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SISSON Y GROSSMAN ANATOMIA DE LOS ANIMALES DOMESTICOS ROBERT GETTY, D.V.M., Ph.D. Late Distinguished Professor and Head, Department of Veterinary Anatomy, Towa State University COORDINACION EDITORIAL Cynthia Ellenport Rosenbaum, B.S. N. G. Ghoshal, G.V.Sc., D.T.V.M., Dr. Med. vet., Ph.D. Daniel Hillmann, D.V.S., Ph.D. QUINTA EDICION Tomo II m MASSON Barcelona - Madrid - Patis - Milano - Asuncién - Bogota - Buenos Aires Caracas - Lima - Lisboa - México - Montevideo Panama - Quito - Rio de Janeiro - San José de Costa Rica - San Juan de Puerto Rico - Santiago de Chile Quinta edici6n espafiola de la quinta edicin original norteamericana, de Sisson and Grossman’s The Anatomy of the Domestic Animals, publicada por W. B. Saunders Company, de Filadelfia ‘Traducido por: Dr. R. Martin Roldn Dr. M. Illera Martin Dra, MJ. Blénguez Layunta del Departamento de Anatomfa de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid Revisada por el Dr. R. Martin Roldan, Catedratico de Anatomia de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madri. Frimeraedicién 1933 SF Segunda edicién 1947 76/ Tercetaedicion 1953 ‘Cuarta edicién 1959 _ Reimpresién 1963 RCO] Reimpresién 1965 ‘ S Reimpresién 1967 MVR Reimpresién 1969 . Reimpresion is ee Reimpresion 1973 Reimpresion «1974 Reimpresion 1975 Reimpresion 177 Reimpresin 1978 Reimpresion 1979 Reimpresion 1980 Quiniaedicién 1982 Reimpresion 1984 Reimpresion 1985 Reimpresion 1998 Reimpresion 1959 Reimpresion _—_-2000(2) Reimpresion” 2001, 2002 ESCUELA DF MEDICINA VETERINARIA ¥ ZOOTECNIA BIBLIOTESA ferret —- ee © MASSON, S.A. - Avda, Diagonal, 427 bis-429 (Barcelona) por i (apro: ), laa is tran cen QV , rde ca enen f te, exi nde. F later el axi anads . El fi 1 bori ite bal salme . esta a Fig. 37-2 Fig. 3730 Fig. 374 ahaa Fig. 37.2, Cuarta vértebra cervical del cerdo; vista lateral. es qu 1, extremidad eraneal_y U7, extremidad caudal del cuerpo; 2, arco; 3, foramen del arco; 4, apéfisis vent ‘rucular erancal;%, apdfisis cspinosay 6, rama veniral de la’ apofels transversa. ontoide Fig. 373. Sexta vértebra cervical del cerdo; vista craneal. dula ¢ J, cuerpo; 2, apéfisis transversal; 3, foramen transverso; 4, foramen transverso accesorio; 5, apétisis esco, | sitiulars 8 arcor' 7. apaals espinoss o tran Fig. 37-4. Séptima vértebra cervical del cerdo; vista lateral. has pri 1 (ovimero sobre el hueso), foramen del arco: 1, extremo craneal v 1, extremo caudal del cuerpo: Br casita capltular para ia T costa; arco: 4 apohals transvensa; Ss apoksis artical 6 spots espinosa, 1342 Porcinos ! ese fF Fig. 375. Atlas del cerdo; vista dorsal. J, tubéreulo dorsal; 2, foramen alar; 3, ala; 4, foramen ver- tebral lateral; 5, arco dorsal; 6, tubéreulo ventral; 7, Toved ‘para la apobsis’ odontoides. Fig. 374. Atlas del cerdo; vista craneal. 4, tubérculo dorsal; 2, als: 3, foramen alar; 4, cavidad are ‘deular craheal 5, tuberculo ventral AXIS (Figs. 37-7 y 37-8) El axis tiene una gran apéfisis espinosa que se extiende dorsal y caudalmente. La apéfisis odontoides es una especie de cilindro grueso. Las apéfisis transversas son muy pe- quefias y el foramen transverso, lo mas co- rriente es, que se encuentre incompleto. Vértebras toracicas (Fig. 27.9} Las vértebras tordcicas son normalmente 14 6 15. Sus cuerpos son relativamente gran- des, constrefiidos en su porcién media y sin crestas ventrales. Sus extremidades son elip- ticas, deprimidas en la parte media y pro- minentes en la periferia. El arco esta perfo- rado por un foramen en cada lado y, en la mayoria de las vértebras, existe también un foramen vertebral en la parte caudal de la raiz de la apéfisis transversa que comunica con este foramen y con el intervertebral cau- dal. Algunas veces existe también un fora- men en la parte craneal de la apéfisis. Exis- ten las apéfisis mamilares excepto en la I y II vértebras; en las cinco 0 seis vértebras caudales se proyectan desde las apéfisis arti- culares craneales. La carita para el tubércu- lo de Ja costilla est4 ausente o unida con la de Ja cabeza en las ttitimas cinco o seis. La ultima apéfisis transversa tiene caracter lum- bar, semejante a una placa de unos 2 cm de largo. Existen pequefias apéfisis accesorias en la parte caudal de la regién. La primera apéfisis espinosa es ancha, muy alta ¢ incli- nada un poco craneaimente. Las otras di minuyen muy gradualmente de longitud has- ta la décima, por detras de la cual son casi todas iguales. De la segunda a la novena es- Fig. 37-7, Axis del cerdo; vista lateral. iis adonwaiden: 2, p6Gaig ardcular craneal y 2; are teal caudal: 3, exiremo™ caudal del cuerpo: ttansversar 3, foramen transverse: 6. areoy fy pode es: ppinosa;_ las’ fleehas indican el foramen vertebral lateral, 1 Fig, 378. Axis del cerdo; vista craneal. apéfisis odontoidea; 2, apéfisis articular craneal y 2" at- tical shudats Sy foransenNgunsversos hr arcer 3 “apéts ‘espinosa. 5, apéfisis articul Fig. 379. Segunda y tercera vértebras tordcicas del cerdo; vista lateral. os nimeros alrededor de los huesoss J, extremo eraneal ¥ To" extremo caudal ‘de los cuerpos; 2, casitas para, las. ca Inst de las costae; 3, J apolisie'articulares; f, casita para lt cabera de la costilla’ 5, apofisis espinosa. Numeros, fobte tos hucsos: 7, f° foramenes de os arcosy 2) 21 apo: Sel uransveress 3) F) Casta? parm tow eubercus dels cottilla. tn inclinadas caudalmente, la décima es la «diafragmatica» y la undécima es vertical; el resto se inclina cranealmente. La anchura disminuye desde Ja cuarta a la décima y por detrés de ésta se observa un aumento gra- Fig. 37-10. Cuarta vértebra lumbar del cerdo; vista ‘craneal. 4, evergos 2, apdfsis transversa; 3, ap6: fis ardeatar caneaky {sponse mae way aude apa Osteologia de los porcinos 1343 dual. Los somitos estén ligeramente alarga- dos y asientan casi en linea recta. Vértebras lumbares (Fig. 37-10) Las vértebras lumbares son seis siete. Sus cuerpos son mayores en la regién tordci- ca y tienen una cresta ventral. Se hacen mas anchos y aplanados en la parte caudal. Los arcos estan profundamente escotados y se- parados por un espacio que aumenta dorsal- mente. Las apéfisis mamilares se proyectan lateral y caudalmente. Las apéfisis transver- sas son arqueadas y se inclinan un poco en sentido craneal. La longitud aumenta hasta la quinta para disminuir bastante en Ia ulti- ma. No se articulan entre s{ 0 con el sacro. El borde caudal de la raiz de la apéfisis esta marcado por una escotadura en la parte cra- neal, de la serie de vértebras y un foramen en la parte caudal. Las apéfisis espinosas son anchas y estan inclinadas cranealmente, a ex- cepcién de la ultima, que es estrecha y ver- tical. Sacro (Figs. 37-11 y 37-12) El sacro esta, normalmente, formado por cuatro vértebras (Barone, 1966, dice que en algunos casos, existen cinco) que se unen mas 0 menos completamente como ocurre en los otros animales domésticos. Son me- nos curvadas que en los bévidos. Las apéfi- sis espinosas estén muy poco desarrolladas y lo mas comin es que estén ausentes. La mitad de la superficie dorsal es aplanada, lisa y presenta aberturas hacia el canal sacro, entre los arcos adyacentes. A cada lado es- tan los foramenes sacrales dorsales y los tu- Fig. 37-11. Sacto y primera vértebra caudal del cerdo; vista dorsal. LIV, arcos de tas vert, sacras: 1, 2,3, fordmeaes sacros dor fpleih Toramen ‘sila etree Sanro 9 1 vee cn Seno de la Se Sagal Ariclar cranal © Sia!"D, Superdele aurieulat; &, apdisis articular caudal; Evert caudate bérculos que indican las apéfisis articulares unidas. Las alas recuerdan las de los bévidos. La apéfisis articular craneal es muy grande. La superficie pelviana recuerda la del bévi- do, pero no esta tan fuertemente curvada y las Iineas transversas son muy manifiestas. Vértebras caudales Las vértebras caudales (coccigeas) se ca- racterizan por la presencia de apéfisis ar- ticulares en las cuatro 0 cinco vértebras p meras, a partir de ellas las apéfisis no son articulares y se hacen mas pequefias. Los ar- cos de las cinco o seis primeras son comple- tos. Las apéfisis transversas son