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Partiendo de un hecho conocido: la imposibilidad de hacer un pronóstico

exacto, desde el presente, de lo que se sucederá en el futuro, el análisis de


impactos cruzados, nos permite hacer una valoración de los posibles eventos
que pueden llegar a configurar el escenario en el cual nos tengamos que
desenvolver en un momento determinado de un “futuro posible”. Así, las
variables que tomamos en cuenta, siguiendo la evolución de las mismas hasta
los momentos, nuestro raciocinio y el de los expertos, nos brindan la
oportunidad de crearnos una idea de los que puede ser nuestra historia futura,
sin perder nunca de vista, el hecho fundamental del proceso histórico como un
conjunto de sucesos interconectados y en permanente evolución.

Al plantearnos razonar sobre el posible escenario al que habrá de


enfrentarse España en el 2012, son muchas las variables globales, regionales,
nacionales y locales, que de una u otra manera, entran a formar parte de la
…….. Analizar cada una de ellas sería una labor demasiado ardua y extensa
que excedería con creces la finalidad de éste ensayo, especialmente porque
nos encontramos ante una época de importantes crisis económicas, políticas,
sociales y de identidades, que nos permite especular también sobre
importantes transformaciones futuras en el sistema establecido. La
globalización, así como la globalización, han enfrentado a nuevos actores y
fuerzas en el juego político-económico internacional. Estamos ante unos
cambios en los niveles de acción y resolución de las cuestiones
trascendentales para las personas y los Estados cada vez menos coherentes,
pero a la vez más interconectados. Lo que nos conduce a tener que mirar
necesariamente hacia ángulos muy distintos para poder predecir o estimar
cómo será el discurrir político de España en el 2012. Pese a ser un escenario
no muy lejano, parece que vivimos y seguiremos viviendo tiempos de cambios
fundamentales.

En este sentido, y pese a no ser el escenario más probable, considero


que las situaciones 1, 2, 3 y 5, responden a lo que podría definir no sólo a la
España del 2012, sino a los diferentes ámbitos, regionales y mundiales que
pueden de una manera u otra influir en las decisiones geoestratégicas de
España y en sus políticas tanto internas como externas. He descartado del
escenario posible para España en el 2012, la situación 4 “En la opinión pública,
la de la mayoría de los formadores de opinión, así como la de los políticos, los
asuntos de seguridad y la defensa seguirán siendo materias ajenas a sus
intereses y preocupaciones” ya que considero que ésta indiferencia
generalizada (aupada por las altas esferas del poder político) empieza a hacer
evidente su anormalidad. Y es que pacifismo no puede ni debe significar
ausencia de debate. Y el debate sobre la defensa no debe bajo ningún
concepto significar la subestimación del valor de la diplomacia.

Particularmente creo que el tema de defensa esta presente en las altas


esferas del poder político, y constituye una parte importante de las agendas de
los partidos políticos. Para todos es conocida la utilización de las partidas para
cooperación internacional, como un instrumento para influir en determinados
territorios o para mantener unos lazos económicos y culturales determinados.
Detrás de la “altruista” transferencia de recursos, canalizada por la OCDE hacia
los países en vías de desarrollo, nos encontramos con una serie de matices
que van desde la cooperación técnica condicionada, la no transferencia de
tecnologías, financiación de proyectos muchas veces no rentables para los
países receptores, pero que refuerzan en definitiva los intereses económicos,
culturales, geoestratégicos y claro está, militares y de defensa. Lo vemos por
ejemplo en el acceso a las listas de países receptores de ayuda económica
española de estados en los que España de una manera u otra estaría
involucrada militarmente hablando, véase Irak en su momento o Afganistán.
También observamos un desplazamiento de la ayuda española, desde los
países tradicionalmente receptores ayuda española (véase América Latina)
hacia países, que por cuestiones de geoestrategia, despiertan un mayor interés
para la Unión Europea (los Balcanes por ejemplo) o que implican una amenaza
directa para los intereses de los Gobiernos de la zona (aumento de la ayuda a
Senegal a cambio de un mayor control hacia la inmigración ilegal). En este
sentido veo que los intereses geopolíticos, muy vinculados a las
responsabilidades estratégicas y militares (misiones de paz, ataques
preventivos, etc.) que España ha ido asumiendo con diversos organismos
internacionales o con la potencia militar, así como la relevante cobertura y
alcance que los conflictos armados de la última década han tenido en la opinión
pública (véase por ejemplo la lucha contra el terrorismo internacional, que ha
pasado a ser un “must be” en las agendas de los políticos de primer mundo). El
Real Instituto Elcano, El Grupo de Estudio Estratégicos (GEES) o La Fundación
para las Relaciones Exteriores y el Diálogo Exterior (FRIDE) 1 son algunos de
los Think Tanks que en España se han especializado en las relaciones
internacionales, el papel de España en la Sociedad Internacional, así como en
los asuntos estratégicos y de seguridad. Con el paso de los años éstas
máquinas de creación de ideas, han ido cobrando “prestigio” y credibilidad
entre Los altos mandos del poder político, económico y empresarial; pese a no
conectar verdaderamente con la opinión ciudadana, si que cuentan con una
importante influencia sobre las élites con capacidad de determinar el futuro de
las políticas de defensa del país.

La situación convulsa en el norte de África y Oriente Medio, pone


nuevamente sobre el tapete el debate sobre la postura y posicionamiento de
los países occidentales respecto a ésta zona del globo donde confluyen gran
cantidad de intereses de diversa índole. La cuestión de la seguridad adquiere
una relevancia vital, en la medida en que la Unión Europea – y dentro de ella
también España- aspira a mantener las posiciones estratégicas alcanzadas
hasta ahora, pero también en la medida en que la inmediatez de la información,
la existencia de Mas Media, la multiplicidad de medios alternativos y la
importante aportación de Internet, está implicando cada vez más al ciudadano
en los asuntos vitales de su existencia ya no sólo dentro de un Estado sino
dentro de asociaciones más amplias como la Unión Europea y más locales
como sus comunidades autónomas. En éste sentido creo que creo que la
opinión pública, así como los formadores de opinión, presionarán
continuamente para que éstas cuestiones –cada vez más cercanas al
ciudadano- se reflejen con mayor intensidad y prioridad en la agenda pública.

1
TELLO BENEITES, Marta. Guía de Think Tanks en España. Fundación Ciudadanía y Valores. Madrid:
http://www.funciva.org/publicaciones/think-tanks.pdf

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