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  • SUPIOT, Alain - Por Qué Un Derecho Del Trabajo

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    © AQUI una interrogacion a la que pregunta? , Paris, LGOJ, 1973, 182 pags, 16 Aus €) Gerecho civ! no era, por naturaleza, destavorable a los ‘aeeies (14). Pero enionces la pregunta es mas apremiante, 2Por qué al cerecho civil ne tiga las relaciones de trabajo? saute or la pecagogia, yo abordasia este problema par medio de une to, one oh ubarasfa las relaciones enire el derecho civil, mas onset ceent, <1 derecha de obligaciones y el derecho del tadaj, a acuélias qu dosent? un coche y una nave, Su azén de ser es finairenta te misma {despiazarse), pero responden a imperatives diferentes (adaptarse 2 una su. perlie sélida en un caso, y Iiquida en el otto), si bien cake observer entre cits. @ le vez, ciartas simiitudes y enormes diferencies, be mismo modo, e| nataztrde-s ei ia rising cerecha clei y ai trabalo tienen finalmente te Tilia Se iesbe ee lie sciuiizars las celacianng aeélales (15), @6 decir, sustituir Ef elas las Telacicnes de fuerza por relaciones Ge derenne Pero, mientras ave el derecha civil de las obligaciones avaluciena en lida —el Gol Suiste de derecho, duefio de su custo jae su Voluntad= ste t Si tebslo depenciente, s! cual comporta dos Imperatives ssiructurales que et derecho de ob! 8 ge Salstacer,'y que lo ccnvierten, por Slivacicn del Guerps humans y la susordinaeion co ET derecho Gel trabajo Procede jUstamente de estas dos Wuntat (78), Pregurias aificles ¢ome garantizar la seguridad fisiea de indviduos sujeles a las cons- eciones de la produccién? ntad cel otro? © canterir derechos a individues sametices a ta vel A. La constriccién fisica ado de derecho ~es decir, de tina | de la Seguridad de las personas, ei de la segu. pees ae a falas bien, los conceptos del derecho ei se har mena inca. ebgacionn antzet esta seguridad en la empresa, porque el doreehe can de OhisEEIones nO puede regir una situacidn donde los Individues ewrcce| del Si hay un principio fund. Sociedad wcivilizada Leen gues chistes wit croit ev tava, 0.1975, Che, ss1-88 {Geol cit tarot du travail, rm. ogpacr maye sone nino ts ehagenaae, S08 IEUEIEA cue, wen ol eerie halbiee ee desconocida do esto AEgMPO. Ia hifacién no ws ata cosa goo olimpore dense, E len Compra de fo vers dor ocr 1003, pay. 171) semtao oscapas por genet Buss, on sla chisstion oa ba Uae He Paris, Galmanntgey, 1970 sete Lie) fei UIA presénvacién do conkino, ver Ua eoS ot to Gobel, 1979, 339s, Se aTe 20 travel, Tasis Bor. 17 O4CARL ee i saat oh a CuetPOs, donde éstos devienen una fuente de energia que’se vibe een? igahlzacién material concebida jor ole. «Hay gue dec see ER (17), Que el irabalo es el hombre mismo, en sucucreo yen ¥ gue no hay ali e! objeto posible de un contrato de derecho crit, dareches no fel abajo ha ienido por primer objets suplr esta corerste Fr sears onmalos, y extender al interior de tas emareses el prin de la seguridad de las personas. Glace falta recordar aqui la amplitud de las disposiciones elaboradas con este fin? liega, se piensa en primer lugar en las disposiciones qc oa ls olan eh tecnica de los trabajadsres, tales como las regis res aad aa higiene y ala seguridad, ala medicina del vabaje oles cece aa Mavalo ¥ a las enfermedades protesionales. Paro ef aicaree ne esta Fr tas uriad fsles es, en realcad, infntamente mas vaste, y se sen Wor 2 ledas las regias que conciemon a la salud (por ejomple ie elativas a ta linilacign y ordenactén del tiempo de trabajo, ova fe enfermedad), fa repro- jrescon (arotecctin do ta maternicad), la vejex (disefiminasioncs Por edad, Trude ae one gl Sustento del cuerpo (aroblemas del minimo'y ds la ca Fer dad de los medios Go subsistencia que han dominady ef régimen juricica reich, 2 8 inlimidad (ragias relativas a los regisiros, el test Go relativa a las normas