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LAS IDEAS DE GAMBOA {y Chavez] rAvinseneala} Reyes) SOCIEDAD DE ARTE MODERNO (SAM) Pablo Picasso Mascaras Mexicanas Manuel Alva’ Obras Maestras México Visto por sus Pintores 2 Bravo la Pintura Europea en México ATENEA POLITICA (Alfonso Reyes) ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA La museografia. Nuevos conceptos El futuro ideal de la museograffa en México El museo moderno como instrumento de ensefianza de la historia El nuevo disefio de las exposiciones Nota para el disefio de la galeria Examen de admision para la Escuela de Museografia Plan de estudios para Museologia Aplicada y Museografia 100 maravillas de México El arte mexicano en peligro FERNANDO GAMBOA Y SU PARTICULAR VERSION DE MEXICO (Carlos Molina) BONAMPAK Hacia Lacandonia Diarios de la Selva Tragico accidente Resultados de la expedicion RESCATE DE OBRAS COLONIALES Primer informe Ultimo informe UNA ESTETICA CINICA (Michel Onfray) LA MUSEOGRAFIA. NUEVOS CONCEPTOS Fernando Gamboa ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA (2) eQué es museogratia? Segin una antigua definicién del diccionario de 1a Lengua Espaftola, el Museo es “el lugar donde se reGnen curiosidades cientificas y artisticas", y Museografia “la descripcién sistendtica del contenido de los museos", estas definiciones, susceptibles de opiniones, provocaron en algunos artistas del siglo pasado la opinién de que “entre los musedgrafos y los historiadores puros, las obras de arte t4n en peligro de ser transformadas en especimenes cientificos”. En nuestros dias, las palabras del diccionarie s6lo son aceptable: en parte, puesto que 1a funcién del Museo ha canbiado radicalmente. EL Mueo es en 1a actualidad no s6lo el lugar donde se alojan, archivan, conservan y exhiben colecciones de objetos, sino que ademas, es el medio més elevado para proporcionar goce estético, estimulo cultural e informacién, al gran piblico, asi como facilidades de investigacin al especialista. No todo esto surgié con 1a creacién de estas instituciones. El Museo moderno es en consecuencia una unidad viva de cultura y un instrunento para la popularizacién de aquella; por consiguiente, no debe solamente de acuerdo con su idea primitiva, reunir y exnibir obras excepcionales (eliminamos de una buena vez la idea de curiosidades), sino todas 1as cosas que integran la vida del hombre y el mundo que 10 rodea. Solamente de este modo pueden llegar a comprenderse las obras més notables producidas por 1a humanidad. Esta es, entre otras, la diferencia bésica que existe entre el Museo moderno y “el gabinete o bodega de antigliedades". En el Museo moderno se procura mostrar no el objeto raro, sino por el contrario, el objeto comin, e1 que da una idea de cémo vivieron y viven los pueblos, sin que naturalmente deba incurrirse en proscribir la exhibicién de 10s objetos extraordinarios, tales como reliquias de héroes y todo aquello indicado para reconstruir el perfil de un personaje necesario al entendimiento de la vida historica de un pais. Si se trata de un Museo de arte, si debe procurarse, en beneficio del piblico, de los artistas y de la voluntad cultural de 1a Naci6n, exhibir obras de primerisima importancia, ya sean propias de dicha Nacién, ya pertenecientes a otras culturas y civilizaciones. Por su parte, el moderno concepto de 1a museografia nos inclina a afirmar que se trata del arte y la ciencia de impartir a los objetos dispuestos en un lugar determinado, 1ldmesele Museo o sala de exposicién, monumento histérico o parque nacional, un sentido 1égico y racional, tun aspecto atractivo, sencillo y capaz de emocionar y deleitar al espectador, y sobre todo, de dar una interpretacién justa, comprensible y estimulante de los valores que encierran las diversas realizaciones de 1a actividad humana en todos sus dominios, de las miltiples riquezas del mundo mineral, vegetal o animal, de las ciencias exactas o aplicables, de 1a tecnologia, del arte y de la historia, de las reservas naturales y de las bellezas englobadas en los parques nacionales de un pais. ALOUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA La técnica miseogréfica —que convierte estos principios en realidad- a la que me referiré con mayor amplitud en el momento debido, se ‘esencialnente en 1a capacidad de valorar las obras que van a exponer de proyectarlas hacia el piblico por medio de un justo empleo de 1a I color, disposicién y forma; en fin de los varios elementos que tré de explicar a ustedes 1o mas amplianente dentro de 1o esquematico de charla como 1a que hoy tengo el gusto de sustentar ante ustedes. (2) Breve historia de 1a museografia Mientras la museografia, como ciencia y arte, con sus leyes y reglas, no puede atribuirsele una antigiledad mayor que 1a del siglo, Museo es una institucién cuya ereacién se remonta a antiguos tiempos. En el Siglo V los griegos ya poseian pinacotecas, y en Roma se reu tesoros artisticos con objeto de consignar las relaciones conercit de 1a capital con otros pueblos, amén de exhibir los productos de conquistas. Otros tesoros fueron asi misno reunidos y expuestos con similares en la Edad Media. Durante el Renacimiento esas preseas se transformaron progresivs en coleceiones que constituyeron, a titulo privado, los tesoros de principes de la Iglesia y de los soberanos. Asi se crearon enbriot y Alemania. Pero fue en museisticos, en Ttalia, Inglaterra, Est ciudad italiana, en Florencia, donde los Médicis, patronos del arte, formaron grandes colecciones que posteriormente asumieron un cardct pablico. Francisco I y Richelieu posibilitaron otro tanto en Francia, Ambos fueron grandes coleccionistas y el primero de ellos creo un f En el curso del Siglo XVIII dichos acervos hicieron accesibles a los visitantes. He aqui la aparicion en Europa, fen tiempos modernos, de los primeros museos y de los primeros esfuer: de difusién conocidos. La galeria Luxemburgo, en Paris, se abrié al piblico en 1750, y en Inglaterra, el Museo Briténico se inauguro en 1751. Otro hecho de gran trascendencia en este sentido, tuvo lugar all abrirs en 1793 las puertas de 1a gran Galeria del Louvre, en 1a que figuraban 500 cuadros. Incidentalmente, lo mismo en Inglaterra, que en Francia, movimiento de popularizacién de los tesoros artisticos destinados antes gabinete de pintura ‘al goce exclusive de sus propistarios, coincidié con 1a publicacién de “ta Enciclopedia”. El misno Diderot es quien traza en el tomo IV de I Enciclopedia, en un articulo dedicado al Louvre, el programa preciso del Museo Nacional Prancés. Son pues un filosofo positivista y liberal, y tuna Conveneién Nacional Popular los que inyectan vida al Museo, con una) bellisima declaracién que es el inicio del admirable movimiento actual de la miseografia en los paises mas adelantados. Dijo asi Diderot prop6sito de la creacién del Museo del Louvre: “Este debe ser el recreo de los aficionados al arte y debe servir a todos los artistas. Deberé estar abierto a todo el mundo y cada quien podré contemplar Librenente un cuadro, una estatua o un dibujo. Este monunento ser nacional, y no volveré a pertenecer a quien prive al pueblo el derecho de contenplar Libremente