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Cen ie pp A ow ens ce J Sheu es un sello propiedad de edhasa Oficinas en Barcelona: Oficinas en Madrid: Avda. Diagonal, 519-521 Castellé 24, 1° dcha. 08029 Barcelona 28001 Madrid Tel. 93 494 97 20 Tel. 91319 58 57 E-mail: info@edhasa.es E-mail: castalia@castalia.es Oficinas en Buenos Aires (Argentina): Avda. Cérdoba 744, 20, unidad 6 C1054AAT Capital Federal Tel. (11) 43 933 432 E-mail: info@edhasa.com.ar Primera edicién © de la edicién: Raquel Garcia—Pascual, 2011 © de los textos: El local de Bernardeta A., Lourdes Ortiz, 1994 A vueltas con los clasicos, Carmen Resino, 2008 Los ojos de la noche, Paloma Pedrero, 1998 Apres mioi, le déluge, Lluisa Cunillé, 2007 Los nifios perdidos, Laila Ripoll, 2005 © de la presente edicién: Edhasa (Castalia), 2011 www.edhasa.com Tlust. de cubierta: Mujer alambrada, de Juanjo Pascual ‘ Universitats- ISBN: 978-84-9740-416-7 bibliothek Depésito Legal: M-31.410-201 Rostock Impreso en Top Printer Impreso en Espafia Queda rigurosamente prohibida, sin la autorizacion escrita de los titulares del Copyright, bajo la sanci6n establecida en las leyes, la reproduccién parcial o total de esta obra por cual- quier medio o procedimiento, comprendidos la reprografia y el tratamiento informatico, y la distribucién de ejemplares de ella mediante alquiler 0 préstamo publico. Dirijase a CEDRO (Centro Espafiol de Derechos Reprograficos, www.cedro.org) si nece- sita fotocopiar o escanear algun fragmento de esta obra. V VIZ0YYN¥38 Id 1VD0173 mn ~-eum ‘[eUOIS -9joid euang eun erg “Ieue3ua eqefep as ou A euanb anb oJ erqes ‘equnsip Anur esa ery eat] ® sanbo} aur ou ‘eq & sanbo) ou o1ag (‘piuod uod) geqreyedsor A OUIa}9 JOUIe sour ODUTD soyso us eA opeant uey 29 soquENd ‘opeSjoo sey 33 soyueNd aq? ‘seiapuaide eounu anb zx sara NY ‘soreled ap eusy ezoqeo ey souan aonb ef sala OJ, ‘seuru ap sesoc ‘seurfdureg --VLdCUVNWIg (‘souvus svj U0) viv2 vj vdvy ag) “A ‘etqes Oo] ourwoy [> A ‘serqes of ma "mM A ‘epaszeaay] & eqrinbe ap epreses e eq ‘odn Ja ‘{9 anbrod ‘aasons eruay X*"UgIG -wre) efja anbiod ‘erpuazua our ery ‘opto aonb seIpuay song gpepraa? ‘opo wsnB a3 ON] --VITSW jset97U0) seSrp on]! --VLECUVNUag, “eye anb -iod ‘erpuaqua our Is e1V] “easrxa ou anb 3190p azainb ou opnuas sredey of eounu ang -vVITAW “-eIOYe oes sou anb of wos em) -"sn5 ““uN OUWI0D ‘ezIoNy EUN OUIOD sq ‘oprdoo vsa anb ‘arab a3 ody un and -vITaW é9nO? ~LLavW. *URIOU 9 SeSOD sesy ~"VITAW, “ered vstoroheut soso ex uapol ay olag “eK -"VOOVI “SETUI SESOD UOS "VITA “-opunur [2P Opegos ser ofr Ja aystazs a1 anb mm9ap ® sta OUI OU seIMTe seyso e :a3adny> Tu ‘o1Dq -eq soureaal] ou anb ‘XQ ‘sourezadura ex -"VaoVW “4 Jofnur ns e zelap & eq] ‘evonb our onb as og ‘euonb ay ‘opuarura oue un eqeaory] (‘vppzuodieayy) -"vITaW ° DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL saca una cartera y le ensefia unos papeles y dice que lo primero es hacerle firmar a dofia Fina la renuncia y que si no se la amenaza con que se la encierra por incapacitada o algo asi. Y a dofia Bernardeta yo veia que se le iba un color y le venia otro. Pero, en vez de ponerle en su sitio, dijo que tenia que pensar- lo y empez6 a gritarle al Romano, y el Romano callado, y dijo que no queria saber nada, que delegaba en su secretario y nuevo socio, y que no tenia nada més que afiadir, y dofia Bernardeta, que casi le da un soponcio, dijo que iba pensarlo, y entonces... Macpa.- (Reflexiona.) Asi que va a haber cambios... PoNCcINA.- (Bajando la voz.) Si. Quieren poner en la calle a la sefiorita Gus, y... Macpa.- ¢Hablaron de mi? Poncina.- No, qué va. De usted no dijeron nada. Yo creo que a usted la temen.Y no debe achan- tarse, mi nifia, que vienen tiempos malos. Por eso he querido avisarle, que yo le estoy muy agradecida por cémo traté usted a Yolanda, cuando se puso enferma. ;Sabe usted? Cada vez que pienso en la Adelita, y en lo que hizo, me acuerdo de mi Yolanda. (MAGDA se pone en pie.) Macpa.- Gracias, Poncina, gracias. :Lo sabe al- guien mAs? PONCINA.- Yo creo que todavia no. Las dos nuevas estan en la tercera planta. Ya sabe usted, no creo que bajen hasta dentro de una o dos se- N DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL cho protestar al principio y en cuanto... aires de reina, que no hay quien la aguante, y todo porque goza de los favores del Romano, ella que tanto... Macpa.- Pues que se vaya preparando para el recambio, est4 idiota si piensa que... (Entra MaRTI. Algo ha cambiado desde el primer acto. Segura y ufana, con aires de marquesa.) MarTL.- :Quién piensa aqui? Macpa.- Aqui pensamos todas 0 ninguna. Habla- mos de los cambios. MarvtI.- ¢Qué cambios? Macpa.- Dos nenitas nuevas y... un capataz. El jefe busca refuerzos. Le has dejado agotado en sdlo tres dias. (Se rie.) MarTL- :Qué es eso de un capataz? MacpA.- Un Romanito para llevar la batuta. Ya puedes empezar a dirigir tus carantofias hacia otro lado. {Con lo que te habjas esforzado! Lo siento por ti. Gus.- Se habla de que hay alguna que va a salir por piernas. Sobramos. Mercancia nueva y barata. MartT1.- Es normal que el local se renueve. Yo en eso estoy con el Romano. Gus.- Qué fuerte te ha dado, ;eh? Pero haces mal en besarle la mano, no creo que se acuerde cuando tenga que darte la patada. Mart1.- Hablemos claro. Si alguien sobra en esta casa, no soy yo. Cuando falta el trabajo, con- viene... ya me entiendes. DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL z te desplazé y nunca la tragaste, no te hagas ahora la... Mart1.- Vieja de mierda. MELIA.- Basta. Parece mentira que... Como sigais disparatando llamo a Bernardeta. MartTL.- Otra que tal. A mi Bernardeta me la... (Entra BERNARDETA.) BERNARDETA.