JUAN SCALITER
DELIA IGLESIAS
eola, me llamo Coralina
y vivo en un pequefio.
pueblito que se llama Leer. De
verdad que existe, buscalo en un
mapa, esta en Alemania. Y no,
aca las casas no estan hechas de
libros, ni los techos de hojas. Las
fuentes no dan letras en lugar de
agua, ni hay murallas en forma
de enciclopedias. Es un pueblito
normal con una plaza, una o dos escuelas, una estaci6n de tren y
una biblioteca, la mia. Pero no trabajo de bibliotecaria, al menos no
solo de bibliotecaria. Soy médica de cuentos desde hace mucho,
pero mucho tiempo. Tanto que a veces tengo que usar anteojos y
anteoidos, porque también estoy un poco sorda
Las doctoras de cuentos recibimos historias que estan
enfermas, en las que las y los protagonistas (piratas, princesas,
descubridoras, misicos y monstruos) no recuerdan qué tienen que
hacer, con quién tienen que pelear o si se enamoran de alguien, y
les devolvemos la memoria.
Para ser doctora de cuentos hay que estudiar Respiracion de
paginas, Cirugia de tapa dura y tapa blanda, Alergia de personajes
(hay algunas princesas que no quieren ni ofr hablar de principes
y otras a las que no se les pueden mencionar los sapos) y
Otorrinolaringologia de letras. Me especialicé en una parte de la
curacién de libros: soy pediatra de cuentos, los conozco a todos
desde que nacen.= or eso recuerdo
perfectamente qué pas6
después de aquella noche, cuando
todas las caperucitas del mundo se
reunieron para escribir a historia
que siempre quisieron protagonizar,
Apenas terminaron con el relato, los
personajes de los cuentos clasicos,
los gigantes y los dragones, los
cerditos y las brujas, los lobos y los
enanos, se fueron a dormir a sus
libros, mientras Cenicienta segufa
dando wueltas alrededor de un
mapa, murmurando en vor baja.
Aligual que Caperucita, Cenicienta
también tenia primas por todo
el mundo: hubo en Finlandia,
Vietnam, Francia, China y una, la
de Grecia, lleva contandose desde
hace mas de dos mil afios. Por eso
cuando se sent6 a mi lado y me
‘Yo también quiero escribir
mi historia”, le contesté: “Ya tenés
una. Y es mejor de lo que imaginas.
Solo tenés que recordarla”.& ue entonces cuando se
me ocurrié una idea:
“Voy a hacer algo nuevo le
dije mirandola a los ojos-.
Caperucita pudo reescribir
su historia porque llamo
a todas las caperucitas
del mundo. Nosotras no
tenemos tiempo para eso,
asi que vamos a viajar a
todos tus cuentos. Nadie
tiene que verte -le dije
mientras abria un cuento
muy antiguo y le daba un
\lamador magico para que
pudiera abrir otros libros-.
Te doy también un cuaderno,
para que escribas la historia
que quieras”.
Cenicienta me mir6 con
una sonrisa, me abraz6 y,
como alguien que salta a un
precipicio de almohadas, se
dejé caer en el primer libro.
Y desapareci6.“gsadupdsap 2s e119P0)
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anbsog wn any 1A anb oaawusd 0camino hasta el castillo.
Ahi, oculta detrds de una ventana,
dno un paje del rey
Pad ea
Na OMe
nea
vec)[hada me senalé una ventana: allf estaban
mais hermanas mostrandose los vestidos que
usarian por la noche. Entonces entré yo
(bueno, la yo del cuento), ellas ocultaron las telas y se
pusieron a bailar alrededor vaio, mientras se refan de
wi.
~4Qué ves? -me pregunté el hada.
-Que no me gusta lo que estdn haciendo -le respondi.
El hada se dio una palmada en la pierna.
-No, eso lo ve cualquiera. Miré mejor, bused las
diferencias.
“gLas diferencias? gEntre quiénes? éDiferencias de
qué? Pensé todo eso pero no me animé a preguntarle
nada y miré fijamente lo que ocurria. Me concentré
mucho y cuando ya me iba a dar por vencida, lo vi
~iLos colores! -grité.