de indumentaria en la empro. Ser ane coguridad fsica ha estado, y petmanece atin, en el cora- 26n Cel derecho del trabajo. La misma aparace en of origen histérice de todos les derechos del trabajo europeos; on los sistemas rac dominades por ef abstencionismo estatal en la materia'de las relaciones laborales, constituye la cee teductible de un derecho det trabajo impuesto por el Saker lia se Lely cont oh li. en el centro de la construccién del derecho sosist europeo, H21y como se observa, por ejemplo, en el Acta Uniew (20) Wise central, pues, pio, por a mPortancia sigue deseenociéndose a menudo, a juzyer Por ejeme Gio Por ol débil espacio cue ocupa la referencia a las nocedee ne cronebio- lecleas en ios Uitimos datatos acerca de la distibucds der tiempo de trabajo en Francia, groite, Paris, LGOJ, 1955, a 109, peg. 278 got sala Bu revenu sala en Lax vanstesce’ du ees du ‘Caen, Paris, Dalioz, 1909. Migs. 317-200 Ver 8. Terssie, «Personnes, eniroprags ot rev Dr. sac, Orot evi Si Stal Gu vaval, eum, espec. ai. 374-389 O Nine briraprises et veiaions Pave ements Ce \isprudencem, darn, 1086, Sox 36a ee La ibené dans te ey eet aetggrbbent. Agate, tratrnte et bean sacs ene eepec. cit, 48-58 travel, taht Var. Vacane, =Tiaval ot dante un sna Gu travel, Métanges G, LronCam, cts pines 8. Le suberdinacién de la voiuntad El deracho dél irabajo procede igualmente ce la incapacidad d side las obligaciones por aprehendor una relacién dominada por la idea ce subordinacién de una persona a otra. Mientras que en el contrato civil la voluntad se compromete, en ia relacién de trabajo fa misma se somete. El somsromiso manifiesta 1a libertad; la sumisién la niega. Esta contradiccién entre ‘2 autonomia de ja voluntad y la subordinacién de la voluntad conduce a que ef vatajadcr, en tanto que sujeio de derecho, desaparece del hor del derecho civil desde que el mismo entra en la empresa, para dejar paso a jeto (out court, sometida al poder normative dei empresario (21), El 10 del trebajo na tenido y tiene siempre por primera razén ce ser la de falla, es decir, la de «civiizar» el poder empresatiel, doténdolo de or este ha significado al mismo tiempo izacion y una limitacin de Puesto que se trata Ge clvilizar las relaciones de trabajo, no es sorpren= 2 Jy dente que nos encontremos aqui técricas provenientes del derecho civil, pero tet ge | adaptadas a las exigencias de Ta rdindcién: Al igual que en“un'buque: cc atimdn, que recuerda al volante, o una hélice, que reouerda a ;cho del trabajo adapta a los imperatives na 1 de trabajo cierlos conceptos que proceden del derecho civi, Ye idica, de representacién, Leone qer Pte raoda motriz, asi también at der GAD dt Go ia elas \6n ha sido acordar un puesto a ia Heide los derechos. Esta raf ensar inmediatamente en los concepids |uricicos propios col corect na el de empresa (y, en Su Grbita, los de establecimiento ic 1808, 236. €1 anaisis fur clidac co eu ete do deve bie esta nocibn, ver «Dblegelisation, normalisation ot roi au taval coves necesais y aufwiarte para ceracterizar esta (5, que no es 0" ¢) sate presente Una simple cuws:en de hecho (Gr contre. ser). Cacvowaen: «Sur laa tazas au roneaujat ee drat, en Avzn.,L $4, Pacis, Siray. $89, 1 en acpacial page. 201-202), (22) dal. Gnazaron, Lemaeunt da techniques de efcit adm) Terie, Paves) 986 (2) Verias actan do! cologuio -Les dicts de a aéfanca ot le arit du ravalin, rep on La Gazeno cu Palais, y en La semaine social de 24 de mayo de 1985, suplemento en al F. Aioscir, on azpagich is comurieneion €@ Jf, Ueepes relalva 2 los derechas cu la celenss fn interds Ca la empresa istratt par ie rot du | . OMAR es de grupo, de unidad econsmica y social, atc.) ¢ de rama, de negociacidn o de jepreseniacién coleciiva, de huelga o de sinckealo, Pero, en realded, lo celae vo se halls pre si siempre en fligrana, incluso en la definicién de los Gerechos individuales conferides