anchas, se- mejantes a una placa en la parte craneal y disminuyen luego gradualmente. Es muy co- rriente que la primera vértebra caudal se una al sacro, Fig. 37-12. Sacro y I vértebra caudal del cerd vista ventral. FIV, vért. sacras (cuerpos); 1, 2, 3, fordmenes sacroventray les; '4) foramen similar entre ‘el'sacroy la T vert. cad A, cusrpo de la I vert, sacra; ‘B, apofisis articular craneal, ‘Gr ala; D, apolisis auricular; E, 1 vert, caudal CURVAS VERTEBRALES La region cervical es practicamente recta. Las regiones tordcica y lumbar forman una ligera curva, céncava ventralmente, que tie- ne el punto més alto en la unidn de las dos regiones. El promontorio sacro no es tan acentuado como en los bévidos y la curva sacra es mas aplanada. Longitud. Las longitudes regionales de la columna vertebral de los cerdos «Berkshire» son las siguientes: Cervical, 24 cm; toracica, 53,5 cm; lumbar, 31 cm; sacra, 17 cm, y cau- dal, 35 cm. Variaclones. Es muy comin encontrar 15 vérte- bras tordcicas, si bien la existencia de 16 € incluso 17 es también’ bastante corriente, Es muy raro que existan solamente 13. También es muy frecuente que se presenten 6 6 7 vértebras lumbares; la pre- sencia de 5 es poco frecuente. El mimero de vérte- bras caudales varia de 20 a 26 segiin los distintos in- vestigadores. Lesbre (1897) indica que el nimero que con mas frecuencia se ha encontrado es de 23. e 0 1e te e a e Costillas (Figs. 97-13 y 37-4) El mimero de costillas es de 14 6 15 pares, |, de los cuales 7 son verdaderas, 0 costillas } esternales, y siete u ocho falsas o asternales. | Bn general, estan fuertemente curvadas en “Jas razas seleccionadas, de forma que hay un | Gngulo bastante manifiesto, excepto hacia el final de la serie, La inclinacién caudal de las costillas posteriores es muy iigera. La I cos- tilla es prismatica y tiene la extremidad ven- tral grande y el cartflago muy corto. La an- chura es mayor de la III a la VI y la longi- | tud es normalmente mayor en la VI y en la VII. El tubérculo se une con la cabeza en las cinco 0 seis dltimas costillas. De la I a la V forman articulaciones sinoviales con sus cartflagos, anchos y semejan una placa. La XV costilla, cuando esta presente, puede estar muy desarrollada y su cartilago entra ‘en la forma- Fig. 37-13. Octava costilla del cerdo; vista lateral. 4, cabeza; 2, cuello; 3, tubérculo; 4, borde craneal; 5, ex tremidad ventral. damn, 2 carag coa 3. cuerpo; 5, V costilla; 6, apéfisis xifoides; 7, cart x ides. 2 Osteologia de los porcinos 1345 3 6 Fig. 37-14. Primera costilla del cerdo; vista lateral. 1, cabera; 2, cuello; 3, tubéreulo; 4, borde craneal 5, im- presidn vascular; 6, extremidad ventral. Fig. 37.15. Esternén del cerdo; vista dorsal. costocondr: 1346 Porcinos Fig. 37.16, Esternn del cerdo; vista lateral. 1, manubrio; 2, articulicién sinovial manubriosternal;, 3, ticulacién esternocostal; 4," union costocondral; 5, V cost ila; 6, cartilago sifoides, cin del arco costal; pero en la mayoria de los ca- sos es flotante y en otros sélo mide 26 3 cm de Jongitud, TORAX El térax es grande y tiene una apariencia més en tonel que la que presentan el caballo y los bévidos, dado que las costillas estan mas fuertemente curvadas y difieren menos en longitud relativa. Esternén (Figs. 37-15 y 37-16) El esternén est formado por seis segmen- tos y recuerda, en su forma general, el de los bévidos. El primer segmento (manubrio) es largo, aplanado lateralmente y presenta un cartilago puntiagudo en el extremo craneal; el extremo caudal presenta una articulacién sinovial con el cuerpo. El resto es aplanado, ancho en su parte media y estrecho en los extremos. Los segmentos mAs anchos estén formados por dos partes laterales, que no estan unidas completamente en el animal adulto. El tltimo segmento tiene una apéfi sis xifoides estrecha y larga que contiene el cartilago xifoides. MIEMBROS S. SISSON* HUESOS DEL MIEMBRO TORACICO El miembro tordcico esté compuesto por cuatro segmentos principales: cinturén tora- cico, brazo (himero), antebrazo (radio y ci bito) y mano (carpo, metacarpo y dedos [fa- langes y huesos sesamoideos]). Para conocer los detalles de los cierres epifisarios véase Ja tabla 37-1. Cintur6n toracico (espalda) El cinturén torscico esta formado por la escdpula, grande y bien desarrollada, plana Y que presenta una apdfisis coracoides pe- quefia. El porcino carece de clavicula; sin embargo, ocasionalmente existe una banda tendinosa en la interseccién clavicular (re- cuerda a un vestigio de clavicula) que se puede encontrar dentro del masculo braquio- cefalico, craneal a la espalda. ESCAPULA (igs. 97-47 y 37-18) La escdpula es muy ancha, su {indice es de 1:0,7, La espina es triangular, muy ancha en * Preparado por C. R. Ellenport y revisado por N. G. Ghoshal. su mitad, se curva caudalmente sobre la fosa infraspinosa y est provista de una gran tu. berosidad, La cara ventral presenta una pe- Tabla 37-1. Tiempo del cierre epifisario en el miembro tordcico del cerdo Bruni y Zimmert Hueso 961) Lesbre (1897) Escépula Proximal Lafio ~1afio 3 4.afios 3 }aftos Lafio Lafio Proximal Laiio Lafio Distal 3} afios 3 Fafios Caibito Proximal 34> ~3B o> Distal 3) > By» Metacarpo IIT Proximal antes del naci- miento Distal 2afios ~2 > Falange proximal Proximal 2» awd > Distal antes del naci- miento Falange media Proximal Lafio ~1Lafio Distal antes del naci- miento Osteologia de los porcinos 1347 ai | Angulo eraneal 4 ) , , ; Borde caudal 1 > Borde cranes! 1 : [ Fig. 37417. Escépula izquierda del cerdo; vista lateral. ig espinosa;_2, tuberosidad de ta . ibaa intaspinasat 2, cartilage, Tubérculo supraglenoideo —__Cavidad glenoidea Angulo caudal Borde caudal Borde craneal Cuello Surco vascular Fig. 37-18. Escdpula izquierda del cerdo; vista medial. 1. fosa subescapuilar; 2, superficie serrad : sry eartilagoe ee ee ee Tubérculo supraglenoideo Cavidad glenoidea 1348 Porcinos quefia proyeccién (acromion rudimentario). El borde craneal es ligeramente convexo, si- nuoso cuando se observa de frente, y grueso y rugoso en su parte media. El borde caudal es ancho, ligeramente céncavo y presenta una especie de tuberosidad rugosa. El borde dorsal es convexo y el cartilago no es tan ex- tenso como en el caballo y los bévidos. El Angulo craneal es pequefio y se arquea un poco medialmente. El angulo caudal es ma- yor y casi forma un angulo recto, El cuello esta muy bien definido. El borde de la cavi- dad glenoidea es redondeado y carece de escotadura, El tubérculo supraglenoideo est inmediatamente por encima de la parte cra- neomedial de la cavidad glenoidea y no se observa apéfisis coracoides; se une con el resto del hueso, aproximadamente al afio de edad. Brazo HUMERO (Figs. 37-19 y 37-20) E] huimero se asemeja a la letra f, cursiva, pero carece de su barra cruzada; esto es de- Tubéreulo mayor {(tuberosidad lateral) Tuberosidad deltoides Surco para ol m._. | braquial _— Foramen rutricio Fosa radial ~ : “Cresta epicondiloides Trécle lateral —Fosa Copitulum + del olécranon Epicéndilo medio Epicéndilo lateral Fig. 37:19. Huimero izquierdo del cerdo; vista lateral. bido a la notable inclinacién caudal y cra- neal de los extremos proximal y distal, res- pectivamente. El cuerpo (eje) esté compri mido entre los lados. La superficie medial es extensa y aplanada, esté separada de la su- perficie craneal por un borde muy manifiesto y No presenta la tuberosidad para el teres mayor. El surco (musculospiral) para el misculo braquial es hondo. La tuberosidad deltoides es pequefa y tiene una gran emi. nencia redondeada en la parte media, entre aquélla y la tuberosidad mayor (lateral). El foramen nutricio est sobre la superficie cau- dal por debajo de su porcién media, La ca- beza estd ms fuertemente curvada y el cue- lo mejor marcado que en el caballo o en el bévido. La tuberosidad mayor es muy grande y se extiende a la parte frontal de la extremidad. Este hueso est dividido en dos prominencias mediante un surco profundo y ancho. Existe una tercera eminencia distal y lateral para la insercién del musculo su- praspinoso. El surco intertuberal (bicipital) est en la parte frontal del lado