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2004. 121 SATA LORE, ARTEAN ATMOSFERA. MRTERIAL DEL JARDINERO DIGHTAL. ‘CRISTINA DAG MORENO + EFREN GARCIA GRENDA. CIRCO DSbS glaterial del jardinero digitel? 2Pox qué referiznos al arquitects cono jardinero disitel? sou sentido tiene proponer trabajar con algo tan indefinide como la ataésfera? Conencenos por praguntarnes sobre la materia. Generalnente, cuando en 1a discipline de la arquitectura se discute sobre le relacién entre técnica y espacio, © entre la tecnologia disponible y su influencia en cémo se concibe y proyecta el espacio, es habitual destigurar los conceptos de cal mode que resulta dificil establecer vn diélogo fructifero. Se suele afirmar que las transformaciones radicales de 1a materia son agueilas que inducen las revoluciones drésticas -y auténticas- de nuestra sciplina, como si existiera algin tipo de materia desconocida que se pueda descubrir © fabricar, Un tipo de naterial no conoeide cuya ixzupeién borraria de una vez la forma usual en la que proyectamos las transformaciones fisicas de nuestro entorno. Ho nos interssa Giscutir aqui qué clase de nuevo material es 4se, si existe entre nosotros en algin tipo de estado enbricnario, ni exponer las cuslidades que deberia poseers ni mucho menos juger 2 1a futurologia de salén y predecir 1a fantdaticn y Liberadora arquitectura a la que darfa lugar, en un ejercicio consoladar y estéril de ciencia ficeién. Sabenos que pore que estas transfermaciones surtan efecto no basta com una Snvencién en el canpo de la ciencia de los materiales. Dicho de otro modo, 10 que varia constantenente no es Ta materia, sino nuestra mirade sobre ella. Cuando decimos materia no nos estamos vefiriends a algo que existe ahi fuera espexéndonos, a un objeto © una cosa, sino a une construccién cultural en le que inciden Girectenente las transformaciones sociales © politicas, evolucién @n ol campo Gel arte y del pensemienso, y tanbi claro, os avances 0 descubrimientos dela tecnologia y de le ciencia. Insistinos; no nos interesa si la materia canbia 0 no, Sino la idea que la seciedad 0 una daterminada @isciptina hen Vegado a construlr y compartir de ia misma, Por eso, haste que luna determinada cultura material ao ha Llegado a cristalizer: Jas novedades tecnolégicas no son capsces de producir por si mismas ese cipo de canbics. Si modificéranos la ides que la @isciplina tiene sobre esas transformaciones, podriemos Feconguistar el futuro como proyecto y al tiempo volver " imrelevante la palabra progreeo. Pacarfanos a pensar en futuros materiales posibles, de crédito finite y auto extinguibles, que no estuvieran basados en la epifania de nuevas técnices, sino en ine tyansformaciones de nuestva cultura material quieiéranos, a los efectos que aqui estence tratando, resunir en sna plrueca sinolificadore esas xecientes traieformactones en solamente dos: e1 colapso de 1a iden de naturaiezn y au | posterior actuatizacién, y 1a inersién masiva ae 1e cutcuza | en @1 mundo 42 10 digital. Haganos et esfuerzo ge suponer ave | anvas podrian resunix y condensar 1a infintdad de rensformactones quo han tenido lugar en estos ditinos aftos apezendo por 1a prinera, deberianos de wna vez olvidar esa ides por 1a que se concede a la necurateza una doble condicién asada en a0 doninio y la explotecién de aus recursos. y de eer Gopositarie de una ioflice capacidad redentora de todos log ales de 1a civilicacién; por a que al ism tiempo te explotanos sin piedad y noe dejenas fascinar abilicanence ose su betlesa, Nalas noticing para los ingens: ya no existe esa clase de maturalera, Lo qle nos cizcunda os otra naturales comuesta por Fragnentes de paisajes desestificads, parcues | natursies, extensiones agricolas, terrenos contaninados. ciudades magmaticas y extensivas, infraestructuras de transporte... un mosaico de diferentes naturalezas, elgunas mantenidas en estado original @ través de su sobreproteccién y otras irreversiblemente contaminadas y alteredas. Esa otra paturaleza es, en realidad, muchas naturalezas distintas; un ccéano de mulcinaturalezas alzededox del que se ha elaborade una nueva belleza que Le es propia y rotalmente alejeda de aquelle idilica que servie a los modernes como redencién de los wales de le gran ciudad, Al destervar estas ideas consoladoras, pedr{anos esteblecex una relacién con ella de igual a igual. Soria posible entonces modificar esa asimetria total, t{pica de la edad moderna, ¥ traneformarla en una relacién biuniveca en la que todo es a 1a vez actante en teminologia de vihitehead- y objeto de le accién, Podriawes entences meterializar ess asamblea que reclema Latour entre humanos y no hunanos y penser que él acercamiento a la neturalezs no nos redime de nada; que si cones capaces de establecer una conversacién con ella, los conflictes no van a quadar automiticamente xesueltes, De este forma, supevarionos 1a indiscriminads y recurrente apelacién a jo natural tan freouente en muestra disciplina, gue ha impedido desarrollar protecoles de relacién mis sofisticados, nis perversos 0 anbiguos. 