a los trabsjadoras, 2Se trata de presenter © de comparecer a la entrevista previa al despido? Se asistir por su delegado, Se trata de saber qué 2 Puede pretender, © qué duracion maxima de trabajo guede trabajador podra alegar reglas colectivas, legales 0 conven. cionales. ¢Se Wata de ejercer una accién individual? El trabejador pours ha, cerse asisty representer por el sindieato, que se halla habiltace incase na Bcluar en su puesto, en un nimare cada vez mayor de casos. ¥ esta sonine Ge Io colective se extionda hasta la jurisdiceién competente para los I individuales, porque la institucién prudhomaie es clectva y purltaria, —__] imponérsele? La constitu Cerecho del abajo come rama auténoma del derecho se ha producida asi por un doble movimiento de declive del contrate ind como cuadro juricice exciusivo de ta relacién de trabajo, y de reconoc Cerechos detinidas colectivamente (derechos colectivos 9 regulasisn co! twa) que fundan 9 confortan derechos indlviduales, es decis, derechos qu Gata Wrebajacor puede oponer a su empresaria. Desde este punto de vista, une de las nociongs mas originales del veracho dal Haba et la de débserc 4 individual de elereicio colective, necién que se encuentra-en eLcorazon de la n francesa del derecho de huelga, del derecho sindical y de! derecho a la Hegediaclon colectiva. Se-encuentea ast planteada, no sco el problema ce leprbteccién de incividuo por e! grupo, sino también ol de la proteccion det ingividue contia’al grupo, cuest otupa Un puesto mayor en el derecho inglés 0 atieriéaio, Vy que’ acéba de gozar de los honores de la aclualided sttucional en Ia propia Francia (24) ede to anterior es avidentemente complicado, afc! de manejar, y este Helenewe Perpetue entre Jo inelvidual y lo eolectva, ta suvordinacién y Ia libertad, ol contrato y sl estatuto, es muy adecuado para producie marece at Giilsta. Ei peligro esta en otra parte para el jurista, Contrariamente a, ios Que ia temen, ios marinas de agua dulce aman la vida en la tisia, y ita a ella con el instinto infaible que causa los grandes naufragios. El mismo riesgo acecha al jursta tentado de volver, para trata lae felaciones de abajo, a la tierra firme del derecho civ. Es0 no quiere deci Gus los Présiamos del derecho civil le esién prohibides, pero no suede trate GP Kasladar pura y simplemente una disposicion de derecho evi al apareyo nstlivclonahcad ¢e las acciones de susttusién: C. Const, 25 jute: decisién comeniaca por %, Prevor, en Or Sac, 1869, 84g, 7s eaeTanwn 7 Gerecho Cel trabajo sin haber verticada previemente que esta dis. propio di las propias de este ult posicié: Hace fella, en efecca, resolverse a constatar cue ei derecho del trabajo se corvertide en ol cerecho comun de las relacianes de cependencia eon ca, en la medida en que pésee una Iégica propia que irradia a las otras {amas del derecho. Los conceptos forjados en su seno se han difundide on {bes las situaciones juridicas donde se encuentra esta idea de dependence, G2, Sgauridad Social (26), Ia tuneién publica (27), el cereche rurcl 28), al derecho de los tansportes (28), el derecho mereantl (20) y el propio coreghe il cuando debe regir reiaciones desiguales (91), han lomiado por su cuenta bara adeptarlo a sus propias exigencias, ‘al o cual concepto. Y la actual, Gadi (92) muesira el dinamismo que las ideas de dececho sintical, do derecho ce Buelga, de negeciacién colaciiva, incluso de renta minima o ga-antizaca, pueden adquirir en el seno de profesiones liverales —coma los madicos o loc atosades— hoy dilaceracas entre la afirmacién de su independencia juriéioa 2 la constatacién de su cenendencia ecanémica y financiera con respecio al Ho 0 ala Seguridad Social & Pussto que asi ha edquitide el derecho del trabajo en nuestro sistema fuicico fe expane evicentemente, mas que cualquier ot, alos cambios (83) Betde este punto de visia, fa pregunta « {Por qué un derecha eel