmiento, Querria confiarle mis discos de Petrouchka a Marthe el 28/7, es una grabacion completa en 4 d. Vi ayer ‘por la noche a B, para agradecerle sus atenciones, él sabe ‘que he defendido desde agut las obras del escultor ante personalidades. Soy feliz fotos recientes que no le he ense- ‘ado a B., me he disculpado por no darle fotos de ia obra, pero le he dicho que puede pedirlas por su cuenta. La~ mento interrumpir las ediciones, pero si velvo pronto ya Ihabra tiempo de continuar. Me gusta la escultura de Le roy, habia editado con gusto una reproduccion reducida ala medida de mis posibilidades, y a pocas horas de mi ‘partida la idea no me deja Os pido que acompantis a mi madre, pero sin desa- tender vuestras necesidades, claro, Transmitile a Irene, su vecina, mi ruego. Mirad de telefonear al doctor André Anat (si atin se halla en Paris). Decide a André que en comtré a la persona de la cual tiene la dineccién ol 1 de ‘mayo pero que me detuviero el 3 (ze wna coincidencia). Quisd esta nota desordernada os asombre, pero el ambien fe es penoso, son las 6.30 h de la manana, Tengo que en viar en seguida lo que no me voy a llevar, temo llevarme demasiado, Si les apetece, os que registran pueden enviar tuna maleta a paseo si falta sitio o segiin estén de humor (on miembros de la policia para asuntosjudios, colabo- racionistas 0 chivatos). Sin embargo, me vendré bien, Haré wna selecién. Cuando dejeis de tener noticias mas no 05 apuréis, no corns, ened paciencia,tened confian- 2a en ml, decidle a mii madre que prefiero hacer este via Jes pues he visto partir a otros (ya 0s lo he dicho) hacia et ‘Mas Alld. Lo que me deprime es tener que separarme de ‘mi esilografica, no tener derecho a tener papel (un pen- samiento ridiculo me pasa por la cabeza: los cuchillos es- tan prohibidos y yo mo posea ni wn simple abrelacas). No exagero, no me apetece ni est el ambiente para eso: los cenfermos y los invdlidos también van a partir, y en mii- ‘mero importante, Pienso en Ral; espero que se halle defi- nitivamente a salvo, Bn casa de Jacques Daumal tengo toda clase de cosas. Creo que es instil sacar libros de casa, pero sois duefias de hacerla, ;Mientras tenganos buen tiempo durante el vie! Ocupaos de los subsidis de mi ‘madre, que la aytden los de la UGIE. Espero que ya 0s ha ‘yds reconciliado con Jacqueline: es desconcertante pero en el fondo es una chica muy maja (el tiempo se aclara ve & hacer un buen dia). No sé si habs recibido mi carta or dinaria y si me contestaréis antes de salir. Pienso en mi rmaadre, en vosotras. En todos los compareros que tan afee tuosamente me han ayudado a conservar mi libertad. Gracias de todo corazin alos que me han ajrudado a «pa sar el invierno». Voy a dejar esta carta sin acabar. Tengo ‘que preparar la bolsa. A toda prisa. Estilografica y reloj a ‘Marthe, diga lo que diga mi madre, esta nota para el caso de que no pueda continuar. Mamé querida, y vosotras, queridas mas, 0s abrazo con emocin. Sed valientes. Has ‘a pronto, ya son las 7. 4 Durante dos domingos de abril de 1996 recorrt los ba- trios del este, donde estaban ubicados el internado del Sagrado Corazén de Marfa y el campo de Tourelles, con la esperanza de encontrar huellas de Dora Bruder. Me parecia mejor hacerlo en domingo, cuando la ciudad std desierta, en bajamat, No queda nada del Sagrado Corazn de Marfa, Un logue de pisos modernos se alza en la esquina dela ca- lle Picpus con la de Estacién de Reuilly. Parte de los edi- ficios evan los dltimos nimeros impares de esa calle, donde estaban antes los muros sombreados de Arboles del pensionado. Un poco mis lejos, yenfrente, lado de los pares, la calle no ha cambiado. Cuesta creer que en el 48 bis, cuyas ventanas daban al jardin del Sagrado Corazén de Marfa, la policia detu- viera a nueve nifios y adolescentes una matiana de julio de 1942, mientras Dora Bruder era interna po de Tourelles Se tata de un edificio de cinco plantas de ladrillo claro, Dos ventanas en cada piso encuadran otras dos ventanas més pequefias. El niimero 40, al lado, es un edificio grisiceo en fase de reforma. Delante eal zan un muro de ladillo y una tej. Enfiente, en la