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nº5

Sumari
1. Editorial
Patronat FNB

L’adolescència actual: els seus símptomes, les seves experiències. President Dr. Ramon Morera i Castells
Director de la Divisió d’Atenció Primària de
l’Institut Català de la Salut
Algunes consideracions teòriques
1. Consuno de tóxicos en la adolescencia: Experiencia o síntoma? Secretari Sr. Alfredo Landman
Elvira Guilañá Director General de l’Editorial Gedisa
2. Acerca del consumo de tóxicos en la adolescencia.
Jorge Sosa Vocals
3. El precio de una errancia. Sra. Mai Felip
François Sauvagnat Amat Ires, SA
4. Desposesión y tendencia antisocial.
Dr. Francisco Luque Mellado
Patricia Lombardi
Director dels Serveis d’Atenció Primària de Nou
5. Tratamiento preliminar de la adolescencia en institución. Barris
Silvia Grases, Francisco J.Burgos
Dra. Núria Torres Esparza
La clínica Directora de Servei Sanitat Respon, Sistema
1. Ritos de iniciació i experiències de separació. Introducció d’Emergències Mèdiques, SA
L’equip educatiu davant d’un crisi.
Jordi Pros
2. Intentos de suicidio, tentativas de separación.
Graciela Esebbag
3. Adolescència: noves eleccions.
Dolors Arasanz

Investigacions Clíniques
1. La influència dels factors psicosocials en l’evolució del TMG.
Aleix Caussa
2. Notas sobre el Trastorno Mental Grave infantil y adolescente.
Clara Bardón

Connexions
Responsable de Publicació: Graciela Esebbag
Altres institucions Comitè de Redacció: Francisco Burgos, Susana
1. Trabajo en grupo con chicos que padecen afecciones psicocomáticas y Brignoni, Graciela Esebbag, Paloma Gonzá-
crisis de angustia. lez, Patricia Lombardi
Equipo de Investigación del Hospital Pedro Elizalde Secretària: Ma. Reyes Nogués
2. Los pequeños grupos y la subjetividad. Del espejismo al nombre propio. Disseny i Maquetació:
Equipo de Investigación del Hospital Pedro Elizalde Ariel Reinhardt
Montse Codina
Impressió:
Altres discursos
Limpergraf, S.L.
1. Una pràctica educativa en el camp de la inserció laboral amb malalts mentals.
Xavier Orteu, Rosa Antolín Adreça FNB: Pg. Valldaura, 214, 1a. plta.
08042 Barcelona
Tel. 93 276 16 95
Polèmiques Contemporànies www.f9b.org
secretaria@f9b.org
1. La parentalidad homosexual: nuevas formas de familia. Entrevista a Anne Cadoret

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Editorial
L ´Interrogant, la publicación periódica de la Funda-
ción Nou Barris, es fruto de un trabajo colectivo
que continúa con la intención de reflejar la actividad
Las graves crisis adolescentes revelan, en muchos casos,
una patología severa enmascarada o no tratada en la in-
fancia. En Investigacions Clíniques publicamos dos
clínico-asistencial, de docencia y de investigación de- artículos que ilustran nuestro trabajo en el programa de
sarrolladas en nuestra institución, así como el trabajo atención a los Trastornos Mentales Graves en la infancia
que realizan otros profesionales en el campo de la salud y la adolescencia -puesto en marcha el curso pasado- El
mental y de otras disciplinas vinculadas con el mundo primero de estos textos, es un extracto de la investiga-
de la infancia y la adolescencia. Por este motivo en el ción llevada a cabo conjuntamente con la Universidad
apartado Conexions incluimos el resultado de algunas Autónoma de Barcelona y el apoyo de la Fundación La
de esas reflexiones y trabajos, en particular aquellas Caixa. El segundo, a partir de la intervención clínica,
experiencias institucionales que pueden aportarnos una muestra la dificultad del tratamiento de estas patologías
enseñanza por la invención de su propuesta asistencial. y la necesidad de establecer un trabajo continuado con
Además hemos dado un espacio a los que, desde otros todos los profesionales implicados en cada caso.
campos del saber, pueden aclarar algunos de los interro-
gantes que surgen en nuestra práctica diaria. Polèmiques Contemporànies es un nuevo apartado que
incluimos en este número con la intención de abrir en
Como en números anteriores, publicamos también, al- nuestras páginas temas candentes que provocan discu-
gunas de las ponencias presentadas en la precedente siones y controversias teóricas. En esta edición hemos
Jornada de Debate, que llevaba por título Consum de elegido uno que hoy en día genera un fuerte debate: La
Tòxics en l’ adolescència: experiència o símptoma?. parentalidad homosexual. Nuevas formas de familia.
Esta Jornada, realizada en octubre del 2003, generó
en nosotros la idea de tomar como eje temático la ado- Con el presente número queremos transmitir, una vez
lescencia, cuya problemática está hoy en el centro de más, nuestro modo de entender y abordar el trabajo
las preocupaciones sociales, asistenciales y políticas. clínico-asistencial en la red pública: una clínica que
La adolescencia, etapa de crisis y transformaciones, se promueva la escucha, que entienda los síntomas como
inaugura con la pubertad: el cuerpo experimenta cam- una expresión de los malestares y como las respuestas
bios radicales y se entrecruzan la sexualidad infantil con particulares de los sujetos. Con frecuencia, estas res-
la adulta. Estos cambios, en las culturas tradicionales, puestas sintomáticas se manifiestan en los diferentes
están simbolizados con ritos de iniciación que facilitan espacios sociales del niño y del adolescente. Es por eso
a los sujetos elaborar el pasaje del estado infantil al que creemos imprescindible el trabajo en red, es decir la
estado adulto. En nuestra cultura, progresivamente, coordinación de todos los profesionales que intervienen
estos ritos se han ido borrando y nos encontramos que en el abordaje de los problemas de cada uno de los
algunos sujetos intentan colmar ese vacío con actos de sujetos que denotan un sufrimiento psíquico. A la vez, es
transgresión que responden a la necesidad de concretar en la profundización teórica y en el intercambio, donde
la separación de su mundo infantil. En nuestra sociedad, podremos encontrar las claves que nos permitan enten-
que promueve la satisfacción inmediata y donde las der las particularidades de nuestra época y los nuevos
figuras de identificación son múltiples, esta separación, síntomas que ella genera.
toma muchas veces la forma de actos extremos como
adicciones, intentos de suicidios, violencia, acciones
delictivas. Los artículos publicados aquí sobre este Carmen Grifoll- Directora de la Fundació Nou Barris
eje, muestran desde la teoría, la clínica, la educación Graciela Esebbag – Responsable de L’Interrogant
y el trabajo interdisciplinar las diferentes experiencias
llevadas a cabo desde cada campo para abordar esta
problemática.

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Acerca del consumo de tóxicos en
la adolescencia (*)

Jorge Sosa.
Psicólogo. Psicoanalista.
Centro de Salud Mental Infantil y Juvenil de Nou Barris

L a adolescencia es una etapa de


la vida en la que se produce una
re-actualización del encuentro - siem-
en su infancia a la pregunta por el
deseo. Estas respuestas constituyen
las condiciones de acceso a la satis-
situación de riesgo”, sólo conduce
al desconocimiento de la causa
real de dicho comportamiento y a
pre traumático - con la sexualidad. facción sexual adulta y por lo tanto la vez cierra el camino a cualquier
Se trata de una re-actualización también pueden ser los obstáculos a solución verdadera, dejando sólo las
porque este encuentro se produce la misma. falsas salidas, como por ejemplo la
normalmente en la infancia, como El consumo de drogas en la intervención exclusiva sobre el orga-
ya demostró Freud. La maduración adolescencia debe ser abordado nismo o la reeducación moralizante.
orgánica y la presión derivada de teniendo en cuenta este contexto, A continuación voy a esbozar
las expectativas del entorno so- de lo contrario nos extraviaremos. una breve tipología - que no preten-
cio-cultural pondrán a prueba las Identificar rápidamente al sujeto de ser exhaustiva - de los “usos” del
respuestas que encontró el sujeto como “enfermo”, “adicto” o “en tóxico en la adolescencia, una serie

14 Algunes consideracions teòriques


Los “ritos de iniciación”, propios de las culturas tradicionales,
tienen la función de sancionar mediante una altamente simbólica,
elpasaje del sujeto del estado infantil al estado adulto

extraída de los casos atendidos en lescentes que vienen a suplir ese También hay jóvenes para los
los servicios de salud mental de la vacío y que muestran la necesidad que el tóxico cumple una función de
Fundació Nou Barris. Con ello pre- de simbolizar esa separación. des-inhibidor o de ansiolítico, permi-
tendo demostrar la importancia que ¿Qué se pone en juego en los tiéndoles afrontar situaciones que de
tiene la introducción de la perspecti- ritos de iniciación o en sus equiva- otro modo no se sentirían capaces
va del sujeto del inconsciente en el lentes en nuestra sociedad? Una de afrontar.
tratamiento de los adolescentes que separación simbólica respecto a los Evidentemente estos casos no
consumen tóxicos. objetos familiares, la pérdida de un son necesariamente patológicos,
modo de goce infantil, la asunción sino formas particulares de presen-
de la muerte como parte de la vida. tación - en nuestra cultura - de la
Experiencia iniciática. En definitiva, son rituales de los que adolescencia como síntoma de la
el sujeto sale transformado, portan- pubertad.
Decíamos que la adolescencia impli- do las marcas que lo identifican
ca una actualización del encuentro como hombre o mujer y que le dan
con lo sexual. Por otra parte sabe- los derechos propios de su sexo, Usos sintomáticos.
mos que este encuentro es siempre especialmente el derecho al goce
traumático, pues introduce en la sexual según las reglas de esa cultu- En este punto debemos referirnos al
vida del sujeto la significación de ra en particular. menos a dos cuestiones: los síntomas
una pérdida irreparable. Esto lo En los adolescentes que atende- de los padres y los síntomas de los
podemos comprobar claramente en mos, comprobamos a menudo que el hijos. Teniendo en cuenta además
los niños, cuando la pregunta por el consumo de drogas forma parte de que los síntomas de los hijos son en
sexo siempre aparece asociada con una especie de ritual de paso o de parte transmitidos inconscientemente
la angustia. Se podría decir incluso iniciación al mundo de los adultos. por los padres.
que este encuentro espera al sujeto Verificamos en efecto que se trata Ocurre con frecuencia que la
desde antes de su nacimiento, que de una forma de exploración de ese preocupación por las drogas en
está de alguna manera programado espacio de libertad que implica la algunos padres de adolescentes -
por la estructura y que es codificado separación respecto a sus padres, preocupación torturante que les lleva
por cada cultura. Por ejemplo, los o incluso una manera de producir a adoptar una actitud de vigilancia
“ritos de iniciación”, propios de o escenificar esa separación decep- y control obsesivos - viene a sustituir
las culturas tradicionales, tienen la cionando sus expectativas o trans- a la angustia que les produce el des-
función de sancionar mediante una grediendo sus normas. pertar a la sexualidad de sus hijos y
ceremonia altamente simbolizada el En otros casos, el consumo al deseo de ejercer un férreo control
pasaje del sujeto del estado infantil de drogas es un medio de acceso sobre ella. Comprobamos además
al estado adulto. Por otra parte, al otro sexo, ya sea porque forma que este despertar al sexo del ado-
también en nuestra cultura, en la que parte del ritual de acercamiento o lescente evoca y actualiza en los pa-
el discurso capitalista ha borrado porque constituye un elemento esen- dres sus propias fantasías sexuales
progresivamente estas tradiciones, cial de la imagen “ideal” de su sexo reprimidas. Esa angustia paterna es
encontramos conductas en los ado- en el grupo al que pertenece. por tanto la “señal de alarma” que

Algunes consideracions teòriques 15


llama a defenderse, a ponerse en realización del deseo inconsciente efecto aparentemente paradóji-
guardia, no ante lo que pueda hacer de los padres... He aquí algunos co. En efecto, algo que manifies-
el hijo sino ante el retorno de esos ejemplos. tamente es un “no”, resulta ser en
deseos rechazados. En estos casos 1) el joven que ha permanecido verdad una “incitación”, incluso
los padres reproducen en la relación inconscientemente fijado a una un “imperativo”, puesto que el
con sus hijos, su propia lucha inte- posición de rivalidad con el hecho mismo de la prevención
rior, y su horror ante lo que imagi- padre puede encontrar en el indica dónde se ubica para el
nan que pueden hacer sus hijos no consumo de drogas la ocasión padre o la madre su verdadera
es otra cosa que el horror ante su de reactivar este conflicto y satisfacción. En estas condicio-
propio inconsciente. satisfacer sus deseos reprimidos nes el sujeto sabe - aunque no
No obstante, la angustia de de confrontación así como sus sea consciente de ello - que una
los padres también puede tener sentimientos de culpa resultantes cosa es lo que le piden y otra
otras fuentes, por ejemplo cuando de estos deseos hostiles. muy distinta lo que desean.
el adolescente pone en cuestión el 2) el joven que ha mantenido idea-
lugar que ha tenido para ellos hasta lizados a sus padres hasta la
ese momento y los confronta con la adolescencia, puede empezar Una manera de frenar los
pregunta por su propio deseo. Nos a consumir drogas desde el síntomas.
momento en que experimenta la
caída de estas estatuas ideales. Muchas veces el consumo de tóxicos
El sentido del síntoma remite al es una respuesta a la angustia o al
Muchos veces el desprecio que inconscientemen- surgimiento de un síntoma. Puede
te le inspiran estas figuras y al que el sujeto ya consumiera sin ser
consumo de tóxicos castigo que desea inflingirles un adicto o que no consumiera, pero
es una respuesta por esa decepción, a la vez que
idealiza a otros personajes de la
desde el momento en que se desen-
cadena el trastorno psicopatológico,
a la angustia o el cultura, como cantantes, actores, el consumo de la droga pasa a ser
políticos, etc. una manera de frenar los síntomas.
sufrimiento de un 3) El joven que desde la infancia Se entiende que en estos casos la
ha encarnado para los padres adicción no se reduce a una depen-
síntoma la causa de su malestar, aho- dencia orgánica, sino que el sujeto
rrándoles la pregunta sobre depende de la droga en la medida
sus propias dificultades con el que ésta le permite apaciguar un
encontramos, en efecto, con parejas,
deseo, puede tomar en la ado- trastorno de angustia, parar un pen-
en que la crianza y la educación del
lescencia el camino de reactivar samiento obsesivo o desconectarlo
hijo ha velado sus problemas como
este papel mediante el consumo de los fenómenos intrusivos de las
pareja. De modo que cuando el hijo
de tóxicos, asegurando así la psicosis: alucinaciones, sentimientos
se mueve de ese lugar y se resiste
continuidad del síntoma familiar de desvitalización, impulsos suicidas
a seguir dándoles las satisfacciones
y su dependencia respecto a u homicidas, reproches delirantes,
libidinales que hasta entonces les
los padres, puesto que con su etc.
daba, la pareja entra en crisis. De
comportamiento provoca que lo Por eso es delicado el tema
ahí que con frecuencia la preocu-
vigilen constantemente. de cómo responder a la demanda
pación excesiva de un padre o una
4) Por último hay casos en que los social de que el sujeto deje rápida-
madre por el posible consumo de
padres, o uno de ellos, ve en el mente la droga, puesto que se debe
drogas del hijo no representa otra
hijo precisamente aquello que ha tener en cuenta el papel que juega
cosa que su angustia ante la pérdida
reprimido de sí mismo y ese de- en su economía libidinal a fin de
que implica la independencia de ese
seo inconsciente reaparece, por prevenir los efectos catastróficos que
hijo y las preguntas que le plantea a
ejemplo, bajo la forma de un “no puede tener el hecho de confrontarlo
su propio deseo.
fumes”, “no bebas”, “no te dro- abruptamente con aquello que la
Si partimos en cambio de lo
gues”, dirigido al hijo. El proble- droga tapa o frena. Hay que pensar
que dicen los jóvenes, el consumo
ma es que estos enunciados se que en estos casos el consumo de
de tóxicos puede querer decir otras
anticipan a cualquier deseo por drogas puede haber sido el único
cosas: desafío, rechazo, reproche, o
parte del hijo, produciendo un recurso del sujeto frente a una situa-

16 Algunes consideracions teòriques


Es necesario que el sujeto entre en un discurso en el que pueda
subjetivar sus síntomas, localizar la coyuntura de su encuentro
con la droga y sustituir los efectos del tóxico por los efectos
terapéuticos de la transferencias

ción de hundimiento, de modo que sexo. Sin el atajo de la droga ese en- En efecto, en estos casos
será necesario ayudarle a construir cuentro podría desencadenar quizás podemos medir las consecuencias
alguna otra manera de tratar con una sintomatología de tipo neurótico devastadoras de ciertas posiciones
su inconsciente para ayudarlo real- o psicótico, pero el consumo de dro- subjetivas en las que hay un rechazo
mente a abandonar su adicción. Es gas permite acceder a cierta forma radical de la pérdida inherente al
necesario que el sujeto entre en un de goce sin tener que pasar por el surgimiento del deseo y al goce de
discurso en el que pueda subjetivar circuito del deseo, es decir, sin tener la vida. Si el complejo de castración
sus síntomas, localizar la coyuntura que contar con el deseo del Otro. freudiano constituye la simboliza-
de su encuentro con la droga y Este encuentro con la droga ción del abandono por parte del
sustituir los efectos del tóxico por está entonces sobredeterminado al sujeto de los objetos incestuosos in-
los efectos terapéuticos de la trans- menos por tres cuestiones: 1) re- fantiles - pérdida que toma la forma
ferencia, aunque, evidentemente, a chazo de la “castración” simbólica de una prohibición paterna que dice
veces es imprescindible el recurso a que habría permitido acceder a una al hijo “no gozarás de tu madre” y
la medicación o el ingreso en una posición “sexuada”; 2) encuentro a la madre “no reintegrarás tu pro-
institución para que se puedan dar con un goce distinto, el que produce ducto” – aquí vemos cómo lo que
las condiciones de un tratamiento la sustancia actuando directamente se realiza es precisamente ese goce
psicoterapéutico. sobre el cuerpo; 3) satisfacción de la incestuoso.
pulsión según una modalidad infantil Estos casos, seguramente los
y pasiva. más graves, son lo que más nece-
El cortocircuito de la No es raro que algunos de es- sitarían de un dispositivo institucio-
sexualidad. tos casos acaben haciendo realidad nal especializado. No obstante, si
determinadas fantasías inconscientes tenemos en cuenta su lógica, dicho
A veces el avance de la sexualidad harto conocidas. Por ejemplo, cuan- dispositivo no debería ser una repe-
en la adolescencia pone al sujeto do el sujeto es acompañado hasta tición del Otro “maternal” que con-
en serias dificultades. Se trata gene- la muerte por una madre abnegada virtió al sujeto en un puro objeto de
ralmente de aquellos sujetos cuyas y un padre ausente o impotente, goce, ni tampoco la materialización
formas inconscientes de satisfacción comprobamos que a medida que del ideal moralizante y culpabiliza-
implican una posición de pasividad el sujeto renuncia a la dignidad del dor que comporta toda intención
extrema respecto al objeto. Ocurre deseo, la madre lo convierte cada reeducativa en este campo.
entonces que cuando se ven confron- vez más en aquel objeto pasivo de
tados a las exigencias imperativas los primeros cuidados. Podemos re-
de la adolescencia, no cuentan con ferirnos aquí a lo que dice Lacan en
los recursos simbólicos necesarios su texto “La familia”1, ya que de lo Nota
para acceder al goce sexual por la que se trata en estos casos es de la (*) Ponencia presentada en la VI Jornada
vía del deseo. realización del fantasma de retorno de la Fundació Nou Barris “Consum
de Tòxics a l’adolescència: experièn-
En estos casos la droga puede al seno materno como una de las cia o sínptoma”
servir de coartada para evitar la manifestaciones más impresionantes
1 Lacan, J. La Familia, Editorial Argonau-
angustia del encuentro con el otro de la pulsión de muerte. ta, Barcelona, 1982