- ;Qué cofio pasa aqui? Es la hora de prepararos. El local abre a las nueve, como siempre. (MAGDA, que ha terminado de recoger sus bartulos de las ufias, con mucha tranquilidad.) Macpa.- Creia que ibamos a celebrar el bautismo de las recién llegadas. ;Por qué no nos has contado las novedades? BERNARDETA.- Poco hay que contar. Macpa.- {Ni siquiera que te han puesto un inter- mediario? ;Quién manda ahora aqui? Nos gustaria saberlo. BERNARDETA.- jQuién iba a mandar! Esta casa es mi casa y todo sigue igual. A esa idiota de Poncina se le va demasiado la lengua... Macpa.- Cuéntanos del Romanito. Martl.- Si, eso, dinos qué pasa con el capataz. Dicen estas dos zorras que hay un tipo nue- vo que... BERNARDETA.- Es un secretario. Un secretario del Romano. Sdlo eso. V VISGYYNYIE 3d 1VDO1 13 + ‘eX ojefag ‘snd ‘esorazau seisq -“VITI ‘ap aoqdurgs sas oxatnb ru ‘reps apanb anb ‘Ise OUIOD Ise AOA OU OU OX" *seSOD SET S9IUE anb oxagaid ‘nbe op se8zey onb o8ua) our Is oxad ‘*-sorons soyetd soy weary as aonb eysn3 a) ooodurey y y ceuonur eqmbsour ‘ou ‘yy? -"snD *sOJANUL SO] & 9AOUIAI BUATAUOD ON ‘zed ua eysog e] soutafap ‘zaa Eun ap e90q RL aaeyeD ‘seotp aonb of worq eisa ou ‘sng -"vITaWy *sugmb axes opeponb eAey ou anb “aonb ap seyzey soureysa eA anb ‘odey as opo onb op seqey soureysa eh and -"sn5 g10;9adsur un ap osa sa 9nd? -"VLIGUVNUIG ‘zoyoadsun un suaa onb eupuay -"snp “sQUOTIEITGeY SEISINA & SORBIE] “seIP SO] SOPO} OUIOD ‘aAoNU seT B aIge as [RIOT [] eK eyseg gesed so ous anb o19g? --VLECUVNUIg “op ely ~LLIvW ‘eanrugep zed eun apep ap 1 aaseBreoua 29 eq ‘zed ua sourerefop ey aonb ‘ereysn3 a3 osq -"sn5 --eIoy euanqg uq zed ua enjpy ey] & zefep stgiand? -LavWw ‘“Jopapuaiua uang y “epeN -"VaoVW git2ap saramnb nb? ‘osg --viTayy éitsap sazainb 9nd? --VLaCUVNUI_ euopiad 0] 93 ON “eI@PY oP OT ap sgndsap opos argos ‘Y Uo eyUOD ou kA OURUIOY [J “epres eded ap Staso UpTquie) DT "Seaq> Of 23 EUISTU DY IN] “WdOVW ‘ok Aos epueur anb ey inby-seur 2] 2] 19 Out0d ‘oyTUeUIOY J? sousuI OYSNUT Tu ‘ourewoy [a epuew ou mby -vladuvNuag ~~ A uapio Jauod & suata anb onejaizes up) -"VGOVI TUAL % DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA AC’ Macpa.- Si. Déjalo. Cuando Ilegue el momento... Cada cosa a su tiempo. BERNARDETA.- {Qué quieres decir 4? Aqui no se habla con medias palabras. No me esta gus- tando nada, pero que nada, este rollo. He dicho que os larguéis a vuestros cuartos. Tenéis que prepararos. MarTI.- Yo ya estoy preparada, carifio. Papa Roma- no me espera. Conmigo tampoco cuentes esta noche. BERNARDETA.- jY un cuerno, nena! Papa Romano no te necesita esta noche. Asi que preparate como todas las demas. MartI.- ¢Cémo que no me necesita? Macpa.- (Riéndose.) El reemplazo, guapa. Gus.- Se te terminé el menguado reinado. Esta vez tendras que acabar con las dos. Martl.- (Amenazandola.) Te voy a... MetiA.- Es muy feo lo que insintias, Gus. No es que Marti sea un Angel, pero no est4 bien lo que dices... Somos compafieras. Gus.- Cuando Ilega el momento de la verdad, nena, las compaiieras... BERNARDETA.- Pues compafieras 0 no, esto es un ne- gocio, asi que hacedme el favor de... No os con- viene nada este numerito. Sois tontas si os po- néis en contra mia. Le estdis dando la razon al... Macpa.- Al Romanito. ;Ves cémo a ti también te acojona? Estas en el mismo saco que noso- tras, asi que deja los modales y dnete el gru- po. Si queremos salvar el local y salvarnos todas, tenemos que hacer pifia. TA, la prime- ra. Yo al menos prefiero lo malo conocido a WY VLAGYYN443a 3G 1VD01 13 + eypurd ayuauratqeqaid anb | anb A ‘otsuoa sepo} auan set ou onb A oanesosap oyUsUIa{9 un ue opnzaauo. ey as eUepepy ““onb ‘eun ap orerd jo 10d seqeden3 sop opesay] uey ang) ‘soulepmnosep sou OUIOD ‘al[eD ET Ua Sepod reysa sourapod ang ‘sorques Joqey & A aNd -"SND gmap optionb uey 9nd? -"vITAW (vita A LDV ‘sn 4opand) “UgIqUiD} aps VADVIN “éiD as A vyjana v] vp ag) “ela as eA o1od ‘epeu ‘e0ye 10g —VLIGUVNUI 20389 Opor uod Jaa anb ouan gnb omuewoy asa A? -VITaW “SEIOSOA op eun opts ay A Aos ‘ogeo ye A uy py “Uatq opeyen ay so ardurats Of ‘gsreszedaid anb key A ““soaanu soduray usuat, “ered $09 -aiorpr sey pefop A sequaie peaso ‘vanb Isy ‘sea -1e3 opuryduray Aowso ardurors onb ‘rw & A sey -OSOA Y"sepor b seay souasigUOd uapand sesor se] uozer auay Z9A eun Jod epseyy -"VLICUVNYA *“TENUISUT & PATINA uamngye outros o1eg ‘zed ua ysourgfap ‘Ig — LAVIN ‘onsanu Of ze souredea A ‘souzjo opand ou eA onb ‘zed ua zippy ey & soutofo ‘Terepoe onb oye exs¢qny anb sa Is ‘sesoo se] rereppe ered soureyseq sou senoson ‘ody unuru ap soz0x9adsur tu ‘sod sourazanb ou nby-zaa end vun op Jeyouty> ap efap ‘sng ‘m9 Aodureasa anb e sezadsa anb eiqey :uozer auon wepreuseg ‘soureredaid @ sOUeA ‘seUTU ‘eBUa, ‘19290U09 IJod oseJau OT © 4 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL y corta a partir de ahora es ese Romanito o como se Ilame... :Te parece poco? MELIA.~ Eso no es justo. Esta casa sin ella no seria la misma. Es una madama.Tiene lo suyo, pero... Manrt1.- Estan locos si creen que yo voy a quedar- me para seguir... Gus.- :Decepcionada? Adelita no era nada, guapa. Con ella o sin ella, el régimen no cambia. Siempre habr4 otra mas joven. Tenias que haberlo aprendido. Marq1.- Yo no maté a Adelita. Gus.- Pero te alegraste de que se muriera. Pensabas que todo te iba a venir rodado. Privilegios... comisiones... tardes y noches libres... y... el reinado te duré cuatro dias. MELIA.- ;Sabes lo que pienso? Gus.- Creia que ti nunca pensabas. MELIA.