las obras”. De esta suerte, creé entre 1792 y 1794 la Convencié ncesa tod: los tipos de museos que actualnente existen en aquel pais, realizando el mensaje de los enciclopedistas: los museos de arte, los cientificos, ia natural, los técnicos, los histéricos, los museo! os monumentos franceses, los arqueolégicos, los jardines boténico zool6gicos, los museos de tradiciones populares, siendo recobrados pc artistico que se incorporan al estudio popular y se convierten en miseos pablicos con 1o que se contribuye de modo insuperable al desarrollo del arte, de 1a ciencia y de la técnica industrial, y con lo que se integra a fisonon{a cultural de Francia Otro tanto puede decirse de Italia, en donde como se sabe, funcionar més de 600 museos. Cabe agregar que en ese pais 1a museografia actda intensamente en otros medios de expresicn, en los que deseo hacer hincapié. En Ttalia, la museografia realiza exposiciones especialmente organizadas sobre asuntos artisticos, cientificos, industriales y de otros géneros y crea el clima apropiado para el mantenimiento prodigioso del cardcter de las ciudades, consciente de que cada casa, puente o plaza, representa el sentimiento de 1a historia de 1a Nacién. Esta conciencia nace de toda Italia un verdadero museo viviente que respeta las premisas museogréficas a que me he referido. Su merito alcanza a conpaginar debe encontrar en su propio beneficio, en las caracteristicas de 1a civilizacién industrial de nuestro tiempo. La historia contemporénea de los museos de Europa y de Norteanérica demuestra que existe una nueva conciencia, cada dia més extensa, de las relaciones que deberia haber entre el pablico y el museo, que se basa en que el papel social de éste ya no puede ser el de pablico, convirtiéndose en centro active y dindmico de 1 método seguido en casi todos los museo: a esa indispensable compenetracién ha abarcado destii reformas radicales en la estructura de los edificios para hacerlos més comodos y funcionales; se ha dado gran importancia a la instalacién las colecciones con el objeto de acabar con las indigestiones que producian las as; he proporcionado explicaciones necesarias para la plena comprensién de las colecciones, ya sea mediante cédulas, o acompafiantes responsables; ha dado una importancia primordial a la educacién infantil con la colaboracién de especialistas, quiene han encargado de mostrar las colecciones a los nifios; se ha inyectado eva vida al museo por medio de exposiciones y conferencias; se ha ampliado el limitado programa tradicional de la institucién ‘cd exhibiciones cinematogréficas y con filmoteca: n integradas, coi departamentos de disefio teatral y de danza, de disefio industrial, estigacion estética y publicaciones de arte, conciertos de misica, clases de pintura para nifios y adultos y servicios especiales para el (3) Historia ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOORAFIA En suna, 1a orientacién museogréfica contempordnea revela una nueva actit de respeto al piblico, lo mismo al no enterado que al culto, en oposi @ 1a antigua postura de indiferencia y hasta desprecio, caracteristica algunos museos de otros tiempos. £1 de hoy es una institueién consci de su responsabilidad social, de su categoria de centro vital de enseflanzs, de estimilo y de elevacién del nivel cultural popular. Este programa de reorientacién no se lleva a cabo solamente en I museos de ciudades importantes; en los Estados Unidos, por ejemplo haj més de mil museos, asociaciones y otros centros de cultura sosteni por el esfuerzo particular u oficial, que trabajan intensanente en es sentido. Lo mismo, en escala proporcional, puede decirse de los paises de Buropa, particularmente Italia y Francia. de 1a museografia en México. Periodo pre-moderno En México se organizé un Museo por vez primera en el afio de 1774. El Vis Bucareli orden6 que el Archivo de la Nueva Espasia, incluyendo 1a valios coleccién de antigiiedades reunidas por el explorador italiano Boturi (un cédice célebre lleva el nombre de este investigador milanés), concentrara en 1a Real Universidad como “el lugar més apropésito 1 uso de sus noticias”. Bn 1761, el Rey Carlos 111 de Espafia designé a don Jerénino Antoni Gil, académico de San Fernando, de Madrid, como director de 1a Real casa de Moneda de México, encargéndole 1a direccién de una escuela grabadores. Fue tal el nimero de solicitudes de ingreso de estudiantes que, con 1a aprobacién del Virrey Mayorga se inauguraron en ese nist afo les clases en una escuela provisional, instalada en la misma antigua) casa de Moneda, ubicada en el angulo noreste del Palacio Virreinal. Por Gltimo, en 1783, e1 mismo Rey Carlos III acord6, en vista del éxito piblico obtenido por aquel centro de arte que se creara 1a Real Acadenia de San Carlos de Bellas artes. Como las exigencias pedagégicas del plan de estudios, requerian toda clase de modelos, don Jerénimo Antonio Gil demand6 del Virreinato que se trajeran reproducciones de las esculturas conservadas en la academia madrilefa de San Fernando, peticién que no logr6 satisfacer por el t: que manifestaron en la época de que s6lo “una providencia milagross) podria librarla de los posibles riesgos que se aventuraria le coleceiéa| en su viaje Afios més tarde, en 1971, don Manuel Tolsé, el gran escultor y arquitecto, logré traer a México la admirable colecci6n, todavia ed exhibicién en las galerias de San Carlos, de copias de originales que se encuentran en el Museo del Vaticano, siendo esta coleccién de copias juno de los acervos escultéricos mas completos y mejores que existen en el mundo. Por otra parte, en 1785, el activo director Gil trajo a México una buena coleceién de grabados, y habia formado la Galeria de Pintur aproximadamente con un centenar de obras, entre ellas algunas de pintores espafioles como Ribera y otras de italianos. Un afio después ya se ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA go muchos otros cuadros, dos mil estampas y algunos centenares de dibujos. En 1821 el caudal pictérico de las Galerias de @ Academia aument6 extraordinariamente con las obras provenientes de EL enriquecimiento de 1a pinacoteca con valiosos cuadros de pintura mexicana antigua, comenz6 verdaderamente en 1855 debiéndose tal cosa a la magnifica labor de José Bernardo Couto y de don Echeverria Particularmente, Couto trabajé sin descanso ha a ayuda de religiosos encargados de conventos, muchas de las mejores obras de la pintura de 1a colonia. Su excelente politica de estimilo a la formacién de 1a pinacoteca le llevé a solicitar del gobierno que @ dirigiera a los provinciales de los establecimientos religiosos para que estos entregaran los cuadros a la Academia, los cuales previa calificacion y avaldo “serian pagados al contado y sin dilacién alguna”, Couto invité a los religiosos a que ayudaran a la formacién de esa coleceién, diciéndoles “que asi como fueron los primeros en introducir cultivar 1a ilustracién civil y religiosa en los primeros tiempos de la conguista de estos paises”, estaba seguro “que no habiendo declinado ese espiritu, seran hoy los que con gusto contribuirén a la realizacién del proyecto". més adelante sugirié que se estableciera