Un «Afi de San José» muy especial Desde este pasado 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada, hasta la misma solemnidad en el 2021 la Iglesia celebra el Afio de San José convocado por el Papa Francisco con motivo del 150 aniversario de su proclamacién como patrono de la Iglesia Universal. La devocién de Francisco por San José es mas que conocida, pero en este Afio Santo queda patente lo especial que llega a ser para él y de ahi que pretenda mostrar mejor su figura durante este afio jubilar. “Todos pueden encontrar en San José —el hombre que pasa desapercibido, el hombre de la presencia diaria, discreta y oculta— un intercesor, un apoyo y una guia en tiempos de dificultad. San José nos recuerda que todos los que estan aparentemente ocultos o en ‘segunda linea’ tienen un protagonismo sin igual en la historia de la salvacién. A todos ellos va dirigida una palabra de reconocimiento y de gratitud”, explicaba el Papa Francisco en la Carta Apostélica Patris Corde publicada el pasado martes. EL ARTE DE ESPERAR No conservamos ni una sola palabra de san José; no es alguien que hable o arregle las cosas a su conveniencia; sé limita a escuchar lo que el éngel le descubre de la verdad. La verdad de Dios es mas importante que lo que vive José. Y José respeta esta verdad sin agresividad, sin pensar incluso en defenderse. Tanto para Maria como para José, la anunciacién es :algo increible. Nadie es capaz *de estar a la altura de semejante verdad. Y, sin embargo, no hay en ellos escepticismo, ni un comportamiento dubitativo; ningun distanciamiento, nada parecido al ya veremos. Unicamente fe y abandono. EY nosotros? No podremos ser felices mientras no derrumbemos las muralias que rodean nuestro yo, mientras no nos abramos al misterio de los otros, el otro y el Otro. Tampoco podremos ser felices si no llegamos a contemplar en profundidad los acontecimientos pasados y presentes, de nuestra existencia. Dios esta presente en ella: no hay circunstancia que no haya sido fruto de su plan, o con la que no haya querido decirnos alguna cosa. ‘Aun estamos a tiempo de descubrirla. Es imposible vivir sin confianza. La Unica via hacia la felicidad es la de ser un hombre, una mujer, de adviento: alguien que escucha mas que habla, alguien que sabe, sobre todo, que para Dios nada es imposible. Como esperamos tan poco, Dios s6lo nos puede dar poco: es imposible alimentar al que no tiene hambre. Nuestros contemporéneos no se limitan a desear conseguir la felicidad por si mismos, la quieren en plenitud y de inmediato. Nuestra época es impaciente: esperar os algo imposible. El conocido eslogan Liéveselo ahora y pague mafiana es la traduccién popular y comercial de esta disposicién de la mente. Esperar ayuda a madurar. Si algo se manifiesta a lo largo de toda la Biblia, es el arte de esperar. No sera nuestra falta de alegria, de esperanza y de fervor el mayor obstaculo en la evangelizacion? ENSENANZAS DE SAN JOSE Enséfianos José: Cémo se es “no protagonista, cémose avanza sin pisotear, cémo se colabora sin imponerse, cémo se ama sin redamar. Dinos José: Cémo se vive siendo "ntimero dos", cémo se hacen cosas fenomenales desde un segundo puesto, cémo se sirve sin mirar a quién. , Explicanos José: Cémo se es grande sin exhibirse, cémo se lucha sin aplausos, cémo se avanza sin publicidad, cémo se persevera y se muere sin esperar un homenaje, cémo se alcanza la gloria desde el silencio. rary difundir cardenal Godfried Is Pr«Tenemos que | defender la religiosidad popular de quienes quieren secularizarla» El jesuita Daniel Cuesta destaca la capacidad que tienen las devociones populares de frenar la | secularizacién en Espafia, en su libro Luces y sombras de la religiosidad popular «La religiosidad popular no son solo las procesiones ni la Semana Santa, sino mucho més. Es dificil de definir, porque comprende también la imagen de la Virgen que tiene una persona en casa, o la estampa en la mesilla de noche de un hospital, hasta cualquier romerfa. Es un fendmeno colectivo y también individual, que abarca muchisimo», afirma Daniel Cuesta, autor del libro Luces y sombras de la religiosidad popular, que se presenta este domingo en Roma. Cuesta, jesuita y cofrade también de la Feligresia de San Andrés, de Segovia, ya ahondé en su anterior libro La procesién va por dentro en el valor de la Semana Santa como expresion artistica y espiritual. Ahora ofrece un estudio de Ia religiosidad popular desde una perspectiva pastoral, basada en el magisterio de los iltimos Papas y del Concilio, «para mostrar sus oportunidades de una manera realistay. En esta perspectiva, sefiala que las devociones populares «suponen de alguna manera un freno ala secularizacién que vivimos en Espafia, Podri ser un modo més o menos perfecto, pero la realidad es que hay mucha gente que se encuentra con Dios y con la Iglesia a través de ella», afirma. En este sentido, es «un puente entre la fe y la cultura que detiene ese proceso de secularizacién que tiende a contaminarlo todo y a relegar la fe a un plano intimo exclusivamentey. En este contexto, la teligiosidad popular «sitda la fe en Ia plaza piblica y muchos viven en este escenario su fe, eso es innegable». Para el autor, este fendmeno «nos desconcierta como Iglesia porque es muy potente y muy rico», pero tiene claro que con él «Dios nos quiere decir algo y nosotros tenemos que saber emo acompafiarlo y vivirloy A la hora de mencionar sus sombras lamenta «que muchos se fijan més en lo negativo que en lo positivo, aunque es indudable que existen ciertos riesgos. Entre ellos, el principal es lo que Pablo VI llamaba “formas culturales sin adhesin a la fe”, pero hay ms». Asi, cita también la superficialidad, el individualismo 0 el affin de protagonismo, «pero el mas mordiente es el proceso de secularizacién que quiere secar nuestra cultura religiosay Cuesta pone como ejemplo a muchos museos en los que las pinturas se exponen como una obra artistica més, y donde «se le roba el alma religiosa a muchas piezas». Del mismo modo, en la religiosidad popular «hay un proceso que busca presentarla como algo meramente antropologico, turistico y social» Para este jesuita, la Iglesia debe defender su esencia «porque muchos viven a Dios desde ahi». Por eso, «no podemos menospreciarla ni tratarla como un fendmeno simplemente cultural. Tenemos que defenderla de quienes quieren secularizarla, y cuidarla desde dentro para no jugar con la fe de muchas personas». El libro sera presentado este domingo ~a puerta cerrada, debido a las restricciones por la pandemia—en la Iglesia Nacional Espafiola de Santiago y Montserrat en Roma. La presentacién consistira en un coloquio entre el cardenal Carlos Amigo, autor del prélogo, y el autor, moderado por el rector de la Iglesia, José Jaime Brosel. leer, releer, orar y difundir B a