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bos lados de la Hinea, Los hechos som b denn hechos. Los princi OsPonlOLE os BIBLIOTECA “rlenentos Determinantes * Saseph L. Badarncco / 194.48132M ed Los momentos determinantes E UNA NOVELA TITULADA The queda del dia, el protag llamado Stevens, que pasea por la campifia me f hocer ensefanzas sobre nes que tienen que t auto, Kaz Stevens pasa mu a tiempo trryendo a la memoria cisiones que tomé, algunas 25 afios 84 Moura nema tvs, y que irrevocablemente dieron forma a su vide ysu carr ra. Al recordatlas sient a veces orgullo, peto mas a memdo tristeza, Més dolooso atin es darse cuenta de que en su mo mento no entendié el aleance de tan graves decsiones. Slo ahora en retrospective, ve e6mo en tnos bers instante vo en sus manos st vida y defini6imevocablempente su destino sos fueron para Stevens momentos determinantes 0 de’ Aefnicisn, As, ambien, son las decisiones entre dos ines de conductacorrectas que a veces tienen que tomar los gerentes. Rebecea Dennet, Steve Lewis, Peter Adaro y Edouard Sake se vieron también en encruciadas en las cuales valores impor tantes, personales y profesionals, elalaban en dstintas dre cones. Ni los grandes prineipios ni su propia intuicion ica les odin dar la solucisn corecta, La presidn era intens, ln incertidunbre grande. Lo mismo que Stevens, todos ellos po- dian fcilmenteequivocarse al juzgat lo que elaba en juego, para ellos mismos y pata otros, y al tomar decisones de las penta, Tales iesgos son inevitables cuales mas tarde se a para los gerentes y para todos aquéllos que tengan seas rex ponsabildsdes para com la vida de los dems. Por fra, sn embargo, hy manera de carga os do | dosa favor de decisiones pects, responsables ~elecciones | que los gerentes pueden rememorar més tarde con un sentido 4 de oxgll, de elizacn y de honor. El primer paso en ea diveccdn cs entender las mancras como las decisiones ene dos condita comectas son momento detemminantes ode de finicién en la vida de los geren | esyy en su eartera Los moments dérrinanes 85 CENIT DE UNA CARRERA John Dewey, fldsofa y educador estadounidense, nos da un firme y perspicaz punto de partida, En su libra Bthies, escrito en 1906, dice que las decisiones éticas importantes tienen dos xpectos: uo piblico, 0 sea lo questadas pueden-ver, como los aeios de una persona y sus consecuencas,y otro pivado que, ten cambio, es mis sui, En palabras de Dewey, Comprende las ‘maneras como las decisiones éticas“iholdean, evelan some: ten el yo a prueba". La expresion de Dewey es preve — ape- tas unas pocas palabras — pero arvoja una intensa lz que ilu- rina lo que est en riesgo cuando los gerentes hacen la eleccién entre dos conductas correcta y las maneras bisicas en las cua Tes esas elecciones son momentos de definicién. En las pigi- nas siguientes vamos a ver emo revelar, someter « prueba y ‘moldear son elementos claves de los momentos de definicién ‘Aun cuando la novela The Remains ofthe Day se desatto- lis en 1956, sus episodios claves se desarollan en los ios que ‘mediaron entre las dos guertas mundiales, evando Stevens era mayordomo de un lord inglés apellidado Darlington. EI mo: mento determinante dela carrera de Stevens ocurre la ditima noche de una importante conferencia internacional celebrada en Darlington Hal, residencia del noble. Lord Darlington y ‘los personajes evan a cabo una serie de negociaciones su- ‘mamente delicadas, encaminadas a persuadiral gobierno fan: ff de que avi las sanciones impuestas a Alemania al termi- no de la Primera Guerea Mundial Stevens ve la conferencia como el cenit de su carrera, Ha Pasado atios esforzindose por ser un gran mavordomo. apira- cin que define en térins dios sin ninguna ambighedad Un gon mayordomo, as mede de ver incrpra la ealiad de a dgniad, yt reptesenta un dia de aloes y noble seicio, Un gran mayordomo