mis- ‘ma acera que bordeaba el muro del pensionado, hay pe- enclcam- ‘quettos edficios que se han conservado tal como eran En el nGimero 54, justo antes de lear a la calle Picpus, Ihabla tun café regentado por una tal seforita Lenzi De repente tuve la certidumbre de que la tarde de su fuga Dora se habia alejado del pensionado siguiendo Ia calle de la Estacin de Reuilly. La vela, recortiendo el muro del pensionado. Quiza porque la palabra «esta- ‘ids evoca el acto de huir. Al cabo de un rato de caminar por el barrio sentt el peso de la tristeza de otros domingos, cuando habia ‘que regresar al internado, Estaba seguro de que ella ba jaba en el metro de Nation. Retrasaba el momento en ue franquearia el porche y atravesaria el patio. Se pa- seaba un poco més, al azar, por el barrio, La tarde caa. a avenida Saint-Mandé es tranquila, bordeada de ér- bles, He olvidado si habia alguna explanada, Se pasa por delante de la antigua boca de metro de Picpus. :Sa- lia a veces por aquella boca? A la derecha, la avenida Piepus es mis fia y desolada que la avenida Saint-Man- dé. Sin drboles, creo. Qué soledad Ia de esos regresos el domingo por la tarde, El bulevar Mortir estd en cuesta, Baja hacia el sur Para llegar hasta él, aquel domingo 28 de abril de 1996, hice el siguiente recorrido: calle Archives. Calle Bretag- ne, Calle de las Hijas del Calvario. Luego subi por la ca Ie Oberkampf, donde habia vivide Hena ‘Ala derecha, el panorama de érboles a lo largo de la calle Pyrénées. Calle Ménilmontant. Bajo cl so}, los blogues de pisos del niimero 140 se encontraban de- siertos. En el sltimo tramo de la calle Saint-Fargeau te tia la impresién de recorrer un pueblo abandonado. EI bulevar Mortier ests bordeado de_plitanos. Donde acaba, justo antes de llegar a la puerta de Lilas, ain se pueden ver los edificios del cuartel de Tourells ‘Aquel domingo el bulevar estaba desierto y sumi- do en un silencio tan profundo que se escuchaban los suusurros de los plitanos. Un alto muro rodea el antiguo cartel de Tourelles y oculta los edificios, Recorri el ‘muro, Habia una placa en la que pude leer: PROMIIDO FILMAR Y HACER FOTOGRAHIAS Me dlije que nadie se acordaba de nada. Tras el muro se extendia una tierra de nadie, una zona de vas clo y de olvido, Los viejos edificios de Tourelles no ha- ban sido derribados como el pensionado de la calle Picpus, pero esto careceria de importancia Y no obstante, bajo aquel denso manto de olvido, se ofa, de cuando en cuando, algo, un eo lejano, aho- gado, pero era imposible saber exactamente que. Fra como encontrarse al borde de un campo magnético sin, péndulo para captar las ondas. En la duda y por mala conciencia habian colgado el cartel de «Zona militar Prohibido filmar y hacer fotografia ‘Alos veinte af, en otro barrio de Paris, recuerdo hi ber experimentado sin saber por qué la misma sens cidn de vacfo que ante ef muro de Tourelles Tenfa una amiga que se las arreglaba para vivir en pisos 0 casas de campo ajenos. Yo aprovechaba para limpiar las bibliotecas le obras de arte y ejemplares nu- ‘merados y luego los revendla. Un dia, en un piso de la calle Regard en el que nos encontribamos solos, robé tuna caja de misica de anticuario y, después de registrar Jos armarios, me llevé también varios trajes muy cle- sates, camisas y una docena de pares de zapatos caros.. Busque en ol listin a un chamarilero al cual revendérse- lo todo y encontré uno en la calle Jardins-Saint-Paul Esta calle arranca del Sena, en el mule de Célestins, ¥¥ confluye con la calle Charlemagne, cerca de liceo don: ‘de habia pasado los examenes de bachlerato el ano an. terior. En los bajos de uno de los wtimos edificios, en et lado de los pares, justo antes de Hlegar a la calle Charle- ‘magne, veo una persiana metilica oxidada y levantada a medias, Penetro en un almacén donde se amontonan mules, vestidos, chatarra, piezas de automévl. Me rec bbe un hombre de unos cuarenta aos y me propone ama blemente ir a buscar la «mercancia» unos dias después. ns Nos despedimos, recorre, la calle Jardins-Saint- Paul, hacia el Sena. Todos los edificos de la alle, lado de los impares, habian side derribados