- Pues si, claro que pienso... y mas de lo que ta puedes creer. Estamos todas hartas, Gus, yo también, de tener que aguantarte, de tener que... la experiencia, la pufietera experiencia. Te has pasado cinco afios, desde que llegué a esta maldita casa, dandome lecciones: debes hacer esto, no debes hacer esto, esto se hace asi, si quieres gustar tienes que... A todas las nuevas nos hacias la vida imposible... y a la pobre Adelita también... ;Sabes cémo te Ila- maba? Blas... te llamaba Blas. En cuanto te dabas la vuelta se reia y decia: «Lo dijo Blas... Punto redondo». Tampoco ella te aguantaba. Yo no creo que tt tengas que marcharte, que ninguna tengamos que marcharnos, pero deja ya de torturar a las demas con tu maldita ex- V VidGYYNY99 3d 1VD01 13 + anb oj saqes? "ap osed ua ‘Ise aoey as :ofesu0d oyonur ‘erqey eysnut ‘Is ose ‘oSant A spepzsa? ‘opuarpuaide viany anb ried ejapy & eures ¥] Ud aISNAUI OT 9g “EpeIIOD eIED Ef ap eZUaNS ~IOAUIS [9 ‘oO Jonbe o ‘oSany exed omnp seu o] od sezadura sofour sa ‘seisap ‘opuctey seAea 9) onb austauo7) ‘ZA eioumtd Ee] peptsox -9ua8 nj epo? u0d aysesed aur aonb ‘osoranbse ofeta jonbe ourod ‘opuempeur --n ered ets -0989 e[ “opustpuaide ezany aonb exzed ajuour -PSOULIED SeIPId soy our ‘eyadxe ey] ‘na anbiod aedny> aonb opmay ay aur anb sayqeiasrut soyuer ap vy] ‘souzesed esatpnd anb of opayq un eqeqodun aj ‘sepeforu02 sepo) & sourauay seponb ny edend ‘ony “zepne ap soasap ‘pra -unjoa tuang gensaeur ef uod opof a1 ON? —"VITaW ““oploareul ustq o8ua) oy au A OueT] Op -UNUI [2 ¥1S9 SOptdapeIZesap ap ‘ousng *onb Joges ered aang ‘oye exed oats ‘said of 23 ou ty onbune ‘eruarsodxe ey “aaens seur long esod ef aonb saoey uo A sepnde ua eqeziojso as onb eun so eU0} e] A “Inbe stoysedoy] NeW A eyyapy ey A m opuens erqes of of outros ualq ue} sages oj eA eIOYY ‘eUau ‘oINp so o1sq ‘oueur eun seyso Jod eralasap as onb ‘eun sa e]U0] eT ‘aepnde opeajuT ay aiduratg gf ap 3199p anb sauen ouos and? gapof a3 ON? joaony un orduroz eounu onb eT! 3°"A? -"snD “vk reyqey & 1ez -adua sourenpod seperyeo soureysa aonb sey erp ungje anbiod ‘zed ua sepoy e souelap ‘'*-zed ua wie] & efop X% ‘sepoy oqes sey as onb enp -eur eynd ap sour soysnur sm) uo9 *eruatied OWAMATURGAS ESPAROLAS UM CA HRCENA ACTUAL 8 te digo? Que yo me callo, me he callado mu- cho tiempo, pero ya se ha acabado. Conmigo se te ha acabado el rollo, y no me saques de mis casillas un poco mas porque si hay que hablar, hablamos todas. Mart1.- jBien por la mosquita muerta! Tiene raz6n, sabes? Estamos de experiencia hasta el mofio... Y Adelita la primera, lo que pasa es que Adelita, que se las daba de lista, era bas- tante tonta y... tragaba y tragaba. Contigo y con todos los demas. Cualquiera podia haber sido. Todos menos yo.Y tt la primera. Gus.- Has perdido el juicio. Meta.- No, no ha perdido el juicio. Ni yo tampo- co. 2Qué pasa con las setecientas mil, eh? ;O crees que no lo sabiamos? Gus.- ;De qué me est4s hablando? Metta.- Adelita me lo contaba todo. Me contd como la habias presionado para que te dejara el dinero... amenazandola con contarle al Romano lo de Bernardeta y... como la prome- tiste que se lo devolverias... pero de eso hacia ya siete meses y... ni una peseta... ni una sola peseta. A que a ti también te ha venido de perlas que se saliera por la tangente? Porque ella estaba decidida a contarlo... iba a hablar con Bernardeta para que ella te fuera descon- tando de cada trabajito hasta que la deuda... Gus.- Todo eso te lo estas inventando, es la mentira mis gorda que he ojdo en... Martt.- Ajaja. De lo que una se entera...Y luego querias cargarme a mi el mochuelo... No es- taba mal la jugada... De todo esto tendra que N 5 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL Gus.- Si. Pero yo queria a Adelita. A mi manera, pero la queria. Ella era generosa. Yo no lo hice, ni me alegré cuando pasé. Marql.- Y aunque ti no me creas, yo tampoco. Cuando una hace lo que ella ha hecho es como si todas... (Gus se levanta, pasa la mano por el hombro de Manrtl y ambas salen de la habitacién.) FIN DEL SEGUNDO ACTO VW VL3GY3WNU439 3d 1VD01 13 wn -~A& saypou seysa op bun eraajoa onb aorp ‘ropesuaa Josue fa“ eUreT] EF] OUIOS paysn ages ‘Opto |e sesod eUEND 2] A souoroues equed ay aonb ~-eqapy e| aoarede ey] as anb ao1q ‘oper ep our eysey tur y (‘z0a pj vig) ““sewiseyuey oa ‘oqUouTeUNTN “aonb Sesod adIp seveA Y “EULY eUOP a1q0g --VNIONOd ‘rofewr uex -epmd ey Wye A eurzayua eso Olag ‘Ig --VIACUVNWAg “sour soyonut UO “eTJa UIs sUIIOODeY & AOA ON “BABA as anb BsnB aul OU dN ZO8Ip eT onb oj aqeg? -‘VNIONOg -"JauI0D ueIeYy Pl Ty “eye z0d & uerpusa eueueyy --vVLacuvNwag ““pagsn Zaa [e,opand ou ef OX “JoUIOD e Batu as seIp soun aovy ap -soq gefata e] uos Aoy sourssey an)? ‘eueD SEU UOD OfasIeUIO] eogep anbuny ‘‘ouep aoery ou esonbryyey ve] eprosua anb oF --VNIONOg “aquauTeUINTN eyonysed eqeisa onb ‘opueurur sa as esod eT jIse soy -ou seyonyy! ‘eplour Aoyso “"yeg -"VLECUVNUIg (snquo0 v vzuanuon A aigv vy ‘saopnen ap vpiln pun waar] ‘soywdvz soy vynb as A vyuais ag “VIACRWN WAG ou ‘said sop so] opuvdjoo uandis oysaj Ja ug] ‘sosantuay soy vyIva A spsaus sv} ap Sosva aBovak VNIDNOg ‘seppasao sauowppiqny soy ua sang Avpy ‘auan{ pasnu vun A sopiu 4 sys uako ag ‘aysou vy sod sq av5iy owsi pq) o190I2], pV 5 a DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL BERNARDETA.- Chaladuras de anciana. Por eso es preferible que se la leven y la cuiden... este no es lugar. PoncINa.- Ella afirma que es su casa, que de aqui no va a sacarla nadie... BERNARDETA.- Ella ya no sabe lo que le convie- ne... PONCINA.- Debié de ser muy guapa, jverdad?... Usted la conocié cuando todavia... BERNARDETA.- Si... La conoci, claro que la cono- ci... estupendamente... No era guapa, peto... tenia sefiorio, clase, era... Poncina.- {Una Madama de campeonato!... mejo- rando lo presente. Estaba segura... no hay mas que verla cémo habla, que parece un libro, y... Me hubiera gustado conocerla en sus buenos tiempos... esa historia del conde... BERNARDETA.~ Pamplinas. El conde era un viejo chocho. Como ella, mas o menos... Y ni siquiera sé si era conde. PONCINA.