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MARIO GARCES DURAN Crisis Social y Motines Populares en el 1900 Sind Cariruto Cuarro La CUESTION SOCIAL ¥ LA FROTESTA POPULAR "Mientras tanto que a prensa ia autoridad niegan fa existoncia de la cuestin social, lla sigue su cursa sin que ta fuerza ni nada pueda detenerla. Ela sacude ‘al pueblo, lo despierta. a ajita ilo nace ‘entrar en La lucha ella va pemetranda por todas partes como el agua que busca ¢l vacio; hablindale al praductor sobre sus dorechos usnmpauosi sobre sus conguistas. ‘A su fuerza de conviesién no le resisten las sambicioncs politics, fanatismosy prejuicios. Es poreso que jermina ya en el pucblo.. timese-en consideracién que 54 ‘propaganda casi se debe tinicamente al elemeao Jenving, nativo del pueblo, ino al clementa extranjero, cémo se ha dicho enla prensa" Duan Jemorxs, Stps.,26 de abeil de 1904, ‘La Comisiin Consaltiva de gobiceno que visits la pampa satitera laf 1904 reconoci causas suficientes para que existira “malesiar” entre los trabajadaresnortinos. Sin em- bango, ello no autoriaba para diagnosticar-como seal la Comisiin- que se verficara em Jategidn “lo que propiamente eotiende la esonomis politica por cuestéa soca”, Para Santiago y Valparaiso sia embargo, o para Lata y Coconel,no s# requerian “Cami sinaes Cansultivas” para saber si cxistia o no “malestar” entre los trabajadores y menos 9 ‘aun para reconacer sk existia 0 no Faouestién social". Ea realidad cualquier abservadar ‘independiente podis apreciar cf asunto simplemente porque aqui fa pobreza ora jindisimulada y se manifestsha on extendides arrabales y conventillos, en candiciones sanitarias y urbanisticas sabhumanas, ee epidemiasdificiles de conjurar, en subempleo ydesempleo abierto,y en estos mismos ails, ox una cresfenteinflaciéa que empeors las condiciones do subsistencia popalaz Mcambiarel silo la sociedad populir enfrentaba en realidad, una de susmis agudas crisis hisériens. Se agotaba, por una parte ls Comins de subsistencla peonal cuando Ine perdiendo sentido cmigrar als fiebres de or que tacaban yasu fi, Por otr pare, las condiciones de vida en las grandes chudades se habian francamente deteriorade clos convtntlles de 1900. 1a situacin no ers mis fovorable para ls artesanos, qué difcilmente prospercbia com producto de ta ereciente competencia industrial y la débil o easi wala proteccién estatal. Compartian, en consecuencia, los artesanos, progresivamente Ia suerte de los mis poles. es sectones abroras, finalmente, sf bien erecfan on niimeroen importantes os tablecimientos miners ¢ indastriales, uo wi fechas. su demandas para alzar sus salarios, fuertemente deprimidos como producto dela inflacién,y nose ubriaa tam poco espacios ni eandiciones minimas para nagaciar con sus patrones. bia on consecuencia, razones sufickentes para que se eatendiera e] malestar entre bos sectones pomulares,y ds todavia si se considera que el ciclo salitrera habia significa, ‘un inerementa imaportante de Ios negocios y del consumo de fa lite. Cen odo a élite por mocko tiempo todavia, prefrié atribuir los sintomas de malestar al impacto de: la ‘propaganda anarquistay sotialinta, es decir « as “ideas perturbadoras del orden social" (que iban ganando espacin~"comio el agua que busca el vacio™-entrels cbreras, ls ares: ‘os y entre las elementos eultes y empobrecidos de la clase media, ‘Para la Elite era mucha mis fécil no ver y noescuckar y confisr todavia ea el “Esta doen forma", es decir en ese Extado "de derecha” afsaosamente construido alo largo del siglo XIX. Muy articulado en la superestractura y bien cunectado al mereade inter tnacional, pero con ua débil e insuficionte logitimidad social en la base, sabre todo en la popular. Ee qua un roolidad ce tratabs de un “Estado Gx forma” mia para si miso ‘que para el conjunto de la nacién. Ello por cierto era un problema muy dificil de ree -nocer, no solo porqus a élite se sentia y se proclemabs a simisma La me or expresin de ‘2 natin, sino pone ademés reconocerlo tendria que haber significado empren. der una refarma sustantiva del Estado, para haceddo efectivamente aaciomal. Era entonces mis fécil persstir en los formalisms legalos y acadomicistas en ln re itn salitrera yen Chile, dirian también muchos, no existe “lo que propiamentc entiende la ‘econumia politica por cacstiGn social”, La cuestién social, sin embargo,no quedaba roswel te.con este tipo de senienctas, En efecto, ella ya se babia manifestado como protesta social 80 en 1800, 9 través de ta huelgs minera y partiaria que debi enfrentar ef gobierno de Balmaceda y se volveria a manifestar-al cambiar el siglo-con mayor regulaidad e inusia- da fucrea en la huelga maritima de Velparais, en las protestas populares de Santiago en 1805,cn Antofagasta en 1906 finalmente ~cerrando éate cicla de manifestacianes popula. os en Iquique, en 1907. Fin todos estos casos, ly “cuestién social" fue enfrentada recorriendo al expediente-de la fucraayo-seaa la repeesi6n isa y lLana de los movimientos de protesta popular. La repre- sién, como bfon saemos la chilenos, por una experionciahistrica directa reiterads 2 To argo dot siglo XX, no es mas que Is confesiin de una carencia de legitimidad social y politica de los scetores dominates de Is Sociedad. Es el intento de disciplinar a la socie- {dad-particularmente ala popular- ya no por ln via del consenso y la negociacié, sino que [por a via del silenciamiento y de su negacién como interlucutor. De este mada, en los primeros afas del siglo, a pesar de que no se reconoela le existencia de la "cuestiGn social” fue necesarin recurrir al Lenguaje metilica de las ametralladoras y los ables para Intentar domostrar que la enestién social efectiramente “no exist, Laprimera déeada dlsiglo XX chilonoes, en ete sentia, tremendamente pars digmitica, Ex efecto,ella pusode manifiest la precariedad del Fstado nacional para hacerve cargo de 1s problemas “nacional populares” (fundamento dltimo de la nackin)y evideacis, por etra parte ladecision *sacaly politica" de la elases populares para eairentar de mode colectiva 1a resoluciin de sus problemas "evondmicos sociales” més epremiates Ena primera década del siglo, tonienda como telén de fondo el empobrecimieato de Jas condiciones de subsistencia populay, opresonts y aprimides se terminaron de desc: bbriry de reconacer; unas y ors Blcieron evidentes sus disiniles Weotidades, argamete ‘onstrudas alo largo del siglo XIX, y tanto los unos como fos otros wgudizaron la lucha de «clases. Los mavimientos socislex populares esboraron,en este proceso, sus primes pro syoctes politicos de large alienta, La prensa conservadora de prineipios de siglo destacé cl hecho de que las ideas ssnarquisias ganaban prestigio y “otal acongejaban* als obreros y alos “pobres sin cult ma*. ¥ Ilamé también Ta atencién sobre las acciones vandilieus y “wergonzasas” que “protaxonizaron los mix pobeos. Reconocié es cierto, la*justcis™ de algunas de las demo das de los trabajadores y la wecesidad de que ol Estade interviniora on Jos asuntns ‘econtémicos y sociales. Cried también a algunos cmpresarias para que se abrieran a un ‘mayor didlogo con sus taba adores, Poro Ia verdad sea dichst na encontré mayur eco els ‘droulos del poder. ‘Sila peotesta socal no fue el producto tnicumente de fas ideas anarquistas, que clerta- mente ganaron en extensin y prestigio entre el*clemeilo Jesuino" y “aativo del pueblo", fine entences el predueto de-una nuova situaciie histirea -particularmente critica aque se debieron enfrentar los sectores popolares, a ‘La protesta obrera y popular de 1903-1907 fue quinés Ia manifestociin més agua de que en ol pais las eoeas no marehaban bieo. ¥ bubo muchas weees -ademis de las que se ‘expreseron como hueles y stalidos populares- que demuncisron y Hamaroa la ateccns- {relssitunciin que 2 viiaal cambiar siglo Recobarrea, por ejerplo,salté ala palostra et ‘motivo del Centenario pora decir que babia