medial; no est dividido y se convierte en un canal. El surco lateral sobre la superficie articular distal 0 céndilo es muy pequefio. La fosa Tubérculo mayor (parte craneal) Surco intertuberal Tubérculo_ mayor {parte caudal) 7a Tubéreulo menor (tuberosided media) Cuello —— Tréclea Epicéndilo Capitulum medio Fig. 37.20. Hiimero izquierdo del cerdo; vista medial. Olécranon Apétisis ‘anconeal Escotadura ‘troclear Fovea _ capitular Espacio Interéseo Cuerpo del radio Cuerpo del cibito, Superficie carpal ‘del radio Fig. 37-21. Radio y ciibito izquierdos del cerdo; vista lateral. olecrancidea es muy profunda, y la placa de hueso que la separa de la fosa radial es delgada y algunas veces esta perforada. El extremo proximal se une con el cuerpo apro- ximadamente a los tres afios y medio de edad; Ia parte distal lo hace al afio. Antebrazo (igs. 37-21 y 37-22) RADIO El radio es corto, estrecho y grueso; su cuerpo aumenta de tamajio distalmente. La parte mayor de la superficie caudal est4 en aposicién con el cubito, esta marcada por un surco vascular que va distalmente a par- tir del espacio interéseo proximal y tiene un foramen nutricio en su extremo proximal. La tuberosidad radial est representada por una zona rugosa. El extremo distal o tréclea es relativamente grande. Su superficie car- piana est4 formada por caritas concavocon- Vexas para los huesos radial e intermedio carpiano. Existe un surco ancho en la por- cién media de la parte frontal. El extremo Osteologia de los porcinos 1349 Olécranon Apéfisis ‘anconeal ~~ Escotadura troclear . Fovea capitular Espacio interdseo Cuerpo del cabito ce ‘del radio Extremo distal del cdbito Extremo distal del radio Fig. 37-22. Radio y cubito izquierdos del cerdo; vista medial. proximal, © cabeza, se une con el cuerpo aproximadamente al afio de edad y la distal a los tres afios y medio. CUBITO El cibito es mucho mayor y considerable- mente més grueso que el radio; el cuerpo est curvado, La superficie craneal es conve- xa y la mayor parte de su superficie rugosa, que se halla unida al radio, lo hace median- te un ligamento interéseo, Existe una zona lisa en el tercio proximal que interviene, jun- to con el radio, a la formacién del espacio inter6seo proximal del antebrazo y est4 mar- cado, en su parte proximal, por el foramen nutricio. A partir de este espacio existe un surco vascular que desciende a la parte dis- tal del cuerpo, donde hay un espacio inter- 6seo distal para el paso de los vasos. La su- perficie media es extensa, céncava y lisa, La superficie lateral es ligeramente convexa y su parte proximal esté marcada por una li- nea rugosa y oblicua. La extremidad proxi- mal es grande y algunas veces est4 arqueada Me eee eeeeee ee eee teases | 1350 Porcinos medialmente; su longitud es mds de un ter- cio de la del hueso total. La extremidad distal es relativamente pequefia y se articula con los huesos accesorios del carpo y cubital, y esta escotada cranealmente para acomodar el en- grosamiento del radio, El hueso contiene un canal medular ancho que se consolida a los tres 0 tres afios y medio de edad. Mano (Figs. 97-23 y 37-24) HUESOS DEL CARPO El carpo comprende ocho huesos, cuatro en cada fila. Los de la fila proximal recuer- dan los de los bévidos, a excepcién del acce- sorio, que se asemeja mas al del caballo, pero no tiene surco lateral. El I carpiano es pequefio, elongado desde Ia cara dorsal palmarmente y redondeado y articulado dor- salmente con el segundo del carpo. Este ti. timo es alto y estrecho y se articula con el II y III metacarpianos, distalmente. El ter- cer hueso carpiano se articula con el radial y con el intermedio, proximalmente, y con el III metacarpiano, distalmente. El cuarto es el mayor hueso de esta fila; se articula con el intermedio y con el cubital, proximalmente, y cl IV y V metacarpianos, distalmente; pre- senta una tuberosidad sobre su cara palmar. HUESOS METACARPIANOS Existen cuatro huesos metacarpianos. El I esta ausente, el UII y el IV portan los de- dos principales, mientras que el II y el V son mucho mas pequefios y contienen los dedos «accesorios». Sus extremos proxima- les, 0 bases, se articulan entre si y con el carpo, como ya se ha indicado antes. Los ex- Fig. 37:23, Esqueleto de la parte distal del miembro tordcico izquierdo del cerdo; vista dorsal. IV, segundo a quinto, dedos: C24, segundo, tereero y cuar 10 dedes del carpo; Ct, hueso earpiano intermedia: ‘Cr. earportadial:, Gxt, ‘carpocubital; Me, huesos "metacarpia fog Pht talanges proximal, media. distal distal de la teéclea del radio: U, extfemo distal (apoists ‘stiloides) del cabito. Fig. 37-24. Esqueleto de la parte distal del miembro tordcico izquierdo del cerdo; vista palmar. S05, carpianos; ‘C. Ci, ‘radial hoe ‘carpocubital; “Me.2, huesos metacarplanos;” Ph.l3, iés- proximal, medial y distal; ‘, extremo. distal. de ‘ea’ ‘del ‘radio; S, hueso ‘sesamoideo. proximal Uextremo distal (apétiss: eat ides) del cubito. tremos distales 0 cabezas se unen con los cuerpos alrededor de los dos afios de edad. El III y IV metacarpianos estan aplanados desde la cara dorsal a la palmar y presentan tres lados, situados juntos. El extremo distal © cabeza se articula con la falange proximal y los sesamoideos. E} HIT es el mas ancho de fos dos y se articula con toda la fila di tal del carpo, excepto con el primero. El cuar- to se articula con el cuarto carpiano prin- cipalmente, pero tiene una carilla para el I. El Il y el V metacarpianos estan situados més palmarmente que Jos huesos principa- es. Et V es considerablemente el mas grue- so. Los extremos proximales son pequefios y se articulan con los huesos carpianos y metacarpianos correspondientes. El extremo distal es relativamente grande; su superfi- cie articular es condiloidea en la cara dorsal y troclear en fa palmar. DEDOS DE LA MANO Cada uno de los dedos comprende tres fa- langes y tres sesamoideos. Los huesas de los dedos principales recuerdan los de los b6- vidos en cuanto a forma, pero no existe foramen en la superficie axial de la apéfisis extensora y los sesamoideos proximales son estrechos y estén surcados palmarmente, Las falanges de los dedos accesorios (por lo gene- ral no alcanzan el suelo) son similares en forma pero mucho més pequefios. La fusion de los extremos proximales 0 bases con los cuerpos se efectiia alrededor de los dos afios de edad para las falanges proximales y, aproximadamente al afto, para las falanges medias, HUESOS DEL MIEMBRO PELVIANO El miembro pelviano, lo mismo que el to- racico, est4 formado por cuatro segmentos: el cinturén pelviano, el muslo (fémur y ré- tula), pierna (tibia y peroné) y pie (tarso, metatarso y dedos [falanges y huesos sesa- moideos}). Los tiempos de los cierres epifisa- ios se pueden observar en la tabla 37-2. itur6n pelviano (huesos de la pelvis) El cinturén pelviano est4 formado por los huesos coxales (os coxae, de cada lado) y el sacro. Los huesos coxales estan compuestos Por el os coxae de cada lado, que forma una Osteologia de los porcinos 1351 Tabla 37-2. Tiempo del cierre epifisario de los miembros pelvianos del cerdo Bruni y Zimmer Hueso Rec} tesbre (1887) Ilion, isquion y pubis Lafio ~Laho Femur Proximal 3 afios 33 Lafios Distal By» aie Tibia Proximal 34s 3h» Distal 2s a2 os Peroné Proximal 34» ~3h > Distal 22} aftos 224 » Caledneo = 224 » Huesos distales al tarso (algunos como en e} mica bro tordcico) sinostosis a lo largo de la linea media (sinfi- sis pelviana). La sinfisis pelviana esta forma- da por las sinfisis pubiana e isquidtica. «OS COXAE» (Figs, 37-25 y 37-26) EI hueso coxal es largo y estrecho. EI ilion y el isquion estén casi en un plano horizon- tal y presentan una direccién casi sagital. El ala del ilion se arquea lateralmente mu- cho menos que en el caballo 0 en los bévi- dos, La superficie ghitea se divide en dos fosas por una cresta que continiia con ia apéfisis isquidtica, caudalmente. La superfi- cie sacropélvica presenta una extensa zona rugosa caudalmente, en aposicién con el ala del sacro. La regién iliaca es lisa, estrecha y esta limitada dorsalmente por una cresta. La cresta es convexa, gruesa, rugosa y pro- minente