Algunes consideracions teòriques 17


El precio de una errancia1

François Sauvagnat.
Psicoanalista

Q uisiera situar de entrada mi intervención haciendo


referencia a una práctica que observó un funciona-
rio local del Imperio Británico2 a fines del siglo pasado
su madre en el momento de la pubertad. A partir de ese
momento, lleva la vida de un monje mendicante, visita
todos los templos del dios, y llega al monte Mahadéo en
en India, cerca de Bombay, en aquella época existía el momento de la fiesta anual, para precipitarse desde
un famoso mercado, que tenía lugar en los montes Ma- lo alto del acantilado. Si le faltaba el coraje de morir,
hadéo; la principal atracción de las festividades era el emprendía durante un año su errancia. Como máximo
suicidio de jóvenes hombres, que se arrojaban de lo se le acordaba una prórroga de un año suplementario.
alto de un acantilado a 150 metros en honor al dios Después del cual debía precipitarse al vacío. La historia,
Mahadéo. por supuesto no relata lo que le sucede al pobre desgra-
¿Cómo se explican sus conductas? Estos jóvenes ciado si retrocede por tercera vez...
realizaban un voto formulado por sus propias madres En esta práctica ritual, podemos situar de entrada
antes de venir al mundo. Éstas eran mujeres estériles que el precio, el valor que puede tener esta conducta de
suplicaban al dios Mahadéo que les concediera la fecun- errancia. Siendo aquél de una deuda a pagar, de una
didad, a cambio, prometían ofrecerle sus primogénitos. deuda exorbitante frente a la cual la existencia del sujeto
El muchacho designado es puesto al tanto del voto de no tiene el más mínimo valor puesto que ella está contra-

18 Algunes consideracions teòriques


Por el término de errancia se puede caracterizar el
comportamiento y la posición subjetiva de un cierto número de
jóvenes que se prostituyen

tada mucho antes de su llegada al mundo, y a partir del el viernes santo, o aquella de Malc, muy cercana al
momento en el que le es desvelado su destino, lo propul- personaje de Judas, haciendo notar leyendas similares
sa a esa errancia, que preludia la muerte real, incluso si españolas; o aún Ahasvérus el zapatero errante, que
en varios aspectos mina la realización. no aparece sino tardíamente, a fines del siglo XVIII7.
Me parece que esta práctica tradicional, en su Digamos rápidamente que al inicio esta tradición era
radicalidad nos introduce de la mejor manera a la pro- del todo antisemita, pero con el romanticismo, este tipo
blemática de la errancia. de errancia es considerada como generalizada: cuando
Por el término de errancia se puede caracterizar W. Goethe o Adalbert Chanisso8 retoman el tema, es en
el comportamiento y la posición subjetiva de un cierto el fondo para afirmar que somos todos errantes, en tanto
número de jóvenes que se prostituyen. Si he propuesto que hombres modernos y sujetos de la ciencia.
este término, es porque a mi parecer permite examinar Es bastante interesante notar que el “infierno”,
bajo un nuevo aspecto la posición subjetiva de un cierto puesto de relieve hace ya algunos años por el sociólogo
número de jóvenes –y los menos jóvenes también- de F. Dubet9 como característico de los jóvenes salidos de
un verdadero extravío, de una desorientación subjetiva, “ciudades obreras” “con problemas”, desempleados
que me parece caracterizarlos mucho mejor que la impli- más o menos violentos, si al principio connotaba un
cación en las prácticas delincuentes o toxicómanas. malestar existencial, ahora tiende a designar una suerte
Quisiera señalar una ambigüedad del término de elección de vida que es análoga, guardando las pro-
errar en francés (también válido para el español). Éste porciones, con el destino de los bribones descriptos por
deriva, nos enseña el diccionario etimológico de Bloch y Geremek.
Wartburg 3, de la confusión de dos palabras diferentes. Aquello a lo que apunto con el término de errancia
La primera viene del latín errare que significa equivocar- es algo evidentemente diferente, puesto que se trata más
se o extraviarse. La segunda es un verbo antiguo que sig- bien de cercar una posición subjetiva que de detenernos
nifica simplemente progresar, avanzar, caminar, en este en las envolturas sociales que, por supuesto, no han de
sentido se decía igualmente oirre (en viejo francés). ser descuidadas ni ignoradas.
En el último sentido, errar se utilizaba principal-
mente para los peregrinos, a quienes una cierta indi-
gencia podía eventualmente acercarlos más a la vida “Juventud abandonada” e “impostores”
eterna. Así, los monjes errantes que son tan numerosos
en muchas religiones (tradiciones católica, hinduista, bu- En el fondo, la población a la que aquí apuntamos lleva,
dista) o bien las errancias tradicionales de los pueblos en la tradición psicoanalítica, tres tipos se etiquetas, que
gitanos, que durante largo tiempo, han presentado su quisiera recordarlas brevemente: “juventud abandona-
desplazamiento como peregrinaje a partir del siglo XV da”, “impostores” y “conductas antisociales”.
en Occidente 4. Esta “cobertura”, por otro lado, ha sido Con los términos “juventud abandonada” (verw-
retomada por los bribones, los “mendigos”, “los hijos de ahrloste Jugend )10 August Aichhorn designaba los hijos
Caín”, como los denomina en su reciente estudio el his- maltratados, abandonados, en conflicto masivo con su
toriador polaco Bronislaw Geremek5; estos estafadores familia, y sobre todo persuadidos que el orden del mun-
rápidamente devinieron, gracias a la literatura españo- do estaba constituido según un modelo de agresión-frus-
la, los héroes de las novelas “picarescas”, erigiendo una tración del cual es absolutamente imposible salir. A pro-
figura eminente de la modernidad. pósito de varios casos, Aichhorn mostró en que medida,
Otro caso, recientemente recordado por J. incluso con niños agresivos, una maniobra educativa
d’Ormesson6 es la figura medieval del infiel errante, terapéutica era posible, pudiendo hacer aparecer una
como la figura de Boutedieu, quien habría sido conde- situación nueva para ellos: tener el derecho de sobrevivir
nado a errar hasta el infinito por haber burlado a Cristo sin tener que mostrarse agresivo. O más precisamente,

Algunes consideracions teòriques 19


para retomar la problemática que me parece importante puede ser negociado y es precisamente aquello contra
en estos casos: que su existencia pueda no ser puesta en lo cual el sujeto protesta. Este texto de Winnicott debe
duda, que tenga verdaderamente un valor. ser confrontado a otra serie de textos (es sabido que
Del mismo modo, cuando K. Abraham, en 192511, Winnicott ha escrito mucho sobre la delincuencia), de
evoca “la historia de un caballero de la industria”, un los cuales tomaré sólo tres. Primero, una conferencia que
estafador y artista plástico que al comienzo le parecía he traducido recientemente, y que habla de la primera
completamente irrecuperable, inclasificable, retomando práctica de Winnicott en un centro de jóvenes adoles-
un término consagrado por el uso, para mostrar con centes refugiados de la segunda guerra mundial16. Allí
gran sorpresa, un buen día, que este estafador dejó de él describe el problema existencial fundamental de esos
estafar y de errar de ciudad en ciudad, de cárcel en cár- niños que es la supervivencia. Lo que nos acerca a nues-
cel. Pues había encontrado una mujer que le demostró tro tema.
que él podía ser otra cosa que el patito feo de su familia,
odiado por su padre y dejado de lado por su madre. En
el fondo, saben que Edgar A. Poe 12 decía que la estafa A propósito de varios casos,
era lo propio del hombre, esta mujer llegó a probarle
la existencia de un más allá de la estafa, en donde él Aichhorn mostró en que medida,
podía tener un valor indiscutible.
incluso con niños agresivos, una
Winnicott y las “conductas antisociales” maniobra educativa terapéutica
Un más allá de la errancia y de la estafa, es aquello
era posible, pudiendo hacer
que Winnicott describe cuando habla de “conductas an-
tisociales”, publicado en 1956 13. Recordemos que con
aparecer una situación nueva
estos términos, el celebre psicoanalista inglés, no apun- para ellos: tener el derecho de …
taba a una delincuencia organizada, sino al resultado
de lo que él concebía como las privaciones, destetes
afectivos derivados de una insuficiencia en los cuidados Los otros dos textos son: “Objetos y fenómenos
maternos. Esta causalidad ha sido muchas veces critica- transicionales”17, donde insiste sobre el hecho de que
da, y de seguro no recubre todos los casos que podemos el “first not-me posesión”(*) es su ser mismo, algo de lo
encontrar. Así, por ejemplo, el psicoanalista americano que él no puede decir, a propósito de lo cual no puede
Karl A. Menninger 14, mostró hasta que punto una educa- más que mentir, y el resultado, aún ahí, de la posición
ción demasiado solícita, infantilizante, podía precipitar en la cual es mantenido por su familia. Es decir, que
a ciertos sujetos a una realización particularmente cruda expresa de un modo invertido la posición en la cual su
de la pulsión de muerte, haciendo de ellos, en el mejor entorno simbólico lo sostiene. Por último, otro texto, “La
de los casos, unos eternos niños de pecho. cuerda: un aspecto técnico de la comunicación”18, pone
No obstante, podemos reconocerle a Winnicott en evidencia el hecho de que un niño es mantenido en
haber sabido descubrir los mecanismos esenciales de la carencia en cuestión, un cierto tipo de separación se
estas conductas, principalmente el hecho de que el niño revela imposible: no puede existir como separado.
a través de sus descarríos de conducta más o menos Es evidente que aquí esta imposibilidad de separa-
ruidosas y desesperadas, pone en evidencia que algo ción es desde ya simbolizada; el problema no era tanto
le faltó, algo a lo cual él tenía derecho; que este algo que no podía separarse particularmente de su madre
no es negociable a priori, y que su comportamiento, sino que este niño no podía parar de jugar con una
en el fondo, es una reivindicación, una protesta contra cuerda, y ataba todo lo que le caía bajo sus manos, de
esta carencia: la conducta antisocial, para Winnicott, un modo totalmente compulsivo.
deja esperanzas15. Hace de la conducta antisocial una Es precisamente una característica de los sujetos de
conducta de llamado. Pero deja en la sombra un punto los cuales nos ocupamos: su errancia, paradójicamente,
importante que se desprende, sin embargo, de su texto: resulta de una imposibilidad de separación, y están tan-
el objeto de reivindicación es el valor, el precio que el to más encadenados a esta errancia cuanto que recha-
sujeto mismo pueda tener en el seno de la constelación zan toda actividad contractual que pueda asegurar un
familiar y parental en la cual vino al mundo. Este valor lazo social estable. Todo transcurre como si esta deuda
es, en esos casos, algo que, desde su punto de vista, no a pagar, contratada las más de las veces por su entorno

20 Algunes consideracions teòriques


familiar en su nombre, se encarnara de tal modo en ellos Hay una errancia fundamental por el hecho mismo que
que anula completamente el valor de lo que se puede el ser humano se guía a ciegas por los significantes.
presentar frente a ellos como posesión propia, como los Pero lo que hace que las consecuencias sean más o
fieles del dios Mahadéo. menos dramáticas de tal o cual tipo de errancia, es una
Por supuesto que abundan los ejemplos de esta elección subjetiva que pondrá en juego el ser mismo del
anulación: la mayor parte de los sujetos que vienen sujeto. Para resumir, habría dos aspectos relativamente
a vernos se presentan sin documentos de identidad, y diferenciables en las conductas de errancia a las cuales
frecuentemente no sólo hay que hacerles los trámites estamos confrontados.
sino también conservarlos. Otros nos confían objetos 1) Una estructura simbólica que se encarna en el fantas-
personales como si fuéramos el monte de piedad (suerte ma, un lugar asignado al sujeto por deseo del Otro.
de banco social hipotecario en el que se presta dinero 2) Una elección alienante que el sujeto ha realizado,
a cambio de objetos dejados en garantía), y vienen pe- que es la de no hacerse cargo o incluso rechazar
riódicamente a inspeccionarlos para verificar su existen- todo lo que pueda vincular su deseo con la ley (rol de
cia, que para ellos es altamente improbable. Pensemos la función paterna).
también las numerosas inhibiciones intelectuales que
pueden presentar dichos sujetos, para quienes falta la
confianza mínima para aceptar recibir el saber en un
aprendizaje. Hay una errancia fundamental
Pensemos igualmente la manera espectacular con
la cual el dinero de la prostitución viene a ser las más de
por el hecho mismo que el ser
las veces dilapidado, a tal punto que ciertas reglamenta-
ciones policiales del siglo pasado preconizaban que se
humano se guía a ciegas por los
constituyera autoritariamente una caja de ahorros para significantes
las prostitutas19.
Podemos incluso preguntarnos en qué medida un
cierto número de esos jóvenes errantes no encuentran Toda una gama de comportamientos puede apare-
precisamente, en algunos servicios sociales, interlocu- cer, que va desde la búsqueda de una función media-
tores que vienen a pagar en cierto modo esta deuda dora (fuga para hacer un llamado a otra persona de la
previa. Pero el fracaso correlativo de estos encuentros familia) hasta una suerte de denuncia, de reivindicación,
podría igualmente ser imputado al hecho de que el ob- incluso de rechazo total. Estas elecciones son claramente
jeto de esta deuda les resulta inaccesible, indecible, y visibles en las conductas de errancia, en la medida en
por esta razón, invaluable por fuera de la reivindicación que se presentan esencialmente con la estructura de una
en la cual esos sujetos se sostienen. Es por eso que en pregunta, que tortura al sujeto y ante la cual no encuen-
regla general un psicoanálisis les es inaccesible, porque tra una respuesta. Pero esta pregunta, paradójicamente,
se trata de un contrato en el que se invita al sujeto a ya es una toma de posición, un comienzo de respuesta.
ceder sobre el goce de su síntoma. Ahora bien, lo que Por supuesto, esta respuesta incontestable no es la bue-
demandan, lo que exigen estos sujetos es más bien que na. Pero el sujeto todavía se encuentra en la errancia, y
su deuda previa sea liquidada... mágicamente, ya que si no se ha embargado aún en certidumbres más fuertes
para ellos todo contrato no hace más que repetir un en- (como la de una criminalidad organizada) es porque en
gaño del que han sido, incluso antes de haber cobrado el fondo duda un poco. Como decía Winnicott, “aún
o percibido, los engañados. queda una esperanza”. Se pregunta, si a pesar de todo,
el dios Mahadéo no se equivoca un poco... Es ahí, me
parece, que podemos intervenir, y que una maniobra es
De un engaño al otro posible para un cierto número de casos.
¿Qué se trata de obtener? Para mí, se trata de de-
Hay un punto sobre el cual J. Lacan, (a propósito de mostrarle al sujeto que existe una instancia en la cual se
ese maravilloso texto sobre la adolescencia que es “El puede apoyar, una instancia que invalida al dios oscuro
despertar de la primavera” de Wedekind20) ha hecho, (en “El despertar de la primavera” de Wedekind21, se
según mi parecer, avanzar mucho sobre la problemá- trata del “hombre enmascarado”). Se trata de invitar al
tica de la errancia. Es el de la paradoja de que si el sujeto a retirar su confianza de este dios oscuro y por
ser humano siempre es la presa de un cierto tipo de ende de relativizarlo, mostrarle que es una construcción
errancia, habría en el fondo buenas y menos buenas. fantasmática y que lo que quiere es su pellejo, que en el

Algunes consideracions teòriques 21


fondo apunta a otra cosa que a su propia destrucción. miles de francos, lo que sólo una negociación extrema-
Para ello, evidentemente, habrá que localizar en qué damente rigurosa, cautelosa, logró hacer cesar.
de su bagaje simbólico el sujeto se puede apoyar, con Lo mismo que una joven que se prostituía en con-
qué fuerzas puede contar para separarse de ese dios diciones particularmente dramáticas es acosada por un
oscuro. personaje materno vagabundo, a la cual le entrega una
parte del dinero de la prostitución. Esta joven se presen-
tó largo tiempo de una manera casi maníaca, abordan-
Efectos de báscula do a los pasantes, como si no existiera distancia alguna
entre ella y el otro, en una suerte de búsqueda afectiva
Así como Winnicott (1956) 22, o Aichhorn (1959) 23 sin fin. En el curso del tratamiento, llega a deshacerse
consideraban que las “conductas antisociales “ que un poco de la influencia fantasmática de ese persona-
describían podían encontrarse en todas las estructuras je materno devorante, va a hacer un viraje hacia una
clínicas, de igual modo, la errancia se puede constatar conducta casi ascética, descubriendo una vocación
en sujetos que presentan tipos clínicos variados, con de enfermera enteramente consagrada a su trabajo,
posiciones evidentemente diferentes; es lo que quisiera invirtiendo completamente el peso intacto del insaciable
mostrar a partir de algunos ejemplos, y agradezco a los superyo materno, y abordando ahora las cosas de un
practicantes que han querido comunicarme sus precio- modo radicalmente diferente.
sas observaciones. La errancia puede responder a una problemática
psicótica como lo había notado Foville24 en su célebre
artículo “Los alienados migradores”. Así, tal joven, en
quien una psicosis alucinatoria pudo pasar inadvertida
¿Qué se trata de obtener? Para por su entorno durante largo tiempo, permitiéndole
mí, se trata de demostrarle al conservar sus trabajos sin que nadie aparentemente
dudara de algo durante largos periodos, cortados por
sujeto que existe una instancia episodios de “excesos” más o menos extensos, que te-
nían visiblemente una función terapéutica. El delirio se
en la cual se puede apoyar, una desarrolló durante largo tiempo sin hacer mucho ruido,
centrado alrededor de la idea de que ella era una rata
instancia que invalida al dios de laboratorio, y que un cierto número de instancias
secretas habían decidido experimentar sobre ella; los
oscuro temas delirantes se agravan, al punto que acosada
por tales alucinaciones amenaza con reventarse los
tímpanos; se aísla en la habitación de un centro para
La errancia puede presentarse en una estructura jóvenes trabajadores, presa del delirio, y deviene cada
neurótica y hacer actuar los resortes fundamentales. vez más apragmática; hospitalizada luego de largas
Así tal sujeto, mortificado por un padre omnipresente negociaciones gracias a un educador en el que ella
en el hogar aunque incapaz de conservar un empleo conservó milagrosamente su confianza, logra salir casi
fijo, controlando incesantemente el mínimo gesto y obrar inmediatamente del hospital, haciéndoles creer que
de su hijo, al punto de constituir un superyo devastador sufría una simple depresión a causa de una decepción
forzándolo a deambular horas y horas sin rumbo fijo. amorosa. Reinternada luego de una brutal agravación
Durmiendo apenas algunas pocas horas cada noche, el delirante, va a estabilizarse prestando poderes mági-
desdichado corre de empleador en empleador, actuan- cos a su terapeuta, a quien juzga capaz de detener el
do sin parar las escenas conflictivas que lo encadenan complot del cual no dudó un solo instante que continua-
a su genitor, forzado a una mitomanía que no hace más ba tramándose contra ella. Su delirio está claramente
que perjudicarlo anulará por otra parte un encuentro que articulado al sentimiento de que la pueden “dejar caer”
había sido organizado entre los miembros del equipo y en el vacío, hacia un ser de deshecho, o más precisa-
su padre, aterrorizado por la idea de los efectos que mente de roedor, lo que la actividad de los educadores
éste podría producir. Parece a tal punto obsesionado durante largo tiempo logró refrenar.
por los controles de billete que logró hacerse interpelar La errancia igualmente puede presentarse en una
sin billete de transporte un número considerable de ve- estructura perversa –quiero precisar que por perversión
ces (llegando incluso a hacerse multar cuando tenía un no significo nada de lo peyorativo como tampoco una
billete válido) al punto de acumular multas por miles y connotación moral, hay que disipar absolutamente toda