poons mtins para las fiestas entre ls veciores opalares yel doctor Julio Valdés Cage, en agudas carts dirigas al Prosidentede ba Rep. bles por estes mismos aos, puxt todos los pantos sobre is iex: En Chile la distancia entre riensy pores se hacis coda ver més insoportable. En este contesto ln cuestin social o solo se manifesté como protesta, sina que tambiés como el mds significative exfuerzo de organizacidn popular Este, ascniado sobre tradicianes mutuals en cuanto aaa tzacién- y tradiciones peonales-en cuanto a sudistatt ‘tay apostle al Estado oligiruico- dio lugar un movimiento popular con marcados ws ‘de antonomia. e ae For ello, quizis no dba extrafiar que importantes secures populates ehilenos abraxa: an el ideario anarco-sindicalista. Este, come veretis, enfatizaha cn la libertad, en el antiautarfariono'y particularmente en clprotagonismo histirico de los *paedUiares”,os ects, de las prapis trabajadoes. Tampoco debe extrifar que lu trabiadoes, bap as con. dicones de un Estodo liberal y fmanciads por as exportaioaessaitreras, confiaren mien sus propias fuormasque enn actin socal det Estada que por iertatambitn demandaian Ast Jorevala entre ctr, el tipo de organaciin popalat que perming entre Ios trabajadores,cen- {réndose unas veces en I organizacién de Ia satidaridad,y otras tantas en la “acedn dleocta™ pars lograr a saisaccén de sos demondas. {os morimientos sociales populares de principios de siglo tendieron répidamente = paliiztrse, coma producio del protagonismo gue alearwaroa y de las opasiciones que ex. cantraron en la socledad de la época. Al hacerlo, ecberaroa la politica de los yartides denominados “histéricos" {conscrvadores,liberales, radicales, ete), ¥ con razin, pues estos eran mayeriteriamente los parties de la élite, Debieron, en consecuencia, vanzar en la ‘onfigeracién de una politica propia, es deci, de una “politica popular” ‘Esta politica popular, qae se abrid paso al cambiar el siglo, fue el producto dela aceién ‘rganizativa, eivindicatira y de pres que prn'agonizaron los peopioe netorex aoclales, Foo también el prodacto de diversos centros sociales y de lustraridn oberg; de ls constitu ion de una corriente al interior del partide deméernta que buscé “socializar” su politica: ‘dela nutri actividad desplegada por la prenxa abrera para denneiar las injusticias de ‘jue eran victima los productares y praclamar los muevasidcales sociales. Como resultado «de este proceso surgioron también los primeros partidas populares Configurar una “politica popular no era por cierto una tare sencilla, ya quea medida que crecia “el malestar” en él pueblo, se extendia la hnelgs yla protesta y erecan también las Oorgantzaciones, los problemas se bacian mis complejos. a efecto el mavimiento poptlay al 82 politinarse debi avanvaren tareas que se verificatan en el campo propio organiaackim y ‘educariin fundimentalmente) con el objeta de antofortalecerse, paro al mismo tiempo ‘nian necesidad de proyectar su mavimento al canjunto de la sociedad, con el objeto de producir cambins en ella Y¥ muy pronto se comprobarfa. que Sos Cambios, sobre todo én el dmbita ecandmin y social, sopontan no sola hacer expresiva su protesta {la agitaién social) sina que arribar ‘.un.augvo orden socialy que ello na Seris posible si ls {uereas populares eran lo saficientemente utdnomasy fuertes. ‘Se empezaba a constituir de este modo la euestiém principal de una estraiegla y una politica popular ls cambias sola son posibles si las jucraas populares son paderosas, Ese Irincipio, ea términos generale, orient la accién social y palities popular en los inicbos del sigh. Por elo, su principal mérito quings sea el haber inaugurado muchas formas para hacer politica desde la base popular, iLa cuestién social existe! (Cuda elite sc aprestaba a colcbrar el Centenario de la Repiibica, la sitasciin ‘econdimica.y-social de los sestores populares habia empeorade en tal grado gue se hacia ‘exasperante. Por esta ranin Recalsrren en su famoso Ries y pobre, luego de descriir ol estado de la “altima clase de la sociedad que coastituye probablemente un tesco de la ‘poblackén del pals es decir mds de un milién de personas”, se preguntaha si se podia“asa- -lar al pueblo” alos rexschos del primer centenaria”™ EY Recho mds contundente, la distancia entre ricas pobres, lo hacia notar también 1 doctor Jolio Valdés Cange en sus Caries al Presidente: “La impresia més vive que recibe el viajeroabservador al estudiar nuestra organiza- dn social, esta ue prodace el contraste entre la jenteadinerada ila clase trabajadora; ‘argue en Chile hal solo das eases sociales rios i pabres, estes. explotadaresiexplo- tadog; nnexiate laclaxe maifex: ls que-no somes ricox ni menesterosos | aparentemente formamos el estado liana, semas jente de trdnsito, stida del eampo de los explotads i ce camino para el de los opulenios"* Porsu parte el dirigente poplar Alejandro Escobar Carvalla, en sus memoriasrecon- ‘ce también que fa situacién de los pobres al finalinar ef siglo habia empeoradn. En efecto, Mccabe, Luis #5 baum de sig: ise y pobre a ound en siglo devia rpc”. En ‘Beracre sca Cie, lersin Gadoy Beit Univeaia Saatag, 37, nega, Ala ara Sisceride Chie ni 1970 a, Unienstaria, 198. Care dle quota del De. Ja Valdés Cange sui wide pu A Noni Pah wt AMS. 33 Carvalle indica que en los aiios de Ia revalucin del 91 la situactén gencral de pais “era relativumente prispera” y que el costo de la vida en las ciudades “sumamente bajo” 3 pesar de que ls salaros oren también bajos. Sin embargo al finalizar el siglo, el emadro conimica y social se habia modificado negativamente, ‘Alas diversas clases caps sociales nacionales “las distarciaba tna atibésfera de i- Comprensiéa de impermeable orgullay de retraimiento reciproco. Esta atmisfera sc bacia nds densa en escala descendent, hasta llegar a pesar como un manta de ploma sobre cl nivel inferior de laclase obrera y campesina”" Pura este iltimo nivel, le los més pobres, segin el mismo testimonio de Carvallalasituackin-era uinosa "pues nas clasos bajas no existin parvenir para las nuevas generaciones”, Los artesanos, por su parte se halluban en plewo proceso de proletarizacién, mante- niendo ras pequetos talleres"o ineneporéndas "a a ninestriaasalariada de la Fbricas, que ya comertaban aextender su red industriosaen{a zona central del pals permitienda a formacisn de una vasa claso obrera industrial", Recabarren, por su parte al realizar su balance de 100 sios de vida republicans reeo- ‘noee el siguiente euadro social: “La elase eaptalista,o burguess,comale tlamamos (que) ha hecho evidentes pragresos ‘partir de bos iltimes 50 aiios, pero muy natablemenie después de la guerra de con -quista de 18740 que la clase gobernante de Chile se anexd a la regitin salitrera™ -) La dima clase como puede considerarse en escala socials os gafianes, jomaleros, pores de los campos, eurreLanerog, ec, vie hoy como vivid en 1810... Ea euailo a su sitwaciin mara podriamos afirmar que en los campos permanéce estacioaaria yque en ‘Tas cudades se ha desmoralizado mis... dima elise dela sociedad...n0 ha adquiri- da ningin progreso evidette en mi concepto digo de Hamarse progres”. e *(La clase media) ha ganado un poco en saspecto socal y esta que vive mis esa sada al qué dirdn,wla vanidad y-can fervientesaspiraciones alas granderassuperfivas ya brillo false, Bebido a esta cicunstancias que le ban servido de alimento,esta clase ina hecha rogresos en sis comodiades y vesthdri ba mejorado sus bbitos sociales, pero acosta de mil sacrificias.2"* ‘Pero icudles eran los bechosconcrelis que fimméamentaban tan negativas percepciones ten Recabarren, el doctor Valdés Cange o Alejandra Escobar, sin abundar todavia en lag reitoradas denuncias que se hacion desde la prensa obrora de Ls paca? hs Carila,A “Chie «Mie al iho ND", Revie Oia 119, Santign 198, fe Haha psi. 8 ecabures bc, par co La vivienda popular Ya hemos indicado queen la sogonda mitad