dedi tod sea de El mayedomo procede as en sei de un aino monlmente bueno com Stevens consideaa lord Dalagton Ye amo, 4 uve, ene que ar dedcada alguna dum pande'~ ts eno un lament humritaro dees denotado ym pebvecdoslemanes En un patae dela novela teens dice Mi vain nose ved teaizada asta que o hay hecho tod io ve peda par cr qi nord sale adelante con as iyandes ares que sha imps ‘Ys pra lama noche de a conference hala loge Ae alin progres. El epresentante anes parca eta abieto 4 toda as propucts que te dtu, Stevens lo sabia y cena muy oxullos de sv contribu a ete reslado, Di tate tos abl asada] numero personal de Dtingon Nal pra un siceso como ét. Durante la semana que pe cedieron la confetencia habia trabsado sin dscano, “come tn general que prepara una Btla. Advert l penal que aj es techo bien oti cts haiend itor. Darafe cionarle comodiadysteneion nial delega francs que tenia lor pic lees de ampolls Bn fin, encontaba ene mal de ona netabereaiacién profesional y personal Peo el pared Sevens también emplado de Dilingon Hal agonizaba en ess momentos en un euro de un pio } superior. Ese mismo dia, unas horas antes, habta sido vietima de un fulminante derrame cerebral. Asi que Stevens tenia que scoger entre sentarsea Ia eabecera de su padre o atendera sus deberes durante las diltimas horas erucales de la canferencia Stevens visto brevemente al moribundo y regresé en seguida 2 ss deberes profesionales. Justamente después de la cena, cuando Stevens estaba sit- viendo bebidas a los invitados, Miss Kenton, el ama de Haves en Darlington Hall, lo Tam apartey le informs que el enfer ino acababa de expirar. Miss Kenton le pregunté a Stevens si ibd a subir. EI contests que subirfa dentro de unos minutos y Sgteg6: “Ve usted? Yo sé que mi pade habriainsistido en que yo.cumpliera con mi oficio en estos momentos”. Mas adelante ila historia Stevens nos dice: “A pesar de todas la tristes ‘memorias, cuando quiera que recuerdo hoy esa noche, eneten- El crete tho que la recuerdo con um gran sentido de triunfa haber dado al fin la medida de Tas exigentes normas de servicio se podia comparar con los grandes mayordomas de su épocs, incluso ‘que se habia fijado pata sf mismo, Ahora ereia que on su propio padre Hay mas en esta historia, y pronto volveremos a ella, En ‘ste punto, sin embargo, es importante exeminar lo que la de isidn de Stevens nos dice sobre revelar, someter a prueba y ‘moldear, que son los elementos centrale de tun momento de ‘efinicién. En realidad una sola decision o elecvién funde los tees elementos. Estos nose desarrallan uno por uno, como eta- as ordenadas de elecciones separadas. Con todo, es stil ob sewvar de cerca cada elemento de un momento determinante 88 Mowers arremnunras REVELAR De muchas maneras, algunas de ellas muy convineentes, los momentos determinantes revelan, Tl vez saquen ala luz algo. 1a cosa que estaba culta, 0 quizé erstalicen lo que estaba fui doe informe. Fs posible que den sna visi nia y clara de n todos los Easos esos momen algo que antes era oscuro, pero tos revelan algo importante con respecto a los valores bisicos dde una persona y sobre sus abligantes compromisos en la vid, ‘Chester Barnard sostenta este punto de vista, Sus afios de ign de que experiencia en los negocios lo Ilevaron a la cone el cédigo moral de un gerente tipico “le ha sido implantado por causas, fuerza, experiencias que, o bien ha olvidado 0 ex general nunca reconocié. De hecho, cules son éstas con pre cisién s6lo podemos deducislo aproximadamente de sus accio nes, de preferencia baja presién™. Los momentos determinan- tes o de definicidn obligan a la persona 2 formar sus valores “en fila” ya revelar las prioridades entre ells. | | Stevens resolvié permanecer en la conferencia en lugar de acudiral lado de su padte. Al proceder de esa manera reve 16 que por encima de todo estimaba sus ideales