en su parte media, donde forma el punto mas alto del hueso. La tuberosidad sacra (tuber sacrale) es mas baja que la cres- ta, se dirige caudalmente y se articula me- dialmente con el sacro. La tuberosidad coxal (tuber coxae) es ain mas baja y muy poco gruesa, El isquion, en la hembra, es un tan- to divergente y aplanado caudalmente. Las tuberosidades estan evertidas y presentan tres prominencias. Existe una cresta o tube- rosidad en la superficie ventral. La apéfisis isquidtica es muy semejante a la del bovino pero estA ligeramente curvada, y las crestas musculares sobre {a cara lateral son mas manifiestas. La parte sinfisaria del pubis es gruesa y los dos huesos estn casi en un eee ss 1382 Porcinos Cresta del flion Linea glitea Tuberosidad sacra Escotadura isquidtica menor, Escotadura Isquidtica mayor Tuberosidad isquldtica Tuberosided coxal ium (cuerpo) Acetabulum Isquium Fig. 31:25. Os coxae izquierdo del cerdo; vista lateral, Tuberosidad sacra |__ Cresta del ilion Escotadura Tuberosidad “isquidtica _ Espina isquistica “menor isquidtica Foramen obturador pubis (rama craneal) Eminencia iliopibica Superficie 7 ‘Tuberosidad coxal ‘auricular Fig. 37.26. Os coxae izquierdo del cerdo; vista medial. plano horizontal. La eminencia iliopabica* es prominente, y el tubérculo psoas es muy no- table. Acetébulo El acetabulo esta situado un poco mas cau- dalmente que en los bévidos, su borde es grueso y est cortado caudalmente por una fisura estrecha, que conduce a la fosa aceta- bular profunda. Las tres piezas del os coxae se unen al final del primer afio, pero la cres- ta y Ia tuberosidad isquidtica estan parcial- mente separadas hasta el sexto o séptimo afio de edad. La sinfisis, usualmente, no completa su osificacién. Existen huesos in- terisquidticos. PELVIS La abertura pelviana craneal (entrada) es eliptica y muy oblicua, En los cerdos muy sei Rrmuss¥ Buda (94), indican que a eminence ica ipeluye los tuberculos psoas y pectineo de Tos a Eevdomescss. desarrollados el diametro conjugado es de 125 a 15 cm y el transverso de 8,75 a 10 cm. En la hembra el suelo (solum) es relativa- mente ancho y aplanado, especialmente en la abertura caudal (salida), donde las tuberosi- dades estan evertidas; también tiene una in- clinacién ventral en sentido caudal. El eje pelviano es, por tanto, oblicuo. El arco is- quiatico es ancho. En el verraco, el pubis es mucho més grueso y el isquion no est ever- tido caudalmente. La abertura anterior es més pequefia, el diametro conjugado es de 11 a 12,5 cm y el transverso de 7,5 a 8,75 cm. EI suelo es céncavo en toda su longitud y menos inclinado que en la hembra, Las apé- fisis isquidticas estan més incurvadas y el arco isquidtico mas estrecho y profundo. FEMUR (Figs. 37.27 y 37-28) El fémur tiene un cuerpo relativamente grande, con cuatro superficies. El principal foramen nutricio esté situado en el tercio proximal de la superficie craneal. La super- ficie caudal es ancha y esta limitada lateral- mente por una cresta que se extiende desde el trocanter mayor a la tuberosidad grande y lateral supracondiloidea. No existe fosa su- pracondiloidea. La cabeza est fuertemente curvada y marcada hacia el lado medial por una tuberosidad més bien grande que sirve de insercién al ligamento de la cabeza del fémur. El cuello se distingue facilmente. El trocdnter mayor, aunque grande, no se ex- tiende por encima del nivel de la cabeza. La cresta intertrocantérica y la fosa trocantéri- | ca recuerdan las de los bévidos. No esta pre- sente el tercer trocdnter. Las crestas de la tré- clea son similares y casi sagitales. Las extre- midades se unen con el cuerpo a los tres 0 tres afios y medio de edad. ROTULA La rétula est4 mucho mas comprimida transversalmente y presenta tres superficies. ‘Trocénter ‘mayor Cabeza Cuello e Epicéndilo . lateral Epicéndilo medio Céndilo " Tréclea ‘medial Céndilo e lateral \ Fig. 3727. Fémur derecho del cerdo; vista craneal, Osteoiogia de los porcinos 1353 Fosa ya ttoantérica Trocénter Cabes mayor Cuello Cresta Imertrocantérica Trocénter menor —] — Borde lateral Tuberosidad Tuberosidad supracondiloidea supracondiloidea ‘medial lateral Epicéndilo lateral in o88.,, Céndilo lateral intercon- diloidea Géndilo medial Fig. 37-28. Fémur derecho del cerdo; vista caudal. Pierna (Figs. 37-29 y 37-30) TIBIA El cuerpo de la tibia esta ligeramente cur- vado y es convexo en sentido medial, La tu- berosidad se halla surcada cranealmente y presenta un surco extensor estrecho que la separa del céndilo lateral. La carita para el peroné esta sobre el borde de esta ultima y limitada medialmente por una eminencia. La parte proximal del borde craneal es muy prominente y curvada lateralmente. El extre- mo distal 0 tréclea recuerda en lineas gene- rales la de los bévidos, pero es relativamen- te mds estrecha transversalmente y més gruesa desde la porcién craneal a la caudal. El extremo proximal se une con el cuerpo aproximadamente a los tres o tres afios y medio de edad, y la distal lo hace a los dos afios. 1354 Porcinos PERONE El peroné se extiende por toda la longitud de la region y esta separado de la tibia por un gran espacio interéseo, Su cuerpo esta aplanado de un lado a otro. La parte proxi- mal es ancha y profundamente surcada en sentido lateral; la porcién distal es mas es- trecha y gruesa. El extremo proximal es aplanado, esté surcado lateralmente y se ar- ticula medialmente con el céndilo lateral de la tibia, El extremo distal forma el maléolo lateral. Est4 surcado lateralmente y se ar- ticula con la tibia y el astragalo medial- mente, y con el calcdneo distalmente. El ex- tremo proximal, o cabeza, se une con el cuer- po a los tres 0 tres afios y medio, y la parte distal entre los 2 y 2%. Pies (Figs. 3731 y 37-32) HUESOS DEL TARSO El tarso est4 formado por siete huesos. El astrdgalo y el calc4neo recuerdan, en li- Eminencia intercondiloidea tyberosidad Céndilo lateral Cndilo medial Cabeza del peroné ty | Cresta de la tibia Cuerpo dol peroné Espacio — interéseo surco para el tendén Maléolo 7° lateral Fig. 3729. Tibia y peroné derecho del cerdo; vista craneal. Las flechas indican el surco extensor del extremo proximal ‘de ta tibia. neas generales, los de los bévidos. Los ejes del astragalo, sin embargo, son ligeramente oblicuos (ventromedial) y su extremo distal presenta una doble tréclea para articularse con los huesos central y cuarto del tarso. La tuberosidad calcdnea est4 _profundamente surcada en la cara plantar. El hueso central del tarso es estrecho transversalmente y bas- tante grueso. Su superficie proximal es pro- fundamente céncava, y la parte plantar pre- senta un gran tubérculo. El primer hueso del tarso es alto y estrecho; se articula con los huesos central y segundo del tarso, y con el II metatarsiano. El II tarsiano es pe- quefio y de forma prismatica, se articula con el central proximal, con el III dorsalmente, con el I en sentido plantar y con el II y III metatarsianos, en el distal. El III tarsiano es mucho mayor, esta comprimido de la por- cién proximal a la distal, y es ancho en la cara dorsal y estrecho en la plantar. Se arti- cula con el hueso central del tarso proximal mente, con el III metatarsiano en sentido distal, con el I tarsiano medialmente y con el IV tarsiano lateralmente. El IV tarsiano es grande, su cara lateral est4 cruzada por Céndilo medial Eminencia intercondilar Cabeza del peroné Cuerpo del peroné Espacio interéseo Maléolo lateral Extremo distal de la tibi Fig. 37-30. Tibia y peroné derechos del cerdo; vista caudal. 