tranaja?, $e plantea en términos diferentes, como un problema de actualidad: mae oll 2, Ee eae Sento, J. Lancoue, Aéftestans sur fa julssrudence ce la Charro cociale de fig. ge, © CBssation, on Mélanges GH: Gawermen, Pals, Osllce, 1Oh8, eee epee lg. 22 (25) Cr, dod, Durara pags, 140-101 irae e/cerecis co! trabo.o, come el d Peynet, AJOA, 1973, 608. cane! Gas Toulcuse, Rec. 152, ‘soncl. Laresovusch, (25) Git “Volevage indvoirie’ taco au dest ey travel Roviombra 1803, pags, 935-031 Foe outa, eee, Label let nous atend au coin dolar, Parc, La ee. te, 1802, y dt ‘mismo autor UElat providance, Paris, Grasse, 1996, an agpeeal neg, Aare 1%, 20" clempla, e|esiatuta de ios repreaontanies Ge comores ¢ al puesto decisive do! erachs de onsiitucién de um derecho do loa grupos empesoae G1 ct Lintluencs des relatens de travail sur le ere cemmnin das centatse consulate seen cote “Orit ent at arot dy taval-. on Dir Soe. 1580, SDs oats se eg area tmere coe provacha tas tess da C, Benuor scbre tLe conv adhesions Weer Fe Nace Gs Niatanur, Sur les contrat de cepandanca on dei pide (reo, Joateif tt98 90 ta ayuda judicial en les abogados, huslga de los masiecs on eh oie eo, cies Suen dtc aeN® convanio can ia Caisse Natonalo GAseurance Moladie Adds ecg Moe etemGeen, ta ero cu travail non selaié, Pars, Sry. 1590, 208 sae, NS, Gieics Lven-Gnen, Changemant petique et changement au diet ou freee, en Be cage, HORAN Gl BagE. TG, yd Raye Mulaton Ecoromiane et wet Gee kee 8p. elt. pigs. 31-31 , Drolk Co la Sécurité Socal, Pats, Datos, 1." edie, 56 y ples generales en os que ese aternided (CE, Aes, dui 1979, 5. 23 avr 1692, vile do Consejo de Estado de pi Diciecsian 42a en Rav. et. wrt, n, especial ociubro- uclurales, gcudles son las rezones coyunturales de & N. RAZONES COYUNTURALES: EL DERECHO DEL TRABAYO CARA AL CAMBIO Para abordar fos problemas de nuesiros clas, yo distinguirla los dos Semtides de ta nosién de derecho del trabajo: dé una parte, ol dereche Ge! Lsbejo come conjunto de textos que rigen las relaciones de tabejo y, Ge oir, 6! cerechs del trabajo como clencia de cichos textos. La prequy ta =Por qué un derecho del trabajo?» se desdodla entonees, y concuce a inlerrogarse no sélo @ qué pueden servir cicnos textos, sino lenbign a qué puede servire los textos, Es dificil no pronunciarse acerca de tales cuesti fo privilogiar cietas respuastas posibles. Tomando tido con bastante clarided, para facilitar una eventual refutacién, yo avanza- jo —~como wciencia» de los texios— puede servic ‘abajo —camo practica dé los textos y- debe'servir para'dominarlo— fla que si el derecho de! tra pafa aval’Zar 6 Cambio, el Vaisehé cel MOET Singular, Como practice’ |udiel A. Ciencia de los textes y anilisis del cambio Excelentes escritos han analizado las stare2s» 9 las «funciones» de la doctrina, en especial en el derecho del trabajo (24), Yendo a lo esencial, i de las diversas facetas del conocimiento del tenmeno ralmente, e! acento en el roi que juega la doctrina en furidico (5). Asi, no es Ui volver a elias acui, y ieve un interés marginal de la ciencia de fos juridico, y ponen, ni el interior del erdenarsien: Yo quisiera ms bien poner textos, que.es el.de contr Comprensién de aquello de que nos hablan fos textos; dicho de oro mado, de darnos una visién no ef del perspeciiva, que restituye camblo Econémica y social. Marginal, sin duda, es! enies ilustres en le al derecho su dimensién cultural, puede referiese a pre. d ye, islssonce du prénoméne juidique et les tiches de ‘2 doctrine wlame Ju dit privée, an D., 1956, Chi, 79: Gu Atus, =Progits Qe Grol et Monee wens science du drole, an Alev. Trim, di. cv.. 1903, 606: JC, Jamusce y Pu, Aueemonen oe ne Resse ae aut a tezherehs on erat di vaval-,en Di. Soe. 908, 21:6, Gomeuern ary gegret OF “Les anslarmations au ara du tiavaln, Mélenges G. LrowGamn Sec pine” San 2a, ont), Veh Pet ciemple, 3. Courauaien fan, eit, m7 s (98) , Sia tmontarse @ Montesquieu 0 Portals, batte con evocar aqut ol nombre de Furear, Sosteanee et Cersouses, curas obras can a ver, més alld del fenomene jurden ne S0ciedades en que se ingene este fesamon trina fra 5), quo cistingue tes y. en fin, de conieversia, 22 ambio» —nocion amb) 2 donde las naya— equivale lermings menos rabuscades que los que Mowraicne empled, ue wel mundo es un bamboleo permanente». Quedan por caracterizary por define, los bamboleos de nuestros dias, Tal es el problema que el dere- tho del trabajo, come ciencia de los textos, puede contribuir a plantear con- Sq estructural que ccupa, en el eruce de fo indi- sico y de lo mental, de lo ecandmico y Io social ia conveniente venienteme vidual y lo colectivo, de io fi del trabajo da dal cambio una atenciéa.t125_ tenden- sis hoy, observames con un Signdenaias fuertesw de nuesira : ionya'la duali bohirscsiciiiinncinaasaaann Ea ol dossier de la incividuelizacién (38) incluimos: ia dwversificacién de las ‘ormas juridieas dal empleo, la revalorizacién det contrate individual de traba- ‘0, el principio de no di minacién por razén de sexo, ia flexibilizacién de I. te ia jornaca de trabajo (asi como de ia vida €8 trebalo: ron Sikes do leg clausulas-guillotina en materia de [udilacién), el derecho de ex- sresion, los derechos a un permise individual (permisos sabaticas para crea Si realizame: aspectus'ese! ‘las: a'la-individuallzack la-desconcentr 7 de ura empresa, parental de educacién, de farmacién, etc.), el derecho conversiéa, el derecho de jubliacién, etc. En of dossier de la Cesconcentracién ingluimos: de una parte, Ios signs vencional de une tendencia ala cescentralizacién (desarrollo del derecho ct y de los acuerdas de empresa, puesta en tela de juicio de la necion de orcen publice seca) y, de otra parte, los de una tendencia inversa, a la intemacio~ reia del derecho social eurapes (40), del derecho do nalizasién (39) [emer grupos} jo comgs’sdojlevade 2 e250 #9 YB. Beacussen (NUE, aN) Eke desarrcla retoma fae grandes tineas de un tr fon ios protasores U. Mucrenscaaen (HWP, Haru Angulo juttoteo, por Individuatzacién puece ententecse ie atibusisn 60 eee cles imbwaendisntements de la perienercia a une colectvised o a voa ntucign Sets pate punto Ge via, daberta distinguree ce la esubjelivacione, que consist ee. Garcchos ineivicuales en el arco de cna coleclvided 0 una Inattucién (es cai, Sao eecvodor como un sujeta de Gerace en la empeesal, Nocién diferente de 18 aoe alate en ieatar 1 indlviduo come un simple objeto Go cerecha, como una jets ceteramante subordinada a una estuctura inetivescna! Be YET, dune downs, Lieternatonalsation des cappons ca raval, Mélanges G. Lyon: oe eee SIS: SEM Venmen, Uappan dee normes ca TOIT au droit dy avail tangas, Deseo 19 qurepéenne et otc du siaval, Mélanges G. Lyer-Caes, 23 M@4caki Oe > En el dossier de la cualizacién, encontramas los fragmentos de un derecho del abajo del «segunce tipo» que prbspera ala sombradel antiguo: contralos de curacién daterminaca, trabajo tempcral, trabajo-a tiempo parcial, interi= lente; Tormas juridicas do entrada_en ei itabajo (militid de stages y-ce gortratos del tino «empleo-formaciénm). presiacioii dela Mano de obra, eto Del segundo tipo, porque la mayor parte dé las nociones fundamentales del derecho ¢ol trabajo (empresa‘io, empresa, representacién, huelga, incluso ia nocida misma del trabajader) quiebran on Por lo demas, dichas tendencias no s6lo se observan en el derecho del trabajo: asl, por ejemplo, ia individualizacién puede apreciarse también en el derecho Ge familia (41): la desconcentracidn en el derecho publico (42), y la Gualizacién en el derecho de Ia seguridad 0 ¢e Ia asistencia social (43) . e51a5 tencencias se han observado en otras partes, en econo- mia o en sociolagia (44), Pero ef andlisis juri puede permitir precisar ef sentido y of alcance ce las mismas. For ejempio, demastrande