un canje de pinturas efecutadas por los estudiantes mas distinguidos, en compens: cuadros que las Congregaciones religiosas diesen para la formacién de a coleccién. Ofrecié inclusive pinturas murales en pago de cuadros y de este modo logré por fin reunir las mejores obras de los Echave, de Arteaga, de los guérez, de Ramirez, inclusive de pinores europeos, espafioles, italianos y flamencos. Considero interesante referirme a estas noticias de la historia de nuestras colecciones piblicas, porque, a fin de cuentas, forman el inicio del desarrollo del concepto miseog ‘fico moderno, y porque los esfuerzos beneméritos de nuestros antepasados en beneficio de 1a cultura popular, exigen no s6lo nuestro reconocimien sino que ofrecen experiencia: muchas veces aprovechables, pese a que los tiempos han cambiado. En oros campos de la formacién de miseos se origina cono antes dije, ¢ en que el Virrey Bucareli confisca 1a coleccién de antigledades formada por Boturini y 1a mezcla con los documentos del Archivo de la Nueva Espafia. Esta primera coleceién fue posteriormente enriguecida co valiosos objetos arqueolégicos, nuevos documentos hist6ricos y ejemplares de plantas, animales y minerales de la Nueva Espaiia, constituyéndose e: el afio de 1822, el “Conservatorio de Antigiiedades” y el “Gabinete de Historia Natural” que se instalaron en la Universidad de México. Desde aquella época, estas instituciones recibieron el denominativo de Museo Nacional, pero fue en 1831 cuando el Congreso Nacional decreté le creacién de un “Establecimiento Cientifico” que Llevaria el nombre de luseo Nacional Mexicano’ Bl incipiente Museo permaneci6 en la Universidad hasta 1865, aflo en que, por acuerdo de Maximiliano fue reorganizado y pasé a ocupar el edis 1a Casa de Moneda, ed ficio donde tuvo su asiento hasta ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEQGRAFIA 1786 1a Real Academia de San Carlos de Bellas Artes. El Museo rec! muchisimos donativos aportados por particulares, especialmente materia de reliquias hist6ricas y se enriquecié igualmente con obj arqueolégicos cobrados en exploraciones efectuadas por personal propio Museo y por investigadores nacionales y extranjeros. Bn materia artistica las colecciones de 1a Academia de San Carl siguieron en aumento; sus directores adguirieron pinturas y escult: en algunas exposiciones efectuadas en Europa, asi como a coleccionis mexicanos. También compraron a los pintores nacionales, la mayor de ellos adelantados discipulos de la Academia. Bn 1909 siendo Secretario de Instruccién Publica Don Justo sie: ordené que los ejemplares que formaban 1a seccién de Historia Nacic fueran separados del Museo Nacional para constituir el Museo de lis Natural que desde entonces funciona en las Calles de Chopo. A partir esa fecha el Antiguo Museo Nacional Mexicano recibié el nombre Nacional de Arqueologia, Historia y Etnografia. Por entonces se fi también el Museo Geolégico en las Calles del cipré: Como esfuerzos privados en las historia de nuestra museografi cabe sefialar los que efectuaron en forma por demés desinteresada, ilustres coleccionistas mexicanos: uno de ellos Don Ranén Alcaa minero de Guanajuato, que logré formar una extraordinaria colecci de artes decorativas, menores e industriales mexicanas y extranjei que pasaron a propiedad del Museo Nacional de Historia y que hoy exhiben en algunas de sus salas. 1 otro coleccionista es don Maris Bello, précer poblano que integré un riguisimo museo abierto al pabli Y que a su muerte doné a la ciudad de Puebla, disponiendo que f adninistrado por un patronato mixto formado por sus herederos, al: particulares y el Gobierno del Estado. Realmente este museo pri es el Gnico que puede citarse en México hasta nuestros dias, cone que ha efectuado el esfuerzo mas consciente, metédico y desinteress ¥ que denota por tanto el alto espiritu civico que poseia su nots organizador. (4) Campo de accién de 1a museografia como decia, es my vasto el campo de accién de la actual museografi Pone al alcance de la inventiva, de la ciencia, del arte y de industria un programa basado en lograr la educacién de las masas. mismo persigue la consecucién de una técnica que ensefie a ver, a mirar y a comprender las etapas de la transformacién del espiri hunano, y sus creaciones, asi como las riquezas de la naturaleza. Indudablemente que el eje, el punto focal de la museografia el museo y éste puede ser variado en sus temas como lo exigia integracién bien diferenciada de los distintos aspectos de la vida lun pueblo en todo lo que es susceptible de visualizarse y de expresi objetivamente y aun de 1o que siendo eminentemente subjetivo es cf de ser transformado por la museografia en formas l6gicas, arnénicas estéticamente dispuestas. ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA Vemos pues, que gracias a un inteligente empleo de esta especialidad es factible convertir en materia mseistica el arte plastico, el musical, el teatral, el arquitecténico y aun el cinematogréfico; este dltimo no en el sentido limitado que ofreceria un simple acopio del proceso de su desarrollo en su aspecto industrial, sino en el de la historia de sus esencias més activas, es decir, de las obras de arte cinematogréfico ereadas por el genio humano dignas de delatar el cardécter de una cinematografia nacional, los perfiles psicolégicos de un pueblo, sus preccupaciones sociales, etc. No es menos Limitado el campo del museo cientifico, tan variado como 10 son lag ramas que componen el eje de la ciencia. su utilidad educativa y social es sunamente importante para un pais. El hecho de disponer de un verdadero Museo de Antropologia, es decir, del que brinde una leccién objetiva de 1a historia del hombre desde su origen hasta nuestros tiempos es algo esencial, toda vez que su mensaje constante redunda efectivamente en 1a mitua compenetracién del hombre en todas 1a latitudes y contribuye a desvirtuar una serie de lastres y prejuicios de toda indole: raciales, religiosos y sociales. Este Museo debe ser el tronco fundamental de 1a actividad museogréfica, porque en él debe ofrecerse al pueblo 1a historia de la cultura humana. Los museos de higiene son indispensables en todas partes y los de industria son necesarios, porque dan idea del desarrollo de los procesos de produccién que orientan y transforman 1a economia de tun pais. Son unos mdos pero elocuentes indicadores de 1a légica que debe presidir las corrientes manufactureras. Otro tanto puede decirse de los museos de ciencias naturales en los que se hallan las fuentes de estudio de los productos que ofrece 1a naturaleza fen sus dominios terrestres y maritimos; en sus observar explicaciones generales, mientras que los técnicos descubren en ‘las el pueblo tiene que fellas fuentes de estudio de la vida del cosmos y del Micro-Cosmos. Otro vasto campo de accién de la mseografia lo forman los museos para la infancia, en sus dmbitos los nifos no solamente deben ver, sino jugar y experimentar, adquirir técnicas que prueben sus aptitudes personales, apreciar 1a belleza, comprender 1a época cientifica y estética en que vivimos. Ahi deben capacitarse para participar activa @ inteligentenente de la sociedad