del siglo XVX las principales cludades del pals yea particular Santiago, fueron testis de wna enstante migracidn cam Elo as sotenta “la Gudadcrecia casi diariamente™ y en bs ait setenta Vicuia Miscenna Mlamaba La atencién de ta opinidn publica y de los consejales municipales indican ‘onvivian en Santiago pedeticatente des cudades: la *cindad propia os decila ylaSciadad barbara, es decic ba popular - Bl Tntendente Vicwiia Mackcnna tomé medidas que sin duda transfarmarun la geogre- fia urbana de la capital, pero no fueron capaces de conjurar el explosivo crecimienta de la capital y todas las seeuelas sociales ~en vivizada, salud, et. que este crecimiento implica: ba, Enefecto, hacia fines de! silo les condiciones de fa vivienda popular se habian hecho ads crticasy las inciauivas polities de parte del Estate para enfrentar esta situacidn eran tremendamente ineficientes y de escasa magnitud, como también Io era la acciin caritativa Gilantrdpica, on la que tadaviaeonfiaba Viewfa Macken, en los as 70, Segin Eyraguire y Errizar, tanto en el campé cam ‘trabajadores sobre sus viviendas “apenas 0 en las minas es freenente el sistema de “yvienda en préstam" mientras trabajan en el predio a a mina, Ea las ciudades, por su parte, el sistema dominente es el scteade nor tnenswaltdadea™ ¥ ea de suienda measua le forms de tienda populabnés ‘extendida era el convensille, Ete surgi rapto del Sglutioamfente U6 Tie rieos “ranchas” ‘campesinos instalados hore ena ciudad camo-del subatriendo de antigeas casas patricia En este éltimo caso, como indica Gonzalo Vial, quienes habitaron estas casas fucran viet mas de la necesidad y también de la codicla de quienes practicaban el negocio del subarrlenda, Las viejas easonas de fa élite -de hasta tres patics- ahora se sobrepoblaroa, “Tres, cust, hasta ocho personas ocupaban una piczs. Fl agua que daban uno 0 dos planes de aquellos patios fue ardorosamente disputada, Los servicios higléaioos ya escasos y rodimentartos cuando sola eran empleados parsimaniasamtente por ls poco hhabitantes primitivos de le residencia-presentaban ahore unespeetécula de pesdiin. eras cigpas,wentands, vide, pines, papel, eto, enabled, buldosas, odo fue destruyéndose, inuilizindose, desapazccien do; cuartedndose las murallas: rompitn- dose tas, tochos, desagies Reinaban a oscuridady la fetider. No se subsaacba ningin desperfecto Pues comiinmente el duet de la casona la habia dado en arrendamiesto un imtermediarin,cacnciendo muy biea cl objetivode aquély, por ende, cabrando un caion que presuponia y pagaba la desiruccién paulatina, pero ‘otal. El intermediario Cle. Cap. yng y Besa Monerafie dena fone Senin, 1902 pag. 9B a5 ra quien subarrendabs Ins esas; aituraimente, estaba gum menos inclnado a hacer reparacianes” ___Junto'a este tipa de comeentitin surg del spbarrienda de antiguas casonas, estaba el (card tipade conventilo sargido del alineamiento de cuarinsy pies en tomoa un pasadizo )& a i. ¥ mis abajo aun, en Ta escala de | ienda, estaban los"cuuries redondios”, piezas subarrendadas que ao daban directamente a ningiin lugar abierto, Gon- alo Vial, siguiendo inlormacisn de prensa, en un calculo conservador estima que hacia 1910, cien mil personas, aproximadamente la cuarta parte de la poblaciéa de Santiago, vivian en 25 mil piezas de coaventiles, cuartos redondos y ranchos'™. Elcanveatillo que, comp hemos vistoen el capitulo Hi, atrapé a las ms pobees cuando se agotaban las estrategias de subsistencia neonal, eva un negocio ity rentable para sector ses dela élite, Con una inversiém muy baja, las rentas percibidas no solo pagaban en costo nlazo las precarias construcciones o las doterioradas casos patricias subartendads, sno ‘que constiinian para muchos sectores una feente-estable de ingresos."Tan extrema era esta situactin, que cuando se tomaron algunas iniciativas para demoler conventilos Ueelarados insalubres, el Estado no considers e] pago de indemmizacidn a las propietarios. Agregvemos que en el periodo que nas ocupa ol eanon de ariendas rigué también ‘spiral inflacionaria. En efecto, Vial ha caleulado que entre 1895y 1910 estos experiment: ron un alza de aprocimadamente ut 24%)Esta cra es muy cercaaa a los cdlculas quae ofrece Reeabarren para el mista periedo. 1 Estado, por ciert,se-omé su tiompo para enfrentar seriamonte-e! problema de 1a hhabitacién popula: El Congres, par ejemplo, se tomé 19 afias para dictar la famosa Lay de ® Hobinaciin. Obrere, proiilgada en 1%) Esta establecia la farmactia de un Consejo de ines pars obreros qué contaba com una serie de atribuciones para demoler o de- 5 bres Jos canventillos,oforgubs cicris benefcios a las “casas higitnicas", establecia algunos boncticos ibtarins para la construceén y las coopérativas te. Apo. bbétambiée la destinarién de 600 mil pesos para construcci de hebitacianes abreras'”. Fi\Canseje de [labitacionss para abseriy que [uncioné al amparo-de la Ley de 1906, operaria- hasta eae 1925, ¥ si bien en su haber hay que anotar la demolicidn de muchos conventilles, la reparaciim de vey canting, ks declsracién de vivrlendas igiemicas Ge 193 cités y mis de 4 mil casas, su accién en tmnivis geacralesestuvo muy por debajo de la ‘magnited que represcntaba e problema de la vivienda popular. Por ejemplo, los 604 mil ‘pesos zprobados por la ley en 1806 estaban agotindose al inalizar ose misma ao", 8 ViaGarmla sri Die Ba Serna del Pein. Sastng, 181, tT poe 5 Viale, ig s02 & Wibebeitepae 504 = Vise eitsplp 502, —igntocoma producto de Laci filantrpca de particulars, c Fstadeaeconsruyeer las pines poblacioie Ober. Fl Consejo cnsituy, por elenpla ‘ina poblacsin obrera Ge Gien casas en el barrio San Eugenio (en 1912 se entregaram 7 de estas a sus usiiod); tras C3888 para Olhéres fueron consiruidas en este periodo por a Lefin XIILyla InstituciGn “Sofia Concha*. Sin embargo, en canjunto estas eran 16s ‘remendamente pareialos: “Ante fa magnitad de! probledia tales inictativas eran gotas en el mar"™, Can raxin entonces el dociar Valés Cange cra tan pesimista frente a Ia cans. truceida de habitaciones para obreros, En su carta decimequinta al Presidente Barros Tasco Jedecia que tenia el temer de que “la cosa quede en el papel”. Por otra parte, eno gue se refiere la habitaci6n de sbrezos.on else, lasiuaciéa no era mejor: En efecta, em este cass ls construcciones siempre tavicron un earicter provisaria ¥ las compaitias no demostraban mayor intorés en invertir en este rubra, De esto modo la habitaciin miner tipi Fue fa del “campamento: “Las habitaciones que las oficinas dan asus operarins son grandes harracas de ferro ‘alrinizada divididas en piers pequetas,en cada una de las cuales se insalan dos ‘tres trakajadores si son suliervs, i uno-solo si es ¢asado. En algunas salitreras, que, por haber adopted procedimintos de elaboracién més pesfectos, necestam menos opera ‘ios que antes, se dan dos coartas de habitacin a lag matrimonies cia familia. Rstas barracas, que constituyen Jo que so lama. eam patents, son las habitackones mais terri. ‘bles que se puede imajinar: en el dia el fierro se caldea con 2! sol que eae a plomo y ele ss myosen aquellas arenas bracadasjJosevarts so corvierten ea hornos; en la ‘noche la temperatura, aun.on verana, baja mocho, ila habitacién de obrere pasa dol calor ‘nsufrible aun fra que muchas neces no le permite concilioe el sui; diferencias de 30 grados entre el dia ila noche son corrientes"™, Otra forma de constraccién, distinta a la barraca de metal, fue la de *costra 0 costeén™ {una tierra endurecida que se encuentra sobre el caliche), Esta forma tenia la ventajade neutralizar los fuertes cambios de temperature, propins dcl desierio chileno, pero repre- sentaba elincaoveniente de que era caldo de cultio para todo tipo de bchos yen especial Ja temida vinchuca, conocida por sus nocivus efectos para la salud. La deteriorada vivienla poendar,rantoen laminas, en la ciudades, como también en compo, weafa'sa cottraparte