profesionales ‘Cuando decidis desempentar sus deberes después de la cena cen lugar de subir a cerrar los ojas de su padre, le dijo a Miss Kenton que hacfa lo que erefa que su padre hubiera queride ‘que hiciera. Al decir esto revelaba algo ms: la justificacion de sus valores, Stevens tenfa una interpretacién personal, cud lada, de la vida que habfan llevado su padiey | dosamente toteos grandes mayordomos, y habia trabajado fervorosamente | nara inorecar en fila i Les ramets detrminanies 89 ‘Tadoslos momentos determinantes no toman precisamen- tla misma forma que el de Stevens. Una eleceién puede reve larpoco a los demas y mucho a quien lahace. Estos momentos de laridad son privados y personales. En otros casos, una elec cin puede revelar mds a otras personas, si saben abservar, que ‘a quien elige. Otras devisiones, como la de Stevens, revelan mucho a los demas, Esa decision, como el resto de sa vida, fue cxcesivamente deliberada, y él le dio a Miss Kenton una expli- cacién de su proceder. Con toda probabilidad, el personal de servicio de la casa pronto se enters de lo que Stevens habta echo, Sus valores estaban a la vista de todo el mundo, Los momentos de definicién no tienen que presentarse ex un instante ni en un breve episodio. Stevens sf tenfa que decidirse inmediatamente en cuanto se enteré de que su padre habia mucrto; el joven aprendiz de banquero de inversién, Steve Lewis, disponta de s6lo una hora, poco més 0 menos, para re- solver qué debfa hacer sobre la reunién en St, Louis, En car bio, Peter Adario tenfa varios dias para decidir eémo manejar 1 conflicto entre Kathryn MeNeil y Lisa Walters, y Edouard Sakizdisponta de mucho mis tiempo para pensar cémo proce- der con el RU 486. Aun cuando la decision de Stevens no es ef modelo para todos los momentos de definicién, s{subraya varios aspectos ‘importantes de estas decisiones y Io que ells revelan. No hay, Por ejemplo, ninguna garantia de que un momento de defini: 6i6n descubra un valor 9 un compromise moralmente inspira: dor y elevado, Hitler sin duda tuvo sus momentos de defini- «in, como los tienen todos los malvados y farsantes. Ante el 90 Mowsxros neraanwns tam eacudhendo Wterente a abet | Poveta pare lo que revels un momento determinate | de defini ra vee sur sorpendente facets neva da or corco de on nds. Macho at lei I i Stina noche delaconfeenl, Stevens abiarevlado sob. | tinados valores y sus compromisos, medianté innumerables ac- tos de escrupulosa y desinteresada atencidh a las minucias de Ieadmiitacdn oma, Bosbrevesmomentosdeautone f ‘velacién confirman la observacién de Michel de Montaigne, | “hose emai feels els XVI, de que un ol gest, bien a ober, pede eel to el acer una persona | ‘Los momentos de definicién revelancristalizando, Son versio res mds nftidas, is vividas, mas intensas de To que una perso na ha venido revelando todos los dias, por To general de peque- | Citra caractetstica de un momento determinante es que i; tanto del pasado de una persona como de su presente eles, Lay prions él posen revel To que son ae i les importa si ya son alguien, Stevens no Hegé a su momento sofo ha Tamado un “yo sin} args Nora napa en blanco ena sl pata bunt determinante coma lo que un fem gusto un autocrat, Al igual ue Stevens, todo somo} tngran medidalo que hemossio,Laadvrtencia qu pate j cep eevores de ates — "Laat Guete seflejan aqutestin ms cerca delo que parece” ~ see como una afirmacin sobre la vida y sus momentos determi} nantes. | feel bien y el mal, someten a prueba los valores de una bs moments deers La decision de Stevens es también un recordatorio de que Jos momentos determinantes 0 momentos de definicién, aun que hondamente personales, son también profundamente so Giales.Abren ventanas no slo ala vida y a experiencia de los individuos sino a los valores de la comunidad en la cual han vivido, La més famosa