de 1a cual son miembros. Bsos museos, creados recientemente en algunos paises, son objeto de gran interés por parte de las autoridades educativas de muchos lugares y actualmente han adoptado sus beneficios institucionales tan importantes como el Museo Metropolitano y el Museo de Brooklyn de Nueva York. Por Gltimo, las bellezas naturales de un pais protegidas, por las leyes que las eleva al rango de parques nacionales, son también materia museogréfica, si se considera que no debe existir en naciones desarrolladas tuna concepeién primitiva de tan importante campo de 1a riqueza nacional, puesto que como los jardines zoolégicos y botdnicos, deben ser, ademas de lugares de ornamentacién, puntos de reservas y centros de estudio de 1a flora y la fauna de una regién del mundo, en las que muchas veces se basen partes importantes de las economias nacionales. (5) Cometido ALOUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA Ni hablar de las posibilidades que ofrece 1a historia de una que se imponen como necesarias para la mejor integracién de su nacional. Ese museo ayuda a los ciudadanos a hacerse de una de su realidad historica, y de sus tradiciones. una con esfuerzos que es 1a herencia de responsabilidad que la Patria para subsecuentes generaciones, para que 1a veneren apro\ dolorosas experiencias, sus hechos: heroicos y sus errores, ea de perfeccionamiento. profundo de la museografza Mis 1a museografia no es simplemente el arte y la c organizaci6n de los objetos y de su exhibicién. No sélo se algo tan importante como ensefar el arte, 1a ciencia y la hi fel método visual, nos es tampoco un arte y una ciencia en ajenos @ 1a enseflanza del asunto que trata de exponer, ni arte que se recrea narcisistamente con alardes virtuosos di su espiritu de servicio de los temas que presenta. La mis algo mis que eso. Como todo arte y ciencia que se desarrollan preconcebido, en este caso el de educar, tiene que poseer ut principios éticos y estéticos que infundan a esta actividad profundo. Este cometido no puede desatenderse de aquella orientaci de cualquier arte y ciencia el vehiculo sensible y diferenci valores morales de un pueblo y de su concepto de 1a vida. Bn consecuencia, 1a museografia tiene més deberes que los el clasificar objetos, adquirirlos, conservarlos y exhil hallarse indivisiblemente ligada al programa de un pais det este Gltimo respecto, 1a mseografia rebasa los limites y como arte y ciencia se brinda al servicio del concepto una etapa histérica determinada en el mundo, coadyuvando @) conocimiento. Por esta razén la museografia ha evoluci convertirse en un instrumento cada vez més universal. De museo haya ampliado su visién y que, tras haber nacido como) gabinete, haya llegado a los formidables alcances de la que 1a equipara a la biblioteca y al cinematégrafo, que la 1 medio estimulante y difusor mis intenso de las diversas culturales. Bs preciso considerar el esfuerzo que ha representado, técnico a que se ha apelado para realizar 1a colosal operae! necesario hacer durante la Gltima guerra en Europa, con evacuar debidamente millares y millares de obras producidas de la historia para arrancarlas de los peligros de 1a Bs pues 1a conviccién profunda de servicio a la cultura museografia, 10 que hace de ella uno de los instrunentos més expresién universal de nuestro tiempo. Conviene por ello que poco de aquellas cosas de ideal programatico que alientan el esta actividad. Desde luego 1a miseografia, al cuidar de 1a ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA de los tesoros de 1a cultura, tiene de los mismos el més profundo y sensible sentido de sus valores. Seria absurdo pensar que no se requiere de cultura para apreciar debidamente el significado de una obra de arte, con todo 1o que ella contiene de valor de creacién, de relacién de pueblo y artista, de los enpefios y esfuerzos de conocimiento que hubieron de adquirirse para madurar por fin el fruto artistico. Si el misedgrafo de cualquiera de las ramas que integran esta carrera no acta sincronizado con los valores imponderables de 1a tradicién, no puede discernir, no digamos ponderar, las excelencias de una obra como la “Gioconda” o de una delicada figurilla maya de la Isla de Jaina. Ni siquiera las sabria cuidar con eficacia como un simple bien material, tal como puede hacer con lo suyo un guardian de institucién bancaria. ‘Al comprender e1 museégrafo el valor de la herencia cultural, por lo que ella tiene de definitiva en el tiempo, le es preciso apreciar asimismo, en todo su significado, la importancia del esfuerzo de 1a creacién contemporénea, para que al fungir como vinculo entre el artista y el hombre de ciencia y el pueblo, sepa sacar de esta relacién entre creadores y contempladores 1a luz necesaria que alimente 1a continuidad del esfuerzo creativo. La museografia contiene, pues, las fuerzas definitivas que en un momento determinado son capaces de convertir sus actividades en una fuente fecunda de estimulos a la creacién. ¥ al referirnos a este fenémeno de creacién que comprende los diferentes ingredientes de indole moral y social que participan de la obra creada, 1a museografia no puede tampoco descuidar el sentido de 1o nacional. Todas las manifestaciones del arte y de la ciencia constituyen necesarianente expresiones vigorosas de dicho espiritu nacional. #1 arte porque es el més fiel interprete del medio fisico, y de las inguietudes del espiritu del pueblo; 1a ciencia porque aunque aspira a servir al hombre en sentido universal, generaimente se inspira y extrae su fuerza no 8610 de las experiencias y de los progresos que en su rama se hayan obtenido en otras partes, sino de las necesidades innediatas del pueblo donde trabaja el cientifico, el cual no puede menos que estar circunscrito a realidades materiales del medio en el que trabaja. za esencia nacional de la museografia como arte se deriva del hecho inmediato de que sirve al desarrollo de 1a cultura y del espiritu de tuna nacién dada, de las que ese arte es una manifestacién a la que hay que atribuir en primer termino la expresién de naturaleza nacional, sin lo cual puede dudarse de su legitimidad. Hay una visible relacién de causa y efecto en lo que vengo diciendo, en apoyo de esa esencia; un marco puede comprometer un contenido, y asi la museografia debe ligarse a tal grado al espiritu de la cultura del pais, que sin negar el valor intrinseco de las expresiones artisticas o cientificas de otros lugares, tiene que ser tan legitimanente nacional en su carécter y servicio, como lo es 1a expresién que est ponderando y difundiendo. No quiere decirse que la museografia desconozca los valores de 1a universalidad, contrarianente mis siendo 16gica y hunananente 1a condicion 21 ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA de nacionalidad anterior al concepto universalista, su preocupsc: lo nacional debe situar: arte se trata. Veanos hasta que punto en el programa de un museo modernanente orie! se definen por si solos estos conceptos tan subjetivos. Recono: estudiar les puntos de accién de un museo, en que forma se desp: orientacién a que me vengo refiriendo. Hablaremos de las finalidades del Museo Nacional de Artes Pléstic México, en cuyo ambito nos encontramos. en primer lugar sobre todo si de materi 1.