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  • NEWMAN Carta Al Duque de Norfolk

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    JOHN HENRY NEWMAN BIBLIOTECA UNIVERSIDAD PANAMERICANA CARTA AL DUQUE DE NORFOLK SOBRE EL DESARROLLO DE LA DOCTRINA CRISTIANA Traduccién y nousde VicToR GARCIA RUIZ ¥ JOSE MORALES EDICIONES RIAL S.A. MADRID CARTA A SU GRACIA EL DUQUE DE NORFOLK CON MOTIVO DE LA RECIENTE POLEMICA DE MR GLADSTONE cas74) 1. Observaciones Incroductorias. 2. La Iglesia Antigua, 3. La Iplesia de los Papas. 4, Lealtades encontradas 5. a Conciencia. 6. La Enclclics de 1864. 7. BL Syllabus. 8. Fl Concilio Vaticano, 9. La Definicién. Vaticana. 10. Conclusin. {i,t peat Boh LBG4, Henry ta Wille Evan Glade fais importante Ad nga hee Senque icine ‘stnte con Dsl y Res pales ASU GRACIA EL DUQUE DF Norrous Maniscat. HERRDITARIO DE INGLATERRA, FTC, Etc Miestimado Duque de Norfolk Cuando eedi ante el cumplido deseo que vas, junto con muchos otros, me habjais impuesto de responder a la reciente queja de Mr Gladstone, un amigo me sugiié Aue debia recabar cl permiso de Vuestra Gracia para dri- gitos mis observaciones. Ni él ni yo: pensamos por un momenta en implicaros de ninguna forms en tnd te: ponsabilidad que es s6lo y por entero mia, Mas con mo- tivo de oeasion tan solemne, cuando se han hecho acusa sions tan graves contra Jos Catslicos de Inglaterra y por un adversario tan poderaso y tan llena de celo, ere que cra mi deber, al aceptar su tero, obtener el apoyo de un nombre que es el mejor representante y ejemplo perfecto delaico, tan defensor de la Religion Catslica como pa riot. 29 Habs coasentido con un algo de La mim, sania que yo mismo sent cuando se me inses roc Po pues a cualquier edad, temprana 0 avanmadg Sais rene obligado »haccr las cosas abandonando el pect © Par enc curso y los deberes de nuestra vida corricnt prinaros al escenario dela guerra. No obveg cuanto 2 il que Pete ans gene gue ya extd pasando de largo con rapider, tome na compensscidn por una desagradable tarea, ef seen” So eee i6n, con alguien que por tantos motivos me aren guerido y que, tan leno de jovenes promesss, tiene ant sina larga carrera Lamento muchisimo que Mr Glad r gue Mr Gladstone haya cons drat deber suyo hablar con severidad tan extaondin, ‘ia de nuestra religion y de nosotros. Consi ae idero quese lo a una descarriada interpretacién de doce. mentos eclesidsticos y a una visién de nuestra posicign ex.el pais que no merecemos y que no podemos consen. tit Nati alo la Sohole Thelogorum es compere para determinar la fuerza de las declaracion Sinodal tempo, es Papales :ademis, ss ntxpretacidn eacta et apo del Jo mismo puede decirse tanto de los Decreios que se han venido promulgando recientemente como de los creyentes que los han recibido, La versién de Me Gladstone, ranto de los Decretos como de nosotros, Pusde decisse que no es ni digna de crédito ni caritativa No poco se podria afadir para explicar un paso que deploran tantos de sus admiradores y cuantos le quiere pen Por ai parte, tengo la profunda conviecién de que los Catélicos, y nadie mds, somos los responsables de ha- ber provocado Ia antipatia hacia nosotros de un pensador 30 can rcligios0: Hay algunos de nasotrox —debemos con- feadlo— quc durante muchas afios han aetuado como si no hubicra responsabilidad alguna en pronunciar pala- bras desatinadas y en perpetrar execsos; estar genes han expuesto ciertas verdades de la forma més paraddjica po ‘ible, estirando sus principios hasta hacerlos cas ella. ‘Al cabo, estos; habiendo hecho todo lo posible parain- cendiar ledificio, dejan a otros la penosa labor de extin- gir las lamas. Los Ingleses tienen suficientemente en Gienta los derechos del Papa y no hace falta que se los restrieguen por la cara, en son de desafio, Por supuesto, tno voy a negar tales derechos; nunea lo he hecho. Ni ahora que he de escribir sobre ellos tengo la mis lejana incencién de escamotear nada, Yo los suseribo de cora én, lo mismo que reconozco mis deberes de lealtad ala constitucién, leyes y gobierno de Inglaterra. No veo que haya incoherencia alguna en ser a la ver un buen Carélico y un buen Inglés. Sin embargo, una coxa es ser ‘apa de satisfacerme a mi mismo en lo que atafie a mi integridad y otra distinea satisfacer a otros; y, estando tranquilo como cstoy ante mi conciencia, reconczco que hay grandes dificultades en