22 Algunes consideracions teòriques


una serie de malentendidos. Es cierto que, como lo podía descentrar la distracción paterna, y que lo que
han mostrado los trabajos de Jean Delay sobre André sólo podía atemperar era el cuidado atento que ponía
Gide25, o de Raczynmov sobre Maurice Sachs26, tales en la educación de su hijo, en quien toda veleidad de
perversiones son de modo característico el resultado de afirmarse como ser sexuado era perseguida, hostigada.
carencias simbólicas del entorno del sujeto, incluso si, En la madre de Maurice Sachs, rechazo masivo de ese
por otro lado, ellas son propias a realizaciones artísticas hijo así como un rechazo total a hacerle conocer todo
a menudo muy notables. aquello que pudiera tocar el ser paterno. En la madre de
Si estas carencias están como esfumadas en los uno de nuestros pacientes, encontraron una manipula-
casos más favorables, al punto de no dejar aparecer ción a cada instante, que en cierto modo agrava la con-
la figura de “monstruos sagrados”, según la expresión ducta francamente delincuente del padre desvalorizado
de Jean Delay, las más de las veces tratamos sujetos en en tanto que inmigrante.
quienes ésta se traduce en comportamientos de prosti- Según otro sujeto, su madre, abierta y repetida-
tución particularmente perjudiciales, sobre todo en este mente, había expresado el deseo de que su hijo se
periodo de epidemia de SIDA. prostituyese para vengarla y “sonsacar el dinero a los
A menudo se ha puesto en duda que tales sujetos hombres”. Y de hecho, es en respuesta a estas constela-
puedan tener una demanda que sea realmente tratable,
siendo consideradas las prácticas perversas como un
impedimento radical.
Algunos parecen incluso considerar que los sujetos
Nuestra preocupación es
perversos no demandan nada, y que encuentran en sus sobre todo que el destino
prácticas perversas la solución de todos sus problemas.
En el fondo, si se les cree, los perversos serían los únicos de estos sujetos sea menos
sujetos que no tendrían razón alguna de lamentarse ni
de quejarse. Ahí no se trata más que de un punto de vis- catastrófico, y …s
ta muy estrecho, por no decir una tontería consumada.
Me parece, al contrario, que los practicantes que han
encontrado estos sujetos, pueden testimoniar la angustia ciones que el deseo va a renacer, en sus constelaciones
y el sentimiento de derelicción (**) que aparece tan atípicas. Por ejemplo, en Gide ante “los jóvenes de piel
frecuentemente en ellos. Así, André Gide hablaba de su morena bañándose bajo el sol”.
sentimiento de ser “separado, forcluído”, de las violen- Para uno de nuestros pacientes, el deseo renace
tas crisis de angustia que podían tomarlo (que él mismo en un arranque de venganza contra un padre aborre-
designaba con el término alemán Schaudern)27. cido, con un anhelo de ser al fin apreciado y amado
Nuestra preocupación es sobre todo que el destino por sus compañeros. Pero en el fondo, sobre aquello
de estos sujetos sea menos catastrófico, y que el senti- que podemos contar, me parece, incluso en los suje-
miento de estar condenados, que acompaña frecuente- tos más gastados, es con el hecho de que muchos de
mente su existencia en nuestros días, no les impida hacer entre ellos buscan un modo de neutralizar esta maldi-
justicia por la necesidad de tener acceso a los cuidados ción parental. Parece que una cierta estabilización se
de los que tienen derecho, principalmente cuando son puede esperar de una idealización que relativice esta
seropositivos. maldición, y recrear el derecho de existir. Si es cierto
A través de los diferentes casos que han venido como lo exige Freud que, la estructura de la perversión
a consultarnos, y apoyándonos sobre diversos relatos está sujeta a la del fetiche, habría entonces que contar
biográficos que disponemos (de escritores como Jouhan- con la posibilidad de una estabilización a través de la
deu, Maurice Sachs, André Gide, Montherlant, etc.) erección de un fetiche. Así el encuentro con Madelaine,
parece que podemos contar con diferentes elementos en para Gide, elevada al rango de un ángel al lado de
el momento de la “prise en charge” (***). De un lado, quien el autor de Et nunc manet in te28, intervendrá en
las prácticas perversas (cuando se trata de estructura posición femenina, ha podido taponar los efectos de
perversa) tienen a menudo como tela de fondo una la maldición del deseo. Entre los periodos de franco
derelicción localizada en las relaciones de la pareja vagabundear parece que ciertos mecenas han jugado
parental, en el sentido de que se le vuelve imposible el mismo rol para Maurice Sachs. Quizás habría que
al sujeto posicionarse con respecto a su sexo: rigor pu- recordar cómo la pederastia durante largo tiempo ha
ritano, frialdad glacial y legisladora, angustia a hacer sido practicada como una suerte de ascetismo peda-
daño a cada instante como la madre de Gide, que no gógico. Podríamos también recordar cuántos han sido

Algunes consideracions teòriques 23


los perversos que se han erigido paradojalmente como A modo de conclusión
legisladores29, para así darnos cuenta hasta dónde es-
tos sujetos pueden demandar un punto de anclaje para Si finalmente el comportamiento de nuestros sujetos “erran-
atenuar, por poco que sea, su deriva. tes” nos parece que resulta de un entorno simbólico que
Así, tal sujeto, prostituído y seropositivo, ha podido induce a hacer elecciones forzadas, el impasse en el que
después de continuas gestiones junto al servicio donde se encuentra el sujeto provoca una anulación de todas
venía incesantemente a verificar el estado de su ropa, las formas de intercambio –incluyendo por supuesto los
que dejaba en el depósito, circulando durante largos intentos de reinserción social. La cuestión parece ser, en el
ratos por diferentes lugares (en el baño, en la alacena), tratamiento, poder llevar al sujeto de nuevo a su elección
aceptar querer curarse gracias al intenso trabajo de una en la que se encontró precipitado, y que lo condena, en el
educadora. Nos parece que esta educadora, con su fondo, a una suerte de muerte psíquica. Se trata entonces
trabajo atento, corregía los efectos más desfavorables de hacer nacer, de marcar la contingencia ahí donde el
del personaje materno (el personaje de Madelaine para sujeto se ve encadenado a una necesidad ciega, en un
André Gide), permitiendo a este joven sujeto “ocuparse universo deshabitado y desértico. En tal caso, la errancia
al fin de él mismo” (según su propio decir) en vez de tendrá la posibilidad de volver a ser lo que es para cada
prostituirse en condiciones dramáticas. uno de nosotros: el teatro de su deseo.

Notas
1
Esta conferencia fue realizada en un 13
Winnicott, D. W., “Les comportements 24
Foville, A., (1875) “Les aliénés voya-
coloquio dirigido a educadores que antisociaux ”, in De la pédiatrie à la geurs ou migrateurs, étude de cer-
se ocupan de jóvenes adultos prosti- psychanalyse, Payot, París, 1976 tains cas de lypémanie ” in Annales
tuidos y toxicómanos 14
Menninger, K. A. (1938) Man against médico-psycologiques
2
Sleeman, CD. Citado en Jean Bae- himself, Harcourt Brace Jovanovich 25
Delay, J., La jeunesse d’André Gide
chler (1981), Les suicides, Calman- 15
Winnicott, D. W. De la pédiatrie à la (dos tomos, Gallimard, 1958
Lévy, París psychanalyse, op. cit.
3
Boch y Warburg (1975), Dictionnaire
26
Raczymov, H., Maurice Sachs, Galli-
16
“Survie et institution: à propos d’une
étymologique de la langue française, conférence de D.W. Winnicott ” in mard, 1988
PUF, París Broca, F., Cremniter, D., Kaufmant, 27
Cf. la discusión de este término en la
4
De Vaux de Foletier, F. (1961), Les Y., Vaissermann, A., Wartel, R., obra de J. Delay (Tomo 1, nota 21)
Tzsiganes dans l’ancienne France, Sauvagnat, F., Psychose et création
actualité de l’Ecole anglaise, GRAPP,
28
Gide, A., “Et nunc manet in te”, in
Connaissances du Monde
París, 1990 Carnets, T.II. Ed. de la Pléiade
5
Geremek, B. (1990), Les fils de Caïn,
Flammarion
17
Winnicott, D.W., (1952), “Objets et 29
Cf. principalmente las posiciones
phénomènes transitionnels”, in De la “éticas” de Montherlant respecto a
6
D’Ormesson, J. (1990), Histoire du juif pédiatrie à la psychanalyse, Payot,
errant, Gallimard las muchachas en flor. Montherlant,
París, 1976
H., de “Les jeunes filles” in Oeuvres ,
7
Knecht, E. Le mythe du juif errant, 18
Winnicott, D.W. (1956), “La ficelle”, Ed. de la Pléiade
Presses Universitaires de Grenoble, in De la pédiatrie à la psychanalyse,
1977 Payot, París, 1976 (*) N. de T.: Primera posesión no-yo.
8
Novalis, Henri d’ofterdingen, in 19
Corbin, A., (1987), Les filles de no- (**) N. de T.: Del verbo derelinquir, des-
Oeuvres completes, Chamisso, A. ces, Plon, París amparar, abandonar.
Von, Peter Schlemihl, Aubier (***) N. de T.: Literalmente, hacerse
20
Wedekind, F. (1974), L’evil de prin-
9
Dubet, F. (1985), La galère, Fayard temps, tr. Fra. ; cf. également Sau- cargo. Se trata de designar la acti-
10
Aichhorn, A. (1971), Jeunesse à vagnat, F., Destins d’adolescence, vidad de los educadores, contiene
l’abandon, Payot, París Presses Universitaires de Rennes, un aspecto “terapéutico” además
1992 del aspecto educativo.
11
Abraham, K. (1925), Histoire d’un
chevalier d’industrie, in Oeuvres
21
Wedekind, F., Ibid
complètes, Payot, 1966 22
Winnicott, D.W., De la pédiatrie à la
12
Poe, E. A. (1989), “De l’escroquerie psychanalyse, op. cit.
Traducción Marina Lusa
considérée comme un des beaux- 23
Aichhorn, A., (1964), Delinquency
arts” (primera edición 1843) in Con- and Child Guidance, International Texto publicado en la revista Registros.
yes, essais, poèmes, Laffont university Press Tomo Verde, año cinco. Buenos Aires

24 Algunes consideracions teòriques


Desposesión y tendencia
antisocial

Patricia Lombardi Soulier.


Médico Psiquiatra. Psicoterapeuta. Centre de Salut Mental Infantil i
Juvenil-Fundaciò Nou Barris

N i neurótico ni psicótico, para


Winnicott la tendencia antiso-
cial no hace diagnóstico, y contra-
En el escrito sobre el que baso
estas reflexiones1, nos comenta
que este tema, desposesión, fue
más finos descubrimientos” de la clí-
nica analítica: el objeto transicional.
Sin embargo, este hallazgo de Win-
riamente a lo esperable, sitúa esta abordado por Bowlby en términos nicott, esta primera posesión no-yo
tendencia como un intento de solu- kleinianos. Winnicott, como también como él la denomina ¿es del mismo
ción: la tendencia antisocial implica lo hará en su teorización sobre la orden que lo que plantea en este ar-
esperanza, intento de solución de categoría del objeto, traza su propio tículo sobre la tendencia antisocial?,
aquello que la motiva. recorrido. ¿de qué cree estar desposeído un
¿Qué significa esto?. Que bajo sujeto cuando presenta estas con-
esta tendencia subyace para el autor ductas que, según nos dice, pueden
una desposesión precoz y prolon- ¿Por qué Winnicott? adoptar diferentes formas? Robos y
gada, es decir, se trataría no sólo mentiras asociadas, daño o destruc-
de las consecuencias de un trauma Jacques Lacan rinde homenaje al ción, pero también incontinencia y
específico, de una pérdida, sino autor inglés en varios seminarios, suciedad en general, unificadas en
también de la persistencia de las retomando una y otra vez lo que no su heterogeneidad por el valor de
condiciones que lo provocaron. duda en calificar como “uno de los molestia que genera en los otros. Si

Algunes consideracions teòriques 25


bien –aclara- cada síntoma tiene un No se trata específicamente de fort(fuera)-da(aquí) de su juego la
valor y un significado específico, el un objeto, sino de una “posesión”, desaparición y reaparición del Otro
factor común que interesa a efectos que admite por otro lado una amplia primordial.
de la descripción de la tendencia variedad. En ese sentido, el objeto tran-
antisocial es el valor de molestia (...) De esta forma, y contrariando sicional para Lacan es algo “que
que será explotado por el niño, ya el ideal de una relación armónica, está justo antes de la aparición del
que no se trata de algo casual, sino de perfecto ajuste entre madre e yo (moi) es decir el momento donde
que gran parte de la motivación, hijo, el objeto transicional muestra el sujeto se interroga en relación al
aunque no necesariamente toda, es la punta de un abismo, algo inter- Otro en tanto que presente o ausen-
inconsciente. fiere en esa díada. Su función es te” 5.
Intentaré situar, actualizar es- “defensiva” frente a la ansiedad o Etiqueta de un muñeco, punta
tos problemas, teniendo en cuenta deshilachada de una manta, peque-
que la clínica psiquiátrica actual ños índices del vacío que se abre
ha hecho una categoría diagnóstica y donde se alojará el sujeto como
específica bajo este nombre, son los la tendencia efecto de lo simbólico.
llamados disociales2 y que inclusive Winnicott sitúa allí el campo de
se les sitúa en la mira evolutiva de antisocial implica la ilusión, del juego; el objeto tran-
otro trastorno muy mentado en la sicional no es objeto de represión,
niñez (producto también de estas esperanza, intento de simplemente pierde significación, se
clasificaciones DSM, CIE3) denomi- diluye en otros intereses culturales:
nado trastorno hiperquinético. Sin solución de aquello arte, religión, entre otros (1), pero
embargo, partiendo de los relatos
clínicos que Winnicott realiza sobre
que la motiva. también puede participar en la
génesis de las toxicomanías o del
el tema, veremos que en contraposi- objeto fetichista.
ción a la pobreza reduccionista de
aquella nosografía –y esclarecidos el peligro y aparece en un período
por la teorización lacaniana sobre para el que el autor deja un amplio Desposesión y demanda de
la angustia y el acto- se abre un margen, entre los cuatro a seis me- amor
abanico de precisiones clínicas y ses hasta los ocho a doce.
posibles intervenciones. Lacan trabaja sobre este hallaz- ¿En qué dialéctica introduciremos
Para comenzar trabajaré sobre go de Winnicott y lo asocia a la ob- entonces al “desposeído” de Win-
la oposición (ya veremos si es tal) de servación de Freud sobre el Fort-Da. nicott?
esta pareja significante: posesión - Recordemos brevemente la Para responder a esta pregunta
desposesión (traducida en otro texto experiencia que él describe. Sabe- vamos a analizar las breves referen-
como deprivación). mos que se trata de su nieto que cias clínicas que nos da el autor en
tenía por entonces año y medio, es este escrito.
un niño tranquilo, que acepta las Del primer caso –un niño delin-
Primera posesión: objetos y prohibiciones de los padres y se cuente- tenemos pocos datos, dice
fenómenos transicionales hace entender, aunque cuenta con que fue tratado durante un año. El
pocas palabras. También acepta análisis marchaba bien -a pesar de
La primera hipótesis de Winnicott es -al parecer sin problemas- que la las dificultades que planteaban las
de 19514, con ella el autor recorta madre se vaya unas horas fuera de conductas antisociales del niño- sin
una zona intermedia de experien- la casa, pero es entonces cuando embargo, la clínica donde realizaba
cia entre una primera actividad del desarrolla una costumbre bastante el tratamiento ordenó interrumpirlo
bebé, como es la introducción del “perturbadora” según Freud: arrojar “por el bien de los demás pacien-
puño en la boca por el recién naci- objetos acompañando esto de un tes”.
do hasta el apego a un objeto, pero largo o-o-o-o-o. Más tarde, cuando El niño es destinado a un
no solamente, también el parloteo el niño introduzca otra palabra con reformatorio. En el momento que
del bebé o la repetición de sonidos la manipulación de un carrete, Freud Winnicott realiza esta comunicación
o melodías mientras se adormece se podrá confirmar su sospecha sobre habían transcurrido bastantes años.
ubicarían en esa zona intermedia el sentido de ese sonido inicial. El El antiguo paciente tenía ahora trein-
como fenómenos transicionales. niño reproduce activamente en ese ta y cinco años. Se había casado,

26 Algunes consideracions teòriques


Recordemos que el trabajo de Winnicott sobre la tendencia
antisocial se sitúa en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, y
es en esas circunstancias tan difíciles que él se pregunta,

tenía varios hijos y un empleo que derecho?. Dile que está reclamando sin esperanzas de ser lo que el Otro
le permitía ganarse la vida satisfa- a su padre y a su madre porque sien- necesita.
ciendo “su inquietud”, aquella que te que se le priva de su amor”. Entonces, esa esperanza winni-
lo impulsaba antes a la actuación Winnicott conocía a la madre, cotiana, junto al “valor de molestia”
transgresora. sabía que en la adolescencia ella de los actos, parecen reflejar más
Por lo que el autor concluye misma había atravesado una fase bien la única esperanza posible, la
que no era lo mejor para aquel niño antisocial, bajo la “férrea disciplina de recibir una sanción simbólica y
el psicoanálisis “sino encontrarle una del padre”. Su interpretación tuvo al como tal liberadora. La desposesión
colocación” y “que sea la sociedad parecer un efecto inmediato, el niño se anuda aquí a la ignorancia del
quien se encargue de él” dejó de robar. que no sabe desde dónde actúa y
Conclusión que contradice lo El contraste entre ambos ejem- actúa tanto más, cuanto más velado
que dijera algunos párrafos antes plos, contraste señalado por el autor, quede para él lo reprimido.
cuando el niño estaba en tratamien- nos permitirá partiendo del segundo Necesariamente nos introduci-
to. Ahora bien, ¿por qué no era la reflexionar sobre lo que él denomina mos en la clínica del acto, pero no
vía adecuada?, ¿qué vislumbró el “complejo de desposesión”. me extenderé sobre este tema muy
autor después de tantos años?. Este complejo se inscribe en la elaborado por Lacan. Hay un artí-
No contamos con otro material demanda de amor, pero es necesa- culo bastante esclarecedor de Guy
más que la serie restringida de actos rio situar lo que afecta esa deman- Trobas donde aborda las respuestas
que da del caso, y a diferencia del da, lo que le excede, lo que mella la del sujeto frente a la angustia 7.
siguiente ejemplo no menciona inter- supuesta armonía. La demanda de Es importante retener que
pretación alguna. Tomemos nota de amor no puede sino padecer de un en ese agieren, en esas acciones
ambas cosas, repetición de actos, deseo cuyo significante le es extraño aparentemente inmotivadas, debe
sin posibilidades de interpretación –dice Lacan. restablecerse la lógica subjetiva que
(si las hubo, no se mencionan, Lacan dialectiza de esta forma las determina.
también podemos pensar que no la demanda de amor con la “prueba Volvamos a la resolución sin-
tuvieron efecto). del deseo”6, momento donde el suje- tomática del primer paciente que
En la segunda referencia clíni- to se enfrenta al reconocimiento de describe Winnicott, encontrarle un
ca, Winnicott comenta el caso de un la falta en el Otro encarnado en la trabajo, algo que anude ese espíritu
niño que roba compulsivamente, la madre, momento fecundo en la pro- inquieto, el nudo social prevalece y
situación es explicada por la madre. ducción de síntomas, en el límite de el niño logra –al parecer- un saber
El padre no ve con buenos ojos esa lo simbolizable. hacer con sus síntomas. Sin embar-
consulta por lo que no podrá aten- La madre “shockeada” del se- go, el autor duda de los resultados
derle directamente: “nada podía gundo caso que relata Winnicott es de esta curación espontánea. Prefie-
hacer yo fuera de lo que hiciese allí una madre puesta en cuestión, inte- re dejar de hablar del caso y “que
mismo y en aquel preciso instante”. rrogada en su deseo, ella no podía sea la sociedad quien se encargue
Sin embargo, no duda sobre el ca- creer que el niño dudase de su amor. de él”.
rácter de estos robos y le sugiere a la El niño roba cada vez más, suscita Esta conclusión no es ajena
madre una interpretación. “¿Por qué su angustia, y en ese sentido hay “es- a las circunstancias en que desa-
no le dices al muchacho que sabes peranza”, pero ¿de qué?. Sabemos rrolló su experiencia. Recordemos
que cuando roba no lo hace porque que el trabajo de elaboración en un que el trabajo de Winnicott sobre
desee las cosas que roba, sino que análisis nos conduce a esa “prueba la tendencia antisocial se sitúa en
está buscando algo a lo que tiene del deseo” de la cual el sujeto saldrá el contexto de la Segunda Guerra