en lt refinadas vivcndas patti, de los administradares yempleadas de contfianiza de la mina 0 del patron que visitaba por iemporadas sus posesio- nes en el campo. Enel caso minera, el costraste estab muy cera, alli misma en el eampamento en las casas de la administracién. Estas eran “urs veces sencillas y otras lajsas, pero siempre ia he pig 504 = Yeneg h e. 228 87 chmarla, limpias, bien tentdas por wna protija ama de Maves, con subrosa comida y exce lentes alcoholes, y en las cuales -siendo inglesas las oficinas- los empleedos segutan I ctiqueta imperial y se westian con esriero para Ia coma”. En eltcaso de Santiago el contraste entre el hacinado coaventillo y Ia espaciasa man- sin oligimaica no admitia comparacién. Como indican Grogs y De Ramén “la clase alla santigtlina habitaba casas de grandes dimensiones equivalonteia los antiguos sales de Ia traza primitiva de lacimdad y a récos mis aun como era el caso del “palacio" Concha Canotte, pudiondo recibir yalojar cémodamontea tres generactones de una misma familia. ‘Sus grandes patios asegurabaa la privacidad suficionte a Ia familia y también permitian ef sislamiente de 5s individuos en sss habitaclones ae el intorior de sus buertos.eiaverns- deros; en el gran camedar podian insalarse sin problemas cincuenta 0 sesenta personas, ‘en sus divers salones, Hamados segin el color de su empapelado y todas ells colmades de pesados muctles, cspejos,cuadros, mesaselfambresy limpares, podia celebrarse gran- es fests y todos sus numercsnsinvitados cabian sin prablomas y aun tenian espacio pare danzar los complicados bailes de la época que roquerian de muchos metras por pareia™, '¥ se podria seguir enumerendo esas contrastantes diferencias que se verficen en Val- paraiso, donde los ingleses contaron con certo propio (Cero Alegre) 0 en Lota, donde la expora de Cousifo tuvo su monumental pargue propio. En cindades como Santiago, entre el eonventilla y la mansin patricia se podia distin. guir también toda ose tipo de construcciém intermedia, Kabitadas por artesance, comerciantes, ompleados, ec. Se tratabs de berrios més bies grises, pabremente equipo dos y que'ene! mejor de lascasosreproducian cuadros y paisajes de pueblos provincianos. El deterioro de la salud del pueblo Como hernos insistido, el poblamiento peonal de cindades como Santino, Valparaiso © CConcepeién {ve creciente en a segunda mitad del siglo XIX, En la década del sesenta, la ‘Mutiipalid de Santiago se-vio en la necesidad de administra algin tipo de medidas al desordenad crecimiontn dela ciudad. Pero el problems no-era solo comay con “plan regula. dor’, sino que macho mayor: la ciudad tal eul se venta desarollands cra presa fell de grandes estes yepidemias Por ests raxén junio.caa los planes de laedilidad en orden a-establecer agin plan” para Santiago, hubo de crearse par estos mismos afas un Consejo de Higiene, umpliar la cepacidad hospitalara, crear nuevos Jararetos, mportar vacunas, etc. Can tide iat ig. S00. Goa, Purdie De Renin, Aranda Samiage exo psindsIRS-ISVE: Searls urban y media uni. Docuseata de inajo 921 CIDU, antag, 1, 88 ‘yw pesar de las constantes denuncias de los médicas verdadero intelectuales angénicos Ae la cutsa popular algunos de ellos~y tambiéa de la accién autnsostenida de las artesa ‘os 2 través de mutuales, los problemas de salud pelica contimearon ~¥ el eanventillo los agravé-hacia fines det siglo. El conventillo, docimos, agravé lis problemas de sulad publica pore! hacinamicnto de | poblaciin popular que élconllovabe, pero también coniribuian decididamente a empeo- rarlos prablemas ls deficiontes somvicios sanitariosy de agua potable. Sabido esque tadavia 8 Finalisare! siga Santiago no contaba con sistema de-aleantarillada y as aguas servidas ‘cotriam a tao abicrto por las famosas acequias. Fstas narmalmeate cruzaban por ef timo ‘Patiode las cases patriciasy por el asidio central de los-conventila, Entre las pestesy epidemias mis frecuentes, al finalizar ol siglo se pueden sefabar ia peste bubénica -fantasma constante, aunque intermitente~cl céler®, que elafo 1B8Garra- sé la ranacentral yse extendis hasta Arauen. CompronettS a ais do dice mi vitimas, La viruelaera por su parte ondémica. Particalarmente duro fue un brote de ella sein Vial- m.1905, La Sociedad Nacional de Agricultura ealcalé en diea mil el nimero de trabajada- res alectados.Y si se considera el periods que va entre 1905-1910, e] nimero de afectados fue de 18 mil, que terminé por representay ¢1 3% de la portalidad geveral dea poblacidn cenel mencionado poriodo, Pata el iismo periado, finalmente, més crveles fueron las epideraias de flee tfc dea,que anoté wn total de 25 mil muertes. En conjunta,la bubsnies, el cblera, la viruela ye] lias efan las enfermedades que mayores estragas haclan entre loa més pobres, comprometiendo muchas veces también otros estratos sociales. Ere sus casas, que mnés estinulsban Ia propagacién de las epidemias, estaban las pésimas candictanes sa nitarias de nuestras principales ciudades Como siempre suele ocwrer, ls nifos eran los mis expucstod a la enfermedad y aI ‘muerie, Confabulaben paraello np soo las causes sanitarias hasta aqui anatadas, sina tam bign el deterioro general dela salud Fiscay mental por laque en este period atravesaba la familia popular La escaseéde trbija el ala del costo de lavidarque sc hizo muy notorioen. Jas primerasaios del siglo KX, la vidaen el ccaveniillo, ct fucron también causas sulicoa- (os para que ereciera ol aleobolismo,la prostitucién las enfermedades venéreas. La famil tendié también entoncesa desarticularie, de fal suerte que en losaos 19061910 el 37% de Js nacimientos fueranilegitinos y que el ao 1908 superaran al $05. do los acidos. Asi ls pestes infantile eatre 1905 y 1910 alcanearon su penck ol sarampin exierminé as de 10 mil nosy adultos; el coqaclachea 14 milla diftera y el crup s unos 2 mil y gripe a mie de 18 miF, Yala eg 508, 89 Blaleoholinma, coma hemas adelantado, también crecid. Ba las afos del cambio de sigloel consumo anual por habitonte alcenzaba alos 18 ltrs, que representaba el dable y hasta el criple de cuelquier otra pais. El consume desmedida de alcohol era frerweste en Jos barrios populares de las civdades, pero tambin co los campamcatos mineres. Forel, 1 Dr Valdés Cange, indicaba que las fandas instaladas en los campamentos, que coniaban con laaprobactba dels administradores,eraotra de lastantas formas de explotacién. Algo ‘semejanteocerria en el compa, dande era Frecuente que ef pago de jernaes fuera compa: dado de un importante eonsamo de alcohol, suministrada par los patromes. Pero el seohol, ‘camo se sabe, no suele venir sala sino que trae sus compas, Des de elias quizés hayan sida las més importantes en el periodo que nos ecapa: el ego y el bardel. Este itm era Bieza obligads ei los pucblos mineros del norte y se insualaba normatmente al interior del raismo conrentilloen ciudades como Santiago, Pare 1916,que existounaestadicticaconfiablo, se allaban rgietradas en Santiago sobre 500 prostititas. Sin embargo, toa indica que sa nimero era muy superior. Fara algunos bservadores la cifra real debe aber hordeado las 10 mil iso considers Iu prctica elon Aestina def camercio sexual ysi seomnsidera tambien que cuanda la prostiucon crece en estos niveles es poryur ella representa una eststegia de sobsistencia para un importante seclae de mujeres del pablo. El cambio de siglo sorprendié de este modo ls mis pobresde la sociedad popular en tn verdadero callejin sin salids o como ha indicado Salazar, en la nis profund crisis la sociedad popular”. En efect,en esta coyuntura, si bien la industria agltinaba a impor. ‘antes sectoresIeborals, la inflacién depreciaba sus salatos y su capecidad de absoreiéa de mano de obra era limitada; par otra part, el régimen parlamentarin hacia muy pooo ‘ara hacer fente a la miseria que seextendia yalainflaciéa que polpouba las ya precarias estratogias de subsistencia