Ia tarea que tengo ante ni Me enfrento, especialmente, con una peimera difieultad presente estado de énimo de la opinién piiblica, com pletamente hostl a nuestra relighn; dificultad que pro ‘ede, por un lado, de las extravagancias crénicas de ef ‘alos Catélicos de aqui y de all, y, de oto, de a retérica vyehemente que constituye el motivo de esta Carta, Orra dificultad asin mayor.consiste en conseguir que la gente tatice, abandone formas de expresion y de lenguaje Sy adlopte las distinciones ciendlicas y reglas i icionales; aunque al resultarles 3 dad, temprana o avanzada, a hacer las cosas abandonando el oe due «l pace ante conn na esrnaro de la guera. Ne pasando de largo con rapier een n por una desageadable tarea, el ser sno 1e probablemente ha de ser mi dldma ¥ que, ran lleno de jévenes promesas, tiene anc, ana larga carrera. : aed Lamento muchisimo que Mr Gladstone haya eons do deber suyo hablar con severidad tan extn, tia de nuestra religion y de ne a uieEr otros. Considero que se ido = una descarriada interpretacién de docu. sclesiésticos y a una visién de nuestra posicign, pals que no merecemos y que no podemos conten tit Nadie salvo la Schola Theolagorum ex competente pars detcrminar la fuerza de las declaraciones Papalea y Sinodsles ‘iempo nds, su icerpretacisn exacta es labor del lo mismo puede decirse tanto de los Decretos ues han venido promulganda recentemente como de los creyentes que los han recibido, La versién de Mr Gladstone, tanto de los Dectetos como de nosotros, puede decise que no es ni digna de crédito ni cartatva No poco ss podrla afadir para explicar un paso que deplova tics de sus admiradoresy cantos le quieten fis spate, tengo a profunda convieién de que {os Carslcos,y made mas, somos los responsabes de ha- bsr provocado la antipata hacia nosotros de un pensador 30 tan eligioso, Hay algunos de nosotros —debemos cone Pavrlo que durante muchos afor han actuado como si AS ubiers responsabilidad alguna en pronuncisr pala fs desatinadas y en perpetrar excevas; estas gentes han epestocleras verdes de a forma mis paraddjca po thle, ead mis principio has Maceo ca alla jNreabo, estos; hablendo hecho todo lo posible para in- an ard elit, dejan a otror i pevon iba dc ex fait las lands, Loy Tngleses tienen suficientemiente en ania los derechos del Papa y no hace falta que s¢ los restreguen por la cara, en son de desaflo, Por supwesto, ange les derecon aes le hecho. Ni Shora que he de escribir sobre llos tengo la mas lejana intencidn de escamatear nada. Yo los suseribo de cor tin lo smsmo que reconozco mis deberes de Iealtad a fa Consducién, eyes y gobiera de Inglaterra, No veo que haya Incoberencis alguna en set a Ja yer un buen ‘Gatélico y un buen Inglés, Sin embargo, una cosa es ser capar de satisfacerme a mf mismo en lo que atafiea mi intepridad y otra disinea satisfacer a otros y, estando tranquilo como estoy ante mi canciencia, reconoco ite hay geandes dificultades en la tarea que tengo ante mi Me enftento, especialmente, con una primera difieltads dl presente estado de dnimo de la opinion publica, com- pletamence hostl a nuesteareligiéns difieulad que pro- Cede, por um lado, de las extravagancias erdnias de ch culos Catdlicos de aqul y deall, y, de oxo, dela retina ‘ehemente que constituye of motivo de exta Carta. Our, diliculad atin mayor consist: en consegult-quela gente matice, abandone formas de expresion y de lenguaje poco exactas y Wopte las dltineiones cientlicas y reas de iiterpretaciin tradicionales; aunque al resultathes 31 Jes parezcan evasiy ¥ Poco nag te una tercers dificultad ademis ~ eer es ¥ puntos de vista muy por tanto, considerar esa los lene Pacicncis poguery 5 qUe habrlmm uellos en los que ellos mismo = a ‘ard ratat, al menos »ya he dicho suficiente- tfulo de prefs ssn més dilacién me ocuparé del fll de 1. Observaciones Introduetorias La cucstidn mas importante que Mt Gladstone ha comenzado por considerar es la siguiente: pueden lr Catélicos ser subditos del Estado dignos de confianu! 