-Desarrollar un fuerte movimiento educativo popular que a elevar el nivel cultural del pueblo mexicano. 2.-E1 Museo debe ser para los artistas un centro din: estudio e investigacién y de orientacién estética. 3.-Un centro capaz no s6lo de revalorizar el arte del ps estimulando e1 actual, sino de ayudar a la comprensi los nuevos valores y de servir de inspiracién al mov: artistico del pais, 4.-Debe reunir, custodiar y conservar los tesoros artistic 5.-Crear las posibilidades econémicas para que el arte ne quede en el pais para el provecho del piblico mexicano. 6.-Cooperar para que México sea uno de los més import centros artisticos del mundo. 7.-Proyectar todas las actividades artisticas del mseo en escala nacional, reflejando, asimismo, las actividades artist de los Estados en 1a Capital. 8. Aunque parezca una redundancia de los puntos que figuran en el pi que me he permitido comentar en este momento, deseo concretar 10 se dice de la funcién de un museo en su triple aspecto de educ: creaci6n y difusion, debe también decirse de 1a misién de 1a miseog! stablecer un continuo intercambio internacional. en su conjunto. Efectivamente, no tiene sentido crear un arte que no se pi difundir. Es tan absurdo como pensar difundir un arte que aun no creado. Tal vez suene esto un poco paradéjico, pero el hecho es arte no se desarrolla si no se difunde y estimula aproximando a él masa del piblico que forma se base social. Por otra part un pi Ro se educa ni se hace sensible mientras no frecuente y se faniliad con las manifestaciones artisticas. Esta situacién es bien conocida’ nuestro pais, y michos serén los que recuerden que fue preciso que artistas encontraran una estrategia difusora de su arte para que el misnos pudieran conquistar mejores condiciones de trabajo que re en el desarrollo de su labor de creacién. La educacién y el estimilo a 1a creacién y 1a difusion del son indispensables y si se separan se limitan; por 1o que es pI consignar que la museografia, en su cometide més profundo sizve integrar mejor los conceptos de tradicién o herencia cultural, ereacién con su correspondiente sentido de 1o nacional y universal, © ambién como social en el més amplio sentido del té poque el miseo como 1a biblioteca, es para todos sin distincién de clas aspira a ser aprovechado por todo el pueblo, como lo dijo Diderot al crear 1a: bases que dieron vida al Museo del Louvre. Técnica de la Museografia. Ta museografia ha llegado a tales alcances que afortunadan en dia existe una correlacién de fuerzas entre lo: mundo. A tal efecto se ha creado el Consejo Internaciona que depende de 1a UNESCO, encargada de difundi: erereeinas dl tacaitel cuerpos técnicos que trabajan en los museos, los pr en materia técnica se van encontrando al perfeccionarse nétodos EL consejo publica una revista titulada “Museum”. Se trata de una lente publicacién mestral que se edita jo los auspicios de la la actividad en esta rama en 1 as partes del mundo Al referirme a la técnica de la museografia dentro de los términos brevisimos de esta charla pido a ustedes me sea pe manera muy somera. Es imposible hacer hincapie, por ejemplo os problemas que en materia arguitecténica contempla hoy 1a museografia Desde luego debe decirse que es muy reciente el hecho de haber mpuesto el estilo moderno en los edificios; asi mismo es reciente el conceder importancia al continente y a su funcionalidad, de atende: debidamente tanto las div la eléctrica, las de calefaccién y de ventilacisn mento no poder referirme en todas sus partes a la integracién de tun museo moderno. Seria my grato para mi dar a conocer a ustedes el programa formilado para el nuevo edificio del Museo Nacional de Artes Plasticas que se espera construido pronto en México. Por el veriam como se disponen sus partes y que importancia tienen ellas entre s. etc. Prefiero entrar en materia refiriéndome a algunos deta se técnica museogréfica que darén a ustedes una idea de su complejidad empo no me permite tanpoco referirne expresanente a los problemas centro de esta clase y los otros museos Los capitulos més importantes de la actividad del museo sc museo como parte central fija y més compleja y la galeria de expo: periédica o eventual, y dado que 1a organizacién de exposicion el aspecto que con mayor frecuencia, se presenta me referiré a ella en forma preferente Es preciso reconocer que después que se as form académicas de los viejos © incipientes museos, en los que las obras je anontonaban sin preocupacién de ningin género, como si el valo: wera bastante al entendimiento del pablico, a icionado répidamente demostrando que es dificil apreciar el art. y comprender su belleza © importancia cultural con una organizaci¢ ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA Hay entre el museo y 1a galeria de exposiciones eventuales diferene! esenciales de formlacién programética y de realizacién material. museo debe dividir sus colecciones en tres partes: la primera representativa, que se exhibird en salas llamada de interpretacién que servir para llevar al piblico a la répida y mayor comprensién conjunto de obras que le esperan més adelante. Dichas salas, prepars para el andlisis de una obra individual, de una escuela o de un per: artistico 0 historico determinado, estableceran las relaciones entre arte y otro y serviran para estudiar la técnica y las, y las clidat de las obras situdndolas en el espacio y en el tiempo. £1 si contingente se exhibiré en las salas generales, ya sea con el prop6sit puro de brindar e1 goce estético © bien con el de presentar en su magnitud el desarrollo de una escuela o de una cultura. La ter parte deberé guardarse en salas de estudio o bodegas perfectane acondicionadas, a las que sélo tendran acceso los especialistas pues fellas se alojaran aquellas obras que sélo interesan al estudioso. Por el contraric, 1a exposicién eventual s6lo duraré unos cu dias o semanas, acaso meses y su razén es 1a de exhibir un tena 1a obligacién de tratarlo exhaustivamente, ni seguir el médulo desarrollo de las colecciones fijas ni el de 1a estructuracién requiere la institucién. La exposicién exige en canbio, su cart temporal, mayor vitalidad, desde el punto de vista de 1a capacite inmediata y directa de los visitantes, sin que el montaje requ tanta formalidad, aunque reclama en cambio mayor énfasis y mucho efectisno. Para atender a los problemas de 1a técnica de una exposicién event se requieren principalmente las siguientes medidas de organizaciéat tema. Ante todo el organizador de una exposicién deberé conocer tema a fondo; analizarlo escrupulosamente; deberé calibrar sus val artisticos y situar las obras en eu época y ambiente; deberd asi comprender su estilo y la sociedad que lo produjo. Tomo al azar un ejemplo de esta orientacion 1a exposi retrospectiva de la obra del grabador mexicano José Guadalupe P que cronolégicamente fue 1a primera que se presenté en México en términos. Esta exposicién habria desmerecido notablenente fuera marco de su época y estilo tan particulares. ahi figuraron fotogrs y documentos personales del artista. Obras que situaban