- 3No podria quedarse aqui? Yo la cuida- tia. Ella no da casi lata... no es humano tener- la encerrada. Yo creo que no come porque presiente... BERNARDETA.- Callate de una vez.Ya est bien de que metas las narices en todo. ;Quién eres ti para...? PONCINA.- Perdone la sefiora, yo... BERNARDETA.- En vez de meterte donde no te Ila- man, deberias contarme qué pasa con las chi- cas, qué se cuece. PONCINA.- Mis ojos no ven y mis oidos no oyen.Y no sé nada... BERNARDETA.- TH sabes siempre mas de lo que de- uw a DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL BERNARDETA.- ;Qué pasa con Delia? PONCINA.- Nada. No pasa nada, Es muy chica, muy dulce, y no acaba de encontrarse, eso. Sdlo eso. BERNARDETA.- Ya se encontrara. Poncina.- Deberian darle un tiempo... Bueno, no es que yo quiera meterme..., ustedes sabran mis. La otra es de otra pasta, mas... BERNARDETA.- ;Correosa? Son gemelas. PONCINA.-Y parecidas como dos gotas de agua. BERNARDETA.- Tiempo al tiempo. Ya se iran ha- ciendo. PONcINA.- Ya. Madama tiene experiencia. Pero yo por si acaso no estiraria demasiado... BERNARDETA.- Vale. jVaya nochecita! Muchas como esta y... PONCINA.- Se la ve a usted contenta. BERNARDETA,- ZY por qué no iba a estarlo? Nadie es imprescindible, pero ellos saben que sin mi esto no marcha. Me lo he ganado a pulso. PoNcINA.- Le doy entonces la cena a dofia Fina? BERNARDETA.- Si quiere comer, que coma, y si no... Mafiana sera otro dia. Yo también voy a acostarme. (Se levanta y salen cada una por su lado. Se oyen voces, rumores, alguna luz que se enciende, pasos por la escalera. Puertas que se cierran, sombras que cruzan y desaparecen. La vida del burdel en sordi- na. La miisica se va haciendo mds suave y amanece. Junto a los pies de ADELITA hay ahora otros dos pies. Entra PONCINA y mira hacia lo alto.) PoncINA.- jV4lgame el cielo! ... Ay... ay..., que ya me lo veia yo venir... que dofia Fina te- 0 5 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL BERNARDETA.~ Deja la murga. ;Quién eres ta para decir cuando es pronto o tarde? Esa nifia era una enferma, demasiado fragil, demasiado delicada. Ha sido una mala suerte. Una racha. Eso es todo. No debiéd enterarse de lo de Lita. Era muy impresionable. Ya se lo adverti al imbécil ese: que debiamos ir despacio, que apenas acababa de dejar la casa de sus padres, que ella estaba hecha de otra pasta... pero él erre que erre, que si la productividad, que si no podiamos alimentar dos bocas y tenerlas de pensién, como si esto fuera una residencia, que cuanto antes mejor, que asi se iban haciendo. :Qué cofio sabré él del oficio? Y el otro dale que dale, probar y catar...Y en las nubes, estirar la mano a fin de mes y... mien- tras, el gilipuertas ese metiendo baza donde nadie le ha llamado... Poncina.- jValgame el cielo! |Valgame el cielo...! (Llaman a la puerta. Fuertes golpes. Todas se que- dan quietas. Vuelven a llamar.) Poncina.- (Reaccionando.) Son los loqueros. Dije- ron que vendrian a las ocho... Vienen a por Madama Fina... | Valgame Dios! BERNARDETA.- Callate de una vez y vete a abrir. Aqui no ha pasado nada. (A MELIA.) Trae ti a Fina. Contigo no recela. MELtA.- A mi no me da la gana. Yo no traigo a Fina ni a nadie. Yo de aqui no me muevo. BERNARDETA.- Eso es. Ninguna va a ayudarme, eno? 3Creéis que a mi me divierte lo que est4 ¥ VLIOYYNY3G 3G 1VD01 13 un ‘~ofeyfad ns usa aurz9A 0A ezatsinb ON “epanb anb ey ered oad sa ised ‘~anb oaeyd un sa ON ‘oureT] as OUIOD O apy uo09 o9uID © onend A eTaq] UoD sesqeted sop saul 938d Ua OpEZnId giqey anb oaI9 O4 “ep -PAIOSAI PLDI “SOUIRIIOUOD sey EUNSUTNY —-VITAW (‘oy2a} Jv vjouas & au ag) -uayoosorde ay anb ‘seaanu ouan rye sond ‘sea -onu ueysnd a] “seTUT se] UOD EINYSIP [9 IN ‘Ou -PUIOY [OP SUID SET 19A DJIOIAIP JUL OU K'O9 -zouod er] seuade oA ‘seurapy ‘eiopreuiog eSIp Of as and ‘osany asa uod orad ono Y ~LLUVW ““setagep ‘nae ‘NL seueT OUEUIOY ]2 Woo asopuezjoaar g1s9 onb odend sa on ‘eyURULIOY ve] & OPMMUsueN onb eget] --VGoVW “nbe soured -d]] Opuens oA OWOd oO mM OUIOD BHD UR], -LLIVN ‘eld euN eIg "seIadsIA sua ON ~VITA -eyuajuos eupuod as eLsues e3S9 CIITA Ig "eIsa OU eA SM) Olag “seZII BIqes SND —1LUV gaezal ages using? --vITaW (pusand vy ua saz0a uako ag ug vp va YNIONOg 4 VLSGUVNWag 22S) “ZaA RUN op saqfe> 33 aNd ‘e913 souan ou Aoy anb o8ip ay, LUV (aya ag) “eteJouny eun OpryuOU! Joqey sepod japinq un ap zaA ug ‘o1ID08au ap opesoatnba sey 93 O1ag “sepoi ap udtq [J -VAOVI “rod sa aavy as inbe anb o] opoy, ‘uatq ns iod sq -eury od e 221 ox Zopuesed 6 ° DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL Macpa.- Hay que hacer algo. MarT1.- ;Qué cofio vamos a hacer? Macpa.- Una es un trago, pero dos... MELIA.- No se pueden apretar tanto las tuercas... Macpa.-Ya. Es facil decirlo ahora. Pero cuando lle- go el momento nadie... MEtiA.- ;Qué momento? El momento es ahora. éQuién iba a pensar que...? Macpa.- No: el momento fue cuando largaron a Gus. ;Quién movid un dedo entonces? ;O quién protesté cuando se aplicaron las nuevas normas? Cinco trabajitos por noche. Con descuentos para la que no llegara... Marti.- Tampoco ti dijiste nada entonces, no ven- gas ahora con... Macpa.- No. Yo tampoco dije nada. Pero ahora me arrepiento, MELIA.- Te achantaste, como nos achantamos todas, porque... Mart1- Porque no nos quedaba otro remedio, guapas, gpara qué nos vamos a engahar? Lo tomas © lo dejas. Estaba claro. Macpa.- Si. Clarito como el agua del rio. Pero... (Vielve PONCINA.) Poncina.- jValgame el cielo! Estos tipos no tienen paciencia. Que si tienen mal aparcada la am- bulancia, que si... ;Y la sefiora? Macpa.