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    Indice ‘Avseprom De Ls RADIO Lama 1 ‘Un domingy de ivieno Visas En clandén a Fideos ales, Castigo Owaverd Don Sima Desi Eaajo Lavanon 2 Teva ‘Una sera despite Eade Leveson 3 Galpe avg sper Una nods Heo Leveson 4 Tater Ausenca Elbe laveson 5 Lanadio Enovento Descubrmiento Onn tila Lavexon 6 Ungran almuero Mis de at Preguntss “Tiempo deus 1a noche nd ind del nd Alrededor de la radio pataba para escuchar el evento de la radio. Hlevaba esa costumbre algunos afios; al picipio provacaba extraiea, luego la gente se Ses por la noche. Tado el pueblo se pre acostumbis. ‘La vor era siempre la misma y el tema de los elatos también, Todos, absolutamente todos, s© reunfan alrededor dela radio y en la calle sucedia lo mismo y la misma hor, Flalimbrado dela exquina ea tenue. Una persona llega con un pafiueo en la cabeza atado debajo del smentén y un sobretodo largo. Esa pessona aba ls puerta, se metfa en una pequetta habitaciny lt crtabay sin scare el pafuelo ni el sobrerodo, de inmediato dejaba exapar su vou que entraba en todos los hogares. ncrees mic erent iii te i voce omer Bplay dopey ec ote gine oad om ie 4 honda cen wh ao de erie Lt inno feb dafepr a eccimefi va get ro at taney stem ia le ele nto “Sinan melt Ss poo pode spin oe pepe chance thers net gol piney deta pad uta eet Ne odes rman ch aoa i gn ope ‘eben bean a ep il sacle pgoecemnenaie mac ntmetes pov eo aaron te cas ude Seeing repos aaa canon iemrpcinertiae vee a La joven por su parte, no deseaba ninguna dete ni cesar, y sofa tan slo com vivir bremente, Pero todas las muchachitas como ella, ls entehaban a aceptar su destino, sin protota: Una sola vex una nti habia sido raptada por un blanco y munca mds le viron Ella no queria perteneer un hombre, desea ser como la liebe, lis palomas, de ago extaba segura: e- ‘apart al fin del undo cuando le canara al ofde un enamorado, ya que esa era la manera que tenia los Iombres desu aldea para delarar eu amor ‘na noche de lana lens, en el medio de le ralderta senos aincas armados asta los dienes quemaron chozas,raparon a mujeres y mataron alos que se les ‘ruzaron en el camino Ale you familia ota: pocos talieron despavorider rambo a onas lugares desco- nacido Eo ena ser aborgen en las veras raurpadar por blanco Allin junto a. pod y su mar excaparon en busca dew agar donde sinteran ductor del suelo, del are, desu chosa; aunque ex lugar no exe Yamin yeni ae gt neon nr Un domingo de invierno Eran las nueve de la mafiana del domingo. El ins vierno ingresaba a un pueblo casi olvidado, como todos los 21 de junio: sin demora ni tiubeos. EL pueblo llamado Azul recbfa. gustoso el fifo sin ponerse a las reglas de naturaleza. AL mismo tiempo que el viento abrazaba las calles brutalmente, sala por el acceso principal un colectvo naranja con dlucido por una mujer ‘A est misma hora, Cini salié para hacer su hie bial y flmera sla. Bieilea, gorro'y mochila en mano, dio una vuelta por La calle de tierra; ewvo caidado de que nadiela vera cos difel en una eo- rmunidad chica yrom¢ el camino paralelo alas vis, rutbo ala laguna que bordeaba la eas abandonad xe era peo ms secreto y mis experado: ira la casa abandonada que, como todas las cas aban- dlonadas del mundo, eenia un aga historia inti eliza excapadas fugaces aes sitio muy 2 menu para exloatloy porque se sent bien vi Sitindolo, Dede muy chiea habla ecuchado la historia de las personas que habian vivid ally como Cinta era curios sencla una atracin especial por aque hgat. Ela paseaba por el mont, eocaba famias,espiaa por ls ventas, pero nanea hab conseuido ena en la casa Cinta legs en bcieta a 20 probibida, Grund cl patio, del bck des dela bomb, que slo acaba agua si se bombesha mas de veince minutos, y obser todos los puntos cardinales. Luego convidé ‘con miguitas de pan alas palomas que se acercaron 3 recibidla, cori los perros que se fueron ala laguna sustando a los famencos y espant6 alos teros que yenian a gitale al ofdo. Se aceroé a la laguna. Caminé primero por I orila donde estaban los sauces lorones y luego por laribera hasta que decidis avanzar, El agua le legaba alos cobillos y la sins haelada a pesar de sus boras rojas. La laguna era bastante playa hasta la pede grande que pareca una inca en la laguna, Camind hacia ella, no muy lejos de a ola, Cintiasubié a la piedea, ve ests6 bien, apoy6 los codos y-gr6 su vista hacia el lado del pueblo y sus montes. El de su casa tenia pos bo- rrachos y en marzo se ponin rosa El de a casa des mejor amigo, estaba cereado por aromos y en agosto se tela de amarillo, El de la casa abandonada tenia jacarandaes y en noviembre se tea de celeste. Los ‘moates todavia ecaban sin loecet. Cinta se acosts sabre la piedeay siti6 cémo Ia bisa arristaba el silencio, un silencio que sélo rompian los teros, 15s) ranas_y_algunos grills perdidos. De golpe, se sobresalt. Una bandada de pejaros sali del palomat hacia el cielo y temblé la tierra. Se sents, miré hacia todos laos, no vio a