1, La historia del cine como historia Qué es la historia del cine? Esta podria parecer una pregunta innecesa- ia, teniendo en cuenta el hecho de que desde ta segunda década de este siglo se han venido publicando libros que se anuncian a s{ mismos como «historias del cine». Todas las bibliotecas universitarias de Estados Unidos y Europa contienen cientos de trabajos de este tipo, la mayorfa de cuyos autores confian en que sus lectores saben qué es la historia del cine. zNece- sitamos més libros de historia del cine, especialmente uno que plantea una cuestién tan elemental? La pregunta ¢Qué es la historia del cine? tiene que estudiarse, en gran medida, debido a que el consenso superficial sugerido por cientos de titulos acerca de la historia del cine se contradice con el con- siderable desacuerdo entre eruditos con respecto a la naturaleza de la histo- ria cinematogrifica. Ademas, cualquier disciplina de estudio que vaya a ser tomada en serio debe definir y redefinir de forma continua su objeto de estudio, objetivos, Ambito y métodos. Una revisién de laStaSuneiones'venfoquesqUeaCEHTaSTOTETEOORIS que se autodenominan historia del cine deheria capacitar a la persona inte- resada en la historia de las peliculas para hacer un mejor uso de cualquiera dexellas. Por tanto, el objeto de estudio de este libro sera los SOFTOPHIStOTE costsobretelicinenlaNhisioriografia@cineMmarognapicam Aunque en los cap! los subsiguientes se estudiardn diversos ejemplos especificos, 1a principalBe 20 LLECTURA, INVESTICACION Y REDAOCION DE LA HISTORIA DEL CINE sud de este libro es la globalidad, las grandes cuestiones que trascien- den cualquier ejemplo concreto de escrito histérico. {Qué es, exactamente, \dor cinematografico afirma estudiar? ;Cual es la natura- leza del conocimiento que se 2 io de la historia del cine? ;Con qué materiales trabajan los historiadores cinematograticos? {Cua- les son las perspectivas que han adoptado los historiadores en su trabajo? 4Cémo pueden criticarse estas perspectivas? Podriamos empezar planteando la pregunta mds basica acerca de la his- ia del cine: ;qudestathistoriatdeheine? EI término en si sugiere una defi- wn bipartita, La historia del cine impiiearelesindiondelfendmenonalaue habitualmente nos referimos eomorecinen(ontiimesppeliouiasyullizareihos estos términos indistintamente). Asimismo, impligarekestudiondeheinedes- nna que significa estudiar algo hist6ricamente. A\amarse a si mi toriadores cinematograficos», y a sus trabajos «historias del historiadores cinematogrificos, tanto si quieren reconocerlo como si no, se implican en cuestiones, controversias y problemas que van mucho mis los por historiadores’y fild- sofos de la historia durante siglos. Cada escrito histérico sobre el cine, por modesto que sea, se basa de forma implicita en una serie de supuestos acerca de la historia. Por tanto, antes de estudiar cualquier enfoque concreto de la historia del cine, antes incluso de estudiar el cine, es necesario examinar el tipo de presunciones que los historiadores hacen (incluyendo a los historiadores cinematografi- cos). Una vez aclarado que el primer ¢: ro sobre la historia del cine tiene muy poco que ver con el cine, también deberfamos advertir al lector de que este capitulo es quizés el mas abstracto y «tedrico» de todo Jos temas histéricos que aqui destacamos no fueran sido objeto de debate desde los tiempos de Aristé- de sobremesa tiene que integrarse en Ja discusidn vital de la naturaleza y el propdsito de la Historia con Hf maydiscula. Tengan por seguro que la senda de nuestro estudio acabaré por volver (aunque dando un rodeo) a las peliculas. La historia del cine como una rama de los estudios cinematogrificos Antes de estudiar tatelaciénsentresashistoriardelseinesselashistoriaees ‘generaipseria conveniente situar la historia del cine dentro de los estudios [LA HISTORIA DEL CINE COM UA 2 cinematograficos. Tradicionalmente se ha considerado taphistoriandelscine como una de las tres ramas principales de los estudios cinematograficos, junto con la teoria y la critica cinematogratficas. Lo: s entre las tres no son fijos en modo alguno, pero estos tres términos delinean las princi- pales areas de énfasis investigador y constituyen la base para las divisiones curriculares en muchas universidades. En Jaspprineipalesteortasteinemarogranieas, Dudley Andrew argumen- ta que los te6ricos del cine «hacen y verifican proposiciones acerca del cine © de algtin aspecto del cine». La teoria cinematografica tiene como am- Dito la naturaleza, cualidades y funciones del cine en general. {Qué es el cine? {Como podemos derivar significado de una pelicula? ;Como podemos izarlo? {Cuailes son sus propiedades caracteristicas y cudles comparte con otros medios de comunicacién, manifestaciones artisticas y modos de representacién? Hastarunarépocarbastanterreciente lateoria‘cinematourati> cacha tenidowuna’orientacion casi-exclusivamenteestéticay que intentaba de- ‘emminanlasipropiedadessinicasideliinetcomorartes definir los tipos de arte dia produ: ibir (en algunos casos) el modo en que imos quince afios algunos te61 mo produce significado el, vez de cinematogrificos han pre- «Como entiende una pe- qué sentido es.arte el cine?». Rara vez analizan peliculas concretas excepto como ejemplos de una goria particular de potencial filmico o como ilustracién de una propos cin més general. londe la feoria del cine se encarga de caracteristicas comunes entre peliculas, 1a critica cinematografica se ocupa de las cualidades particulares: deviilmessindividualessorsruposidesiilmes. El critico pregunta, «{Como se conjuntan los diferentes elementos de la realizaciOn cinematogréfica en una pelfcula determinada?, «Cémo funciona una pelicula conereta: como una experiencia visual, como una historia, como una obra de arte?». PAFET@IEE mosteritions (aunque en modo alguno para todos ellos), eliobjetivortersus Aunque los criticos y teéricos cinematograficos han influido en la his- toria del cine y en algunas ocasiones se han implicado en controversi toricas, ninguna de estas ramas de los estudios filmicos tiene como émbito ‘principal la dimension temporal del cine: el modo en que el cine como arte, tecnologia, fuerza social o institucién econémica se desarroll6 en el trans. curso del tiempo o tuncioné en un momento concreto del pasado. I'ste es2 LECTURA, INVESTIGACION ¥ REDACCION DE LA HISTORIA DEL CINE el Ambito de la historia del cine. En lugar de analizar una pelicula o refle- xionar sobre la naturaleza y el potencial de todas las peliculas, el historia- dor cinematogréfico intenta explicar los cambios que ha sufrido el cine desde ‘sus origenes, asi como dar razén de los aspectos del cine que se han resisti- do al cambio. | : Por ejemplo, a finales de la década de los veinte, muchos tedricos y cri- ticos cinematogrificos escribieron ensayos como respuesta a uno de los cam- le desde un punto de vist el paso del cine mudo y la posible pér . El realizador y teérico ‘un manifiesto acerca de las .ciones y oportunidades estéticas del sonido. Los criticos norteameri- alternaban la condena de las peliculas habladas por su Jabanza del sonido como anuncio de una nueva Jine.? Mientras que Arnheim, Eisenstein y otros trata- ron la llegada del sonido como una ventaja, un nuevo desarrollo a ser inte- grado en sus respectivos sistemas teGricos o criticos, etihistoriadoneinema= Sergei Eisensteit sinonenseémosmeponsquésc! sonido sincronizado llegé cuando y donde lo hizo. Para responder a estas preguntas acerca del pasado del cine, eliaisto® iador cinematogratico debe ser un estudioso del cine, pero tambicn un es-_ : ; La naturaleza de la investigacién historica To que distingue las preguntas historicas sobre el cine de ias criticas y : . langondelriempos Pero, ,c6mo se lleva a cabo esta empresa hist6rica? Pon- gdmoslo de otro modo, zcémo explica un historiador, al margen de su ob- jeto de estudio (cine, arte, politica, tecnologia), el pasado? Esta cuestion ha ocupado a historiadores y fildsofos durante sigios, y no entra en el érm- bito de este libro estudiarla con el detalle que merece. No obstante, puede resultar titi] empezar un libro sobre la historia del cine con un breve estudio de las cuestiones filoséficas que sirven de base a cualquier tipo de historia. Podemos preguntar en primer lugar, ;qué es un historiador? Al nivel més elemental, un historiador es alguien que estudia el pasado. Evidente- ya que no todo el que estudia ‘a menudo los coleccionistas po- el pasado es un historiador. Por ejemp! seen conocimientos de extraordinario detalle acerca de objetos del pasado. Un coleccionista cinematogrifico puede ser duefio de cientos de filmes 0 LA HISTORIA DEL CINE COMO HISTORIA 23 haber memorizado todo el didlogo de Casablanca (Casablanca, 1942), pero is posesiones del coleccionista ni sus conocimientos acerca de objetos -oleccionista siente una fascinacién intrinseca por las antigiie- dades, por su belleza, rareza o sencillamente porque son antiguas. El estudio del pasado que realiza umhistoriadorsintentarexplicarpponquésseproduije> ‘Lo que une al cole joriador son los artefactos que han sobrevivido al paso del tiempo. Para el coleccionista son valiosos en sf mis- ‘mos, en ocasiones desde un punto de vista econs: rothy en El mago de Oz [The Wizard of Oz, 1939] se cotizan délares); para el historiador son una fuente de informacién den retroceder en el tiempo para tomar notas acerca de la bat loo o acudir a una reunién en la MGM. Deben basarse en los artefactos que han sobrevivido hasta la época de la investigaci6n: en el caso de la his- toria del cine, ps , Tegistros de produccién, periédicos, documentos gubernamentales ¢ incluso viejos edificios que sirvieron como cines, entre otros muchos tipos de restos del pasado. Sin pensar demasiado sobre ello, la mayoria de nosotros hacemos un gran hincapié en el papel de los objetos en la explicacién del pasado. He- ‘mos aprendido desde las clases de historia del instituto que el estudio apro- piado de consiste en desvelar todos los datos importantes acerca de una cuestién histérica en particular y presentarlos de un modo tan desa- pasionado y «objetivon como sea posible. El trabajo del historiador, nos han ensefiado, consiste en actuar como coleccionista y organizador de las evidencias histéricas. La interpretacién queda relegada a un nivel de im- portancia muy inferior y, de hecho, puede que incluso sea innecesaria, ya que los hechos, una vez ordenados apropiadamente, pueden «hablar por si mismos». En esta versién abiertamente caricaturizada de lo que llamo «chistoria de instituto», 1a verdad de la historia puede conocerse por medio de los hechos incontrovertibles de la historia, y esta verdad existe totalmen- te separada de las interpretaciones de cualquier historiador. La verdad his- tdrica se presenta como algo incuestionable y reducible a preguntas de ver- dadero 0 falso en un examen fin Las presunciones generales que la mayoria de nosotros hace acerca de Ja naturaleza de la investigacién hist6rica derivan de una posicién filos6fi-