bes Deis) Prmcaes 1945. CLE, , Bavectonn, bribe, 29-26 - Paut ZumtHoR LA POESIA ¥ LA VOZ EN LA CIVILIZACION MEDIEVAL El conjunto de textos que nos han legado los siglos x, xy x (y en. menor medida ls sigs xi y XIV) ruvo Una fase oral transitori, {este postulado supone un importante corolari: ee trinsito vocal 20 fue aleatorio, sino que constituia una de las fnaldades de los textos. ‘Cualesquiera que sean las creunstaiaso los procesos que la pre- cedan, acompatn o sigan, designaré con la palabra performance & Ja accion voeal en virtud de Ia cul el texto postico se transmit asus destinatarios. La transmision de boca a ofdo oper iteralmente sobre texto, J configura. La performance es preisamente la que convier- te una comunicacion oral en objeto podtico, confiréndole la ident ‘ad social que hace que se la periba y consider com tal. La perfor- ‘mance, por elo es constituiva dela forma, Frenteal texa ens acta ‘como efecto sonore; sn embargo ate ese efoto sondro el texto reac ciona y se adapya, se modifica para superar lainhibieia que esta si ‘twacion entratia. Por ello dstngo, en toda obra podtica medieval, en ‘res superficie ingstic y su forma: la segunda inlay aa primera, superindola en todo lo que conciere a la respiracién, al sonido, Jos gesos, ala instrumentacin, al decorado. Ea adelante designaré ‘recitamente como obra ala totalidad de factores dela performance ‘todo lo que se comunica poeticamente, hic et mune: palabras ¥ OT cones, sonoridades, ritmos, elementos visuales— y como feo ala -yomacones, que consttuye uno de ee- Pal Zor, pee vote dose cain él, PUF, Fa, 985, bo. 3s, 45,3, cones pean cross cg emanate {tavate Dela fnratres mat Sel, Par 198 en tet Cat, Mr Gea. :2 LITERATURA MEDIEVAL Desde a perapectiva de performance, el texto declamada constitu- 3¢ en primer lgar una seta sonora, como tal activa; slo en segundo {Uemino es mensaje aticulado, De eli se deriva una sporis erica para cl medievalista, puesto que no le es dado aprehender in situ la perfor- ‘mance. Sin embargo, esta imposibilidad no justfica en nada la negl- sencia con la que se tiende asoslyarel problema, cuando no a igno- ‘arlo soberanamente. Con todo, los factores que integran la operacion de la performance (tiempo, lugar, circunstancias,contexta hstérco, actantes) pueden ser reconstruidos (en varios casos particulates que consideraremos ejemplaes, con la ayuda prudente de trabajos etno- 16gloos), con lo que esulta posible pesbi, cuando menos globalment, la naturalera de los valores detetados —entre ello, los que vehicula © produce el text, Podria carlos trabajos de Jean-Claude Schmitt sobre la mimica gestual como un buen ejemplo de lo que podemos ‘esperar de aes investigaciones. En ptimas condiciones de informa cidn nos Hevan hasta el punto maximo al que la imaginacin erica pretende conduciras: al punto en que me es dado ofr epentinamente, Sofecado pero audible, ee texto; en que peribo, a con bastante cla- Fidad, esa obra; yo, ndividuo singular, a quien una erudiion previa (seria de sear) ha despojado de los mds opacos prejuiios vineala- dos a mi historcidad, a mi areaigo en esta otra cultura la nuestra. Certo es que ental caso la reconsruccién no sala del émbito del fotklore y, por tanto, no conseguira realmente fundamentar un cono- «imiento por més que eontribuyera elo, No obstante, me parece ne- cesario creer que la posibilida y, si puedo dacirlo sa, la esperanza de que se lev a efecto sean inerorizadas, semantizadas, integrades ¢ muestrosjuicios y en nuesiras opciones metodoldgicas, [1 La performance tiene lugar en el momento crucial de una serie de inco operasiones que consttuyen la historia de toda obra: — su produccién, = su transmisién (0 comunieasién), = su cepa, = su consernacién, = su repeticion, [La performance abarca y funde en