- Haciendo de Pilatos. A lo mejor necesita que la ayudes. Fina es la Gnica que no es facil de manejar. Sube a ver si... Vv VISGYVN43d JG IVWDO1 149 U ‘oO “ugUTY “UgTSIpusq ns Uep sou PINE e] apsap soyjasue sop soy A‘eareseo elota ey] --vVISVW ‘[pSug [ep ex0Y ke] opeSaq] ey anb ‘zaa eun ap peuoroear ‘sermon ‘sepepsTy ‘sodiand soy e opueiedss uesonye as sefed sey A uapie anb urjso sarefed soy sopoy “ures stazeye9 ou sequtd seqysa uoo A epautol ef ezuaTt02 anb ‘estid ap soauoduros ‘sezour ‘eSua, “wound RT ‘OA ‘Tesed & UA as SeTZIUOP sey sepoy A sn -a8ur fap ez0y eT so anbiod ‘o81n ap odures Ja aigos ueayojoaer anb sosuefq sowyasue sop **° (04a jv vjpuas) 1oUes [ep [eur jo A oduron ja ered as A seuedures se] ueuansar a90p set Y ‘OuO}0 Ua qeased oogruSeur sa ‘ayes ey & sepor sourea A sed -en3 soauog gseqen3zed ow10 mbe seysg sepor uaoey gnb? ‘eurm mu ‘19g ‘soduan sofara soy ua ourod ‘oased ap ees aul eHag ep euang eT — (‘soounjg soyjaqu) soy opuvdyy ‘alvrua ap opusods un A vsos SoZ] ap opsuosiuD? ja uo) vpysaa va anb ‘VNIJ D ozvg ja sod opuvaay VLECUVNUAG v4uq) “"e spony esed es “epnul as ep VNIT -uaut visq ‘Uajuend ou anb o8uuos sang -"LLYVW “eIOYE EISEY OUIOD ‘UID ‘seOsOU A ‘euo puny anb usust] OWIOD UsuOTUny sesoo sey anb eleg ‘eiepreusog ep opeuoflose osnerde jo A ouewiory jop oyerwMUasUOD [a uos oyUEWIOY Jap zeoga Ady ey “efefy --vaOV ‘eurtoua ap efara ef e ueamb as eioye x -"VITSW (‘VNIONOg 3J¥S) ° 9 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL (Breve silencio.) ADELA.- Lo has pensado bien? (JULIA asiente.) sDe veras vas a dejar a Teo segiin esta? Juuia.- Es fuerte. Resistira. ADELA.- 2Y si no resiste? Jutta.- ;Qué quieres que haga? jTengo derecho a rehacer lo poco que me queda! ADELA.- Podrias esperar... Juuia.- :A qué? 3A que se cure o se muera? Estoy harta de esperar. Las ocasiones se presentan cuando se presentan y a mi edad es raro que surjan. (Breve pausa. Con determinacién:) Me voy, Adela. Te parezca como te parezca y cai- ga quien caiga. Quiero a Carlos. Le quiero y me voy. ADELA.- Te vengas, Julia. Lo tuyo no es mas que venganza. Juuta.- Si se tratara de venganza lo habria hecho mucho antes. ADELA.- {Pero ahora precisamentel... Juua.- No se morira. (Intentando bromear.) Teo es inmortal: casi como sus dioses. ADELA.- El médico, lo sabes, no dio demasiadas esperanzas. Juuta.- {Pues si se muere, que se muera! ;Qué pue- do hacer? (Breve pausa.) Si me quedo, la que se moriré seré yo. ADELA.- ;Lo ves como es venganza? Carlos no es ms que un pretexto. Recondcelo, Julia. Un pretexto, con una buena cuenta corriente. Juuia.- No es ningiin pretexto: es mi futuro. N 9 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL ADELA.- (Burlona e incrédula.) Vamos, que lo hiciste por el honor y todas esas cosas... Juia.- Naturalmente que lo hice por eso. ;Por qué si no? ADELA. (Recitando burlona:) «;Qué es el honor?... éPuede el honor reponerme una pierna, o un brazo o suprimir el dolor de una herida?... éQué es el honor? {Un soplo de aire!»!. JuLia.- No lo tomes a broma. ADELA.- ¢Acaso se puede tomar a broma a Shakes- peare? Jutia.- (Volviendo a su idea.) Si, Adela, yo tenia que hacer ver que no veia, que no escuchaba, que no sabia, que aquella monstruosidad no era verdad. Por eso actuaba como si no pasase nada: tenia que resguardar mi reputaci6n y la de todos. Era mi papel y mi deber. (Breve pau- sa.) A eso nos ensefiaron, Adela: a guardar las formas, a establecer distancias, a decir sonrien- do que todo va bien, estupendamente, aunque estemos muertas de asco y de angustia... A eso nos ensefiaron, Adela: a callar. Y yo cumpli. AbDELA.- No; no cumpliste: tu deber como madre... Juia.- {Mi deber, mi deber! Hice lo que pude. ADELA.- Pero no te das cuenta? Al callar, te con- vertiste en cémplice. Juua.- En cémplice yo? Yo no soy cémplice de nada. Soy inocente. La tnica inocente y victi- ma de todo este asunto. 1 Parlamento del Acto Il de Enrique IV, de William Sha- kespeare. 9 f DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL (Transicién. Nuevo silencio.) ADELA.- :Tampoco le vas a decir que su padre esta enfermo? Jutta.- Tampoco. No es el momento. ADELA.- Mas que nunca. JuLIA.- ;Qué quieres? ;Avinagrarme la noche? He- lena y Victor no pueden marcharse con esa preocupacién. Ademas, Teo no quiere que se lo diga: le aterra el papel de victima. (ADELA va a replicar pero se calla ante la entrada de TEO. No obstante, la discusién flota en el aire. TEO es un hombre de unos sesenta afios, vigoroso atin; de un vigor mds intelectual que fisico. Cierta tristeza en su semblante de madura belleza. Parece ausente. Fuma.) TEO.- (Amablemente.) ;Otra vez discutiendo? ;De qué se trata hoy? Jutia.- Y ta fumando. (Sin esperar contestacién.) Al menos podias salir al porche... ADELA.- (A TEO, suavemente, como si regafiara a un nifio pequento.) Julia tiene raz6n... TEO.- gEn qué? ;En lo de fumar o en lo de salir? ADELA.- {Siempre por la tangente! (Nuevamente en tono dulce.) ;Si pusieras un poco de tu parte! TrEO.- (Cortdndola amablemente.) Por favor, Adela, no me vengas a estas alturas con frases piado- sas: me muero y lo sé. Juuta.- (Sin poder contenerse.) {Te mueres, te mueres! (Marchandose llorando.) {Mierda, mierda de todo! On 9 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL libro que me hacia tanta ilusi6n y que queda- r4 inconcluso... empezaba a salir del tinel, de esa depresién que me hundio hasta el cue- llo cuando Helena se marché... (Breve silencio.) ADELA.- ¢Sufres todavia? TEO.- (Afirmando.) Todavia. ADELA.- Papa dice que no deberia haber venido. TEo.- Tal vez. (Nuevo corte.) ADELA.-Y de lo de Julia, ;c6mo te enteraste? ;Te lo dijo ella? TEO.- No hizo falta. Las mujeres, cuando os ena- morais, sois como el cristal. ADELA.- Y?... TEO.- Carlos es un buen tipo. La hard feliz. (ADELA lo mira incrédula.) Y en el caso de que no sea asi, estamos en una edad en la que la decep- cién se amortigua: cada vez exigimos menos. Aceptamos nuestra decadencia, los achaques, la enfermedad, la muerte que se avecina... épor qué no la iba a hacer feliz un tipo vulgar? ADELA.