0 ho existe una potencia extranjera que tiene poder sus conciencias y hasta puede servinse de ellos en ualquier momento’: zy no redundaria ext hecho o9 muy serios dafios para el gobierno evil Bajo el que vite? Mr Gladstone no se limita « esas preguntas sino quest fic avanzando por su camino, lamento decirlo, sbochornarnos con nuestra pérdida de libertad mental moral, acusacién del toda innecesaria para su props idemds de que hemos «repudiado ls histo fa aguas, que rechazamos el spensarientor modem, ‘ae nesra iglesia se ha dedicado a poner al dist he ‘ramicias oxidadass, y que ha hecho dktimamente Nos infor 32 WMBLIOTICA UNIVERSIDAD PANAMARICAMA fere0 7 es harto probable que sia as en el fosury pr ximo— nuestro vinculo de sumisién, No me parece digo del esplritu elevado de Mr Gladstone haber Ianeado semejantes invectivas contra nosotros; iq hombela inceleetual nox queda si hacemos casa de sus palabras? No obstante, su efreulo de conocidos es suf. Cientemente amplio, ¥ el juicio que tiene sobre sus com: ptsioras es bien certero come pars que no ve dé cuenta de que estk nultriendo tina cosecha de odios y provo- ceando inquinas contra hombres excelentes, cuya finics tacha es su religidn. Cuanto mée intensos son las pee ios con los que nox contemplan clases sociales enceras, menos generosidad demuestra al dedicarnos vemejante avalancha de reproches superfluos. Cuanto mds grave ex lb acusacidn que dirige contra nosotros, mayor habria de ser su cuidado en no predisponer a jet y jurado en con- fra nuestra. En Inglaterra no hace falta retries alguna para acometer contra un desventurado Cacélicos cual quiet oeasin es propicia. Mas Mr Gladstone ex tan poco coniciente de cémo nos trata, que en un lugar de su Folleto, por extrafio que pueda parecer llega a ufanarse de que ha tenido un cuidado extremo en sno afadi¢ lea al fuego del apasionamiento en aquello que es ssunco de Pura argumentaciéns, pp. 15, 16. Me acrevo a pensar que alga fa se artepentixé de lo que ha dicho, Sin embargo, hemos de considerar las cosas tl y como 4¢ nos presentans ao es precsamente lo que tenga ine de hacer ala nomi pudiamo la histaia angus, de qe rechazamos el pen: wien med yde que teueccnova rusia tad de peniamiento, para limitarme a aquello en que 33 wy paveden ser xibaitos leas . Fondamentorde la denuncia ala que _acaie ya omeido, st le etiendo bien, on a eo enaien, xe sinti6 alatmada rack sre a Eaala Papal del 8 de diciembre y por aes je Errores que, por autoridad del Papa, ly cn st eifussin a ls obispos. Siguieron enton- sevos del Conclio Vaticano de 1870, funda- ais jacidiccién universal e infaliblidad doc- Sind del Papa. Finalmente, como colofén del mento que convirt la alarma en indignacién y ie pablica protests, alos Obispos. Carslieo Romanos de Ilanda estimaron conveniente denunciar + Fatararos de la Universidad Ielandesa de febrero de 1973 por influencia directa que ejercian Jos prelados sobre Gero nimero de Miembros del Parlamento irlan- dees, et, p. 60. Fste paso que dicron los obispos de smoseré a lie clara, si le entiendo bien, la nueva y ma- liga fuerea que Roma habla adquitido, o al menos, a jrowocat su caida del poder, le proparcioné Ia oportuni- Ged pntdenincath sed saiel nents smpletamente la situacién», ye provocé «na amplia dlc plea acre dela cligin caéhiea de quie- sel profesan,y de cuna deuda con el pals que debia ser aged. fsa deuda erépapada cuando Mr Gladstone se ‘onveaza, cn benelcio del pals, de que no hay nada en la ee imps ques profes sean cles a su patria como eualesquicra otros stibditos del Eade: y umbies que la Sede de Roma earece de podet Pars interferiren sus obligeciones civiles, provocando Preveupacién o alarma en os poderes civiles. El punto 4 rincipal eh que se basa para propugnar la necesidad de prince igsion de esta naturales ex 6 pitas tt vino, el cexto de los documentos originales de 1864 y Ty70. A-continuacidn, y com mayor ahinco, el animus ue respiran y el esplritu de permanente agresién que Flan; en cercer lugar, la osidia de la agresién sufrida 01873 cuando el Papa, actuando —seguin se aduce— on su influencia sobre los Miembros Irlandeses del Parlamento, consiguié desalojar de sus sillones a unos iministros que, ademas de otros benclicios pasados, esta- fan en aquellos precisos momentos bencficiando 2 los Carélicos Irlandeses y, en consecuencia, fucron cesados precisamente por otorgar esos bencficios especiales {L..] No creo que haya habido intervencién alguna de Roma en este asunto. En la actitad adoptaday los Obispos solamente hicieron uso de sus derechos civles, que todos teriemos y que también orros hablan usado a su manera. :Por qué no habia de ser su deber promover Jos intereses de st religidn mediante sus posibilidades po licieas? Acaso los