oémo, tas los discursos que magnifican la emancipacién del individuo por mecio det contra. ts, el vingulo juridieo se transtorma y teje nuevas formas de reagrupecién y de constri es sociales (45). Asi pues, el derecho de! trabajo permit= anailzar y comprender mojor los cambios que, ala vez, expresa e imprime. A los 0/95 del simple obser for, eso bastaria para justificar el interés del mis- imo. Pero las que practican ei derecho del trabajo corren el riesgo de no Satistacorse con un interés tan especulative. Les magisttaces, on perticular No pueden contentarse con observar, pues ellos tienen el poder y la misién de decidir. Para ollas, la cuestion eseicia! vo saws w! ia poms dO 108 textos Sin cud: permite § as! odservados, (441 Por siemaio, en ia liperatizacion det divorcio, en la equiparacién de fos deve Petimaniaies Go los saposcs, ca la evolucidn que va dal pover palemno a la autorcad parental, on es derechos reeanccides a ios concubines, fon la Mheiaizacén dol derecho deta vial 4 emancipar al Icieovs 8 1a snaliucion famaiias Tone ovige Siexeetgiones ur cicas (endl enlondida coma cuadro jurigica ingorogabie (42) Leyar 0 descartralzaci6n ce un laco, integracién auropea ee ott. (43) Ver actas de! eologuio de Nantee, Lee sartemple el le tel Quircer, Catlgrannes, 1987. 228 pags JJ. Ourevnour, Droit de la Séeurlé Sociale, Pans, Dalen, 1+ Gl, 1906, 8 E98 81 E. Aermanoani (di), “Linsertione, Rev. de er sant ei gee, h. espetial Paris, Seep, 1908. ned ACL, aoalsis magisiaioe co M. Venner, La cultuie ouwiéve, Sain 98 pags. y, del misma avior, sO an ast ta culture cusrrs dy Uwavall, 1989, ". 1. page. 125 8, Ver tambien A. Gent Métanomhoses du avai, Quele du sens, Paris, Galle, 1968. 303 pays: y el punto dv vies scondmico co A Diwaanve, Cempétivits, abt social, enjeu édveail Para, eo. Crias. 19a 287 page 5) Ci, -Derdgiementation des ristions ge iavall et autor Dr. Soe., 1985, 195.205, en especial pag, 209, enlation de lenueprise., See oF y de 10 peor, y puede consigerarse ya coma esgo (46 La lendencia a la individualizacién puede anatizarse, por éjemplo, come la Sporiunisiad para Una \iberacién de las coacciones que el grupo sjerce sore Ci ndividue; Gleno de otro made, como un factor de liberacién y de respensa. ils n Iugar de que Ia organizacién de su tiempo (67), sus esperanzas de ganancia, la expresisn do sus opiniones, sean llevacas a cabo o Cofricas ae forina oolectiva (por sl Estado, el eripresario o e! sincicata), of rabajader mismo se canvertiria en el artasano Ge estos diferentes aspectos de su vide rote Pero puede verse en la incividualizacicn, por ol contratio, el riesgo de una cn de ta proteccion del individvo por ei grupo o, dicho. de stro moco, un factor ce desarganizacién, Mientras que la definicién coiectiva de las rele Gus rigen la ralacién de trabajo daba a cada trabejadortitulos juridieos quo © ner al empresario, la individualizacién se reduciria 2 un lemiento de esos cerechos que hunden su raiz en lo colectivo. La fometida del individuo duefio de su destino, no ser accesitle, en Pequefio numero de trabajadores capaces de dar un con. tenido concrete a estos derechos ingividuales. Para todos los demds, la retinas da de las protecciones coiectivas dejaré ei puasto 2 nuevas farmes ve norma, lzacion y de explotacion (dentro y tuera de la empresa) (48). Mas Soneelmente, puede conjeturarse que la funcién de integraciin econémica y Serial que siempre ha cumpiio el derecho del trabajo liende a no jugar mae gue en beneficia de una parte de los trabajadores, mientras que pars la oira Parle este derecho se ha convertico en un factor suplementaio de exchisiere mismo desmant (oo) (SET Us Mucntnstncen y 8, Peake From derogulavon t2'an Euepean foot of rights: Eigeu Lan, fexbilsaion ana tho European single Market, Zalochalt 1 orale mesa es sMaceeute Abella une Socialracnt, Moielberg, Mater, julotsept. 