- (Con reproche.) {De manera que te parece bien! TEO.- ;Qué quieres que haga? ADELA.- jPues a mi, no! Dadas las circunstancias, deberia quedarse contigo. Teo.- Es ahora cuando tiene la oportunidad de librarse de mi. ce DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL ADELA.- jHermética! (Buscandole la mirada.) Eso es que no te has fijado bien... No me extrajfia: por lo general no soy objeto de mucha observacion... (Volviendo a sujetarlo y a colocarse frente a él.) De veras no ves nada? TEO.- No puedo ver nada porque nada hay. Ta, querida Adela, nunca quisiste a nadie. Y esa ha sido tu suerte. (Pausa. Para si.) El amor es una debilidad y una servidumbre. Cuando Helena se marché yo crei morirme. Ya ves, mucho mas que ahora. (Nuevamente a ADE- LA.) Ti eres fuerte, Adela. Te has liberado de todo sentimiento. Eres el ser mas libre que conozco. Por no amar, no amas ni a tu padre. ADELA.- jTe equivocas, Teo: yo también sufto y haria por ti lo que Julia no es capaz de hacer! TEO.- Lo dices porque me ves enfermo. No sientes otra cosa que compasién. ADELA.- No, Teo, no. No es lastima ni compasi6n. Es deseo. Y amor. Lo sé a través de muchas noches en las que sofiaba contigo, de posibles amantes a los que rechazaba por el hecho de no ser ta.¥ te lo digo ahora cuando me has hecho perder toda esperanza. Te lo digo como una expiacién. (Pausa.) Hubiera sido muy dulce quedarme aqui, contigo, acompa- fandote en este tiempo que te queda, pero ahora no: jahora no quiero quedarme aqui! jQuiero castigarte y castigarme! Ts0.- (Hacia ella y sujetandola con dulzura.) jQué complicadas sois las mujeres! Poseéis una dualidad atormentada, jy la vida es tan senci- 100 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL (Sale ADELA.) ABUELO.- Si, vete, vete... (A TEO.) Ese es el mayor defecto de las mujeres: son pesadas. Hay que estarles dando cuenta de lo que hacemos o dejamos de hacer minuto a minuto... Se pre- ocupan demasiado de nosotros...; demasiado. Nos tratan como si fuéramos nifios. TEO.- Somos sus nifios. Necesitan que lo seamos. ABUELO.- Si por Adela fuera, no saldria a la calle. Me tendria como una flor de estufa: tiene miedo a que coja una neumonia como la del invierno pasado, pero a mi me gusta pasear, salir, airearme... Ademas esta haciendo un tiempo relativamente benigno... TEO.- Si. Lo malo esta por venir. ABUELO.- Febrero es el peor mes. (Intentando quitar importancia a la frase:) Es el mes de la muerte, pese a ser el mas corto. TEO.- (Para si.) ;Febrero? No, no me gustaria. ABUELO.- :El qué no te gustaria? TkEO.- No, nada. Pensaba qué mes ser el més indi- cado para morir. En primavera debe ser muy triste. Quizds en otofio. ;Pero qué mes del otofio? Bueno, cualquiera diria que podemos elegir. ABUELO.- (Con resolucién.) Podemos. Y no sélo el mes. También el dia y el momento. TEO.- Ya. Pero no es facil. Decidirse, digo. Quizas sea cobarde. (Breve silencio.) 102 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL (Silencio. La alusién a HELENA flotard unos ins- tantes. Se hard presencia.) TEO.- Sé que usted no queria... ABUELO.- 3El qué? TEO.- Que viniera. ABUELO.- (Como al chiquillo a quien se coge en falta.) No, no; esta muy bien. Es Navidad. TEO.- Vamos, no disimule conmigo. (Breve pausa. En tono mds bajo.) Digame cuanto tenga que decir, pero sea compasivo. ABUELO.- (Después de una pausa y como si tuviera que medir lo que va a decir.) Siempre lo fui. (Algo mas bajo. Casi para st.) De lo contrario, te habria matado. TEO.- Debié hacerlo. Me habria evitado el sufri- miento. ABUELO.- No fue compasién. Simplemente, me pillé demasiado viejo. Es lo malo que tiene la vejez, esa perpetua certidumbre de que nada importa demasiado. (Intentando tomarlo a bro- ma.) Como lo de fumar. (Breve pausa.) ¥ aho- ra, gc6mo no ser compasivo cuando estamos los dos a las puertas del abismo? TEO.- 3Lo sabe, verdad? (EL ABUELO afirma triste- mente.), y ni siquiera se molesta en decirme falsas palabras de consuelo... ABUELO.- ;Para qué! Lo que tenga que ser, sera. (Sale EL ABUELO por la izquierda después de haber dado una ultima calada. Queda solo TEO.) 10: a DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL y a charlar. Pero esta visto que eran otros tiempos. (Breve silencio. TEO la mira.) TEO.- Te veo bien. HELENA.- Estoy bien. TEO.- :Eres feliz? HELENA.- (Sin excesivo entusiasmo.) Mucho. TEO.- Me alegro, hija. HELENA.- jPor favor, no me lames asi! TEO.- gY cémo quieres que te llame? Lo eres, que- ramos o no.¥ me alegro de que las cosas te vayan bien, que hayas encontrado a un chico como Victor. HELENA.- No te creo. TEO.- Es cierto, créeme. Reconozco que a veces le odiaba, pero luego el padre que hay en mi, ese que te quiere por encima de todas las cosas... HELENA.- (Tapandose la cara con las manos y haciendo intenci6n de salir precipitada.) jNo, no quiero oir- te, no quiero oirte! jEs como una pesadilla! TEO.- (Sujetandola suavemente.) Por favor, no seas tan dura conmigo. HELENA.- ;Te parece que no tengo motivos? TEO.- También fuiste feliz. HELENA.- ;Feliz? ;De verdad crees que fui feliz? TEO.- Lo parecia o mucho me engafiabas. HELENA.- Como podia serlo? Me veia distinta a las demas. TEO.- Lo eras. On 10 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL HELENA.- Victor tuvo el don de la oportunidad: se presentd en el momento justo. Ese fue su mérito. Victor era tu coartada. Si las cosas se hubieran sabido, si todo hubiera quedado al descubierto, ;qué hubiera pasado con tu carrera, papa? ;Ddénde estarian los premios, los homenajes?... Qué universidad se hubie- ra atrevido a nombrarte doctor honoris causa si hubieran sabido que te acostabas con tu hija? jHabia que casarme, largarme lejos! TEO.