poco tiempo an- tes. Y luego otros. En su lugar no quedaba mas que un solar, cercado también por restos de edificios medio erruidos. Ain se veian, en las paredes a cielo abierto, papeles pintados de antiguas habitaciones, marcas de conductos de chimeneas. Se habria dicho que el barrio habia padecido un bombardeo, y la impresién de vacfo cera atin mis intensa a causa de la fuga de aquellas calles, hacia el Sena El domingo siguiente el chamarilero fue al bulevar Kellerman, cerca de la puerta de Gentilly, a casa del pa dre de mi amiga, donde lo habia citado para entregarle Ja mercancia, Carg6 en su coche la caja de misica, los trajes, las camisas, los zapatos. Me pagé setecientos francos de entonces por todo. ‘Me propuso tomar una copa. Fuimos a uno de los dos cafés que habia, frente al estadio de Charley. “Me pregunts qué es lo que hacia en la vida, No sa ‘fa qué responderle. Terminé por decirle que habia de- jado los estudios. Yo también le hice preguntas. Su pri mo y socio levaba el almacén de la calle Jardins-Saint- Paul. Bl se ocupaba de otto local, situado al lado del ‘mercado de las Pulgas, en la puerta de Clignancourt. Habla nacido en el barrio, en el seno de una familia de judos polacos ui yo quien comeneé a hablar de la guerra y de la Ocupacién. En esa época él tenta dieciocho afios. Re- cordaba que un sibado la policia habia hecho una in- n9 cursién en ef mercado de las Pulgas de Saint-Ouen para detener judios y que habia escapado a la redada de mi lagro. Lo que més le habia sorprendido es que entre los Inspectores hubicra una mujer. Le hablé del solar que me habia llamado Ia aten: cién cuando mi madre me llevaba a las Pulgas, y que se extendia al pie de los bloques de pisos del bulevar Ney. 11 habia vivido all con su familia, En la calle Elisabeth- Rolland. Le lamé la atencién que yo anotase el nombre de la calle, Un barrio al que denominaban El Llano. Lo habian demolido por completo después de la guerra y ahora lo utilizaban como campo deportivo. Mientras conversaba con él pensaba en mi padre, al ue no veia desde hacia tiempo. A los diecinueve anos, a misma edad que yo tenia y antes de perderse en sus suefios de altas finanzas, vivia de pequefis trapicheos em las puertas de Paris: pasaba clandestinamente los fe- Iatos con bidones de gasolina, que revendia a los gara- jes, on bebidas y otras mercancias. Todo ello sin pagar las tasas, En el momento de despedirnos, el chamarilero me dijo en tono amistoso que si tenia més cases que ven- derle podia ponerme en contacto con él en la calle Jar dlins-Saint-Paul, ¥ me dio cien francos mis, conmovide sin duda por mi aire candoroso de buen chico. He olvidado su rostro. Solo me acuerdo de su nombre. Pudo muy bien conocer a Dora Bruder, en la puerta de Clignancourt y en BI Llano. Vivian en ef mis- ‘mo barrio y tenian la misma edad. Quiz se las sabfa to das acerca de las fugas de Dora... Existen casualidades, encuentros y coincidencias que se ignorardn siempre Aquel otofo, caminando de nuevo por la calle Jardins- Saint-Paul, meditaba en todo eso. El almacén y su per~ siana metilica oxidada ya no existen los eificios veci ros han sido restaurados. De nuevo experimentaba un vacio. Y no comprendia por qué. La mayor parte de los, edificios del barrio habian sido demolidos después de la ‘guerra, de una manera metédica, segin una decisin ad ‘ministrativa, Incluso se le habia dado nombre a la zona ‘que debi ser arrasada: el islote 16. He encontrado fotos, tuna de la calle Jardins-Saint-Paul, cuando ain existian los miimeros impares. Y otra de edificios a medio derti- basal lado de la iglesia de Saint Gervais y alrededor del hotel de Sens. Otra, de un solar a orillas del Sena, que la gente atravesaba por dos aceras, por lo demas intitiles: cera todo lo que quedaba de lacalle Nonnains-d’Hyéres. YY luego habjan construido hileras de casas, modificando a veces el antiguo trazado de las calles. Las fachadas eran rectilineas, las ventanas cuadra- das, el hormigén del color de la amnesia. Las farolas proyectaban una luz fia. De cuando en cuando, bancos, un parque, 4rboles, piezas de un decorado, hojas artifi-

You might also like