nadie, No qued6 muy tanguila porque ella sabia que cuando los pijaros saan volando en conjumto y asustados, eta porgue percibian 1a presencia, de alguien. No tena tniedos pero sil Aneendente a en ceontabe en esis eras wedadas no iba a ser fei jus tifica el motivo de su visita. Volvié a observar ast alededor para asegurarse de que estaba sola. Se sued Tas bots, escurié el agua y las dej6 sobre Is peda para que se secaran also Del palomar satan mds y mis palomas. Miré la casa la bomb, la mecedora, los porills.. y nada Se acosté y cer las ojos. Luego: pensé: “Tanco tiempo visitando eate sitio, ya es hora de ignorar rides imaginaros’ ‘Se quedé quits asf de nuevo el silencio se le hacla ands suyo. Desde allt vela el cielo imponente: Las ‘nubes pasaban, daban waeltas y segufan hacia otros pueblos. Pasiton unos minutos, tal vez varios minutos. Cert ls ojos. Se qued6 dormida. Siempre se adormecia en la piedra porque dormfa poco pot las noches debido a su apuro por termina lis novelas aque le prestaba dom Simdn. Sintié que algo le hacia osquilla en la nariz, nun segundo estuvo sentada. —Un bicho -grits Pero no era un bicho, Alguien le estaba haciendo cosquillas con una ramita de jacarands. Sable que estabas act. {Te asustét Para nada ~dlijo Cincia, pero baj6 de la pied y caminé apuradla mojéndose los pantalones por la brusquedad de sus pasos Era Bruno, que insedistamente supo que cll = habia asustado aunque jamds lo admicera. Beano % tenfa una honda y vena al palomat a cazar plats {Los dos estaban en séptimo grado. y eran amigos desde el jardin de infances. Ambos compartian el gusto por aquela casa abandonada de as auras del pueblo, Conocien Ia leyenda porque era muy ontada en la zona y también sabfan del miedo que todos les tenian a esas verras prohibidas. Pero ga aquién no le gusta averiguar cosss de aquello que «3 ‘landestino? Para ellos el encanto seta ver least por dentro y es0 10 le habla ocurrido a nadie en el ‘pueblo, al menos que ellos supicran Legon a aera La east abandonada conservaba en st interior un gran secieto, eso ert obvios pero ademés le ocursfa igo maravilloso, algo que nadie en el pueblo con: seul ep poro que tds sper an tecimiento tan esperada ocustia todos los 28 de n0- viembre, cuando todos despertaban e iban com probutlo, sin desayunar, aes hug. El gran mister fue creciendo con os aos, Bruno y Cinta estaban escurriéndose las medias ‘cuando el ruido de los pjaros y los perros les dels {que un auto enttaba por el camino de jacarandaes Cada uno agar las boras que se habia sacado para wolear el agua volvicron al Lago. descalos. Se ‘quedaron atts de la piedea agachados con medio {cuerpo bajo el agua helada. Cicia temblaba de fio, Bruno le pasé. un brazo sobre los hombros. Ells tembl6 mis. Le encantaba que la abresara y le parecié que algo le recora piraba muy cerquita de ella. Cinta tenfa miedo de {ques le escuchar los ltdos de conn Quiet jo ls todo suceda como en fs novelas ‘de amor que lela Cinta cuando se las prestaba don Sion. De pronto lla sol, un segundo nada mis porque con sus manos apoyé la honda en el hombro como las boras que sostenia; luego volvi6 a sbrazatla A ella le segua cablgando el corazn. EL auto negro avanzé pore camino. Los forasteros escendicron vestidas de negro también. Se eerearon a la casa pero no entraron, tampoco Sbrieron sus puerts; slo conversaron y expiaron hacia adentro por a endija dela ceradur, ‘Dee minutos. més tarde colgaron un. cartel de chapa en el porillo con una fase que ni Bruno ni CCineia pudieron desifas. Finalmente, subieron al auto y silieton, En la tringuera del camino, o> Tocaton otto carl luego desapazecieron Bruno y Cinta se parton para sale de la lagna Eillevaba la honda al hombre sosteniéndoa cot uns mane, En l-otra mano, os dos pares de bots. La honda era segtin Cinta, et dinco defecto que tena su amigo. "De no haber sido por esa mania de cazar tinimales, todo hubjera sido perfecto", penss por mix lesima ver ‘Se acercaron al cael y Tos dos leyeron al unisono: Se vende, jno puede ser Se miraron Ahora, mas que munca, tenersos qu No pordemos. Son casi las dies tengo que it weam- biarme para ir ala estacion a busear los diaros. La bua me espera para almorzar ~dijo Cintia po- rigndos las boas sobre las medizs moja. Tends eazén, no podemos quedatnos mis empo. ero me parece que esperar hasta el ot domingo &s truck, g¥ si volveros eta tarde? —pregunté Bruno mama tiempo que ayudaba asa amiga asubi bicictera. — Ser peligroso? ‘run pensé uno segundos. Después die “Si venimos antes de que legue la seins del in- Tendente, noes peligroso. Sabemos que dos dlucrmen la sexta los domingos. "Ambos tenfan los pantalones mojados. Salieron por el camino de past que tb desde ln cia hasta a Kranguera que ahora tena el cartel "SB-VENDE” y Tego tomaton ede tera hacia el pueblo stabaty mvertos de rio. late del inviero queria secalos pero el costo era ener mis fro, Cintia ve adelant6y huego desapare

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