1900, rae: tance eres io llama el esiado de nueva Incen 0 Die Neue Undbersientonkelt, hrkamp, 1895, ‘89 rabaj, pero lambiéa tiamaa ce la formacién, de ljubi ne fa acucacién 4 flecio, la Ineividuaizacién va a la par con una tandenca ala estandaiizaciin do fos alos grees ats Favorecida on ospecal por fas medias de eomunicathn, La Gassernorei, foe ge ings Mfermadios doja ef euesto Itre-a tos valores y representations (eer con nti. porque el marcade se convieie en la Ja comin) que £9 imporen tants mas " eden opaneiag valores propio ferameno 29 perceptible, sence peau Tt £0 relacionen de trabajo ene seetr publics el sta Subs GST de Service pudlicn, en Dee Soc 25 ACARL (ase > un rol esencial, mm Ahora bien, el juez empea A decir verdad, ha jugago siempre un papel capital en la construccién del derecho dei tfabaje., era como motor, ora como ancia flotante, haciéndols avanzar y limitanco sus derivas, Asi, se le debe — el princip’ ge la responsabilidad dai empresario en materia de seguridad e higiene (49), la iécnica de la suspension del cantrato de trabajo (60), la nocién de unidad econdémic# y social (51), ia técnica de fa recalificacién de los cantratos pre carios sucesives (2) ‘oluciones fuluras, y de él puede espe Va a jugar un rol decisivo se lambién io mejor y lo pear, francesa, lo peor es excepcicnall Pero, de estos trabajadores de! sequnde tipo en la jurisprudencia aun asi, he aqui npio. Se ti que trabejan en las empresas de prestacién de servicio (restauracién, jar ‘a, Iimpleza, et), de esios trabajadores para ios que los derechos colectivos lian, poco mas © mengs, vacios de sentido, sorque trabajan de facio Fa un empresario que no es el suyo de jure, de estos trabajadores, en fin, Guo sonatituyen e! tina mismo de la mano do obra exerorizada y barata, y gue no conacen mis gue los malos aspectos de Ia individualizacién y la duslizacién, Estos trabajadores tenian una proteccién y una sola: la jurispru Gencia llamada «Laving-glace» (83), que evitaba que la concurrencia entre las esas que prestaban servicios no se jugase principaimente sobre los bajo cs y la explotaciéa de la mano de obra (64). La Corte de Casacién les jencia «Nettoitout» (85)], bajo Ja na privade de esta Unica proteccion jurisprs feo) 2) Vera 1289, 1, 972, 80 travel, Tesis Lyon, 1878, Paris, Sey potion units éconemique et acciale entreprises juidigueimer’ 7, 6, sx, sl conttal de travel, on Traits do droit du travad, Pais, Dell 2. 842, Ver, racizntemente, en la lea Ge esta junsprusone e” Soe, Soe. 1398, 200 5.,"ar. G. Puan, Le travail inieemitent par conclusion de a curde dsvorringa, (5), Eatie iss rumeroses B. civ. V., m 816, pag. 500; Soe, 6 e130 nov. 1978. 0." tencias, ver Soe. dée. 1974, 8 Ch V5 ne 592, pag. $49 9. 5.277, nak de a jeilsam on Rav. tein. ef com, 1905, rota 67, 93g. 822 (95) Cass.’Ass. ln. 18 nov. 1985, dos a Hi, Ravnous y «Novar, Dr, Soe., 1886, €0 és el paradigme de Ve ‘encias: -Netoloule Gaz. Pal 1985, |, 38, nota G. Precn y nota ge G, Couroumien: $20.12 ju 1 Dr. Gos., 1886, 695 s, conel. G, Fecx) sebre esle cambio, vor ancnunce ¥ MA. Monenu-Bounues, Le conrat de Vaval, en ielado cit. puesta al oa 106, 04g. 46 82H. Bo tions dans ia persenna Ge erpioyeur: Far 122-12 dans ia towmenicn, en Dr. Soc, 1906, 89]: Arnaud LrawCate, «A proves oe fanal Desqueane ei Gitals, en Dr. Sac, 1S06, 8 26 Co ee presién de una-argumentacién ec: A Cuyo cardcter se demostraria pos- terormente, porto menos, anroximative, Eldesmentide que a tal argumenta. sién han dado 10s propios actores sociales (58) y, despues, la posicién adop. {ada por el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas (57), permiten esperar que Ia Corte de Casacidn reformars pronto esta jurisprudencia sNottaitouty ($8), que se parece a Io que J.J, Dueevaoux ha llamado ul effet Ou en el derecho de la Seguridad Social (59): a los que no tienen riva incluse de lo que peseen son evidentemente mucho mas faciles