un solo acto la transmisia y 4a recepeidn; si la obra es improvisada, este acto comporta también, indisociablement, la producti, En oda sociedad que posee una escrtur, cada una de esta cinco ‘operaciones se realiza, LAPOESIA YA YO, 2 — bien por via sensoria oral-audtiva; — bien por medio de una inscripcién,oftes visual; — mis raramente, por el eoncurso de ambas vias. EE nimero de combinaciones posbles diversifca la problemtca Mi hipétesis de patia se reduce aexcluir una sola de estas combina- ciones como atfpiea en el modelo medieval: aquelia ena que cada una 4e las cinco operaciones pasa exclusivamente por la mediaciOn de I escritur. Porel eontrario, no faltan ejemplos de obras (jaunquenece- sarlamentefalten textos!) cuya historia {ntegra, desde su produccién su repetic6a, fue exclusivamente orl (.-] "Habla al respecto de tlempo integrado de la performance (0 de la obra»), dstnto de la duracion textual propiamtente dicha, la cual resulta de la adicidn de un cierto mimero de slabas y de secuencias silabicas encadenadas lincalmente seg las normas prosidicas de una Iengua, El «tiempo integrado no se corresponde necesariamente con tiempo de integracién, es det, con el momento cronoldgico en que tiene Inga la performance. No obstante el tempo de intepracién nos resulta conocido con muctia frecuencia, Io que evste gan importan- ‘ia para nuestea comprension dela performance. Este tempo, toms ‘do dela duraciba sociohistériea, no es nunca indiferente,y la relacién ‘que mantiene con esta duracién resulta, ene seno de Ia performance, ‘generadora de valores. Entiéndase: no me estoy refiriendo (0 no nece- Sariament) el tema de la obra, sino mas bien a su ocasion, A. veces, al tiempo de integracién se sta en un punto determinado ‘— de alin ciclo e6smico; as, las canciones sobre Ia llega del ‘verano, que han dejado las hulls que sabemos en la canso trovado- resca, alas que Bédir consideréantato el prototipo det lrsmo «po- pillar, mientras Scheludko vela en elas un género ampliamente di- undido: "= del ciclo de Ia exstencia hurmana; as, los eantos 0 narraciones vinculados ala muerte de un miembro del grupo, como el planetus, of planh y otras lamentaciones, "de un cel ritual, como la mayor parte dela poesia litrsica, tanto en latin como en las lnguas vulgare, inluidas las formas ant- gus del eteatro»; asf como los villancicosnavidetos, que asoman en ‘nuestros textos, por toda Furopa, entre lo sigs xV y XVI, pero cuya tradicign debe remontarse mucho mis aris; como acaso las cancio- res de Pascua, algunas de euyas huellas deseubro por entre os Ro- ‘manzen de Bartsch; a la percep2% LITERATURA MEDIEVAL — or itimo, de la duracin socal, que mide acontecimentos re- urtentes piblicos o privados, pero de frecuencia imprevisible: el en- ‘uentro amoroso, ef combat, la vitora; 0, mas expecificament, tal celebracién, tal coronacién 0 tal acontecimiento politico. Los elem- los son numerosos, aunque poco individualizabes, pues esta clase de textos, sn duda poco ritualizada, se distngue mal dea performance «libre, 0888, aquella que no puede stuarse sino es en relacin con 4a duracin personal e intima del intérpreteo de su auditorio. El vin- culo por el que el poema se liga a esa duracién excapa de auevo a nuestra percepcida, lo que no implica que nose dcra menos por ello, 0 es algo ya sabido. Esa vida de santo que se escogia para el aniver- ‘sario de un oyente del mismo nombre; ese fabllaw que se explisaba por ‘alusidn a un suceso reciente; esa cancion de eruzada que se cantaba «nla partida de un caballer: Ia ocasibn, por ms huldizay disereta gue fuera, se integraba en la performance y contribuia a llenarla de sentido Es una regla absolutamente general que se debe a la naturale- za misma dela comunicacién oral: el tempo de integracion connota