peanal. Fl cooventilla se convirti antonces en el titina bos ‘iin para albergar-a una clase popular Con sus ingresas deprimidas, cuando los tenia, y su salud quebrantada por las epidemias, el juego, el alcohalisme y et hacinarienta, En este Contexio era muy diel hablar de future Bs ln situacion de-un peda que describe A. Romero en La wiusla del conventilta; un pede que se encuontra en ! final desu iornads: “Pinto, alba, gun al di. Hina de tndo y cuando el maletin de las voescianes se ‘qaeda vaca, el pobre hombre se artim al conveniio, despacitey fumando, furmando ppensé una porcidn de cosas, ta vista pordida en el ciclo alt y az. Fidel Astecillo se daba cuestadeque no hacer nada cs un trabajodduro, dificil abruna ‘tor, mxime cuando el agraciade tiene sus deblidados, sus gustos, sus vicias suerte & Vishab ci pies, Cabrel Cuno Ge eran deeds populares, C0, 198. perrala de uno-prufia el macstra Fidel, dejando corer las horas que, también como al agua de la acequia, pasaban por delante desu silla sin dejar ni el tids eve rastro,"™. Y para colmo, inflacion Enel periodo que nos ocups, la depensencta de Ja economia chilona del mercado interna cional,elsalitre mediante, ore causa frecuente de desecuilibeiosscandmicos Esta fue laepia que leré, por ejemplo, alos abitreras. “manicomninarse™ (yfijarcuotas de produccién,reduc- cid de trabajadares, et). Pero, exisn tambiga cansas quo podriames deeominarintemas para los peridticos desequilbios, Una de elas fu la supressn del patrén oro y ls emisiones 4 “papel moneda” que permitionajustar les negocios de la lite, faverecan lx especulaciin (cuando habia dinero obundante) y tenian coma consecuencia uns cresieateinlacin. Es {amos la*Tiebre bursitil” de 1904-1505 qpe Deva la consticuciin deunabundante ‘nimerade empreses que ao tentan més respalda que la especalacfn financier cl crédi- 10 ficilAngel Heredia, personaje central de la novela Casa grande de Luts Qrrege Luca logréen ezveriempo vivir la Hsin de prosperidad y atendor las demands de $a aristocra- ‘ica esposa, Sin embargo, sin produecién real_y conereta, a la Fiebre bursétil de 1905 le siguié muy ripidamente ef derraimbe y elcalapsor muchas empresas recién erosdia "que- braron”, se restringé ef ered eayeroa las reservas bancarias. Segtin el histariador Jolio C. Jobot, 1a fiebre bursinil de 1906 “se presté para las ms atrevidas especulseiones que causarom luego la ruina de muchas persooas®. El mismo au: ‘oe indica a renglén seguide: "Sin embargo la crisis que se abre « cantinnacién no afect a Jos grandes magnates {agricultores y benqueras), perv-se aprovecharon de ella para cbtenee nuevas exnisio- ‘nes que hieicron descender mai el cambio, agravando la miscria de las masas por ¢] ehcatecimiento continuo de la vida, especialmente-de los articulos de primers ne- cesidad para el pueblo” En este sentido, para Jobet y otras autores ol ala de los preeis “fue uno de os clemen- ‘ot exis importantes en el desarrollo de 1s cueatin social en Chilc™, Destaca asimisma Jobor que el peligro iaflacionario fue también comprendido en su ‘época por cl destacada palitic liberal de la ite, Enrique Maclveryen un discurso dirigido ‘a tus colegas en o Seriado, en mayo de 1906 Bary Alber a i del cenit, (CLS jab Ji ap ris desi concn de he Halt Uninet Sag 1955, oh, ¥ . bet Jk Ci cd pg 190, a1 “Bate estado de profunda agitacion y excitaciin de las clases trabajedoras,esta cares: tig intolerable de la vida, que puede ser indiferente para las.que-tienen negocios ea li Holza zoo piensan mis honorables colegas, que pueden traerenvucltaslas buelgas fut. ras, con tndas sus consecuencias? Los que estamos aqui poderos defendemos de la baja de lz moneda, Jos que tienen ganada saben que: étas subinin de valor, Is que tienen ciros negocins tienen campos de donde repanerse de las perturbacioncs del ‘alar de la moneda; pero ls pabres los que estén afuera,los que viven de salarins esos fo tienon medios de defensa; esos son las débles en La lucha por Is vid; ess Sm ls victimes." ‘Veamos ahora cémo se reflejabs la situaciin deserita em el nivel de los salarios: “Los jornales que ganan los inguilinos-y que son vartables seqrin las regalias de que oran...n losafios 1907-1908 fucruahan de 0,21-centavos a § 1 enmoneda carriente de 410° d, Encuanto a las peonadas ambolantes, “forasteros” ganaban wn salaria que va riaba de 080 centavos a§ 1,60, sujeta a dversaescala (con “raci6n” o sin ella, a trata 0 al diay segin las lcalidades yfaenas. Es asi comallos salarios de unreal de principios del siglo XDCeran de 2 reales a mediadas y de 10 reales a prineipios det actual: en Canto al valor de la moneda habia disminuida de 47 d.a mediados dl sigho XIX, a 12 2 comicnaar dol siglo XX" Y,en cl caso de fos mineros y otras zonas del pais la situacidn ora la siguiente: “Los salariosen las minas de'Tarapucd y Antofagasta eran de § $6 on el Enterior y de S45 5 en la costa, en maneda de 10 d. Kn las provineias de Atacama, Coquimba y Aconcagua de $2 a 3,50 en la cnsta y de 2 a-4en ol interior. En las minas de carb se pagatan hasta § 5, 50, En Magallanes 8, En las industrias el salarin medio de les hom bres era de $380 y para las mujeres y nos de $1,80, en moneda de 10" d,.con una jomads de 9 » 12 horas. Si a veces pueden cansiderarse elevados tns salaries debe rerordaree que, desde le Revolucién de 1891 hasta 1908, el eosto dc la vida se habia ‘duplicade y él valor dela moneda habia descendidoa la mitad, por laque lasprecios de articulos de consamo so cuadriplicaron" Ferola inflaciinen zelaciins la economia popular vo tambiga otto tipa de consecuen- cfs. Emirs Gets se pueden setalare] aumento de-Truentas at 1li60" en Jos alinaceties as pests semanales” pae la compra de vestnaro,y el més soenrrdo: el empefio de prendas, articulos del hogar e inclusode herramiensas de trabajo cn las famosas ngencias de empefi. {a inflecin $e tradujo en estreches, miseria, pero juntacon ello entregé a lossectores populares urbazos al negocio de fa usura. Al eomemmar el siglo habia en Santisgs mis de (Chanda por Soe an hips. = heutapor Jobe dl tad Gl ames Lamm ebrenzen Chile presen al Prins Conroe (Glonisien ele on Santiago deste el 25d ces dy 15084 6 de ene de 2908 = Bide, 92 fochenia agencias de empefio, Ja mayor parte en manes dc extranjeras. Muchas de ellos ‘abitaban en el miinua local de la.agescia pere més que sus propias condiciones de vids, Lo, ss duro del oficio eran los abusos que cometian avalusndo en muy baje preciolas prondas empefadas aplicandotasas de interés que legaban al 120% anual. Mediante exe sistema cm précticament inevitable que el agencio se quediara con las prendas empefadas. Flo movié a la opin piblicay al gobierno y se establecié entances ‘como narma que las prendas ha recuperides por sus duets debian srrematadse, Fl resul- tado na fueme Feira tenemos que: “el aio 1908, en Santiago, 177.526 copecies empofiadas y rematadas, cuya tasacién su- ‘mara apronitsadamente setecientos mil pesos, dicran setecientos cincuenta mil pesos. De ésias, $3% correspondié a los agencieros 6% alos martilleros y solo 1% a las due fi. Pore I» que ofectivamente cubriroa los itimos (par causa de fos brevisimos plazas Y engorrasostramites pare recamas la devalucia) ue ‘odavia menos: apenas 242 pe- 05,7 centavos...,0,032 sobre el producto de lus rematest™, Rodebe extraar catonces,come yeremos més adelante, queen la gran protesta pomt- ‘aren Santiago, en 1905, hayan sido asaltadas muchas casas de empeiia y que se hubicse manifestado in fwerte sentimienia antiextrenjero. Naseria completo el caadra que hemas venido describiendo sino nos efirigramosa las condiciones de trakaja en que se debian deseavolver ls trabafadores chilenos en ls pri- meros afes del presente sila. Condiciones de trabajo, una causa frecuente de protestas ‘Las denuncias sobre condiciones de vida y de trabjo de las obreras chilenas estuvic- ron presentes prcticamente en tados es manifests, peticbones y quejas