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FE Y PACIENCIA las gemelas Podengsas KENNETH COPELAND FE Y PACIENCIA KENNETH COPELAND = PUBLICACIONES KENNETH COPELAND A menos que se indique lo contrario, las citas biblicas fueron tomadas de la Version Reina Valera Contempordnea®, © por la Sociedades Biblicas Unidas, 2009, 2011. Las citas marcadas con las siglas RVR6O fueron tomadas de la Version Reina Valera 19607, © 1960 Sociedades Biblicas en América Latina; © renovado 1988 Sociedades Biblicas Unidas. Usado con permiso. Fe y Paciencia: Las gemelas ponderosas Faith and Patience—The Power Twins ePDF ISBN 978-0-88114-346-1 30-80468 1991 Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Publicaciones Kenneth Copeland 2014 Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Publicaciones Kenneth Copeland ‘Traduccién autorizada de la edicién en inglés. Esta traduccidn es publicada y vendida de acuerdo con el permiso de Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Ministerios Kenneth Copeland, propictario de todos los derechos para publicar y vender este material. Todos los derechos reservados bajo la legislacién Internacional de Propiedad Intelectual. Ninguna parte de esta publicacién puede ser reproducida o transmitida en ninguna forma o per ningun medio electrénico o mecanico, de fotocopia, grabacién, por ningiin sistema de almacenamiento y recuperacién informatica sin el permiso escrito del editor, con la excepcidn de citas breves usadas en resefias. Este libro digital es autorizado para uso personal, no comercial, y no puede ser revendido o regalado a otras personas. Si deseas compartir este libro, 0 deseas sembrar una copia en la vida de otra persona, por favor adquiere una copia adicional para cada persona con quien desees compartirlo. 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En Hebreos 6:12, leemos: «Y para que no se hagan perezosos, sino que sigan el ejemplo de quienes por medio de /a fe y Ja paciencia heredan las promesas». Y en Santiago 1:2-4: «Hermanos mios, considérense muy dichosos cuando estén pasando por diversas pruebas. Bien saben que, cuando su fe es puesta a prueba, produce paciencia. Pero procuren que la paciencia complete su obra, para que sean perfectos y cabales, sin que les falta nada». Sin embargo, la paciencia sin la fe no tiene poder para llamar a la realidad las cosas que deseamos. Como la fe es la sustancia de estas cosas, la paciencia sin la fe, no tiene fundamento. Por otro lado, la fe sin la paciencia no podra permanecer firme sobre la evidencia de la Palabra, la cual te otorga “el certificado de propiedad” de las cosas que no se ven. Jesus le dijo a Pedro que El habia orado para que su fe no fallara. Sin el funcionamiento activo del poder de la paciencia, permitiremos que el conocimiento —las cosas que vernos— ahogue nuestra fe; la cual se basa en lo que dice la Palabra, y no en las cosas que vemos con nuestros ojos naturales. La paciencia respalda fa fe y le da la fuerza para perseverar hasta que la respuesta se manifieste. Eso no significa que nuestra fe sea débil y necesite fortalecerse. La fe es una fuerza poderosa, y siempre funciona. Sin embargo, sin el poder de la paciencia, nosotros mismos impedimos que la fuerza de la fe actiie, debido a nuestras confesiones y acciones negativas. Es nuestra fe, y de nosotros depende si la activamos o la detenemos. Por lo general, pensamos que la paciencia es darse por vencido y conformarse con cualquier cosa que nos toque. Eso no tiene nada que ver con la paciencia. La paciencia es una fuerza real, la cual tiene que crecer y desarrollarse. Leemos en Tito 2:2 que debemos ser sensatos e integros en la paciencia. La fe también es una fuerza que necesitamos desarrollar. El mismo pasaje biblico nos dice que debemos ser integros en la fe. La paciencia y la fe son fuerzas individuales, pero trabajan juntas de la misma manera que el amor y la fe. Cada una de estas fuerzas juega un papel distinto