4a, surco para el maléolo medio del tendén Wiel flexor digital largo. Tuberosidad calednea Fig. 37-31. Esqueleto del pie derecho del cerdo; vista dorsal, ILV,, segundo a quinto dedos; Me. 25, huesos metacarpian Pi 1S tatanges proximal, media y distal; 7-3, tercero y TA, ‘arto huesoe del tarso: 7c, tarsiano eentraiy 7: ealcineo; Tits astrigalo. un surco oblicuo para el tendén del misculo peroneo largo. La superficie medial se arti- cula con los huesos central y III tarsianos. La superficie proximal sostiene el astrégalo y el calcaneo, y la distal descansa sobre el IV y V metatarsianos. Tiene dos centros de osificacién. El extremo de la tuberosidad cal- cdnea se une con el resto del hueso a los dos © dos afios y medio de edad. METATARSIANOS: Los cuatro huesos metatarsianos recuer- dan los correspondientes del miembro ante- Osteologia de los porcinos 1355 Tuberosidad caleénea Fig. 37.32. Esqueleto del pie derecho del cerdo; vista plantar. ILV, segundo a quinto dedos: a, hueso sesamoi hhuesos metatarsianos; Pi. 1-3, falanges proximal distal; 5; hueso sesamoideo proximal (cl sesamoideo distal testi. presente. pero. no mal Tl, primero y 14, cuario hhuesos del tarso; Tc, tarsiano central, Ty, caleanco; Tt, ‘astragalo. rior, pero son algo mayores. Los extremos proximales o bases del III y IV tienen, cada uno, una gran proyeccién en la cara plantar; las ap6fisis del II] presentan una carita para articularse con un hueso sesamoideo discoi- deo metatarsiano. El Il y V se hallan més ha- cia la cara plantar de los huesos largos que en el caso del miembro anterior. DEDOS Las falanges proximal y media son un poco mayores y més estrechas que las del miem- bro anterior. me Tee teeter eee eee 1356 Porcinos CRANEO HUESO OCCIPITAL (Figs. 37:33 a 37-95 y 37-41/G) EI hueso occipital forma la porcién caudal del créneo y est ligeramente aplanado y elongado. Su parte ventral media est4 perfo- rada por el foramen magnum trapezoidal (figs. 37-33 a 37-35) y flanqueando, lateralmen- te, por los céndilos occipitales y, dorsalmen- te, por los tubérculos de fa nuca. La parte basilar es hexagonal, aplanada caudalmente, estrecha y gruesa en la parte rostral. La superficie externa est provista de una cresta media estrecha, denominada tubéreulo faringeo. Ventromedialmente, la parte basilar presenta los tubérculos muscu- lares, prominentes, pares y convergen rostral- mente hasta el hueso basosfenoides. Ros- trolateralmente a los tubérculos musculares, Cresta de la nuca J. HILLMANN los lados derecho e izquierdo son redondea- dos y entran a formar parte del foramen yuguiar, caudalmente,. y del foramen lace- rum, rostralmente. Los lados caudolaterales de la parte basilar estan unidos con las par- tes laterales del hueso occipital y contribu- yen a la formacién de los céndilos occipita- ies. El lado caudal esté escotado y toma parte en la formacién del foramen magnum La superficie cerebral o craneal es plana y li geramente céncava, y conforma a la super- ficie de la medula oblongada y el puente. Las partes laterales flanquean el foramen magnum y contribuyen a la formacién de los tubérculos de la nuca; lateralmente, forman una proyeccién en abanico que rodea los céndilos occipitales. Cada parte se solapa y se une con la apéfisis occipital del hueso tem- poral. Ventralmente, cada parte lateral pre- Fig. 37-33. Crineo del cerdo; vista caudal. 1, 2, 3, partes escamosa, lateral y basilar de] hue So Sccipital: 4 foramen magnum; 5, condilo oc Cipital;. 6, apéfisis. yugular; 7, parte escamosa Gel Iuieso| temporal;” 8, meato ‘acuistico eterno: 3. tubereulo articular.’ del -hueso. temporal; 10, ‘apéfisis cigomitica del maxilar; {/, bulla timp& alea, 12/12, partes perpendicular y orzontal del mueso palatino; 13, 13, coanas; 4, vomer 45, apofisis"pterigoidea’ del ‘hueso. basosfenotdes 76, ‘apofisis ‘pterigoidea ‘del hueso Palatino; 17, apofisis condilar dela. mandibula; '78,\ foramen ‘mandibular; J9, cuerpo de la mandibula. Fig. 37.34. Calavera del cerdo con la mandibula retirada; vista dorsal. 4, hye insur, B, hueso nasal, C, manila: D, cigomat 5: hueso la feceipital; J, parietal: K, frontal Mt temporal, [extension restral del huevo nasal; 2, Inclsura ‘Asomanilar; 3, apofisis nasal del hueso incisivo;,#, ap alveolar del Hyueso incisivo; 9, ‘apdfisis alveolar del’ maxilar: {0 foramen Infraorbiaro:,&."foramen lsgrimal;) By Yorn ‘men supraorbitario; 21, sulcus supraorbitaio: 24, apofss, Slgomatlea del hueso.frontal;® 28, meato' actsticn. extern (be Hillmann, 1971) senta una apéfisis yugular alargada (figu- ra 37.35/27). Rostralmente, la base de la ap6- fisis esta marcada por una escotadura yugu- lar, verticalmente alargada. Junto con la par- te timpanica del hueso temporal forma el foramen yugular. Inmediatamente caudal a éste se halla la abertura externa del canal Para el nervio hipogloso, Caudomedial a [a Osteologia de los porcinos 1357 base de la apéfisis, se presenta la fosa condi- lar ventral profunda. Internamente, cada par- te lateral presenta una fuerte depresién en su superficie rostrolateral que marca la aber- tura interna del canal para el hipogloso. Pro- fundamente, en esta depresién y ligeramente rostrolateral, se halla el canal condiloideo. Fig. 3735. Calavera del cerdo con la mandibula retirada; vista ventral. ‘A, hueso incisiva: C, maxilar; D, cigomético: E, palatino: &; plerigoideo: Wt, vomer; 1, occipital, Ky frontal; fy basis fenoidess Me temporalr 3, Asura interincisiva: 6, continu sién_ rostral’ del "sulcus" palatino sobre el Rueso Incisive Fr apdbsis palatina del Hueso.incisivo: 8, fisura_patatina’ 5 aponsis alveolar del maxiiar; 9%, apotisis palatina’ del ma: hari if raberosidad mauiars 12 oramen mana, 73, su us palatino mayor: 1, foramen palatino mayor, 13, form fen palatino ‘menor: 76, lamina Horizontal del ueso pala tino; 7, Perpendicular del ues Palatino: 3, an ideo; 3, apohsispicrigoidea. del hueso basoste: apf leomation del hueso frontal 25, bulla timpinica;’ 2. apofisis vugular:. 28, toramen. magnum; 29, foramen hipogloso: 30, ‘foramen eatllomastoideo (abertura externa). (De Hillman, 1971.) eel lL tC Fe 1358 Porcinos Rostraimente, se abre dentro de la escotadu- ra yugular donde confluye con el foramen yugular. La parte-escamosa es extensa, aplanada y de forma triangular con la base del tridngu- lo en la parte dorsal. La base es gruesa ex- cepto cuando est4 excavada por los senos paranasales y forma la parte més alta del craneo. El vértice est4 dirigido hacia el fo- ramen magnum, entre las partes laterales del hueso occipital. A partir del vértice, que forma parte de los tubérculos de la nuca, se hallan dos crestas divergentes entre las cua- les esta la superficie de la nuca, lisa y cénca- va. La superficie craneal de la parte escamo- sa es céncava y pequefia, y conforma la su- perficie del cerebelo. La protuberancia occi- pital interna esta muy reducida. En el adulto, los senos frontal y esfenoides se extienden dentro de las partes escamosa y basilar, respectivamente. ESFENOIDES (Figs. 97.35 y 37-41/H) El hueso esfenoldes esté situado en la base del craneo, su parte central asienta rostral- mente a la porcién basilar del occipital. Esta formado, en el nacimiento, por dos partes, el basisfenoides y el presfenoides. Basisfenoides El basisfenoides esta compuesto por un cuerpo, dos alas y dos apéfisis. El cuerpo se articula caudalmente con la parte basal del hueso occipital. Las alas se articulan con la porcién escamosa del hueso temporal ¥ ros- tralmente con el presfenoides; caudalmen- te, hay una conexién limitada con la super- ficie interna de los huesos parietales. Las ap6- fisis pterigoideas se articulan rostromedial- mente con el presfenoides, rostroventralmen- te con los huesos palatinos y, medialmente, con los huesos pterigoideos. El cuerpo, comprimido lateralmente y de forma algo triangular, presenta una cresta sagital baja, sobre su superficie ventral. En el cerdo la silla turea est limitada caudal- mente por la silla dorsal, esto es, una promi- nencia que se inclina en sentido caudal para unirse a la parte basal del hueso occipital. Existe una pequefia depresién en este punto que se denomina clivus y que soporta el puen- te. En proyeccién rostrolateral, desde la silla dorsal, estén presentes las apéfisis clinoideas caudales, Segtin la edad del individuo y la preparacion pueden. ser observadas 0 no ser lo. Rostralmente, la superficie dorsal del ba sisfenoides contribuye con el presfenoides a la formacién de la fosa hipofisaria profunda Las alas del hueso basisfenoides se extien. den a partir del cuerpo, al principio lateral mente, para luego curvarse dorsalmente articularse con la porcién escamosa del hue so temporal. La superficie temporal est di gida caudolateralmente