Algunes consideracions teòriques 27


Mundial, y es en esas circunstancias ambiente temprano y en la relación bólico y de la transmisión del Ideal.
tan difíciles que él se pregunta, por del niño con él (...)”. Quiero terminar con una frase
ejemplo: ¿qué es lo que permite al de Lacan, es de su seminario sobre
niño soportar frustraciones, depriva- la angustia y dice: “la relación dual
ciones y la aparición de situaciones La relación dual pura pura desposee (...) desposee al su-
nuevas? 8. desposee jeto de su relación al gran Otro”.
Algo escapa a la lectura inme- Referida como tal a las psicosis, nos
diata trauma-efecto, algo que lo con- Para finalizar, si Winnicott encontró permite introducir otras coordenadas
duce de la desposesión del hogar o fórmulas paradójicas como las men- en la desposesión, que son aquellas
de un medio estable, a las primeras cionadas, para hacer frente a lo aso- hacia donde empuja la moderni-
experiencias, a los objetos transicio- cial de la “desposesión”, nosotros dad.
nales: ¿estamos del todo seguros de también tenemos tareas pendientes.
que en nuestro manejo con los niños Comprobamos el aumento de consul- (1) A propósito del arte de la
deprivados respetamos los fenóme- tas por este tipo de trastornos, que escritura recuerdo la dedicatoria de
nos transicionales que ya existen?9. generan situaciones de urgencia en Borges a su madre en las OC, dice
Lo cual es una forma de interrogarse lo social, sin embargo estos niños o al final: “Aquí estamos hablando
por lo que el niño aporta, por su adolescentes tienen poco que decir los dos, et tout le reste est littéra-
mundo simbólico, por sus elecciones sobre eso. No hay síntoma para ture, como escribió, con excelente
pulsionales, por sus posibilidades a ellos, a veces algunas quejas, por literatura, Verlaine”. La literatura
nivel subjetivo. eso tampoco demandan. En estas entra en ese espacio donde ya no
En ese sentido ¿cuál era la circunstancias, el trabajo conjunto hay dos, en principio no son sus
solución más adecuada para estos con la red social nos permite –a palabras (tomadas de Verlaine); el
niños de la guerra? Winnicott exi- veces- poner freno o acotar ese real Borges creador es un Borges deudor
gía como esencial un “diagnóstico pulsional, a la espera de que el su- de una lengua y de múltiples voces
psiquiátrico”, bien diferente de la jeto consienta a una elaboración de que le han precedido. Mas allá de
absurda suma de ítems patológicos saber (de su saber). la madre, de sus dones, lo que re-
que nos demuestran las clasificacio- La ausencia de síntomas -en el cuerda son las lecturas de la madre,
nes nosográficas del DSM o CIE. sentido analítico del término- forma su amor a Dickens y Eça de Queiroz.
El diagnóstico era una evaluación parte de nuestra modernidad. Con Presencia del deseo del Otro en la
de las experiencias tempranas, de Lacan, podemos leerlo como efectos que él encontró, tal vez, su urgencia
la vida familiar, de la “presencia o del declive de la función paterna. por crear.
ausencia de rasgos positivos en el Verdadera debilitación del polo sim-

Notas
Winnicott, D. W. La tendencia antisocial (1956) Escritos de pediatría y psicoanálisis. Ed. Laia
1

Trastorno disocial , DSM – IV p. 90. Ed. Masson (1995)


2

Clasificaciones internacionales de las enfermedades mentales


3

4
Publicado en International Journal of Psycho-Analysis, vol. 34 (Trad. español: Realidad y juego. Granica Editor)
5
Lacan, J. El Seminario: libro 6, (inédito), lección del 3/6/1959
6
Lacan, J. La significación del falo. Escritos I, Ed.Siglo XXI.
7
Trobas Guy. Tres respuestas del sujeto frente a la angustia: inhibición, pasaje al acto y acting out. Logos 1. Grama Ediciones.
8
Winnicott D. W. Deprivación y delincuencia, p. 217 Ed. Paidós
9
ídem

28 Algunes consideracions teòriques


Tratamiento preliminar de la
adolescencia en institución(*)

Silvia Grases.
Psicóloga, psicoanalista. Miembro fundador y
presidenta de la Asociación EBA

Francisco J. Burgos.
Psiquiatra infantil-juvenil. Director científico de la Asociación EBA

N uestra intervención pretende ser una reflexión so-


bre la adolescencia que permita una aproximación
a las coordenadas que la atraviesan y a las formas de
maravillas de Lewis Carroll. Se trata de un monólogo de
Alicia después de haber comido un pastelillo que la ha
hecho crecer desmesuradamente: “…veamos; ¿era yo la
malestar que afectan al adolescente en la época de la misma esta mañana al levantarme? Casi creo recordar
postmodernidad. Queremos referir además la experien- que me sentía algo diferente. Pero si no soy la misma, la
cia de trabajo con adolescentes que presentan trastornos pregunta siguiente es ¿quién soy yo? ¡Ah! ¡Eso sí que es
de la conducta en una institución médico-educativa. un misterio!...”. Este pasaje refleja cómo el tema de la
Al proponernos pensar sobre la adolescencia hoy, transformación del cuerpo y de la vivencia subjetiva que
recordábamos algunos artículos e intervenciones que ello provoca era una de las cuestiones fundamentales
elaboramos al respecto hace ya algunos años. Nos que se jugaban en la adolescencia. Otras eran la viven-
preguntábamos si lo allí dicho seguiría siendo válido, cia de pérdida y extravío subjetivo, la reconstrucción de
o si el panorama y las coordenadas que marcan este la identidad, la separación de los padres, el acceso a
tiempo de la vida habrían cambiado radicalmente. Uno las relaciones sexuales, la búsqueda de ideales.
de estos artículos, dirigido a un público lego y escrito Realmente todas ellas siguen siendo cuestiones
hace unos diez años, se titulaba El enigma de la adoles- fundamentales a las que el joven debe enfrentarse. Sin
cencia y se abría con una cita de Alicia en el país de las embargo, más allá de la angustia que caracteriza este

Algunes consideracions teòriques 29


momento de la vida, se constata un malestar creciente
entre los jóvenes. La sociedad parece quejarse cada día
más de los jóvenes y promover una segregación de los
adolescentes como grupo empujada tanto por lo social
como por los propios jóvenes. Las conductas de los ado-
lescentes son cada vez más transgresoras y los pasajes
al acto se dan con mayor facilidad. Los psicoanalistas
podemos constatar esta tendencia en nuestra práctica
clínica en consulta o en institución. Cabe preguntarse,
¿qué es lo que ha cambiado?

La aparición de la pubertad
produce un decalage
fundamental entre lo físico y lo
psíquico.

Si bien es cierto que tanto el adolescente de anta-


ño como el de hoy se enfrenta a un particular recorrido psíquica. Será desde este estado de prematuración que
subjetivo durante este tiempo de su vida, recorrido en el adolescente deberá afrontar los retos que el cuerpo le
el que deberá contar con los recursos con los que se plantea.
haya provisto con anterioridad, también es verdad que Nos referiremos aquí al estadio del espejo de La-
las transformaciones sociales se dejan notar y parecen can y en especial a la definición como drama que se
dificultar hoy, cada vez más, la tarea del adolescente. juega de la insuficiencia a la anticipación, al partir de la
Abordaremos ambas vertientes del problema a premisa de la prematuración biológica del ser humano.
través de dos notas: la prematuración psíquica del El drama del estadio del espejo permite la constitución
adolescente y su relación con el Otro en la época de la de una forma ortopédica de totalidad con la que asumir
postmodernidad. una identidad, la formación del yo. Lacan nos dice que
“hay que comprender el estadio del espejo como una
identificación en el sentido pleno que el analisis da a
La prematuración psíquica en la adolescencia1 este término: a saber, la transformación producida en el
sujeto cuando asume una imagen (…)”2. Esta imagen es
De todos es sabido que la pubertad pone en marcha in- una Gestalt, una imago, la “estatua en la que el hombre
tensos cambios físicos que afectan directamente el cuer- se proyecta”3.
po del niño y de la niña, obligándolos de esta manera a La formulación clásica del estadio del espejo no
una interrogación y a una rectificación subjetiva. solo evidenciaba la prematuración biológica del bebé
La aparición de la pubertad produce un decalage humano sino que la consideraba en cierta forma motor
fundamental entre lo físico y lo psíquico. El cuerpo ex- de la formación del psiquismo, el drama de la insufi-
perimenta cambios radicales, que cogen al sujeto “por ciencia a la anticipación. El sujeto asume una imagen y
sor-presa”· Lo físico va por delante produciendo irreme- ello produce una transformación. A este primer tiempo
diablemente un desfase con lo psíquico, que ahora se inaugural de la subjetivación, que corresponde a la pri-
evidenciará en estado de prematuración frente a los mera infancia, sigue un segundo tiempo de rectificación
intensos cambios corporales que deberá asumir. subjetiva, el de la adolescencia. En este segundo tiempo
De aquí se deduce la hipótesis de que no se trata lo que se pone en evidencia, de la mano de la pubertad
tanto de que la pubertad preceda a la adolescencia, y los intensos cambios en el cuerpo que implica, es la
sino de que la provoca; la pubertad provoca la adoles- prematuración psíquica del sujeto frente a la imagen que
cencia precisamente en tanto aboca al sujeto a un traba- le devuelve el espejo. De nuevo el sujeto queda impacta-
jo de elaboración debido a su estado de prematuración do por la imagen y de nuevo esta imago, el esfuerzo por

30 Algunes consideracions teòriques


Caen las identificaciones e
ideales de la infancia y se
inaugura un tiempo, el de la
adolescencia, marcado por
intensos cambios y reajustes a
nivel psíquico, que abarcan la
reconstrucción de la identidad

asumirla, lo pone a trabajar. Caen las identificaciones e vamos a extendernos en explicaciones sobre el Otro
ideales de la infancia y se inaugura un tiempo, el de la contemporáneo, pero sí queremos rescatar algunos
adolescencia, marcado por intensos cambios y reajustes puntos de interés que nos servirán para enlazar con la
a nivel psíquico, que abarcan la reconstrucción de la cuestión que nos parece fundamental aquí, y que es:
identidad, la constitución de nuevos ideales, el acceso a ¿cómo reacciona el adolescente ante el Otro contempo-
la sexualidad adulta. ráneo?, es decir, ¿cómo se las apaña el adolescente de
En este momento, es lo biológico lo que empuja, nuestra época?
y lo hace además a partir de introducir la diferencia La sociedad actual promueve el ideal de la satisfac-
sexual. En este punto nos parece que toma todo su valor ción inmediata, la promoción de goce. Es una sociedad
la propuesta de M. Recalcati de repensar el estadio del que no quiere saber de la muerte, de la pérdida, del
espejo en la adolescencia y específicamente respecto a dolor. Igualmente es la sociedad de la caída del Ideal.
la diferencia sexual4. Ahora, el niño se mira en el espejo Sin embargo, recogemos aquí una interesante obser-
y ya no se ve, ve otro, la imagen anticipada de un hom- vación de José Ramón Ubieto5, que hace notar como
bre. De nuevo una alteridad no reconocible, intrusa, y la si bien es cierto que ésta es la época de la caída del
angustia narcisista que esta transformación implica. Ideal, lo es también de la promoción de otros ideales, y
La importancia del espejo para los adolescentes, especialmente de lo nuevo, respecto de los objetos, y de
como objeto ambivalente que ofrece un soporte identifi- lo joven, respecto de las personas. De aquí se deduce
catorio pero que también genera angustia, nos conduce una cuestión interesante, y es cómo mantener renovado
hasta el Otro contemporáneo, cuya declinación históri- el deseo cuando los objetos caducan casi instantánea-
co-social desprovee a los adolescentes de un modelo mente. Es decir, que el adolescente de hoy se enfrenta a
identificatorio consistente y promueve un malestar que una tarea doblemente difícil, no solo debe acceder a su
va más allá de la angustia propia del adolescente. deseo sino que además se las ve con una gran exigen-
cia, dificultad añadida para hacerlo existir.
Todo ello nos hace cuestionarnos sobre los ritos de
La relación del adolescente con el Otro en la paso adolescente, que hoy parecen ser más bien ritos
época de la postmodernidad de pasaje al acto. El adolescente de antaño lograba
una separación del Otro a través de pequeñas transgre-
El Otro contemporáneo es un Otro inconsistente que ha siones, por ejemplo, fumarse un cigarrillo. La eficacia
perdido autoridad y que se muestra incapaz de sumi- simbólica era suficiente. Pero en la época actual, ante
nistrar identificaciones válidas para el adolescente. No la falta de un Otro consistente, las transgresiones se han

Algunes consideracions teòriques 31


vuelto extremas y a menudo ponen en juego la vida del importantes dificultades en el medio escolar, social y fa-
joven, haciéndolo cruzar delante de un tren cuando éste miliar— ante la ausencia de una respuesta unívoca que
ya está casi encima por ejemplo. Este tratar de llegar organice la solución de la problemática, se ha optado
al límite se facilita más cuando la pulsión de muerte se por situar la conversación “entre varios” (en este caso
desliga de la de vida. psiquiatras, psicólogos, psicoanalistas, pedagogos,
Estos pasajes al acto resultan de la dificultad de educadores, sociólogos, antropólogos, profesionales de
algunos jóvenes para subjetivarse. Se podría decir que justicia juvenil, familias y adolescentes) en el centro de
la separación que operan estos jóvenes hoy se basa en la cuestión, en sostener una conversación que sustituya
un uso de la transgresión, a través de rechazar la ley, al discurso magistral que nos habría de solucionar el
encaminado a hacerse expulsar, ya sea de casa, de la problema a todos.
escuela o del sistema social. Esta sintomatología y este colectivo propios de
nuestra época, la época de la globalización, de la totali-
zación, de la generalización de los sistemas educativos,
sanitarios y sociales, el tiempo de los derechos funda-
Al principio la UME era un mentales, etc. aparece bajo la forma de la exclusión.
Este es un colectivo que perteneciendo a este sistema
cajón de sastre, un lugar donde se excluye en tanto que rechaza el ejercicio de estos
derechos —en concreto el derecho a la educación, a
iban los que no tenían ningún recibir tratamiento y apoyo de los servicios sociales—.
lugar, era como el conjunto que Nos muestran la imposibilidad de educar, curar o pres-
tar los servicios sociales a todos. Al principio la UME
contiene los elementos que no era un cajón de sastre, un lugar donde iban los que no
tenían ningún lugar, era como el conjunto que contiene
pertenecen a ningún conjunto los elementos que no pertenecen a ningún conjunto
(alumnos, pacientes, ciudadanos...). Se constituyó como
un espacio de “exclusión interna”: pertenece a los siste-
mas educativos, sanitarios y sociales y al mismo tiempo
Jóvenes como estos, difícilmente clasificables, son acoge a los que los rechazan.
los que van a parar a la UME (Unidad médico-educa- Estos adolescentes se excluyen de una manera que
tiva) de la que hablaremos ahora. El reto de la unidad podemos denominar activa, no automática. No se trata
es como hacer para acoger y dar voz al sujeto que se sólo de un no querer saber nada, hay una serie de con-
expresa en actos, y como permitirle el acceso a una sub- ductas, comportamientos, y fundamentalmente “actos”,
jetivación que lo reintegre al campo social. que ponen de manifiesto no un rechazo de la ley —por
otra parte frecuente en la adolescencia— sino una trans-
gresión de la ley y que traen aparejado una respuesta
Trastornos de conducta en la adolescencia de los representantes de ésta en el sentido de la exclu-
y su tratamiento en una Unidad Médico sión y la punición. En la UME los adolescentes conocen
Educativa6 la ley general y saben que la transgreden, lo que des-
conocen es su propia ley. El adolescente con trastornos
En ninguna disciplina hayamos una localización y de conducta actúa, transgrede la ley general en nombre
definición clara de esta temática, para los manuales de una ley propia que no conoce y que es vivida como
de clasificación psiquiátrica hay que situarla entre la angustia, miedo, nerviosismo, aburrimiento, etc. En la
hiperactividad, el negativismo desafiante y lo disocial o UME la orientación del trabajo se plantea encaminada
bien nos tenemos que ir ya al código Z. en el ámbito de a convertir estos actos en discurso, esta ley desconocida
los tratamientos posibles que se proponen queda refle- en humana, socializarla, pasarla al lenguaje y sobre
jada esta indefinición y será según la disciplina lo haya todo que el adolescente la conozca, la subjetive y pue-
definido. Es difícil hacer generalizaciones o propuestas da hacerse cargo.
que alcancen a todos los casos. En nuestra experiencia En el dispositivo, en primer lugar interesa cortar
de lo que uno se da cuenta es de que en cada caso se esta repetición, este “más de lo mismo”, lo que conlleva
plantean cuestiones tan singulares y propias que se hace el “consentimiento” a algo nuevo —saber sobre la ley
difícil agruparlos bajo un mismo epígrafe. En la UME propia que aparece en diversas formas de angustia—.
—que recibe adolescentes entre 12 y 16-18 años con Se trata por tanto de poder traducir los actos en pala-

32 Algunes consideracions teòriques


bras o poder decir esta ley desconocida por parte del de enfrentarse a lo nuevo —muchas veces prefieren que
adolescente, que éste pueda hablar según su propia ma- continúen tratamiento con nosotros hasta “el final”... de
nera y que el equipo lo quiera escuchar y valorarlo —en la época escolar— y hasta por parte de las instituciones
este equipo de varios profesionales se incluye también de la salud mental para colaborar en momentos de crisis
la familia o quien tenga la tutela de los adolescentes—. por considerarlos “intratables” —“a veces inclasifica-
Lo que no interesa y se excluyen son las conductas y lo bles”—.
que interesa son las palabras, las conversaciones, las En los últimos años apreciamos en la UME una
explicaciones... tal vez es lo único que interesa, del acto clara tendencia a la disminución de la edad de los
al pensamiento. adolescentes que nos vienen derivados, se trata casi de
En lo particular del trabajo psiquiátrico, en el senti- púberes —hemos hecho una propuesta a la Administra-
do de la prescripción de psicofármacos, lo introducimos ción para la apertura de una UME de segunda infancia,
dentro de la conversación en los casos que o bien ya es decir, de 6 a 12 años— lo que conlleva una modifi-
están medicados o bien que el equipo valora esta posibi- cación en el planteamiento de salida. Si el trabajo por
lidad. Hay dos criterios fundamentales para ello: cuando la inclusión que se realizaba al principio se encaminaba
hay una invasión llena de afectos de la mente y del cuer- a una salida laboral, en estos momentos lo que orienta
po o en los momentos de vacío y sentimiento de muerte el trabajo es el retorno a los institutos y a su entorno
subjetiva, en ambos casos siempre y cuando el sujeto no habitual. También aparece con fuerza un mayor tiempo
disponga de recursos para apaciguar lo que es ruinoso posible para el trabajo con la paradoja de “no hacerlo
para él y su expresión tome la vía de una alteración del servir para mantener la exclusión”.
comportamiento. Aquí el uso de los psicofármacos —sin Con todos estos cambios y tendencias se ha hecho
amordazar al sujeto— puede propiciar en el adolescen- más patente la necesidad de que en este trabajo “entre
te la posibilidad de que pueda decir lo que le sucede. varios” que agrupa a los profesionales y familias de la
Al introducirlo en la charla y tomar en consideración lo UME precisa de la participación de profesionales de
que nos dicen, tratamos de acoger su devenir subjetivo, las redes educativas, sanitarias y sociales que se co-
intentando incitarlos a que no dimitan de la tarea de responsabilicen en la política del consentimiento para
hacerse sujetos de su destino, sea el que sea. la “inclusión”. No se trata de producir sujetos como los
No siempre encontramos disposición por parte de otros, son sujetos muy particulares con estilos de vida a
los adolescentes a abandonar el trastorno, o por parte veces extraños para los demás, pero para que el trabajo
de las familias a tratar el trastorno de la manera que pro- se pueda llevar adelante hay que permitir y por tanto
ponemos, o por parte de las escuelas a tener un deseo querer su inclusión.