en nuestra vida cristiana. Es muy peligroso confundir la funcién de una con la otra, e intercambiarlas. Por ejemplo, vemos en Hebreos 11:1 que la fe es la sustancia de las cosas que esperamos. La esperanza sin fe no tiene sustancia. Las personas declaran lo siguiente: “Estamos esperando y orando”. Suena bien, pero eso no tiene fundamento. En este caso, la esperanza se esta confundiendo con la fe. Sin la sustancia de la fe esta oraci6n no produciré ningtin resultado. Y puedes ver cémo en una situacién critica esto seria muy peligroso. Necesitamos alinear nuestros pensamientos con la Palabra, a fin de que podamos darle el uso apropiado a estas fuerzas para que se cumpla la perfecta voluntad de Dios en nuestra vida. Una de las tradiciones —y errores— mas comunes en esta area es creer que las pruebas y las tribulaciones desarrollan nuestra fe. Esto no es asi, en Romanos 10:17 dice: «Asi que la fe proviene del oir, y el oir proviene de la palabra de Dios». Las pruebas y las tribulaciones desarrollan nuestra paciencia. Ya aprendimos lo mismo en el primer capitulo de Santiago, y también el apéstol Pablo nos lo confirma en Romanos 5:3. La fe se desarrolla a medida que actuamos conforme a la Palabra. Hebreos 12:2 declara que Jestis es el Autor y Consumador, o Perfeccionador de nuestra fe. En ningun momento se menciona a Satanés como el perfeccionador de nuestra fe. Es vital que notemos la diferencia entre desarrollar nuestra fe y desarrollar nuestra paciencia. La fe debe perfeccionarse en la Palabra de Dios, antes que las pruebas y las tribulaciones vengan. Jestis dijo en Lucas 6:47-48 que todo aquel que actiua conforme a Su Palabra, es semejante a un hombre que edifica su casa sobre la roca. Y cuando una inundacion golpea contra la casa, ésta no es derribada. Observa que este hombre tuvo que cavar profundo, y es en ese mismo proceso que desarrollé su fe. Sin embargo, su paciencia se desarrollé6 durante la tormenta. El sabia que su casa permaneceria en pie, pues estaba cimentada en la roca. Recuerda: Jesus dijo que aquél hombre construy6 sobre la roca —es decir, actué conforme a la Palabra—. La fe se desarrollé antes de que la prueba llegara. La fuerza de la paciencia se desarrolla en medio de la prueba y de la tribulacién; y ésta sustenta, o mantiene la puerta abierta, para que nuestra fe obre y venza cualquier obstaculo que se le presente. La definicién de paciencia es: “ser constante” o “ser el mismo todo el tiempo”. En Santiago 1 se nos dice que no debemos dudar o titubear. Debemos mantenernos, o reaccionar, en cada circunstancia de la vida de la misma manera—de acuerdo con las Escrituras. Sin importar qué enfrentemos, debemos arraigarnos en la Palabra de Dios de tal manera que no reaccionemos en temor o duda, sino en conformidad a la Palabra. La Biblia dice que Jestis es el mismo ayer, hoy y siempre. El siempre actuo y actuara de acuerdo con la Palabra, y no basado en las circunstancias, la razén o el temor. Asi debemos ser nosotros. Ser integros en paciencia es responder ante cada duda y temor confiando y confesando que la Palabra de Dios es verdad, sin tomar en cuenta lo que sintamos, escuchemos 0 veamos. Sin importar qué tormenta aparezca en nuestro camino, la Palabra del Padre no falla. En ese tipo de atmosfera, la fe actuia con libertad y vence cualquier cosa que Satands envie. Santiago 1:12-21 lo explica de esta manera: 10 «Dichoso el que hace frente a la tentacién; porque, pasada la prueba, se hace acreedor a la corona de vida, la cual Dios ha prometido dar a quienes lo aman. Cuando alguien sea tentado, no diga que ha sido tentado por Dios, porque Dios no tienta a nadie, ni tampoco el mal puede tentar a Dios. Al contrario, cada uno es tentado cuando se deja llevar y seducir por sus propios malos deseos. El fruto de estos malos deseos, una vez concebidos, es el pecado; y el fruto del pecado, una vez cometido, es la muerte. Queridos hermanos mios, no se equivoquen. Toda buena dadiva