- Te equivocas: es cierto que quise alejarte, pero lo hice por ti, sdlo por ti. Victor era el hombre que te convenia. HELENA.- jNo mientas! jSdlo te importaban tu carrera y tu prestigio! (Breve pausa. En tono menor.) Lo de menos era haberme pervertido. TEO.- ;Cémo puedes hablar de perversién? HELENA.- {Como Ilamarlo entonces? Tko.- Era algo mucho mis profundo... una especie de identificacién... HELENA.- {No me hagas reir! TEO.- (Con nostdlgico entusiasmo y para si.) Todo empez6 cuando te lei la Ilfada... Era una ver- sién para nifios con ilustraciones... Luego vinieron otras lecturas: Séfocles, Esquilo, Safo... ;Te acuerdas?... Los viajes por el Medi- terraneo, las ruinas de los templos con los que te extasiabas... Nos moviamos los dos en un circulo magico de héroes, gigantes, dioses y ciclopes...; un circulo magico en el que los demas no podian penetrar... Ta y yo meci- dos, apresados por los clasicos, por la grandio- sidad y belleza de ese mundo en el que la Oo oO DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL Te preservé, Helena, y al hacerlo, aunque ta no lo creas, te hice libre. HELENA.- jLibre! ;Libre yo? jFiscalizabas mis pasos, todos mis movimientos! No hagas pasar por generosidad lo que no era mas que egoismo: jeres un monstruo y sdlo me querias para ti! Incluso ahora lanzas tus hilos desde lejos. ¢Crees que no me doy cuenta? jNi mi trabajo ni el de Victor se deben a la casualidad! TkEO.- {También me lo reprochas? HELENA.- Me gustaria haberlo conseguido por mi misma. Teo.- Es tu oportunidad. Es lo Gnico que deberia importarte. HELENA.- (Dejando traslucir una pena que no puede evitar.) Antes me retenias; ahora me alejas... Teo.- Ni te retuve entonces, ni te alejo ahora. HELENA.- Si, entonces me retenias. TEO.- Si, quizds si.Te veia y te veo como una fuer- za de la naturaleza a la que no podia resistir- me, como un fatum en el que siempre termi- naba cayendo... Como Edipo, intenté huir, y como a él, el destino se me ponia en contra enfrentandome cada dia a la fatalidad. Parecia como si todo estuviera irrevocablemente dis- puesto entre ti y yo, como si el curso de los planetas hubiera trazado el mio de forma inequivoca... Lleg6 un momento, tan agobia- do estaba, que me rendi, como los humanos se rinden ante los dioses. Ninguna accién debia imputarseme. Yo no era responsable. Ellos, a través del destino, lo decidian todo. HELENA.- Muy cémodo, papa. 1 oO DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL TEO.- Calla, no seas cruel. No me martirices. ADELA.- Té también eres cruel: también me mar- tirizas. TeEo.- Lo siento... Lo siento... (ADELA lo mira con reto y luego sale en un gesto de rabia contenida.) 4 3 N DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL excelentemente pagado, pero aquel tipo no me podia comprender, porque cuando le expuse mis razones, me miré fijamente y abrié la boca como si estuviera viendo a un ser de otro mundo... Juta.- (Amablemente.) No me extraiia... ADELA.~ No todo es el dinero, Julia... JuLia.- Casi. VicTOR.- ... y acto seguido me solté: «Pero jt de qué vas? ;En qué planeta crees que vives?». Entonces me di cuenta de que no podia seguir alli ni un minuto mas. (Todos sonrien y hacen comentarios de aprobacién, excepto HELENA.) HELENA. (Con ligero resquemor.) Muy idealista!, Pero reconoce que te pasaste. Vicror.- En absoluto. Le dije lo que tenia que decir. Ni més ni menos. Era un cara y un incompetente. Y lo que es peor: un corrup- tor literario. HELENA.- Eres demasiado perfeccionista e intole- rante. La corrupcién literaria no me parece tan grave. VicToR.- jLa peor! Se empieza por el lenguaje y se continua con todo lo demas. HELENA.- No estoy de acuerdo: las palabras son sdlo palabras. VicToR.- sSélo? Las palabras transmiten conceptos y, si Corrompemos las palabras, equivocamos el concepto y trasmitimos, por tanto, una idea adulterada. La corrupci6n literaria es el prin- 3 p DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL Juia.-Y todo esto, a qué viene? Victor nos estaba hablando de por qué dejé su empleo. (Breve pausa. Todos esperan a que ViCTOR reanu- de el tema.) VicTor.- Bien, como os decia, después de aquello tenia que marcharme. La verdad es que me la jugué. HELENA.- (No exenta de reproche.) Una auténtica quijotada. Victor.- ... De la que me siento muy orgulloso. No podia seguir avalando una literatura detestable. HELENA.- ... Pero te quedaste en la calle. Victor.- No por mucho tiempo. HELENA.- Ah, no? Te recuerdo que fueron unos meses... VicTror.- ... pero a la larga, el hacer lo que uno cree que debe hacer, tiene su recompensa... (HELENA va a replicar. Impidiéndoselo:) Y si no, ahi tienes la prueba: cuando la cosa se estaba poniendo fea surgié lo de la Universidad... HELENA.- (Con doble intencién y mirando a TEO.) jAh, la Universidad! Una casualidad, tan oportuna, que no parece casualidad! (TEO no parece darse por aludido.) (Todas las objeciones de HELENA a VICTOR seran dichas en tono intrascendente y amable, con un tono muy «social» pero con una soterrada critica.) VicToR.~ Es cierto. ;Quién podia pensar que en Estados Unidos iban a interesarse por mi? a DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL TEO.- (Con desgana y mirando a HELENA.) Se equi- voca, suegro: los clasicos tampoco est4n de moda. ;A quién le preocupa hoy lo que se dijera hace siglos? Ni tan siquiera ayer mis- mo. Vivimos en el mas permanente de los olvidos... ABUELO.