afirmacién de Ariststeles es su defini. cn del ser humano, En su Politica, eserbié: “E] hombre es por naturaleza un animal politico", esto es, una eriatura dela polis 0 sociedad citcundante. Mis enfitica ain es el fl6sofo ‘euando escribe: “Quien no pueda vivir en sociedad, o no lo necesite porque se basta asf mismo, tiene que sero una bestia orun-ios La vida de Stevens, literal y figurativamente, estaba confi= ‘nada a las paredes de Darlington Hall, an microcosmo de ta politica, las maneras y las relaciones sociales de la sociedad finténica en el perfodo comprendido entre las dos guertas smundiales. Por tanto, la decisién de Stevens revelaba no sélo Si propio cardcter sino el de la sociedad que lo rodeaba. Los momentos de definicidn revelan lo politico y lo personal SOMETER 4 PRUEBA las decsiones de Stevens la noche que murié su padre tam. bign sometieron 2 prueba sus valores. Bste es el segundo as- esto crucial de Jos momentos de definicién y también el mas familia. Todas las cleceiones morales, aun las inés obvias em a Indi sientes aera ican si su compromiso con elles es sincero 0 solo de 92 Mowrovnos peau Con todo, las dessiones entre dos lineas de conducts co- rrectas son patticularmente exigentes, porque hay que elegit ‘entre dos o més valores con los cuales est uno profunda y ge- nainamente comprometide. En ottas palabras, el precio de ba lealtad a algunos valoresy compromisos el sacrificio de otras. Stevens, por ejemplo, se vefa ante un dilema de este tipo. Para 1 la cuestibn bisica era si tendria la fortafera necesatia para servira su sefiory ala gran causa ala cual €ste se habia dedica pace, para con el cual se sentia profundamente obligad, Aun cuan do, en el momento mismo en que acababa de expiras do Stevens era macsto en reprimir ss sentmientos, las igs sas le rodaban porlas melas cuando regres a sain def. adores después de enterare dl fllecimiento desu pa Pagiba un precio sumamente alto por abedecer a susaltos ide les de seni Stevens afrntaba un reto profesional ypesonal que mi cos gerents reconocerén, (Fate puede ser uno de Tos sent ds en Jos que Ishiguro cree que “todos somos mayordomnes") Stevens tenia importantes rexponsabilidades Habia presién, profesionales, Sus metas eran lars él se media por estindares cexigentes; no tenfa tiempo para pensar en todo, Sus response bilidades personales y familiares chocaban penosamente com sus aspitaciones ylo que 61 consideraba sus obligaciones profe sionales “Todos los getentes de empresa de quienes hemos tatado se vetan ante prucbas de definicién. Peter Adario, por ejem plo, crea estar obligado a ayudarle @ Kathryn MeNeil a cot] {ervarsempleo yal mimeo tiempo evidar de su hijo. Al des] i Los mamens dernvanies 93 rollarse los hechos, sin embargo, vio que correriaserios vies: 0s profesionales para conver en realidad tan plausible meta De esta manera, sus valores y compromisos se pondrian seri mente a pruebs, MOLDEAR a dima noche de la conferencia fue para S wens més que na prueba. Lo que le importaba mis que ninguna otra cosa ta que se habla convertido en un tipo particular de persona ~ o aspiraba fervientemente a ello. Le importaba mucho que sus actos, y mucho més su cardcte, reflejaran fielmente Tos altos ideales de sactifiio y servicio profesional". Décadas des prs, eecordaba la conferencia con gullo, porque crefa que hubfa sido el momenta en que se convirtié en wn gran mayor domo, El tercer aspecto bisico de los momentos de definicién es ‘que pueden moldear a una persona, Este moldeamiento pro- viene en parte de decisiones 0 acciones poco signifcativas en s{mismas, Si se ven una por una, pueden ser engafiosas, pero ‘en su conjunto contribuyen a formar el carder, asf como las {gotas de agua al fin cambian Ia forma de la piedra. Hay co- ‘merciales de televsin por cable que muestran casos de ripida 94 Mownas pemaunvrs autotransformacisn, pero