El hada me hizo un gesto de “silencio” con el dedo en
la boca, como el cuadro de las enfermeras.
~Exacto. Tus hermanas son de colores mas tristes,
apagados... igual que el castillo 0 tu madrastra. Eso
es porque son partes nuevas de la historia. Las partes
originales tienen colores mas brillantes, no cambian
con el tiempo. Por eso, cada vez que descubras un
color apagado, toma nota y la historia recuperara
parte de la original. Ast llegards a la primera vez que
a eseribieron -dijo et hada madrina, y desapareci6.parte de sus tareas de rey, todas las maanas
las ciudadanas que
tenfan un problema e intentaba resolverlo. Al cumplir los 4
ios pude presenciar la primera sesién de la corte. Estaba ansiosa
Mis hermanas llevaban mucho tiempo como consejeras y habian
demostrado su gran inteligencia
El primer dia de mi hermana mayor, Clara, ayudé a descifrar ur
ja aios impedia que una joven pudier
‘a condenado a casarse con quien él dijera a menos
que otra persona resolviera el texto que habia dejado escrito. ;Pobre
ella! Tenia un padve que la trataba como a una princesa, no co
nosotras que tenfamos tantas libertades... Pero habia muerto
el
poco tiewy 0 quedaba un aio para que se cumpliera e
la soluci6n. El texto decta: “En este dia dejo firmado
namorado que di a el nombre de mi hija y su color
vido demostrara ser lo suficientemente inteligente como para
otorgarle su libertad. De lo contrario se casaré con tal y cual’?
Bueno, no decia tal y cual el texto, pero era letra por letra lo que
ponia. Y nadie sabia su nombre ni su color preferido. No habia modo
de hablar con ella 0 con otro familiar. La joven parecia condenada
Y mi hermana encontré la soluci6n, la anica posible si uno lee el
texto atentamente, y la por fin fue libre.
Atos después supinos que se convirtié en la primera mujer en ir a
la universidad y terminar un doctorado.i otra hermana, también se enfrenté a un dilerna en su
primer dia. El salén de juicios del palacio tenia mds de
30 metros de ancho y 60 de largo. Y estaba casi todo
erto por una alfombra. Mi padve desafié a sus asesores a que le
trajeran un violin que colocé en el centro de la alfombra... pero no
podran pisarla. Lo hizo porque confiaba muchisimo en la capacidad
de Camila; sabia que lo resolveria y asi demostraria a su Consejo
que merecia ocupar el lugar (porque a los consejeros no les gustaba
nada que se siguieva llenando de mujeres, sobre todo porque
eran més inteligentes que ellos!). Uno a uno, los hombres fueron
pasando. Los visires de Persia usaron catapultas, los nobles de ttalia
construyeron alas de tela, los consejeros de Egipto intentaron con
larguisimas caiias de pescar y los de China se subieron uno encima
del otro, armaron torres humanas de 30 metros de alto y se
dejaron caer justo encima del violin. Pero lo dnico que consiguieron
fue: unos chichones tan grandes como una corona real, volver a su
asiento con menos dientes y asegurar a los gritos que mi hermana
tampoco podria hacerlo
Entonces ella se levant6, hizo una reverencia a mi padre, otra a
los consejeros y se dirigié a un extremo del saldn. Se detuvo justo
donde comenzaba (a alfombra y comenzé a enrollarla hasta llegar
al violin. Todos se quedaron con la boca abierta y aplaudieron su
solucién.ero ese ako me tocaba a mi y no sabia si sevta capaz de ser
tan inteligente como mis herraanas.
Después de que se presentaran varios casos sencillos, llegé nai
oportunidad. El dilerna era el siguiente: los cinco hij
wmolino habian heredado de su padre un cofre con cinco monedas
de oro, una para cada uno. Pero su padre habia dejado escrito
que habia que dividirlas en partes iguales... y una debia quedar en
el cofre. No se podian cortar, limar ni cambiar. {Cémo se podian
dividir cinco monedas entre cinco, pero una debia quedar en el
cofre? Nadie podia resolverlo. Me acerqué a mi padre y le susurré
la respuesta: cada hermano se quedaba con una moneda y el quinto
se llevaba la moneda y el cofre. Todos aplaudieron mi respuesta,
incluso la asamblea de sabios, que me dio la bienvenida con gritos
de alegria.