Evangélicos no defienden sus intereses cn Exeter Hall? Yo crela que era cosa comiinmente acep- tada en la teoria de nucstra Constitucion Reformada que Jos Miembros del Parlamenco son representantes de sus ‘yotantes, y que la flerza de cada interés se demuestra y el rumbo dela nacin se fija por medio de las divisioncs de a Camara de los Comunes, Recuerdo perfectamente ‘Que, tras unas elecciones generales, el Times se lamentaba de que no hubiera ningiin catdlico inglés en la nueva (Cimara, fundamentando su comentario en quc todas las clases y partidos deberfan tener representacidn parlamen. taria. Verdaderamente la religién earélica viene mucha sceptacién en Irlanda; gpor qués pues, no ha de tence un 35 shige viectsda de repreerantesiy fetes orm Tin cy me pe to ued SIpin defect en mi conccimiento de lox Sipe koespen yd dagen de Mela ntuca de Tou Oblepor ilandeses en 1873, Pees pe ecakama ningunosy i vo Miy ningang ares ca poset en etait de [anda hace protble que tambien sea poco razonableen suf so de ahora acerca de la Enciclica, a del Syllabus y de los deeds Las Obispas, seg creo, no sol 1 no solamente e opus 2s rosa dele de Me Gladsone on demas, salicitaron fondos dicigidos a cubrir ls gastos des ena Sa fue a ergumeniacion mite aera le que sigue: que los Catélicos consticuyen ware Pes pb de Handa y que no al cre tinodspotstane se beneficase de lo destimdo sta Se Pape uta fcates Lae CSE SS mote ae no ea el provestanasne entree ee ae rincipios y se comport Solas race amb odin benefice de tos argumentos; sin em Me gustaria clejar. sna girne le Ob come Cardlicos, = ance propucsta: no sélo rae como Irlandeses y luego fifo que en exe asunto.eatarlan a¢ Obispos Catslicos sino como i et bins eb ania pent TF tet wan ont de rlonlan eannng:Aathey Tati tees 36 jos de una nacidn eat6lica, Y'no mantenian su pose bis oempor rarén de Tos contenidas de la, Encfclica, el Gibus 0 los Decretos, Vaticanos. Pedfan como ndeses que se les eoncediesc lo que les eortespondia Meath eparto presupuestario del pals, ;O es que acaso Gi aada no ene derecho a reclamae en fal asuaco, Y sus ‘Guapeso la representan en justia? Me parece wn ere cons eror pensar que cuanto hacen lor Obispos y el iso irlandeses lo hacen s6lo por motivos eclsidsticoss ‘esque no pueden hacerlo por motivos nacional? En ie ufo, esas acciones nada tienen que ver con Roma Dien conoros la fiemera de las fundamentos de ls fe sen- fill de la mayor parte del pueblo irlandés y cémo ante- ponen Ia religion eatélics a cualquier ocet cosa de exe Frando. Es su consulo, su alegria, su texoro, su orgullo, fh compensacién por sufriccientos de molestias y des- wentajasrociales y materiales. Mas ;quién puede negar Tuc en politica a veces su conducta —y mAs que a ve- des he tenido um deje mas favorable su paci6n que & fu Iglesia? Esto se dijo en las wltimas elecciones genera les, cuando se mostraban tan favorables ala Auronom(a. {Por qué, pues, debe Mr Gladstone atacar ala religion catdlica? Porque los Irlandeses aman su Isla Verde y sus Inereses?Irlanda no es el nico pats donde politica, ps triotismo y facciones politicas han estado tan (ntima ‘mente tinidos con la rligidn de ln nacién 0 una clase cial, que resulta dificil decidir cuil de los diversos prineipios y motivos es el principal, «Et Puritano» dice Macaulay «se postrd en el suelo ante su Creador, pero so Ia boca en el cuello de su rey», No le acuso de hipo- ¢resia por este motivo, pues al haber suftide grandes ma- less sw entender, tanto en asuntos religiosos como tem 7 . porales, y al ser las misma: Personas fos estos dite sponse mila arena loque auey i pueden distin ss religioso y su religion esti hondamente impregnal patrotsmo, No scibo de entender como prateake’® ser responsable de ninguna de Z vs repe guna de sus acciones polica de, [. El propio Mr Gladstone dice—y et Co ice ~y ef Duque de Wellingcom y Sir Robert Pec también cendefan que has terlosthido como él— que slos Papas han manvenide comparativamente con muy poca intromisién, su der cho ala Infalibilidad dogmaticay, p, 28. As! pues, sila Pretensién del Papa respecto a Ia Infalibilidad era hecho tp patente (pon amir que era in) conver aquellspretensién’ en dogma? La verdad os que Walingion y Peel eataban muy poco interesados en eae asut segdn se expuso en una Peticin » Decaracion Smad come os por cl Ds Toy, eultaba de nul in tere bajo la dptica politica. Si