al es} fen a 6poca de Posada, preparéndole para la mejor comprensin obra cuyos valores técnicos y estéticos aparecian acentuados un desarrollo cronolégico y una serie de amplificaciones fotost reveladoras de 1a monumentalidad del arte de Posada. ‘Tratandose de una exposicién de arte escultérico prehispinico t © maya, por ejemplo, es indispensable un conocimiento profundo Panoramas histéricos y culturales a aquellos contemporéneos, organizacién y presentacin correcta de dichos tenas. La naturaleza fisica de la obra que se exhibe, determina el ti instalacién que debe darsele. Segin ella, puede dividirse las n tres tipos: pintura; blanco y negro; ya se gratia, dibujo o grabado; y volGmenes; como escultura, maquetas de arquitectura, etc cada uno de estos tipos presenta problemas de instalacién. Los he rdenado de lo simple a lo compuesto, pues adems de la problema de valorizacién estética de cada obra, que es lo sustant la buena museografia, es més facil exhibir que el arte blanc Aciles que 1a e jean los voldnenes. BL tiTuLo enfrentaré a un problema que entra del resultado jenturoso de toda exposicién: el titul El titulo es la sintesis del tema, es la clave, es el que provoca el estado de anino del espectador. La exposicién de la obra de Posada fue presentada en la ciudad de Chicago con el tit Posada, Grabador del Pueblo Mexicano” (Posada Pintmaker to the Mexican People). Por ello, al entrar al instituto de arte de Chicago, el vieitante se disponia innediatanente a darse cuenta del poderio alucinante de la belleza de México, interpretada por el creador del grabado mexicano. “Un siglo del LOCAL ¥ CIRCULACION 1 local presenta casi siempre dificiles problemas al forma, sus proporciones, su tamafo y su luz, contribuyen acierto 0 al desastre. aunque, pese a dichas dificultades, existe un facto: que determina el éxito de toda presentacién artistica; la composicién. Al saber componer le es f4cil exhibir con acierto, dar movimiento y unidad 1a obra, imponiéndose a las malas condiciones del local Este determina el desarrollo del tema y ambos obligan 1a circulacién, la que debe conducir al espectador adecuadanente. Es una grave falt: 1 que el espectador ignore por dénde ir, en qué debe fijarse, si de dandoles unidad. Las variaciones del trayecto deben tener un sentido subrayando los puntos vitales con anécdotas y sorpresas que llamen la atencién del visitante sucesivamente hasta au salida 1A seleccién atinada de las piezas que integran una exposici6n, tomando ntribuyen al acierto de una exposicién. Es preferible mostrar con propiedad cincuenta obras, que cien sin mas criterio que el de la dad fay que ay que calcular sin encarifiarse demasiado con el tema. Por otra parte, el organizador tiene que presentir el tipo de piblico, adivinar su capacidad emotiva, y su preparaci6n, para n ALGUNAS IDEAS SOBRE La MUSEOORAFIA EL COLOR Bl ambiente de una exposicin y 1a exaltaci6n de las cualidades plés de una pieza se logra, en buena parte, gracias al color que se los fondos y a los valores téctiles de las superficies. De 1a indol las piezas expuestas depende 1a seleccién de los colores, los que emplearén caprichosamente, con un falso sentido decorative ni vida propia, divorciada del cardcter y estilo de los objetos exp A este respecto 1a EXPOSICION DE MASCARAS MEXICANAS organizada Sociedad de Arte Moderno, dio lugar a soluciones que ejemplifican 10 Hubiera sido absurdo intentar una laboriosa reconstruccién real: argueolégica de resultados pobres e inevitables; hubiera sido traténdose de exhibir la escultura prehispénica que 1a integraba, quedaba sugerir interpretativamente el ambiente del arte expuesto, como inspirarse en los colores de las antiguas mscaras, modific y transforméndolos con un sentido moderno y dramético, para pGblico, no una pseudo-reconstruccién, sino una atmésfera mod clave que determiné e1 color de los fondos de aquella exposic! sugirié una placa de barro con una méscara que representaba a la azteca de la primavera, policromada con los colores clAsicos mex del pasado- el azul turquesa, el rojo almagre, el ocre, el bis gris-; cldsicos porque han sido inmortalizados en el gran arte antiguo; clésicos porque nacen de la tierra mexicana y han influ la posterior estética del pais. Estos colores que parecian un hal eran los mismos de as obras de 1a exposicisn. Una vez decididos los colores se pasa al estudio de su manejo: brillo e intensidad, de su intencién tranquilizadora o excitante, reiteraci6n deliberada, y también al empleo de materiales, tradici © completamente nuevos, para crear sensaciones téctiles, como por e el uso de papel 1ija como fondo para una piedra altanente pul: telas; maderas; vidrios; etc., todo lo que, en suma, pueda surgir imaginacién creadora del organizador. LA TLUMINACION La iluminacion, tan vital en toda exposicicn, tal vez sea las fases de la museografia que han recibido menos atencién. general, los musegrafos tienen que conformarse con luces que ilk de arriba abajo sin intencién especifica. La iluninacién ideal indudablemente del tipo de arte que se exhibe, ya sea pintura, blanco y negro o voldmenes. Cada problema de iluminacién es especi obstante, podriamos decir que existen dos tipos: general y parti Za luz general, cenital, dificil de lograr suave y armonios es adecuada tratandose de ciertos tipos de exposicién, especialne pintura. Por otra parte, cuantas exposiciones 1a eligen, frac: falta de una iluminacién parcial que concentre la luz en el obj interesa observar. Por ejemplo: la escultura de la Coatlicue, ill ordinariamente, dir‘amos pasivamente por 1a luz general de la Monolitos del Museo Nacional; luz no contrastada, que no penetra profundidades que el escultor imprimié a su obra, que no extrae los grandes valores drandticos y plasticos de esta extraordinaria obra. ar, la buena Sujeta, pues, a muchas circunstancias largas de enum iluminacién —fuorescente 0 incandescente- es aquella que, sin herir los ojos del espectador, exalta las cualidades de 1a obra con discrecién, sin destruir las formas, ni iluminar con exceso los colores. Exist el de la simetria y el de la n dos métodos de composicicn asimetria. La eleccién de cualquiera de ellos es un problema que han debido resolver los artistas de todos los tiempos. Muchos nos inclinanos por el método asimétrico por considerarlo dinamico y vital, ya que el simétrico nos parece decorative y f4cil. La instalacién asinétrica da a uuna exposicion un enorme dinamismo que el piblico siente inmediatamente El espectador responde con viveza al movimiento que resulta de la colocacién asimétrica de los objetos y se lleva una impresion visual mucho mas vigorosa que la que produce el arreglo simétrico, que es un Respecto a otros valores subjetivos, propios de 1a instalacién, tengo una teoria del comportamiento de los visitantes bien experimentada a través del conocimiento de muy diversos piblicos. Con el propésito de crear en el espectador emociones intensas y una estrecha comunién entre €1 y 1a obra expuesta, divido en tres partes el material por exhibir, en un orden de jerarquia artistica, colocando algo de lo més importante al principio, 10 secundario a la mitad del trayecto y, al