y contribuye a la for: macién de la fosa infratemporal. En la parte ventromedial del ala, en la base de la apéfi sis pterigoidea, hay un pequefio surco. Ros. tralmente, este surco se convierte en canal pterigoideo, formado medialmente por la par te vertical de los huesos pterigoideo y pres fenoides y, lateralmente, por las apéfisis pte rigoideas del basisfenoides. La parte rostral del canal se abre en la caudal de Ia fosa pte rigopalatina, entre el presfenoides rostrome- dialmente y la apéfisis pterigoidea caudola teralmente. El canal aloja el nervio pterigoi deo. La superficie cerebral del ala presenta dos surcos longitudinales y dos crestas. La cresta més lateral es la continuacién rostral de la apdfisis tentorial del hueso parietal. En la unién del basisfenoides y el presfenoides termina la apéfisis. Una pequefia porcién rec tangular lateral a esta apéfisis se sitda den tro de la fosa craneal media. Medial y ven tral a la cresta hay un surco, dirigido ventral. mente, llamado surco del nervio maxilar, que se abre rostralmente y concurre con el pres fenoides a la formacién del foramen orbitoro- tundum. Caudalmente, este surco lateral esta escotado externamente por la incisura espi nosa, y medialmente por la incisura oval. El surco més medial es poco profundo y est separado del lateral por una cresta longitu dinal corta que se extiende caudalmente, en tre la parte petrosa del hueso temporal ¢ in- completamente separa la incisura carotidea, medialmente, a partir de las incisuras ya mencionadas. El surco medial contiene la red cerebral y los senos cavernosos. La apéfisis pterigoidea se extiende ventral- mente, a partir del cuerpo y'el ala del basis fenoides. Su parte proximal es céncava ros tralmente, y se une, medialmente, con el presfenoides y, lateralmente, presenta una cresta pterigoidea mas gruesa. A partir de ésta, parte la apéfisis pterigoidea que se re tuerce lateralmente y se articula con el hue so palatino, rostroventralmente, y con el hueso pterigoideo, medialmente. Distal, so bre su superficie caudal, existe una depre- sién profunda que contribuye con el hueso 1 7 > eee rs pterigoideo a la formacién de la fosa pteri- ‘idea. No existe el foramen alar. La apéfi- Sis pterigoidea esta variablemente excavada por el seno esfenoidal. Presfenoides El presfenoides esta compuesto por un cuerpo y un par de alas. El cuerpo se articu- la con el basisfenoides, caudalmente, el et- moides, rostralmente, el vémer, ventralmen- te y el palatino, ventrolateralmente; las alas se articulan con el frontal, rostrolateralmen- te, y con las alas del basisfenoides caudola- teralmente. El cuerpo, situado medialmente, es corto y comprimido lateralmente. En la parte ven- tral est cancelado, durante bastante trayec- to, por los huesos vémer y pterigoideo. La superficie cerebral presenta las siguientes caracteristicas: 1) Rostralmente, existe una parte elevada pero aplanada (yugo esfenoi- dal), que presenta dos zonas laterales ligera- mente concavas; esta parte tiene un borde caudal libre que se solapa con la entrada de los canales épticos. 2) Inmediatamente caw- dal a ésta, y a un nivel inferior, existe una depresién transversal lisa, Hamada surco 6p- tico (sulcus chiasmatis}, donde descansa el quiasma éptico. A partir de cada uno de los extremos de este surco el canal éptico pasa rostral y lateralmente para abrirse dentro de la 6rbita en el foramen éptico. Rostral- mente, el cuerpo esta expandido para recibir el laberinto etmoidal y la lamina perpendi- cular del hueso etmoidal. Se encuentra exca- vado y forma el seno esfenoidal. A medida que ei animal envejece la excavacién se hace de forma que se queda como una fina placa de hueso entre la fosa craneal media y el seno esfenoidal. Rostroventralmente, el ‘sur- co éptico esta profundizado por otro surco que aloja las ramas anastométicas de las ar- terias oftalmicas internas. 3) Caudal al sur- co quiasmatico el cuerpo del presfenoides se cleva y forma el tuberculum sellae. Se incli- na caudalmente para contribuir, con el hue- so basisfengides, a la formacién del suelo rostrai de la fosa de la hipofisis. Las alas del presfenoides se curvan dorso- lateralmente a partir de los lados del cuer- po. La superficie cerebral es convexa y esta marcada por las impresiones digitales de los gyri del cerebro. La superficie orbital es cén- cava. La raiz del ala esta perforada por el canal ‘ptico. Caudal al canal éptico existe una cresta puntiaguda que se divide desde Osteologia de los porcinos 1359 la pared medial del foramen orbitorotundum y que est4 formada por la contribucién de los huesos presfenoides y basisfenoides. In- ternamente, la pared dorsa} del foramen or- bitorotundum estd bordeada por las proyec- ciones caudales del ala del presfenoides. La- teralmente, esta proyeccién se contintiia cau- dalmente con el ala del presfenoides. Me- dialmente, la cresta presenta, de modo va- riable, las ap6fisis clinoidales rostrales. ETMOIDES (Figs. 37-96 9 97-41/3) El hueso etmoides est localizado profun- damente dentro de la calavera, entre las par- tes craneal y facial. Asienta entre las fosas orbitales derecha e izquierda y parcialmente rodeado por las excavaciones de la cavidad nasal. Esta situado dentro del fondo de la ca- vidad nasal, donde existen numerosos salien- tes 6seos que aumentan la superficie y que pa- recen como dirigir la circulacién del aire den- tro de los senos paranasales. En las muestras inmaduras el etmoides se une con el vémer, lo cual dificulta la desarticulacién para sepa- rar el hueso. También se funde con el presfe- noides. Ademds, esta relacionado con los hue- sos frontal, maxilar y palatino (figs. 37-36 y 37-37), Esté compuesto por laberintos pares (masas laterales), placas orbitales pares y pla- cas cribiformes y una placa perpendicular media. Cada laberinto est4 compuesto por apro- ximadamente unas 20 laminas éseas delica- das, Ilamadas etmoturbinados, dispuestos de forma paralela, extendidos desde ta placa or- bital a la placa cribiforme. Cada una de es- tas laminas tiene un mimero variable de concentraciones dseas primarias y secunda- rias. El eje mayor de cada concrecién es per- pendicular a la superficie de la lamina cribi- forme, por tanto, permite a los nervios olfa- torios que entren en el bulbo homénimo con, aproximadamente, un Angulo recto sobre toda su superficie. Solamente estén bien desarrollados siete de los etmoturbinados, que se extienden uni- dos a las laminas media o perpendicular, son los Mamados endoturbinados (figs. 37-38 y 37-39). Las otras concreciones que, hasta el mimero de trece, se pueden desarrollar pero pobremente, se llaman ectoturbinados. La lamina basal del endoturbinado I (con- cha nasal dorsal) (figs. 37-40, 37-41/K y 37-44/1) surge desde la superficie dorsomedial de la 1360 Porcinos placa ‘orbital. Es una lamina que esta sola- mente concrecionada en la superficie latero- ventral; la otra superficie, esto es, la dorso- medial es lisa y forma el suelo del seno fron- tal primitivo (fig. 37-39/5) y ocasionalmente la abertura nasofrontal. Extendidas desde la lémina basal existen cuatro concreciones di- rigidas ventrolateralmente, cada una con la parte terminal distinta. Caudalmente, la cara medial de la concrecién terminal parece sur- Fig. 37.36. Seccién transversa a través del laberinto etmoidal y rodeando los senos paranasales del cerdo. La seccién esta realizada entre el segundo y tercer molar. J, eso frontal; 2, mailar matic: 5, Tagrimat, “A, ‘seno frontal rostral medio (lado “izquierdoS. Nora: ‘Ambos compartimi tos forman un seno con una lamina de se- Paracion; B, 'seno frontal caudal (lado iz Quierdoy; C; Seno frontal rostral (lado iz. Guierdo); G,’seno lagrimal; ZRH, sence max fares (parecen como. compartimentos. medio ¥ lateral); 7, células ‘etmoidales. (lado lzquier- Go); J, seno! maxilar (v. fig, 37-37); V, vomer: M," tercer molar (a nivel del cual se ha’ rea ‘Yizado'la"seccion)." (De ‘Hillman, 1971°) gir a partir de la lamina cribiforme como una estrechura propia del hueso. Se extien- de rostralmente de forma que se hace mas ancha, hasta que a un nivel entre el primero y segundo molares su anchura es de aproxi- madamente el doble. Localizado a este nivel se encuentra la cavidad del endoturbinado I, que tiene un tamafo muy variable (figu- ra 37-41/K) y que, a partir de su superficie lateral y dorsal, permanece en comunicacién Fig. 37.37. Secci6n transversa a través de la cavidad nasal y seno paranasal del cerdo. La seccién se ha practicado a vel del segundo molar. 