querfan obtener alguns respuesta acerca de lo que podria ocurir en el futulo ot que no dirigitse directamente al euartel general? ifs auésededicaron a lnzar rumorce por os pass en ee ss nsidades acerca de este asunto de las preten- as Gat ® POF qué confiaron en os Folletos © xk pe Obispos alot que nunca solictaron credevciae fron dirccramente a Roma? ces males, ao distinguia car realizaba como patriota y los q ano. Y del mismo modo, Irfandeses, no distingue Jest Por qué no Por 06 no se ditig 1 Pero no, lads desde yo Pet*stieron en una empresa descabe Principio, po : pees de quehn naiPi®> Porque pensaban que serfan & qebrar el vinculo indisoluble que une la cabeza lec ont tas dans aeaa omit ee ree jlndehetey ee ey etanee e Se re eit aes ee pete ieee ai peel cyentes de todas partes han de recurrira. No abs- ihre. durante rrescientos afos la postura oficial de Inglaterra ha sido ignora la existencia del Papa y consi- dear los eatblicos de Inglaterra, no como hijos suyos. Sino come sectarios del proselitismo Catélico Romano. Napoledn le cijo a su enviado: «Tate al Papa como si fueta cl amo de 100.000 hombress. Comprendts el lugar del Papa en el conjunto de los asuntos curopeos, por mera sgaeidad mundana pero tan coramente que lees ¢ decir a el Papa no cxistiese, no habia extado de mis ‘redo para aquella ocasién, al igual que los cénviles o- manos ereaban tn dietador cuando las circunstancias lo ign, cap. 35 de la Historia de Alison, Sin embargo nosotros, en el caso del mis grande y més antiguo poder de Europa —una Iglesia cuya grandeza en el pasado exi- fl ierta everencia en el tato, a seria madre del ristac nismo inglés; que, aunque su conducea subsiguiente-no hubiera sido siempre la de una madre, ha sido siempre amiga lesl desde e} comienzo de nuestra historia— 10s: (0s no solamente hemos renunciado a ella sino que; €n cxpresin familiar, hemos cortado con ella. Ha pasado el tiempo y ya no tenemos remordimientos; hoy, lo mismo ue ayer, no entendemos que el orgullo es impropio de los hombres y que albergar resentimieatos no es propio dc-un gran pueblo, No entro en un tema tcoldgico: me limito a hablar en todo caso de un mera intercambio se colar entre Inglaterra y Roma. Mis de cien problemas y, smalcorendidos se habrian solucionad cionado al mistido tna telacivn diplomas odes potencias. Pero, nas, el actual suahguier esperanza de que ls cosas mej alVascano, hac canal de coi he rile mol Gurren noe’ este 8 mando de la politica tiene sus I y caminos que ha seguido inglatera wenings Ha pasado algo que, desgraciadamente ase han nat Sabor gescrin bien pojudicles pul ete Seer ‘me temo que también para todo ef Pals, Sehy mead un gran Concilio y, como Inglaterts hy rade a Roma duraate tanto ticmpo, Roma gs se tod hay que decirlo—ha ignorado a Inglacra See qu a haya ignoradoa propia escmuccees Satara de nucstos actos qué iban a saber los Ob de todas los rincones de la erra, en 1870, acerca de toss ingles yde los dcbates paclamentarios de les ana, 1826 ¥ 1829? El Concilio fue una reunién cxtraording. ‘ests posibilidades, propésicas y resultados fuer igealmentc maravillosos. Considerando el estado deh epitio tolgia cients afca antes, no menee mere a resulta el acuerdo de casi todos los centenares de "pos ante el juicio teoldgico que Roma habla dese ado Side hace tanto tiempo. Las protestas de usa Gozo nerenn en contra del sentinlcnn dees thisa mayors no y eee « dirigicron, contra la verdad de ‘poruno de re defi ae contra el hecho o lo mp En Jo. que a mi me atae, no tas Geesnn una lt declracén, pues los tempor] 19 Dios los conoce, y Ia persecucide 40 sia vr opervona'—onnae ie fxd erates oer al aGia Ee egae aR moan *t0, podla hacer violencia a eual- we com hecho ulera de mis opiniones 6 conchisiones teolépicas nt vec cl hecho de aceptarlo ningtin efecto lgico ni pric- too que debilite mi fidelidad a a Reina Victoria, '¥ ahora debo pasar de los metos accidents de la po- lémica a sus puntos esenciales, y no podé tratarlos aes. faceidn de Mr Gladstone si no me remonto un gran trecho en el iempo para hablar dela Iplsia Catslica an- sigua 2 Da Iglesia Antigua (Cuando Mr Gladstone nas acusa de «repudiar li his- toria antiguas, parece referirse a la historia antigua de la Iglesia. La Cristiandad se nos presenta bajo muchos as- pector: por ejemplo, el aspecto de la utilidad social, el de la devocion o el de la