final, el resto de lo mis interesante. Sin pretender establecer una regla fija a este respecto, he anotado ciertos fenémenos que acepto como guia. El espectador entra en una exposicién:.palpa el ambiente; se situa en el lugar, capta al momento el modo general de 1a exposicién. Por su Gindmica natural, tiende a irse a la izquierda, pero por hébito va a la derecha, fenémeno que debe tenerse en cuenta al fijar los puntos visuales de una exposicién. Generalmente, no ve las rimeras piezas, pero éstas le dan 1a t6nica de la exposicion, y, vistas algunas obras, empieza a sentir la importancia de 1o expuesto, 1a que muchas veces lo detiene y lo hace volver al principio. Continia saturéndose del ambiente, que ya lo ha atrapado. Al final es menester instalar obras importantes para que se lleve 1a mis positiva y elevada imp resign de lo que acaba de ver. Claro que todo esté sujeto al tema. No siempre es posible este desarrollo. En 1a EXPOSICION DE MASCARAS MEXICANAS, donde nos propusinos ensefiar este aspecto de 1a gran escultura mexicana a través de veinte siglos y de todas las culturas del pais, hubo el imperative cronolégico de principiar con lo arcaico, seguir con lo olmeca, lo teotihuacano, ode cada tema a lo colonial y 1o moderno. Pero dei asi estaban ordenadas las piezas ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOORAFIA ELEMENTOS COMPLEMENTARIOS Los elementos complementarios de una exposicién son aquel sin opacar el interés del tema central, contribuyen a darle realidad. Por ejemplo: el empleo de plantas; de muebles, para ambiente o para descansar, indispensables para la recuperacién e intelectual del visitante; 1a colocacién de cédulas explicati cumplen un importantisimo papel educativo, toda vez que ellas guién informativo de 1a obra expuesta. Los textos seran breves y sencillos, sin tecnicisnos, a menos 1o exija 1a naturaleza de 1a exposicion. Las cédulas son parte de la instalacién y del ambiente moderno que se quiere dar, por veces aparecen amplificadas fotostaticamente a gran tamafio, en negros y grises. En todos espiritu moderno que prevalece en la exposicién. La plantas ornamentales fungen a veces como un trasunto que al espectador por cada regién de donde provienen los temas exposicién. Bien realizados, estos detalles ayudarén; mal hechos, ‘toda 1a composicién. tos detalles debe intervenir el ‘CARTEL ¥ caTALoco como aspecto final, pero tan importante como cualquier otro, @ Publicidad que ha de dedicarse a la exposicion. El catdlogo es el testimonio permanente del acontecimiento; que cuenta al final, lo que se proyecta en el tiempo. Una que haya durado dos semanas o dos meses, seré recordada indefini por un catélogo. Las dems formas de publicidad deben ser, disefio y realizacién, consecuencia del estilo de 1a exposicién. # Seré reflejado en todos los elementos: concepcién del montaje, colores, iluminacién, instalacién, etc., hasta el cartel y el cat Lo que aqui he tratado fue hecho superficialmente por neces: que la materia abarca micho m4s de lo que se puede decirse en el de una conferencia, dictada solamente para sefalar cémo en el ambiente mexicano se concede 1a mixima atencién a lo que se refiere organizacién de museos y exposiciones. (7) Realizaciones de 1a museografia mexicana moderna. ‘Los adelantos de este movimiento de museografia moderna mexicana ft a114 por los aiios de 1930, los sefiores Gabriel Fernéndez Lodet Francisco Diaz de Leén. Mas tarde los también pintores Carlos Romero y Carlos Mérida. Estos magnificos artistas realizaron programas de exposiciones, e inclusive fundaron algunas salas de La actividad museogréfica no fue enfocada sin embargo, en magnitud sino hasta 1940, allo en que el Estado realiz6 1a organizac! una importante exposicién mexicana en el extranjero y posterior trabajo de exposiciones se arraigé ya de manera profunda en este P: En 1939, el presidente cérdenas al crear el Instituto Nac: Antropologia e Historia, le don6 como patrimonio E1 Castillo de Chapult para que se instala 4 el Museo de Historia. Este gesto de comprensisn residencia presidencial y otras oficinas pablicas a en tun museo el recuerdo de nuestros grandes muertos m patria y en uno de los lugares mis bellos del pais. cuando esto sucedia era Director del Instituto Nacional de Antropolog © Historia el Lic. Alfonso Caso, quien dispuso que 1as colecciones d antiguo Museo Nacional Mexica distribuyeran Llevando a Chapultepe las colecciones histéricas y dejando en el edificio de la calle de la Moneda las colecciones arqueoldgicas. El Museo de Historia fue reorganizado e inaugurado en 1944 y el Museo Nacional de Antropologia fue reorganizado e inaugu El Museo Nacional de Artes Plésticas que funciona en este Palacio, fue una de las primeras realizaciones del Instituto Nacional de Bellas os antecedentes de este museo de arte se encuentran en los esfuerzos jue ya vimos, se han venido haciendo desde el siglo pasado, al forma ademia de San Carlos. En 1934, cuando se inauguré a pinacoteca de 1a te Palacio, se dedicaron para migeo una gran sala y cuatro sal del piso superior. Se organiz6 también por Roberto Montenegro, una coleccién de arte popular a la que se titulé “Museo de Arte Popular”, jue se instalé en el ala norte del edificio ,de 1a que tuvo que cambiarse por carencia de medics de transporte al piso en donde se abiéndose instalado posteriormente en el quinto piso del lado principa del edificio. Esos son todos loa antecedentes del Museo Nacional de arte que por fin funciona normalmente ofreciendo un panorana st6rico del arte moderno y contemporéneo y un programa activo d exposiciones que tienen por objetivo estimular artistica y actividad entre 1944 y 1946 de 1a Sociedad de arte no, algunas durante el siglo actual no ser una obra de trasce a n materia de exposiciones el ndmero ha ido aumentando. Si es menorabl por su valor hist6i co en la exposicién que se hizo en 1 Dr. At aan \imero crecié entre los afos de 1928 a 35. Siguié en aumento del 39 al 43; crecié notablemente de 43 a 46 y de este afo a la fecha la Capital y en los Estados, han celebrado en casi cuatro afios 150 exposiciones: 120 en tal, 25 en los Estados y 5 en el extranjer ero la actividad de siciones es notable; cada dia se inauguran wevas galerias que celebran exposiciones en todas partes de 1a ciud: ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA Se han organizado formalmente cuatro museos, tres en la Capits de Antropologia, el de Historia, el de Bellas artes y el de Religioso. También debido a la iniciativa privada se creé un obras coloniales en 1a Basilica de Guadalupe y otro en las Vizer En los Estados ee organizaron el precioso Museo de Arte Popul Patzcuaro; el bellisimo de Morelia llamado Museo Regional Nichosc de Guadalajara, el de Querétaro, el de Puebla, el Arqueclégico de y el Moderno de Hermosillo, Sonora. Funcionan como miseos diversas zonas arqueolégicas en el pais, cono también monuments artisticos coloniales como los conven Tepotzotlén, Acolman, Santa Nénica en Puebla y muchos otros, y perfeccionado otros centros similares ya existentes. ‘Aunque empiricanente, se han ido formando una serie de especiali que atienden estos museos y hace pocos afios se