en la vida cortente eso no se ve. Més plausible era el punto de vista de Aristételes: ricer, afirma, surge de la repticign de actividades similares", I estado del cx Nadie se escandalizé de que Stevens permaneciera en la cconferencia en lugar de acudira la aleaba de su padte. Suclee i6n no Jo hizo una persona nueva, aunque st contibuyé a ‘moldearlo, en la medida en que afianzé més adn algunas de sus caracterstcas bisieas. La decisin lo ayudé a ser “mis €] mismo”. Por este aspecto, esa decisién, como todas las que la gente toma, moldes su cardcter de una manera particular. Otras decisiones tienen «sn efecto mas dramatico en el ‘moldeamiento del earécter. La de Stevens cristaliz6 una ima- igen muy precisa de s{ mismo, y ésta se convirtié en ef lente 2 través del cual él interprets su vida, Stevens ctefa que con es ‘decisin habia legado a ser un gran mayordomo. Su vida em pez6 en la oscuridad, trabajé asiduamente durante muchos atios y ahora, al fin, ya él era algo. En adelante veria el mando (y experaba que ese mundo la viera a él) no como un simple sie viente, sino camo un hombre de dignidad y estatura. Esta ima gen de él mismo permanecié firme en su lugar durante dos dlécadas. No la volvié a reconsiderar hasta que sufi6 varias desilusiones personales dolorosas. Sélo entonces su vision de si mismo como un gran mayordomo perdié el ascendiente que tenia en sa vida, Hay una tereera manera en que un momento determi nante puede moldear la vida de una persona, Puede ser un momento erucial, una bifureacién de camines. Dewey men cions, por ejemplo, “la eleccién de un ofiei 9 de un comy | 2s mom 95 ero de por vida”. Estas y ottas decisiones son elecciones de una forma de vida, Stevens esogié la vida de un devoto m yordomo al servicio de fines que él ereta nobles, en vez de la sida de marido y quizd de padee de familia. La mayoria de ls esonas entienden la impottancia de esta decisiones en el momento de tomarlasy en algunos eases, como el matrimo tio lasociedad desta a importania de una decisi6nrodedn dala de ceremonias y compromisos formals. ay sin embargo os momentos determinantes que, te niendo consecuencias no menos significativ parecen en st ‘nomento de escasa importancia. Todos recuerdan decisiones ‘de este tipo. Abren unas puertas y cieran ott veces para siempre: Modifican el caeicter de una persona cambiando su sia y sus experiencia. Una de las penosas desilusiones de Stevens empez6 por Jo que pareefe una decisién pequena, Durante los aft que siguieron 2 la conferencia internacional, él y Miss Kenton, el ama de laves en jefe, trabajaron en estecha colaboracién. Ella lleg6 a abrigar sentimientos muy fuertes para con él, aunque Stevens escasamente se daba cuenta. Un gran mayordomo, somo él erefa ser, no podia permitirse tales sentimientos. Mas i, ocupaba su énimo la gran tarea de servira lord Darlington, {quien continuaba sus esfuerzos por reparar las relaciones angloalemanas Un dea Stevens pass frente ala puerta del eusrto de Miss Kenton y leanré a ofr que éstaloraba. Acababa de tener noti- de que una ta soya habta mueto, EI pudo haber llamado.a lapuertay haber e loa consolarla pero no lo hizo: se alejé 96 Mowexros amends porque no se atrevta, segsin explicd, “a inmiscuirse en su dolor ' J incidente, privado", Poco después olvide Pero mds tarde en la vida, esa decision, en apariencia ine trascendente, vlvié a mortificarlo, Poco después del inciden. te, Miss Kenton renuncié a su empleo en Darlington Helly se «e286 con un hombre a quien no amaba. He aquf las dolorosas reflexiones de Stevens al recordar estos hethos, 20 aos des Pero qué sentido tiene hace conjeturasinterminables Sobre nq uo habe sd, ta cel momento hu | pues iera tenido un desenlace distinto? Ast ve puede wno vl ver loco. En todo easo, aunque exté muy bien hablar de uno sala lox puede reconocer en “momentos eruiaes