teologia. Aunque dirige su atencién al dlumo de estos aspectos, su vision se enfoca desde su rehicsén con el poder civil. Escribe como un hombre de mundo a sus anchas», como un slaico que ha dedicado la mayor y mejor parte de su vida a observat y practicar la polias p. 7; ycomo estadisea, naturalmente contempla 1a Iplesa desde su perspectiva politica En consecuencia, manifiesta que quiere entablar po- émica con nosotros por aceptar los Decretos del Vaticano y decide hacerlo, no por alguna razdn especk- fica, sino por la incompatibilidad qus eso comporta con auesersfidelided civil. Esta es la piedra angular de la at- gumentacién que hace contra nosotros. Como hombre Al de nuestra religid eligidn, Jos asuntos nacio relighia adapea una activud y un ¢ stacks complet distinros al de la C tipuns an diferente que puede decirse que hy 1a primiiva Gristiandad, que nuestra Ip y la ricrnas; dice que nucstras acciones son ani no hs aeclones del atado y Noe eh ts amenan Lp y roped ies, ‘taria més! Todo el mundo sabe que San Ign de Amioguts, San Tollarpo de Eatlena, San Cloaang de Carago y San Lorenzo de Roma, San Alojandto, Sin de Constantinople, San 0 de Mild ips Ladi, Juan, Silverio, Gregorio y Marti dela «lpleal nod evar buena c Jet em man en gn xa, Na el Moan. peeps ni mis de vida que defender te hot al aso nei del pero debe de ser por otros motivos que ra denen que ver con todo ete he Can a rexpeo de MeGladnone hada ical de que 118 humanas secla bueno llamar a atencién wos hecho tan paradjicos? Da tramp atari ses liad nt ‘Cidade aetlony ol septs es lo que le dxgus fmt tin andy edad qu e Tad Din tho sana Besa? (Fue acaso enna Deco y ror. miles « quienes hab(an abji a puto de ta eligi de i anclguin Roma? 7Fue rind Atanasio fe desterrado a Teéveris! 0 cittstome fue enviado a Cuscusio, para ser peneyuido sar una Emperariz hasta el extremo de causal te er ye! Prefecto {mperal dijo a San Basilio «Nunca ries hombre algurio me tritd con vemejance libertad: seeehilio replicd: «Quirks es que nunca ances te enc Mice aun Obispos, Recorted fox extensas anales de la AMteconia de Ia Iglesia siglo tras siglo, y comprobadlo ‘Hubo alguns époea en que ox Obispos y de fer sin ilar el Obispo de Roma, fveran reivos x dar texto vy sufrir por la moral y la ley tevelada? ;Hubo al wate en que olvidasen que tenfan un mensaje que smitie al rhundo bligacién de adi trar consuelo espiritual, confortar el echo de los enfer mas, educar a buenos miembcox de la sociedad 0 sservir sino un mensaje concreto y especial para clas dita y bajas, an mensaje que procedia del Creador del undo, any mensaje que no sabfan si los hombres esc erarlan Fs lar que la Historia de Ia Iglesia tempos, antiguos y medievales,¢ Ta enc iténtica de aquella tradicidn de indepenclencia ‘expresidn que a los ojos del Apostdlica y de libertad hombre consticuye ahora mayor ofen Fis rds, me atreverla a dlecic que tal independten wna de sts Nos o credenclales porque ilénde ls encon: » en la Iglesia Catdliea? Di tertimonio de ncluso ante los reyes, y no vent vergilensas, Este verso —me parece que decla el Dr Arnold se haba empleada como juicio condenator dela Iglesia Anglicans, a pear de los valores auténticos que posce. Por lo que atafe a jas plesias Orientales, co Tive dice el Salmista, 43 dos sabemas en qué servidumbsce se hall aro cl Solin. Asi estén las cosas: la Chien beg por misién dar testimonio del Credo std Mandamienvos en un mundo que cs hort” Dig tua hecho palmmario que. en estos momentey, Ro tinica tepresentante fiel —y por tanto hered, ie yi Romie scea— dk aquella Iglesia Antigua de audaz bere presi, cuyas tradiciones politicas y soci ‘Gladstone que ha repudiado esa misma Ror ‘Tengo algo més que afiadir acerca del t peteademp, Esta fidelidad al antiguo sist ales dicey, ma. “ie cma del cy, spac reonls Roms modems, consicuyé d cio minoso samiento de los hombres de Oxford Hai clla se volvieron con reveren Gauss, ds; 2 algunos Hlegé a provocaries la e scfimicd a apartalos de In oporiign serve sn shen spear des oposicion activa a Patses de ls Iglesia Roma, coms fel admis plesind fade desaparcer gue mis que cualquier otro se instaurs en lp hace cuarenta aim. cia, interes y ag cfecios distntos en cade nd or sus recls. iguno de nosotros pudo leer lon y ser discipulo suyo, sin sentir que naturalmente, inistradora, habia mantenido lo que nuestra comunidad anglicana habla