1, peso frontal; 2, maxilar; 2, foramen infra: seal? "fue igus, ese agra Grotere 1a’ presencia del. canal agrimal) i, i tina basa? et huesoetnotdes unlda’ co el omer (estas estructuras juntas forman el seP- ttm hereon ‘entre et fondo, ela cavidad natal por encima) ¥ el nasofaringeo. (por de- BaonaPa, Seno frontal rostral medio se derthoy 3"Seno rontal cata ago. dere Sho, seho frontal rostral (Indo derecho) Gi sono ageimal (a. cualquier lado de 6) {a derechoy, Gals seno manila; en negro, com: Partimento lierals en blanco, sompartimien- To'medio {las lineas de puntos, indiean Inco: monieacton)s 1" (centto),” cella etmoidales Te senoe' dentro (del ‘huéeo cigométice ‘que © Zomunican cone! seno maxier CH). Novae En Sin acct este Seno est dentro del hse Sipomauco, "completamente independiente lags Ra awolainge Mr segundo m0- r srda), ‘smcha nasal” dorsal (endo turbinado 1); JZ, concha nasal media (endotur- Dinado If); las flechas indiean {a comunicacion de los senos paranasales con Ia. cavidad nasal através del Iaberintoetmoidal, (De Hillman, sit) | Fig. 37.38. Crdneo macerado de una cer- da de 10 a 11 meses de edad; seccién sagital-regién craneofacial. E] hueso nasal se ha desarticulado: a lamina perpendicular del hueso etmoides “ha ‘sido es- Guipida para ‘lustrar el. laberinto etmoidal; el Septum sinuum esté ‘separado para mostrar fas exeavaciones del seno; el vomer esta. par- ialmente separado; las flechas indican la" co. ‘unieacion del seno paranasal con la cavidad hasal; Ia. poreign.‘séllda asienta dentro de. 1a ‘eavidad nasal del seno. paranasal; la. poreion unteada asienta por detras del hueso del fide; la finea. interrumpida ‘indica el limite del sen0 Ir arfiba, lado derecho; a fo, lado izquierdo; A, seno frontal rostral fo; A’, extension rostral de A; B, seno front ‘caudal ‘(muy reducido); C, seno frontal rostral D, 'seno esfenoidal;. 1, hueso. frontal 2) maxilar’ (Sutra nasomaxilar);_¥, concha na- ‘Sal"ventral; 3, hueso etmoides; 7, ‘palatino (ls mina. esfenoetmoidal); 8, hueso 'pterigoideo: 9. hueso presfenoides: 10, hueso. pa i, mina basal; 12,'limina perpendicular; I en: doturbinado I; fi, endoturbinado I; 11L-ViT, endoturbinados Ili a VII; esta muestra ilustra {i seno frontal caudal extremadamente. pea 30. La proyecciOn. rostral del seno. frontal rostral medio se extiende hacia el hucso. nasal (De Hillmann, 1971) con la cavidad nasal. La cavidad es parte del seno conchal dorsal. Lateralmente, el endo- turbinado presenta una porcién horizontal de hueso que se une con la superficie medial del maxilar para formar el techo de la parte caudal del meato nasal medio. En proyeccién rostral y en continuidad con la cara medial aplanada del endoturbinado, existe una pro- yeccién estrecha que prosigue a lo largo de la cresta del hueso nasal, con lo cual se com- pleta la formacién de la concha nasal dorsal. El endoturbinado I (figs. 37-38 a 37-41/L) es mucho més pequefio que el primero y comparativamente se le designa como con- cha nasal media, La lamina basal del endo- Osteologia de los porcinos 1361 turbinado II, la décima en sucesién a partir del primer endoturbinado, se origina desde la lamina orbital que forma la pared medial del seno maxilar. Presenta unas pequefias concreciones secundarias en ambas super- ficies y termina en una concrecién par. Las léminas basales de los endoturbinados II a VIE (figs. 37-38 a 37-41/N) estén dispues- tos en dngulo oblicuo a la linea media. Tie- nen una direccién caudolateral y presentan concreciones secundarias sobre ambas super- ficies, si bien decrecen en numero desde el endoturbinado III al VII. Los endoturbina- dos III a V terminan en concreciones termi- nales pares; los endoturbinados VI y VII en i SS a ss 1362 Porcinos simples concreciones (el nimero de éstas puede variar tanto para las secundarias como para las terminajes). Todos los ectoturbinados tienen un origen y estructura similar, pero solamente estén bien desarrollados diez. La mayorfa de los ectoturbinados bien desarrollados se locali- zan entre Jas l4minas del primero y segundo endoturbinados. De éstos, algunos se extien- den junto a la linea media, pero no la pue- den alcanzar y se disponen en series medias y laterales. Unicamente son constantes las 1é- minas mayores. La lémina orbital presenta una cobertura lateral primaria, incompleta y delgada del Fig, 3739, Calavera macerada de una cerda de 10 a 11 meses de edad; seccién sagital-regién craneofacial. EL hueso nasal est4 deserticulado; Ia lémina perpendicular del hueso etmoides’ esta escul- ids para. ilustrar ‘el laberinto etmoidal ye Septum simu sphenoidatium se ha separado pra ilystrar Tas Excavaciones. del senor el Noe er esta parcialmente separado; “las. flechas Indican la comunicacion de los senos parana- sales ‘de la cavidad) nasal: Ia. poreién” solida asienta ‘dentro de la cavidad masal ‘del sen0 i Paranasal; le porcién punteada. asienta por Hetras del hueso. del teidor la linea de trazos Indica 1 limitacion del seno. paranasal.. Arriba, ado derecho: abajo, lado. izquierdo; By sno frontal caudal (lado ‘igquierdo} (arriba: cl sep. tut sinautfrontalizm la iequitrda dela Tinea “media);'B, extensién ‘rostral de_B: D, seno esfenordal; ‘I, hueso frontal; 2 maxilat (Gttars nesomaziar) 7. concha nasal ventral Shueso etmoides; 5” mato. etmoidal con la lmina que le rodea:(obsérvese una. fina tinea de uniéa dela Taming etmoidal con el. hueso {Font esp paltio tina tena. ial 8, pterigoideo: “9, prestenoides;, 10, pa- fetal; 17) lamina ‘basal; 72, lamina’ perpen cular; 1,’ endoturbinado 1: 11, endogurbinado Hi; i1r-if, “endoturbinades “182 a Vil; esta muestra presenta un’ seno frontal caudal de famaflo’ normal para’ esta edad. La proyeccion rostral (B') surge Pritnariamente deste ¢l seno frontal ‘Caudal “iequierdo. (B). (De Hillmann, ity laberinto, Su parte dorsomedial (Idmina del techo) es pequefia y se une medialmente con la lémina perpendicular del etmoides. Su parte ventromedial (ldmina del suelo) es més gruesa y extensa. Medialmente, se une con et vomer, lateralmente con el hueso maxilar, para completar el suelo del fondo de la ca- vidad nasal, y caudalmente, se une con el hueso palatino. Su borde rostral es liso y forma la demarcacién entre el fondo de le cavidad nasal, dorsalmente, y la nasofaringe, ventrolateralmente. La superficie ventral esta surcada y, junto con los huesos palatino y maxilar, completa la formacién del foramen esfenopalatino. Lateralmente, la lémina orbi- Fig. 37.40. A) lado izquierdo de 1a sec cién sagital de la calavera de la cerda (animal maduro). a goncha nasal ventral; 5, hucso etmoides; 7 ihueso palatine: 12, lamina p sen fron tal caudal D, Seno esfencidal: F, ‘Seno, con- chal dorsal; /, endoturbinado 1; i, endotur- Simdo il; EVI, endoturbinados Tita VI. B, lamina perpendicular del hueso et- moides esculturado para ilustrar la co- municacién nasofrontal. fe, getiado, ch sen, swum, exenaidae Ime (D) para: mostrar Ia excavacton del. seno: 3a yomer esta parclalmenteretirado. Las Ne pss indiean ts: comunieacion de los senos Pa: fanasales con la cavidad ‘nasal: la_parte $0. TEaaaventa "dentro de Ta Gavidag natal © del Seno, paransalr Ia parte: punteada asienta bor Seirad del hues) Gel tejido’ (De Hiltmann, 1971) Fig. 37-41, Lado derecho de la seccién sagital de la calavera del cerdo adulto. La calavera ha sido escltutada para ilustrar Ia cavidad natal y lov senot paranasales, A, Bueso incisvo; #, hueso nasal; C, tparllar; D, palatino; £, pterigoideo; F, frontal, G, occipital; H, estenoides (el presfenoides y'el basisfenoides estan ‘unit dos) 7, vom (ia pate fosttal esta retrata); - etmoides K: concha nasal dorsal, Z concha nasal media; M, concha fasal ven tal; N, “tmoturbinados, 1, primer