retrospective. Es cierto que cuando se rememoran hoy tales episodios tomar el axpecto de momentos precios, ceruciales en nuestra vida, pero cuando ocurrieron, éa no fue la impresin que nos dejaron... Cirtamente no habia nada que indicara en ese momento que tales in dentesevidentemente pequefies harian para siempre iredimibles nuestros sueRos’. de una vida con Lo que Stevens se perdis fue el gran su Miss Kenton. Al final de la navela se describe una breve visita aque le hace y la terminacién de su esperanza de que ella vach va Darlington Hall, Ella prefiere volver al lado de su matido, de quien se habia separado, y Stevens se queds solo, conten plando Jo que queda de sus das. Los momentos eter MOMENTOS DETERMINANTES, GERENTES Y ORGANIZACIONES Las expresiones “momentos deerminantes”y "revela,some- tera prueba y moldeat” son brevesy parecen simples. Sin em» bargo, son guts valiosas para reflexionar sobre decisiones per sonal. Bn particular, lo ayudan a uno a entender To que est nego cuando es preciso elegir entre ds lines de conducta fortectas. Estas decisiones lo obligan a uno a revelar por lo inenos una pate de sus valores bisios. Ponen a prueba cu jiumemente eté comprometid con los valores que defiende, 4 proyectan una sombra que moldea el resto dela propia vida Pero los gerentes no pueden pensar de una manera dnica mente personal sobre ls dilemaséticos que se les presentan nla mayorfa de los casos seria ingenuo eitesponsable que ast Inicieran, pus para ellos los momentos determinants son tanta sociales como personales. Po fortuna, las dos expresio- tes citadas son también excelentesinstrumentos para enten- desloge sigifican para una onganizacin las decsiones en tredos conduct corectsy lo que significan para los gerentes gue las toman, Mas importante ain es el hecho de que las expresiones Taman a stencion hacia uno de los elementos mas exgentes y xeativos del trabajo de los Ideres empresaiales: adapta, n- terpretare individualizar valores humanos bisics, de tal ma neta que guien y moldeen tods la compania,Fista es la tarea moldeadora o ceatva de una forma de vida, no para una per- sona sino para toda wna oxganizacin 98 Mouncos penn | [ Los momentos determinantes de definicién para as com. | patias, lo mismo que pata el individuo, pueden ser sutils, si | lenciosos 5, examninados uno por uno, aparentemente intres ccendentes, Sin embargo, ya sea que los gerentes lo quieran o ro, sus decisiones y aceiones transmiten yna corrente conti: naa de mensajes al personal de la empresa sobre c6mo funcio nan en realidad las cosas y cémo hacer“para progresar, La “kremlinologi” (la préctica de una inteisva interpretacién de todos los hechos, aun Tos mas pequertos, por parte del go bierno soviético) puede estarse debilitando en Ia Secretaria de | ado de los Estados Unidos ahora que ya terminé la guer fefa, pero vive en Ja mayor parte de las compan. Un gerente ine dijo: “Lo que no saben muchos ejecutivos es que hay una relacin muy estrecha y silenciosa de observacin entre jefesy. subaltemos, porque los subaltemos quieren ser ascendidos ¥ ‘obtener mejor paga y posicin La kremlinologla se intensifica cuando los gerentes te nen problemas de eleceién entre dos conduetas eorrectas. Ex tas son distintas de las decisiones relativas a la asignacién de tareaso ala preparacion de presupuestos, que todo el mundo trata de descifrar para enterarse de cémo se juega el juego 3 {guign va ganando o perdiendo, Las elecciones entre dos com; uctas correctas son distintas por un aspecto importante: I frecen a todo el mundo wna mizada alas priotidades éticas de {quienes manejan la compaiia, umn sentido mas claro del tp de personas que éstas son en realidad as miradas no son simple especticulo deportivo, pu to que influyen en el grado de confianza que los empleads puedan depositaren los jefes. {Estamos trabajando para