de Los Folletos de Actualidad sc cimenta- se apache) Meshnspontics, Taeramenrn petal nea! rapec st Fsadn, Neon ‘eset apecen i fm 44 por esueriston, que es el Arca dela Salvacdn. et Orieulo rela Verdad, la Esposa de Cristo; que posee un mensaje far todos los hombres de cualquier lugar que tiene de- Pifpo asu amor y obediencia. Ea relacién con el poder il. sostenian que la Iglesia era el objeto de la promesa ecka por los prafetasjudios: ¢Mirad, levantaré mi mano eee Jos gentile y levancaré mi estandarte ante las na- ‘ones: Ios reycs y las reinas se postrarin ante ti con el outro vuelto hacia el suelo, y besardn el polvo de tis The. Ningoin Ultramontaao —as lamadoe— podea ic rs alld que esos autores en el relaro que nos han dejado Telos Proferas; y esa elevada nocién se reitera sin error posible en mil paginas de sus xcritos [, .] La conviccion Te que la Iglesia tenfa derechos que el Estado no podia vrolar —aunquc era proclivea ignorados, causando gran- es problemas entre ambos— llevé a Mr Froucle al co- tmienzo del Movimiento de Oxford a traducit las cartas de Santo Tomds Becker, ya Mr Bowden a escribir la vida de Hildebrand. Muchas miembros de la Iglesia de Inglaterra hoy en fa son feles a estas ideas que et Movimiento de Oxford proclamé en 1833 y afios sucesivos. La mayor diferencia Entre ellos y los Catélicos no reside en la existencia de ciertas prerrogativas y poderes espirituales que se atribu- yen a la Iglesia Cristiana, sino en que los poderes que no- sotros atribuimos a la Santa Sede, los atnbuyen ellos asus Obispos y Sacerdotes, ya como corporacién, ya como in- dividuos. Clato es que se trata de tna diferencia muy im- portante pero no creo que interfiera con Ia argumenta- cién que estoy desarrollando aqui. Me parece totalmente fuera de lugar acusar ala Iglesia Catélica de hoy de repue cia la Historia Antigua fundamentindose en algunas de AS ss sceuacioncs politica, y derivar de ahi identidad, cuando som precisamente las wnt Pde, Seas dela igen en ls primero gos en hoy asu comunidad, o al menos a us ent paces hombres culiose intelectuales que carn ‘es primeror siglos en modclo de conducts e Pero tengo mae decir sobre est sxasado, cuando contemplo que la Iglais Ce pss de percpuida a Poder establecido, y sus ae soaviein eh hijorsayos Ad como resid y deta sus peneguidares, goberné a sus pucblox come? (Ocumié todo esta de tan forma natural que slo molestar 0 resultar extrafio a quien Lie es descon ‘ema o sepan poca historia. Sila Iplesia es indepeniiess del Estado, en tanto que ex Ia Mensajera de Dias Entado, con aus sts fanconatos ya poblaciin, aac ‘ae #su comunién y creencias, obviamente debe am, Si shoulda pr survon No hay terms tc # nigga su orien divino o hay que humillarse ance el, en cuanto abarca el imbito de la quefe—. No podian colocar ino plano, Fa lo que concierne a los Em E 1e2 los Emperadores Romanos, ua cee etme te volvicwn Cristianos, su exalacién debe ee cambié en proporcién invers alas vejaciones soe ape Sutdo durante a época pagana. Los con horde et! sinneron que nada era demasiado india eat Y servic ala Iglesia, Los Emperadores = ante los Obispos, besaban st lls bandce Co los Prelados reuy **learrebolaron las mills y as wig © Ant, ain, religsn, reino no 42.Dios yal hombre ead su rostro adopt 46 syd suplicante; no quiso sentarse hasta que los fe rogaron que lo hiciese y bess las heridas de Pe Confesotes. Asi dio ciemplo alos suceores dew po. Obispos ete Obispos no declinaton ales honors. Las pein en os es eran ala mesa; los generale vewnioson (ethan penitencia y pedlan el perdin de sus pesados saci P ioputaban con ellos y hasta ls desteraban, Cosas nu mano al firmarla orden, y tra varios inten ter punciazon «tales propésitos. Los militares que coe Jewadon al poder soberano soliciaban su reconoci- cr voy ene se les negaba. Las cudades que hablan su Fado lara imperslsolicitaban su intervencién, yl amo doe ntalegiones se encontrabainerme ala hora de rs oe ievoceoa vor den extafio ancano cancao de viajar. cpraaron leyes en favor de la Ilsa, Los obispos olanone podian jgatles obispos, las causa crimina- ee rare eatin da chalice hres Su senrencia era definitiva, como si fuera la del Fnperadas miro, os gobeinaores das provi ‘Gtsban obligados 4 ejecutarlas, En todas partes als lit See ve let sutonzabaalevar sus qucjas a sibunal de Br Obispas, que, ademas, ve convrtieron en dbitras