Nota
(*)1 Ponencia presentada en el Primer Seminario de la Asociación Jonás. “La nueva cuestión preliminar”. Gubbio (Italia). Julio
2003
2
El concepto de prematuración psíquica en la adolescencia es una hipótesis formulada por Francisco Burgos que se basa en una
idea sugerida por la lectura de los Tres ensayos de teoría sexual de S. Freud y que ahora desarrollamos aquí conjuntamente.
3
J. Lacan, El estadio del espejo como formador de la función del yo tal como se nos revela en la experiencia psicoanalítica, en
Escritos 1, Siglo XXI editores, pág. 87.
4
Id., pág. 88
5
M. Recalcati, Clínica del vuoto, Franco Angeli, Milano 2002, pág. 61
6
J.R. Ubieto, Familia y violencia, en Cuadernos de psicoanálisis (Revista del ICF en España), nº 25 Síntoma y lazo social, Ediciones
Eolia, Bilbao 2001.
7
Este desarrollo se basa en la experiencia de dos años en la UME en la que participo como psiquiatra y en los textos inéditos del
actual responsable Francesc Puntí

Algunes consideracions teòriques 33


La influència dels factors
psicosocials en l’evolució del tmg
en nens i adolescents

Aleix Caussa.
Investigador social

A mb la intenció d’afavorir un millor coneixement del


camp complex i poc definit encara dels Trastorns
Mentals Greus (TMG) en la infància i l’adolescència,
seguien el seu tractament al CSMIJ de Nou Barris.
L’objectiu de la investigació és poder conèixer quins són
els factors psicosocials2 que influencien en la gestió de
s’inicia una relació de col·laboració entre la Fundació la vida quotidiana que fan els referents dels nens i ado-
Nou Barris i el Departament de Psicologia de la Salut i lescents amb TMG. Conèixer el lloc que ocupa el nen en
Psicologia Social de la Universitat Autònoma de Barcelo- la família, les vinculacions entre la organització familiar
na. Aquesta relació pren forma i s’estabilitza mitjançant i el TMG o la pèrdua de funcions familiars bàsiques a
la recerca que ambdues entitats inicien l’any 20011 causa de la desorientació que senten els familiars vers
sobre l’evolució dels factors psicosocials implicats en el TMG, són també elements primordials per la cura i el
l’evolució dels TMG en nens i adolescents. tractament dels nens i adolescents.
La població d’aquesta recerca van ser pares i En aquest article mostrarem alguns dels coneixe-
educadors-tutors de nens i adolescents amb TMG que ments que es deriven del gruix de la recerca. Cal dir

44 Investigacions clíniques
que a diferència de la recerca, no es mostraran els relats locos. Ahora este año ya es más tranquila, porque
dels educadors encarregats de la tutela de nens i ado- ahora él ya iba solo a... lo recoge un autobús, ya va
lescents. En aquest article ens centrarem únicament en solo, va solo a casa; él tiene sus llaves, él abre, él
els relats dels pares, en no voler ubicar aquests canvis y él... Este año es más relajado, pero hasta el curso
en l’organització únicament en un àmbit de caire més pasado era correr, correr. Yo trabajo. A lo mejor los
professional, que seria més típic dels educadors. Així, horarios no me coincidían, tenía que ir, bueno, co-
l’objectiu d’aquest article serà mostrar els canvis que rriendo a todos los sitios. Y ahora este año estamos
suposa l’aparició del TMG en l’organització i gestió del más relajados, gracias a Dios, porque hasta ahora
dia a dia dels pares de nenes i adolescents amb TMG. han sido once años de correr, correr. (Ent. 8: 2)
En un primer moment, mostrarem un seguit de relats
extrets de la investigació que ens permetran aproximar- A aquestes relacions amb els professionals també
nos a com es dóna sentit i significat a aquests canvis. En hi hem d’afegir les tasques i activitats relacionades amb
un segon moment, presentarem un apartat més analític, la gestió de la casa. Tot plegat pot resultar molt estres-
on discutirem amb més profunditat les implicacions del sant per a la família:
que els pares ens expliquen.
Des d’aquesta aliança entre la UAB i la Fundació “Ya no puedes estar como relativamente tendrías
Nou Barris, pensem que la introducció de la recerca3 psi- que estar: llegando a tu casa, comiendo en condicio-
cosocial en aquest camp pot portar nous coneixements nes... Tienes que ir corriendo por la cría, el trabajo,
que serveixin com a eina d’orientació per als profes- la cría, los médicos, la compra, lo otro... Entonces
sionals en les problemàtiques de salut mental infantil i esto es un estado de nervios que lo vas llevando...
juvenil, així com una incidència positiva sobre l’evolució “ (Ent. 3:16)
i el pronòstic dels TMG.
D’aquesta manera, els fills esdevenen el centre de
la vida familiar. La major part de les activitats i dinàmi-
Els canvis en la vida quotidiana ques de la família, fins i tot la decoració i distribució dels
mobles de la casa, estan en relació amb les necessitats i
L’aparició del Trastorn Mental en una llar genera tot un conductes del fill o filla.
seguit de canvis inesperats en l’organització quotidiana
d’una família. Les dinàmiques familiars han de passar “P2: Llegó un momento que lo teníamos encerrado
a tenir en compte la malaltia del fill, amb el que això en el recinto del comedor porque
implica; canvi de rutines en el treball, a la casa, en el P1: En el comedor nos poníamos y cerrábamos
temps lliure, etc. puertas
En un primer moment, a les activitats que ja desen- P2: Puertas con pestillos
volupaven els pares durant el dia s’hi afegeixen les acti- P1: Y sólo porque era incontrolable “ (Ent. 6: 1)
vitats necessàries per a la gestió del trastorn: les visites al
metge, al logopeda, al psicòleg, etc. Els pares obren tot Veiem com el dia a dia dels pares està molt orientat
un seguit de noves relacions orientades al tractament del cap a l’atenció de les necessitats dels fills. Una atenció
trastorn mental. A més, també es veuen obligats a rene- que normalment implica una dedicació absoluta per part
gociar aquelles relacions que ja tenien estabilitzades en de la família, les 24 hores del dia. Tot i que en algunes
el seu dia a dia, fruit de les noves necessitats dels seus famílies la dedicació es troba distribuïda entre els seus
fills: l’escola, el treball o els amics. membres, veiem que majoritàriament són les mares les
Aquest canvi que suposa la irrupció del trastorn que porten la cura i l’atenció de les necessitats dels fills.
mental queda palès en els esforços que els pares han
de realitzar per a poder gestionar agendes sobrecarre- “Sí, su padre, de hecho, solamente le lleva a las
gades. nueve al colegio (...) porque por las noches ya no
lo ve, y si algún día a mediodía puede venir, pues
“Luego tienes miles de entrevistas con los profeso- bien” (Ent. 7: 8)
res, con los psicólogos, que luego con los asistentes
sociales de los centros de educación; porque, claro, “Bueno mi marido es que no va también porque él
son muchas cosas. Luego también, aparte, hace inte- trabaja en la obra y viene muy tarde. Ahora porque
gración. Ya tienes que tener entrevistas en los otros ha plegado un rato antes... entonces claro... (Ent.
centros con los educadores y tal... y, o sea, es de 3: 3)

Investigacions clíniques 45
Així doncs, no és d’estranyar que les mares siguin
les que pateixen més els efectes d’aquesta centralització
de les activitats en el nucli familiar. Tant és així, que ens
trobem relats de mares que se senten absorbides per la
dedicació als seus fills.

“Pero me estoy dando cuenta de que tengo 39 años,


de que he perdido muchas cosas y quiero recupe-
rar... No todo, pero mi vida, mi espacio. O sea, soy
una persona individual y necesito respirar. Y necesi-
to pues eso, vivir. Sí, Manuel es mi hijo pero no es
mi apéndice” (Ent. 8: 13)

Ara bé, algunes mares creuen que elles també són


responsables d’aquesta exclusivitat en l’atenció del fill.
Ben segur que les coses podrien canviar si les mares
deleguessin algunes tasques a d’altres membres de la fa-
mília. “O sea, es que queremos organizarlo todo, todo,
todo. Todo, o sea, pensamos que somos las que lo sabe-
mos todo” (Ent. 8: 14-15). A vegades no és fàcil delegar
a d’altres persones les atencions de les necessitats dels
fills. I més quan aquesta atenció conforma i dóna sentit a
cions dels fills davant les situacions de lleure habituals
les teves activitats quotidianes.
acaba per desencoratjar qualsevol activitat de caire
Serien aquestes relacions d’exclusivitat les que
social dels pares.
dificultarien fer una separació entre el jo i el fill. Per un
costat, no es marcaria un límit que possibilitaria que els
“P2: Sí, es él. Sí, exactamente. Y, por ejemplo, a
pares creïn un espai de reflexió per donar sentit a les
nosotros antes pues nos gustaba salir a tomar el
seves pròpies preocupacions. Les quals, entre d’altres,
aperitivo con nuestros hijos mayores. Eso ya se ha
tenen molt a veure amb el sentit que es donen a si ma-
acabado
teixos com a pares en relació amb els seus fills.
P1: No, si no se puede, se acabó
Per un altre costat, aquesta impossibilitat de dis-
P2: Àlvar lo podemos llevar, pero es sentarte y cuan-
tanciament també dificulta les relacions dels pares amb
do él ha acabado su refresco
el seu entorn, per exemple amb la xarxa d’amics. Tant
P1: [No, te tienes que levantar]
és així, que en algun casos hem pogut comprovar que
P2: [Ya sabes que]
alguns pares mostren reticències a quedar amb els seus
P1: Cuántas veces nos hemos levantado con todo
amics perquè pensen que el seu fill o filla es fa pesat per
puesto y tal, y hemos dicho bueno pues nada, va-
als altres. I les amistats es van perdent:
mos”. (Ent. 6 )
“... Pierdes muchas cosas de tu vida, ¿eh? Muchas
Moltes vegades els relats dels pares ens expliquen
cosas. Pierdes relación. Bueno, la relación con los
l’angoixa que els provoca les situacions en les quals es
amigos que teníamos antes, la hemos prácticamen-
veuen immersos fruit del trastorn mental dels seus fills.
te... Claro, no puedes ir a su casa ¿Cómo llevas a
un niño que está chillando día y noche a casa de
“Es que eso de ser adulto no quiere decir que dejes
unos amigos? A ver, no puedes. Es que no puedes,
de ser un ser humano, con tu sensibilidad... Y claro,
es imposible” (Ent. 8: 13)
nosotros, ¿eh?, esos problemas te afectan evidente-
mente. No te puedes apartar de ellos “ (Ent. 9: 5)
A més, hem de tenir en compte les dificultats
d’adaptació que presenten els fills davant certs con-
“Yo, como madre, a mí me cuesta muchísimo. Voy
texts, fet que fa que moltes de les activitats d’esbarjo i
haciendo... Unas veces pues lo llevo mejor, otras
d’interacció esdevinguin una càrrega esgotadora i una
veces, pues, la verdad, es que me baja la moral
font d’angoixa per als pares. La incertesa de les reac-

46 Investigacions clíniques
porque, claro, ves que tu nene no lleva el ritmo “ Una altra via que tenen els pares per a poder
(Ent. 3: 17) situar-se davant els seus fills, i reduir així les angoixes,
són les relacions amb d’altres famílies amb problemes si-
Com a conseqüència de les angoixes que senten, milars. Aquestes relacions permetran als pares compartir
trobem que alguns dels pares han anat a un psicòleg experiències que els seran molt útils a l’hora de situar-se
recomanats pel CAPIP. El psicòleg proporcionarà la davant els seus fills.
possibilitat de trobar un punt de vista extern, un espai
on tractar les seves preocupacions personals. Gràcies “Sí, pero cada uno con su problema. Sí, sí, a veces
a la teràpia molts pares han pogut reflexionar i situar- hablamos, cada uno: ‘tú tranquila que, cuando sea
se vers totes aquelles situacions que defineixen com a grande, pues ya tu nena... ya verás como poquito a
problemàtiques. poco...’ O sea que, sí, además de buen hablar, yo
tengo a veces que desahogarme porque es que es
“Pero también me gustaría que saliera y que estu- lógico... Yo estoy hablando y tienes que desahogar-
viera... que tuviera su novia y se preparara, o, qué te porque es que esto no te lo puedes... te lo estás
sé yo, es que me pienso mucho el día de mañana. tragando, un día y otro y otro y dices: ‘jolines, es
Te lo digo porque yo voy a una psicóloga, estoy en que siempre estás con lo mismo’, ‘jolín, es que es mi
una psicóloga hace ya ((puajj)) seis o siete años y hija y lo estoy pasando yo’. Vale, que yo entiendo
siempre le digo lo mismo. Y me dice que me obse- que no tienes que estar siempre con lo mismo, pero
siono mucho con el día de mañana. Digo, ya, pero tengo mis subidas y mis bajadas; esto es lógico, y yo
es que yo... yo qué sé. Yo pienso en el día que yo misma estoy luchando y yo misma voy haciendo...
no estaré porque... eso no sé cuando será... pero, y yo misma... y el día a día cuesta, cuesta” (Ent. 3:
bueno, llegará, ¿no?” (Ent. 5: 19) 28)

A part de poder treballar les seves pròpies neces- Les referències d’altres pares permeten trobar
sitats vitals, la teràpia permet treballar el sentit que es patrons d’organització que donen solucions-sentit a
donen a si mateixos com a pares. I és que les dificultats molts dels problemes derivats de la irrupció del trastorn
de la relació amb nens amb TMG pot arribar a ser una mental. En l’acte de compartir les seves experiències els
font de qüestionament de la seva pròpia competència pares troben eines per organitzar la seva quotidianitat i
com a pares per a alguns progenitors. el seu paper en ella.

Investigacions clíniques 47
Conviure amb el Trastorn Mental Greu efectes de la simptomatologia del nen o adolescent, sigui
el cas d’haver de marxar d’un bar abans d’acabar-se la
En aquest apartat passarem a centrar-nos en les impli- consumició o sigui el cas d’haver de deixar d’anar a casa
cacions del que ens comenten els pares sobre els canvis dels amics pel comportament violent del fill. La família or-
que els ha suposat la manifestació del trastorn mental en ganitzarà i restringirà els seus recorreguts vitals segons les
els seus fills. conductes i necessitats dels seus fills amb TMG.
El material recollit a les entrevistes amb familiars A banda d’això, els membres de la família es troba-
relacionats amb nens i adolescents amb TMG constitueix ran davant l’aparició de requeriments fruit de les noves
una informació força significativa sobre les dificultats amb necessitats dels seus fills. Han d’obtenir certs serveis del
què aquells es troben des del moment de la irrupció de la sistema sanitari, han de conèixer les seves disposicions
malaltia. En una època en què, com a conseqüència de legals que empren en determinades circumstàncies o
la progressiva implantació de models d’atenció basats han de buscar nous centres per a les activitats quotidia-
en la comunitat, la cura en primera instància de les per- nes dels fills adaptats a les seves necessitats. Aquest fet
sones amb malalties mentals recau, bàsicament, en els suposarà una sobrecàrrega de l’agenda dels pares que
seus familiars o substitutius, és evident que conèixer les els disposarà a anar a corre-cuita tot el dia. Tot i aquest
vicissituds derivades de la convivència amb un nen amb alt nombre de cites durant tot el dia, les mares mai tenen
TMG esdevé, cada cop més, una necessitat ineludible. la garantia d’aconseguir allò que persegueixen per als
A més, si tenim en compte el relatiu buit que hi ha a la li- seus fills. Per exemple, a les entrevistes es pot apreciar
teratura clínica respecte de les problemàtiques d’aquells perfectament el que costa a les mares de trobar un lloc
que són els referents fonamentals d’aquests nens i ado- on deixar els fills en les estones de lleure. La manca de
lescents amb TMG, la lectura d’aquestes pàgines i de la preparació d’alguns centres o la simple resistència a fer-
investigació en la seva totalitat pot resultar una eina molt se càrrec de nens potencialment tan problemàtics suposa
útil per aquells la tasca dels quals té a veure amb donar una forta trava en la cerca de moments d’intimitat d’unes
suport a aquesta part de la població. mares que es troben enganxades als seus fills o filles.
El fet de donar un lloc privilegiat a la paraula És obvi, també, que les transformacions que ha so-
d’aquells que acompanyen aquest nens està totalment fert el model de vida familiar en els darrers anys tampoc
justificat4, ja que, com assenyala Antonio Di Ciaccia5, no ajuda a portar el pes de la càrrega familiar. Efectiva-
els pares dels nens amb TMG tenen un saber fonamen- ment, la progressiva desaparició de la família extensa a
tal per al treball dels clínics. Perquè un tractament sigui favor de la nuclear, així com el creixent nombre de famí-
possible, cal donar les condicions perquè aquest saber lies monoparentals, configuren un escenari en el qual el
emergeixi; cal, en definitiva, donar un lloc a l’altre de recurs als serveis públics es torna més i més necessari. El
referència dels nens. suport de la família que, com s’ha confirmat en diferents
estudis7, fa minvar l’estrès dels pares, ha de ser substi-
tuït per una xarxa assistencial que, malauradament, no
La càrrega familiar dóna la resposta necessària.

