Siguiendo con la consigna y, luego de las devoluciones dadas en el
correspondiente grupo podemos decir que una niña de 5 años en su primer almuerzo en un restaurante podría pedir a gritos la comida y, a su vez sorprenderse al ver que hay pagar por la comida se debe a la razón teórica de que los esquemas de acción de la niña no están lo suficientemente coordinados para saber que uno debe pagar en un restaurante, es decir que, esta información no está incorporada a sus esquemas de acción. Según Wolman los esquemas de acción se modifican, lo crucial de ello es el proceso de coordinación por asimilación recíproca entre los esquemas de acción. La coordinación de los esquemas de acción va permitiendo progresivamente una “solidificación del mundo”, por lo tanto, es producto de la puesta en relación que el sujeto hace de sus esquemas de acción y no meramente de un programa prefijado. Al no ser este conocimiento parte de sus esquemas, surge una ruptura en la adaptación de la niña, dando lugar al surgimiento de una nueva interacción de la niña con el objeto y, del mismo modo, se produce un desequilibrio en sus esquemas. Cabe decir que, para Piaget, el aprendizaje está dado por la interacción entre el sujeto y el objeto (acción). En esta interacción entre sujeto y el objeto, entra en juego dos mecanismos que se complementan: la asimilación y la acomodación. La primera (asimilación), es el proceso por el cual el sujeto interpreta la información u objeto que proviene del medio mediante sus esquemas o estructuras conceptuales disponibles. El segundo mecanismo (acomodación), es un proceso complementario en donde el objeto modifica los esquemas del sujeto. Es decir que, explica la tendencia de los esquemas de asimilación de adecuarse (o no) a la realidad. Las peculiaridades del objeto influyen sobre el sujeto. Por ende, el objeto "impone" un tipo de acción diferente. Los esquemas de acción, en este caso, son los conocimientos que tiene el sujeto al interactuar con el objeto. Los esquemas de acción se van modificando y conformando estructuras que se superan unos a otros. Por lo tanto, volviendo al ejemplo de la niña, el haber podido observar aquello de pedir la comida y pagar por ella, se le permitirá realizar el proceso de asimilación y, también, se le permitirá incorporar la nueva información a los esquemas o estructuras conceptuales de la niña, logrando así la acomodación. Si bien, es importante decir que cada vez que es asimilada una nueva información del exterior se producen perturbaciones que desequilibran la estructura del sujeto; también lo es, decir que con la acomodación se le permite volver al estado de equilibrio, produciendo la adaptación. En síntesis, al tener la niña ya incorporado a sus esquemas el pedir la comida y también pagar cuando se va a un restaurante, no se va a sorprender por esto ya que ya va a estar en el proceso de acomodación.