Hervite y De la Gacse Clave).
Persar Fede
PENSAR HISTORICAMENTE
Fuse Omives i
AL Hevica, Medeico
he k ‘ POR NOEMI S. HERVITZ
Y LUIS ALBERTO DE LA GARZA
Us 34. No t2, ash,
i po mucrto de peneacions desaparendas de
‘ioridore, amazes y eons, bo Str
do sm posblided de wplcon ues en el
asd.
E.H.Carc Questo
La posibilidad de proponer una ensefanza que le»
ve al sujeto a pensar histricamente, es decir, a vi-
virsu propia historicidad, implica analizar tres mo-
‘mentos en ls propia historia de este quehacer. El
presente articlo intenta crticar los dos momentos
txistentesy plantear un tercero que se esti desarro-
Ilando y que debe superar dialécticamente los ante-
tres en la ensefianza dela historia.
El primer momento al que alude la mencionada
cita de E. H. Cates a historia moralizante, la his-
toria patria, la historia politica en tanto histor
fictica a través de le cual los curricula oficiales
smiten la ideologia dela clase dominante y con
tuna false conciencia del quehacer histérico,
Esta educaciOn histdrica que se repite en todos
Jos niveles condiciona, en un segundo momento,
acide y mena o woo de rechaze a
disciplina istériea que aburre de tantas fechas y
jo que impideal alum pensarse bist
ricamente, entender su presente y posbilitar su
propia transformacié
De ahi que como profesores de historia aboga-
mos por retomar Ia enseianca de la historia, en un
tercer momento que plane el sentido de ensefar
historia ~como sefaldbamos en un articulo ante-
rior (Clr. Del histoicismo y os historicisas)~ pa
dar cuenta de nuestra propia historicidad, com
una forma de coneebir problemas, desde a cual sea
posible “transformar conciencias para que piensen
¥ practiquen transformando a su ver su propia hi
{oicidad libremente”
{Cémo aprendimos historia? Aqui podemos
‘enumerar una serie de axiomas que representarian
festa captain por endo que nos tans
‘on sobre la historia, a la que llamaremos “la poll
tica de la historiografia.”
'No profundizaremos por ahora la discus
por otra parte ya abundante™ del significado de
la historia patria moralizane cuyas razones de ser
se encontrarian, mis dentro de la explicacion del
Tae es aes etna
0, En este sentido la falsficacin y la mitificaci
de los hechos corresponde a un proceso de control
de la historia (como pasado) por parte de las clases
Y grupos dominantes que tiene como fin la legiti>
‘macidn de su presente, al mismo tiempo que es ve~
biculo de tcunsmision de su ideologta.
El eulto a los héroes, la conmemoracién de las
arandes fechas, ef descubrimiento de los hilos con-
‘ductores del proceso histérco que se plasma y jus-
tifeaen ef hoy y el agui, el control de as interpret
‘iones a partir de ls libros de texto’ y de los "pro-
trams vigentes y autorizados' son unas de las tan-
28
tas maniestaciones del sentido de este tipo de ense-
fianza de la historia
A guisa de ejemplo podemos efala el problema
r
santoraleslaicos que se ofrecen en cai todos
los sistemas de educacin con respecto a la histo-
Fla, Aqui se involucra el papel que juegan los hé-
roes en las historias nacionales: heroes moraizan-
tes, semidioses perfectos e inmaculados cuyas vi
das estuvieron destinadas de principio a fin a pen-
sar, actuar y luchar por el bienestar comin y la
‘grandeza dela patria, Maniquelsmo y mitiieacin,
‘euyo culto erie alos gobernantes y sus idedlogos
‘en supremos sacerdotes dela religiSn « l historia,
‘Héroes que sirven como ejemplo a ia nitezy ala
juventud que debe emularlas y que son impensa-
bles como hombres reales; heroes que se encarnan
‘sucesivamente en la figura del gobernante en tit-
1; héroes que desde sus pedestales observan satis
fechos como sus premoniciones sobre el futuro es
tan plasmadas en el presente oficializado.
ero, iquién elige a los héroes? Aqui a politica
‘edativa como parte de la ideologia politica de un
pals determinado decidir quitnes son los “bue-
‘nos” ¥ quiénes los “malos”. De esta manera ten-