incisivo, PM, primer premolar, M,. primer molar; 1, seno frontal caudal (es una ete sign dei ‘Tado Izquierdo, par fanto, el septum del” seno frontal ha sido’ desviado) y 7", lado derecho (la. fecha 2 pasa a. tra- $55 del seno pop detras del septum del seno frontal que esta parciamente retiradc\g, Seno frontal rostral medio; hy sane esfenoides (12 flecha pasa a traves de Ia abertura del seno esfenoidal y, por tant, $e comunica con el fondo de ia cavidad basal j, celdligs etmoldales; , Seno. conchal dorsal; m,concha navoventral (voluta dorsal y Teceso correspondiente) y ‘m (oluta ventral-y receso correspondiente): lamina base esculturada por encima de 3; m", la fecha 3 indica el sen0;_n, 10. Famen esfengpalatino; 0, foramen etmoidal; la flecha 2 representa [a comunicacion desde la cavidad nasal al seho ‘com chal dorsal (4) yal seno frontal caudal (7); la fecha 3 reprewenta la comunicacion desde la. cavidad nasal al. seno conchal ventral (mt); y" la fecha. representa fa” comunicacion desde la cavidad ‘nasal al seno maxilar lateral (apertura nasoman Tai). (De Hilimann, 1971) 1364 Porcinos tal presenta una superficie irregular. Su parte caudoventral es lisa y convexa y se continua caudalmente con el presfenoides, hasta for- mar la superficie dorsomedial de la fosa pte- rigopalatina. La parte rostrodorsal se puede dividir en dos porciones: dorsalmente, pre- senta un surco poco profundo que represen- ta la pared media de la abertura nasomaxi- lar; caudalmente, el surco se curva ventral- mente y se contintia con la pared medial del seno maxilar, formada por la concavidad cir- cular profunda de ia porcién ventral. La lémina perpendicular est situada en- tre los dos laberintos y sirve para unir las léminas cribiformes derecha e izquierda. Esté compuesta por un hueso compacto que resulta de una osificacién progresiva del car- tilago del tabique nasal. Ventralmente esta fija dentro de un surco localizado en el vo- mer. Se une con el hueso presfenoides, cau- dalmente, a edad temprana, pero no est uni- formemente unida con el vomer en la misma edad. Por tanto, en los huesos macerados existe un canal inmediatamente ventral a la lamina que persiste en el adulto. Contiene pequefios vasos sanguineos que entran en el cartflago del septum nasal. Caudalmente a la superficie lateral presenta numerosas depre- siones, correspondientes a los endoturbina- dos IV a VII. Existe una prolongacién dor- sal, la erista galli, localizada entre las lami- nas cribiformes. Eventualmente, la crista galli se une en sentido rostral en la linea me- dia con el hueso frontal, La ldmina cribiforme es par y ambas estin separadas por la extensién dorsal media de Ja lamina perpendicular, la crista galli, En el animal inmaduro, donde el etmoides se quita con facilidad, existe una cresta lisa alrede- dor de la periferia; la porcién perforada es céncava de un lado al otro y entre ambos extremos. Caudalmente, su superficie (lami- na cribiforme) asienta en un plano horizon- tal. A partir de aqui y rostralmente se curva en sentido dorsal hasta que asienta en un plano vertical, Est4 perforada por numero- Sos agujeros. Algunos de éstos son grandes y dispuestos alrededor de una cresta que se corresponde con cada lamina basal del labe- Tinto etmoidal, Inmediatamente lateral a la crista galli existe una fila de agujeros gran- des los cuales poseen otros mds pequefios. Paralelos a la fila media existe una serie adi- cional de agujeros que no son tan uniformes en cuanto a su disposicién. Dentro de la su- perficie de la mina cribiforme existe una cresta lisa no perforada, que se correspon- 7 de con la lamina basal del endoturbinado II. | En continuidad con la cresta, ligeramente rostrodorsal, existe una zona elevada, lisa, que tiene fordmenes que irradian laterales y | representan la ultima porcién de la l4mina cribiforme que se osifica, Esta zona puentea la disposicién basal del endoturbinado I y aisla todos los endoturbinados que hay an- tes del endoturbinado II. INTERPARIETAL El hueso interparietal se une antes del na- cimiento con el occipital, No existe protube- rancia occipital interna. HUESOS PARIETALES (Figs. 97-34, 37-85 y 37-42) Los huesos parietales son pares. Existe una | linea temporal que divide la superficie exter- na en un plano parietal, plano dorsal y un plano lateral, esto es, el plano temporal. El plano parietal est4 limitado medialmente, donde se une af hueso del lado opuesto, por un borde sagital recto; rostralmente, se une con el hueso frontal por el borde frontal; caudalmente se une, extensivamente, con el hueso occipital por el borde occipital. El pla- no temporal forma una gran parte de la fosa temporal; caudalmente, se une con el hueso occipital para formar la cresta de la nuca (fig. 37-33) y, ventralmente, esta solapado por la parte escamosa del temporal por el borde escamoso. La superficie interna es concava, presenta numerosas impresiones digitales que se co- rresponden con las gyri cerebrales. También existen surcos para las arterias meningeas. Variablemente, a lo largo del borde sagital, existe un surco para el seno sagital dorsal. Venirocaudaimente, existe una proyeccién media que contribuye a la formacién de la tienda del cerebelo, que separa las fosas craneales media y caudal. La cresta sagital interna esta reducida. En el adulto, el hueso esta normalmente excavado por el seno fron- tal. En el cerdo no existe meato temporal. HUESOS FRONTALES (Fig. 37-41/F) Los huesos frontales, pares, estén inter- puestos entre los parietales, caudalmente ace OT aE SL rr Osteologia de los porcinos 1365 Fig. 37-42. Craneo del cerdo; vista lateral. A: hcso occipital, 3, clgomatico; G, maxi ‘sais Yugular; ta parietal; 7, 25 apotisis frontal y'15, apaiisis temporal (borde parietal) y los nasales, rostralme1 te (borde nasal). Se articulan con el etmoi des, con el lagrimal, con las alas del presfe- noides y del basisfenoides, con el maxilar y la parte escamosa del temporal. Son muy irregulares y estan formados de las partes escamosa, nasal y orbital. La parte escamosa (figs. 37-34 y 37-42) for- ma la base de la frente, es gruesa y est ex- cavada por el seno frontal. Su superficie ex- terna es lisa y varia de convexa a céncava, segtin Ja raza. Lateralmente, est4 limitada por un borde supraorbital semicircular, que la separa de la parte orbital. Aproximada- mente a los dos tercios de distancia rostral y centralmente sobre cada hueso, existe el foramen supraorbital (abertura externa del canal supraorbital), que sigue oblicua y cau- dalmente para abrirse dentro de la pared medial de la orbita dsea, en su parte rostral. HH, incisive: 1, nasal J \apoisis condilar de la mandibula; 4, meato acéstieo externo; is cigomética; §, parte orbital_del hueso frontal, 9, foun pata el orlgen. del miisculo oblcio ventral del ojo; 10, abertura orbital del ca famensupraorbital y st surco; 13, foramen, infraorbital; iB apotsls ‘del hueso cigomitico;, 16, "19, 19, riolarés; 20, foramen mental; 21, protinencia mental; 22, Angulo de la mandibula. ute escamosa del hueso temporal; C, hueso parietal; D, frontal; £, lagrimal: rostral; K, mandibula; 1, e6ndilo.occipi 5, fosa temporal supraorbit “it, foramen lagrimal; 12, fo- is, apstis joindtica del hueso. temporal, incisivo; 17, canino; 18, 18, premo- En el animal adulto el canal estd rodeado por los senos paranasales. Ei surco supraor- bital se continia rostralmente desde el fo- ramen dentro del hueso nasal. La parte nasal es una porcién rostral pe- quefia que se une con el hueso nasal en el borde homénimo, La apéfisis cigomitica se localiza en la por- cién caudolateral del hueso y se proyecta en direccién ventrolateral. Es corta y redondea- da y carece de conexién con el arco cigomé- tico. La parte orbital es extensa y forma la ma- yor parte de la pared medial de la srbit Su parte dorsal esta perforada por el orifi cio orbital del canal supraorbital, rostral al cual se distingue la févea troclear para la tré- clea del misculo oblicuo dorsal del ojo. El foramen etmoidal est4 situado en la parte ventral, cerca de la unién con el ala del hue-

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