que se hicieron presentes a la autoridad. Tals el caso de las “quejas” que hicieron presentos diversos delegados obrervs al Iatendente de Inutque y a un Ménistro que se encantraba de visita cn Ja ciudad en marzo de 1908 ‘Reunidas con Is autoriad, gin informs Bi Puetlo de Iquigue Wego de ls saludos de riparjel Ministro preguntd als delegados sobre sus narsbres, pocedencias, canta, ofc, te, manifestanda el intends del gobierno por “tamar contacto directa con las abet" Los delegades obreros fueron omando la palabra y exponienda ras quejas. Manuel ‘Montenegro expied, “que el rabajo.ra rudo pong se trabajaba a todo sal d la mafana a ‘a tarde en Inextraccién del caliche,con un diario de $1,50., Que pa Iaearvetada de ealiche lob, li $8 se poga al operario también $150, pero que a veces soles hace botar algunas carretadas a ipreterto de ser de escasa ley y que desputs ex recagida y echado 2 los cachuehos para su bonefiio. Que suchas weces los operarios hacen acopias de buena ovegularley,y euandoese copia ya esté hecho, se les reba el preci por carrotada, sin ninguna forma de avi." (Ou delegada, de apeliido Barrios expuso “que ali no eaiste el libre comercin, que se cabra contribuein par las verduras, de part de los jefes de oficina; que se persigue a los ‘comerciantes impidiéndoles el acceso a los campatmentns y.que se toma y quita por contra thando coalquier compra de comestible hecha fuera-d¢ la pulpcria”, ‘Hdelegedo Alvarez, porsu parte, indicé “que los coress son defisientes, que se vila Jn corpespandencia y st intercepta Ia creulacién de impresos. Que se cobra un peso de contribucidn para médica y botica par cata persona, forriindose con esto grandes cantida- des y que ese dinero debe darséa la Beneficenca, por cuanto ningin enfermo se medicina elas ofcinas sino en el Hospital de Iquique... Que las habtaciones para los operarios son ‘nnd, malsanasy enfermizas..” Finalmente, el delegado Ponce hizo presente lo rudo del trabajo que no se crresponde ‘con ol mexyuing salarié “por cuanto el triajador of las miquinas hace su servicia aun ‘alor de 125 grads, en la pa viento y so, y que los primero ne pueden resisit 8 BEN FUdS Trubajo ms de dos afios y que un cargadar se inutiliza-en wn aio, y que se impone la necesidad de velar de parte del Gabfetna,coa respecte ala falta de garantias la Aesigualded y los ebusos que existen entre el capital ye trabajo", YY isi continuarin las quejes relativas a salarios, seguridad indusiria, mulas indebi sas, neficacta del sistoma ascalar'y de falud, susenca de libertad de comercio y abuso con fas fichas ete, Estas demandas ya veremos se repiteron una y otra vexen ls pampa, hasta ‘que fueron acaliadas temporalmente en la Fseuela de Santa Maria en 1907, ‘En una mirada mds generat las condiciones de trabajo do ns aralaiados en Chile en esta <época se puede decir que no existia ningin ipode previsién social, salvo la que-se proveian Ios ‘propio trabajdaresa través de sus sociedades mutuales yom tipo deorganteaciones, Nobuo tampoca, sino hasta 191, alguna legstockin sobre aocidentes del trabajo Taampoco se Babi Jegislado sobre ba duracidn de ta jena OF Wabi, que podda Ductuar entre 9 12 horas ‘orlus¢ incluso wun ms ¥ el mbajede niles mujeres careeia de Lodo tipo de reglamenta- ‘lia pest de que en conjuntorepresentaben alnededor del 30% dela fuerza de trabajo. En fin, coma es sabido, en Chile se caretié hasta 1824 de toda tipo de lesislacin que regular las rolaciones capital rbajo, Recién este af se dictarom las primera leyes laboales que fueron ampli y refunds luego en el Cdigo de Trabajo en 1930, Fl resultado de esta situacién fue clara en las primeras décadas de sgl: el. trabajo se encontré en tina evidente desventsja y desproteccidn respecto del capital A los trabajadores, © Blfaclede igiqe. 19 man 3904, 4 en consecuencia, no les quedé mis camino que demandar al Estado, pero mis que eso, extender sus propia organizaciones que esolran algunas de sus problemas previsionaes, de sald ¢ incluso de educacide~ y,enfatirar, por otra parte, en In confrastackén ean sus patmnes para obtener wa minine de justicia, La protesta popular: La otra cara de Ia cuestién social “-Conoeié el malestar la Comisidn i vio principio de perturbacide. (Reena! Coad la autaridad coastala ess existencias! Esto prucba qr la miseria existe entonces,icomo.un efecto surge ese principio de perturbcién, aQuerdis lamar también solo principio de perturbecisa a la veintena de huelgas ya producidas? Sis autaridad no ka wegado de todo la euestide sockl y Wo redace soloa principins de perturbacin, es porque en ellas se recucrd haber asesinado al pocblo muchas veces” = Duan Jecou, Sign 28 deabril de 1904. 1a cuestidn social al cambiar el sgl rove a nuestro juicio una doble mantlestacién: ‘por una parte vlrié cada vex mas opresivas ls condiciones de vida popular, coma ya he- mos visto-en las paginas recientes Peso, por otra parte, se manifes6 como protesta contra Lorde social y politicoexistente, La obrems y los artesanos, on la medida que habian avanzado wnds'en organiza y ‘xtensinestuvieroa a la vanguandia. Per cada manifestacin significative de elios-aqucllas que tascondieron regional o nacionalmente- estuvo seompaiada por la presencia masta de Jos mas plies. En ete sentido, a prtesta socal de principios de salon fue solo crera-@ ariesanal, Mis que esa, fue popular Valparaiso 1903: La huelga maritima Liogaba at ia 15 el mes de abil de 1803 cuando suchas porto e enter por la prensa del inicio de tna huelga de geate de mar. Se trataba de los trabajadores encargados de las tareas de carga y descarga dela Compafia Inglesa de Vapares (Pacific Steam Navegation Company}, - as bela sein El Mari de Vora relamaban, nitalmente, a moder citi en Tos horarios de trabajo que hasta ese momento era de seis de ba maiana a seis de ka tarde 95 “Piden las eporarios que las horas de trabajo sean en I Gpoca de inviernade sete dela saiana a cinoo de la tarde, dejéndoles el tiempo que en la actualidad se les eoncede part el desayuno de ocho media a nuevo, y pare elalmuer de una.a dos". Reclamaban también bs esibedores de la Coenpaitia Inglesa un ala de sus salar, que babitwalmente eras alrededor de wit 10% mis to que el de sus how élagos de li Compaiia ‘SudAmericana de Vapors Los tabajadores buscaron sacar veetaja de ba tradicional okuntad dels Compaiia Inglesa de pagar un poca mejor que su rival, la SudAmezicana™.¥, pr ceria ‘quc-sesalaios se habian venido deprectand coma producto dl alea del caso ea vida. El gorente de a Compatia Ingles, J. W. Sharpe, st meg6torminantomiente a consderar las demandas dc los estibadares y amenad adoms 2 los hucluistas con ol envio de “nuc- vas cuadrilas Ge trabajadores que ya tenia contratadns”, Gonsiderando la actitud hasil de Sharpe ls trabajadares so entrevista, la misma smafiana del dia 15,com el Director et Territorio Maritimo, contraalmirante Arturo Fernindex ‘Wall Este, que eva ademds presidente honorario de varias spckedades obreras, lee “proma- ti6 ayudartos y ver modo de arreglar las dificultades pendientes™. El nimero de trabajadores comprometidos aa la huelga, on esos momentos aleanzaba a unos 60. Dos dies después de declarado el movimiento, los trabajadoresdirigieron ura nota a Sharpe en la que haeian presentex nuevamente ews demandas y su deeisiin de someter sus diferencias a un arbitraje: “los abajo sucrits tenemasel honor de poner a voestradeliberacién los siguiontes acuerdes tomados por Ins estibadores y jornalerus ocupadas en la cayga y descarga de fos vapores y baques que recalen en este pacrto: {Al joe del torrtoria maritima, don Arvura Feradndex Vial, nomshrindole coma érbi tro nuestro le que fie sceptada por més de 200, que era el némero de ka reunide, 2 Pasar una circular ala Compafia de Vapores y alas casas consignatarias de buques y a Cimara de Comercio de este puerte, come igualmente a la gobernacton maritima y «ala fntendencia de la provincia. 