de encon. Los ejemplos de lo me i limitaria a dos de ellos; ambos mucho mas numereses. Yo Sonciemen al procaso de individualizacién, rimero es el relative 2 1a calilicacién det contrato de trabajo. Como se sabe, una de lac formas préctioas de individuatizacién paca cierias empresas Consists en transformar sus propios trabajadores en empresarios subconira. terés de la operacién estriba, desde luego, en exciuir del campo d echo del trabajo a les trabajadores asi «establecidos por su 0 a Sala de lo Social. come a Sala de la Penal de la Cone de muesian, en tal hipstesis, de una firmeza similar. Su jurispra. atiene al principio, recientamente afrmado por la Asamblea plena. in el cual wia sola voluntad de las partes (es) ineficaz para sustrasr al interesaco del estatuto social que proviene necesariamente de tas condicio. Bes de cumplimiento ce su trabajo». (60). No se subrayara nunea bastante la ‘mportancia de esta jurisprudenc'a: la calificacién de! contata de trabajo es un Gerrojo que el juez no podria abrit sin correr el riesgo de precipitar fuera de toca proteccién a miles de trabajadores, aplicacion det jentar alos sdoptadas en la rastauracién de lag salectnidades locales 'd0 22 28 do fobres0 1906. ragiamenia de axtoncibn de 6 nia 1296, poder neal Sana ial ge! 2), en a manateneign ferrowarie (acuerdo de 24 do tebrare \G8E reslaner ene lesion v.13 mayo 4996, publicada en el Bolein Ofeial del 23) y en ta impiens oe eae uarde de 4 abil 1806, regiamento d2 extensin de 17 jurio 1986, publeado onal Geletin cane ae BD. sotee astoe diferentes acuerdos, ver J. Beast, ate, Or Soe, 1900, pag was e 10 febrero 988 (Federasion danesa de contramaesires), On. Soe. 1900, 485, ssuon, Acta G. Cour vmen: TICE, 15 Junio 4968 (Bari, a8urt0 fe WLBT crete eleoreia de dicha jutisnrudencia outopea, ver G, Courunen, sha mamon des arene ves hhavaileurs en ea ee rans! ss, on Dr ‘See, 1989. £8 Esta esperanza ha acanaco ae celmarse een ei timo carsio de juisprudencta: Cass 18 mars 1990, publicaca en el riimera do maye de esta rowan (85) Droit ce la Seeuite sania 64, IT by 17a, 355 (60) Ass 883. J. 343, corel, Casannes: ver en el mismo sentido, cren. 29 1986, #2; Sos, 19 jul, 1968, B. cv. V.n. €78: para ura Walon oe Goma dea cuestion, ver tatesis de Th. Ausesrsowtrevecen, Subecdnalion fraions ef nee Ca aval Toulouse. ed. det CNAS, 1968; add.'A. Jess, Let paljwoleceoe oe travail, en télanges G. Lvow- Caen, cit. pig. 299 27 i 7 BACARL oe ae > csngunde elemplo 9 ol de la jursprudencia Raguia,retava a la mod fduateacar ee, 2° Jabalo (613. Aqut se da también ef proceso ae wa cont aaacion. puesto quo go trata de valvara dar vigor alas eolipuingar ae, sea oe goniual, Una parte de los trabajos de este coloquie deine covcccren Tab dineumesetrolos de esta nueva jurisprudencia, y ne dudo gue iesenn igs aieutades téenicas que puede plantear (62), Ash, ne de eat recordar Sau! Gus la Sentencia Raguin ha consagrada una solusién de bon sentido, are. dectina invocaba dosde hace mucho tiempo. Esta soucién prohioe seine. mhres2. puesto qua deja libre al emprosario pare doviclr ine sae’ Sustanciales dei contrate. Pero ie obliga a talar al webojonee ero sujoto de derecho, consuitandole sobre esta mociinn Bsentimienta expreso, o bien un techaze que conduacs © de Gespice, 9 bien todavia a negociar con é! las Condiciones de esta mositicacicn, io que teva a cz avsiones colectivas inne Ge este modo, la sentencia Raquin entre antes a la vida de Ia empresa y el respeto id9 los indiv ‘ensiblemente ciferente dei que acaba de defini, seis ea ns & ropsskte del ejercicio sindical de acciones indivi, Guales, al exigir que se recoja ol acuerda expreso de ioe lrabajadores afec tados {3}. En ios dos casos, se tala de watar al trabajador como a un wae sani Suiets de derecho, pero en condiciones que preserven ke esa "as prercogatvas ue!

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