cualquier performance. ,Acaso el Roland que secant (admitémoslo) as primerasfilas de os combatientes de Hastings era el mismo Ro- land (aun reconociendo los demés factores de cambio) que se eanté ante quién sabe? [..] Para nosotros lo que resulta mas dificil de percibir eel decorado 4e a performance, las circunstancias concretas que la rodean, su as- ecto visual ytéctl. Aqui y ald, en verdad, algin texto nos las evocd, {En otra ocasin] menciont Is existencia de documentos narativos que scan a excena a intéepretes de textos podtico. La escena en cuestin, or lo general, noes ota que la misma performance, descrita a veces ‘con una preisiéa que en otro tiempo hubigramos considerado reals: ‘a: asi, al principio del largo pr6logo de Doon de Nanteul, vv. 3-117. La evocacion, a base de retazos sucesivos, es impresionante Se dird acaso que se trata solamente de una sri de t6picos: un tema literario, sin valor desriptivo. Quiéa sabe? Podemos admit, me pa- rece, queen ls civlizaciones con tradiciones largas y slides la dis- ‘tancia entre el tema literario y la experiencia vivida (salvo sel primes se emonta a una lejana antgiedad) es menos considerable que ea ‘uestras cultures de la moda. El texto del sig Xil, del Xi (a falta ‘de una vsin fotogrifica de los hectos) propone lo que yo llamaria tun onden de imdgenes, una «idea del tamafon, como sucle deers. En efecto, lo poco que aprehendemos ast nos devuelve a un gener, LA POESIA Y LA YO. 2s mientras que el objeto final de nuestro estudio es un texto. La inter: pretacién, al menos, dela obra de la que este imo form parte se encuentra as orintada hacia un cierto sector de lo imaginaro. En ots tou de eallade apos para lanza a openacon de images et cat operacdn que asu vez condiionard la labor folic. Esta (en In perspestvaen que me sto) itera el eautad, aunque So sea Como factor de inecsi, es dcr, desde cl punto de vista dela obra fnmersa en ee profando pasado, en ant que factor de Ubertad. [1 ‘Sin embargo, no cabe dud de que la pricticattalldad dea poc- sia medieval depend de otros do ips de oraldad, cy rsgo co- tata ot qu contain, es el poo 8a gr Gace, ton fa torte {os amo respetvamente oridad mira, cuando ts influencia del escrito permanece externa, paral retardada, yoralidad sepunde, and se ecompone a partir de a escritura en un medio en que sta iene a agoar fs valores dela voz tanto ene so como en Ia imaginaclon Invitiend el punto de visa, diremos que la oalidad mista procede de la exstencl de una cultura cseritay (nel etido| de eposeedora de una escritury), yl ralidad segunda de una cultu- ta lead» (cla que toda epresion etd mareada eo mayor 0 e- tor medida por la presencia del ero). La voealidad de nuestros texios medial reson ana, més eat voces bnlocontciona de onda, yu soa mst, yu sagan Sexi las épcas, ls regioes, clases soils nciso os indivi- dios, La reartiin no sgue ninguna eronologia aunque en gene es verosimil qu laimportancarelativa del orlidad segunda sacen- fuave a parr del siglo Xi Ente indigzncia de noes informacion, reduce ao que ven mie- tro ojos sobre Ia pga en tte natant presente, un punto de ata aradic pia alararun poco eas tielas Consist en con- ‘era por prnepo a todo testo anterior siglo Xt (eincuso al av, aunque con miichor mds problemas) como st fuera wa dance dest, admiendo, hata que se demueste lo ontario, qu su fun- ‘Sonamiento real eslaraba los mismos jus de valor ypabo en mar- oa mas cade xe deal tone eba- ten mejor (j excepslonalmente) conoidas en todas partes: (exo, mnelodiay movimictos(podemosreconsir ets dlinos medians el andlisrlimioo el estudio leonogrien), como la Santa Fe dl2% LITERATURA MEDIEVAL ‘lo Xr, equ’ bella'n trescan,segtin dice el texto, Lo que sabemos de ‘estas canciones exig,respeto de oto textos, una tvslcion et ta Sor 0 menor grado,