A partir de ese dia, las hijas del rey fuimos conocidas como las
tres sabias. Reyes de lejanas tierras llegaban a preguntarnos por
diferentes dilemas y a cambio nos traian libros, nos ensefiaban sus
idiomas y nos hablaban de sus costumbres.
Pero también desperté la envidia de otros que decfan que un rey
sin esposa, que dejaba que sus hijas ocuparan altos cargos, era un
hombre muy débil y no debia reinar. Y los que pensaban asi no
tardaron en aliavse ¢ invadir nuestro reino: capturaron a nuestro
padre y nos desterraron. Asi, las tres terminamos en lugares
diferentes y lejanos.ardamos algunos aios en volver a encontrarnos, pero
Prefiero sequir contandoles sobre cosas lindas. Sélo puedo
decirles que no necesitamos la ayuda de hadas madvinas
ni de sapos encantados; pudimos salvarnos solas y reencontrarnos
(el mismo dia y a la misma hora iy sin habernos puesto de
acuerdo!) en el bosque que rodeaba nuestro antiguo castillo. Mi
hermana mayor fue abandonada en el Pais de los hielos y logré
escapar desafiando al rey de los glaciares con una adivinanza, Mi
otra hermana fue desterrada a un desierto y tuvo que aprender
el lenguaje de las raices y las dguilas para encontrar la salida
Yo fui encerrada en las Mil y una grutas, un laberinto en las
Profundidades del planeta. Alli viven seres'que no conocen los
colores, le temen al humo y su moneda son los cwentos: pagan tod
0 que compran con historias. Asf logré escapar de allt, con relatos
que nadie habia escuchado jamds
Cuando las tres hermanas nos reunimos, pedimos la ayuda de los
reyes leales a quienes hablamos aconsejado, formamos un ejército
y fuimos a rodear el castillo para solicitar una audiencia con los
invasores. Es cierto que éramos muchas y muchos més que ellos y
nos hubiera sido facil vencerlos, pero una guerra hubiera sido cruel
y lena de muertes
Esta vez, la respuesta no era tan sencilla para mi y mis hermanas
Entonces recordé el instrumento magico que me habia dado
Coralina y se me ccurrié una idea. Las tres decidimos, pese a que
las veinas y reyes se opusieron, que debiames ir solas al castilloAlli nos recibieron los tres
monareas enemigos. Sonrefan
convencidos de que les pediriamos
una tregua, pero no contaban con
nuestra valentia (ni con nuestro
secreto).
Sin demnasiadas vueltas, decidt
actuar: Saqué el aldabacadabra
que Coralina me habia dado y les
dije: “Seran los malos mas malos
de todos los libros, a quienes
las nihas y los nimos no querrén
nunca, y s6lo cuando entiendan
el dato que hicieron, podran
reescribir su historia’: Y entonces,
desaparecieron.
Ast fue como rescatamos a
nuestro padre y recuperamos
nuestro reino. Pero la historia que
les contamos a nuestros aliados
fue muy distinta
Cuando lo liberamos, mi padre ya
no queria llevar la corona, por lo
que nos cedié el trono para que (o
comapartiérarnos.Br
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“Volvimos a crear la asamblea de sabios y
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que sumarnos a cualquier persona que
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Pena dianasuando ya era viejita, le conté la historia de mi vida a una mujer,
Maria de Francia, quien fue la primera que la escribié y wae puso de
nombre Cordelia. No le dije nada del aldabacadabra, pero si le hablé
de wi padre, de mis ganas de participar de un baile y del hada madrina. A ella
se le ocurrié que el hada madrina podia ser mi aliada, inventé lo de una
calabaza que se transforma en carroza, los ratones en caballos y lo de recoger
las cenizas de la cocina. Finalmente, como nos gustaban tanto los enigmas, se
le ocurrié uno cuya clave son los zapatitos de cristal. Para resolverlo hay que
entender que ningiin ser hunmano usaria un zapato de cristal: son incdraodos,
se pueden romper y es facil lastinnarse con ellos. {Por qué los llevaba puestos?