de innumerablespleitos entre particulars. La gente; arn tien los paganos, deseaban que as fuera. San Ambrosio ceaba enfraseado tan a menudo en asuntos de esta nats falera que no le quedaba tiempo para otras cosas. San ‘igustin y Teodor se qucjan del peso de tales suntos se- cilaes, que la gente les echaba encima de forma impor tuna. Esto no es todo; los Emperadores mostraban 8 creencia en el origen divino dela Iglesia y en su Credo ‘mediante actos que hoy en dia clificariamos de peress in A Tos judi se les prokubié hacer proseitismo entre a7 ‘ex pagunos, se abolicron los den, Ekice cnc gaa oem ae vars dong an Sus capillas ¢ incl Scoala epic SP Eetas caracteristicas "especies del Lmperio converte sensecucncia ligica © inmedise « dias de la nueva ge Experadores no hubicran honrado ala Gon istianda ss miisros, oo habian mereck ses. Tampoco cataba fuera de nando se < = los logan, Frames lo bul epscopaer tall oe re cone Puertas: La Iplesia, claro mi doeae cada eeTeeAtvat le pertenccfan en justci yee pare da earns atures que se le hablan hecho per fed Eien cree cena derecho que las reclamase, y deber dl Estado e concederas seme ade del ae Farece habe sido la hase det a plenamente Tope et82* We siguicron ae (Seta Stor sh Sedede Pedin, yo 220% Qui ddesaparicion del poder Imence en manos de uni : 10 poner de releve— 1 Pero permanccie ae Ssudctecy el derecha de | i ‘nalterables la esen lesia a mantenet ess 48 serogativas. Los cambios en Ta distribuctn incerna rrpader no afeetaron a Ix existencia y wo del poder del ‘ais. 3. La lelsia de fos Papas gamos ahora la doctrina definitotia de la reigisn sari que not separa de tds larderts dcpomina- Genes Ceishianas, por mucho que nos acerquen otros 3 eos privilegos de la Sede de Roma, que han dado pul al Follero de Me Gladstone ya las presentcs ob reacones El Papa cs el heredero histérica de los dere hos, perrogativas, privilegios y obligaciones,a Tos que soto de pasar revista en Ia Iglesia antigua. Ya que Mr Gludscone apelaa la Historia, me detendré ahora en este wanto para tratarlo no desde Ia perspectiva teoldgica sino Fesde ls histénica En lugar de craarlo de forma teol. fic. quisiera enfiencarme con ojos —por ax deciclo— Ereulares @ incluso no catélicos, a esos poderes que el Papa viene asumiendo durante los dimos mil aos. 1. El Papa es el heredero dea Jerarqula Ecuménica dal siglo 1 al set lo que yo llamaris heredero por fata de ciros, Nadie mds reclama ni ejercita derechos ni deberes {Es posible considerar a Jos Pateiareas de Moscti o de Gonstantinopla herederas de los derechos histoticos de San Ambrosio o de San Martin? Hay algin obispo Anglicano de los dleimas 300 afios que nos recuerde la imagen de San Basilio? que s ha exfumado el gran poder cclesistico que * 1a Hino nunca sre como wedi de eer dogo ‘mld er mas, pone 8 49 ejances chibiciones en dl ta sec oh en el imperio Crig vit Desens que tha arasen este extremo, No quiero ee Fc comprendan suctn emest jas cosas. Hay grandes dif a slo; mejor un Ken pg ny mantenimiento de Su pueblo: noha Gasca eee ae Rese oa 2 Si hay que buscarlo en Consundaste siry, no cabe la menor duda: ha desapre in ba habido tuna corrupesén te la Cristiandad desde sus comienzos o la Ctistandad ho, pa tas cast RASS ia Cristiandad en la historia antigua, coma concreto, se refiere a la Iglesia de Atanasio y sus sen el episcopado: y no existe otro testimo: salvo ese conjunto de fenémenos, esa com- fae ee correspondientes. No hy salida: no sc pede tomar le maeay eae aoa ee segue an ndvsbley compa como una mrad __Orenunciamosa l aenciaen la Iglesia como ins ‘cia divina o la geconocemos hoy dia en la comunidad See he onens ‘contain Jo derechos, prerogativa y debere i ——< con ef Reino que Cristo instauré. Hay que Sra ion concern a en et <1Pepe En consceuenca a een el Papa y sus atrbucic SSE rors les pee alos Prieta © eens me le de nuestra condicién de Catélicos: i nuestra condicién de catdlicos, el set 50 sianos. No hay nads de‘caprichoss oposicin a i ela Cab gr ae eccee re Gfrmontana, ni hay tampoco nada de repique de nowe- Sites pata dos propensox al asombro. Admiir les pre- | oie hes del Papa no es seria. Es que erat Que el atamento nos trate con toda la durcza que quiera no er amor en Is Iglesia sh no creyésemos en su cabera vibe Es ask: el empo ha cumplido la profecia yla pro- pss,

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