hizo el esfuerzo de la carrera de museografia, cuyos primeros frutos son los técnicos trabajan en este Museo de Bellas Artes y otros en el de Antropol en el de Historia. Se ha promovido un verdadero interés nacional y ain internaci de parte del piblico que asiste a los museos y a las exposic! interés que ha ido creciendo a gran prisa. Recuerdo que hace diez se consideraba que un museo o una exposicién estaba bien asist: tenia un piblico de cien personas por dia. £1 afio pasado 1a expos nacional de Diego Rivera recibio un piblico inaugural de cuatro personas y durante el primer mes tuvo una asistencia de mis de tres personas por cada dia. La exposicién duré seis meses y fue visit por medio millén de personas. Incidentalmente, esta exposicién cincuenta mil pesos su organizacién, y un piblico que pagé tr centavos los tres primeros meses devolvié cuarenta y tres mil pesos concepto de visitas a la misma. Los pblicos extranjeros reclaman al arte mexicano, constant se reciben invitaciones para ver exposiciones de arte mexicano en Estados Unidos, Sud-Anérica y Europa. Los periédicos han ayudado mucho a la tarea de divulgar el interés os miseos y de las exposiciones y ellos mismos han terminado por o suplenentos y paginas de arte dominicales. Se han publicado innumerables revistas y libros de arte plistico Jo que va del siglo, an cuando todavia no esta escrita la His General del Arte Pléstico Mexicano y la bibliografia sobre los asuntos que tienen interés artistico sigue siendo escasa. El Estado ha interesado més cada vez y los gobiernos recientes, han reconocide importancia que tiene el museo para 1a vida cultural de México. La actividad museogréfica ha contribuido a enaltecer al artista a estimular el formidable movimiento plastico contemporaneo y al todavia sigue siendo my dura la vida de los artistas en el sentido Ja lucha que tienen que sostener para crear su obra, sin embargo se ha ganado en los Gltimos aflos con 1a cooperacién prestada por museografia para la divulgacién del arte. ALGUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA Se esté formando el coleccionista mexicano. Muchos distinguidos connacionales han integrado ricos acervos pictéricos. ‘Aunque el Estado, durante lo que va del siglo, no ha gastado 1o debido en adguisiciones artisticas, seré una verdadera sorpresa para ustedes ver lo que el Gobierno actual ha invertido en obras, con 1a exposicién que se prepara titulada: “Adquisiciones Recientes hechas por el Museo Nacional de Artes Plésticas” (8) Analisis y critica To que es un hecho es que en lo que va de nuestro siglo se ha formado la conciencia del valor de la museografia y de 1a utilidad del museo, aunque todavia sea incipiente nuestro desarrollo. Creo que es micho 10 que se ha hecho con los escasos recursos, con que se ha contado, pero la verdad es que prevalecen deficiencias, algunas de las cuales no es preciso remediarlas con recursos econémicos, cono por ejemplo 1a confusién que todavia existe respecto de la naturaleza de las colecciones de nuestros museos y de la funcién que corresponde a cada uno de ellos. Para ser conereto diré que a mi juicio el Museo de Antropologia no lo es tipicamente de esta materia. Se hallan ahi contenares y millares de obras de arte antiguo mexicano que deben encontrarse en el Museo de Arte y no sirviendo de ilustraci6n a temas que podrian comentarse con algunos ‘ejemplares nada mas. £1 museo de Historia tiene también colecciones a mi juicio mal ubicadas. Mas todo lo anterior se comprende al estudiar la historia que ha seguido 1a distribucién de las colecciones que todavia no estén bien clasificadas ni armoniosanente distribuidas’en funcién de nuestros museos nacionales. considero meritorios los esfuerzos que nuestras instituciones han hecho en tan pocos afios contando con tan escasos elementos materiales e inclusive con tan curioso criterio administrativo. Para que ustedes tengan una idea de los tropiezos que surgen en México en este campo, voy a contarles una anécdota curiosa. Cuando se inauguré el Museo Nacional de Historia con sus 16 salas, éstas se instalaron de todo a todo con 1a cantidad de cuarenta mil pesos; més el acto inaugural del museo, por demés solenne y brillantisimo e indudablemente necesario, toda vez que iba a consagrar el nacimiento de esa institucién, costé bastante mis de la cifra destinada a la instalacion. Para terminar considero fundamental hacer un resumen de las falas que aun observamos en este campo de trabajo, entendiéndose que més que una critica lo que deseo hacer al referirme al asunto, es hablar de lo que considero el futuro ideal de 1a museografia en México. Hacen falta edificios y lo mis necesario para México es construirlos especialmente proyectados para el alojamiento de las colecciones de los museos de cualquier materia de que se trate; ello no solo en 1a Capital sino en las principales capitales de la Repiblica. Es urgente la readaptacién de edificios apropiados para cierto tipo de museo, como por ejemplo de una época histérica determinada, diganos la vida de México durante 1a Colonia. Es riguroso establecer una verdadera ALOUNAS IDEAS SOBRE LA MUSEOGRAFIA Proteccién de los monumentos histéricos y artisticos y del total ciertas poblaciones, que como unidades son verdaderas joyas artisticas éNo les parece a ustedes que Pétzcuaro es una ciudad tan bella extraordinaria como puede serio Siena en Italia? No puede haber museos sin obras. Es urgente la adguisicién de ob Para el enriquecimiento de 1as colecciones, 10 mismo en materia artes plésticas que de historia, ciencias naturales, etc. Es prec que ustedes sepan que este Museo Nacional, cuya labor a nadie escapa, Posé sino un solo cuadro del desaparecido maestro José Clemente 0: Los mejores ejemplares de nuestro arte contemporéneo se han ido extranjero. La conciencia museogréfica esta llegando tarde para evi 1a evasion de estas obras. Otro tanto debe decirse de la historia y las ciencias naturales. Debe hacerse una verdadera intensificacién de la vida museogré fen todos los Estados de 1a Repdblica, fundando para el efecto must regionales. Debe prepararse un personal especializado en los diversos asi del manejo de un museo. Hasta hoy unas personas poseidas de espit: abnegado y entusiasta han entregado sus vidas a esta actividad, recibir una recompensa adecuada. Debemos estimularlos y crear téen! Para que prospere esta actividad, tan util a la cultura. 3s riguroso ampliar las actividades de los miseos existentes convertirlos en activos centros culturales de nuestra comunidad, y ltime, se hace precisa una orientacién general para activar ! nivel de calidad en las instalaciones de las colecciones de todos museos; para delinear cuidadosanente sus funciones; para garanti tun verdadero sentido pedagégico en la exposicion de las colecci tal como lo exige un pais como el nuestro, donde desde 1a épocas Cortesianas mis renotas, el talento artistico ha sido particula: Prodigio, siendo el indice mAs claro y esponténeo de 1a fuerza espirit de nuestra Nacién, a la que no obstante su pobreza material el arte tuna personalidad vigorosa e inconfundible ante el mundo.

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