Així, el primer que podem constatar és que l’aparició del


trastorn mental suposa per a l’entorn familiar del nen o L’organització del nucli vivencial
l’adolescent una càrrega6 afegida a les que normalment
són pròpies de la vida familiar. De fet, a la literatura Els horaris, els ritmes, els espais passen a adaptar-
especialitzada es distingeix entre càrrega subjectiva se al nen, a partir dels condicionants que la malaltia
i càrrega objectiva. La primera es refereix a aquells sembla imposar, deixant de costat, o en un segon pla,
efectes de la malaltia sobre la família que tenen a veure les necessitats de la resta de membres de la família, amb
amb processos emocionals de diferent índole i que a les la qual cosa arriba a posar-se en perill la coherència
entrevistes hem pogut apreciar en termes de dolor empà- mateixa de la família i el seu desenvolupament com a
tic, pena crònica o dificultats en l’elaboració de pèrdues unitat. Les últimes conseqüències d’aquest procés es pre-
simbòliques. La segona té a veure amb les demandes senten en la forma de supressió de les prioritats familiars
de dedicació addicional que la malaltia provoca en els no relacionades amb la malaltia i de negligència de les
membres de la família. qüestions normatives que faciliten el desenvolupament
Els diferents fragments recollits en aquest article ens familiar8.
mostren algunes de les repercussions que té l’aparició del En la majoria dels casos és la mare la que més ac-
trastorn mental. A vegades, la mateixa família pateix els tivitats de la seva vida personal sacrifica per ocupar-se

48 Investigacions clíniques
del nen en qüestió. En canvi, el pare ocupa de manera amb TMG obliga el seu entorn a reorganitzar-se. Ara bé,
creixent el seu temps, i roman molt sovint absent durant aquesta reorganització pot implicar certs riscs que, com
llargs períodes. Colette Soler9 destaca, a partir de la hem vist al llarg de les entrevistes, amenacen l’estabilitat
seva experiència en el tractament psicoanalític a moltes del grup: el referent del nen entra en un cercle viciós --en
mares, que hi ha quelcom en la relació d’una mare amb caure en una dinàmica d’establiment de mesures que
els seus fills que té a veure amb el sacrifici de si mateixa. porten a infraccions del nen que, al seu torn, porten a
Moltes vegades, segons hem pogut observar, aquest noves mesures que són cada cop més fortes i que poden
sacrifici es realitza per sentiments de culpabilitat que se desembocar en situacions de violència mútua propicia-
sostenen sobre la creença de ser la causant o la que ha des pels sentiments d’impotència que es generen— que
transmès d’alguna manera la malaltia. Cal assenyalar, no fa més que empitjorar la situació tant del nen –que so-
tanmateix, que alguns dels pares entrevistats relaten no- vint queda reificat com a problemàtic-- com de si mateix.
ves configuracions familiars en les quals ambdós cònju- El nen amb TMG té una important dificultat de respondre
ges es coresponsabilitzen de la cura dels fills. dòcilment a allò que l’altre de referència li demana, amb
Aquesta organització adaptada al subjecte amb la qual cosa s’arriba, en els casos extrems, al fracàs de
TMG fa que es dilueixin certes normes en la organització la seva funció: els pares expressen el sentiment que part
familiar. Veiem, com destaca Lacan10, que el subjecte d’allò que succeeix al nen és degut al fet que ells no ho
amb TMG qüestiona l’ordre simbòlic establert, i presenta fan suficientment bé. En general, els que conviuen amb
dificultats per vincular-se socialment. Sovint, hom troba un TMG se senten altament demandats i consideren que
casos de TMG que mostren el seu desenganxament dels les ajudes i recursos socials són insuficients. El que es
altres a través de la seva dificultat per entendre i connec- dedueix d’això és que cal construir un circuit que per-
tar amb el codi de conducta establert. Presenten evidents meti que el nen no depengui absolutament del seu tutor,
dificultats per entendre un sistema de normes socials, evitant d’aquesta manera l’adaptació del nucli de convi-
realitzar jocs reglats, o organitzar-se autònomament el vència a les característiques de la malaltia així com els
seu temps. És per això que, d’alguna manera, el subjecte possibles processos cronificadors.

Notas)
1 4 7
Estudi qualitatiu dels factors psicoso- Per a una revisió d’anàlisis similars a Vegeuure Warfield, M. E. (2001)
cials implicats en l’evolució dels tras- aquest que presentem aquí, hom pot Employement, Parenting, and Well-
torns mentals greus (TMG) en nens i consultar Marsh, D.T. i Jonson, D.L. Being Among Mothers of Children
adolescents (2001-2002). (1997). The Family Experience of with Disabilities. Mental Retardation,
2 Mental Illness: Implications for Inter- 39 (4): 297-309.
Parlem de factors psicosocials alen vention. Professional Psychology: Re- 8
referir-nos a aquells elements psico- search and Practice, 28(3):229-237 Vegeuure González, S.; Steinglass,
lògics i socials que influencien en la o, també, Barker, S.; Lavender, T. I P. I Reiss, D. (1989) Putting the Illness
construcció del sentit i del significat Morant, N. (2001) Client and family in its Place: Discussion Groups for Fa-
en les relacions, en aquest cas, dels narratives on schizophrenia. Journal milies with Chronic Medical Illnesses.
referents dels nens i adolescents amb of Mental health, 10 (2): 199-212. Family Process, 28: 69-87.
TMG;. Jja sigui en la relació amb un 9
mateix o en la relació amb els altres. 5
di Ciaccia, A. (2001). Una pratica Soler, C. (1993). La cosa materna
al rovescio. En AA.VV. Desarrollos en el inconsciente del niño. En Actas
3
Tot i que la metodologia qualitativa actuales en la investigación del autis- de las Sextas Jornadas de Trabajo
exigeix un tractament intensiu de la mo y psicosis infantil en el área me- de Forum-Nueva Red Cereda. Barce-
informació i no permet una univer- diterránea. Madrid: Ministero Affari lona: Forum.
salització dels resultats, fa possible Esteri-Ambasciata d’Italia. 10
un aprofundiment comprensiu i inter- Lacan, J. (1987). Discurso de clausu-
pretatiu i comporta, també, un major 6
Per a un estudi dels diferents factors ra de las Jornadas sobre la psicosis
poder explicatiu. Això és possible, que influencien la càrrega familiar, en el niño. El Analiticón, 3: 5-15.
principalment, perquè la utilització vegeuure Lowyck, B; de Hert, M.; Pee-
de mètodes qualitatius té com a ters, E.; Gilis, P. i Peuskens, J. (2001)
característica principal l’anàlisi i International Journal of Psychiatry in
interpretació del significat que les Clinical Practice, 5: 89-96.
persones donen a les seves accions
i a les accions dels altres.

Investigacions clíniques 49
Notas sobre el Trastorno Mental
Grave infantil y adolescente

Clara Bardón.
Psicoanalista. Miembro de la ELP.
Psiquiatra en el CSMIJ Nou Barris. Fundación Nou Barris.

C uando hablamos de Trastorno


Mental Grave (TMG) nos referi-
mos a un trastorno mental que apare-
repercusiones en el ámbito subjetivo,
familiar, escolar y social en los que
se desenvuelve la vida del niño y en
problemática y sus características
subjetivas. En segundo lugar las pe-
culiaridades de su entorno familiar.
ce en la infancia o la adolescencia. su futuro. En tercer lugar, el medio escolar y
Un tiempo de la vida en el que tiene La denominación de TMG en social del que forma parte.
lugar el proceso de construcción de la salud mental constituye un cam-
la subjetividad, tanto en lo que se po complejo debido a los diversos
refiere a la estructura de lo simbólico factores interrelacionados. En primer El TMG infantil y adolescente
como a las diversas identificaciones lugar las características psicopato- versus el TMS del adulto1
y los vínculos sociales. Por ello, una lógicas del niño o el adolescente,
perturbación significativa del proce- que estarán a su vez condicionadas El TMG infantil y adolescente en-
so a este nivel va a tener importantes por la edad de aparición de la globa diferentes patologías, en la

50 Investigacions clíniques
serie de las psicosis, algunos tras-
tornos del desarrollo del lenguaje
El TMG infantil y adolescente engloba
y algunos trastornos graves de la
personalidad. Pero presenta ciertas
diferentes patologías, en la serie de las
características que lo diferencian del psicosis, algunos trastornos del desarrollo
Trastorno Mental Severo tal como se
concibe en el adulto, ya que en este del lenguaje y algunos trastornos graves de
caso la connotación “severo” impli-
ca un criterio de cronicidad. la personalidad
Por el contrario, en niños y
adolescentes, si bien el trastorno
mental como tal no se puede evitar,
sí pueden en muchos casos evitarse
la cronificación del cuadro y las con- lismo poco conveniente, a partir del la problemática de los niños que
secuencias invalidantes que tendría cuál podría creerse que el trastorno están a su cargo.
para el futuro del sujeto. mental como tal es posible evitarlo Esto permite establecer pla-
La infancia y la adolescencia interviniendo sobre toda la pobla- nes de actuación con los servicios
constituyen el periodo de la vida ca- ción con ciertas medidas de tipo implicados que pueden ir desde la
racterizado por momentos cruciales informativo o educativo para las reorientación de su trabajo por tener
en la construcción de la subjetividad familias. una idea más precisa del problema,
y los vínculos sociales y donde la es- Consideramos aquí como hasta la reconducción de actitudes
tructura familiar y sus peculiaridades prevención la detección precoz del respecto al niño o el adolescente
tienen una importancia capital. Por trastorno, posibilitado por el trabajo para evitar conductas estigmatizan-
este motivo, es importante poder de coordinación e interconsultas que tes y de segregación muy frecuentes,
discriminar, en cada caso, lo que ya se realiza con otros dispositivos de como son los castigos o expulsiones
está definido de la estructura del su- la zona que tratan de forma regular de la escuela por los trastornos de
jeto de aquellos otros aspectos que o incluso diaria con el niño o ado- su comportamiento, o las burlas de
pueden ser modificables si se produ- lescente, especialmente el pediatra los compañeros. También facilita la
ce una detección a tiempo del tras- o médico de familia y la escuela. En derivación al CSMIJ para valoración
torno que posibilite una intervención este último caso la intermediación clínica de aquellos casos que aún no
precoz sobre el sujeto, la familia y del EAP3 es fundamental ya que en han consultado.
las repercusiones que tiene el trastor- muchas ocasiones es el primer equi- La detección a tiempo permite
no en otros aspectos de su vida. po especializado en ser consultado así el tratamiento precoz de ciertos
La intervención es compleja por los trastornos de diversa índole trastornos que presentan señales de
porque es necesario tener en cuen- que muestra el niño en la escuela. alarma que pueden hacer sospechar
ta muchos factores, como ha sido El trabajo continuado entre ambos un TMG y evitar su agravamiento.
señalado. equipos, del EAP y el CSMIJ, permite Por ejemplo, los llamados trastornos
ir creando una cultura común en re- del desarrollo del habla y del len-
lación a este tema y la elaboración guaje o las dificultades en el vínculo
Un programa de atención a de protocolos de detección y deriva- con el otro en la primera infancia,
los TMG2 ción a partir de las diversas señales los trastornos graves del comporta-
de alarma que se pueden producir miento en la segunda infancia o la
La importancia de un programa de en el ámbito escolar. Lo mismo su- irrupción masiva de la llamada “fo-
atención específica para los trastor- cede con la Atención Primaria de bia social” en la adolescencia, por
nos mentales graves es la de poner Salud (APS). citar sólo algunos de ellos.
de relieve no solamente las necesi- Si bien son éstas las dos prin-
dades asistenciales y de tratamiento cipales fuentes de detección y deri-
sino los aspectos preventivos. vación, no es menos importante la Acerca del diagnóstico
Respecto al concepto de pre- detección a partir de los Servicios
vención en salud mental es preciso Sociales, donde se atiende a las fa- Las patologías englobadas en lo que
situarlo en su justo lugar y límites milias y se puede, si se presta aten- consideramos trastorno mental grave
para no deslizarse hacia un idea- ción, conocer de manera indirecta, son: el autismo y psicosis de apari-

Investigacions clíniques 51
Las patologías englobadas en lo que consideramos trastorno
mental grave son: el autismo y psicosis de aparición en la
infancia, la esquizofrenia infantil y adolescente, las psicosis
afectivas y algunos trastornos

ción en la infancia, la esquizofrenia desencadenamiento de la psicosis, inicio del proceso de simbolización


infantil y adolescente, las psicosis por lo que es preciso afinar en el de su realidad y de su posición en
afectivas y algunos trastornos graves diagnóstico diferencial. ella.
de la personalidad (de tipo límite o En este sentido, el diagnóstico En cada caso, este proceso in-
disocial). a partir de la estructura subjetiva cluye en sus inicios la simbolización
Pero no es suficiente un diag- y del vínculo con el Otro permite de los objetos, la dependencia del
nóstico de psicosis para considerar detectar, antes de que eclosione la Otro para la satisfacción de la nece-
el TMG sino que se suman otros crite- patología en su más grave expresión sidad transformada en la necesidad
rios como son: la gravedad de su ex- clínica, aquellas situaciones que de pedir en el contexto de una rela-
presión clínica, la precocidad en el llamamos prodrómicas susceptibles ción, la organización y soporte sim-
inicio del trastorno, la problemática de evolucionar hacia un trastorno bólico de la relación imaginaria con
familiar, las consecuencias del tras- mental grave. el otro, la construcción del cuerpo
torno en la vida del niño y sus posibi- El síntoma, desde este punto de como tal a partir del organismo vivo,
lidades, tanto a nivel subjetivo como vista, es algo elaborado por el sujeto la organización de las pulsiones. El
del vínculo social y del aprendizaje. a partir de los fenómenos psicóticos anudamiento de esta estructura sub-
Asimismo aporta gravedad el hecho que padece y constituye más bien jetiva no se salda sin un resto, ya
de que haya asociado un consumo una respuesta a esos fenómenos que que no todo es simbolizable, y ese
de tóxicos en la adolescencia. amenazan su estabilidad. Por eso, resto constituye el núcleo real de
Por esta razón, el abordaje del en el diagnóstico y orientación del los síntomas que, en muchos casos
TMG no puede limitarse al proyecto tratamiento es importante discernir introducen una distorsión a diferen-
terapéutico individual sino que inclu- la función que cumple cada uno tes niveles en su vida pero, en otros,
ye la valoración de todos los aspec- de sus síntomas y poder diferenciar pueden ayudarle a sostenerse.
tos de la vida del niño que puedan aquellos que constituyen un eje que Como decía, estar en el len-
estar afectadas y el trabajo con las puede centrar la subjetividad de guaje no es suficiente para estar
personas y los profesionales que se aquellos que son fallidos en este en la palabra. Es preciso que tenga
ocupan de él. sentido. lugar su apropiación por el sujeto.
Por otra parte, no están inclui- En las psicosis encontramos un fallo
das en esta denominación algunas en la simbolización que va a tener
patologías que pueden ser también Clínica del vínculo social consecuencias en los aspectos antes
muy graves: algunos trastornos del mencionados. Por esta razón está
comportamiento con conductas de La causalidad de la psicosis es pre- particularmente afectado el vínculo
riesgo, trastornos obsesivo-compul- ciso pensarla en relación al primer con el otro, lo cuál sumerge al sujeto
sivos, trastornos del humor, fobias encuentro del sujeto con el lenguaje en una dimensión de soledad en re-
generalizadas, trastornos de la que implica un doble movimiento: el lación a sus vivencias que no puede
alimentación, etc. Pero, en algunos niño es incluido en el lenguaje por el compartir y en un desorden pulsional
casos, estos trastornos pueden ser Otro4 que le dispensa sus cuidados no regulado. Se ve afectado de for-
síntomas que tienen la función de y, a su vez, el niño consiente a esa ma especial por el vacío, el rechazo
compensar la fragilidad de la es- mediación del lenguaje en su rela- y la segregación en relación con la
tructura subjetiva y protegerla del ción con el Otro. Esto va a permitir el familia, compañeros y maestros, a

52 Investigacions clíniques
su vez afectados, de una u otra for-
ma, por la dificultad para entender
Se trata, por tanto, de poder comprender y
su lógica y relacionarse con él.
Hay que tener en cuenta que
explicar en cada caso la problemática del
en esta dificultad toma parte tam- TMG que padece cada niño o adolescente
bién la disposición del otro, su ac-
titud y su deseo, o no, de entender en particular, de forma que esto permita
el problema. Con frecuencia se le
compara con el niño ideal, se le construir otra idea del niño y de su
exige un comportamiento neurótico,
una respuesta normalizada a la malestar
intervención educativa, a la que no
puede responder, en parte porque le
es transmitida en unos términos no
comprensibles para él pero, funda-
mentalmente, porque sus síntomas vacío que amenaza su integridad. nóstica con el niño y la familia. Un
no son educables. Entender precisamente eso, muchas diagnóstico que, como hemos visto,
Con frecuencia, lo difícil de so- veces permite situarse ante el pro- no es sólo clínico sino subjetivo,
portar es, no tanto el comportamien- blema de otra manera y contener la realizado a partir de la singularidad
to disruptivo que distorsiona, sino la situación desde una posición distinta de su síntoma, y psicosocial. Por lo
falta de respuesta que se espera, y, tal vez, dando un rodeo con otros tanto, se incluye en esta valoración
su falta de lógica o sus actitudes medios. no solo al niño y su familia sino a la
defensivas que son causadas por la red de profesionales y servicios que
dificultad para ubicarse en una de- intervienen (teniendo un lugar cen-
terminada situación, o bien sus mo- Un tratamiento posible tral la escuela) y aportan desde otra
mentos de desconexión que alternan perspectiva información y reflexión
con otros momentos de conexión, lo Ya han sido señaladas las dificulta- sobre su problemática.
cuál genera un gran desconcierto en des de relación con los niños que El tratamiento es siempre com-
su entorno. padecen un TMG y que suelen ser plejo y es importante garantizar en
Comprender al otro se basa en una fuente de gran malestar para su lo posible una continuidad, facili-
poder identificarse con él. Aquí se entorno ya que el malestar del niño y tando una disponibilidad horaria
trata, ante la imposibilidad de com- su forma de conducirse provoca que del profesional que le atiende para
prender, de poder aceptar lo incom- uno se sienta cuestionado en su com- sus visitas, para la atención urgente,
prensible y encontrar otra manera petencia como profesionales, como para las llamadas telefónicas de la
que la educativa para aproximarse padres, educadores, maestros, etc. familia. Hay que pensarlo siempre a
a él y poder manejar la relación de Se trata, por tanto, de poder largo plazo, con tiempos e intensida-
una forma distinta. Un ejemplo muy comprender y explicar en cada des distintas según el momento. Hay
frecuente es la dificultad para poner caso la problemática del TMG que tiempos fuertes y tiempos débiles,
límites a una conducta producto de padece cada niño o adolescente en en los que aparentemente no pasa
un desarreglo pulsional que desbor- particular, de forma que esto permi- nada, existe una compensación re-
da al sujeto. La orden, que suele ta construir otra idea del niño y de su lativa y aparece el aburrimiento del
ser intrusiva y amenazadora para malestar, entender a qué responden niño y la familia. Hay que maniobrar
él, lo que provoca es una reacción las expresiones de ese malestar y, con eso para tratar de que no se rom-
defensiva, bien como bloqueo e inhi- como consecuencia de ello, poder pa el vínculo que, con frecuencia, es
bición, bien en forma agresiva o de construir otra modalidad de relación lábil y difícil de sostener por parte de
pasaje al acto, pero, en todo caso con él. Pero teniendo en cuenta que muchos pacientes y sus familias. A
equivalente a la vivencia del males- hay síntomas que es importante pesar de ello, con frecuencia se pro-
tar que ha experimentado. respetar porque tienen una función ducen interrupciones producidas por
Porque verse confrontado di- estructurante o reparadora. la propia estructura del trastorno.
rectamente con aquello que para él Este es el primer paso en el En la psicoterapia individual el
constituye lo imposible de soportar trabajo psicoterapéutico, a partir de trabajo depende de la transferencia
le lleva al borde del abismo, de un las entrevistas de valoración diag- que pueda establecer el niño o ado-