perso nas que realmente se preocupan o sélo dicen que se preocu: pan? zLes podemos creer ewando dicen que apoyan nuestro proyecto, que les gusta nuestro trabajo o que ya no habri mis despidos A nivel organizacional, los momentos de definicién obli- ‘gin alos gerentes a revela, someter a prueba y elegir la ética desu organizacidn. Bsos momentos moldean la oxganizacién porque pasan por encima de todos los pronunciamientos muy ben formulados acer de lo que la compai espera hacer, y reyelan en cambio lo que hace en realidad. Estos episodios jan precedentes y crean expectativas que moldean una com: pula para muchos afs. Definen el propésito de la organiza- tién y al mismo tiempo cdmo va a proceder para cumplitlo {Las momentos de definicién pueden er tan importantes para la ‘tampa. como lo son para la vida y la carrera de un gerente, ‘Los momentos de definicién también colorean indeleble ‘mente la imagen que los empleados y otrs personas tienen de ana organizacin y de sus Iideres. Sin dada, son episodios de alt riesgo. No silo estin en juego los compromises y valores deun gerente, sina también cl carictery el espritu de trabajo de una organizacién, Stevens, por ejemplo, era el gerente de ‘un qumeroso personal doméstico, Sin duda la historia de su decisién la ltima noche de la conferencia la contarian y la ‘epetitfan durante muchos afos. Algunos miembros del perso tul se asombrarian o se indignarfan por lo que hizo Stevens po él fij6 casi en piedra un ejemplo de compromisos, valores Y esindares que habria de prevalecer en Darlington Hall 100 Mowe sermons i ( Vox geet on Ts mete i de comp, | Esto es cierto, ya sen que sean jstos o pocadores, 3252 que | tengan a intencion de ensehar ciao no, Son ees del fico, Las acionesrasmiten menses y las omniones tambien, yo mismo hacen muchas ors cosas, Po xox geen respon: sables se preocupan por el papel que deseppetian en los mo. smentos de definicién de sus organizaciones. Es deci, les inte resa la manera como sus decisiones y actuaciones rel someten a prueba y moldean el carécter de sus compa Por esta razén las decisiones entre conductas correcta, son momentos determinantes. En estos episodios, los actores definen qué valores morales tienen lamas alta prelacion. Defi nen igualmente qué significan esos valores en situaciones par ticulares — para sf mismos, ys son gerentes, también para sux organizaciones. Tales el reto fundamental que puede lanzat ‘un momento de definicidn a las manos de un gerente, a meni do sin previo aiso. Jean Paul Sartre, Chester Bamard, Aristoteles y Joh Dewey nos han ayudado a entender la naturaleza de estos pro Dlemas, Ahora volveremosa os otros tes fildsofos — Nietzsche, ‘William James y Maquiavelo — en busea de gufa sobre eémo resolverls. Ells sugieren importantes maneras de reaccionar reflexiva y responsablemente en los momentos de definicién,y hacerlo asia medida que se presentan, a alternativa es rememorar més tarde esas decisiones, como Stevens, con resignacién y tristeza. Su historia planter ceuestionesinquietantes, Pudo Stevens haber procedido de unt mejor manera? :Hay alguna manera en que pude haber com 101 prendido, al pasar fente a ls puerta de Miss Kenton, lo que istaba realmente en juego? Estamos nosotros condenados, ‘como él, a darle vueltas incesantemente a lo que pass y a en- tender los momentos determinantes sélo cuando ya nada se puede cambiar? Stevens, al fin y al cabo, capt6 algo eracial sobre las decisioneséticas: que pueden ser momentos crucales en la vida de una persona, Pero esto lo aprendié demasiado tarde, El esto de este libro procede a partir de supuestos dis tints: que Tos hombres y mujeres reflexivos sf pueden recono- cer los momentos determinantes a medida que acurren, y que cl evidado y la reflexidn influyen grandemente para resolver Jos bien

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