y todo don perfecto descienden de lo alto, del Padre de las luces, en quien 11 no hay cambio ni sombra de variacion. El, por su propia voluntad, nos hizo nacer por medio de la palabra de verdad, para que seamos los primeros frutos de su creacion. Por eso, amados hermanos mios, todos ustedes deben estar dispuestos a oir, pero ser lentos para hablar y para enojarse, porque quien se enoja no promueve la justicia de Dios. Asi que despojense de toda impureza y de tanta maldad, y reciban con mansedumbre la palabra sembrada, que tiene el poder de salvarlos». Para desarrollar de manera apropiada el poder de la paciencia, debemos saber lo que dice la Biblia acerca de las pruebas y las aflicciones. 12 La palabra griega traducida como tentaciones en estos versiculos, es el mismo término para pruebas y afficciones. Es samamente importante que sepamos, por el versiculo 13, que Dios no es tentado por el mal y que El no tienta o prueba a la humanidad con el mal. De hecho, se nos advierte que nunca debemos decir que somos probados por Dios. El versiculo 14 nos explica que una prueba o una afliccién es todo lo que ejerce presi6n para obedecer la concupiscencia 0 los deseos de la carne. Cualquier presion gue nos aparte de la Palabra de Dios es el inicio de una prueba. Y si condescendemos con esos deseos, el resultado sera el pecado. Sin embargo, tenemos una salida, pues en la Palabra dice que tenemos un abogado ante el Padre: Cristo Jestis. 13 El es fiel para perdonar nuestros pecados cuando los confesamos (1 Juan 1:9). Todavia somos mas que vencedores en El. Cuando Satands oprime nuestro cuerpo para que éste enferme, no debemos sucumbir ante esa presién. Cuando se presente con ruina financiera, no debemos rendirnos ante la tentacién de buscar al mundo pidiendo prestado. La mayoria del tiempo, estas acciones sdlo empeoran la situacién. Gracias a Dios, podemos ir a la Palabra, buscar lo que esta escrito en Filipenses 4:19, y usar nuestra fe. Luego, a pesar de las circunstancias, necesitamos ejercer el poder de la paciencia y continuar firmes en la libertad a la que fuimos llamados (Galatas 5:1). No olvides el ministerio del Espiritu Santo en este proceso. 14 El esta continuamente trabajando en ti, ensefdandote, intercediendo, respaldando tu fe con Su gran poder. Aqui es donde el poder de la paciencia es tan importante. Mientras tu fe se encuentre activa, el Espiritu de Dios también lo estara. Es imposible agradar a Dios sin fe. La paciencia te protege para que no le des lugar a la duda, ni hagas confesiones de temor en tu conciencia. Asi, nuestra fe crecera y, de esa manera, E] que vive en nosotros sera mayor que el que esta en el mundo. Leemos en 1 Corintios 10:13 que: «A ustedes no les ha sobrevenido ninguna tentaci6n que no sea humana; pero Dios es fiel y no permitira que ustedes sean sometidos a una prueba mas alla de lo que puedan resistir, sino que junto con 15 la prueba les dara la salida, para que puedan sobrellevarla». Este versiculo también revela tres cosas importantes acerca de las pruebas: 1) Las pruebas y las tentaciones son comunes en la humanidad. Ningtin hombre ha sido probado o tentado con algo que no sea comtin para la humanidad. Aunque Satanas haya sido un ser celestial, eso no le da derecho para que traiga sobre la humanidad pruebas y aflicciones que no pertenecen al ambito natural. 2) Dios es fiel. Jamas enfrentards nada que no puedas vencer. 