Porque para caminar por la vida hay que ir con la verdad: puede ser
incémoda, se rompe facilmente y puede-herir. Pero quien la lleva, se distingue
facilmente de las y los demés.on el paso del tiempo, otros (sf, hombres)
se apropiaron de la historia y la
cambiaron tanto que casi consiguieron
que yo también cambiara.
iHasta wn
nombre! Mucho tiempo después de que
me pusieran Cordelia, a un escritor se le ocurvié
rebautizarme, porque siempre estaba cerca de
un fresno, y en inglés a este Arbol se [0 conoce
como drbol ceniza: de ahi viene Cenicienta
Cuando Cordelia termin6
‘su relato, todos los
personajes de los libros,
que llevaban horas
despiertos, escuchando
su historia, comenzaron
a aplaudir. Cordelia se
puso de pie, agradeci6
con una reverencia y se
encerr6 en su libro con una
sonrisa nueva... después
de cambiar el titulo de su
cuento a “Anti Cenicienta”.EPiLOGO
No te preocupés, el epflogo no es otro personaje de
nombre raro, sino un capitulo que sirve para explicar
algunas cosas de la historia. Todos los personajes,
desde Maria de Francia, hasta Cordelia, su padre y
sus hermanas, existieron. Y, excepto por los dilemas,
casi todo lo que has leido es cierto, También sus nombres y la historia del fresno o
arbol ceniza.
La clave para el primero de los dilemas, el de la mujer sin nombre y sin color, esta en la
oracién que dice: “En este dia dejo firmado que el enamorado que descubra el nombre
de mihija y su color preferido...”. Si unes las palabras El y enamorado, formas Elena
y Morado. De hecho, incluso Elena es real. Su nombre completo era Elena Lucrezia
Cornaro Piscopia y a los 7 afios ya hablaba espajiol, latin, griego, hebreo, francés y
Arabe. Su padre la envié a la Universidad de Padua para que aprendiera mas atin y el
25 de junio de 1678, delante de cientos de personas, se convirtié en la primera mujer
en conseguir un doctorado universitario.
Te animas a resolver un enigma mas? iAsf podés armar tu propio Consejo!
Tenés 10 sacos con diez monedas cada uno. Cada moneda pesa 10 gramos... excepto
que en una bolsa hay monedas falsas que pesan menos: 9 gramos. iCémo saber cual
es el saco de monedas falsas si solo podés usar una balanza una sola vez?
Respuesta
0025 OAB}20 J9 Ua 0420 UP}IRy a} |S A O1aD19} 12 UB S91} UB}IeY 9] 15 ‘ODeS LaWILAd Ja Ua
upisa sesjey sepauow se] ‘owes un eye; aj 1270} osad je IS “Zalp e seBay| erseY }se A
01013} |ap $84} ‘opunfas jap sop ‘o2es sawLId Jap epauoW Eun eZUE|eq ej Ud SBUOdiOtro Anticldsico para disfrutar!
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oy
"347
)
ordelia (el verdadero nombre de
nuestra Anti Cenicienta) quiso
escribir su propia historia. Y para
lograrlo, de la mano de la abuela
Coralina, revisit6 los cuentos de todo el
mundo que la tienen como protagonista, y
que se vienen escribiendo idesde hace dos
mil afios!
Asi, Cordelia descubrié que no tenia nada
que ver con la famosa sirvienta enamorada
de un principe azul, sino que era una
guerrera inteligente y muy lectora, que
descifraba acertijos para salvar al pueblo...
Y no solo eso, nunca sufrié bullyng por parte
de sus hermanas, sino todo lo contrario:
hicieron alianza entre las tres para rescatar
al rey, su padre, con su sabidurfa ancestral.
ZY el zapatito de cristal? Un misterio que se
develaré al final del cuento...