Investigacions clíniques 53
lescente, según su problemática, con paciente. A veces, lo posible es ese de su tormento, insoportable, y ser
la ayuda del terapeuta, y diferente punto de apoyo en el terapeuta que ignorado como sujeto. Darles un
en cada caso. Hay niños que se vin- le permite iniciar un vínculo distinto lugar en el tratamiento implica ante
culan muy bien al tratamiento a pe- con el Otro y que le da la posibili- todo tratar eso. También producir un
sar de sus dificultades porque se le dad de empezar a tener una idea di- desplazamiento de la posición de
ofrece la posibilidad de una relación ferente de sí mismo. Esto por sí solo los padres respecto a los síntomas
distinta con el Otro, y ese eje que puede apaciguar los síntomas, hacer del niño y ayudarles a entender
se descubre como facilitador del vín- su mundo más vivible y soportable otras cosas de su hijo. Siempre, en
culo es, precisamente, el que puede para él y puede tener consecuencias cierta medida, está la necesidad de
servir para ayudar a orientarse en la muy importantes en su vida. El víncu- sostener, apoyar, ayudar a separar-
dirección del tratamiento y también lo terapéutico así establecido puede se o a soportar la separación que su
a la familia y a la escuela. ser fuerte, pero también precario y hijo necesita para adquirir alguna
En cada caso será la escucha sometido a diversos avatares. autonomía.
atenta, permitiendo que se desplie- Pero en otros muchos casos, Cada caso es distinto. Hay
gue la estructura, que hable de sus las dificultades en el lazo social son casos en que la familia colabora
síntomas y experiencias de malestar, tan importantes que afectan a la poco, familias muy enfermas en las
lo que va a orientarnos acerca de posibilidad del establecimiento de que predomina el rechazo a tratarse
los recursos de que dispone el sujeto la transferencia del lado del niño y tratar al niño, porque el trastorno
para hacerle frente y ayudarle a pro- y también de las familias, lo cuál del niño cumple la función de man-
ducir un síntoma que le permita orde- reduce el campo del tratamiento a tener una cierta homeostasis en el
nar su mundo y sostenerse en él. la intervención indirecta con otros goce familiar o por la indiferencia
Puede tratarse de una inven- servicios que se ocupan del niño y, que les produce su malestar, ya que
ción del sujeto que sirva para loca- en ocasiones, al tratamiento psico- el hijo no está subjetivado en tanto
lizar y poner límite a su libido, una farmacológico que en muchos casos tal. Por otra parte, en estos casos, la
particular relación con el saber, una es eficaz en el apaciguamiento de clínica que presentan suele ser pobre
construcción metafórica, la creación algunos síntomas. y esto implica una mayor necesidad
artística, ciertos usos del lenguaje, El trabajo específico con de intervención de otros dispositivos
una formación imaginaria. Las mani- los padres, necesario siempre en y de trabajo indirecto a partir de la
festaciones clínicas son muy diversas alguna medida en el tratamiento coordinación con ellos. Si la familia
y también lo son las posibles solucio- con niños, se hace particularmente no sostiene, los otros deberán de
nes, más o menos exitosas, en cada importante en los casos de TMG. sostener más.
caso. En otros casos es el vínculo En primer lugar dándoles un lugar En cualquier caso, el tratamien-
mismo con el terapeuta en el marco como sujetos en el tratamiento para to del TMG no se puede reducir a
del tratamiento, el que lo sostiene en que puedan desplegar los avatares lo que ocurre en el consultorio. Hay
ausencia de un síntoma propio que de su relación con el niño, movilizar que contar con los tugares de vida
sea eficaz. su fantasma, especialmente el de del niño, ayudar a entender qué le
No se trata nunca del ideal las madres, en el que el niño puede pasa porque esto es lo que va a
sino de lo posible de tratar y de tener una posición muy consolidada, orientar el trato que recibe.
lo que es posible construir con el ocupar un lugar oscuro, como objeto

Notas
1
Trastorno Mental Severo
2
El CSMIJ de Nou Barris desarrolla desde diciembre de 2002 un programa piloto de atención a niños y adolescentes que padecen
un Trastorno Mental Grave
3
Equip d’Asessorament Psicopedagògic
4
Se escribe a partir de aquí Otro cuando la referencia fundamental es simbólica, para diferenciarlo del otro, el semejante, cuya
referencia fundamental es imaginaria.

54 Investigacions clíniques
Trabajo en grupos con chicos que
padecen afecciones psicosomaticas
y crisis de angustia
“¿Vos te pensás que va a ser fácil volver al cole?”

Euipo de investigación sobre Pequeño Grupo Monosin-


tomático del Hospital de Niños Pedro de Elizalde. Buenos
Aires (Argentina).1

E n 1995 un grupo de analistas del Servicio de Psico-


patología del Hospital de Niños Pedro de Elizalde
inició un trabajo de asistencia e investigación de pa-
médicos suponían también que este espacio facilitaría la
derivación de pacientes al servicio de psicopatología,
que, de otro modo, a veces era sentida por los pacientes
cientes con afecciones dermatológicas. De los pacientes como exclusión –“Usted, doctor, no me quiere atender y
derivados por el Servicio de Dermatología, llegaron a por eso me manda al psicólogo”–.
la admisión un promedio de 40 por año; las patologías Mediante este dispositivo fuimos verificando la
más relevantes eran alopecia, vitíligo y soriasis. creación de un lazo imaginario entre los pacientes, que
El equipo de dermatólogos (dirigido por Lidia comenzaron a nombrarse como un “nosotros”. Y, para
Valle, a su vez presidenta de la Asociación Argentina nuestra sorpresa, pacientes que, derivados a psicopato-
de Dermatología), suponiendo la presencia de aspectos logía, dejaban sus tratamientos, sin embargo concurrían
psicosomáticos y no pudiendo hablar suficientemente a la reunión mensual de grupo.
con los pacientes durante las consultas, decidió hacer un Nos dimos cuenta de que el lazo social que se
grupo con pacientes y médicos, una vez por mes, con producía en el grupo hacía que la gente siguiera yendo.
participación de psicoanalistas de nuestro servicio. Los A partir de eso, y tomando en cuenta la teoría de Mas-

Altres institucions 55
simo Recalcati sobre pequeños grupos (ver nota aparte),
empezamos a formar “pequeños grupos monosintomáti-
En el pasaje al acto se trata de
cos”, primero de chicos con problemas dermatológicos
y después también con trastornos de lenguaje y ataques
la ruptura repentina de una
de pánico. continuidad en la conducta,
Por ejemplo, en Jazmín, integrante del pequeño
grupo monosintomático de niños con alopecia, la muerte caracterizada por su dimensión
de su padre había producido una angustia que no había
podido ser elaborada, tomando la forma de lo que llama- de urgencia.
mos pasaje al acto –en su caso, fugas escolares– y del
fenómeno psicosomático –en su caso, caída del pelo–.
En el pasaje al acto se trata de la ruptura repentina
de una continuidad en la conducta, caracterizada por su Y este efecto se produjo a partir del grupo, como
dimensión de urgencia. En el Seminario “La angustia”, muletilla imaginaria, como facilitador que permite el
Lacan considera la fuga como paradigma del pasaje al despliegue de la subjetividad.
acto. Carlos presentaba ataques de angustia que le im-
En el fenómeno psicosomático, hay una desgarra- pedían ir al colegio. Los ataques habían comenzado a
dura que remite, en el cuerpo, a algo más que la ima- partir de la muerte de su abuelo. El había ido primero a
gen real; una marca que, al no estar perdida, se instala un análisis individual, donde sus producciones gráficas
como memoria de lo real, memoria sin posibilidad de –dinosaurios muertos por la caída de un meteorito– se-
recuerdo, in-memoria (Javier Aramburu, “El fenómeno ñalaban la angustia que, sin embargo, eludía todavía
psicosomático y la clínica borromeana”, Hacia una la palabra, la simbolización, y pasaba directamente al
clínica lacaniana del FPS, volumen 4). El cuerpo toma cuerpo. En el grupo monosintomático de fobias, Carlos
nota de un acontecimiento traumático pero el sujeto no demostró cómo la vacilación de los otros puede ser un
puede historizarlo, no puede ser mediatizado por lo recurso para meditar sobre la propia vacilación.
simbólico. Una integrante de ese grupo le dijo: “¿Vos te pen-
Mediante el dispositivo del pequeño grupo mo- sás que va a ser fácil volver al cole?”; como si le pre-
nosintomático, Jazmín comenzó el trabajo del duelo. guntara si él creía que sólo cuando se le fuera el miedo
Recordemos que, en la concepción lacaniana del duelo, iba a poder volver. Esas palabras le alcanzaron para
no se trata de que el sujeto pierda el objeto, sino de que soportar la angustia y volver al colegio. La compañera,
ya no hay Otro a quien faltarle. ese pequeño otro, hizo emerger la precipitación de un
En una sesión del pequeño grupo, una compañera juicio y la decisión de no esperar más.
contó que había festejado su cumpleaños, y habló de Carlos encontró en su semejante la clave para la
personas que habían estado ausentes de esa reunión. solución de su problema; esta reciprocidad con los se-
Jazmín, sin motivo aparente, se angustió. Y pronunció mejantes instauró en él una tensión donde el momento
una frase que a ella misma la dejó perpleja: “Yo no estu- de retraso con respecto al grupo se presentó como el mo-
ve allí”. ¿Por qué hubiera tenido que estar allí? En todo mento de concluir. Momento de concluir, con su decisión
caso, a partir de esa escena relatada por la compañera, subjetiva, el acto de comenzar nuevamente el colegio.
que ella había leído como exclusión, por primera vez Con alivio. El acto había reducido su goce pero con una
pudo reclamarle al Otro: “¿Por qué yo no estuve allí?”. ganancia de saber.
A partir de la resonancia singular que le produjo esa A partir de esto, comenzaron a articularse en Car-
escena, Jazmín pudo tolerar la angustia y surgió en ella los preguntas subjetivas, que sólo podrán desplegarse
algo del deseo. en un análisis individual.

Nota
1 Los miembros del Servicio de Psicopatología del Hospital de Niños Pedro de Elizalde cuentan su experiencia, desde una pers-
pectiva psicoanalítica, con pequeños grupos de chicos que sufrían enfermedades como alopecia, vitíligo y soriasis.

56 Altres institucions
Los pequeños grupos
y la subjetividad
Del espejismo al nombre propio

Euipo de investigación sobre Pequeño Grupo Monosin-


tomático del Hospital de Niños Pedro de Elizalde. Buenos
Aires (Argentina).

E n su trabajo “La función del


pequeño grupo en la lógica del
psicoanálisis”, Massimo Recalcati
la formuló Jacques Lacan a partir
de Freud. En la masa, se produce
el eclipse del sujeto bajo una insig-
absoluta produce la ilusión de ser y
hacer Uno con el Otro. Y conlleva
el peligro de empujar al sujeto en la
–psicoanalista y profesor de la Sec- nia donde se exalta, por vía de la dirección fanática del sacrificio.
ción Clínica de Milán del Campo identificación, el poder ideal de un El pequeño grupo, contraria-
Freudiano– evalúa la posibilidad líder; en la mirada hipnótica del jefe mente a la masa, puede garantizar
del uso clínico del psicoanálisis en el se reencarna la mirada del padre la existencia de la particular. Su
contexto del grupo. Considera la dis- totémico, el “temible padre primor- lógica interna no es la del fanatismo
tinción entre grupo y masa, tal como dial” al que alude Freud. Esa mirada por el Uno sino la de la diferencia,

Altres institucions 57
del no-todo, del Uno no sin el Otro.
Entonces, la posibilidad de un dis-
El pequeño grupo, contrariamente a la
positivo grupal va en contra de esa
tendencia espontánea del conjunto
masa, puede garantizar la existencia de
humano a su masificación. la particular. Su lógica interna no es la
La dimensión del pequeño
grupo parece indicar otro género de del fanatismo por el Uno sino la de la
identificación posible. La hipótesis –
planteada ya por el psicoanalista de diferencia, del no-todo
la escuela inglesa Wilfred Bion– es
la de un “grupo sin jefe”, una identi-
ficación horizontal; un grupo que no
se cimenta sobre el Ideal del Uno,
sino que deja existir lo particular del
sujeto promoviendo la heterogenei- ño grupo se constituye sobre esa En el grupo, el lazo inicial se
dad, no asimilable a ninguna fusión ilusión; lo que da contenido al grupo asienta sobre la ilusión del “noso-
identificatoria. El grupo no se sostie- es un lazo imaginario, una reciproci- tros”, semejanza imaginaria que
ne bajo la mirada absoluta del Ideal dad identificatoria, un espejismo. La debe ser reducida, ya que el lazo
ni sobre la “semejanza imaginaria” dirección del tratamiento apuesta a es un lazo de trabajo; un primer
que deriva de la identificación al deconstruir esa identificación colec- espacio que apuesta a la aparición
Ideal, sino a partir de un lazo social tiva para producir el nombre propio de algo aleatorio, contingente, que
reducido al trabajo, al “objetivo co- del sujeto. apunte a la división subjetiva. En su-
mún”, en términos de Bion. Recalcati plantea las diversas jetos con fenómenos psicosomáticos,
Recalcati trabajó en una institu- monosintomaticidades que caracteri- se advierte la segregación respecto
ción especializada en el tratamiento zan nuestra época clínica como una del lazo con el Otro. El pequeño
de pequeños grupos de sujetos respuesta social a la inconsistencia grupo monosintomático produce un
anoréxicos-bulímicos. En el Hospital que produce la caída de la función forzamiento que apunta a reinscribir
Elizalde trabajamos con pequeños simbólica del Nombre-del-Padre y la al sujeto en el campo del Otro.
grupos de sujetos con diagnósticos emergencia de una nueva adhesivi- Por otra parte, en el grupo, el
de: fobias, trastornos del lenguaje dad en la que el gran Otro se reduce sujeto se encuentra subordinado a
(no acceden a la lecto-escritura) y al otro con minúscula. La monosinto- una economía del tiempo y de la
pacientes derivados con diagnóstico maticidad le garantiza al sujeto una palabra colectiva: debe ceder, per-
de vitíligo y alopecia (afecciones identidad particular por medio de der algo del goce, para poder ser
dermatológicas). una identificación universal: más se admitido en el lazo simbólico con
Ciertamente, la homogeneidad gana en la certeza identificatoria de el Otro.
del síntoma es una ilusión: el peque- masa, más se pierde del sujeto.

Los textos de estas páginas fueron escritos por Andrea Cucagna (Directora del postgrado en Clínica con Niños y Adolescentes del
Hospital de Niños Pedro Elizalde), Mirta Blasco, Marta Castro Riglos, Noemí Cecchi, Eugenia Crivelli, Silvia Gvirtzman, Patricia
Kovacevich, Mariana Loureiro, Anabella Racioppi, Gladys Staropoli, Dolores Ugarteche e Ivana Velizan (miembros del equipo
de investigación sobre Pequeño Grupo Monosintomático de ese postgrado)

58 Altres institucions
Una pràctica educativa en el
camp de la inserció laboral amb
malalts mentals

2
1
Xavier Orteu i Rosa Antolín,

2
educadors d’INSERCOOP1

12 1
2
V eient els aldarulls que actualment es produeixen
arran del tancament de diferents empreses no és
difícil recordar la pel·lícula Temps Moderns de Chaplin,
Un dels efectes de l’actual capitalisme és la mercan-
tilització de tots els espais socials. A això, s’ha unit el
discurs de la ciència que certifica la possibilitat de trobar
en la qual veiem com els obrers reivindicaven unes mi- certeses que expliquen la realitat. És per això, que per
llors condicions laborals. En l’actualitat, però, es dóna parlar del treball educatiu amb malalts mentals adults cal
una diferència substancial. La industrialització va provo- insistir en la relació entre els esdeveniments econòmics i
car el naixement de la classe obrera i de l’assalariat1, els esdeveniments d’ordre individual. Les persones amb
és a dir, el naixement d’un sistema de protecció de les trastorns mentals també es troben en aquest context. Cri-
particularitats a través de diferents mecanismes legals. si de les institucions que fan funcionar el vincle social i
Des del mateix estatut dels treballadors fins al treball pro- la solidaritat; crisi de les formes d’integració econòmica
tegit, passant per diferents sistemes de regulació de les i crisi en definitiva de les identitats individuals i col-
condicions laborals. Ara, en canvi, és la individualitat lectives2. Se senten també abocats a la recerca individu-
el que emergeix. Les persones han perdut les referències al d’un projecte de futur.
col·lectives que els permetia explicar què els passava i Això es pot entendre com un pas endavant per
quines eren les alternatives de futur. Se senten reduïts a aconseguir un major nivell d’integració, però cal dir que
res i es troben sols, enfrontant-s’hi individualment. aquesta situació és fruit de la progressiva desregulació