0 simplemente con més matices sos protecolos podrian tener 1a cualidad de permitir aprender de ella ciertos mecanismos de accién que al aplicartos = nuestra disciplina nos ayudaria a evolucionarla, 2 ofrecer respuesta cada ver mis sofisticadas, y a progesar en ose acercaniento asintético con lo patural Si hemos aprendide que los sistemas vives trabajan silenclosanente @ través de 1s geoetria y esa consideracién nos puede ayudar 2 generar patrones espaciales en la definicién de nuestve entorne artificiel, podrianos tarbién preguntarnes sobre Ja relacién que establecen estos sistams con el paso del tiempo y de qué nanera pedrisnos aprender de ellos, Al igual que le natural, 1a arquitectura no deberia ser solamente objeto eatable, permanente, que resiste con su materialidad el paso del tiempo. Hemcs aprendide de le vida de los objetos de consumo que Ja erquitectura puede tener fecha de caducidad, Pero tanbién se puede aprender de lo natural que es posible definir una relacién con ©l tieapo que abarque su gestién temporal, los procesos de sucesién, las perturbaciones a las que se ve sonetido en cada momento © ¢l proyecto de su propia muerte. Olvidarianos la Gisciglina coms la encergada de imaginar un estado o imagen final e inmatable, y nos convertirianos en gestores que proyectan process de energencia de sistenas materiales y su gestién a lo largo del tiempo, su decadencia, muerte # incluso su proceso da sucesicn. Todo esto nos perniticia integrer lo inpredecible, ne cone alge de lo que nos tenemos que proteger, ‘sino como un material con el que podenos trabajar. asi, la arquitectura que corresponderia a tedo ello pasaria a ser, coito otros objetos y tecnologias de uso cotidienc, algo que nos permite relacionarnss con eso que esté ahi fuera de un modo menes traunitico, més fluido y natural; que « través de la construccién de un espacio, se convierte en un instramento de intemediacién sécnica entre nuestss cuszpo y lo que aos circunda, esa asarblea de hunanos y no humancs; que trabaia filtrando las percepeiones del afuera. Esa nueva relacién pasaria por entender cue no necesitames recurrir a la ortodoxia nedicanbiental u otras aproximaciones simplificadoras paxa ver cumpligo ese acercaniento, sino nds bien adguirir €l conpromiso dz desarrollarla cone una eficaz hervamienta de invermediacién rdenice con Jo natural, que nos facilite esa relacién de igual a igual En esa otra naturaleza, la procedencia de los materiales, su autenticidad 0 falsedad, han dejado de tener valor. El proceso de eilacién de cuslidades de otros materiales, naturslee o artificiales, produce cualidades inesperadas que van nis alld de las del material enulado. to completamente artificial, of cardcter oranental © la falsedad dejarian de ser condiciones nagativas, y pasarian a tener el infinite valor de poseer exactanente las cualidades de los materiales que emlan. se emla slo ei efecto, no 1a osencia. Lo sintético, ys sea do origen material o artificial, se ha desprendido de eso que solenos Manar Ia vardadara esencia da las cosas, y 0 cantca en producir el efecto, Ese nuevo acercamionto a lo natural también nos parwicivia entender cudl es el valor de la produccién de diversidad y cules podrian ser los procedimientes para generarla. De esta forma entenderiamos cud es el papel de los patrones organizativos en las especies y a través de qué clase de mecanisnos de diferenciacién se diversifican en individvos. Es decir, aprenderianos a Fijar muestro interés no en 1a diversided como hecho, en su metrificacién y cuantificacién, sino en los agentes, necanisnos © situacionas que 1a producen Volvanos ahora la vista a la repentina innersién en to digital que nuestra sociedad ha experinentado. Una de sus consecuencias seria la falta de relacién visval con el propésite ai que las tecnologias digitales estan ascciedas. No podanas ya velacionar visualmente el objeto con el use para el que esté destinado, Ya no es posible leer en él au mecenismo de funcionamiento, ai siquiera l fin que satisface. A le progresive miniaturizacién que los objetos ténicos han ido experimentands, y que en los afios setenta impulsaba a algunos 4 pronosticar un mundo sin objets, se afiade la creciente universalizacién de las tarcas que estén destinados a cumplir. Son cajas negras que no hacen presente, que no comumican las cualidades performativas que poseen. Son tecnologias que no necesitan de presencia Fisica ni, | capaciéad comunicativa para funcionar. A través de estas eecnologias e1 objeto so Lihera de atguna forma de su apariencia y el interés pasa @ vecasr en el efecto quo genera, Esta vetivada del objeto a 1a trastienda exige su reenplazo por algin fendmeno fisico que sea capaz de interactuar con nosotros, que sirva de interface, que pueda transmitir informacién y que nos pemvita reenplazar Ja presencia fisica, tangible, real del ‘objeto por otro tipo de manifestacién Por Gltimo, 1a confluencia de estos émbitos también se manifiesta en los procedinientos de trekajo sobre 1a materia. Si hemos aprendido, después de miles de afos trabajando en le seleccién de especies productivas y en, la moditicacién cial de nuestzo cuerpo, a trabajar indixectamente pare nodificar las condiciones y cualidades de la materia, en el mundo Aigital cualquier operacién, desde la més sencilla, a le nds sofisticada, se gobierna a través de scripts. De forma nediada, no directa, cualguier accién se controla & través de Lineas escritas de acciones simples, y a su vez, cualquier modificacién de un modelo informético queda elnecenada en su historia a través de una secusncia de dzdenes, El objeto y las trensfomaciones qué en 61 se operan queden dafinidos a través de Liness de programa, sobre las que, de nuevo, s¢ ha de operae indirectanente, Los jardineros éigitales, les eriadores de eepecies de ceros y unce, definen sus especies y trabajan sobre eNas 2 través de interfaces, en secuencias de Linoas do Sxdenes escritas. Se actila operando en paguetes de infoxiacién codificada, a través de un Lenguaje técnico de mediacién entre el sujeto y el objeto. Por todo ello en los Wltimes afos en muestra oficina hemos estado interesados en trabalar en sistenas que disipan, consuinen y capten enorgia de forma dindmica on forma de sistenas anbientales. Lo que entendsnos por espacio pasaria asi a ser un conjunto de percepciones Ligadas a efectos anbientales generados a través de la gestién de diversas formas de eneryia. Bs deci, trabajar involucrands 1a entera configuracién del edificio en la produccién de anbieates. De esta manera, muestra produccién seria tecnologia anbiental apenas visible, sistenas téenicos que inducen efectos espaciales, ambienteles y visuales, y que desplazan el interés por el objeto a aquello que se consigue; 2s decix, el efecto. Se pasaria as{ de un sistema de relacién entre objetos, en el que su posicién, tamafio y dens atributos forneles genoran un sistena que trabaja por figura, asociaciéa y Gisposicién, a otro besado en le creacién de sistenas anbientales @ escala reducida, regulados nediente secuencias ae Srdenes. Seria posible entonces trabajar con la intensidad Ge los estimlos. con estades alterados y diferentes niveles de percepeién. Todo ello @ distintas escalas, desde ta macroseépica a 1a del paisale Este epresurade repaso nos induce a pensar que le produccién ce ciuded y de paisaje no estén reclamando més que un cambio radical de estrategias, instrumentos y modes de conformar la realidad senejantes, por no decir idénticos, a los que la ceceslogia digital y esa nueve acexcamiento @ la naturalezs pes xeclanan: Podrieues penser entonces si las cateyorias de ciudad, paisaje o infraestructura, pertenecientes a otros tiempos, pueden conbinavse en una mueva. Alge gue contenga el germen det paisaje en su extensién y sus materieles, que pueda naterializarse a través de las téenicas desarrollades para la creacign de entornos artificiales.y la eruda eficiencia de las inrasstructuras, Algo que pudiera dotar de nuevo significado a la disciplina que trata de lee fenémenes urbanos; que pueda resituarie fuera de 1a eiénaga normativa del urbenismo occidental. Algo que nos gusteria Mamar arquitectura infraestructural del paisaje. Y gue nes permita mixar con curiosidad distanciada a la época en la que existian acumulaciones de materiales y sistenas cécnicos que se Lamaban edificios. Nos podrianos preguntar qué pasaria si injertaranos de forma masiva en nuestros paisajes artificiales leyes de sucesicn y crecimiento natural, y tanbiée geonetrias y leyes generativas de entornes artificiales. Bienvenidos a una ciudad infraestructural de cualidades naturales, paisajes materiales artificiales, evolucionados y cultivados con si se tratara de organisms vivos, han sustituido el papel de le que se lanaba arguitectura ¥ si pensamos asi, se nos ofrece todo un excitante panorama que incluye 1a misma mutacién de log sistenas de trabajo y cooperacién, de adquisicién de cenocimientos y desarrollo de herramientas; y comprenderenos que 1a ciudad -o el paisaje- nos estén haciendo una ilamada a la accién urgente y entusiasta; que la ciudad podria ser un excirante Laboratorio @ Ciempo real de Infraestructura anblental Cristina Diaz Moreno + Rixén Garcia Grinds ‘Texto basade en le intervencién “Hotas sobce la trensformacién de la materia", La Corulla, marzo de 2004

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