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glo XIX, en las cuevas de Altamira, en Espatia, y al sur de
sontes, mamuts y renos fueron pintadas por los hombres she a
ue, por fo tanto, los conocfan muy bien. Bsos cazadores primi ae
de pirntar a sus presas -con las lanzas y las hachas de piedra que emplea a
manos- tendria un poder magico que lograria que los verdaderos a ba a
dos y asi, esos hombres podrian alimentarse.\Para Armold Hauser (1892- a ee
para los pensadores marxistas, el arte se relaciona, en todas las épocas, con #
des y con las relaciones econémicas, En consecuencia, los Soe Soe pa ee
s elarte. Los dibujos cumplfan
ela presi. En cambio, en el Neolitico, con el desarrollo
de la agricultura, el hombre se vuelve més sedenta-
rio, puede detenerse a pensar y crear, y suarte co-
mienzaa abstraerse. a
Las obras més formidables dela Antigtiedad,
las pirémides de Egipto, son tan majestuosas y
se elevan al cielo porque los egipcios crefan que
podfan ayudar al faraén muerto —que era consi-
derado un ser divino- a subir a la mansién de
los dioses de donde proventa.
CSeau ne):
Se Ue)
También, en el Medioevo, el arte servia a los
fines de la religién. Era propagandistico de las
bellezas del Cielo y tendia a infundir temor a los
que no segufan el recto camino de la Biblia a
partir de las imagenes del Infierno.
ARTE Y MORALIDAD
En el siglo XVIII, con el comienzo de la
Modernidad —via la Revolucién Industrial en
el plano cientifico y tecnolégico, y via la Re-
volucién Francesa en el plano politico e ideo-logico-, primero Baumgarten y principalmen- Speen
te Kant intentaron separar el arte del 4mbito la mael
de la moral
~ Sin embargo, y aunque el juicio estético no
es un juicio moral, puede existir una relacién
entre ambos. La postura moralista, por ejemplo,
propone que el arte debe promover la morali-
dad, es decir, la cualidad de las acciones huma-
nas que las hace buenas. Asimismo, considera
que, en ocasiones, el influjo de una obra de arte
puede ser inmoral, es decir, afectar la ética y las
buenas costumbres. El peligro de esta postura es
que puede justificar la censura de algunas mani-
festaciones artisticas, tal como ha ocurrido en la
Argentina y en otros paises, sobre todo, en si-
tuaciones de dictadura
A\RTE Y SOCIEDAD POLITICA
ePhinnved
Para Karl Marx (1818-1883) y, sobre todo, para los pee marxistas, la es-
tética y las obras de arte tienden a reproducir las relaciones econémicas y politicas
propias de las clases dominantes. Es decir que el arte propio de la modernidad es
un arte burgués, solo para los burgueses y, ademés, representa los intereses de la
burguesfa y la manera en que esta clase social explota a los obreros.
Hay diferentes relaciones entre el arte y la politica. Muchas veces, el arte puede
ser utilizado como medio de propaganda para difundir diferentes ideas politicas.
Asi, en la Argentina, en 1978, el director Sergio Rendn dirigié la pelicula La fiesta
de todos, concebida como un documental sobre el triunfo del Mundial de Futbol de
ese mismo afio, en la que se realizaba una apologia de la ultima dictadura militar
argentina (1976-1983) que impulsé el terrorismo de Estado. Este documental, in-
serto en el film de Rendn, apelaba a la adhesion popular mientras miles de seres
humanos eran secuestrados, torturados y asesinados por orden de la dictadura.
Otra fue la funcién del arte para el fildsofo Friedrich Nietzsche (1844-1900). Este
elaboré una teorfa estética en Bl origen de la tragedia en el que explicaba la evolucién
del arte a partir de dos inspiraciones que se fusionaban. Nietzsche denominé esas
fuerzas “espiritu dionisfaco” (por el dios griego Dionisos) y “espfritu apolineo” (por el
dios griego Apolo). El primero se caracterizaba por festejar gozosamente la vida, el se-egipcias dicer
vestirse, las act
monias religic
jos que decorab