4 Que el temps de trabajo sa de 7 A.M.a SP siendo oste tiempo permancnte, con una hora de comida de11 a 12 0 de 12 1 PM. Em cas de ncupamos despuesde la hora antes dicha sera un trabajo extra: sa valor por ‘horas de cincuenrs ceniavosen mercaderias y de seventa centavos en metales y carb, +# En ningin caso podrd haber medlos dias nitres cuartas de dias. SEI trabajo por dias ser par mercaderias de $4,por carbin ymotales $5; dias festivos sgn declarados por Lure ta Rergnaca tendrd un necanco net 25%, Et Meeurede lowe 15 de a de 19 3 DpSei Peer “The Vaparaen Marine Spi of 103 an the development of Resoheionary Labie Movement in Ce, en bursa f Latin America Studi, Crepe University. % EtMeeurs dileaeis, Se da 903, % EiMerure deo, oe bat 1303, La respuesta se Sharpe a la nata de los estibadores én huelga fue det tado ‘Argumenté que los soeldos por ellos recibidos oran lo sufieientemente altes, que ean los subretiomposestacalcansoban a $45 ¢lnclusaa § Sy que la Compaiia podria prescindir de sus servicios. “Pero como parece que un almero cnsiderable dels personas que Us, representan ap estindispuesinsa trabajar con dicho sueldo por onsiderarlo muy arduo y mal reaunera- dda debo decieles que creo no hab incotrenientes de partede la Compeiie en encuntrar otros medios de efectuer las aperaciones sn la concurrencia de sus roprosertadea™, lcuotesalesirante Feraiades Vial, porsu parte, intents persuodira la Compal que llegardaalgin acuerdo con los trabajadares, pero no abtuvo.ningin revltado postiv, Alle parecia que “las demandas obreras eran justiicadas en vista de las presentes nece- siiades de la clase obrera a.cual tiene hoi mayores exigencias que antes... Actualmente. todo cuesta mis cara, la ropa las wiveres In easa, et. (deelaréa El Mercurin)..”™. Pronto tales eclaraciones de simpatia con el moviasiento de estibadores asf como sus inciatvas para favorecerlas, le costara su puesto la Armada El dla 18 e abril ls-estibadores de-a-Compatia Inglesa solicitaron al gremio de los ‘ancherncsjue apayaran su movimiento y esc mismo dia ademés so plegsban ala huelga los ‘estibudores de la Compa in Sudamericana de Vapores. Las lancheras ln harisn a partir del Itunes 20 junto a os jornaleros de Aduana. '¥ cada greinio que se’ncorporaba al mavimientolo hacia ya1no solo en solidaridad con los estibadores de la Compaiia Inglesa sino hariendo presente cus propias demands, fal fueel casa,por ejemplo, de os jornaleros de Aduana que se dirigieron alas auloridades de {a provincia en los siguientes términos: “Daido of escaso jornal quo se nos asigna,y la caestia de todos los artéculos de vida, nucstra situacin ex de miseria,reniendo apenas le Suficieate para comes, Vastras seforias saben que aun cuando el valor nominal de Ia moneda es siempre el misma su valor efectivo es casi un terclo menor al que legitimamente le correspendia. De aqui que no es e] mimera de pesos que debe considerarse, sino su capacidad pera adquirir los alimentos oservr as necesidades de nuestros bogares. Con el objetn de que so nos ‘gay co nas ationds oy nuoetras:poticianes, bacemos wl amargo socrfici do parslizar ucstro trabajo, ya.que nila let ni fas autoridades judieales 0 de gobierno han dictado prescripciones en resguardo o pratecckin de! desvilid."®, Bindican Incgo sus dcmandas que pueden resumirse en: aumento de tril, anticlpos de joruales por mercaderias no desembercadas, “matricula” camo medida de moralidad ft Merarn dedpar, le ab 968, SFE Mirsri de Wapertie, 18 de abe 19. EE Meranis Ide sew 10. ‘leceifn de los capataces y que estos no sean designaidos por los contratistas, que los pagos se lashagan direetamente las funcionariosy no las eapataces, lo ue como norma ineluye todo movimionin huelguistico al finalizar sa petitoro: “que no se suspends a ning traba- jjador por haber partcipado en la buelga”. ] dia 20, cwando ya diversos gremios shaban declarado en huelga, la actividad normal del puerto peicticamente tesé.Como indica De Shazo,la mayoria de hs tripalantes gvese ‘enoontraban s bordo de Ins bareas delas Compaiis los abardosaron.y se dirigseran aValpi- rico pera samarse al movimionto; ninguna carga fur movida a través dela Casa de Aduana argue los contratistas no padian encontrar a nadie que reemplazara a is: aduaneros en ‘pao; la mayaria de los barcos permanccicran cargndos cn la bahia con sus cargarsentes de ‘erecibies descomponindose, ye que lnslanchoros ampova trbajahan'?,A estas alraras, ct ‘mimera de huclguistas Degaba a unos contro mil Los diversos gremioscomprosetides en a uelge mentaron consti un frente wnida de tal forma de slidatizarie en sui petciones ino volver al trabaja mightras na se resoviera lobelmente el conflicta, La iniiatva proventa dela “sociedades de resistencia” de orient énamamqaista quese habian.ctivado al calor de a huelga. El pecto no prospers par diversas arones entre otras, parque los trobajadores pertenecientes a sociedades:mtualisias se ‘mostraran desconfiados de lasonarquistas. Huboriticasa Magno Eapinoco, presidente de la Sociedad de Empleados de Vapores, quo ora partidario de condacir Ia belga de un modo rds active. Psi, sn embargo, también para que no oe firmara el stverde, la negativa de lee lancheros. Estos no fueron partidorios de la iniciatva por cuanto tenian posibilidades de nogociar par separado con sus emmpleadores. Ea el intertanio el eontraakmirente Ferninder Vial, con fecha 22de abril, era destitui- do de sa cargo y transferido Ia Divisin de Bvoluciones de a Armada. Ello era, por cierto, iaha suerte de sancién que Ke imponta el jefe ie la Armada, Almirante Jorge Montt. Este ‘im, en realidad, fall on favor de las Compaiias y la prensa alia alos empleadores a (gaienes Fernidee Vial no les simpatisaba, Caando ya el movimiento se prolnagaba por ms de una semana, tanto los estibadores como ins ancheros alcanraban acuerdes con algunes empresarios. Sin embargo, el conflic- to cas fae grandes Compuiins 10 tenia vis de soluciGn. La wetivided comercial, poe 3 parte, ya sential elecios de a paralizacin del puerto: “Bl comorco sufve considerablomonte con este estado de gasas -camentaba £I Mercurio sabemas de vartas casas comerciales que han dado orden que sus mercaderias se tes. embarquenen'Taleahaano y sean traidas por tierra Valparaiso. Le fbrica de cerveras \Valtivia ba paraizado tos trakajos a causa que no ha podido desembarcar los barriles due tiene-a bordo de os vapores surtas.ca It bahia", estan ob. pie 1. Bi Mecuria dFlpurai24 de abril de 290, 98 ‘Asi como Fernindes Vial manifest sus sinpatiss pore! movimiento de ls trabajadomes imaritimos, entre algunos funcienaris de aduanas existian también opiniones fevorables a los trabajadores en pare Tales el caso de un alto funcionario que, aposar de manifestar no ‘estar de acuerdo con as peticiones de alza do salarios de ls jornalers, si cninciia con ellos en sus exitcas a los capetacess “estas explotan Jas operarina. Tienen los capstaces cantinas y despachos en los cua. les obligan alos trabajadores-a consumir Liones y provisiones, yal fin de semana sescoeatan el valor deo consumido. El que no se aviene a hacerse cliente dela can ‘0 despacho, con cualquier pretexto es despedide desu ocupacidn™™, Los cootratistas sin cmbargo,reckavaban toda ala de xalarios en favor dels jornale- ‘os, angumentando gue ello suponia modifcar ls cantratas establecidos con el Fisco. Las ‘autoridades maritimas y de Gobierno, por su parte, mantenfan una activud ambiralente frente al moviiemto, For una parte se mostraban proclives al aritraje: peru por otra, favorecian la estrategia de los empleadores tendiente a quebrar el movimieato mediante el recuse de los rompetuelga. El dia 26, cl gobernador maritimo Francisco Siinchex propuso realiar en su despacho ‘una reuniéa coe tedos-los greraies en hnelga, con e] objeto de nombrar una persona “que sirvienda de dcbitr 0 iatermediain, se acsecaso @ todas ls patrones y on unin con ellos solucinnase ls dificultades