3) Dios siempre proveera una salida. El armamento de Satands no se compara con el que Dios nos ha equipado. ;Gracias a Dios! Las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en El para derribar fortalezas. El diablo esta limitado 16 a usar las cosas que son comunes para la humanidad, pero nosotros no tenemos limites. Tenemos acceso total a la armadura de Dios. Nuestra paciencia descansa firmemente en la plena seguridad de que, sin importar qué pueda venir, Jestis nos ha provisto una victoria mas que suficiente para que venzamos. Muchos cristianos usan Romanos 8:28 como excusa para fallar: «Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien...» (RVR6O). Para ellos, esto significa: “Todo lo que el diablo hace en mi contra, se convertira en algo bueno. Después de todo, ya sabes que en la Biblia dice que nosotros nos fortalecemos en las pruebas y en las tribulaciones de esta vida”. j|Eso no es lo que dice la Biblia! Cuando el 17 apostol Pablo escribi6 que todas las cosas les ayudan a bien a los que aman a Dios, y que son llamados de acuerdo con Su propésito, estaba ensefiando acerca de la oraci6n intercesora. Romanos 8:26-28 dice: «Y de igual manera el Espiritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espiritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudrifia los corazones sabe cual es la intencién del Espiritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos. Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, 18 esto es, a los que conforme a su propésito son LIlamados» (RVR6O). jTodas las cosas ayudan a bien a aquellos que aman a Dios, cuando estamos trabajando juntos en oracién intercesora! Un dia, mientras un amigo y yo conversabamos acerca de la oracién, el Sefior me dijo: “Cuando hablo de cosas, no significa que las cosas malas ayudan a bien a los que me aman. Yo me refiero a Mis cosas, es decir: fa Palabra, los dones del Espiritu, el nombre de Jestis y las poderosas armas del Cuerpo de Cristo. Estas son las cosas que obran para bien a los que me aman”. Todo lo que el diablo te lance sera vencido por el poder de todo lo que proviene de Dios, y el resultado sera la victoria. 19 Muchas de las pruebas que Satanas envia causan que las personas se debiliten, no que se fortalezcan. Si las pruebas y las tribulaciones nos fortalecieran, cada persona en la Tierra seria un gigante espiritual. Por supuesto que han habido muchas pruebas y tribulaciones para perfeccionar a los santos —sin embargo, ésa no es la via que Dios utiliza para perfeccionarnos—. «Y él mismo constituy6 a unos, apéstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas, a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificacién del cuerpo de Cristo» (Efesios 4:11-12). Esta es la manera en la que los santos son perfeccionados — no através de la tribulacién—. Nosotros somos perfeccionados por medio de la Palabra a través del ministerio. 20 Bien, no sé lo que tu pienses, pero a mi me alegra saber que Dios no envié el cancer para edificarme, ni la pobreza para perfeccionar mi fe. No, esas maldiciones no vienen de Dios; provienen de Satands. Por tanto, debemos triunfar sobre ellas, con las gemelas poderosas: la fe y la paciencia. La Palabra no nos dice que la fe se desarrolla por medio de las pruebas, sino que la prueba de nuestra fe produce paciencia. Es nuestra reaccién ante las pruebas y las tribulaciones la que marca la diferencia —no el hecho de que estamos sufriendo—. Algunos en la Iglesia piensan que debemos gloriarnos en las tribulaciones, pero la tribulacién no es la meta del cristianismo. Muchos creen que no valemos nada si no sufrimos primero; sin embargo, eso no es cierto. No valdrds nada a menos 21 que venzas ese sufrimiento. Sufrir es el resultado de un ataque de Satanas. No hay victoria en rendirse y permanecer en las pruebas. La gloria se encuentra al vencerlas con la Palabra, a través del poder de Dios. Por esa razén, podemos tener sumo gozo cuando nos hallemos en diversas pruebas, pues sabemos que Jesus derroté a Satanas, y que somos victoriosos sobre cualquier cosa que él traiga a nuestro camino. Jestis dijo en Juan 16:33: «Estas cosas les he hablado para que en mi tengan paz. En el mundo tendran afliccién; pero confien, yo he vencido al mundo». La gloria se encuentra en vencer al mundo, sus pruebas y sus tribulaciones. Quiza surjan problemas en el trayecto, pero por medio de las buenas cosas de Dios, El siempre nos da la victoria en Cristo Jesus. 22

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