- No estoy de acuerdo: los clsicos, los ver- daderos clasicos, siempre estaran vigentes porque siempre nos hablan de nosotros mis- mos. Claro que aqui entramos en otro dile- ma, porque, ;qué es un clasico?, :qué enten- demos por tal? También sobre esto existe confusién, como en casi todo; a la larga muchos de estos aburridos y detestables autores acabaran por serlo con un poco de suerte. En realidad, en la mayor parte de los casos, se llega a cl4sico por pura inercia, por cuestiones puramente cronolégicas, y no es eso. No por llegar a viejo se es un clasico. (Dirigiéndose a TEO.) gNo estas de acuerdo, Teo? Ta eres el mas indicado para hablar de lo que debe ser el clasicismo... Juwia.- (Cortando impaciente a TEO.) jPap4, por fa- vor, que no estais en Ja Universidad! ;Podia- mos hablar de algo un poquito més intras- cendente, mas vulgar y asequible para los pobres mortales? ABUELO.- Mi hija tiene raz6n: «primum vivere; deinde filosofare’». (A TEO y HELENA:) Se dice asi? 3 En latin, ‘primero vivir, después filosofar’. = a 0 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL pero la casa es como si me obligara a echar el resto, a implicarme en algo... Juta.- s¥ en qué mejor? A todas las mujeres nos encanta preparar nuestro hogar... HELENA- jHogar, hogar!... Cuando veo todas esas cajas sin abrir, jme entra una angustia!... jEl apartamento era tan acogedor! VicTor.- Se nos quedaba pequefio. HELENA.- Sobraba para los dos. Victor.- (Atrayéndola hacia si.) Pero no siempre seremos dos... (Todas las observaciones y réplicas de VicTOR estardn guiadas por un tono amable, condescen- diente y carifioso.) ADELA.- gAcaso hay alguna novedad? HELENA.- (Evasiva y tajante.) No. (La respuesta de HELENA genera un certo malestar.) ABUELO.- (A ADELA.) ¢Por qué careces, querida hija, del don de la discrecién? ADELA.- ;Qué malo hay en hacerle esa pregunta a unos recién casados? Victor.- Es cierto. Pero no. No hay nada. Al menos, de momento. Helena esta en ese asunto tan perezosa como con la casa. (Rien un tanto forzadamente.) Juua.- jCon la ilusién que me hacia ser pronto abuela! co 12 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL tomamos una decisi6n, nuestras relaciones se deterioraron hace tiempo. ;Tanto te cuesta comprenderlo? TEO.- (Contemporizador.) Quiero que sepas, para tu tranquilidad, que tu madre y yo estamos totalmente de acuerdo. Vamos, que lo hace- mos de manera civilizada, y amistosa. HELENA.- (Intentando encajarlo y cortar la cuestién.) Vale, vale. Est4 bien. Sdélo que... ADELA.- No le des mas vueltas. (Breve pausa.) Ade- mis, hay una novedad con la que no conta- bas: (Con retintin.) tu madre est4 enamorada. Juta.- Eres venenosa, Adela. ADELA.- (En el mismo tono.) ... Al menos, eso dice. JuLIA.~ jPues si, lo estoy! ADELA.- ¢Y sabes quién es él? (HELENA niega.) Car- los. jCarlitos!, ste acuerdas? HELENA.- 3Carlos? ;Pero no fue novio tuyo? ADELA.- jNooo! Un flirteo sin consecuencias. Quien le gustaba de verdad era tu madre, pero como ya habia conocido a tu padre... Jutta.- Hace dos afios se quedé viudo, nos encon- tramos y... jeso es todo! Como ves, no hay nada de particular: juna vieja historia! (Se hard un silencio. Jutta, dando por finaliza- da la conversacién, se levanta y va decidida al drbol de Navidad.) Juuia.- (En tono nuevamente desenfadado.) jBien! Y ahora que mi querida hermana os ha puesto al tanto de las novedades, ha legado el mo- mento de dar los regalos. Todos llevan su correspondiente cheque por si no os gustan y ° 13 DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL ADELA.- No hay nada que disculpar ni que ocultar: Victor no es una visita. Ya es de la familia. HELENA.- jMenuda familia! ADELA.- :Qué tienes que decir? Eres la persona menos indicada para hablar de la familia. Teo.- jBasta! Estais dando un especticulo lamen- table. HELENA.- Pero se puede saber qué pasa? Juia.- No hagas caso. Si tu tia esta histérica, no vamos a hacerle el juego los demas. (ADELA va a hablar, pero JULIA no la deja.) sSabes lo que te digo? j|Que me tiene sin cuidado lo que digas o dejes de decir, y si tienes mal vino, te lo aguantas! jHe dicho que voy a dar los rega- los, y voy a dar los regalos! (Va decidida a los paquetes.) AbDELA.- De acuerdo, de acuerdo... Si quieres seguir jugando a las apariencias, hazlo: por mi no te prives. Jutia.- Ta tampoco, si te empefias en airear los tra- Pos sucios. ADELA.- No son trapos sucios. Es la verdad. JULIA.- No; no es la verdad. jTodo es mentira, male- dicencia, mala voluntad y resentimiento! ADELA.- ;También es mentira la enfermedad de Teo? (Corte. La noticia caeré de nuevo como una bom- ba. Espeso silencio.) HELENA.- (Yendo temerosa hacia ADELA.) Qué di- ces, tia? ADELA.- Lo que oyes: tu padre est4 enfermo. 16. aS DRAMATURGAS ESPANOLAS EN LA ESCENA ACTUAL H.- H.- M.- H- M.- H.- H.- Tienes que concentrarte. Vamos, pon todos los sentidos. Uno es la imaginacién. ;Qué dicen? ;Qué dicen? Ella le dice que tiene vaselina en su neceser. «Toma, pénmela adentro. Cuidado, despacito. Eso es. Ahora échatela ti en el pene. Bueno, yo lo haré. Te gusta?... ;Ahhh... Ya esta, si, ya est4!». Ahora estan en silencio. Oigo sus ja- deos... Se mueven. (La mujer se separa del hom- éQué pasa? (La mujer calla.) Contéstame. ;Es que te duele el deseo? Contéstame. Ya... Ya estoy bien. De acuerdo. Ahora el olfato. Vamos. Huele el cuarto, la cama. (La lleva hasta la cama y la obli- gaa olerla.) Eso es. A qué huele? Huele a... huele a lejia. Huele a... a otros cuer- pos. A muchos cuerpos... éY la pared? (Offateando.) Huele a frio... A cal... A manos sucias... Ahora las alfombras. Cada olor tiene un sen- tido, indica un camino. Lleva a un lugar. ¢Donde quieres que vayamos? A la terraza. Ah, quieres ver la luz... Las lucecitas de la ciu- dad. Es peligroso, dos ciegos en la terraza de un rascacielos. Esta bien. Vamos. (La mujer intenta cambiar de rumbo y Ilevarle a la puerta. El hombre le aprieta el brazo.) {La terraza esta por ahi! Camina. (Salen a la terraza.) ¢Qué hay ahi abajo? ;Puedes ver algo? Siento vértigo.

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