peadientes™™, Es decir, lo misme que habia propuesto los esti badores al inieiarse el eonflict. Las gremies por cierto aceptaron la peaposiciin de Sdnchex« insistieron ene] nombre de Fernandez Vial El gobernador les manifests que su norabee “ao era erato a los ater nes", Aun asi los estibadores insistieron en él mientras que los empleados de vapores propusieron el nombre de Ange] Guarello, dipotada demécrata por la provincia, Lagestiia de Francisco Saincher yl dipatado Guarella correrialsinismasuerte que la ‘queantes habla corridola de Ferndndes Vial. Las Compatiias se negabans negociae con los trabsjadarss en huelga y menos aun a someterse a un comité arbitral. Fn esta casiin Sharpe declaré respecta det arbitraje, “que ne Lo habia pens ni os probable que taaie resolution alguna paes asuntos més importantes ocupan su tiempo" y ue ls vapores con mayer wmcaut carga saldriau del puri. Horacio Tyon, gerente de Lx Sudamericana de Vapores, en la misma lines de Sharpe, declaré: “al irectorio de la Campa el init llamado a rsilversise aeeptao moa dclegnda de lostuelpuistes.. su opin eraque no habia para qué tratar cond y tenia conocimienta aque este ers tambin el esprit de log miembros que componian el directorio®. er sMesune deeper, de ™ Thides. BrMocurisdeperai,27 a ik 1908 99 La estrategia de los ompleadores apuntaba en wealidad bésicamente aquebrarel movi- rmiento. Por una parte se negaban 2 todo tipo de negoctactin devestimando las iniciativas de las autoridades maritimas y de Gobierno, came también laintervencién del demécrata A. Guarelle Por otra parte, habian logradair rectutanda trabejadores(rompe-huelgas) en- tre los devempleades y trestadando también personal de otrospucrtos del pais. La Casa de ‘Aduana,ea lé mises légics, restableci su funcionamiento el dfs 27 con 100 trabaj «que ingresaron al recinto protegides por fuerzas de la policia. Las auiaridades maritimas, por su parte aywdaran a las Compafias permitiendo quo se embarearan con un mimo do tripulantes menor al establecido por a ley"*, Ante tales inicitivas de los contratistas Jos trabajadores trataron de impedir que los Tompe-huelgas ingresaran a fs Casa de Advan cl dia 27. Se produjeraa ast his primeros enfreniamientos entre los huelguistas y la politi, aunque sin mayores consecoencias. AA inalizar abril, I estrategia de losempleadores ganahe sus puntos: Ia actividad del ‘puart comenzaba a reaetivarse mientras que la moral de los huelgeistas Becaia, Eraluando esta situacién, los anarquistas bascamon reactivar al movimiento, Para ello ‘convecaruna un mitin que se levéa efecto al stardecer del dia hmes 4 ae mayo. Enel mitin hicieron ws de Ia palabra diversos dirigentes. Sin embargo, lo mas Sestacado fueroa las valabres pronunciadas por Magno Espinara: Este, buscando revert las vacilaciones yre- veses por los que atravesaba el movimiento huelgulstico, arengé de este modo a los manifestanies: *No debomos trepidar ux momento...antes que teadimos a los patrones debemos preferis que nuestros pochas sean atravesados por las bayonctass ¥en las momentas ‘que estemos on la agania, gustaremas del placer de ver cémo arden los edificios de nuestros tims y cima sé arremolina el agua al hundirse los vapores de esas com paitias que hoi nos oprimen”™*. ‘ALimitie le sii una marcha pore] cestro de Valparaiso, segsidas muy de cerea por la policta Elgremiade los tripatantes de rapores, que dirigia elamarquista Magno Espinoxa, tado tipo de esfuerzos par maatener en alto el movimiento, recorriendo el puerto e insis- tiéndoles a los trabojadares de lo desastroso que significaria desist antes de tiempo Presionaron tambiéna las Compatias insistiendo para que se les pagara los salarios que se los adendata del sltimo viajo,antes de abandonar las barcos, Anie esta presida de las tripulantes, el Intendente y el gobernador matitimo se reunie- ‘ron con las gerontes de as compatiiasel dia 7 demayo. El gobernador maritima expuso que ‘no aceptaria la sada de nuevos rapores con gente sin matricula, Se convino, ademas, en (Be Starn ob cl, pe 10 ‘lve de Valprain, Se sary 190 100 pagar los salariosadeudadosa fo tripulantes. Sin embargo la cuestién del arbitraje quedé pendiente. Los gerentes, por su parte, pidierus un mayor refucrzo policial para las rampe- shuelgas. Lanogativa de los pasrones se basuba enel hechode que efectivamients hastaese moments su estrategia pare valdarse. La hoelga estaba virtualmento quebrada, Sin embargo, lay “énkmos de ls huelguistas de los tripalantes sobre odo ora aun de combate, Angel Guarello, preocupado por la situacién, que se volwia cada vex mas tensa, lelegra ‘6 al presidente de su partido a Santiage: “Valparaiso, mayo 9:de 1903, Ser Malaquias Concha. Santiago: Reclame urgente Minis ‘to del Interior y Maria de parcidlidad sutatidades superiones de ls Armada en favor ‘compatia de vapores, permitiendo embarque de jenteysalidas denavos cas infraceidn abiertade reglamentos matriculay lei de navegacién y de redatasy de reemplaans, Pida rministo rene esas autridades cumplir estrctamente al especto esos reglamentoc y leyes. Gobernator maritimo me dijo que quebrantaba reglamentss por cauca huelga, pero si gobierno erdenaba eurplir estritamen'edisposicines legales lo hari. Tgualmente pido cese intervencién fuerea pblica a bordo vapores quo detiene tip: lsntesimpidién dolesbajada tierra, Conducta antoridadesesté asi, xasperando énimos, precipitanda peligrosiima situacién que amenaza Valparaiso. ‘Alsirante Reredder y yo hemos obtenido hasta osto momento tranquilided «jem plar de buelguistas y resolucisin de enteegar sus reclamos al fallo arbitral en la inteligeacia que aceptando arbitraje, valverén todos a sus facnas, acatando desde Iuego resolucida arbitral posterior cualquiera que sec. ‘Putrones resisten arbitraje ante Intendente y vetinos cataclerizados, mantenicndo si tnaciéa que, dcbido 2 los actos de autoridad que denuncio, ioman graves caracteres ‘que nose pueden prover, Urje resolucidn inmediata y veaida ministro marina y del de hacienda, Angel Guarelo. 2. ‘Miontras en log grerains Ia situaciin ve hacia insostenible y se dscutia, seguramento, darn giro as huelga para pasar a *la-accién directa" las autoridades se mostraron con: fiadas EH gic éT para ne pasasia » mayores [abmiraate Moott shandoné el puerta para participar en maniobrasn alta mar y el fatondente i bien reforai la ativided poical en Jos muclles, na mevilizé tropes ni saicito apayw al enbierno central. Tabi la percepeidn en Santiago era de debildad del movimiento, Asien el Ministerio del Interior se eamenté cenestos dias que la huelga “era casa de muchachos". Fl dia domingo {@serealizaron.en la avenida Brasil dos mitines el primoro al medida convoctaestibaddares, lancheros 5 jarvaleras de Awana. Fl segundo, a eso de las 14 horas, BEM pari 101 rounid los tipalantes de rapaces enceberados par Magno Espinoxa. Estos iltimos ralire ron colectas en eLacto para rewnir fondos para la huelga.Lassociedades mutuales yaablan itorizade girs en sus cuentas con el mista fin, El mitin de los estibadores, lancheros y jornaleros acordé ecviar oma nota al Intendente en Ia que insistié en ef arbitraje como medio de solucidn del conflict Los lanchers,estibadoresy jornalerosde ls advan solictan del primer mayistrade de la provineia que reewbe del Suprema Gobierno el nombramiente de una eomnaiin gue se aboque el conocimlento de nvestrolitigio con los armadores. 2+ Siempre declinamas nuestros poderes en los rbitrus ya nombrados. ¥ Que esta situaciin por lo demés insastenibile pat La mala roluntad de ls armadores 1 joentes de lanchas para qu se arroglen mucstrosreclamos cos las presientes de las ‘greets en huelga, sin perjuicio que se-encuentren presentes dos personas pudientes, ‘Para que'sean testigos oculares, para arribaraalgin arreglo cquitativa, ‘¢ Ponor on canocimionto del Intendente que so nos ba estado arepellandaeea nests

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