59
dels sistemes de protecció. Això no implica la defensa l’esgotament que genera l’intent d’entendre la narració
d’un sistema tancat, una institució model-ideal, que de- del subjecte. Es queixen de la poca autonomia de molts
mana un subjecte-model ideal per treballar. Justament, subjectes i dels dubtes que tenen entre desatendre’ls o
la desregulació ens demana amb urgència eines per sobreprotegir-los Es queixen de les situacions en què el
regular. És aquí on l’atenció personalitzada al subjecte subjecte els diu que no. Ho entenen com un fracàs per-
esdevé l’única alternativa. Una constatació és que cada sonal i atribueixen les dificultats a una qüestió de vincle,
cop més arriben persones amb malaltia mental a no es- confonent vincle educatiu amb vincle afectiu. Es queixen
pecífics per treballar amb malalts mentals. de les dificultats per definir els objectius de treball ja que
El neoliberalisme, al voltant dels setanta comença el temps de treball no és lineal (primer el subjecte plan-
a dir adéu a la qüestió social. S’està donant un canvi en teja una dificultat, després hi ha una explicació per part
la manera de regular els conflictes socials, en la manera del tècnic i finalment es resol la dificultat amb una acció
que són definits, significats, abordats i resolts, a “diferent determinada). I tantes altres queixes que sempre troben
diagnòstic, diferent tractament”3. Per exemple, ja no es un nexe de la realitat en les quals certificar-se5, justa-
considera que es doni un cert antagonisme d’interessos, ment l’educador selecciona aquella realitat que encaixa
els problemes laborals de les persones es troben en amb la seva posició: “no hi puc fer res”. Certifica que
cadascuna de les persones en atur. La desresponsabi- aquella persona que està atenent no respon al subjecte
lització de l’Estat, que històricament havia assumit el ideal del programa. Aquell subjecte que s’hauria de fer
paper de mediador, fa que l’única possibilitat de l’indi- càrrec del seu dèficit i sostenir un pla de treball que de
vidu sigui la sortida particular. Les institucions cada cop manera progressiva anés reduint aquest desajust vers el
més es fixen en els factors de risc de cada individu, les mercat de treball, fins a eliminar-lo. Com que la causa
seves circumstàncies adverses. La recerca de feina cada d’aquest impossible és el subjecte, es dedueix que no es
cop està menys en l’òrbita de l’estat i cada cop més en pot fer càrrec de la situació. No se’l considera un subjec-
l’òrbita privada. te responsable. Els tècnics acaben negant la capacitat
Sovint, però, quan aquestes persones realitzen una del subjecte a fer-se càrrec de la demanda en ubicar-lo
demanda d’atenció en un programa no específic per a com la causa del desajust amb el subjecte ideal.
persones amb malaltia mental, la resposta del professio- Aquesta situació se supleix atribuint com a de-
nal és que ell “no pot fer res amb aquests casos”. manda allò que el professional considera que són les
Contràriament al que podia semblar, aquesta necessitats del subjecte. En certificar la impossibilitat
afirmació no està provocada per un desconeixement, d’una articulació del subjecte amb el programa que no
al contrari, es deu a una certesa. La certesa que el passi per acceptar el lloc de qui no té demanda pròpia,
professional no pot fer res amb aquest subjecte. Té a el valor principal de la incorporació en el programa
veure amb la posició del professional. És una certesa deixa d’estar en els elements de la transmissió educativa
individual de cada professional. Arriba a la conclusió i passa a estar exclusivament en elements que tenen a
que ell no pot fer-hi res. És una seqüència que afecta el veure amb la conducta: l’assistència i l’actitud. És a dir,
subjecte i el professional i que Tizio anomena “control a es dóna una exclusió dins del propi programa en tant
dues bandes”4. que s’ha buidat de possibilitats de canvi i exclusivament
En l’explicació que dóna l’educador no hi ha cap se’n fa un control del subjecte.
dubte. La impossibilitat d’una oferta educativa té la seva Per proposar alternatives a aquesta situació, abans
causa en les dificultats del subjecte. Però aquesta posi- de pensar en respostes a les queixes o pensar en la crea-
ció en realitat són dues afirmacions: en una l’educador ció de nous dispositius, hem de revisar la formulació del
accepta com a únic objectiu possible la productivitat del problema. En la formulació actual es considera que el
subjecte; en l’altra assumeix com a funció haver de dir treball a fer amb el subjecte passa per la seva adaptació
al subjecte què ha de fer. El resultat és que l’educador a una determinada oferta laboral. El resultat és que les
assumeix l’encàrrec de dir al subjecte què ha de fer per possibilitats de promoció del subjecte queden sotmeses
ser productiu per al mercat laboral. En realitat, podem a una única lectura: la seva productivitat.
dir que aquest plantejament nega la possibilitat d’escol- Per plantejar alternatives a aquesta única visió del
tar el subjecte en relació amb com ell està a l’atur. Nega subjecte en termes mercantils, cal una obertura a la
la possibilitat de donar cabuda a quelcom que tingui a funció educativa. Cal obrir espais per a l’exercici de la
veure amb el seu malestar. funció educativa diferents a la gestió de les persones des
Curiosament aquesta situació també produeix un de la lògica dels recursos humans. Entenem que aquesta
malestar als educadors. Ho veiem amb freqüència a funció educativa en el context de treball amb persones
través de les seves queixes. Per exemple, es queixen de adultes amb trastorns mentals, no s’ha d’entendre com

60
socialitzar el subjecte. Ens referirem a la funció educa- lògica del discurs únic. Neguen la particularitat i això els
tiva com la constitució d’una llibertat. Aquesta llibertat converteix en un greu obstacle per al treball educatiu.
té a veure amb la implicació del subjecte socialment6. Les conseqüències per al professional, per tant,
En aquest sentit, el treball educatiu en el camp de la serà que ha de donar la possibilitat que el malalt mental
inserció laboral ha de partir del fet que el subjecte ja prengui la paraula en nom propi. Perquè això sigui pos-
està socialitzat i justament el que cal promoure és com sible cal saber com respondre al discurs desbordant que
cada subjecte s’interroga sobre els seus llaços socials i pot tenir el subjecte. L’educador caldrà que pugui con-
laborals. És a partir d’aquest punt que es pot promoure tenir aquest discurs perquè pugui emergir el subjecte de
la millora de la seva articulació amb el mercat laboral, a l’educació, el subjecte que es fa càrrec. Contràriament
partir de com cada subjecte es fa càrrec d’una situació al que podríem creure, aquesta contenció no ha de ser
que li pertany i és capaç de formular demandes que en del subjecte, sinó del propi professional. El professional
termes de futur li permeten una certa articulació amb la no pot confondre la història del subjecte amb l’objectiu
seva història. Cal partir sempre, i això és important, de de treball. S’ha de contenir de no quedar enganxat a
les eleccions que implícitament suposa cada història. En aquest discurs per poder sostenir alguna altra cosa. Per
aquest sentit, el treball educatiu enllaça amb la construc- sostenir allò que té a veure amb el que el subjecte pot
ció de la ciutadania. desitjar, amb la seva demanda. Aquest és un límit de la
La formulació del problema doncs s’ha de plan- nostra funció. És justament gràcies a aquest límit que és
tejar en relació amb com cada subjecte s’enfronta al possible pensar en una pràctica educativa amb malalts
problema. Però aquest problema, malgrat que sempre mentals adults. És el propi límit que ens posem com a
fa referència a una situació d’atur, sempre es formula educadors el que permet treballar amb la demanda del
de manera diferent. Cal saber, però, que l’objectiu de subjecte i amb la seva responsabilitat. En definitiva, això
trobar un lloc en el mercat laboral, com en la resta dels és el que anomenem aposta educativa. Aquella aposta
universos que poblen el món social, sempre té quelcom que és possible perquè respecta la incògnita que és el
d’impossible7. I això cal tenir-ho en compte perquè no subjecte8. La incògnita que no es respon ni a través de
esdevingui un obstacle en forma d’ideals de subjecte, la malaltia ni a través de la lògica del mercat. La incòg-
impossibles d’aconseguir. Justament és aquesta diferèn- nita que només la pot respondre el subjecte a través del
cia la que es nega en els programes que actuen sota la seu treball.

Referències bibliogràfiques
(1) CASTEL, R.: La metamorfosis de la cuestión social. Ed. Paidós, Buenos Aires, 1997
(2) FITOUSSI, J-P.; ROSANVALLON,P.: La nueva era de las desigualdades. Ed. Manantial, Buenos Aires, 1977
(3) SABADA RODRÍGUEZ, IGOR: “La conflictividad en la sociedad de la la información y la globalización: de la ‘cuestión social’
al discurso del riesgo”. Rev. Nómadas, núm. 5, 2002, ISSN 1578-6730
(4) Presentació de HEBE TIZIO en el 8è Stage de Formació Contínua: “Las instituciones y los procesos de sergregación: los efectos
de la norma única”. Barcelona, maig de 2004
(5) i (6) MERIEU,Ph.: La opción de educar. Ed. Octaedro, Barcelona, 2001
(7) TIZIO,H.: “La posición de los profesionales en los aparatos de gestión del síntoma” a TIZIO,H (Coordinadora) Reinventar el
vínculo educativo: aportaciones de la Pedagogía Social y del Psicoanálisi. Ed Gedisa, 2003, Barcelona
(8) NUÑEZ,V.: Pedagogía social: cartas para navegar en el nuevo milenio. Ed. Santillana, Barcelona, 1999

(*) Aquesta pràctica es desenvolupa en el marc d’una col·laboració d’Insercoop amb el Departament de Treball de la Generalitat.

Nota
1
“Insercoop és un servei d’inserció laboral que en el marc de col·laboració amb el Departament de Treball de la Generalitat de Ca-
talunya ha iniciat diverses línies de treball amb persones amb trastorns mentals. La línia de treball bàsica és l’itinerari individual
en el quale cada persona, en funció de la seva demanda i la pròpia oferta del servei, articula un recorregut a partir del treball
que realitza. Els suports que ofereix el servei per al desenvolupament d’aquest itinerari sóon: un espai de recerca de feina,;
diferents tallers relacionats amb la recerca de feina i el suport d’un tècnic de referència.”

61
La parentalidad homosexual.
Nuevas formas de familia
Entrevista a Anne Cadoret autora del libro Padres como los demás.........

Confrontados con la polémica suscitada a partir de la posibilidad


de la legalización por el gobierno actual del matrimonio entre per-
sonas del mismo sexo y la autorización de la adopción de menores
por parejas homosexuales, nos pareció interesante introducir la
opinión de una antropóloga porque su investigación ilumina acerca
de una realidad que ya existe y que introduce cambios en el con-
junto de la sociedad.

L’Interrogant - Su libro se llama “padres como Se pueden notar diferencias importantes -más
los demás” ¿A qué se refiere con “padres como los importantes que entre familias hetero y homo- entre
demás? familias con padres heterosexuales modernas y familias
- Anne Cadoret - Al hecho de que los padres tradicionales. Estas diferencias son de valores. Por ej.,
homosexuales son como todos los padres: tienen las en una familia que se califica de tradicional se acen-
mismas preocupaciones, por ejemplo, por la salud de túan los valores como el respeto del conjunto familiar.
sus hijos, la escolaridad, los amigos, las vacaciones, En cambio, en una familia heterosexual, en la que los
cosas así. padres se han divorciado y cada uno se ha juntado con
Me refiero también a otro hecho: que el papel del otra persona, son familias en las cuales los valores son
padre no tiene que ver con su sexualidad y las socieda- la libertad de cada uno y la búsqueda de la felicidad de
des exóticas nos dan un buen ejemplo de la flexibilidad sí mismo.
de las funciones de que realiza el padre. La única cosa Esta diferencia está en el único hecho que la
que no pueden hacer los hombres es quedarse embara- pareja conyugal homosexual no puede procrear los
zados y dar el pecho, pero para esto último, sí pueden niños, necesita otra figura para hacer el cuerpo; pero,
dar el biberón. En estas cosas hemos “naturalizado” una vez que el niño ha nacido, está, no veo diferencias
mucho las funciones de los padres. notables, significativas.

62
y parentalidad; y gracias por haberlo notado, por que
L’I.- Según explica en su libro, trabajó con niños para mi es importante :
tutelados por el Estado ¿en qué medida influyó esta El parentesco (padre, madre, abuelo...) es un esta-
experiencia en su investigación sobre homosexualidad tus: cuando uno dibuja su genealogía, tiene un sitio para
y parentesco? poner a su madre, otro para su padre (pero no tiene
A.C. - Como antropóloga “clásica”, formada en el sitio para poner dos madres o padres!), dos sitios para
final de los años 60 y principios de los 70, había leído, las abuelas (materna y paterna) etc... Además, esos per-
estudiado las familias (el parentesco) de las sociedades sonajes en el buen lugar (en función de nuestro estado
exóticas donde hay formas de parentesco con dos o civil, es decir, de nuestras reglas de parentesco) deben
más padres o madres; pero nuestra forma de familia cumplir papeles específicos: dar de comer, educar, cui-
parecía no tener nada interesante en este tema del pa- dar, dar una identidad. Hay otras sociedades donde es-
rentesco: teníamos una madre y un padre, y ya está. tas tareas (y también la de procreación) están repartidas
Sin embargo, estando en una provincia francesa, le entre diferentes personas; pero en la que está el padre
Morvan (noroeste de la Bourgogne), provincia tradi- es la que da la identidad.
cional de familias acogedoras, oí frases tales como “mi Y a veces es así en nuestra sociedad: así la familia
madre no es mi verdadera madre”. La primera madre acogedora tiene la función de criar, de cuidar; pero no
podía ser la genitora o la madre acogedora. Entonces de transformar al niño acogido en un heredero (aunque
me di cuenta, de forma muy concreta, que en Francia pueda ocurrir que se haga): estas familias tienen una
también se puede tener dos figuras de madre... y que función de parentalidad y no de parentesco.
nuestro parentesco es tan increíble, tan interesante como El problema es que en nuestra sociedad occidental
el de las otras tribus. (al menos la
De esta manera hice un trabajo de campo bastante francesa) no se establece diferencia entre los dos
clásico, viviendo ahí y trabajando con mis vecinos en el conceptos: una persona que ejerce la función de parenta-
tema de la construcción de la familia: discutiendo con lidad tiene que ser padre. De esta manera, aparecen las
ellos (ellos: familias que habían acogido a veces más de dificultades de construcción de su identidad y la frase que
veinte niños, o niños que habían sido acogidos y ahora oía en el Morvan : ‘mi madre no es mi verdadera madre”.
eran jóvenes y que se habían establecido ahí) acerca Además, es curioso que hoy en día, el término paren-
de las personas que consideraban como parte de su tesco (“parenté, muy utilizado en Francia, pero quizás
familia. Y constaté que nuestro modelo de familia con no tanto en España) va desapareciendo a favor de
sólo un padre y una madre no funcionaba. Además, no parentalidad.
funcionaba tampoco con las familias adoptivas; ya que De este modo cuando se quiere reconocer un sitio
esas últimas familias (acogedoras, adoptivas ) están en en la familia para el nuevo cónyuge de la madre: ¿qué
un modelo de parentesco plural. (y de ahí el título de mi se va decir? ¿padre? Pero hay ya un padre...
libro: Parenté plurielle. Une anthropologie du placement No hago diferencias entre pluri o multi y utilizo
familial. París, L’Harmattan,1995 ). los dos con el mismo sentido.
Después, trabajé en el mismo tema pero en un otro
lugar cerca de Paris: un lugar “moderno” para ver si mi L’I - Siguiendo con lo mencionado anteriormente,
hipótesis de parentesco plural funcionaba. en su investigación con padres homosexuales, Ud. tam-
Me di cuenta también que se podía aplicar a otras bién utiliza el término coparentalidad ¿ puede describir
familias como las familias recompuestas o las que tenían a qué se refiere con este término y qué formas adopta la
niños con inseminación artificial: todas estas familias coparentalidad?
para las cuales había una diferencia entre genitor o A.C.- La co-parentalidad (pero a veces se podría
genitora y padre o madre, o para las cuales uno de los decir co-parentesco, según lo que van a establecer los
padres vivía con otro cónyuge que estaba en posición padres) es una de las cuatro posibilidades de familias
de padre. (le beau-parent) con padres homosexuales :
a) heterosexuales con familia y niño, que se han
L’I. - A lo largo del libro aparecen conceptos y divorciado y uno de ellos ha creado una pareja
palabras que no son conocidas por el público en ge- homosexual: es una familia recompuesta;
neral como multiparentesco, pluriparentalidad, homo- b) homosexuales que quieren tener un niño y que
parentalidad y homoparentesco ¿podría ampliar estos éste tenga un padre y una madre. Se ponen de
conceptos? acuerdo con una persona del otro sexo para
A.C. - Establezco una diferencia entre parentesco procrear al niño y deciden acerca de la vida

63
cotidiana entre el hogar de la madre y el del del otro (el niño ya está ahí). Otros países (en Canadá,
padre. El tema es que, muchas veces, la madre en el Québec, por ej.) permiten a dos mujeres ser ma-
vive con una compañera que quiere también te- dres simultáneamente: una se queda embarazada por
ner la función y el estatus de madre (madre bis); inseminación y la otra, cuando nace el niño, es también
a veces sucede lo mismo del lado del padre; así su madre. Sin embargo, los hombres no tiene esta posi-
el niño, desde su nacimiento, tiene 4 padres. bilidad, porque la madre de alquiler (surrogate mother)
Hay también otras dos formas de familias que está prohibida.
llamo “familias dúo”
c) adopción. L’I.- La cuestión del parentesco homosexual está
d) familias con ayuda médica en la reproducción. creando un fuerte debate en nuestra sociedad. Existen
sectores que se oponen al mismo aduciendo que, para
L’I - ¿Cuáles serían las ventajas de la coparentali- un niño, podría ser psíquicamente perjudicial tener pa-
dad? ¿Y las desventajas? dres homosexuales ¿Cuál es su conclusión al respecto?
A.C. - Las ventajas: que todas las personas que han A.C. - No trabajo con los niños; pero me parece
participado en la procreación del niño sean conocidas y desplazar el problema: los niños son seres no construi-
que el niño tenga más de dos padres (y que no haya la dos; se construyen con lo que los padres y el medio
apropiación del niño por una pareja conyugal). ambiente le dan. Si la sociedad acepta las parejas
homosexuales, que ya no haya discriminación contra
- Desventajas: la necesidad de llevarse bien entre la homosexualidad, no veo por qué sería un problema
dos parejas: la pareja de la madre y la del padre. Difi- para los niños tener una familia con padres homosexua-
cultades que se encuentran en las familias en las cuales les. Sólo, saben que dos mujeres o dos hombres no
los padres se han divorciado y siguen peleándose... han podido procrearlos; se tiene que saber contestarles
cuando pregunten de donde vienen (como lo preguntan
L’I. - ¿Por qué la coparentalidad se daría casi ex- los niños adoptivos).
clusivamente entre parejas homosexuales?
A.C. - También se ve en las familias divorciadas L’I.- ¿Cómo reaccionan los niños por el hecho de
y recompuestas; pero hay una diferencia entre las dos pertenecer a una familia homosexual?
(hetero y homo): las primeras se han construido con un A.C. - En los estudios que he leído (estudios más
modelo de sólo una familia y no con un modelo de re- bien americanos o ingleses), los niños se extrañan por el
parto. rechazo de la sociedad hacia sus padres, rechazo que
- La co-parentalidad se puede ver en personas no entienden...
(una madre y un padre) muy autónomas, que estén de
acuerdo para tener un niño, criarlo en dos hogares indi- L’I. - Más allá del debate, a favor o en contra, que
viduales, pero es muy raro. estos temas suscitan ¿qué impacto tienen estas nuevas
formas familiares en nuestra sociedad?
L’I. - ¿Qué otras formas, además de la coparentali- A.C. - Me parece que nos obligan a contestar a
dad, eligen las parejas homosexuales para tener hijos? la cuestión de la pluri-parentalidad: que para hacer
A.C. - Siguiendo con lo que dije anteriormente un niño, puede muy bien que haga falta algo más que
agregaría que en el caso de adopción o reproducción hembra/macho; que el nacimiento no es filiación. Así,
asistida, lo más frecuente es que los dos miembros de que todos los personajes que han participado en la lle-
la pareja quieren ser padres; así estamos más en un gada y la vida del niño tengan un sitio en su historia; no
modelo de parentesco que de parentalidad. significa que los genitores deben ser los padres (o los
padres los genitores), pero que las cosas deben estar
L’I............. reconocidas y dichas.
A.C. La legislación evoluciona muy rápidamente Si nuestro modelo de familia estaba fundado en el
y además no es mi especialidad profesional, entonces lazo entre sexualidad, procreación, alianza matrimonial
puede que diga cosas inexactas. Pero, lo que más me y filiación, no es más lo que vemos hoy en día.
ha llamado la atención es que en el caso que haya una Este antiguo modelo era (y quizás todavía es), un
forma de matrimonio (creo que fuera de los Países Bajos, modelo de relación de sexos : sexo (y sus consecuen-
no hay otros países que permitan un matrimonio idéntico cias) permitido solo en el matrimonio!.
al de los heterosexuales), se trata de un pacto civil.
Hay países que permiten que la pareja adopte el hijo

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